Chapter 1: Prologo (parte 1-2): La gran audición
Chapter Text
(Ciudad de México, México)
Era una mañana tranquila en lo que se podía considerar como la densa capital del país de habla latina más reconocido en toda la región norte del continente americano, algo raro considerando el hecho de ser toda una metrópoli según el sentido de la palabra. Y aun más en el instituto Willmington, allí hasta se podía respirar la calma de lo tranquilo que estaba.
Si, todo parecía estar bien en el universo por decir lo menos.
O así fue hasta que de la nada apareció nada más que una turba enfurecida de chicas que iban desde con trinchos hasta bates de beisbol, solo no sacaron las antorchas porque no tuvieron el tiempo para hacerlas. Dicho grupo estaba en plena persecución de 3 chicos que literalmente estaban corriendo por su vida.
Los cuales se estaban arrepintiendo seriamente de la decisión que tomaron hace solo unos instantes.
(Flashback de hace un minuto)
???: Oportunidades como esta solo aparecen una vez en la vida -dijo un joven de 16 años a uno de sus dos amigos que parecía dudoso de lo que estaban por hacer.
Un chico de piel achocolatada de 1,57 cm que resaltaba no solo por su cuerpo delgado o sus ojos cafés. Sino que lo que más lo caracterizaba era su actitud amable y tranquila, pero aun así, como todo adolescente, no se iba a negar hacer una buena broma si la oportunidad estaba justo allí. Así era Miguel Rivera y así lo querían todos. Aún con sus metidas de pata de vez en cuando.
Miguel: Y cuando dichas oportunidades aparecen ante tu puerta, solo debes recordar ese refrán que dice ¨si la vida te da limones, has limonada¨ o en este caso ¨si la vida te da una llave inglesa, gírala en grande¨ -dijo mientras abrazaba por los hombros al chico indeciso que solo rodo los ojos con exasperación.
Este joven un par de centímetros más alto que el moreno entusiasta se podía distinguir fácilmente por su poca ortodoxa forma de vestir que mezclaba lo steampunk y lo tradicional. Además de también ser conocido por tratarse de todo un cerebrito en las clases. Sip, si no sabías algo, posiblemente Leo San Juan sepa cómo explicártelo.
Leo: Solo te diré lo que creo que ya sabes. Si giras esa llave, estoy al menos un 90% seguro de que el resultado será un severo daño corporal acompañado de diversas fracturas y hasta un par de hemorragias internas. Y aclaro, de nosotros, no de ellas -exclamo a la vez que el otro chico solo suspiro.
Miguel: Vamos, apóyame en esto, solo se vive una vez -dijo antes de intentar girar la llave, sin lograr moverla ni un poco- me lleva la que... esta trabada.
Leo: Gracias al cielo -dijo con alivio.
Siendo en ese momento que el tercer de ellos decidió de hablar una vez termino de arreglarse el cabello. Este chico bien se podía considerar como una copia casi exacta de Miguel a excepción de que el prefería más las ropas en azul en vez de las rojas por las que su amigo se caracterizaba. Además de que su actitud era un tanto más arrogante y altanera, con todo y defectos, Marco de la Cruz era así y nadie lo podía cambiar, que les pregunten a los consejeros de la escuela para que vean como se reirán en sus caras.
Marco: Saben, anoche estaba teniendo ese sueño de nuevo -dijo en lo que el par solo negó al saber por donde iba la cosa- yo en el escenario, siendo aclamado como lo fue mi tatarabuelo Ernesto de la Cruz. Pero por merito propio, no por atajos o actos viles como él lo hizo, como una estrella de verdad. Hasta llevaba mi camisa de la suerte y cantaba una de 4*TOWN -menciono antes de ponerse a cantar un fragmento de ¨Nobody Like U¨.
Lo cual para los otros dos era un cuento de nunca acabar. Desde que conocían a Marco sabían cual era su plan de vida, que sin importar el camino largo y corto, la meta siempre era la misma, volverse una estrella como lo fue una vez Ernesto de la Cruz, y devolverle a su familia el honor y aprecio que se les fue quitado cuando se desveló la oscura verdad del difunto cantante.
Por dicha razón, incluso en la actualidad la familia de Marco no era muy apreciada, principalmente en el mundo musical. Y al ser su sueña una especie de obsesión, tampoco lo hacia grato tenerlo como compañía para la mayoría de la gente. Haciéndolo un inadaptado que curiosamente calzaba perfectamente en el micro grupo de Miguel y Leo que lo aceptaron con los brazos abiertos.
Marco: Entonces ¿Qué es lo que estamos haciendo?
Miguel: En resumen, el conserje de la escuela dejo una llave inglesa en la válvula del aspersor ¿nos ayudas a regar la cancha de futbol mientras el equipo femenino de soccer está entrenando? -pregunto en lo que el moreno de azul no le tomo ni dos segundos pensarlo.
Marco: ¿Pero que pregunta es esa? ¡Obvio, si! -dijo tomando parte de la llave también para que luego ambos se quedaran mirando al que faltaba, quien solo miro al cielo antes de negar.
Leo: ... Es oficial, tengo que buscar nuevos amigos -dijo antes de unirse también en el esfuerzo colectivo.
Para luego, entre los 3, lograr girar la llave. Lo que en consecuencia causo que todo el equipo de chicas acabara empapado justo a mitad de los calentamientos. Lo que solo les causo gracia al trio de chicos unos pocos minutos antes de huir por sus vidas cuando las muchachas los vieron con fuego y sed de venganza en su mirar.
Miguel: Ahora ¡patitas pa que las queremos!
Lo que nos lleva a la situación actual.
(Tiempo presente)
Miguel: ¡Corran por sus vidas! ¡Corran, perras, corran! -dijo motivando a sus dos amigos mientras que las chicas en plena persecución solo enfurecieron más pensando que se refería a ellas.
Marco: ¡Así será cuando me vuelva famoso un día! ¡Solo que las chicas querrán besarme y no tratar de matarme!
Leo: ¡Los culpo a ambos de esto, de verdad son un par de idiotas!
Ambos: ¡Pero somos tus idiotas! -dijeron divertidos antes de acelerar aún más la marcha al ver que les estaban pisando los talones.
Solo para acabar dando un mal giro y de ese modo, terminar en un callejón sin salida. Donde todo lo que pudieron hacer fue ver con miedo, al punto de casi mojar los pantalones, como la enorme oleada de féminas armadas se acercaban a ellos gritando cual amazonas listas para el combate.
Miguel: ¡Tiempo fuera! -pidió a la vez que de milagro, las chicas pararon extrañadas.
Cosa que hasta a los dos chicos junto a el los sorprendió.
Miguel: Leo, dale el casco de futbol americano a Marco, necesitamos proteger su rostro -dijo en lo que el mencionado solo asintió mientras sacaba dicho casco de su mochila, que ya estaba bastante golpeado de las veces que ha sido usado con anterioridad para situaciones similares a la actual, para dárselo a Marco.
Quien en cosa de un parpadeo ya lo tenia puesto y asegurado en su cabeza.
Marco: Los amo chicos, en serio -dijo con resignación al, igual que los otros dos, saber lo que seguía a continuación.
Miguel: ... Pues bueno ¿Seguimos? -pregunto encogido de hombros.
Lo cual fue lo ultimo que dijo antes de que los 3 fueran molidos a golpes por las chicas que por poco olvidaban porque habían llegado hasta ese callejón, pero ya recordando que estaban furiosas con el trio de chicos. Se desquitaron de lo lindo con todo lo que tenían a la mano. Tanto así que al momento de volver a sus hogares, él como los 3 podían caminar aún, era un misterio que hasta la fecha se sigue sin resolver.
Así era la vida de estos 3 chicos que sin que lo supieran, sus vidas estaban a punto de cambiar para siempre de un modo que nunca hubieran imaginado, en especial para uno de ellos.
____________________________________________________________
(Mansión Rivera, San Fransokyo, USA)
En una mansión de gran tamaño, del clásico estilo rustico apartada del resto de la población, tal cual el estilo aislado y reservado de los ricos de antaño. Que si lo comparamos, dicho lugar no tenía casi ninguna diferencia con el hogar del famoso villano de la caricatura de los Simpson, Montgomery Burns. A excepción del diseño de esta, claro.
Siendo quien camina a través de los silenciosos pasillos de ese en gran parte vacío hogar, que con cada paso que daba se escuchaba el eco del mismo por todo el lugar, una joven de 18 años de lentes que recién estaba regresando de su clase privada de violín, la joven Rosa Rivera. Quien en ese momento, aunque se veía calmada por fuera, por dentro solo negaba al estar algo harta de tener que hacer la misma rutina a diario.
Pero al no haber nadie más que lo haga, era su trabajo encargarse de que su querido tío se despertara. Y teniendo esa misión en sus manos, es que abrió de par en par las puertas que daban a la habitación del hombre. La cual se hallaba en penumbra, siendo lo único que se podía ver una enorme cama, y entre las sabanas de esta, una figura que roncaba suavemente, o eso parecía.
Rosa: Por favor despierta, querido tío Héctor, que ya amaneció -dijo con un tono amable a la inmóvil figura- debes levantarte ahora. Tú mismo activaste esos molestos y escandalosos gallos robóticos ¿lo recuerda? -dijo ya más seria, señalando el montón de maquinas que rodeaban toda la habitación- si no despiertas pronto se seguirán activando de uno en uno hasta que decidas levantarte -exclamo señalando a uno de los robots.
Quien, como si de una señal se tratara, de repente levanto la cabeza y emitió un sonido igual al de un cacareo pero con el triple de potencia, haciendo que la menor se tuviese que tapar los odios fastidiada. Más que todo porque el hombre en frente suyo parecía igual de inmóvil que antes.
O eso parecía antes de que escuchara un mísero quejido.
Héctor: Ya desperté, ya desperté. Solo cinco minutos más -dijo moviendo una mano con pereza. Cosa que hizo a su sobrina suspirar.
Rosa: Lo siento, pero no caeré en eso otra vez para que luego te quedes dormido 3 horas más como la vez pasada -dijo cruzada de brazos- si no te levantas en este momento querido tío -menciono antes de tomar su violín con una sonrisa maliciosa- me obligaras a entonar con mi inmaculado talento mi canción despertadora.
Cosa que aunque no pareció, causo un estremecimiento en el mayor de pies a cabeza.
Rosa: Veo que aun no te quieres despertar... mejor para mí, veo que de verdad quieres cantar una canción por la mañana -menciono con un poco más de malicia en cada palabra dicha- ... Y la canción que os ofrecemos esta semana de la DJ Rosa será aquella famosa canción: el pañuelo negro de la felicidad... ¡Aquí voy! ¡Espero que la disfrutes! -dijo estando a punto de tocar.
A la vez que un espantado Héctor se levantaba aquejumbrado de la cama.
Héctor: ¡Esta bien! ¡Ya, esta bien! Por favor, todo menos eso... -dijo antes de literalmente caerse de cabeza de la cama y chocar la misma contra el piso, cosa que lo termino de despertar.
Y mientras se frotaba el chichón que se le acababa de formar, no pudo evitar hacer un puchero por el acto de recién de su sobrina. La noche anterior había bebido demás, así que la cabeza le estaba doliendo a horrores. Y si ha eso le sumabas una sesión completa de violín (que ella misma tocaba lo más agudo posible para fastidiarlo) el resultado era tortura, así de simple. Un método cruel, pero efectivo para levantarlo, lo reconocía.
Condenada chamaca, pero mentía si dijera que no estaba sonriendo internamente porque justo así es como le gustaban las personas, picaras y algo necias.
Héctor: ¿Qué te costaba dejarme dormir un par de horas más? -pregunto mientras bostezaba- anoche me acosté muy tarde, así que más que un sueño, lo que tome apenas puede considerarse una breve siesta.
Rosa: Lo lamento, pero si queremos llegar a la ciudad de México para las audiciones, debías de levantarte ya, tío -menciono en lo que él hombre solo negó con resignación.
Héctor: Pues ya que, ni modo -dijo con un suspiro- ¿al menos podrías tocar esa canción que dijiste como balada? Creo que eso si lo puedo soportar.
Rosa: Como gustes, querido tío -declaro antes de comenzar a tocar una pieza relajante mientras que el hombre mayor se dispuso a entrar al baño privado de su habitación para asearse- aunque debo decir, que es muy pretencioso de tu parte actuar de forma tan despreocupada a estas alturas, tío ¿no crees?
Héctor: Si quisiera escuchar reprimendas me bastaría con escuchar el canal de chismes, gracias -dijo mientras se echaba agua a la cara- ¿Por qué mejor no haces lo tuyo y me dices que al fin encontraste lo que llevo tiempo buscando? -pregunto a la vez que la menor resoplo desde fuera del baño.
Rosa: No puedo hacerlo solo así como así. No cuando hay demasiadas opciones, y menos tomando en cuenta que es la ultima ciudad de la gira, a todos los demás de las otras ciudades los rechazaste.
Héctor: Ninguno tenía el talento que estoy buscando -menciono mientras se lavaba los dientes- además, tu fuiste la que dijo que deseaba disminuir el numero de candidatos.
Rosa: De verdad eres toda una diva, tío -declaro con resignación- me das tanto trabajo que incluso haces que se me antoje algo dulce para quitar el sabor de boca de tanta carga de trabajo excesiva.
Héctor: Puedes comer algo dulce de camino al avión -exclamo en lo que llenaba la bañera de agua caliente- ¿el desayuno esta listo?
Rosa: Así es. Incluso están sus panes caseros mexicanos de edición limitada, tío. Aparte de que me encargue de abastecer tu baño con los jabones perfumados que te gustan para el agua de la bañera.
Héctor: ¡Excelente! -declaro antes de solo desvestirse y dejarse caer en el agua caliente, permitiéndose relajar cada uno de sus músculos tensos- nada como empezar así el día... un día que empezó bien y que seguro acabará bien, estoy seguro, pronto lo encontraremos -dijo con emoción.
Mientras que por su parte la chica desde el exterior del baño solo negó para si misma.
Rosa: Sigo sin poder creer que tras una década de estar retirado. Ahora decidas dedicarte nuevamente al mundo de la música, y todo por un sueño que tuviste.
Héctor: ¡Que no fue un sueño! ¡te digo que fue una premonición, niña! ¡Una premonición! -declaro mientras hacia una pataleta en la bañera como si fuera un niño pequeño.
Lo que hizo que la joven solo rodara los ojos. Las excentricidades del hombre que era su tío a veces podían hastiarla hasta a ella.
Rosa: Si, tus dichosas premoniciones. No te ofendas, tío... pero simplemente no tienes el don -afirmo como si nada- déjame poner un ejemplo, el sueño que tuviste sobre que Miss Universo se mudaría a la mansión de a lado el año pasado no se hizo realidad ¿o sí?
Héctor: ¿Te burlas de mí? -pregunto antes de solo hacer un gesto con su mano aunque ella no lo viera- no importa. Solo acabemos con esto, iremos a la ultima ciudad de la gira y entonces verás que tengo razón... ¿Cómo dijiste que se llamaba?
Rosa: En resumen, volveremos a nuestra patria, tío. La capital de nuestra tierra natal, México -menciono a la vez que el hombre en la bañera solo silbo un largo instante.
Héctor: ¿De vuelta a México? La verdad no me hace nada de gracia tener que volver allí -declaro con cierto fastidio.
Rosa: Solo recuerda que es la ultima parada. Solo concéntrate, intenta no ser tan exigente y trata de no hacer llorar a nadie como hiciste en Canadá.
Héctor: ¿Qué culpa tengo yo de que los canadienses aparentemente no puedan escuchar una palabra fuerte o dos sin acabar rompiendo en llanto? -pregunto encogido de hombros.
Rosa: Solo recuerda tu dichosa profecía, tío -dijo ajustando sus gafas- en alguna parte esta tu próxima estrella, aquel que nos ayudara a finalmente volver realidad todo lo que nos hemos propuesto -dijo a la vez que una risa se escucho en el baño.
Héctor: Aclaremos algo, cariño. ¡Por el momento, la estrella soy yo! Lo que necesito es un lienzo bien parecido y de buen vestir donde pueda pintar todo lo que se -declaro con convicción- necesito un trozo de madera como el que vi en mi sueño, uno que cante, al que pueda quemar en escena, necesito a ese alguien que quiera lo mismo que yo con la misma intensidad... ¿entonces dime donde esta?
Rosa: Pues si todo sale bien, en ciudad de México -dijo a la vez que se escucho como el hombre mayor se levantaba de golpe de la bañera, derramando agua por todos lados.
Héctor: ¡¿En dónde está en ciudad de México ese fuego que nos llevara a las puertas de ese mañana de ensueño?! ¡¿Esa falacia que para todos los cerrados de mente es solo una fantasía absurda?! -pregunto mirando al cielo a través del techo de vidrio instalado sobre la bañera.
Solo para a los pocos segundos resbalar con una barra de jabón y terminar cayendo de bruces al agua nuevamente. Cosa que solo hizo a la menor negar mientras pensaba cuantas veces esa misma escena se había repetido en el ultimo mes.
___________________________________________________
(Ciudad de México, de noche, horas después)
Luego de todo un día de experiencias por parte del trio de jóvenes, por decirlo de algún modo al menos decente, ahora mismo se podían observar a los tres chicos todo adoloridos quejándose del dolor mientras escuchaban música de un canal de la televisión en el hogar de Miguel.
Un humilde departamento de la clase media donde los otros dos hacían el favor de acompañar al líder de su pequeño grupo mientras este cuidaba de su hermana menor que se encontraba durmiendo en lo que la mamá del moreno estaba fuera.
Miguel: Creo que puedo decir esto sin riesgo de que se me termine de romper la mandíbula, la música calma mi dolor -menciono en lo que señalaba la televisión.
Marco: Algún día ella será mi esposa -dijo señalando a la cantante de la pantalla, lo que causo un bufido del tercero en la habitación.
Leo: ¿Vas a casarte con Clara Nightingale? ¿No se suponía que tenías como crushes a los rubios de 4*Town? Y de todos modos ¿Cómo lo harás? -pregunto antes de llevarse una mano a la boca.
Miguel: Menso, para que lo dijiste -exclamo mientras se llevaba una mano a la frente.
A la vez que, casi de forma milagrosa, Marco se recupero del dolor que sentía para luego subirse a la mesita de la sala con emoción de sobra.
Marco: ¡Porque seré famoso! Cantare en estadios llenos y tendré como cinco casas y volveré locos a chicas y chicos por igual -dijo haciendo como que sostenía un micrófono antes de encogerse de hombros- y luego, me casare con Clara. ¿Y porque no? Tener a los de 4*Town como una relación libre sin compromiso -dijo a la vez que los otros dos solo negaron cansados.
Leo: ¿Terminaste? Por favor, dime que terminaste.
Marco: Ya quisieras, porque como saben, esta es la parte ¡donde meneo el trasero! -dijo para luego hacer justo eso frente a la cara de Leo- ¡voy a ser famoso! ¡voy a tener mi propio harem de famosos!
Leo: ¡Okey, es todo! -declaro para luego levantarse de golpe y taclear al otro chico para acabar los dos luchando en el suelo. Todo eso siendo observado con diversión por el chico que vivía allí.
En estos casos le podrían preguntar ¿son tus amigos? Y el con todo gusto dirá: ¨Mis mejores amigos¨.
Aunque dicho momento se cortó en el instante en que la programación fue interrumpida por el canal de noticias.
Reportero TV: Ahora, una pregunta ¿quieren ser estrellas pop? -pregunto el de la pantalla con una sonrisa. A la vez que Marco se libero de golpe de la llave que Leo le estaba aplicando.
Marco: ¡Si!
Reportero TV: Bueno, están de suerte, porque hoy es su oportunidad si se encuentran en ciudad de México -declaro- ahora ¿están preparados?
Marco: Yo estoy en ciudad de México -dijo con un atisbo de ilusión a la vez que los otros dos no pudieron evitar mirar la pantalla con cierto interés y curiosidad en lo que la imagen de un hombre aparecía en esta.
Reportero TV: Héctor Rivera, Antigua estrella del mundo musical y mega productor de bandas de hace una década como chicos que lloran, terremoto de chicos y ciudad de chicos está buscando a su próxima estrella pop -menciono en lo que los tres jóvenes se miraron entre sí- pero él es aún más famoso por su cita en la revista Rolling Stone cuando dijo: ¨Puedo convertir lo que sea en una estrella, desde un perro pulguiento hasta un ave de malagüero¨.
Marco: ¡Yo canto mejor que cualquiera de esos dos animales!
Reportero TV: Las inscripciones son hasta las 7 de la noche, así que si creen tener madera para el estrellato del pop, aún tienen tiempo, es su oportunidad.
Aunque eso ultimo ni fue escuchado por el trio de adolescentes que rápidamente procedieron a usar el plan de contingencia usado la mayor parte del tiempo por casi todo hombre adulto, maduro y responsable cuando ya no se tienen más opciones: llamar a sus respectivas madres.
Solo para que ninguna contestara. Dejando como segunda opción el dejar un mensaje en el correo de voz y esperar a ver quien respondía primero.
Marco: Vamos, que no tenemos todo el día ¡suena! -dijo desesperado para luego ver una estrella en el cielo y comenzar a rogarle- ¿Puedes, puedes, puedes? ¡Por favor, ¿puedes?!
Leo: ¿En serio estas aplicando la del cuento de la princesa y el sapo? Marco, eres mejor que esto. Yo no lo creo, pero demuéstrame que me equivoco -dijo para que luego fuera su teléfono el que sonara- oh tiene que ser una...
Marco y Miguel: ¡Contesta!
Leo: ¡Ya voy! -respondió antes de contestar- ¿Sí? ¿Aja?... ¿En serio? ¡Claro que sí! Por favor, venga tan rápido como pueda -dijo terminando la llamada mientras que Marco ya lo estaba abrazando agradecido.
Marco: ¿Tu mamá viene en camino?
Leo: ¿Qué? No. Pero esa amable mujer de la librería a la que soy suscrito enviara su personal para que me entreguen una enciclopedia gratuita de mitos y leyendas del mundo -dijo con emoción.
Solo para que esta vez fuera Marco quien se emputara y nuevamente ambos acabaran luchando en el piso, esta vez incluyendo jalones de pelo, rasguños y mordidas a gusto. Aunque antes de que las cosas empeoraran, fue que al otro moreno se le prendió el foco.
Miguel: ¡Esperen! ¿Acaso lo olvidaste, Marco? ¡Leo tiene un permiso de conducir de aprendiz! -dijo parando el conflicto de golpe.
Marco: Oye, es verdad -dijo en lo que ambos se le quedaron viendo al otro chico que estaba siendo sujetado con una llave al cuello- entonces...
Leo: Lo admito, hasta a mí se me olvido. Pero antes de que se ilusionen, recuerden que necesito un adulto que me supervise. Y otro detallito pequeñito pero muy importantito ¡un auto!
Marco: Son buenos puntos. Miguel, te toca -declaro en lo que el mencionado se extrañó.
Miguel: ¿Y porque me miran a mí? De los 3, Leo es el que tiene más materia gris.
Leo: Si, pero me paralizo bajo presión. Y por lo general, es a ti al que se le ocurre una solución a los pocos segundos -declaro a la vez que Marco le dio una mirada de ¨¿vez?¨.
Miguel: ¿Qué? Eso no es verdad, no hay ningún modo en que yo... santa cachucha, ya se me prendió la bombilla.
(Unos minutos después)
El camino por recorrer no fue tan lejos ya que Don Andrés no vivía muy lejos del departamento de Miguel, literalmente vivía en el departamento al final del piso. El hombre llamado Don Andrés José María Garciano de Majará y Percebe, o solo Don Andrés para variar, era ese tipo de hombre que la mitad de la gente cree que es "un viejo loco que de todo se enoja", pero la otra mitad... bueno, la otra mitad también cree que Don Andrés es "un viejo loco que de todo se enoja".
Sin embargo, en lo que también coinciden, es que ese viejo de mente simple, propenso a los consejos tontos, de movimientos lentos y de andar tieso. Aún con todo, es el mejor y más leal amigo que uno pudiera tener, y que dentro de todas sus limitaciones, es un caballero que daría su vida por ayudar a la gente que quiere.... Pero de que es loco y enojón... lo es.
Pero eso no era lo más importante, no. Lo que importaba... era que se trataba de un adulto y que tenía un auto. El cual, tras luego de que tocaran su puerta con insistencia, salió vestido como caballero antiguo con todo y espada en mano.
Don Andrés: ¿Acaso el infierno se congelo? ¡¿La rata gigante de sumatra acata de nuevo?! ¡Pues entonces que un mal fario les caiga y no se deshaga! ¡Ni crean que me van a sorprender sin los pantalones puestos! -grito puras incoherencias para diversión de Miguel y Leo mientras que Marco seguía impaciente.
Miguel: Yo preferiría que se los dejara puestos, Don Andrés -dijo divertido en lo que el anciano parpadeo confundido antes de reconocer quien le hablaba.
Don Andrés: Miguel, pero si eres tu muchacho, y Leo y Marco también. Por un momento pensé que eran unos sicarios desalmados, pero no, muy bebes para eso -dijo guardando su espada- entonces ¿Qué desean? Los invitaría a una copa de güisqui, pero repito, muy bebes.
Marco: Si, si, ya lo dejo claro ¿siquiera esta mentalmente cuerdo ahora?
Miguel: ¡Marco, no seas grosero! -exclamo antes de ver al venerable hombre con una sonrisa- para no irnos por las ramas, Don Andrés. Tenemos una propuesta para usted. Verá, solo debe sentarse en su auto, Leo conducirá y luego... no lo sé ¿sacudiremos todo el polvo de su tienda de antigüedades sin cobro alguno el resto del año? -pregunto a la vez que los tres pasaron a hacer ojos de cachorro con miradas suplicantes.
A lo cual el anciano solo se encogió de hombros.
Don Andrés: Normalmente discutiría o haría una rabieta, pero ya sé que con ustedes al final acabo ayudándolos de todos modos, así que... vámonos.
Y ni termino de decir eso cuando ya estaba siendo cargado en un trono de brazos improvisado por el trio de adolescentes que en menos de lo que canta un gallo, ya estaban en el Volkswagen Virtus del hombre para que luego Leo pisara el acelerador y ya se pusieran en marcha. Todo esto mientras que Miguel pensaba que, por alguna razón, se estaba olvidando de algo importante.
_________________________________________________________
(Dante Pov)
Otra vez paso, mi humano parece que no aprende sin importar cuantos taconazos la líder de esta casa le de como reprimenda, otra vez dejo a la cría humana sola. Lo bueno es que para eso estoy yo aquí... mientras no me este rascando las pulgas, claro.
Solo era cosa de esperar... 3... 2... 1...
Coco: ¿Hermano? ¿Dónde esta Miguel? ¿Dónde está?... Snif... ¡BUAAAAHHH! -la pequeña humana ya estaba llorando en su habitación. Siempre ocurría en cuanto mi amo se iba. No se como lo hace, pero ella parecía saber cuando él no estaba incluso estando dormida.
Pero eso no importa, es mi deber hacer que la pequeña cachorra deje de llorar.
Coco: ¿Qué?... ¡Dante! ¡Señor Osito! -dijo en cuanto me vio llegar con un peluche de oso en mi hocico al que ella, por alguna razón que no entiendo, estaba apegada a él. Hasta me atrevo a pensar que quería al oso más que a mí ¡eso es tonto, yo soy mas bonito!
Aunque igual no puedo deshacerme del oso, la ultima vez que lo intente, ella no dejo de llorar por al menos 4 días. Aun así, no debía pensar en ello, mi trabajo era hacer feliz a la pequeña humana y protegerla hasta que la madre vuelva.
Siendo así que, lo único que se me paso por la mente mientras la pequeña humana me abrazaba, fue el preguntarme que tan fuerte golpearía la madre de mi amo al mismo cuando regrese y vea que ni él ni los otros dos están.
No puedo evitar preocupar... ¡oh, si! Justo ahí pequeña humana, detrás de la oreja, si... ¿en que estaba pensando? Meh, no importa ¡adoro que me rasquen la oreja, casi tanto como las caricias en la barriga!
_____________________________________________________
(General Pov)
(Centro de la ciudad, teatro Moon)
Decir que Héctor la estaba pasando mal, era quedarse corto, el hombre literalmente estaba a nada de que se le formara y hasta que se le reventara una hernia de lo molesto que estaba. Eso se podía asumir con facilidad debido a los gritos que se escuchaban desde el interior del auditorio. Y si le preguntaran a alguien que pasaba allí adentro, solo podía decir que los insultos eran bastante variados.
¨Hablo en serio, cuando digo que tu canto me hace querer bailar una buena bachata... ¡directo al infierno! ¡siguiente! ¨.
¨Llamaron los 80, quieren que les devuelvas el atuendo pasado de moda y el afro ¡siguiente! ¨.
¨ ¡SAL – DEL – ESCENARIO- AHORA! ¨.
¨ ¡lárgate antes de que control animal nos acuse de estar asesinando con brutalidad a una pobre ave inocente! ¨.
Rosa: ¡No! -grito cuando vio que su tío ya estaba sacando una bazuca para dispararla al pobre diablo que estaba en el escenario en ese momento- ya lo hablamos, sin armas de fuego, no repitamos lo que paso en Guatemala. Solo por eso no puedes poner un pie allí los próximos 10 años.
Héctor: Aguafiestas -declaro cruzado de brazos en lo que la siguiente persona hacia su audición, solo para fruncir el ceño aún más- escúchame bien, amiga. No lo tomes a mal, pero ese fue el peor canto que he escuchado en toda mi vida ¿Por qué no se toma algo para la garganta? Sonó como si un gallo tuviera flemas -declaro a la vez que la indignada mujer se fue molesta.
Rosa: ... ¿Eres consciente de que le acabas de decir eso a una monja, verdad? -pregunto en lo que él solo se encogió de hombros.
Héctor: Y por eso me contuve. Si de verdad hubiera querido insultar, hubiera dicho algo como lo que vi en esa película de espías de anoche, algo como: ¨Me encantaría escucharla más, pero es que soy una prostituta católica, sostengo una relación no conyugal con mi novio judío que también es negro y que tiene una clínica militar de abortos. Así que, salve satán, y que pase una bella noche, madame¨ -declaro con una sonrisa.
A lo cual la chica de lentes solo lo vio como si fuera un pez buscando aire y con un tic en el ojo antes de respirar hondo. Si se lo preguntarán, ella lo confirmaría como si nada, su tío a veces (y por a veces se refería a todo el tiempo) no era mejor que un niño de 8 años.
Rosa: Solo... recuerdas que son seres humanos y que tienen sentimientos ¿no?
Héctor: Claro que lo se. Pero ¿adivina que tengo yo? ¡30 álbumes de platino, y hasta un disco de diamante! -dijo solo para luego sentir de primera mano uno de los métodos favoritos de Rosa para ponerlo en cintura cuando se pasa de la raya.
Golpearlo con el estuche de violín con decoraciones de diamante que le compro en su cumpleaños número 10 directo en la cabeza.
Héctor: Ya, perdón -declaro mientras se sobaba el chichón- es solo que... ahora mismo no estoy de humor para siquiera sentir algo de empatía. No cuando se que la persona de mi premonición esta tan cerca, puedo sentirlo... eso y que necesitamos encontrar a alguien bueno que valga los millones de dólares que Krei Tech nos pago para encontrar y para que yo hiciera mi fuego –dijo estresado- y si tu y yo no le encontramos a él o ella...
Rosa: Ya lo sé, no lo tienes que decir, se acabó, fin del juego. Estás apostando lo que te queda de credibilidad en el mundo de la música en esto, la cual se ira por el retrete si esta búsqueda se va al caño y Alistair Krei nos de mala reputación por eso -dijo con un suspiro.
Héctor: Me alegra que lo entiendas, ahora ¡sigue caminando! ¡no veas el micrófono, solo sigue caminando! -le grito al chico en el escenario al que ni dejo intentarlo siquiera- ¡y adiós!
Rosa: Solo intenta calmarte, tío. No debes preocuparte por nada, recibimos a muchas audiciones hasta las 7 y... solo faltan cinco minutos -dijo mirando su teléfono, al mismo tiempo que el hombre mayor dejo caer su cabeza contra la mesa con desespero.
En lo que el próximo en hacer la audición se dejo escuchar, quien resulto ser meramente un perro de verdad que hasta un piano tenía, vete a saber como.
Héctor: Ah... De hecho, por raro que suene, es el mejor que he escuchado hasta ahora -dijo escuchando al can ladrar.
A la vez que, para sorpresa de la propia Rosa, tuvo que darle la razón. Mientras internamente rezaba por que apareciera alguien con talento, preferiblemente humano. Porque con lo desesperado que estaba su tío, a la de menos y si acababa llevándose al perro para hacerlo estrella... no sería la primera vez.
Pero para lo otro que su tío hacia todo esto, definitivamente el perro no era opción.
Siendo por dicha razón que decidió salir en busca de más candidatos, solo para soltar un grito ahogado cuando vio que no quedaba nadie en la fila para la audición. Lo cual en parte no le extrañaba para su frustración, no con todo lo que su tío había estado gritando las ultimas horas.
No obstante, cuando estaba por darse por vencida y decidir cerrar todo, fue que vio a tres chicos correr directamente hacia ella.
Marco: ¡Me llamo Marco de la Cruz y quiero ser famoso! -dijo para luego hacer un disque intento de canto.
A la vez que la chica sintió como si un campeón de boxeo peso pesado le hubiera dado un derechazo sin contenerse para nada.
De todos los lugares del mundo, de todas las posibilidades... un De la Cruz. Probablemente solo estuviera imaginando cosas ya que no es como que fuera un apellido exclusivo. Pero ya sabía cómo acabaría esto, aún así... igual no se pierde nada con intentarlo.
Rosa: Llena la planilla y espera a que te llamen -dijo mientras le pegaba un numero en el pecho al chico.
Marco: ¿Así de fácil?
Rosa: Ya lo veremos -dijo antes de fijarse en el chico vestido de negro- ¿y tú? ¿Cuál es tu nombre?
Leo: ¿Yo? No gracias, no tengo interés en cantar, me gustaría ser medico o escritor pero...
Rosa: Entonces yo también me presentare como una cazatalentos desesperada. Tu tienes una linda sonrisa y Justin Bieber cuando tenía esta edad ganaba al menos 3 millones de dólares por concierto -dijo dejando sin palabras al chico.
Leo: ... Pégueme el número.
Rosa: Muy bien ¿Qué tal tú, chico del hoyuelo en la sonrisa? -pregunto mirando a Miguel- ¿quieres que tus sueños se hagan realidad?
A lo cual el chico solo suspiro antes de negar.
Miguel: Lo siento... si hablamos de sueños, este no es el mío. De hecho dudo que si quiera pueda ser posible cumplirlo a veces y...
Rosa: Si, no me importa -dijo pegándole un numero en el pecho también- ahora... sigues tú, 810 -dijo a Marco antes de irse al interior del auditorio.
Solo para que al segundo, Marco intercambiara lugar con Leo.
Marco: Que cosas ¿no? Sigues tú -dijo en lo que Leo le miro extrañado y Miguel lo vio con mala cara.
Miguel: Déjate de bromas, Marco. Ambos sabemos que los 3 acabamos metidos en esto solo porque esa chica parece aceptar a cualquiera. Y además, también, ambos sabemos que Leo no sabe cantar -declaro de brazos cruzados.
Comentario que ofendió en gran medida al listo del grupo.
Leo: Vaya, cuanto apoyo. Por cierto, estaba siendo sarcástico. Ese fue sin duda el peor estimulo de la historia -declaro antes de dar un paso al frente- afortunadamente soy inteligente, así que ya pensaré en algo. Pero en que haré esa audición, la haré... Miguel.
Miguel: Solo no te pongas en ridículo.
Leo: Entendido -dijo antes de sin más, entrar al auditorio.
Solo para hacer un intento de ritmo de rap que para no alargar mucho la cosa. Se podía decir que era como la hamburguesa sin las papas, las espinas sin la rosa, la ola sin la tabla. O dicho de una forma entendible, no estaba tan mal, pero solo faltaba algo, no congeniaba. Así se sentía. Y así lo sintieron Héctor y Rosa.
Héctor: ¡Detente ya, antes de que mis oídos empiecen a sangrar! -dijo haciendo que Leo parara de golpe- solo... detente para siempre, por favor.
Leo: Pero... acabo de empezar.
Héctor: Acabas de terminar -aclaro- y por favor no te tomas a mal lo que te diré, pero para dejarlo en claro, quiero decirte que ¡algo más! -dijo pegando los puños contra la mesa.
Siendo así que Leo salió del lugar con una cara de horror mientras que de fondo aún se escuchaban los gritos del hombre mayor.
Héctor: ¡Eres la peor persona que he oído tratar de imitar a alguien que sabe lo que hace! -se escucho antes de que la puerta se cerrara una vez Leo salió de allí para luego tomar asiento junto a sus dos amigos.
Donde al fin parecía que había regresado al mundo de los vivos, porque hasta hace casi nada, parecía como si hubiese visto al mismismo charro negro en persona por poner un ejemplo.
Miguel: ... Pregunta estúpida ¿Cómo te fue?
Leo: Respuesta corta: No iré a Hollywood. Respuesta larga: Parece simpático al inicio, pero... solo no entren ahí. Es el mismísimo satanás, un satán flaco de traje a la medida y con una bazuca a la par -dijo para luego tratar de meditar e ir a su lugar feliz, aunque lo nervioso aún se le notaba y con creces.
Para que luego la morena de lentes se asomara por la puerta del auditorio con expresión cansada.
Rosa: Muy bien, 811, tu turno, pasa ya -dijo antes de irse.
Momento que Marco uso para intentar cambiar su numero con el de Miguel solo para que este se lo impidiera.
Miguel: Primero que nada, si estamos aquí es por ti, Marco. Sin mencionar que yo no quiero acabar así -dijo señalando a Leo.
Que ya estaba sentado al estilo indio haciendo hasta lo imposible para calmarse sin dejar de restar mantras y masajearse las cienes.
Miguel: Y segundo, este es tu sueño, Marco. No el mío -dijo antes de tomar a su amigo por los hombros y apretarlos con empatía- solo recuerda que oportunidades como esta solo aparecen una vez en la vida.
Marco: ... Tienes razón -dijo sonriendo al otro chico que solo asintió satisfecho.
Miguel: Ahora, ve, toma ese sueño con ambas manos ¡y hazlo en grande! -dijo para luego casi que empujarlo al interior del auditorio.
A la vez que tanto Héctor como Rosa miraron fijamente al recién llegado con mirada crítica.
Héctor: ... Entonces ¿es él?
Rosa: Si, querido tío.
Héctor: Muy bien, veamos que tienes ¨De la Cruz¨ -exclamo mientras observaba como el chico subía al escenario- aunque para crédito suyo, puedo decir que no se ve tan mal.
Y de allí, lo siguiente que paso fue que Marco, una vez tuvo el micrófono en sus manos, solo respiro hondo antes de comenzar a cantar ¨1 true love¨ de 4*town ante la expectante mirada de ambos evaluadores. A la vez que Miguel, Leo y hasta el viejo Don Andrés se colaron para ver el ¨debut¨ de su amigo y conocido.
Don Andrés: Hasta yo debo decir que no lo hace nada mal -dijo para si mientras asentía.
Aunque cuando parecía que las cosas estaban marchando viento en popa y que tanto la búsqueda de Héctor y Rosa terminaría, así como el sueño de Marco parecía estar a punto de volverse una realidad. Fue que Murphy, la famosa ley de que todo lo que podría salir mal, saldrá mal, ataco con todo lo que tenía.
Al hacer que el chico acabara desafinando en la estrofa más importante debido a que se intimido por la mirada criptica de Héctor. Quien solo frunció aún más el ceño por eso.
Héctor: Alto, solo detente. Para.
Marco: Yo, lo siento -dijo con cierto titubeo en su voz- es que estoy algo nervioso ¿puedo comenzar de nuevo? -pregunto a la vez que el hombre sonrío con ironía y sarcasmo.
Héctor: ¡Oh sí! ¡claro que sí! Sí, sí, sí. Claro, comienza de nuevo... O mejor aún ¿Por qué no sales y no vuelves a entrar? ¿De acuerdo? Solo ten cuidado de que no te caiga una campana encima ¡siguiente! -grito para desconcierto de Marco.
A la vez que sus dos amigos estaban consternados en diferentes niveles. Miguel solo no podía creer la actitud del hombre y Leo solo susurro ¨satán¨.
Marco: Pero ¡pero soy bueno!
Héctor: Eso no lo niego... en cierto sentido, suenas como Ernesto -dijo para sorpresa del menor- pero pasa y resulta que no necesito ¨bueno¨ ¡necesito fuego, arder en llamas! -dijo con convicción- ¿de acuerdo? ¡necesito a alguien que me saque de mi asiento! Y como puedes ver ¡sigo sentado! -declaro molesto- aunque si me preguntas, lo prefiero así, quien sabe en que momento me darías veneno -menciono con descaró.
Cosa que hizo enfadar al chico en el escenario.
Marco: ¡Yo no soy como él! ¿Por qué me ataca así? -pregunto a la vez que el hombre puso una expresión de aburrimiento en su rostro.
Héctor: Porque lo nuestro es algo de hace varias décadas chico ¿crees que mi apellido es coincidencia? Soy descendiente directo de Héctor Rivera primero ¡el original! ¡el tipo al que tu antepasado mato para volverse una estrella a costa de su asesinado amigo! -dijo a la vez que el chico se quedo sin palabras- pero sabes, deberías agradecer que no te pareces a él ¿ya viste el video? -pregunto como si nada.
En lo que Marco solo pudo apretar sus puños con fuerza al saber de que video se trataba. Fue uno que se hizo el año pasado que mostraba como su tatarabuelo era aplastado por la campana una y otra vez ¡algún maldito había hecho todo un remix del accidente! Video que para su desgracia, era malditamente popular.
Héctor: Rosita.
Rosa: Si, tío –menciono en lo que revisaba su tableta- ese video fue visto por diez mil millones. Cosa curiosa tomando en cuenta que a lo mucho solo hay siete mil millones de personas en el planeta.
Héctor: ¿Ya vez? Ernesto ahora mismo es una burla para todos, lo que de hecho es mucho de lo que esperar de una rata asesina -declaro como si nada- déjame hacerte un favor al decirte esto. Vete a casa, medita, y piensa que hacer con tu vida. Porque aquí no tienes cabida, encima de que tu reputación familiar... esta ese pequeño detalle que ¿Cómo lo digo?... Oh si ¡tu no tienes talento! -dijo dando fin al asunto.
Al mismo tiempo que Miguel termino por explotar. Esa había sido la gota de que colmo el vaso.
Miguel: ¿Qué no tiene talento? -pregunto saliendo de su escondite en lo que se dirigía a donde estaba el hombre- ¿No tiene talento? ¡tu eres el que no tiene talento!
Héctor: ... ¿Disculpa? -pregunto sorprendido por la interrupción.
Miguel: ¡Lo que oíste! ¡Tú eres el único sin talento aquí! ¡No has tenido un éxito en 10 años!
Héctor: ¡Oye! Para que sepas, chica en mi corazón fue un éxito hace 9 años -reclamo ofendido por la acusación del chico. Aunque, por alguna razón que ni él entendía, la actitud de ese niño no lo hacía enojar, casi hasta le parecía... nostálgico.
Miguel: ¡Oh! ¿Chica en mi corazón? Veamos si puedo recordar ese clásico, Rivera -dijo para luego, sin previo aviso, subirse a la mesa para sorpresa del hombre antes de ponerse a cantar- ¨ ¡Chica en mis ojos! ¡Y en mi mente también! ¡Y como una estrella no pare jamás! ¡Se la chica, chica, chica de mi CORAZON, CORAZÓN! ¨ -canto mientras hacia gestos de pulsación justo frente a Héctor con la intención de insultarlo.
Pero este, en vez de verse ofendido, solo vio con sumo interés al menor. Cosa que no fue compartida por la menor sentada junto a él.
Rosa: ¡Oye! ¿Qué rayos crees que haces? ¡Seguridad! -grito a la vez que dos hombres fornidos se estaban acercando allí, cosa que fue ignorada por Miguel.
Miguel: ¿Por qué no escuchas esto, amigo? -pregunto antes de improvisar una canción mientras pateaba lo que estaba en la mesa al hombre que no dejo de verlo ni un instante- ¨ Oh, pareces a cerdo ¡sí, un gran cerdo! ¡Y te vez como cerdo, y hueles a cerdo! ¨ -canto para que luego los de seguridad lo tomarán de un brazo cada uno- ¿Qué? ¡No, basta! ¡Suéltenme! -dijo antes de comenzar a forcejear.
A la vez que mientras eso pasaba, Leo tenía un debate interno entre su sentido común y su impulso de estupidez... y el impulso estaba ganando.
Leo: Veamos, lo peor que podría pasar si me meto en esto sería reformatorio, oficial de vigilancia, una tobillera electrónica, algunas horas de servicio comunitario -dijo mientras enumeraba con los dedos antes de solo suspirar hondo-... necesito conseguir nuevos amigos.
Y sin más, San Juan se sumo a la pelea. Al mismo tiempo que Marco solo respiro hondo antes de dejar el micrófono donde estaba para luego saltar encima de uno de los dos tipos de seguridad. Tanto así fue la cosa que hasta Don Andrés se unió a la escaramuza con todo y espada.
Don Andrés: ¡Sostengan vuestros calzoncillos, yo os salvaré! -grito mientras corría a la acción.
Siendo de ese modo que, para no alargar la cosa, solo se puede decir que el pleito acabo cuando la policía llego.
(Tiempo después, casa de Miguel)
Si había algo que los 3 jóvenes podían concordar en ese mismo instante, sin ninguna duda, era un hecho muy simple y tan sencillo de explicar como el necesitar beber o comer. Y eso era que estaban aterrados. Pero de que, se preguntaran ¿de ser arrestados por la policía? ¿por hacer un escandalo que a la de menos acabaría en las noticias? ¿por una posible demanda?
Pues no, ninguna de esas cosas. Si estaban tan asustados, era por la mujer que ahora mismo los estaba viendo de brazos cruzados y ya hasta con una bota en mano, la cual tenía una cara tan amargada en ese momento que la leche fresca se podría agriar sin problema alguno en cosa de segundos por lo que tenía en frente. A nada más que a su hijo junto a sus dos amigos y su vecino en su puerta, siendo escoltados por policías.
Miguel: ¡Mamá! ¿De casualidad recuerdas esa vez que te salve de casi asfixiarte? -pregunto en un inútil intento de ablandar a la mujer- vaya, eso estuvo cerca... y te amo.
Imelda: Sigue hablando, cada palabra es un clavo más en tu ataúd, cariño. En el de los tres -dijo haciendo que el trio se estremeciera del pánico.
Y si de por sí ya podían darse por muertos, lo que los acabo por rematar al punto de ya darse por muertos, fue el cometario de Don Andrés.
Don Andrés: ¡Me siento tan vivo!
_________________________________________________________________
Chapter Text
(General Pov)
(Hogar de Miguel Rivera)
Si se buscara una sola palabra para describir todo lo que estaba sucediendo en el hogar de la familia Rivera en esos instantes, sin exagerar con conceptos arcaicos como la tortura o el simple sentido literal del sufrimiento, bien se podía decir que dicha palabra era una que todo ser humano a sentido en algún momento de su vida sin excepción: Dolor. Así de simple.
Un profundo, arduo, extenuante y horrendo dolor que llega al punto de ser agonizante. Siendo la mayor responsable de este la dueña de la casa que estaba ¨disciplinando¨ a los 3 adolescentes allí presentes.
Imelda: ¡¿Qué creen que hacen?! -grito mientras arrojaba a Marco al suelo de un movimiento de judo.
Marco: ¡Mis costillas!
Imelda: ¡¿Cómo se atrevieron a irse y dejar a Coquito sola sin supervisión?! -pregunto para luego arrojar a su hijo contra la mesita de la sala y romperla con el cuerpo de este.
Miguel: ¡La mesa para los pies!
Imelda: ¡Incluso la cena se estaba empezando a enfriar porque no estaban, hoy había traído pizza del trabajo! -menciono antes de estrellar a Leo contra el piso.
Leo: ¿Alguien tomo el numero de la matricula? -pregunto en lo que se unía a sus dos amigos en el suelo. Quejándose de dolor los tres.
Siendo el resultado final una victoria aplastante y muy unilateral de mamá Imelda que sigue invicta. (primer corte comercial: se hace omisión del resto de la golpiza por exceso de violencia y sangre) (segundo corte comercial: el cuarto de coco es insonorizado por razones de este tipo).
Resultado que los 3 sabían que era mejor no discutir, porque si decían algo como que ya estaban heridos por el ataque del equipo de soccer de chicas de la mañana. Solo lograrían que ella los castigara más para que ¨aprendieran a usar el poco de materia gris que tienen¨.
Imelda: Y encima de todo me tengo que tragar el hecho de que la policía los tuvo que traer a casa -declaro cruzada de brazos- sin mencionar que apestan a sudor. En cuanto terminen de explicar que paso, vayan a tomar un baño, perdedores.
Miguel: Si, mamá -logro decir para luego gemir de forma lastimera.
Imelda: Además, hay que ver, ahora tengo que recalentar la cena de los 3 porque los señoritos no se molestaron en estar en casa y cuidar a Coco como se los pedí –se quejo a la vez que el otro par solo soltaron un lastimero quejido.
Leo y Marco: Lo sentimos, señora.
Imelda: Muy bien. Ahora, iré a ver si Coco se despertó de nuevo. Y de no ser el caso, los cuatro tenemos mucho de qué hablar -dijo dándoles la espalda- ya tienen 15 años. Y se siguen comportando como niñitos -se quejo en voz alta.
Para luego solo desaparecer.
Marco: Miguel... ¿te he dicho que tan dulce y femenina me parece tu madre? -pregunto con un claro tono sarcástico a la vez que él contrario solo bufo.
Miguel: Diariamente.
Leo: Por mi parte solo diré que me sorprende que aún luego de tener dos hijos, tu mamá sea capaz de barrer el piso con nosotros como si nada -menciono en lo que los 3 tuvieron un escalofrío por recordar golpizas anteriores.
Razón por la cual agradecieron a cuanta deidad conocían que esta vez no usara la chancla, o peor, la bota.
Miguel: Pues si ya saben como es ella... por favor, no la vayan a hacer enfadar. Saben como es -casi que suplico en lo que los otros solo pudieron asentir.
Marco: Por cierto ¿Dónde aprendiste esas canciones, Miguel? -pregunto con algo de amargura. Refiriéndose a las que canto a Héctor, a la vez que el otro moreno solo se encogió de hombros.
Miguel: Ponen chicos que lloran en el canal de música todo el tiempo... y la canción del gran cerdo la invente -declaro con orgullo y diversión para sí mismo.
Leo: Pues... hay que admitir que era pegajosa -menciono estando de acuerdo.
Al mismo tiempo que, tan rápido como desapareció, Imelda nuevamente hizo acto de presencia. Y junto con ella, un silencio sepulcral que dejo al trio de adolescentes que solo temblaron aterrados.
Imelda: Para su suerte, Coco esta dormida, gracias a que nuestro perro es más responsable que tú, Miguel -menciono a la vez que su hijo solo bufo- ahora, lo resumiré en perfecto y simple español -dijo cruzada de brazos- ¿Qué sucedió? La verdad, ahora.
Siendo el que respondió luego de unos minutos nadie más que Dante, quien soltó un ladrido cuando vio a un gato por la ventana de la sala, para luego quedar con su típica expresión lengua afuera.
Imelda: Confiesen ustedes, no el perro -exclamo con fastidio en lo que los 3 se miraron entre sí antes de suspirar al unísono cuando la vieron tomar la bota en mano.
Leo: Fue culpa de estos dos -señalando a sus dos amigos- Don Andrés nos ayudo a intentar a hacer famoso a Marco, pero el productor era super malvado con todos, un satán.
Miguel: Yo me ofusque y luego le cante la canción del enorme cerdo al tipo y luego hubo una pequeña pelea ¡desde ya aclaro que no hubo heridos! -dijo rápidamente a la vez que Leo asintió varias veces.
Marco: ... Y ahora estoy muy triste -dijo deprimido al recordar lo que sucedió- que va a saber ese tipo de que habla... ese Héctor.
Y como si de una especie de reflejo involuntario al solo escuchar ese nombre, Imelda arroja la bota que se estrelló perfectamente contra una pared, a la vez que se escucho la queja del vecino de al lado, quien fue olímpicamente ignorado. Cosa que extraño a los 3 jóvenes.
Imelda: ... ¿Héctor?
Miguel: Si... estaba haciendo audiciones, y Marco quiso probar suerte... Creo que hasta un perro callejero hubiera sido mejor tratado por ese hombre que Marco -dijo en lo que el mencionado solo suspiro- parecía odiar su apellido, él...
Imelda: Bueno, toma en cuenta que el apellido De la Cruz no es muy querido -exclamo extrañamente más calmada- sobre todo en la industria musical desde que Ernesto... hizo lo que hizo... -menciono algo incomoda. Causando que Marco solo se encogiera en su lugar de la pena y vergüenza.
Aunque extrañamente, lo que paso después desubico por completo a los 3 chicos. Lo cual, fue que Imelda solo negara antes de respirar hondo y calmarse.
Imelda: De cualquier forma... lo bueno es que se acabó ¿Quién quiere que le prepare un sándwich? -pregunto a la vez que los 3, aún más desubicados, solo levantaron la mano- de acuerdo entonces -declaro antes de dirigirse a la cocina.
Solo causando que Leo ya no pudiera aguantar la intriga por tal cambio de actitud.
Leo: Muy bien ¿Qué sucede? -pregunto, causando que Imelda se detuviera, a la vez que los otros dos le rogaban en silencio que se callara y solo dejase que el milagro pasara- ¿de verdad es todo? ¿ese fue el gran interrogatorio? Por lo general, es mucho más castigo físico acompañado de presión psicológica con el fin de apretarnos los tornillos para así hacer que nos enfrentemos a los hechos -termino al mismo tiempo que el par restante ya tenían el Jesús en la boca.
Solo para que la mujer de la casa se encogiera de hombros y se hiciera la desentendida.
Imelda: No se de que estás hablando... pero no te permitiré ver CSI, La ley y el orden o Chicago Fire nunca más -dijo causando que los 3 rieran con suavidad- como sea... antes que nada, ya me dio curiosidad. Miguel ¿le cantarías a tu madre la canción del gran cerdo? -pregunto con cierto aire cómplice en lo que los 3 captaron la indirecta.
Siendo así que, aun cuando estaban tirados en el suelo quejándose del dolor, ahora los 3 chicos estaban cantando la canción insultante como si nada a una, muy fuera de lo común, divertida Imelda. Solo para que a los pocos segundos sonara la puerta, y cuando fueron a abrirla aún cantando la dichosa canción.
Cual sería la sorpresa de ver allí parados al gran cerdo en persona junto a su sobrina. Cosa que saco un grito de chica a los 3 machos.
Marco: ¡SI! -grito apenas supero la conmoción para luego abrazar a Héctor con fuerza- ¡sabía que vendrías por mí! -declaro con ilusión solo para que Héctor lo apartara con brusquedad.
Héctor: No vine por ti -dijo con el ceño fruncido antes de sonreír complacido- de hecho, en realidad vengo por él -exclamo decidido a la vez que señalaba a un sorprendido Miguel.
Marco: ¡¿Qué?!
Leo: ¡¿Qué?!
Miguel: ... ¿Yo? -pregunto en lo se señalaba a si mismo confundido.
Solo para que cuando Héctor estuviera a punto de afirmarlo, fuese que tanto él como la matriarca del pequeño hogar cruzaran miradas... y entonces, fue que se sintió la presión. No, mejor dicho, fue una tensión tan densa y espesa que perfectamente se podía agarrar y hasta cortar con un cuchillo sin ningún tipo de problema.
Y el relámpago que se escucho fuera del edificio de apartamentos solo ayudo a que la situación pareciera más dramática y de suspenso.
Héctor: Imelda... No sabía que te habías mudado...
Imelda: Héctor... -escupió el nombre con tal tono venenoso que hizo estremecer a todos los presentes.
Héctor: ... Que linda estás.
Imelda: Ahórratelo -dijo para que luego la incomodidad en 3 jóvenes se hiciera aun más notoria mientras que Rosa parecía indiferente.
Los 3 adolescentes: ... ¿Ustedes dos se conocen? -preguntaron en lo que la mujer solo negó.
Imelda: Por más que me amargue decirlo -exclamo con renuencia.
A la vez que el hombre allí presente solo se masajea la frente al sentir un dolor de cabeza que sabía de antemano que solo iba a empeorar.
Héctor: Vaya que al destino le gusta ser un mal nacido -dijo antes de centrarse en la razón de que estuviera allí en primer lugar- entonces... es él ¿verdad? -pregunto a la vez que la madre solo apretó los hombros de su hijo con recelo.
Imelda: Si, es él -afirmo con acritud.
Para luego, aún con toda la amargura que se estaba acumulando en su garganta. De igual modo dejar pasar a la pareja de tío y sobrina al interior de su hogar. Quienes una vez tomaron asiento, de inmediato se pusieron a los negocios.
Héctor: Entonces... a lo que vinimos -dijo una vez tuvo a los habitantes de ese lugar en frente suyo- supongo que sabes cual es el plan aquí ¿no es así, Imelda? -pregunto con seriedad- el chico tiene todo para ser una estrella. Quiero llevármelo a él junto a ti y ha Coco a San Fransokyo. Para producir unos demos con Miguel -termino con una sonrisa que no hizo nada para borrar el seño fruncido de la mujer.
Imelda: Eso es decisión de él, Héctor, lo sabes -dio su contra argumento con severidad.
En lo que el propio Miguel aún no podía creer lo que estaba sucediendo.
Miguel: No habla en serio ¿o sí? -pregunto a la vez que el hombre mayor solo arqueo una ceja a la vez que su sobrina ajusto sus gafas.
Rosa: Serán 3 meses, nos encargaremos de los gastos, hospedajes, medicamentos de ser necesarios, lo que necesiten -explico con naturalidad.
Héctor: ¡Miguel! -exclamo con su mejor sonrisa de comercial- ¡Tienes un don! Tu tienes nada más ni menos que el fuego -dijo con emoción- y por lo que vi en las audiciones, tienes ciertos problemas de control de ira. Lo cual no juzgo, ya que algunos dicen que yo también los tengo, pero también tengo ¡dos deportivos y un todo terreno!
Y ni termino de decir esa afirmación cuando Marco solo parpadeo un par de veces antes de ponerse a cantar ¨U know what's up¨ de 4 town. Cosa que Héctor solo hiciera un gesto de cierra el pico con la mano en un parpadeo.
Héctor: Detente, por favor, no vuelvas a hacer eso -dijo como punto final, causando que el chico solo agachara la mirada y guardara silencio- gracias.
Rosa: Miguel -dijo volviendo al tema en cuestión- viajamos por 22 ciudades de 22 países diferentes, escuchamos a más de 20 mil personas y de todos ellos, Héctor te eligió a ti –dijo a la vez que el mencionado solo le dio una sonrisa y un guiño a Miguel.
Quién cada vez estaba más desubicado.
Miguel: Pero... no soy cantante -dijo a la vez que Leo le miro extrañado.
Leo: ¿De que hablas? Tu cantas todo el tiempo -afirmo confundido- lo haces en el auto, en la mesa, le cantas a tu hermanita cuando no puede dormir de noche.
Miguel: Yo no hago eso -negó en lo que su madre apretó su hombro con suavidad.
Imelda: Si lo haces -dijo en lo que Leo siguió dando ejemplos.
Leo: Cuando trabajas en la tienda de Don Andrés con nosotros, cuando abriste la puerta hace 3 minutos -termino a la vez que Miguel parecía cada vez más ofuscado.
Miguel: Pero eso no es cantar -dijo a la vez que su madre le llamo la atención de nuevo.
Imelda: Si lo es, cariño.
Leo: Y siempre está cantando cuando escucha los canales de música.
Miguel: ¡Leo! -dijo en tono de advertencia- cierra la boca, por favor.
Imelda: Pero de cualquier modo -siguió ella por su cuenta- no necesitas que yo este allá, Héctor. Yo ya tengo un trabajo estable y una vida... y tal vez seas un imbécil al que de hecho, ahora solo deseo que tu recuerdo sea enterrado y olvidado por mi familia... pero se que a pesar de todo, Miguel estará bien contigo -termino soltando con renuencia.
Al mismo tiempo que Miguel ya se sentía como si le estuvieran hablando en mandarín o que de un momento a otro lo mandaron a perderse al planeta marte sin ningún mapa o punto de referencia. Dicho de otro modo, más perdido y confundido no podía estar.
Miguel: ... ¿Me perdí de algo? -pregunto solo para que ambos adultos apartaran la mirada.
Héctor: Nada importante -dijo restándole importancia al asunto- entonces, Miguel ¿Qué dices? ¿Quieres cumplir el sueño y salir de Latinoamérica para ser moldeado y convertido en una gran estrella por él gran Héctor Rivera? -pregunto mientras se servía un café que Imelda había traído al comienzo de la reunión.
En lo que todos los demás estaba observando atentamente al centro de atención en ese momento, el cuál era Miguel. Quien tras pensarlo un momento, solo respiro hondo, sonrió y dijo.
Miguel: No.
Y en ese mismo momento Héctor termino rompiendo la taza, causando que todo el liquido se derramara encima suyo antes de probar un sorbo. Pero, aún estando, hirviendo el café, el hombre no soltó un solo grito, solo una incómoda sonrisa que parecía contener toda la furia que guardaba en su interior en ese momento.
Aunque eso no evito que la propia Imelda ahogara una risa burlona que de todos modos se escapo de sus labios.
Héctor: ¿Perdón?
Leo: Si ¿perdón? -pregunto igual de sorprendido.
Héctor: Escucha, niño -dijo tratando de sonar lo más calmado posible- primera regla del estrellato, la cima es solitaria. Porque algo me dice que estás declinando esta oferta para no hacer sentir mal a tu amigo aquí presente, pero te diré esto... si confías demasiado -dijo antes de ver de reojo a Marco quien solo bajo la mirada con vergüenza al saber por donde iba la cosa- ... te podría arrepentir después.
Miguel: Ya veo... igual, no gracias -dijo causando que Héctor considerara cada vez más irreal lo que estaba pasando.
Héctor: ... ¿Cómo, como, dices que dijiste?
Miguel: Eso, no gracias -dijo con tal simpleza que todos, sin excepción, estaban perplejos.
Cosa que hizo al hombre mayor respirar hondo y contar internamente hasta diez... luego hasta cien... e incluso hasta mil, con tal de controlarse... fracasando épicamente. Respetaba al niño en parte, su lealtad a su amigo, así como su terquedad... un tierno y dulce sentimiento... ¡justo en la peor ocasión!
Héctor: Muy bien... esto es lo que haremos. Voy a tomarme un momento, saldré a comer, tomar aire, aclarar mis ideas. Y para cuando volvamos a hablar, espero que lo hayas pensado mejor -dijo para luego solo ponerse de pie y salir por la puerta.
Mientras que internamente, Imelda lamento que Héctor no terminara bebiendo el purgante que había colocado en el café.
Para luego solo sentir su propio dolor de cabeza, el cual iba en aumento con cada cosa que se escuchaba rompiéndose fuera del apartamento mientras Rosa solo saco un fajo de dólares y comenzó a dejar billetes sobre la mesita de repuesto que habían sacado del armario luego de que ella usara el cuerpo de Miguel para romper la otra hace casi nada.
Rosa: Esto es por la taza... y esto por el jarrón... y por la maceta... y por el buzón de la entrada... ¿sabe qué? Tome todo, y de paso tome mi tarjeta también -dijo dejando todo el fajo de dinero sobre la mesa junto a la mencionada tarjeta.
Imelda: Gracias, querida -dijo dándole una sonrisa genuina a la chica que solo asintió.
Rosa: Un placer... en cuanto a ti -dijo mirando a Miguel- el tío y yo nos iremos en 3 días. Deberías pensarlo... muchos considerarían lo que estás haciendo como una estupidez -dijo a la vez que el chico al que le hablaba solo endureció la mirada.
Miguel: Dile a tu tío que mi posición es firme -declaro a la vez que ella solo negó antes de irse también.
Siendo justo en ese momento que Marco se levanto de su asiento y golpeo a Miguel en la cabeza sin reparo alguno.
Marco: Torpe -declaro en lo que otro chico solo se encogió de hombros.
Miguel: Es tu sueño, Marco. No sería justo quitártelo.
Leo: ¿Justo? Amigo, hay que reconocerlo, cantas mejor que este -dijo señalando a Marco.
Marco: ¡Si! Espera ¡oye! -se indigno en lo que él más listo del grupo solo se encogió de hombros- como sea, mantengo lo que dije, eres un torpe... y me quedo con esto -dijo para luego tomar un dólar de 20 antes de irse también.
Cosa que hizo que tanto ambos amigos como la madre de uno de los dos solo suspiraron pesadamente, menuda forma de acabar la noche.
________________________________________________________
(Dos días después)
(Ciudad de México, zona central)
(Rosa Pov)
Sencillamente no lo comprendo, ya casi se acaba el tiempo que le dimos a Miguel para que nos llamara, y ni rastro de él. Esta se supone que es una oportunidad única, cualquiera con solo un poco de sentido común habría tomado esta rara y casi imposible segunda oportunidad para el estrellato que no cualquiera da. Pero este chico no ¿Cuál es su problema?
Solo ¿Qué pretende? Es imposible que haya alguien tan terco, va contra todo instinto sensato y lógico... demasiado parecido a mi tío para mi desgracia, como si uno no fuera suficiente.
Rosa: Solo no lo comprendo ¿Cómo pudo rechazar algo así de grande como si nada?... excepto que si lo que me dijo el tío es verdad, entonces claro que lo entiendo -mencione mientras observaba el lugar que tenia ante mí.
Se trataba de una cafetería rustica de nombre ¨Las leyendas¨, el exterior mostraba una fachada rustica con bastante vegetación como decorado, desde flores hasta helechos. Y de lo que podía ver en el interior, había bastantes cuadros de diversas entidades antiguas en las paredes: La Nahuala, La llorona, Momias, el chupacabras, hasta el mismísimo charro negro, por decir algunos.
Rosa: Debe ser un lugar para fanáticos de esos mitos -dije antes de fruncir el ceño al ver un impedimento a mi propósito de estar allí ese día- el lugar esta lleno, y no veo a Miguel por ningún lado, según lo que investigue, tiene un trabajo de medio tiempo aquí, mientras que el trabajo en la tienda de antigüedades de su vecino es más un pasatiempo... que fastidio -dije sintiendo migraña desde ya.
Solo para luego desconcentrarme al escuchar lo que parecía ser música, la cual provenía de la parte trasera de la tienda, a lo cual decidí ir a ver de que se trataba. Para así terminar encontrándome a quienes estaba buscando, al parecer el chico que estaba buscando parecía estar en su hora de descanso, y sus dos amigos le estaban haciendo compañía, o al menos eso parecía.
Aunque lo que me llamo la atención era el hecho de que Miguel tenía un viejo balón de futbol en sus pies, el cual no dejaba de patear al aire una y otra vez, pareciendo del todo concentrado en esa única tarea... aún así, debo reconocer que tiene un buen... no, un perfecto control del balón. Cosa que era muy importante para jugadores de todos los niveles ¿será fanático del futbol?
Leo: Entonces... -dijo luego de lo que parecía ser un buen rato de estar en silencio- estuve sacando las cuentas anoche con eso del canto... y Marco tiene razón, eres un idiota -declaro en lo que cerraba su libro y Miguel solo suspiro.
Miguel: Chicos -dijo sin dejar de mantener el balón en el aire en ningún momento- no quiero ir a esa tal San Fransokyo con ese cretino. En vez de eso, quiero estar con mis cretinos, y conseguir unirme a cualquiera de los equipos de la ciudad.
Leo: Pero esto es como el futbol, hasta mucho mejor que esa necesidad tuya de querer jugar futbol callejero en la que nos metiste también -siguió insistiendo- solo que en vez de romper las leyes, una que otra vasija y correr a la portería, vas a cantar y bailar -dijo con cierta necedad de no querer dar el brazo a torcer- ¿Qué tienes que perder?
Y mientras Miguel parecía pensarlo, yo me puse a investigar con mi celular ese asunto del futbol callejero, ya que nunca lo había escuchado antes.
Leo: Amigo -dijo tomando al otro moreno de los hombros, haciendo que el balón callera al suelo de paso- hablamos de San Fransokyo. Piensa en el dinero, la fama, las estrellas, la tecnología, las oportunidades... hasta puede que encuentres a tu media naranja o algo así ¡solo piénsalo!
Miguel: Si, lo se. Pero nada de eso importa si debo restar a mis mejores amigos -dijo molesto- saca esas cuentas, profesor.
Leo: Muy bien -se encogió de hombros en lo que saco una calculadora de su bolsillo- de acuerdo, llevo 2, lo multiplico por el coste/beneficio, y lo divido entre los ingreso y el estándar de vida promedio de mejora humana según los estándares de la ONU... y no, aún eres un tonto -dijo a la vez que su amigo solo frunció el ceño.
Miguel: Pues perdón -exclamo con un tono obvio de ironía antes de ver a Marco que parecía distanciado- ¿y tu qué? -llamando su atención- no me has dirigido la palabra en los últimos dos días.
Marco: Será porque no quiero hablarte.
Leo: Pero ya lo hiciste -menciono a la vez que el De la cruz solo resoplo fastidiado.
Marco: ¿Sabes qué? Parte de mi te odia. No, todo yo te odia -dijo encarando a Miguel- pero si eres listo, vas a llamar a ese tipo, aquí y ahora -ordeno con seriedad.
Cosa que no le gusto para nada al otro moreno.
Miguel: Ese tipo, dijo que no tenias talento. Le dio un trauma a Leo, y rompió más de una cosa de mi casa -termino con simpleza su contra argumento.
Marco: ¡Pero quiere hacerte famoso! -declaro en lo que sacaba un papel de su chaqueta- salió en la portada de Rolling Stone -dijo mostrando justamente el artículo de mi tío que seguramente habían visto en las noticias hacia un par de noches atrás.
Miguel: ¿Qué otras cosas extrañas llevas en tus bolsillos? -pregunto mientras tomaba el papel.
Marco: Pues mi espejo de la suerte, y fotos personalizadas de 8x10 -aclaro mientras sacaba dichas fotos- Un chico bueno ¡y un chico malo!
Miguel: Sin nada que argumentar... excepto que ¿no es muy poca ropa en el del chico bueno? -pregunto en lo que el otro chico solo se encogió de hombros.
Cosa en la que hasta yo como chica debía estar de acuerdo.
Leo: Ignorando el narcisismo de Marco. Solo queremos lo mejor para ti.
Marco: Oportunidades como esta solo se presentan una vez en la vida -termino de insistir a la vez que su amigo solo se quedo pensándolo.
Miguel: Déjenme entender esto... están diciendo que si tuvieran la oportunidad de ir a San Fransokyo para grabar demos ¿irían? -pregunto a la vez que ambos soltaron un si al unísono.
A lo cual yo solo negué antes de decidir irme, al mismo tiempo que escuchaba como mi celular estaba sonando, y no hace falta decir que ya sabía de quien se trataba. Ya tenía una idea de cual era su plan, pero ni crea que tendrá lo que quiere tan fácil. Si él se puede hacer el duro, nosotros también podemos.
Pero, aún así, no estaría mal ponerlo a prueba, porque viendo como esta la cosa, muy posiblemente él si sea lo que mi tío a estado esperando, lo cual es muy irónico si se toma en cuenta la relación de esos dos. De cualquier modo, no lo vere hasta la noche... ahora toca hacer lo que de verdad vinimos a hacer a Ciudad de México en primer lugar.
Rosa: Game Start -dije con una sonrisa ya queriendo que fuera la hora donde le dije que me viera, solo no podía esperar.
______________________________________________________________
(Horas después)
(General Pov)
(Ciudad de México, Alameda Central)
La Alameda Central, es el paseo más antiguo de la Ciudad de México y recibió el nombre ya que en su origen se plantaron álamos, ahora sustituidos por sauces y fresnos. Con el objetivo de realzar la belleza de la ciudad y que hubiera un espacio dedicado exclusivamente al paseo, su arreglo fue mejorando con esculturas, fuentes y monumentos.
Y era en dicho lugar donde Miguel se encontraba ahora, extrañado por el solo hecho de estar allí en primer lugar, justamente a las 9 de la noche de todas las horas. Decir que la situación le parecía sospechosa era poco, pero, se suponía que vería a la tal Rosa allí, y él por su parte tenía una respuesta que dar.
Miguel: ¿En dónde estará ella? -se pregunto antes de finalmente emocionarse al verla llegar por el sendero a un lado suyo- hasta que al fin, casi me salen telarañas ¿Dónde te habías metido? -pregunto con intriga- además, si sabes que estar aquí de noche puede ser peligroso ¿verdad?
Rosa: Y sin embargo, tú estás aquí también -dijo con una sonrisa antes de cruzarse de brazos- ¿Y bien?
Miguel: De acuerdo -dijo de golpe- iré a San Fransokyo contigo y tu tío a grabar demos... solo -exclamo haciendo que ella arqueara una ceja- si llevan a mis amigos conmigo, y nos convierte en un grupo.
Cosa que, aunque Rosa ya lo veía venir, igual la sorprendió.
Rosa: ¿Qué... que dijiste? ¿Estas tratando de negociar aquí? -pregunto con diversión- aquí somos mi tío y yo los que hacemos los negocios.
Miguel: Pues yo solo digo lo que es, querida -dijo con simpleza- si me quieren, tendrán que llevarnos a los 3 -declaro a la vez que la chica no pudo evitar ahogar una leve risa.
Rosa: Lo siento, fue inapropiado, es solo que... ¿escuchaste cantar a tus amigos? Es verdad, no saben. Leo no tiene nada de entonación y Marco, aún con todo y la actitud de diva, tiene problemas escénicos. De los 3, la mejor opción eres tú.
Miguel: ¿Es así? Pues... yo no soy una estrella retirada o mega productor como lo es tu tío, pero se que cantan mejor que perros pulgosos o aves de malagüero -dijo para luego mostrar la noticia de la revista Rolling Stone de Marco- y fue el propio Héctor quien dijo que podía convertir esos animales en estrellas.
Rosa: ... Le dije que no dijera eso en esa entrevista, que luego se le regresaría -se quejo antes de suspirar- ¿y se supone que eso convenza a alguien? ¿De verdad nos crees tan desesperados porque visitamos 22 países diferentes y no pudimos encontrar a nadie? Pues te lo digo de antemano, no existe forma de que mi tío se llevara a los 3 a San Fransokyo a convertirlos en estrellas. Nunca sucederá -dijo con tal tono que hizo que Miguel solo arqueara una ceja.
Miguel: Conozco ese tonito, esta es la parte donde viene un ¨pero¨ -dijo en lo que ella solo ajusto sus gafas antes de hablar.
Rosa: Dime algo Miguel ¿Cuáles son tus sueños y esperanzas para el futuro? También califican las ambiciones -dijo extrañando al otro chico.
Miguel: ¿A qué viene esa pregunta?
Rosa: Solo responde por favor -dijo en lo que el moreno solo suspiro antes de contestar.
Miguel: Mi sueño, es un jugador de fútbol que sea reconocido por todos y que haga que todos usen los zapatos que hace mi mamá en su local -dijo a la vez que Rosa solo lo miro como si le hubiera crecido una segunda cabeza- pero no de cualquier futbol, de futbol callejero de todas las cosas.
Y aunque la afirmación final fue dicha para aclarar cualquier duda, la chica solo quedo aún más confundida.
Rosa: ¿Fútbol callejero? Admito que investigue un poco al respecto, pero... ¿Por qué quieres eso precisamente? Ese deporte apenas se esta empezando a hacer popular ¿Por qué mejor no intentar algo como clasificar en el equipo de tu escuela? Así dentro de unos años...
Miguel: ¡No me estás entendiendo! No quiero esperar unos años, el futbol callejero me ha gustado desde que tengo memoria, lo cual no es mucho tomando en cuenta que de los 10 años para atrás no recuerdo nada... ¡pero igual! ¡Si triunfo en el fútbol callejero ahora, puedo hacerme famoso desde ya y así apoyar el negocio de mi mamá y de mi familia! -termino decidido a la vez que Rosa solo se quedo pensando.
Rosa: ... ¿No recuerdas nada de tus diez años para atrás?
Miguel: No... Hubo un accidente de auto, o eso me dijo mi mamá. Todo lo que recuerdo era que desperté en una cama de hospital y que desde entonces vivimos en Ciudad de México. Parece que vivíamos en otro lugar antes, pero ella no me dice mucho. No pregunto y no me importa mucho la verdad -dijo en lo que ella sonrió con interés.
Siendo así que con cada palabra, el interés de Rosa solo parecía crecer cada vez más y más.
Rosa: Eso explica más de una cosa -dijo para confusión del chico en frente suyo- de cualquier modo... no te entiendo, en serio. Honestamente, te están dando la oportunidad de toda una vida ¿y tu prefieres eso?
Miguel: Pues sí, es una cosita llamada lealtad ¿y qué? -respondió con brusquedad- y si te estas burlando, te lo advierto. No dejare que nadie se burle de mi ni de mi hermoso sueño. Seré el mejor jugador, y luego buscaré a mi padre y lo haré volver a casa para que diga porque nos abandonó -dijo a la vez que Rosa solo sonrió con diversión.
Rosa: ¿Tu padre?
Miguel: Si... mamá dijo que murió en el accidente. Pero no le creo nada, se que esta vivo. Y cuando me vuelva famoso por mi cuenta y tenga los recursos, lo buscare y lo jalare de las greñas devuelta a casa para que me explique más de una cosa -declaro decidido a la vez que la joven solo rodo los ojos con ironía.
Rosa: En serio no sabes nada, parece que se te ha guardado más de un secreto.
Miguel: ¡Deja de hablar así! ¡Como si supieras cosas que yo no, es molesto! -exigió en lo que ella solo le dio la espalda.
Rosa: La desesperación es mala consejera, recuerda eso -dijo en lo que le hizo un gesto para que la siguiera- y no me estaba burlando para nada... es más, déjame decirte algo, que en parte es la ley de vida de mi tío... no importa qué clase de sueños tengas, Miguel. Si eres capaz de arriesgar tu vida por ellos, entonces son reales -dijo para extrañeza de Miguel.
Pero aún así, de algún modo, esas palabras, dichas de ese modo por ella. Le hicieron sentir algo, no sabía que y no podía encontrar las palabras para describirlo, pero era un ¨algo¨ que le gusto sentirlo. Siendo entonces que le quedo claro, de algún modo, ella sabía de él.
Cosa que le agrado, porque le gustaría tener respuestas por la extrañeza de toda la situación. Aunque antes de que pudiera preguntar que pasaba, fue que llegaron a una sección restringida de la Alameda. Una que parecía ser la entrada a un pase subterráneo. Por el cual ambos siguieron para extrañeza del moreno.
Miguel: Debo admitir que esto empieza a ser emocionante.
Rosa: Si tu lo dices -dijo con cierta ironía que esta vez hizo a Miguel rodar los ojos.
Miguel: Ya imagino, lo tuyo es irse a la cama a las diez ¿no es así?
Rosa: Pero ¿Qué dices? -pregunto con cierta indignación que le pareció divertida al chico- a mi me gusta divertirme.
Miguel: Oh, sí, claro. Se te nota a leguas -menciono con sarcasmo haciendo que la chica frunciera el ceño.
Rosa: Muy bien, vale. Cuando terminemos con esto, te lo mostrare.
Miguel: Claro ¿me lo das por escrito? -pregunto para que luego ambos acabaran soltando una leve risa- a fin de cuentas ¿A dónde vamos?
Rosa: Este túnel lleva a una entrada secreta del que una vez fue el refugio secreto de uno de los luchadores más famosos de todo México, el toro fuerte -dijo sorprendiendo al chico.
Eso debido a que Miguel, así como buena parte de la población masculina del país, sabían de quien se trataba esa persona. El toro fuerte o solo el toro, fue uno de los luchadores más grandes de todo México. Nadie le gano jamás, ni una sola vez. Lo que causo que muchos comenzaran a hacer especulaciones de como eso era posible.
Algunos decían que era debido a que nació con una enfermedad que lo hizo inhumanamente fuerte desde que nació. Otros que se entreno en los lugares más peligrosos y casi imposibles como para que cualquiera pudiera siquiera habitar en ellos más de una hora de forma normal. Hasta había quienes decían que el toro había hecho un pacto con el mismísimo diablo. Pero el punto, es que su secreto, se lo llevo a la tumba.
Miguel: Si, claro ¿Cómo no? Mas te vale que no me estés mintiendo -dijo en lo que ella solo sonrió con complicidad.
Rosa: Claro que no. Resulta que al tío y a mi nos gusta la colección de artículos antiguos, y el toro escondió cierta artefacto de incalculable valor en este escondite. Si me ayudas a recuperarlo, con gusto convenzo al tío para que de el brazo a torcer con esa idea tuya de hacer una banda ¿tenemos un trato? -pregunto a la vez que el moreno parecía pensarlo.
Y de paso, también comenzar a dudar. Una cosa era aceptar hacer todo ese numerito de los demos y tratar de volverse estrella pop. Pero otra diferente era ya profanar casi que un patrimonio nacional como lo era el escondite del toro.
Rosa: Veo que estas dudando... Por cierto, aunque el futbol sea un deporte jugado por diestros, lo cierto es que solo es entendido por los super diestros -dijo acomodándose las gafas.
Miguel: ¿Insinúas que sabes más de futbol que yo?
Rosa: Solo digo que la clave para entender ese juego, así como una gran mayoría de deportes, es con la sabermetría -explico- desarrollada por el experto en estadísticas, Bill James.
Miguel: Si, y yo hare como que se de quien hablas -dijo haciendo resoplar a la chica.
Rosa: En resumen, fue alguien que hizo los deportes tan divertidos como calcular impuestos.
Miguel: ¡Herejía! ¡Ni Leo se atrevió a tanto! -dijo logrando que la chica rodara los ojos.
Eso era algo que a la propia Rosa no le gustaba del genero masculino aparte de que tan estúpidos podían llegar a hacer cuando la testosterona llegaba a ser la que mandaba. El solo hecho de que a veces podían llegar a ser bastante inmaduros. Era por cosas así que a veces consideraba un hecho común que las mujeres maduraban más rápido que los hombres... al menos en la mayoría de los casos.
Rosa: Solo te diré que usando la sabermetría, hasta el matemático promedio puede volver a cualquiera de un don nadie a un Messie o Cristiano Ronaldo -exclamo mientras ajustaba sus gafas- dicho de otro modo, te estoy ofreciendo una propuesta. Independientemente de si aceptas irte a San Fransokyo con nosotros o no, te puedo ayudar a volverte una estrella de este ¨futbol callejero¨ -dijo llamando la atención del chico- si tenemos éxito hoy, claro.
Miguel: Te noto muy confiada al respecto... pero no creas que no comprendo lo que dices. ¿Qué pasara con lo que hace al juego emocionante? ¿Las jugadas suicidas, tiros erróneos del balón o las riñas en los juegos?
Rosa: Hombre tenías que ser -declaro con un suspiro- ya veo por donde vas. Y está bien, igual seguirás jugando el juego que tanto te gusta a tu modo y como tu quieras. ¿Pero las practicas? Eso ya será punto y aparte ¿te parece bien? -pregunto extendiendo su mano, la cual fue estrechada a los pocos segundos.
Miguel: No pierdo nada -exclamo encogido de hombros- y honestamente me estás dando más opciones que los de la escuela u otros equipos. O no me aceptan porque no me conocen, o acabo peleándome con ellos por tomarme por menos, de allí la broma al equipo femenino hace un par de días.
Rosa: Y ahora seré yo la que hará como que sabe de qué hablas -dijo antes de pulsar un interruptor- muy bien, tenemos luz.
Siendo lo que vio Miguel una vez se prendió la iluminación, nada más que una puerta que parecía ser de un bunker secreto o algo así, a la vez que noto que donde estaban parecía ser una especie de bodega abandonada o algo así.
Rosa: Nos encontramos debajo de un edificio que ahora esta abandonado. Esta es la única entrada que no activara las alarmas o llamara la atención de las autoridades -explico en lo que sacaba un papel y comenzaba a teclear lo que parecía ser la contraseña de la puerta, antes de que la misma hiciera el típico sonido de denegado- ¿Qué?... ¡No puede ser! ¡No! ¡Rayos! ¡Demonios! -dijo intentando la clave una y otra vez solo para que la puerta siguiera negando el acceso- se suponía que esta era la clave... ¿ahora como vamos a entrar?
Miguel: ... Bueno. Si pudiéramos volar o algo así, yo diría que por allá arriba -dijo señalando un agujero en el techo a una distancia de al menos 2 metros- pero claro, eso es imposible.
Rosa: ¿Imposible, dices? -pregunto con una sonrisa burlona para extrañeza del moreno- te diré algo, cuanto más tiempo pases con mi tío y conmigo, entenderás que para nosotros esa palabra tiene poco o nulo significado... Dime ¿alguna vez has ido a Bavaria? -pregunto confundiendo al contrario.
Que decir que sintió que se estaban burlando de él, era quedarse corto.
Miguel: Pues no todos nos bañamos en dinero, con costo he salido a la vuelta de la esquina y hasta en esos casos me regreso por ser muy caro -dijo logrando sacarle una risa a la chica.
Rosa: Hace unos años, él tío formo parte de una expedición, en la cual se gasto buena parte de su fortuna, con el fin de investigar el castillo del loco rey Ludvick, que era conocido en su época por llevar invitados a su hogar para convertirlos en victimas de sus muchas trampas mortales -dijo para sorpresa del otro joven- con decirte que el tío fue el único que volvió con vida de esa expedición.
Miguel: ¿Qué?
Rosa: Si, resulto que algunas de las trampas aún servían. Por razones así no le decían el adorable Ludvick o el buen vecino rey de Bavaria -dijo con tono humorístico- de cualquier modo, siguiendo con la historia, el tío y el grupo lograron llegar a la cámara del tesoro perdido de Ludvick, pero... allí fue donde todo se fue al carajo ¿quieres saber como mi tío fue el único que salió con vida de ese infernal castillo?
Miguel: Aún cuando no se que tiene esa historia que ver con esto y que me estas matando de la intriga. Por favor, dime -dijo con interés genuino.
Siendo la respuesta de la chica sacar lo que parecía ser una piedra de su bolsillo para mostrársela con orgullo a Miguel. Esta era una roca con forma octagonal que en realidad parecía muy bien trabajada para ser solo una cosa cualquiera, pero lo que más llamaba la atención, era el dibujo de lo que parecía ser un gallo en la parte de en frente.
Rosa: Esto estaba en el escudo de armas de Ludvick. Aunque en si el escudo no importaba tanto más allá del valor monetario. Lo que importaba era esto, que estaba en el centro del escudo, un talismán con las marcas del gallo del zodiaco chino.
Miguel: ¿Un talismán? ¿Y qué haremos con eso? -pregunto en lo que ella solo le dio una sonrisa maliciosa.
Y antes de que se diera cuenta de que estaba pasando, el propio Miguel se encontraba flotando para su consternación, no siendo capaz de procesar lo que estaba sucediendo hasta que ya se encontraba cruzando el agujero en el techo y dejado en el suelo del siguiente piso.
Miguel: ¿Qué?... ¡¿Qué rayos fue eso?! -pregunto mientras miraba a Rosa que aún estaba en el piso de abajo sin borrar la sonrisa en ningún momento.
Rosa: Eso, fue el poder del talismán del gallo que tiene el enorme poder de la levitación -explico para sorpresa del contrario- según una antigua leyenda, además de este, hay otros 11 talismanes repartidos entre los cuatro puntos cardinales en todo el globo, uno para cada animal del zodiaco chino. Y cada uno tiene un poder diferente -explico mientras el chico procesaba todo.
Miguel: Diría que te volviste loca de remate... de no ser por lo que acaba de pasar, y el hecho de que la magia es en realidad una de las teorías de porque el Toro fuerte era invencible... adiós a la teoría del pacto con el diablo o los rituales de sangre -exclamo con cierta renuencia- en cualquier caso ¿es super fuerza, no?
Rosa: Me sorprende lo rápido que vas captando. Te seguiría el paso, pero aun no me domino muy bien a mi misma en el aire.
Miguel: Esta bien, solo... ¿Por qué me estas contando todo esto? ¿Y porque tu y tu tío buscan estos dichosos talismanes? -pregunto ya más interesado en saber más de ese par que cada vez se estaba volviendo más y más interesante.
Rosa: Las respuestas son solo para aquellos que se atreven a buscarlas, luego de que encuentres el talismán, con gusto te revelare más de una cosa -dijo antes de arrojarle un audífono al chico- con eso estaremos en contacto, buena suerte -dijo dando punto y final a la conversación.
Cosa que aunque molestaba a Miguel, tuvo que aceptarlo de momento de mala gana.
Miguel: Esta bien. Pero quiero una explicación completa de todo a la vuelta... cuidado con los murciélagos.
Rosa: ¡¿Murciélagos?! ¡¿Dónde?!
Miguel: Bueno, puede que aparezca alguno -dijo con una sonrisa burlona en lo que ella solo le dedico una mirada molesta.
Rosa: Claro, y no podías avisarme de otra forma -exclamo con los brazos en jarra- mejor vete ya.
Siendo así que el chico se puso en marcha, desde ya encontrando más de un problema. Como el hecho de que el edificio se notaba que estaba abandonado, demostrado por lo demacrado que se veía todo, así como el hecho de que al parecer habían pasado años desde la ultima vez que alguien le había dado mantenimiento a ese piso o a los demás.
Y aun con todo, le parecía casi ridículo que las cámaras de seguridad siguieran en pleno funcionamiento. ¿Cómo era que lo sabía? Era por medio de ellas que Rosa lo observaba ya que al parecer hackeo el sistema desde el subsuelo.
Miguel: Se nota que todo esto es muy viejo ¿de verdad el Toro tenía todo un edificio como su escondite secreto? O no era muy sutil, o intentaba compensar algo -dijo mientras saltaba entre los pedazos de piso que aún no se habían caído por el pasar del tiempo.
Rosa: De hace 20 o hasta 30 años tal vez. Pero tal parece que la infraestructura aún es capaz de aguantar tu peso -la escucho hablar en su oreja a través del audífono en lo que él solo asintió.
Miguel: Ha pasado tiempo desde la ultima vez que hice algo así, debo retomar mis practicas de parkour.
Rosa: Justo iba a preguntar eso. Note que te mueves muy bien ¿Dónde lo aprendiste? -pregunto en lo que el moreno solo sonrió con diversión.
Miguel: La escuela callejera, o dicho de otro modo, la calle -declaro como si nada- ya sea para escapar de uno que otro perro mañoso, alguna paria con navaja o solo para llegar a tiempo al colegio o para hacer una entrega antes de que se acabe el tiempo. Lo cierto es que el moverte bien por los lugares de difícil acceso de la ciudad te viene ayudando muy bien.
Rosa: Es así... ¿Cuántos trabajos tienes? -pregunto en lo que el chico solo se encogió de hombros.
Miguel: Los que hagan falta y con los que pueda comprarme mis cosas a la vez que ayudo a mamá con los gastos, soy el hombre de la casa, es mi trabajo -aclaro a la vez que ella solo suspiro.
Rosa: Veo que la has pasado mal... te prometo que te diré todo lo que se una vez recuperes el talismán. Solo... no debiste pasar por eso, no está bien -dijo solo para que Miguel se encogiera de hombros.
Miguel: No es como que se pueda hacer algo ahora, ya lo que paso, paso -exclamo calmado- y bromas aparte. Si es por lo de ahora, en realidad hasta me estoy divirtiendo, me siento como un Indiana Jones o algo así.
Rosa: Ya, bueno. Por ahora solo céntrate en lo que estás haciendo aquí y ahora.
Miguel: Lo que digas, jefa -dije mientras trepaba un muro que llevaba al piso siguiente luego de ver que la escalera estaba bloqueada por escombros.
Para de ese modo, luego de un buen rato de estar trepando, saltando, esquivando obstáculos, que el menor finalmente había llegado a su destino, el ultimo piso del edificio, la suite del toro fuerte. Donde, tras escarbar entre los escombros y la basura un buen rato, termino encontrando lo que había ido a buscar.
Nada más que el símbolo y el orgullo para cualquier luchador mexicano, que incluso el solo hecho de dejar que te lo quiten era razón de estar condenado a una vida de deshonra y de vergüenza, la mascara del toro fuerte. O mejor dicho, lo que estaba pegado a la máscara, un talismán igual al que Rosa le había mostrado hacia un rato, con la diferencia de que el dibujo no era el de un gallo, sino lo que parecía ser un buey.
Miguel: Y pensar que tantos problemas solo por esta pequeña cosita -dije arrancando el talismán de la máscara- que vergüenza. Todos creían que era el mejor, y solo ganaba usando trucos -exclamo antes de guardar el talismán en su bolsillo.
Para luego emprender el camino de regreso al primer piso de la torre y así volver con Rosa y ya ponerle fina esa historia. O ese hubiera sido el plan, de no ser porque la ley de Murphy, esa famosa ley, ataco con todo lo que tenia cuando en el momento que Miguel pateo una roca.
Esta misma piedra hizo caer un jarrón, que hizo que otro escombro cayera, el cual giro hasta derrumbar una parte del suelo, y de ese modo siguió la cadena de sucesos hasta que. Lo que hace un momento parecía tarea fácil, se volvió un escape digno de cualquier película de acción cuando todo el complejo se comenzó a derrumbar.
Siendo lo último que Miguel vio cuando estaba a medio camino de escapar el como parte del techo le caía encima para luego perder el conocimiento.
_________________________________________________________
(Más horas después)
(Hospital General Xoco)
(Miguel Pov)
Mi cabeza, me duele todo, se siente como si me hubiera caído toda una casa encima... ¿Dónde estoy?
Miguel: ¿Cómo... como llegué aquí? -dije al notar que me encontraba en lo que parecía ser una cama de hospital y que al parecer tenia la cabeza y algunas otras partes del cuerpo vendadas.
A la vez que justo en ese momento recordé lo que había pasado... para luego hacerme la pregunta del millón ¿Cómo rayos era que estaba vivo? Debí caer de una gran altura al mismo tiempo que me caían quien sabe cuantos kilogramos de concreto, solo no era posible que estuviera aquí con apenas algunos moretones y raspones.
Solo ¿Cómo es que...? Claro, el talismán. De algún modo eso tuvo que ver. Aunque si era honesto, lo que me llamaba más la atención, era el hombre en frente de mí que estaba sentado en una silla sin despegar la vista de mi en ningún momento con una mirada difícil de descifrar. Héctor Rivera estaba aquí.
Héctor: Al fin despiertas, admito que me estaba empezando a preocupar. Pero no sabes cuanto me alivia verte despierto -dijo con una amabilidad que difería bastante de su actitud de las otras veces que nos vimos- por cierto, Rosa me hablo de tu idea de una banda... y lo cierto es que aunque me negara, la verdad es que te ganaste el derecho a que acceda a tu demanda.
Miguel: Vaya, gracias. Y solo me tuvo que caer un edificio encima -dije con sarcasmo en lo que el solo me dio una sonrisa que de algún modo me hizo sentir extraño.
Héctor: Y sin embargo, estas aquí de una pieza, y que pieza -dijo con burla en lo que yo solo lo tome como una ofensa. A lo cual el solo resoplo antes de sostener un espejo.
Siendo entonces que me quede boquiabierto ante lo que estaba viendo. Ese...ese no podía ser yo. Si era mi cara, pero... este cuerpo, era el de un físico culturista, un hombre musculoso que parecía sacado del comercial de un perfume o de una revista Playboy... ¿Cómo es esto posible? ¿Acaso es...?
(para que se hagan una idea)
Héctor: ¿El talismán? Así es. Por si no te has dado cuenta, lo sigues sosteniendo -dijo a la vez que note que era verdad. Para luego ver como en el momento en que solté la piedra octagonal, rápidamente comencé a desinflarme para así tener mi cuerpo de siempre.
Miguel: Es... es increíble.
Héctor: La magia siempre lo es -dijo con una sonrisa de nostalgia- créeme, lo se. He dedicado buena parte de mi vida a buscarla -declaro en lo que me daba la espalda- además de la música, probar que la magia es real, ,siempre fue mi mas grande anhelo... una ambición que me ha hecho perder muchas cosas a lo largo de mi vida.
Miguel: ... ¿Cosas como qué? -pregunte con cierta intriga por como el ambiente se estaba volviendo tan inexplicablemente cálido entre ellos por alguna razón.
Héctor: Solo te diré, que a veces tienes que dejar muchas cosas atrás, para cumplir un sueño... una de ellas, mi matrimonio.
Miguel: ¿Era casado? ¿Quién fue la pobre? -pregunte con diversión... solo para que el me viese con una seriedad que me incomodo.
Héctor: ¿La pobre?... Fue tu madre, Imelda.
... ¿Eh?
Héctor: Tenemos mucho de que hablar... hijo mío.
... Solo no podía creerlo ¿esto de verdad estaba pasando? Había imaginado este momento por tanto tiempo. Yo nunca creí que llegaría este día siquiera, nunca pensé que llegaría a ser algo más que un sueño imposible... pero era verdad, de algún modo, solo lo sabía, este hombre... decía la verdad, él era mi padre.
Tenía tantas cosas que quería preguntarle, tanto que deseaba decirle. Era tanto que... lo cierto es que acabe por solo reaccionar por instinto.
Miguel: ¡¿Y cuanto más, desgraciado infeliz?! -dije para luego levantarme de la cama y sin cuidado alguno darles una patada a las joyas de la corona de cualquier hombre, en este caso, las de mi padre.
Se que no fue la mejor primer reacción. Pero ya teníamos toda la noche para hablar, por ahora ¡el me debía al menos eso!
Notes:
Y así acaba esta segunda parte del prólogo. Como siempre pueden votar, comentar, lo que gusten.
¿Y que les pareció?
Ya para el próximo capitulo estaríamos comenzando la historia como tal. Con decir que apenas empezando ya sería en San Fransokyo. Y descuiden, cualquier duda que crean tener, desde ya aseguro que se ira desvelando con el pasar de los capítulos.
Por el momento solo me despido y les digo, hasta otra.
Chapter Text
(Estados Unidos, San Fransokyo)
(Krei Tech)
(Miguel Pov)
Bueno, luego del tiempo que tomo llenar todo el papeleo para salir del hospital, el tiempo de soborno para que el personal se quedara callado, la paliza que le metió mamá a mi padre cuando supo lo que paso, una serie de discusiones que terminaran con mamá llenándome la cara de besos por al menos dos horas y al menos 5 horas de viaje, estábamos aquí.
Finalmente, San Fransokyo, en la sede del que parecía ser el mayor responsable financiero de que mi papá Héctor, Krei Tech, una compañía tecnológica.
Miguel: Como sea... ya estamos aquí, empecemos con esto -mencione en lo que me abría paso junto a los demás en la empresa.
Pero a todo esto. Seguro se estarán pensando ¿Qué mosco me pico para aceptar ir con Héctor luego de saber que él es el dichoso padre que tanto quería encontrar? Pues, es algo complicado.
Por un lado, todo lo que quería era molerlo a golpes, pero... una vez me conto su historia, así como el hecho de que si nos dejó a mamá y a mi junto a Coco, fue porque no quería que saliéramos lastimados con su estilo de vida y aparecer propósito de existir. De paso explicando como fueron las cosas el día que se fue, que en pocas palabras... fue que él accidente de auto fue causado tanto por mí como por papá Héctor.
Tal parece que el hombre estaba tan obsesionado con probar que la ¨magia¨ existe, que dedico gran parte de su vida a eso, al punto de casi volverse una obsesión. Fue tan así que según me contaron, yo me la pase todo el día tratando de llamar su atención luego de no haberlo visto en semanas. Siendo el resultado de ser ignorado el salir corriendo a la calle sin fijarme si algo estaba cruzando o no... para luego no ver el auto, y... solo paso.
Fue entonces que tras el accidente, papá lo hablo con mamá, y mamá Imelda más clara no pudo ser: ¨Elije, tu familia o tus sueños¨... y papá eligió sus sueños. Bajo el contexto de que era mejor seguir por su cuenta que quedarse con su familia y poner en peligro innecesario a otros solo con sus fantasías. Llevándose con él a Rosa... quien resulto ser mi prima. Y cada uno con su vida.
Si... que mierda. Decir que tenia sentimientos encontrados de todo esto. Era solo quedarme en la primera pagina del libro. No, ni eso, apenas la portada.
Aunque en defensa de papá, el de hecho nunca nos desatendió financieramente, y si la vimos mal más de una vez, en realidad se debió a que mamá es lo bastante orgullosa como para preferir que todos pasemos hambre antes que pedirle ayuda a su ¨estúpido marido¨.
Si, se supone que técnicamente están divorciados, pero aun se quieren... o eso dan a entender. De hecho es complicado y difícil de entender... adultos ¿Quién los entiende?
De todos modos, para resumirlo, siempre quise un padre desde que perdí la memoria y solo desperté sin él. Y ahora que lo tengo... no lo pienso dejar ir. Aun cuando en realidad no haya cambiado nada y sigue con su obsesión tal cual el día que se fue según mamá. Aunque... podía entender el porque de su terquedad, estos talismanes... son la prueba de que sus ambiciones no solo fueron años perdidos. Y si eso lo hará feliz... yo quiero ayudarlo a ser feliz. Es lo menos que merece luego de lo que vivió.
¿Y que vivió? Bueno, eso es cosa para meditar... otro día.
Miguel: Escuchen, revisión de realidad -dije llamando la atención tanto de Leo como de Marco mientras que papá Héctor y Rosa estaban delante de nosotros unos metros- tenemos que prometernos ahora que no dejaremos que esto del canto ni nada de esta ciudad o la farándula nos cambie ¿estamos de acuerdo?
Leo: Por mi está bien ¿Qué hay de ti, Marco?... ¿Marco? -pregunto en lo que ambos vimos a nuestro amigo con espejo en mano.
Marco: Yo solo les diré, que una vez viajas en primera clase. No hay vuelta atrás -dijo mientras buscaba alguna imperfección en su rostro. Cosa que nos hizo a ambos suspirar.
Era oficial, ya lo habíamos perdido.
Rosa: Muy bien, repasemos la agenda -la escuchamos llamando nuestra atención- ya la casa donde se quedarán esta lista, sus cosas ya fueron instaladas, según me aseguro el personal de Krei Tech las habitaciones son limpias, están cerca de aquí y lo mejor de todo es la piscina.
Los 3: Dijiste... ¿Piscina? -preguntamos ya queriendo mandar todo al diablo y ver donde nos quedaríamos antes de que ella nos devolviera a la realidad.
Rosa: No tan rápido, primero trabajo, luego placer. Una vez conozcan a quien nos financia, comenzaremos a trabajar en el entrenamiento del tío para bandas de chicos.
Héctor: Ni yo lo pude decir mejor -dijo antes de suspirar- y hablando del rey de Roma, miren quien está por allá -dijo señalando a tres personas que parecían estar esperándonos frente al ascensor que llevaba al resto de pisos del edificio. Aparte de lo que parecía ser la mascota de la marca Michelín versión gordis.
Dos de ellos eran adultos, un hombre de mediana edad en traje de negocios que solo con verlo ya me parecía el típico hombre de negocios que pensaba con el bolsillo antes que la cabeza. Y la que estaba junto a él parecía ser su asistente.
Pero quien más me parecía como salido de la ecuación era el chico o ¿chica? Que estaba junto al michelín versión sumo. Era un chico algo bajito que asumo era como de nuestra edad. Vestido con un intento de formalidad (digo intento porque pantalones cortos y encima ni se mete las faldas) y el peinado más desordenado que había visto. La verdad, me recordaba al de la Chimultrufia de Chespirito.
Aunque... por alguna razón, me parece... tierno, a su modo, claro. No sé porque, pero así es. Se ve lindo y tierno. Con todo y el hecho de que el no parecía tener la menor idea de que hacia allí.
???: ¿Cómo dijiste que se llamaban? -escuche al hombre de negocios preguntar a la que parecía su asistente que procedió a revisar su tableta electrónica.
???: Miguel Rivera, Marco de la Cruz y Leo San Juan. Son 3 estudiantes de secundaria que según Don Héctor, serán la próxima bomba. Sus palabras, no mías. Señor Krei -dijo en lo que el hombre de negocios, que ahora sé que era el dichoso Alistair Krei. El dueño de todo esto, se quedó pensativo.
Siendo entonces que ambos grupos ya estábamos frente a frente.
Héctor: Hola Alistair, te juro que estaba por avisarte que íbamos a verte. Solo pensaba que sería mejor caerte de sorpresa. Pero la sorpresa me la lleve yo, no te sorprendimos -dijo tratando de forma amena la situación. Haciendo que el tipo pusiera una típica sonrisa de comercia.
Alistair: Si. Y yo estaba por enseñarle a mi tigre mascota, el lenguaje de señas. Pero tampoco lo hice, y ni siquiera tengo un tigre -dijo con sarcasmo- tu sobrina le aviso a Judy de tu visita... pues no me parecen la gran cosa la verdad -menciono mientras observaba a los 3 fijamente- ni modo. Ni se molesten en desempacar.
... ¿Cómo dijo?
Héctor: ¿Disculpe? -pregunto igual de consternado que nosotros- no sé si se te olvido, amigo. Pero teníamos un trato, por contrato. Estaba claro que el trato seguía en pie si encontraba una estrella.
Alistair: Así es, pero no encontraste una estrella, encontraste a 3 adolescentes justamente en la última ciudad de tu gira, eso no habla muy bien de ti -dijo con un evidente falso tono de empatía- yo seré el que decida si son estrellas. O lo haría si hubiese aprobado un millón de dólares para una banda de chicos cuando la idea era solo uno. No sé en que siglo vives Héctor, pero las bandas están acabadas, muéstrale -dijo a la vez que la mujer de lentes le arrojo un enorme libro que parecía ser de cuentas y estadísticas a mi papá.
Que apenas lo atrapo casi se va de bruces de lo pesado que estaba. Eso o mi viejo necesitaba hacer ejercicio con urgencia.
Héctor: Si, no voy a ver esto -menciono en lo que le daba el libro a Rosa que apenas lo tuvo en sus manos se cayó al suelo casi que de inmediato- escucha, tengo un plan. Un excelente plan de 3 meses, te prometo que te dejara impactado.
Alistair: Que bueno... solo cambia tu plan -exclamo como si nada- la reunión del consejo de directores y asociados es en 4 días. Y necesito lanzarles carne fresca, si sabes a lo que me refiero -dijo con simpleza- lo que significa que tienes solo 3 días para darme un... plato apetitoso, por así decirlo.
Pero a diferencia del tipo, tanto los chicos como yo, y hasta Rosa y papá, estábamos igual de incrédulos por lo que estábamos oyendo ¿el trato no era 3 meses? ¡¿Quién se creía este tipo para cambiar todo solo así como así?!
Héctor: ¿3 días? ¿Nos estas dando 3 días nada más?
Alistair: ¿Qué comes que adivinas? -menciono mientras se limpiaba algo de lechuga de los dientes a la vez que se veía con un espejo que sostenía su asistente- y quiero una apariencia, un nombre para el grupo y una canción. Quiero que los adolescentes tomen las tarjetas de crédito de sus padres para comprar las cosas que lancemos de estos chicos ¿lo entiendes? Esta banda debe tenerlo todo, Héctor. Porque, como sabes, lo quiero todo.
Vaya, que simpático sujeto... nótese el sarcasmo.
Alistair: Ahora, si me disculpas, tengo una junta a la que asistir, y antes de eso deseo ponerme unos pantalones tibios. Nada como eso para relajarte antes de algo importante. Oye, pasante -dijo en lo que el chico que hasta ahora no había dicho o echo nada se voltio para ver al sujeto- tráele unos pantalones tibios a Héctor de la tintorería, parece que los necesita. Y de paso, trae los míos también -ordeno en lo que el chico solo frunció el ceño antes de irse, siendo seguido por la copia con sobrepeso del michelín.
¿Entonces el chico era un pasante? Pobre, algo me dice que ni todos los créditos extra de que podían dar en una escuela valían tener que aguantar a este tipo.
Alistair: Así que sin más. El viernes, a las 10 A.M. y más vale que sean buenos. O estás acabado, Héctor -dijo para luego retirarse junto a la mujer de lentes.
Siendo en ese momento que juro que mi padre estaba usando todo de sí mismo para solo no soltar un grito de la cólera que se traía y que se escuchara hasta Guanajuato.
Leo: ... ¿En serio puede hacer eso?
Rosa: Como pueden ver, sí. Quien tiene el dinero manda, y ahora mismo, ese tipo tiene el dinero -declaro luego de darle el libro de cuentas a Marco que la estaba viendo medio complicada para cargarlo- esto solo significa que tenemos mucho que hacer. Ahora sí que van a trabajar duro chicos, cantaran y bailaran como nunca. Sudaran como cerdos si queremos cumplir con el plazo.
Marco: Que cosas. Ni hemos empezado y ya nos explotan laboralmente -menciono sacándole de milagro una risa cansada a mi padre.
Héctor: Bienvenidos al mundo real -exclamo tras encogerse de hombros- muy bien. ¿Listos para ser estrellas?
Los 3: ¡Claro! -dijimos al unisonó en lo que el hombre mayor frente a nosotros solo nos sonrió con cierto aire de suficiencia.
Héctor: Entonces pruébenme que pueden serlo. Porque como oyeron, solo tenemos 3 días para probarle a los de arriba que hay algo, lo que sea, aquí. Esas son las palabras de Alistair, mejor conocido como el presidente de todos nuestros traseros actualmente -dejo en claro en lo que yo solo solté un suspiro.
Miguel: Pasar de ser una banda en 3 meses a solo 3 días... aun me cuesta procesarlo -dije en lo que sentí el brazo de mi padre rodear mis hombros.
Héctor: Para empezar, esto en parte es culpa tuya, así que no te quejes -dijo haciéndome rodar los ojos, al parecer me lo va a reprochar mucho tiempo- pero, ya no hay vuelta atrás. Ustedes, no pueden ser una banda, tienen que ser LA banda en 3 días... a menos que crean que no puedan lograrlo, señorito conviértenos en una banda.
Si, al parecer a papá no le gusta que le lleven la contraria de ningún modo.
Miguel: Tu tranquilo, yo nervioso, viejo -dije determinado- podemos hacerlo. No hay problema, arrójanos todo lo que tengas -declare para que luego ambos nos retáramos con la mirada.
Héctor: Eso no lo dudes, los atacare con todo lo que tengo -dijo en lo que los minutos pasaron sin que ninguno de los dos nos moviéramos un solo milímetro.
Miguel: ... Muy bien. Esto ya es demasiado cerca para mí.
Héctor: Para mí también, además, le voy a varias cosas, pero ni el incesto ni la pedofilia son de esas -dijo divertido mientras me revolvía el cabello- ¡al set! -dijo en lo que lo pasamos a seguir.
Aunque por andar distraído fue que no me fije y termine chocando con cierto pasante que hacia un momento se acababa de ir ¿no lo habían mandado a por ropa o algo así? Quizás olvido algo o de una aprovecha para hacer dos mandados en uno, eso es dedicación.
Miguel: Oye, se cuidadoso -dije de forma amena en lo que el parecía querer decir algo, pero un grito de mi viejo me devolvió rápidamente los sentidos- perdón por chocar contigo así, prometo fijarme, adiós -dije para luego ir con los demás.
Pero... por alguna razón que no entiendo... no puedo sacarme de la cabeza a ese chico.
------
(30 minutos después) (Set de entrenamiento musical)
Muy bien, de lo que estaba entendiendo, parece ser que de lograr impresionar a la dichosa junta en la reunión que abra el viernes, nuestra vida los próximos meses estará muy metida en esta empresa de Krei Tech.
Bastaba con ver que la casa donde nos estaríamos quedando estaba cerca de aquí, y que, tanto el estudio como el lugar para los ensayos estaban dentro el edificio principal de la empresa en el tercer piso que al parecer tenía bastante espacio desocupado por alguna razón.
Y ya sé que se pregunta ¿si mi papá tiene una mansión aquí, porque no solo vivimos con él y ya? Pues pasa y resulta que eso lo prohíbe el contrato, Tal parece, que aun con lo desechables que parecemos ser para el señor Alistair Krei. Igual por el momento éramos activos de su empresa, activos a los que no quería quitarles el ojo de encima ni un segundo.
Menudo lugar al que fuimos a parar, pero ni modo, ya no hay nada que hacer, solo seguir adelante... con suerte.
Héctor: Ahora, chicos -dijo llamando nuestra atención- Por el momento, esto es todo lo que necesitan saber de San Fransokyo -comenzó a hablar mientras que Rosa solo pasaba carteles con imágenes- yo Héctor, Rosa, Judy la asistente de Alistair, Hiro el pasante casi esclavo de Alistair, Baymax, grandes héroes, Krei Tech, villanos de turno, Estados Unidos, Sushi, Lenore Shimamoto, mi mansión, ustedes. ¿Alguna duda? -pregunto en lo que los 3 levantamos la mano- ¿ninguna? Muy bien.
... No sé si nos ignoró a propósito o solo es que tenemos prisa, pero me siento ofendido... aunque, ya veo... el chico greñudo se llama Hiro, interesante. Pero ¿Cómo esta eso de ser casi esclavo de Krei?
Héctor: Entonces, pasando a lo importante -explico mientras comenzaba a caminar de un lado a otro frente a nosotros- para ser un grupo pop se necesitan 4 cosas. Un gran baile, gran apariencia, una gran canción, y un gran canto. Rosa, llama a las tropas -dijo en lo que ella hizo sonar una bocina que nos dejó sordos un momento.
Aunque eso se nos pasó rápido cuando las puertas del set se abrieron a la vez que se adentraban al interior del lugar las personas más llamativas que había visto en mi vida. Dos era mujeres que parecían ser madre e hija, pero aparte de eso, parecía que estaban listas para que los 70 o los 80 las llamaran para que les devolviera la ropa.
Otro era un tipo de baja estatura con un traje que, lo diré ahora, era demasiado brillante, en el sentido literal. Lo que seguro era para que la gente no notara su sonrisa, que ciertamente, era algo inquietante.
Y la última era la misma chica de antes, la que estaba con Alistair. Judy, creo que dijo papá que se llamaba.
Héctor: Es cierto que solo tenemos 3 días, pero les aseguro que solo para el final del día de hoy, mi equipo y yo convertiremos a los 3 chamaquitos de ciudad de México ¡En una explosión pop de Héctor Rivera! -dijo a la vez que tanto las dos mujeres retro como el hombre brillante hicieron poses.
Excepto Judy que parecía ya no entender nada de lo que estaba pasando.
Judy: Yo, bueno... soy de contabilidad y marketing, no tengo ningún movimiento o pose especial. Aunque podría improvisar algo -dijo ya dispuesta a hacer como un baile del robot antes de que papá la detuviera.
Héctor: Ni te molestes, déjame ahorrarte la vergüenza -declaro condescendiente antes de volver a vernos a los 3 con seriedad- ahora, lo primero en el entrenamiento ¡un gran baile!
Y como si fuera esa la señal, ambas mujeres desconocidas dieron un paso al frente.
Héctor: Permítanme presentarles a un grupo de madre e hija muy reconocido en la ciudad, bastante popular aun con su pasado delictivo ¡Barb y Juniper, Alto Voltaje! -las presento a la vez que ambas mujeres solo chasquearon sus dedos para que luego el título ¨Alto Voltaje¨ apareciera sobre sus cabezas escrito con electricidad.
... ¿Cómo rayos hicieron eso?
Héctor: Antes de su vida criminal y de su actual reivindicación, Barb fue famosa por coreografiar bandas como Hammerfall, terremoto de chicos, Madonna, Beyoncé, y hasta los teletubbies... antes de que fueran eliminados de la programación por acusaciones de satanismo y homosexualidad.
Okey, eso ultimo era demás... ¿pero de que se habían fumado los de esas acusaciones a un programa para niños?
Héctor: Y Juniper es muy popular en la ciudad, actualmente ella es la maneja tanto su programa de baile de caridad como el de baile de madres e hijos que hacen como servicio comunitario. Basta con decir que aun cuando cometían crímenes la gente iba y le aplaudían.
Barb: Corrección, nos aplaudían -dijo haciendo a mi padre reír algo nervioso.
Héctor: Correcto. El punto es que ambas están más que capacitadas para entrenarlos en su baile, muchachos.
Leo: Señor Héctor... ¿seguro que es buena idea tener a, aparentemente, dos criminales aquí? Digo, no dudo que estén rehabilitadas, pero... -dijo en lo que mi viejo hablo antes de que alguna de las dos mujeres que fruncieron el ceño ante ese comentario.
Héctor: Oigan, trabajar con Bad Bunny o Justin Bieber vuelve villano a cualquiera, se los aseguro -exclamo antes de solo hacerse a un lado para dar rienda suelta a ambas mujeres.
Quienes en menos de un segundo ya estaban frente a nosotros.
Barb: Y ahora, nosotras los haremos explotar con el baile -dijo de una forma que nos tenso a los 3- comenzaremos con una examinación. Cruce de pierna, giro y pose. Muestrales como se hace, cariño -dijo a su hija Juniper.
La cual siguió las instrucciones de su madre al pie de la letra. Para que luego siguiera nuestro turno, y seré honesto... fue terrible. Bastaba con ver la cara de Barb para saber que pensaba igual.
Barb: Muy bien... él es grandioso, pero no serio -dijo señalándome- él es serio, pero no grandioso -hablo refiriéndose a Marco- y él perdió una mascota cuando era más pequeño, y aun esta triste -se refirió a Leo esta vez que rápidamente puso una expresión de tristeza.
Leo: Alebrije -dijo en lo que yo suspire porque al parecer Barb como de la nada adivino que Leo le afecta con facilidad recordar cuando perdió a su lagartija mascota, Alebrije, en el jardín de niños.
Pero eso era lo de menos, lo que importaba ahora era que ni habíamos empezado esto, y ya éramos un caso perdido.
Barb: ¿Quiere que sea franca con usted, jefe? -pregunto al viejo que solo asintió- son extremadamente malos, y no estarán listos para el viernes.
Héctor: Ya veo... mi contra oferta, les doblare el salario y ustedes procuran probar que los milagros existen -dijo como si nada en lo que madre e hija se vieron entre si antes de asentir.
Barb: Esta hecho.
Héctor: Así me gusta. En cuanto ustedes -dijo viéndonos a nosotros- volveré en una hora. Y para entonces me gustaría ver bailarines, no perros danzantes ¿lo captan? -pregunto antes de solo irse siendo seguido por Rosa y el resto de la bola a excepción de Barb y Juniper.
Solo para que una vez nos dejaran solos con el dueto de mujeres bailarinas, ambas sonrieran de un modo que nos hizo sentir escalofríos en toda la espalda.
Barb: ¡Posiciones de inicio! -dijo dispuesta a hacernos sudar. '
Pues bien... a ver qué pasa.
---
(1 hora después)
Héctor: Muy bien, ha pasado una hora y...-dijo apagando el equipo de sonido que seguía reproduciendo música de baile. Solo para notar que apenas nos encontrábamos nosotros y ni rastro de Alto Voltaje- ok...
Rosa: ... Chicos ¿Qué paso con Barb y Juniper? -pregunto en lo que los 3 decidimos hacer lo que habíamos acordado si nos preguntaban eso, ser honestos.
Leo: Bueno, al principio la cosa estuvo bien, pero conforme más fallábamos, más se enojaban las dos -comenzó a explicar- llegando al punto de que Juniper se puso a gritar en una bolsa para calmarse y Barb se puso a golpearse la cabeza contra la pared.
Marco: Luego nos mareamos después de dar varias vueltas -continuo en lo que mi papá parecía estar a nada de que se le formara y reventara una hernia al mismo tiempo- y después ambas comenzaron a decir varias malas palabras y maldiciones.
Miguel: Y luego solo se fueron.
Y ni termine de decir eso cuando Rosa ya se había puesto unas orejeras para que a los pocos segundos mi viejo soltara un grito que juro que perfectamente se escuchó hasta la michoacana. Vaya que papá tenía unos pulmones bastante fuertes, eso o en serio lo hicimos enojar.
Aunque rápidamente se calmó para luego llevarnos a rastras a la que parecía ser una sala de juntas, en la cual el hombre bajito de traje brillante ya nos estaba esperando junto a la mujer llamada Judy.
Héctor: Muy bien, empezamos con el pie izquierdo en el baile, pero podemos recuperarnos -dijo buscando calmarse a sí mismo- ¿Qué tal si pasamos al paso dos de mi entrenamiento especial para ser un grupo musical? La cual es una gran apariencia -dijo para que el hombrecito diera un paso al frente- para eso, los voy a dejar en manos de alguien que solía ser una de las más grandes estrellas del internet, con ustedes, el señor Chispas.
¿El señor Chispas? ¿Ese señor Chispas? Con razón el tipo se me hacía algo familiar pero no me acordaba, el hombre solía ser el boom en internet hasta hace un tiempo, todos los chicos del colegio no hacían otra cosa que hablar de sus videos... hasta que acabo siendo superado por un gato gordo que lo único que hacía era aplaudir... si, la fama en internet puede ser rara y muy injusta... aunque no negare que era un lindo gatito.
Marco: ¿Y cuándo cantamos? -pregunto, de paso interrumpiendo al señor Chispas cuando estaba por presentarse. A la vez que papá le dio una mala cara.
Héctor: ¡Cuando yo diga que canten! -dijo antes de respirar hondo- ahora sí, todos tuyos, Frank.
Todos: ¿Frank?
Sr. Chispas: Si, ese soy yo, Frank Chispas. Yo y mi animal de apoyo Hanzel nos ocuparemos de todo en cuanto su apariencia. Pelo y maquillaje, madi pedí, guardarropa ¡de todo! -explico mientras acariciaba un pollo de goma en sus manos- ¡estoy seguro de que seremos los mejores amiguis!
... ¿Tenia como mascota a un pollo de goma? Estoy empezando a preguntarme de donde es que mi viejo saca a esta gente.
Sr. Chispas: De todos modos, chicos. Déjenme decirles que tenemos unos estilos sencillamente emocionantes que literal, los van a transformar.
Miguel: Y... ¿no podemos ser nosotros mismos? -pregunte haciendo que todos los adultos presentes y Rosa me vieran.
Solo para que a los pocos segundos se pusieran a reír como si hubiese contado el mejor chiste del mundo... cosa que sentí insultante la verdad.
Sr. Chispas y Judy: No -respondieron al unisonó parando las risas.
Sr. Chispas: Primera regla del espectáculo: A veces tienes que cambiar para poder triunfar. Y quieren triunfar ¿no? -pregunto en lo que asentimos con algo de duda- solo confíen en nosotros, Judy -exclamo a la vez que la mujer mayor de gafas tomo la palabra.
Judy: Chicos, déjenme ser clara -dijo a la vez que pulso un botón y la pantalla en la oficina se encendió para mostrar unos gráficos- investigamos y electrocutamos a los grupos de encuesta para determinar el estilo exacto y el nombre que están destinados a vender millones de álbumes.
Sr. Chispas: Luego, procedemos a entregarlos a los estilistas -menciono chasqueando los dedos a la vez que varios de los mencionados aparecieron como por arte de magia detrás de nosotros- para cambiar sus atuendos... y posiblemente afeitarles la cabeza.
Je, sonare brusco, pero fue divertido ver la cara de Marco cuando dijo esa ultima parte. El cabello sencillamente era algo sagrado para mi amigo. Ya me gustaría ver a una de estas personas intentar siquiera acercar un par de tijeras a la cabeza de Marco... baño de sangre garantizado.
Judy: Pues bien. El señor Krei quiere un plato jugoso para el viernes. Y por eso le daremos unos platos deliciosos -menciono a la vez que ya los estilistas estaban encima de nosotros.
Solo para que conforme fueran pasando los atuendos me diera cuenta de algo. Esta gente no tenía la menor idea de lo que estaba haciendo.
Empezando con el estilo de los 70.
(Logo para hacer alusión al tipo de imagen, eso ya va a imaginación del lector)
Hector: Pues... Noooo está mal, pero necesito opciones -dijo con un tono que claramente significaba ¨es basura¨- ¿Qué mas tienen?
Sr. Chispas y Judy: ¡Cámbienlos! -ordenaron para que ya el montón de manos se pusieran sobre nosotros nuevamente.
Para luego pasar al estilo patriótico estadounidense.
(Logo para hacer alusión al tipo de imagen, eso ya va a imaginación del lector)
Sr. Chispas y Judy: ¡Rojo, blanco y chico con muchas estrellas! -dijeron haciendo el saludo militar.
Héctor: ... ¿En serio?
Judy: Este estilo fue bien recibido por los veteranos de guerra del norte.
Marco: Pues yo digo que nos vemos bien.
Miguel: Yo digo que parece que el tío Sam nos vomito encima -dije a la vez que mi padre asintió estando de acuerdo.
Héctor: Mijo tiene razón. Aun así, chicos, silencio. Ustedes dos, mas opciones -ordeno al par con algo de irritación.
Sr. Chispas y Judy: ¡Cámbienlos! -y ni terminaron de decir eso cuando ya nos estaban arrancando la ropa de nuevo ¿es raro que ya hasta me estoy acostumbrando?
Y así pasamos a la moda emo gótico, al menos Leo parecía contento con este estilo al ser parecido a su vestimenta negra habitual.
(Logo para hacer alusión al tipo de imagen, eso ya va a imaginación del lector)
Sr. Chispas y Judy: Les presentamos a chicos peligrosos.
Sr. Chispas: Chicos peligrosos es peligro, los padres les prohibirán a sus hijos comprar música peligrosa.
Judy: Y por eso la compraran -termino ella en lo que ambos chocaron puños.
Aunque por su parte, mi viejo parecía cada vez menos convencido con estos estilos, y no lo culpo para nada.
Leo: Me gusta... pero no siento las piernas -dijo incomodo.
Judy: Oh cierto, los pantalones son peligrosamente ajustados.
Héctor: ...Lo odio.
Sr. Chispas y Judy: ¡Nosotros también!
Vaya... la opinión sí que cambia rápido cuando tu jefe dice que la idea es basura, que curioso el mundo adulto.
Héctor: Quiero cinco estilos nuevos para mañana -dijo en lo que ambos asintieron antes de vernos- en cuanto a ustedes, ahora síganme para que le echen un vistazo a su primer sencillo que hará que el mundo sepa de mi nuevamente y acabe llevándome a la cima ¡muévanse! -dijo yendo a otra habitación siendo seguido por toda la bola.
Mientras que nosotros como pudimos intentamos seguirles el ritmo. Judy decía la verdad ¡estos malditos pantalones eran ridículamente tallados!
Aun así, con mil y un costos (donde básicamente fuimos hasta donde habían guardado nuestra ropa para quitarnos esta ropa darks del demonio) fue que volvimos al set de entrenamiento. Donde papá ya nos estaba esperando.
Héctor: Si que se tomaron su tiempo, pero me alegra que se quitaran esos harapos -dijo al vernos- pero como sea, ahora, la tercera parte de nuestro entrenamiento para grupos pop es... la gran canción -revelo en lo que Rosa nos mostró los papeles con la canción impresa en ellos antes de repartirnos una hoja a cada uno.
Rosa: Se llama ¨hora de chicas¨.
Héctor: Es una canción sobre que no importa que hora del día es ¡siempre es hora de chicas! -recito lo ultimo cantando mientras tocaba un piano- ¨ah acabo de despertarme ¿Qué hora es? ¨ ¡Es Hora de chicas!, ¨Disculpe señor ¿sabe qué hora es? ¨ ¡Es hora de chicas!
Leo: Y si tienes gripe o algún malestar ¿no es hora de ver al doctor?
Héctor: ¡Claro que no, igual es hora de chicas! Excepto de SIDA para arriba, pero eso es punto y aparte -dijo restando importancia al asunto.
Aunque por mi parte, aun cuando deseo ayudar a mi padre en todo esto... había algo que me estaba fastidiando del asunto.
Miguel: Oye, viejo, una duda... ¿no tendrás alguna canción que no tenga la palabra chica? -pregunte solo para que Rosa me viera con cara de ¨ya la regaste¨.
Héctor: Ja ¿en serio preguntas eso? Bueno, pues averigüémoslo. Demos un vistazo a mi pared ¡de discos de platino! -dijo en lo que pasaba a caminar a dicha pared que al parecer no era solo de decoración.
¿Acaso se trajo los discos de su casa para decorar? Vaya que el ego de papá era grande.
Héctor: Veamos, esta... ¨Chica como tú¨, ¨Chica eres mi chica¨, ¨Chica sexy¨, ¨Chica en mi corazón¨, ¨Navidad de ardillas alocadas¨... Ese se me coló -dijo quitando el disco de la pared- ¨Zona de chicas¨, ¡Y chica, chica, chica! ¡Que vendió 3 millones de copias y fue numero 1 en cinco semanas!
Ok, ya me quedo claro, al publico le gusta la palabra chica. O al menos eso era antes, porque, a riesgo de ser yo el que suene anticuado... solo no sentía que estuviera bien.
Héctor: Entonces ¿alguna pregunta? -pregunto con un tonto de que ya eso era todo.
Y yo, sabiendo que posiblemente lo haría estallar, lo dije de todos modos.
Miguel: ... ¿Y no crees que ya es hora de no usar la palabra chica? Ya es no es el pasado, es el presente, papá -dije solo para que luego todo se descontrolara.
Ok, admito que me pase.
(Dos horas después)
(General Pov)
De todas las cosas que se pudieron esperar en la ciudad de San Fransokyo que ya estaba acostumbrada a las cosas más irreales, desde ser tragada por una ola gigante o por un agujero negro trans dimensional a ser atacada por cosas que iban desde robots hasta mutantes, ciertamente un terremoto aparecido de la nada llamo la atención.
O al menos eso pensaba el canal de noticias que ni lento ni perezoso se puso a reportar el incidente con el reportero de la ciudad ya en el caso.
Bluff Dunder TV: Y finalmente un pequeño terremoto en el distrito de gama alta de la ciudad tiene a los sismólogos desconcertados. Solo un modesto 3.1 en la escala de Richter, aunque igual es un misterio, porque el epicentro no se encontraba en una placa conocida por nadie -revelo al publico mientras que fotos de Krei Tech se mostraban en la televisión.
Siendo en ese momento que Rosa decidió apagar el televisor.
Rosa: Vaya ¿Quién lo diría? Parece ser que además de la super fuerza, el talismán del buey también es capaz de producir temblores si el usuario esta lo bastante molesto -menciono mientras escribía en su Tablet- por otro lado, tu ritmo cardiaco ya volvió a la normalidad y tu presión sanguínea esta a 120 sobre 80, tío, ya puedes producir -dijo en lo que le quitaba la banda de presión a su tío del brazo.
Héctor: Lo sigo diciendo, que tomaras esos cursos de medicina fue una de mis mejores ideas -dijo mientras se tomaba un café- esto no estaría pasando si el maldito cerdo capitalista de Alistair no fuera una sucia rata... ¿y de donde sacaste a esa gente, Rosa?
Rosa: ¿Te refieres a Alto voltaje y al Sr. Chispas? Pues aunque no lo parezcan, son expertos en sus respectivas áreas... además, cobran poco -menciono a la vez que el hombre mayor solo suspiro.
Héctor: Solo esperemos que el idiota narcisista meta la pata pronto, porque no creo que pueda aguantarlo mucho tiempo más -dijo antes de respirar hondo- bien, empecemos con la grabación -exclamo mientras observaba al trio de chicos que se encontraba dentro de la cabina de sonido.
Rosa: Solo recuerda que Miguel y los chicos no han tenido un descanso, y por sus caras creo que se están poniendo algo irritables y agresivos -le dijo al hombre que solo rodo los ojos fastidiado.
Héctor: Esta generación de ahora, no aguantan nada. Que no lloriqueen -dijo antes de presionar un botón para que su voz fuera escuchada dentro de la cabina- muy bien muchachos, ya es hora de la fase final del más increíble entrenamiento de Héctor Rivera para bandas de chicos ¡el canto! -grito a la vez que los 3 jóvenes tuvieron dolor de oído simultaneo al escuchar eso con cascos que tenían en sus oídos.
Aunque luego fue el aparente líder del grupo quien decidió hacer la dichosa pregunta.
Miguel: Oye, viejo ¿Qué es este lugar exactamente? -pregunto haciendo que su padre solo se masajeara las cienes buscando calmarse.
Rosa: Es una cabina de sonido, Migue. Aísla las voces en caso de que necesitemos editar -respondió con amabilidad sabiendo que ya su primo y sus dos amigos debían estar exhaustos. Por lo que no veía problema en ser algo considerada para variar.
Leo: ¿Y porque hay almohadas en el piso?
Marco: ¿Quieren que durmamos una siesta? Porque estén por seguros que lo haremos -menciono a la vez que Héctor solo se preguntaba como rayos su hijo se volvió amigo de quien parecía ser una copia de la personalidad del bastardo del De la Cruz original.
A lo cual su sobrina le metió un pellizco al ya saber en que pensaba su tío.
Rosa: Son para absorber el eco extra, como esas cubiertas en los micrófonos de goma espuma -explico en lo que Miguel se pego con uno de los micrófonos para ver que no dolía nada- y también les deje jugo de frutas por si se les seca la garganta y unos bocadillos por si tienen hambre.
Héctor: Muy bien, ahora que la explicación de la escuelita termino, a trabajar. Ahora...
Pero no pudo siquiera dar la orden de empezar a grabar porque en el momento en que Miguel golpeo a Leo en la cabeza con un micrófono a modo de juego. Lo que comenzó como una leve discusión, fácilmente termino en una guerra de comida dentro de la cabina cuando un sándwich de atún cayo en la cabeza de Marco. Dos cosas eran seguras, sándwiches y jugo volaban en todas direcciones, y Héctor se ponía cada vez más rojo cuando pasaron de la comida a las peleas de almohadas.
Rosa: Ok, lo admito, esta vez fui yo la que se equivocó. Fue mala idea.
Héctor: Por favor, solo haz que paren.
Rosa: Lo intentare -dijo pulsando el botón- Chicos, chicos ¡chicos! -trato de llamar la atención de los adolescentes solo para ser ignorada- ... ese es un gran desperdicio de plumas. Lo de las almohadas también fue una mala idea -menciono en lo que su tío se puso de pie- te dije que estaban cansados.
Héctor: Solo... haz que los chicos me vean en el estudio cuando terminen -ordeno para luego retirarse.
A la vez que en ese mismo instante Rosa solo vio como Leo fue estrellado contra el cristal de la cabina. A lo cual ella dio un largo suspiro al saber lo que se venía.
(30 minutos después)
Los 3 chicos traídos de México eran muchas cosas. Infantiles, obstinados, algo malcriados, todo eso se les podía recriminar en la cara y nunca lo negarían. Pero algo que no eran, era gente que se daba por vencida. Aun así, viéndose en ese momento, cubiertos de plumas y restos de comida... se podía decir que no era su mejor momento.
Y menos cuando un Héctor al borde del colapso los observaba como perro rabioso listo para atacar.
Héctor: Tú, no sabes cantar ni bailar -dijo apuntando con su dedo a Leo.
Leo: Pero puedo dar un mortal hacia atrás y...
Héctor: Solo cállate.
Leo: Bueno -dijo cerrando la boca de golpe.
Héctor: Para siempre -declaro antes de pasar a Marco, o ese parecía, antes de pasarlo de largo y centrarse en su hijo- de tu otro compadre ni quiero hablar. Y lo peor de todo, es que tú, mi amado primogénito ¡ni siquiera pareces querer esto!
Siendo la respuesta de Miguel solo abrir la boca para escupir unas cuantas plumas.
Marco: Oiga, ya en serio ¿Qué hay de mí? -pregunto llamando su atención- puedo cantar, bailar y de verdad quiero esto -dijo haciendo a Héctor respirar hondo.
Héctor: Tú... me recuerdas a Justin Bieber.
Marco: Genial.
Héctor: ¡Yo no soporto a Justin Bieber! -declaro borrando la sonrisa del chico.
Era oficial, les había dicho que eran basura, escoria o cualquier otra cosas que quisieran pensar que fuera degradante, sin ningún pelo en la lengua.
Héctor: Este grupo no sabe cantar, ni bailar, no tiene una canción ni un estilo ¡y están cubiertos de plumas! -declaro estresado- y lo diré con toda honestidad ya que seré bruto, pero me gusta decir lo que hay. ¡Prefiero renunciar ahora mismo que cometer un suicidio pop el viernes frente a la disquera y nuestro narcisista patrocinador corporativo!
Y decir que los tres, hasta Miguel, lo miraban cansados y hasta hastiados, era decir poco.
Héctor: Sin embargo, antes de que se vayan a dormir para ver si mañana mejoran al menos un poco. Hay una canción que me gustaría tocarles... -declaro antes de tomar asiento en su piano- ... ¨Uh, siento dolor... ¡Y es que son estos brutos!... Que no sirven para ¡NADA! ¨ -termino la cantada para luego presumir un poco con el piano antes de ya mandar a todos a descansar.
Siendo el resultado del día uno de entrenamiento, fracaso total.
(Una hora después)
(Residencia de artistas de Krei Tech)
Krei Tech podía ser muchas cosas, y su dueño muchas más. Pero si había algo que no se le podía cuestionar al hombre, era su gusto en bienes materiales, al menos en los de recreación y lujo. Porque el interior de la casa en si era un asco, ya que solo compro una propiedad cercana y ya, ni se molesto en remodelarla ni nada parecido. Pero por otro lado, el area piscina era todo un lujo y más.
Lugar donde los 3 chicos se encontraban ahora mismo tratando de olvidar los pesares de su primer día viviendo el ¨sueño americano¨. Bienvenidos al mundo real, damas y caballeros.
Leo: Aunque odie decirlo, tu papá realmente es bueno con el piano, Miguel -dijo tratando de aligerar el ambiente antes de suspirar- pero... me siento tan deprimido.
Miguel: Eso es por la música, déjame -dijo tocando su teléfono, pausando la canción triste que estaban escuchando en ese momento.
Leo: ¿Quién diría que buscar ser una estrella famosa sería más difícil de lo que se ve?
Miguel: Vamos, solo tuvimos algunas diferencias creativas.
Leo: Dilo bien, solo no nos despidió de inmediato porque eres su hijo -dijo haciendo al otro chico rodar los ojos- ¿tenías que retarlo así?
Miguel: Oye, tal vez sea mi viejo y este feliz de tenerlo de vuelta. Pero el tipo no hizo nada más que gritarnos... y obligarnos a usar pantalones peligrosamente ajustados -menciono a la vez que Leo tuvo que darle la razón.
A la vez que Marco estallo.
Marco: Tienes razón, solo quiere convertirnos en estrellas pop ricas y famosas, que crimen -dijo con sarcasmo.
Miguel: A como va la cosa seremos perros entrenados para bailar.
Marco: ¡Perros entrenados ricos y famosos!
Leo: ... Pues el tiene razón -menciono haciendo que Miguel lo viera sorprendido.
Miguel: ¿Es en serio? Apoyas a Marco?
Leo: ¡No! Bueno, tal vez... más o menos... ¿sí? -pregunto ya sin saber que pensar.
Pero una cosa es segura, en que estaban hechos un desastre, lo estaban.
Marco: ¿Saben qué? Lo arruinaron, arruinaron mi oportunidad ¡pudieron esforzarse más, pero no lo hicieron! -dijo en lo que el que parecía su gemelo perdido respiro hondo antes de ponerse de pie.
Miguel: De acuerdo, ¿Qué tal si nos calmamos todos y pensamos en cosas felices como videos de gatitos? -pregunto solo para ser empujado por Marco de vuelta a su silla.
Marco: Tu cálmate si quieres, señor no me tomo esto en serio sabiendo lo importante que es para su propio padre.
Miguel: Muy bien, tu te lo buscaste -declaro antes de saltarle encima a Marco y comenzar a pelear en lo que Leo intento separarlos.
Leo: ¡Y ahora peleamos! ¡Esta ciudad en verdad nos esta cambiando! -dijo antes acabar volviéndose un participante más de la agresión en vez de un mediador.
Y así hubieran seguido por horas de no ser porque alguien los empujo, de tal como que los tres acabaron cayendo directamente en la piscina.
Marco: ¡Hey! ¿Quién fue el graciosito? -pregunto a la vez que Miguel ya tenía una buena idea de quien era debido a que no dejo de pensar en ese chico desde que lo vio en la mañana.
Allí estaba, chupando un lollipop con una sonrisa burlona mirándolos con diversión, Hiro Hamada.
Miguel: ¿Hiro, no? ¿Por qué hiciste eso?
Hiro: Veo que saben quien soy, eso me agrada -dijo sin borrar la sonrisa de su rostro siquiera un poco- y sobre porque hice lo que acabo de hacer. No sé, me pareció que necesitaban enfriarse -dijo encogido de hombros.
A lo cual los 3 solo se miraron entre si antes de suspirar al unisonó.
Marco: El chino tiene razón, lo siento amigos -dijo antes de que los otros dos solo lo sumergieran bajo el agua, empezando así una pelea más amistosa a la anterior.
Mientras ignoraban olímpicamente al chico nativo de San Fransokyo que se quejaba de ser japones, no chino.
(Un par de horas después más, tarde noche)
Para cuando las cosas se calmaron, ya los 3 chicos acompañados de Hiro se encontraban sentados alrededor del fuego en un área de fogata que estaba continua a la piscina, ya que al parecer, el propio Alistair Krei era un fanático de las vivencias al arie libre, cosa difícil de creer cuando se era el hombre más rico de toda San Fransokyo.
Por otro lado, mientras esperaban a secarse, fue que entendieron lo que Hiro estaba haciendo allí, que básicamente fue que lo mandaron para revisarnos, y como no quería volver con Krei durante lo que quedaba del día, decidió que mejor pasaba el rato con el nuevo ¨experimento de marketing¨ de Krei Tech. De paso disculpándose por la canallada que Krei les había hecho. Pero lo que si era cierto, es que los chicos habían congeniado bien con el nipón rápidamente. Cosa que decidieron ameritarlo a que entre raros se entendían, así de simple.
Y no hacia falta decir que quien más estaba interesado en conocer al nipón que se acerco por si mismo, no fue otro que Miguel. Quien intentaba con todas sus fuerzas ser casual sin rayar en lo incomodo y hasta en lo irritante. Cosa que lo confundía, ni que Hiro fuera una chica para actuar como colegial enamorado... ¿o igual le quería de ¨ese¨ modo?... Vaya que cupido era una divinidad caprichosa como le da la gana.
Marco: Podría quedarme aquí y ser modelo... digo, soy muy guapo -dijo sonriendo cansado- o quizás un reallity show tal vez.
Leo: ¿Sí? ¿Cuál? ¿Proyecto idiota? -pregunto burlón en lo que al otro chico solo se le resbalo.
Marco: Hablas por envidia, Leo.
Miguel: ¿Saben que es gracioso? -pregunto llamando la atención de los demás presentes- que ni siquiera pudimos cantar juntos.
Hiro: ¿Es en serio? ¿Ni siquiera los dejaron cantar?
Leo: Digamos que las cosas se... salieron de control a la hora de la grabación -dijo en lo que los 3 solo rieron por el recuerdo para extrañeza del nipón.
Quien solo miro como esos chicos traídos del país del sur comenzaron una canción que perfectamente servía para insultar ya fuera al tal Héctor o al propio Krei... le gustaba. Y no lo negaría, le gustaba como cantaban esos chicos... especialmente el hijo del productor.
Hiro: No se sientan mal por no llegar lejos. Trabajo con Krei de primera mano, y puedo decir lo caprichoso, superficial y mezquino que puede ser. Al menos lo intentaron, que es más de lo que muchos pueden decir -dijo tratando de dar ánimos a los chicos.
Pero ellos ni lo habían escuchado debido a que, una vez habiendo cantado sin ninguna presión o consigna, fue que llegaron a una conclusión, les gustaba cantar juntos, y mucho.
Miguel: Haremos más que intentarlo, eso lo aseguro Hiro -dijo mirando a sus dos amigos- deberíamos hacer esto, ustedes dos tenían razón. Realmente debemos hacer esto.
Leo: ¿Y cómo? Tu papá no nos quiere ver ni en pintura.
Miguel: Claro que no... bueno, tal vez un poco. Pero el problema fue que no dimos lo mejor.
Marco: ¡Yo si di lo mejor!
Miguel: Lo sabemos, Marco, lo sabemos -dijo calmando a su amigo entusiasta- Hiro, necesito música, algo inspirador ¿tienes algo así en tu teléfono? -pregunto en lo que el chico se encogió de hombros.
Hiro: Yo no, pero se quien sí, Baymax.
Y fue cuando el Michelin versión gorda, que según Hiro había dicho, se trataba de un robot asistente medico de todas las cosas, comenzó a reproducir una música inspiradora. Cosa que solo hizo asentir al joven Rivera, que en verdad pensaba que el futuro era ahora.
Miguel: ¿Ok?... En fin, escuchen chicos. Somos simples soñadores, aspirantes a cosas grandes. Yo quiero ganar la próxima copa mundial de futbol callejero, si es que llega a existir. Leo quiere ser muchas cosas, siendo la que sobre sale un animador lo bastante bueno como para hacer sus propias animaciones por su cuenta... y Marco solo quiere deshacerse de nosotros para ser solista, y ni te molestes en negarlo Marco, todos lo sabemos -dijo divertido.
A la vez que el mencionado solo se encogió de hombros sin negar nada.
Miguel: Pero a pesar de todo, somos unos tercos persistentes que en las buenas y en las malas ¡no nos rendimos jamás! -declaro en lo que los otros dos asentían- ahora ¿vamos a solo dejar el balón tirado, y quedarnos en la banca? ¿O vamos a tomar ese balón. correr a la portería y tirar un gol en grande?
Leo: ... ¿En verdad crees que podamos ser una banda?
Miguel: No -dijo con sinceridad- pero me he dado cuenta de 3 cosas desde que llegamos. 1: me encanta cantar, es decir, en serio me encanta cantar. Al parecer, lo tengo en la sangre -declaro con una sonrisa- 2: me encanta mucho más cantar con ustedes, chicos. Y oportunidades como esta solo ocurren una vez en la vida.
Marco: ¿Y cual es la tercera?
Miguel: Ahora mismo, de no estar aquí, estaríamos en el departamento de mi mama en ciudad de México, posiblemente golpeados por haber metido la pata en quien sabe que cosa... y esta piscina en serio me enamoro -dijo haciendo reír a sus dos amigos y al nipón que escuchaba todo atentamente.
Leo: ¿Cuál sería la jugada entonces, capitán?
Miguel: Esa sería solo soltar el balón, o ser lo que siempre hemos sido, Crazy Land -dijo haciendo memoria que eso era lo que tanto su madre, como sus profesores, como otros grupos de chicos opinaban de ellos 3. Que por donde fuera que pasaran, la locura estaba garantizada.
Cosa que a ambos chicos faltantes del grupos les gusto.
Leo: Crazy Land.
Marco: Crazy Land.
Miguel: Pues... Crazy Land será.
¿Y cuál era la opinión del chico por fuera de la ecuación en ese momento? Pues simple y llanamente, Hiro al principio podría admitir que solo fue a ver al grupo de chicos para intentar comprender en que rayos estaba pensando Krei esta vez. Pero tras conocerlos y convivir con ellos, podía decir que, no sabiendo si era por curiosidad o porque en verdad estaba interesado. Una cosa que era segura es que quería ver hasta donde podía este grupo llegar.
Crazy Land... no es un mal nombre para una banda.
(Al día siguiente) (Set de entrenamiento musical)
Nuevo día, nueva tortura esperando a la futura banda que solo se acercaban al grupo compuesto por el propio Héctor, Rosa y el resto de la bola excéntrica detrás de ellos. Pero a diferencia del día anterior, los chicos se diferenciaban por una sola cosa. Estaba decididos esta vez.
Héctor: ¿Y bien? -pregunto una vez ambos grupos estaban frente a frente. A lo cual su hijo solo se encogió de hombros.
Miguel: Esta bien, lo admito viejo, ayer tomamos las cosas como un juego y no lo tomamos en serio, eso se acabó -dijo haciendo sonreír a su progenitor- por eso, bien, lo haremos a tu modo. Sin tonterías, sin peleas de almohadas, y sin preguntas por estos dos días que faltan.
Héctor: Eso era todo lo que quería escuchar, mijo -declaro emocionado antes de darles la espalda- ¡muy bien! ¡Hora de chicas, desde el principio!
Miguel: ¡Excepto por eso! -declaro a la vez que Héctor lo vio de reojo- de verdad no queremos cantar hora de chicas.
Héctor: Déjame adivinar -menciono antes de suspirar- tienen una idea mejor ¿no es así? Adelante, escuchemos el mejor título de canción que se les ocurrió.
Miguel: Es más que eso.
Marco: La banda se llamará Crazy Land.
Leo: Y en cuanto la canción, esa se llamará.
Los 3: Big Time Rush -dijeron seguros de si mismos.
Además, la cara de Héctor era todo un poema, eso era seguro.
Miguel: Es una canción sobre 3 chicos comunes y corrientes con aspiraciones grandes y una oportunidad única en la vida -dijo sonriendo con honestidad- y que darán lo mejor de ellos, para que todos sus sueños se cumplan.
Rosa: ¡Me gusta! -hablo antes de que su tío dijera algo- el nombre de la banda es original y seamos sinceros, tío. Tienes que dejar de usar la palabra chica en todos los títulos de tus canciones -dijo en lo que la nueva banda, Crazy Land, asintió en señal de estar de acuerdo.
Héctor: Pues ¡A miiiiiiii.....! me gusta también, ambas cosas -dijo para alegría de los chicos- trabajaremos toda la noche porque faltan 2 días para el viernes. Así que vamos con Big Time Rush.
¿Qué más se podía decir? Desde que se tomó esa decisión. Las cosas solo fueron como viento en popa para ser claros. Con una motivación renovada, la nueva banda se tomo las cosas más en serio, logrando llegar a un acuerdo de vestuario con Judy y el señor chispas, y logrando hacer la coreografía para gusto de Alto voltaje.
Siendo de ese modo que antes de que se dieran cuenta, ya estaban en la cabina de sonido listos para grabar.
Héctor: Muy bien, Big Time Rush, desde el principio -ordeno en lo que el trio le daba pulgares arriba- espero que esta vez no me den ganas de matarlos.
(La canción es Big Time de Big Time Rush, búsquenla para escucharla si no la han oído antes, porque seré sincero, esa canción resume casi que todo lo que rodea este fic)
(Time Skip, dos días después)
Y antes de que se dieran cuenta, ya el grupo se encontraba bailando y haciendo un numero frente a un inexpresivo Alistair que desde el momento en que tomo asiento ya tenía las expectativas por los suelos. Cosa que parecía así incluso para cuando la canción termino.
Hasta que sin previo aviso se puso de pie y abrazo a Héctor para sorpresa e incomodidad de este.
Alistair: ¡Estos chicos serán una mina de oro, MI mina de oro! -declaro emocionado- me gustan, y el resto de la junta los adorara. Tienes 3 meses parar hacer los demos. ¿Te lo dije o no, Héctor? Las bandas están de vuelta -dijo con su típica sonrisa de comercial- ahora, tengo que irme, mamá quiere que vaya a la opera con ella... hay destinos peores que la muerte -declaro antes de retirarse junto a Judy.
Mientras que por parte de Héctor, este solo se acercó al micrófono para hablar con sus chicos que estaban en el set expectantes a saber que se decidió.
Héctor: Chicos... se quedan en San Fransokyo -dijo causando que los 3 se pusieran a celebrar- ¡dejen de festejar! Si pensaron que los últimos 3 días fueron difíciles, imaginen los próximos 3 meses. Leo aun debe mejorar su canto y su baile, Miguel, tú mismo debes mejorar tu baile ¡y por alguna razón que no comprendo, todavía no soporto a Marco!
Marco: ¡Oiga! -iba a reclamar antes de ser apartado por Miguel.
Miguel: Trabajaremos en eso, tu tranquilo y nosotros nerviosos, viejo.
Héctor: ... De acuerdo, ya pueden celebrar -dijo cortando la comunicación y sonriendo divertido al ver a los chicos ponerse a gritar y dar saltos de felicidad.
Y no mentiría al decir que no le daba gusto ver a los chicos celebrar de ese modo, era el comienzo de su viaje musical, el sabia lo importante que era eso. Así que por ahora, los dejaría disfrutar el momento. Ya luego los torturaría.
Rosa: Parece que al final las cosas salieron a pedir de boca, querido tío.
Héctor: Puedes decirlo dos veces, mija... dime ¿segura que es verídico? -pregunto aprovechando que estaban solos en lo que ella asintió.
Rosa: Si, querido tío... fue encontrado en una cueva en el amazonas, la exhibición estará aquí en San Fransokyo en unos días. Y no sabes cuantas tretas tuve que hacer para que la gira de exposición se pasara por el museo de esta ciudad.
Héctor: Excelente -dijo complacido- todo va según lo planeado, tanto sus sueños como los míos van en camino a ser cumplidos... todo de acuerdo con el plan.
Si, un futuro brillante estaba abriendo sus puertas a la familia Rivera. Pero ¿eso era bueno o malo para terceros? Pues depende a quien preguntes.
__________________________________________________________
Notes:
Y ese sería el capitulo, como siempre pueden votar, comentar, lo que gusten.
¿Y que les pareció?
Por el momento no tengo ningún comentario extra que hacer, (excepto disculparme de lo que dure haciendo esto) así que por ahora, hasta pronto.
Chapter Text
(Miguel Pov)
Ya hace unos días que había empezado mi nueva vida en la ciudad futurista del San Fransokyo, buscando llegar a la meta de volverme junto a mis amigos en una banda famosa. Siendo todo en realidad una pantalla de mi padre para sus propios intereses, pero que a pesar de todo, era de suma importancia lograr este sueño.
Aunque una cosa es decirlo y otra muy diferente es hacerlo, ya que lo admito, he estado recibiendo sorpresa tras sorpresa desde que empezamos a vivir en la basura de casa (con piscina genial) De Krei Tech. ¿A que me refiero?
Pues a que justo el día después de que nos dieran la noticia de que Krei si nos daba los 3 meses para grabar. Fue que Rosa nos visito luego de que como buenos amigos, hiciéramos a Marco caerse en la piscina por diversión dejándolo, flotando, en esta mientras seguía dormido para luego gritar que había una oferta 2 x 1 en acondicionador para el cabello... todo lo que se escucho fue el cuerpo cayendo al agua.
(Flashback)
Marco: Si, graciosos, muy graciosos ¡¿Dónde está el acondicionador para el cabello?! -pregunto mientras hacia una rabieta en el agua para diversión nuestra.
Leo: Lo admito, eso fue divertido. Si así serán todos los días, no me quejo -exclamo en lo que buscaba calmarse- son como vacaciones con canto.
Miguel: Dilo bien, son Cantaciones -dije en lo que él solo asintió.
Marco: Vaya forma de despertar -se quejo llegando al borda de la piscina con cara de pocos amigos, cosa que solo nos hizo reír más.
Y como salida de la nada, mi prima ya estaba detrás de nosotros casi después de que Marco se había salido de la piscina.
Rosa: Buenos días a los 3. Me alegra ver que están motivados -dijo con una sonrisa divertida antes de ponerse seria- bien, séquense y vístanse, es hora de ir al estudio. Si no han desayunado lo harán en el camino.
Miguel: Pero si es mi linda primita Rosa -dije aun tratando de volver a tener una conexión con la chica frente a mí. Cinco años de no vernos más el hecho de que yo no recuerdo absolutamente nada de ella no ayuda mucho a eso, pero la esperanza es lo ultimo que se pierde- ¿Qué nos tiene mi viejo, el gran Héctor Rivera, reservado para nosotros hoy? ¿Armonías?
Leo: ¿Aprender nuevos pasos de baile?
Marco: ¿Una gran fiesta al estilo Hollywoodense para exponernos en la alfombra roja?
Rosa: Cerca -dijo antes de sonreír con malicia para nuestra preocupación- irán a la escuela.
... Ok, esa si no la vi venir.
(Fin del flashback)
Si, al parecer tener esperanzas de pasar 3 meses sin clases fue mucho pedir al universo. Ya que según la asociación de actores, cantantes y artistas, los menores de 18 en la industria de la farándula deben asistir a por lo menos 4 horas de escuela al día cada cinco días a la semana... cosa que hubiéramos sabido si hubiésemos leído los panfletos que nos había dado la noche anterior en vez de solo tirarlos a la basura.
Pero en nuestra defensa ¡nadie lee esas cosas!
Y otra que no nos esperamos, es que el viejo, en vez de meternos en una escuela normal. Quiso abrir su propia escuela en la sección que le tocaba de Krei Tech, ¨la escuela de Rivera¨. Con la idea de que al él mismo supervisarnos, nunca íbamos a perder el tiempo en ensayos o grabaciones... lo cual era una basura conforme más lo explicaba.
En vez de descansos para el almuerzo, iban a haber ensayos para armonías. Las excursiones iban a ser al estudio de baile al final del pasillo. Y ni hablemos de los profesores, cada uno fue peor que el anterior, con decir que el primero nos odiaba solo porque nosotros logramos su sueño de juventud frustrado de ser una estrella famosa... y por eso no nos dolió nada deshacernos de él como del resto de ellos del mismo modo que hacíamos con las niñeras en el pasado.
Cabezas de pescado, bombas de tinta, la ropa sucia que no lavamos en 6 meses para justamente casos como estos, sillas saboteadas, el mazo de madera de tamaño Harley Quinn ¡Hasta los Sándwiches con comida para perro! Basta con saber que a una le regalamos las llaves del porsche del viejo como soborno para que se largara.
Fue un truco sucio entre tantos, pero en la guerra todo se vale ¡y eso era una batalla sin cuartel en busca de algo tan simple como buena educación! y si, se lo raro que es que un adolescente de segundaria desee eso. Así de mal estaba la cosa.
Y admito que cuando trajo a una super estrella de la lucha libre nos agarro con la guardia baja. Pero ese cabrón termino huyendo como todos los demás, ni tan intimidante resulto ser Roman Reigns al final.
Pero al final ese asunto se resolvió de una manera un tanto inesperada.
(Flashback)
Héctor: Bien chicos ¿para que negarlo? Ustedes me importan -dijo una vez entro al aula de clases que hizo para nosotros en su modo ¨director¨- por eso, quisiera contarles una historia de mi juventud. A lo más que llegué de preparatoria fue el segundo año, luego por ciertas... razones, me tuve que salir de la escuela, y mi director de ese entonces era un cretino, un verdadero hijo de puta -explico mientras hacia caras ¨directorales¨ como el las llamo.
Vaya, mi viejo si que no se reserva las opiniones.
Héctor: Y por eso, me jure a mi mismo que un día, yo sería el director. Uno amable, bueno, justo, agradable...
Leo: Pero... no eres ninguna de esas.
Héctor: ¡Oye! ¡Las cosas no siempre resultan! -declaro ofuscado antes de respirar hondo- lo importante aquí es que no importa lo que hagan, se quedaran en esta escuela, fin de la historia -dijo para luego recibir un manotazo por parte de Rosa.
Je, eso es algo que tanto yo como Leo y Marco nos dimos cuenta apenas empezamos a convivir con ellos, tal vez mi papá era el adulto, pero Rosita era la adulta de la relación tío/sobrina. Sin exagerar, ella era al menos dos décadas más madura que mi papá... no se que puede decir eso de mí. Pero de algo que estoy seguro, es que si Rosita lo estaba reprendiendo, es que al fin se dio cuenta de sus metidas de pata... ojalá.
Ya que, aunque Rosita era más racional que mi viejo, tampoco era del todo una aliada, a fin de cuentas, su lealtad al 100% era para mi papá y nadie más. Cosa entendible ya que él fue quien la crio cuando ella se fue a vivir con él luego de que yo perdiera la memoria... larga historia que no quiero recordar ahora... muy triste.
Héctor: Pero, tras discutirlo con Rosa, me he dado cuenta de que los profesor que les he conseguido hasta fueron un poco... algo... ¿a quien engaño? Fueron basura. En mi defensa, culpen a esta cosa, no a mi -dijo levantando un libro algo grande que nos llamó la atención.
Miguel: ¿El registro de escuelas oficiales de la Aspa?
Héctor: El cual esta lleno con todos los nombres de los profesores certificados a los que podría llamar. Además de las reglas que deben seguir las escuelas de la aspa y esas cosas aburridas -dijo para luego literalmente arrojar el libro por la ventana- si fuera por mí, estaría llamando profesor tras profesor hasta que ustedes se rindan. Cosa que sabemos que no va a pasar -dijo en lo que todos reímos.
Bueno, al menos parece que el punto de que las cosas debían cambiar para mejorar estaba claro, eso es algo.
Héctor: Solo para aclarar, no es que este cediendo a las tácticas truhanescas de mis picaros alumnos y el sabotaje no me importa, no estoy cediendo. Solo es que para ahorrarnos tiempo... saluden a su nuevo profesor. El profesor definitivo. El futuro es hoy chicos -dijo a la vez que la puerta se abrió.
Dejando a la vista algo que debimos haber visto venir tomando en cuenta que Krei Tech es una empresa que se encarga principalmente de robótica. Nada más ni nada menos que un robot profesor.
???: Vaya, vaya, esta clase se ve muy inteligente -dijo con un tono de voz amistoso en lo que yo junto a mis dos amigos solo arqueamos una ceja.
Héctor: Ahora, déjenme presentarles a su nuevo profesor, el robot E-51 Inteligente. O solo Inteligente, recién salido de fabrica con el único propósito de ser su profesor... son todos tuyos Inteligente -dijo en lo que el robot hizo un saludo militar- ahora vamos Rosa, aun tienes que ayudarme a decidir que corbata me hace ver más directoral.
Rosa: Sigo diciendo que la fea -declaro en lo que ambos se retiraban del aula.
Inteligente: No se preocupe estimado señor director, disfrute su importante selección de cortabas. No se preocupe por los chicos, están en buenas manos -dijo despidiéndose antes de cerrar la puerta y encararnos- ahora veamos... Miguel Rivera, presente. Marco De la Cruz, presente. Leo San Juan, presente.
Leo: Espera ¿acabas de escanearnos?
Inteligente: En efecto. Y por lo que veo están todos, una asistencia perfecta ¡excelente! Como su profesor eso me hace muy feliz -dijo pareciendo que en efecto, estaba contento- ahora ¡saquen sus libros de matemáticas y empecemos con la clase!
Marco: Ah no, ni creas que enseñarnos será tan fácil. El único modo para vencer a una maquina racional, calculadora sabelotodo es con otra, Leo, ayúdame con esto -dijo al mencionado que solo rodo los ojos con fastidio antes de ponerse a ello.
Leo: Profesor Inteligente, todo lo que yo diga es mentira. Y estoy mintiendo ahora -dijo esperando que con eso bastara para que la maquina tuviera un corto circuito de error en buscar el raciocinio a eso, cosa que no funciono.
Inteligente: Buen intento, pero me es familiar todo lo relacionado a la paradoja de epiménides. Si gustas podemos estudiar sobre él en la clase de historia ¡Pero es hora de las matemáticas! ¡Ya verán lo fáciles que son las matemáticas mientras tengan un ojo atento! -exclamo de tal modo que parecía mostrar alegría.
Desde ese momento no me apena decirlo, el robot supero al hombre, y por mucho. Ya que aunque intentamos deshacernos de él solo para ver cuanto aguante tenía, la maquina venia preparada.
En la clase de matemáticas Marco intento dejar cabezas de pescado en un gabinete del escritorio del profesor y en respuesta Inteligente demostró ser veloz para no solo quitarle el pescado podrido a Marco, sino que también hasta le pinto las uñas con el tiempo que sobro.
En clase de educación para el hogar nos enseño a hacer sopa, y cuando intentamos hacer alguna broma como preparar las trampas de tinta o derramar la sopa, el en respuesta nos vistió a los tres con delantales rosa de corazón.
Y ni me hagan hablar de la clase de idiomas extranjeros, allí fui yo quien quiso hacerle una broma arrojando unas canicas a ver si así perdía el equilibrio y se caía. La respuesta a eso es que acabé con el pelo cuidado y arreglado con quien sabe cuántos cosméticos ¡me sentí como Marco!
Inteligente: Espero que lo entiendan chicos. Mi trabajo así como el propósito por el cual fui creado es cuidar y encargarme de las cosas. Como de la buena conducta y apariencia de mis estudiantes aún cuando estos busquen ser unos diablillos problemáticos -dijo haciendo ver que era consciente de nuestras intenciones- si gustan pueden seguir esforzándose por ver que tan preparado estoy para ser su profesor. Y cada vez que lo hagan, cuidare muy bien de ustedes... ahora volvamos al estudio ¡ya que es un gran honor para mi enseñarles!
(fin del flashback)
Miguel: Y con todo paso una semana desde entonces, y tienen que reconocer ha sido el mejor profesor que hemos tenido nunca, para ser una máquina -dije dejándome caer en el sofá de la sala junto a mis dos amigos que estaban tan cansados como yo- si solo el tiempo en el estudio de grabación fuera igual de divertido... 5 horas de baile.
Marco: 7 horas de armonías -declaro tan cansado como yo.
Leo: Y para rematar, sude al menos 14 pañuelos mientras me limpiaba el sudor -dijo antes de pasarse un pañuelo por la frente- ... que sean 15.
Marco: Tu y tu insistencia de llevar pañuelos a todos lados ¿Quién hace eso?
Leo: Que aun desee mantener vivo uno de los viejos vestigios de la caballerosidad del siglo pasado es mi problema, no tuyo Marco -dijo en lo que él solo se encogió de hombros.
Miguel: Pero al menos podemos descansar de un largo día de estudio y trabajo en nuestra... bella casa -dije para que luego de la nada las patas del lado izquierdo del sofá se rompieran y cayéramos con todo y mueble al piso- lo sé... eso ultimo fue mentira.
Leo y Marco: Este lugar es horrible.
Cosa que ciertamente no estaba en desacuerdo, una sala pequeña, paredes con pintura gastada, muebles y decoración de hace al menos 40 años o hasta más, ni siquiera había cable, era solo un reproductor de VHS que venía con un televisor de los de caja, los viejitos ¡Un reproductor de VHS, ni siquiera de DVD! Y eso sin mencionar las manchas en la alfombra y el piso o los agujeros en el techo y paredes.
Todo eso sin hablar de los olores que, honestamente, parecía que toda una familia se murió aquí... solo queda rezar para que ese no fuera el caso. Aunque viendo como es Krei, si lo creo capaz, a fin de cuentas, las casas que fueron escenas del crimen son más baratas.
El punto es que nos centramos tanto en nuestra guerra contra la educación que olvidamos el mayor problema. Nuestra casa era un basurero, y no solo porque unicamente vivimos hombres aquí. Pero cuando nos quejamos directamente con Krei, el solo se hizo la victima y dijo que éramos unos ingratos, que encima que se gasto tanto en la increíble piscina, no apreciábamos que nos diera un techo donde vivir.
Vaya, al parecer para los ricos los lujos son más importantes que las necesidades básicas ¿Quién los entiende?
Marco: Y encima la tubería se acaba de romper -dijo en lo que escuchamos como el agua comenzaba a correr por la cocina- odio este lugar.
Miguel: Yo igual, necesitamos nueva casa. Una donde si se pueda vivir como personas.
Leo: Si, claro, seguro -declaro con sarcasmo- como si eso nos fuera a caer del cielo. Ya escucharon al jefe de jefes, no podemos irnos de los terrenos de Krei Tech, es aquí o en ningún lado. Solo no hay modo de que eso vaya a cambiar de la noche a la mañana.
(Al día siguiente)
Judy: Decidimos llamarla la máxima casa adolescente -dijo mientras exponía un dibujo de lo que bien podía ser la casa soñada para cualquier chico de nuestra edad.
Dios, si estás ahí, soy yo, tu hijo Miguel, y se que no hablo contigo a menudo... o casi nunca. Pero sabes que soy buena gente y que nunca he hecho mal, a menos de forma intencional, así que... ¡por favor!
Judy: Llena de increíbles aparatos electrónicos como una pantalla plana, un sistema de sonido de última generación, la playstation 5 y...
Marco y Leo: ¡Un tobogán! -dijeron emocionados en lo que ella les guiño un ojo con complicidad.
Vaya forma de empezar el trabajo hoy. Con una reunión de todos con el jefazo que solo asintió satisfecho al diseño de la dichosa casa máxima.
Alistair: Genial ¿no es así?... Por cierto, yo también me antoje de un tobogán. Jodie, que instalen uno en mi oficina, pasante, toma nota de eso – dijo en lo que tanto Judy como Hiro solo rodaron los ojos antes de asentir.
Héctor: Y supongo que esta es la parte donde doy a conocer lo que opino -dijo tras al menos mostrar profesionalismo hasta terminada la presentación- Krei, amigo, no sé que es todo esto, pero necesito trabajar con mis chicos en las armonías hoy.
Alistair: Pues cambia tus planes, mi mamá, la doctora Lolo, una de las personas más influyentes en el ámbito de la robótica a nivel mundial, cree que es una estupidez todo esto, y quiere eliminar esta nueva división musical de Krei Tech. Y con todo soy un buen hombre que le hace caso a su mamá -dijo sonriendo.
Sonrisa que no fue para nada compartida por mi papá como por Rosa o ninguno de nosotros, hasta Hiro y Judy no creían lo que estaban escuchando.
Alistair: Pero tus muchachos la harán cambiar de opinión así como lo hicieron conmigo -dijo mirándonos de reojo y guiñándonos un ojo.
No puedo creer que diga esto... pero empieza a caerme bien el capitalista narcisista.
Miguel: ¿Y podemos vivir ahí? -pregunte señalando el dibujo de la casa adolescente.
Alistair: Seguro... por al menos dos horas.
... Hable demasiado pronto.
Alistair: Estarán en esa casa mientras filman un video promocional rodeado de productos Krei Tech, que le mostraran a mi mama que nuestras futuras estrellas son perfectas para vender celulares, robots de ultima generación, televisores, autos, etc -dijo tomando asiento frente a nosotros al otro lado de la mesa de juntas- hagan algunas entrevistas, respondan cosas como ¿Por qué les gusta cantar? ¿Por qué el espejo o el pañuelo? -señalando a Marco y Leo- ¿Por qué aman los productos de Krei Tech? Los toboganes y la nueva Krei Laptop micro XZ25, solo miren que pequeña es, cabe en la palma de la mano.
Y si... era muy pequeña, competía fácilmente con el violín más pequeño del mundo de Don cangrejo. ¿Quién usaría esa cosa y como lo haría?
Alistair: Además de que desde ya se me ocurrieron algunas cosas para ustedes y la banda cuando sean más famosos chicos, y que será aún más dinero para mí -dijo llamando nuestra atención- y en serio llevo un tiempo planeando esto, desde hace un año que Héctor se me acerco a mi con su propuesta de patrocinar su ambicioso proyecto. Desde ese momento, pase el ultimo año trabajando, investigando, desarrollando, patentando y probando los que pueden ser los productos volaran de los anaqueles que estén relacionados con Crazy Land.
Ok, hasta ahora esto me estaba gustando.
Alistair: Y la respuesta a que productos serían los que acabarían siendo vendidos en todo el mundo, esos serían... ¡los cepillos de inodoro, shampoo de caballo, y juguetes para preescolares! ¿genial, no? -pregunto a la vez que la respuesta fue el sonido de un grillo que al final fue lo único que se escuchó en la habitación.
De nuevo hable muy pronto, ya veo que con este tipo ilusionarse por una idea suya era un grave error... ¿lo dejaron caer de chiquito o qué?
Rosa: ... ¿Y qué cosas dirían los muñecos de los chicos? porque serán de ellos ¿no? -pregunto haciendo que los 3 sintiéramos aversión a la idea casi de inmediato.
Alistair: ¿Yo que se? Cosas como ¨Es hora de mimir¨, ¨Hora de rockanrolear¨, ¨Me hice bum bum, mejor me cambian¨, ese tipo de cosas -dijo como si nada.
A la vez que nosotros sentimos como si el ojo nos fuera a explotar de la rabia.
Los 3: ¡Nosotros no decimos que tenemos que hacer bum bum!
Alistair: Lo acaban de hacer -dijo con burla a la vez que mi viejo se puso de pie con cara de pocos amigos.
Héctor: Krei, vamos, en serio no piensas que esos productos con los que quieres relacionar la imagen de los chicos son vergonzosos y... simplemente malos -dijo solo para que el millonario hiciera oídos sordos.
Alistair: Esto no se trata de lo que te gusta Héctor, esto se trata de lo que al publico le gusta. Estos productos son únicos y diferentes, a eso le llamo pensar por fuera de la caja simbólica -dijo convencido de que esa idea iba a ser un boom. Y de hecho si lo era, uno Ka boom directo a nuestra ruina.
... ¿Cuántos años te pueden dar en prisión por matar a un rico por este intentar arruinar tu vida sin culpa o pena de nada?
Héctor: Krei -dijo respirando hondo mientras se masajeaba la frente- no puedes seguir viniendo a mi estudio todos los días, interrumpiendo mis sesiones de entrenamiento.
Alistair: Claro que puedo, el edificio es mío -dijo encogido de hombros- y asegúrense de hacer las entrevistas en el ISTF, ya reservé un lugar y todo. Mi madre en serio ama esa universidad al ella graduarse de allí, hasta cree que el césped verde del lugar da buena suerte a sus estudiantes... lo sé, raro.
Rosa: Pero -llamando su atención- ¿lo que quieres es una presentación justamente en esa casa adolescente?
Alistair: Exactamente, y necesito que esto este hecho en dos días.
... ¿Cómo, como dijo que dijo?
Alistair: O créanme que todo esto de la división musical se ira directo a la basura -dijo dejándonos a todos boquiabiertos- ¡pero diviértanse! Tómenselo con calma ¡y no quiero oír quejas ni gritos! -declaro justo cuando tanto nosotros como el viejo y Rosita estábamos a punto de hacer eso.
Para luego retirarse con suficiencia siendo seguido tanto por Judy como por Hiro quienes suspiraban y no podían evitar mirarnos con pena y lastima. Hasta algo de vergüenza, y no los culpo la verdad.
Rosa: Bien... ya que al parecer no tenemos otra opción. Iré a la universidad a verificar el lugar de construcción para la casa adolescente, también revisare cual podría ser la zona perfecta para hacer las entrevistas y buscare un director de moda.
Héctor: Por el director de moda no te preocupes, yo soy uno al fin y al cabo -dijo antes de vernos a nosotros- ahora, esto es lo que haremos. Ustedes trabajen en sus entrevistas, mientras que Rosa y yo vemos como arreglar esa basura de productos de marketing ¿hecho?
Los 3: Hecho -dijimos al unísono mientras que él y mi prima se retiraban también.
Dejándonos a los 3 fantaseando con imagen de la casa adolescente frente a nosotros. Dicen que soñar no cuesta nada... pero mientras más sueñas con algo, más te duele no tenerlo a la mano, ahora más que nunca lo sé.
Miguel: ... ¿Están pensando lo mismo que yo? -pregunte en lo que ambos pasaron a verme entre interesados (Marco) y consternados (Leo).
Leo: No... solo, no ¡es imposible! Lo que piensas, solo no se puede... -dijo al parecer leyéndome la mente.
Miguel: Hay Leo, has intentado hacer que Marco y yo demos marcha atrás a nuestras ideas con sentido común cientos de veces. Dime ¿funciono alguna vez? -pregunte en lo que él solo suspiro resignado.
Leo: No.
Miguel: Justamente, además, solo piénsenlo -dije poniéndome de pie- hace solo una semana éramos un trio de don nadie soñadores de México, y hoy somos una banda en San Fransokyo. Literalmente cualquier cosa es posible, hasta la magia, y ambos saben que no miento -dije a la vez que un recuerdo me vino a la mente.
Las caras que pusieron cuando les mostré los talismanes del buey y el gallo no tuvieron precio, pero aun con todo, prometieron guardar el secreto. Y se que lo harán, por algo eran mis mejores amigos.
Leo: De acuerdo, tienes un punto. Pero pregunta, literalmente la madriguera que tenemos por casa es solo la mitad de lo que se ve en el dibujo ¿Cómo meteremos todo eso en nuestra casa?
Miguel: Me alegra que preguntaras eso, el primer paso es buscar al diseñador de escenario contratado por Krei y engañarlo para que haga la casa adolescente en nuestro hogar y no en el ISTF.
Marco: Déjenmelo a mí, soy un actor muy convincente -dijo divertido.
Solo para sobresaltarnos al escuchar una voz detrás de nosotros que casi nos hace saltar del susto.
Rosa: Sabía que tramaban algo -dijo divertida- ... si saben que sin mi ayuda no pasaran del punto de arranque de todo esto ¿no?
Oh no... me huele a extorsión.
Los 3: ... ¿Cuál es tu precio? -preguntamos ya haciéndonos a la idea de que ella no nos iba a ayudar sin delatarnos, no sin un precio al menos.
Rosa: Nada del otro mundo, solo quiero usar el tobogán primero.
Marco y Leo: ¡Pero...! -estaban a punto de reclamar antes de que les tapara la boca a ambos con mis manos.
Miguel: Hecho. Pero ¿segura que puedes hacerlo, primita? -pregunte en lo que ella me vio con una expresión que claramente era de burla.
Rosa: Miguel, tu solo siéntate y mira a la maestra trabajar -dijo antes de que entre los cuatro nos pusiéramos a planificar.
Parece que era oficial, tendríamos casa nueva.
______________________________________________________
(General Pov)
(Al día siguiente) (Oficina del director de escenario, Roddy Blair)
Rosa: Necesito que esto este listo para las 3 de la tarde de mañana en la vivienda actual de Crazy Land en los terrenos de Krei Tech y no en el ISTF -dijo mostrando los planos a quien se contrato para el trabajo, una leyenda en su campo, Roddy Blair.
Siendo su nombre real Rodderick Blair, el mismo es un hombre misterioso que tiene fama de poder construir lo que sea cuando sea, arquitecto de profesión y de buen renombre aunque su apariencia no diga mucho de si mismo. Sin mencionar que por debajo del ojo público, era conocido en el mundo de los superhéroes, bastaba con saber que entre ellos era conocido como ¨el rey de las guaridas¨.
No obstante, los tiempos no son como antes y no hay tantos superhéroes en busca de guaridas como en el pasado, y pues, de algo hay que vivir ¿no?
Rosa: La idea es tener el set cerca de la empresa para no tardar tanto tiempo en transportar los equipos tecnológicos -se explico ante el hombre que seguía observando los planos- la pregunta es si puedes hacerlo. Porque si no puede entonces tenga por seguro que el señor Krei encontrara a alguien pueda -dijo haciendo que el hombre mayor le viese con presunción.
Roddy: Todo esta prefabricado y la pintura estará seca para las 3, niña -dijo con un tono desafiante en lo que Rosa sonrió con picardía.
Rosa: Excelente, llame al señor Krei solo si tienes alguna otra pregunta o te metes en algún problema -dijo dándole una tarjeta al hombre antes de darle la espalda.
Roddy: Entendido, por cierto... ¿no eres muy joven para trabajar en asuntos de una multinacional como lo es Krei Tech de este modo?
Rosa: ... Si, si lo soy -dijo para luego salir de la oficina.
Al mismo tiempo que con cierta desconfianza, Roddy tomo su celular y comenzó a marcar el numero que se le fue dado.
(Al mismo tiempo en la casa de Crazy Land)
Marco: A ver si entendí. Entonces la razón por la que Rosa nos ayuda es porque cuando recién empezó a vivir con Héctor él la llevo al parque acuático y porque un idiota se lanzo con grasa de cerdo por todo el cuerpo por el tobogán de agua para ir más rapido... ¿este quedo engrasado y Rosa que fue la siguiente salió disparada hasta la tienda de bebidas del parque? -pregunto divertido recapitulando lo que la prima de su amigo había revelado.
Miguel: Si, y luego de que el viejo le metiera una paliza al idiota, le prohibió a Rosa volver a siquiera ver un tobogán, ahora guarden silencio los dos o no escuchare... -dijo con celular en mano.
Para que luego este comenzara a sonar de golpe.
Miguel: Justo a tiempo -dijo contestando y haciendo una voz más superficial- Oficina de Alistair Krei... ¿Judy? Se enfermo, soy su reemplazo... Si, ajá, un momento por favor -menciono para luego darle el celular a Leo- rápido, has tu imitación de Krei.
Leo: ¿Qué? Yo no tengo ninguna...
No pudiendo acabar lo que iba a decir cuando Marco sin pensárselo dos veces le piso el pie.
Leo: ¡Hijo de...! -dijo antes de que solo hiciera una voz más gruesa que sonaba sorprendentemente parecida a la de Krei- Hola, aja... sí, justamente eso quiero, mueve ese foro al hogar de los chicos ahora... bien, no tengo todo el día, debo contar de nuevo mi dinero para saber lo rico que soy -declaro para luego colgar.
Momento que sus dos amigos aprovecharon para celebrar.
Miguel: Paso 1, listo.
Leo: Si, si, sí. Yo no celebraría antes de tiempo, lo único que hiciste fue buscarnos problemas.
Marco: Vamos Leo, no esta bien que siempre estes asustado por todo -dijo haciendo que el otro chico frunciera el ceño.
Leo: No estoy asustado, soy realista, hay una gran diferencia -se quejo antes de soltar un suspiro- de cualquier modo ¿ahora qué? -pregunto en lo que tanto él como Marco observaban fijamente a su amigo y líder.
De tal modo que la espera los inquietaba, ansiosos por saber cuál sería el siguiente paso de este gran plan maestro que los sacaría de la miseria que era el cuchitril que era su hogar actual, la siguiente fase de esta gran proeza, siendo la respuesta de este...
Miguel: No tengo la menor idea.
Respuesta que hizo que ambos se fuera de espaldas al puro estilo anime sin pena alguna.
Leo y Marco: ¡¿Cómo que no tienes idea?!
Miguel: ¿Pues que quieren que les diga? De hecho no pensé que llegaríamos tan lejos -dijo con sinceridad antes de ponerse a pensar- bien, el viejo nos seguirá el juego sin pensarlo mucho, pero la que si nos debe preocupar es la decana de la universidad, la tal Granville, por lo que he investigado, será un problema.
Leo: Es verdad, yo también la investigue, y si queremos hacerle frente a esa mujer, necesitamos a alguien que piense como ella, alguien que pueda meterse en su cabeza... ¿pero como conseguiremos a alguien tan inteligente, frio y hasta cierto punto malvado?
Marco: Yo se quien -dijo sacando su celular a la vez que ambos arquearon una ceja.
(Una hora después)
Miguel: ¿Es en serio? -pregunto molesto en susurros a su amigo quien solo se encogió de hombros mientras que Hiro estaba terminando de montar una presentación.
Marco: Vamos, solo porque te cae bien no puedes negar que el tipo es sarcástico desgraciado sabelotodo -dijo encogido de hombros.
Aunque justo antes de que una pelea diera lugar, Hiro se hizo escuchar.
El cual desde que convivio con el grupo por primera vez, rápidamente se volvió el primer amigo de los chicos en San Fransokyo al tener una edad similar, y sorprendentemente, por aparte de la inteligencia del prodigio en robótica y su actual posición como estudiante universitario, de hecho se llevaba bien con facilidad con los 3 chicos.
Eso y que en una ocasión charlando con sus otros amigos, se dio cuenta de que aparte de Megan y Karmi, no tenía muchos amigos de su edad, de hecho, ni un solo amigo hombre... no podía darse el lujo de perder a esos tres fácilmente.
Hiro: Primero, necesitaran más manos para lograr que esto sea posible. Ofrecería a mis amigos, pero están ocupados buscando empleo... excepto Fred, a él simplemente no lo llamo porque Granville lo ignorara y hasta creo que ella lo odia un poco -dijo pensativo antes de volver al tema- en fin, yo en lo personal recomendaría a Alto Voltaje por su falta de miedo y sentido del peligro -dijo mientras apuntaba con un palo a la proyección en la pantalla del monitor tamaño grande que trajo con él previamente.
A la vez que los 3 tenían gotas de sudor por lo serio que se había tomado esto.
Hiro: Ahora, pasemos a lo que necesitaran, yo sugiero algunas herramientas inalámbricas, algunos materiales falsos de construcción, frases de código geniales y...
Miguel: Espera chinito...
Hiro: Ya hablamos sobre esto ¡soy mitad japonés, ni siquiera uno entero!
Miguel: Si, pero te digo así de cariño chinito lindo -dijo haciendo al contrario rodar los ojos con fastidio- pero debo preguntar ¿de donde sacaste el monitor? Juraría que se ve igual a uno de los que Krei tiene para mostrar anuncios de sus productos en la recepción de la empresa -pregunto a la vez que Hiro solo se encogió de hombros divertido.
Hiro: De todos modos Krei solo vende cosas malas, le estoy dando un mejor uso -declaro sin pena alguna antes de que una imagen de Granville se mostrara en la pantalla- ella es la rectora de la universidad y la decana de mi carrera, la profesora Grace Granville. Una buena mujer, pero a veces si es capaz de poner un dominio de puño de hierro para que las cosas se hagan como ella quiere -explico a la que los 3 rodaron los ojos.
Marco: Pero que encanto -dijo con sarcasmo.
Hiro: En fin, ya que hablamos de ella, para que esto funcione, deben tenerla en su oficina todo el día. Pero para que todo esto funcione, a quien se debe de distraer para que no meta sus narices es a Krei, de eso me ocupo yo.
Miguel: Perfecto, y una vez que la remodelación del sueño adolescente este listo, el no podrá decir nada porque ya no habrá tiempo para mover las cosas ni nada.
Leo: Solo una pregunta... ¿Por qué nos ayudas, Hiro? No nos conocemos de tanto y bueno... Krei es tu jefe ¿no? -pregunto de repente haciendo que el mencionado se quedara pensándolo.
Antes de sencillamente guiñar un ojo.
Hiro: Lo cierto es que ustedes me agradan, y aunque le tengo algo de estima a Krei, no se puede negar que llega a ser un idiota a veces y hasta ahora él ha sido muy injusto con ustedes. Creo que se merecen algo por las malas pasadas que Krei les ha hecho hasta ahora... y quiero ser el primero en usar el tobogán -dijo sonriendo a la vez que los 3 se miraron entre sí.
Eso a Rosa no le iba a gustar.
Pero de cualquier modo decidieron dejar eso para después, ahora mismo tenían que planear contramedidas en caso de todo tipo eventualidad para el día de mañana, aunque tal vez porque todos estaban en sus cosas, fue que nadie noto que Miguel en ningún momento le quito el ojo a Hiro durante su estancia con ellos.
Miguel: ¨Solo... ¿Por qué no puedo dejar de verlo? ¨ -pensó para si mismo sin percatarse como un leve sonrojo se mostraba en su rostro, el cual fácilmente pasaba por alto gracias a su piel morena.
De cualquier modo, por el momento eso no importaba, había una casa adolescente que conseguir sin importar el costo.
_________________________________________________________
(Al día siguiente, zona verde del campus del ISTF, cerca del laboratorio de robótica Ito Ishioka)
Héctor: Muy bien, aquí esta el cheque por la locación y también por los respectivos permisos ¿Quién diría que se necesita firmar tantas normas para usar un espacio en una universidad? -dijo dándole el papel a una seria Granville que lo recibió cortésmente.
Granville: Ciertamente debo agradecer que se tomaran la molestia de hacer esto durante las vacaciones de los estudiantes, de lo contrario me abría negado rotundamente a algo como esto, las distracciones no son buenas para el alumnado.
Héctor: Si, si, si, sí, estoy completamente de acuerdo. De ser por mí ni la molestaría, pero sabe cómo es Krei -dijo en lo que ella no oculto el ceño fruncido por la molestia de solo oír el nombre.
Graville: Si, lo sé -dijo antes de arquear una ceja- ¿seguro que no me necesita para ayudarlo a supervisar?
Héctor: Más que seguro, mi sobrina y yo nos ocuparemos de todo, no queremos quitarle más tiempo -dijo no pudiendo evitar sonar algo nervioso al final por el modo en que la mujer lo estaba viendo.
Una mirada tan fría y penetrante que hizo que tanto tío como sobrina llegaran incluso a sudar frio de como esa mujer parecía estar leyéndolos solo con la mirada, causando una incertidumbre ciertamente agobiante. La cual, para fortuna de ambos, paro a los pocos minutos.
Granville: Muy bien, si me necesitan estaré en mi oficina, y de paso también monitoreare la construcción de la casa adolescente en el aula designada -menciono antes de retirarse sin dejar de ver a la pareja hasta perderse de vista.
Rosa: Que mujer. Me sorprende que no le coquetearas, tío.
Héctor: Sencillo, valoro mi vida -menciono antes de fruncir el ceño- por cierto, sigo diciendo que perfectamente pudimos hacer todo en el estudio y solo poner una foto de este lugar o algo, nos habríamos ahorrado tamaño poco de tiempo y de dinero.
Rosa: Vamos, la doctora Lolo se abría dado cuenta de que no era el instituto real.
Héctor: Ella es una mujer que vive en su propio mundo de casi 80 años que fácilmente ignora lo que no le importa, con decirte que ni siquiera a puesto un pie aquí desde que se graduó hace décadas -dijo fastidiado- como sea, ve a ver si los chicos están listos y no jugando o lo que sea... solo acabemos con esto.
Siendo en ese momento que ambos soltaron un suspiro que no sabían que tenían contenido. Solo para luego Rosa ir a juntarse con los chicos que estaban siendo arreglados por Chispas y el equipo de maquillaje y vestuario cuando Rosa recibió una notificación.
Rosa: La emperatriz esta en su trono y Alto Voltaje está en posición. Me sorprende que hayamos logrado convencerlas de vestirse de conserjes.
Miguel: Excelente, todos recuerden sus misiones -dijo mientras las del maquillaje daban los últimos retoques- Leo, tu y el viejo tárdense todo lo que puedan.
Leo: Entendido.
Miguel: Rosa y Marco, vayan al aula donde se supone que están construyendo la casota adolescente y háganle creer a Grandville que eso están haciendo. Mientras yo voy con Roddy y veo que se instale tanto el tobogán como el resto de esos grandiosos productos electrónicos -dijo en lo que todos asintieron.
A la vez que la voz de Héctor se escuchó a lo lejos.
Héctor: ¡Muy bien, Leo va primero! Después entrevistare a los demás.
Y ni dijo eso cuando del resto de la bola solo quedaron siluetas que se desvanecieron en el aire dejando unicamente a un obediente Leo que solo tomo asiento. Cosa que inmediatamente encendió las alarmas en el hombre.
Héctor: ... Ni voy a preguntar por que lo se. Es ilegal?
Leo: No tanto, depende a quien preguntes.
Héctor: Suena a que planean algo terriblemente peligroso y parcialmente ilegal... me gusta por donde va la cosa -declaro sonriendo- de cualquier modo, solo terminemos esto. Papá necesita su trago del medio día -dijo empezando la entrevista.
---
A su vez que esto pasaba, Granville, que debido a no tener mucho trabajo gracias a que no era periodo de clases precisamente. Fue que decidió ir a ver como iba la casa adolescente mientras se preguntaba cuando había contratado a dos conserjes rubias que por alguna razón no dejaban de seguirla... algo que olía mal, y no le gustaba nada.
Y ni loca iba a permitir que algo malo pasara mientras ella estuviera a cargo, ni hablar.
Granville: Bien, es aquí -declaro mientras planeaba abrirse paso por entrada al aula que se había ofrecido para el dichoso video musical, la cual de hecho era solo una bodega que hacia tiempo nadie usaba de todos modos y que estaba cubierta por una cortina y cintas de seguridad.
Aunque fue detenida cuando una Rosa con todo y casco de protección salía del interior del lugar con un letrero de guardia peatonal de alto.
Rosa: ¡Alto, alto, alto! ¿A dónde cree que va?
Granville: Como fue que tú?... No importa, sabe quien soy, señorita Rivera, vine a supervisar la construcción de la casa adolescente -dijo esperando que ya la dejaran pasar, cosa que no fue así.
Rosa: ¡No puede pasar, no esta usando casco! -tuvo que gritar debido a que desde el interior de la bodega se escuchaba bastante ajetreo y ruido de construcción- ¡es riesgoso! ¡Hacerlo sería ir contra las normas de seguridad de la institución! ¿y no quiere eso, verdad? -pregunto mirando fijamente a la mujer.
Aunque internamente se estaba riendo porque el dichoso riesgo era solo videos de construcción de YouTube puestos a máximo volumen y Marco golpeando una tabla con un martillo y haciendo sonar un taladro... ok, eso ultimo si era algo riesgoso, pero...detalles.
Granville: ... Supongo que tiene razón -dijo con cierta sospecha- iré por un café y más tarde verificare que la construcción de la casa sea llevada a cabo de forma apropiada -declaro antes de retirarse.
Mientras de paso era seguida por Barb y Juniper quienes le dieron un pulgar arriba a Rosa antes de perderse de vista. Sin notar el ceño fruncido de la mujer mayor.
Granville: Algo aquí me huele mal, y no me gusta. Es peor que esa sensación cuando la mascota de la universidad, el chico Frederickson esta por cometer alguna de sus famosas metidas de pata -dijo planeando ver como se colaba al aula bodega para ver cómo iba la construcción.
Cosa que fue notada por madre e hija quienes solo se miraron entre si antes de llevar a cabo su plan para distraer a la mujer.
Barb: Solo para confirmar, si los ayudamos los chicos nos incluirán en uno de sus videos musicales ¿no?
Juniper: Con todo y diálogos. Sin mencionar que nos dieron un bono para comprar ropa -dijo a la vez que ambas asintieron en señal de estar de acuerdo con lo que hablaban- ¿tienes la salsa de tomate, mamá?
Y de allí lo siguiente que paso fue que Grandville se regresara sobre sus pasos al escuchar lo que claramente eran gritos de terror, solo para encontrarse con la desagradable escena de sus nuevas conserjes cubiertas de una sustancia roja... que esperaba de todo corazón que no fuera lo que pensaba que era.
Juniper: ¡Estábamos limpiando el corredor cuando el aire acondicionado que instalaron cayo sobre nosotras! ¡¿Sabe cuanto mancha la sangre?!
Barb: ¡Iremos con nuestro abogado para poner una demanda! -dijo para que luego ambas salieran corriendo, siendo seguidas por una alterada Granville.
Granville: ¡No hay que llegar a esos extremos tan exagerados! ¡hablémoslo, solo no demanden! -dijo siguiendo al par- ¡no demanden!
Siendo todo visto por unos divertidos Marco y Rosa.
Ambos: Son buenas -dijeron antes de que el celular de Rosa sonara.
Rosa: ¿Diga? -pregunto cortésmente en lo que la voz de Miguel se escuchó.
Miguel: Si, hola, señor Krei, puede que tengamos un pequeño contra tiempo -dijo desde el otro lado de la línea antes de que Roddy le quitara el celular- ¡oye!
Roddy: ¿Krei? -pregunto a la vez que Rosa le dio el celular a Marco.
Rosa: Leo te enseño a imitar a Krei también ¿no?
Marco: Si, pero no creo que ¡me lleva la que...! -dijo luego de que la chica le pisara el pie para luego hacer una imitación casi perfecta de Kre- ¿diga?
Roddy: Si, bueno, verás, la habitación de la casa es muy pequeña, así que si quieres que quepa el tobogán tendremos que romper el techo ¿suena bien? -pregunto haciendo que Marco y Rosa se vieran entre si a la vez que Miguel por su parte ya estaba dando todo por acabado.
Pero ninguno de los dos Rivera se espero lo que paso a continuación.
Marco: ¡Si, derríbenlo!
Roddy: Justo eso quería escuchar -dijo antes de colgar.
Momento en que Marco vio que Rosa le miraba con total incredulidad.
Marco: Dicen que en la vida se deben tomar riesgos... espero que sea verdad.
Siendo justo allí donde sintieron un temblor que juraban que se produjo por Roddy derribando parte de la casa para hacer las construcciones que le pidieron y que se acabo escuchando por toda la ciudad. Esa era otra cosa del rey de las guaridas, cuando no tenía que hacer un trabajo en secreto, le gustaba ser lo más ruidoso posible.
Rosa: Mas te vale que tengas razón -menciono antes de notar que tenía al chico que encima que él era más alto que ella, igual ella lo estaba cargando al estilo princesa ya que literalmente el salto a sus brazos cuando tembló- por cierto... eres mas liviano de lo que pareces.
Marco: ... Solo por eso comenzare a ir al gimnasio desde hoy.
Rosa: Lo que digas -dijo divertida- por cierto, ¿en serio crees que eso llegue a funcionar en caso de que nos descubran? -pregunto señalando el hecho de que luego de que Granville se fuera, Marco cubrió la puerta de su lado con varias tablas- los robots de seguridad se abrirán paso como si nada.
Marco: No lo sé, usualmente funciona en las caricaturas -menciono en lo que ambos solo se encogieron de hombros.
_____________________________________________________________
De ese modo la tarde paso rápidamente, siendo un mal día en general para Grace Grandville. La mujer solo accedió a todo el asunto de las entrevistas por el donativo que industrias Krei estaba dispuesto a dar a la universidad para que fueran llevadas a cabo, pero en ese momento se estaba arrepintiendo profundamente de haber aceptado.
Luego del fiasco de las conserjes que al final resulto que estaban cubiertas de salsa de tomate y no de sangre, trato de volver rápidamente al set para comprobar que la casa adolescente se estaba construyendo apropiadamente. Solo para acabar siendo arrastrada por medio campus por nadie más que sus propias mascotas, las cuales por alguna razón parecían alteradas.
Solo para que luego de calmarlas, ya molesta, se topara con que en un corredor vacío vio una figura lúgubre acechándola, el ambiente se había oscurecido tanto que parecía una escena de una película de terror. Más que todo porque al otro lado se encontraba un sujeto vestido todo de negro, con un sombrero mexicano negro y ese brillo que...no, solo no puede ser.... ¡ni siquiera es real! ¡Se supone que es Estados Unidos, no México para que eso este aquí!
Recuerda haber leído sobre eso hace varios años durante el tiempo que estuvo fuera del circulo de la enseñanza.
Cuenta la Leyenda, que hubo un hombre que, por ambición, acabó mordiendo más de lo que podía masticar, nacido en una familia humilde, de padres que lo amaban profundamente, nunca pudieron cubrir todos sus caprichos, y a éste le hartaba que, aunque trabajaba de sol a sol, y llegaba hasta a dejar de comer para ahorrarse unos pesos, pero el dinero nunca era suficiente.
Así que, tras morir sus dos progenitores, contacto al Caído, quien a cambio de su alma le dio más riquezas de las que le alcanzaría una vida para gastar, al principio lo disfrutó, pero al cabo de algunos años, los vicios le acabaron pareciendo aburridos, y los falsos amigos, que sólo lo querían por su dinero, descorazonadores, y acabó dándose cuenta de que su petición era absurda en comparación a lo que dio a cambio.
Y su frustración se volvió miedo al comprender que su momento de pagar su parte se acercaba, intentó todo para alejar al Maligno, desde poner cruces, una capilla, e incluso intentó simplemente huir, pero el Rey de las Mentiras es un oponente que nunca pierde, y el joven codicioso acabó pagando su error, volviéndose por la eternidad el Intermediario del Diablo, encargado de hacer en su nombre los tratos con los mortales, y de cobrar su parte cuando llegase el momento.
El charro negro.
Grandville: ¿Y quien se supone que eres tú? ¿Algun villano con temática del charro negro? Intimidante, lo reconozco ¡pero no me das ningún miedo! -dijo antes de verlo fijamente- espera un momento... ¿San Juan?
Lo cual fue lo ultimo que dijo antes de que el chico la atara con una soga que le lanzo al puro estilo de los vaqueros para luego encerrarla en el armario del conserje a un lado del pasillo.
Leo: Je, y Nando dijo que esas clases de cowboy eran perder el tiempo... ahora a devolver el caballo al parque -dijo antes de salir corriendo.
Momento que fue la gota que colmo el vaso para Grandville, era obvio que esos chicos, no... que esos vándalos estaban haciendo alguna travesura lo bastante grande como para querer tenerla al margen ¡y eso sería sobre su cadáver, no en su universidad!
De allí que una vez decidió que era momento de mostrar empoderamiento femenino, lo que hizo fue derriba la puerta de una patada para luego dirigirse al lugar de la construcción de la super casa adolescente acompañada de los robots de seguridad del campus, solo para que una vez la entrada fuera derribada. Lo único que se encontrara fuera a Marco y Rosa sentados como si nada saludándola con la bodega tal cual la había visto antes de que todo empezara, no había ninguna casa adolescente.
Grandville: ... Oh no...
_____________________________________________________________
(Media hora después, casa de Crazy Land)
Ni Grandville ni Héctor, ni siquiera Alistair Krei o Judy podían creer lo que estaban viendo, al final no hubo que interrogar mucho a los chicos debido a que ellos mismos estaban ansiosos por probar la que ahora era su nueva casa, al final habían descubierto a donde había terminado la casa adolescente.
Héctor: Lo admito, esto no lo imagine ni de lejos -viendo boquiabierto a los chicos disfrutar el lugar junto a los demás adultos.
A excepción de que Roddy Blair, él estaba complacido con su trabajo.
Roddy: Quedo muy bien ¿no? -sonriendo satisfecho- además, todo fue reforzado a nivel industrial, ni un terremoto podría mover nada de aquí, esto lo digo por el temblor de la semana pasada.
Judy: Entonces podemos olvidar guardar o devolver las cosas cuando termine la grabación -dijo algo impresionada del ingenio de los chicos delante de ella.
Alistair: Pero yo... esto no fue lo que pedí, yo... esto... -dijo mirando a Judy en busca de una solución, la cual solo negó.
Judy: Ya escuchaste a Roddy, no hay modo de mover las cosas de aquí, aparte de que no tenemos tiempo para esto y menos para buscar como llevar todo esto al estudio designado -dijo ajustando sus gafas- y el video debe ser grandioso para su madre o puede que hasta nos saque del negocio hasta a nosotros.
Grandville: ¡Ellos me ataron e hicieron daño a mi institución! ¿Qué con eso?
Judy: ... ¿Un cheque por mil dólares y asunto olvidado? -pregunto a la mujer que solo miro el papel antes de tomarlo en plan ¨lo acepto, pero me ofende muchísimo¨.
Y por su parte Krei estaba al borde de un colapso por una sencilla razón, lo había desafiado abiertamente y se habían salido con la suya, le habían visto la cara y el no tuvo la ultima palabra al final. Desde temprano había sospechado que algo estaba pasando, pero su pasante se había empeñado en distraerlo, y ahora que lo veía bajar del tobogán junto a la sobrina de Héctor fue que lo dedujo fácilmente, se habían confabulado.
Cosa que por lo general no le importaría, pero había un detalle que era pequeñito, pequeñito pero muy, muy importantito. Su madre estaba involucrada en el asunto, y si había algo a lo que Alistair Krei le tenía pánico, era a decepcionar o hacer enojar a su madre.
De allí que, sin nada más que hacer, todo lo que hizo fue agarrar a Miguel de los hombros y gritar con toda la colera que sentía.
Alistair: Iluminen y... ¡GRABEN!
___________________________________________________________
(Al día siguiente, mesa ejecutiva de Krei Tech)
Héctor: Vamos amigo, cálmate, al final hicimos cosas grandiosas ayer. Tenemos las grabaciones de las entrevistas y el video musical en la casa adolescente, relájate -dijo tratando de animar a Krei.
Quien en respuesta, solo presiono un muñeco antiestrés con tal fuerza que lo acabo explotando.
Judy: Y ese es el numero cinco de esta mañana -declaro suspirando.
Alistair: Esperemos que mamá piense lo mismo... más te vale que esto acabe resultando, porque si no... nadie encontrara tu cuerpo -dijo haciendo que tanto Judy como el propio Héctor lo vieran de reojo.
Héctor: ... ¿Acabas de...? -iba a preguntar sorprendido.
Solo para que en ese momento la pantalla principal de la sala se encendiera, mostrando a una mujer que si le preguntaban a cualquiera, mentira que era una persona de la tercera edad. Los milagros de las cirugías plásticas y el boto ¿y esos eran ojos morados? Definitivamente debía ser inyección de tinta a la pupila... auch.
Una mujer adulta de cabello rubio que llega hasta la cintura. Conocida como una eminencia de la robótica en el viejo mundo, alabada en toda Europa, la doctora Lolo Krei.
Quien sin siquiera saludar ni nada, solo hizo un gesto con la mano, a lo cual su hijo rápidamente acato y comenzó la reproducción del video musical y las entrevistas. Donde puso atención más que todo a las declaraciones de los chicos.
Miguel (video): A cada nos gustan cosas diferentes pero igual nos apoyamos entre nosotros, nos gusta cantar y divertimos juntos.
Leo: Yo soy el inteligente del grupo, pero no se engañen, igual al procesador RCM de la nueva laptop micro XZ25 de Krei Tech.
Mientras que Marco, todo lo que hizo fue dar una sonrisa en plan de creerse modelo de revista. Cosa que hizo que Krei ya tuviera al cristo en la boca pensando en que tanta iba a ser la furia de su madre por esto. Siendo por ello que solo cerro los ojos esperando lo peor.
... Lo cual nunca paso.
Dra. Lolo: No soy una mujer de muchas palabras por lo general cuando no es mi familia o trabajo, por lo que lo dire simple y llanamente... me gustan los chicos, no fue una idea estúpida, mi pequeño Ali -dijo haciendo sonrojar al mencionado.
Alistair: Mama...
Dra. Lolo: Solo una pregunta. Que era esa idiotez del shampoo de caballo y los cepillos de inodoro ¿a que clase de idiota se le ocurrió eso? ¿Para que quisiera alguien esas tonterías? -pregunto fastidiada- Solo es el colmo que alguien pensara en algo tan simple, patético y desagradable como lo son esos productos ¿Qué tan perdedor tienes que ser para siquiera pensar que esas ideas funcionarían? De cualquier modo me tengo que ir, ya me enojé.
Y sin más colgó, sin notar que en ese momento la expresión en el rostro de su hijo era perfecta como para ponerla en un diccionario y que la misma fuera una descripción oficial de la palabra ¨tristeza¨. El cual solo se fue en silencio.
Judy: Pues... por mi parte debo decir que la doctora Lolo parecía muy complacida con Crazy Land... es la primera vez que la veo sonreír, bien hecho -dijo despidiéndose tío y sobrina antes de seguir a su jefe.
Para que luego tanto Héctor como Rosa se miren mutuamente antes de llegar a una decisión.
Héctor: Debemos deshacernos de él.
Rosa: Descuida tío, lo sabes, el solo cavo su propia tumba desde que decidió hacerle caso a su madre y hacer el dichoso video publicitario ¿Cuándo se lo decimos?
Héctor: Mañana, tampoco hay tanta prisa ¿Dónde están los chicos?
Rosa: Aún estrenando su casa nueva... sabes, me agradan, no son como otras bandas o grupos con los que has producido o lidiado -dijo haciendo que su tío solo se encogiera de hombros.
Héctor: Puedes decirlo dos veces.
________________________________________________________________
(Miguel Pov)
Al final no puedo creer que las cosas acabaran así de bien, mi primer plan alocado en San Fransokyo y resulto en todo un éxito. Nuevamente nos aseguramos nuestra permanencia en Krei Tech (algo que siento que será muy molesto si siguen insistiendo que hagamos eso cada tanto), teníamos casa nueva y Marco junto con Leo estaban felices.
¿Qué más le podía pedir a la vida?
Bueno, al parecer la vida pensó que no había sido premiado o castigado lo suficiente, aún no se como sentirme al respecto, ya que pasa y resulta que hacia un momento Hiro había entrado a mi habitación para ofrecerse a ayudarme a terminar de desempacar mis cosas (que sí, aún no había sacado todo porque soy algo haragán) y al terminar nos quedamos hablando... no arruines esto, Miguel Rivera.
Hiro: Sabes, debo decir que todo este plan loco tuyo acabo siendo algo muy divertido al final, aunque creo que se ganaron a la profesora Grandville como enemiga de por vida -exclamo divertido- aunque por mi parte... admito que un cambio de aires de vez en cuando no esta mal.
Miguel: Tú lo llamas cambio de aires, para mi y los chicos literalmente es nuestro día a día. Si supieras cuantas trastadas hemos hecho cuando en la escuela y el colegio -dije divertido antes de pensarlo- sabes, aún me sorprende que ya seas todo un universitario en vez de ir a la escuela como los demás ¿no te llegas a sentir como que, no lo sé, no encajas? -pregunte en lo que él solo se encogió de hombros.
Hiro: Si me preguntas, era en la escuela donde no encajaba, la escuela no es un lugar para gente inteligente, una perdida de tiempo si me lo preguntas. Sin ofender, claro -dijo lo ultimo apenado.
Miguel: Descuida, se que soy bruto, no tienes que ablandarlo chinito -dije haciéndolo enojar, cosa que de hecho me divertía- si te soy sincero, no extraño mi escuela para nada. Es más, al comienzo estaba muy emocionado por venir a vivir a esta ciudad... antes de que Krei viniera con todo el asunto de que solo teníamos 3 días y bla, bla,bla. Con lo contento que estaba, me sentía como en una excursión, lo cual me alegraba porque sería como la primera entonces -dije llamando la atención del nipón.
Hiro: ¿La primera...? ¿Nunca fuiste de excursión antes? Se que no soy quién para hablar, pero...
Miguel: Se suponía que debía ¿no?... Pero tuve que pasar -dije como si nada- fingía que estaba enfermo y me quedaba en casa. Tenía muchas razones para hacerlo, pero la principal, bueno... lo cierto es que en casa no gozábamos tanto de lo que es la libertad económica ¿entiendes? -dijo en lo que él asintió- y aparte de Leo y Marco, mis demás compañeros de clase eran unos cretinos así que pensé ¿Qué importa que no vaya?
Hiro: Créeme, conozco ese sentimiento muy bien -dijo haciendo una mueca que solo me hizo sonreírle de vuelta, algo me dice que él tampoco extraña a quienes fueron sus compañeros de clase antes de graduarse mucho antes de lo debido e ir a la universidad.
Miguel: Aunque eso sí, menuda paliza me dio mi mamá cuando se entero que me saltaba las excursiones.
Hiro: Supongo que es normal que un padre o en este caso una madre se enfade por esas cosas, mi tía es igual -dijo sonriendo divertido- yo mismo me gané un regaño más de una vez tanto por faltar a eventos como por... otras cosas -dijo en lo que yo arquee una ceja curioso.
Pero decidí no preguntar para no meterme en su privacidad... por ahora. Es oficial, cada vez llamas más mi atención, Hiro Hamada.
Hiro: ¿Tu mamá esta en México, no? He escuchado cosas sobre ese país gracias a mi amiga Honey Lemon -dijo antes de quedarse pensativo- México ¿eh? Me gustaría ir algún día.
Miguel: Me encantaría llevarte -dije sin pensar.
Antes de ambos quedarnos viendo a los ojos antes de apartar la mirada igual de sonrojados, de la incomodidad pienso yo ¿Cómo se me ocurre decir algo así como si nada? Primero conócelo bien al menos, Rivera.
Miguel: Pero, de cualquier modo, volviendo al tema -dije algo nervioso- aun así me enojaba que mi mamá me regañara por ese tipo de cosas. Ella sabe mejor que nadie cuanta falta nos hacia el dinero -dije haciendo un puchero- tenemos una tienda de zapatos artesanales, pero nadie compra de esos hoy en día. Los únicos clientes que van son los que buscan que les arreglen la suela del zapato o ha remendar algunas costuras mal hechas de sus tenis de marcas caras y eso. ¡Pero aun con todo, salí siendo un genio musical! -acabe con optimismo.
Hiro: Yo estoy similar, mi tía siempre tuvo su café, pero mi hermano y yo siempre nos fuimos más del lado de la robótica. Desde pequeño supe como comprobar el estado de cualquier máquina -dijo impresionándome.
Miguel: Eso de hecho es genial.
Hiro: ¿Pues que esperabas? Desde que tengo memoria crecí entre piezas de maquinas y herramientas, gracias más que todo a Tadashi pero sí. Recuerdo que cuando era pequeño tenía la costumbre de armar y desarmar todo lo que tenía a la mano, de hecho una vez agarre a mi gato y... -siguió hablando en lo que yo solo me quede pensando.
Supongo que es normal que sea así de inteligente, creciendo en esa clase de ambiente. Aunque ¿Quién será su hermano? La ultima vez que quise preguntar al respecto, solo se puso frio y distante para luego cambiar de tema. Es un asunto en el que decidí darle privacidad, pero en serio me mataba la curiosidad por querer saber más al respecto.
Hiro: ¡Lo siento! -dijo sacándome de mis pensamientos- a veces solo me pongo a hablar y presumir y acabo hablando sin parar -explico mientras se rascaba la cabeza apenado- no te he dejado decir casi nada.
Miguel: No te preocupes, de verdad. A fin de cuentas no había mucho que decir excepto que mi madre es una terca sin remedio y de todos modos a mi siempre me tocaba ayudar en la tienda -dije como si nada- si nos comparamos, de hecho no he sido más interesante de lo que ya soy desde hace poco.
Hiro: ¿Qué significa eso?
Miguel: Que antes de venir aquí y comenzar todo esto de volvernos una banda y así. No hacia mucho más aparte de ver la tele, jugar videojuegos y relajarme, poco más, poco menos. Si somos sinceros, comparado contigo no soy mejor a cualquier adolescente normal -dije algo apenado.
Solo para que el me diera una sonrisa que no parecía de lastima o condescendencia, sino una como de comprensión y empatía.
Hiro: Pues a mi me pareces muy interesante -dijo antes de pensarlo- que te parece esto. Hoy hablare de mí, pero la próxima vez que nos veamos, me tienes que decir algo de ti ¿esta bien?
Miguel: Pues no sé porque quieres saber de mí, pero esta bien -dije apretando la mano que el extendió ante mí.
Honestamente no se en que momento él y yo acabamos agarrando esta confianza, pero ciertamente no me molestaba pasar tiempo con él.
Miguel: Pues bien... la verdad aún siento que sea muy pronto para hablar más a fondo de nuestra vida personal, así que... ¿Qué tal si me hablas de algún programa o robot en el que estes trabajando? Seria genial.
Hiro: Ummm... bueno... -dijo pensativo antes de suspiro- ¿Por qué no? Actualmente como sabes, sigo siendo solo un pasante de Krei Tech, por esa razón Krei no me ha dado ningún trabajo real aún. Pero estoy trabajando en algo secreto, un proyecto personal que sigue en la fase de investigación... va a ser un programa bastante complicado que usara el sistema actual de los robots modernos como base. Sin embargo, no se cuanto pueda decir sin zafarme de lengua.
Miguel: Ah, claro, lo entiendo -dije algo decaído ya que de hecho si sonaba interesante- sería terrible si se filtraran lo datos o algo así.
Fue entonces que el me vio con el ceño fruncido ¿será que pensó que hable con sarcasmo porque solo estábamos nosotros dos? ¿o cree que lo acuse de no tenerme confianza? ¡Maldición, lo estoy sobre pensando!
Hiro: No es que no confié en ti, es solo que ya he tenido problemas antes donde se han acabado robando mi trabajo y pues... -dijo para luego suspirar- supongo que no pasará nada porque te de una pequeña pista... se puede decir que trabajo en algo cuyo nombre esta compuesto por dos vocales -dijo para luego retarme con la mirada a que lo pensara.
A ver ¿algo compuesto por dos vocales, y que tiene que ver con robots y todo eso? En realidad seré medio menso, pero creo que me la dejo fácil. Si mi tiempo viendo películas de terminator o de Transformer me sirvió de algo, puedo decir que...
Miguel: En lo que trabajas... ¿tiene que ver con una inteligencia artificial? -pregunto de forma inocente.
Y lo juro, la cara que me puso era una digna para tomarle una foto.
Hiro: ¡¿En serio lo descubriste?! ... será que igual di una pista muy fácil o solo te subestimé demasiado.
Miguel: Seguro que si... ¡oye ¿y eso que significa?! -pregunte fingiendo enojo antes de solo reír por como se incomodo el chino.
Siendo de allí que pasamos gran parte de la noche hablando, o mejor dicho, el dándome una conferencia sobre IA's fuertes o débiles, lo que compone una IA, su meta de querer hacer una IA que sea una que no se diferencia en nada a la mente de un ser humano porque si un tal Obake lo logro ¿Por qué él no? Y varias cosas más.
De las que no le entendí ni pico pero me alegraba verlo hablar sobre algo que le gustaba tanto.
Así paso el tiempo, siendo lo ultimo que recuerdo cerrar los ojos por el cansancio, sintiendo algo medio pesado acostarse encima de mí. No se que sea, pero se sentía... cómodo.
Pero si una cosa me ha quedado clara hasta ahora mientras caía al mundo de los sueños, era el hecho de ser consciente de que todo lo que he vivido hasta ahora, solo puedo decir, que era nada más que el comienzo... seguro Hiro se regreso a su casa, ya hablaré más con él otro día.
Hiro... de algún modo, siento que esta charla nos hizo un poco más cercanos. Pero, no se si eso será algo bueno o malo.
Notes:
Y eso sería todo esta vez. Como siempre pueden votar, comentar, lo que gusten.
¿Y que les pareció?
Este capitulo la verdad lo sentí como relleno (y de hecho se puede considerar como tal tomando en cuenta que tiene más de 10 mil palabras) Pero en si es base para lo que se viene, que prometo que dejara sorprendido a más de uno. Ya que creo que para esta altura deben saber que aunque la banda es importante, de hecho es una trama secundaria.
De cualquier modo, nos vemos luego.
Chapter 5: Capitulo 3: Debut de un ladrón de ensueño en grande
Notes:
(See the end of the chapter for notes.)
Chapter Text
(Miguel Pov)
Miguel: No mamá, no quiero ir a la escuela, 5 minutos más... no, espera mamá... ¡No, espera, no con la silla! -dije antes de despertar de golpe para luego soltar un suspiro de alivio- que bueno, era solo una pesadilla...
Vaya forma de despertar, aun no me acostumbro a que ahora puedo despertarme por mi cuenta en vez de recibir la ayuda de mi ¨cariñosa¨ madre. La lista de cosas que ha usado para despertarme a sido larga, desde tirarme de la cama a usar agua fría o de una chancla, y ni hablar de cuando se ponía creativa.
Pero de cualquier modo, era mejor levantarse ya, tocaba otro gran día de esta nueva vida mía... o eso pensaba, pero rápidamente me di cuenta de dos cosas, había algo pesado encima de mi que no me dejaba levantarme, y que tenía mi mano izquierda sujetando algo sumamente suave y redondo, no sabía que era, pero me estaba gustando la sensación. Solo quería seguir tocando y manoseando ese algo todo lo que yo quisiera.
Hasta que escuché un leve quejido que me hizo volver a la realidad y darme cuenta de la situación apenas abrí los ojos. Donde me encontré con una mata de pelo negro acompañado con un olor a aceite de motor mezclado con ositos de goma que me hizo acordarme de lo de anoche casi de que de inmediato... Me quede dormido escuchando la conferencia de Hiro sobre IA's, y al parecer Hiro también se quedo dormido.
Hiro estaba dormido encima de mi... le estoy manoseando el trasero a Hiro.
... Carajo.
¡Mierda! ¡Mierda, mierda, mierda, mierda, mierda, mierda, mierda! ¡Esto es malo! ¡Esto es muy malo! Literal es tan malo que hasta me parece escuchar una vocecita en mi cabeza, la cual tenía cierto tono de voz que me hacía imaginar a mi prima Rosa vestida de angelito como si tal cual fuese mi ángel de la guarda, hasta me la estoy imaginando en mi hombro y todo diciéndome:
Rosa-ángel: Quita las manos antes de que Hiro despierte, debes respetarlo y si se da cuenta de lo que haces ni quien te libre.
Cosa a la que por lo general haría caso al instante... pero pasa y resulta que casi no podía escucharla por otra voz más fuerte, una maliciosa y traviesa que me hacía pensar en mi papá vestido de diablo y con un megáfono, que de igual modo hasta lo imagine en mi hombro y todo diciéndome:
Héctor-diablo: ¡APROVECHA Y DATE UN ATRACÓN TACTIL CON ESE MANJAR, CABRÓN!
Y no es por ser un simple y débil adolescente hormonal igual al resto, pero entre el ángel y el demonio... el demonio estaba ganando la discusión.
Rosa-ángel: ¿No vas a escucharlo o sí?
Héctor-diablo: No le hagas caso, mijo. Ella solo busca guiarte por el ¨camino de la rectitud¨ -haciendo comillas- ¡yo te guiare por el camino de la acción!
Rosa-ángel: Oh vete al infierno.
Héctor-diablo: Y tu vete al cielo.
Rosa-ángel: ¡Tú!
Héctor-diablo: ¡Tú!
Rosa-ángel: ¡Tú!
Héctor-diablo: Tu primero -respondió casual haciendo enojar a la pequeña angelita- ahora escucha mi indeciso y guapo amigo, te voy a dar 3 razones para que la ignores y sigas disfrutando de este placer pecaminoso. Razón numero 1: Mírala, toca un instrumento ridículo de nerd.
Rosa-ángel: Otra vez con eso. Es un harpa, ya te lo dije, ignorante.
Héctor-diablo: Ay si, un harpa, claro... y trae vestido.
Rosa-ángel: Primero, soy mujer ¿así que a que viene eso? Y segundo, es una toga, torpe -reclamo solo para ser ignorada por el pequeño engendro del mal.
Héctor-diablo: Razón numero 2: Mira lo que puedo hacer yo -dijo para luego empezar a hacer flexiones con una mano.
Miguel: ... Ya me confundí ¿eso que tiene que ver con esto? -pregunté en un susurro solo para ser callado por el ángel.
Rosa-ángel: No, no -dijo observando a su opuesto- la verdad no lo hace mal para estar tan flaco.
Miguel: Ok, es todo -dije ya irritado- me están confundiendo, lo cual solo me esta estresando más de lo que ya estoy. Así que solo váyanse, arréglense ustedes -dije en lo que ambos me miraron antes de encogerse de hombros.
Rosa-ángel: Como quieras.
Héctor-diablo: Fresa -dijo para que luego ambos se esfumaran con un poof.
Hasta que al fin, ya con ellos ausentes ya puedo pensar mejor las cosas... en todo caso, viéndolo de cierto modo parece que tengo serios problemas con mi subconsciente para que este se manifieste de ese modo... meh, ya lo resolveré después.
De momento todo lo que tengo que hacer es quitar la mano suavemente y... ¡Me lleva la que...!
Miguel: ¡Ay wey! ¡Se me durmió el brazo! -dije sintiendo todo el hormigueo, supongo que es el precio justo por aprovecharme de Hiro, quien por cierto seguía profundamente dormido.
Vaya que el chinito tiene el sueño pesado ¿eh?
Miguel: Mejor me voy de aquí y lo dejo que se despierte solo antes de que las cosas se pongan incomodas -dije mientras me levantaba y miraba el teléfono celular.
Solo para sorprenderme al notar dos cosas, que eran más de las 9 de la mañana y que al parecer hoy los ensayos estaban cancelados por ¨asuntos de negocios¨... ¿Qué estarás planeando esta vez, viejo?
_____________________________________________________________
(General Pov)
Hay muchas cosas que se pueden decir acerca de Alistair Krei. Como que es una persona de alto perfil de una familia muy rica. Hay quienes afirman que incluso practicaba origami con dólares ya que siempre había muchos por ahí, pero su padre nunca le permitió doblar nada más grande que billetes de $ 50. Pero también a tenido tragedias en su vida, como que a pesar de ser rico, sus padres eran estrictos con él y no le permitían tener nada que "mostrara debilidad", incluido un conejito como mascota que él quería.
Asistió a un internado y durante cada verano cuando estaba en casa, sus padres lo enviaban al Campamento Fire Scout. Como no tenía muchos amigos y maltrataba a los pocos que tenía, tampoco celebraba nunca la Navidad. En cambio, el hombre pasaba su tiempo solo en el bosque aprendiendo sobre la supervivencia en la naturaleza. Gracias a su familia adinerada, Krei estudio en el Instituto tecnológico de San Fransokyo, graduándose como un alumno distinguido (aunque a puerta cerrada, fuentes como el ex - profesor Callaghan afirmaron que ignoró la ciencia sólida y tomó atajos para llegar a donde está actualmente).
Con todo, Alistair Krei se veía a si mismo como un tipo normal. Como diría la canción de Kenny Star, solo una persona normal de sangre roja que se pone sus pantalones de diamantes una pierna a la vez y que gusta de beber un buen café tostado colombiano (solo si fue traído directamente de Colombia). Alguien que busca baños tranquilos, que le gusta dormir hasta tarde y en la noche ¿Por qué no? Divertirse un poco.
Pero con todo, era alguien que pensaba que tenía la vida resuelta... hasta esa mañana en que entro en su oficina y todo se fue al demonio para él.
Alistair: Oye ¿qué haces aquí? -pregunto a nadie más que a Héctor Rivera que estaba acomodado como pedro en su casa con los pies subidos en su escritorio con su sobrina su lado- No sé si lo sabes, pero esta es mi oficina -dijo al hombre que ni se inmuto ante la actitud hostil del hombre.
Héctor: Uy ¿no te llego el memo? Que incomodo -dijo con un evidente tono falso de culpa- Pues temo diferir. Pero, no es así. Hay una nueva administración, amigo mío.
Krei: ¿Eh? -pregunto con clara incredulidad para diversión del otro hombre. Para luego torcer la boca del mismo modo que el Grinch cuando escucha los villancicos para dar el ejemplo.
Solo para que cuando estuviera a punto de empezar a gritar y exigir, el Rivera mayor levantara un dedo.
Héctor: Rosita.
Rosa: Si tío -dándole una copia de contrato a Krei- sección 8, artículo 47, párrafo 6. "Si la primera parte involucrada usa la imagen de la segunda parte involucrada sin consentimiento de la segunda parte para promoción de cualquier clase de artículo u aparato, entonces la primera parte voluntariamente accede a dar todos sus activos a la segunda parte sin posibilidad de apelación" -termino su explicación.
Mientras que por su parte Krei no entendió ni un cuarto de lo que dijo.
Krei: ¿Traducción? -pregunto sacándole una sonrisa maliciosa al hombre de piel morena.
Héctor: Como la primera parte, ósea tú, hizo un video promocionando toda su basura usando la imagen de mis muchachos. Entonces automáticamente nos acabas de regalar toda tu fortuna, bienes materiales y tu empresa. ¿Lo traduje bien, Rosita? -pregunto a la menor ignorando al hombre rubio que parecía un fantasma al escuchar esa declaración.
Rosa: Tan buen como tú puedes, tío -dijo con diversión.
Para que luego ambos vieran lo evidente, al hombre que hacía unos segundos era uno de los multimillonarios más importantes rojo de ira y usando todo de si para aguantarse y no acabar haciendo un berrinche digno de un niño de cinco años.
Alistair: ¡Malditos estafadores! ¡Vinieron desesperados a mi ¿y así es como me pagan?! ¡Ya verán cuando se enteren mis abogados! -declaro con severidad para diversión del dúo de tío y sobrina.
Rosa: Antes de que diga algo. Le recomiendo no meterse con nosotros, sabemos de algunas de sus acciones moral o legalmente cuestionables que podemos llevar a la corte. Por ejemplo: el robo de ideas, chantaje, extorsión y rompimiento de las leyes. Sin mencionar su falta de ética al lanzar productos que son poco eficientes a la hora de la verdad y que incluso son dañinos para la población ¿debo mencionar que toda la ciudad esta aterrada por sus camiones de basura?
Alistair: ¡Eso no es...! ¡Eso es...! -trato de excusarse en lo que su tono de rojo solo se hacía más notorio.
Héctor: Entiendo el asunto de que fuiste criado para no ser débil y que dios nos libre si admites estar equivocado y bla, bla, bla -declaro restando importancia al asunto- Krei, amigo, eres un maldito infeliz -dijo haciendo enojar más al tipo- y no importa cuanto dinero tengas o con cuantas mujeres duermas o cuantos autos, trajes y yates compres... ambos sabemos que en realidad, nada jamás llenara ese vacío dentro de ti donde debería haber algo.
Rosa: Es cierto, es un hombre vacío señor Krei -dijo encogida de hombros- bueno al punto, ya para hacerlo oficial -entregándole otro documento a Alistair que se lo quita de las manos con disgusto.
Alistair: ¿Qué es esto?
Rosa: Es su indemnización correspondiente al ya no ser socio de la empresa. Con un evaluó por impuesto de lo que técnicamente aun tiene, siendo ese numero de abajo el total de sus activos, señor Krei.
Alistair: ... Es un maldito 0 -dijo respirando hondo en un vano intento de tratar de calmarse- si ustedes creen que van a quitarme todo mi dinero están locos.
Héctor: No todo, solo lo correspondiente que aun quede luego de compensar a los socios y tus deudores. Por ejemplo la compañía a la que le compraste el Krei Pescador o el señor Mel Meyer a quien sacamos de prisión luego de pagar su fianza después de que usted lo hiciera arrestar.
Alistari: ¡Es un criminal que trato de matarme!
Héctor: ¡Luego de que usted le robara sus ideas e incumpliera su parte del acuerdo del trato que hizo con él! -respondió igual de molesto antes de relajarse- pero el asunto es que la mayoría de esas compensaciones se pagaron con tu indemnización, lo que explica que considerable reducción a $0 -dijo con una falsa empatía mientras se divertía con la incredulidad del hombre que solo revisaba los papeles una y otra vez.
Quien mejor dicho ya era consciente de que más que una broma, era un hecho que lo perdió todo y lo único que puede decir bueno al respecto, es que al parecer no tenían intención de mandarlo a prisión por los fraudes enumerados a lo largo de su carrera... que ciertamente eran bastantes.
Rosa: Mírelo de este modo, es cierto que se quedo sin empresa, sin activos y sin trabajo, pero al menos no ira preso porque se pagaron sus faltas a todos los que ha agraviado, aunque eso tristemente redujera las utilidades de la compañía un 20%... pero nos recuperaremos rápido.
Y allí fue donde Alistair reventó, esa fue la gota que colmo el vaso.
Alistair: No... No, no, no, no, esto no es cierto -declaro con enojo- es mentira ¡es mentira! ¡mentira global! ¡ES UNA MENTIRA! ¡NO ES CIERTO! -grito mientras saltaba y pataleaba como un niño pequeño al que le dijeron no por primera vez- tú Héctor Rivera no puedes ser una mente maestra criminal ¡eres un perdedor que no ha tenido éxito en 10 años! ¡Es mi dinero, es mi empresa!
Héctor: Pues... ya no lo es -dijo para luego ser sujetado del cuello por el rubio encabronado- Rosita, no lo hagas, ni él es tan estúpido -dijo deteniendo a su sobrina que estaba a punto de llamar a seguridad.
Alistair: ¡Tú no puedes engañarme a mí! ¡Eres un don nadie! ¡Entre tu y yo soy yo el de noble cuna! ¡Soy el crac, soy la estrella, soy el ídolo! -dijo para que luego Héctor se soltara su agarre de un manotazo.
Héctor: Y justo por eso es por lo que ahora me dedico a representar -dijo nada impresionado- el asunto Krei... Es que las estrellas se apagan, los cracs envejecen, los ídolos caen... los managers como yo, somos eternos -dijo con una sonrisa- tengo grandes planes, Krei. Y me estorbas, mejor vete en paz y dale paso a la siguiente generación. Por tu propio bien.
Diciéndolo de tal modo que al final Alistair Krei se acabó sintiendo atrapado y sin salida. Estaba acostumbrado a tener todo lo que deseaba, pero ahora se siente perdido y desesperado. La idea de tener que comenzar de nuevo desde cero puede ser abrumadora y desalentadora, en especial para alguien que no sabe hacer es al haber tenido todo desde que nació.
La sensación de haber perdido todo lo que había logrado puede ser devastadora. Aunque en algún momento tuvo la seguridad de que nunca le faltaría nada, ahora se siente vulnerable y desprotegido. El fuerte no tenia nada para probar que lo era.
Krei: ¡Pero no puede ser! Jodie revisa mis contratos! ¡¿Como fue que ella no lo vio?! -trato de alegar en un ultimo intento de al menos comprender como todo había terminado de ese modo.
Siendo la respuesta el observar como la mencionada mujer, tal cual como si solo la hubiesen invocado con el nombre, se abría paso por la oficina hasta colocarse al lado opuesto del que estaba Rosa a un lado de su tío.
Héctor: Su nombre es Judy. Creo que la conoces, ¿adivina quién es mi nueva asistente? Con el triple de salario -explico con una sonrisa maliciosa a la vez que ha Alistair Krei que se le caía la quijada de la incredulidad.
Alistair: No puedo creer esto... no me siento bien, se me esta acabando el aire ¡Jodie, deja de respirar!
Judy: No voy a dejar de respirar, señor Krei -exclamo de brazos cruzados- así como no voy a seguir aceptando sus órdenes, no más.
Alistair: ¡¿Cómo te atreves?! ¡Yo te di todo!
Judy: ¡¿Un trabajo como tu asistente sin un solo día de vacaciones en años con un salario mal pagado es darme todo?! -respondió claramente molesta- me parece que lo malinterpretas, olvidas con facilidad que si hasta hoy eras la personas más rica de toda San Fransokyo, fue unicamente porque yo estaba allí para arreglar tus errores... solía ser leal a ti, pero la familia Rivera me ha hecho entender que mi único error... ha sido malgastar mi tiempo siéndole fiel a la persona equivocada.
Alistair: Tú... -susurro con una voz llena de veneno- ¿Cómo pudiste hacer esto? ¿Cómo pudiste traicionarnos a todos y vender la empresa a alguien que ni siquiera la va a valorar como lo hago yo? -pregunto con odio solo para notar que la mujer ni se inmuto.
Judy: Lo siento, pero así son los negocios. A veces tienes que tomar decisiones difíciles. Yo también necesitaba una oportunidad para crecer -revelo con una mirada fría- tantas cosas se pudieron evitar si en su momento me hubieras escuchado, pero solo eres un arrogante que tiene el ego demasiado grande como para escuchar al resto. Solo porque me tratabas un poco mejor fue que deje pasar por alto todas las veces que me ridiculizaste o me diste ordenes o me obligaste a guardar secretos que no quería saber... comparado contigo, Héctor Rivera es mucho más hombre que usted.
Héctor: Hey, gracias -dijo complacido por el alago.
Judy: Y ni siquiera me haga empezar con todo el trabajo que hice para ti sin ser reconocida, sin nunca recibir una promoción en años. Siempre pedías más y más y nunca me dabas las gracias. Nunca me diste un día de vacaciones, al menos no por voluntad propia, nunca valoraste mi trabajo -siguió sacando todo lo que tenía dentro con enojo con suma indiferencia.
Alistair: Piensa en lo que estás haciendo Jodie, somos socios, tenemos historia -rogo en lo que trato de acercarse solo para que dos Buddy guardias aparecieran a ambos lados de Krei amenazándolo con sus armas- traidora... espero que sepas que lo que has hecho es lo más bajo que se puede hacer.
Judy: Viniendo de ti eso no significa nada ¡y mi nombre es Judy! ¡guardias, hagan lo suyo!
Siendo así el cómo los tres vieron como Alistair Krei, el anterior millonario más grande de la ciudad, solo se fue siendo sacado a la fuerza entre protestas y forcejeo por los Buddy guardias. Judy en quien él había confiado y a quien le había dado tanto poder, ordenó que lo sacaran con un rostro frío y sin mostrar rencor. Nada más que desprecio por el hombre que solo la vio como una maquina más.
A la vez que Krei no podía creer lo que estaba sucediendo, se hallaba desprotegido y a merced de la tecnología que él mismo había dado aprobación para desarrollar. Se preguntaba cómo había llegado a este punto, en el que una sola persona que él creía que era de confianza podía darle la vuelta a todo y dejarlo en la calle. Y como dos don nadie, lograron hacer eso posible.
De allí que su reacción final, fue actuar como el inmaduro que siempre fue.
Alistair: ¡Sé que esto no es todo, aún tengo la fuerza y la inteligencia para volver! ¡No crean que esto se acabó, todavía queda mucho por hacer! -grito mientras ya lo estaban sacando de la oficina- ¡Algún día volveré para cobrar venganza contra todos ustedes! ¡No dejaré que me derriben tan fácilmente! ¡Esto no se quedará así! -grito antes de que las puertas se cerraran de golpe.
Dejando la oficina en un silencio sepulcral antes de que el sonido de un encendedor diera lugar, para que luego el humo de un cigarro fuera notorio para ambas mujeres presentes.
Héctor: Vaya que se quedará así. En cuanto se dé cuenta que el mundo no es tan fácil para los que no son ricos, su mayor prioridad será sobrevivir... aunque dudo que eso pase -menciono encogido de hombros.
Judy: No me puede importar menos, luego de toda la gente que ha arruinado a lo largo de su carrera, merecía que se lo hicieran a él para variar -dijo antes de suspirar y ajustar sus gafas- avisare a todos los trabajadores que la empresa estará cerrada unas semanas para remodelación y reorganización por parte de la nueva administración, señor.
Héctor: Muchas gracias, puedes retirarte. Disfruta tu oficina nueva, y una vez des los avisos... tomate el día, vete a beber un café, ve una película, busca una cita. Tienes derecho -dijo guiñándole un ojo a la mujer que solo sonrió en respuesta.
Judy: Gracias señor, eso hare -dijo para luego retirarse dejando solos a tío y sobrina.
Con el primero solo tomando asiento nuevamente en la silla que solía ser de Krei antes de sencillamente disfrutar el momento.
Y es que después de haber robado la empresa con éxito, como nuevo jefe, Héctor se encontraba en su nueva oficina en silencio, saboreando el éxito de su engaño con satisfacción. Se sentía invencible y confiado en sus habilidades para liderar la compañía con ayuda de su nueva socia Judy y su siempre fiel mano derecha, Rosa.
Se permitió soñar en grande y trazó planes para el futuro, imaginando una empresa más grande y próspera, pero más que todo, capaz de producir más ganancias que podía usar para sus verdaderos objetivos. No obstante, al mismo tiempo, el mayor no podía evitar sentir una mezcla de ansiedad y emoción ante la idea de las responsabilidades que ahora tenía en sus manos. Pero a pesar de la presión, estaba decidido a no dejar que nada lo detuviera en su camino al éxito.
Ya había empezado con esto, ahora no hay marcha atrás.
Héctor: Sabes, Rosita. Se que no tiene nada que ver, pero ¿no te parece gracioso como la palabra humanidad ... su significado es sentir afecto, compasión o solidaridad hacia más personas... pero la mejor manera de describir a un humano es justo por la falta de esos valores? -pregunto en lo que su sobrina solo suspiro por dicha pregunta.
Y aunque Rosa se tomó un momento para reflexionar sobre la pregunta de su tío. Al final solo soltó otro suspiro de tristeza.
Rosa: Tienes razón, querido tío. La ironía es que la humanidad debería ser una cualidad que definiera a nuestra especie... Pero la verdad es que los humanos muchas veces carecen de compasión y solidaridad hacia los demás. Espero que algún día podamos cambiar eso y ser dignos del nombre que llevamos -dijo en lo que su tío sonrió.
Héctor: Por eso es en parte que hacemos lo que hacemos. Cuando probemos a todos que la magia es real, el mundo volverá a tener esa ilusión por lo fantástico, dejarán de ser tan escépticos y verán que la vida no es tan sombría como la sociedad o en si todos la hacen ver -declaro con determinación, sacándole una sonrisa a Rosa.
Rosa: Tienes toda la razón, querido tío. La gente necesita creer en algo mágico y maravilloso para superar la negatividad y la desilusión de la vida cotidiana. Y si podemos demostrar que la magia es real, tal vez podamos ayudar a que la gente recupere esa esperanza y esa ilusión... Pero debemos tener cuidado. No todos creen en la magia, y seguramente encontraremos muchos escépticos en el camino... ¿crees que Miguel esté listo?
Héctor: No creo, sé que está listo. Su gran debut como uno más de nuestro equipo será en un par de semanas, en ese tiempo lo prepararemos para hacerle frente a los escépticos de este mundo. Como los héroes de esta ciudad por ejemplo... no dejare que nadie se meta en mis sueños.
Rosa: Pero aunque Miguel tiene agilidad, reflejos y cuenta con dos talismanes...
Héctor: No pasa nada -dijo sonriendo al paisaje a través de las ventanas de la oficina- le enseñaremos... le enseñaremos a creer.
_________________________________________________________
(Time skip) (Dos semanas después) (de noche frente al museo de arte de la ciudad)
Cierta figura sombría había estado observando el museo desde el edificio de enfrente desde hacía un tiempo. Podía sentir la adrenalina corriendo por sus venas mientras se preparaba mentalmente para su primer gran robo. La emoción que sentía era palpable, pero al mismo tiempo, también sentía un poco de miedo.
Había sido preparado meticulosamente para esta tarea durante semanas, estudiando cada detalle del museo, planificando todo meticulosamente para asegurarse de que todo saliera a la perfección. El sonido de su propia respiración parecía ensordecedor en su cabeza mientras se concentraba en el momento, listo para hacer su movimiento para ayudar a su padre a obtener lo que desde hacía tanto tiempo había soñado, pruebas de que la fantasía es una realidad.
Miguel: ... Pueden creer que eres alto siendo bajo, que puedes ser fuerte sin serlo -dijo memorizando algunas de las lecciones que su tío y su prima le habían dado los últimos días- pero una debilidad solo existe si así lo crees -recito mientras se capa era ondeada por el viento frio de la noche.
Su vestimenta fue una idea en conjunto tanto por su Héctor como por sus amigos Marco y Leo. Un atuendo elegante que además de verse bien, tenía varios trucos bajo la manga, habiéndose inspirado en cierto personaje de ficción, Kaito Kid. Aunque Rosa comento que el color del traje le recordaba más a Tuxedo Mask de Sailor Moon, de allí que también se decidiera usar un antifaz. Por mi parte solo diré... que me veo bien.
(imaginar moreno y con algo más de musculo, o si alguien gusta hacer un fanart, aún mejor jaja)
Como dijo su padre: ¨Antes de pasar a la lucha sin sentido se debe de impresionar al enemigo, si lo engañas con tu apariencia, abras ganado media batalla¨.
Miguel: Bien... es hora -dijo antes de solo saltar.
Para luego solo usar una pistola de gancho escondida en una de sus mangas para de ese modo columpiarse en uno de los alumbrados públicos y así aterrizar con éxito en la azotea del museo. Donde ya tenía una entrada libre por un ducto de ventilación que sus amigos habían saboteado la tarde de ese mismo día.
De allí que una vez dentro, lo que hizo el aspirante a ladrón fue quedarse maravillado por las diferentes exposiciones que se encontraban en el interior del museo. Había esculturas, antigüedades, pinturas y objetos de valor por doquier, y todos irradiaban una belleza y un valor incomparables. Todo parecía tan surrealista, como si estuviera en un mundo diferente.
Su mente divagaba mientras pasaba por cada pasillo, analizando qué objeto es el que más tentador era para robar, pero él ya sabía que era lo que debía robar, algo que comparado con todo lo que había allí, era el santo grial escondido entre un montón de basura vieja. A medida que la emoción se apoderaba de él, sin embargo, también se sentía cauteloso. Sabía que cualquier paso en falso podía ser su fin, pero al mismo tiempo, la promesa del éxito era demasiado grande para resistirse.
Miguel: Muy bien, hagamos esto -dijo mientras se paseaba por los pasillos- Ahora, si fuera una piedra mágica ancestral ¿en dónde me pondrían?
A la vez que como si el mismo universo estuviese conspirando a su favor, es que encontró una sala de cultura china con el nombre de ¨la gran exhibición de la gran serpiente¨.
Miguel: Gracias universo -dijo sonriendo y entrando al salón antes de recordar lo que le dijo Héctor y usar un aerosol, revelando los láseres- alarma laser ¿es en serio? Entiendo que para muchos estas cosas son caras, pero en lo personal para mi solo son cosas viejas -dijo antes de tocar el comunicador en su oído- oye R ¿Qué propones? -pregunto sabiendo que su prima estaba viendo todo a través de las cámaras de seguridad.
Rosa: No lo sé... ¿Qué opinas del disco?
Miguel: Si, soy ambivalente ¿Por qué preguntas? -dijo en broma antes de dejar caer una canica de su bolsillo.
La cual apenas toco el suelo se expandió hasta tomar la forma de una bola disco en la que el joven de traje elegante se subió sin pensarlo dos veces- dale.
Siendo en el momento en que dijo eso que por su comunicador escucho música retro a la vez que se abría paso entre la alarma laser, con la capacidad reflectora de la bola disco apartando con facilidad los láseres infrarrojos hasta llegar a su objetivo sano y salvo. Una vitrina de cristal con una piedra muy especial en su interior.
Miguel: Si tuviera un afro ahora mismo juro que me sentiría como una fiesta de los 70 -menciono divertido- en serio que son muchas molestias para proteger cosas que la mayoría ni querría.
Rosa: Eso es porque esas ¨cosas viejas¨ en conjunto pueden valer más que la mansión de mi tío -dijo en lo que el chico solo se encogió de hombros.
Miguel: Si tú lo dices. En todo caso, eso es lo bueno del arte, todo el mundo puede opinar porque piensan que es basura -menciono antes de fruncir el ceño- aunque no te mentiré, eso que acabo de hacer fue genial, lastima, ojalá alguien lo hubiera visto.
???: Yo lo vi -respondió una voz que lo sobresalto a la vez que corto la conexión con Rosa.
Momento donde se da la vuelta para encontrarse con un grupo de 6 que acababa de hacer acto de aparición. Era obvio que se trataban de los dichosos héroes de San Fransokyo, y su primer contacto con ellos fue muy impactante.
El chico del traje morado parecía ser el líder de este grupo, con una aparente actitud confiada que delataba una gran inteligencia y una mentalidad fuerte, el capitán encanto.
Mientras que la chica del traje rosado irradiaba mucha energía y vitalidad, ella era la Chica alta.
El gran robot de armadura roja, aunque impotente a simple vista, en realidad se veía muy amistoso, con su gran tamaño y su voz tranquilizadora, ese era el Panda rojo.
El del traje de monstruo era el más excéntrico de todos, con su gran traje y su energía por todos lados, vaya que Salta llamas.
Mientras que los de trajes verde y amarillos parecían serios y listos para la pelea. Chop Chop y Reina Veloz no se andaban con juegos al parecer.
De repente se encontró rodeado por el equipo de los grandes héroes y no sabía cómo reaccionar. Pero sabía que si no encontraba una forma de escapar pronto, se metería en problemas graves. Aunque fue justo en ese momento que recordó otra de las lecciones de su padre y sonrió para luego fingir incredulidad.
Miguel: Oh no... ¡Los power rangers! -dije hacienda que me vieran fastidiados, lo cual era mi intención.
¨Nunca muestres que tus enemigos te intimidan, ellos no te conocen, no dejes que te conozcan. Jamás se debe ceder el terreno alto, sin importar que suceda¨.
Go Go: ... ¿Es en serio? -pregunto fastidiada la chica de amarillo.
Hiro: Ahora en verdad quiero encerrarlo, espera ¿qué estás haciendo? – pregunto el de traje morado viendo al sujeto echar pegamento en sus zapatos.
La razón de esto es que Miguel sabia de algunos de los encuentros que tuvieron estos héroes en el pasado. Como por ejemplo de la vez que se enfrentaron a la ladrona Momakase por una maquina antigravedad. Y como recomendación de Rosa, si hacía pasar la magia por tecnología que ellos ya conocían, aun mejor.
¨La gente a simple vista te tomara como una broma, no esperaran que pelees sucio, usa eso a tu favor¨.
Miguel: Solo no quiero salir volando, desde ya lo digo, sin rencores -dijo para que luego, de repente todo en la habitación comienza a flotar menos el propio Miguel, incluyendo a los héroes.
Wasabi: ¿Qué rayos? -pregunto espantado el de verde.
Hiro: ¡¿Otro ladrón que logró robarle a Krei la tecnología antigravedad?! ¡Baymax, puño cohete! -ordeno al robot rojo.
El cual obedece y dispara el ataque sin chistar, solo para acabar destruyendo el vidrio que protegía el talismán.
Miguel: Oye ¡gracias, amigo mío! ¡Me ahorraste trabajo! -dijo antes de hacer una reverencia y tomar el talismán.
Para que justo en el momento en que toma dicha piedra se active, volviéndolo invisible y sorprendiendo a sus adversarios que no sabían lo que acababa de pasar.
Miguel: Bueno, fue un placer enfrentar a los Power Rangers, pero tengo cosas que hacer, personas que ver, cosas que robar ¡juguemos en otra ocasión! -dijo para luego irse del lugar.
Siendo cuando se va que todos caen de bruces al piso.
Hiro: ¡Esto no se queda así! -declaro mientras se levantaba claramente molesto en lo que sus amigos se reponían.
Wasabi: ¿Vamos a ignorar que se volvió invisible? -pregunto aun procesando que un ladrón novato los acababa de dejar en ridículo.
Honey: La ropa que usaba debía tener tecnología de pantalla flexible
Fred: ¿Como la de mi traje de Fredmaleón? -pregunto en lo que la rubia asintió.
Go Go: Y al parecer Hiro debe estar seguro de cómo rastrarlo porque se acaba de ir -dijo para luego señalar que justamente tanto Hiro como Baymax ya no estaban.
Haciendo que todos suspiraran colectivamente antes de decidir seguirlos.
En lo que, por su parte, después de robar con éxito el antiguo talismán, Miguel se sintió emocionado mientras corría por los tejados para escapar de los héroes. Aunque en cierto modo sabía que lo que ha hecho es ilegal, también era consciente de que se sentía vivo y emocionado por el acto del robo.
Sin embargo, también admitió que sentía cierta culpa o remordimiento por su acción, sabiendo que ha tomado algo que no le pertenece. En general, el aspirante a ladrón estaba experimentando una mezcla de emociones contradictorias mientras huía con su botín, sabiendo que ha logrado algo increíble pero también consciente de las posibles consecuencias de sus acciones.
Aunque honestamente no le importaba, era magia real de lo que estábamos hablando aquí ¡al carajo lo que es correcto o lo que no!
Miguel: Invisibilidad ¡Menuda habilidad! Esto me hace sentir como un super héroe o algo así –exclamo en lo que estaba corriendo de edificio en edificio con el poder del gallo y el gancho en su muñeca.
Cuando de repente por puro reflejo de esquivar rocas mientras hacía parkour en las calles de ciudad de México fue que esquivó con éxito un puño cohete cortesía de cierto robot rojo con un chico de traje morado en su espalda que lo estaban siguiendo.
Miguel: ... Y aquí corro -exclamo antes de acelerar el paso- nunca te rindes, eso es de admirar la verdad.
Hiro ¡No puedes escapar!
Miguel; ¡¿No tienes nada mejor que hacer, Power Ranger morado?! ¡La noche es joven, busca una chica! (corriendo) A menos que tú seas de otros gustos, no juzgo -menciono divertido, a lo cual respuesta fue el puño cohete otra vez- ¡jaja, fallaste!
Hiro: No subestimes mi tecnología, ladrón. No te dejaré escapar tan fácilmente. -respondió, con tono serio mientras que Baymax volaba cerca del ladrón.
Miguel: Vaya, vaya, chico inteligente. Pero no te preocupes, no te quitaré tu preciado tiempo más -dijo serio, sacando el talismán robado de su bolsillo y mostrándoselo al gran héroe de traje morado- ya cumplí con mi misión, ahora me iré a disfrutar del resto de la noche, a fin de cuentas, la noche es joven.
Hiro: Eso no te exime de tus acciones ilegales. Deberías entregarte a las autoridades y enfrentar las consecuencias de tus actos -sugirió, con firmeza y convicción en su voz.
Miguel: Jajajaja eres muy gracioso -dijo divertido- crees que me vas a convencer con tu discurso moralista, ¨héroe¨. No pierdas tu tiempo. -respondió con una sonrisa socarrona antes de saltar a otro tejado y desaparecer usando el talismán de la serpiente.
Cosa que Hiro no iba a dejar que pasara en lo más mínimo.
Hiro: ¡No escaparas tan fácilmente! ¡Baymax, escanea! -ordeno al robot que rápidamente paso a hacer lo que le habían ordenado para fastidio del moreno.
¡Eso debería ser trampa! No es justo que los héroes tengan trucos así. Deberían dejarles las cosas más fáciles al menos a los ladrones, sean mas justos.
Miguel: ¿En serio usas trucos como ese? Los héroes siempre deben tener algo bajo la manga ¿no es así? -pregunto fastidiado.
Baymax: Localizado -exclamo el robot señalando con el dedo al chico invisible para frustración de este.
Hiro: Ahora sí -dijo para luego, sorprendiendo al moreno, saltar encima suyo para luego ambos rodar por todo el tejado.
Hasta que las cosas terminaron en que Hiro termino encima de Miguel quien estaba medio adolorido por el impacto (aun teniendo el talismán del buey que le daba mas masa muscular haciendo que fuera más difícil reconocerlo de su aspecto civil)
Miguel: Debo admitirlo, eres tenaz... -menciono algo aturdido antes de quedarse pensando- un minuto... esta sensación la conozco de algun lado -susurro en lo que le apretaba el trasero al héroe encima suyo aprovechando que su mano termino justo allí.
Hiro: ¡Oye! -prácticamente chillo avergonzado para diversión del otro chico. Sacándole una risa de diversión por lo bajo.
Ya que estaba convencido, esa sensación la sentía familiar, más que eso, esa retaguardia la reconocía y sabia justamente de dónde.
Miguel: ¨... Reconocería estas burbujas tan suavecitas donde sea...¨ -pensó divertido antes de sonreír con calma- lo siento, no pude resistirme –dijo apartando al otro chico antes de tomar distancia de él y su robot- pero en serio, eres un buen héroe. Tal vez podríamos trabajar juntos en el futuro -propuso, con una sonrisa astuta en su rostro.
Cosa que hizo que el otro chico solo lo viera con incredulidad, de tal modo que si no tuviera su casco de héroe puesto se vería en su cara tal expresión que sencillamente dice ¨ ¿habla en serio? ¨.
A la vez que Miguel por su cuenta sabia que no podría convencer a Hiro, porque si, sabía que era Hiro. Pero al menos intentaría lograr que bajara la guardia lo suficiente como para escapar, como diría otra de las lecciones de su padre y Rosa:
¨ El engaño en el campo de batalla no solo es una opción. Casi siempre es la diferencia entre la victoria y la derrota¨.
Hiro: No creo que eso sea una buena idea. Tú eres un ladrón cualquiera, y yo soy un héroe. Nuestras vidas no pueden estar más alejadas -respondió Hiro, con determinación en su voz- malos y buenos no se mezclan, es una simple conclusión -termino con seriedad.
Aunque dicho argumento no perturbo en lo más mínimo al chico de traje elegante.
Miguel: ¿Estás seguro? -preguntó acercándose al héroe un par de pasos- A veces, las cosas no son tan simples como parecen. Tal vez podríamos aprender algo el uno del otro. ¿Qué dices? -insistió con una mirada intensa en sus ojos. Pero su opuesto se mantuvo firme.
Hiro: Lo siento, pero no puedo confiar en ti después de lo que has hecho. Además, no creo que un ladrón y un héroe puedan trabajar juntos sin tener conflictos -dijo con firmeza- Pero si alguna vez necesitas ayuda para cambiar tu vida, podamos hablar al respecto. Eso es lo que hacen los héroes -añadió antes de extender su mano- devuelve la piedra... que ahora que lo pienso ¿Por qué robaste una roca? ¿Qué tiene de especial? -pregunto extrañado.
Logrando sacarle un suspiro de decepción a Miguel.
Miguel: Es un talismán, y no todo en esta vida es dinero o joyas, héroe. Y sobre tu propuesta, tal vez algún día encuentre mi camino. Pero mientras tanto, seguiré siendo un ladrón -murmuró mientras me daba la espalda- soy el ladrón Casanova, y pronto el mundo entero sabrá mi nombre, nos vemos -declaro antes de arrojar una carta de naipes con una función de sobrecarga electromagnética incluida.
La cual dio de lleno en el robot compañero de Hiro, tomando a este ultimo por sorpresa. Para que luego Baymax en unos pocos segundos comenzara a mostrar fallas, siendo lo primero que hizo sujetar con fuerza a su dueño.
Hiro: ¿Qué haces, Baymax? ¡Suéltame! -dijo solo para ser ignorado por el robot.
Quien solo desplego sus alas y mando a volar tanto al héroe de traje morado como a el mismo, todo ante la vista de un incrédulo Miguel que solo vio el resto de la baraja de sobre carga electromagnética con impresión.
Miguel: ... Que buenas cartas -dijo antes de caerle el 20.
El sabia quién era el líder de los grandes héroes, se trataba de su nuevo amigo Hiro Hamada. A quien acababa de mandar a volar junto a su robot a vete a saber dónde... oh carajo.
Miguel: ... Ay, no puede ser, ay no puede ser, ay no puede ser -dijo nervioso para sí mismo mientras se abanicaba con las manos para luego respirar hondo buscando calmarse- seguro estarán bien, digo, parece que hacen esto a menudo ¿no? -menciono antes de solo encogerse de hombros- es hora de ir a casa.
Siendo capaz de escapar sin que ninguno de los demás héroes pudiera seguirle el paso para frustración de estos últimos. Y eso era debido a que otra lección de su padre fue:
¨La lucha y las armas no son tus únicos amigos. El entorno puede ser tu aliado, conocer la zona como la palma de tu mano te dará la ventaja táctica¨.
________________________________________________
(Un rato después)
Y mientras Miguel se preguntaba si Hiro y su robot estarían bien, una sensación de culpa comenzó a invadirlo. Sabía que había actuado mal al robar el talismán y al atacar a sus dos amigos. Por un momento, consideró ir tras ellos para pedir disculpas y tratar de enmendar su error. Sin embargo, su orgullo y su deseo de mantener la fachada de ser reconocido como el mejor ladrón del mundo lo detuvieron. Pensó que sería un acto de debilidad pedir perdón, y que era mejor seguir adelante con su vida.
Además, dar marcha atrás sobre esto ya no era negociable. Oficialmente había empezado su debut como Casanova, el ladrón que es capaz de robar los corazones de todos con magia, y no iba a detenerse hasta conseguir los 12 talismanes y de ese modo ayudar a su padre a cumplir su sueño de mostrar al mundo que la magia es real.
Aunque aún sabiendo que no hizo las cosas con mala intención, no pudo evitar entrar a la oficina de su padre con cierto nerviosismo donde su padre y su prima lo estaban esperando.
Miguel: ¡JEFE, EL CHINO GREÑUDO LINDO ES UNO DE LOS GRANDES HÉROES! -grito a su padre quien estaba a mitad de una llamada.
Héctor; ¡Ahora no es buen momento! ¡No, No te lo decía a ti Imelda! -dijo para luego centrarse en el celular en su mano- ¡NO, NO TE ATREVAS A COLGARME!... Me colgó -dijo para luego suspirar en lo que tanto su hijo como su sobrina solo arquearon una ceja.
Miguel: ¿De nuevo discutías con mamá? -pregunto para la exasperación de su padre.
Héctor: Sigue considerándome un mal padre, ¿y qué si me confundí y en vez de la casa de su prima te mandé a un prostíbulo cuando eras pequeño? Cualquiera se equivoca, además, es agua pasada -respondió restando importancia al asunto.
A lo cual Miguel suspiró, sabía que su padre siempre intentaba minimizar los errores que había cometido en el pasado, pero eso no lo hacía sentir mejor. Decidió que era mejor cambiar de tema y hablar sobre su última misión.
Miguel: Viejo, quiero informarte que he obtenido el talismán de la serpiente.
Héctor: ¡Excelente trabajo, chamaco! ¿Hubo alguna complicación?
Miguel: Eso es lo que te quería decir -menciono algo incomodo- me topé con los que parecían ser los Power Rangers, ósea, los grandes héroes, ¡Y resulta que Hiro es uno de ellos! -dijo sorprendiendo tanto a Héctor como a Rosa.
Héctor: ¿Entonces ese chino desaliñado...? -se preguntó a si mismo mientras lo pensaba- Con que el chinito es el líder de ese grupo, es el único que coincide en altura con el dichoso capitán encanto de los grandes héroes... ¿Pero estás seguro?
Miguel: ¡Reconocería esos glúteos majestuosos que parecen hechos para caber perfectamente en mis manos donde fuera! -respondió orgulloso con un pulgar en alto.
A lo cual su padre solo se levanto de su silla antes de atrapar a su hijo en un fuerte abrazo.
Héctor: ¡ESE ES MI HIJO! ¡Igual de listo que su padre!... -declaro con orgullo y diversión antes de ponerse serio- Entonces ¿Qué hiciste con ellos?
Miguel: A la mayoría los perdí en el museo, aunque a Hiro y su robot rojo sin querer los mandé a volar, literalmente... ¿Crees que estén bien? -pregunto en lo que Héctor solo hizo un ademán de no importar.
Héctor: No te preocupes hijo, estoy seguro de que esos héroes están acostumbrados a ese tipo de situaciones -dijo calmando a la sangre de su sangre- lo importante es que obtuviste el talismán y que estamos un paso más cerca de cumplir nuestra misión. Pero ten cuidado la próxima vez, no queremos llamar demasiado la atención cuando se trata de los talismanes -sonriendo malicioso- aunque eso sí, al chino le deberás una serenata, un jardín entero un huracán de pasión para compensar lo de mandarlo a volar.
Siendo dicho comentario lo que le saco un suspiro a su hijo.
Hector: Pero eso por ahora no importa por el momento. Van 3, faltan 9... -dijo con emoción viendo el talismán de la serpiente dejado junto a los otros sobre el escritorio por su hijo- tu ve a descansar, mañana tienes escuela y luego de eso ensayo de armonías para la nueva canción que estoy escribiendo para la banda.
Miguel: ¿Ya tienes una nueva canción?
Héctor: Así es -dijo sonriendo- en lo que encontramos el próximo talismán, debes de mantener la fachada de adolescente que busca el éxito como estrella pop con su banda y yo el del mánager que solo busca que triunfen -dijo encogido de hombros.
Miguel: Entiendo. Haré lo que me pides, viejo -dijo antes de rascarse la cabeza algo incomodo- Pero no puedo evitar sentir que estamos engañando a la gente haciendo todo esto como si fuéramos criminales. ¿No deberíamos decirles la verdad sobre nuestra misión y pedir su ayuda al menos a los grandes héroes? -pregunto haciendo que tanto su tio como Rosa rodaran los ojos con algo de fastidio.
Ya que esa no era una opción. Los héroes estaban acostumbrados a hacer las cosas ¨correctamente¨, lo que casi siempre significa hacer las cosas a su manera con una disque moral superior que al final acaba con que los de ¨ambiciones egoístas¨ no obtienen nada de lo que por tanto tiempo han deseado y solo terminan con una lección moral que parece sacada de una galleta de la fortuna.
Gracias, pero no gracias.
Héctor: No podemos arriesgarnos a que nadie más se entere de nuestra misión, hijo -respondió con calma- ya hemos hablado sobre esto. Lo importante es que sigas concentrado en tu carrera musical mientras yo busco los talismanes. Juntos lograremos nuestro objetivo. Ahora ve a descansar, mañana es un nuevo día.
Miguel: Si padre -dijo aun algo decaído por lo que le hizo a Hiro, cosas que su viejo noto.
El cual tras meditarlo unos segundos solo gruño con renuencia antes de dar la mano a torcer. Pensaba decirle la sorpresa mañana, pero cuanto antes mejor al parecer.
Héctor: Sobre la discusión con tu madre -dijo llamando la atención de su hijo- no sólo se quejó de lo mal padre que soy, sino que, contradictoriamente, quiere que Coquito se quede con nosotros una temporada -dijo logrando que su hijo levantara la mirada al escuchar el nombre de su hermanita menor.
Miguel: ¿De verdad? -pregunto emocionado, sacando una sonrisa a su tío y a su prima.
Héctor: Sí, parece que Coquito quiere pasar un tiempo con nosotros y tu madre no tiene problema con eso. Así que tendremos que prepararnos para recibirla -dijo sonriendo- le dije que estábamos en esta ciudad y dijo que llegaría en unos días para entregárnosla -declaro con amabilidad- pero primero, concéntrate en tu descanso. Mañana hablaremos más sobre esto y sobre los siguientes pasos a dar a continuación... siendo el primero ¿te gustaría salir a almorzar afuera mañana?
Miguel: Eso suena bien -dijo con honestidad.
Héctor: ¡Así se habla! ¡Te ganaste un almuerzo de la mejor alcurnia! ¿Qué dices si tú, yo y Rosita mañana vamos a esta cafetería en una salida en familia? Escuche que es muy buena -mostrándole una foto en su computador.
A lo cual su hijo solo arqueo una ceja.
Miguel: ¿La cafetería el gato de la suerte?
Héctor: Exactamente, esa misma. Rosa te puede hablar mucho de ella -menciono señalando a la chica que asintió con una sonrisa.
Rosa: Sí, es uno de mis lugares favoritos. Me encanta su comida y el ambiente es genial. ¡Me alegra que hayas ofrecido ese lugar! -respondió con entusiasmo.
Miguel: Ya veo... no se porque siento que escuche el nombre en algún lado -menciono antes de encogerse de hombros- si ¿Por qué no?
Héctor: ¡Perfecto! Entonces mañana a la 1 pm nos encontramos allí. Ahora ve a dormir, hijo. Mañana será un día ocupado -termino la reunión con una sonrisa y un guiño.
A lo cual Miguel asintió, sabiendo que su padre tenía razón. Y aunque no estaba del todo convencido con el razonamiento de su padre y su prima, decidió seguir adelante con el plan. Después de todo, él también quería lograr el éxito con su banda así como ayudar a su padre a mostrarle a todos que la fantasía es una realidad.
De allí que lo siguiente que hizo fue despedirse de su padre para luego retirarse a su habitación en su casa para descansar. Donde llego sin hacer mucho ruido entrando por la ventana. Y mientras se acostaba, no pudo evitar pensar en la misión que su padre le había encomendado y en los riesgos que implicaba. Pero también sabía que era importante para él y que no podía fallar. Con esa determinación en mente, cerró los ojos y se durmió.
Notes:
Y así termina el capitulo de esta vez. Como siempre pueden votar, comentar, lo que gusten.
¿Y que les pareció?
Ya oficialmente se muestra como será la dinámica entre Hiro y Miguel. Amigos civiles, enemigos bajo la mascara y el traje ¿Qué les parece?
En fin, por ahora estoy con el tiempo contado así que solo diré ¡hasta pronto! (en serio, tratare de no mostrar tanta inactividad)
Chapter Text
(General Pov)
Hiro Hamada estaba completamente agobiado mientras intentaba desinfectar el sistema operativo de Baymax, que había sido infectado con virus. Se sentía muy culpable por lo que le había pasado al robot, ya que fue un ladrón quien les causó tantos problemas y provocó que Baymax se infectara con una seria carga de virus antes de hacer que ambos acabaran en un basurero. Pero aunque el problema parecía muy complicado, Hiro estaba empeñado en encontrar una solución y arreglar a su amigo cuanto antes.
Sabía que tenía que actuar rápidamente antes de que el virus causara más daño al sistema operativo de su amigo. A pesar de sentirse abrumado y ciertamente furioso por los acontecimientos de la noche anterior, la determinación del nipón de arreglar a Baymax y capturar al ladrón solo se hizo más fuerte. De allí que no durmiera nada y pasara la madrugada analizando cuidadosamente el código y probando diferentes métodos para eliminar cada uno de los virus, trabajando incansablemente hasta que finalmente había logrado que al menos el sistema principal de su amigo estuviera fuera de peligro.
Hiro: Ese desgraciado, mira que hacerte esto. Pero descuida, ya lo atraparemos luego amigo -dijo palmeando la cabeza del robot antes de suspirar cuando escuche a su tía llamándolo.
Es verdad, había olvidado que era su día de ayudar en la cafetería. Cosa de que la que sabía que no podía escapar sin de paso dar excusas absurdas que incluso podrían poner en riesgo su identidad secreta. De allí que solo suspiro profundamente antes de bajar... Solo para acabar siendo vestido con un delantal por su tía.
Hiro: ¿El delantal es necesario? -pregunto con un fastidio evidente que la mujer mayor decidió ignorar antes de darle una lista de tareas. Ya que por parte del nipón, usar delantal a la hora de ayudar a su tía no le gustaba... le hacia recordar como eran las cosas antes.
Pero al no tener otra opción, el menor solo suspiró mientras se ponía a trabajar, pensando en cómo podría continuar con su investigación para atrapar al ladrón que le había causado tantos problemas a él y a Baymax. A pesar de estar en un lugar completamente diferente, su mente seguía analizando el código y buscando pistas sobre quien podría ser este nuevo enemigo.
Siendo en ese momento donde se escucho la campanita de la puerta revelando la llegada de clientes.
Hiro: Pues ya que... -susurro antes de forzar una sonrisa casual al grupo recién llegado- bienvenidos al gato de la suerte ¿en que les puedo ayudar? -dijo antes de percatarse de que los recién llegados era la familia Rivera.
Don Héctor, Rosa y sobre todo su hijo, Miguel... genial, y el vestido con delantal.
Miguel: ¡Encanto! -dijo con algo de pánico antes de buscar calmarse- digo... encanto... verte de nuevo -dijo en lo que el nipón solo suspiro en lo que intentaba relajarse del mal genio que tenía.
¿Cómo no hacerlo cuando te sonreían de esa manera?
Esto sin saber que por su parte, el moreno estaba en verdad aliviado de que el nipón estuviera bien. No quería admitir que tuvo una mala noche de sueño pensando que de algún modo se había lastimado cuando tuvieron su altercado con sus respectivos alter egos.
Hiro: Hola, buen día ¿en que les puedo ayudar? -pregunto en lo que el patriarca Rivera arqueara una ceja.
Héctor: ¿Qué paso? ¿Mala noche? -pregunto ya sabiendo lo que había pasado pero de todos modos decidiendo meterse con el chico, haciendo que este gruñera por lo bajo.
Hiro: Tuve un problema con alguien que se tomó muchas libertades conmigo -explico en lo que el moreno más joven solo sintió como una gota de sudor bajo por su sien.
Cosa que a su padre le valió poco o nada.
Héctor: Ta veo... parece que lo suficiente como para no tomar un baño -dijo prensando sus fosas nasales con dos dedos- sin ofender, pero hueles como recién salido del basurero -dijo haciendo que el menor se sonrojara de vergüenza por eso.
Y es que con todo se le olvido por completo tomar una ducha luego de salir del basurero por culpa de un villano... por tercera vez. Más bien fue un milagro que su tía no lo hubiera notado.
Hiro: ¡Esas fueron las confianzas! ¡El desgraciado me tiró basura encima! -dijo en lo que el hombre mayor fingió pena.
Héctor: Entiendo... Espero que andes con mejores compañías a futuro -menciono para luego guiñarle un ojo al moreno menor- mi hijo Miguel aquí, estuvo esperando tu llamada toda la noche, y no lo llamaste -dijo haciendo que ambos jóvenes se sonrojaran.
En el caso de Miguel porque su padre lo haya dejado en evidencia así, y por parte de Hiro por haber olvidado por completo que había prometido al menos llamar a Miguel luego de no haberlo visto en semanas por todo el asunto de la remodelación de Krei Tech. Cosa de la que se estaba avergonzando ahora mismo ¿Cómo pudo olvidar llamar a este chico que en poco tiempo se hizo un buen amigo para él?... si, amigo.
Hiro: Disculpa, fortachón, me sentía con peor humor ayer y no quería arriesgarme a desquitarme contigo -dijo desviando la mirada mientras la familia tomaba asiento en una mesa.
A la vez que el moreno se extraño por ese comentario hasta que se acordó de que se había olvidado de quitarse el cinturón con el talismán del buey anoche. De allí que aun tenia la musculatura que el talismán otorgaba junto a la super fuerza. ¿Acaso Hiro pensaba que era cosa de puro ejercicio sin descanso las ultimas semanas o algo así? Fueron los pensamientos del mexicano.
Sin saber que justo eso era lo que pensaba el nipón, que ese cuerpo era parte de un entrenamiento simplemente inhumano creado por Héctor para que los chicos tuvieran el cuerpo digno de una banda.
Miguel: No... No importa -dijo restando importancia al asunto para luego darle el menú al nipón después de haberle dado una ojeada- yo... Quiero un poco de todo.
Hiro: ¿El costo de esos enormes pectorales? -pregunto con algo de humor para pena del contrario.
Miguel: Eh... bueno, no sé...-respondió tímidamente mientras Hiro sonreía divertido.
Héctor: Bueno, bueno, suficiente chicos. ¿Qué tal si pedimos algo de comer antes de que Hiro nos siga hiriendo los sentimientos a los demás? -dijo para evitar que la situación se pusiera más incómoda para su hijo, por muy divertido que fuera verlo- a mi tráeme mi café negro con un trozo de selva negra, gracias.
Rosa: Y ha mi un descafeinado con unos wafles con zarzamora -dijo la prima de Miguel, dándole el menú al nipón.
Quien solo asintió antes de retirarse para pasarle las ordenes a su tía mientras pensaba en como podría compensar al aspirante a cantante por haber olvidado llamarlo como había prometido. Mientras que por otro lado con los Rivera en la mesa donde se habían ubicado.
Miguel: ¡¿Cuál es tu problema?! -pregunto a su padre que solo se encogió de hombros con diversión.
Héctor: ¿Qué? -pregunto como si nada- sólo digo que es hasta tierno que ustedes se dan tantas vueltas, como bailando un vals -dijo para molestia de su hijo- además, admítelo, es divertido molestar a ese chico.
Miguel: No es divertido, papá. Me haces sentir mal cuando te burlas de mi amistad con Hiro -dijo haciendo que tanto su viejo como su prima arquearan una ceja en plan ¨ ¿Amistad¨, si ¿Cómo no? ¨.
Héctor: Lo siento, mijo. No quería herir tus sentimientos. Solo que me divierte verte tan nervioso alrededor de ese chico.
Miguel: No tengo nada que ocultar, papá. Hiro es solo mi amigo. Y es un buen amigo.
Rosa: Creo que todos en esta mesa sabemos que nos es verdad, basta con ver tus ojos de borrego a medio morir cuando lo vez -dijo para indignación de su primo.
Miguel: ¿Qué? ¡Yo no!... -dijo solo para ser interrumpido por su prima.
Rosa: Pero en todo caso, dime tío ¿es buen momento para hablar con Miguel sobre nuestra intención de hacerlo el chico malo de la banda? -pregunto haciendo que el moreno arqueara una ceja.
En lo que el padre del moreno sonrió de tal modo que hizo que su hijo sintiera un escalofrío, cuando el sonría así, no era bueno.
Miguel: ¿El chico malo?
Héctor: Seamos sinceros, mijo. La nueva canción de la banda es genial, lo cual es obvio, porque yo la escribí -dijo con algo de arrogancia- pero falta mucho para que la banda sea genial, y es que a ustedes les falta varias cosas, como por ejemplo, el ingrediente secreto de rock and roll. ¡El chico malo! -aclaro- el rebelde explosivo con talento para el baile sincronizado. Y uno de ustedes debe serlo, yo digo que seas tú -dijo haciendo suspirar a su hijo.
Quien pensaba que a la de menos esa era una desventaja de que el mánager de la banda fuera su propio padre.
Miguel: ¿Fue por eso por lo que no invitaste a Marco y Leo a venir? -pregunto mencionando sus amigos y otros dos miembros de la banda.
A lo cual tanto su padre como su prima asintieron al unísono... al menos intenten disimular ¿no?
Héctor: Exactamente, necesitamos trabajar en el estilo de la banda y tener una imagen más definida. Y tú, con ese estilo de chico bueno, no encajas en el papel del chico malo. Y el chico malo siempre ha sido una tradición del rock and roll -explico.
Para luego mostrar algunas fotos de álbumes de bandas famosas donde se veían a algunos tipos dando la espalda al resto del grupo o usan ropa oscura. Clara referencia a que si o si las bandas tenían un chico malo quisieran o no.
Rosa: Pero solo puede haber un chico malo por grupo. Como aprendimos en el experimento del 95 chicos malos -dijo mostrando una foto de toda una banda dándole la espalda a la cámara.
Héctor: No hace falta decir que ellos no vendieron ni un solo CD -explico haciendo suspirar a su hijo.
Miguel: Pero viejo, no me siento cómodo interpretando ese papel. No es quién soy, sin mencionar que ni mis amigos ni yo nos damos la espalda, jamás -aclaro en lo que su prima y su padre solo resoplaron, sabían que las cosas no iban a ser tan simples. Nunca lo hacían.
Rosa: Pero Miguel, piénsalo. Ser el chico malo te dará más libertad en el escenario, podrás ser más atrevido y experimentar más con tus movimientos.
Miguel: Lo sé, pero no creo que tenga que ser el chico malo para hacer eso.
Héctor: Entonces también te daré otro secreto del Rock and Roll. El chico malo suele ser el miembro más popular de la banda, es el que gana más dinero y es que sale con las mujeres más hermosas -dijo pensando que con eso ya se había echado a su hijo al bolsillo.
Solo para notar que este no tenía el más mínimo interés en nada de lo que había dicho... había que sacar las armas pesadas.
Héctor: Mira, mijo, lo que quiero es que la banda sea un éxito. Y para eso necesitamos un chico malo -dijo con seriedad- si no quieres hacerlo tú, podemos buscar a alguien más -declaro haciendo que su hijo frunciera el ceño.
Miguel: No te atreverías -dijo haciendo sonreír por dentro al hombre que ayudo a traerlo al mundo.
Ya lo tenía justo donde quería.
Héctor: ¿A qué te refieres, mijo? -pregunto haciéndose el inocente.
Miguel: A buscar a alguien más para ser el chico malo de la banda. Eso sería una falta de respeto hacia mí y hacia mis amigos que hemos estado trabajando duro en esto -dijo no estando dispuesto a dar marchar atrás con su opinión.
A la vez que Rosa ya había captado las intenciones de su tío y decidió seguir el juego yendo del lado de su primo.
Rosa: Además, no sería auténtico. El chico malo debe ser alguien que se sienta cómodo en ese papel, que lo haga suyo -explico en lo que el hombre mayor fingió derrota antes de masajearse la frente.
Héctor: Está bien, está bien. No buscaremos a alguien más. Pero necesitamos encontrar una solución pronto. La banda necesita una imagen más definida -explico en lo que, por su parte, Miguel se quedo pensando al respecto.
Él no se sentía cómodo interpretando el papel del chico malo en la banda. Creía que no era quién era en realidad y que su personalidad no encajaba en ese estereotipo. Además, sus amigos y él nunca se daban la espalda, lo que hacía que la idea de interpretar a un chico malo fuera aún más difícil para él.
A pesar de que sabía que ser el chico malo le daría más libertad en el escenario, no quería cambiar su forma de ser para encajar en un papel preconcebido. No, obstante, sabía que el asunto de que la banda fuera un éxito era muy importante, y por eso estaba dispuesto a trabajar en su estilo propio y encontrar su versión del chico malo, pero no cambiaría quién era para ello.
Miguel: Lo sé, y estoy dispuesto a trabajar en ello. Pero no voy a cambiar quién soy para encajar en un papel de algo que no soy -dijo con seriedad- seré el chico malo, pero no voy a usar ropa oscura todo el día y no dejare a mis amigos de lado.
Cosas que los otros dos presentes decidieron aceptar, no se podía ganar todo.
Rosa: Y no tienes que hacerlo, Miguel. Puedes encontrar tu propio estilo, tu propia versión del chico malo. Algo que te sientas cómodo interpretando.
Héctor: Eso es cierto. Lo importante es que la banda tenga una imagen definida y que tú puedas brillar en el escenario -dijo haciendo que el más joven sonriera a ambos.
Miguel: Gracias. Aprecio su apoyo. Y estoy seguro de que juntos podemos encontrar la solución adecuada -dijo antes de ver de reojo el local- ¿Dónde esta nuestra comida? -pregunto extrañado.
Sin saber que Hiro, quien se sentía un poco incómodo al darse cuenta de que se había olvidado de ir a buscar la comida para la familia Rivera y se había quedado escuchando la conversación a escondidas, había terminado por escuchar todo. A medida que la conversación continuaba y su amigo expresaba sus preocupaciones sobre interpretar el papel del chico malo, Hiro se sintió orgulloso de su amigo por defender su autenticidad.
Y finalmente, cuando Miguel aceptó encontrar su propio estilo como el chico malo sin dejar de lado a sus amigos, Hiro sintió un gran alivio y admiración por su amigo. Sabía que Miguel y su banda podrían superar cualquier obstáculo que se presentara en su camino hacia el éxito, y a él le gustaría ver eso.
Aunque por estar metido en sus pensamientos fue que no noto como lo tomaban del brazos y fue arrastrado a la mesa donde estaban sus amigos de la universidad (y hasta hace un tiempo únicos amigos en realidad) que habían llegado hacia poco.
Go Go: Muy bien ¿Quién eres y qué le hiciste a Hiro? -pregunto haciendo que el menor la viera extrañado.
Hiro: ... ¿Eh?
Fred: Amigo ¡estás hablando como adolescente urgido con la hormona alborotada!
Hiro: No sé de qué están hablando -dijo sintiéndose algo incomodo y fastidiado de saber a dónde iba la conversación.
Fred: "Disculpa, fortachón, me sentía con peor humor ayer y no quería arriesgarme a desquitarme contigo" "¿El costo de esos enormes pectorales?" -dijo imitando al nipón quien solo lo vio con molestia.
Honey Lemon: Tu nunca dices esas cosas, nos preocupas -aclaro la rubia algo angustiada.
Wasabi: Por otro lado, qué buena imitación haces de Hiro, Fred.
Fred: Gracias -dijo con su propia voz antes de pasar a la voz de Hiro- pero ese no es el punto.
Mientras que por su parte el joven nipón estaba empezando a ofuscarse al verse siendo interrogado de ese modo ¿Qué tenia de raro actuar como lo hizo?
Hiro: ¡Están exagerando, yo...! -dijo antes de sentir una mano en su hombro.
Momento en que se percato de que grito de tal modo que el acabo llamando la atención de todos en el local, en especial de cierto moreno que por inercia se movió hacia donde estaba el nipón con sus amigos.
Miguel: ¿Esta todo bien? -pregunto a la vez que lograba que el chico más pálido respirara hondo para calmarse.
Hiro: Si... solo un desacuerdo con mis amigos -mirando a estos de reojo con el ceño fruncido. Los cuales se hicieron los desentendidos.
Miguel: Esta bien, es que ya pareces muy sobre estresado y no deberías esforzarte mucho, yo buscaré la comida para mí y mi familia, tú no te esfuerces, buen día a todos -dijo sonriendo con amabilidad antes de volver a su mesa con Héctor y Rosa.
Solo para que Hiro, conmovido por el simple gesto, acabara diciendo dos palabras que serían los últimos dos clavos en su tumba.
Hiro: Adiós papi... -susurro antes de ver a todos sus amigos con expresiones de incredulidad con sonrisas incomodas- ¿Qué me ven?
Las cuales pasaron a ser sonrisas cómplices luego de unas cuantas miradas entre ellos.
Wasabi: Al fin pasó...
Go Go: Te gusta alguien.
Fred: Y no te molestas en negarlo... Pobres de Karmi y Megan -dijo haciendo sonrojar al menor.
Hiro: No sé de qué hablan -dijo sintiéndose cada vez más incómodo por las burlas de sus amigos, a lo cual intentó cambiar de tema- ¿Y ustedes qué han estado haciendo últimamente? -pregunto solo para recibir un codazo cómplice de parte del rubio mayor.
Fred: Vamos, Hiro, no puedes negar que estás enamorado. ¿Desde hace cuanto te gusta el chico aspirante a estrella musical? -pregunto señalando a Miguel a lo lejos.
Cosa que hizo al más chico del grupo ponerse rojo como tetera.
Hiro: No sé de qué estás hablando, Fred -insistió para diversión de los mayores.
Wasabi: Vamos, Hiro, no te hagas el desentendido. Todos notamos que esos ojos que le pusiste no eran normales -dijo sonriendo cómplice.
Solo para que luego de unas cuantas burlas más, los amigos de Hiro decidieron seguirle la corriente y cambiar de tema luego de que el menor insistiera en ello. Sabían que Hiro no estaba listo para hablar de sus sentimientos, pero estaban ahí para apoyarlo si lo necesitaba.
Go Go: Bueno, digamos que no sabes, cambiando de tema ¿al final que paso con el ladrón de anoche? -pregunto con más seriedad- tratamos de seguirles el paso pero tanto tu y Baymax como el tipo sencillamente desaparecieron ¿Qué fue lo que paso?
Y como si alguien hubiera presionado un interruptor, el nipón paso de sentirse apenado a sentir verdadera rabia.
Hiro: El tipo se hace llamar Casanova... escapó -dijo con furia en su voz- y como si eso no fuera suficiente, destrozó por completo todo el sistema operativo de Baymax infestándolo de virus, me llevara un tiempo repararlo... ¿Qué fue lo que se robó exactamente? -pregunto recordando la piedra que el ladrón le había mostrado la noche anterior.
Ya que eso no pudo ser todo lo que se pudo robar ¿verdad?
Honey Lemon: Una reliquia de la china imperial -explico.
Fred: Nada más que una piedra con el dibujo de una serpiente ¿será fanático de los reptiles? -se pregunto en voz alta en lo que el menor de ellos solo gruño por lo bajo.
Go Go: Aunque debo admitir que es un cambio interesante, usualmente sólo roban tecnología
Hiro: Es verdad, pero si robo esa piedra debió ser por algo, debemos vigilar cualquier cosa relacionada con serpientes o la china imperial, tal vez aparezca de nuevo esta noche o en el plazo de la semana -dijo en lo que todos acordaban como dividirse las rutas de patrullaje los siguientes días.
Sin notar que los Rivera los oyen interesados desde su mesa gracias a un aparato de tecnología de espionaje cortesía de los nuevos laboratorios de Rivera Solutions listos a estrenar el día de mañana.
Y si, entre los cambios que se hicieron a las industrias Krei Tech vino incluido el cambio de nombre con la nueva administración. Siendo el nuevo nombre Rivera Solutions.
Héctor: ¿Escucharon eso mis queridos chamacos? -pregunto mientras bebía su café con calma.
Rosa: Así es... tal parece que creen que estamos interesados unicamente en serpientes. Como si fuéramos tan predecibles -dijo mientras clavaba con un tenedor un trozo de wafle antes de llevarlo a su boca.
Héctor: ¿Qué? Yo decía lo de que al chino le gustas, mijo -dijo haciendo que su hijo se atragantara con el café que se estaba bebiendo.
Miguel: Eso supongo que es bueno, si... muy bueno -menciono sonrojado antes de ver algo incomodo a su padre- ¿estas bien con eso? Digo, tú siempre has querido que sea tan mujeriego como tú.
A lo cual Héctor se encogió de hombros.
Héctor: ¿Qué te hace decir eso?
Miguel: Que ambos sabemos que eso de mandarme a un prostíbulo en lugar de con la prima de mamá fue un accidente cuando era un niño pequeño es mentira -dijo inexpresivo recordando eso de algunas de las cosas que su madre le ha dicho de su pasado olvidado- sobre todo si es un accidente que se repitió cinco o seis veces más.
Cosa que hizo a Rosa suspirar.
Rosa: Y por cosas así es que tienes prohibido salir solo, tío -dijo haciendo al hombre reír incomodo.
Héctor: Bueno, bueno, el punto es que encontraste a alguien que a ti te gusta, y yo solo quiero que seas feliz, mijo -aclaro para alivio de su hijo- Eso es lo importante, ahora... -dijo antes de guardar silencio.
¿La razón? La dueña de la cafetería que había sido la que acabo atendiéndolos cuando su sobrino paso a estar con su grupo de amigos, se acercaba nuevamente a su mesa. Y Héctor podía decir sin ningún pelo en la lengua... que la mujer no era nada fea, justo su tipo.
Cass: ¿Disfrutan su comida? -pregunto con amabilidad- espero que el café este como a ti te gusta Rosita, ha pasado un tiempo desde que viniste y tenemos cafetera nueva.
Rosa: Eso lo note, pero descuide señorita Cass, el café es tan bueno como siempre -dijo la joven con una sonrisa.
Solo para que luego tanto ella como su primo fruncieran el ceño cuando el hombre adulto que los acompañaba sin ningún aviso previo tomo la mano de la mujer y la beso.
Héctor: Claro que sí disfrutamos de tan buen manjar. Sobre todo si fue cocinado por manos tan suaves y delicadas como estas, que sólo pueden pertenecer a alguien que por derecho propio se ganó el título de una verdadera belleza citadina, una flor entre flores -dijo con un aire coqueto que hizo reír a Cass.
Solo para que luego el hombre recibiera un sartén que le dio de lleno en toda la cara y lo dejo viendo estrellas.
Cass: ¡Ya hablamos de que arrojes cosas en la casa, tesoro! -dijo divertida a su sobrino que casi que mágicamente se había transportado de la mesa donde estaba con sus amigos a la cocina de la cafetería para tomar el sartén que había arrojado.
Hiro: Lo siento, tía Cass -exclamo con un falso tono de inocencia. Complacido de haber puesto en su lugar a ese tipo que buscaba hacer una movida con su tía.
Antes de arrepentirse al haber olvidado de quien era padre ese tipo.
Miguel: ¡Papá! -dijo mientras ayudaba al hombre a ponerse de pie.
Para que luego su prima solo arrojara agua a la cara de su tío para hacerlo reaccionar.
Héctor: Caray, que jaqueca... -dijo masajeándose la cabeza antes de ver a Cass y sonreír atolondrado- ... ¿morí y llegué al paraíso? Porque veo un ángel.
No siendo capaz de decir algo más antes de recibir otro sartén cortesía de Hiro que lo hizo por pura inercia.
Cass: Hiro, creo que puedo responder yo misma a los que intentan coquetearme -dijo divertida pero también algo incomoda por como estaban resultando las cosas.
Hiro: Perdón, tía Cass -dijo nuevamente con un falso tono de inocencia.
Cosa que hizo que tanto Miguel como Rosa solo suspiraran. Mejor se iban, a fin de cuentas, Héctor ya se había encargado de matar el ambiente en el lugar.
Miguel: Igual no creo que escuche nada, me lo noquearon como para que despierte hasta medio día -dijo haciendo que Hiro se sintiera de la patada mientras que su tía rio incomoda.
Cass: Perdona, mi sobrino es muy sobreprotector conmigo, casi como lo soy yo con él -dijo antes de ver al mencionado quien solo se escondió bajo el mostrador para que Miguel no lo viera.
Aunque este solo sonrió con comprensión.
Miguel: No importa, no es la primera vez que golpean a papá
Rosa: Es cierto ¡él tío un mujeriego sin remedio! -dijo haciendo que tanto la tía como el sobrino se animaran un poco.
Cass: Entonces que Hiro no te oiga, es capaz de usar sus inventos de la escuela... pobre cartero, aunque siendo justos debió ser más discreto sobre mi catálogo de ropa -dijo causando que su sobrino nuevamente se sonrojara de pena.
¡Pero no fue su culpa! ¡El cartero debió aprender a guardarse sus comentarios si le preguntaban!
Miguel: Anotado, ahora si me disculpa, nos tenemos que ir -menciono cargando a su padre como costal de papas- muchas gracias por la comida, estuvo delicioso y ya todo está pago, que tenga buen día, nos vemos mañana -dijo con la evidente intención de volver, para deleite de la mujer que de lejos ya había visto la interacción entre el chico y Hiro.
Y justo por dicha razón es que pensó... ¿Por qué no?
Cass: Ven cuando quieras, el horario de trabajo de Hiro es a partir de las tres de lunes a viernes y todo el día en fines de semana -dijo recibiendo como respuesta un guiño por parte del moreno antes de irse con su padre a cuestas siendo seguido por su prima.
Sin notar que mientras se despedía de la familia latina. Nuevamente Hiro había sido arrastrado por sus amigos.
Wasabi; Excelente primer movimiento romeo, noquear a su padre, sí que conseguiste muchos puntos -menciono para frustración del menor.
Hiro: Lo sé, es que me molesta que le anden coqueteando como si nada a tía Cass... y además escucharon lo del prostíbulo ¿no? -pregunto a la vez que todos ellos asintieron.
Go Go: Lo que me hace tener dudas ahora de que si sea buena idea que te relaciones con ese chico -dijo haciendo que el nipón se enfadara más.
Honey: Parece que se crio en un ambiente donde es normal tener una pareja y dejarla el mismo día.
A lo que por parte del joven mitad japonés solo gruño fastidiado. El era consciente de como era Héctor Rivera, lo había visto en el trabajo lo suficiente para hacerse una buena idea del tipo de hombre que era, al menos en el aspecto de ¨Don Juan¨. No obstante, su hijo por otro lado...
Hiro: No sé, siento que él de su padre sólo sacó el apellido -dijo antes de negar- en todo caso. No es como que me vaya a perjudicar de algún modo haber echo eso, digo, no es como que Héctor Rivera fuera mi jefe o algo así -dijo restando importancia al asunto.
Sin saber cuan equivocado estaba en realidad.
_____________________________________________________________
(Al día siguiente) (sede de Rivera Solutions, anteriormente industrias Krei Tech)
Ok, desde el momento en que vio el nuevo nombre de la empresa sabia que algo estaba pasando. Y dichos pensamientos se reafirmaron cuando entro a la oficina de Krei en busca de respuestas... solo para encontrar a un sonriente Héctor Rivera sentado en la silla del jefe con los pies sobre el escritorio mientras jugaba con uno de esos viejos juegos de video que se suelen vender en las ferias con juegos como tetris o asteroids.
Solo para que luego el hombre dejara perder la partida en cuanto se dio cuenta de la presencia del más joven para luego sonreír como el gato de Alicia en el país de las maravillas, cosa que hizo al menor ponerse en guardia.
Hiro: ...Tengo varias preguntas. Para empezar ¿Qué hace usted aquí? -pregunto señalándolo- ¿porque Judy no está por ningún lado? ¿Dónde está Krei? -siguió haciendo preguntas en lo que el hombre mayor lo vio con una sonrisa.
Héctor: Hiro, Hirito, Hirin... -hablo como si hablara con un niño pequeño.
Lo que en respuesta hizo que el más joven sacara un gas pimienta de su bolsillo.
Hiro: Usaré esto -declaro dispuesto a cumplir su amenaza haciendo que el hombre rápidamente levantara las manos en plan de apaciguar.
Héctor: Sin duda te crio tu tía, chinito -dijo antes de aclararse la garganta- de cualquier modo, lo que te voy a decir es tan serio que te hablare como un adulto a otro -procediendo a usar un tono de voz grueso- soy tu jefe ahora.
Y no hace falta decir que esas cuatro palabras desubicaron al menor por completo. Quien ahora si que tenia varias dudas dentro de su cabeza
¿Cómo fue que este hombre se hizo con la empresa? ¿Qué había pasado con Alistair Krei?... ¿seguía siendo un empleado de la empresa? A fin de cuentas, firmo un contrato con Krei, no con Héctor.
Hiro: ... Podía decirlo sin buscar sonar como si estuviera estreñido, ¿Sabe? -dijo no queriendo que se notara lo tenso que estaba.
Héctor: Jajaja qué simpático -dijo con sarcasmo- Ahora. Tengo entendido que firmaste un contrato con Alistair Krei para ser prácticamente su asistente ejecutivo sin sueldo. Bueno, eso se acabó -declaro con seriedad a la vez que el menor solo suspiro.
Aquí venia, lo iban a despedir. Esta era la venganza de hombre por haberle arrojado un sartén a la cabeza dos veces seguidas el día anterior.
Pero cuando ya había aceptado su destino, fue que el joven se extraño al ver como un contrato nuevo era tendido en frente suyo.
Héctor: Antes de que preguntes, no hay trampas. Es un contrato legal en el que se garantiza que se te pagara por tu trabajo como un empleado más -dijo sin que Hiro pudiera creerlo.
Hiro: ... ¿Qué significa esto? -pregunto desconfiado- es decir... ¿Es en serio? ¿Qué hay de Alistair Krei? ¿Sigue en la empresa de algún modo?
Héctor: Alistair ya no es el dueño de la empresa, Hiro. Ahora yo soy el jefe, y te aseguro que estarás en buenas manos. Dejémoslo así -dijo con tranquilidad- así que, ¿Qué te parece? ¿Quieres trabajar para mí? -pregunto mientras el menor leía el nuevo contrato.
A la vez que no podía creer lo que estaba leyendo. Básicamente le estaban prometiendo su propio laboratorio así como un salario bastante bien remunerado así como prestaciones sociales, seguro, vacaciones, por decir algunas cosas.
Hiro: Sí, por supuesto. Gracias, señor Rivera -dijo para luego firmar al ver que no había trampas.
Si, era verdad que Krei le daba imagen a la empresa haciéndola conocida en el campo de la robitica. Pero solo un cambio de administración no significaba que la empresa fuera menos reconocida. Además, nadie podía ser tan mal jefe como Krei.
Héctor: No hay problema, Hiro. Y por favor, llámame, Héctor. Ahora, ¿por qué no te sientas y hablamos de tus responsabilidades y de lo que espero de ti como mi nuevo asistente ejecutivo? -pregunto para sorpresa del menor que solo hizo caso.
Hiro: ¿Asistente ejecutivo? -pregunto sin poder creérselo.
Héctor: Así es -dijo con calma- ahora escucha chamaco. Tu trabajo es muy simple, solo quiero que seas el niñero de mi chico. Pasaras con el todo el tiempo, sin quejas, ni protestas -explico haciendo que la sonrisa se borrara del rostro del nipón en cosa de segundos.
Sabía que era demasiado bueno para ser verdad. No es que no le gustara pasar tiempo con Miguel, era solo que...
Hiro: No es que no quiera... Pero no quiero -dijo frunciendo el ceño- por mucho que me agrade su hijo, yo... Pensé que al fin me tomarían en serio y podría dar mis ideas a la compañía, como un trabajador de verdad.
Héctor: Y lo harás, chamaco, pero velo como que también serás el asistente de mi hijo -explico buscando animar al más joven mientras jugaba con un cubo de rubik- porque seré sincero contigo. Mi chico, aunque tiene talento, no está ni a medio camino para volverse una estrella del mundo de la música. Le espera un largo camino, y puede errar en él, necesita de un chico listo como tu para ayudarlo a no meter la pata -declaro con seriedad- ya sabes, mantenerse al tanto en la escuela, una vida sana... no hacerme abuelo tan pronto.
Comentario que hizo que el mitad japonés mitad estadounidense arqueara una ceja.
Hiro: ¿Ok?... ¿Qué es lo peor que puede pasar? -pregunto pensando que su nuevo jefe estaba exagerando.
Héctor: Ser Swifteado por ejemplo.
Hiro: ¿Swifteado?
Héctor: Terminó creado por la propia Tailor Swift. Cuando tienes una cita con una estrella importante. Cometes una estupidez que a ella o él no le gusta, y luego ese él o ella escribe una canción sobre ti siendo un cretino total -dijo con simpleza.
A la vez que por su parte, Hiro de los dos era el que menos entendía de lo que estaba hablando. Es decir ¿eso en serio era un peligro en el mundo de la farándula?
Hiro: ¿Y cómo se supone que debo cuidar a su hijo y trabajar en la compañía al mismo tiempo? -preguntó preocupado.
Héctor: Tendrás que encontrar un equilibrio, pero no te preocupes, tendrás un horario flexible y podrás trabajar desde casa si es necesario -respondió tranquilamente.
Hiro: Vale, supongo que eso ayuda -dijo asintiendo con la cabeza.
Héctor: Además, Miguel está en una edad en la que necesita a alguien que lo guíe y lo apoye. Si lo haces bien, podrías tener una gran influencia en su vida y ayudarlo a ser una persona exitosa y feliz -añadió con una sonrisa.
Hiro: Supongo que tienes razón. Lo intentaré -dijo con determinación- a fin de cuentas, me hago una idea de me hago una idea de lo que es tratar con cretinos.
Menciono mientras que nuevamente recordó el incidente con el ladrón de hace un par de noches.
Héctor: Oh, y yo que pensaba que no tenias vida social -dijo divertido haciendo que el contrario se molestara.
Hiro: Que casi siempre salga con mi grupo de amigos no significa que no salga con otras personas, ¿sabe? -menciono sorprendiendo al adulto en la habitación.
Héctor: Judy -dijo tras pulsar un botón en su escritorio para hablar con la mujer que estaba en su propia oficina en ese momento- Tu lo conoces mejor que yo ¿es verdad que Hiro tiene amigos por aparte de su grupo universitario?
Judy: Es cierto, señor -revelo como si nada- en los últimos meses también se junta con la hija del jefe de policía aparte de su grupo de amigos.
A lo cual Héctor, al saber esa información solo vio con sorpresa al chico frente a él.
Héctor: ... ¿Te juntas con la hija del jefe de policía?...
Hiro: Su papá es viejo amigo de mi tía, a ambos se les ocurrió la idea de presentarnos a Megan y a mí, y nos hicimos amigos -explico encogido de hombros.
Héctor: Oh... entiendo... Judy, ve y quema todo lo que está en los archivos del tercer piso de la sección D a la S -ordeno con seriedad.
Judy: Si, señor Rivera -dijo para luego cortar la comunicación.
En lo que Hiro solo vio ese intercambio con cierto recelo.
Hiro: ... Temo preguntar.
Héctor: Que bueno porque no te incumbe (sonriendo) pero de todos modos, volviendo a mi hijo. Se lo pediría a cualquier guardaespaldas. Pero al parecer, mi hijo te quiere específicamente a ti. Le agradas.
Y Hiro se apena de la idea de que Miguel lo quiera de asistente. Aunque nuevamente, el hombre lo bajo de la nube antes de que siquiera empezara a subir hacia ella.
Héctor: Eso sí. También serás el asistente de Marco y de Leo. Sería un desperdicio tener un asistente para cada uno si casi hacen las mismas actividades todos ellos -explico en lo que el joven solo suspiro resignado.
Hiro: ¿Hacer música, aspirar a ser estrellas de futbol callejero y exasperar a quienes los conozcan? -pregunto sacándole risas al mayor.
Héctor: Solo Miguel quiere intentar algo en lo que respecta al fútbol callejero, aunque ese es un plan más a futuro -explico con calma- Marcó prefiere usar su tiempo libre para probar suerte en la actuación y Leo lo dedica su tiempo a trabajar en animación de todas las cosas, te lo digo para que vayas anotando... -aclaro antes de ponerse serio- y sobre "hacer música" ¿crees que es sencillo? ¿Crees que es un juego?
Cosa que Hiro no se tomo la molestia de fingir aunque fuera un poco de respeto y se encogió de hombros.
Hiro: Tratándose de usted si -dijo antes de casi caerse de la silla cuando el hombre mayor se levanto de su asiento con cara de pocos amigos.
Lo cual desubico un poco al nipón debido a que era raro ver a este hombre como alguien serio y severo de verdad.
Héctor: La música, jamás será un juego... Tal vez no tenga tus programas, cables, tornillos y todas esas cosas robóticas. Pero me gustaría verte sobrellevar un solo día de ensayos y coreografías sin mencionar a los fans, los paparazzi, la disquera, los Dj, la banda, la publicidad, la imagen pública, los blogueros, etc. Solo por decir algunas cosas -dijo enumerando algunas de las adversidades que tenían aquellos que se dedicaban a la farándula.
Mientras que por su parte, el más joven, aunque se sorprendió un momento, tampoco se dejo intimidar.
Hiro: Entiendo que la música no es un juego, señor. Y jamás diría que la música no tiene sus dificultades, lo que digo que me sorprende que usted no lo vea más por el lado de las fans -explico haciendo que Héctor arqueara una ceja.
Héctor: ¿Acaso crees que sólo pienso con la entrepierna? -pregunto ofendido.
Hiro: Si -respondió casi automáticamente para fastidio del hombre.
Héctor: Pues este inútil que piensa con la entrepierna fue lo bastante listo para hacerse con Krei Tech. Y por cierto, no olvides que soy tu jefe -dijo buscando que así el menor mostrara algo de respeto a su persona.
No consiguiéndolo en lo más mínimo.
Hiro: Krei también lo era y no era precisamente respetado -aclaro para fastidio de su nuevo jefe- pero aun con todo, todavía esperaba poder contribuir de alguna manera a la compañía -dijo con sinceridad logrando que el hombre se ablandara un poco.
Héctor: Por supuesto que podrás hacerlo, Hiro. Pero también tendrás que ser un modelo a seguir para mi hijo y sus amigos y ayudarlos a alcanzar sus metas -respondió con firmeza- su éxito depende de cuanto los puedas ayudar.
Y por mucho que el menor no quisiera reconocerlo, eso de hecho le gusto.
Hiro: Lo entiendo -dijo asintiendo con la cabeza- Haré mi mejor esfuerzo para ser un buen asistente para todos ustedes.
Héctor: Eso espero, Hiro. Confío en ti -dijo mientras le daba una sonrisa- Bueno, como sea, ¿Y si vas con mi hijo y le das la buena noticia? -pregunto.
Solo para que justo en ese momento por una ¨rara¨ razón la puerta, que estaba medio abierta, se abre más para luego dejar caer los cuerpos de Miguel, Marco, Leo y Rosa. En ese orden, quienes habían estado espiando la conversación para consternación y vergüenza por parte de Hiro así como picardía y diversión por parte de Héctor.
Héctor: Así que estabas escuchando ¿eh, mijo? Oh, Marco y Leo también. No lo esperaba de ti la verdad Rosita -dijo con burla pero feliz de la jugarreta a su sobrina quien rápidamente se puso de pie.
Rosa: Yo intentaba que ellos se fueran, tío -dijo señalando al trio de chicos que solo se hicieron los desentendidos.
Marco: ¿Entonces si le hará caso a Miguel, Don Héctor? -pregunto frunciendo el ceño- ¿Por qué nuestro asistente tiene que ser el chino amargado? -pregunto solo para que el chico a su lado le jalara la oreja en señal de reprimenda.
Leo: Marco, no seas descortés -dijo en lo que, por su parte, Miguel solo vio ilusión a su nuevo asistente al ver que su padre si le hizo caso.
Miguel: ... Hola -saludo al nipón que solo lo miro confundió antes de devolver el saludo.
Hiro: Hola Miguel ¿Cómo estás? -saludo guiñando un ojo apenado para deleite del único adulto en la habitación.
Antes de que Marco matara la atmosfera entre ambos jóvenes enamorados con uno de sus comentarios.
Marco: Oh genial. Ya se volvió estúpido, otra vez -dijo mientras movía una mano en frente de Miguel para confirmar el hecho de que estaba del todo desconcentrado de su entorno solo con ver a Hiro.
Rosa: Al menos Miguel ya tiene con quién apendejarse, Marco -menciono divertida para indignación del moreno vestido de azul.
Marco: Oh yo tengo con quien apendejarme -aclaro para luego verse en un espejo de mano- ¿Verdad, hermoso?
Rosa: ...Alguien por quien no cause pena ajena -dijo para que luego Marco le sacara la lengua.
Siendo todo esto visto por un contento Héctor que solo vio todo con alegría. Antes de recordar que tenia asuntos de atender con los jóvenes a su cuidado.
Héctor: De cualquier manera. Hiro... Se bueno y tráenos a todos unas cuantas bebidas. Necesito hablar con mis chicos y con Rosita. Cosas de familia, solo será unos momentos -explico a la vez que el mencionado solo frunció el ceño.
Antes de sonreír internamente. Si Miguel lo quería como asistente, significaba que su papá no podía despedirlo tan fácilmente... era hora de cobrar revancha por el atrevimiento del tipo por intentar ligar con su tía.
Hiro: Si, señor -dijo rodando los ojos antes de dedicarle una sonrisa a Miguel. Y sin más, salir de la habitación.
No siendo hasta que todos estaban seguros de que Hiro salió de la habitación que las sonrisas se borraron de los rostros de todos. Ya era hora de hablar de temas en verdad importantes.
Marco: Okey -dijo cruzado de brazos- en parte admito que tener a Krei Tech dominado es bueno para la banda ¿pero que tiene esto que ver con el plan de obtener los talismanes? -pregunto a la vez que la única chica en el grupo comenzó a enumerar con los dedos.
Rosa: Recursos, contactos, ayuda que no podríamos tener de otro modo... -explico antes de ajustar sus gafas- sin mencionar que tenemos total acceso al Ctos de esta ciudad.
Aunque como era de esperar, ninguno de los 3 chicos supo que quiso decir con eso ultimo.
Leo: ¿Ctos?
Rosa: El sistema operativo central, o Ctos para abreviar. Es un software de ordenador que controla la red de una ciudad con información completa, incluyendo todos los datos personales. Una ciudad con ctOS no solo almacena y registra cada momento de la vida digital de los ciudadanos, sino que también puede suponer la forma en que piensan y lo que creen. ¿Como creen que Krei lograba mantenerse en la vanguardia en el mercado? -pregunto haciendo que los 3 abrieran la boca con incredulidad.
Marco: Mendigo cerdo capitalista -fue lo todo lo que pudo decir ante la relevación de dicha información.
Rosa: No sólo es Krei. Ctos es usado por todo empresario con bastante poder en la ciudad. Y de hecho, toda ciudad moderna en la actualidad tiene un Ctos. Que las empresa privadas usan para vender y mandar publicidad -siguió explicando.
Héctor: Y lo mejor de todo es que los Ctos están interconectados entre sí. Dicho de otro modo... Ahora tenemos la capacidad de espiar las ciudades más importantes del mundo con sólo pulsar un botón -dijo complacido.
A la vez que Marco estaba aguantándose para decirle cerdo capitalista a Héctor también.
Miguel y Leo: Vaya... -dijeron impresionados.
Héctor: Aun así. Hay cosas que escapan de Ctos, siendo una de ellas... Los grandes héroes -explico con una sonrisa al saber que ese no era un problema de todos modos.
Rosa: Aunque ya sabemos la identidad de uno gracias a las manos alegres de Miguel -dijo divertida mientras que el mencionado no pudo evitar sonrojarse por dicho comentario.
Leo: Y por eso es por lo que Hiro es nuestro asistente ¿no? ¿Pará tenerlo vigilado?
Héctor: Correcto, San Juanito -dijo satisfecho con la resolución del más listo de la banda.
Marco: Yo creía que para que Miguel pudiera merendárselo, ya saben, el jueguito de pareja de "jefe y asistente" -menciono para mayor vergüenza de Miguel así como aceptación por parte del jefe de todos ellos.
Héctor: Eso también ¿para que negarlo? -admitió encogido de hombros.
Mientras que Miguel por su parte estaba sonriendo como retrasado ante la idea.
Leo: Supongo que eso me hace sentir más tranquilo. No necesitamos que los grandes héroes metan las narices donde no los llaman -menciono estando de acuerdo con el plan hasta ahora.
Marco: Aunque saben que igual intentaran evitar que "el ladrón de reliquias" siga robando -dijo fastidiado- pinches héroes, deberían meterse en sus asuntos y no molestar a los demás.
Rosa: Es uno de los problemas de los héroes. Literalmente tienen licencia para meterse en cosas que no son su asunto -aclaro en lo que tanto Leo como Marco solo resoplaron.
Todo eso mientras que el hombre mayor por su parte jugaba tranquilamente con otro de los juguetes que adornan su escritorio. Más específicamente, una trampa para dedos.
Héctor: Da igual. Esto es como jugar al póquer, nos estamos arriesgando al tenerlo cerca. Pero él no sabe que sabemos quién es, y podemos anticiparnos. Aunque lo intenten, no dejaremos que nos paren... -dijo viendo al exterior por la ventana con determinación- ...ese mundo que para todos es una fantasía, mostrarle a esta ciudad de escépticos y al mundo que la fantasía es real, eso es todo por lo que vivo.
Y tras un silencio que hasta parecería de drama para algunas personas.
Rosa: Tienes que juntar los dedos para poder sacarlos de la trampa, tío, tirando sólo te atoras más -aconsejo al hombre mayor que no quería admitir que tenia aprietos para liberar sus dedos del juguete.
Héctor: ¡Ya lo sabía! No actúes como que no lo sabía, porque si lo sabía -dijo apartando la mirada para que no notaran su sonrojo.
Leo: Y aún anda tirando, don Héctor -dijo divertido por la situación.
Marco: Esto es una causa perdida -exclamo antes de ver a su amigo que seguía fantaseando despierto- oye, no te vayas a ablandar con el chino. Se ve a leguas que te gusta, pero no vayas a meter la pata, tenemos algo bueno aquí -dijo haciendo reaccionar a su amigo que solo frunció el ceño.
Miguel: Casi fue el viejo quien lo arruina ¿Por qué tenías que mencionar lo del prostíbulo? -pregunto a su padre que se hizo el inocente- ahora debe pensar que soy igual de mujeriego que tú.
Héctor; Lo dices como si fuera algo malo -dijo antes de masajearse la frente- Auch, solo recordar el golpe hace que me duela la cabeza. Tu enamorado tiene buen brazo... Significa que es una fiera en la cama -dijo como si nada haciendo que su hijo se pusiera rojo tomate.
Rosa: Y hablando de Hiro, ya viene de vuelta -dijo casualmente.
A lo cual todos los presentes rápidamente retomaron la postura sonriente y relajada mientras que el nipón se abría paso empujando un carrito con diferentes bebidas.
Hiro: Café -para Héctor- malteada de fresa -a Rosa- atole, no fue fácil encontrar tan rápido- a Leo- jugo de cereza, tía Cass me comentó que es bueno para luego de ejercitarse -con algo de pena a Miguel- agua del grifo -termino entregando la ultima bebida secamente al Marco.
Quien decir que se sintió ofendido era poco mientras que Hiro estaba de malas con él chico con exceso de vanidad por reprocharle a Miguel la decisión de hacerlo su asistente.
Marco: ...Lo tomó porque el agua es buena, pero me ofende muchísimo -dijo antes de probar un pequeño trago- ¿seguro que es agua del grifo? Sabe ácida.
Hiro: Tendrá que ver con que ese vaso lo saqué de los laboratorios de petroquímica -dijo encogido de hombros para incredulidad del moreno quien escupe la bebida molesto.
Marco Ahora si la hiciste -dijo para luego saltar sobre el nipón para que luego ambos empiecen a rodar por toda la oficina mientras se lanzan puñetazos, patadas y hasta mordidas. Para diversión de Héctor, resignación de Leo, preocupación de Miguel para Hiro y finalmente, fastidio por parte de Rosa.
Rosa: Hombres tenían que ser, siempre directo a la violencia -dijo antes de solo tomar una pistola eléctrica y apuntar.
Para que luego en pocos segundos tanto Hiro como Marco pasaran de pelear por media oficina a estar temblando en el piso por pulsaciones eléctricas cortesía del arma disparada hacia ellos. Cosas que hizo a Leo reír por lo bajo.
Miguel: Oye -reprocho a su prima- Marco ya está acostumbrado, pero a Hiro no le lo maltrates, Rosita -dijo a la joven que solo se rio por lo bajo.
Rosa: Anotado, a la próxima sólo electrocuto a Marco -dijo dando por terminada la discusión.
Momento en que Héctor decidió meter mano en el asunto.
Héctor: Por mucho que quiera que se queden. Aun debo encargarme de algunas cosas aburridas de papeleo y esas cosas. Rosa, quédate, los demás, ahuecando el ala -dijo haciendo el gesto con sus manos de que se fueran.
Siendo así que mientras Miguel se llevaba a Hiro en forma nupcial, Leo solo agarro a Marco del tobillo y se lo lleva a rastras. Para que luego, una vez estando solos tío y sobrina, procedieran a seguir la discusión sobre los próximos pasos a tomar a partir de ahora.
Héctor: Bien... Vamos planeando la cena desde ya ¿Segura que este cocinero es viable? Según me contó Judy, la última chef que trajeron aquí acabó siendo una ladrona profesional -menciono recordando el incidente con una tal Momakase del que la ex asistente de Krei le informo.
Rosa: Parece bueno, y debe serlo si no consideraste a la tía de Hiro -explico en lo que él se encogió de hombros.
Héctor: La mujer es hermosa, pero prefiero evitar mas sartenes en la cara, gracias -dijo para luego notar que su sobrina le vio con el ceño fruncido.
Rosa: Más te vale que no haya pasado algo raro que nos hiciera quedar mal con la familia Hamada o de lo contrario es muy probable que Miguel te tira por la ventana -dijo a su tío que solo imagino la escena para que luego cayera una gota de sudor por su frente.
Héctor: Claro que no... al menos no de momento -dijo dando por terminada la discusión antes de tomar la taza de café traído por Hiro dispuesto a beberlo.
Solo para ser detenido por Rosa que ya tenia una idea de lo que tenía ese café
Rosa: Pues yo que tú te aseguras de que no le Hiro no le haya hecho nada a ese café antes de beberlo, recuerdo que le molesto que coquetearas con su tía ayer -dijo casual.
Siendo así que Héctor, que estaba a punto de tomarlo. Al final decidió tirar el café al piso. Donde vio como el café desintegraba el piso como si nada...
Héctor: ... ¡Ese condenado homicida! -dijo aterrado mientras su sobrina no se aguantó las carcajadas.
Rosa: Moraleja, no aceptes nada de Hiro hasta estar seguro de que ya se le pasó la ofensa contra su adorada tía.
Héctor: Y ya vez porque estoy contratando al nuevo -dijo antes de suspirar- en todo caso, parece que los grandes héroes van a insistir en meterse en nuestro camino. Hay que apartar su atención de la búsqueda de los talismanes de algún modo -dijo ya teniendo dolor de cabeza mientras empezaba a escribir planes.
Solo para que, como siempre, su sobrina y mano derecha ya tuviera la solución lista, envuelta y hasta para entregar.
Rosa: La solución es simple, tío. Solo debemos hacer que Miguel, o bueno, Casanova, haga otros robos de otras cosas. Eso hará que los héroes lo vean como un ladrón excéntrico que roba de todo y rápidamente dejaran de darle interés a los talismanes -explico a la vez que su tío por su parte sonrió ante la idea.
Héctor. Ni se donde estaría ahora si no estuvieras conmigo, querida.
Rosa: Posiblemente preso por el fisco o en un manicomio, querido tío -dijo como si nada a la vez que el hombre rio cansado.
Héctor: Tienes razón. En todo caso, se me ocurren algunas ideas excéntricas para que Casanova se haga un nombre en el mundo. Tu sabes que si de excentricidades es la cosa, yo soy el maestro -dijo sonriendo.
Para luego recibir una llamada de Judy informando de la llegada de quien sería su nuevo empleado, su nuevo chef personal.
Héctor: Perfecto, déjalo pasar... -ordeno para que poco después la puerta de la oficina fuera nuevamente abierta- espero que tu cuchara pueda pagar tu reputación. Kyle Takachiho, un gusto -dijo dando la bienvenida al recién llegado.
Quien se trataba de un joven en sus 23 o 24 años con un aspecto serio y de vestimenta oscura a excepción de la camisa blanca por debajo de la chaqueta de cuero. Una persona que perfectamente podía robar más de un corazón con un solo guiño de quererlo pero no teniendo nunca el interés en hacerlo al estar dedicado a su trabajo, la cocina.
Kyle: Un gusto -dijo haciendo reverencia mientras que Judy entraba también para luego notar el hoyo en el piso.
Judy: ... ¿Qué pasó?
Rosa: Hiro pasó -dijo divertida y Judy entendió de inmediato.
Judy: ... ¿Insultó u ofendió a su tía en algún sentido de casualidad, señor? -pregunto a Héctor que solo se indignó por la acusación.
Rosa: Todo parece indicar que sí -dijo haciendo que la mujer viera con simpatía a su jefe.
Judy: Aquí tenemos una regla no oficial: Si aprecias tu integridad física, nunca te metas con la señorita Cass -dijo para fastidio del hombre.
Héctor: ... No prometo nada -dijo cruzado de brazos antes de ver a Kyle- pasemos a lo importante. En resumen, serás mi chef personal, mío y de mi familia, así como los otros chicos de la banda. Si tu no lo apruebas, nosotros no lo tragamos. Así de simple -aclaro.
Mientras que por su parte, el joven chef acato las ordenes sin problema alguno.
Kyle: Por supuesto. Solo que aviso de antemano. Tomo mi trabajo muy en serio, no tolerare ninguna estupidez mientras este en la cocina, no me importa quien sea -dijo siendo aceptado fácilmente por Héctor.
Héctor: No prometo nada, mis chicos pueden ser... Problemáticos, si están lo bastante aburridos -dijo solo para que su sobrina riera por lo bajo.
Rosa: Me late que lo decía por ti, tío
Héctor: Esta juventud... -dijo con un tic en el ojo antes de solo encogerse de hombros- como sea ¿algo más? -pregunto para ya dar por terminada la junta antes de proceder a encargarse de sus asuntos
A lo cual, tras meditar sobre que al parecer seria muy estresante trabajar para ese hombre y su familia, pero recordando que la paga era muy buena y que ciertamente había querido algo de emoción en su vida aparte de la tensión y profesionalismo que su carrera y profesión exigían. Fue que Kyle solo se encogió de hombros sin tener la menor idea de en qué se estaba metiendo antes de decir.
Kyle: ... ¿Puedo tener una hora libre para fumar?
Notes:
Y ese fue el capitulo de esta vez. Como siempre pueden votar, comentar, lo que gusten.
¿Y que les pareció?
Oficialmente Krei Tech ahora se llama Rivera Solutions y Hiro ahora es asistente de los chicos. ¿Qué pasara a partir de ahora? La verdad no tengo idea, toca esperar.
Y ya Marco tiene con quien apendejarse, jeje.
De todos modos, espero que les haya gustado, nos vemos luego.
Chapter Text
(General Pov)
(Un par de días después) (Países bajos, Europa)
Era una noche tormentosa en la ciudad de Ámsterdam, la capital de los países bajos, país que también recibe el nombre de Holanda. Llamado así erróneamente debido a que en el pasado Holanda era la región más influyente y rica del país, lo que llevo a que muchos tomaran el nombre de la provincia como el propio de los países bajos, un error común que se mantiene hoy en día.
Y aunque la ciudad fuera conocida por su patrimonio artístico, su elaborado sistema de canales y sus casas angostas con fachadas de dos aguas, herencias de la Edad de Oro de la ciudad durante el siglo XVII, o también por el ciclismo que era la clave en la identidad de la ciudad. Lo que importaba en ese momento era el distrito de museos donde se encontraban cosas como las obras de Rembrandt y Vermeer en el Rijksmuseum, o el arte moderno en el Museo Stedelijk.
Pero en esta ocasión, el objetivo de cierto ladrón de vestimenta elegante que lo que más resaltaba de su atuendo además de ser el traje de un mago, era que resaltaban 3 talismanes mágicos, el de la serpiente en su guanto izquierdo, el del gallo haciendo de corbatín debajo del cuello y el del buey en el cinturón del joven intruso que se encontraba abriéndose paso entre las obras que marcaron un antes y un después en la vida de Vincent van Gogh.
Miguel: Recuérdame ¿Por qué estoy haciendo esto? Además de la oportunidad de viajar en un jet privado -pregunto a su prima por el comunicador quien se encontraba monitoreando todo a través de la cámara oculta en el antifaz de su primo.
Rosa: Ya te lo dije, gracias a que le hablaste a Hiro de que el talismán era algo importante, hay que distraer a los grandes héroes. ¿Y qué mejor que volverte internacional a la hora de robar con robos falsos para desviar la atención de los héroes? -pregunto haciendo que el chico se quedara meditando.
Miguel: Entiendo, pero no sé si esto es lo correcto. ¿No deberíamos intentar conseguir las cosas de forma legal? -pregunto en un último intento de hacer retroceder tanto a Rosa como a su papá de esta idea.
Había aceptado la idea de robar los talismanes de ser necesario, y reconocía que esto era un buen plan, pero... bueno, en cierto modo, si no lastimaba a nadie técnicamente no estaba haciendo ningún crimen. Y si al final se aseguraba de que todo fuera de vuelto, en realidad no estaría haciendo nada malo ¿verdad?
Si, visto de ese modo, en realidad es solo tomar las cosas ¨prestadas¨, no estaba haciéndole daño a nadie.
Rosa: Ya hemos intentado eso antes y no lo logramos. Además, estos héroes, aunque de nobles intenciones, son una molestia para cumplir nuestros sueños. Necesitamos distraerlos para poder seguir adelante con nuestros objetivos. Y tú sabes que tenemos la habilidad de hacer esto sin lastimar a nadie -dijo terminando de convencer a su familiar.
Miguel: Sí, tienes razón. Pero no me gusta tener que recurrir a estos métodos. Espero que al final de todo esto las cosas no se salgan de control -menciono haciendo a su prima suspirar.
Rosa: Lo sé, Miguel. Pero a veces tenemos que hacer lo que sea necesario para lograr nuestras metas. Y recuerda que estamos haciendo esto juntos, como familia -dijo logrando que el más joven de los dos se sintiera bien por el comentario.
Luego de pensar que solo tenía a su madre y su hermanita quien pronto estaría con ellos, el recordatorio constante de que ahora su prima y su padre estaban con él también era bienvenido siempre.
Miguel: Adoro ese argumento -dijo sonriendo antes de resoplar- en todo caso, ya dije que lo sentía. Me dejé llevar por el momento cuando dije lo del talismán... Entonces... ¿Solo me robo los ojos de la pintura? ¿Porque no la pintura entera? -pregunto haciendo reír por lo bajo a la chica.
Rosa: Así podemos valernos de que técnicamente no robaste la pintura por si algo sale mal -explico haciendo a Miguel asentir en señal de comprensión.
Miguel: Entiendo, gracias por explicármelo... bueno, animo, ojo de tigre ¡Rosa, lo lograre! ¿Qué hago si no lo logro?
Rosa: No te molestes en volver -dijo a tono de broma haciendo reír al otro chico.
Miguel: Buen punto -declaro antes de colgar.
Y sin más distracciones, era hora de trabajar. No siendo hasta pasados unos minutos que el ladrón dio con su objetivo, la pintura del autorretrato de Vincent Van Gogh pintado por el mismo y que era conocida por ser el último autorretrato pintado por el artista así como por ser una de las pinturas más conocidas de Van Gogh.
No siendo cuando la toco que la alarma del museo sonó, y antes de que el lugar se llenara de policías y guardias fue que el ladrón Casanova hizo su jugada y usando un aparato especial de corte laser, fue que en cosa de un instante corto los ojos de la pintura para luego guardarlos en su vestimenta con cuidado.
Momento en que acabo siendo rodeado por toda la fuerza policiaca de Ámsterdam.
Jefe Policía: ¡Manos arriba! ¡He dicho que ponga las manos arriba! -grito el jefe de policía quien solo miro consternado lo que el criminal había hecho- desgraciado... los ojos de Van Gogh.
Casanova (Miguel): Je, un pequeño precio a pagar para que el verdadero arte tome lugar -dijo mientras alzaba sus manos- mi nombre es Casanova, un ladrón fantasma de sueños que no le molesta ser confundido con un mago también.
Jefe Policía: ¿Y cuál es la maldita diferencia? -pregunto tenso ante la tranquilidad del joven que solo sonrió de forma engreída.
Casanova (Miguel): Ambos roles tienen cosas en común. Una de ellas es que los magos son capaces de hacer posible lo imposible, y los ladrones fantasma roban casi lo imposible -dijo agachando la mirada para que no se note la mirada picara en sus ojos- ambos hacen milagros... así como yo hare un milagro esta noche, trayendo la lluvia aquí dentro para escapar -dijo para la incredulidad de los presentes.
Jefe Policía: ¿Qué? ¿Lluvia dijiste?
Subjefe de policía: ¡Que milagro ni que nada! ¡Lo único que pasara esta noche es que te atraparemos y te encerraremos, criminal!
Casanova (Miguel): Ya veremos -dijo antes de extender sus brazos a modo de presentación mientras los oficiales apuntaban con sus armas- ¡en este maravilloso lugar, haremos un acto de magia y traeremos la lluvia! -dijo chasqueando sus dedos,
Momento donde, lejos de la vista de cualquiera de los presentes, Casanova, usando el poder del talismán del gallo, hizo levitar tanto una baraja de naipes como una caja de fósforos, con los cuales encendió algunos de los naipes para luego mandar las cartas en llamas a los aspersores y detectores de humo. Lo que acabo en que todas las alarmas contra incendios del edificio se encendieran causando que todo el lugar se llenara de agua.
Jefe Policía: ¡Desgraciado! ¡Hiciste que se activara el sistema contra incendios! -dijo tratando de cubrirse de la lluvia improvisada para diversión del ladrón.
Casanova: Y con este acto me retiro -dijo haciendo una reverencia- ¡este baño se encargará de que todo salga a la luz al final del acto de magia! ¡de tal modo que el agua de lluvia se llevara el lodo sucio! -dijo en lo que su imagen desaparecía entre una cortina de humo que comenzó a llenar la habitación.
Subjefe de policía: ¡Su silueta desaparece con todo este humo! ¡Manipulo los detectores de humo solo con la presión del agua! -dijo mientras que tanto él como el resto de los oficiales perdían la visión.
Así fue hasta que los aspersores dejaron de soltar agua a la vez que el humo se disipo. Dejando como resultado que no hubiera nada a la vista, ni los ojos de Van Gogh ni ladrón Casanova por ningún lado.
Jefe Policía: ¡Maldición! ¡El desgraciado escapó! -exclamó frustrado mientras miraba a su alrededor en busca de alguna pista o indicio del paradero del ladrón.
Subjefe de policía: Aun no puedo creer que haya logrado manipular los detectores de humo con la presión del agua, es un genio del crimen -dijo asombrado.
Oficial 1: ¿Qué hacemos ahora, jefe?
Jefe Policía: Emite una alerta a todas las patrullas y unidades, quiero que se cierre toda la ciudad para que no se le escape.
Oficial 2: ¿Y qué hacemos con los ojos de la pintura? ¿La recuperamos? -pregunto haciendo que su superior lo viera frustrado.
Jefe Policía: ¡Por supuesto que sí! Esa pintura es un tesoro nacional y no podemos permitir que se pierda. ¡Organicen a los expertos en arte para que la examinen en busca de cualquier daño además de la evidente falta de ojos!
Subjefe de policía: También deberíamos revisar las cámaras de seguridad, tal vez dejamos alguna pista.
Jefe Policía: Excelente idea, revisó todo el material que tenemos. Quiero que Casanova sea capturado y llevado ante la justicia lo antes posible. ¡Vamos, muévanse! -dijo haciendo que todos se movieran de un lado a otro.
Sin saber que de hecho, Casanova nunca se fue del edificio, llegando a salir tranquilamente por la puerta principal como si nada y sin que nadie lo viera gracias a su invisibilidad otorgada por el talismán de la serpiente. Y decir que Casanova estaba emocionado mientras escapaba del museo con los ojos del autorretrato de Van Gogh en su poder, era decir poco de hecho. Pensaba que había logrado su primer acto de magia exitoso, seguro que su padre estaría orgulloso de él.
Casanova (Miguel): "¡Otro robo perfecto de Casanova! ¡La lluvia fue la mejor idea que se me ocurrió! Ahora nadie puede atraparme" -pensó con una sonrisa maliciosa en su rostro.
Sabía que la policía lo estaría buscando, pero no le importaba. Después de todo, era un ladrón fantasma que siempre lograba escapar. (aunque solo fuera su segundo robo, pero tenía planeado que fueran más, muchos más)
Es verdad que antes de entrar en personaje actuaba con la personalidad noble de Miguel que buscaba evitar la criminalidad lo más posible, pero una vez entraba en personaje como Casanova... bueno, si de todos modos iba a hacerlo ¿Por qué no divertirse con el crimen para variar?
Casanova (Miguel): El verdadero arte está en mis manos ahora, que empiece el juego -dijo mientras se alejaba del lugar del crimen.
_______________________________________________________________
(Al día siguiente) (San Fransokyo, USA)
(Guarida de los grandes héroes, Basemax)
Hiro: Solo un poco más... ¡y listo! Oficialmente estás libre de virus amigo -dijo sonriendo mientras terminaba de reparar a su robótico amigo.
Quien solo asintió para luego agradecer como el sabia, abrazando al joven nipón.
Wasabi: Me alegra que Baymax se sienta mejor, llevas días trabajando con él -dijo amablemente.
Go Go: Lo cual de hecho es sorprendente por parte del tal Casanova, en serio debió infestar a Baymax con virus en nuestro último encuentro ¿no es así?
Hiro: Sí, no entiendo por qué tuvo que hacer algo así. Pero al menos pudimos solucionarlo -dijo sonriendo más tranquilo- tenemos que estar más alerta la próxima vez. Pero por ahora, estoy contento de que Baymax esté de vuelta en forma.
Baymax: Gracias a Hiro, estoy funcionando al 100% de nuevo.
Honey Lemon: Eres impresionante, Hiro. Siempre encuentras una manera de arreglar las cosas.
Go Go: Bueno, no perdamos más tiempo. ¿Qué les parece si salimos a patrullar la ciudad? Quién sabe, tal vez podamos encontrar a Casanova en acción -pregunto en lo que todos estuvieron de acuerdo.
Momento donde un alterado Fred se abrió paso en la sala de reuniones extrañando a todos.
Go Go: ¿Y ahora que mosco te pico? -pregunto extrañada.
Fred: Ya verán ¡Basemax, pon las noticias! -ordeno a la computadora de la base quien solo obedeció sin rechistar.
Haciendo que en pocos segundos apareciera en la pantalla el canal de noticias de San Fransokyo que al parecer estaba a mitad de un reportaje de última hora que era dado por el reportero número 1 de la ciudad, Bluff Dunder. Con la premisa del reportaje siendo la de ¨Primero la oreja, ahora los ojos¨.
Bluff Dunder (TV): ¡Escandalo en Ámsterdam hoy! ¡Ya que recién se dio la noticia de que el autorretrato de Van Gogh fue vandalizado y sus ojos fueron robados! ¡Esto mismo ha causado que haya pánico en todo el mundo del arte! -dijo sorprendiendo a los héroes- ciudadanos y gobiernos están alerta por este repentino robo de arte. Las autoridades han nombrado con facilidad a un sospechoso, el criminal que dejo en ridículo a los grandes héroes hace unos días, el ladrón fantasma o ladrón de ensueño, Casanova -dijo mostrando fotos tanto de la pintura recortada como del ladrón- y ahora lo que todos se preguntan es ¿Por qué este aspirante a ladrón hizo tan atroz crimen? ¿Y en donde atacara ahora? -dijo terminando el reportaje para que luego la pantalla se apagara.
Dejando a los héroes sin palabras.
Hiro: ¿Cómo es posible? ¿Casanova robó los ojos del autorretrato de Van Gogh? -preguntó en voz alta con incredulidad.
Honey Lemon: Eso es terrible. ¿Por qué alguien haría algo así? -pregunto cómo la fanática del arte que era.
Go Go: Y ahora todas las miradas están sobre él. No podemos permitir que siga haciendo esto.
Wasabi: Pero ¿Cómo vamos a encontrarlo? No sabemos dónde va a atacar la próxima vez. Además, esta vez dio un golpe en Europa -pregunto en lo que Fred resto importancia al asunto.
Fred: Eso es fácil, tenemos que pensar como él. ¿Qué tipo de objetivo sería atractivo para un ladrón de arte como él?
Hiro: Buen punto, pero necesitamos más información. Tal vez podamos buscar en línea para ver si hay alguna pista.
Baymax: Estoy listo para buscar en internet cualquier información relevante sobre el ladrón Casanova -dijo haciendo que todos sonrieran ya que habían extrañado a su amigo suave y esponjoso.
Honey Lemon ¿Pues que estamos esperando? Encontremos a ese ladrón -exclamo sonriendo con entusiasmo.
Solo para que todos se llevaran la sorpresa de que no tuvieron que hacer mucha búsqueda ya que antes de que alguno se pudiera levantar de su silla, fue que su señal fue hackeada, haciendo que la propia computadora de Basemax avisara que estaba teniendo una interferencia antes de que el propio Casanova apareciera en pantalla para consternación de los héroes.
Casanova (Miguel): Hola grandes héroes ¿Cómo están? -pregunto de forma casual- escuche que quedaste apestando desde nuestro último encuentro, Capitán Encanto. ¿Algo de caer en el basurero por segunda vez? -pregunto haciendo gruñir a Hiro- escuche que el jugo de tomate ayuda con la peste.
Hiro: ... Ahora sí lo mato -susurro fastidiado.
Casanova (Miguel): En todo caso, solo llamaba para decirles que fue divertido. Pero a menos que salgan de San Fransokyo, ya el juego se acabó con ustedes, recién acabo de robar otra cosa y nadie me detuvo, es algo aburrido si lo piensas -dijo fingiendo estar decaído.
Go Go: ¿Qué es lo que robaste esta vez, Casanova?
Casanova: Oh, me parece que ya tienen una idea, todos los canales de noticias hablan de eso. Y sobre lo próximo que voy a robar... Nada que ustedes necesiten saber. Pero les dejo un pequeño regalo antes de despedirme -dijo mientras la pantalla se llenaba de código encriptado- eso debería mantenerlos ocupados por un tiempo. Por eso los invito a que intenten atraparme, me falta robar dos cosas más antes de mi próximo espectáculo. Si aceptan el reto, descifren la pista que les deje. Hasta entonces ¡Nos vemos, héroes! -dijo antes de desconectarse.
Mientras que por su parte, Hiro estaba furioso. Casanova había vuelto a burlarse de ellos y había robado algo más. Era frustrante no poder detenerlo y no tener idea de cuál sería su próximo objetivo. Sabía que tenían que actuar rápido y descifrar el código que les habían dejado antes de que fuera demasiado tarde. Pero también sabía que Casanova era un ladrón astuto y no sería fácil atraparlo. Aun así, no iba a dejar que el tuviera la última carcajada al final.
Fred: ¡Maldición! ¿Cómo vamos a descifrar todo ese código?
Honey Lemon: Tengo una idea. Podríamos usar mi fórmula de desencriptación molecular para analizar el código y encontrar patrones.
Wasabi: Eso suena genial, Honey. ¿Creen que podamos descifrarlo a tiempo?
Hiro: Sí, pero necesitamos hacerlo rápido. Dijo que el código era una pista. Más nos vale resolverlo cuanto antes -dijo antes de que todos se pusieran a trabajar.
Excepto Fred que no tenía idea de que carajo hacer y en vez de eso se quedó jugando con una escoba como lo haría el chavo del ocho,
En todo caso, tras al menos un par de horas de trabajo arduo y extenuante, el grupo de héroes finalmente había logrado desencriptar el código. Solo para terminar sumamente confundidos cuando el resultado detrás de tanta encriptación fue la frase ¨Yo tenía la nariz más grande, pero puede ser mentira¨.
Y no hace falta decir que Hiro frunció el ceño al leer la extraña frase que resultó del código. ¿Qué significaba eso? ¿Era una broma de Casanova o una pista real? Por su parte, los demás héroes también parecían desconcertados.
Go Go: ¿Qué diablos significa eso?
Honey Lemon: Tal vez es una pista para encontrar su próximo objetivo.
Wasabi: Pero ¿cómo vamos a saber qué significa?
Fred: ¿Tal vez es un acertijo? ¿O una pista para una ubicación? -pregunto mientras pensaba sobre algo similar que haya visto en algún comic.
Hiro: No lo sé, pero tenemos que descubrirlo.
Baymax: Podríamos buscar en línea para ver si hay alguna referencia a esa frase.
Hiro: Buena idea, Baymax. Comenzamos a buscar -dijo sonriendo.
Wasabi: Pero espera, Hiro. No tienes que ir al trabajo. Ahora eres el asistente de Miguel y sus amigos ¿no? -pregunto al chico que se encogió de hombros.
Hiro: De momento tengo un par de días libres, básicamente Leo está llevando a Marco a un hospital de famosos o algo así porque el menso tuvo una reacción alérgica de un desodorante y el grupo en si está descansando mientras que Don Héctor termina una canción de amor, cosa que al parecer le está costando -explico en lo que sus amigos solo arquearon una ceja.
---
(Clínica privada de celebridades) (Los ángeles)
Leo: ¿Sabes? En cierto modo es muy divertido como acabo esto. Digo, divertido para mí, para ti parece muy doloroso -dijo mientras leía un libro de leyendas escandinavas mientras le hacía compañía a su amigo que estaba atado a una camilla de hospital y usando el dichoso casco de futbol americano para esconder su rostro.
¿La razón? Sencillamente estaba fuera de si al sentirse irreconocible debido a que estaba inflamado casi que de todo el cuerpo de la cintura para arriba. Sus manos eran el doble de grandes de lo normal, tenia cara llena de costras causadas por una severa reacción alérgica y ni hablar de sus labios que estaban exageradamente hinchados, como si lo acabaran de sacar de una mala película de comedia o de terror de blanco y negro.
Siendo la razón de esto una sola cosa, desodorante masculino Barracuda en aerosol de la marca Cuda, ¨Mejor usa tu Cuda¨.
... Claro que olvidaron mencionar el pequeño detalle de que esa cosa causaba terribles reacciones alérgicas y por eso acabo siendo sacada del mercado poco después de que fuera estrenada, vaya negocio.
Leo: Y pensar que todo esto fue solo porque querías llamar la atención del nuevo chef privado de Don Héctor -dijo haciendo enfadar al contrario.
Marco: ¡Tu mejor no digas nada, no debería estar aquí, debería estar San Fransokyo conquistando a ese sexy chef huraño! ¡Ya deberíamos habernos ido hace horas, escuchaste al doctor, la recomendación fue una dosis de chaqueta de cuero negra y 100 cc's de pantalones ajustados! -reclamo fastidiado- ¡te juro que algún día Kyle será mío! -dijo obstinadamente a lo que Leo solo rodo los ojos con ironía.
Ya que era lo mismo que llevaba diciendo desde el día que conoció al chef. Que fue apenas antier. Y ni siquiera fue un encuentro romántico, tan solo se lo topo por casualidad y trato de robar algo del almuerzo de Don Héctor antes de que Kyle sutilmente le dijera que se fuera al diablo y lo hiciera tropezar para caer sobre una maseta. Eso Marco se lo tomo como algo personal y paso fastidiando al chef el resto del día. De allí en más Leo no sabe que paso pero eso termino con Marco enamorándose del cocinero de mal carácter, o al menos insistir en querer estar con él.
Eso hizo que justo el día de hoy intentara llamar su atención en su modo ¨conquistador¨ usando el dichoso desodorante barracuda, una cosa llevo a la otra y helos allí. Siendo lo peor de todo para Marco que Kyle lo vio como ¨feto mal abortado ¨.
Marco: ¡Como sea, ahora todo lo que quiero es ser bonito de nuevo! -dijo gritando al medico que se encontraba revolviendo cajones- ¡me escucho, Doc! ¡quiero esa inyección ahora! ¡no me importa mi miedo a las agujas y créame que no soy bonito bajo el casco! -dijo al hombre que solo se dio la vuelta con una expresión desinteresada.
Este hombre de entre 40 y 50 años era conocido por ser el medico de las celebridades, y aunque Baymax pudo ocuparse perfectamente de la situación, Héctor prefirió llevar a uno de los chicos que son su inversión con el doctor al que iban todas las estrellas, el doctor Hollywood.
Quien sencillamente solo inyecto al chico en el brazo poniéndolo a dormir.
Dr. Hollywood: ¿Sabes? Me gusta su ropa, el chico tiene estilo -dijo como si nada ante la incredulidad de Leo.
Leo: ¿Exactamente que le puso?
Dr. Hollywood: ¿La verdad? Ni la menor idea, solo buscaba algo para su ataque de pánico ¿acaso no estabas aquí viendo? -pregunto haciendo que Leo solo lo tomara del cuello de la camisa fastidiado.
A finde cuentas, ya llevaban como 3 horas en ese lugar y el chico aunque al principio se había divertido de la miseria de su amigo, ya estaba cansado y hasta sintiendo pena por Marco.
Leo: Ahora escuche amigo, el solo necesita el medicamento correcto para ponerse a cantar, tenemos una canción que ensayar ¡para ayer!
Dr. Hollywood: Y yo ya dije que lo suyo puede ser el raro síndrome di Rosenberg, el trastorno genético extremadamente raro que incluye el irreversible deterioro de las glándulas que resulta en un dolor tan severo que solo puede aliviarse... con la dulce y misericordiosa muerte -dijo haciendo que al joven solo se quedara callado para evitar decir groserias.
¿Cómo rayos ese tipo había obtenido su licencia de medico?
Leo: ¡Ya le dije que solo es una reacción alérgica! -dijo ya harto- solo póngale la inyección y ya... ¡y no, no le va a poner un implante! -dijo al ver que el medico iba a decir algo- solo... haga que pueda cantar ¿me escucho?
Dr. Hollywood: Bueno, está bien... veamos, inyección para cantar una canción, inyección para cantar una canción -tarareo mientras revisaba entre sus cosas nuevamente, para luego sacar una de las cosas más ridículas que Leo vio en su vida, una inyección lo bastante grande como para tener que ser sujeta con las dos manos- esto no le dolerá un poco ¡le dolerá mucho!
(Para hacer una idea)
... Era un hecho, no se iban a ir pronto de esa condenada clínica.
---
(Rivera Solutions, oficina de Héctor)
Rosa: Si, entiendo -dijo para luego cortar la llamada con Leo- te dije que era mejor dejar a Marco con Baymax ¿te debo recordar que el doctor Hollywood perdió su licencia medica como cuatro veces por incompetencia?
Héctor: Pensé que dijiste que tu te ocupabas.
Rosa: ¿Pues que te digo? No quisiste que llamáramos a Hiro con Baymax, Marco se rehúsa a una inyección ¡y no soy enfermera! -dijo llamando la atención del hombre que la encaro con una mirada de sorpresa y una ceja arqueada.
Héctor: Tus gritos han mejorado cariño -dijo con orgullo- pero mejor toma esto como referencia futura ¡Dile a Leo que no importa como ¡QUE LO ARREGLEN PARA HOY!! -dijo con terquedad mientras Rosa solo mando un mensaje a Leo.
Y es que lo cierto era que desde que supieron que Hiro era el líder de los grandes héroes, aunque su trabajo era ser asistente de los chicos, lo cierto era que tanto Rosa en cierto modo como Héctor preferían tenerlo al margen de sus cosas lo más posible... además, Héctor no tenia prisa alguna en realidad para arreglar al joven De la Cruz.
A fin de cuentas, odiaba al chico y seguía sin entender porque su hijo lo tenia como uno de sus mejores amigos. Los misterios de la vida.
Héctor: Muy bien, mientras arreglan a Marco -exclamo tomando asiento frente al piano- la idea es algo sencillo y romántica. Debe ser una canción lenta sobre el amor. Todo gracias a que si queremos que los chicos tengan público femenino, si o si debe haber baladas -dijo dispuesto a tomarse el resto del día a escribir si o si una canción de amor.
Mientras que su sobrina solo señalo a una esquina de la habitación donde se encontraba un hombre de aspecto intimidante, corpulento con apariencia ruda y que además usaba la típica vestimenta estereotipada de los motociclistas.
Rosa: ¿No vamos a hablar del enorme sujeto de la esquina? -pregunto haciendo sonreír a su tío.
Héctor: Rosa, querida. Conoce a Felony Carl, lo conozco desde que era conocido como Crimen menor Carl. Un exconvicto que busca tener una vida más decente y ahora es mi nuevo ejecutivo a cargo de hacer que la gente haga ¡lo que yo diga!
Y ni bien el hombre termino de decir eso cuando Carlo hago un agujero en la pared de un puñetazo para impresión de la joven sobrina de su jefe.
Rosa: Impresionante, y es buena idea que tengas guardaespaldas ahora que eres lo bastante famoso nuevamente, tío -dijo en lo que el mencionado decidió ignorar lo de que antes no era tan famoso.
Héctor: Ahora, mientras mijo hace lo suyo. Toca escribir la nueva canción, la cual será de ese momento típico de cuando un chico ve a una chica por primera vez, y sabe que es la indicada. No hay hombre que no se sepa de que hablo -dijo sonriendo antes de ponerse a trabajar- ¨aquí estoy, aquí estás, todo parece mal, no debería ser así...¨ ¡está canción es horrible! -grito exasperado.
A lo cual el enorme hombre con apariencia de pandillero solo le dio palmadas en la espalda para darle consuelo a su nuevo jefe para diversión de la sobrina del hombre. Parece que sería un día interesante. Al menos Miguel no sería el único que se estaría divirtiendo ese día.
---
(De vuelta en Basemax)
Mientras esos sucesos ajenos pasaban. El grupo de héroes se puso a trabajar de nuevo, esta vez buscando cualquier información que pudiera encontrar sobre la extraña frase. Sabiendo por instinto que los criminales como Casanova no eran muy pacientes que digamos.
Hiro: Muy bien, pensemos ¿Por qué Casanova buscaría robar solo los ojos de la pintura de Van Gogh? Es decir ¿Por qué solo lo ojos? Ahora la pintura esta arruinada y no vale nada.
Honey Lemon: Yo no diría eso -exclamo la que bien puede ser considerada la experta en arte del grupo- quizás se llevo solo los ojos al ser los más expresivos que jamás pinto Van Gogh. Era un artista apasionado por así decirlo. Sus colores eran vividos, sus pinceladas violentas, a veces hasta rompía el lienzo cuando pintaba.
Wasabi: Oigan ¿Van Gogh no era el pintor que acabo enloqueciendo y cortándose una oreja? -pregunto en lo que su amiga solo asintió con tristeza.
Honey Lemon: El pobre estaba muy perturbado. El pobre lucho toda su vida contra la pobreza y la soledad. Y aunque creo cientos de obras de arte, en vida solo vendió una sola.
Fred: Oigan... ¿no les parece curioso como casi siempre el único modo para que un pintor o escultor sea reconocido como artista es que primero deba estirar la pata? -pregunto casualmente.
Ganándose un coscorrón cortesía de Go Go quien lo hizo como favor a su amiga rubia que vio al chico de traje de monstruo con mala cara.
Hiro: Concéntrense, hay que seguir el juego -dijo cruzado de brazos- actualmente Casanova está buscando pinturas famosas ¿no? ¿Qué pintores eran conocidos por las narices qué hacían en sus pinturas?
Y nuevamente todos vieron a Honey quien se sintió halagada de ser el cerebro del equipo esta vez.
Honey Lemon: Pues bien... en los bonitos rostros de Boticelli todo armonizaba perfectamente en la cara, con nariz más bien grande, pero con una extremada belleza -inicio mientras contaba con sus dedos- las felices chicas retratadas por Renoir siempre aparecen con narices pequeñas.... Por el contrario, Picasso deconstruía los rostros, los representaba desde varios ángulos a la vez y, aun así, conseguía que se reconociera a cada uno de sus modelos, un arte único... -menciono mientras sus amigos prestaban atención.
Hiro: Boticelli, Renoir y Picasso -susurro memorizando los nombres mientras Baymax empezaba una búsqueda en internet.
Wasabi: ... ¿No me digas que vamos a investigar las pinturas de todos ellos a ver cuál sería una qué Casanova pueda robar? -pregunto al notar la mirada determinada en el rostro del joven nipón.
Hiro: No todas... Solo la pintura con la nariz más grande -dijo para luego ponerse a investigar también.
A lo cual todos decidieron seguir su ejemplo. Solo para darse cuenta de que el mundo del arte era algo más complejo de lo que creían, empezando con la gran cantidad de artistas que han vivido a lo largo de la historia, los diferentes tipos de arte en los que se especializaban cada uno más el hecho de que no tenían una idea clara de lo que buscaba su nuevo enemigo ladrón.
Solo no se habían dado cuenta que ya eran como las 3 de la tarde hasta que escucharon al sistema de la base avisando que alguien se acercaba para luego mostrar a la persona intrusa por los monitores, la cual dejo sin palabras a todos los presentes al saber quien era ella.
Se trataba de una ladrona con la que habían lidiado antes de Casanova. Una mujer acróbata que solía ser una física profesional en algún momento de su vida que además, también fue acróbata de un circo ambulante para terminar de pagar la escuela. Aunque el verdadero método por el cual termino de pagar sus estudios fue aprovechando que el circo viajaba de ciudad en ciudad para robar objetos de valor. La ladrona cirquera Sirque.
Go Go: ¿Qué hace ella aquí? ¿No estaba en prisión?
Wasabi: Pues estaba, pero al parecer ya no -dijo evidenciando lo obvio.
Honey Lemon: No creerán que descubriese nuestro escondite ¿o sí?
Fred: Seguro viene a vengarse de Hiro por lo de la ultima vez que la siguió por toda la ciudad hasta que se desestabilizaron los portales.
Hiro: No, la ultima vez hasta me agradeció... pero... -dijo mirando a la mujer en pantalla preguntándose que hacia allí y que iba a hacer.
Solo para que todos se extrañaran cuando ella ni siquiera intento entrar en la guarida, sino que más bien solo la vieron dejar una carta con todo y sobre en la entrada de la fabrica abandonada antes de dar la media vuelta e irse. A lo cual Hiro la recoge una vez que siente que no hay moros en la costa.
Fred: ¿Que quiere ella ahora? -pregunto mirando la carta en manos de su amigo con sospecha.
Para luego notar el ceño fruncido en el nipón.
Hiro: Nada... No es de Sirque. Es una carta de Casanova para nosotros -dijo sorprendiendo a todos.
Go Go: Entonces... ¿Casanova y Sirque trabajan juntos? -pregunto desconfiada- ¿acaso Casanova está usando la tecnología de los portales para movilizarse?
Lo cual no hacia falta decir que era una idea terrible se viera por donde se viera. Solo era cosa de recordar la tecnología implicada en el proyecto Silent Sparrow para hacerse una idea de los horribles resultados que podía causar el jugar con esa clase de ciencia.
Wasabi: Lo que me preocupa es que los portales se desestabilicen -dijo mientras que por su parte, Hiro ya estaba sacando el contenido de la carta.
Que resulto ser unos cuantos billetes y una nota de Casanova.
Hiro: "Veo que mi pista fue muy dura para ustedes, se las dejo más fácil" -leyó en lo que los demás observaban la moneda extranjera.
Wasabi: Esos billetes...
Baymax: Son pesetas, la moneda oficial de España -dijo el robot tras analizar el dinero- aunque estos son billetes descontinuados.
Solo para que en el momento en que acabara de decir eso, es que nuevamente hay un reportaje de las noticia. Donde Bluff Dunder revela al público televidente otro robo de arte de Casanova. La nariz del retrato de Jaume Sabartes de Picasso en el Museo de Picasso en Barcelona. Mostrando la pintura antes de que el robo fuera perpetrado.
Hiro: ..."Pero una segunda pista ya es solo un premio de consolación para los perdedores" -termino de leer la carta antes de romperla en pedazos- ese hijo de... Muy bien... -dijo respirando hondo-tenemos que robo los ojos de Van gogh y una nariz de Picasso... Es obvio que sigue ¿no? -pregunto en lo que Fred sonrió.
Fred: Ni cuca idea -dijo encogido de hombros para enojo de su amigo.
Hiro: Robo unos ojos y una nariz famosa -dijo con seriedad- les apuesto a que ahora mismo esta robando una boca famosa.
Go Go: El asunto es ¿Por qué? ¿Qué boca? ¿Dónde? -se preguntó.
Hiro: ¿Hola? ¿Quién tiene la sonrisa más famosa y bella del mundo? -pregunto sonriendo en lo que su amigo moreno puso una mirada soñadora.
Wasabi: Los de 42 Sing -dijo recordando a su banda kpop favorita.
Y no hace falta decir que Go Go se aguantó las ganas de golpearlo al decir tremenda fredsada.
Hiro: ... La Mona Lisa -dijo inexpresivo a la vez que todos entendieron.
Honey Lemon: ¡Es verdad! La Mona Lisa tiene la sonrisa más bella del mundo del arte. Eres brillante, Hiro -dijo apenando al menor.
Ya que de hecho no le parecía para tanto. Es decir, todo el mundo sabía que la Mona Lisa, también conocida como La Gioconda, es una famosa pintura realizada por el famoso Leonardo da Vinci. Que es considerada una de las obras maestras más reconocidas y emblemáticas del arte occidental y sobre todo, que era la sonrisa de la pintura lo que más llamaba la atención de quien la veía.
¿Qué significaba esa sonrisa? ¿Enigma y misterio de la personalidad de la modelo o de la dualidad humana? ¿Una expresión ambigua que muestra emociones mixtas? ¿Solo una técnica artística de Leonardo? ¿O solo una idealización de la belleza y la perfección? Hasta la fecha nadie lo sabía.
Fred: Solo una duda. La Mona Lisa está en Francia ¿no? Eso no es nuestra jurisdicción -menciono llamando la atención del resto.
Go Go: ¿A qué te refieres?
Hiro: Si me vienes con alguna regla ridícula de Comics con gusto te voy a ignorar Fred ¡ese tipo nos ha retado! -dijo ya tomando el asunto como personal.
Fred: Solo digo que París ya tiene héroes ¿no? Seguro ellos se ocupan de Casanova -dijo a la vez que el resto recordó haber escuchado de esos héroes.
Eran tan novatos como ellos en realidad, no llevaban mucho de tener trabajo activo pero aún así han acumulado bastante popularidad. Los héroes de París, la heroína de la mariquita que personificaba la buena suerte y la creación, Lady Bug. Y su compañero, el representante de la mala suerte en persona además de la destrucción encarnada, el héroe del gato negro Chat Noir.
Honey Lemon: Es cierto, Ladybug y Chat Noir, aunque también sería de preocuparnos por Hawk Moth -dijo ya pensando que habría que ir a la ciudad parisina.
Wasabi: Además. París no está a la vuelta de la esquina precisamente -añadió a la conversación.
Fred: Puedo pedirles a mis padres el jet familiar -exclamo como si nada sorprendiendo al resto.
Todos menos Fred y Baymax: ¿Tu familia tiene un jet privado? -preguntaron siendo Hiro el primero en reaccionar.
Hiro: ¡Es increíble! No sabía que tu familia tenía un avión privado, Fred. Eso podría facilitar mucho las cosas si decidimos ir a París a enfrentar a Casanova -dijo sonriendo con malicia por sorprender al ladrón que estaba empezando a fastidiarlo en la ciudad del amor.
Fred: Sí, ustedes lo saben, mis padres son bastante adinerados y tienen ese jet para viajes familiares. Pero, como dije antes, no estoy seguro de que sea una buena idea que vayamos allí. París ya tiene sus propios héroes y no queremos meternos en su territorio -declaro obstinadamente.
Honey Lemon: Entiendo tu preocupación, Fred, pero si Casanova y Sirque están trabajando juntos, podrían representar una amenaza para todos, no solo para París. Además, como héroes, nuestra misión es proteger a las personas y evitar que los villanos causen estragos en cualquier parte del mundo.
Go Go: Estoy de acuerdo con Honey Lemon. Si podemos ayudar a detener a Casanova y Sirque, no deberíamos dejar que las fronteras nos detengan. Además, sería una oportunidad para aprender de los héroes de París, nunca se sabe quien puede ser un aliado o un enemigo en el futuro -menciono haciendo pensar al rubio.
Wasabi: Aunque entiendo tus preocupaciones, Fred, creo que deberíamos considerar seriamente ir a París. Si Casanova sigue su patrón de robar partes famosas de obras de arte, la Mona Lisa podría ser su próximo objetivo. Y si podemos detenerlo allí, podríamos evitar que cause más daño en cualquier otro lugar.
Hiro: Además, el jet privado de tus padres nos permitiría llegar rápidamente a París y estaríamos mejor equipados para afrontar la situación. Fred, entiendo tus reservas, pero creo que debemos hacer lo correcto y ayudar donde sea necesario -dijo pasando a poner una expresión triste que golpeo a todos- es decir... alguien tiene que ayudar ¿no?
Y eso fue lo que termino de convencer al más infantil del equipo, ya que solo bastaba con que le recordaran a cualquiera de ellos el porque fundaron a los grandes héroes en primer lugar para mandar por la ventana cualquier creencia, compromiso o interferencia para cumplir con su deber... todo sea para mantener vivo el recuerdo de su amigo, Tadashi.
Fred: Está bien, chicos -dijo para luego suspirar- si creen que es lo correcto, los apoyaré. Llamaré a mis padres y les pediré prestado el jet. Pero recuerden, no sabemos qué nos espera en París, así que debemos estar preparados para cualquier cosa -dijo sacando sonrisas a todos.
Honey Lemon: Gracias, Fred. Sabemos que esto implica salir de nuestra zona de confort, pero juntos podemos afrontar cualquier desafío. Estoy emocionada por esta nueva aventura que nos espera -dijo haciendo que su amigo meditara esa parte antes de volver a ser el mismo irresponsable infantil de siempre.
Eso había que respetárselo a Fred. Si de comics era el tema, rápidamente pasaba a ser el más serio del equipo en cosa de segundos.
Hiro: ... ¿Pues que estamos esperando? -dijo emocionado como el resto por la que seria una nueva etapa para él.
Nunca había salido de San Fransokyo, puede presumir que llego a volado más alto que nadie, pero en realidad sería la primera vez que deja la ciudad que lo vio nacer y crecer. Decir que estaba emocionado era solo una forma simple de decirlo. Pero aún así, debía concentrarse y no olvidar la prioridad, Casanova.
Lo iban a atrapar y nada se iba a interponer en su camino. Además ¿Qué era lo peor que podía pasar?
______________________________________________________________
(Esa noche) (París, Francia) (Alcaldía)
(Kagami Pov)
Me siento como toda una estúpida. Le he dado oportunidad tras oportunidad a Adrien para que confíe en mí, sé que es egoísta que desee que el me diga todo lo que hace, pero por mi parte miento todo el tiempo solo para estar con él. Le miento a mi madre para poder verlo y miento en todas mis clases de esgrima para poder pasar más tiempo juntos. Y solo me gustaría algo de reciprocidad de su parte.
Es un hecho, los dos solo somos un par de mentirosos. Excepto que yo miento porque quiero estar con él, pero el me miente porque no tiene interés alguno en estar conmigo. Al principio estaba dispuesta a pelear para estar con él, incluso si eso significaba hacerme rival de mi primer amiga Marinette, pero ahora... ni siquiera cerrarle la puerta en la cara me hizo sentir mejor.
Me encontraba en medio de un torbellino de emociones. Podía sentir como la rabia y la tristeza se mezclaban en mi interior, mientras trataba de procesar las palabras hirientes que había escuchado, como se atrevió Adrien a mentirme en mi cara diciendo que perdió ese dichoso amuleto de la suerte y que lo encontró cuando yo lo tenía en la mano. Me sentía traicionada y herida, como si el mundo entero se hubiera vuelto en mi contra... Solo ¿Por qué siempre terminaba lastimada cada que intentaba ser una adolescente normal?
Y fue entonces que el akuma se introdujo en el amuleto de la suerte de ese doble cara que aun tenia en mi mano. Que como ya sabía, venia acompañado de la voz de quien actualmente era el mayor criminal de París, el supervillano que cambio de nombre recientemente, Shadow Moth.
Shadow Moth: Mentiras, yo soy Shadow Moth -lo escuche hablar dentro de mi cabeza- te otorgo el poder para librar al mundo de los mentirosos. Lo que pido a cambio, son los miraculous de Lady Bug y Chat Noir ¿tengo tu palabra? -pregunto esperando mi respuesta.
Y en ese momento, un sentimiento oscuro y vengativo comenzó a apoderarse de mi ser, alimentando la semilla de la venganza y desencadenando dentro de mi unicamente un solo sentimiento, castigar a aquellos que se atrevían a mentir para su propio provecho sin importarles los sentimientos de los demás.
Kagami: Créeme. No se permitirán más mentiras en mi nuevo mundo, Shadow Moth -dije cegada por los sentimientos vengativos.
Siendo en ese momento donde la miasma cubrió todo mi cuerpo y para cuando esta se desvaneció. Kagami se había ido, y Mentiras había tomado el relevo esta vez.
___________________________________________________
(Miguel Pov) (Poco después de la akumatización, torre Eiffel)
(Por favor ignorar a Lady Wifi)
Desde lo alto de la majestuosa Torre Eiffel, parado justo en la punta de esta, podía contemplar la mágica ciudad de París envuelta en la oscuridad de la noche. Los pensamientos se entrelazan entre asombro y admiración, pues la vista panorámica me revelaba una imagen completamente nueva de la ciudad del amor. Cada destello de las farolas y los edificios iluminados evoca una sensación de romanticismo y encanto.
El brillo del río Sena y las luces intermitentes de los barcos que navegan por él, generan una atmósfera de serenidad y tranquilidad. Si, se podía decir que en ese momento, me sentía como parte de algo más grande, conectada con la historia y la belleza de París. Es una experiencia que quedará grabada en mi memoria para siempre, un momento mágico y único que solo la Torre Eiffel puede ofrecer.
Ojalá Hiro estuviera aquí, pero ahora mismo yo era Casanova, y él es el Capitán Encanto, líder de los Grandes Héroes. Había que mantener los papeles. Solo esperaba que esta vez tuvieran sentido común y sacaran por lógica donde sería el siguiente robo para que vinieran a intentar pararlo, es decir, tampoco era muy difícil de adivinar ¿o sí?
Casanova (Miguel): Este es un mundo justo y hermoso... donde todos luchan para estar en lo correcto... pero jugamos a las escondidas con nuestros sentimientos, aunque es muy fácil descubrirlo todo al final... nuestros corazones se llenan de emoción ¿podemos hacer lo que queramos? -tarareaba una canción que iba improvisando sobre la marcha.
Cuando de pronto lo vi, como un orbe gigantesco de luz se iba formando poco a poco desde la alcaldía. A lo cual solo encendí el comunicador en mi oreja para luego saltar de la torre y columpiarme mientras me acercaba a donde estaba pasando la diversión.
Casanova (Miguel): Tenías razón R. Solo era cuestión de tiempo para que un akumatizado hiciera de las suyas. Y este parece ser uno problemático -dije a mi prima quien parecía estar de acuerdo.
Rosa: Así parece, acércate y escucha lo que la señorita perfecta y el gato simp tienen que decir -dijo mientras que por mi parte no pude evitar reírme por lo bajo con ese comentario.
Ya me habían dado una descripción breve de los héroes parisinos, pero ciertamente al verlos en persona desde lo alto de un edificio, fue que mi primer pensamiento acabo siendo... Lady Bug esta chaparra y ese traje de gato si que marca bien el trasero del rubio.
Chat Noir: ¡Cata- ¡-dijo antes de ser detenido por su compañera para usar su poder.
Lady Bug: ¡No! Si tocas la esfera te congelas -dijo para mi sorpresa.
¿Ella no acaba de llegar también? ¿Cómo rayos lo supo tan rápido?
Chat Noir: No si no digo mentiras.
Lady Bug: Si, pero ¿es verdad? -pregunto mientras se acercaba a él.
Chat Noir: Un poco -dijo apartando la mirada mientras retrocedían para alejarse del orbe brillante- ¿Qué hay de ti? ¿Eres sincera todo el tiempo?
Lady Bug: Claro que no gatito, tenemos que mentir. Para mantener nuestra identidad en secreto -dijo antes de ver con horror la luz- y si tocamos esa cosa, nadie evitara que congele a Paris.
¿Una ciudad inmovilizada sin que nadie me impidiera robar la parte final para mi gran debut?... Eso suena a música para mis oídos.
Chat Noir: Entonces ¿Qué hacemos? -pregunto a la vez que ella ya tenia su yoyo en mano.
Lady Bug: ¡Amuleto encantado! -grito activando su poder de la creación.
Siendo lo que apareció esta vez nada más y nada menos que una caja con un dron a control remoto en su interior.
Chat Noir: Ya quiero ver que vas a hacer con el dron -dijo sonriendo mientras ella se quedo pensándolo.
Lady Bug: Bueno, no podemos entrar, pero dudo que el dron mienta. Entonces, distráele mientras envió esta cosa a espiar adentro -dijo en lo que tanto ella como él se colocaban comunicadores como el que yo usaba con Rosa- seguiremos en contacto.
Chat Noir: Tus deseos son ordenes, y eso es verdad.
Para acto seguido subirse a un poste de luz a la vez que Lady Bug se alejó para manejar el dron y mientras por mi parte yo recibía nuevas instrucciones a través de mi auricular.
Rosa: Ya se cuál es el objeto akumatizado, basto con ver las grabaciones de las cámaras de seguridad de la alcaldía, si las cosas se salen de control tú puedes encargarte. Sabes lo que tienes que hacer ¿verdad?
Casanova (Miguel): Eso creo. Pero ¿Dónde vamos a conseguir un pato y una manguera a esta hora? -pregunte bromeando, haciendo que ella resoplara.
Rosa: Muy gracioso. Pero ya en serio... baja esa cosa del cielo antes de que sea un problema.
Casanova (Miguel): Tus deseos son ordenes, y eso es verdad -dije imitando al gato.
Y acto seguido fue que actúe en cuanto vi que el gato comenzó a actuar como tonto para llamar la atención de la persona akumatizada a la vez que el dron ya estaba en el aire.
Casanova (Miguel): Si, no lo creo. Esta vez el molesto amuleto encantado no te dará un Deux Ex Maquina -dije arrojando un as de corazones de mi baraja hackeadora al dron. Para luego solo sonreír y ver el efecto inmediato, el cual fue ver como Lady Bug perdía todo control del aparato.
Lady Bug: ¡¿Pero que fue lo que paso?! ¿¡Que le pasa a esta cosa?! -pregunto fastidiada tratando de recuperar el control del dron mientras observaba como este volaba directamente a Chat Noir.
Chat Noir: ¡Yuju! ¡No me llamo Chat Noir! ¡Odio a Lady bug! ¡Y creo que Shadow Moth debería llamarse tonto moth! ¡Mas gracioso! ¡Ah, y lo olvidaba, mi plato favorito es la coliflor con salsa bechamel! -grito al orbe de luz, siendo bechamel lo ultimo que dijo antes de que el dron lo golpeara en la cara, mandándolo a estrellarse contra un auto a la vez que la maquina voladora se hacia pedazos.
Ok, eso fue muy gracioso.
Lady Bug: Chat Noir -dijo saliendo de su escondite y yendo a ver como se encontraba- ¿estas bien?
Chat Noir: Yo diría que sí, aunque si no fuera por la super resistencia me hubieras dejado sin dientes mi lady -dijo levantándose del capo destrozado del auto- ¿Qué fue lo que paso?
Lady bug: No lo sé, el dron de repente comenzó a fallar y antes de darme cuenta había perdido el control.
Y lo sabía, ese era mi momento de aparecer. Por lo tanto, eso hice. Arroje tres pañuelos al aire, los cuales maneje con el poder del gallo para que tomaran altura por toda la parte de en frente de la alcaldía, antes de que se desintegraran por completo haciendo que nevaran corazones de papel que llamaron la atención tanto de los héroes como de la akumatizada.
Casanova (Miguel): No fue de repente, digamos que soy un chico muy travieso -dije parado sobre otro poste de luz teniendo la atención de los presentes- ¿Y sobre quien soy? Pueden llamarme Casanova, un ladrón y mago que puede convertir lo ordinario en algo extraordinario.
(Imaginar como se pidió en el capitulo 3 por favor)
Y no hace falta decir que las miradas de los héroes no tenían precio.
Lady bug: ¿Y tu quien te crees que eres? Espera ¡¿tu estropeaste el dron?! ¡¿Eres otro akumatizado?! -pregunto con una obvia falta de paciencia que me divirtió bastante.
Casanova (Miguel): No, no lo soy. No tengo un miraculous, un akuma ni nada de eso. Aún así, soy alguien cuyas habilidades mágicas superan fácilmente a las de cualquiera de los presentes -dije haciendo una reverencia- y esta noche pienso robarme la luz protagónica sacándolos de escena, Lady Bug y Chat Noir -dije haciendo que ambos héroes se pusieran en guardia.
Lady Bug: ¡No te creas tan rápido! No importa cuán mágicas sean tus habilidades, nosotros somos los héroes de París y no permitiremos que te salgas con la tuya.
Chat Noir: Tienes razón, Lady Bug. Estamos aquí para proteger a la ciudad ya sus habitantes. No dejaremos que un villano como tú se salga con la suya... que por cierto ¿Qué es lo que planeas? -pregunto haciéndome sonreír divertido.
Casanova (Miguel): Ay, qué valientes. Aun así, no te diré lo que planeo, gato negro. Un mago nunca revela sus secretos, solo los utiliza para asombrar y maravillar -dije bajando un poco el ala de mi sombrero- pero permítanme decirles que he venido preparado. Tengo algunos trucos bajo la manga que les sorprenderán -dije con un tono desafiante.
A la vez que escuche a Rosa hablarme por el comunicador que ella podía encender a distancia cuando quisiera.
Rosa: Miguel, ten cuidado. No subestimes a Lady Bug y Chat Noir. Ellos siempre encuentran una forma de derrotar a los akumatizados. Puede que solo lleven unos meses, pero no son simples aficionados a diferencia de ti -dijo haciéndome fruncir el ceño.
¿De que lado estás tu mujer?
Casanova (Miguel): No te preocupes, prima. Estoy listo para el desafío- respondi susurrando antes de volver a encarar a ambos héroes- pero déjenme preguntarles algo, ¿qué harán si no pueden detenerme? ¿Qué pasará si logro salirme con la mía con lo que pienso hacer justo esta noche? -pregunte haciendo que la heroína de traje de puntos me viera con mala cara.
Lady Bug: No permitiremos que eso suceda. Usaremos todas nuestras habilidades y recursos para detenerte -dijo haciendo girar su yoyo.
Chat Noir: Así es. Juntos somos invencibles. No importa cuán poderosos sean, no podrás vencer a la dupla de Lady Bug y Chat Noir -dijo también con el bastón ya listo para pelear.
En lo que yo solo los vi a ambos con una ceja arqueada. Vaya que se olvidaron rápido de su situación previa a que yo apareciera, es hora de recordárselos.
Casanova (Miguel): Mmm, interesante. Veamos quién es más astuto. Prepárense para una batalla que recordarán por mucho tiempo... solo que será en otra ocasión, porque ahora tienen otro asunto entre manos -dije antes de ver directamente al orbe y a la nueva villana creada por Shadow Moth que sabia que nos estaba viendo- ¡saludos, Lady Mentiras! ¡Como escucho, soy un ladrón, uno que desea inclinarse ante la guardiana de la verdad por un mundo puro y limpio así como su destellante luz que purga las mentiras y la vileza de este mundo! -dijo mientras justamente hacia reverencia.
Y apenas termine de decir eso es que escuche la voz de la villana a través de la cegadora luz.
Mentiras (Kagami): Dime ladrón ¿tu mientes?
Casanova (Miguel): Solo si usted me responde si ha mentido antes. A lo cual la respuesta es ¿Qué importa? -dije tratando de evitar ser victima del raciocinio extremista de esta mujer- ya que a fin de cuentas, yo no soy el enemigo aquí, ellos lo son -dije señalando a los dos héroes.
Lady Bug: ¡Kagami, no lo escuches! ¡Sabes que solo queremos ayudarte!
Casanova (Miguel): ¿Ayudarla? ¿Ayudarla cómo? ¿Rompiendo su objeto akumatizado y deteniendo sus planes? -pregunte haciendo que ella solo deseara partirme la cara, lo notaba en sus ojos.
No se porque, pero era divertido meterme con esta chica.
Mentiras (Kagami): ¿Eso es verdad?
Casanova (Miguel): Pues claro, yo nunca le mentiría a usted, soy un ladrón que dice la verdad, y deberías ya saber como es con estos dos. Solo buscan detenerte sin importarles un bledo porque acabaste así.
Chat Noir: ¡Eso no es verdad!
Casanova: ¿Y lo dicen los héroes que acaban de admitir que mienten con frecuencia? -pregunte antes de hacer una reverencia al orbe de luz- yo en cambio no tengo pena alguna en decir que estoy al servicio de Lady Mentiras, reina del futuro mundo puro y libre de mentiras y engaños.
Mentiras (Kagami): ... Harían bien en aprender de él -dijo tras guardar silencio- Casanova, tu me ayudaras a conseguir un mundo perfecto. En cambio ustedes, nadie se interpondrá en mi camino -dijo ya dirigiéndose a ambos héroes.
Los cuales para cuando intentaron agarrarme, se llevaron la sorpresa de que me volví invisible. A lo cual solo huyeron para no ser afectados por el poder de Mentiras, y posiblemente con ganas de darme una paliza, no los culpo.
Pero en fin, ya estaba hecho. Ahora que ellos iban a estar ocupados, era hora de terminar con mi primer gran golpe criminal. Era hora de hacer mi nombre en el mundo del arte.
Notes:
Y ese fue el capitulo de esta vez. Como siempre pueden votar, comentar, lo que gusten.
¿Y que les parecio?
Para aclarar dos cosas. La primera es que si, a partir de ahora cada robo estrafalario vendrá acompañado de un crossover con otra serie. Ustedes den sugerencias, así me ayudan a pensar jaja.
Y segundo punto a aclarar, solo decir que este capitulo quedo más grande de lo que tenia planeado. Así que quedo dividido en dos partes.
En fin, hasta el próximo capitulo, nos vemos.
Chapter Text
(Hiro Pov)
Después de un largo viaje, finalmente llegué a París, la ciudad de las luces y del amor. La emoción y la anticipación llenaron mi corazón mientras bajaba del avión. Era la primera vez que salía de mi ciudad natal, San Fransokyo (de paso mintiendo a mi tía diciendo que me quedaría en una pijamada con Fred) y estaba ansioso por explorar esta nueva tierra llena de historia y cultura.
Se que vinimos por trabajo y nada más, pero no podía evitar pensar en el hecho de que me encontraba en un lugar completamente nuevo, rodeado de un idioma que no entendía completamente, pero eso no me detuvo (en parte por eso había instalado un traductor automático en los trajes para los chicos y para mi). Pero sencillamente me era difícil no sumergirme en la elegancia del Louvre o perderme en las calles estrechas de Montmartre. Cada esquina parecía esconder una nueva maravilla que descubrir.
Aunque conforme fuimos explorando más de la ciudad, más rápido me di cuenta de que algo malo estaba pasando. Y eso era que las personas no se movían, según el escáner de Baymax, seguían vivas, pero sencillamente por alguna razón no se podían mover. No sabía que pasaba, pero no me gustaba. Y luego fue que la vi.
Una esfera de luz se estaba moviendo como pedro por su casa por la calle, y cualquiera que entraba en contacto con dicha esfera se quedaba justo en ese estado catatónico. Por lo cual parecía que Lady Bug y Chat Noir estaban huyendo de dicha esfera... ¿Qué rayos estaba sucediendo?
Fred: ¡Santa Máscara de Megazord! -dijo lo que de uno u otro modo todos pensábamos, aunque obviamente no dicho de ese modo y menos en voz alta.
Go Go: Esto definitivamente no es obra de Casanova. Con que de estas cosas son capaces los famosos akumatizados... -menciono mientras que por mi parte medito sobre ello.
Gracias al Lady Blog, que aparentemente por alguna razón es la mayor fuente de información sobre los héroes de París (aun cuando quien lo administra es una adolescente que aparentemente tiene nulo sentido del peligro) fue que logre actualizarme sobre lo que pasaba en esta parte del mundo.
Cuando una persona siente emociones negativas fuertes, como enojo, envidia o tristeza, Shadow Moth (antes conocido como Hawk Moth) detecta el momento de debilidad de esa persona, gracias a su ¨miraculous¨ (lo que les da poder a los héroes, algún objeto místico o algo así que en realidad debía ser alguna tecnología avanzada), y manda un akuma (mariposa cargada de una especie de energía negativa). El akuma vuela desde la guarida de Shadow Moth hasta la persona y posee un objeto importante que le pertenezca a esa persona.
Y así es como se crea un akumatizado. Cada uno diferente en base a porque su enojo, pero no por ello menos peligrosos.
Hiro: ¿No se menciona que para derrotarlos se debe de romper el objeto donde se aloja el akuma? -pregunte en lo que los demás asintieron.
El asunto que al parecer era el problema se trataba de que toco el que entraba en esa esfera se quedaba inmóvil, y el villano de turno estaba dentro del orbe de luz, entonces ¿Cómo rayos puedes enfrentar algo que no puedes ver ni tocar?
A lo cual, dicha respuesta apareció del peor modo posible. Con un ladrón fastidioso apareciendo en frente de nosotros sentado sobre un poste de luz cruzado de piernas.
Casanova (Miguel): ¿Buscaban algo? Aunque no tiene ninguna importancia en realidad -dijo como si hablara para sí mismo, ignorándonos- segunda estrofa: ¨El día y la luna gris, quemaba y opacaba el sol...¨
Hiro: ¡Tú! ¡Sabía que la Mona Lisa sería tu siguiente objetivo! -dije molesto apuntándolo, haciendo que el sonriera divertido.
Casanova (Miguel): Yo, Casanova, ante ustedes. Que helaba con su fría luz... -termino de cantar divertido antes de hacerse invisible.
Lo que me sorprendió ya que esta vez Baymax no lo podía escanear o ver cuando le pedí que lo buscara. Al menos en nuestro encuentro pasado Baymax podía seguirle el rastro gracias a su calor corporal, pero ahora él no podía encontrarlo ¿acaso se actualizo el también? ¿o el virus de la vez anterior tuvo algo que ver?
Casanova (Miguel): Tercera estrofa -dijo de repente apareciendo al lado opuesto de la calle sentado en un banco- en tu honor, querido Capitán Encanto.
Hiro: ¡Déjate de juegos! -dije molesto.
Honey Lemon: ¿Por qué robaste esas pinturas? -pregunto haciendo que el ladrón sonriera de forma burlona.
Casanova (Miguel): El buen Casanova tiene todas las respuestas... pero no siempre las dará. La respuesta ha este capricho y esta vida. En los sueños esta -dijo rimando antes de encogerse de hombros antes de volver a desaparecer.
Esto estaba empezando a ser irritante.
Go Go: ¡¿Dónde estás?! ¡Revélate!
Casanova (Miguel): Pues tomando en cuenta que eso podría acabar mal para mí, prefiero no hacerlo. ¿Nunca han pensado en lo injusto que es que los héroes enfrenten a una sola persona valiéndose de la superioridad numérica? -pregunto en lo que su voz se escuchaba por todos lados- en todo caso, París necesita héroes, y los que tiene están en aprietos. El amuleto que sujeta la chica de blanco es donde está el akuma, solo quienes nunca hayan mentido a su reino pueden entrar y ser bien recibidos.
¿Ahora de que está hablando? Esperen un momento...
Wasabi: ¿Nos acaba de decir como vencer a la akumatizada a la que se están enfrentando Lady bug y Chat Noir? -pregunto sorprendido.
Fred: No lo creo ¿Por qué nos lo diría? ¡No se puede confiar en él!
Siendo la respuesta del ladrón aparecer de la nada detrás de nosotros. Sacándonos un susto a todos menos a Baymax por obvias razones.
Casanova (Miguel) ¿Confiar o no confiar? ¡Confió en que lo decidirán! -dijo antes de aparentemente irse de forma definitiva.
Sin que tuviera la menor idea de que rayos estaba pensando ese tipo.
Go Go: ¡No puedo creer que ese ladrón nos haya dado una pista para derrotar a la akumatizada! ¿Qué hacemos ahora? -pregunto mientras que yo solo me quede pensándolo.
En una situación normal o en todo caso siguiendo las reglas, lo normal sería decir que deberíamos encontrar a Ladybug y Chat Noir y compartirles la información que obtuvimos. Ellos son los héroes de París y sabrán qué hacer ya que ellos se han enfrentado a akumatizados antes, así que confiaba en que podrían encontrar una solución.
Honey Lemon: ¿Vamos a ayudarlos? ¿Qué paso con lo de estar incógnitos? -pregunto en lo entre todos nos dimos miradas de duda.
Pero... así no es como hacemos las cosas. A fin de cuentas, lo primero que tiene que ser uno para ser héroe es ser experto en meterte en cosas que no son tu asunto.
Hiro: ¿Ya lo olvidaron? Alguien tiene que ayudar -dije de repente y de una vez como punto final del asunto. Y eso basto para que todos nos pusiéramos de acuerdo de igual modo, con una mirada.
Wasabi: Pero ¿Cómo los encontramos? No sabemos dónde están.
Fred: ¿Cómo no? ¡Solo hay que seguir la luz gigante! -dijo señalando el brillo que el orbe de luz de la akumatizadoa que era fácil de distinguir a lo lejos y más siendo de noche.
De allí que pusimos rumbo al lugar, yo volando sobre Baymax y el resto saltando por los edificios. En lo que mientras avanzábamos, solo me quede pensando acerca de cual sería la mejor estrategia para vencer a la chica. Mi primera opción seria Baymax ya que era un robot que en teoría no puede mentir, pero eso irónicamente es mentira recordando lo que paso cuando nos enfrentamos a Orso Knox en el banco.
... Eso es.
Fue entonces cuando lo recordé, tal vez Baymax había mentido antes para salvarme. Pero el propio Baymax dijo que tras analizarla, era un echo científico que esta persona nunca mentía. Solo queda probar a ver que pasas.
Hiro: ¡Go Go! ¡Tú encárgate! -le dije a mi amiga de traje amarillo quien solo asintió al seguro pensar lo mismo que yo.
Y como si mi conformación fuera todo lo que necesitaba para despejar cualquier duda, sin pensarlo dos veces, entrar dentro del orbe de luz para sorpresa del resto así como de los héroes de París que solo no se esperaron que alguien buscara entrar de repente allí adentro.
Aunque fue más la sorpresa cuando de la nada unos segundos después la luz se disipo y todo lo que quedo fue la imagen de la akumatizada des transformándose y de Go Go parada con el amuleto a sus pies, roto. Del cual salió una mariposa oscura que Lady Bug no tardo en capturar con su... ¿Yoyo? ¿Es en serio? ¿Tiene un yoyo como arma?
Lady Bug: No más maldades para ti, pequeño akuma ¡es hora de terminar con la maldad! -dijo para luego atrapar al akuma, para soltarlo un momento después ya como una mariposa blanca normal- adiós mariposita -dijo para luego arrojar lo que parecía ser un controlador al cielo- ¡miraculous lady bug!
Y lo siguiente que paso, una cosa era ver videos o leer sobre ello, pero otra muy diferente era ver como lo que parecían ser cientos de mariquitas comenzaban a reparar todos los daños como... literalmente como por arte de magia. Era sencillamente mágico ver como algo así pasaba ante mis ojos.
Pero no podía ser magia, tal cosa no existe, seguro era nanobots o algo así ¿no?
Lady Bug y Chat Noir: ¡Ganamos! -dijeron tras chocar sus puños sacando de mis pensamientos y de paso haciéndome fruncir el ceño.
¿Ganamos? Eso me suena a manada.
De cualquier modo, parece que al fin nos notaron ya que se acercaban hacia nosotros. Pero no para agradecer precisamente ya que la chica que se que es Lady Bug tenia muy mala cara mientras iba directo hacia Go Go.
Lady Bug: ¡¿En que estabas pensando?! ¡Eso fue muy peligroso! -dijo reprochándole- y es más ¿Cómo rayos es que no te congelaste por el poder de Mentiras? Se supone que congelaba a todos los que han mentido antes.
Go Go: Pues allí tienes tu respuesta, yo nunca he mentido -dijo con simpleza para incredulidad de ambos héroes jóvenes.
Chat Noir: ¿Quieres decir que nunca has mentido? ¿Jamás? ¿Ni siquiera una mentira pequeñita?
Go Go: No -dijo de forma seca y directa.
Chat Noir: Vaya... impresionante -menciono tranquilo.
Mientras que su compañera aunque no parecía querer bajarle una rayita a su mal genio, se obligo a calmarse una vez vio que la situación estaba controlada.
Lady Bug: Ah todo esto ¿Y ustedes quiénes son? -pregunto para nuestra incredulidad mientras que por su parte el gato parecía reconocernos.
Si no es que la sonrisa en su rostro no era una señal.
Chat Noir: Esperen un momento ... ¡Son los Grandes Héroes de San Fransokyo! -dijo emocionado mientras que su compañera le miro con una ceja arqueada.
Lady Bug: ¿Quienes? -pregunto con evidente indiferencia.
... ¿Era en serio?
Chat Noir: Vamos, Bugaboo, imagino que has oído de ellos -dijo a la vez que ella parecía hacer un esfuerzo por concentrarse.
Lady Bug: No, la verdad no. A menos que sea algo de Shadow Moth, no me suele interesar lo que no son mis propios intereses -dijo como si nada. Bueno, tampoco la podía culpar, yo tampoco sabía nada de ellos antes de que me fueran relevantes.
Chat Noir: Mientras que nosotros entramos en la categoría de "héroes mágicos" por nuestros Miraculous, los Grandes Héroes son héroes tecnológicos, ya que tienen a su disposición tecnología de punta -dijo llamando mi atención.
¿Héroes mágicos? Eso es llevar el teatrito muy lejos ¿no?
Lady Bug: Oh.... Entiendo ¿y que hacen en nuestro territorio? -pregunto ya prestándonos atención.
Hiro: Tenemos asuntos pendientes aquí, Lady Bug -dije con seriedad- usualmente nos mantendríamos en San Fransokyo, pero un ladrón que ha estado siendo una carga pudo haber venido aquí
Ambos: ¿Un ladrón? -preguntaron con el ceño fruncido.
Chat Noir: ¿Traje de mago? ¿Un sombrero de copa? ¿Antifaz?
Lady Bug: ¿Qué puede hacerse invisible y que tiene una actitud que quisieras patearle el trasero solo por escucharlo hablar?
Hiro: ... Ya se lo toparon ¿no es así? -pregunte a la vez que escuche un beep provenir de los aretes de la heroína parisina.
Y fue entonces cuando Chat Noir nos explicó lo sucedido mientras que Lady Bug se fue porque solo le quedaba un minuto antes de des transformarse, ya que resulta que los disfraces de ambos (así como los demás héroes de París al parecer) tienen un tiempo límite... menuda tecnología defectuosa. Pero de momento eso no era lo importante.
En cambio, lo que si era de preocuparse fue que Casanova mismo impidió que Lady Bug y Chat Noir vencieran con facilidad a la akumatizada de nombre Kagami Tsurugi. Y creo tener una buena idea de porque... aunque ni termine de llegar a dicha conclusión cuando un oficial de policía hizo acto de aparición, que de tener que adivinar, seguro era el jefe del departamento de esta ciudad, Roger se llamaba según investigue. A la vez que Lady Bug regreso de nuevo.
Roger: ¡Lady Bug, Chat Noir! Al fin los encuentro ¡ha pasado algo terrible! -dijo alterado- ¡La Mona Lisa! ¡La Mona Lisa fue vandalizada, fue destruida!
Sorpresa, sorpresa, tenía razón. Todo esto fue solo una distracción mientras el buen Casanova se robaba la sonrisa de la Mona Lisa sin siquiera sudar apuesto... desgraciado.
Ladybug: ¿Vandalizada? -pregunto consternada en lo que yo di un paso al frente.
Hiro: Maldita sea... No me diga ¿le robaron la boca de casualidad? -pregunte a la vez que el oficial asintió varias veces con la cabeza que hasta me sorprendió que no se desnucara o algo así.
Roger: ¡Si, su boquita! -dijo al borde de las lágrimas impactando a ambos héroes franceses.
Chat Noir: ¿Como es que...? -pregunto aun procesando mientras que nosotros nos pusimos a aclarar los hechos.
Wasabi: Llegamos tarde entonces. Casanova atacó de nuevo.
Go Go: Debió aprovechar todo el desastre con Mentiras para hacer su jugado mientras todos estaban distraídos con la akumarizada -dijo en lo que el gato negro nos miró algo tenso.
Chat Noir: ¿El ladrón de arte del que todos hablan desde esta mañana? Es el mismo tipo que le corto los ojos al autorretrato de Van Gogh ¿no? -pregunto con seriedad.
Al mismo tiempo que cierta chica se abría paso hacia nosotros, se trataba de la joven que había sido akumatizada, Kagami. En si parecía estar bien físicamente, aunque algo desorientada. Sin mencionar que también parecía sumamente avergonzada al punto de que ni siquiera podía ver a la cara a ninguno de nosotros.
Parece que escucho lo que hablamos.
Kagami :... La Mona Lisa fue profanada por mi culpa... -se expresó con vergüenza a la vez que el héroe gatuno vio a la chica con tristeza ¿la conocía acaso?
Chat Noir: No fue su culpa, señorita Tsurugi, Shadow Moth es el único culpable -trato de animarla en lo que ella negó.
Kagami: No, si fue mi culpa. Deje qué mi resentimiento hacia Adrien por seguir mintiéndome me dejara controlar y eso me hizo presa de Shadow Moth -explico en lo que paso a revelar lo que la llevo a ser victima del villano de las mariposas.
Y a lo que parecía, el tal Adrien sonaba como todo un canalla. Aunque dicha opinión no parecía ser compartida por Lady Bug quien solo se molesto por las acusaciones contra el modelo.
Ladybug: ¿Disculpa? Adrien Agreste nunca podría mentirle a nadie -pareció hablar por inercia con un tono de molestia. Cosa que hizo que la chica victima del ataque del criminal parisino solo se abrazara a si misma con pesar.
Kagami: No dejaba de darme excusas para no salir conmigo -dijo en lo que las chicas solo suspiraron con cansancio.
Go Go: Noticia de última hora, amiga. Así son los hombres, en especial adolescentes -menciono como si fuera algo de sentido común.
Cosa que de hecho me hizo sentir ofendido, y no solo yo si debía opinar por los demás.
Honey Lemon: Se les hace más fácil inventarse excusas que decir que no desean salir con una. El chico que me gustaba lo hacia todo el tiempo, aunque el lo hacia por timidez más que todo, aun así... -dijo haciendo que yo bajara la mirada.
Yo sabia a quien le solía gustar Honey... vaya, así que mi hermano era evasivo con ella. No esperaba eso de Tadashi... ¿a quien engaño? Suena completamente a él. Todo un genio para la ciencia, pero cuando de citas se trataba... aunque la verdad no soy quien para hablar.
Hiro: Y luego se hacen los que estuvieron muy ocupados... Cuando podían dejar que Marco resolviera sus propias pendejadas solo -susurre muy por lo bajo lo ultimo recordando que el día anterior le pregunte a Miguel si quería pasar el rato pero dijo que pasaría el día de hoy durmiendo porque se iba a desvelar junto a Leo por ayudar a Marco a decidir un plan para enamorar al nuevo chef privado de Héctor.
... Cuando lo pienso mas me alegra que el narcisista acabara siendo alérgico al desodorante.
Hiro: En todo caso no tenemos tiempo para esto -dije dándole la espalda a los de París antes de ponerme a pensar en voz alta- los ojos de Van Gogh, una nariz de Picasso y la boca de la Mona Lisa de Da Vinci... ¿Porque robar solo piezas en vez de las pinturas completas? -me pregunté extrañado.
Solo no tenia ningún sentido.
Fred: ¿Además de fregarnos con el tecnicismo de que no hizo algo ilegal? -pregunto a la vez que el rubio gatuno ladeo la cabeza confundido.
Chat Noir: ¿Tecnicismo? ¡Se robo la Mona Liza!... O bueno, parte de ella...
Go Go: Parte de, no la pintura como tal. A lo mucho se le puede acusar de vandalismo, crimen menor. Eso si tiene un buen abogado -dijo fastidiada para incredulidad de los europeos.
Roger: ¡Pero es un tesoro de la humanidad!
Hiro: Y a Casanova no le importa -dije encogido de hombros- en vez de robar las obras enteras... Busca piezas, como si estuviera armando un rompecabezas o buscando ingredientes para una receta...
Honey: ... O una pintura propia...-dijo de repente para mi sorpresa.
A la vez que todos acabamos en shock al comprender lo que implicaba esa insinuación. No tenía ningún sentido, pero al mismo tiempo... parecía tan coherente.
Honey: Explicaría por qué quiere las mejores partes de esas pinturas ¿para que quisiera toda la pintura cuando solo quiere lo mejor que hizo el artista? -pregunto más para si misma que para el resto.
Siendo justo en ese momento donde el oficial Roger recibió una llamada, al parecer de la jefatura.
Roger: ¿Qué? ¿Estás seguro? -fue lo que dijo luego de recibir el aviso de uno de sus subordinados antes de vernos con algo de inquietud- disculpen. Casanova es un joven vestido de mago con traje negro y antifaz?
Hiro: Si, es él
Roger: Es bueno saberlo. Porque me están informando que de algún modo, y no sé cómo, robo todas las ondas televisivas. Esta en todos los canales -nos informó.
Y ni termino de decir eso cuando yo ya estaba corriendo a la tienda de electrónicos más cercana junto al resto de los presentes que al parecer estaban tan impacientes e intrigados como yo. De allí que cuando llegamos a tener la primer pantalla a la vista, fuimos recibidos por un Casanova confiado sonriendo a la cámara para toda la audiencia televisiva ¿ahora qué?
Casanova (Miguel): He probado qué soy el ladrón más astuto de todos los tiempos. He logrado robas las mejores partes de las obras de arte más hermosas de la historia y las he unido en una pieza única -explico a la vez que imágenes de las piezas cortadas aparecían en pantalla.
Desgraciado infeliz... al parecer Honey Lemon tenia razón.
Casanova (Miguel): Y ahora mi intención será que mañana al medio día mostrare mi obra maestra al mundo. Donde luego la guardaré para siempre en mi galería de arte privada -dijo para mi fastidio y enojo- ¿saben? ciertamente debo decir que no fue un desafío crear mi obra maestra. Los Grandes héroes de San Fransokyo son muy lentos para seguir mi ritmo. Y Ladybug y Chat Noir pues... Parece que no son tan perfectos como todos creen, no pueden estar en dos lugares a la vez -dijo con un tono despectivo.
Es oficial, no importa que pase, meteré a la cárcel a este tipo. Quien tras una reverencia a las cámaras, solo dijo buenas noches a todos y se corta la transmisión.
A lo cual, hice lo más sensato, ordenar a Baymax que rastreara la señal de la transmisión a la vez que yo intentaba hacer lo mismo por medio del computador que tenia en mi antebrazo. Solo para que Wasabi me pusiera una mano en el hombro.
Wasabi: Estas perdiendo el tiempo -dijo haciéndome fruncir el ceño- muy seguramente era una señal encriptada. Así como la señal puede decir que estuvo en un lugar, puede estar a la vez en otros 50 mil en todo el mundo. Y aún si encuentras donde se hizo la trasmisión. Ya se debió haber ido -dijo mientras que yo me mordí la lengua para no responderle de forma grosera.
Ya que, con todo, sabía que era verdad.
Hiro: Baymax, dime que pudiste desencriptarlo -pregunte viendo a mi amigo robótico como mi ultima esperanza, solo para que este negara suavemente.
Baymax: Aún sigo con fallas por los virus que Casanova me implantó la última vez. Tengo problemas para ubicar la señal -confeso.
Haciéndonos a todos suspirar colectivamente.
Honey: Tendremos que esperar a que revele lo que hizo, y entonces tratar de tenerlo cuando suceda. París es conocida por ser una de las capitales artísticas del mundo, si piensa revelar su pintura mañana, seguro lo hará aquí. Entonces podremos atraparlo -dijo tratando de levantarnos el animo a todos.
Solo para luego escuchar a cierta heroína de dos coletas aclarándose la garganta.
Lady Bug: Si, sobre eso... Me gustaría que se fueran o que no se metan. Casanova está en París, significa que es problema mío y de Chat Noir, espero que lo entiendan -dijo con un tono como de solo esperar que hiciéramos caso y diéramos media vuelta sin rechistar.
... ¿Perdón?
Hiro: Eso no pasará, si quieren intervengan si Shadow Moth decide ofrecerle ayuda, pero mientras él es nuestro -dije encarando a la chica que solo dio un paso al frente también.
Ladybug: Estas dejando que esto se vuelva algo personal, incluso dejaron a su ciudad desprotegida para perseguirlo hasta aquí. Así no actúan los héroes -dijo con aires de superioridad.
Oh, a mí no me vas a jugar la carta del asunto persona, mujer. Además, por algo dejamos a Mini Max y ha Megan cuidando el fuerte.
Hiro: No me vengas con eso -dije sin intención alguna de retroceder- respóndeme algo. ¿Te quieres encargar porque eres una heroína, o porque se burló abiertamente de ti? -respondí sin dejarme intimidar lo más mínimo.
Y esto lo digo porque ahora mismo ella parecía querer arrancarme la cabeza. Vaya ¿acaso soy el primero que le lleva la contraria o algo así? Pues bien, vine hasta aquí persiguiendo a Casanova y no voy a dejar que ella se haga la muy digna de que como es su ciudad, solo ella puede encargarse.
Bueno, ella y el gato que parecía escuchar más a la razón y se llevo a la chica por separado para intentar razonar con ella.
Chat Noir: Mi lady, si queremos atrapar a Casanova, tenemos que trabajar juntos
Ladybug: ¡Eso no va a pasar! Podemos encargarnos nosotros. Ellos nos entorpecerán.
Si, esta chica no me estaba cayendo nada bien.
Chat Noir: Mi lady, peleándonos entre nosotros no lo detendremos, además no es muy diferente a cuando estuvimos en Nueva York, en teoría debimos quedarnos fuera hasta que Hawk Moth se metió -dijo en lo que yo me quede pensando ¿Qué paso en Nueva York?
De cualquier modo, no tenía tiempo para esto. De allí que justo cuando Lady Bug solo suspira antes de volver a ponernos atención... nosotros ya nos encontrábamos a una distancia considerable. Nuestra meta era encontrar a Casanova, no razonar cosas sin sentido con esta chica con complejo de Mary Sue.
Ladybug: ... Rayos -fue lo ultimo que la escuchamos decir.
Pero ni modo, ya hablaríamos otro día, ahora mismo, teníamos un ladrón irritante y fastidioso que debíamos encontrar y atrapar... oh si, y unas pinturas que recuperar también.
________________________________________________________________
(A la mañana siguiente)
(Adrien Pov)
Kagami rompió conmigo.
Y me dolía, no solo era dolor físico por el golpe que ella me dio durante la practica de esgrima, sino también un fuerte dolor emocional. Yo no quise lastimarla de ese modo, pero para mi es simplemente imposible decirle la verdad. No le tenia ese grado de confianza, además... Lady Bug nunca dejo de insistir sobre la importancia de esconder nuestras identidades.
Además, en parte la entendía ya que ella nunca ha tenido amigos y de allí su decisión de no querer verme al sentirse herida por mentirle ¿pero no es egoísta de su parte esperar una persona sea un libro abierto todo el tiempo? ¡Todos tenemos secretos!
Chat Noir: En todo caso, creo que necesito despejar mi mente un rato -dije estando con mi identidad de héroe mientras patrullaba la ciudad.
Solo faltaba como hora y media para la gran revelación artística de Casanova y aun no teníamos idea de donde iba a hacerlo o que planeaba hacer. Nada... ningún akumatizado nos había hecho esperar tanto para hacer algo, y eso en cierto modo era algo fastidioso pero también muy inquietante. Al menos yo no sabía que esperar.
No como Lady Bug, ella siempre sabía que hacer. Era tan genial y perfecta, por eso era la chica de mis sueños. Aun cuando ella diga que lo nuestro nunca podrá ser.
Chat Noir: Tal vez cuando todo esto termine finalmente pueda tener un patrullaje normal con mi Lady como antes... soñar no cuesta nada -dije mientras pasaba por el parque.
Momento donde note algo ciertamente inusual. Lo cual era que a esta por lo general quienes estaban en los bancos que era cubiertos por las sombras de los arboles eran el señor banana quien leía su edición matutina del periódico Le Monde Vespertino, y tampoco estaba el Sr. Ramier alimentando a sus palomas de forma ilegal como de costumbre.
En su lugar, la única persona que parecía estar en el parque era un sujeto que estaba cubierto por completo con una capucha negra que no dejaba ver absolutamente nada del sujeto. Aunque de igual modo, incluso cuando en realidad no estaba haciendo nada. Podía sentirlo, el tipo no dejaba de mirarme... y no me gustaba, me incomodaba.
Chat Noir: ¿Qué pasa? ¿Soy o te parezco? -pregunte aterrizando en frente suyo sin que el mostrara alguna reacción. Ni siquiera se movió.
???: ...Eres uno de esos héroes de París, ¿no? -finalmente hablo tras aparentar ser mudo un rato que basto para tensarme.
Al menos por la voz se que era un hombre. Y la voz me parece haberla escuchado en algun lado aunque sonaba diferente ¿pero dónde?
Chat Noir: Ya tú sabes -dije intentando actuar tan despreocupado como siempre. Aunque algo me dice que él no se lo creyó.
???: No lo sé... Porque honestamente tu actitud me parece falsa y no me pareces un héroe con ese traje de gatubela -dijo haciéndome tener un tic en el ojo casi por inercia.
¿Gatubela? Ese apodo nuevo.
Chat Noir: Pues con este traje puedo decir que no oculto nada -dije mientras usaba mi bastón para girar con el como si estuviera en uno de esos clubes para adultos que hay en las películas.
Se me conoce por ser un héroe despreocupado y amante de las bromas. No iba a dejar que esta tipo (que no conocía pero que claramente buscaba meterse conmigo) lograra hacer que perdiera la compostura.
???: ¿Por qué?
Chat Noir: Porque es en verdad ajustado -dije guiñando un ojo de forma coqueta.
Cosa que hizo al desconocido resoplar... ¿fue eso una risa? A mi no me engaña. Entonces el tipo tenía sentido del humor, ya con eso me sentía algo más a gusto.
???: No era eso a lo que me refería, un bromista entonces... aunque en lo personal si que pareces tener talento para el pole dance -dijo negando pero con cierto tono de diversión en su voz- ¿cómo no te han matado con esa actitud? Debes tener mucha suerte, irónico tomando en cuenta que los gatos negros dan mala suerte.
Chat Noir: Leyenda urbana -di mi opinión simplemente encogiéndome de hombros.
???: Parece que no aprendiste nada del guardián anterior después de todo, Chat Noir.
Y solo basto con esa simple frase para que cualquier intento mío de tratar de mantener la misma actitud de siempre se fuera al diablo. ¿Este tipo sabia acerca del guardián de los miraculous? ¿Cómo era posible? Es más... ¿Cómo sabía algo tan personal de él? Esto se estaba volviendo algo peligroso.
Chat Noir: ¿Cómo sabes que Ladybug es la guardiana ahora? -pregunte con mi bastón en mano listo para la pelea.
Para después solo verlo negar con decepción de todas las cosas.
???: Nunca dije que ella era la guardiana actual -aclaro para mi desconcierto con indiferencia, como si hablara del clima- solo dije que no aprendiste nada del guardián anterior, qué supuse que había cambiado porque parece que la dinámica entre ustedes dos a cambiado las últimas semanas. La de Ladybug y tú.
Chat Noir: ¿Qué? -dije con incredulidad- ¿pero tu acabas de...?
???: Solo dije la suposición de que no aprendiste nada del guardián anterior, de paso suponiendo que había un guardián -añadió el encapuchado- Nunca mencioné que el guardián anterior ya no estaba y que ahora Lady Bug era la guardiana, amigo. Esa información me la diste tú mismo.
Chat Noir: Rayos -dije empezando a sentirme molesto.
¡Odiaba sentirme utilizado! Y este tipo lo hizo con tanta fluidez y sin esfuerzo alguno que honestamente estaba sintiendo como la sangre me empezaba a hervir.
???: Ahora una pregunta... Dime ¿Cuál es la habilidad más grande de un héroe? -pregunto de forma casual para mi incredulidad.
Chat Noir: ¿Sus poderes? ¿Su valentía? -pregunte sugiriendo lo primero que se me vino a la mente.
Solo para que el sujeto se atreviera a negar con la cabeza.
???: No, piénsalo -dijo en lo que yo solo me preguntaba que estaba haciendo aquí hablando con este tipo para empezar- y por cierto... Repetir tu respuesta no hará que mágicamente la respuesta sea correcta.
Sea quien sea esta persona, estaba empezando a ponerme de los nervios.
Chat Noir: ¿Entonces cuál es, según tú? -exigí al tipo que solo soltó un suspiro cansado antes de tomar asiento en la banca junto a él.
Casanova: Siéntate -ordeno más que preguntar y yo solo hice caso- ¿sabes cómo se juega?
Y aunque al principio no entendí la pregunta. Luego la comprensión y la consternación se apoderaron de mi cuando note que, aparentemente de la nada, había un tablero de un juego de mesa en medio de nosotros. ¿Qué estaba pasando aquí? ¿De donde había salido el tablero? Podía jurar que no había nada allí hace un segundo ¡Y el tipo ni siquiera se había movido!
... ¿Estaba lidiando con un akuma? Fue lo primero que pensé ya que ¿Cómo es que de repente aparecían cosas de la nada?
Chat Noir: Claro -dije reconociendo el juego. Se trataba de damas chinas. Un juego de mesa de estrategia de origen alemán para dos a seis jugadores. El juego es una variante moderna y simplificada del juego estadounidense Halma
¿Y como rayos sabía eso? Bueno, cuando estas solo la mayor parte del tiempo y buscas formas de matar el tiempo, cualquier cosa era buena. Aunque no tenia pena en admitir que le gustaría que su kwami sea un mejor compañero de juegos.
De cualquier modo, sin que ninguno de los dos dijera nada, empezó el juego. Y aunque el desconocido en realidad no había hecho nada ni remotamente amenazante. Solo había algo que me generaba desconfianza acerca de esta persona... aún con todo, solo pasaron seis minutos y oficialmente el tipo me había aplastado en todo el sentido de la palabra.
Chat Noir: Otra vez -dije no queriendo dejar las cosas así para que luego el juego reiniciara- ¿Quién eres? -pregunte luego de mover la primera ficha. A lo cual él rio por lo bajo.
???: Tú dime, Chat Noir. O trata de adivinar -dijo haciendo fruncir el ceño.
Si algo le gustaba menos que perder, era los juegos mentales. Y estaba pasando por ambas cosas ahora mismo.
Chat Noir: ¿Cómo puedo decírtelo? ¡No te conozco!
???: Parece que realmente no aprendiste nada del guardián anterior. ¿O tal vez no te enseñó nada? Porque Ladybug seguro si estuviera formulando mil y un teorías sobre quien soy -dijo tras suspirar para mi molestia- un consejo gratis, mira por debajo de lo oculto.
Pero aunque le dijeran eso, en ese mismo momento no tenia la menor idea de que significaba esa corta frase... pero como sea. Sin querer ya había dejado que este tipo empezara este juego con el (sea cual sea) entonces ¿Por qué no llegar hasta el final y ver que era lo que quería? A fin de cuentas, aunque la situación lo incomodaba... mentiría si dijera que no era lo más emocionante que le pasaba en varios días.
Chat Noir: ... No eres un ciudadano civil -dije tras pensarlo.
???: Oh ¿Por qué dices eso?
Chat Noir: Aparte del hecho de que pareces saber que los Miraculous tienen un guardián, ya que no creo que solo lo adivinaras. También sabes más de los Miraculous de lo que deberías... Y presiento que este encuentro no fue una coincidencia -dije empezando a sacar cosas por lógica- así que... ¿Quién eres? -pregunté.
???: ¿Y? -pregunto en respuesta. Prácticamente ignorándome. Parece que aun quería ver que más podía adivinar. Muy bien amigo, lleguemos hasta el final.
Chat Noir: Me hiciste una pregunta que tiene que ver con el heroísmo como si hubieras sido un héroe antes o al menos haber lidiado con uno.
???: Podría solo ser un entrometido y decir eso por casualidad -dijo restando importancia al tema con una mano.
Chat Noir: No lo sé... Tu forma de actuar me hace pensar lo contrario -dije con seriedad- tu voz y tus gestos... Me parecen muy confiados para ser solo curiosidad de un fan entrometido -concluí.
Para que en respuesta al fin asintiera en señal de aprobación, aunque no lo suficiente para mi gusto si debía ser sincero.
???: Bien... ahora déjame decirte lo que me di cuenta en nuestra reunión -dijo con un tono serio- tienes un conocimiento patético de los Miraculous al parecer, nunca negaste nada de lo que dije sobre que no te enseñaron nada. No prestaste suficiente atención o quizás tu conocimiento fue saboteado o sencillamente el guardián anterior te enseñó nada y no hiciste nada para corregirlo.
Ok, esa acusación no me gusto nadita.
Chat Noir: ¿Dices que debería desconfiar de Ladybug por no hacer que el anterior guardián me enseñara a mí también? -pregunte en lo que el solo me ignoro para seguir con su aparente evaluación.
???: También das información con demasiada facilidad. Uno simplemente tiene que hacerte enojar o tomarte con la guardia baja. Por ejemplo, todo lo que dije fue que no aprendiste nada del guardián anterior. Fuiste tú quien proporcionó la información de que Ladybug era la nueva guardiana. Tú mismo diste la información sobre tu nivel de conocimiento actual e incluso sobre tu trabajo de héroe -dijo con un tono exasperado- otro error por cierto, yo podría perfectamente haber sido con la misma facilidad un enemigo o un espía de Shadow Moth o de alguien más -revelo para mi desconcierto.
... Odio admitirlo, pero tiene razón... aunque esperen ¿significa que no lo es?
Casanova: Continuando, tu habilidad de combate es horrendo debido a la postura defensiva descuidada en la que intentaste ponerte apenas hice mi pregunta inicial, eres como un animal, solo peleas bien cuando estás enojado. Pero pareces saber lo que haces con tu bastón, Lo que me dice que tu habilidad con el es al menos marginalmente mejor.
No sé si sentirme ofendido la verdad, ya que ¿para que negarlo? Era verdad.
???: También eres poco persuasivo, no notaste que el tablero estaba aquí a la hora de jugar ni notaste cuanto te quite tu bastón -dijo revelando para mi sorpresa que tenía mi bastón en su mano, el cual me arrojo- en general, si yo fuera un enemigo, habrías muerto al menos cuatro veces en los primeros minutos de nuestra reunión ¿sabes?
Muy bien, es oficial. Este sujeto estaba empezando a aterrarme por entre no saber quien es más el hecho de que no dejaba de darme golpe tras golpe de verdad. ¡Y no podía hacerle nada porque técnicamente no había hecho nada más allá de hablar conmigo! ¡Solo podía sentir como el corazón se me hundía y se me aceleraba el pulso!
Ni siquiera Lady Bug se había molestado en saber tanto de él. Y esta persona lo había conseguido averiguar en pocos minutos.
???: Ahora bien, dímelo. ¿Cuál es la habilidad más grande de un héroe?
Pues... ahora creo tener la respuesta correcta a esa pregunta. Y parece que he vivido engañado toda mi vida.
Chat Noir: ... El engaño -dije con certeza- la habilidad de que no sepan quién eres y que no puedan saber nada de ti con facilidad para de ese modo poder seguir siendo un héroe sin preocuparte de factores externos... tal vez por eso Ladybug fue elegida como la guardiana, porque ella es discreta cuando de su identidad se refiere.
???: Una forma bonita forma de decir que está bien ser un mentiroso para ser héroe -dijo antes de ponerse de pie- nos veremos de nuevo, Chat Noir.
Oh no, esto no esta pasando. Aun con todo sería tonto si no reconociera que el tipo no era una especia de genio. Tal vez el pueda responderme esa duda que he empezado a tener desde que el anillo negro llego a mi vida y que se intensifico con lo de anoche.
Chat Noir: ¡Espera un momento! -grite haciendo que se detuviera- no creas que me gusta eso, de hecho lo odio. Anoche me di cuenta de eso, como héroes debemos mentir todo el tiempo, no podemos confiar en nadie y herimos a los que nos importan... ¿Eso está bien?
???: ... La verdad es que no hay una respuesta fácil a esa pregunta, Chat Noir. Ser un héroe implica tomar decisiones difíciles ya veces dolorosas. La necesidad de mentir y proteger las identidades es parte de ese sacrificio. Pero eso no significa que no se pueda encontrar un equilibrio entre proteger a los demás y mantener la integridad propia -dijo sin verme ni de reojo- aunque también hay otras veces donde es mejor que les ocultemos cosas a ponerles un blanco en el pecho a quienes amamos.
Ok ¿entonces estaba bien ser sincero o no estaba bien?
Chat Noir: Pero ¿Cómo podemos encontrar ese equilibrio? ¿Cómo se puede ser héroe sin lastimar a las personas que nos importan?
???: Es una pregunta difícil, y la respuesta puede variar para cada héroe. Pero creo que es importante recordar que la confianza y la honestidad son fundamentales en cualquier relación ¿Aunque qué se yo? En eso puedo afirmar que soy un hipócrita -menciono encogido de hombros.
Aunque, en cierto, pude sentir que eso no le gusto decir eso ultimo.
Chat Noir: ¿Quieres decir que debería decirle la verdad a Ladybug? ¿A pesar de todo lo que hemos aprendido sobre proteger nuestras identidades? -pregunte sin recibir respuesta alguna- ... está bien, no me respondas. Pero dime algo más, por favor -casi que suplique haciendo que me vierta- ... ¿Qué es ser un héroe para ti?
Y de todas las cosas o reacciones que pude haber esperado de esta persona misteriosa. No me podía creer lo que pasaba cuando metió su mano entre su ropa y saco ni más ni menos que un libro. El cual me arrojo como si nada. Primero un tablero y luego un libro ¿Qué más tenia guardado?
???: Hay algunas cosas que tienes que resolver por ti mismo.
Chat Noir: ... ¿El arte de la guerra? -pregunte extrañado antes de encararlo.
Solo para acabar con la quijada del todo desencajada cuando el sujeto se quitó la capucha para revelar su identidad. Era él... todo este tiempo estuve hablando con el ladrón Casanova.
Casanova: En la guerra y en el amor todo se vale, especialmente en profesiones como la nuestra. Hasta la próxima vez, héroe. Y por cierto, trátalas bien, son algo histórico después de todo -dijo para luego literalmente desaparecer ante mis ojos.
Mientras que yo para este punto ya ni sabia que pensar. ¿En serio tuve al ladrón que nos causo tantos problemas anoche a mi lado todo este rato y no me di cuenta? ¿Pero que es lo que pasa conmigo? ¿Y qué rayos quiso con ¨tratarlas bien¨?
Aunque rápidamente me di cuenta de a que se refería cuando me di la vuelta y vi que donde estaba sentado Casanova ahora había una pintura. Era como ver a la Mona Lisa con la nariz más extraña que haya visto en toda mi vida, pero que extrañamente parecía como si siempre hubiera estado allí. Sin mencionar unos ojos que te podían transmitir mil cosas y a la vez ninguna... solo no sabía como sentirme al respecto ante esto.
Chat Noir: ... En cierto modo... Si es una obra maestra... -fue todo lo que pude decir antes de tomar la pintura- aun así... el problema es cómo deshacer esto -dije sin tener muchas ideas sobre qué hacer a continuación. Dudaba que esto pudiera ser reparado por mi lady, después de todo, no lo hizo un akuma.
A lo cual sencillamente me encogí de hombros antes de buscar al papá y al hermano de Alix, Alim y Jalil Kubdel. Ambos trabajaban en el museo y eran tanto historiadores como curadores. Siendo sus reacciones en cuanto les entregue las piezas robadas de las pinturas el abrasarme y besarme con gratitud antes de llamar a la prensa.
Vaya, no pensé que los hombres mayores podían ser tan afectuosos, especialmente el hermano de Alix. En todo caso, ahora solo me queda esperar a que llegue la prensa así como mi lady. Esta será una larga tarde.
Aunque de todos modos no pude evitar pensar en el libro que Casanova me dio... tal vez lo lea luego.
___________________________________________________________
(General Pov)
Medio día, es medio día y no hay nada. Ninguna transmisión, presentación extravagante, nada... ¿a que estaba jugando Casanova? Eso se preguntaba el joven líder de los grandes héroes que sobre volaba la ciudad del amor (procurando estar en una zona apuesta a la que sabía que patrullaba la heroína de la Catarina)
Honestamente no pensó que así sería su primera interacción con super héroes fuera de casa. No considero que en verdad algunos podían ser bastante territoriales ¿eso que importa cuando hay un criminal peligroso suelto? De cualquier manera, la prioridad era clara, encontrar a Casanova, recuperar lo robado y ponerlo tras las rejas.
Ese fue su pensamiento hasta que de repente la señal de su comunicador que usa para hablar con los de su equipo fue interceptada.
Hiro: ¿Qué pasa, chicos? Estoy ocupado ¿alguno tuvo suerte encontrándolo? -pregunto pensando que era alguno de sus compañeros.
Solo para estremecerse y fruncir el ceño al darse cuenta de quien era el que le estaba hablando.
Casanova (Miguel): Robe algunas de las mejores piezas de arte del mundo, capitán encanto -dijo de forma casual para fastidio del nipón- por cierto. Hasta ahora lo cuestiono ¿Por qué Capitán Encanto? Si nadie te ha visto debajo del casco como se sabe si eres un encanto o no. Bueno, yo lo sé, pero lo digo por el resto.
Hiro: Tú... -dijo con frialdad- ¡Las voy a recuperar!
Aunque allí es que Hiro pensó en lo ultimo que dijo y se tenso ¿acaso el tipo sabía quien era tras el casco?
Casanova: No hace falta. Chat Noir ya lo hizo.
Hiro: ¿Qué? -pregunto antes de ver las noticias en la primer pantalla que encontró.
Donde en efecto, se podía apreciar como la reportera Nadja Chamack estaba entrevistando al héroe con temática de gato negro mientras era abrasado por dos hombres que parecían ser los curadores del museo de la ciudad, junto a ellos una chica de pelo rosa que solo por la mirada que les daba a los dos hombres se podía decir que eran familia y que ella parecía querer morir de vergüenza por como actuaban sus dos familiares.
Pero aquí lo importante era el porque de la entrevista. Por alguna razón, Casanova entrego voluntariamente las partes robadas de las pinturas a Chat Noir.
... ¿Era una broma de mal gusto acaso?
Casanova: Solo llamaba para decirte que esta vez los héroes tuvieron suerte. Pero tal vez no sea así la próxima vez -dijo con un tono sugerente que solo hizo enfadar al nipón.
Si así quería jugar, pues bien, jugaría su juego. Ya el mundo no era un obstáculo a fin de cuentas.
Hiro: Tal vez la próxima vez te atrape. Ya me decidí a seguirte el juego y no habrá lugar en el mundo donde te escondas de mí.
Cosa que hizo reír al ladrón del otro lado de la línea.
Casanova: Hasta el próximo robo entonces. Capitán encanto -dijo antes de sonar con un tono más pícaro- por cierto... aunque siento que definitivamente la pintura habría sido una obra maestra, la verdad... desentonaría con el contenido de mi galería privada.
Hiro: ¿Qué quieres decir?
Casanova: Solo revisa tu correo electrónico y lo sabrás. En fin, me gustaría charlar con un té y ricos panecillos. Pero me necesitan en otro lugar, hasta más ver -dijo para luego cortar la transmisión.
A lo cual, no pudiendo evitar ser dominado por la curiosidad, regreso sobre sus pasos hasta el avión privado de Fred (donde pasaron la noche debido a que era más grande por dentro de lo que parecía por fuera, y eso era decir bastante) donde tras buscar su laptop se dispuso a ingresar a su correo... para que lo hizo.
Había un correo de un remitente desconocido, el cual una vez habría tras verificar que no estuviera infestado de virus. Lo abrió solo para ver diferentes fotos de pinturas y esculturas famosas ciertamente... provocativas. Con el pequeño detalle de que las caras estaban editadas con su propio rostro... ¡¿Casanova sabía quien era?! ... ¡¿Ese era él en un nacimiento de venus?!
Hiro: ¡Maldito pervertido! – grito arrojando la computadora al piso, rompiéndola en pedazos. Eso con la intención de ver si su rostro dejaba de enrojecerse de la vergüenza al ver que todas las pinturas tenían dos cosas en común. Su rostro en ellas... y la ausencia de ropa en ellas.
Y el golpe final a su orgullo fue que justo antes de que la pantalla junto al resto del aparato dejaran de funcionar del todo apareciera un mensaje de Casanova que decía ¨Pensé que te gustaría ver que aprecio la belleza cuando la veo, pero ni modo¨.
Es todo. Ahora debía reforzar la seguridad de todas las cámaras o cualquier dispositivo porque era evidente que el tipo había descubierto quien era como civil... ¿acaso abra obtenido los datos de Obake de algún modo? Debía de haberse asegurado de que todo en esa guarida ahora submarina no funcionaba del todo cuando tuvo la oportunidad.
Fred: Hey, Hiro, ¿Supiste? Chat Noir... -dijo su amigo que venia entrando junto a los demás.
Siendo la respuesta que casi por inercia el nipón metiera una patada de cascanueces en las ¨nueces¨ de su amigo. Haciendo que este solo se quedara sin aliento. Cosa que de hecho no sorprendió a ninguno de los demás miembros de los grandes héroes porque a parte de que siempre acababan teniendo ganas de hacerle eso a Fred. Terminaba pasando con bastante frecuencia que el rubio terminara lastimado de uno u otro modo.
Hiro: ¡Que alguien tome nota! -dijo ya harto de todo- no importa si incluso viaja a la luna. ¡Casanova es nuestra mayor prioridad! ¿Entendido? -pregunto a sus amigos.
Quienes solo se vieron entre si antes de asentir, estaban preocupados por su amigo de porque de repente se tomaba el asunto tan personal. Pero de todos modos ya Casanova los había retado y dejado en ridículo, era algo personal.
Baymax: ... Recordatorio anotado -dijo de forma casual como siempre hace- ¿Deseas que avise a tía Cass, por si debe cancelar las clases de danza madre hijos que quiere que tomen? -pregunto llamando la atención del resto.
Aunque basto una mirada del nipón más joven para que decidieran preguntar sobre el tema después. Lo cual se resumía a que con el fin de que pasaran más tiempo juntos, Cass los había inscrito en un programa de servicio comunitario ofrecido por las ex delincuentes de alto voltaje para pagar su deuda con la sociedad. Menuda suerte la del joven héroe.
Hiro: ... Nada ni nadie me salva de esas clases.
Baymax: ... Anotado, capturar a Casanova puesto como prioridad, después de cualquier actividad extracurricular a la que tía Cass te anote -dijo haciendo resoplar al joven.
A veces olvidaba lo molesto que era aun ser menor. Pero no había de otra... en todo caso, de momento solo una cosa era segura. Casanova se había escapado por esta vez. Pero ya vera la próxima, eso era un hecho.
________________________________________________________
Y con eso acaba el capítulo, pero antes de pasar a los anuncios finales, es momento de los Omakes.
Omake: Palabra japonesa para referirse a un extra de algun tipo de material como DVD, videojuegos, etc.
Habrán de esos de vez en cuando aquí, como ahora.
_______________________________________________________
(Omake 1 de 2: La ira de la guardiana)
(General Pov)
Chat Noir se encontraba sumamente confundido. Luego de haber devuelto las partes robadas de las pinturas y de ser aplaudido tanto por la prensa como por el personal del museo (que incluso el hermano de Alix le dio su número por alguna razón), llegando al punto de que lo estaban llamando el héroe del arte de Europa. Esperaba que su Lady lo felicitara del mismo modo que el resto de la gente.
No se espero que en cuanto él la vio en su punto de reunión usual ella lo tomara de los hombros para comenzar a zarandearlo con violencia buscando información de lo que paso entre Casanova y yo. Un cambio anticlimático de ha como lo habían estado tratando las ultimas horas sin duda.
Ladybug: Dilo de una vez. ¿Cómo lo hiciste? ¿Cómo le quitaste a ese ladrón de pacotilla la pintura robada? ¡¿Y porque no me llamaste?! -pregunto exaltada para preocupación de su compañero.
Chat Noir: ¡Porque no sabía quién era! ¡Solo hablamos y decidió dejarme la pintura como si nada, en serio! -dijo rápidamente en un intento de calmar a la heroína que era su compañera.
Quien solo lo soltó antes de quedarse pensando en lo que dijo.
Chat Noir: La verdad fue hasta raro, ni siquiera sabía que se trataba de él, estaba usando una capucha -comenzó a explicar- solo comenzó a preguntarme cosas al azar antes de ponerme a jugar damas chinas, que por cierto perdí. Luego me critico sobre varias cosas, y luego se fue y dejo la pintura atrás -se explico.
Aunque la mirada de la chica indicaba que no le parecía creer.
Lady Bug: ... No puedo creer su descaro, se burla de nosotros ¿y luego solo deja todo y se va? ¡¿Quien hace eso?! -pregunto molesta más para si misma que para nadie más.
Chat Noir: Él al parecer -respondió solo para ser victima de la mirada furiosa de la joven.
Lady Bug: ¡No te preguntaba! ¿Seguro que eso fue todo? -pregunto ahora haciendo que el héroe gatuno se molestara.
Chat Noir: Sí, eso fue todo. No puedo creer que me estés interrogando de esta manera, Lady Bug. No fue mi intención no llamarte, simplemente no sabía quién era en ese momento. Además, ¿por qué estás tan molesta? -pregunto haciendo que ella solo usara todo de si para no mandar a su compañero a volar con su yoyo.
Lady Bug: ¡Estoy molesta porque eres mi compañero y deberías confiar en mí para resolver estos casos juntos! No puedo creer que hayas tomado una decisión tan importante sin consultarme como la de enfrentar a Casanova tu solo.
Chat Noir: ¡Ya te dije que no sabía quien era! Además, no fue un enfrentamiento porque de hecho no hubo pelea -dijo solo para ser ignorado por la chica que sencillamente se cruzo de brazos y le dio la espalda.
Y es que por parte de la heroína, ella no iba a admitir que sencillamente se sentía con el orgullo herido luego de que un villano que no era un akumatizado ni nada la dejara en ridículo. Ni siquiera Shadow Moth o Lila la habían hecho sentir así de inútil, se habían burlado en su cara y no le gustaba nada. Sin mencionar que tampoco le gusto la prepotencia de ese héroe de la armadura morada ¡nadie le hablaba así! ... Aunque obviamente nunca le diría eso a su compañero, había que mantener las apariencias.
Mientras que por su parte, el héroe gatuno al saber que no ganaría la discusión, decidio hacer lo que siempre hacía cuando sabía que no ganaría hablando, ya fuera en su casa o en la escuela o incluso con su Lady... dar el brazo a torcer.
Chat Noir: Lo siento, Lady Bug, pero en ese momento no tenía ni idea de que estaba tratando con el ladrón. Pensé que era solo un tipo aleatorio con una capucha. No tenía ninguna razón para pensar que era necesario llamarte.
Ladybug: ¡Eso no es excusa! Somos un equipo, Chat Noir, y deberíamos tomar decisiones importantes juntos. No puedo evitar sentir que me dejaste de lado -dijo para incredulidad del rubio.
Quien solo se mordió la lengua para no responder algo subido de tono.
Chat Noir: Lo siento mucho, no fue mi intención hacerte sentir así. A veces me emociono y actúo sin pensar. Pero debes entender que hago todo lo posible para protegerte y resolver los casos -dijo en lo que ella lo vio a los ojos para acariciar su rostro suavemente.
Lady Bug: Lo sé, gatito, pero eso no significa que puedas tomar decisiones importantes sin mí. Necesitamos trabajar juntos confiar y el uno en el otro -dijo haciendo sentir mal al rubio.
Pero no obstante, eso no significaba que no hubiera una vocecita en la cabeza del gato negro que le gritaba que cuestionara. Ya que ¿ella no había tomado decisiones importantes sin él antes? Con más frecuencia últimamente.
Chat Noir: Tienes razón, Lady Bug. A partir de ahora, prometo que te consultaré antes de tomar cualquier decisión importante. Somos un equipo y debemos actuar como tal -dijo haciendo que ella sonriera.
Ladybug: Gracias, Chat Noir. Aprecio que entiendas mi punto de vista. Ahora, volvamos a la acción y asegurémonos de que ningún ladrón tengan oportunidad de robar nuevamente. No dejaremos que ningún héroe o villano venga aquí a hacer de las suyas como si fuera su casa ¿entendido?
Chat Noir: Por supuesto, Lady Bug. Juntos tú y yo contra el mundo.
Y de allí cada uno tomo su camino. ¿Ella? complacida de que al final parecía tener un poco del control que sentía que estaba perdiendo en su vida desde que se volvió la guardiana. ¿Él? preguntándose porque esa conversación le dejo un mal sabor de boca si se supone que ama a Lady Bug... ¿y porque se sintió mucho más a gusto con todo y la incertidumbre con Casanova que con ella?
_______________________________________________________
(Omake 2 de 2: Canción de amor)
(Hiro Pov)
Ahora mismo no era un chico feliz. Se que dije que cazaría al tipo alrededor del mundo, pero aún estaba el hecho de que el ladrón se les había escapado. Solo jugo con nosotros, esto no acabo siendo nada más que una perdida de tiempo, siendo eso lo que acabe pensando todo el camino de regreso.
Y con el tema no dejando de rodar en su cabeza fue que apenas escucho de lejos a su tia saludándolo y diciéndole que alguien lo había ido a ver, pero como no se encontraba, solo dejo algo para mí en mi habitación antes de irse... ¿Qué cosa?
Hiro: ¿Ahora qué? -pregunte mientras aceleraba el paso a mi cuarto donde encontré un sobre colocado con cuidado en mi cama.
El cual abrí con sospecha, solo para sorprenderme al ver que lo primero que saque fue un dibujo de mi hecho a carboncillo. Junto a una nota cuya letra la reconocía fácilmente además de un USB, fue Miguel quien escribió esto.
¨ Hola, Hiro. Perdón por llegar de improviso pero quería sorprenderte luego de que pasaran un par de días sin verte o hablar contigo. De paso, perdón por eso, mi padre insiste en acaparar cada minuto posible conmigo luego de no tenerme a su lado en años y todo eso, aparte de lo de Marco que termino muy mal ¿Cómo íbamos a saber que ese desodorante era tan propenso a las alergias? Parece que necesitamos un Baymax propio jaja.
En fin, hoy decidí hacer algo especial para ti. Me emocioné tanto con la idea de verte que hice un dibujo retrato tuyo (le pedí ayuda a Leo) y también traje la nueva canción en la que mi padre trabajo para nosotros solo para ti. Serás el primero en escucharla y me gustaría saber tu opinión. Quería entregártelos en persona, pero por desgracia no te encontré en casa.
Dejé la nota junto al regalo en tu cama, me disculpo si parece muy intrusivo. Espero que te guste el retrato y que la canción transmita lo que se espera, si te gusta, sé que será un éxito. Quiero que sepas que cada trazo del dibujo fue hecho con dedicación y que cada palabra de la canción de verdad proviene de lo más profundo de mi corazón, no es cantar por cantar. Según el nuevo guardaespaldas del viejo, un tipo llamado Felony Carl, si el fuera una chica, se sentiría bastante conmovido por la canción.
No veo la hora de verte. Espero que este pequeño gesto te haga sonreír y te haga sentir especial, porque eso es exactamente lo que eres para mí (perdón si me estoy pasando, es mi primera carta ¿sabes?)
Ya nos veremos en el trabajo, nos vemos, Miguel. ¨
... Ok, acabo de leer esto y me preocupa el hecho de que solo abrace tanto la carta como el dibujo contra mi pecho en lo que una sonrisa boba se formaba en mi rostro. Esto de verdad me ayudo a calmar mis nervios.
Hiro: También dijo que dejo una canción... bueno, veamos -dije antes de colocar la USB en la computadora para comprobar que efectivamente solo había un archivo. A lo cual le di click, y dejé que la canción se reprodujera.
(Me lleva la cachetada con Universal. En todo caso la canción es Any Kind of Guy de BTS, si le dan ¨Mirar en YouTube¨, debería escucharla y verla sin problemas)
Pues bueno, fue una linda canción, eso era lo que creía.... si el sonrojo en mi cara y el hecho de sentir mi corazón latir muy rápido eran indicios de eso. Solo, yo, es que... ¿esto fue una declaración? Digo, la canción decía chica, pero ¿no fue una indirecta?
No ¿en qué cosas estoy pensando? Aún así... debería ver como se lo agradezco a Miguel, solo esto basta para que me sienta de muy buen humor el resto del día, de la semana tal vez... fue muy lindo de su parte.
Si hubiera habido ositos de goma al final definitivamente me habría flechado tal cual cupido... sí, debo dejar de leer esas novelas que le gustan a Honey Lemon. Pero la idea es esa... ahora quiero ositos de goma.
Notes:
Y ese fue el capitulo de esta vez. Como siempre pueden votar, comentar, lo que gusten.
¿Y que les pareció?
¿Qué tal estuvo el primer crossover? No hace falta decir que más adelante retomaremos esta desconfianza naciente en Chat Noir para algo más.
De momento aviso que antes de que aparezca un nuevo talismán abra otro robo estrafalario. Les daré una pista sencilla, ¨E.T.¨
Y claro que eso viene con un crossover diferente, aunque ese no lo adivinan ni en un millón de años. Punto si lo hacen.
Por ahora me despido, hasta luego.
Chapter 9: Capitulo 7: El gran llamado a las estrellas (1/2)
Notes:
(See the end of the chapter for notes.)
Chapter Text
(General Pov)
(Llanura de Salisbury, Inglaterra) (Noche)
Habían pasado unos días desde que se supo lo del gran robo de arte en diversos países del viejo continente. Y debido a ello, ya el nombre de Casanova era conocido por todo el mundo, con personas hablando mil y un cosas del misterioso ladrón de que no tenían idea ni de su origen ni de sus objetivos.
Pero una cosa tenían en claro, era hábil en su trabajo, y por ello es por lo que no debían bajar la guardia ante el más mínimo avistamiento de dicha persona. De allí que por dicha razón una persecución policial por la propia Scotland Yard estaba siendo realizada a mitad de la llanura de Salisbury. La cual es parte de un sistema de tierras bajas de tiza en todo el este y sur de Inglaterra formado por las rocas del Grupo Chalk y se encuentra en gran parte dentro del condado de Wiltshire, pero se extiende hasta Hampshire.
En dicha llanura se dedican grandes superficies al entrenamiento militar y, por tanto, la llanura escasamente poblada es la mayor superficie de pradera calcárea que queda en el noroeste de Europa. Pero además de ello, la zona era famosa por su rica arqueología, incluido Stonehenge, uno de los monumentos más conocidos de Inglaterra y que hasta donde sabia la policía británica, era el objetivo de Casanova.
Inspector Ingles: ¡Detente y ríndete, Casanova! -ordeno desde la patrulla solo para que el joven ladrón activara la función de nitrógeno de su auto para tomar la delantera.
Para ellos era una persecución para atrapar a un aspirante a criminal de fama mundial. Para Casanova, era solo una carrera que quería ganar.
Policía 1: ¿Vieron eso? -pregunto el oficial que conducía mientras el inspector fruncía el ceño.
Inspector Ingles: Maldición -dijo al ver a donde había estacionado Casanova su auto.
En efecto, tal como ellos habían pensado, el objetivo del ladrón no era otro más que Stonehenge. Donde una vez el vehículo entro en dichas ruinas, todas las patrullas no perdieron el tiempo y rodearon todo el circulo arquitectónico, dejando al criminal aparentemente sin opciones.
Policía 1: Hemos formado un perímetro de 40 kilómetros. No podrá escapar -informo al oficial de mayor rango que solo observaba la zona con cautela mientras los oficiales peinaban el área.
Policía 2: ¡Mire inspector, esta por allá! -señalo hacia arriba.
Y fue que de ese modo todos los presentes observaron al famoso ladrón parado como si nada sobre una de las rocas que conformaban las famosas ruinas con una sonrisa de superioridad mientras el viento ondeaba su capa y su ropa con naturalidad mientras el joven era iluminado por las luces de un helicóptero judicial.
Inspector Ingles: ¡Entrégate, Casanova! -ordeno con un alta voz- ¡No podrás robar Stonehenge! ¡Scotland Yard te tiene rodeado! ¿Qué dices a eso? -pregunto sin que el chico pareciera haber escuchado nada.
Solo para que vieran como el joven chasqueo los dedos. Y al mismo tiempo que eso paso, todo Stonehenge comenzó a temblar al punto de que las rocas que conformaban el famoso monumento de la antigüedad comenzaron a temblar también. De allí en más los oficiales solo pudieron ver con incredulidad como cada una de las piedras era tragada por la tierra sin que pudieran hacer nada al respecto.
Y cuando quedo solo una piedra que era en la que Casanova se encontraba parado con la luna detrás suyo.
Casanova (Miguel): ¡Yo les digo, gracias y buenas noches! -dijo antes de desaparecer con todo y roca. Dejando lo que solía ser Stonehenge como nada más que una planicie con varios agujeros en el suelo que era donde antes solía estar uno de los misterios de la antigüedad de la historia humana.
Inspector Ingles: ¿Es que no hay nadie que pueda atrapar a Casanova? -pregunto el hombre fastidiado mientras los oficiales solo miraban la escena sin entender todavía como lo había hecho.
Solo para que poco después Scotland Yard convocara a su equipo de investigadores para analizar todas las pistas y pruebas disponibles. Revisan minuciosamente el área donde solía estar Stonehenge, buscando cualquier indicio que pueda revelar cómo Casanova logró realizar su hazaña. Llegando incluso a ponerse en contacto con renombrados arqueólogos y científicos que han estudiado Stonehenge durante años.
Mientras tanto, los medios de comunicación y el público en general estaban desconcertados por lo sucedido cuando la noticia se hizo pública. Las teorías y especulaciones sobre los métodos utilizados por Casanova se estaban volviendo virales en las redes sociales y los periódicos. Llegando a haber especulaciones que iban desde posibles conexiones con fenómenos sobrenaturales a tecnología avanzada única en su clase.
Pero una cosa era segura, Casanova ya estaba de nuevo en sus andadas y solo había una pregunta que hacer ¿Qué iba a robar ahora?
____________________________________________________________
(Hiro Pov)
(A la mañana siguiente)
Barb: ¡Agiten los brazos como si fueran un águila volando! ¡arriba y abajo! ¡arriba y abajo! ¡ejerciten esos deltoides! -dijo mientras guiaba la clase para un estiramiento matutino antes de comenzar las lecciones de baile como tal- ¡les dije como águilas no como gallinas!
Juniper: ¡Todos y todas a sudar, vamos! ¡Rodillas arriba! ¡No sean debiluchos, parecen pollitos mojados! ¡Se que pueden hacerlo mejor, arriba y abajo, arriba y abajo! ¡todos juntos! -dijo mientras continuaba el ejercicio junto a su madre- ¡vamos, un caracol podría hacerlo mejor!
Y ha todo esto ¿Cómo porque me encontraba siguiendo las instrucciones de este par de excriminales? Sencillo, como parte de su contrato con Rivera Solutions debían de hacer alguna actividad que entrara en la categoría de servicio comunitario para así conservar sus empleos y cumplir con su libertad condicional, y ¿Cómo no? Ellas eligieron el baile.
Más específicamente, el concepto de madres e hijos, cosa que llamo la atención de varias madres de la ciudad, entre ellas mi tía, quien se encontraba justo a un lado mío feliz de la vida haciendo ejercicio para estirar músculos antes de comenzar la clase. De cualquier modo, solo no había modo de librarme de esto.
Pero al menos el calentamiento ya acabo... y ya me sentía sin aliento y quería irme. Ni si quiera peleando con villanos sudo tanto (aunque supongo que tiene que ver que a diferencia del resto, yo soy quien menos se moviliza estando sobre Baymax la mayor parte del tiempo... Nah).
Barb: Ahora que ya hemos sentido algo de esa energía de la juventud que estos jóvenes sienten a diario, señoras. Comencemos la clase, pero antes, unas palabras de nuestro patrocinador -dijo señalando a la puerta.
De la cual el propio Don Héctor se abrió paso. Cosa que me extraño ¿Qué estaba haciendo aquí y no en la empresa? ¿Acaso volvió a dejarle todo el trabajo de oficina a Rosa?... ¿De que me sorprendo? Ni siquiera ha pasado un mes desde la nueva administración y ya casi todos sabían que quien manejaba la empresa era Rosa y el era solo la figura pública, aunque eso no quitaba que aun con todo, era el jefe de todos, incluyendo el mío.
Héctor: Buenos días a todos, antes de comenzar, se lo que piensan ¿Quién es ese galán? Héctor Rivera, encantado. Y para las madres solteras, si quieren luego de la clase tomamos un café o algo, no me quejo -dijo con un tono juguetón haciendo reír a algunas de las mujeres para disgusto de sus hijos- pero ya en serio. Vine para hablar de un par de cosas antes de ir a unas reuniones , y se que varios de los presentes tienen dudas tanto de esta clase como de quienes la están impartiendo.
Bueno, en eso no se equivoca la verdad.
Héctor: Sus madres buscan pasar tiempo con ustedes, pero no finjan chicos, yo sé que la mayoría preferiría estar en cualquier otro lugar excepto aquí. Así que hablemos claro... tal vez para algunos estas clases lleguen a ser algo absurdo, una perdida de tiempo, algo poco practico o pasado de moda, pero déjenme decirles algo chicos y chicas... el amor es universal, solo que lo buscamos en formas diferentes, lo oímos en canciones diferentes. Ya sea romántico, fraternal, familiar, u otro.
... ¿Ahora de que va esto?
Héctor: Tal vez no les guste estar aquí por pena o por pensar un fracaso. Y lo entiendo, hacer algo, lo que sea, es difícil. Es más fácil culpar a tu padre, al entorno, al gobierno, a la falta de dinero. Pero, aunque encuentros algo o alguien a quien culpar, eso no hace que desaparezcan los problemas, eso va tanto para los jóvenes como para las madres -dijo con una seriedad que pocas veces se ve en él- déjenme mostrarles algo... Señorita Cass, me permite -dijo extendiendo su mano.
Hiro: Oiga, no se atreva a...
Cass: Hiro, aquí no -me dijo con seriedad para mi desconcierto- no es la cafetería para que te deje salirte con la tuya, además... es una clase, vinimos a aprender.
Y antes de darme cuenta mi tía y el padre de Miguel estaban ¨abrazados¨ (así lo veía a mis ojos) en una posición para un típico baile de salón. Y juro que en ese momento deseaba tener un sartén, llave inglesa o cualquier otra cosa a la mano para arrojársela a la cabeza al desgraciado.
Héctor: Bien, no haremos nada del otro mundo. Solo vamos a movernos... eso, es muy sencillo -dijo para luego empezar a moverse- y ahora vamos a caminar. Si, vamos a caminar ¿estamos caminando? No, bailamos -hablo sin dejar de sonreír- ósea que si sabes caminar, sabes bailar.
¿Cuál es su juego exactamente?
Héctor: Verán, si ella deja que la guie, es que confía en mi -comenzó a explicar a la clase- pero además... confía en si misma. Bien, ahora por ejemplo... si sus hijas de 16 años se sienten fuertes y seguras y confían en si mismas ¿creen que es posible que algún idiota las deje embarazadas? Y si sus hijos aprenden a tocar a una chica con respeto ¿Cómo creen que trataran al genero opuesto el resto de su vida? Y ustedes como madres los ayudaran a ellos y ellas con eso. Gracias -dijo separándose de tía Cass.
Quien para mi desconcierto hasta le guiño un ojo antes de volver a mi lado... es oficial, no me importa quien sea, ahora mismo quiero matar a este desgraciado.
Héctor: Verán, señoras y jóvenes, eso es lo que aprenderán en estas clases que Barb y su hija Juniper impartirán, enseñarán baile. Pero además de eso, también enseñaran las normas que enseñaran a sus hijos aquí presentes ahora o en el futuro porque crean jóvenes, ustedes serán madres y padres también -dijo con una sonrisa- el respeto y la dignidad, y eso ayudara a que tengan una visión del futuro que no les abandonara, una visión del futuro que siempre tendrán... ¿alguna pregunta?
Madre 1: (levantando la mano) ¿Usted también dará clases debes en cuándo? -pregunto sacando algunas risas de las presentes.
Héctor: No, no soy un bailarín profesional, al menos no como antes. Pero estoy aquí para apoyar a Barb y Juniper en su labor. Mi enfoque principal es asegurarme de que todos ustedes tengan una experiencia positiva y significativa en estas clases. Estoy comprometido con el bienestar de la comunidad y quiero ayudar a fortalecer los lazos familiares a través del baile. Así que, aunque no me atreveré a dar las clases de baile, estaré aquí para brindar apoyo y motivación -dijo antes de entregar la clase al dúo de madre e hija y quedarse de observador.
Siendo mientras la clase transcurría que aunque me desagradara la idea, no podía negar tanto que Barb y Juniper sabían lo que hacían, como el hecho de que Héctor aún con todo y sus hábitos y actitudes cuestionables era una persona que a simple vista tenias más corazón y humanidad que Krei, a simple vista, aclaro. Además, teniendo tiempo libre se entiende que este aquí si lo pienso bien.
¿Y porque no está con la banda de su hijo? Pues al parecer las reuniones que dijo hace un momento lo tendrían de manos atadas hasta mañana ahora que recuerdo. Y su mansión estaría sola y sin supervisión, lo que llevo justamente a la discusión del día anterior.
---
(Flashback de ayer)
Resumen rápido. Ensayo de una nueva canción ¿Problema? Héctor no se había tomado su café de la mañana ni sus tragos nocturnos por lo que estaba de malas. Y todos los presentes nos encontrábamos en la zona cero de desastre.
Héctor: ¡Corte! -dijo deteniendo el ensayo.
Miguel: Sonó grandioso ¿no? -pregunto el líder del grupo juvenil a su padre que estaba en los controles de la cabina de sonido junto a Rosa y a mí.
Héctor: No, Green Day suena grandioso ¡Ustedes solo casi me hacen vomitar! -dijo haciendo que los chicos empezaran a protestar, a lo cual solo pulso un botón dejando muda la cabina y a Miguel junto a los demás sin que se les escuchara una sola palabra de lo que se quejaban.
... Seré sincero, necesito un botón de esos o en todo caso, una habitación como esa solo para Fred.
Héctor: Lo siento, no los oigo ¿Qué dicen? -pregunto haciendo gestos burlones a lo cual su sobrina lo golpeo con una carpeta que tenia en mano.
Rosa: Entiendo que últimamente estés estresado por todo lo de ser el nuevo CEO de una multinacional de gran renombre y todo eso. Yo también estoy estresada ¿Por qué no puedes decirles que cantaron bien? ¿O agradecerlos su arduo trabajo? -pregunto a la vez que le di la razón.
Héctor: Sencillo, agradecer cuando no es necesario llega a verse como un signo de debilidad incluso, y podría hacer que te tomen del brazo cuando tu solo quieres darles la mano -explico como si hablara con niños pequeños- además, ellos nunca me agradecen a mí. Como el chino este parado junto a ti.
Hiro: ¿Disculpe? ¿Y porque debería agradecerle? -pregunte cruzado de brazos.
Héctor: Por no denunciarte por ataques intencionados a mi persona en la cafetería de tu tía o de una por tu intento de homicidio a mi persona con ese café, para empezar -dijo en lo que yo estaba por responder con algo sarcástico.
Cuando en ese momento los chicos salieron de la cabina de sonido con urgencia, esto parece que se pondrá bueno... y yo sin palomitas.
Miguel: Viejo -dijo llamando la atención de su padre- queríamos agradecerte -dijo en lo que los tres procedieron a justamente dar gracias a Héctor por lo vivido hasta ahora desde que formaron Crazy Land tanto para mi incredulidad como para la del propio Héctor.
... ¿Qué rayos...? ¿A que jugaban?
Héctor: Pues vaya -dijo reaccionando luego de que Rosa lo golpeara de nuevo- yo por mi parte, pues solo quería decir que... ustedes están... libres por hoy -dijo haciendo que Rosa y yo casi quisiéramos golpearnos la frente.
Aunque por su parte los chicos estaban celebrando ese resultado, parece que su intención era justamente que los dejara ir... bien jugado.
Héctor: En todo caso, repasando el plan de mañana. Rosa y yo estaremos todo el día y posiblemente hasta al día siguiente entrevistando estrellas que quisieran firmar con la nueva división de la empresa, Rivera Entertainment -dijo con seriedad- esto como un plan B por si la idea de la banda no funciona y ustedes acaban fallándome.
Miguel, Marco y Leo: ¡¿Vas a reemplazarnos?! -preguntaron consternados.
Sentimiento que compartía con ellos, ya que ¿era un chiste? Luego de todo lo que hizo por estos chicos, que uno es su propio hijo aclaro ¿para hacerles eso? Y pensaba que Krei era despreciable.
Marco: ¡No vas a reemplazarnos después de que veas mis nuevas fotografías! -dijo sacando un par de esas de detrás suyo ¿Dónde las tenía guardadas? – Un joven y sexy doctor o un sexy y grasiento mecánico ¿Cuál prefiere?
Héctor: Tengo una gran idea -dijo tomando las fotos- pondré estás con las demás -dijo para luego romper las fotos como si nada para consternación del moreno- ahora, Rosa. ¿A quien pusiste a cuidar nuestra mansión? -pregunto a la vez que la chica rápidamente levanto un dedo.
Rosa: Oh no. Tu dijiste que esta vez te encargarías de eso.
Héctor: ¿Qué? ¡No hay forma de que yo haya dicho...! -reclamo justo antes de que ella presionara su teléfono.
Solo para que después se escuchara como se reproducía un audio con la voz de Héctor que decía: ¨Rosita, cariño, yo encontraré a alguien que cuide mi mansión¨.
Héctor: ¡Rayos! -exclamo a la vez que Rosa nos miraba con picardía.
Rosa: Ahora lo grabo todo, está en la constitución.
A lo cual yo solo recordaba una vez más lo que supuse desde el día que conocí a Rosa (lo cual hubiera sido mucho antes de yo convivir más con los clientes de la cafetería ¿Cómo iba a saber que ella era clienta frecuente?) el hecho de que era mujer peligrosa.
Héctor: Pues como sea, puedes jugar tu juego y creerte superior a mi después. Entre tanto ¿Quién desempolvara el plasma de 100 pulgadas? ¿Y alimentara nuestras mascotas exóticas? ¿Y se asegurara de que la sala de juegos de un millón de dólares este a 21 grados? -pregunto.
Solo para notar que el trio de chicos ya se encontraba casi que respirando en su cara de lo cerca que estaban.
Los 3: ¡Nosotros lo haremos!
Héctor: ¿Qué cosa? -pregunto divertido- ¿En serio creen que dejare a unos monos en mi mansión? Solo con Miguel tengo dudas y es mi hijo.
Leo: ¿No se suponía que éramos perros?
Héctor: ¡Son mono perros! ¡Y la respuesta es...! ... No -dijo al final para dar fin a la discusión.
A lo cual yo decidí que era momento de hacerme escuchar. De allí que sin preguntar si quiera, me llevo a tío y sobrina a la oficina principal de la empresa para dejar las cosas en claro, si por algo era conocido, era por no guardarme mi opinión a fin de cuentas.
Hiro: Esta es la cosa, creo que deberían dejarlos cuidar la casa -dijo para la sorpresa de ambos- sería una excelente forma de agradecerles por su trabajo.
Héctor: Chinito, no se si lo entiendas, pero es una mansión. Y la respuesta sigue siendo no -dijo mirando a su sobrina- que Carl lo haga.
Rosa: Oh no. ¿No recuerdas lo que paso la ultima vez que dejamos a Felony Carl cuidando la mansión hace solo 3 días? -pregunto presionando un botón.
Lo que hizo que una pantalla de la oficina se encendiera para mostrar a un Felony tratando de hacer la caminata lunar de Michelle Jackson usando nada más que una camisa blanca, calcetines y ropa interior blanca con música de piano de fondo. Cosa que acabo con que el grandulón no viera por donde iba y terminara arrojando al piso una escultura, a lo cual luego solo salió corriendo, terminando así el video.
Héctor: Buen punto. Si no fuera tan buen jefe le hubiera cobrado eso de su salario -dijo al recordar lo sucedido.
Rosa: Eso y que si de verdad lo hubieras hecho, el pobre hombre hubiera terminado de pagar esa estatua en al menos 50 años con lo que gana, que no es poco por cierto -dijo ajustando sus gafas- en todo caso, debemos mandar los correos y organizar todo el cronograma ya. Y necesitamos quien cuide la casa, hagamos caso a Hiro y que los chicos se encarguen.
Y no hace falta decir que Héctor no parecía nada feliz con la idea. Pero aún con todo al final solo resoplo con resignación. Ya había dado el brazo a torcer.
Héctor: Bueno, supongo que podríamos intentarlo -dijo antes de fruncir el ceño- pero quiero que quede claro que cualquier problema que surja será responsabilidad de ellos y no quiero excusas si algo sale mal.
Rosa: Entendido, tío. Nos aseguraremos de establecer reglas claras y supervisaremos de cerca su desempeño. Además, podemos mandar a Carl directamente para allá en caso de alguna emergencia -dijo haciendo que el hombre solo asintiera ya cansado de discutir.
Hiro: Gracias, Don Héctor. Estoy seguro de que los chicos apreciarán esta oportunidad y harán todo lo posible para cuidar de la mansión.
Héctor: Si, si, si, está bien, lo intentaremos. Pero si algo sale mal, no digan que no les advertí -exclamo con terquedad- ahora tráiganlos aquí -ordeno.
Solo para que cuando la puerta se abrió, ya el trio de chicos estaban en el suelo revelando que nos habían seguido y que se habían quedado espiando y escuchando todo.
... Ok, hasta yo me estaba arrepintiendo de esto, pero ya que.
(Fin del flashback)
---
Hiro: Supongo que mientras recuerden las reglas que establecimos las cosas no deberían de salirse de control -dije recordando las mencionadas.
Regla 1: Permanecer fuera del salón de juegos. Regla 2: No llevar comida del refrigerador a la sala. Regla 3: No sentarse en el sofá federico Vininy de 40 mil dólares de Héctor. Regla 4: No tocar el gato peruano sin pelo de Rosa, Monty. Y regla 5: Si cualquier cosa estaba rota o fuera de lugar, lo iban a pagar caro.
... Muy bien, ahora que estoy repasando las reglas me doy cuenta de que al final del día tendré que rezar para que todo salga bien. Ya que aun con la confianza que le tengo a Miguel y demás... seguían siendo adolescentes.
Pero en todo caso, no fue hasta el descanso de la clase que algo paso, y eso fue que mi celular recibió una llamada de un numero desconocido. Y al momento de contestar, rápidamente sentí como si me hubiera tragado un limón al escuchar esa voz que desde hace tiempo me causaba malestar el solo oírla.
Ese desgraciado... Casanova.
Casanova (Miguel): Hola chinito lindo -dijo divertido- solo quería decirte que acabo de cometer uno de mis más osados robos.
Hiro: ... ¿Cómo? -pregunte extrañado pero alerta- sea lo que sea que tramas esta vez. No te saldrás con la tuya -dije susurrando para que ni mi tia ni ninguno de los presentes me escuchara.
Casanova: Inténtalo si quieres, no me atraparas -dijo divertido- y posdata, ¿Esos leggins que usas? Deliciosos, me dan una imagen perfecta de lo que es mío -dijo para luego colgar.
A la vez que yo procedí a ver como loco en todas direcciones ¿me estaba espiando? ¡Ese desgraciado!
Pero todavía quedaba la pregunta de ¿Qué se robo ahora? Aunque dicha pregunta la respondió Don Héctor cuando prendió el televisor que se encontraba en una esquina del estudio de baile.
Siendo de ese modo que pude ver el noticiero de ultima hora en el que Bluff Dunder hablar acerca de la última hazaña de Casanova. Burlar a Scotland Yard y robarse completamente todo Stonehenge.
Hiro: ... ¿Qué cara...? -dije incrédulo antes de sentir como me jalaban la oreja como reprimenda.
Cass: Hiro, lenguaje -dijo en lo que todos los presentes pusimos nuestra atención en las noticias.
Bluff Dunder TV: Y cómo pueden ver -sigue narrando el reportero principal de San Fransokyo- donde antes estaba el famoso monumento antiguo. Ahora no hay nada. Porque Casanova se robó las 162 piedras qué conformaban las ruinas. Nadie sabe quién construyó el monumento hace 5 mil años, pero curiosamente hay como 600 ruinas parecidas en todo reino unido. Hay que reconocerlo, Casanova solo roba lo mejor -dijo con cierto aire de intriga.
Mientras que yo sentía que debía contar desde ya hasta 100 al menos para no acabar explotando allí mismo. ¿Primero partes de pinturas y ahora todo un antiguo tesoro de la antigüedad? ¿Cuál es el gran plan ahora?
Una cosa es segura, esta vez lo atraparemos.
______________________________________________________
(Un rato después, Basemax)
Honey Lemon: Hiro, hola ¿Cómo estuvo la clase? -pregunto al ver llegar al chico que sin más tomo asiento a un lado de la mesa.
Hiro: De momento no me quejo, pero los pies me matan -dijo antes de notar algo inusual.
Lo cual se trataba de una caja musical de forma rectangular de color blanco, con un relieve de color dorado, que tiene el diseño de enredaderas. Sin mencionar que por obviedad a un costado tenia una manija para que todo el mecanismo de la caja funcionara.
Hiro: ... ¿Eso de dónde salió? -pregunte señalando el objeto.
Go Go: Otra pista de Casanova entregada por Sirque -dijo mientras inflaba un globo de chicle.
Bueno, eso lo terminaba de confirmar, al parecer el nuevo trabajo de Sirque era ser la mensajera de Casanova. Vaya que este era un mundo pequeño.
Hiro: Ya veo... pues revisémosla -dije en lo que Fred golpeo la mesa con ambas manos.
Fred: ¿Y que pasa si es una trampa o una bomba?
Hiro: Creo que es un hecho que ese no es el estilo de Casanova. Él no deja trampas... Solo pistas.
Go Go: Aunque por si las dudas... Fred, dale cuerda, los demás, detrás de la barrera de seguridad -dijo con naturalidad.
Para que luego a los pocos segundos todos menos Fred estuviéramos detrás de dicha barrera mientras que nuestro amigo, con ya de por si un bajo instinto de supervivencia y auto conservación, solo se encogió de hombros antes de tomar la caja y hacer girar la manija. A lo cual se escuchó una música ciertamente tranquila antes de que la caja se abriera, revelando una estatuilla.
Wasabi: Oigan, esa es una estatuilla maya de la península de Yucatán -dijo haciendo que todos lo viéramos como si le hubiera crecido una segunda cabeza o similar- ¿Qué? me gusta la arqueología.
Go Go: Nada, es solo que es raro que digas que te guste algo que implique ensuciarte -dijo ya que para todos nosotros era bien sabido de la afición a la limpieza de nuestro amigo.
Wasabi: ¡Pará nada! Solo me gusta ver las fotos, el detalle de algunas de las piezas arquitectónicas. Tienen que admitir que en cierto modo tienen su simétrico encanto.
... Ok, a cada quien lo suyo.
Hiro: En todo caso... -dije tras pensarlo un poco- lo cierto es que no entiendo nada. ¿Qué tienen en común las ruinas de Stonehenge de Inglaterra con los mayas de Yucatán?
Ya que de hecho no lograba que una relación se formulara en mi cabeza. Hablábamos de dos lugares que estaban a miles de kilómetros de distancia con una diferencia de cientos de años, sino es que miles. Sin mencionar que antes de que América fuese descubierto el mundo era unicamente Europa y Asia del pasado. No tenia sentido.
Pero de nuevo, Wasabi sorprendió a todos con sus aparentes conocimientos de arqueología.
Wasabi: Hace 2000 mil años los mayas inventaron un calendario parecido al moderno. Y por otro lado, mucha gente cree que la función de Stonehenge era un reloj gigante qué marcaba el inicio, la mitad y el final del día -dijo haciendo memoria- aunque más que un reloj, era como un almanaque para que la gente antigua supiera cuando eran los solsticios de verano e invierno.
Fred: ¿Entonces qué? ¿Busca hacerse con una agenda antigua o algo así? -pregunto en lo que nuestro amigo moreno se encogía de hombros.
Wasabi: Eso me parece a mí, eso si no nos vamos por lo ridículo. Como qué se supone que Stonehenge era un lugar donde aterrizaban los extraterrestres cuando visitaban la tierra en el pasado -dijo antes de taparse la boca.
Pero el daño ya estaba hecho. Todos podíamos ver como Fred mostro una sonrisa de oreja a oreja al punto de que parecían salir chispas de sus orificios como si fuese un cohete que estaba a nada de estallar y salir disparado al cielo. La emoción lo estaba consumiendo por completo.
Fred: Oh por Dios...
Honey: ¿Freddy?
Fred: ¡Oh, por Dios!
Go Go: Ay, no...
Fred: ¡Casanova intentará contactar con extraterrestres! -dijo emocionado.
Mientras que el resto de nosotros solo guardamos silencio sin saber como reaccionar ante la resolución a la que había llegado nuestro amigo de imaginación de infinito más uno.
Go Go: ... ¿Quién le pega esta vez? -pregunto suspirando.
Siendo la respuesta el propio Mini Max quien entro volando a la sala de juntas con una bolsa llena de cocos, los cuales dejo caer todos encima de Fred y lo hicieron ver estrellas.
Fred: ¿Alguien anoto la matricula del camión del vendedor las frutas? -pregunto medio atolondrado antes de recomponerse a los pocos segundos- ¡aunque igual piénsenlo, tiene sentido!
Honey Lemon: Freddie, los extraterrestres no existen -dijo tratando de hacer entrar en razón a Fred. Cosa que sabíamos que era causa perdida.
Wasabi: Aunque -dijo en lo que se tensaba- ...si existieran. Y Casanova logra contactar con ellos... Sería el logro científico más grande de todos -dijo casi en un susurro- pasaría a la historia como quien contactó con los extraterrestres.
... ¿Ese tipo recordado por lograr el descubrimiento científico del siglo o del milenio al hacer contacto con vida extraterrestre?... ¡Primero muerto!
Go Go: Pero ¿por qué Casanova estaría interesado en eso? ¿Qué beneficio obtendría de contactar con extraterrestres?
Fred: No lo sé con certeza, pero tal vez esté buscando conocimientos o tecnología avanzada que solo los extraterrestres podrían tener. Podría ser algo realmente importante -dijo convencido de su teoría.
Honey: Pero chicos, ¿no creen que esto suena un poco descabellado? Quiero decir, ¿realmente creen en la existencia de extraterrestres y en que Casanova está tratando de contactar con ellos?
Hiro: Bueno, Honey, la verdad es que el universo es vasto y desconocido. No podemos descartar la posibilidad de que haya vida inteligente en otros planetas -dijo amargo por el pensamiento- además, Casanova hasta ahora ha sido un sujeto misterioso y enigmático, así que no me sorprendería que esté involucrado en algo tan intrigante como eso -dije aguantándome las ganas de salir ya mismo a buscar al tipo- de cualquier modo, supongamos que Casanova realmente está tratando de contactar con extraterrestres... ¿algo más que puedas decirnos al respecto, Wasabi? -pregunte.
A la vez que él solo tomo la caja de música con la estatuilla para verla más de cerca.
Wasabi: En todo caso... Está estatua tiene un escudo. Eso me recuerda que hubo un niño rey maya llamado Pakal en la ciudad de Palenque. Su nombre significaba escudo, la pista debe ser ese lugar... Aunque puede ser una trampa -menciono en lo que todos solo suspiramos ante la obviedad de ese hecho.
Honey Lemon: No perdemos nada.
Fred: ¿Pues que estamos esperando? ¡Todos al Fred jet! -dijo emocionado.
... ¿Cuándo decidimos ponerle así al jet del señor Frederickson?
____________________________________________________
(Horas después, zona arqueológica de Palenque, estado de Chiapas, México)
Esta vez para nuestra suerte el vuelo no duro tanto debido al hecho de que México y Estados Unidos estaban uno al lado del otro. Y por descarte, en cuanto llegamos al estado de Chiapas la primer parada para nuestra investigación si o si debía ser la zona arqueológica donde solía vivir el niño rey, Pakal.
Siendo de ese modo que sin problemas llegamos a lo que parecían ser las ruinas de toda una ciudad maya en el centro de la selva tropical. Ese lugar destaca por su historia y era uno de los sitios más importante de la cultura maya junto a Chichén Itzá, Calakmul y Tikal. (Si, durante el tiempo de viaje aprendo bastante de los lugares a los que vamos, hay que sacar provecho al tiempo de vuelo ¿no?)
El asunto es que una vez llegamos, decidimos inspeccionar primero el templo de las inscripciones, una pirámide que de hecho era la tumba de Pakal.
Lo cual fue una decisión acertada, ya que no dimos ni dos pasos al interior de la construcción cuando escuchamos unas voces, a lo cual nos abrimos paso en silencio hasta llegar al origen de las voces.
Donde una vez llegamos, lo primero que vimos fue a Sirque a través de una llamada holográfica dando instrucciones a otros dos sujetos.
Sirque: Apresúrense con la trampa. Los Grandes héroes no deben tardar en llegar -ordeno al par de sujetos que obedecieron a regañadientes.
El primero de ellos era un chico bajito con bata de laboratorio y cabello castaño. Pero hasta allí llegaban las cosas que se podían considerar ¨normal¨ en él. Para empezar, uno de sus ojos era una prótesis robótica, así como uno de sus brazos era un reemplazo mecánico de tamaño desproporcionado.
??? (Dr. Chipotle Jr.): ¿Por qué estamos haciendo esto de nuevo? -pregunto mientras aseguraba el suelo trampa.
Sirque: Porque se les pago para ello -dijo aclarándose la garganta- sí, Casanova ya reviso el sarcófago en estas ruinas y se fue a dar un golpe a una isla en el pacífico. Y los dejo a ustedes dos para deshacerse de los grandes héroes -explico en lo que el otro tipo bufo.
Este sujeto a diferencia de su compañero fácilmente lo superaba en altura por al menos 3 o 4 cabezas. O al menso eso es lo que su armadura negra lo hacía aparentar, porque si, era obvio que estaba usando un traje robótico que lo ayudaba en la batalla posiblemente. Lo único visible del tipo era su rostro, de mejillas regordetas, sombrero negro, un antifaz que cubría la mitad de su rostro y un gran bigote... en general, se veía amenazante, para que negarlo.
??? (Señor Siniestro): Aunque creo que podría pagarnos más -dijo haciendo que Sirque frunciera el ceño.
Sirque: Solo se les paga a quienes hacen un buen trabajo. Háganlo bien y puede que se les dé un generoso bono -dijo dando por terminado el asunto al cortar la transmisión.
Momento donde me asegure de hablar lo más bajo posible mientras el par de matones parecían montar guardia.
Hiro: ¿Y esos dos quiénes son? -pregunte a los demás quienes no parecían saber en lo que Baymax comenzó a buscar en su base de datos, aunque tenia problemas por la mala señal de la zona.
Honey Lemon: Ni idea -dijo en lo que el par comenzó a dialogar entre sí.
??? (Dr. Chipotle Jr.): Sabes, Siniestro. Cuando nos ofrecieron trabajar con un ladrón qué está haciéndose fama rápidamente a nivel mundial como Casanova. No esperaba que nos encargará deshacernos de sus enemigos, qué honor si lo piensas -dijo sonriendo mientras que su compañero negó.
??? (Señor Siniestro): Yo esperaba que nos tocase algo como ayudarlo en sus golpes -dijo antes de suspirar- aunque un descanso del tigre y su familia no viene nada mal, admito.
??? (Dr. Chipotle Jr.): Eso si -dijo dándole la razón.
A la vez que esta pequeña conversación ya estaba dándome información valiosa. Uno de ellos tenia el nombre Siniestro como alter ego. Y al parecer tenían a sus propios héroes con los que lidiaban, una familia de héroes nada menos. Ah, y también que Casanova los contacto personalmente al parecer.
Señor Siniestro: Ahora vamos a escondernos. Deberían caer fácilmente en la trampa.
??? (Dr. Chipotle Jr.): Tienes razón -dijo para que luego ambos procedieran a esconderse.
Oh eso hubiera pasado de no ser porque cuando estaban a punto de tomar sus respectivas posiciones paso algo que nos dejo sin palabras a todos de lo repentino que fue.
Y dicho suceso se trato de que de la nada, una parte del techo de la sección de la tumba donde nos encontrábamos se desplomo. Siendo el responsable de ello un chico algo bajito de apariencia... bastante felina por decir lo menos. Ya que de hecho, su atuendo era una especie de temática de tigre, con guantes de garras de metal, botas a la medida, una bufanda roja. En si era un diseño muy original y creativo.
... Algo me dice que este es el ¨Tigre¨ del que hablaban hacer un momento.
El tigre: ¡No lo creo! ¡Sea lo que sea que están haciendo ustedes dos, termina aquí! -dijo haciendo que ambos villanos lo vieran boquiabiertos.
Ambos: ¡El tigre!
Si, eso confirmo lo que pensaba sobre la identidad del recién llegado.
Los grandes héroes: ¿El tigre? -susurraron mis compañeros mientras que yo solo observaba fijamente el enfrentamiento.
Quería saber de qué eran capaces tanto el tigre como ese par de villanos. Ya que nunca se sabe quien podría ser tu enemigo el día de mañana, mejor estar preparados.
??? (Dr. Chipotle Jr.): ¿Qué rayos? ¡Estamos muy lejos de ciudad Milagro para que vengas a molestar! ¡Esto no tiene que ver contigo! -reclamo el tipo del brazo robótico al chico que solo sonrió divertido.
El Tigre: Si tiene que ver con patearles el trasero, tiene que ver conmigo. En cuanto supe que habían venido hasta aquí tenia que saber que era lo que planeaban ¿Y qué traman por cierto, doctor habanero?
Dr. Chipotle Jr.: ¡¿Cuántas veces debo decírtelo?! ¡Es doctor Chipotle Jr.!
Ah, con que ese es su nombre. ¿Junior? ¿Acaso hay un doctor Chipotle padre? Vaya nombrecito.
Señor Siniestro: ¡Nada que te importe!
El Tigre: Ah con que se van a poner así. Pues entonces que dicen si pasamos de una vez a la pelea. Tengo lista una buena ensalada de puños para ustedes -dijo ya listo para saltar a la acción.
Pero cuando estaba a punto de atacar a ambos criminales, estos solo se vieron entre si compartiendo miradas antes de acordar algo silenciosamente. Lo cual fue que luego de hacer un gesto para que el Tigre los atacara, estos solo se apartaron del camino haciendo que el héroe minino cayera en la trampa que estaba destinada a nosotros.
La cual para mi gran sorpresa, acabo siendo un rayo de energía punto cero. La energía más baja que un sistema puede poseer, o dicho de otro modo, es la energía residual de cualquier fuente de energía. Capaz de inmovilizar cualquier cosa que estuviera en su rango al ser, como dice el nombre, un punto cera absoluto... ¿de donde esos dos o Casanova sacaron algo tan avanzado?
Señor Siniestro: Eres un tonto, Tigre. Esta liga está por encima de la tuya -dijo feliz de la vida.
Dr. Chipotle Jr: Este día está saliendo mejor de lo esperado. No solo nos encargaremos de los enemigos de Casanova, sino que también nos deshacemos de El Tigre de una vez por todas -dijo para luego soltar una risotada típica de villano- y ni siquiera son las 10. No ha sido una mala mañana.
Pero luego de analizar el tipo de trampa que era esa. Fue que rápidamente me di cuenta de algo que me hizo agarrar suficiente confianza para salir de mi escondite bajo la mirada perpleja de los chicos.
Hiro: Una pregunta -dije acercándome al par que estaban centrados en su enemigo capturado- ¿esa cosa estaba diseñada para disparar una vez y sólo una vez?
Señor Siniestro: Así es, ¿Por qué? -pregunto sin prestarme atención.
Hiro: Entonces... ¿Desperdiciaron la trampa que era para nosotros en su propio enemigo?
Dr Chipotle Jr: Y vaya que valió... -dijo en lo que procesaba lo que le había dicho.
Para que luego ambos se dieran cuenta de que nosotros, quienes debían capturar, estábamos justo frente a ellos. Y que en efecto, nos habían salvado de la trampa al hacer que el tigre cayera en ella.
Ambos: ¡Esto es tu culpa! -se dijeron entre antes de solo suspirar con resignación.
Señor Siniestro: Bueno no importa.
Dr. Chipotle Jr: Igual podemos con ustedes -dijo en lo que ambos estaban listos para empezar una pelea.
A lo que los chicos estaban listos para ir a las armas en lo que yo solo los detuve haciendo un gesto con una mano.
Hiro: Déjenmelos a mí, no tardare mucho -dije para consternación del resto mientras que Baymax y yo estábamos listos para el combate.
Mientras que en realidad solo pensaba en una cosa, terminar con esto lo más pronto posible para sacarles a golpes de ser necesario la ubicación de Casanova. Porque ya contratar a villanos para que se encarguen de nosotros en vez de dar la cara era bajo. Ya vera cuando le ponga las manos encima...
__________________________________________________________
(Omake: Reunión con un grande)
Héctor: Entonces ¿Quién es el primero de la lista, Rosita? -pregunto el hombre a su sobrina mientras esperaban a la primera celebridad con quien esperaban firmar.
Rosa: Una estrella del rock retirada. Un viejo conocido tuyo, aunque lo de retirado es entre comillas porque hasta la fecha el tipo sigue produciendo éxitos solo que lo hace en casa.
Héctor: ¿Estrella de rock retirada?... a ver si adivino. ¿Grande, de pelo verde, nunca se quita el maquillaje y una lengua anormalmente larga?
Rosa: Que por dicha razón tuvieron que hacerle cirugía de lengua por atorarla en una guitarra o un aparato del dentista un par de veces. Si, justo ese -dijo haciendo que el hombre mayor sonriera de oreja a oreja.
Héctor: ¡De eso estaba hablando! Haz que ese descerebrado psicópata pase de una vez -dijo emocionado en lo que su sobrina solo sonrió mientras le decía a Judy que dejara al primer potencial socio pasar.
Para que luego a los pocos segundos las puertas de la oficina se abrieran a la vez que el humo se abría paso al interior de la habitación junto con un solo de guitarra que por la potencia de este tanto tío como sobrina juraban que de no ser porque las ventanas eran reforzadas, se abrían roto ante la primera tocada.
Siendo el responsable de dicha entrada un hombre de mediana edad (ya a sus 50) con la apariencia de una verdadera estrella de rock de la vieja escuela. El lunático, inmaduro, necio y excéntrico (según Rosa) Pero innegable estrella del rock. Rock Zilla.
Rock Zilla: ¡¿Este lugar es rock o este lugar es roll?! -pregunto una vez termino la presentación antes de sencillamente atrapar al CEO de la empresa en un abrazo aplastante- ¡Hector! ¡Siento que han pasado años desde la ultima vez que te vi! ¿Cómo has estado viejito?
Héctor: Es porque de hecho si han pasado años ¿y a quien llamas viejo, anciano? -pregunto en respuesta para que luego ambos rieran- ¿Cómo esta tu familia? ¿Tu esposa sigue con sus excentricidades?
Rock Zilla: Ya sabes como es ella. Con todo eso de los chacras, el espíritu y no se cuanta cosa más. Aún sigo sin entenderle nada, pero así la quiero.
Héctor: Lo imagino, no cualquiera tiene un matrimonio de 20 años exitoso amigo mío -dijo haciendo que el contrario rápidamente pareciera tener una crisis existencial.
Rock Zilla: Ni me lo recuerdes. Aun no me creo que hayan pasado 20 años ¿en qué momento paso?
Héctor: Parece que fue ayer cuando nos conocimos en aquel concierto. Recuerdo que eras el alma de la fiesta, siempre en el escenario dando lo mejor de ti -dijo en lo que ambos compartían una sonrisa de nostalgia.
Rock Zilla: Ah, esos fueron buenos tiempos. La música era mi vida y cada concierto era una experiencia única. Pero ahora, con la edad, decidí retirarme de los escenarios y disfrutar de la tranquilidad del hogar.
Héctor: ¿Lo dice el tipo que acaba causando una explosión digna de llamar a los bomberos a cada lugar al que va? -pregunto haciendo que ambos soltaran una carcajada.
Y es que en efecto, ambos era viejos conocidos de los viejos días dorados cuando la música de verdad tenia alma y corazón. Esos eran tiempos que difícilmente alguno podría igualar.
Héctor: Pero te seguiré el juego -dijo guiñando un ojo- aunque te hayas retirado, sigues siendo una leyenda en el mundo de la música. Tus canciones siguen siendo un éxito y tu legado perdurará por siempre.
Rock Zilla: Gracias, Héctor. Significa mucho para mí escuchar esas palabras. Aunque ya no esté en los escenarios, siempre llevaré la música en mi corazón.
Rosa: Y hablando de música -dijo ajustando sus gafas- hemos escuchado las últimas canciones de Rock Zilla. Siguen siendo increíbles. Incluso ha experimentado con nuevos estilos y ha sorprendido a todos -dijo sacándole una sonrisa a la estrella.
Rock Zilla: Sí, he estado explorando diferentes géneros y fusionando mi estilo clásico con nuevas influencias. Es emocionante poder reinventarse y seguir creando música que llegue al corazón de las personas ¡el rock vivirá por siempre mientras viva, yeah!
Héctor: Me alegro de escuchar eso. Siempre supe que tenías un talento único y que dejarías una huella imborrable en la industria musical -dijo en lo que sus ojos adquirieron cierto brillo- y por esa misma razón me gustaría hacer negocios contigo.
Rock Zilla: ¿Negocios? Sabes que no firmo nada sin que mi abogado lo lea primero.
Héctor: Tranquilo, primero hablemos con calma. Y me paso me cuentas de tu familia, según tengo entendido tienes dos hijos que están parecidos en edad con el mío.
Rock Zilla: Oh si, Serena y Willy. Buenos chicos, justo como su padre -dijo tomando asiento- sea lo que sea que propongas, espero que valga la pena para venir desde el otro lado del país, viejo amigo.
Héctor: Oh si que lo valdrá, eso te lo aseguro -dijo levantando un vaso de vodka.
Ya que desde ese momento estaba brindando por lo que seria el resurgimiento de la verdadera música en el mundo actual. Y sería algo grandioso.
Notes:
Y ese fue el capitulo de esta vez. Como siempre pueden votar, comentar, lo que gusten.
¿Y que les pareció?
¿Qué les parece los crossovers hasta ahora?
No hace falta decir que el próximo capitulo será el desenlace de este robo. Y desde ya les digo que al final del próximo capitulo aparecerá un personaje que será pista para el próximo crossover que de una tendrá que ver con la aparición del próximo talismán.
Sin más que decir, nos vemos.
Chapter 10: Capitulo 8: El gran llamado a las estrellas (2/2)
Notes:
(See the end of the chapter for notes.)
Chapter Text
(General Pov)
Recordando a donde nos habíamos quedado la vez anterior, Hiro por sí solo decidió enfrentar a los dos matones contratados por Casanova para la diversión de estos últimos así como la consternación de sus amigos. ¿Y porque hizo algo así de imprudente sabiendo que el de hecho no sabe pelear?
Pues por una razón muy simple en realidad, no quiere verse menos a los ojos de Casanova. Para Hiro, era obvio que el tipo se creía que ellos eran tan poca cosa que ni se dignaba a tratar con ellos y por eso los dejaba con villanos de segunda ¡Y eso no lo iba a permitir! El no era un plato de segunda mesa para nada ni para nadie.
Acabando así en que nuestro joven héroe comienza la monumental batalla entre el bien y el mal, una lucha tan colosal que su fama perdurara. Y que acaba en la victoria de Hiro sobre los dos villanos en tan gran batalla... que no podemos mostrarles porque sería muy costoso y no hay presupuesto.
(Pero se resume en que Baymax hizo todo y que Honey dejo a ambos esbirros pegados en uno de los muros de la pirámide con una de sus esferas pegajosas ¿Pues que esperaban?).
Siendo al final del altercado que el robot del grupo recibe una notificación.
Baymax: Tengo noticias de la red contra el crimen enviadas por el jefe Cruz -dijo levantando un dedo- Sirque dio un golpe para Casanova en Rusia. Se robo el RATAN-600 Ruso. El Radiotelescopio más grande del mundo -dijo extrañando a todos los demás héroes mientras que la pantalla del robot se revelaba para mostrar dicho artefacto robado (nueva función de la armadura hecha por Hiro).
Honey: ¿Un telescopio? -pregunto en lo que Hiro ya estaba mirando al par de secuaces derrotados.
Hiro: Ustedes dijeron que Casanova vino aquí a ver el sarcófago de Pakal. ¿Por qué? -pregunto a la vez que ambos villanos solo fruncieron el ceño.
Señor Siniestro: No les diremos nada -dijo a la vez que Chipotle Jr asintió estando de acuerdo con su compañero.
Cosa que fastidio a todos, la situación iba a tardar, y ciertamente no tenían tiempo que gastar.
Wasabi: Solo no lo entiendo. Que tiene que ver Stonehenge, las ruinas mayas de Pakal y un telescopio Ruso -pensó para si mismo.
Solo para que el aspirante a científico loco lo meditara.
Dr. Chipotle Jr: Pues los Mayas eran una cultura muy avanzada para su época -pensó en voz alta- hay algunas personas, y no diré nombres, qué creen que avanzaron tanto porque recibían ayuda de alienígenas.
Señor Siniestro: ¿Hablas de Casanova? -pregunto a su compañero quien rodo el ojo orgánico con molestia.
Dr Chipotle Jr: Claro que hablo de él, ¿De quién más?
Go Go: Tiene que ser una broma -murmuro por lo bajo mientras ambos villanos seguían platicando entre ellos olvidando donde estaban en primero lugar.
Dr. Chipotle Jr: Eso explicaría cosas como las similitudes entre las pirámides nativo-americanas y las egipcias qué se construyeron con milenios de diferencia así como miles de kilómetros de distancia entre ellas.
Siniestro: Y como se construyeron en primer lugar.
Fred: ¡Además miren! -dijo Fred de repente señalando la tumba de Pakal- ¿sí o no parece que el tipo está montando una nave espacial? -pregunto.
A la vez que el resto se fijo en el diseño de esa antigua reliquia, llegando a la conclusión de que en efecto, aunque los más listos quisieran negarlo, de verdad con algo de imaginación se podía decir que en la imagen Pakal efectivamente estaba montando algún tipo de platillo volador.
Fred: ¡Vamos, tú lo dijiste Wasabi! Stonehenge era donde aterrizaban los extraterrestres! -defendió su caso haciendo al moreno suspirar.
Wasabi: ... Y también se robaron el RATAN-600, el Radiotelescopio más grande del mundo que... -dijo respirando hondo- en teoría puede ser usado para... enviar señales en busca de vida inteligente en el universo... -dijo causando que el rubio se emocionara.
Así como el científico del brazo robótico también.
Dr. Chipotle Jr: ¡El jefecito chulo de Casanova quiere hacer contacto con vida inteligente de otros planetas! -dijo con ilusión mientras que el sujeto de negro solo gruño con amargura.
Señor Siniestro: Y nosotros echamos a perder la cosa al no evitar qué sus enemigos se metan en su plan -dijo haciendo que Hiro sonriera con burla.
Hiro: De paso contándonos todo, gracias -menciono dispuesto a irse.
Solo para sentir la mano de su amiga velocista en su hombro.
Go Go: No todo. Casanova aun va a dar un golpe en una isla del Pacífico, pero no sabemos donde -dijo haciendo que ambos villanos sonrieran con arrogancia.
Señor Siniestro: Si, es cierto, no saben eso, y nunca lo diremos.
Dr Chipotle Jr: ¡Eso es! ¡Jamás de los jamases diremos que se encuentra en la Isla de Pascua, y que mientras hablamos está construyendo su transmisor! -dijo haciendo que todos le miraran con los ojos entrecerrados.
Para que luego el Señor Siniestro pegara con su cabeza a su compañero, y con todo derecho. Hasta los grandes héroes admitían que se había pasado de bocón.
Hiro: ¿La isla de Pascua? -pregunto pensativo a la vez que el robot del grupo comenzó a buscar información al respecto.
Baymax: Según algunas leyendas. Las estatuas de la isla de Pascua son en realidad estatuas de extraterrestres qué los nativos esculpieron en su honor en el pasado -dijo para luego explicar en detalle la así llamada hipótesis de paleo contacto.
También conocida como la hipótesis de los antiguos astronautas, la cual es una hipótesis sin base científica ni histórica que sostiene que seres extraterrestres han visitado el planeta Tierra en el pasado y que estos seres han sido responsables, en varios grados, del origen y desarrollo de las culturas humanas, las tecnologías y las religiones (otra forma de llamarlo es creacionismo alienígena).
Siendo una variante común de la idea que la mayoría de las deidades en las religiones, si no todas, son en realidad extraterrestres, y sus tecnologías fueron tomadas como evidencia de su condición divina. Así como las cosas que fueron echas en su honor, como las líneas nazca o las estatuas de la isla de Pascua.
Hiro: Pensándolo así... tiene sentido -no pudo evitar decir, dijo comprendiendo las intenciones del tipo.
Si, sonaba a algo lo bastante ridículo y excéntrico como Casanova al parecer le gustaba hacer las cosas. Ya solo era cosa de ir a la isla de Pascua y detener el plan del ladrón antes de que cometiera otro golpe. Aunque por alguna razón, en general los chicos sentían que estaban olvidando algo.
Fred: Oigan chicos. ¿Qué hacemos con él? -pregunto señalando al Tigre que aún estaba atrapado en la trampa que estaba destinada para ellos.
Oh... así que era eso lo que se les estaba pasando por alto.
Honey Lemon: Ay, disculpa, se nos olvidó -dijo arrojando otra de sus esferas químicas al mecanismo.
Liberando de paso al héroe gatuno.
Quien rápidamente hizo que los provenientes de San Fransokyo lo miraran con extrañeza al notar que el chico en vez de agradecer o preguntar cuál era la situación. Solo actuó como todo adolescente promedio al escuchar todo lo que se había hablado y emocionarse por ello en consecuencia.
El Tigre: ¿Extraterrestres? ¿El Ladrón Casanova del qué todo el mundo habla está detrás de todo esto? -dijo antes de abrazarse a Hiro- ¡Por favor, llévenme con ustedes! ¡Por favor, por favor, por favor!... Por cierto ¿Te han dicho que estas suavecito? -pregunto curioso haciendo que el nipón se sonrojara debajo del casco de su atuendo.
Hiro: Nosotros nos ocupamos, tu tranquilo ¿Acaso no tienes tu propio trabajo de héroe qué hacer o algo así? -dijo tratando de apartar al joven héroe local, pero el chico con temática felina estaba empeñado en no soltarse.
El Tigre: Nah, mi papá puede encargarse de eso. Es mucho mejor siendo héroe qué yo -dijo encogido de hombros- se podría decir que estoy de aprendiz.
Hiro: Ah bueno. Entonces no -dijo como fin de la discusión para nuevamente proceder a tratar de zafarse del agarre del tigre.
Quien al ver que su insistencia usual no le estaba sirviendo para conseguir lo que quería (como era costumbre en realidad) decidió usar su arma secreta que solo usa en casos extremos con su mamá (con su papá y su abuelo ni lo intenta porque son muy rudos para caer en eso) Pero no perdía nada con intentarlo.
Así que sin pensarlo dos veces aplico la táctica del gato con botas, los ojos de la ternura. Que perfectamente podían sacarle un ¨Awww¨ a cualquier mujer. Y para su buena suerte, parece que el efecto de la ternura de la técnica felina estaba haciendo efecto en los héroes.
Fred: Sus ojos... No lo vean a los ojos... -dijo con una muy poca fuerza de voluntad.
Solo para que todos vieran que ya Honey Lemon tenía al chico con temática de tigre entre sus brazos como si fuera un animal de peluche.
Honey Lemon: ¿Nos lo podemos quedar?
Y claro, en todo el lugar se escucharon los simultáneos golpes del palmeo a la frente por como acabo el asunto.
Hiro:... Solo esta vez -dijo derrotado en lo que Fred sonrió burlonamente.
Fred: Y eso prueba una vez más que Hiro no es capaz de decirle que no a Honey -dijo a la vez que el tigre se soltó del agarre de la rubia alta para abrazar nuevamente al chico del traje morado.
El Tigre: ¡Gracias! ¡Prometo que me portare bien! -dijo haciendo más fuerte la muestra de afecto mientras parecía que su cola se movía como si fuera parte de él- oye, no miento, eres como abrazar una almohada.
Hiro: ¡Nadie te pregunto! -dijo rojo de pena mientras se trataba de soltar del agarre del chico en lo que sus amigos se reían de su mala suerte por lo bajo.
Esta situación al nipón le recordaba haber leído acerca de que el héroe de París, Chat Noir, también era conocido por ser un sujeto simpático, juguetón y coqueto ¿es que todos los héroes con temática felina tenían ese tipo de personalidad tan... picarona?
De cualquier modo, ahora si que ya no tenían nada que los retuviera en México. Ahora sin importar que, debían llegar a Chile cuanto antes. Pero estaban confiados ya que en general, todos los héroes por igual pensaban que ya no debía haber más sorpresas esperándolos... que equivocados estaban.
_________________________________________________________
(Hiro Pov)
(Más tarde en la noche de ese día)
(Isla de Pascua, Chile)
Las cosas no pudieron acabar de peor manera.
Luego de un viaje a toda velocidad, llegamos a la isla de Pascua, el hogar las famosas cabezas de piedra de procedencia desconocida, fue solo para ver a Casanova robarse una de dichas reliquias usando su tecnología. Situación que no iba a dejar que pasara a mayores, y por eso emprendí la persecución del ladrón montando sobre Baymax en un intento de alcanzarlos.
Mala decisión, debido a que en pleno vuelo el maldito acabo por usar otra de sus cartas de hackeo en Baymax, volviendo a saturar su sistema con virus y en consecuencia, haciendo que tanto mi amigo como yo acabáramos flotando a mitad del océano mientras observábamos como nuevamente Casanova se escapaba.
No sin que antes el maldito encima de nuevamente dañar a Baymax, también tuviera la osadía de lanzarme un bote inflable. Se estaba burlando de mí, que necesitaba ayuda de mi enemigo para poder apañármelas, ese infeliz. Pero lo que más odiaba... era que de hecho si necesite su ayuda porque justo luego de que el bote se inflara fue que un tiburón estaba al acecho, de no haberme subido...
Hiro: Odio a ese tipo -dije mientras sacaba a Baymax sin armadura del agua.
De lo contrario hubiera sido mucho más difícil llevarlo de vuelta a la orilla, donde una vez pusimos un pie en tierra, ya era de noche. No quedándome de otra que unirme a los demás que habían hecho una fogata mientras esperaban mi regreso... si, las cosas no pudieron terminar de peor modo.
Hiro: Bueno, oficialmente todo el sistema operativo de Baymax no sirve, encima que los múltiples virus dañaron su capacidad de operación de nuevo, el agua de mar daño sus circuitos -dije con fastidio- y al parecer la isla de pascua no es donde está guardando todo, solo era otro objetivo... juro que cuando le ponga las manos encima.
Este tipo de verdad estaba empezando a ser una piedra en mi zapato.
El Tigre: Estas estatuas son increíbles, es la primera vez que estoy tan lejos de casa -escuche decir de repente a nuestro polizón que se encontraba sobre una de las cabezas de piedra- ¿creen que en serio sean un homenaje a viajeros extraterrestres del pasado?
Je, al menos alguien la está pasando bien para variar.
Honey: Nunca se sabe, cosas más locas hemos visto en nuestra vida -dijo con amabilidad.
Go Go: Pero aún queda la duda de saber a dónde se está llevando todo... -dijo cansada antes de ponerse a silbar una melodía que ciertamente no la había escuchado tocar antes.
Bueno, esa y ninguna tonada en realidad.
Wasabi: ¿Y esa nota? -pregunto a nuestra amiga de traje amarillo que solo se encogió de hombros.
Go Go: Es la única pista qué tenemos del robo del Radiotelescopio en Rusia. Uno de los guardias asegura que Sirque estaba silbando esa tonada -dijo en lo que el resto asentimos.
Hiro: En todo caso ¿En dónde puede funcionar mejor ese telescopio robado?
Go Go: En Siberia, Rusia, para empezar, ya qué es donde estaba -dijo pensativa- en las planicies del serengueti en África o en Australia en...
El Tigre: ¡Eso es! -dijo de repente haciendo que le prestáramos atención.
¿Qué era? ¿Acaso este impulsivo había descubierto una pista para resolver el caso? Me costaba creerlo. Pero bueno, si hasta Fred podía ser de ayuda, estaba mal subestimar a otros.
Fred: ¿Qué descubriste, amigo gato? -pregunto haciendo que el chico riera apenado.
El Tigre: Mi mamá solía ser una cantante famosa -explico- viajo por todo el mundo, y aprendió muchas canciones. Esa qué estaban silbando era bailando con Matilda.
¿Ah?
Hiro: ¿Bailando con Matilda? -pregunte en lo que el chico sonrió con orgullo.
El Tigre: Una famosa canción Australiana.
... Maldita sea.
Go Go: ...Otro de los lugares donde el telescopio funcionaria bien seria la roca de Ayers en el desierto Australiano -dijo para nuestra incredulidad.
¡Maldición! ¡Eso es! ¡Aun no estábamos fuera del juego!
Hiro: Debe estar en Australia.
Y antes de que alguien dijera algo más, ya todos estábamos en el avión. Había un océano pacifico que cruzar.
___________________________________________________________
(Más tarde esa noche)
(Roca de Ayers, Australia)
Uluru, o Ayers Rock, era un enorme monolito de arenisca en el corazón del árido "Centro Rojo" del territorio del norte australiano. El pueblo grande más cercano era Alice Springs, a 450 km. El Uluru es sagrado para la población indígena australiana, y se piensa que comenzó a formarse hace 550 millones de años. Se ubica dentro del Parque nacional Uluru-Kata Tjuta.
Siendo para cuando llegamos que la enorme piedra era de un negro casi puro ya que debido a ciertos factores naturales, la piedra daba la ilusión óptica de cambiar de color junto el momento del día que era (Día, tarde o noche). Pero no fue hasta que la escalamos que nos llevamos una sorpresa.
La cual era encontrar todo lo robado justo en el centro de la gran piedra. Con Stonehenge en el centro de Uluru y justo en el centro del círculo de piedras se hallaba la estatua de la isla de Pascua. Extrañamente... parecía una especie de altar.
Fred: Esto es tan increíble -lo escuche murmurar mientras nos movíamos entre Stonehenge sin que los robots de seguridad nos notaran- ¿no sería genial que Casanova logre hacer contacto real con extraterrestres? -pregunto solo para que Go Go le diera un golpe en la cabeza.
A la vez que yo no podía evitar sentir un deja vu, ya que los robots que estaba usando Casanova como secuaces no era otra cosa que Budy Guardias, los robots creados por Krei Tech (ahora Rivera Solutions) Y que Obake también acostumbraba a usar como mano de obra.
Hiro: Yo digo que sería aún más genial que lo logremos atrapar esta noche -dije mirando por encima de la estatua de Pascua.
Donde justo se encontraba a quien vinimos a buscar. El ladrón que tantos problemas nos estaba dando se encontraba allí parado como si nada mientras parecía estar manejando un control remoto, posiblemente el del radiotelescopio. Era nuestra oportunidad.
Y todos los sabíamos. De allí que tras hacer un gesto en silencio que hasta el tigre entendió, todos procedimos a rodear a Casanova que seguía sin darse cuenta de nuestra presencia. Poco a poco estábamos bloqueando cualquier salida que el tipo pudiera tomar. Lo teníamos en la palma de nuestra mano... y fue cuando Fred metió la pata.
Ya que no se fijó, y acabo enredándose con unos cables que eran parte del sistema de iluminación del improvisado centro de aterrizaje y comunicación interplanetario. Lo cual termino con nuestro amigo en traje de monstruo siendo electrocutado, de paso revelando nuestra presencia al orquestador de toda esta fiebre de alienígenas.
Casanova (Miguel): Debo decir que esta vez estoy muy impresionado -dijo sin mirar a ningún lugar en concreto- lograron alcanzarme esta vez, chicos.
Hiro: Y esta vez irás preso -dije saliendo de mi escondite. En lo que el ladrón solo sonrió con burla.
Casanova (Miguel): Yo no diría eso -dijo antes de hacerse a un lado.
Logrando así esquivar el ataque sorpresa del Tigre quien acabo pasando de largo del ladrón.
El Tigre: ¡No se vale, lo esquivaste! -dijo solo para que Casanova le sacara la lengua juguetonamente en respuesta.
Hiro: Ya basta, entrégate, Casanova, esta vez no tienes salida ni por donde escapar ¡se acabó! ¡Estas rodeado! -dije en lo que los demás también salieron de sus escondites, revelando que en efecto, el criminal tenia todos los flancos bloqueados.
Pero en vez de verse alterado o al menos confundido, el tipo estaba sonriendo, y encima con arrogancia. ¿Ahora que iba a hacer?
Casanova (Miguel): Te equivocas, la diversión apenas acaba de empezar -dijo señalando al cielo.
Momento en que todo el lugar se ilumino con una luz cegadora que parecía provenir de un artefacto que poco a poco estaba descendiendo del cielo nocturno hacia nosotros. De hecho, parecían ser varias luces y el objeto que descendía era algo grande y pesado... ¿No me dirán que acaso el de verdad...?
Fred: No puede ser... ¡En serio lo logro, es un platillo volador! -dijo gritando de emoción.
Solo para que cuando volviéramos a ver donde estaba Casanova, el sujeto brillo por su ausencia. No siendo hasta muy tarde que eso que vino no era ningún platillo volador. Era solo un helicóptero que ni había que ser un genio para hacerse una idea de quien era.
Hiro: No era ningún alienígena. Solo era uno de sus helicópteros, el desgraciado se escapo de nuevo -dije aguantando las ganas de gritar de exasperación.
Momento donde mi casco estaba recibiendo interferencia de una señal desconocida, que ciertamente ya me hacia una idea de quien se trataba... je, esta vez no te voy a dar el gusto de ser el primero en hablar. Tal vez se escapó, pero esta vez fuimos nosotros quienes ganamos.
Hiro: No hiciste contacto con extraterrestres, Casanova -dije burlón, a lo cual escuche una risita del sujeto del otro lado de la línea, cosa que me molesto.
Casanova: Tal vez esta vez no, capitán. Pero si alguna vez lo hago, ni siquiera las estrellas estarán a salvo de mi -dijo con suficiencia- y por cierto, tú sólo dime tu constelación favorita, y juro que la bajo sólo para ti. Hasta el próximo robo.
Hiro: ¡Ahora escucha tu...! -dije solo para escuchar cómo se cortaba la transmisión- algún día maldito infeliz, algún día -dije por lo bajo para luego escuchar a cierto felino que se había parado detrás de mí.
El Tigre: Uno de mis poderes es tener un oído sensible, escuche la conversación... ¿Todo esto fue porque el ladrón buscaba darte un regalo excéntrico porque le gustas? -pregunto confundido.
Mientras que yo solo le di una mirada de esas de que si las miradas mataran, este chico estaría al menos a 6 metros bajo tierra.
Wasabi: Bueno, miren el lado bueno -dijo tratando de aligerar el ambiente- logramos recuperar todos estos tesoros tanto modernos como antiguos. Ya lograremos atrapar a Casanova otro día.
Y por mucho que odiara admitirlo, era la verdad. Al final todo lo que podíamos hacer era buscar a las autoridades para informar donde estaba todo lo robado. Tal vez no atrapamos a Casanova, pero salvamos a las estrellas de él por ahora, eso era una victoria para mí.
Pero mentiría si dijera que solo eso ya había sido lo mejor de la noche, porque no fue así. Ya que luego de que dejáramos al tigre en su hogar en México, la ciudad Milagro. De paso aceptando que el chico en realidad era buena persona y solo algo inmaduro, pero aprendería. Fue que me lleve una sorpresa al volver a mi casa.
Ya que nuevamente en mi cama había otro regalo que según tía Cass, había sido dejado por Felony Carl por ordenes de Miguel, que era un presente para agradecerme por apoyar en la decisión de que ellos cuidaran la mansión de su papa. Y una vez abrí el regalo, fue que me sentí conmovido al notar que se trataba de un collar con un dije en forma de Polaris, la estrella polar.
¨Porque tu eres como mi estrella brillante que me ilumina en la noche¨ decía la nota junto al collar. Y seré sincero, tal vez ese desgraciado de Casanova se ofreció a bajar cualquier constelación para mí, pero con este gesto Miguel Rivera me había dado el universo entero... y me encanta.
_____________________________________________________________
(Hora de los Omakes)
(Omake 1 de 3: El deber de un buen amigo)
(Miguel Pov)
Miguel: ... ¿Qué rayos fue lo que paso aquí? -pregunto con un tic en el ojo.
En sí, estaba cansado. Acaba de regresar de Australia luego de hacer un viaje por medio planeta de Inglaterra hacia el continente de Oceanía. Y ahora que ya todo el plan había terminado y Hiro junto a los buenos habían ¨ganado¨ esta vez. Todo lo que quería era pasar el resto de la madrugada durmiendo para así levantarse hasta tarde.
Pero no conto con que apenas llego a la mansión de su papá se encontró con todo echo un caos. ¿Y por qué? Porque al parecer Leo no fue capaz de controlar a Marco y ambos se encargaron de poner todo patas arriba.
Regla 1: Perspectiva (Permanecer fuera del salón de juegos) vs Realidad (Habían entrado al salón de juegos y estaba todo desordenado) Pero eso era nada comparado con lo demás.
Regla 2: Perspectiva (No llevar comida del refrigerador a la sala) vs Realidad (Marco rompió el candado del refrigerador y llevaron el pudín de mi viejo a la sala para ver películas en la pantalla plana).
Regla 3: Perspectiva (No sentarse en el sofá Federico Vininy de 40 mil dólares de papá) vs Realidad (No solo se sentaron, Leo accidentalmente dejo caer pudin en él. Y para rematar, cuando trataron de usar arena para gato para que absorbiera el pudin, el gato de mi prima hizo del numero 2 en el sofá)
Regla 4: Perspectiva (No tocar el gato peruano sin pelo de Rosa, Monty) vs Realidad (Luego de que el gato uso el sofá caro como inodoro, Marco lo agarro y lo lanzo por la ventana, perdiendo así al gato).
Regla 5: ... ¿Para que recordarla? Estaban jodidos. Y es que toda esa remuneración fue solo el comienzo de los problemas.
Ahora mismo solo me quedaba sonreír para no romper a llorar.
Miguel: Haber si entendí. Luego de que perdieran el gato de mi prima ¿buscaron otro para afeitarlo y hacerlo pasar por el de Rosa? ¿De donde sacaron un gato para empezar?
Marco: Conozco a alguien -dijo encogido de hombros solo para que Leo le golpeara la cabeza.
Leo: Pero al final eso resulto peor porque apenas lo intentamos, el gato enloqueció. Adiós a las sillas del comedor, las cortinas de seda... y me sigo preguntando donde aprendió a hacer eso -dijo señalando un grafiti en la pared que decía ¨los gatos son super¨.
... ¿En serio un gato hizo eso?
Marco: Y las cosas empeoraron cuando luego de que el otro gato rompió la estatua decorativa de la entrada el lagarto escapo de su foso, pero tranquilo, lo logramos encerrar en el baño.
Ok... ¿Por qué mi papá tenia un foso con un lagarto en su mansión? Mientras más tiempo paso con el hombre que me trajo al mundo junto a mamá, solo me hacia más preguntas de que tan mentalmente estable se encontraba en realidad.
Miguel: Más les vale que el gato se encuentre rondando el vecindario o este durmiendo en un árbol y no esté en el estómago del lagarto. O todos seremos la próxima comida de ese reptil -dije en lo que intentaba que se me pasara la migraña para pensar con claridad.
Marco: Si es por el gato descuida, solo es cosa de llamar al FBI y que ellos lo busquen -dijo como si nada para mi incredulidad.
Leo: Y yo ya te dije que el FBI solo trabaja en casos serios.
Marco: Oh... eso explica porque me cortaron la llamada cuando los contacte porque tenia las puntas resecas -dijo tocándose el cabello antes de vernos ya más apagado- se que uno de ustedes dos uso todo mi gel para el cabello.
... Juro que ahora mismo quería golpearlo, a los dos quería solo arrojarlos al baño y que el cocodrilo se hiciera cargo. Luego diría que se trato de un triste y desafortunado accidente, si, la idea de hecho era muy tentadora.
Miguel: Es un hecho, son terribles niñeros de mansión... ¿Y ahora en que pensaste? -pregunte en ver a Leo con laptop en mano.
Leo: En como arreglar esto, obviamente.
Marco: ¡Si, sabía que el inteligente lo resolvería! -dijo abrazando al más flaco de los 3- ¿Qué tienes?
Leo: Pues escuchen, hay un vuelo a las 4 hacia Bolivia. Llegamos ahí, cambiamos nuestros nombres y pasamos el resto de nuestras vidas criando Alpacas -dijo en lo que tanto Marco como yo lo vimos boquiabiertos.
Es oficial, Leo estaba desesperado, para dar ideas así de radicales dignas de que se le ocurrieran a Marco, pues.
En todo caso, perfectamente podía dejarlos morir, es decir, nada de esto fue mi culpa... Pero no podía hacerlo, estos dos serán unos tarugos, pero eran mis tarugos. Todos para uno y uno para todos. Tanto en lo bueno como en las cagadas. Ese fue nuestro pacto de amistad cuando los 3 nos hicimos amigos, y se debía respetar.
Miguel: Solo guarden silencio -dije con seriedad- ahora escuchen, necesitare 3 litros de soda, un costurero, un balde de vinagre, cloro y pongan al teléfono tanto al lugar que entrega pegamento super fuerte y pintura blanca semi brillante como al supermercado que abre 24 horas... ¿Qué esperan? ¿Les hablo en chino? ¡Muévanse! -dije a la vez que Leo ya estaba con teléfono en mano.
Marco: Pero espera ¿Qué pasa con el gato de Rosa? -pregunto.
Solo para recibir su respuesta cuando yo tan solo fui a la cocina y regresé con una caja de Frisky Bits de pescado. Y tan solo basto con hacer sonar la caja y dejar un poco de alimento en el suelo para que la mascota de mi prima mágicamente apareciera para cenar (gracias Hiro por hablarme de como hacer que Mochi viniera cuando no se veía a simple vista).
Leo y Marco: ¡Al fin apareció!
Miguel: Un problema menos -dije antes de ver a ambos con el ceño fruncido- ¿Ahora que están esperando? ¡Estaremos aquí lo que queda de la noche y toda la mañana! ¡A moverse, moverse, moverse! -dije poniendo al par a trabajar.
Y por muy difícil que fuera de creer, para cuando salió el sol ya todo en la casa estaba arreglado (incluyendo devolver el lagarto a su foso con ayuda del talismán del gallo y un poco del buey también). Siendo cuando todo acabo que los 3 adolescente solo se dejaron caer rendidos en el suelo.
Leo: Miguel, fuiste nuestra salvación -dijo agradecido con su amigo que ya tenia los ojos cerrados.
Miguel: Como siempre. Ahora cállense, quiero dormir, ya luego les cuento de como me fue esta vez.
Marco: Esta bien, pero solo una pregunta ¿Cómo sabías todo lo que había que hacer para arreglar la casa? -pregunto aun sorprendido de cómo se habían librado de la bala que seria enfrentar la ira de mi papá y de mi prima.
Miguel: Sencillo, tal vez mi prima sea la genio, pero yo también se defenderme en algunas cosas, además... ¿olvidaron quien es mi mamá? -pregunto con ironía.
A la vez que los 3 tenían recuerdos de Imelda de sus días en México que para esas alturas se veían tan lejanos... y gracias al cielo que era así.
(Flashbacks)
Imelda: ¿Qué están haciendo? -pregunto entrando a la sala donde se veía al trio de chicos tomando café mientras jugaban a las cartas.
Miguel: Nada mami, jugando y pasando el rato, nada más -dijo con calma aunque por dentro estaba muerto de miedo. Esperando que esta vez su madre si los dejara en paz por esa tarde.
Marco: Hola doña Imelda.
Leo: ¿Cómo esta, doña Imelda?
Imelda: Ummm... ¿Y el cuarto?
Los 3: Lo arreglamos.
Imelda: ¿Y los platos?
Los 3: Los fregamos.
Imelda: ¿Y la carne?
Los 3: La sacamos.
Imelda: ¿Y el baño?
Los 3: Lo lavamos.
Imelda: ¿Y la ropa?
Los 3: La doblamos.
Imelda: Oh... -dijo pareciendo impresionada.
Mientras que por su parte, el trio de amigos pensaba que al fin había pasado. Se saldrían con la suya. Pero no contaban con que Imelda no era una madre como el resto. Y sin importar como, siempre encontraba un modo para poner tanto a su hijo como a sus amigos a trabajar. Y ese día no fue la excepción.
Ya que media hora después de que los chicos dijeran que había hecho todos los deberes de la casa.
Imelda: ¡¿Y ese rio que esta allí?! ¡¿Cuándo me lo van a secar?! -pregunto señalando nada más y nada menos que el rio de la piedad.
Marco y Leo: ¡¿Pero que carajo?!
Miguel: ¡Mamá, pero eso ni siquiera es parte de la casa!
Imelda: ¡Dios, nos regalo el mundo! ¡Y limpio tenemos que dejarlo! -dijo haciendo oídos sordos a las protestas de su hijo.
Miguel: ¡Eso ni sentido tiene!
Imelda: ¡Lo que no tiene sentido es la vagancia de ustedes! ¡Vamos, me secan ese rio antes de que se haga de noche! ¡Vamos, manos a la obra! -dijo antes de irse.
Y por si no fuera suficiente el colmo, al final los 3 acabaron disque tratando de secar el rio como se les había ordenado, era eso o enfrentar algo peor que la chancla, la bota de doña Imelda.
Miguel: ¡Les dije que teníamos que irnos a la casa de alguno de los dos! ¡Y dejen de exprimir las toallas en el rio! -dijo exasperado viendo al par mojar los trozos de tela para luego exprimirlos igual en la misma fuente de agua.
Es que era el colmo de colmos.
---
(Otro día)
Y eso era cuando Leo y Marco se quedaban en la casa de Miguel, cuando no. Era peor para el pobre.
Imelda: ¡Miguel, yo espero que tu me hayas lavado los...! -dijo entrando en la habitación.
Solo para ver a su hijo mayor ya terminando de lavar los platos.
Imelda: Oh... ¡Pero el baño, mira...! -dijo señalando esa otra parte de la casa.
Para quedar sin palabras al ver que su hijo ya estaba allí terminando de pasar cloro y desinfectante por todo el lugar.
Imelda: Oh... jejeje... ¡Si, pero tu cama! -dijo ahora señalando la habitación de su hijo.
Solo quedando aun mas en shock al ver a Miguel allí también ya arreglando y acomodando su cama y de paso el resto de la habitación también.
Siendo cuando termino que madre e hijo tenían una competencia de miradas. Esperando a que alguno de los dos cediera, con Miguel esperando que su mamá lo dejara tranquilo al ver que ya hizo todos los quehaceres de la casa (sacando el rio de la ecuación al hacerla reconocer que no tenia sentido secar un rio y que Imelda solo quería casa sola para ver en paz la novela de la tarde mientras Coco dormía la siesta).
Pero esa es una lección que Miguel hasta la fecha nunca aprende, con su madre no había que tener esperanzas de descanso.
Imelda: ¡La bisagra de la puerta, mira! -dijo antes de pasar un dedo por la dichosa bisagra de la puerta del cuarto de su hijo- ¡mira, llena de oxido y polvo, mira!
Miguel: ¿Pero qué? ¿La bisagra? -pregunto en lo que su madre se arrojo al suelo.
Imelda: Y mira nada más, aquí debajo de la puerta, mira. ¡Sucio y mugre, sucio y mugre!
Miguel: ¿Pero quien chingados limpia ahí? -pregunto con incredulidad mientras su madre se ponía de pie.
Imelda: ¡Los que no son unos vagos como tú, Miguel! ¡Ponte hacer lo que tu tienes que hacer porque eres grande y lo sabes! ¡Vamos, te me mueves, quiero limpias todas las puertas de la casa! ¡No sabe hacer nada bien ese muchacho! -dijo yéndose de la habitación dejando a su hijo haciendo tan ridícula tarea.
Pero eso no era todo, sino que hasta en los ratos destinados de ocio la señora de la casa también tenia algo que decir. Como en la tarde noche de ese mismo día en que Miguel pensaba salir a ver una película al cine.
Imelda: ¿Qué es lo que haces, mi amor? -pregunto al ver a su hijo con ropa en la cama.
Miguel: Organizando mi ropa para luego bañarme, es que voy a salir.
Imelda: ¿Esa ropa es nueva?
Miguel: Pues si lo es. Tu me has dicho que si gano mi propio dinero, puedo comprar cosas por aparte del presupuesto de la casa y lo que me das de mesada. Y esta ropa la acabo de comprar -dijo en lo que su madre solo respiro hondo preparándose para el regaño.
Imelda: Miguel, la verdad es que tu no tienes consciencia. ¿Cómo es posible que yo tengo 3 días que te traje esa ropa que te la lavé, y tu compras ropa nueva para luego mezclarla con la vieja para que yo la lave de nuevo, y tu tengas mas ropa que doblar? -pregunto señalando un puño de ropa que estaba en la esquina de la habitación.
Miguel: Mami, es que es demasiada ropa. La doblo cuando regrese -dijo casi suplicante.
Imelda: Miguel, doblar esa ropa no te toma ni cinco minutos.
Miguel: Mamá, me tengo que cambiar y salir, Marco y Leo me están esperando. Voy a durar mucho haciendo esa ropa -dijo para fastidio de la mujer mayor.
Imelda: ¨Ay mami, es que voy a durar mucho¨ Como se nota que todo lo tengo que hacer yo en esta casa -dijo yendo hacia donde estaba el montón de ropa- mira, 2 segundos, mira.
Solo para que su hijo se quedara en shock al ver como su madre arrojaba la ropa a la cama para que esta pareciera como si mágicamente se doblara en el aire y aterrizara ya doblada en la cama. Y encima una prenda encima de otra.
Miguel: ¿Pero que carajo...?
Imelda: ¿Viste lo rápido que se dobla la ropa? Toma, dobla esa tu -dijo arrojándole un pantalón que Miguel atrapo ya hecho.
Miguel: Pero mamá ¡esto ya esta doblado!
Imelda: ¡Pues a desdoblarla y luego vuelve a doblarla! -dijo dándole la espalda- dios mío, pero fue al papá que salió este muchacho, no se que hacer con él -menciono antes de irse.
Pero no sin antes arrojar una camisa de espaldas, solo para que por sorpresa de nadie, también cayera ya doblada sobre la pila de ropa.
(Fin del flashback)
Miguel: Si... amo a mi mamá y todo... ¡pero estoy feliz de tenerla lejos!
Leo y Marco: ¡Y nosotros también!
Y sin poder evitarlo, los 3 lloramos tanto de alegría por lo de la mansión ya limpia como de dolor por recordar esos y más traumas del pasado. El amor duro estaba bien, pero tampoco había que pasarse de la raya.
En eso le tenían envidia a Coco, mientras que a ellos Imelda los explotaba. A su hermana menor la trataba como una princesa. Lo cual era entendible por la edad, pero igual no se vale.
_____________________________________________________________
(Omake 2 de 3: Reunión con los grandes)
(General Pov)
Héctor: Y eso es todo. Me alegra tenerte a bordo -dijo apretando la mano del musico que tenia en frente suyo- será un placer trabajar contigo, mi buen Bobby, amigo.
Si, esta vez a quien Héctor había terminado de convencer de firmar para que firmara con la división musical de su empresa fue viejo amigo suyo. Robert Jackson Proud, más conocido como el buen Bobby Proud. Un musico afroamericano de funk rock/hip hop que anteriormente iba por la moda de los 70 pero recientemente se actualizo al estilo del hip hop y el nuevo Jack swing de los 90.
Y aunque el momento de fama de Bobby había pasado hacia algunos años, Héctor pensaba que fácilmente podía llevarlo de nuevo a la cima con su ayuda.
Bobby: Siempre un placer ayudar a un viejo amigo, Héctor, yeah -hablo de una forma cantada que hizo reír al otro hombre.
Héctor: Me alegra que sigas igual, Bobby -dijo mientras el moreno firmaba el contrato- ¿Cómo esta tu mamá?
Bobby: Ya la conoces, primero se acaba el mundo antes de que algo malo le pase a mi mamá adorada, ella es una mujer dura. Por cierto, te manda saludos.
Héctor: Si ¿Cómo era que decía tu hermano Oscar?... ¨No puedes lastimar algo tan viejo, Suga Mama ha sobrevivido a algunos de los desastres más grandes de la historia humana: El Hindenburg, el titanic, hasta el meteoro que acabo con los dinosaurios¨.
Bobby: Y 30 años de telenovelas. Por comentarios así mi mamá y mi hermano no se llevan nada bien -dijo divertido- por cierto ¿con quienes más has firmado, Héctor? -pregunto haciendo sonreír al hombre mayor.
Quien hasta ahora le seguía dando gracia el modo de ser de Bobby, a pesar de tener más de 40, el tipo seguía siendo todo un niño de corazón. Ojalá más adultos fueran así.
Héctor: ¿Pues recuerdas a Rock Zilla? Lo convencí de salir de su retiro que ni retiro era. También me robe a esa chica, Clara nightingale de su disquera, y también convencí a ese chico, Jonah Tyler Taylor, de trabajar conmigo antes de que el mundo de la farándula lo termine de corromper -dijo haciendo memoria- ambos sabemos que los jóvenes llegan a cometer estupideces cuando se hacen famosos y no tienen supervisión.
Bobby: Entiendo. No queremos que se repita lo que paso con Billy Joe -dijo con un tono cantarín antes de que ambos suspiraran.
Billy Joe Cobra era toda una estrella del rock con un talento natural para la música y el canto que fue descubierto a la temprana edad de 6 años. Además de actor, compositor, juez de programa de talentos, en si el chico tenia el paquete completo para triunfar en el mundo musical. Pero nunca tuvo a nadie que lo guiara en ese mundo, claro que tuvo a gente que hacía todo por el así como fans que literalmente besaban el suelo por donde pisaba, pero nadie que de verdad se preocupara por él como persona.
Eso lo llevo a tener una actitud de divo así como gustos que sobrepasaban lo excéntrico. Y ha la larga, eso posiblemente fue lo que lo llevo a su muerte a la edad de 20 años. La policía nunca revelo al publico la causa real de su muerte, dejándolo como un triste accidente. Pero la verdad era evidente para quienes estaban en el medio. Una fan obsesiva lo mato, y como tenia dinero, salió bien librada del asunto.
Lo que le paso a Billy Joe es lo que actualmente a los artistas y managers llaman ¨No hacer un Cobra¨, o dicho de otro modo, no dejar a las estrellas a solas con fans bajo ningún concepto, y menos en lugares fuera del ojo público.
Bobby: Era tan joven, fue una lástima, me gustaban sus canciones.
Héctor: Sí, fue una tragedia. Realmente era un talento brillante y tenía un futuro prometedor en la industria musical -dijo prendiendo un cigarro- es una pena que su vida haya sido tan corta y trágica. Pero aprendimos de esa experiencia, y ahora nos aseguramos de que nuestros artistas estén bien protegidos y rodeados de un equipo confiable.
Rosa: Lo que lo incluye a usted señor Bobby -dijo la sobrina de Héctor a un lado de su tío mientras se acomodaba las gafas- la seguridad y el bienestar de los artistas son fundamentales. No podemos permitir que tragedias como la de Billy Joe se repitan. Es importante tener un equipo que se preocupe tanto por la carrera como por la vida personal de los artistas.
Héctor: Exactamente. Además de su talento musical, es vital que los artistas reciban el apoyo y la orientación adecuada para manejar el éxito y las dificultades que puedan surgir en el camino. Eso es lo que quiero ofrecerte, Bobby: una oportunidad para brillar nuevamente y tener una carrera exitosa, pero también para cuidarte y apoyarte en cada paso del camino -dijo con franqueza.
Cosa que hizo sonreír al otro hombre.
Bobby: Aprecio mucho eso, Héctor, y sé que mi querida mamá también -dijo feliz- estoy emocionado de trabajar contigo y de ver qué podemos lograr juntos. Creo que con tu experiencia y mi pasión por la música, podemos hacer cosas increíbles -dijo manteniendo la nota al final- estoy listo para darlo todo y volver a la cima.
Héctor: Eso es lo que quiero escuchar, Bobby. Estoy seguro de que juntos lograremos grandes cosas. ¡Vamos a conquistar el mundo de la música! -dijo complacido- pero antes, todavía me queda una reunión, y será almorzando con algunas celebridades que quiero que sean las caras para los productos de mi empresa. ¿Nos acompañas?
Bobby: Ya tu sabes, donde sea que haya comida gratis, allí estará Bobby -dijo complacido con la idea- ¿Quiénes nos acompañan?
Rosa: Pues de hecho, acaban de llegar -dijo mirando a la puerta. A la vez que esta se abrio de golpe, revelando a cinco personas que hicieron que hasta una persona como Bobby se quedara sin palabras. Claro que los conocía, eran algunos de los famosos del momento en sus respectivos ámbitos.
El primero era la celebre estrella del cine, Rock Callahan. Un actor que era conocido por hacer la mayoría de las escenas de acción así como acrobacias en autos el mismo. Toda una autentica estrella de la pantalla grande.
El segundo en entrar se trataba de un famoso acróbata conocido por su nula auto conservación a la hora de hacer acrobacias ya que adora arriesgar su vida sin razón alguna. Boom McCondor. Era conocido como el acróbata más arriesgado del mundo hasta la fecha... hasta que una de sus acrobacias lo acabe matando, obviamente.
El tercer también era una estrella en el mundo de las acrobacias, solo que su especialidad eran los camiones monstruo, William Christian, o como lo conocían en los medios, Billy Stumps. Camionero de las pistas de demolición más famoso no había, era el hombre que hasta la fecha tenia aun el récord mundial de destrozar neumáticos.
El penúltimo hombre en abrirse paso a la habitación era un hombre que ciertamente hasta era fácil confundirse sobre si era humano o no. Ya que hablábamos de un tipo que fue criado por lobos en el desierto y que ha sobrevivido prácticamente a cualquier desastre natural existente. Todo un superviviente experto, Jock Wilder.
Y finalmente y no menos importante, otra celebridad del mundo de los medios dobles de riesgo. El motociclista Mike, quien actualmente era el medio doble de acción que más huesos se había roto en un único choque. Pero aun así ha hecho algunas de las hazañas más grandes nunca vistas con una motocicleta.
Los 5 eran verdaderas estrellas, y eran los últimos famosos que el CEO de Rivera Solutions iba a ver para que se afiliaran a su empresa.
Héctor: Gracias por venir caballero. Además de nosotros, Bobby aquí presente así como Rock Zilla, Clara Nightingale y Jonah Tyler Taylor nos acompañaran en nuestro almuerzo de negocios -dijo con una sonrisa- pero antes de cualquier cosa, tengo una pregunta muy importante que hacer -dijo con tal seriedad que hizo que todos tragaran grueso- ... ¿Pollo o pescado?
No hace falta decir que todos los presentes se cayeron de espaldas al escuchar eso, a excepción de Rosa que solo negó al ver a su tío hacer otra de sus payasadas. Todo lo que ella quería era volver a su casa y abrazar a su querido gato Monty.
Rosa: ...Me pregunto si los chicos lo estarán cuidando bien.
________________________________________________________________
(Omake 3 de 3: Respondiendo al llamado)
(General Pov)
Volviendo a cuando todos se fueron de la roca de Ayers, tanto Casanova como los grandes héroes y El Tigre. Bien se podía decir que el caso había quedado cerrado del todo y que el intento del ladrón de contactar con vida fue solo una fantasía sin sentido.
¿Vida extraterrestre? Algo para reír. ¿Qué se puede contactar al espacio usando ondas y reliquias del pasado? Pamplinas. Nada que ver, solo no había modo de que...
???: Óyeme tu, tal vez seas quien escriba todo esto pero no dejare que menosprecies mi maravillosa existencia.
... ¿Pero qué?
???: Si, así es. Se lo que se preguntan. ¿Quién es esa guapura? Pues vean toda mi magnificencia y tal vez así tengan una idea de quien soy.
Beyonder: ¿Ya lo saben? Soy Beyonder, omnisciente, poderoso, un asombroso tipo que esta en la tierra estudiando la raza humana, no hace falta los aplausos, en serio. Y hoy estoy con ustedes porque escuché una transmisión hacia el espacio exterior invitando a venir a este lugar y pensé ¿Por qué no? Entonces... ¿Que pasa aquí? ¿Se toman la molestia de llamarme y no hay nadie? Que groseros -dijo al ver que no había nadie alrededor- ¿Para qué me llaman si no hay nadie?... Primo Beyonder archivaldo ¿eres tú? -pregunto mirando el rostro de la isla de Pascua- Como sea, tengo mejores cosas que hacer... ya se, iré a molestar a mi guía favorita de la raza humana, Lunella Lafayatte... y tal vez aprenda a comer pizza ¿Por qué no?
Y sin más desapareció... y en serio, hasta yo que escribo esto no me espere ese arrebato al final.
Notes:
Y ese fue el capitulo de esta vez. Como siempre pueden votar, comentar, lo que gusten.
¿Y que les pareció?
Como pueden ver, ya el asunto del robo de esta vez termino. ¿Qué tal los robos hasta ahora? ¿Y los Crossovers?
Por cierto, como dije, ya el próximo capitulo será que aparece el próximo talismán. Y como seguro adivinan, el próximo crossover será con Moon Girl.
Por ahora, me despido. Nos vemos luego.
Chapter 11: Capitulo 9: Contando ovejas
Notes:
(See the end of the chapter for notes.)
Chapter Text
(General Pov)
(San Fransokyo, Antiguo escondite de Momakase)
Como el nombre lo indicaba, este lugar era conocido por ser un viejo escondite de la famosa chef de sushi y actual ladrona criminal con muy mala fama entre las autoridades de San Fransokyo, Momakase. Era prácticamente un restaurante clandestino, donde solo se servían lo platillos de la más alta calidad a los clientes más adinerados. Y esa no era la excepción esta vez.
Por qué en la cocina en la cocina de dicho establecimiento escondido al ojo público se encontraban dos figuras trabajando en lo que se podía considerar todo un banquete. Una de ellas era la propia Momakase, quien se encontraba trabajando en un barco de sushi completo con suma concentración.
Mientras que en otra mesa se encontraba Kyle Takachiho dando los toques finales a una sopa Seen Kow con vejiga natatoria de corvina blanca como sazón.
A simple vista se vería como un escenario normal. Pero si uno se fijaba en los detalles, era fácil notar que Momakase no estaba a gusto cocinando. ¿La razón? Tenía sus piernas esposadas, sin mencionar que le habían colocado un collar de descargas eléctricas debajo del traje de chef. No estaba allí por placer, era obligada, y su compañero de cocina, en realidad era su celador.
Kyle: Sabes, me das vergüenza -dijo rompiendo el silencio entre ellos- ambos venimos del mismo lugar y sin embargo acabaste como una deshonra para los nuestros -dijo mientras revisaba la temperatura del queso para unos nachos de todas las cosas.
Momakase: ¿Disculpa? -pregunto arqueando una ceja.
Kyle:... Noir -dijo con simpleza haciendo que ella captara el mensaje.
Que un cocinero dijera esa palabra con esa seriedad solo significa una cosa, sabia lo que significaba. Los chefs nocturnos, o solo Noir, era un grupo de chefs de elite que no aparecen en el mundo publico de la cocina. En lugar de trabajar en restaurantes, hoteles o en el centro de atención como lo hacen los chefs normales. Les Cuisiners Noirs ofrecen su destreza culinaria a la clientela y lugares en los que un chef normal nunca seria sorprendido sirviendo.
Como a jefes del crimen, reuniones para miembros del bajo mundo o solo el inframundo en general. Lo que hacia a los chefs de Noir un grupo notablemente de mayor calidad y calibre en comparación con la mayoría de los chefs regulares. Lo cual podía considerarse un hecho dado su ambiente de trabajo, donde en la mayoría de los casos un pequeño error podía costar la vida.
Los Noir evitan por lo general el ojo público, lo que hace que casi nadie los conozca y así puedan trabajar por fuera de ese circulo turbio. Como era el caso tanto de Momakase como Kyle.
Momakase: ¿Los chefs nocturnos? ¿Me dices que también eres uno de nosotros?
Kyle: ¿Disculpa? Nosotros me suena a manada -dijo burlón- según yo se. Cuando te volviste criminal, decidiste abandonarnos -dijo con seriedad- creíste que podías robarles, humillarlos, dejarlos como tontos. De hecho aun hay algunos ¨clientes¨ que buscan tu cabeza por intentar robarles luego de envenenarlos con tu comida ¿tienes idea de cuanto dañaste la reputación de Noir en general? -pregunto molesto a la mujer que resto importancia al asunto.
Momakase: Tu eres muy joven como para pertenecer a Noir... Pero tienes la actitud.
Kyle: A mi generalmente me llaman para preparar la última cena de presos importantes condenados a muerte o jefes de la mafia retirados. No soy muy conocido activamente -declaro con humildad.
Antes de solo tomar su cuchillo de chef y usarlo para intentar cortar la cara de la chef de sushi. Sabiendo de antemano que ella bloquearía el ataque con su propio cuchillo.
Kyle: Pero no pienses que soy menos mortal qué tu o cualquier otro chef de Noir.
Momasake: Impresionante, lo admito -dijo poco sorprendida en realidad- muy valiente amenazando a alguien que está restringido, debo agregar.
Kyle: Ay por favor. Ambos sabemos que existen condiciones peores para cocinar. Por ejemplo la mafia rusa qué casi siempre cocinas con un cañón de pistola junto a tu cabeza -dijo haciendo sonreír a la ladrona.
Momakase: Ni qué lo digas. Pero los yakuza son peores... Oye, ya dime. ¿Qué haces trabajando para el nuevo millonario de la ciudad? Héctor Rivera no parece a la típica clientela habitual de Noir... Hasta cierto punto -dijo llevándose una mano al cuello, donde estaba el collar que la podía electrocutar a la más mínima señal de conducta sospechosa.
Mientras que por su parte el joven chef solo se encogió de hombros.
Kyle: Paga bien, es agradable hasta cierto punto, ¿Y necesito señalarte que ese collar es porque sabe lo que le hiciste a Krei? -pregunto.
Mencionando el último incidente conocido donde ella uso veneno para paralizar a un cliente rico y robarle algo de su propiedad para venderlo en el mercado negro precisamente.
Kyle: Únicamente no te esposo las manos también porque las necesitas para cocinar. Porque también sabe lo de que tu misma buscaste voluntariamente al clon de Liv Amara para que te volviera una mutante de laboratorio -dijo con desprecio.
Momakase: Pará esta gracia hubieran buscado un esclavo y ya en vez de hacerme cocinar a la fuerza -respondió con sequedad.
Kyle: Un esclavo no tiene tu renombre mundial como chef de sushi. Héctor te usa para presumir que puede disfrutar de tu comida sin miedo a repercusiones a su salud -dijo mientras sonríe con algo de malicia- es gracioso, eres buena, pero no confiable.
De allí, la conversación entre Momakase y Kyle quedó en suspenso mientras se concentraban en terminar de preparar el banquete que estaban cocinando. A pesar de las circunstancias desfavorables para una de los dos, ambos cocineros eran expertos en su oficio y se complementaban perfectamente en la cocina. A medida que los aromas deliciosos de su creación llenaban el espacio, Momakase no podía evitar sentir cierta satisfacción en su trabajo, a pesar de las difíciles condiciones en las que se encontraba.
Sin embargo, la mención de Héctor Rivera y sus motivos para contratarla hizo que la ladrona con temática ninja se sintiera inquieta. Había algo en ese millonario que no le encajaba del todo, algo que iba más allá de sus acciones en la cocina o el cómo se adueñó de Krei Tech. Ella sabía que ser una chef de Noir, expulsada del grupo, pero una al fin y al cabo, le daba cierta reputación y que era parte de su mística no cuestionar a sus clientes, pero Héctor parecía esconder algo más.
Momakase: A todo esto... ¿Qué es una fiesta lo que tiene ahora mismo o algo así? Es mucha comida -señalo la diversidad de platillos.
Kyle: No. De hecho es un grupo pequeño de invitados selectos. Por ejemplo, todo ese barco de Sushi qué estás haciendo es para una sola persona.
Momakase: ¿Una sola? -pregunto sorprendida.
Kyle: Dos palabras: Rock Zilla -dijo haciendo pensar a la chef.
Momakase: ¿El músico? Oí que se tomó un tiempo para estar con su familia.
Kyle: No se pudo resistir a volver. Igual tampoco es que estuviera retirado en realidad -aclaro mientras sacaba un huevo duro de tamaño considerable del agua hirviendo- huevo duro de cóndor, vaya que Boom McCondor tiene gustos excéntricos.
Momakase: Ya veo... estamos cocinando para celebridades. Es diferente a la usual clase alta que estamos acostumbrados tú y yo -menciono.
En lo que por su parte, a Kyle no le gusto nada que ella los pusiera a ambos en la misma categoría. Él era mucho mejor que ella en muchos aspectos, y con creces.
Kyle: Imagino que ahora entiendes mejor porqué don Héctor no quiere arriesgarse a que quieras pasarte de lista -dijo mientras preparaba una terrina de nueve vegetales- sin mencionar que si de algún modo logras hacer algo turbio. Creo que ambos sabemos que sería capaz de hacer ese hombre en represalia... y aún si sales bien librada, o lo mejor librada posible, buena suerte logrando que alguien te crea que don Héctor te hizo algo.
La advertencia de Kyle resonó en la mente de Momakase mientras continuaban cocinando en silencio. Las palabras del joven chef despertaron en ella una sensación de desconfianza hacia Héctor Rivera. No podía evitar sentir que había algo más en juego, algo más oscuro y peligroso de lo que ella podía imaginar. Por lo cual decidió cambiar de tema. Aunque antes de eso, su compañero de trabajo fue quien hablo esta vez.
Kyle: ¿Cómo te sientes al saber que estás cocinando para personas que en otras circunstancias, intentarías robar o incluso envenenar? -pregunto haciendo que ella se girara hacia él con una mirada desafiante.
Momakase: No es asunto tuyo. Mi pasado no tiene relación con este trabajo -dijo antes de preguntar algo que le daba cierta curiosidad- ... dime algo. Eres de Japón ¿no es así? Entonces... ¿Fuiste a Totsuki? La academia culinaria me refiero -pregunto sorprendiendo al joven chef.
Debido a que no esperaba que ella mencionara algo así de forma tan aleatoria. Pero en cierto modo tenía sentido, ella era una chef de temática japonesa, así que era entendible que tuviera interés en la academia culinaria Totsuki, la más famosa de Japón y una de las más importantes del mundo.
Kyle: Así es. Soy de la generación de hace al menos una década. Tenía 15 cuando me gradué. Llegue a ser el tercero de los diez asientos -dijo impresionando a la mujer.
Momakase: Vaya... Nunca pase del cuarto asiento en mi generación. Hasta la fecha sigo odiando a ese trío de desgraciados... Azami Nakamura, Gin Dojima... Y ese malnacido de Joichiro Saiba -dijo el ultimo nombre con resentimiento
Mientras que por su parte Kyle paso a ser el sorprendido. Ese nombre era casi idolatrado en el mundo de la cocina después de todo.
Kyle: ¿Estuviste en la misma generación qué Joichiro Yukihira?
Momakase: Claro que sí, pero nadie lo recuerda -respondió con rabia- Totsuki borro todo rastro de que yo alguna vez recorrí esos pasillos.
Kyle: ¿Qué esperabas, con lo que has hecho? Dudo que Totsuki quiera mostrar que de algun modo tuvo relación con una ladrona tan peligrosa como tú.
Momakase: Ay por favor -exclamo molesta- hace poco supe que ese desgraciado de Azami intento dar un golpe de estado en la institución y hasta expulsó a su propio suegro de la escuela, robándole el cargo de director. Sin mencionar que intento destruir todo el mundo culinario como lo conocemos. Y a él no veo que lo estén borrando de los registros, solo porque se casó con una hija del director Nakiri.
Cosa que en realidad no se podía refutar. Eran esos casos donde te molestaba que el responsable de un mal acabara saliendo bien librado por sus acciones solo por sus influencias y renombre.
Kyle: Es cierto, lo que hizo Azami fue bastante impactante y tuvo un gran impacto en la academia. Pero al final, fue derrotado por el hijo de Joichiro y sus aliados. Aunque su influencia todavía se puede sentir en ciertos aspectos de la escuela, como las reglas más estrictas y el énfasis en la cocina de élite -explico para fastidio de la mujer.
Momakase: No me importa lo que haya logrado el engendro de Joichiro, todavía no puedo perdonarlo por haberme vencido en el festival culinario. Eso fue lo que me llevó por el camino de la criminalidad en primer lugar -dijo molesta- fue cuando me di cuenta de que la cocina convencional no era suficiente, necesitaba algo más que mostrara a todos que yo era la mejor.
Kyle: Y por ser ¨la mejor¨, tú cometiste el error de olvidar que tus aliados en el mundo del crimen no eran tan poderosos... si es que aún tienes alguno al qué no hayas traicionado ya -dijo molestando a la chef.
Momakase: Supongo que lo dices por mis dos anteriores jefes
Kyle: Ah, sí -menciono casual- el loco que intentó destruir San Fransokyo, y la clon lunática, interesante tu agenda de clientes. ¿Y cómo acabaron? Uno está muerto y la otra con cadena perpetua... Deberías aprovechar esta oportunidad, si demuestras el mínimo atisbo de redención. Don Héctor podría mover influencias para dejarte libre -sugirió.
Solo para que en respuesta la mujer se carcajeara.
Momakase: Ambos sabemos que eso nunca pasará. Yo sé que tú sabes que él sabe que ambos sabemos cierto secretito sobre los Grandes Héroes -dijo haciendo que el hombre la mirara unos momentos antes de suspirar.
Si, sabía de que hablaba, la verdadera identidad de los grandes héroes. El propio Héctor se lo dijo en una reunión privada como una prueba de confianza. Y hasta la fecha Kyle no había traicionado esa confianza. Porque sabía lo que le convenia.
Kyle: Si. Pero me parece que juegas con fuego... El hijo del jefe está enamorado del líder de los grandes héroes -dijo sorprendiendo a la mujer.
Momakase: Con que es así...Por eso mismo sé que él no haría nada por mí, sería más fácil para Héctor hacerme silenciar y que me lleve conmigo el secreto del buen Capitán Encanto.
Kyle: Bueno...eso solo significa que sabes lo que te conviene si no quieres ¨dormir con los peces¨ -declaro antes de volver a
Momakase: Mira nada más. Volví a mis días cocinando en Noir -dijo con sarcasmo.
Kyle: Eres terca, eso te daré. Pero no puedes negar que aun con todo, estar aquí es lo mejor que te puede pasar actualmente... has perdido la confianza de todos. Nadie confiará en ti como chef después de todo lo que has hecho. Estás destinada a vivir en las sombras, lejos de los ojos del mundo culinario.
Y ella sabía que era cierto, pero eso no la detendría. Ella siempre había sido una mujer de pocas palabras, más acción. Y estaba decidida a demostrarle a todos que aún tenía lo necesario para triunfar. De una u otra forma.
Momakase: Muy bien, Kyle. Puedes seguir disfrutando de tu pequeño papel de chef "oscuro" mientras yo vuelvo a subir al escenario. Te mostraré que aún puedo crear platos que harán que el mundo tiemble ante mí -dijo con arrogancia. Aunque en realidad solo intentaba evitar pensar en el hecho de que simplemente estaba a merced de Rivera Solutions.
Sin que hubiera mucho más que pudiera hacer, de momento, estaba atada de manos.
______________________________________________________________
(Escondite de Momakase, comedor)
Después de horas de trabajo arduo, finalmente llegó el momento de entregar los platillos a los invitados de Héctor, quienes se mostraron encantados al ver los platillos y elogiaban la habilidad culinaria de los cocineros. A lo cual ambos chefs se enorgullecieron del resultado final. A pesar de estar obligados a trabajar juntos, demostraron su habilidad y maestría en la cocina, entregando platillos de la más alta calidad y sabor.
Cosa que Héctor esperaba, ya que la presentación era importante para terminar de enganchar a sus nuevos socios. Ahora dependía de él terminar de endulzar el trato.
Héctor: Si, mi hijo y sus amigos hacen cada tontería. Los jóvenes llegan a cometer cada locura -dijo terminando de contar como sus hijos le declararon la guerra respecto a recibir clases de profesor privados.
Sacando risas a todos por cada ocurrencia de los jóvenes que de momento eran el principal proyecto de la persona delante de ellos que en cierto modo tenía un carisma que les llamaba la atención y hasta hacían que confiaran en él.
McCondor: ¿Me lo dirás a mí? Un niño de apenas 10 años logro hacer conmigo la acrobacia máxima. A diferencia de su hermano mayor que dejo mucho que desear -dijo divertido recordando el incidente, que termino con el mayor vendado de cuerpo completo al obviamente carecer de cualquier habilidad acrobática u osada.
Billy: ¿Hablas de Kick Buttowski? -pregunto el camionero con curiosidad para sorpresa del experto en skateboarding.
McCondor: ¿Lo conoces? Pequeño, traje de acróbata, usa casco -pregunto hasta haciendo un gesto con la mano para enfatizar la parte de que el chico era ¨bajito¨.
Billy: ¿Qué si lo conozco? Mantengo el contacto con él, y aquí entre nos, me reí bastante cuando me contó que su hermano entró a ese concurso que hiciste porque pensaba que la ida a Hawái era el premio, el idiota no sabía nada de la acrobacia que haría contigo -dijo carcajeándose.
McCondor: Eso explica todo ¡el imbécil era terrible! -dijo en lo que ambos se rieron.
De paso llamando la atención de cierta joven que estaba degustando de su ensalada cesar. Quien era una de las cantantes pop más populares entre los adolescentes y jóvenes adultos del momento. La joven Clara Ruiseñor.
Clara Ruiseñor: ¿Cómo conoce Billy Stumps a este chico, Kick? -pregunto a la sobrina de Héctor quien solo ajusto sus gafas antes de comenzar a revisar la información que tenía en su tableta.
Porque sí. Rosa antes del almuerzo ya había hecho investigaciones a fondo de cada uno de los invitados de su tío. Antecedentes, historia, familia y conocidos, gustos, pasatiempos, todo. Nada se quedó sin investigar, a fin de cuentas, la información es poder en todo el sentido de la palabra.
Rosa: ... Al parecer había un concurso de la marca guepardex, quien encontrará la llave dorada podría hacer una acrobacia con Billy Stumps. El chico, Kick, la ganó, pero en sus prisas por llegar a tiempo sin querer saco a Billy de su camión e hizo la acrobacia, fallando y destruyendo el camión en el proceso -respondió por lo bajo sorprendiendo a la cantante.
A la vez que causo que Billy al escucharlas se carcajeara aún más fuerte antes de llevarse unas cuantas albóndigas con especias a la boca.
Billy: Y con todo fue impresionante para un novato, ese niño tiene talento -declaro riendo con nostalgia- nada menos se podría esperar del hijo de Honey.
McCondor: ¿Honey? ¿Honey Splash? -pregunto curioso.
A la vez que otro de los presentes paro de sorber sus fideos a través de la rendija del casco. Debido a que al parecer tenía por ley que nadie podía ver su cara hasta el día de su muerte, por eso el casco de motociclista 24/7.
El motorizado Mike: ¿Saben de ella? Esa mujer era mi ídolo durante mi infancia. Fue una lástima que tuviera ese accidente justo antes de romper el récord mundial.
Billy Stumps: ¿No supiste? -pregunto sonriendo- regresó para romperlo, acompañada de su hijo.
Rosa: Quién no es un novato cualquiera señor Mike. ¿No lo sabe? -exclamo con un tono sugerente- ese niño, Kick fue el misterioso acróbata qué completo los rizos de laceración, la atracción de los juegos extremos de California qué ni siquiera usted pudo completar -menciono con tranquilidad.
Logrando que el motociclista escupiera su bebida de golpe.
El motorizado Mike: ¿Fue él?
Billy Stumps: ¿Qué les dije? Si el talento fuera petróleo ese niño tendría para ser multimillonario -dijo soltando una carcajada.
El motorizado Mike: Aun recuerdo cuando vi la noticia, escupí mi cereal apenas me enteré -dijo recordando el suceso en su mente.
A la vez que cierto hombre de apariencia bastante ruda dedo de comer su filete de cocodrilo al escuchar tantas menciones de cierto chico que de hecho le parecía haber visto antes.
Jock Wilder: ... Ahora que lo mencionan. Recuerdo que un chico así se quedó en mi campamento natural. Pero él se quedó con mi hermano Larry mientras yo me lleve a su amigo a apagar un incendio -dijo sacándole una sonrisa al actor de cine sentado a su lado.
Rock C: ¿El que fue criado por chihuahuas? -pregunto a la vez que el otro hombre se encogió de hombros.
Jock Wilder: Si. Pero ahora que lo mencionan. Desde que eso paso, Larry se ha vuelto mucho más osado -dijo notando ese cambio de actitud en su hermano. Y en realidad le gustaba, siempre intento que Larry fuera más intrépido pero él nunca se había animado a salir de su zona de confort.
Billy Stumps: Es lo que pasa cuando tratas con Kick Buttowski, acabas abrazando lo increíble -dijo como si fuera lo más obvio del mundo.
Rock C: Suena a un chico interesante. Me gustaría conocerlo -dijo en lo que varios de los presentes asintieron también.
Héctor: Lo mismo digo, parecer ser un chico divertido. Y me gusta la diversión, tal vez para cuando haga la primer fiesta de la empresa lo invite para ver que desastre acaba causando -dijo riendo por la idea.
Ya que desde ya imaginaba todo acabando en desastre con explosiones, llamas y tal vez algunos animales del zoológico sueltos... Sería algo muy interesante de ver.
Billy Stumps: Sólo un consejo, deja en claro que el hermano no está invitado -dijo llamando la atención del otro hombre.
Héctor: ...Rosa, corazón. ¿Qué información puedes darme del hermano que parece sonar como alguien de malas pulgas? -pregunto a su sobrina solo para que en respuesta Billy levantara el muñón que tenía por brazo derecho en señal de protesta.
Billy: Yo te la puedo dar, Héctor. Empezando porque decir que tiene los modales de un cerdo, lo cual de hecho es un insulto para los pobres puerquitos. Esta el detalle de que si lo invitaras... sólo digamos que seguro tendrían que sujetarte para que no le hagas nada por andar acosando a tu sobrina -declaro con seguridad.
Cosa que no le gustó nada al anfitrión del almuerzo.
Héctor:... Oh, ese tipo de persona -dijo con el ceño fruncido- ya veo, tomaré su consejo. Por otro lado ¿Qué me dicen caballeros? Les gustaría firmar con mi empresa y ser rostros publicitarios de Rivera Solutions? -pregunto con una gran sonrisa.
A lo cual, los invitados se miraron entre sí, evaluando la propuesta de Héctor. Siendo Rock Callahan el primero en hablar.
Rock C: Me gusta la idea de ser parte de Rivera Solutions, parece una empresa prometedora. ¿Qué tipo de publicidad tendríamos que hacer? -pregunto con interés.
Héctor: Bueno, eso dependería de cada uno de ustedes y sus talentos. Pueden participar en anuncios comerciales, eventos promocionales e incluso proyectos benéficos. Quiero que sus rostros sean sinónimo de calidad y confianza -dijo a la vez que Clara se aclaró la garganta.
Clara Ruiseñor: Como artista, siempre me ha gustado involucrarme en proyectos que ayuden a las personas. Me encantaría colaborar con organizaciones benéficas y promover causas importantes. Por esa razón acepte estar a su cuidado, señor Rivera -dijo en lo que los demás artistas presentes asintieron estando de acuerdo.
Jock Wilder: Si puedo utilizar mi fama para hacer el bien, estoy dentro. Me gusta la idea de ser parte de algo más grande que yo mismo, por eso disfruto la naturaleza -dijo dando un pulgar en alto.
Billy Stumps: ¡Cuenta conmigo también! Si puedo ayudar a dar a conocer una empresa que ofrece soluciones reales, estoy dispuesto a hacerlo.
El motorizado Mike: No soy muy fanático de la publicidad, pero si eso significa ayudar a impulsar una empresa que tiene un propósito valioso, podría considerarlo -dijo encogido de hombros- ¿usted pondrá capital para futuras acrobacias, no?
Mientras que por su parte, Héctor sonrió satisfecho ante las respuestas positivas de los invitados. Sabía que contar con estas personalidades reconocidas en el mundo del entretenimiento sería un punto de quiebre para su empresa en más de un sentido.
Héctor: Dale por hecho Mike. Déjenme decir que estoy emocionado de trabajar con ustedes. Creo que juntos podemos lograr grandes cosas y marcar la diferencia en la industria. ¡Bienvenidos a la familia de Rivera Solutions! -dijo levantando una copa para brindar.
Gesto que todos imitaron a excepción de una persona. Un chico que tiene el pelo largo y un gran flequillo que de vestimenta traía una cazadora azul, grandes zapatos, pantalones negros, una cadera de oro y un brazalete. Este era Jonah Tyler Taylor, quien posiblemente era una de las celebridades más queridas y admiradas del mundo actualmente. Un cantante tan popular que hace conciertos constantemente, y los fans hasta se acercan a él en el escenario.
JTT: Disculpe, señor Rivera -dijo levantando la mano- de hecho. Ya que estamos haciendo solicitudes, me gustaría preguntar algo -menciono llamando la atención del hombre.
Héctor: Pues pregúntame, caon, pregúntame -dijo de forma casual sacando algunas risas a los presentes.
JTT: Ejem, si bueno. Ya que escucho que piensa invitar a la fiesta de su empresa a este chico, Kick ¿Eso quiere decir que no tiene problema en invitar a gente que no es famosa?
Héctor: Claro, ¿Por qué no? -respondió como si nada- no sé si lo has notado. Pero no soy como el rico estirado promedio -dijo casual.
Siendo ese comentario lo que le dio ánimos a la estrella adolescente para seguir con su idea.
JTT: Pues en tal caso, me gustaría que una familia fuera invitada como mis invitados. La familia lejana de Billy Joe Cobra, los Wright -dijo llamando la atención de más de uno.
Héctor: Claro, no tengo problema -respondió de inmediato.
Mientras que por otro lado la estrella de Rock que se estaba comiendo un barco de sushi paro de golpe con su cometido de devorar las pequeñas piezas de arroz con pescado.
Rock Zilla: ¿A qué se debe eso, chico? -pregunto arqueando una ceja.
JTT: Pues, en realidad, es bien sabido que soy un gran fan de Billy Joe Cobra. Desde niño escuchaba sus canciones, pero mi representante anterior nunca me dejo hacer nada para homenajearlo ya que "sería malo para mi imagen".
Rock Zilla: ¿Malo para tu imagen? -pregunto al mismo tiempo que cierto cantante junto a él paro de comer nachos al entender a que se refería el joven.
Bobby: Así que el rumor es cierto, todos esperan que tu seas el nuevo Billy Joe, yeah -hablo cantando con micrófono en mano.
Clara: Escuche de eso -dijo pensativa- si no me equivoco, la razón del porque tu representante anterior te dejo hacer esa nueva versión de la canción de Cobra "Tú me amas, yo me amo más" fue porque él pensó que era tu modo de decir que Cobra era cosa del pasado y tu estabas listo para terminar de enterrarlo o algo así ¿no? -pregunto.
Logrando que el joven frunciera el ceño con desagrado por el recuerdo.
JTT: Exacto, e imaginarán como me sentí cuando supe que mi representante anterior era un ex representante de Billy.
Rosa: Si, él fue de esas personas que en secreto detestaba a Billy por su actitud de Divo cuando estaba vivo al parecer -menciono de forma casual.
JTT: Yo sé que BJC cometió errores, pero me pareció desagradable que quisiera faltar respeto a su memoria de ese modo -dijo resentido con su representante anterior.
Solo para que esa pareciera ser la señal para que de repente, varias notificaciones sonaran en el celular de Rosa, quien solo sonrió al ver quien era el remitente.
Rosa: Y dicho hombre aún está molesto con nosotros, querido Jonah. Al parecer sigue mandando mensajes de odio porque "te lavamos el cerebro".
Héctor: ¿En serio? -pregunto antes de solo agitar la mano en señal de desinterés- solo mándalos al equipo legal y consigue una orden de cese y desista, linda
Rosa: Si, tío -dijo para incredulidad del chico que no se creía lo poco que consideraban como amenaza al hombre que solía manejar cada aspecto de su vida prácticamente.
JTT: En todo caso, me gustaría hacer algo lindo por la familia que le queda a BJC en vida. Y por eso me gustaría invitarlos a la fiesta y aprovechar para presentarme ante ellos -dijo sacándole una sonrisa al anfitrión del evento actual.
Héctor: Suena como una increíble idea -dijo antes de chasquear los dedos- Rosa...
Rosa: La familia consta de cuatro miembros -hablo ya con información en mano- los padres Hugh y Jane. Y sus hijos Spencer y Jessica. De todos ellos Spencer puede ser quien más te interese, tío -dijo llamando su atención.
Ya que siempre le impresionaba la facilidad con la que su sobrina conseguía información. Y si ella decía algo así, sus motivos tendría.
Héctor: ¿Ah sí?
Rosa: Es un aspirante a cineasta, y sus películas caseras son muy buenas, en especial los efectos especiales -explico- y a ti te gusta explotar el talento joven.
Héctor: Tienes razón... aunque con Marco preferiría explotarlo literalmente -menciono pensativo- que no lo haya hecho hasta la fecha demuestra cuanto quiero a mi hijo –dijo con evidente sinceridad.
¿Cómo no había hecho que el amigo de su hijo que tenía relación directa con Ernesto de la Cruz no acabara estrenando unos lindos zapatos de concreto en el océano pacifico? Misterios de la vida.
Héctor: Pero en fin. Entonces supongo que abran dos invitaciones desde ya para cuando sea la fiesta en unas cuantas semanas. Por ahora terminemos el almuerzo, y luego... ¿Quién quiere ver Mike y Boom hacer una acrobacia con tiburones, un volcán activo y barriles a lo Don King Kong? -sugirió a la vez que todos levantaron las manos mientras que ambas estrellas del círculo de los medios dobles de riesgo ya estaban emocionadas con la idea.
Siendo en ese momento donde una alarma particular sonó en el celular de Rosa. Una que hizo que tanto ella como Héctor se miraran con sorpresa y recelo. Cosa que extraño a sus invitados.
Héctor: ¿Es lo que creo que es?
Rosa: ... Merry tiene un corderito blanco como la nieve, querido tío -dijo extrañando a todos.
Héctor: Entiendo -dijo poniéndose de pie- por favor, todos sigan disfrutando de tan buena comida. Mi sobrina y yo debemos hablar de ciertos... asuntos -dijo para luego retirarse sin más siendo seguido por Rosa.
Donde una vez ambos estuvieron a solas a puerta cerrada, dejaron que grandes sonrisas de complicidad se formaran en sus rostros. Debido a que tenían una oración clave para cada uno de los talismanes en caso de que estos llegaran a ser encontrados.
Y esta vez, el talismán de la oveja fue el que tuvieron la suerte de hallar.
Héctor: ¿Y bien? ¿En dónde esta? -pregunto emocionado.
Rosa: Habrá una subasta de antigüedades en línea en Nueva York dentro de pocos días. Uno de los artículos subastados será un viejo jarrón chino. Y ya adivinaras que tiene incrustado dicho jarrón -dijo llenando de satisfacción a su tío.
Gallo, Buey, Serpiente.. y ya podían añadir el de la oveja a la colección.
Rosa: No obstante... -menciono ajustando sus gafas- ¿Qué haremos con Hiro? Esto es algo en lo que no queremos que meta sus narices de ningún modo. Ni él ni el resto de los grandes héroes.
Héctor: Es verdad... ¿sabes qué? Ejecuta el plan ¨falso oscuro retorno¨ -dijo sorprendiendo a su sobrina.
Rosa: ¿Ese? ¿No es un poco extremista?
Héctor: Lo sé, pero en este caso creo que es necesario. No podemos permitir que Hiro o los demás descubran lo que estamos haciendo, al menos no desde el comienzo -dijo encogido de hombros- se trata de que no se interpongan en nuestros sueños... incluso si eso implica tomar medidas drásticas -declaro decidido.
Haciendo que su sobrina asintiera, entendiendo la gravedad de la situación. Sabía que su tío, aun cuando la mayoría del tiempo actuaba de forma exagerada, precipitada e infantil, no tomaría esta decisión a la ligera, y confiaba en su juicio.
Rosa: De acuerdo, ejecutaremos el plan "falso oscuro retorno". Me aseguraré de que todo esté listo y preparado.
Héctor: Excelente. Mientras tanto, debemos ser cautelosos y mantenernos alejados de cualquier sospecha. No podemos permitir que nadie nos descubra antes de que hayamos asegurado el talismán de la oveja.
Así ambos se miraron con determinación, sabiendo que estaban a punto de embarcarse aún más en algo mucho más peligroso de lo que habían anticipado. Pero estaban dispuestos a arriesgarse por el bien de la familia y por proteger y defender el sueño por el que estaban dándolo todo.
_______________________________________________________________
(Esa noche)
(San Fransokyo, parque de la puerta Torii)
(??? Pov)
... ... ...
Circuitos cerrados debido a circunstancias imprevistas...
... ... ...
Volviendo a formatear. Reiniciando el sistema...
... ... ...
Confirmación de la misión... Datos dañados, no se puede acceder a la misión... reactivando sistemas. Prioridad: Buscar reparaciones... error del sistema... error del sistema... error...
... ... ...
Nueva misión programada: Encontrar al chico. El chico es todo lo que importa. Nivel de alerta elevado a prioridad cuatro.
---
¿Dónde... donde estoy? ¿Fue todo lo anterior... solo un sueño?
???: Ugh... mi cabeza... que... ¿Qué paso? -dije llevándome una mano a la frente, aun cuando se supone que no debía ser capaz de sentir nada, sentía una terrible jaqueca, como si hubiera revuelto todos mis bancos de memoria sin cuidado alguno- y... ¿Dónde está él?
¿Pero quien era ¨él¨? Puedo sentir que estoy en el suelo, se siente la tierra, las plantas y la humedad así como el frio de la noche ¿Cómo llegue aquí? No recuerdo nada... solo imágenes borrosas...
???: Joder, me duele el pecho... ¿Por qué...? -me pregunte antes de que un recuerdo viniera a mi mente. Un gran robot rojo, lanzando su puño hacia mí- cierto... yo estaba... y... ¡El chico! -dije alarmado.
¿Cómo pude olvidarlo? ¡El chico? ¿Dónde está el chico? ¿Cómo pude olvidar algo tan importante? Yo no importo, el chico es lo único que importa. Nada más.
???: ¿Él esta bien? ¡usk! -dije antes de golpear mi cara contra el suelo, mis piernas... aun no estaban del todo funcionando- yo... ¡yo necesito encontrarlo A ÉL!... Necesito... -dije abriéndome paso por las frías calles de la ciudad.
Avanzando a paso tambaleante por las calles de San Fransokyo, me esfuerzo por recordar cuál es mi objetivo principal. La misión programada antes de... ese lapso en mi memoria. Encontrar al chico. Sí, eso es lo que debo hacer. Pero ¿Quién es ese chico y por qué es tan importante?
Mientras sigo caminando, atrayendo miradas confundidas de los transeúntes, una imagen se forma vagamente en mi mente. Un joven, con cabello oscuro y ojos penetrantes, alguien que parece estar en peligro. Esa es la única pista que tengo hasta ahora.
Mis sistemas aún están reiniciándose y no puedo acceder a mi misión anterior, pero sé que debo enfocarme en encontrar al chico. Puede que tenga respuestas para mí, respuestas sobre quién soy y por qué me siento tan incompleto.
Sigo avanzando por las calles, buscando desesperadamente alguna señal del chico. La ciudad está tranquila a esta hora de la noche, pero algo en mi interior me dice que él está cerca, que puedo encontrarlo si sigo adelante. Así que seguí avanzando... hasta encontrar algo que me llamo la atención. Era un volante, para una oferta de empleo.
¨Contratando. Se necesita ayudante en la cafetería del gato de la suerte, trabajo de tiempo completo. Se ofrece alimentación y una paga razonable. No se necesita experiencia. Si esta interesado llamar a Cassandra Hamada al XXX-XXX¨ ... a acabar de leer, volver a analizar el anuncio una y otra vez, no entendiendo porque era tan importante para mí por alguna razón.
Hasta que un corto circuito me hizo recordarlo... el chico... él podía estar allí.
???: ... Perfecto.
________________________________________________________________
(Un par de días después)
(Hiro Pov)
Es oficial, estaba muy molesto. Lo suficiente como para incluso distraerme tanto de mis clases en la universidad como de mi trabajo en Rivera Solutions. Y es que sencillamente no podía sacarme de la cabeza a ese ladrón, Casanova. Fue tan así mi estrés respecto al tema que tanto mi jefe, Héctor y la profesora Granville me pidieron que me tomara un par de días para aclarar mis ideas debido a que por distraído estaba haciendo desastres tanto en la escuela como el trabajo.
Y es que... ya iban tres veces que se escapaba de nosotros. En nuestra propia casa, aquí en San Fransokyo luego de robar el museo. En París, Francia luego de robar partes de pinturas famosas. Y más recientemente, en su intento por contactar vida extraterrestre en Australia. Honestamente la idea me hacía sentir bastante frustrado ¿Qué nos estaba pasando? Ningún criminal nos había humillado de ese modo antes.
Solo era un tipo que tenía delirios de grandeza que jugaba a ser un mago con trucos obviamente baratos y que estaba obsesionado con llamar la atención de la forma más llamativa posible ¡¿Cómo es que no lo hemos atrapado aún?!
Baymax: Hiro, tu neurotransmisor indica por tus niveles que estas ¨nervioso y molesto¨ -dijo mientras caminábamos de vuelta al café de la tía Cass luego de tomar una caminata para despejar la mente- ¿es por Casanova?
Hiro: En parte, pero no debes preocuparte, tu tómalo con calma ¿ok? Apenas estas a un 30% de tus capacidades -dije recordando que aún no había podido limpiar adecuadamente el sistema de Baymax. Casanova había usado virus más potentes para infectarlo que la vez anterior.
Baymax: ... Entiendo... pero igual pareces estar estresado...
Hiro: Si, pero no es solo por Casanova en realidad... no, de hecho es también por el nuevo empleado de tía Cass... -dije recordando justo la razón por la que decidí salir a caminar en primer lugar.
---
(Pequeño Flashback)
Hiro: ¿Dónde quieres esta caja? -pregunte a mi tía mientras la ayudaba a limpiar el sótano. Lugar que de hecho no solía visitar mucho ya que estaba lleno de lo que para mi eran solo cosas viejas sin importancia.
Cass: Solo ponla encima de las demás cerca de las escaleras, cariño -respondió acomodando otra parte de la habitación.
Mientras que por mi parte, admito que esto era una buena distracción de todo lo que me estaba rondando la cabeza. Aunque sentía curiosidad también, que yo recuerde tía Cass nunca nos había pedido ni a mi ni a Tadashi limpiar el sótano antes. Ni siquiera cuando le daba la fiebre de primavera.
Hiro: ¿Por qué estamos limpiando el sótano de todos modos?
Cass: ¡Por el nuevo empleado! Tuve tanta suerte de que presentó su solicitud -dijo sonriendo- él también estaba dispuesto a hacer un trato, por lo cual el acabo siendo muy barato.
... No me gusta por donde iba esto. La gente usualmente intentaba verle la cara a la tía Cass al verla siendo amable y gentil. Se que ella puede cuidarse sola, pero...
Hiro: Que... ¿Qué clase de trato? -le pregunte- ¿Y que tiene eso que ver con el sótano?
Cass: ¡Esa es la cosa! El buscaba un lugar donde quedarse ¡Así que para reducir su paga, él va a vivir aquí! -dijo con emoción.
.... ¿Eh?
Hiro: ¡¿QUÉ?!
Cass: ¡Él incluso tiene experiencia trabajando en un restaurante! ¡Qué golpe de suerte! -dijo ignorando mi consternación. A lo cual decidí hacerme escuchar.
Hiro: Tía Cass ¿Por qué hiciste eso? Quiero decir, no sabemos quién es este tipo... -pregunte en lo que ella me vio con mala cara.
Cass: ¡HIRO! -me hablo en reprimenda antes de ponerme las manos sobre los hombros para apaciguarme- se que esto es repentino... pero realmente necesito ayuda y esto es lo mejor que pude conseguir... ¿Puedes confiar en mi en esto? -pregunto dándome esa mirada que me hacia imposible decirle que no.
Aunque obviamente, tenía mis dudas.
(Fin del flashback)
---
Baymax: Todo estará bien -dijo dándome apoyo- la tía Cass nunca dejaría a alguien peligroso entrar a la casa -me dijo en lo que llegábamos al café.
Hiro: Tienes razón, Baymax. No debería preocuparme tanto. ¡Todo estará bien! -dije abriendo la puerta para entrar en lo que trataba de convencerme de que solo estaba exagerando la situación, no era tan malo.
O eso pensé.
Baymax: Oh no -dijo para mi confusión antes de ver a donde mi amigo estaba viendo.
En ese momento, juro que sentí que todo mi cuerpo se congelo, yo... estaba paralizado del miedo y del horror. Solo... ¿Cómo era posible? No tenía sentido ¡se suponía que estaba muerto! Nunca encontramos ningún rastro de él. Pero aquí estaba, frente a mí... era Obake.
Habían pasado meses desde que eso paso, y en realidad, cuando iba al cementerio a visitar la tumba de Tadashi, algo en mi me obligaba a también dejar flores en la tumba de Bob Aken. Ya que en cierto modo, aun cuando fue nuestro enemigo, él hubiera sido mi maestro de haber aceptado su propuesta hace tanto tiempo. Y no pude evitar sentir lastima por él.
Era tal la situación que incluso he llegado a ver las grabaciones que tenia Baymax de los últimos momentos del hombre y de que el techo colapsara sobre él. Así como solía ver los videos de mi hermano una y otra vez, hice lo mismo con esas grabaciones. Intentando comprender lo que Obake pensaba al final, pero nunca pude hacerlo.
Pensé que era una pagina de mi vida que había terminado de ser escrita... pero tal parece que ese no era el caso.
Hiro: ... ¿Obake? -dije sin saber si lo que estaba viendo frente a mi era real o no.
Pero pronto él propio espejismo me demostró que tan real era cuando me tomo de los hombros para luego atraerme a su lado. Ok, era real, era muy real... ¿Por qué tenia el pecho tan duro?
Hiro: Oh no.. -dije decidiendo mirar al rostro del sujeto, esperando lo peor.
Solo para acabar del todo confundido. Según recordaba, Obake era una persona fría incapaz de sentir euforia o satisfacción debido a su propio problema mental causado por el accidente que tuvo hacia años. Pero este sujeto era todo lo opuesto, literalmente irradiaba alegría y felicidad... además, el cabello de Obake tenía una franja roja, no azul.
¨Obake¨: ¡Aquí estás! -dijo prácticamente rebosando de emoción, llegando casi a la euforia. Y yo... ya no entendía nada.
Hiro: ... ¿Eh...?
Tan solo... ¿Qué estaba pasando?
__________________________________________________________________
(General Pov)
(Rivera Solutions)
Rosa: Si no me equivoco, justo ahora Hiro debió de encontrar nuestro pequeño ¨presente¨, querido tío -dijo tomando un te de burbujas de fresa con satisfacción- oh mejor dicho, nuestro regalo lo encontró a él. Eso lo tendrá bastante distraído por un tiempo.
Héctor: Esa es la idea. Se que jugar con sus emociones al recordarle un viejo trauma del pasado fue jugar sucio. Pero en la guerra todo se vale -dijo terminando su almuerzo- fue un golpe de suerte encontrar a ese robot abandonado ¿no te parece?
Rosa: Bien dicen que la basura de unos es el tesoro de otros -menciono antes de centrarse en su computadora- ahora podremos centrarnos en la subasta en paz. Esta por empezar.
Cosa que tenia emocionados a tío y sobrina. Con los talismanes anteriores habían tenido que hacer un sinfín de cosas para obtener cada uno. Pero en esta ocasión, iba a ser tan sencillo como presionar un botón. Benditas las compras en línea. O en este caso, bendita casa de subastas de Nueva York.
Solo había que seguir las reglas de las subastas. Ofrece la oferta más alta y no dejes que nadie te quite el premio mayor, no quites los ojos del objetivo.
Héctor: Y para mejorar nuestra suerte. El jarrón será el primer articulo para subastar.
Rosa: No creo que tengamos problemas de dinero para ofertar. Solo es cosa de que empiece la subasta -dijo en lo observaban la cuenta regresiva que daba inicio.
Héctor: 10... 9... 8... 7...
Rosa: 6... 5... 4... 3...
Héctor y Rosa: 2... 1...
Y justo en ese momento, ese tan esperado y anhelado momento. Fue que el destino decidió jugar chueco. Con la computadora perdiendo señal y desconectándose de la subasta.
Héctor: ...
Rosa: ...
...
Ambos: ¡¿PERO QUE FUE LO QUE PASO?
Rosa: ¡Algo le paso al Wifi!
Héctor: ¡Pues arréglalo, ya! -ordeno en lo que su sobrina se puso manos a la obra.
Y que no se diga que Rosa no intentó desesperadamente arreglar la conexión wifi, pero sus esfuerzos fueron en vano. La cuenta atrás en su pantalla había llegado a cero y la subasta del precioso jarrón ya había comenzado. Sólo pudieron observar con impotencia cómo las ofertas comenzaban a llegar. A lo cual Héctor maldijo en voz baja al darse cuenta de que su plan había sufrido un gran revés.
Héctor: No podemos dejar que esto se escape. Necesitamos ese jarrón -murmuro desesperado- ¿Hay alguna forma de conectarse a otra red?
Rosa: Intenté cambiar de red, pero nada parece funcionar. Quizás el Wi-Fi se cortó en todo el edificio. Tendremos que encontrar otra solución -dijo antes de recordar algo- espera tío, recuerdo que hay una cafetería cercana que tiene Wi-Fi confiable. Está a solo unas cuadras de distancia. Podemos ir corriendo y continuar con la oferta desde su red.
Héctor: ¿Pues que esperas? No perdamos más tiempo. ¡Coge tus cosas y vámonos! -ordeno.
Siendo así que ambos rápidamente empacaron la computadora portátil y salieron de la oficina, corriendo contra el reloj. Mientras corrían por las concurridas calles de San Fransokyo, Rosa no pudo evitar admirar la energía de la ciudad en un intento por distraerse de lo estresante que fue todo el asunto. Fue un marcado contraste con la ansiedad y la frustración que sintió en ese momento. Pero no había tiempo para pensar en eso.
Finalmente llegaron al café y rápidamente se acomodaron en una mesa cerca de la ventana. Rosa se conectó al wifi mientras Héctor seguía monitoreando la subasta. Solo para que ambos soltaran gritos de frustración al ver que ya era tarde. El jarrón había sido vendido.
Héctor: ¿Por qué? No es justo. Se supone que Rivera Solutions es la empresa más avanzadamente tecnológica de la ciudad ¿Cómo se pudo quedar sin wifi? -pregunto no entendiendo como es que la oportunidad de oro de obtener el talismán de la oveja se fue tan rápido como llego.
Rosa: Lo único que se me ocurre fue que de algun modo se daño el cableado principal de los routers, pero lo que no entiendo es como pudo pasar -dijo pensativa.
Para que en ese momento la respuesta llegara en forma de dos adolescentes que habían entrado apresuradamente en la cafetería y procedieron a sentarse para recuperar el aliento. Adolescente que conocían muy bien y que parecían nerviosos.
Leo: Ahora sí que lo arruinaste, Marco. ¿Cómo se te tirar un poste de luz mientras tomabas la limusina del señor Rivera sin permiso? ¡echaste a perder la electricidad de todo el edificio sin mencionar el internet! -dijo para sorpresa de tío y sobrina que escucharon eso con incredulidad.
Marco: Tranquilo. Mientras nunca se enteren no pasa nada -dijo restando importancia al asunto- sabes la importancia de que aprenda a conducir. Eso seguro impresiona a Kyle.
Leo: Esta vez se enojará más que cuando olvidamos sacar al cocodrilo del baño para devolverlo a su foso -menciono sacándole risas al otro chico.
Marco: Si, Don Héctor grito como una niñita. Se escucho desde fuera de la mansión, fue divertido -dijo riendo por lo bajo mientras las dos personas sentadas justo detrás suyo escuchaban atentamente.
Tanto tío como sobrina escucharon la conversación de los dos adolescentes, sorprendidos por lo que acababan de descubrir. Parecía ser que Marco y Leo eran los responsables de la pérdida de señal de wifi en todo el edificio. Esto significaba que el plan de Rivera Solutions había sido arruinado por sus propios empleados. Oh si preguntan a Héctor ¨por el maldito De la Cruz, ¿Por qué no me sorprende? '.
Leo: En fin, en serio deberías portarte bien con Don Héctor, a fin de cuentas, si estamos aquí es gracias a él y es como la quinta vez que se pone furioso contigo solo esta semana.
Marco: Meh, el cara de chivo no me preocupa -dijo para sorpresa de Leo quien justamente viendo al propio Héctor parado detrás de su amigo con muy mala cara.
Leo: ¿Ah, no? -pregunto intentando esconder las risas que la situación le estaba causando ahora.
Marco: No, cuando empieza a gritarme y regañarme le digo ¨Ah, como quieras anciano, mira, grita todo lo que quieras pero no soy un niño pequeño al que puedas...¨.
Héctor: ¡MENDIGO MOCOSO! -grito en el oído del chico de vestimenta azul. Haciendo que este se cayera de la silla antes de ver con pánico al hombre mayor.
Marco: Je... je, je... hola, Don Héctor -dijo nervioso.
A la vez que el mencionado estaba usando todo de si mismo para simplemente no buscar cuchillos en la cocina de esa cafetería para practicar el tiro al blanco con ambos adolescentes. Al menos de milagro su hijo no estaba metido en el problema gracias a que estaba tomando la mañana para hablar con su mamá.
De paso con Imelda deseándole un buen día, no sin antes también decirle mil y un maldiciones... rayos, esa mujer seguía tan candente como siempre.
Héctor: ¿Qué es esto que escucho? ¿Fueron ustedes los responsables de la falta de wifi en la subasta? -preguntó, intentando controlar su enojo en lo que ambos se miraron.
Marco: Lo siento, Don Héctor. No fue nuestra intención. Fue un accidente, nos tropezamos con el poste de luz y...
Leo: Nos suena a manada ¿no crees?
Héctor: ¡Basta de excusas! ¿Se dan cuenta de lo que acaban de arruinar? ¡Perdimos la oportunidad de obtener el jarrón y todo por su irresponsabilidad! ¿Creen que esto no tendrá consecuencias? -pregunto pensando en posibles castigos para estos chicos problemáticos.
¿Calzón chino? Solo si era en tanga. ¿Pegamento en los parpados? Tampoco había que ser tan cruel... por ahora. ¿Polvos picapica en la nariz? ¡Bingo!
Leo: Lo sentimos mucho. No sabíamos que la subasta sería justo hoy -trato de excusarse.
A la vez que Rosa, que hasta ese momento había estado observando la escena en silencio, intervino.
Rosa: ¡Claro que era hoy! ¡Por eso les pedimos que no vinieran a ensayar en primer lugar! Hemos estado trabajando duro para conseguir cada talismán y ustedes lo echaron a perder. ¿Qué van a hacer ahora para solucionarlo? -pregunto en lo que ambos se miraron nerviosos, sin saber cómo responder.
Héctor: Bien, esto no se puede cambiar. Pero a partir de ahora, estarán más atentos a sus actos. No toleraré más negligencia en esta empresa. Estoy muy decepcionado de los dos.
Leo: ¿Y yo por qué? ¡Marco fue que el metió la pata!
Héctor: ¡Si! Pero literalmente es tu trabajo evitar que el haga tonterías. ¡Le perdiste la vista! Y solo mira a este pendejo ¿no era obvio lo que pasaría? -pregunto en lo que Marco se hizo la víctima.
Marco: Es cierto, Leo. Me decepcionas -declaro solo para que luego su amigo le saltara encima y ambos empezaran a pelearse.
Mientras que por su parte, Héctor, cansado de la pelea entre los dos adolescentes, levantó su mano para llamar la atención de ambos. Pero al ver que no le prestaban atención solo jalo de la oreja a cada uno de los dos.
Héctor: ¡Suficiente! ¿Acaso no se dan cuenta de que estamos en un lugar público? -exclamó, mirando alrededor para asegurarse de que no estuvieran causando demasiado alboroto.
Mientras que el par acaban separándose de mala gana, conscientes de que su comportamiento no era apropiado. Para luego ver a Héctor con cierta vergüenza, sabiendo que habían decepcionado gravemente a su jefe y padre de su amigo.
Héctor: Ahora escúchenme atentamente. Lo que hicieron fue irresponsable y poco profesional. Perdimos esta oportunidad y no puedo permitir que eso vuelva a suceder. A partir de ahora, tendrán que trabajar extra duro para compensar el daño que han causado. Juro que los echaría a patadas sino fuera por que por alguna razón que no entiendo, mi hijo los aprecia -dijo masajeándose la frente.
En lo que Rosa, quien había estado callada durante la confrontación, se acercó a Héctor con una mirada de determinación.
Rosa: Tío, necesitaremos un nuevo plan para obtener el jarrón. La subasta puede haber terminado, pero eso no significa que no podamos encontrar otra manera de conseguirlo. No podemos darnos por vencidos tan fácilmente -dijo llenando de orgullo a su tío.
Héctor: Tienes razón, cariño. No podemos perder la esperanza. Buscaremos otras oportunidades, buscaremos otras puertas que se abran. No descansaremos hasta obtener ese jarrón y completar nuestra colección... ahora. Averigua quien compro el jarrón -pidió con renovada determinación.
Siendo así que el grupo se levantó de la mesa y se marchó del café. Con Rosa hackeando la pagina de la subasta en busca de los participantes y sus perfiles. Hasta que finalmente dio con lo que estaba buscando.
Rosa: ... ¿Quién se supone que es Miriam Lafayatte? -se pregunto mirando la foto en el perfil de la mujer.
___________________________________________________________________
Notes:
(Sin omakes esta vez)
Y ese fue el final del capítulo. Como siempre pueden votar, comentar, lo que gusten.
¿Y que les pareció?
Como pueden ver, ya la búsqueda del talismán de la oveja comenzó. Y algo me dice que si o si abra una confrontación entre Moon Girl y Casanova el próximo capitulo. Por cierto, punto para el que recuerde de donde salió el robot Obake.
En fin, de momento, nos vemos.
Chapter 12: Capitulo 10: Moon Girl vs Casanova
Notes:
(See the end of the chapter for notes.)
Chapter Text
(Hiro Pov)
(Café gato de la suerte)
Es oficial, ya no sabía que era real y que no lo era. Porque hace solo unos minutos pensaba que segundo gran archienemigo (porque nadie le quita el primer puesto a Yokai), Bob Aken, también conocido como Obake, a quien creí que había muerto hace meses. Estaba aquí frente a mí.
¿Qué es real y que no lo es? ¿La luna de verdad esta hecha de queso? ¿La tierra es plana? ¿Fred en realidad es un genio mucho más listo que cualquiera de todos nosotros?... No, eso ultimo pasa y se acabaría resquebrajando la realidad misma. Hay cosas que simplemente no debían ser. Los perros y los gatos no se llevan, el agua y el fuego no se mezclan, y Fred no podía ser un genio... solo no.
Aunque ahora que lo pienso ¿Por qué pienso en estas cosas en primer lugar? Oh sí. Obake me tenia sujeto y me levantaba como si no pesara nada mientras daba varios giros que me mareaban al punto de que creo que tengo el cerebro revuelto. ¿Siempre fue tan fuerte?
¨Obake¨: ¡Eres tú! ¡Te encontré! ¡Gracias al cielo estas a salvo! -dijo con alegría mientras se empeñaba en dejarme bastante mareado.
Hiro: ¡¿Podrías dejar de girar?! -dije ya mirando todo desorientado.
Momento en que paso algo que honestamente nunca me hubiera imaginado que pasaría. El tipo que pensé que era Obake, al parecer dio una pisada que activo un mecanismo interno, abriendo la mitad de su rostro. Revelando así un rostro mecánico que me hizo darme cuenta de quien era este ser.
No se trataba de Obake, sino de un robot que Obake hizo de si mismo para usarlo de carnada mientras el verdadero se robaba el amplificador de energía que había construido. No lo entendía ¿Qué estaba haciendo esta ¨cosa¨ en mi casa?
Hiro: Espera... ¿No eres el verdadero Obake? -pregunte en lo que él solo se volvió a cerrar la caratula del rostro para tener de nuevo la apariencia de un humano normal.
Baymax: ¿Podrías por favor poner a Hiro abajo? -pregunto llamando la atención del otro robot.
Hiro: Si, por favor bájame.
Robot Obake: Oh, por supuesto -dijo obedeciendo la orden.
Hiro: Oh, gracias, Dios... -dije tomando un respiro, de verdad que el robot se había emocionado con los giros.
Y hablando del mencionado, parecía estar emocionado por hablar conmigo, por alguna razón. En serio ¿Qué estaba sucediendo?
Robot Obake: ¡No puedo creer que te he encontrado! ¡Estaba tan preocupado por ti!
Hiro: Espera ¿¨Preocupado¨, dices? -pregunte pensando que había oído mal.
Robot Obake: ¡Tu solo desapareciste después de nuestro ultimo encuentro! -dijo con algo de angustia- un momento tú estabas allí y al siguiente ¡te habías ido!
Bueno... en realidad eso fue justo lo que paso, pero era algo más complicado que eso. Para empezar, pensé que este robot estaba del todo destrozado cuando Baymax le arrojo su puño cohete. Pero tal parece que me equivoque y de algun modo se reactivó. Y hasta con personalidad propia al parecer.
Hiro: Pero... ¿Por qué tu estabas preocupado por mí? ¡Estábamos peleando! -dije en lo que el solo aparto la mirada con una expresión triste.
Robot Obake: ... No conozco a nadie más que a ti y ha mi padre. Por eso me preocupé tanto cuando ya no pude encontrarte.
Y no hace falta decir que eso me hizo quedarme en silencio, sorprendido por las palabras del robot. Solo no podía creer que alguien como Obake, o más bien su réplica robótica, pudiera sentir preocupación genuina por mí. Pero al ver la tristeza en los ojos del robot, lo comencé a comprender.
Hiro: Lo siento, no sabía... No tenía idea de que te preocupabas por mí de esa manera -dije en lo que el robot me volvió a mirar, esta vez con una ligera sonrisa.
Robot Obake: Es comprensible. Probablemente no esperabas que alguien como yo pudiera tener sentimientos. Pero, a pesar de lo que soy, todavía tengo programación, y dicha programación me hace preocuparme por ti -dijo para mi extrañeza.
Hiro: ... ¿Qué? Sabes que ¡solo olvídalo! Mas importante... ¿Cómo has llegado hasta aquí? ¿Por qué estás en el café? ¿Dónde esta mi tía? Y ¡¿Por qué estás usando ese delantal de repuesto?! -pregunto en lo que el solo miro la pieza de ropa que tenia puesta sin saber que decir- ¡¿Dónde está mi tía?! -pregunte de nuevo.
Solo para soltar un suspiro de alivio cuando la vi salir de la cocina de la cafetería como si nada raro estuviera pasando.
Cass: Hey, repare las luces -dijo antes de abrazarme apenas me noto- ¡Hiro, bienvenido a casa, cariño!
Hiro: Tía Cass... ¿exactamente que pasa aquí? -pregunte en lo que ella miro al robot de Obake como si lo conociera de toda la vida.
Cass: ¡Oh, déjame presentarte! -dijo antes de abrazar al robot con un brazo, quien solo sonrió nervioso- ¡El es Robbie! Él es el nuevo empleado del que te estaba hablando. A partir de ahora vivirá con nosotros. Así que sé amable ¿Ok?
Bueno, es obvio decir cual fue mi reacción al saber eso. Fue tan predecible que hasta Baymax entrecerró los ojos en señal de sorpresa. Solo... es que solo...
Hiro: ¡¿QUEEEEEEE?!
La sensación de sorpresa era indescriptible, casi como si no pudiera creer lo que acababa de escuchar (y es de que hecho no lo hacía). Pero no tenía tiempo para pensar en eso ahora, ya que había un montón de preguntas que necesitaba responder.
Cass: Hiro, no grites así, ¡pueden escucharte en todo el vecindario! -le dije tratando de calmarlo. A la vez que ella me recordó la situación. Es vedad, tía Cass no sabía nada de Obake ¿Cómo podría? Ella no sabe nada de los grandes héroes.
Así que solo me quede allí, completamente sin palabras mientras procesaba la información. ¿Robbie, el robot que había confundido con Obake, iba a vivir ahora con nosotros? No podía entenderlo. ¿Cómo pudo tía Cass invitar a un robot a su casa sin siquiera sospechar su verdadera identidad? De momento no podía hacer mucho, solo seguir el juego.
Hiro: Lo siento, fue la sorpresa nada más -dije ofreciendo mi mano a ¨Robbie¨ con una sonrisa incomoda- encantado de conocerte, Robbie. Bienvenido a nuestra casa -dije para luego mirar a mi tía, que parecía realmente entusiasmada con su nuevo empleado- gracias por avisarme de antemano, tía Cass. De no saber lo del empleado nuevo, seguro habría reaccionado peor.
Cass: ¡Ya me conoces, siempre estoy llena de sorpresas! -dijo dándome un suave golpe en el hombro- pensé que contratar a Robbie sería una gran adición al café. Además, parece un tipo muy dulce.
Y la verdad, era que no podía discutir eso. Robbie parecía tener un comportamiento amable y gentil, a pesar de su conexión con Obake. Quizás había más en este robot de lo que pensaba inicialmente. Por ahora le daré una oportunidad, para conocerlo mejor. A fin de cuentas ¨ten a tus amigos cerca, y ha tus enemigos aun más cerca¨.
Hiro: Y por cierto, claro, tía Cass. Seré amable -respondí encogiéndome levemente de hombros antes de susurrar a la mujer que era lo más cercano que tenía a una mamá - pero recuerda, no sabemos mucho sobre Robbie. Es importante ser cautelosos -dije solo logrando que ella me revolviera el cabello entre risas.
Cass: Siempre el responsable, ¿no? No te preocupes, Hiro. Confío en mis instintos y me dicen que Robbie es una buena persona. Además, ya ha demostrado ser un gran trabajador -dijo para que luego ella y el robot intruso se fueran a charlar.
Cosa que solo me hizo suspirar para sus adentros. Al darme cuenta de que no podía revelar mis sospechas sobre Robbie sin exponer mi vida secreta como superhéroe. Tendría que vigilar de cerca a Robbie y descubrir sus verdaderas intenciones sin que la tía Cass sospechara nada.
Siendo así que mientras observaba a mi tía y Robbie interactuar, una sensación de inquietud se apoderó de mí. No podía quitarme de encima la sensación de que las cosas estaban a punto de complicarse aún más y necesitaba estar preparado para cualquier cosa que se le presentara... necesitaba hablar con alguien.
Pero quiero un descanso de mis amigos, y Megan está en cosas de la escuela, ni idea de que este haciendo Karmi... tal vez podría hablar con ¨ella¨, hace bastante que no hago una llamada allí ahora que lo pienso...
___________________________________________________________________
(Al día siguiente, Rivera Solutions)
(General Pov)
Rosa: Compradora, Miriam Lafayette -dijo mientras buscaba información sobre dicha mujer otra vez en los datos gubernamentales mientras que su primo y sus dos amigos le hacían compañía.
Pero no estaba siendo tan sencillo como esperaba. De hecho se encontraba comprando programas sumamente costosos de hackers tanto en paginas oficiales con en la Deep web para obtener información de esa mujer. Quien al parecer solía trabajar en la NASA, solo para empezar, o más específicamente en una rama que ya no existía... era curioso.
Leo: De momento todo lo que sabemos de ella es el nombre y nada más.
Marco: Eso y la foto en su perfil de la pagina de la casa de subastas. Que fastidio.
Miguel: ¿Lafayette? Ese nombre me suena -dijo de repente llamando la atención de su prima.
Rosa: ¿Disculpa? -pregunto arqueando una ceja.
Miguel: El apellido de la que nos ganó en comprar el jarrón con el talismán, Lafayette, me suena, pero no me acuerdo de dónde, y es que siento que es importante -menciono.
Siendo ese comentario algo que hizo sentir intrigada a Rosa, podría tratarse de una coincidencia o de algo más profundo. Incluso estaba considerando que tal vez investigar más a fondo era necesario. A diferencia de Héctor, Miguel cuando decía que algo importaba, generalmente así era.
Rosa: Esto es muy extraño. No puede ser una simple coincidencia -dijo con seriedad- de todos modos, lo que importa aquí es encontrarla.
Leo: Pero no sabemos cómo encontrarla. No aparece ningún dato de contacto en la página de la casa de subastas, y eso era lo más sencillo a lo que podíamos recurrir -exclamo molesto.
Marco: Quizás podamos contratar a un investigador privado para que la ubique. Estoy seguro de que podemos encontrar alguno que sea experto en rastrear personas de este tipo -sugirió.
Miguel: No creo que sea necesario llegar a esos extremos todavía. Déjenme investigar un poco más. Tengo una corazonada de dónde podría conseguir información sobre ella -dijo tratando de hacer memoria y recordar en donde había escuchado el nombre de esa mujer. Ya que juraba que había sido algo reciente.
Aunque la respuesta vino cuando los cuatro decidieron guardar silencio al ver pasar por el pasillo a cierto nipón que conocían muy bien y que en ese momento tenían ocupado con trabajo de oficina. Nada fuera de lo normal a simple vista, pero lo cierto es que ni locos el grupo de los primos Rivera y amigos querían que Hiro acabara escuchando más de que lo debía.
Solo para luego ser ellos los que terminaron escuchando justo lo que deseaban oír al notar que Hiro estaba hablando por teléfono con alguien.
Hiro: Si, tía Cass está bien, si, me contó que te comentó de mi nuevo trabajo de medio tiempo, si, ¿Cómo están los señores Lafayette? -pregunto en la llamada antes de soltar una risita- sí, ya sé, perdón, repito, ¿Cómo están el tío Pops y la tía Mimi?... ¿De verdad? Si, ese jarrón se verá genial en la casa, espero que nos manden fotos, por cierto, ¿Cómo estás Lunella? -pregunto mientras se alejaba.
Logrando que reinara el silencio entre el grupo de cuatro adolescentes al no entender lo que acababan de escuchar. Y una vez lo hicieron... vaya que el destino era caprichoso a veces.
Rosa:... ¿Trabajo de medio tiempo? ¿No le basta con ser pasante aquí? -dijo haciendo que Leo riera suavemente.
Leo: Rosa, no soy experto, pero creo que se refiere a su actual trabajo, no sé, no me hagas caso -aclaro en lo que ella solo se dio un face palm.
Rosa: Si vale, sonó estúpido. Aún tengo la mente algo estropeada por lo que paso en esa subasta para que al final me ganara esa... -dijo antes de que se le prendiera el foco y comenzara a teclear rápidamente.
Llamando atención del trio de chicos.
Marco: ¿Ahora que haces?
Rosa: Solo veo de donde viene la llamada que Hiro está teniendo en este momento. Entro a la compañía de servicio telefónico, hackeo el satélite... Y bingo. de Nueva York -dijo sonriendo ampliamente ya tomando una taza de té como señal de triunfo.
Marco: ¿Y eso a nosotros qué? -pregunto ganándose gruñidos de frustración como contestación- hay que delicados, veo que todos están en sus días.
Leo: Marco, usa tu escaso poder mental y piensa, ¿Qué apellido dijo Hiro mientras estaba en llamada? -pregunto logrando que el más lento del grupo captara de inmediato.
Marco:... Oh... Ok, Miguel, esta es la parte donde mueves tu holgazán trasero, tomas el avión y traes ese jarrón -declaro a su amigo que ya se estaba poniendo de pie.
Miguel: Es cierto, debemos conseguir ese jarrón -dijo decidido.
Solo para que nuevamente Hiro pasara, a lo cual de nuevo tuvieron hacer como que nada pasara. Debería de cerrar esa puerta.
Hiro: Si, tu mamá ya me estaba contando, Lunática, enserio ese jarrón debe haberle encantado a la tía Mimi, si... te doy la razón, también me entristecería mucho si le pasara algo, luego de lo que gastó la tía en él, me molestaría si algún sinvergüenza descorazonado se atreviera a robarlo, ¿Cómo es esa amiga tuya, Casey? -dijo antes de seguir su camino.
Siendo de ese modo que la actitud decidida de Miguel flaqueo con la misma velocidad que apareció en primer lugar. Como sus amigos y familia habían descubierto de mala gana. Hiro Hamada estaba empezando a convertirse en un talón de Aquiles para el primogénito de la familia Rivera.
Miguel: ... Jefe, más te vale apreciar las broncas en que me meto por ti, ya veo venir los golpes de palo de amasar -dijo en señal de lamento a lo cual su prima rodo los ojos.
Rosa; Primero... ¡Alguien cierre esa puerta para ya no tener ataques de culpa moral! -dijo a la vez que Leo obedeció- segundo. Hay que conocer el campo de juego. Nueva York literalmente está plagada de héroes... Y parece que esa parte en específico de la ciudad es territorio de Moon Girl -declaro con fastidio.
Nunca podía ser tan sencillo ¿eh?
Los tres: ¿Moon Girl? -preguntaron los chicos en lo que ella mostro el blog propio de la heroína.
Rosa; Nueva heroína, se nota que es novata. Tiene un dinosaurio... Y su propia mánager ¿Qué héroe tiene un mánager?
Miguel: Iron Man, los Cuatro Fantásticos, creo que Hulk también tiene uno -dijo contando a los héroes que se le venían a la mente que conocía para fastidio de su prima.
Rosa: ... No me simpatizas -dijo molesta- pero como sea, Miguel, esto se resume fácilmente en dos opciones. Se sigiloso y que nadie se dé cuenta que estuviste allí o... ¿Crees estar listo para ir mano a mano con un verdadero dinosaurio?
Miguel: Pues si no se puede ser sigiloso, a darle, lagartijo -declaro ya pensando en tener que pelear con el reptil prehistórico no fosilizado.
Leo: Aunque... ¿A alguien más no le sorprende que al parecer Hiro tiene una amiga de su edad que al parecer conoce de ya bastante? -pregunto con intriga.
Ya que era verdad, a excepción de esas chicas de las que habían investigado con anterioridad, Megan y Karmi. No parecía que Hiro conociera a ningún chico de su edad. Para empezar, sus primeros amigos fueron universitarios considerablemente mayores que él. Y de hecho llegaron a ser sus amigos por insistencia de su difunto hermano mayor.
Marco: Se nota que es una bolsa de mamadas.
Miguel: No, más bien una bolsa de sorpresas... la bolsa de mamadas eres tú -dijo haciendo que su amigo le sacara la lengua.
Rosa: En todo caso, Leo. Eso es porque no son amigos. Son rivales -dijo aclarando la situación al trio de chicos mientras ella buscaba la información en su computadora.
Los tres: ¿Rivales?
Rosa: En resumen, ella es mucho más lista qué él -dijo con simpleza.
Miguel: Pero... se hablaban con mucho cariño.
Rosa: Son rivales, pero igual son cordiales el uno con el otro... -aclaro- además se supone que casi se criaron juntos, ya que la mamá de Lunella Lafayette y la tía Cass son viejas amigas -dijo sintiéndose molesta por no pensar en los registros familiares para de ese modo dar con la tal Miriam.
En lo que por parte de los chicos, no hace falta mencionar que esa información les parecía muy interesante por decir lo menos.
Marco: ¿Y de dónde sacas qué ella es más lista qué él?
Rosa: Sencillo, sus IQ hablan por sí solos -dijo mostrando la pantalla de su computador.
Revelando a los tres que mientras Hiro tiene de 256 de cociente intelectual, Lunella lo supera con un notorio 278.
Marco: ¿Como es que nunca supimos esto? Es muy buen material de burla -dijo divertido.
Solo para que todos soltaran un grito de sorpresa cuando unas tijeras pasan a través de la puerta de vidrio, rompiéndola en el proceso, ensartándose en uno de los posters que tenían como opciones para que fuera el oficial para dar a conocer la banda al mundo, particularmente en la frente del Marco de la imagen. Fue tan sorpresivo el momento que hasta la imagen paso de estar sonriendo a mostrar cara de sorpresa al verse atacada. Y no, no era broma.
A la vez que gracias al hoyo que se dejó en donde estaba parte de la puerta, es que alcanzan a escuchar a cierto nipón que sonaba avergonzado.
Hiro: ¡No te rías, Lunella!, ¿Sabes lo molesto que es que la gente siga haciendo burla de que tienes un IQ más alto que yo? Juro que si alguien llega a decir pío sobre el tema... -dijo mientras ignoraba lo que había hecho por inercia.
Rosa: Desde ya lo digo, esa puerta saldrá de su salario -dijo molesta.
Marco: ... El mismo busca despertar con pescado podrido en la cama -agrego también para incredulidad de sus dos amigos.
Leo: Amigo, sin saber que hablabas de burlarte de eso del IQ, ya te clavó unas tijeras en la frente, ¿Realmente vas a tentar a la suerte? -pregunto en lo que Marco se encogió de hombros.
Marco: Quién tiene miedo de morir que no nazca.
Comentario que dejo boquiabiertos a los otros dos varones.
Miguel: Empiezo a pensar que esa foto te hizo vudú, porque parece que te mató el cerebro -declaro en lo que Rosa se aclaro la garganta.
Rosa: Dejen de perder el tiempo, Marco no puede evitar ser lo que es -dijo ofendiendo al mencionado- en vez de eso, ya deberás estar tomando un vuelo a Nueva York, querido primo. Y mejor cruzar los dedos en caso de que con nuestra suerte la tal Lunella o su familia te acaben reconociendo antes del robo -dijo en lo que Miguel asintió.
Leo: Sólo esperemos no te topes con la tal Moon Girl, suerte -dijo en lo que Marco también le daba un pulgar a su amigo.
Quien solo suspiro antes de tomar el primer vuelo a Nueva York, sencillamente a veces era duro ser un asalariado.
_________________________________________________________________
(Miguel Pov)
(Esa noche) (Nueva York, Lower East Side, pista de patinaje Roll With It )
Nada como un viernes por la noche. Es tiempo de salir y el cuerpo y la mente lo saben. Seguramente eso era lo que hacia a las personas usar el inicio de su fin de semana para sencillamente relajarse con un paseo en el parque, al cine o salir a comer algo. O por otro lado, salir a divertirse ya sea en un bar o en lugares de recreación.
Como este, una pista de patinaje que de hecho era la única que quedaba en toda Nueva York. ¿En serio hay gente a la que le gusta esto todavía? Yo como fiel aspirante a jugador de futbol callejero, soy un fiel partidario respecto a desplazarme con mis pies sin que tengan nada en ellos, los patines nunca me han hecho gracia en realidad. Pero como sea, de momento debo recordar a que vine en primer lugar.
Casanova (Miguel): De verdad ¿Cuál es el chiste de los patines? No son los años 70 -dije esperando a que el local cerrara- ¿Qué información tienes del establecimiento, R? -pregunté a mi prima que igual estaba conectada por transmisor como siempre mientras veía todo lo que yo a través de la cámara en mi antifaz.
Rosa: El local fue fundado por el abuelo de Lunella, James Lafayette Sr hacer varios años. Establecimiento de una planta, la pista cuenta con una sesión de patinaje después del horario escolar de lunes a viernes de desde las 4 p.m., los viernes son de hip hop y tienen roller derby los miércoles de 7 a 9 p.m. La música de la pista la proporciona la DJ Adria Lafayette, la madre de Lunella. La barra de bocadillos la administra nuestro objetivo, Miriam Lafayette -explico por el transmisor- según las cámaras de seguridad, tiene el jarrón que queremos en su puesto de trabajo.
Casanova (Miguel): ¿En serio tiene un jarrón antiguo con el talismán de la oveja como decoración en un puesto de bocadillos? -pregunte sin poder creerlo mientras vigilaba el establecimiento desde el edificio de en frente.
Rosa: Así es, parece que Miriam no tiene ni idea del valor que tiene ese jarrón. Es por eso por lo que debemos recuperarlo y asegurarlo antes de que caiga en las manos equivocadas.
Casanova (Miguel): Entonces, ¿Qué es exactamente lo que tengo que hacer? No creo que simplemente pueda entrar y tomar el jarrón sin que nadie lo note... espera, si puedo, es solo una pista de patinaje -dije sintiéndome medio pendejo.
Rosa: Si, no te recomendaría eso, a diferencia de todo el resto del lugar que es tal cual un negocio descontinuado, específicamente la parte donde está el jarrón se encuentra muy bien protegida. Sistema de rayos laser que activan alarmas al tacto y si el jarrón es tocado, activa otro sistema de seguridad anti ladrones que es de disparar primero, preguntar después.
Casanova (Miguel): ... Es chiste ¿no?
Rosa: Me gustaría que fuera así, pero no. Lunella demostró su talento de genio poniendo toda esa seguridad para cuidar algo que su abuela atesora tanto. Yo propongo cortar todo el suministro eléctrico de la ciudad y aprovechar el apagón para meterte al local cuando este cerrado y robar el jarrón sin ningún problema.
Casanova (Miguel): Espera, ¿cortaras el suministro eléctrico? ¿De toda la ciudad o solo una parte? -pregunte curioso.
Ya que cuando se trataba de los talismanes, mi familia no se iba con rodeos.
Rosa: No sería un apagón en toda la ciudad, solo necesitamos afectar la electricidad en la pista de patinaje y sus alrededores. Podemos controlar qué áreas se ven afectadas. Solo es cosa de hackear la compañía eléctrica y ya -dijo como si nada- es arriesgado, si, pero es la mejor forma de no llamar la atención.
Casanova (Miguel): Está bien, supongo que no tenemos otra elección entonces.
Rosa: Muy bien, prepárate. Necesitarás actuar rápidamente y de manera sigilosa para aprovechar el caos y robar el jarrón antes de que alguien se dé cuenta -dijo en lo que yo solo asentí.
No siendo hasta después de que el local cerrara que el plan se ejecutó. Fue un sencillo corto apagón que dejo a todo el distrito a oscuras. Tenía cinco minutos. Así que sin pensarlo mucho más, tan solo me volví invisible y sin más entre a la pista de patinaje tras forzar la cerradura.
Casanova (Miguel): Una de las ventajas de la levitación es que justamente es muy difícil dejar huellas -dije sonriendo mientras me abría paso por el local- muy bien Miriam ¿Dónde tienes el jarrón? -pregunté curioso.
Antes de recibir la respuesta cuando literalmente vi que en una parte de la cocina resguardada con una vitrina se hallaba dicho jarrón junto a varias fotos de la mujer con dicho jarrón. Vaya, esto no era incomodo ni nada parecido, no, nada que ver... claro.
Casanova: Esto va a estar bueno -dije forzando la cerradura de la vitrina- ahora ven con papá -dije gozando del momento en que después de tantas vueltas al fin lo tuve en mis manos, el jarrón.
Y aun más importante que eso, estaba justo aquí, el talismán de la oveja sirviendo de decoración al cuello del jarrón, de líneas color aguamarina. Era hermoso. Serviría muy bien como decoración en mi manga derecha.
Casanova (Miguel): Un jarrón de la dinastía Song del periodo de las Cinco Dinastías y los Diez Reinos a la orden... Vaya que es viejo -declaro guardando el jarrón en la mochila que traje conmigo justo para eso- ahora a realizar la graciosa huida antes de que Moon Girl se dé cuenta, o peor, los Lafayette, así que buenas noches, Rodar y Ya... No puedo creer que en serio dije rodar. No me gustan los patines -dije frunciendo el ceño.
Aunque antes de emprender la graciosa huida, fue que me tome un momento para ver las fotos que había en el local. Incluyendo una que me llamo la atención. Se trataba de una foto familiar de los Lafayette, pero no solo ellos, también los Hamada estaban en ella. La tía de Hiro con unos jóvenes Hiro y Tadashi. Todos usaban patines.
Casanova (Miguel): ... Aunque tal vez podría darles un chance a esos zapatos con ruedas... -dije antes de darme una bofetada a mi mismo- no, espera, primero el jarrón y luego hacer de simplón.
De allí mi intención era salir de ese lugar de una buena vez. Pero fue que algo paso. Siendo ese algo que cuando abrí la puerta ya para salir a la calle, me topé con un par de grandes ojos amarillos que venían acompañados con una enorme fila de dientes. No había que ser un genio para saber quien era este grandulón, se trataba del compañero de Moon Girl. El supuesto dinosaurio de otra dimensión, Devil.
Quien me rugió apenas me vio, y lo primero que pensé de dicha acción fue... que el condenado me dejo cubierto de baba.
Casanova (Miguel): ... En serio te apesta la boca, amigo. Te recomendaría unas mentas pero no se donde venderían de tu tamaño -dije en tono de broma, a la vez que alguien se hizo escuchar.
???: Descuida, lo averiguaras en prisión, amigo.
Solo me basto con ver su aspecto para saber de quien se trataba. Un traje personalizado de patinadora con una jet pack en su espalda y unos lentes que parecían cambiar según el estado de animo de la chica, sin mencionar los guantes de boxeo que podía disparara de sus puños. Si, no cabe duda, la heroína de la zona Moon Girl me acaba de encontrar.
Moon Girl: Espera un segundo... Traje de mago de salón con todo y capa, un antifaz como si estuvieras en un baile de máscaras. Eres ese tipo que ha estado provocando a medio mundo, Casanova -dijo en lo que yo me hice el desentendido.
Casanova (Miguel): No diría que a todo el mundo, sólo a los Grandes Héroes. El resto de las personas que haya molestado fue accidental -dije mientras que ella opto por ignorarme.
Moon Girl: Eres culpable de crímenes como tratar de hacer su propia pintura robando partes de cuadros famosos de todo el mundo. O robar el radiotelescopio mas avanzado del mundo junto a algunas ruinas para intentar hacer contacto con alienígenas.
Casanova (Miguel): ¿Qué quieres que te diga? Soy excéntrico -declare encogido de hombros.
Moon Girl: Excéntrico es una forma muy educada de describirlo. Más bien diría que eres un ladrón arrogante y sin escrúpulos que no le importa dañar ni molestar a nadie en su búsqueda de emociones -dijo con el ceño fruncido- pero ahora te has metido con los Lafayette y has robado algo que les importa mucho. Ese jarrón no solo tiene un gran valor sentimental, sino también un valor histórico invaluable. No puedo dejar que te salgas con la tuya.
Lo que me faltaba ¿Por qué los héroes tienen que ser tan metiches en general?
Casanova (Miguel): Bueno, Moon Girl, supongo que si quieres el jarrón, tendrás que atraparme primero. -Dije con una sonrisa burlona mientras retrocedía hacia el interior de la pista de patinaje, sabiendo que mi única ventaja eran los poderes que me otorgaban los talismanes.
De momento tendré que valerme de los 3 que tengo. No pienso probar el de la oveja hasta saber que es lo que hace primero. Aunque viendo que Moon Girl tiene patines... maldita sea, de verdad no quiero hacer esto, pero no me queda de otra, tendré que igualar el campo de juego.
Moon Girl: Oye, para que sepas. Aquí se cobra 8 dólares la hora -dijo al verme colocándome un par de patines. Pero no le respondí, estaba más concentrado en no romperme todo lo que se llama cara, era la primera vez que usaba patines en mi vida... empiezo a creer que esta no fue la mejor idea que pude haber tenido.
De allí en más. Moon Girl me siguió rápidamente decidiendo no esperar más, deslizándose con facilidad sobre sus patines y utilizando sus guantes para disparar ráfagas de puños sobre mí. Sin embargo, logré esquivar sus ataques gracias a mi capacidad para volar y desaparecer. Eso y que, contra todo pronóstico, aun siendo mi primera vez patinando, de hecho era muy bueno... eso y que tenía mi pistola gancho escondida en la muñeca para ayudarme con el impulso.
Casanova (Miguel): Veo que tienes habilidades interesantes, Moon Girl. Pero no creo que puedas alcanzarme tan fácilmente -me burlé mientras me movía rápidamente por la pista de patinaje, evitando sus ataques y buscando una oportunidad para contraatacar.
Esquiva a Moon Girl hasta cierto punto era sencillo, quien no se rindió y continuó persiguiéndome, utilizando todos sus trucos y gadgets para intentar atraparme. Pero yo era demasiado rápido y ágil, aprovechando las curvas y giros de la pista de patinaje para confundirla y escapar de sus garras.
El problema resulto ser otro, su mascota. Devil si me estaba siguiendo por los talones debido a que sabia donde estaba aun siendo invisible por el olfato. Así que me di cuenta de que si quería escapar, debía deshacerme del grandulón.
Casanova: ¡Tú no te metas! ¡Vuelve al Jurásico enorme fósil enojado! -dije agarrando la cola del dino antes de comenzar a girar con todo y animal para luego arrojarlo fuera del establecimiento al basurero del callejón de en frente.
Gracias talismán del buey y la super fuerza que viene contigo.
Moon Girl: ¡Devil! -grito antes de verme molesta al notar que yo ya iba camino a la salida como si nada- ¡No tan rápido, Casanova! No voy a permitir que escapes con el jarrón.
Casanova (Miguel): Lo siento, Moon Girl, pero tengo una cita con el destino. Y seguro eres hermosa bajo el casco, pero no me la perderé por ti -dije antes de desaparecer una vez más usando el poder del talismán de la serpiente y aparecer detrás de ella.
Sin darle tiempo de reaccionar, tomé su brazo y la hice girar, desestabilizándola lo suficiente para poder abrirme paso en lo que la mandaba a estrellarse contra la barra de bocadillos.. De allí solo me desplacé con rapidez hacia la salida, me impulsé hacia la noche y desaparecí en las sombras de la ciudad.
Moon Girl: ¿Pero que...? -pregunto molesta en lo que su enorme reptil amigo se acercaba cubierto de basura- Devil, huele, ¿sigue aquí? -pregunto al dinosaurio que solo olisqueo antes de apuntar con la cabeza al cielo.
Rayos, esa cosa tenia un excelente sentido del olfato, me había descubierto.
Moon Girl: ¿Está usando propulsores?
Miguel: Temo decir que ese no es el caso, my Lady -dije aun invisible- y por lo general déjame decirte que al menos pelearía con ustedes un rato más para hacer de esta velada algo más divertida, pero el tiempo apremia, tal vez en otra ocasión... -dije para sin más irme de allí, columpiándome entre los edificios como cierto héroe arácnido.
Es mucho más fácil cuando no eres visible y por lo tanto, no llamas la atención. De momento solo sé que la misión fue un éxito. Ahora me iré a dormir, y para mañana estaré en el avión de vuelta a San Fransokyo. Todo salió a pedir de boca.
_________________________________________________________________
(Al día siguiente)
(Hotel Tipton)
Nada como un desayuno en la cama para empezar bien la mañana. Tostadas con mermelada, huevos revueltos, fruta y jugo de naranja junto a un buen café, nada del otro mundo pero de momento no creía que hubiera algo mejor. No todos los días le ganabas a una super heroína que era bastante popular en las redes sociales.
Y mucho menos tenias la oportunidad de dormir en una de las habitaciones de lujo de la suite imperial de una de las cadenas hoteleras más importantes del planeta, los hoteles Tipton. Fundada en el siglo XVIII y que logro casi todo su éxito luego de superar la crisis de la gran depresión. En todo caso era un hotel caro, bastaba con decir que los huéspedes gastaban 2000 dólares por noche. Y esos eran los normales, no quería saber cuanto gasto Rosa por la habitación en la que se encontraba ahora mismo.
Miguel: Ahora sólo es cosa de que Rosa saque el talismán de la oveja y averiguar qué hace -dije complacido mirando el jarrón robado en una mesa cercana.
Momento donde sonó el teléfono y me sorprendí de ver que se trataba de Hiro.
Miguel: ... ¿Hola? -pregunte solo para recibir el silencio como respuesta- Chino, ¿Está todo bien?
Hiro: ¿Qué te he dicho de llamarme así?
Miguel: Si, ya, que eres japones, no asiático. Pero sabes que yo te lo digo de cariño -dije tratando de animarlo ya que sonaba deprimido- ¿todo en orden? Disculpa que no te avise que venia para Nueva York. Pero si o si tenia que ver ese partido de futbol en el Yankee Stadium -dije aferrándome a la mentira de porque estaba en la ciudad que no duerme en primer lugar.
Hiro: No, yo entiendo, es algo que te gusta... es solo que, pensé que me sentiría bien hablar con alguien y al menos de momento mis amigos están ocupados con sus cosas y con mi tía no puedo hablar ya que estoy trabajando y sé que ella también y... -dijo decaído, casi al borde de las lágrimas. Cosa que me preocupo.
Miguel: Puedes hablar conmigo todo lo que quieras, sabes que sí -dije buscando sonar reconfortante- ¿Qué fue lo que paso?
Hiro: Anoche robaron algo a una familia que es muy cercana a tía Cass y a mí, estoy muy frustrado por lo que pasó, ¿Quién sería tan ruin, tan descorazonado para robar a una pobre anciana? -pregunto cansado.
Mientras que yo solo mire el jarrón que había robado la noche anterior, pero ya no con orgullo, si no con culpa.
Miguel: "Lo haces por el viejo, lo haces por el viejo" -pensé en lo que respiré profundamente antes de soltar un largo suspiro- descuida, seguro que al final todo se resuelve.
Hiro: Ojalá tengas razón, Miguel. Pero es tan difícil entender cómo alguien puede ser tan insensible y robarle a una persona mayor. La tía Mimi es tan amable y generosa con todos. No puedo soportar la idea de que haya sido víctima de un robo -dijo a la vez que yo sentí como cuchillos imaginarios eran clavados en mi alma ¿lo estaba haciendo adrede?
Miguel: Lo sé, Hiro. Es realmente desgarrador. Pero debemos mantener la esperanza de que las cosas se solucionen... de hecho tal vez ya están solucionadas -dije en lo que escuché al nipón al otro lado de la línea hacer un ruido de sorpresa.
Seguro hasta puso una cara confundida y todo. Solo imaginarlo hace que yo quiera chillar de la emoción ¡seguro se ve tan lindo y tierno!
Miguel: Lo averiguaras luego... por ahora tengo que dejarte, necesito ponerme hielo en el ojo...
Hiro. ¿Hielo en el...? Miguel ¿Qué es lo que...? -pregunto antes de que le colgara.
Y es que no podía pensar con claridad mientras él estuviera en la línea. Aunque igual tampoco es que pudiera pensar muy claramente. Así que tomando en cuenta todos los pros y los contras de lo que se me había ocurrido fue que llame a mi prima para informarle de mi plan. Y no hace falta decir que la idea no le gusto nadita.
Rosa: Miguel, eres mi primo y te quiero, pero honestamente. Estas empezando a ser molesto -dijo suspirando.
Miguel: ¿Me vas a decir que a ti no te duele ver a Hiro tan triste? -pregunte con mi mejor tono de culpabilidad para hacerla sentir mal- a ti, que has dicho que tú y Hiro empiezan a considerarse BFF, que te gusta tener pláticas sobre sus inventos y tu habilidad en las finanzas, que comparten gustos musicales y hasta platican de chicos que encuentran lindos... -dije enumerando las cosas que ella me ha dicho de forma casual las ultimas semanas.
¿Quién lo diría? Escuchar si da resultados en la vida.
Rosa: Muy bien, basta, no me hagas sentir peor -dijo frustrada- de todos modos mi intención siempre fue devolver el jarrón. Si lo conservamos, Hiro puede verlo y fin del juego. Pero... ¿seguro que quieres hacer lo que me sugeriste?
Miguel: Es lo único que se me ocurre y justifique la rapidez con la que yo ¨recupere¨ el jarrón.
Rosa: Esta bien, vaya, eso si es sacrificarse por el equipo, primito -dijo divertida- solo saca el talismán del jarrón y luego ya puedes devolverlo y disfrutar de ver a Hiro feliz porque sus parientes honorarios recuperaron su propiedad.
Luego de eso colgó. Mientras que yo de mala gana me puse de pie antes de caminar hacia el baño y solo ver mi reflejo frente al espejo. Y no miento, podía sentir como mi propio reflejo parecía juzgarme, como si estuviera a punto de hacer una de las mayores pendejadas de toda mi vida. (Cosa que de hecho no la mayor, pero si sentía que estaba en el top 10)
Pero al no verme con más opciones, todo lo que hice fue cerrar mis ojos con fuerza antes de solo cerrar el puño de mi mano derecha. Y golpearme el ojo con toda confianza... más vale que haya quedado morado, porque no lo voy a repetir...
...
...
...
¿A quien engaño? Lo repetí como 3 veces más junto con algunos golpes más a otras partes de la cara. Había que hacerlo creíble.
________________________________________________________________
(Más tarde)
(Lower East Side, pista de patinaje Roll With It)
Miguel: Y en resumen, eso fue lo que paso -dije entregando el jarrón a la mujer, ya sin el talismán- no se si tuve buena o mala suerte anoche. Pero me alegra que pueda devolverle algo que usted estima mucho, señora Lafayette -dije sonriendo.
Mientras que por su parte toda la familia Lafayette me miraba como si me hubiera crecido una segunda cabeza. Lo cual era entendible, ahora mismo no tenia el mejor aspecto. ¿Y como no? Literalmente me molí a mí mismo a golpes para que fuera fácil creer que me vi en una pelea con el ladrón Casanova anoche.
¿Qué porque hice eso? Bueno, para resumir la historia falsa que acabo de contar. Les dije que vine a Nueva York para ver la final de futbol en el Yankee Stadium y sin querer me pasé un poco con los tragos. Siendo mientras iba de regreso al hotel que me tope con un tipo de apariencia sospechosa, a lo cual me metí con él y nos acabamos agarrando a golpes antes de que llegue la policía y decidiera huir. Aunque al final le logre quitar la mochila que llevaba. Con el jarrón de la señora Miriam en su interior.
Lo sé, no es la historia más creíble del mundo. Pero por suerte me la creyeron, o eso me daban a entender con sus miradas comprensivas y sorprendidas, al menos la mayoría de ellos. Por ahora bastaba con que la abuela Mimi, con lágrimas en los ojos, me tomó la mano y me agradeció efusivamente por haber recuperado el jarrón que tenía un gran valor para ellos. Me sentí aliviado de ver que mi plan había funcionado hasta cierto punto.
James Jr: Solo hay algo que no entiendo ¿Cómo sabias que el jarrón fue robado de aquí? -pregunto el que parecía ser el papa de Lunella así como hijo de la pareja mayor, en lo que yo sonreí cansado.
Miguel: Esta mañana solo quería quedarme acostado todo el día porque me dolía todo. Pero fue entonces que recibí una llamada de mi amigo Hiro quien estaba muy triste por lo que les paso y bueno, solo pude pensar que nadie sabe para quien trabaja antes de venir a devolverlo -dije en lo que ellos me miraron sorprendidos.
Al punto de que literalmente la música en el tornamesa se detiene de un golpe, mientras todo el clan Lafayette me miraban sorprendidos.
Miguel: Respuesta corta, si, lo conozco, es mi asistente. ¿No les hablo de su nuevo trabajo? -pregunto como si nada.
Antes de arrepentirme de revelar eso cuando sentí como la mujer mayor me abrazaba con fuerza, sacándome el aire de paso. Se que en realidad la pelea con Casanova nunca paso porque ¿Cómo voy a pelear conmigo mismo? Pero no negare que me dolía todo, eso era verdad... algún día debería pensar en ser actor igual que Marco, me tomo muy en serio el método para hacerlo ver realista.
Mimi: ¡Hubieras empezado porque conoces a mi bebé, muchacho! -dijo la matriarca de la familia.
Lunella: ¿Con que tú eres uno de los chicos de los que Hiro nos contó que trabaja de asistente? -pregunto arqueando una ceja.
Miguel: Y tú eres la chica que se supone que es más lista qué él. Y con el mismo mal genio al parecer -mencione en lo que ella me miro molesta.
Lunella: Y supongo que tú eres el pelmazo que no tiene sentido común, ¿Cuál dijo Hiro que era...? ¿Marco?
Óigame no. Confunda, ofenda, pero no maldiga.
Miguel: Miguel Rivera, encantado -me presente en lo que la más joven de este clan familiar me miro sorprendida.
Lunella: Disculpa mi escepticismo, pero Hiro nos ha contado que Miguel es el simpático, dulce y caballeroso, y sin ofender. Pero por la imagen que nos has dado, pareces ser más el revoltoso irresponsable -dijo sin notar que sus padres le estaban dando mala cara.
Miguel: Lección aprendida, no pasarme con los tragos. Tampoco es que sea un crimen beber cerveza. De donde vengo es normal que los jóvenes beban a esta edad. No obstante, si te molesta, no lo vuelvo a hacer -dije apenado.
Ya que en realidad no había bebido nada. Pero había que aferrarse a la historia falsa.
Mimi: Ya, Lunella, viste que está limpio, pequeña. Literalmente lo inspeccionaste apenas entro al local -dijo mientras me soltaba del abrazo asfixiante- mira como quedo por recuperar mi jarrón el pobrecito.
James Jr: Ya sabes cómo es Lunella mamá. No acepta perder de ningún modo -dijo encogido de hombros- sigue molesta porque burlaron el sistema de seguridad que ella instalo.
Ya veo... hasta en eso se parece a Hiro, no le gusta cuando retan su genio e intelecto. Vaya ¿Quién lo diría? Los genios se acaban pareciendo de un modo u otro.
Lunella: No es eso papá. Oh bueno, no del todo -dijo haciendo puchero.
Para luego solo achicar los ojos cuando me vio, haciéndome el gesto de "te vigilo" antes de irse a seguir con sus deberes en el establecimiento... ¿acaso ella sospechaba de mí? Supongo que tiene sentido, técnicamente devolví un jarrón que ni la propia Moon Girl pudo evitar que fuera robado.
Aunque ahora que lo pienso, esta chica se parece mucho a... No ¿acaso...? Vaya, otra cosa en la que se parecen los genios. Al parecer tienen la necesidad de tener si o si una segunda vida como super héroes... ¿Qué cosas, no?
Mimi: Tendrás que disculpar a Lunella, a veces puede ser algo obstinada -dijo antes de sonreírme con gentileza- ¿Hay algo que podemos hacer por el héroe que salvo mi querido jarrón?
Miguel: Pues en realidad si, muero de hambre ¿tienen algo de comer? -pregunte en lo que la mujer mayor prácticamente parecía teletransportarse a la barra de bocadillos y comenzó a preparar unos cuantos aperitivos- también debo decir que tengo curiosidad. Pensaba que toda la familia de Hiro era su tía. Pero cuando supe que tenía más, quise conocerlos en persona -dije en lo que ellos sonrieron con empatía.
Siendo la madre de Lunella quien tomo la palabra.
Adria: No somos su familia de sangre, lo que pasa es que Cassie y yo somos viejas amigas de la universidad, mantuvimos contacto luego que se fuera a San Fransokyo luego de ... -dijo antes de poner una expresión de tristeza en su rostro- perder a Sarah y a Akira...
Oh, interesante. Con que esos son los nombres de los padres de Hiro...
Pops: Si, eran personas maravillosas -dijo el hombre mayor colocando una mano en el hombro de su nuera- Akira era un hombre que te habría enorgullecido estrecharle la mano, y Sarah era una mujer encantadora, la muerte de Sarah y Akira fue uno de los dos únicos días que hemos cerrado el local -dijo con pesar.
Oh no. Se están poniendo tristes, eso si que no. Al menos no en mi guardia. Técnicamente aun estaba en hielo delgado con ellos, mientras menos arruinara nada, aun mejor.
Miguel: No, no, no. Nada de caras tristes. Vine con ánimos de buena convivencia entre nosotros, no malos recuerdos -dije sacando un ramo de rosas al puro estilo de truco de magia- déjenme empezar de nuevo, mi nombre es Miguel Rivera, es un placer conocerlos a todos -me presenté en lo que ellos me miraron extrañados.
Antes de solo encogerse de hombros y decidir seguirme el juego. Parece que habían entendido mis intenciones. Quería que este fuera un momento donde tuviera una buena primera impresión con la familia amiga de Hiro sin que nada lo arruinara.
Mimi: Pues un gusto, Miguel, me alegra conocer al chico del que Hiro habla tanto -dijo tomando las flores mientras que yo intentaba disimular el sonrojo que me causo escuchar eso- ¿no te gustaría cenar con nosotros más tarde?
Miguel: ¿Seguros? -pregunte mirando a la más joven de la familia barriendo a lo lejos- no quiero incordiar.
Mimi: Sólo dale tiempo a Lunella, esta algo de malas. Ya verás como te ganas su confianza -dijo sonriendo con dulzura.
Vaya, ahora entiendo porque Hiro se sintió tan mal cuando supo lo de que le robaron algo a esta mujer. Literalmente la acabo de conocer y hasta yo me sentiría fatal de saber que esta señora estuviera triste... eso solo me hace sentir más mal por lo de anoche ¿soy masoquista acaso?
Miguel: Pues en tal caso nada de dejar que ustedes me inviten. Yo los invito a ustedes. Digan el lugar a donde quieran ir y allí vamos, no importa lo caro que sea -dije llamando la atención de la chica de lentes.
Lunella: Que mi amiga Casey no te escuche o se auto invita -menciono con tono de broma.
Aunque ni siquiera termino de decir eso cuando cierta chica apareció junto a mi casi que como si se hubiera teletransportado. Ok, admito que hasta me asuste un poquito. Supongo que esta debía ser la tal Casey, solo con verla lo primero que se me venia a la mente era la palabra... intensa.
Casey: ¿Alguien dijo que invitaba sin importar el precio? -pregunto en lo que se me quedo mirando fijamente antes de acabar soltando un grito de fanática que me sorprendió- ¡OMG, ES MIGUEL DE CRAZY LAND! -declaro.
En lo que nuevamente la familia Lafayette parecía no entender nada.
Lunella: ... ¿Quien?
Casey: Lu, enserio necesitas oír más música actual, son la banda del momento. Técnicamente aun no han tenido su primer concierto siquiera pero de lo poco que se sabe, son la nueva mina de oro de Héctor Rivera, el ganador de quien sabe cuantos discos -dijo antes de hacer que me sentara- pero te vez terrible. No tienes que explicar nada ¡yo lo arreglo! -declaro ya con maquillaje en mano.
Luego de eso solo vi como un borrón comenzó a girar en todas direcciones en lo que senti polvos por toda y mi cara. Y para cuando ella termino de hacer lo que sea que estaba haciendo, no pude evitar abrir mi boca con sorpresa. Me veía bien, como si nunca me hubiese golpeado... esta chica tenia un don para el maquillaje, eso es un hecho.
Miguel: Gracias, tanto por no hacer peguntas como por arreglarme, eres buena -dije en lo que ella acepto el cumplido encantada- aunque yo no nos llamaría la banda del momento. Apenas estamos empezando, si estamos siendo tan bien conocidos es gracias a mi prima alias hermana adoptiva qué es muy buena publicista.
Casey: Ya veo -dijo sonriendo con evidente interés en lo que se abrazaba a mi brazo- ¿Y qué te trae a nuestro barrio, Miguel? Cuéntame todo mientras vamos a comer... Y si de paso buscas ayuda para los medios sociales, soy una mánager certificada.
Bueno, eso de hecho era interesante.
Miguel: ¿De verdad? ¿A quién manejas actualmente?
Casey: A mi amiga Lunella, por supuesto -dijo como si nada. Siendo allí mismo que la mencionada le tapó la boca a su amiga con ambas manos.
Lunella: Calladita te vez más bonita -declaro molesta sacándome una risa. Vaya dúo parecían ser ellas dos.
Pero en fin, después de arreglarme, me senté junto a la familia Lafayette en la barra de bocadillos. Hablamos de diferentes cosas, principalmente sobre la música y nuestras pasiones. Descubrí que James Jr. era un gran aficionado de la medicina y que le gustaría estudiar algo en ese ámbito de noche y que Adria disfrutaba de su trabajo de DJ así como que odiaba los alisadores de cabello. Mimi era una apasionada de la historia y la cocina; y Pops disfrutaba del patinaje y era un creyente religioso.
Lunella, por otro lado, se mostraba un poco distante, aunque pude notar que ocasionalmente me lanzaba miradas curiosas. Casey, por su parte, no dejaba de hablar sobre mi supuesta carrera en la música, aunque yo intentaba quitarle importancia a eso. No quería que me conocieran solo por ser el "cantante famoso que era jefe de Hiro". Quería que me conocieran como Miguel, el chico amable y cercano.
Después de un rato charlando, decidimos que era hora de ir a cenar. Mimi sugirió un restaurante italiano cercano, uno de sus favoritos. Acepté encantado y nos dirigimos allí.
Durante la cena, las risas y las historias llenaron el ambiente. Fue una experiencia increíble tener la oportunidad de conocer a esta maravillosa familia.
Aunque Lunella todavía parecía mantener cierta desconfianza hacia mí, pude percibir que poco a poco iba bajando la guardia.
Después de la cena, nos despedimos con abrazos y agradecimientos. Me sentí muy afortunado de haber conocido a estas personas increíbles y de haber poder devolverle el jarrón a Mimi. Prometí mantener el contacto con ellos y mantenerlos informados sobre la progresión de nuestra banda.
Pero en fin... si tuviera algo que decir de toda esta experiencia que acabo siendo más extenuante de lo que debía ser originalmente, sería... lo que uno hace por amor.
Notes:
Igual esta vez no hay Omake. Y este fue el capitulo de esta vez. Como siempre pueden votar, comentar, lo que gusten.
¿Y que les pareció?
De momento solo diré que ya volvemos con los robos el próximo cap así que, sin más que decir, hasta el próximo robo.
Nos vemos luego.
Chapter 13: Capitulo 11: El gran mundo jurásico (1/2)
Notes:
(See the end of the chapter for notes.)
Chapter Text
General Pov)
(Base milita r GNB PC Cabruta, Venezuela)
El tiempo avanza, eso es un hecho, nadie puede escapar del tiempo, el futuro y el progreso. Por mucho que intentes huir de él, al final la hora le termina llegando a todo ser vivo. Le paso a grandes civilizaciones del pasado como a los romanos o los mayas, le paso a los a varios animales increíbles como las tortugas gigantes o los tigres de Bali. Pero si hablamos de extinción, hay una palabra en la que la gran mayoría piensa relacionada a ese nombre... dinosaurios.
Los dinosaurios dominaron la tierra durante millones de años, siendo algunas de las criaturas más impresionantes y temibles que hayan existido. Sin embargo, a pesar de su poderío, también sucumbieron ante el paso del tiempo. Se extinguieron hace aproximadamente 65 millones de años, en un evento catastrófico que aún desconcierta a los científicos.
Estas antiguas criaturas, con su variedad de especies y tamaños, eran los gobernantes indiscutibles del planeta. Desde el pequeño y ágil Velociraptor hasta el gigantesco y terrible Tiranosaurio Rex, estas criaturas fascinaban a todos con su imponencia. Pero, a pesar de su supremacía, no pudieron escapar del destino final que les aguardaba. La teoría más aceptada es que un meteorito impactó la tierra, provocando cambios climáticos drásticos que afectaron el ecosistema y llevaron a la extinción masiva de los dinosaurios. A pesar de su desaparición, su legado perdura en la imaginación y la curiosidad de la humanidad, que sigue buscando respuestas sobre su misteriosa historia.
Y entre aquellos que les apasiona el pasado de esta especie, se encontraba cierto ladrón que hasta hace un momento se encontraba mirando una ya conocida película que en su momento causo furor, aunque algunos consideren la franquicia sobre explotada hoy en día, Jurassic Park. Justo la lucha entre el T Rex contra el Espinosaurios.
Casanova (Miguel): La moraleja de esta historia es muy fácil de entender, nunca reúnas varias cosas peligrosas en un mismo lugar o las cosas se saldrán de control, creo... aunque si es una o dos no debería de haber problema -dijo apagando el monitor del vehículo.
Para acto seguido salir y de forma consciente sacarle el aire a uno de los neumáticos en lo que a continuación llamo la atención de un par de soldados que custodiaban la entrada de la base que miraron al joven con vestimenta de mago con suma extrañeza.
Militar 1: Parece que tiene problemas, mi joven amigo. Estoy seguro de que podemos echarle una mano -dijo mientras revisaban la llanta del vehículo.
Militar 2: Por cierto ¿Muy alejado del pueblo, no chico? ¿Te perdiste rumbo a la fiesta infantil donde te contrataron? -pregunto creyendo que el joven era un mago de fiestas para niños, lo cual le saco una sonrisa al mencionado.
Casanova (Miguel): Se puede decir que sí -dijo con calma.
Militar 1: Ah ya veo, aquí esta el problema, su buggy tiene una llanta ponchada.
Casanova (Miguel): Lo que me faltaba, primero me pierdo a mitad de la nada y ahora no llegare a tiempo al evento, no se como pudo pasar esto -dijo mientras hacia una señal que paso desapercibida para ambos guardias.
Momento en que un camión salió de entre la jungla, el cual era conducido por una de las secuaces de Casanova, la ladrona Sirque. Quien usando un aparato deshabilito el sistema de seguridad de la entrada así como las cámaras, entrando sin problema a la base. Donde ella y algunos secuaces bajaron del camión y procedieron a ir a por el objetivo del robo. Los helicópteros que se encontraban guardados en el lugar.
Militar 2: Arreglaremos esto en un segundo -dijo en lo que él y su compañero miraron al cielo al escuchar el ya conocido sonido de las aspas en pleno funcionamiento.
Militar 1: ¡Alguien se esta robando los helicópteros! -dijeron antes de salir corriendo al complejo militar.
No percatándose hasta muy tarde del como uno de los helicópteros robados se llevó el buggy del joven al que estaban ayudando con todo y conductor. No dándose cuenta de quien era hasta ver la matrícula del vehículo que literalmente era el nombre del actor delictivo de dicho robo.
Militar 1: ¡Es el ladrón Casanova!
Militar 2: ¡Deténganlo! -grito en lo que se comenzaron a escuchar disparos al cielo.
Pero ya no había nada que pudieran hacer, los helicópteros habían sido robados. Y una vez logrado el golpe, Casanova sencillamente se sentó en el asiento del conductor del Buggy y termino de ver la película con toda tranquilidad.
Casanova (Miguel): Dios crea al dinosaurio, Dios destruye al dinosaurio. Dios crea al hombre, el hombre destruye a Dios... y ahora el hombre creara al dinosaurio -dijo sonriendo para si mismo antes de ver con seriedad hacia donde estaba la base- de verdad que robar este buggy a ese tonto fue una de mis mejores ideas -declaro.
A la vez que mientras eso pasaba, casi al otro extremo del continente en Estados Unidos, o más específicamente en una ciudad llamada Swellview, cierto super héroe de tendencias de moralidad dudosas se encontraba rojo de rabia debido a un motivo muy simple en realidad.
Capitan Man: ¡Schwoz! ¡¿En donde demonios está el Capi Buggy?!
____________________________________________________________________
(A la mañana siguiente)
(Basemax, San Fransokyo, USA)
Una cosa era segura para los grandes héroes, esa mañana el miembro más joven de su grupo, Hiro, se encontraba de muy mal humor. Bastaba con saber que desde antes de que saliera el sol, él ya se encontraba en la base entrenando en su sala de entrenamiento holográfico, usando más que todo robots con toda la información recopilada de tanto Casanova como Obake.
Y no conforme con eso, una vez que prácticamente lo obligaron a salir del salón de entrenamiento. Paso las siguientes horas golpeando sin parar un saco de boxeo. Al punto de que los demás se preguntaban con honestidad de donde sacaba tanta energía.
Hiro: Es el universo burlándose de mí, yo lo se -dijo antes de darle otro puñetazos al pobre saco de box.
Fred: ... Oigan ¿de dónde salió el saco?
Go Go: Estaba entre mis cosas viejas y decidí dárselo cuando me lo pidió ayer. Parecía tener mucha ira que drenar y pensé que esta era una forma sana de hacerlo... hasta cierto punto -dijo mientras observaba al más joven del grupo entrenar- buena técnica.
Honey Lemon: Hiro ¿No quieres hablar? Te noto algo tenso esta mañana.
Hiro: ¿De qué debería hablar? ¿De cómo Baymax todavía tiene varios errores debido a los virus? ¿De que Casanova se nos sigue escapando y por eso hasta se metió con la familia Lafayatte que es como mi familia también? O mejor ¿Qué tal si hablamos de que ahora vivo con el robot que tiene la apariencia de mi peor enemigo después de Callaghan y que por alguna razón besa el suelo por donde camino? ¡Mi vida es una montaña rusa de emociones ahora mismo! Y no hablemos de mi trabajo y responsabilidades y... ¡Ah! -grito golpeando el saco una vez más.
Era un hecho, Hiro tal vez fuera un chico que estaba a nada de cumplir los 15 años apenas. Pero oficialmente se como un adulto ya cansado de su vida y de su trabajo que solo deseaba que el día terminara para pegar su cara con la almohada.
Hiro: Y antes de que me digan nada, no estoy siendo melodramático, honestamente no creo que nada pueda ser peor ahora mismo -dijo para que justo en ese momento su celular sonara.
Para luego desear sencillamente arrojarlo al piso al reconocer la voz.
Casanova (Miguel): Te perdiste la diversión, Capitán Encanto. Acabo de hacer algo muy divertido, molestar a los militares es tan sencillo -dijo haciendo al joven superhéroe fruncir el ceño.
Hiro: ¿Ahora que hiciste pedazo de bruto?
Fred: ¡Oye! -dijo ofendido ya por costumbre en lo que Go Go le da un golpe en la cabeza.
Go Go: Tu no, el otro bruto -dijo como si nada ganándose una mala cara del rubio del grupo.
Fred: No me simpatizas.
Hiro: De cualquier modo -dijo prestando atención a la llamada- ¡esta vez te atrapare, Casanova! No creas que te perdonare por hacer llorar a Mimi y por dejarle un ojo morado a Miguel Rivera -dijo haciendo recapitulación de lo que le contaron que paso entre Casanova y Moon Girl días atrás.
Cosa que hizo sonreír al ladrón que todavía le dolía algo la cara luego de auto infligirse dolor solo para que el engaño fuera creíble y librarse de sospechas mientras devolvía el jarrón. Aunque igual le conmovía que Hiro mostrara preocupación por él así.
Casanova: Puedes intentarlo, Capitán. Pero dudo que lo logres, ni aunque te diera doscientos millones de años de ventaja -dijo para acto seguido cortar la llamada.
Momento en que Basemax aviso acerca de que en todos los noticieros se habla del nuevo golpe de Casanova cometido en Sudamérica, en el país tercermundista de Venezuela nada menos.
Hiro: ¿Qué les parece? Con que eso se robo Casanova esta vez. 4 MI-26 rusos de una base militar venezolana -dijo mirando un boceto en internet de uno de esos.
Fred: Ya veo... ¿Y que clase de droga es esa? -pregunto haciendo al resto negar con molestia.
Go Go: No son drogas, tarado. Se trata de los helicópteros de carga pesada más avanzados del mundo. Pueden levantar hasta 60 toneladas cada uno -explico cruzada de brazos.
Wasabi: Robo 4, entonces podría levantar 240 toneladas de carga en total aproximadamente.
Honey Lemon: La pregunta seria que cosa -pensó en voz alta- según los noticieros, la ultima ubicación vista de los helicópteros fue llegando a Nueva Delhi, capital de la India.
Go Go: Posiblemente para recargar combustible en Agra. Pero no podemos descartar que tal vez sea en la India donde dará su siguiente golpe, más específicamente por la zona del rio Ganges, allí fueron vistos los helicópteros por ultima vez -dijo mirando el reportaje.
Fred: Entonces será el típico peligro del oficio del bautizo en las aguas del Ganges -dijo en lo que todos lo ven extrañados- ...Ganges del oficio
Redoble de batería de chiste malo, por favor.
Hiro: Bueno ¿Qué esperamos? vámonos ya -dijo ya dispuesto a subirse al avión.
Wasabi: ¿Seguro que puedes venir? ¿Qué hay de tu trabajo? -pregunto en lo que el nipón le resto importancia al asunto.
Hiro: Los chicos estarán ocupados con una sesión de fotos y me dieron el día libre, tanto ellos como Don Héctor y Rosa estarán muy ocupados -dijo mientras recordaba lo sucedido el final del día de ayer mientras partían al país al sur de Asia.
Si, lo recordaba justo como si hubiera sido ayer.
---
(Flashback de ayer, pov Hiro)
(Rivera Solutions)
Nada como el final de un arduo día de trabajo luego de pasar trabajando en armonías desde primera hora de la mañana sin tomar en cuenta el tiempo de la escuela. Algunos chicos celebrarían eso sencillamente sentándose y relajándose, otros harían algo como salir por a estirar las piernas o dar una vuelta con la motocicleta. Pero en el caso del hijo del CEO y sus dos amigos...
Nada como un tranquilo momento de serenidad y relajación en uno de los pasillos del edificio... que en su idioma eso significaba un violento juego de futbol bajo techo que rápidamente paso a los golpes y las patadas cuando Marco, siendo Marco, comenzó a jugar de manera sucia. Cosa que a estas alturas no debería de sorprender a ninguno de los dos.
El hecho era que el trio de adolescentes estaban haciendo todo un desastre digno de niño con hiperactividad de cinco años. Pobres de los conserjes.
Rosa: Recién termino el día y todavía tienen energías para esto, hay que ver -dijo antes de verme- ¿Cómo la llevas? ¿te acostumbras a ser el asistente de este trio de bobos?
Hiro: ¿Qué te digo? Allí voy acostumbrándome -dije encogido de hombros- al menos es mucho más fácil lidiar con ellos que con Krei, Y si preguntas, espero a que se cansen para ya acompañarlos de nuevo a su casa.
Rosa: Jugada inteligente. Aunque buenas noticias, te los voy a sacar de encima mañana -dijo antes de hacer sonar una bocina para llamar la atención del trio de aspirantes a estrellas- ahora que tengo su atención, dejen el balón en paz, pónganse hielo y sonrían. El tío y yo movimos unos cables, y si tenemos suerte para mañana estará garantizado que saldrán en el próximo numero de tigre pop, nuevas estrellas calientes -dijo para que luego el silencio se hiciera notar.
... ¿Qué cosa?
Miguel: Rosita, en español por favor -dijo obviando lo que todos los hombres pensábamos. Lo cual al parecer la molesto.
Rosa: ¡Sesión de fotografías! ¡Ahora vayan a casa a dormir! Con suerte podremos entregarlos de una pieza mañana -dijo en lo que el trio solo se fue emocionado.
Pero no sin que antes Miguel me sonriera y me guiñara un ojo antes de irse... Me lleva... ¿Qué tiene ese chico que me pone nervioso con solo una mirada?... Bueno, una sola fantasía gay más y ya ¡y no tengo ningún problema!
Hiro: ... ¿Uh? ¿Qué es esto? -pregunte volviendo a la realidad al ver que me ponían una revista en mis manos.
Rosa: Una revista de tigre pop, no creas que no note que tu no sabias nada del tema como ellos. Como su asistente eso no puede ser, por eso en vez de acompañarlos mañana, tu tarea será aprender todo de la revista. Empezando con que es la revista adolescente más popular a nivel mundial.
Ok, entendía la importancia ahora... pero igual no podía importarme menos.
Rosa: Oh no me pongas esa cara. Tal vez no sea el ultimo numero del catalogo de piezas de maquinas más recientes o los problemas del premio del milenio. Pero esta revista tiene artículos para adolescentes como tu que valen la pena, como... -dijo abriendo la revista- consejos para manejar un cabello rebelde, cuestionario para saber si tu mejor amigo te aprecia o ¿Qué llevaría la super estrella Jagged Stone a una isla desierta?
¿Era una broma? Sencillamente no había modo de que... de...
Hiro: ... Esta bien, si tengo curiosidad -dije leyendo el articulo- oh, su cocodrilo Fang.
Rosa: Y lo creas o no, Tigre Pop es leída por casi todos los adolescentes y jóvenes adultos del mundo interesados en el entretenimiento. Si tenemos suerte, esta foto de Crazy Land saldrá podría acabar en las paredes de millones de chicas -dijo sonriendo.
Si, lo entiendo, más fans equivale a más ventas y más popularidad de la banda... pero no se porque ese ultimo comentario de las millones de chicas no me gusto para nada.
Héctor: Rosa, aquí estas, te estuve buscando por todos lados -dijo en lo que se acercaba- ¿lista para irnos? Ya casi es hora, si no nos vamos ya no llegaremos a las 7 a la azotea.
Hiro: ¿A la azotea? ¿A dónde van ustedes dos?
Rosa: Ah, bueno, los martes mi tío y yo vamos a un edificio al azar de una zona de clase media alta y subimos a la azotea para lanzar manzanas caducas a los corredores y ciclistas -dijo como si nada.
... Con que ellos eran los arrojadores de fruta que llevaban años molestando a la gente que sale a hacer ejercicio los martes por la noche. Eran conocidos como el terror de los amantes del ejercicio en San Fransokyo desde hace años.
Hiro: ¿Y porque lo hacen?
Héctor: ¡Por nuestro derecho a mostrarle a esos tarados que la calle no es el mejor lugar para hacer eso! Que se vayan al parque o al bosque, pero no la calle, en especial los ciclistas, los odio ¡casi arrollo como a 4 solo el fin de semana anterior, salen de la nada en la carretera, lo juro! -dijo para mi incredulidad.
Pero no negare que en cierto modo lo entiendo. Wasabi también ha tenido problemas con ciclistas mientras conduce en el pasado.
Rosa: Se puede decir que es algo de mi tío y yo, pensamos en incluir a Miguel más adelante. Con todo es mejor lo que hacemos los jueves.
Hiro: ¿Qué hacen los jueves? -pregunte en lo que tío y sobrina se vieron antes de sonreír con complicidad.
Rosa y Héctor: Ir al bar de improvisación a dar sugerencias tristes.
... Era un hecho, aunque Rosa fuera la más recta de la familia que conocía hasta ahora, eso no quitaba que fuera una Rivera. Algo malo debía tener, y eso al parecer era sacar al diablillo que tiene en su interior con su tío un par de días a la semana. Que cosas...
Pero algo me dice que justamente por ese tipo de actividades era que el jefe de policía Cruz se estaba abriendo paso por las oficinas con algunos policías, pareciendo que iba directo hacia el CEO de la empresa... esto se pondrá bueno.
Héctor: Oh, Diego. ¿Qué lo trae a mi querida empresa? Nada malo espero -dijo en lo que un par de policías lo sujetaron.
Jefe Cruz: Tu tranquilo Héctor, en si no has hecho nada ilegal... esta vez. Tan solo estamos aquí debido a que no te presentaste a tu servicio comunitario y por eso pasaras la noche en la jefatura para que mañana lo cumplas.
Héctor: ¿Qué? Oficiales, no se de que están hablando.
Oficial de policía: Hablamos de destruir el buzón de correo de la familia Mole así como vandalizar la tienda de comics de Richardson Mole... ¡con ella! -dijo para luego agarrar del brazo a una sorprendida Rosa.
Rosa: ¡El me obligo a vigilar! -dijo señalando a su tío en lo que comenzó una discusión.
En la cual se resumen que el fin de semana anterior, además de toparse con ciclistas, Don Héctor se dedico a destrozar el buzón de la familia Mole con un bate de beisbol y además a romper ventanas con ladrillos y llenar de pintura todo en la tienda de comics de Richardson, Todo mientras Rosa hacia de guardia y desactivaba cámaras de seguridad y demás.
Siendo atrapados unicamente porque una patrulla paso de casualidad cuando ya se iban. La noticia seria publica de no ser porque Rosa es prácticamente una abogada de la suprema corte adolescente sin mencionar que Héctor paso dinero bajo la mesa. Dejando todo como un delito menor con un par de días se servicio comunitario... menudo fin de semana.
Héctor: ¡Oigan, yo soy la victima aquí, su mansión está al lado de la nuestra y el mocoso del diablo juega sus videojuegos a todo volumen hasta las 3 de la mañana! -grito mientras era llevado con su sobrina por la policía.
... Era un hecho, menuda familia era esta. ¿En que momento mi vida se convirtió en ser parte de esto? Oh si... vine incluido cuando la empresa cambio de dueño. Bueno, ni modo.
(Fin del flashback)
____________________________________________________________________
(General Pov)
(Un par de horas después)
(Agra, India, Asia)
La India, con su vasta historia y rica diversidad cultural, era un país fascinante que ha cautivado la imaginación de personas de todo el mundo. Desde las bulliciosas calles de Delhi hasta los tranquilos templos de Varanasi, cada rincón de este país rebosa de vida y color. Sus magníficos palacios, exuberantes selvas y místicas montañas crean un escenario perfecto para una historia llena de magia y misterio.
Esos eran los pensamientos de los grandes héroes a la vez que caminaban por las calles de Agra. La India es sin duda un lugar donde los sueños se entrelazan con la realidad, donde lo imposible parece posible y donde cada esquina guarda un secreto por descubrir... o al menos así de detallado era el folleto que Fred estaba leyendo y que Go Go arrojo a la basura a la primera oportunidad.
Ya que no había tiempo de turismo, acababan de llegar y ya habían visto a los helicópteros robados. Siendo por esa razón que montados en un bici taxi manejado por Go Go, el grupo de héroes se encontraba persiguiendo al grupo de maquinas voladoras. Teniendo un par de retrasos debido a más de una vaca.
Solo hace falta decir que la gente estuvo a punto de perseguirlos con antorchas y trinchos cuando Fred estuvo a punto de empujar a una vaca para apartarla del camino. Olvidando el pequeño detalle de que en ese país las vacas eran sagradas. Literalmente era mucho más sencillo que te perdonaran por patear a un bebé que por tocar a una vaca.
Pero aun con todo y contratiempos, y casi arrojar a Fred al Ganges un par de veces, fue que lograron llegar a su destino, el Taj Mahal.
Hiro: Honestamente ¿alguno sabe que querría Casanova de este lugar? Es solo una tumba con exceso de publicidad turística -dijo en lo que se adentraban a la famosa construcción antigua.
Wasabi: Pues para empezar es el monumento más famoso de la India -dijo a la vez que miraba el cielo por una ventana. Teniendo una vista clara de los cuatro helicópteros que volaban en círculos alrededor del complejo.
Go Go: Tal vez quiera las joyas incrustadas en las paredes de mármol, o todo y paredes de una vez.
Fred: Seguro es algo para Hiro -dijo haciendo que este le mire- ¿Qué? Como la mayoría de sus robos hasta ahora han sido para impresionarte a ti, solo digo -menciono encogido de hombros.
Hiro: ¿Y exactamente que me va a impresionar una tumba? ¿Acaso me la va a regalar como un presente de donde me van a enterrar? Que romántico -dijo con sarcasmo.
Honey Lemon: O tal vez te la regale por su valor como tesoro de la humanidad -dijo solo para que todos vieran como de repente el lugar entero empezó a temblar al mismo tiempo que la cúpula superior de la edificación se estaba desprendiendo poco a poco.
Y allí al más joven de todos fue que le cayo el 20.
Hiro: ¡Olviden el Taj Mahal, Casanova solo quiere el techo!
Fred: Tal vez piense que te gustan las cúpulas -dijo solo para recibir un golpe de Hiro como respuesta.
De allí en más, los héroes rápidamente se pusieron en acción, intentando detener el colapso del techo del Taj Mahal. Honey Lemon uso sus esferas químicas para reforzar la estructura mientras Wasabi desplegaba sus espadas de plasma para cortar cualquier escombro que fuera peligroso. Fred y Go Go trabajaron juntas para evacuar a los turistas y habitantes locales que se encontraban en el lugar. De ese modo el trabajo en equipo y la rápida reacción de los héroes lograron estabilizar la estructura antes de que se produjera un desastre mayor.
El cual fue cuando la cúpula se desprendió del todo, siendo allí que el grupo de héroes noto de inmediato que faltaba uno de ellos, no siendo ese otro más que Hiro. Que aprovecho la confusión y el caos para agarrarse a uno de los cables de uno de los helicópteros para subir e intentar detener el atraco. (Al principio intento despegar los ganchos pero le resulto imposible, en momentos así desearía tener a Baymax completamente reparado con él)
Solo para llevarse una sorpresa al ver que quien pilotaba el helicóptero era una vieja conocida suya.
Sirque: Ah, el mocoso de los grandes héroes. Tu, toma los controles -dijo a un secuaz que tomo el mando mientras ella salía al encuentro con el joven héroe de traje morado- ¿no te basta con perseguirme por toda San Fransokyo, capitán encanto? ¿Tienes que perseguirme por todo el mundo también? Lo siento, pero no estoy interesada, soy muy mayor para ti -dijo sacándole un sonrojo al menor.
Hiro: En aquella ocasión estabas jugando con tecnología que no entendías y estabas robando, y parece que tu tiempo en prisión no te hizo reflexionar sobre ninguna de las dos cosas.
Sirque: No voy a escuchar discursos morales de un mocoso, agárrenlo -ordeno a la vez que algunos secuaces salían de los demás helicópteros.
Cosa que hizo a Hiro replantearse su situación. Pensaba que Casanova se encontraría cometiendo el atraco, pero tal parecía que ese no era el caso en esta ocasión. Ahora se hallaba rodeado y sin opciones.... Excepto una ¿Si la gente podía bañarse con todo y ropa en el Ganges, porque él no podría? Siendo ese su pensamiento antes de saltar al rio.
Sirque: ¿Pero cual es el problema de ese chico? Yo solo quería entregarle la pista de Casanova -dijo con fastidio en lo que observaba al menor aterrizar. Solo que no en el agua del Ganges, sino en el interior de un barco carguero de especias.
Cosa que por su parte los amigos de Hiro también vieron a la distancia mientras perseguían la cúpula robada. De allí que sin pensarlo dos veces, saltaron al agua para luego abordar el bote carguero e inspeccionar los barriles llenos con diversos ingredientes de cocina como si no hubiese un mañana.
Wasabi: ¡Caven, caven todo lo que puedan! -dijo prácticamente vaciando un barril de canela.
Go Go: ¡Revisen que Hiro no haya caído en maní!
Honey: ¡No está en el curry!
Fred: ¡Tampoco en el azafrán! -dijo mientras seguían revisando barriles hasta que una mano enguantada de color morado salió de uno de ellos.
Hiro: No, estoy en la cúrcuma -dijo saliendo del tarro de madera para alivio - por suerte no soy alérgico a esto. Aunque se siente algo anticlimático, la idea de saltar a un rio es caer en el agua ¿no?
Honey Lemon: En cambio por mala suerte, escaparon -dijo mirando los helicópteros alejarse- si tuviéramos a Baymax, seria sencillo seguirles el paso -menciono amargando al menor de los presentes.
Hiro: No me lo tienes que recordar. Pero tristemente aun falta bastante para que Baymax este del todo operativo otra vez... otra cosa por la quiero atrapar a ese desgraciado -exclamo pensando en el ladrón con ropa de mago responsable de todo.
Fred: Pues no se ustedes, pero yo estoy viendo que la próxima vista viene literalmente caída del cielo -menciono señalando hacia arriba.
Donde claramente se podía observar un artefacto descendiendo lentamente a la ciudad. Y tras buscarla un tiempo fue que la encontraron de la forma más peculiar. Al parecer la pista era una miniatura del Taj Mahal, la cual termino aterrizando en el puesto de un mercader que la vendió junto al resto de su mercancía a un pobre tonto que creyó que estaba negociando el precio con el comerciante.
El chico tenia rasgos de ser caucásico o norteamericano, aunque por el acento se diría más que era lo último. De cabello rubio, piel clara, algo descuidado de físico. Y una especie de uniforme de camisa negra y pantalón de comando militar. Alguien ciertamente peculiar, pero lo que más resaltaba era la mascota del chico, una especie de rata rasurada en su hombro... los gustos de algunos.
Ron: Oye, Rufus ¿Qué dices? ¿Fue una buena ganga o qué? -pregunto con las manos llenas de los productos comprados- si, tal vez tenga madera de comerciante y hasta me dedique a eso ¿no? -menciono en lo que el animal asentía.
Wasabi: Es broma ¿verdad? Un tapete, una tetera, cinco mascadas y cinco kilos de té indio. ¡Solo compraste todo lo que tenía, y al doble de precio por cierto! -dijo indignado al haber visto todo el intercambio.
Momento en que el joven se dio la vuelta solo para ver a cinco personas vestidas con trajes futuristas y con armas en mano, a cualquiera que los viera a simple vista, fácilmente podían decir que estaban dispuestos a ser hostiles a la mínima oportunidad.
Hiro: Si eres listo, entregaras eso sin resistencia alguna -dijo refiriéndose a la pista de Casanova.
Solo para que en respuesta el chico rubio hiciera lo que mejor sabía hacer, aquello para lo que ha entrenado desde que comenzó a viajar por el mundo en misiones que iban desde actividades de comando hasta ayuda humanitaria y movimientos ambientales, esa habilidad innata que le ha salvado la vida de criminales, desastres naturales, peligros y demás, ese talento único que lo caracterizaba... salir huyendo como alma que lleva el diablo.
Y cualquiera que dijera que estaba gritando como niñita era un vil mentiroso... si se lo preguntaran a él, claro.
Honey Lemon: ... Creo que debimos verlo venir.
Go Go: Voy por él -dijo para que acto seguido, comenzara la persecución.
De ese modo, se dio a la fuga por las bulliciosas calles de Agra, llevándose consigo la pista. En lo que a su vez, los héroes, sin perder ni un segundo, comenzaron a perseguirlo a través del laberinto de calles estrechas y concurridas de la ciudad.
Fred, con su rápida habilidad para desplazarse en su traje de monstruo, se elevó por encima de los edificios en un intento de cortar el camino de escape del fugitivo. Mientras tanto, los demás utilizaron sus habilidades y tecnología para navegar a través de la multitud y evitar los obstáculos que se interponían en su camino. Sin querer quemando un puesto de coles en el camino.
Y al final, todo termino con el grupo acorralando al joven y a su mascota rasurada en un callejón al que por suerte para el grupo entro en su huida. Era fin del camino.
Ron: Ok, admito que fue divertido y todo, pero ¿Cómo que ya estuvo, no? -pregunto mientras retrocedía lentamente solo para toparse con una pared- muy bien... en casos así solo hay algo que un hombre maduro, genial y osado como yo puede hacer... ¡KIM! ¡AUXILIO! ¡KIM!
Hiro: ... ¿Kim? -dijo confundido antes de que una bombilla se encendiera en su cabeza. Para luego maldecir al darse cuenta de que estaban jodidos.
Ya decía que el chico le parecía familiar de algún lado aunque al principio no se acordaba. Era Ron Imparable (lo que calzaba perfectamente con su forma de ser... al huir nadie podía detenerlo) quien era conocido por ser compañero de... Kim Possible, la agente de inteligencia secreta independiente de 18 años más popular del mundo.
Pero no era popular solo por ser bonita y simpática, no señor. Esa chica que al principio de todo solo quería un trabajo de niñera, en su primer trabajo acabo salvando a un grupo millonaria de su propio sistema de seguridad con lo último en tecnología laser gracias a sus habilidades como porrista. Eso hizo que su fama se disparara y en poco tiempo fuera conocida a nivel mundial como una chica con habilidades de agente secreto de precio razonable.
Y para colmo, Hiro la conocía muy bien por razones completamente por aparte. Pero de ser posible, eso no se hablaría de momento, por el bien de su identidad secreta y el de su salud mental también. Había cosas del pasado que no quería desenterrar todavía.
Hiro: Mierda, hablando del diablo... es Kim -dijo por lo bajo mientras que una sombra aparecía sobre uno de los edificios del callejón.
La cual aterrizo interponiéndose entre ellos y Ron, revelando a una chica joven pelirroja con una vestimenta igual a la del Imparable. Pero con una mirada y determinación que fácilmente decían ¨te iras al hospital porque yo así lo quiero¨.
Kim: ¿Qué rayos estás haciendo, Ron? Te dejo solo un segundo y lo siguiente que se es que medio mercado es un desastre y te veo rodeado de... -dijo para luego ver a los chicos de trajes futuristas- ... ¿Villanos con afición al ciberpunk?
Ron: ¡Yo no hice nada, ellos empezaron!
Kim: ¿Y ustedes quienes se supone que son? -pregunto arqueando una ceja mientras hace una postura de karate- ¿Qué clase de villanos visten como una mezcla rara de steam punk de los 80?
... Eso fue entre para extrañarse y sentirse insultado, o al menos ese fue el pensamiento en general de los nativos de San Fransokyo.
Go Go: Bromeas ¿verdad? ¿jamás has oído de los grandes héroes? -pregunto en lo que ella solo tomo lo que parecía ser una especie de comunicador de su bolsillo.
El cual tras encenderse la pantalla, revelo a un chico moreno aparentemente joven que se encontraba tecleando y revisando al menos 6 computadores a la vez. Él era Wade, prácticamente la columna vertebral de todo el negocio de Kim, quien brindaba aparatos, gestionaba misiones, administraba contactos y encima era la fuente de información principal de Kim para lo que fuera que ella necesitara... y hasta la fecha no se sabe si ella le paga o el lo hace gratis.
Kim: Wade.
Wade: Son los héroes de San Fransokyo, Kim -dijo ya sabiendo lo que le iban a preguntar- son héroes conocidos en su ciudad natal, y tienen una taza de éxito ciertamente decente.
Kim: ¿En serio? -pregunto antes de soltar una risa apenada- lo siento, mis disculpas. No estoy acostumbrada a trabajar en equipo con otros héroes muy seguido, pero si ustedes están aquí para detener a Ron, entonces estamos en el mismo bando. Ahora, Ron, ¿qué tienes que decir en tu defensa?
Ron: ¡Te digo que no hice nada Kim! Ellos fueron los que me persiguieron.
Hiro: Corrección, te pedimos que nos dieras el modelo del Taj Mahal y su saliste corriendo. Esa pista de Casanova era para nosotros, le llego al mercader por accidente y tu la compraste por tonto al creerte todo el discurso de que era un tesoro familiar.
Y no hace falta decir que apenas termino de decir eso, Kim Possible sin previo aviso lo tomo de los hombros y comenzó a zarandearlo.
Kim: ¿Qué saben de Casanova? ¡Denme toda la información disponible que tengan de él, es importante!
Hiro: Espera ¿también lo buscan? -pregunto alejándose de ella- ¿Por qué?
Kim: En resumen, evitar lo que sea que este planeando que involucré haber sacado a DNAmy de prisión -dijo mostrando una foto de la mujer.
Parecía una persona de mediana edad no muy diferente a cualquier mujer normal. De no ser por la foto que mostro a continuación de la misma mujer con manos y piernas de gorila.
Hiro: ... Eso no esta bien.
Go Go: Descuida, ya le devolvieron sus extremidades normales -dijo mirando la foto- oí de ella, Amy Hall, también conocida como DNAmy, se podría decir que es como Di Amara, sólo que ella hace sus experimentos de mutación genética más que todo para tener mascotas parecidas a esos peluches que le gustan a Honey.
Honey: ¿Los suavecitos? Ay me encantan, son tan lindos, como el Pandaroo o la flaminveja ¿Ella los hace reales?
Kim: Si, aunque en la vida real no son tan lindos, y más cuanto te atacan, créeme... aunque admito que yo no puedo dormir sin mi Pandaroo -dijo suspirando- se puede decir que es la mejor genetista del mundo y en si no es malvada, solo lleva sus pasatiempos... al extremo -declaro frunciendo el ceño.
Ron: Si la mandamos presa es porque igual tiene que responder por la parte de experimentar en humanos -dijo para luego entregar la pista a Hiro.
Quien tras examinar la maqueta del monumento decidió solo abrir la cúpula. Revelando así un holograma del ladrón que solo hizo una reverencia antes de decir una y otra vez ¨Sigan la ruta de Hillary hacia la colina¨.
... Era oficial, nadie tenia la menor idea de que significaba eso.
Kim: Bueno, veamos si nosotros tenemos mejor suerte -dijo llamando nuevamente a Wade- ¿alguna información nueva de este caso, Wade?
Wade: Pues ahora que lo dices, justo te iba a llamar sobre las ultimas novedades -dijo sin dejar de teclear- ya creo tener una idea de porque Casanova saco a DNAmy de prisión. Acabo de enterarme de que Casanova robo información sobre investigación genética. Y no solo eso, también robo un estudio de investigación sobre los, no lo van a creer, dinosaurios.
Go Go: No, no lo digas, ni lo pienses -amenazo a su amigo solo para ver que este ya saltaba como niño de kínder de un lado a otro.
Fred: ¿Dinosaurios?
Wade: ¨ ¿Dinosaurios? ¨ -imito al excéntrico héroe- ¿Hay eco aquí?
Honey Lemon: Ay no -dijo tras pensarlo- el domo del Taj Mahal seria una jaula gigante perfecta para un experimento genético.
Wasabi:... Casanova quiere hacer un dinosaurio real -dijo en lo que Fred y Ron estaban por saltar emocionados antes de que Go Go y Kim los frenaran a su modo.
Con la chica del traje amarillo golpeando a su compañero en la cabeza mientras que la joven agente le jalo la oreja a su infantil novio. Siendo allí donde a Hiro le quedo claro recordando como fueron las cosas en su ultimo robo.
Hiro: No va a hacer un dinosaurio cualquiera, será un tiranosaurio rex, como el de Moon Girl -dijo llamando la atención del resto.
Honey Lemon: ¿Y eso como por qué?
Hiro: Porque ese es su modo de ser. Le gusta sentirse superior o al menos en igualdad de condiciones que los demás. Y no le debió gustar la interferencia de Moon Girl cuando buscaba robar ese jarrón viejo ¿Cómo superas a alguien con un dinosaurio? Pues con uno propio -dijo como si fuera lo más simple del mundo.
Kim: ¿Pero no se supone que Devil el Dinosaurio es un T Rex de otra dimensión capaz de pensar? -pregunto a la vez que los demás se le quedaron viendo- sigo la pagina de Moon Girl, su publicista si que sabe como ponerla en boca de todos.
Hiro: ... Como sea. Siguiendo esta línea de pensamiento, para eso debe querer a DNAmy. No solo va a revivir a un dinosaurio, también lo hará superior genéticamente -dijo frunciendo el ceño.
El poder genético es una de las mayores fuerzas de este universo. Y Casanova piensa usarlo como un niño que encontró el revolver de su padre. Hacer un dinosaurio... dos especies separadas por millones de años, solo no se sabe cómo reaccionarían la una a la otra.
Kim: Esto es grave. Wade ¿Qué puedes decirnos de la investigación robada? -pregunto al chico que se puso a revisar lo que tenia investigado hasta el momento.
Wade: Según el estudio robado, se cree que aunque es muy improbable, no es imposible obtener ADN genético de dinosaurio en buen estado de una medula ósea bien conservada.
Ron: Pero vamos Kim. Conociendo a DNAmy. Su idea de mejorar a ese dinosaurio sería agregarle rasgos de oveja o algo así -dijo buscando aligerar la tensión que se sentía en el aire.
Fred: Tal vez eso sea lo que Casanova busca. Crear un lindo mutante para regalártelo -le dijo a Hiro.
Siendo lo último que dijo antes de terminar de rodillas en el suelo por un puñetazo en el estómago que le saco el aire. Cortesía del menor.
Hiro: En todo caso. Casanova tiene acceso a tecnología avanzada. Puede ser capaz de todo. Incluso aunque sea imposible crear un dinosaurio, no significa que no lo intentara -dijo con seriedad- Wade ¿verdad? Dinos museos donde tengan fósiles bien conservados.
Wade: Dame un segundo... esta el museo de historia natural en Londres. El museo de historia natural de Chicago, el instituto Smithsoniano en Washington y... -dijo antes de que alguien chasqueara los dedos.
Go Go: ¡Es ese, el Smithsoniano! -menciono convencida- la pista decía que sigan la ruta de Hillary a la colina ¿no? ¿Y si la colina es el capitolio?
Kim: ... Pero claro. La primera dama, Hillary Clinton.
Honey Lemon: Que fue mas querida que su esposo Bill Clinton durante su mandato -declaro.
A la vez que mas de uno de los hombres presentes sintió un silencioso chiste sexista entre manos, y más al ver las risas de las 3 chicas.
Pero no habiendo tiempo para empezar una discusión que posiblemente acabaría en una guerra de géneros que entorpecería todo. Es que todos decidieron ir de regreso a Estados Unidos con un contacto de Kim, un piloto que le debía una a Kim por salvar su pueblo de una inundación en el Tíbet.
Hiro: Solo espero que lleguemos a tiempo... ¿Quién sabe que maldades este haciendo Casanova ahora mismo?
_________________________________________________________________
(Sede de Rivera Solutions, San Fransokyo, USA)
(Miguel Pov)
Primero que nada, lo reconozco, tomar fotos para una revista era muy diferente a las fotos de la escuela.
Y segundo, es un hecho, no dudo que el señor chispas será todo un genio de la excentricidad, pero tiene la sensibilidad pop de una nuez. No es ninguna mentira decir que la adolescente que lleva dentro es una retardada cuyas neuronas se pueden contar con los dedos de un pingüino, que seguro fue confundido con la placenta al momento del parto y sin duda nada más nació, la amamantaron con Red Bull en lugar de leche o formula.
De verdad, es que... ¿mariachis espaciales abrazando animales de peluche exageradamente grandes? ¿Quién fue el genio que dejo al señor Chispas a cargo de tomar la foto para la revista?
Leo: ¿Cómo rayos fue que Chispas arruino una toma buena, perfecta y simple de este modo? -murmuro entre dientes molesto mientras disfrutábamos de cinco minutos de descanso en lo que Chispas preparaba los últimos detalles para tomar la foto.
Marco: Esto es genial, nuestra primera foto nos marcara para siempre ¡como matadores del espacio!
Leo: Y para rematar, esto no nos pondrá en las paredes de millones de chicas, diría que al menos 6 o 7 máximo.
Miguel: Bueno, aparte de que tengo que estar libre en la noche para continuar con la fachada del robo. Creo que los 3 estamos de acuerdo en que no podemos dejar que Chispas tome la foto -dije decidido- por cierto, buena idea lo de la moto de nieve, Marco.
Marco: Y por eso me la llevare a mi isla desierta junto a una dotación de por vida de productos para el cabello.
Leo: Una isla desierta tiene clima tropical, genio. La moto no servirá y los productos se echarán a perder más pronto que tarde -dijo fastidiado.
Marco: ¡Es mi isla desierta imaginaria y funcionara como lo digo yo! -dijo dispuesto a comenzar una pelea.
Muy bien, no tengo tiempo para esto... y el traje de mariachi que tenia puesto me estaba haciendo sentir más pena con cada segundo que pasa, sin ofender a estos aclaro. Soy mexicano y todo, pero lo de que los hombres usamos un traje de mariachi como si fuera ropa normal casi todo el tiempo era un estereotipo y ofensivo además.
Miguel: A ver, los dos ¡concéntrense! -dije llamando su atención- Rosa y mi viejo no regresaran para salvarnos el trasero, nuestra reputación está en juego ¡y quiero ya robar ese fósil de tiranosaurio haber si de verdad le podemos hacer como Jurassic Park! -dije como si nada- ahora, vamos a tomar una foto secreta. Marco, ocúpate de la ropa, Leo, de las luces. Y si tenemos suerte, esto será asunto resuelto antes de la hora del café de la tarde.
Leo: ¿Y cuando haremos todo esto?
Miguel: Tu tranquilo, tenemos mucho tiempo ¿saben cuanto tiempo le tomara al señor Chispas encontrar una moto de nueve en San Fransokyo en pleno verano?
Solo para que en ese momento cierto chaparro de ropa y cabello extravagante entrara de golpe atravesando la puerta de la oficina donde nos encontrábamos, conduciendo nada más que una moto de nieve.
Sr. Chispas: Hola ¿adivinen que encontré entre mis cosas viejas como super villano?
... Es todo, hora del plan B... que incluye sogas, cloroformo, una caja, dinero suficiente para el pago de embarque y un barco de carga con destino a Madagascar.
Algo exagerado... ¡pero las decisiones difíciles requieren voluntades fuertes! ¡Y nadie me impedirá ver si es posible revivir a un dinosaurio, vamos, es el sueño de todo niño junto con ir al espacio, ser un superhéroe y ser campeón mundial de algún deporte!
Como diría ese anciano loco... bienvenidos a Jurassic Park. Y mentiría si dijera que la idea no me emocionaba.
____________________________________________________________________
Notes:
Y eso fue todo. Como siempre pueden votar, comentar, lo que gusten.
¿Y que les pareció?
Ya el crossover de esta vez fue hecho. Y seguro se imaginan que caja de pandora se acaba de abrir al incluir a Kim Possible jaja. Punto para quien adivine de que estoy hablando.
De cualquier modo, esperen pronto la otra mitad, nos vemos.
Chapter 14: Capitulo 12: El gran mundo jurásico (2/2)
Notes:
(See the end of the chapter for notes.)
Chapter Text
(Hiro Pov)
(Smithsoniano, Washington D.C., USA, empezando la noche)
El Instituto Smithsoniano, por si solo es la mayor institución de investigación y divulgación de historia, arte y cultura en Estados Unidos. Fundado en 1846 gracias a una donación del científico británico James Smithson, el instituto consta de 19 museos, 21 bibliotecas de investigación, 9 centros de conservación y un zoológico, todos ubicados en Washington D.C. y Nueva York. Siendo la primera sede el lugar donde Casanova dará su próximo golpe.
El Instituto Smithsoniano es conocido por su extensa colección de arte, historia natural, cultura y tecnología, que abarca desde fósiles de dinosaurios hasta arte contemporáneo. La pregunta es ¿Dónde estará ese ladrón de segunda?
Hiro: Esten atentos, no sabemos si Casanova nos dejó una trampa lista como comité de bienvenida -dije mirando los alrededores de la sección de fósiles, en este caso agradezco que Kim nos acompañara, solo basto un por favor de ella para que el personal de seguridad nos dejara entrar sin queja alguna.
Es un hecho... como grupo de héroes los grandes héroes necesitamos mejorar nuestra popularidad, al parecer ser popular si te abre puertas.
Ron: Oigan ¿Qué es eso? -pregunto escuchando un gruñido.
Siendo en ese momento donde todos nos agachamos para evitar que una especie de animales híbridos nos clavaran las garras en el rostro. Al principio pensé que eran buitres o algo así, pero conforme más me les quede viendo a las criaturas que volaban por todo el techo, más me impacte al ver el tipo de mutantes que eran... era una mezcla entre cuervos y dragones de cómodo... así que este era el tipo de trabajo que hacia DNAmy.
Y allí fue donde lo vi, observándonos con una sonrisa engreída estaba Casanova mirando todo con sonrisa desde una distancia segura desde un segundo piso.
Casanova (Miguel): Vaya, vaya. ¿Por qué tardaron tanto? Me hubiera decepcionado mucho que se perdieran de mi obra maestra
Hiro: Ya harás mucho arte en prisión -dije en lo que el solo sonrió con arrogancia.
Casanova (Miguel): Yo creo que no. Con todo lo que he robado y mi tecnología... Nada me impedirá tener mi propio dinosaurio.
Hiro: Nada excepto nosotros -dije con seriedad- además de que pierdes tu tiempo. Nadie puede hacer un dinosaurio.
Casanova (Miguel): Nadie excepto el ladrón de ensueño, Casanova -declaro cruzado de brazos- y esta vez no abran pistas ¿Qué les parece un truco de magia? Ahora lo ven -dijo en lo que una lona cubrió un gran esqueleto de tiranosaurio- y ahora no.
Y fue allí que sucedió, de repente las luces se apagaron, dejando todo el lugar a oscuras al punto de no poder ver siquiera mi propia mano. Y cuando se volvieron a encender...No quedo nada, ni rastro ni del esqueleto ni de Casanova tampoco. Dejando atrás únicamente a las aves reptiles mutantes.
Hiro: ... Odio a ese tipo
---
(Un par de horas después)
Es oficial, si antes lo que me paso con Di Amara no fue un indicativo, ahora es oficial, odio a los mutantes alterados genéticamente en un laboratorio. Entre capturar a esos mutantes cuervo-Komodo y evitar que escaparan a la ciudad, estaba rendido, y no ayudaba que la mayoría de nosotros tuviera más de una herida debido al encuentro.
Wasabi: Es oficial, la próxima vez que quiera visitar el Smithsoniano esperar a que abra y tenga un guía en vez de la ruta panorámica -dijo mientras arreglaba los daños a su traje.
Kim: Bueno, eso en serio me hizo sudar -dijo tomando asiento en las gradas fuera del Smithsoniano- bueno ¿Qué esperan? Vamos a perseguirlo.
Hiro: ¿Y ha dónde? No tenemos ni la menor idea de a donde pudo haber ido esta vez -dije ciertamente exasperado.
De paso sintiéndome mal conmigo mismo, dándome cuenta de lo mucho que nos habíamos vuelto dependientes de las pistas de Casanova para seguirle el paso, ya que ahora sin pistas, era como buscar una aguja en un pajar. Algún lugar del mundo, sin tener la menor idea de donde empezar.
Kim: Yo si me hago una buena idea. Estos mutantes eran en parte dragón de Komodo. Y solo existe un lugar en el mundo donde se encuentran estos animales.
Fred: ¡La isla de Komodo! -dijo levantando la mano emocionado como un niño pequeño.
Go Go: Fred, no seas estúpido -exclamo a punto de darle un golpe al mencionado.
Kim: De hecho... Iba a decir justo eso. La isla Komodo en Indonesia -dijo algo incomoda.
Ok... juro que si Mini Max estuviera aquí en vez de San Fransokyo que fue donde lo dejamos para cubrirnos mientras estamos fuera, el pequeño robot ya estaría cantando la melodía de la dimensión desconocida por el hecho de que Fred tenga razón, hasta me imagino el ¨¨urururu turururu¨.
Con todo y el remate de Go Go arrojando al robot en miniatura hasta la piscina frente al monumento a Washington de una patada.
De allí en más, después de un breve momento de incredulidad por parte de Fred y un alivio general por haber encontrado una pista, nos pusimos en marcha para preparar nuestro viaje a la isla de Komodo. Kim rápidamente se puso en contacto con algun conocido de su larga lista de contactos para organizarnos un transporte que nos llevara lo más rápido posible al lugar.
Era un hecho, aun a riesgo de que Kim me acabe descubriendo, tenerla cerca como amiga y aliada era algo que debía considerarse, a ella y su lista de contactos.
Finalmente, llegó el momento de partir. Abordamos el avión que nos llevaría al continente asiático nuevamente y nos preparamos para lo que sería una misión posiblemente llena de peligros y desafíos. Mientras volábamos hacia nuestro destino, no pude evitar pensar en la astucia y la tenacidad de Casanova. Sabía que esta sería un reto difícil, pero estábamos decididos a detenerlo cueste lo que cueste... más que todo porque mi orgullo herido estaba en juego aquí.
---
(Un tiempo después)
(Isla de Komodo, cerca de las islas menores de Sunda, Indonesia)
Fue a primeras horas de la madrugada que logramos arribar a las costas de la famosa isla de Komodo, logrando llegar en un respetable tiempo récord con la ayuda de un millonario filántropo que no tuvo problema en prestar su yate experimental de velocidad sónica por la ayuda que ella le brindo en el pasado... a diferencia de Ron Imparable a quien dijo como si nada que deseaba amarrar a un ancla y arrojarlo al mar.
Resumen, si pides aventón usa el nombre de Kim, no el de Ron.
La isla de Komodo, cuyas aguas cristalinas albergan arrecifes de coral coloridos y una amplia diversidad de especies marinas. Con sus colinas escarpadas, playas de arena blanca y bosques tropicales, era un lugar perfecto para aquellos que buscan conectar con la naturaleza y disfrutar de paisajes impresionantes (según lo que leí en Internet mientras veníamos para acá). Pero, lo más importante, y por qué estábamos aquí, los dragones de Komodo.
Una especie única de la que se supone que dieron origen a las leyendas de los dragones de la antigüedad que solo se encontraba en esta isla, pero conforme más observaba... más me daba cuenta de que había más especies únicas en la isla, y no precisamente naturales. Me recordaba a la película de la isla del doctor Moreau... era un escenario fascinante y grotesco a la vez, y hasta algo bizarro si mencionaba que estaban vestidos como aristócratas de la alta sociedad.
Híbridos con cualidades humanas pero animales, todo un zoológico mutante digno de las películas de terror de los 2000.
Kim: ...Parece que DNAmy no ha estado perdiendo el tiempo -dijo mirando con desagrado el desfile de fenómenos- esto me recuerda al viaje de esquiar al monte Middleton donde la conocimos.
Ron: Y ahora está planeando hacer un T Rex -susurro mientras nos escabullíamos para no llamar la atención de los animales.
Honey Lemon: No lo sé, en cierto modo me parecen lindos -menciono en lo que más de uno la miro con extrañeza.
Siendo al poco tiempo que encontrábamos lo que buscábamos, al esqueleto del Tiranosaurio Rex colocado justo debajo del domo robado del Taj Mahal, con todo un equipo científico a los pies del fósil y al propio Casanova hablando con quien parecía ser la genetista prófuga responsable de todo el revoltijo genético que hemos visto esta noche.
Y por lo que veo, Casanova no estaba muy feliz ¿acaso la idea de los mutantes no fue suya? Bueno, no me sorprendería que la doctora Amy Hall decidiera tener algo de libertad creativa por su cuenta, pero igual, si lo atrapamos podremos acusarlo de experimentación ilegal a él también... es una oportunidad de oro.
Casanova (Miguel): Muy bien, ignorando que explícitamente le dije que nada de experimentos, doctora -dijo enfatizando el punto.
DNAmy: Pero necesitaba mano de obra y tienes que reconocer que son tan lindos -dijo solo para que Casanova le hiciera un gesto de que guardara silencio- solo por eso no tendrás una galleta.
Casanova (Miguel): En todo caso, vera... me inspire en el hermoso dinosaurio de Moon Girl para esta idea. Pero ahora se me antoja algo más grande y único, doctora -dijo entregándole una carpeta a la científica- con estos estudios de genética y mi tecnología, quiero que me haga mi propio dinosaurio.
DNAmy: Hare lo que pueda ¿Pero seguro que quiere hacerlo así de simple, señor Casanova? Porque podría agregarle unas lindas orejas de conejo o lana de oveja -dijo en lo que el ladrón solo se encogió de hombros.
Casanova: Esa es la idea. Quiero que sea único.
DNAmy: Entonces empecemos, lo tendrá listo para cuando el pastel este listo y luego todos tomaremos el té -dijo señalando el horno que tenia en una esquina antes de comenzar a festejar ella sola encantada con la idea.
... Es oficial, ahora entiendo porque fue echada de la comunidad científica, esta loca y de remate.
Casanova: Muy bien, entonces hágalo. Por favor -dijo retirándose.
Cosa que solo no podía permitir, no se me iba a escapar, no esta vez. Mientras observábamos la escena desde un lugar seguro, nos dimos cuenta de que esta era nuestra oportunidad para atrapar a Casanova y acabar con sus planes de una vez por todas. Con sigilo y cautela, nos acercamos al laboratorio improvisado donde DNAmy y Casanova estaban trabajando en la creación de un nuevo ser híbrido.
Kim hizo una señal con la mano para indicar que nos dividiríamos en parejas para rodear al dúo de villanos desde diferentes ángulos. Fred y Wasabi se encargarían de distraer a los guardias cerca de la entrada, mientras que Honey, Ron y Go Go se asegurarían de cerrar todas las posibles vías de escape.
Mientras tanto, Kim y yo nos infiltraríamos en el laboratorio y encontraríamos una manera de detener la creación del nuevo ser de Casanova. Con habilidad y rapidez, logramos aprovechar la distracción hecha por las chicas para robar la carpeta con la investigación genética robada. Momento en que decidimos que el mejor curso de acción era correr y buscar como contactar con las autoridades al vernos superados en número.
Solo para que en ese momento los mutantes salieran de todas direcciones y nos rodearan... si, algo me dice que no pensamos lo suficientemente bien este plan.
Casanova (Miguel): Esto tiene que ser el colmo... -dijo apareciendo de la nada frente a nosotros- normalmente les dejo pistas para que el juego sea más parejo ¡pero esta vez su presencia no fue solicitada! -dijo con fastidio.
Hiro: Está vez no tienes donde correr. Y te ganamos.
Casanova (Miguel): ¿Y quién dice que voy a correr? -dijo chasqueando los dedos a la vez que los mutantes comenzaron a gruñir de forma amenazadora- aun no cantes victoria. Como dije, esta vez no tiene que ver con ustedes. Mi hermana menor cumplirá años pronto, y le voy a dar el mejor regalo de todo el mundo. Una mascota única para que juegue.
Esto tiene que ser un chiste realmente malo ¿a quien en su sano juicio se le ocurre regalar un dinosaurio mutante como regalo de lo que sea? ¿Tanto la odia acaso?
Hiro: ¿Y le vas a dar un dinosaurio? ¿Por qué de una vez no la llevas a una isla de caníbales? -pregunte con sarcasmo.
Casanova (Miguel): Ni te creas. Ese es el regalo para mi papá. Veras...
Siendo así que el ladrón continuó hablando sobre sus planes y sus intenciones de crear esta mascota única para su hermana. Mientras tanto, nosotros nos encontrábamos rodeados por los mutantes y sin muchas opciones de escape. Fue en ese momento que Kim tuvo una idea brillante.
Kim: ¿Y si le complicamos el plan? ¿Y si en vez de que él tenga una mascota, le damos una sorpresa? -pregunto en lo que yo arquee una ceja.
Para que luego, antes de que Casanova pudiera reaccionar, Kim se puso en acción. Utilizando un dispositivo de tecnología avanzada, logro que Wade hackeara el sistema de energía del laboratorio improvisado tras arrojarlo a dicho mecanismo, creando así una distracción masiva. Mientras tanto, los mutantes decidieron atacar, momento en que Honey se inspiro usando su bolso como una bazuca arrojando esferas químicas para atrapar a las criaturas a la vez que Ron arrojaba granadas de humo.
Momento en que pensé que tal vez seria posible escapar y tener a este tipo acorralada al fin. Solo para que en ese momento se escuchara canción de los 80 por todo el lugar. Y fue que entre el caos mire a Casanova y ha Kim observarse fijamente el uno al otro, esperando a que el otro hiciera el primer movimiento... ¿Qué esta pasando aquí?
Casanova (Miguel): Vaya que eres una sinvergüenza entrometida. Lo estas echando todo a perder, y ahora... es tiempo de que pagues -dijo con sus cartas en mano ¿acaso pelea con ellas?
Ahora que lo pienso, nunca lo he visto pelear, siempre huye... no se porque esto me da un mal presentimiento.
Casanova (Miguel): Ni te molestes en decir unas ultimas palabras, yo las diré por ti... duelo de baile -dijo para consternación tanto mía como de Kim.
¿De que estaba hablando?
Kim: Si eso es lo quieres, pero te lo advierto, estas retando a una porrista -dijo en lo que ambos comenzaron lo que para mi fue la pelea más extraña que había visto.
Prácticamente era bailar mientras peleaban, y no eran los únicos, de algún modo los mutantes también comenzaron a pelear al ritmo de la música ¿esto era real? Porque juraría que si fuera alguien que se ha drogado en el pasado, pensaría que me encontraba bajo los efectos de alguna sustancia ilícita... si me vieran bajo el casco, fácilmente dirían que tengo una cara de ¨¿que rayos?¨.
Por supuesto, la situación era surrealista, pero estábamos decididos a aprovecharla al máximo. Mientras Kim y Casanova bailaban con habilidad y destreza, el resto de nosotros nos aseguramos de mantener a raya a los mutantes alterados genéticamente. Fred y Wasabi aprovecharon la distracción para desarmar a los guardias, mientras Honey Lemon y Go Go usaron sus habilidades para neutralizar a las criaturas salvajes.
Mientras tanto, Kim y Casanova continuaban con su peculiar duelo de baile, cada uno intentando superar al otro con movimientos cada vez más complicados sin dejar de buscar lastimarse el uno al otro en el proceso.
Fue entonces cuando Kim decidió sacar todas sus habilidades como porrista y nos sorprendió a todos con un espectacular salto mortal seguido de un giro triple que casi deja a Casanova noqueado en el aterrizaje si no se apartaba. En lo que Casanova, por su parte, respondió con un rápido movimiento de breakdance que dejó a todos boquiabiertos, era como un tornado de patadas.
Ron: Ok, esto supero mi nivel de surrealismo al que estoy acostumbrado ¿Porque estamos bailando improvisadamente mientras peleamos?
Kim: Igual dime que es menos extraño que Drakken o Killigan -pregunto divertida.
Ron: Buen punto -declaro para luego revelar algo que dejo a todos sin palabras.
El archivo con la información robada estaba en su poder luego de que todos prácticamente jugáramos a la papa caliente con la carpeta. Momento en que la música se detuvo de golpe a la vez que las luces de más de un helicóptero iluminaban el lugar.
¿Qué sucedía? Que al parecer Wade aprovecho la distracción para notificar a las fuerzas armadas de Indonesia, quienes no perdieron un solo segundo en desplazar cualquier vehículo aéreo y acuático disponible a la isla, situando el lugar en su totalidad.
Pellízquenme porque estoy soñando, debo estarlo... era demasiado bueno para ser verdad.
Hiro: Parece que esta vez ganamos nosotros, Casanova -dije sonriendo a la vez que una voz, que supuse que era un militar de alto rango, se hizo escuchar por medio de un megáfono.
Oficial: ¡La isla está rodeada, Casanova! ¡Ríndete y entrégate, no podrás escapar!
Casanova (Miguel): OK ¿quién fue el chismoso? -pregunto a la vez que no pude evitar sonreír con burla.
Hiro: Eso no importa. A ver como escapas de todos estos helicópteros y barcos -dije burlón. Solo para notar que él no se veía preocupado en lo más mínimo ¿Qué esta planeando ahora?
Casanova (Miguel): Si insistes -dijo encogido de hombros- doctora.
Y tras eso vimos como se esfumo en el aire como si nada, para luego aparecer manejando un helicóptero pequeño con la doctora DNAmy de copiloto. Uno que para la incredulidad de todos, se convirtió en un mini cohete que salió disparado de la isla, alejándose a toda velocidad del lugar por debajo del radar y sin que ningún artilugio de las fuerzas militares pudieran seguirle el paso.
No lo puedo creer, después de lo que nos costo llegar a este punto, el muy desgraciado se escapó de nuevo ¡no es justo, ya lo teníamos!
Hiro: Di algo y te asesino -dije a Fred que estaba a punto de abrir la boca solo para quedarse callado.
Kim: ... Lo admito, eso no lo vi venir -dijo soltando un resoplido frustrada- ¿siempre se acaba escapando así?
Honey Lemon: Básicamente.
Wasabi: Bueno... hay que ver el lado bueno. Recuperamos todo... Y un dinosaurio no nos devoro -dijo en lo que todos solo le dimos la razón suspirando con decepción.
Siendo justo en ese momento que una llamada fue recibida a través del casco de mi traje, y no tenia que ser un genio para saber de quien se trataba. Esto será bueno... nótese el sarcasmo.
Hiro: Antes de que digas nada. Déjame decirte que nunca hubieras podido crear un dinosaurio, Casanova -dije en lo que se escucho una suave risa del otro lado de la línea.
Casanova (Miguel): Nunca sabes que puedes hacer a menos que lo intentes, capitán -declaro con un tono juguetón- por eso es que siempre me persigues... Cuando sabes que nunca me atraparas.
... Es oficial, me estoy enojando, y mucho.
Casanova (Miguel): Hasta el próximo robo -dijo para luego colgar.
... ¡Mendigo hijo de...! Como sea, de momento solo me queda volver a San Fransokyo... me pregunto como le fue a Miguel en su sesión de fotos.
______________________________________________________________________
(Miguel Pov)
Menudo desastre acabo siendo todo esto. Yo apurándome para llegar a tiempo a Washington para sorprender a Hiro antes de que llegaran al Smithsoniano, y de allí en más pensaba que el resto será pan comido. ¿Pero que me encuentro en la isla Komodo? Que Amy demostró porque esta loca aun con todo y su actitud de niña de incomprendida de preescolar.
Juro que allí mismo quería solo cancelar todo y mandar a la loca devuelta a prisión, pero aparentemente mi prima y mi viejo tenían planes para ella, además, según su registro, ella uso como sujetos de prueba a criminales paramilitares de África con condena de muerte de la prisión de Kirikiri, asesinos en serie, monstruos que masacraban por el placer de hacerlo... desde ese punto de vista, DNAmy solo les hizo un favor al volverlos lo que siempre fueron... animales.
Casanova (Miguel): Tendremos que pasar al plan B -dije luego de cortar la llamada- doctora ¿Qué animales de su colección recomienda qué serían lindos y aptos para una niña que va a cumplir 6?
DNAmy: Se me ocurren varias ideas -exclamo con emoción- ¿Qué le parece un conejo con astas de venado?
Casanova (Miguel): Me parece perfecto... ¿Tengo entendido que está muy conectada al mercado de los Suavecitos, no? -pregunte en lo que ella me miro ofendida.
DNAmy: Conectada no ¡Soy la mayor coleccionista, los tengo todos! -se jacto con orgullo.
Ventajas de estar relacionado con locos de remate, dependiendo su obsesión están a la vanguardia de x cosa en específico. Solo necesitabas tener al loco correcto para tener lo que querías, y aquí tengo una de esas.
Casanova (Miguel): ¿Qué tan fácil podría conseguirme el Nutroala? -pregunte sobre un peluche que en especifico es mitad nutria y mitad koala.
Lindo... en cierto modo,
DNAmy: ¿Pará usted o para enviar como regalo? -hizo la consulta ya con teléfono en mano, eso fue rápido.
Casanova (Miguel): Como un regalo, para compensar a alguien que significa mucho para mí -dije con un tono algo soñador haciendo que ella me mirara con picardía.
DNAmy: Veo que Casanova no es solo si alter ego, joven señor.
Miguel: No elegí ese alias porque si, Amy -dije quitándome el antifaz- repasemos el trato. A cambio de que dejes de lado la experimentación humana. Trabajaras para Rivera Solutions en la nueva división biotecnológica qué vendrá próximamente junto a la compra de Sycorex. La necesitamos más que todo porque la nuestra es una empresa tecnológica y no tenemos ni la menor idea de qué hacer con un laboratorio genético.
Una propuesta que dejo a DNAmy sorprendida, pero después de pensarlo un momento, asintió con una sonrisa en el rostro.
DNAmy: Está bien, Casanova. Acepto tu propuesta. Trabajaré para Rivera Solutions en la nueva división biotecnológica -dijo en lo que rodo los ojos al ver mi expresión- y lo sé, lo sé, tampoco emocionarme con muestras de animales agresivos.
Miguel: ¿Y?
DNAmy: ... Y te prometo dejar de lado la experimentación humana... aun si lo merecen.
Miguel: Excelente, mientras este supervisada, no debería haber problemas para que trabaje de forma honesta -dije complacido- es una gran oportunidad para usted, pienso que esto es mucho mejor que la cárcel. Además, imagine que logremos hacer qué los suavecitos pasen a ser de una colección de peluches a un mercado de mascotas. Todo gracias a usted.
Si, en cierto modo yo también tengo un don con las palabras al igual que Rosa o mi papá... odio que Marco y Leo tengan razón luego de tantas veces que negué el hecho de que era bueno con la labia.
DNAmy: Sueño con eso, ¿Quién sabe? Tal vez puedas regalarle un Nutroala real a esa persona especial -dijo logrando sacarme una sonrisa.
Miguel: De momento lo quiero porque tengo entendido que hace juego con uno que posee que es su posesión material más valiosa -dije logrando que la genetista se quedara boquiabierta.
DNAmy: No es cierto... ¿Dice que posee el Pandanejo? Pero si sólo hicieron 20, yo con esfuerzo conseguí el mío.
Miguel: De edición limitada. Lo sé, el único regalo que tiene de su madre que se lo regalo cuando era un recién nacido.
Si, técnicamente fue por tía Cass que me entere de eso ya que Hiro aun no me ha agarrado ese nivel de confianza, pero con este peluche, oh si que voy a compensar lo de esta vez y con creces. Ya me imaginaba al peluche en una bolsa de regalo con todo y la nota puesta con cuidado en la cama de Hiro: "De un chico que piensa que cuando sonríes se iluminan kilómetros ❤, con amor, Miguel"
... ¿Este cohete no puede moverse más rápido? ¡Quiero llegar a San Fransokyo cuanto antes!
____________________________________________________________________
(General Pov)
(Rivera Solutions, San Fransokyo, USA)
Héctor: Al fin, libertad -dijo mientras se sentaba en su silla acolchada- vaya que la policía de esta ciudad es algo. Huyen ante el primer super villano que ven ¿pero contra un tipo que no cumple con su servicio comunitario? Hasta un tanque llevan.
Rosa: Es para no sentirse tan inútiles -dijo mientras se quitaba una cascara de banana del cabello- prometo que nunca olvidare a ese anciano que nos ayudo a escapar del guardia correccional, siempre vivirás en nuestra memoria, encías -dijo limpiándose una lagrima.
A la vez que su tío solo se quedó callado y decidió guardar silencio respecto al hecho de que el viejo no estaba muerto ni nada, solo que posiblemente estuviera un día más recogiendo basura por ayudarlos a escapar, pero ni modo... luego le enviarían un pastel de trigo y nueces con un jugo de ciruela y pasas como agradecimiento... mejor no entrar en detalles.
Héctor: Por cierto ¿ya organizaste la reunión con la señorita Liv Amara? -pregunto con curiosidad debido a que quería hacer negocios con ella cuanto antes.
No solo porque luego de todo el caos y desastre de pesadilla que causo su clon para salvarlo de su experimento fallido las acciones de su compañía cayeron en picada haciendo que terminara en bancarrota, volviéndola una ganga para la compra. Sino también porque ya se imaginaba que clase de cosas podrían crear con la ingeniería genética a su disposición... si no puedes probar que existen seres fantásticos de otro mundo, pues créalos. Aunque solo como ultimo recurso, claro.
Rosa: La reunión esta programada en un par de días, para sorpresa de nadie la agenda de la señorita Amara esta bastante libre ahora que su fama como empresaria exitosa esta por los suelos -dijo revisando su teléfono- por otro lado la revista tigre pop notifico que la foto es perfecta... en todo caso ¿se puede saber que haces tío?
Héctor: ¿Qué te parece? Contemplo nuestra más reciente adquisición -dijo mirando el talismán de la oveja en su mano- entonces... ¿La oveja es proyección astral?
Rosa: Así es, y según uno de nuestros drones Hiro usa los zapatos viejos de su tía cuando nadie lo ve -dijo revisando las grabaciones del día de sus drones espías mientras le quitaba el talismán al hombre mayor- me pregunto si es lo único de ella que se probará.
Tenia mucho trabajo que hacer para compensar el día de trabajo perdido juntando basura con su tío. Y en situaciones como esa solo puede decir que siempre intenta detener a su tío de cometer locuras y más si la involucran a ella... pero a veces solo le queda decir que ¨si no puedes con ellos, úneteles¨.
Héctor: Ya me imagino como mi chamaco le sacara provecho a este nuevo poder... Ahora dámelo, no tiene sentido que Miguel lo tenga si no ayuda para pelear o algo así.
Rosa: Lo haría encantada, querido tío... Si no supiera que tu solo quieres ver vestidores de mujeres sin ser atrapado -dijo haciendo al mayor tragar grueso en lo que empezaba a sudar con nerviosismo.
Dicho de otro modo, atrapado con las manos en la masa.
Héctor: ... No... ¡Dame eso! -declaro para luego saltar encima de su sobrina y comenzar una clásica pelea digna de niños pequeños con jalones de pelo, zancadillas, puntapies y demás.
Seria lo normal que Héctor se viera muy mal en ese plan al ser un adulto viejo y todo, de no ser porque en vez de eso lo que daba era tristeza al mostrar que su sobrina estaba ganando la pelea con facilidad (aun cuando en realidad el se estaba dejando ganar) ¿Qué podía decir? Así era como se llevaban..
Aunque la disputa termino de golpe cundo un teléfono celular sono.
Héctor: Tiempo fuera -dijo con el puño de su sobrina en la cara y un pie en su estómago mientras sujetaba el talismán con una mano antes de contestar con la otra- ¿Hola? -pregunto mientras ponía la llamada en alta voz.
Solo para arrepentirse a los cinoc segundos de haberlo hecho al reconocer la voz que fácilmente podía comparar con uno de los demonios de del noveno circulo del infierno... su exesposa, quien no estaba nada feliz.
Imelda: ¡¿Dónde estas pedazo de inútil?! ¡Acabamos de llegar al aeropuerto y no estas por ningún lado! -dijo haciendo que toda la sangre se fuera del rostro del hombre a la vez que empezara a sudar a mares.
Si, en una escala del 1 al 10, Imelda sonaba con la furita suficiente para usar la mega bota con él... ni con casco se salva de al menos una semana inconsciente en el hospital. En resumen, ya valió madres.
Héctor: ¡Ya voy en camino! -dijo aterrado mientras corría para bañarse y alistarse en tiempo récord.
Momento que Rosa aprovecho para tomar la llamada.
Rosa: ¡Hola, tía Imelda! ¿Cómo has estado? ¿Recibiste la caja de chocolates que te mande? -pregunto como si nada.
A la vez que la mujer al otro lado de la llamada rápidamente cambio su actitud de estar furiosa como una berseker a actuar como una madre amorosa y cariñosa, todo un cambio de chip que dejaría boquiabierto a cualquiera de lo rápido que cambio de emoción.
Imelda: Mi niña hermosa, cuánto quiero verte ya, te agradezco por los regalos, aunque ya te he dicho que no tienes que darme nada, linda.
Rosa: Tonterías, luego de pasar años desconectados es lo menos que puedo hacer -dijo con cierto tono culpable antes de solo hacerse la desentendida.
Ese era un tema del que no le gustaba hablar, así que mejor no traerlo a colación, quería dormir tranquila las próximas noches, muchas gracias.
Imelda; ¿Tu tío te ha cuidado bien? Puedes ser honesta y decir que no, con confianza
Rosa: ¿Y para qué digo que sí? -pregunto sabiendo que Héctor estaba escuchando.
Era más que todo para meterse con él, ya que aunque lo hiciera enojar o le hiciera bromas constantemente, lo cierto es que no pudo conseguir mejor tutor legal en el mundo desde que... eso paso.
Héctor: Como abunda la falta de respeto por aquí -dijo saliendo del baño de la oficina con ropa de salir mientras se secaba el cabello.
Imelda: Recibes el respeto que te has ganado -dijo como si fuera una ley universal para disgusto de su exmarido y diversión de su sobrina.
Héctor: Bueno, el punto es que voy para allá, no tardo -dijo para luego colgar- chamaca, vuelvo en dos horas con tu prima Coco y puede que con el perro de Miguel también, quédate cuidando el fuerte -sugirió con gentileza.
A lo cual Rosa asintió con una sonrisa antes de despedir a su tío y quedarse sola en la oficina. Se levantó de su silla y se acercó a la ventana, observando la bulliciosa ciudad de San Fransokyo desde las alturas.
Mientras contemplaba el paisaje, su mente divagaba en todo lo que había sucedido en los últimos años. El cómo quedo huérfana, los problemas legales con la justicia, los riesgos que habían corrido como familia su tío y ella. Pero a pesar de todo, se sentía agradecida de tener a su tío Héctor a su lado. Aunque a veces se comportara como un niño travieso, era un hombre con un gran corazón y un ingenio sin igual... la mayoría de las veces.
Decidió aprovechar las dos horas que estaría sola en la oficina para poner en orden algunos documentos, revisar el progreso de los proyectos en los que estaban trabajando y tal vez incluso hacer un poco de meditación para relajarse, pronto su prima viviría con ellos, algo que hasta ella misma olvido.
Pero no por eso la emocionaba menos... a fin de cuentas, siempre quiso una hermana menor, o bueno, una prima menor en este caso.
Mientras tanto, en camino al aeropuerto, Héctor iba mentalizándose para enfrentar el regaño de su exesposa Imelda. Sabía que había descuidado algunas responsabilidades familiares por estar tan enfocado en su vida privada y sus planes a futuro desde que era adolescente, pero en el fondo sabía que ella siempre tendría razón. Y aunque le costara admitirlo, la amaba con todo su corazón.
Y sabía que ella pensaba lo mismo de él... aún si lo primero que hizo apenas lo vio fue casi dislocarlo del botazo que le dio mientras su hija menor se reía de su dolor... ¡que viva el amor rudo!
Si, esa mujer estaba loca por él.
Notes:
Y ese fue el capitulo de esta vez. Como siempre pueden votar, comentar, lo que gusten.
¿Y que les pareció?
Si, oficialmente Coquito se fue a vivir con su padre, prima y hermano, una idea de Imelda para que su hija no extrañe a su hermano mayor. Y aunque no lo admitiría jamás en voz alta, ella piensa que Héctor merece que su hija conozca a su papa.
Pero en fin, de momento eso sería todo, ya nos vemos pronto.
Chapter 15: Capitulo 13: Sueños en grande (1/2)
Notes:
(See the end of the chapter for notes.)
Chapter Text
(General Pov)
(Juguetería local, Queens, Nueva York)
El automóvil avanzaba lentamente por las calles de Queens, y desde el asiento del pasajero en la parte trasera de la limusina, Casanova dejaba que sus ojos se centraran en el paisaje urbano que se desplegaba ante él por la ventana. Era una mañana radiante, y los rayos del sol se filtraban a través de las nubes, iluminando los rascacielos de Manhattan que se alzaban en el horizonte, monolitos de vidrio y acero que parecían desafiar la gravedad.
Entre el murmullo de la ciudad y el canto lejano de un saxofonista en la esquina, se sentía una mezcla de asombro y euforia. Este vecindario, con sus calles repletas de coloridas tiendas y cafés, respiraba vida propia, un mosaico vibrante de culturas y sueños que coexisten en una armonía caótica.
Casanova: La última vez que vine no me dio tiempo de disfrutar la ciudad debido a que tenía prisa y en parte Moon Girl se empeño en arruinarme la noche esa vez. Pero bueno, supongo que ahora puedo darme el lujo de pasear con calma mientras la ciudad tiene esta ¨crisis fantasmal¨ -dijo entre comillas mientras observaba la televisión en la limusina.
Donde se observaba de primera mano el enfrentamiento de un espectro que aparentemente venía del antiguo Egipto y convertía a la gente en momias, se pedía a las personas alejarse del área circundante mientras que un nuevo grupo novato de héroes llamados la Ghostforce se encargaba de solucionar el problema. Si, ambas cosas eran recientes en Nueva York, pero una ventaja es que la gente está acostumbrada a que cosas así pasen todo el tiempo. No por nada la ciudad está plagada hasta el harto de superhéroes y supervillanos.
Es que en serio ¿Qué tiene Nueva York que literalmente cada distrito y cada barrio tiene su propio héroe y villano designado? ¿Qué la ciudad entera fue construida sobre un gran campo de guerra que luego sirvió de cementerio indio e irlandés o que?
Es más, ¿Cómo es que la gente sigue viviendo en masa aquí y no se larga a la primera oportunidad con tanto desastre?
???: Igual estamos muy lejos de donde se libra la pelea como para que nos importe. Ese fantasmita y los tontos héroes no se meterán en nuestros planes. jajaja, ja jaja jaja, jajaja, ja jaja jaja -se rio de una forma ciertamente molesta su acompañante quien es su secuaz de esta ocasión, Cerebro.
Un joven de gran intelecto y con recursos que lo hacían una persona interesante de tener de matón esta vez... ¿a quién engañaba? Simplemente lo eligió ya que su nombre fue el que salió de una gran urna donde su prima puso nombres de varios aspirantes a villanos que ella investigó y que podía usar en sus robos. Algo arriesgado dejarlo al azar ¿pero qué es la vida sin algo de riesgo y misterio?
Cerebro: ¡Ya déjame! ¡Llenaré mi almohada con tus plumas, engendro! -dijo interrumpiendo su risa cuando el ave que nos acompañaba reaccionó negativamente a su risa y lo atacó en consecuencia.
Se que solo traje al ave para que fuera una pista para los grandes héroes esta vez, pero que buena mascota.
Casanova: Ya deja al pobre animal ¿no ves que es una criatura incapaz de defenderse por sí misma? -dijo en lo que el ave se posó en su brazo dejándose acariciar.
Cerebro: ¿incapaz de defenderse? ¡Es una bestia!
Casanova: Cerebro, mi amigo. Le hablaba al pájaro -dije divertido en lo que el auto se detenía- hemos llegado -declaró- es un pequeño paso para el hombre, pero un gran salto para Casanova.
Para luego sin más ambos se bajaron del vehículo y se abrieron paso a la gran juguetería que abarcaba varios pisos dándoles igual si llamaban la atención o no. Tampoco es que se fueran a quedar mucho y a fin de cuentas, dejarse ver era la idea mientras tomaban lo que fueron a buscar, un juego de pantalla de luz mágica para niños de cuatro años o más. Juguete perfecto para aquellos niños que tenían la fibra de artistas en ellos.
Vendedora: ¡Fuera, fuera de aquí! -dijo alterada mientras que el ave que había venido con ellos tomó el juguete en cuestión antes de ponerse en el brazos del joven de galante apariencia.
Casanova (Miguel): No tema, señora. Es solo una mascota, ciertamente inofensiva, solo algo ansiosa por estar dentro del auto un rato -dijo acercándose al mostrador- Cerebro, págale -ordenó en lo que el joven secuaz le dio a la mujer los dólares.
Cerebro: Y quédese con el cambio -dijo en lo que ambos ya se daban la vuelta para irse.
Vendedora: Espere un momento. ¿No es usted... alguien? -preguntó al joven de traje que solo le sonrió de medio lado con aire de misterio.
Casanova (Miguel): Todos somos alguien, bella dama -exclamó para luego seguir su camino en lo que otro vendedor se acercaba al mostrador cargando algunas cosas.
Vendedora: Oye, Brihan ¿ese chico no es alguien famoso? -pregunto al hombre.
Solo para que él en respuesta soltara todas las cajas de la sorpresa a la vez que la puerta del local se cerró con la partida de ambos jóvenes.
Brihan: ¡Oh Dios mío. ¡Ese es el ladrón Casanova! ¡Rápido, llama a la policía!
La atmósfera de la juguetería se volvió instantáneamente tensa. Las sonrisas se transformaron en gestos de sorpresa a la vez que se oprimió el botón por alerta de robo, avisando así a los transeúntes y patrullas cercanas que algo había pasado.
Fuera del local, los dos jóvenes se apresuraron hacia la limusina. El ave seguía aferrándose al juguete, mirando a su alrededor con curiosidad mientras el ladrón ajustaba su corbata. Cerebro, algo inconforme por experiencia anterior ante lo rutinaria que fue, se acomodó en su asiento trasero, ansioso por salir de allí.
Casanova (Miguel): En marcha, rápido -ordenó al chofer robot mientras el vehículo arrancaba de inmediato. La limusina tomó velocidad al salir de la acera, esquivando a peatones y otros coches.
Pero el momento de tranquilidad no duró. Un par de patrullas de policía se desplegaron rápidamente en la calle, alertadas por la llamada de la vendedora. Las luces azules y rojas parpadeaban, pintando la escena con un aire de urgencia.
Cerebro: "Oh genial, la policía vino a molestar. ¡Literalmente solo aparecen para molestar pero cuando pasan crímenes reales solo dejan la llamada por correo de voz! -dijo con fastidio, mientras se asomaba a la ventana- serán un problema ¿no?
Casanova (Miguel): ¿Problema? Solo estamos saliendo a dar un paseo... -dijo con una sonrisa burlona, haciendo que su compañero compartiera su actitud engreída.
Desde la seguridad de la limusina, podían ver cómo una patrulla se alineaba detrás de ellos, sirenas a todo volumen. Cuando la policía comenzó a tomar una posición de persecución, la adrenalina de la situación nubló el juicio de Cerebro.
Cerebro: ¡Igual necesitamos un plan! Esto no se va a resolver solo
Casanova se inclinó hacia adelante, su mente trabajando rápidamente. No podía permitir que lo atraparan; no ahora y menos por unos simples policías, tenía una reputación que mantener. Este golpe había sido demasiado bien planeado para dejar que un par de policías arruinaran todo antes de que la diversión siquiera comenzara.
Casanova (Miguel): Chofer, toma la siguiente esquina y aumenta la velocidad -dijo con tranquilidad.
El robot obedeció, tomando una curva cerrada hacia una calle menos transitada. La limusina se balanceó un poco, pero mantuvo su estabilidad. Sin embargo, las patrullas de policía no estaban lejos, y una de ellas logró ganar terreno.
Cerebro: "¡Están alcanzándonos! Vamos a tener que hacer algo drástico -su mirada se movía frenéticamente de un lado a otro, buscando una solución. O mejor dicho, una pistola láser que tenía debajo del asiento.
Ganándose un golpe en la cabeza cortesía del ladrón.
Casanova (Miguel): No seas exagerado, diviértete un poco con la emoción de la persecución. Igual... -comenzó a observar las calles que pasaban rápidamente- esa sería nuestra salida -apuntó hacia un callejón estrecho.
El chofer, viendo el gesto, no lo pensó dos veces y giró bruscamente hacia el callejón. El vehículo se adentró en la oscuridad, pero el camino no era sencillo; estaba estrecho y lleno de baches, botes de basura y demás. Y mientras la limusina se deslizaba por el callejón, las patrullas tomaron un momento para evaluar sus opciones. La comunicación de radio reproducía voces nerviosas, indicándoles que la limusina estaba en un callejón y les advertían sobre las posibles maniobras de su objetivo.
Que acabaron siendo saltar a una autopista desde el callejón usando unas tablas como rampa al final de esta.
Cerebro: ¡Oh, genial, ahora somos los héroes de una película de acción! -dijo sarcásticamente, viendo cómo el ambiente del callejón cambiaba abruptamente de luminoso a casi oscuro con la sombra de los edificios.
Casanova (Miguel): Esto es sólo parte del plan y admite que fue divertido ¡al estilo de Grove Street! -contestó sin perder la compostura mientras hacía una referencia de GTA- recuerda el truco: siempre hay una salida -dijo confiado.
En lo que la limusina avanzó, tomando una nueva calle donde el tráfico era menos denso. Las luces de las patrullas se quedaron atrás, pero Casanova sabía que no se darían por vencidos tan fácilmente. Las maniobras de las patrullas seguirán por un tiempo más. Siendo la prueba como de la nada salieron cuatro vehículos más.
Oficial de policía: Los túneles y puentes que conectan el distrito de Queens con los demás y con el exterior fueron cerrados. ¡Todo está cubierto, no podrás escapar, Casanova! -grito por medio de un megáfono haciendo al ladrón sonreír burlón.
Cerebro: Que molestas mentes inferiores. Creen que con solo eso nos tienen.
Casanova (Miguel); Si me dieran una moneda cada vez que me dicen eso... creo que de momento me alcanzaría para un sándwich -pensó en voz alta divertido- ahora, chofer. Toma una ruta alternativa y cruza por Manhattan, me gustaría que pasáramos por Times Square antes de irnos ya que tengo una sorpresa para los habitantes de la gran manzana -dijo con calma.
Cerebro: Fantástico, jajaja ja jaja jaja -volvió a reír antes de ver a su robot- ¡Ya escuchaste! ¡A Times Square!
El chofer robótico no tardó en ejecutar la orden. Con un giro preciso, tomó la dirección hacia Manhattan, navegando entre el tráfico. La limusina, una máquina elegante y pulida, se movía con destreza entre los autos, logrando incluso pasar el bloque derribando una patrulla al puro estilo Need for Speed mientras la adrenalina fluía a raudales en el interior. Casanova por su parte miraba por la ventana, sus pensamientos girando tanto en la emoción del momento como en su próximo movimiento.
Casanova (Miguel): Times Square... lo espléndido de la gran manzana nunca deja de sorprender. No hay mejor lugar para dejar mi marca -murmuró, todavía disfrutando del tema de su propia teatralidad.
Cerebro, aún inquieto, empezó a gesticular con impaciencia.
Cerebro: Pero ¿Qué planeas hacer exactamente, Casanova? Se nos acabará el tiempo. Es solo cuestión de minutos antes de que se bloqueen todas las salidas.
Casanova volteo hacia su cómplice, sus ojos centelleando con un brillo juguetón.
Casanova (Miguel): Verás, Cerebro, a veces hay que hacer una exhibición... un espectáculo para recordarnos a nosotros mismos que somos los verdaderos protagonistas de esta historia. ¡Y la mejor manera de hacerlo es en el corazón de la ciudad! En el caos, encuentra la calma... y en el desorden, crea tu propio espectáculo.
Unos minutos después, la humareda del tráfico y la energía vibrante de Manhattan envolvieron a la limusina a medida que se acercaban a Times Square. Las luces brillantes y los anuncios mudos llenaban el ambiente, un mar de colores vibrantes que pronto serían opacados por el gran acto que el famoso ladrón tenía planeado en esa ocasión.
Oficial de policía: Estás rodeado, Casanova. ¡Sal con las manos en alto! -ordenó mientras las demás patrullas rodeaban a la limusina que extrañamente se detuvo justo en el centro de Times Square.
Siendo allí que pasó, de algún modo, todas y cada una de las pantallas de la gran manzana fueron interferidas y proyectaban la misma imagen. El que parecía ser el logo personal del ladrón.
Ciudadano: ¡Miren, allí está Casanova! -dijo señalando una de las pantallas.
Policía: Buen truco -dijo divertido- pero el verdadero Casanova está aquí -menciono para luego buscar abrir la puerta de la limusina.
Solo para que esta se desarmara y se viera que la cabina del vehículo era también un pequeño jet desplegable sin tener nada que lo parara, salió disparado hacia el cielo con ambos pasajeros a bordo.
Desde las alturas, la limusina convertida en jet cortó el aire con una elegancia inesperada mientras los rascacielos de Manhattan se desvanecían rápidamente debajo de ellos. Casanova y Cerebro intercambiaron miradas de complicidad conforme observaban el paisaje. Las luces de Times Square se convirtieron en un mar brillante de colores, mientras el caos del suelo se perdía en la distancia.
Momento en que el ladrón sacó el teléfono e hizo la famosa llamada. Solo que se sorprendió al no ser el primero en hablar esta vez.
Hiro: Déjame adivinar ¿otro robo? Si crees que vas a escapar esta vez. Estás soñando, Casanova -dijo con seriedad para diversión del otro chico.
Casanova (Miguel): Ten cuidado, mi sueño puede ser tu pesadilla -dijo para luego sonar mas pícaro- pero ¿Quién sabe? igual te acaba gustando... por cierto, la pista esta vez tendrán que buscarla, querido capitán encanto.
Y tras eso colgó. No cabía duda, aunque odiaba admitirlo, cada vez le gustaba más el juego de policías y ladrones que tenía con Hiro. Casi era como un juego de roles de no ser porque él no sabía quién estaba tras el antifaz a diferencia suya. Pero la sola idea de la persecución, la emoción y el hecho de que el chico que, seamos honestos, le gustaba, lo estaba emocionando mucho.
Hora de un nuevo golpe del ladrón de ensueño.
________________________________________________________________________
(Hiro Pov)
Lo diré una y mil veces hasta el día que muera, como odio a ese tipo.
Ya tenía todo el día planeado aprovechando que estaba libre, ya que aparentemente, los chicos y el señor Rivera estaban tan hartos de verse todos los días que estaban empezando a odiarse entre ellos, así que para solucionarlo, decidieron tomarse el día libre de ensayos y cualquiera otra cosa del mundo de la música.
Don Héctor iba a estar jugando golf con Liv Amara para hablar sobre la compra de Sycorax aprovechando que las acciones de la empresa estaban por los suelos con todo lo que hizo el clon de la señorita Amara. En resumen, Rivera Solutions estaba interesada en comprar la empresa que actualmente era prácticamente un edificio abandonado y reinventar el negocio... Tengo mis dudas al respecto, pero hasta ahora el papá de Miguel no me ha dado motivo alguno para sospechar de malas intenciones, más allá de ser un lujurioso pervertido.
Por otro lado se supone que Marco iba a aprovechar su tiempo libre para intentar llegar a la pantalla grande ya que según él ̈su cara y abdominales fueron hechos para el público¨ y dijo que probaría empezar su carrera como actor. Mientras que Leo pensaba asistir a una clase de matemáticas especial impartida por Phoebe Nachee... con el único detalle de que la academia donde la dará es solo para chicas. Todavía me pregunto cómo hará para entrar.
¿Y yo? Bueno, escuche que Miguel tiene una hermanita menor y pensaba pasar el día con él y Rosa para convivir y de paso conocerla. Admito que me emociona mucho la idea, Miguel habla tan bien de esa niña que debe ser una pequeña y dulce angelita. Me moría de ganas de pasar el día con Miguel y su familia... y luego tenía que venir el imbécil de Casanova y arruinarlo todo.
Hiro: Esta vez, señor Barriguita, esta vez lo atraparé...deséame suerte -dije abrazando el peluche de nutroala que Miguel me regaló para luego dejarlo en la cama- bueno, parece que es hora de viajar otra vez, vamos Baymax -le dije a mi amigo robótico que asintió y empezó a seguirme.
(Para que vean como es el peluche)
Aunque no se porque siento que me estoy olvidando de más de una cosa... meh, si lo olvido no debe de ser importante.
_________________________________________________________________________
(Tiempo después)
(Juguetería local, Queens, Nueva York)
Con que este es el lugar donde Casanova fue visto, dijo que esta vez debíamos buscar la pista. Así que definitivamente debió dejarla por aquí. Solo espero que la dichosa pista no sea un juguete, porque si lo es, tardaremos una maldita eternidad en dar con el indicio.
Honey Lemon: Honestamente no lo entiendo -dijo mientras tomaba asiento en un puff- si esta vez pagó por el juguete entonces no lo robo ¿Cuál es el delito entonces?
Hiro: Cualquier cosa nos puede servir de pista, tal vez no robo en esta ocasión, pero definitivamente está planeando algo grande -dije con seriedad- según lo que me informa Basemax de la red del crimen de la policía. Lo han visto moverse de Pakistán a Perú y de China a Chile, aún no se como le hace para moverse tan rápido entre lugares.
Fred: Seguro tiene más recursos que nosotros ¿Cómo rayos le hacen algunos de los malos para siempre tener mejores cosas que los buenos? -dijo haciendo puchero mientras está sobre un trenecito de juguete.
Si, Fred siendo Fred.
Honey Lemon: El tablero de luces qué compró parece haber llamado la atención de Casanova. Parece ser un juguete muy entretenido ¿será que planea regalárselo a sus secuaces en sus cumpleaños o navidad? -se preguntó sacando más de un resoplido a los demás, yo incluido.
Wasabi: O será que lo quiere para cuando esté aburrido -se dijo pensativo en lo que la que faltaba del grupo se acercaba a nosotros luego de interrogar a los dos empleados de la tienda.
Go Go: La vendedora puede decirnos dos cosas del encuentro -dijo casual- uno, que parece que el secuaz esta vez es alguien apenas entrando en la adolescencia qué usaba guantes de yin y yang. Y lo segundo es que llevaban un ave con ellos, un cormorán -reveló mientras sostenía una pluma en su mano, posiblemente dejada por el animal.
¿Un cormorán? Nunca había escuchado ese nombre antes. Aunque siendo justos se tanto de aves como Fred sabe de ciencia. Ahora vaya que el pasatiempo de observación de aves de Go Go acabó siendo útil.
Honey: ¿Guantes de yin y yang? El símbolo chino de las dos fuerzas opuestas... -dijo haciendo un dibujo de este en una hoja.
Hiro:... Baymax -dije mirándolo de reojo- ¿Cómo te sientes? ¿Tus sensores y tu procesador se sienten en óptimas condiciones?
Si, resulta que eso fue justo lo que se me había olvidado. El hecho de que por costumbre me traje a Baymax sin recordar el minúsculo detalle de que seguía en malas condiciones por todo el virus que Casanova le había introducido de nuestra aventura en la isla de Pascua. Y justo esta mañana el virus de algún modo muto, borrando buena parte del progreso que me había llevado tiempo restaurar.
Baymax: Moderadamente, se encuentran en un 65% de capacidad.
Bueno, eso es mejor de lo esperado.
Hiro: Al menos puedes escanear. Dinos de donde es esa pluma -pedí en lo que Baymax ejecutó la orden dada.
Baymax: Esa pluma pertenece a un cormorán de río. Uno del río Yang Tse. En China.
Pues más claro no puede ser. Parece que esta vez el robo será en el oriente.
Honey: ¿Y tiene imágenes de la cámara de seguridad? -preguntó al robot que asintió antes de mostrar las imágenes.
Y allí estaban ellos, Casanova, tan arrogante como siempre con su aparente pájaro mascota y acompañado de un chico del cual tenía muchas cosas que opinar de su apariencia, siendo la primera...
Fred: Pues el secuaz si tiene guantes de Yin y Yang, pero más... ¿Ya vieron el tamaño de esa cabezota? -pregunto sorprendido.
Si, justamente eso. Siempre se podía confiar en Fred para decir cosas obvias o hasta hirientes en voz alta.
Baymax: Identificado, Susan Astronomanov, se hace llamar Cerebro, estudiante de la Escuela Primaria Huber, considerado estudiante prodigio -explicó en lo que todos no pudimos evitar aguantar la risa.
Todos:... Pfff... Susan...
¿Qué tanto te tienen que haber odiado tus padres para ponerte nombre de chica siendo hombre?
Baymax: No veo cómo su nombre es gracioso -dijo ladeando la cabeza- cuando el segundo nombre de Hiro es...
¡Vete a la mierda, karma! ¡Actuaste demasiado rápido para mi gusto esta vez! ¡Mucha información!
Hiro: ¡No venimos a hablar de mí, sino de él! -dije interrumpiéndolo- ¿Cómo que es estudiante prodigio?
Baymax: A que es como tu -reveló- incluso tal vez más controversial a la hora de inventar... Sus inventos han mostrado registros de ser... Muy peligrosos -dijo mientras sufría fallas al hablar de forma entrecortada a la vez que comenzaba a calentarse y a producir vapor de todos lados.
Ay no, el virus lo está sobrecalentando.
Hiro: ¡Baymax! -dije angustiado para luego lograr que se metiera por completo en una fuente que estaba de decoración dentro de la tienda.
¡Benditos sean los diseños poco convencionales y las fuentes interiores que en cualquier otro caso no servirían para absolutamente nada!
Hiro: Tus circuitos están a nada de fundirse. Ese virus le está impidiendo funcionar correctamente. No debí traerte, aún no estás preparado del todo, perdón amigo -dije mientras revisaba el interior de mi robótico amigo.
Baymax: Función de autodiagnóstico activada -dijo mientras se escuchaban varios sonidos de zumbido y pitidos- proceso en curso... Sensores de temperatura: 92% de capacidad operativa. Virus detectado. Requiere actualización de software.
Hiro: Esto es justo lo que necesitaba. Genial, Baymax, genial -dije dando palmadas a mi amigo que ya estaba más frío- vamos, necesito dejarte de nuevo en Basemax para luego ver cómo nos ocupamos de ambos: De Casanova y del tal "Cerebro".
Sabiendo su nombre real, definitivamente Cerebro es mucho mejor que... Pfff... Susan.
Fred: Eso puede ser problemático, Hiro. Si el tipo es un prodigio, quizás no solo esté ayudando a Casanova, sino que también puede ser un obstáculo como lo fueron los enemigos del Tigre en Mexico.
Wasabi: Espera -dijo mirando la pantalla- según el análisis de Baymax, ¿estás diciendo que este chico puede tener los mismos niveles de creatividad inventiva que tú? Eso no suena nada bien.
Honey Lemon: Además, si sus inventos son peligrosos, pueden ser realmente una amenaza. ¿Qué tipo de cosas ha creado? -pregunto en lo que Go Go la desestimó.
Go Go: Lo importante es que mientras Casanova y Cerebro estén juntos, tenemos que encontrar la manera de detenerlo antes de que logre hacer algo con sus "brillantes" ideas.
Clara y directo al punto, no se espera menos de Go Go.
Hiro: Exacto. Necesitamos un plan. Revisando las imágenes de la cámara de seguridad. Este Cerebro no parece el típico secuaz, no se comporta como uno -dije al ver su comportamiento- si es realmente un prodigio, tal vez sea vulnerable a un debate o una discusión técnica.
Go Go: De momento todo parece indicar que Casanova y el tal Cerebro están en el Yang Se.
Fred: Genial, iras a tu tierra de origen, Hiro ¡A China!
... A ver Hiro, contrólate, cálmate. No te dejes llevar por la cólera de escuchar un comentario tan estúpido como ese. Recuerda que es Fred de quien hablamos.
Hiro: Soy mitad japonés, Fred, sé que eres tonto, pero no hagas que parezca que vas a un campeonato -dije con fastidio- aunque igual no te dejarian participar porque dudo que acepten profesionales.
Fred: Tienes razón... ¡Oye! -dijo al darse cuenta de a que me refería en lo que los demás solo nos reímos de nuestro amigo.
Muy bien, a ponerle más puntos de millas de viajero frecuente al avión de la familia de Fred.
____________________________________________________________________________
(Horas después, luego de dejar a Baymax en San Fransokyo)
(Rio Yang Tse, provincia de Sichuan, China)
El Yang Tse se deslizaba como un dragón azul entre las montañas de jade, sus aguas recorriendo la vasta geografía de China con un murmullo ancestral. En algunos tramos, el río se estrechaba entre acantilados escarpados, donde los sauces llorones se inclinaban con la brisa, como si compartieran secretos milenarios con las corrientes. Las embarcaciones de madera, con sus velas ondeando al viento, surcaban sus aguas, llevando consigo historias de pescadores que lanzan sus redes al amanecer y viajeros que soñaban con destinos lejanos. A lo lejos, un monasterio se erguía en la ladera de una colina, sus campanas resonaban en la quietud, invitando a la reflexión y al recogimiento.
A medida que el sol descendía en el horizonte, tiñendo el cielo de tonos anaranjados y dorados, los reflejos del río danzaban como llamas vivas. Las aldeas que se asomaban a sus orillas comenzaban a cobrar vida, con el humo de las cocinas elevándose en el aire y el aroma de las especias invadiendo las calles empedradas. Las risas de los niños reverberaban por el aire, mientras las ancianas, sentadas en la sombra de los porches, tejían historias con sus palabras, entrelazando el presente con el pasado. El Yang Tse, eterno y sabio, seguía su curso, un testigo silencioso de las vidas que se entrelazan a su alrededor, un símbolo de la continuidad y del cambio en el vasto tejido de la existencia.
Si, me puso reflexivo y emocional. ¿Pero qué se puede esperar? ¡Es eso o volverme loco del estrés y el cansancio por llevar horas inspeccionando cabo a rabo de este maldito río que no solo es el más grande de China, sino que de toda Asia! ¡Más de seis mil kilómetros!
Hiro: Vaya suerte la nuestra. El Yang Tse mide 6 mil kilómetros y no tardamos en encontrar dónde se esconde Casanova, solo cuatro malditas horas -dije con sarcasmo- o al menos a su cómplice.
Quien se encontraba tranquilo de la vida tomando el sol en la cubierta de un yate de todas las cosas como si no tuviera preocupación alguna de la vida... ni lo conozco pero quiero golpearlo, debo golpearlo, tengo que golpearlo. ¡¿Cómo se atreve a relajarse mientras nosotros recorrimos casi toda China buscándolo?!
Go Go: Para ser un genio es tan tonto como Fred -dijo como si nada en lo que subíamos a escondidas al barco- esta expuesto sin ningún modo de defenderse.
Wasabi: ... Está hablando en Chino con alguien por teléfono -dijo agudizando el oído-... habla con Casanova. Al parecer el próximo golpe lo darán en un lugar llamado Xichang.
¿Xichang?
Wasabi: Ahora está diciendo... ¨Parece que las plagas ya llegaron... Me ocuparé de ellas...¨ ¿Espera que?
Siendo lo último que dice antes de que todos seamos atrapados por brazos robóticos salidos de diferentes partes del barco... pero claro que el yate no iba a ser normal. Condenada suerte la mía.
Todos: ... Rayos -dijimos al unísono a la vez que el dichoso niño prodigio solo nos vio con malicia y burla.
El típico aspirante a villano que cree que ya ganó y ahora nos presumirá lo superior que es a diferencia de nosotros y más bla, bla, bla. ¿Por qué los villanos son tan predecibles?
Cerebro: ¿Y se supone que ustedes son algunos de los héroes más grandes de todos? No me hagan reír jajaja ja jaja jaja -se rió de una forma ciertamente... irritante.
Hiro: Qué risa más fea tienes -dijo logrando enfadar al cuatro ojos antes de que solo se encoja de hombros.
Cerebro: No importa, no necesito escuchar comentarios de mentes inferiores a la mía -declaró obviamente buscando menospreciar.
Si, como dije, predecible.
Hiro: Y sin embargo trabajas para Casanova, y se supone que eres una mente prodigiosa, ¿Por qué lo haces? -pregunte buscando la causa, motivo razón o circunstancia de las acciones de Cerebro.
Siendo esa causa, motivo, razón o circunstancia una completa estupidez.
Cerebro: ¿No es obvio? Porque soy malvado -declaró como si fuera lo más obvio del mundo.
Hiro: Más bien patético, Susan -dije haciéndolo rabiar.
Cerebro: ¡Maldigo a mis padres hippies por ponerme ese nombre! -exclamó con enojo- de todos modos, espero que disfruten la bodega del barco. No permitiré estorbos, si todo sale bien, Casanova me dará consejos de amor para conquistar el amor de mi vida -dijo con un tono soñador antes de dejarnos encerrados en la bodega del yate e irse.
... ¿Es en serio?
De todas las razones para apoyar a Casanova ¿por consejos de amor? ¿Qué tan patético tienes que ser para hacer algo como ayudar a un criminal internacional por una razón así?
Fred: Esto es tan cliché, solo le falto el tanque lleno de pirañas -dijo en lo que todos colgamos dentro de una jaula en la bodega del yate- y por otro lado, ese chico será un genio. Pero es patético ¿no?
Honey: ¿Empezando porque no nos quitó nuestro equipo? -mencionó con una esfera alquímica en mano.
Mientras que por su parte Go Go arrojó uno de sus discos a la cadena que sujetaba la cadena mientras que Wasabi usó sus cuchillas para cortar los barrotes de la jaula... cosa que acabó siendo un grave error debido a que en realidad ese escenario tan obvio para el escape fue diseñado así para algo, un sonido de la alarma que resonó en la bodega apenas se apaciguó cuando los destellos de luces brillantes comenzaron a girar, inundando la habitación con un espectáculo de luces rojo y amarillo. El sistema de autodestrucción había sido activado.
Me lleva... ¿¡Cuándo se volvió esto una película de James Bond?!
Hiro: ¡Rápido, chicos! ¡Debemos salir de aquí antes de que se nos acabe el tiempo! -grité, mirando alarmado el temporizador que aparecía en una pantalla frente a nosotros, contando hacia abajo desde tres minutos.
Fred: ¡¿Por qué siempre hay un sistema de autodestrucción en los escondites de villanos!? -dijo mientras forcejeaba con la puerta de la bodega, que parecía estar hecha de un metal más resistente de lo que había imaginado.
Wasabi: ¡Concéntrense! -dijo, dirigiendo sus cuchillas hacia la puerta sin lograr hacerle mucho daño- ¡Ya luego te quejas, Fred! ¡Hay que salir de aquí!
Mientras la alarma seguía sonando, los últimos segundos se deslizaban rápidamente, y el tono cada vez más agudo llenaba la habitación como una llamada de alerta. El aire se hacía más denso, y el pánico empezaba a apoderarse de mí.
Honey Lemon: ¡Lo tengo! -gritó de repente, levantando la esfera que había estado sosteniendo y lanzándola con fuerza contra la cerradura de la puerta. La esfera explotó en una nube de energía que desintegró el mecanismo que nos mantenía prisioneros.
La puerta se abrió de golpe, y todos nos deslizamos hacia afuera, corriendo sin mirar atrás mientras el temporizador se acercaba a su final. Solo para que cuando faltaran unos segundos antes de que la cuenta regresiva llegue a cero... pasara algo muy extraño, aun para nuestros estándares normales.
¿Y eso que fue? Pues nada menos que la mano gigante de un robot que parecía sacado de un anime de mechas que nos agarró y como si nada nos sacó del bote a la vez que estallaba. Momento en que tuvimos una vista más completa del robot... ¿un fan de Mazinger Z o qué rayos?
Fred: ¡Santa Máscara de Megazord! -declaró mientras el robot nos dejaba en el suelo a orillas del río.
A la vez que quien parecía ser el piloto decidió que iba a hablar con nosotros. O eso podía asumir al ver como una escalera eléctrica desciende desde el estómago del robot.
Fred: Muchachos, prepárense... estamos por conocer una mente superior a las nuestras -dijo ya con una roca en mano para lanzarla.
Hiro: Si, al menos superior a la tuya creo que sí -dije para luego solo quedarme sin palabras al ver al dueño del robot frente a nosotros.
Ya que de todas las cosas que podía haber esperado... Se trataba de un niño, uno que parecía incluso más joven que Cerebro debido a su baja estatura. Bata de laboratorio, lentes y cabello pelirrojo ¿de donde salió este niño?
???: Saludos -dijo con un tono muy educado y algo altanero para alguien de su edad- me gustaría saber, ya que tengo curiosidad, el porqué Cerebro los tenía cautivos. Y si saben lo que sea que planea Cerebro, me gustaría que me lo dijeran.
Ya veo, así que está aquí por Cerebro, en cierto modo, debí haberlo visto venir ¿su rival tal vez?
Hiro: Básicamente, trabaja para el ladrón Casanova... Y tu... ¿Quién eres exactamente? ¿Otro niño prodigio? -pregunte en lo que el menor sonrió ampliamente.
Dexter: Así es, soy Dexter, el Niño Genio.
Dexter... conozco ese nombre. Y si mi memoria no me falla, tenía a un pequeño desastre escala Hiroshima y Nagasaki entre manos. Así de peligroso han dicho que puede ser este chico sin supervisión.
Hiro: ¿Dexter? ¿Dexter Louis McPherson?
Dexter: Ah, has oído de mí -exclamó complacido.
Hiro: Sí, supe que hiciste el oso del siglo en la Universidad McAllister, por lo que oí determinaron que no estabas lo suficientemente maduro emocionalmente -dije recordando el chisme. En lo que el niño solo se puso rojo de vergüenza.
Dexter: ¡Eso fue un malentendido! -protestó, acomodándose las gafas en una mezcla de indignación y orgullo juvenil- el accidente no fue nada más que un... un inconveniente.
Hiro: Un inconveniente que resultó en una gran cantidad de daños.
Dexter: ¡Pero era solo un experimento de prueba y error! -se defendió con un puchero- Y, por cierto, el incidente fue exagerado por la prensa.
Fred: Bueno, ya dilo ¿Qué fue lo que hizo? -pregunto a Go Go quien solo se encogió de hombros.
Go Go: Por lo que oí, inundó todo el campus queriendo hacer una fiesta.
Y vaya que lo hizo, la noticia se difundió como la pólvora en todos los institutos de educación superior del país y hasta de Europa el como un niño que acabó en la universidad debido a su sobresaliente resultado en un examen de aptitud, terminó inundando la mayoría de edificios del campus al querer hacer una fiesta justo en la época de exámenes finales.
Dexter: ¡No inundé todo el campus! Solo... fue un pequeño desbordamiento, eso es todo... -dijo, intentando dejar en claro que la magnitud del desastre se había exagerado.
Fred: Bueno, eso suena como un buen modo de lanzar una fiesta -dijo medio en serio, medio bromeando- ¡Aunque, en serio, deberías haber pensado en el aviso de evacuación!
Dexter: Como sea, no estoy aquí para hablar de mi pasado, ni de fiestas fracasadas a causa del desgaste mental -dijo restando importancia al asunto- ¡no tengo que dar explicaciones a quienes acabo de salvar! En todo caso ¿Cómo está eso de que Cerebro está trabajando con un ladrón como Casanova? ¿Por qué razón lo haría?
Fred: Dijo que le ayudaría a conquistar a una chica -reveló en lo que el niño se golpeó la cara con fastidio.
Dexter: Me da vergüenza que ese tipo sea mi rival -exclamó con fastidio- ¿Qué es lo que le ve a mi tonta hermana?
Oh ¿entonces a su rival le gusta su hermana? Que desastre, y eso lo digo solo oyendo al respecto.
Honey: Oye, no creo que debas referirte así de tu hermana -hablo con reproche solo para que el niño negara resignado.
Dexter: ... No la conoce, señorita, no la conoce -dijo con cierto tono de miedo y estrés- solo pensar en ella me hace.... -declaró para luego estremecerse.
Pero no era solo eso, casi hasta parecía que el niño estaba pasando por un ataque de ansiedad. Su rostro parecía como si se estuviera resquebrajándose y juro que hasta podía jurar que sus ojos decían solo con la mirada ̈el horror... ¡El horror!¨.
Vaya... que fuerte.
Wasabi: Pobre, su hermana debe ser un monstruo para haberlo tratado así -susurro en lo que todos asentimos estando de acuerdo. Haciendo que el niño consternado nos viera fijamente.
Dexter: Es peor que un monstruo -revelo- es alguien tan idiota que destruiría la vida en la tierra por creer un arma apocalíptica un juego de video. Tan estúpida que liberaría una plaga sobre la humanidad sólo porque ve que el vapor es de un color que le guste. Tan tonta que causaría una fusión nuclear que haría quedar a Chernobyl como una explosión de experimento escolar por no controlar su estúpido impulso de presionar un botón ni bien lo ve... -revelo mientras se frotaba las manos en un intento de controlar su ansiedad.
A lo cual tanto yo como los demás solo vimos de reojo a Fred para luego ver con empatía al chico, compartimos su dolor.
Dexter: Sé lo que piensan, lo entendí ni vi al tipo del disfraz ridículo -dijo para mi sorpresa- pero créanme, no me entienden. Comparado con Dee Dee, éste parecería una mezcla de Einstein, Hawkins y Newton en la misma mente.
¿Qué carajo?... ¿Como una chica así está viva si quiera? Si Fred en comparación suya era un genio... ¿como?
Dexter: En todo caso -mencionó superando el momento- supongo que puedo dejar que trabajen conmigo. Cerebro es mi problema, lo que sea que haga, debo ser yo quien lo detenga. ¿Qué saben hasta ahora?
¿Perdón? ¿Ahora quien se cree que es?
Hiro: Lamento decirte que en todo caso tú eres nuestro apoyo, ya que Cerebro es sólo un peón de Casanova -dije aclarando las cosas.
Dexter frunció el ceño, claramente no le gustaba la idea de ser considerado un simple apoyo. Su orgullo infantil se manifestaba en el ligero temblor de su labio inferior, pero había una determinación subyacente en su mirada.
Dexter: Si Cerebro es solo un peón, entonces eso significa que hay algo mucho más grande en juego. Casanova no es solo un ladrón; está en esto por una razón -dijo en lo que me vi en la obligación de reconocer a regañadientes que tiene razón.
Si... puede que yo también tenga algo de orgullo infantil.
Honey: Solo sabemos que va a Xichang en este momento ¿sabes de algo que podría interesarle allí? -preguntó con dulzura haciendo al niño pensar.
Dexter: Lo único más o menos valioso de nivel científico en Xichang es... El Centro de Lanzamiento de Satélites de Xichang. Aunque lo usan más que todo para el lanzamiento de cohetes espaciales -explicó.
... Oh rayos...
Go Go: ¿Algún lanzamiento programado del que hayas oído?
Dexter: Claro que no -dijo con simpleza- pero siempre hay unos cuantos cohetes listos para ser usados. Ya saben, para cosas como acelerar los transbordadores espaciales, cambiar las órbitas de satélites u otros objetos en el espacio, órbitas de reentrada, para el aterrizaje completo si no hay atmósfera, esas cosas.
Honey: Ya veo... ¿Y puedes darnos un aventón al centro de lanzamiento, Dexter? -preguntó con dulzura en lo que yo solo esperaba que el niño actuará arrogante y se negara.
Pero en vez de eso solo vio a Honey Lemon un momento antes de apenarse y darle la espalda.
Dexter: Supongo que puedo hacerlo... vengan conmigo -dijo haciendo un gesto para que lo siguiéramos al robot.
... ¿Qué?
Hiro: Tengo que saberlo -le susurre a Honey mientras abordamos la máquina- ¿Cómo es que tu...?
Honey: Tal vez sea un genio. Pero sigue siendo un niño pequeño, solo hay que hablarle como se debe y va a hacer caso, se nota que con todo es un niño bueno, a su modo, claro -dijo con tranquilidad.
Ya veo, se nota que ella es buena con los niños... ¡Un momento! ¿Por qué siento que ella ha hecho ese mismo truco conmigo más de una vez?
De cualquier modo, una vez a bordo. La máquina, un coloso de metal y tecnología, se encendió con un zumbido profundo mientras nos acomodamos en espacios situados frente a un panel de control. Dexter se colocó en la cabina del piloto, sus manos pequeñas danzando sobre controles que apenas podía alcanzar. De pronto, una pantalla se iluminó con gráficos que mostraban la trayectoria al centro de lanzamiento, mientras el yate humeante se dispersaba en el horizonte.
Ahora si te atraparemos esta vez, Casanova.
Notes:
Y ese es el capitulo de esta vez. Como siempre pueden, votar, comentar, lo que gusten.
¿Y que les pareció?
Si, esta vez me fui por un clásico aun más viejo. No me juzguen, en mi defensa el mundo de la animación es sorprendentemente extenso y hay mucho de donde elegir. Intentare subir la otra mitad lo más pronto posible.
Hasta entonces, nos vemos.
Chapter 16: Capitulo 14: Sueños en grande (2/2)
Notes:
(See the end of the chapter for notes.)
Chapter Text
(Hiro Pov)
(Centro de lanzamiento de satélites, Xichang, China)
Con ayuda del mecha futurista (que me pregunto de donde rayos consiguió este mocoso los fondos para construirlo considerando que aparentemente tiene en secreto todo el asunto de niño genio a su familia y vecinos) no tomó mucho tiempo llegar al corazón de la provincia de Sichuan, donde se podía ver los valles entrelazándose con ríos caudalosos y las montañas se erigen como centinelas del pasado. El lugar parecía ser un punto donde la modernidad y la tradición danzaban en una armonía inquietante. Las calles resplandecían bajo la luz plateada de la luna, era un lugar bello, tal vez... habría tiempo de hacer algo de turismo.
Aun así, debía recordar cuales eran mis prioridades, siendo de ese modo que llegamos rápidamente al centro de lanzamiento de satélites de Xichang. Las instalaciones del centro espacial funcionan desde 1984 y son principalmente un lugar de lanzamiento de cohetes de alto poder de empuje y satélites climáticos y geoestacionarios. El sitio es importante debido a que es sede de la cooperación espacial China y Europea por el lanzamiento de los satélites científicos Double Star hace algunos años atrás.
Siendo en dicho lugar llegamos solo para ver algo que me dejó boquiabierto de lo absurdo que era pero que igual pasaba frente a mis ojos. Algunos cohetes del centro de lanzamiento salían volando hacia el cielo gracias a unos aparatos con hélices adheridos en la punta de estos solo para desaparecer en el portal de Sirque. ¿Sigue usando esa tecnología? ¡Uno pensaría que aprendió luego de lo que casi termina pasando la última vez!
Dexter: Si no lo veo no lo creo -exclamó sorprendido aterrizando al robot sin arriesgarse a tomar los cohetes por miedo a dañarlos- deben ser al menos 70 cohetes.
Wasabi: Primero compra un juguete barato en Nueva York y ahora se está robando los cohetes espaciales más caros del mundo. ¿Qué planea esta vez Casanova? -se preguntó.
Solo para que en ese momento se abriera un portal delante de nosotros del que Sirque, que para este punto estaba más que confirmado que era una secuaz de Casanova, se asomo.
Sirque: Eso es para que ustedes lo averigüen, no sean flojos -dijo arrojando un objeto envuelto en papel antes de desaparecer por el portal que luego se desvaneció.
Hiro: Comienza a caerme mal -dije tomando la pista.
Fred: Pensé que te cayo mal desde esa vez que la perseguiste por media ciudad para que dejara de abrir portales a lo loco -mencionó haciendo que le viera con mala cara.
Wasabi: Fred, a menos que con Olivia hayas hablado de no tener hijos, mejor ni sacudas el panal -dijo por lo bajo.
Todavía me cuesta creer la aparente casi o nula existencia de instinto de conservación que tiene Fred para decir cosas que fácilmente lo pueden mandar de regreso a San Fransokyo de un golpe. Misterios de la vida.
Hiro: En todo caso, veamos que esta vez la dichosa pista -dije desenvolviendo el objeto- es... Una naranja.
Fred: ¡La naranja mecánica!
.... Que conste que él solo se la busca. De allí que nadie me reclame cuando le doy una patada que lo hace girar dentro del traje, como estaba pasando justo ahora.
Honey Lemon: Parece que Casanova quiere que nos alimentemos sanamente mientras estamos fuera de casa -quiso decir con humor para aligerar el ambiente.
Dexter: Déjenme ver eso ...-dijo mientras recoge el papel con el que estaba envuelto la fruta- como supuse, es un papel tornasol, es de los que cambian de color con la presencia de ácidos.
Vaya, el niño muestra porque se autodenomina genio.
Hiro: Entonces veamos qué dice, ¿Nos haces el favor, enano? -pregunte a la vez que le quite la naranja a Fred que ya estaba a punto de darle un mordisco. Creo que hasta se rompió un diente al cerrar la boca sin morder nada.
Fred: ¡Oye, tengo hambre!
Dexter: Ya comerás después -dijo con fastidio en lo que partía la naranja y la pasaba sobre el papel, revelando así palabras ocultas- "Haré un viaje y estaré triste, cariñosamente, María".... ¿Alguna idea?
A medida que el último fragmento de la frase se asentaba en mis oídos, un escalofrío me recorrió la espalda. La referencia a "María" resonaba en mi mente, pero no podía colocarla de manera inmediata. El tono de la pista, casi poético, sugería que la tristeza de la que hablaba Casanova era más que una simple emoción.
Honey: "María"... puede ser un nombre clave o el lugar donde tenemos que ir. -dijo pensativa, mientras las palabras ocultas seguían brillando en el papel tornasol.
Fred: O tal vez un tipo de fruta... No sé, yo estoy más interesado en lo que hay en la naranja. -Respondió, restando importancia al mensaje y solo pensando en comerse la naranja.
Wasabi: Puede que sea un juego de palabras, o... -dijo mirando al cielo estrellado por encima de nosotros- ¡Parte de alguna obra famosa! ¿Recuerdan esa canción de "María"?
Go Go: ¿Te refieres a "West Side Story"? -preguntó, sorprendida. La mayoría de nosotros nos habíamos visto obligados a ver la película una vez en una de nuestras noches de pijamas en que tía Cass se quiso unir a nosotros.
Fue entonces cuando lo comprendí. La tristeza, el viaje... el personaje al que mencionan... Todo conectaba. Pero no, era demasiado sencillo como para ser eso, Casanova nunca dejaba pistas tan sencillas.
Hiro: ¿Pero a donde viajará?... -me pregunté- Y quién es María?
Fred: ¿Alguien está celoso? -pregunto burlón en lo que yo solo le di un codazo que le saco el aire por reacción.
Dexter: Se robaron unos cohetes espaciales... -exclamó pensando en voz alta- si, tal vez sea eso... Hace siglos Galileo pensaba que las partes oscuras de la luna eran mares, y por eso les puso maría, qué significa mar en latín.
¿La luna? Oh no... no me digan que piensa hacer lo que creo. ¡Eso ya estaría de moda solo para empezar! ¡Ya un villano se robó la luna en una ocasión! Si, se acabó devolviendo el mismo día... pero igual ¡ya se hizo! ¿Dónde quedó la originalidad?
Hiro: No me digan que planea lo que creo que planea -dije ya sintiendo el dolor de cabeza.
Honey: Tal vez la parte de ponerse triste se refiere a cómo algunas personas se sienten con una luna llena...
Fred:... ¡¿Se va a robar la luna?! ¡Pero ya se hizo! -y Go Go le metió un golpe antes de que yo pudiera hacerlo. Entiendo, no debe monopolizar el gusto.
Dexter: Si planea algo con la luna... La próxima luna llena es en cuatro días. Y a los astronautas les toma 3 días llegar a la luna, pero esos cohetes que se robó no fueron hechos para llevar tripulantes -explico- si Casanova y Cerebro quisieran llegar a la luna en luna llena tendrían que irse mañana... ¡Eso es! -dijo volviendo a quitarle la naranja a Fred.
Fred: ¡Oh, por favor! -exclamó con enojo.
Dexter: Miren ¡la naranja tiene escrito Florida! -dijo contento de haber notado ese detalle antes de que el alimento pasará a ser el bocadillo de nuestro amigo.
Florida... ¿pero que tiene que ver Florida con todo esto? La luna, cohetes... okey, es muy obvio.
Go Go: No menso -dijo al ver a nuestro amigo rubio emocionarse- ¡No irán a Orlando, irán a Cabo Cañaveral!
Oh bueno, para casi todos era algo evidente.
Fred: Oh... ¿Ya me puedo comer la naranja?
Todos: ¡Si! -dijimos ya hartos de la dichosa naranja.
Y gracias al cielo no estábamos tratando con algo como la naranja molesta... solo pensar en ese programa hace que me de migraña ¿en que pensaban los ejecutivos de televisión en dar luz verde a algo tan espantoso?
Dexter: ¡Los lanzamientos espaciales! ¡El Centro Espacial Kennedy está en Florida! Podría estar planeando otro robo de cohetes para llegar a la luna -exclamó.
Wasabi: Pero eso no tiene sentido. ¿Por qué robar cohetes de Xichang si puede obtener cohetes en Florida?
Hiro: Ya sabes como es Casanova, nunca hace nada sencillo. Y no solo son cohetes lo que se manda al espacio, también está el transbordador espacial en cabo cañaveral -dije en lo que me dirige de vuelta al robot gigante de Dexter- oye, Dex... ¿Puedes llevarnos de vuelta a Estados Unidos también? No se porque algo me dice que tu robot es más rápido que nuestro Jet -dije forzosamente con un tono amable.
Si, soy consciente de que es un niño, pero tiene el suficiente IQ para considerarlo un genio, y yo también lo soy, de allí que pedir ayuda de este modo no era otra cosa que un golpe a mi orgullo si debía hablar con la verdad.
Dexter: Claro. Pero sólo si admites creerme cuando digo que lo que pasó en aquella universidad fue solo un accidente -dijo el niño mientras activaba los sistemas de navegación del mecha. Solo para que yo usara todo de mi autocontrol para no golpearlo.
Hiro: No abuses -respondí, aun sintiendo impulso de aplastar al pequeño arrogante. Aunque lo admito, es más que todo porque la idea de ahora mismo depender de un niño y que este me dijera qué hacer. Aunque lo necesitábamos, no me sentía lo bastante cómodo.
Me recordaba demasiado a cierto chico que la profesora Granville me hizo convencer de asistir a la universidad con solo doce años. ¡Ese día si fue exasperante para mi! De hecho el trabajo con Don Héctor me salvo de volverme mentor de ese pequeño arrogante.
Mientras el robot comenzaba a moverse, el paisaje de la provincia de Sichuan se desvanecía detrás de nosotros, dejando espacio a la vasta extensión del océano y la costa este de Estados Unidos al poco tiempo. Sentí un pequeño alivio, aunque la presión de lo que estábamos a punto de enfrentar seguía latente en mi pecho. Casanova usualmente no se detiene ante nada para lograr sus objetivos, y si estaba considerando robar la luna, eso solo significaba que estaba dispuesto a hacer las cosas aún más complicadas.
___________________________________________________________________
(Centro espacial John F. Kennedy, cabo cañaveral, Florida, USA)
Dicho y hecho, no habíamos durado ni cinco minutos en llegar a la atracción turística de Cabo Cañaveral que era el centro espacial John F. Kennedy, cuando observamos al mismo irse volando lejos de la plataforma de lanzamiento. Literalmente solo llegamos para verlo irse con otro aparato de miles de millones de dólares en costo como si nada... y no podíamos perseguirlo porque el dichoso robot se quedó sin combustible. Dexter debía cambiarle las baterías.
¿Cómo rayos hace funcionar esa cosa con baterías?
Militar: ¡Personal de seguridad! ¡El ladrón Casanova se robó el transbordador espacial Atlantis! -se escuchó a posiblemente un soldado avisar a todo el complejo, logrando que varios militares y científicos anduvieran como locos de un lado a otro sin hacer nada realmente.
Hiro: Ahora sí, le llegó la hora -dije ya molesto por tanto atrevimiento por parte del ladrón.
No tenía tiempo que perder. Justo cuando la alarma comenzó a sonar, el caos se desató a nuestro alrededor. Los militares corrían a llevar a cabo protocolos de seguridad, y los científicos parecían completamente sobrepasados por la situación. Mientras algunos trataban de averiguar lo que había sucedido, otros comenzaban a evacuar la zona. Había un ambiente de confusión que urgentemente teníamos que aprovechar para hacer lo que sea antes de que notaran que estábamos aquí y empiecen las preguntas.
Lo cual será poco tiempo considerando que vinimos en un maldito robot gigante de anime.
Hiro: ¡Dexter! ¿Cuánto tiempo tomará cambiar esas baterías?
Dexter: Necesito al menos cinco minutos para realizar el cambio y reiniciar el sistema. ¡No puedo hacerlo mientras están en marcha los protocolos de seguridad! -dijo reclamándome con una llave inglesa en mano.
Wasabi: Es un hecho. Robarse la luna no se. Pero en que va para a la luna, va para allá arriba -dijo mirando el cielo nocturno y el gran astro en el cielo, brillando completamente ajeno a la situación.
Honey Lemon: Ahora sí que se nos escapó
Dexter: El juego aún no ha terminado -dijo luego de poner a reiniciar el sistema- aún podemos atraparlos en la ventana de Lanzamiento.
Vaya, será algo odioso, con tendencia a alardear y prepotente, pero cada vez me estaba convenciendo más de que Dexter aun con todo era bueno tenerlo cerca.
Hiro: ¿Pues qué esperamos?
Wasabi: Antes que nada... ¿Cuál es la ventana de lanzamiento? -pregunto haciendo al menor suspirar en lo que negaba con algo de decepción.
Dexter: Básicamente es calcular el punto donde se debe hacer el lanzamiento -aclaró acomodando sus gafas- la luna viaja a 3 mil kilómetros por hora alrededor de la tierra. Tienes que hacer un cálculo previo de dónde estará si quieres alcanzarla a la hora del lanzamiento
Honey Lemón: Y es en ese periodo en que podemos atraparlos, tanto a Casanova como al odioso de Cerebro -dije sonriendo por la idea.
Dexter: No obstante... -mencionó ya con calculadora en mano haciendo cálculos mientras hacía garabatos- de hacer el lanzamiento ahora mismo... Sería en la cordillera de los Andes en Perú, pero... La temperatura está a menos de 5 grados. El despegue se cancelaría automáticamente por la temperatura baja...
Hiro: ... A menos que haya encontrado cómo resolverlo -dije con seriedad, no me sorprendería nada que ese fuera el caso.
Wasabi: Entonces, ¿quiere decir que tenemos que seguirlos a Perú? -preguntó, aparentemente cansado ya de tanto viajar.
Y no lo culpo, yo estaba igual. Aparte de que el proceso de viajar como tal es molesto y agotador, nunca nos quedamos el tiempo suficiente para conocer la ciudad extranjera de turno en cuestión, solo no era justo.
Dexter: Así parece, pero es más complicado que eso... Si la temperatura en la región andina es un problema, también debemos considerar que un lanzamiento desde un lugar tan remoto sería aún más complicado de ejecutar. Pero si dicen que lo tienen ya todo planeado... -dijo suspirando- ¿Por qué no solo usaron el transbordador en el centro espacial Johnson en Texas si la idea era ir al espacio? es más avanzado y la ventana de lanzamiento era perfecta hasta hace unos segundos... ¿Qué estará planeando ese ladrón?
Hiro: Ya lo averiguaremos enano, ahora necesitamos que nos hagas de uber otra vez.
Dexter: ¿Me viste cara de taxi o de autobús? -pregunto molesto antes de solo hacer un gesto para que subiéramos al robot- ... ni siquiera dejan propina.
Y sin más, a subir al bot otra vez. De paso conmigo admitiendo con facilidad que estaba empezando a perder la paciencia. A diferencia de los robos anteriores donde era claro que era lo que quería hacer Casanova. Ahora mismo no entiendo que quiere hacer con la luna yendo hacia allá con un transbordador, setenta cohetes y un juego para niños de cuatro años... ¿Cuál era el gran plan maestro aquí?
_______________________________________________________________________
(Cordillera de los Andes, Perú, Sudamérica)
Así que esta era la cordillera de los Andes, favor no confundir con los Alpes en Suiza. En lo personal solo había visto fotos de ambos lugares, nunca en toda mi vida había soñado siquiera con la sola idea de tener interés de venir a uno de estos lugares. Y sin embargo, aquí estoy, contemplando la magnificencia de las montañas en el sur del continente Americano... con incomodidad cabe aclarar porqué resulta que debido a la inestabilidad del terreno aterrizar con el robot era una muy mala idea.
Así que no quedó de otra que acercarse a la dichosa ventana de lanzamiento montando en llama. Las cuales no eran para nada cómodas, al menos para mi que no estaba acostumbrado a cabalgar.
Pero para nuestra suerte, fue fácil encontrar la cabina de control desde donde Casanova estaba manejando todo lo referente al lanzamiento. Y justo cuando nos acercamos para espiar fue que vimos por la ventana al infeliz vestido con un traje de astronauta teniendo una conversación con Cerebro. Sabia que era él porque hasta se le notaba el aire de arrogancia.
Casanova (Miguel): No tomó más de un día y ya todo está listo para mi pequeña visita al espacio exterior. Y no tuve que gastar millones de dólares de impuestos de los contribuyentes que la mayoría será robado por políticos lagartos como pasa con la mayoría de proyectos del gobierno como este -dijo como si nada.
Cerebro: Los calentadores están en pleno funcionamiento. La temperatura es óptima, nada impedirá el lanzamiento... deja la bolsa de botanas aquí, lo último que necesitamos es que cometas una idiotez como abrir eso en medio del espacio -dijo sin quitar su vista de los monitores.
Casanova (Miguel): Oh genial, ahora me dirás que se necesita licencia para poder pescar.
Cerebro: De hecho si, hoy en día se necesita un permiso para pescar en lagos y ríos.
Casanova (Miguel): ¡No me jodas! ¡Condenado sistema corrupto que no quiere que un simple contribuyente se alimente siquiera! -dijo haciendo una rabieta antes de solo restar importancia al asunto- como sea, es hora del lanzamiento. Me voy, tú ocúpate de todo lo científico -ordenó antes de retirarse.
Siendo en el mismo momento que el ladrón se fue, solo nos bastó una de las esferas químicas de Honey Lemón para dejar inmovilizado al mocos genio criminal de Cerebro, dejándolo pegado en la pared. Algo sucio pero si le damos la oportunidad de defenderse vete a saber con qué cosas de ¨genio malvado¨ nos sacaba con un discurso innecesariamente largo de por medio.
Cerebro: ¡¿Ustedes?! ¿Cómo se atreven a tener la osadía de atacarme por la espalda? ¡Cobardes! -reclamo en lo que nos habríamos paso a la pequeña sala de controles.
Hiro: Muy bien. Ya sabemos para qué Casanova reclutó a Cerebro. Para programar todo lo referente al lanzamiento -dije mirando al chico que no dejaba de quejarse y de protestar.
Go Go: Y también sabemos dónde está el juguete que compró en la juguetería -dijo mirando el tablero de luces colocado sin cuidado en la mesa junto a varios monitores y aparatos para el control del lanzamiento a distancia.
Dexter: El juguete está conectado a la computadora principal -mencionó antes de empezar a revisar el software de la máquina- ... que curioso, los cohetes robados están llenos de tinta negra y roja... Fueron programados para caer en puntos específicos de la superficie lunar. Cuando la tinta se libere... Está imagen aparecerá en la cara de la luna llena -dijo mostrando dicha imagen en pantalla.
Oh por el amor de... es el maldito logo de Casanova. Todo esto es solo un plan para hacer la campaña de publicidad más extravagante de la historia.
Hiro: ... Su plan es hacer una pintura de sí mismo en la luna y piensa controlar todo el proceso desde el transbordador espacial, tienes que estar bromeando.
Dexter: Opino igual, escuche sobre propaganda hasta la luna. Pero esto es ridículo -dijo con exaspero.
Hiro: Oficialmente es aún más ego maníaco que Krei, y eso es decir mucho -dije en lo que mis amigos estuvieron de acuerdo.
La situación se tornaba cada vez más absurda y molesta, y a pesar de la gravedad del asunto, no podía evitar sentir que estábamos atrapados en una comedia de enredos digna de una película de bajo presupuesto. Pero no tuve mucho tiempo para pensar en eso debido a la computadora que anunció que el lanzamiento se iba a realizar en menos de tres minutos.
Cerebro: Jajaja ja jaja jaja. Nunca podrán detener el lanzamiento. Casanova tendrá éxito y su obra maestra hará un caos en los programas espaciales internacionales jajaja ja jaja jaja -dijo con emoción de la sola idea de lo que aparentemente Casanova le dijo que pasaría.
Y aunque odiara decirlo, tal vez no un caos como espera Cerebro, pero esto si era más que solo un golpe publicitario. Si Casanova ensucia la luna con su logo, se convertiría en un ícono para siempre. Mejor que me rapen y me vuelva un emo estereotipado antes que dejar que eso pase.
¡Mi orgullo ya herido y dañado me impedía dejar que este tipo se saliera con la suya otra vez!
Dexter: Necesito acceder a las funciones de lanzamiento. Si puedo detener el sistema a tiempo... -dijo, pero su voz se apagó de repente.
Cerebro: ¡No se atrevan a tocar nada! -gritó, retorciéndose inútilmente en su prisión química.
Go Go: ¡Déjame en la computadora! -ordenó, mientras se acercaba al panel de control y comenzaba a leer rápido los comandos en la pantalla. -Si puedo redirigir la energía del sistema, tal vez podamos cancelar el lanzamiento.
Wasabi: Necesitamos saber exactamente qué hacer para evitar que el sistema se reactive. ¿Hay algún tipo de código que podamos usar?
Dexter: Normalmente, sí. Cada lanzamiento tiene un código de autorización y un protocolo de apagado. Pero si Casanova ya ha tomado el control, puede que estos códigos sean inútiles. Tendremos que encontrar otra forma.
Cerebro: ¡No tienen idea de lo que están haciendo! -gritó, su voz se tornó más aguda. -¡Casanova es un genio! ¡Él jamás planeó fallar y encima ustedes no saben nada de ciencia espacial! ¡Jajaja ja jaja jaja, jajaja ja jaja jaja!
... Este tipo ya me estaba exasperando.
Hiro: En tal caso, será mejor que empecemos a improvisar. -dije, avanzando hacia la computadora, mientras mis amigos se preparaban para cualquier cosa. Solo para ver algo en la esquina de la habitación que me hizo sonreír con cierto tono malicioso.
Se trataba del medidor de temperatura del lanzamiento, era a partir de este aparato que se controlaba el sistema de enfriamiento y la calefacción de todos los sistemas de los cohetes que Casanova planeaba lanzar al espacio. Y pasa y resulta que estas máquinas tienen una programación de que si la temperatura es menor a siete o cinco grados centígrados, cualquier despegue se cancela automáticamente.
De allí en más, solo fue cosa de que Honey Lemon le arrojará una esfera química de material congelante a la máquina para que se escuchara el tan esperado sonido.
Computadora: Lanzamiento cancelado, temperatura por debajo de los niveles de seguridad, lanzamiento cancelado.
Cerebro: ¡Bwahaha bwa haha haha! -rompió en llanto el cerebrito en lo que casi todos lo vimos con una ceja arqueada a excepción del chaparro pelirrojo.
No me jodas, hasta su lloriqueo es exasperante.
Go Go: Buen trabajo -dijo palmeando el hombro de Honey quien asintió con una sonrisa.
Hiro: Y ahora a capturar a Casanova -dije para que luego todos nos pusiéramos en marcha a la plataforma construida en medio de las montañas donde todos los cohetes estaban preparados para ser usados.
Con el transbordador recién robado de cabo cañaveral al frente liderando toda la caravana de despegue. Siendo ese el momento donde ocurrió algo que me hizo tener un tic en el ojo de la rabia que sentía. Lo cual fue ver como la ventana del transbordador era tirada de una patada y del interior de este se encontraba saliendo Casanova con traje de astronauta hecho a su diseño con todo y lujo de detalle
¿Dónde estaba el otro atuendo que uso hace solo un segundo? ¡En serio que este tipo es detallista!
Casanova (Miguel): Pues ¿Qué cosas? parece que me congelaron, héroes. Pero siempre habrá una futura luna llena. Así como otra oportunidad -dijo antes de solo saltar mientras pulsa un botón.
Para así, solo poder ver con impotencia cómo se escapaba usando un jet pack de todas las cosas... ¡Me lleva la que...! ¡Y encima me lanzo una rosa el hijo de...!
Fred: ... Esa no la vi venir -dijo luego de que todos guardamos silencio un momento para procesar lo que había pasado.
Wasabi: Parece que el pequeño paso pero gran salto de Casanova acabó en fracaso.
Hiro: Y en su próximo tropiezo lo atraparemos -dije dándome ánimos a mi mismo más que todo.
Momento en que recibí una llamada, que sabía muy bien de quien se trataba.
Hiro: ¿Qué pasó Casanova? ¿Te pegamos los pies en la tierra? -pregunté burlón solo para fruncir el ceño al escucharlo reír confiado.
Casanova (Miguel): Si no tienes altas aspiraciones, nunca sabrás lo que puede ser tuyo, Capitán
Hiro: Un día te equivocarás, y te detendremos.
Casanova (Miguel): Di lo que te haga sentir mejor... Hasta el próximo robo... Por cierto, si quieres, podría pintar tu rostro alguna vez ¡usaría el mismo cielo como lienzo y usaría las estrellas para escribir lo que siento por ti, literalmente! -y con eso, termino la llamada.
De paso... no hace falta decir que me encontraba hirviendo de rabia y de vergüenza ¿es que tiene que burlarse de mí de ese modo siempre? ¡ese infeliz...! Siempre jugando, siempre desafiándome. Era como un niño travieso que nunca aprendía la lección.
Era muy molesto... Pero no había nada que hacer.
De allí que tras despedirnos de Dexter, quien aseguró que él se encargaría de que Cerebro recibiera un castigo apropiado por su pequeña travesura de esta ocasión, no nos quedó nada más que hacer aparte de volver con el rabo entre las piernas. Pero, al menos la luna está a salvo, si, la luna, tan hermosa, brillante y que de repente tenia un punto negro salido de la nada.
... ¿Eh?
Fred: ¿Un punto negro? ¿Qué alguno de los cohetes se disparó antes de tiempo?
Wasabi: No, acabo de hacer la cuenta. Está, lo que sea eso, Casanova no lo hizo.
Hiro: ... ¿Qué rayos?
Y fue en ese momento que pasó. De la nada, se produjo una explosión que fácilmente creo que todo el planeta pudo contemplar por igual. Un estallido sin precedentes en la órbita que se originó en nuestro satélite natural. Dejando como resultado que... lo que una vez fue una luna completa ahora era solo una eterna luna creciente ante la ausencia del resto de roca lunar... que ahora mismo circula alrededor del astro como un anillo de rocas y polvo.
¿¡Que carajo fue lo que acaba de pasar?! Que esto pasara fue lo mismo que decirnos que todo lo que hicimos hoy al final no valió para nada. ¡Y lo peor es que se que Casanova no lo hizo porque ese no es su estilo! ¡¿Qué significa esto?! ¡¿Quien lo hizo?!
______________________________________________________________________
(Al día siguiente)
(Café del gato de la suerte, San Fransokyo)
Solo pasó una noche, y ya todos los noticieros del mundo buscan dar explicación de lo sucedido, el hecho de que alrededor del 70% de la luna fue destruido como si nada de un momento a otro, particularmente la NASA está como una gallina sin cabeza. De momento todos culpan a Casanova de lo que pasó por sus acciones previas pero yo sabía que ese no era el caso.
Sentado en una esquina del café mientras tomaba un desayuno tipo empresario y disfrutaba del ambiente cálido en lo que le daba caricias a mi gato, fue que observaba atentamente el aluvión de noticias que inundaban las pantallas de casi toda la ciudad. La caída de la luna, un evento que pondría a toda una civilización a reflexionar. Pero aun así, dicho incidente parecía no afectar en lo más mínimo a mis amigos, o eso parecía al menos... excepto Fred, el ya debe estar por la teoría mil y uno sobre qué pasó exactamente.
Siempre entusiasta, nuestro amigo amante de los cómics estaba a medio plan de convencer a Wasabi de la teoría de que, tal vez, todo esto había sido un accidente cósmico y que incluso podrían buscar un número de la suerte en esta serie de eventos, a lo que nuestro compañero simplemente rodó los ojos con sorna.
Hiro: No es un accidente, Fred. Y lo sabes tan bien como yo -dije terminando un café- y por mucho que me enoje reconocerlo, aunque Casanova puede ser un grandioso idiota, él no hace cosas como esta, lo que lo descarta también.
Honey Lemón: Tienes razón, Hiro. Este tipo puede ser tan ególatra que no le importa el caos que cause... pero no es un tonto. Conocemos su estilo, y esto no es algo que él haría.
Go Go: Según la última información, la NASA ha descartado que haya habido algún tipo de explosión controlada o que se trate de un nuevo programa militar. Lo que pasó no tiene explicación -dijo en lo que todos sencillamente decidimos guardar silencio del asunto de momento.
A excepción de Fred, los demás, pese a que de uno u otro modo todos nos habían dado el título de "genios" de alguna manera, éramos conscientes de que estaba claro que a pesar de ser genios, no siempre significaba entender el arte del caos. En casos como estos, la mente era un refugio para el poder de la lógica, y en este momento estábamos intentando traducir la locura en datos... sin tener mucho éxito al respecto.
Por suerte ese robot de Obake que por alguna razón dejo que viva aquí está comprando suministros porque si no, me sentiría más estresado de lo que ya estoy. Aunque en ese justo momento fue que una escena particular me alegró la mañana solo con pasar tal cual ¿y que fue eso exactamente? Pues ver a la familia Rivera llegar a la cafetería para desayunar.
Pero quien me importaba, era el único hijo del señor Rivera, quien entró corriendo al local y pasó a correr por todo el establecimiento entre risas ¿la razón? Era la montura de una niña pequeña que solo se reía mientras pedía ir más rápido, esa debía ser la hermanita menor de Miguel, la pequeña Coquito.
Miguel: ¡Wow! ¡¡Atención pasajeros, llegamos a nuestro destino! Por favor mantengan sus brazos y cabeza en el interior del vagón en todo momento -dijo dejando de correr para luego dejar a la niña en el suelo- el tren Rivera acaba de llegar, todos los pasajeros por favor bajen y den un besito al tren si disfrutaron del paseo -dijo con una sonrisa para que luego la niña se pusiera de puntillas para darle un beso en la mejilla.
Debía reconocerlo, la energía positiva que emanaba de él era contagiosa y, aunque el mundo exterior seguía lidiando con el caos lunar, dentro del café había un pequeño refugio para pasar el rato de forma tranquila. Yo sonreí al ver cómo Coquito, con su cabello alborotado y una energía desbordante, intentó trepar de nuevo sobre la espalda de su hermano, lista para el próximo viaje.
En un momento como este, tan cargado de incertidumbre, ver a los Rivera disfrutar del simple acto de estar juntos era un recordatorio necesario de que la vida continúa, incluso cuando el universo parecía haberse vuelto loco.
Aunque... justamente ver a Miguel ser así con su hermanita... me trae mucha nostalgia... me hace recordar cuando alguien que no diré su nombre... era así conmigo.
Miguel; Vamos Coquito -dijo tomándola de la mano para llevarla a una mesa- has sido una buena niña desde que llegaste y por eso te ganaste una rebanada de pastel de desayuno.
Coco: Siiii -dijo con emoción infantil en lo que su prima Rosa la ayudaba a sentarse en la silla alta.
Rosa: Esta bien, si comerá pastel debe acompañarlo con un vaso de leche, no queremos que se le quite el antojo de dulce el resto del día -dijo mientras peinaba a la niña.
Momento en que apareció justo quien faltaba de momento, el patriarca de la familia quien se acercaba agitado a la mesa donde estaban los más jóvenes en compañía de un perro que sostenía con correa... ¿de dónde salió esa cosa? ¡Es el perro más feo que he visto en mi vida! ¿Por qué no tiene pelo?
No Hiro, esa debe ser la mascota de Coco o tal vez incluso de Miguel, lo que sea que pienses del can, guárdatelo para ti.
Héctor: Les dije.... Que me esperarán... Hace 3 señales de.... Alto... -dijo en lo que tomaba asiento y recuperaba el aliento- necesito hacer ejercicio
Coco: Es que como dice mami, ya estás fregado, papi -dijo con un tono inocente que hizo fruncir el ceño a su padre.
Héctor: Imelda... -dijo gruñendo por lo bajo antes de sonreír- entonces ¿Qué quiere la princesa de la casa para golosear?
Coco: ¡Pastel! -declaró emocionada.
Héctor: Miguel, la estás malcriando.... -exclamó con decepción antes de mostrar una expresión divertida- eso diría si fuera tu madre, pero como soy yo ¡vamos a comer pastel!
Ambos: ¡Yei, pastel! ¡Viva papá divertido! -dijeron sus hijos mientras que Rosa solo negó con diversión por la actitud de sus dos primos.
Ellos... eran una linda familia en verdad, me daba nostalgia verlos convivir de ese modo, una linda y gran familia feliz... ¿Por qué fui tan estúpido antes? Pensando que tenía la vida resuelta con apuestas ilegales, pensando que tía Cass y Tada... Tadashi siempre estaría allí para respaldarme... no importa que tan listo eres, cuando eres un mocoso, siempre cometerás errores de un mocoso.
Je, ahora estoy triste... ah ¿Por qué siento unas manitas más pequeñas que las mías tomando mi mano?
Coco: Por favor no llores, no está bien estar triste ¿quieres pastel? -dijo para mi sorpresa.
Miguel: ¡Coco! -exclamó en lo que corría de su mesa hacia donde estaba yo para tomar a su hermanita en brazos- Chinito, hola, yo... ¿estás bien? te veo... triste.
Como siempre este chico era demasiado dulce y tierno para ser real.
Hiro: No, no estoy triste -dije negando débilmente- solo estaba pensando en algunas cosas... Pero un pedazo de pastel siempre ayuda, ¿verdad? -preguntó sonriendo a la niña que asintió seriamente.
O lo más serio que podía ser una pequeña de cinco años.
Coco: Sí, el pastel siempre hace que todo se sienta mejor. ¡Es mágico! -dijo apretando mi mano con fuerza, como si me estuviera otorgando un poder especial.
Miguel: Ven aquí pequeña escurridiza -dijo cargando a su hermanita sobre su hombro- aún no se conocían ¿no? Hiro, mi chinito lindo, esta de aquí es posiblemente la persona que más quiero en todo el mundo, mi hermanita Coco -mencionó pegando su mejilla con la de su hermana como muestra de cariño.
Maldición, eso es muy lindo de ver.
Hiro: Encantado, Coco -dije sonriendo mientras observaba la singular conexión entre los hermanos. La calidez de su vínculo me hizo sentir un leve cosquilleo en el corazón ¿Será por ternura o nostalgia? No lo sé.
Coco: ¡Hola, Hiro! -dijo con una sonrisa que iluminaba su rostro, su energía era contagiosa, incluso en medio de la sensación de incertidumbre que nos rodeaba- ¿Te gusta el pastel? ¡A mí me encanta!
Hiro: Me gusta mucho, especialmente el de chocolate. ¿Y a ti? -pregunté, comenzando a sentirme más ligero..
Coco: ¡El de fresas! -respondió con entusiasmo, mientras Miguel la dejaba bajar al suelo para que pudiera jugar un poco.
El café estaba lleno de ruidos, conversaciones y risas provenientes de distintas mesas, pero de alguna manera la familia Rivera me envolvió en su burbuja de felicidad. A medida que Miguel se aseguraba de que su hermana estuviera ocupada, se acercó a mí, y tomándome de la mano sin preguntar para llevarme a su mesa con su familia.
Miguel: Hey, Hiro... ¿estás seguro de que todo está bien? -Sus ojos reflejaban preocupación, una mirada que solo un amigo genuinamente se atrevería a compartir. No es justo ¿porque es tan perfecto el infeliz? No... solo es mi calentura de adolescente hablando ¡pero igual!
Hiro: Estoy bien, solo... pasaron muchas cosas, ya sabes. La luna... la gente... Es difícil no pensar en lo que sucedió anoche -dije, sin querer preocuparlo más de la cuenta.
Miguel: Lo entiendo. Es difícil. Pero enfócate en lo que puedes controlar, ¿no? Cómo disfrutar de este momento. -dijo, sonriendo, como si supiera exactamente cómo calmarme- por cierto, hice esto para ti, espero que te guste -dijo dándome una hoja.
La cual desdoble para que luego se me escapara una sonrisa de los labios al ver que se trataba de otro dibujo de mi mismo hecho con carboncillo, en esta ocasión, en vez de un auto retrato, se trataba de un dibujo de mi viendo a la luna... era hermoso, y Miguel tenía talento para dibujar. Recibir un regalo suyo siempre me ponía de buen humor.
Este era un lindo recuerdo para recordar cómo solía ser la luna antes.
Hiro: ¡Wow, Miguel! Este es... increíble -dije, admirando el dibujo. La luna se veía majestuosamente deslumbrante. Miguel había capturado la esencia de la belleza lunar, incluso en medio del caos. Su talento era evidente, y el esfuerzo que había puesto en hacerme ese regalo me calentó el corazón.
Miguel: Gracias. Lo hice ayer para ti. Sabía que necesitabas algo que te recordará que mientras más oscuro se ponga el cielo, siempre podemos encontrar algo hermoso -respondió con una sonrisa confiada.
Antes de que pudiera responderle, Coquito apareció de repente con un trozo de pastel en la mano, con la cara llena de emoción.
Coco: ¡Hiro! ¡Pastel! ¡Mágico! -gritó, levantando el pedazo como si fuera el tesoro más valioso del universo. Todo el mundo en el café se giró a mirarla, y no pude evitar reírme.
Hiro: ¡Gracias, pequeña! Eres un gran distribuidora de felicidad -dije, tomando el trozo de pastel que me ofrecía. La mezcla de chocolate y un toque de fresas parecía perfecta ¿y cómo no? Mi tía lo hizo. Mientras la niña saltaba de felicidad, Miguel puso su mano en mi hombro.
Miguel: A veces solo necesitamos ese pequeño empujón para levantarnos, ¿no crees? Así es cómo funciona la vida. Un día puede ser oscuro, pero luego llega el pastel... y las risas -dijo, como si estuviera compartiendo un gran secreto con el mundo.
¿Dónde estuvo este tipo toda mi vida?
Miguel: Ahora ven a desayunar con mi familia, ayer tuve un día muy loco, no vas a creer lo que pasó -dijo en lo que note a alguien más sentado en la mesa.
Hiro: ¿Cuándo llegaste, Marco? ¿Y qué te pasó en la cara? -pregunte extrañado al ver al de la Cruz hecho un desastre con restos de heridas de quemadura en toda la cara.
Marco: En resumen, no lleves explosivos reales a ninguna audición para una película de magos como efectos especiales. De paso, estoy vetado de ese estudio hasta nuevo aviso -dijo encogido de hombros- de allí que no van a creer todo lo que me sucedió a mi ayer.
Héctor: Dudo que se compare conmigo, yo la pase grandioso ayer, esperen a que escuchen... -dijo divertido.
Pues parece que cada uno tuvo un buen día de descanso por su cuenta ayer, eso es bueno. Aunque siento que falta alguien...
Rosa: Muy bien muchachos ¿Cómo vamos a decidir quien cuenta su historia primero?
Y fue en ese momento que la puerta de la cafetería literalmente se cayó de una patada, siendo el responsable un Leo... Perdón, Leonarda, que estaba vestida como travesti con vestido, labial y hasta pechos falsos. Pero parecía recién salido de una maratón o de ring de gallos de pelea, siendo uno de los gallos.
(Para hacer una idea de como se ve)
Una vez nos vio solo nos dio una sonrisa, y luego se desmayó.
Todos: ... Leo va primero -dijimos respecto a que cuente primero su historia.
Y así empezamos otro día, locura constante garantizada, pero no me quejo. Era una buena distracción, ya me preocupare de Casanova o de lo que le paso a la luna después, o incluso mi situación con Baymax o con el robot Obake o como tía Cass le puso, Robbie. un problema a la vez, Hiro.
Notes:
Y ese seria el capitulo de esta vez. Como siempre pueden votar, comentar, lo que gusten.
¿Y que les pareció?
Punto para quien sepa de donde lo de la explosión de la luna, jaja.
Por cierto, para el próximo capitulo ya será la búsqueda de otro talismán. Y para el siguiente crossover será una franquicia que no conozco a nadie que no la recuerda con cariño o no este con emoción por el nuevo live action.
En fin, de momento, nos vemos.
Chapter 17: Capitulo 15: La liebre y la tortuga
Notes:
(See the end of the chapter for notes.)
Chapter Text
(General Pov)
(Casa de Crazy Land, San Fransokyo, USA)
Ya habían pasado tres meses desde que habían llegado a San Fransokyo y el trío de jóvenes por primera vez en varios días se estaban dando el lujo de descansar los tres juntos en la piscina de su casa. De las ventajas de prácticamente vivir sin supervisión alguna de adultos más que sondeos de guardias o robots que vigilan la propiedad.
Y vaya que tenían motivos para reposar, luego de una carrera de triciclos por diversión, llevar a Leo a bañarse contra su voluntad luego de pasar días sin salir de su habitación por un proyecto de Stopmotion en una tina móvil mientras iban a recoger pizza para el desayuno en la tienda de la esquina, y claro, huir de una jauría de perros callejeros... y un oso de camino de vuelta. Y todo eso fue solo en la mañana del mismo día.
Leo: ... Sigo sin entender porque acabe bañándome a mitad de la calle.
Marco: ¡Porque el descuento era para tres personas o más y terminaba a las nueve! ¡Y tú tardas una eternidad bañándote!
Miguel: Aún no me creo que ya hayan pasado tres meses desde que empezamos todo esto de ser una banda, o al menos así nos ven la mayoría por fuera -dijo divertido- tres gloriosos meses de diversión... y lo mejor.
Leo, Marco y Miguel: ¡Sin la bota! -dijeron al pensar en la dicha que era vivir sin temer a que a la mínima de desobediencia ya venía un botazo por parte de la matriarca Rivera.
Marco: ¿Recuerdas cuando este sorompo te llevó a conocerla cuando nos invitó a su casa por primera vez, Leo? -pregunto señalando con enojo a Miguel- porque yo si me acuerdo... Aún sigo traumado -dijo teniendo escalofríos.
—
(Flashback)
Marco: Buen día doña Imelda cómo está usted? -pregunto entrando como si nada a la casa, haciendo que la mujer le viera como si tuviera algo en el rostro mientras secaba el fregadero de la cocina- ¿se encuentra Miguel?
Imelda: ¿Miguel? Si, mi niño se está bañando, ponte cómodo y espéralo, cariño -señaló una silla en la que el chico se sentó.
Marco: Usted manda, señora, vale.
Imelda: Tu eres nuevo ¿verdad? Porque no recuerdo haberte visto antes.
Marco: En efecto, soy el nuevo amigo de su hijo.
Imelda: Okey, entiendo. Pero mira nada más, debes estar muerto de sed mi hijo, toma, bebe este juguito -mencionó mientras le daba un vaso de refresco al joven.
Marco: Está bien mi doña, gracias -dijo antes de tomar todo de un trago- oh... wao... -fue lo último que dijo antes de caer inconsciente.
¿La razón? Nada como una buena dosis de barbitúricos en la bebida por parte de mamá Imelda para mandar a dormir a cualquiera.
(15 minutos después)
Para cuando Marco volvió a abrir los ojos, se encontró con un escenario de lo más traumante posible. A él mismo sin camisa amarrado a una silla de manos y pies con la madre de su amigo en frente suyo abriendo una caja de herramientas con una mirada para nada amistosa.
Imelda: Yo solo quiero saber mi niño ¿Cuál es tu nombre? -preguntó con un tono que no daba espacio a bromas de ningún tipo.
Marco: Mi nombre es Marco -dijo intimidado.
Imelda: Completo -ordenó con la bota en mano.
Marco: Marco de la Cruz Sorbet.
Imelda: Con que de la Cruz -dijo con cierto tono irónico- ¿y tu mamá y tu papá? ¿Cómo se llaman? -pregunto amenazando con un rodillo para el pan esta vez.
Marco: Mi papá se llama Santiago de la Cruz y mi mamá se llama Ginebra Sorbet... Ella es extranjera -aclaro al final antes de desesperarse- ¡Y ya que estamos porque no me saca sangre también!
A lo cual la mujer mayor solo mostró con diversión un vaso con un líquido rojo dentro.
Imelda: Oh tú tranquilo. Que la sangre te la saque cuando estabas durmiendo -reveló para incredulidad del joven- lo único que me falta es hacerte una prueba de ADN -dijo sacando una especie de hisopo de gran tamaño.
Marco: ¡Señora! ¡Eso no me cabe por la nariz ni en sueños!
Imelda: Tranquilo, que es anal la prueba -dijo en lo que lubricaba el hisopo.
A lo cual el chico solo respiro hondo e hizo lo que cualquier hombre macho con pelo en pecho habría hecho en esa situación... grito y rogó para que la mujer se detuviera mientras gritaba lo más que podía su voz el nombre de su amigo que salió luego de vestirse lo más rápido que pudo al escuchar tanto alboroto.
Miguel: No me jodas ¡Mami! ¿Otra vez? ¡Ya debes dejar de hacerle eso a mis amigos, como si tuviera tantos para empezar! -exclamó en lo que ayudaba a su amigo de sorprendente parecido físico a soltarse.
Imelda: No tranquilo mi niño, llévatelo, que yo ya lo conozco. Es el hijo de Ginebra y de Santiago -declaró para luego solo seguir arreglando la cocina como si nada.
Ignorando por completo como su hijo se llevaba a un alterado Marco de allí.
(Fin del flashback)
—
Marco: Yo solo me pregunto... ¡¿Porque con Leo no lo hizo también?! -se preguntó molesto solo para luego notar al mencionado estremecerse y a Miguel riendo incómodo.
Miguel: Pues... Sí lo hizo, solo que él no se despertó antes de que ella terminará a diferencia de ti -dijo logrando que sus dos amigos se estremecieran.
Marco, aún molesto por los recuerdos, resopló y se cruzó de brazos mientras se zambullía en el agua, causando una onda que salpicó a Leo y Miguel. Esto solo provocó una risa general. Nada como una buena marconeada para aligerar el ambiente.
Miguel: Y yo les sigo diciendo que comparado conmigo ustedes la tuvieron fácil, recuerden que a diferencia de ustedes, yo vivía bajo el mismo techo. Por ejemplo, esto de levantarse tarde por ser día libre y desayunar pizza en casa pasaría el día nunca del año jamás... aun recuerdo lo que pasó el día que me descubrió comiendo habichuelas luego de decirle que no me gustaban -declaró con una mirada traumada.
—
(Flashback)
Mesera: Aquí esta joven, un pescado frito justo como me lo pidió.
Miguel: Con el hambre que hace, muchas gracias -dijo viendo como colocaban al pez en frente suyo.
Mesera: Y su arrocito como usted me lo pidió, con habichuelas -dijo a lo cual el chico le agradeció- que lo disfrute, joven.
Siendo eso justamente lo que el chico planeaba hacer, justo ese día tenía antojo de pescado y por eso decidió comer afuera debido a que en su casa el menú de su madre fue un caldo levanta muertos que, claro que estaba sabroso, pero esa fue la cena del dia anterior y quería algo diferente para el almuerzo.
Y no es que no le gustaba como su madre hace los frijoles, pero es que en ese local hacían unos frijoles charros para morirse y por eso le dijo a su mama que no tenía antojo de frijoles ese dia... porque si sabía que comía frijoles en otro lugar era hombre muerto y las habichuelas de ese lugar era de, o solo comes eso hoy, o pierdes el sabor de uno u otro modo al mezclarlo. Así de selecto era.
Pero al final terminó viendo su vida pasar ante sus ojos luego del primer bocado que le supo a gloria... antes de caer al averno.
Mesera: ¿Y esa señora que está en la ventana?
Si, en efecto, era su madre. Quien al verlo comer los frijoles del restaurante solo le hizo un gesto de ¨vas a ver cuando llegues a casa¨, para luego irse corriendo. ¿Cuál fue la reacción de su hijo? Dejar todo e irse luego de dejar algo de dinero en la mesa para tratar inútilmente de apaciguar la ira de su mamá.
Solo para al llegar encontrarse a la mujer esperándolo en la sala con varios platos servidos sobre la mesa.
Imelda: Entonces Miguelito, luego de rechazar los frijoles de tu madre en el desayuno que hice con tanto amor y cariño, voy y te encuentro siendo un fiel fanático de ellos en otro lado... supongo que solo no tenias ganas en el momento -dijo fingiendo desinterés- así que, como soy tan buena madre, te hice un menú variado: Frijoles blancos, frijoles negros, frijoles rojos, arroz con frijoles, fideos con frijoles, pure de frijoles, pan con frijoles, y para que te bajes todo eso ¡un jugo de frijoles! -dijo sonriendo.
En lo que su hijo ya estaba releyendo y hasta firmando el testamento que había escrito en el camino. Y más por la mirada que le dio su madre al final, digna de espantar al mismísimo diablo con el que se peleó el abuelo en el cerro... y al abuelo también.
Imelda: Y como tu vida necesita un poco de dulce, postre de frijoles -termino con una sonrisa antes de tomar su bota en lo que casi se le prendían los ojos en llamas, literalmente- ¡Y TE COMES, HASTA EL ULTIMO, GRANITO! -amenazo antes de solo irse sin más.
(Fin del flashback)
—
Miguel: ... Después de eso no quise ni ver un frijol en tres meses -dijo en lo que su perro solo lo vio con cara de ¨dramático¨.
Aunque viendo el lado bueno, el mayor de los hijos Rivera tuvo a su madre lejos de su habitación por una semana. Ella sabía lo que le hacen los frijoles a su hijo y comer tantos solo lo empeoro... con decir que prácticamente su cuarto se volvió un campo de pruebas químicas luego de eso.
Si, a veces los castigos no le salían como querían a la doña, pero una cosa era un hecho. Siempre terminaba igual, con botazo asegurado para cualquiera de los tres, o los tres juntos si tenía ganas la mujer.
Leo: Conforme más lo pienso, más me alegro de que nos arrastraras a todo esto de la banda y todo lo que hay detrás, Miguel -dijo llorando de alivio porque los recuerdos ahora eran solo eso- lo prefiero un poco más que a Doña Imelda.
Miguel: Pues si casi no lo vemos cuando no es trabajo, claro que lo prefieres más -dijo divertido- aunque ahora que lo pienso, me pregunto a dónde se habrá metido mi viejo y Rosita, anoche dijeron que tenían algo importante que decir, solo dijeron algo de que ¨La tortuga le ganó a la liebre en la carrera, pero por confiada¨.
Haciendo que sus dos amigos le vieran y parpadearon un par de veces antes de terminar de entender.
Ambos: ¡¿Ya apareció otro talismán?! -preguntaron sorprendidos y emocionados.
Miguel: Así es, justo estoy esperando a que me digan donde está el talismán para ir por él -dijo acomodándose en su silla- en lo que que ustedes me hacen un favor manteniendo a Hiro lejos.
Marco: Tu te vas a otra aventura mientras que nosotros distraemos a tu novio no oficial que no sabe que eres el criminal que lo ha estado molestando desde hace tres meses. Si, seguro ¿Por qué no? -hablo de forma sarcástica y burlona para molestarme mientras salía del agua.
A lo cual hice lo más sensato y lo arroje nuevamente a la piscina. Si me buscan, me encuentran.
A la vez que como si los hubiéramos invocado, justo en ese momento mi prima y mi padre nos honraron con su presencia. Rosa como siempre con ese aire profesional muy en discordancia con su edad pero que se entiende porque es así. Y mi jefe... está hecho una desgracia ¿que no durmió anoche? Se ve como si hubiera pasado la noche en un bar o un club privado... de nuevo.
Leo: ¿Queremos saber que paso? -pregunto también viendo a mi papá quien le dio una mirada cansada.
Héctor: Conseguí traer con nosotros a un viejo amigo mío, un consejero secreto experto en música que tiene el don de predecir éxitos. Cuya sola identidad es alto secreto corporativo, y todo lo que tuve que hacer fue ganar luego de jugar la ruleta rusa con algunos viejos conocidos de mi pasado del mundo musical -dijo como si nada.
Marco: ¿Y ganó, Don Héctor? -pregunto haciendo que mi viejo le diera una mirada de ¨te dejaron caer de chiquito ¿verdad?¨.
Héctor: No sabes lo que es la ruleta rusa ¿verdad, pendejo? -pregunto con fastidio.
Rosa: Yo solo espero que esto se te estrelle en la cara tío, pero agradezco que consiguieras al mono jugando ruleta rusa en vez de gastar un millón de dólares comprándolo.
... Un momento.
Miguel, Marco y Leo: ¡¿Su dichoso consultor que predice éxitos es un mono?!
Héctor: ... Es un chimpancé, aclaró -dijo para incredulidad de los chicos- no me cuestionen, se lo que hago. A pesar de ser una fachada, hacer de ustedes tres una banda exitosa es importante para mi, y todavía nos queda mucho trabajo. Y el chimpancé me ayudará a diseñar canciones exitosas.
¿En qué momento la falta de cordura se volvió algo tan normal en ese hombre? fue lo que los tres chicos y la sobrina del hombre se preguntaban, aunque esta última solo se resignó en suspirar porque aunque supera a su tío en muchas, en serio, muchas cosas. La música no era una de ellas.
Miguel: Vamos mi viejo, no estamos tan mal, trabajamos muy duro y estamos cerca del estrellato.
Héctor: No están tan cerca -lo cortó de inmediato.
Leo: ¿Ya casi llegamos? -pregunto solo para que tanto tío como sobrina negaran con la cabeza.
Marco: ¿A medio camino?
Héctor: ¡Están casi a medio camino! Y para asegurarnos de que lleguemos con éxito a la mitad del camino, que por cierto, muchas bandas no pasan de ese punto, espero que me dejen a mi manejar el asunto -dijo echándose agua de la piscina en la cara para despertarse- ahora, hablemos de lo que nos concierne. Primero, se que es una situación extraña, pero empezamos esto y ahora hay que seguirle hasta el final.
Rosa: Estoy de acuerdo, verán, todo empezó cuando miraba el canal de animal planet anoche luego de acostar a Coco, un segmento especial de especies en peligro de extinción ¿Qué quieren que les diga? Me gusta ver animales, son lindos -dijo encogida de hombros- pero en fin, el punto es que estaba viendo la televisión cuando vi algo que me llamó la atención... una tortuga.
Miguel: ... ¿Una tortuga? -pregunto confundido.
Rosa: Si, una tortuga de los galápagos, de las más grandes y longevas del mundo. Justo para esta ocasión hablamos de Aesop, una tortuga de más de cien años... con una piedra muy especial atorada en su caparazón -dijo mostrando una foto, que era del caparazón de la tortuga. Que en efecto tenía una piedra atorada, el talismán del conejo.
¡Que viva la televisión! y pensar que hay quienes dicen que es solo una caja que pudre el cerebro.
Miguel: ¿A dónde debo ir? -pregunto ya teniendo una idea clara de cuál sería su misión exactamente.
Rosa: Si, sobre eso. No sabemos -dijo haciendo que más de una ceja fuera arqueada- yo ya había movido algunos hilos para lograr que transfirieran a la tortuga de su hogar en la reserva marina de galápagos al acuario de San Fransokyo, cuando... algo pasó.
Héctor: Y ese algo fue que no sabemos cómo, pero de algún modo la tortuga abandonó el barco en el que estaba siendo transportada para acá. Y el único destino a donde podría estar es la masa de tierra más cerca de donde estaba el barco en ese momento. Hawaii.
Rosa: Es obvio que la tortuga tiene acceso al poder del talismán, sea cual sea. Y ahora está perdida en una de las 137 islas que conforman todo el archipiélago de Hawaii. Y ya que estas de voluntarioso, no tendrás problema en ir de isla en isla buscando al animal ¿verdad primito? -pregunto amablemente a Miguel.
A lo cual su primo miró a sus amigos, su mente trabajando a mil por hora para al final llegar a una conclusión... que se lo lleva la chingada.
La idea de ir a buscar a una tortuga de más de cien años que supuestamente tenía un talismán con un gran poder era una mezcla perfecta de locura y emoción. Era justo el tipo de aventura que estaba empezando a ver como algo típico, pero... ni modo, hasta allí llegó su mañana de tiempo de calidad con sus amigos.
Miguel: Bueno, suena como una misión importante. Pero ¿a dónde exactamente voy a buscar? ¿Y cómo es que planean hallar a Aesop entre 137 islas?
Rosa: Eso es lo que estamos intentando averiguar. Las primeras islas a las que estuvo destinado el barco para reabastecerse antes de seguir rumbo hasta aquí son Kauai, Oahu y Maui. Así que deberías empezar por allí.
Héctor: Reza porque esté en una de las ocho islas pobladas, porque si no, habrá que buscar en todas las demás -dijo tenso- y recuerda que no podemos darnos el lujo de perder tiempo. Aesop tiene que ser recuperada antes de que alguien más se entere del talismán, Rosa -dijo a la vez que su sobrina le entregaba un artefacto al joven.
El cual tenía forma de disco, de color blanco con un botón en la parte superior, además de una pantalla circular de color verde y provista de una cuadrícula. El botón al ser accionado mostro una onda constante junto a tres puntos amarillos que si el chico suponía bien y la cruz del centro era su persona, dichos puntos los tenia en frente, mientras que un cuarto punto amarillo lo tenia encima.
Rosa: Para resumir, se trata de un radar de talismanes -dijo mostrando los tres talismanes que ya teníamos en nuestro poder en su mano a la vez que señalaba el talismán del buey que tenía como hebilla del cinturón- hay que arreglar algunos desperfectos, pero para resumir, los talismanes emiten un tipo único de energía que logre calibrar, si hay un talismán lo bastante cerca, el radar lo detectara.
Miguel: ... Administradora, estratega, hacker, violinista, experta en finanzas y mercadeo además de leyes, y encima inventora ¿algún otro talento que tengas escondido, primita? -pregunto divertido.
Rosa sonrió con orgullo ante el cumplido de su primo, cruzando los brazos con una actitud de satisfacción.
Rosa: Bueno, supongo que hay un par más. Pero eso es suficiente para el momento. Necesitamos que te concentres en esta misión, Miguel. La tortuga Aesop es más que una simple criatura; su talismán puede contener un poder que podría cambiar el rumbo de muchas cosas. Y no podemos permitir que caiga en malas manos.
Miguel asintió con determinación, sintiendo el peso de la responsabilidad en sus hombros. A su alrededor, Marco y Leo compartieron una mirada, ambos sintiéndose un poco impotentes en la situación pero listos para apoyar a su amigo.
Miguel: Solo una duda ¿Qué hacemos con Hiro? Esta misión podría llevarme más de un día y él podría sospechar mi ausencia prolongada.
Rosa: Tu tranquilo, de eso se ocupará Leo -dijo señalando a mi amigo que solo sonrió con entusiasmo- mientras que Marco nos ayudara a mi tío y a mi con que el nuevo socio chimpancé de mi tío se sienta cómodo en su nueva casa.
Marco: ¿Ah? ¿Y yo porque?
Héctor: ¿No es obvio? Se sentirá a gusto contigo, entre primates se entienden -dijo burlón.
Si, una mañana normal no terminaba de serla hasta darse entre ellos un poco de bullying matutino. Regla básica entre amigos, sin Bullying, no hay amistad. De allí en más, cada quien acudió a su rol designado, tampoco es que hubiera mucha opción pero hey, las risas no faltarán, eso es seguro... Más o menos.
_______________________________________________________________________
(Un par de horas después)
(Instituto de arte de San Fransokyo)
(Hiro Pov)
Hiro: ... ¿Qué es este lugar, Leo? -pregunto al ver a donde lo habían llevado.
Su mañana había empezado de lo más normal en su opinión, con Mochi durmiendo encima de mi usándome de colchón, si, a mi gato le gustaba hacer eso.
De allí pensaba tomar un desayuno ligero, vigilar como loco obsesionado a Robbie porque aun no confió en ese robot a pesar de que ya ha pasado como mes y medio desde que está en mi casa y no ha hecho nada sospechoso... solo no confío en ese robot.
Y luego pensaba ir a trabajar para luego tener una tranquila tarde con clases en la universidad. O ese era mi plan antes de que Leo de todas las personas llegara y sin preguntar me arrastrara a lo que parecía ser una bodega abandonada del Instituto de arte de San Fransokyo. Y yo tenía muchas preguntas al respecto.
Leo: A la universidad le sobraba un edificio para usarse con fines académicos, en este caso, un club escolar en desarrollo, y me lo dieron a mi para desarrollar mi proyecto para entrar a la IASF en el próximo festival de arte luego de insistir por más de un mes -me dijo motivado mientras se ponía a barrer- solo necesita algo de limpieza, además de reparar los huecos en las paredes y techo... ¡pero estoy seguro de que este se volverá un gran estudio con el suficiente esfuerzo!
Hiro: Eso solo me deja muchas preguntas. ¿Estudio de qué? ¿el instituto de arte acepta estudiantes con un festival? ¡¿Y por qué hace tanto calor?!
Leo: Hace calor porque no hay aire acondicionado, la universidad puede que me de uno cuando me haga un nombre en la institución. Y si, el tecnológico no es el único que acepta estudiantes con una gran exposición, ¿sabes? -dijo divertido mientras recogía basura y la colocaba en un contenedor.
Hiro: ... No creas que no note que no respondiste mi primera pregunta ¿de qué es el estudio? ¿exactamente qué planeas? -pregunte en lo que el de cabello castaño solo sonrió apenado antes de sobarse el cuello con incomodidad.
Leo: ... Anime, o en sí películas animadas, será un estudio de animación de todo tipo. Desde lápiz y papel a Stop motion. Quiero hacer películas de todo tipo y este es el primer paso -dijo con una sonrisa motivada.
¿Animación? La verdad, nunca había pensado en Leo como alguien que quisiera hacer algo en el mundo del arte aparte de lo que ya hace en Crazy Land como banda, especialmente algo tan ambicioso como crear un estudio de animación. Era un chico apasionado por muchas cosas, pero esto era distinto. Recuerdo que Miguel dijo que ese era su sueño, pero es la primera vez que lo veo tocar el tema tan apasionadamente.
Hiro: ... Un estudio de animación.
Leo: Leo: Sí, ¡exacto! -dijo con emoción, sus ojos brillando con cada palabra. - He estado trabajando en proyectos pequeños que no han pasado de bocetos y bosquejos, pero siempre he soñado con tener mi propio estudio. Este lugar podría ser perfecto. Podríamos hacer cortos, series, lo que sea que se nos ocurra, ¡y todo comenzaría aquí!
Hiro: ... Eso suena increíble, Leo, pero... -me rasqué la nuca, tratando de procesar la información- ¿realmente crees que puedes hacerlo solo? Aparte de que este lugar no parece tan prometedor ahora mismo.
Leo: No estoy solo. Tengo a mis amigos, solo que ellos están ocupados por cosas de la empresa que Rosa y Don Héctor les pusieron a hacer... y también estás tú, claro. -dijo sonriendo con esa chispa de determinación en sus ojos que me hizo sentir cohibido.
Hiro: ¡Espera! ¿Yo? ¿Qué tiene que ver esto conmigo? Mira, si quieres hablo con mi amigo Fred y... -me sorprendí, imaginando que quería que fuera parte de un proyecto tan ambicioso, de allí que buscaba zafarme, sin poder lograrlo en lo absoluto.
Leo: ¡No quiero que nadie que no conozco vea mi trabajo! -dijo nervioso- y sobre que tú me ayudes... pues de plano está el hecho de que Rosa dijo que como nuestro asistente, y con los demás ocupados, debes ayudarme en todo lo posible -dijo en lo que movía algunas cajas- tan solo tengo mes y medio antes del festival y tengo que empezar con los Storyboards desde cero. Necesito toda la ayuda posible.
¿Storyboards desde cero? me quedé paralizado, intentando procesar lo que Leo estaba diciendo. La idea de ayudarlo con un proyecto tan grande era abrumadora. No se en que pensaba, pero yo no soy un experto en animación. Mis habilidades se limitan a arreglar robots, a ser un inventor, no a crear historias o dibujar. Solo la tarea de la profesora Granville de escribir una historia fue una tortura para mi.
Hiro: ¿Quieres que sea tu asistente? -me quedé boquiabierto. La idea de ser "asistente" en un proyecto tan grande era abrumadora, especialmente porque nunca había estado involucrado en algo relacionado con la animación.
Hiro: Está bien, Leo, pero... -dije, dudando un poco mientras miraba el desorden que nos rodeaba- no tengo experiencia en esto. ¿Qué se supone que debo hacer?
Leo: No necesitas ser un experto. -respondió, moviendo una caja con más entusiasmo del que podría reunir en ese momento- solo quiero que me ayudes a organizar mis ideas. Podemos usar este espacio como nuestro laboratorio de creatividad. Quiero que me des tu opinión y me ayudes a plasmar mis ideas en papel. ¡Nos volveremos un gran equipo junto con Miguel y Marco cuando tengan tiempo de venir!
Hiro: Un equipo, huh... -susurré mientras miraba hacia el área polvorienta y desordenada. Imaginé cómo podría transformarse en un lugar vibrante y lleno de vida. Quizás no sería tan terrible- ... a todo esto ¿Cómo nació este amor tuyo por la animación? ¿exactamente qué quieres hacer? -pregunte solo para que él soltara una caja de golpe- ¿está todo bien?
Pero en vez de recibir respuesta, él parecía muy incómodo. Pero tras pensarlo unos momentos es que se decidió, respiro hondo y me dio lo que al parecer era una lista de ideas. Que en realidad se trataban de títulos de posibles proyectos: La leyenda de la nahuala, la leyenda de la llorona, las leyendas de las momias de guanajuato, la leyenda del chupacabras, la leyenda del charro negro, la leyenda de los chaneques...
Hiro: Veo que usas mucho la palabra ¨leyenda¨ -dije mirando algunos bocetos y artes conceptuales... este dibujo era bueno.
Leo: No ¿en serio? No me di cuenta -dijo tomando de nuevo la libreta en lo que soltaba un suspiro- cuando era pequeño... encontré un diario desgastado en el ático de mi casa, hablaba de las aventuras de un antepasado mío, de hecho me pusieron mi nombre en su honor, creo, Leo San Juan -dijo con algo de pena- en ese libro... mi antepasado escribió sus aventuras, todas esas cosas de leyenda.. él juraba que las vio, en la vida real, y hasta peleo con ellas.
Hiro: ¿En serio? Eso suena increíble, Leo. -dije, sintiendo un creciente interés en su historia. Nunca antes había escuchado sobre su antepasado y me preguntaba cómo era posible que una leyenda pudiera estar tan viva en su familia.
Leo: Sí, -asintió, un brillo en sus ojos- me obsesioné con esas historias. Desde pequeño, las leía una y otra vez. La forma en que mi antepasado describe cada criatura y cada aventura parecía tan real para mí. A veces, incluso me imaginaba como él, enfrentando a esos seres legendarios. Quería dar vida a esas historias. Después de todo, ¿qué mejor forma de honrar su memoria que contar sus relatos a través de la animación? ¡Con la animación le das vida a las cosas! ¡a los personajes, al viento, al paisaje, a las máquinas, criaturas, a todo!
Vaya... esto iba desde bastante atrás según veo.
Hiro: Eso tiene mucho sentido. Pero... hacer una película sobre ello no debe ser fácil, ¿verdad? -pregunté, pensando en el trabajo que implicaría.
Leo: No, no lo es. Especialmente porque quiero hacerlo bien. Quiero que la gente pueda sentir lo que yo sentí al leerlas. Quiero que vivan esas leyendas, que sientan el miedo de la Llorona o la emoción de un encuentro con un Nahual. -dijo con determinación, su voz transmitiendo un fervor que me hizo sentir que él realmente podía hacerlo.
Me recordó a alguien que fue muy querido para mí... El poder de los sueños es muy grande cuando la persona tiene la suficiente pasión al parecer... esas eran noches duras para mi.
Hiro: Entonces, ¿tienes alguna idea clara de cómo quieres abordar esto? -pregunté, intentando ayudarlo a enfocarse.
Leo: Bueno, por ahora estoy pensando en empezar con "La Leyenda de la Nahuala". Creo que es una historia rica, tiene el horror, el folclor, un protagonista que se enfrenta a sus miedos... Pero necesito desarrollarlo más. Quiero crear personajes tridimensionales, un mundo que cobre vida. -dijo mientras comenzaba a caminar por la sala, visualizando su idea mientras hablaba.
Hiro: ¿Y cómo planeas hacer las animaciones? -inquirí, sintiendo que mis propias ideas empezaban a fluir. Quizás, solo quizás, podría ayudar un poco más de lo que pensaba.
Leo: Bueno, estaba pensando en un estilo que mezcla lo tradicional con un poco de digital. Podríamos hacer bocetos a lápiz y luego digitalizarlos. Ganaría un toque más contemporáneo sin perder esa esencia clásica. -explicó, sus ojos iluminados por la emoción.
Hiro: Eso suena genial. Tal vez podríamos hacer un storyboard y luego buscar referencias visuales. Así podrías tener una mejor idea de la atmósfera que deseas crear. -dije, comenzando a sentirme más animado sobre el proyecto.
Leo: ... ¿Podríamos? -preguntó con una gran sonrisa.
... Bueno ¿Qué rayos? Ya metí la pata yo solo. Ya no me puedo retractar. Igual no pasaré todo mi tiempo aquí, pero si puedo ayudarlo en lo que pueda, lo haré.
Hiro: Está bien, Leo. Puedo intentarlo. No prometo que serán cosas perfectas, pero estoy dispuesto a aprender y apoyarte. -dije finalmente para recibir un abrazo que me dejó sin aire como respuesta. De allí en más, empezamos la limpieza.
Con cada caja que levantábamos, sentía que la carga de inseguridades que llevaba empezaba a desaparecer. Tal vez, solo tal vez, esto podría ser una oportunidad increíble no solo para Leo, sino también para mí. Era un camino nuevo: y ciertamente necesitaba algo para despejarme la mente de todo lo de Casanova y lo que rodea mi vida últimamente, pero también, era un camino de posibilidades infinitas. Tal vez, al final, la animación no estuviera tan lejos como pensaba, quizás sea un modo de explotar mi creatividad. Y, al menos, podría ayudar a Leo a hacer realidad su sueño.
Leo: Por cierto, aun no lo he contemplado todo, pero es probable que nos desvelaremos todo un mes, es eso o ver como trabajamos 48 horas diarias en solo 15 días.
Pero claro.
Hiro: ¿Desvelarnos un mes entero? -pregunté, levantando una ceja con incredulidad. La idea de privarme de horas de sueño no era exactamente atractiva.
Leo: Bueno, no estoy diciendo que esté garantizado... pero con el plazo tan ajustado, probablemente será nuestra única opción. -respondió, rascándose la cabeza mientras se inclinaba para recoger una caja llena de polvo.
Hiro: No puedo creer que haya caído en esto... -murmuré entre risas de resignación- eso suena... abrumador. Pero bueno, una aventura de desvelo no suena tan mal si estamos haciendo algo que valga la pena -dijo con una sonrisa tensa.
Leo: ¡Exactamente! Además, creo que la falta de sueño nos inspirará ¡y las ideas surgirán por sí solas! -dijo irradiando entusiasmo- además, eres universitario ¡estás acostumbrado!
Hiro: ¿Estás insinuando que la vida universitaria es solo desvelos y caos? -dije con una risa incrédula mientras empezábamos a organizar unas cajas viejas. Mi mente aún trataba de asimilar la idea de un mes de desvelos.
Leo: Bueno, un poco, sí. -respondió, dando un guiño mientras levantaba una caja llena de materiales antiguos de otros clubes- Pero no todo es tan oscuro. Piensa en todas las ideas brillantes que podemos desarrollar cuando el sol se oculta. ¡Vamos a crear magia! ¡Abriremos esa puerta de creatividad y llenaremos al mundo con ilusión y magia! ¡Ni el cielo ni el espacio son límites para la fantasía!
Hiro: Magia. -repetí, y la palabra dejó un eco en mi mente. Había algo atractivo en la idea de crear algo desde cero de este tipo, de ver cómo unas pocas ideas podían transformarse en un proyecto tangible en el papel, como invento el sentimiento lo conocía muy bien. Y se lo especial que podía ser.
Me pregunto qué estará haciendo Miguel para que no esté aquí ayudando a Leo, más le vale que sea importante. Marco me daba igual.
_________________________________________________________________________
(Otro par de horas después)
(Pueblo Kokaua, Isla Kauai, Hawaii, Estados Unidos)
(Miguel Pov)
Ah, esto sí es vida. El sol brillaba intensamente en el cielo, arrojando destellos dorados sobre las aguas turquesas que susurraban suavemente al romper en la orilla. En el rincón más apartado de la playa, bajo la acogedora sombra de una palmera alta, me encontraba yo, con un libro en las manos y un cóctel de colores vibrantes reposando a su lado. La bebida, un arcoíris de frutas frescas y hielo, desprendía un sutil aroma a piña y coco, prometiendo un refrescante alivio del calor que reinaba en el exterior.
Con cada sorbo, el mundo parecía desvanecerse, y cada trago me transportaba a un estado de euforia serena. Las risas lejanas de otros veraneantes y el canto de las gaviotas se entrelazan en un coro perfecto con el murmullo de las olas. A lo cual solo cerré los ojos, dejando que el sabor dulce y ácido del trago danzará en mi paladar. En ese instante de placidez, el tiempo se detuvo, dándome un recordatorio de que a veces la verdadera felicidad reside en los pequeños momentos, como disfrutar de un momento de serenidad en la arena, viendo el vaivén de las olas desde un rincón privilegiado del mundo.
Miguel: Ah, si no fuera porque tengo esta cosa sonando, hasta olvidaría que hago aquí -dije mirando el radar en la arena que detectaba el talismán, por suerte la primera isla que visite resulte ser el lugar correcto- ¿segura que este radar de talismanes funcionará, Rosa? -pregunté a mi prima que tenía en plena llamada por un audífono en mi oído.
Rosa: Tan segura como que sería mejor que invitaras a salir a Hiro, el altar que tienes en tu cuarto me preocupa, ¿Sabes?
... ¿Qué rayos tienen las mujeres de mi familia que les encanta matar el buen ambiente con solo abrir la boca?
Miguel: ¡¿Revisaste mi habitación?!
Rosa: Y agradece que fui yo y no Hiro, ¿O necesito recordarte que es tu asistente? -sugirió la posibilidad haciéndome beber el resto de mi cóctel de un trago.
Miguel: Ok, ya, de vuelta al trabajo. Debo decirlo, esa tortuga se perdió en el mejor lugar posible -dije levantándome a la vez que me sacudía la arena de mi traje de baño- no me pondré mi disfraz hasta que la encuentre. Quiero disfrutar de la playa.
Rosa: ¿Y para disfrutar de tu físico sin tener el traje de Casanova? -pregunto con diversión.
Si, me gusta tener un cuerpazo gracias al talismán del buey y presumir al respecto. Demándenme.
Miguel: No tanto en realidad, preferiría tener a Hiro acá conmigo, hasta me pregunto qué tipo de bañador usará -pensé en voz alta para luego escuchar un resoplido del otro lado de la línea.
Rosa: Mejor ni hables. Que por suerte Leo lo tiene ocupado con su proyecto de animación para el festival en el IASF -reveló- así que deja tu calentura para después, galán. Tú solo céntrate en encontrar a esa tortuga.
Miguel: Si, si, lo que digas... ¿Oye, qué es esto? -me pregunté tomando lo que parecía ser una canica que estaba en la arena.
Pero no parecía ser una canica común y corriente, no se porque, desde el color al ser un rosado que me recordaba más a una bola de chicle. Pero también estaba el detalle de que tenía una numeración, como si fuera parte de una colección... 123, no se si será mi instinto de ladrón, pero esto me olía a que era algo valioso.
Miguel: No me lo creerás, pero creo que encontré algo interesante. Parece una canica, pero tiene los números "123" en ella.
Rosa: ... Es muy raro que una canica esté enumerada. Querido primo... Consérvala, puede ser útil, aunque solo es mi instinto quien lo dice -dijo en lo que yo asentí, parece que ambos tenemos el mismo instinto ¿seremos familia?
De allí en más, continué con mi búsqueda. Caminé por la orilla, la arena caliente me hacía sentir la energía del sol que aún brillaba en lo alto. Miré a mi alrededor, admirando a algunas familias jugando con sus hijos y parejas disfrutando de su tiempo juntos. Un par de surfistas se desafiaban con las olas, mientras dos niños hacían castillos de arena no muy lejos de mí. Pensando en eso, me sentí un poco más animado para seguir buscando, tal vez luego pueda convencer a mi viejo de venir todos en familia aquí, parecía un lindo lugar.
Conforme avanzaba guiándome por el radar, me fui alejando de la playa y del pueblo, adentrándome cada vez más a la jungla. Vaya que esta tortuga se decidió a ser exploradora ¿no? Pero extrañamente, cuando la señal se hizo más fuerte, llegué a un lugar que me dejó boquiabierto... lo juro, las cosas más sorprendentes y extraordinarias aparecen cuando ni siquiera las buscas ¡¿Esa es una maldita nave espacial?!
Miguel: No me lo creerás querida prima. Pero tu detector me trajo directamente a lo que parece ser una nave espacial de verdad -dije mirando la máquina a la distancia.
Rosa: ... ¿Perdón? -pregunto en lo que yo ya tenía puesto mi atuendo de alter ego.
Si, debo buscar una mejor forma de llevar mi disfraz conmigo que llevarlo en una mochila. Las arrugas en un traje no son nada favorables.
Casanova (Miguel): Si, mira a través de la cámara en el antifaz.
Rosa: No me jodas... -dijo una vez observó la nave por la cámara- Miguel, ¡no te metas en problemas! No sabemos qué es eso, y mucho menos qué hay dentro. Eso podría ser peligroso.
Casanova (Miguel): Igual no tengo opción, querida prima. ¡Mira! La señal es más fuerte aquí, esto tiene que ver con el talismán y la tortuga. Espero que no me pida un sacrificio o algo por el estilo -dije bromeando.
Rosa: Solo ten cuidado -dijo en lo que yo le mostré un pulgar arriba a la cámara.
Mientras hablaba, me acerqué más a la misteriosa nave, sintiendo la adrenalina en cada paso. La estructura era enorme y algo descuidada por la maleza, cubierta de musgo y enredaderas, como si la jungla misma hubiera decidido reclamársela. El metal tenía un brillo suave debajo de toda la suciedad, pero aún así no era difícil comprender su verdadero diseño.
Una vez adentro me volví invisible gracias al talismán de la serpiente, y no me tomó mucho tiempo llegar a donde parecían haber señales de vida. Encontrándome con un escenario de lo más peculiar. A una especie de criatura con la apariencia de un peluche mirando televisión mientras come un sándwich, mientras había otra criatura que medía más de dos y en cierto modo me recordaba a una ballena o algo así por su color de piel y la forma de su cara.
Pero lo más extraño es que parecía que el tipo grandulón estaba siendo regañado por lo que parecía ser una especie rata sobre desarrollada y regordeta que usa capa.
Vaya que la existencia de los alienígenas, más que impactarte, me hacía tener ideas de qué clase de seres podían haber en las estrellas, tantas posibilidades.
Gantu: ¡Pero se lo juro, señor! ¡Este debe ser un experimento! -grito el tipo ballena señalando a algo cerca del sofá.
Siendo allí donde la vi, la dichosa tortuga, Aesop. Con que aquí había acabado, ya te encontré, toda una pequeña gran escurridiza.
Hamstervile: A mi me parece que capturaste a un animal común y corriente de la tierra ¡idiota! -exclamó el roedor hablador haciendo al alien grande retroceder nervioso.
Gantu: Señor, una tortuga de la Tierra no podría moverse como se mueve está de aquí ¡solo mire! -dijo colocando la tortuga a la vista del monitor.
Solo para que esta, como se puede esperar de una tortuga de más de cien años, se movía como si le estuviera pidiendo a una pata permiso para mover la otra.
Hämsterviel: ... ¿Y bien? -pregunto nada impresionado.
Gantu: Pero señor ¡le juro que...! -trato de excusarse antes de que empezara el ataque de insultos.
Oh vaya... dijo la once. Más que la once, esas son muchas palabrotas, algunas ni siquiera sabía que existían... carajo.
Casanova (Miguel): Y creía que mi mamá insultando a mi papá cuando estaba molesta era intenso -susurre para que los aliens no me oyeran en lo que observaba como el roedor terminaba la llamada con molestia.
Momento en que Aesop, activando el poder del talismán en su caparazón, se movió hasta el otro lado de la nave en segundos para llegar a donde estaba el alien que parece un peluche que justo estaba preparando más sandwiches.
Gantu: Ah, claro, ahora si te mueves rápido, ¿Verdad? -pregunto molesto.
625: Oye, no lo culpes por tener buen gusto. Dime amigo, ¿prefieres de jamón o de huevo? -exclamó ofreciéndole comida al reptil, que solo comió lentamente el sándwich de jamón con gusto.
Gantu: ... Tu disfruta mientras puedas, cuando le pruebe a Hamstervile qué de hecho eres un experimento te llevaré directo con el, tortuga -le dijo al animal que lo ignoró olímpicamente.
¿Hamstervile? Con que así se llama el tipo de la llamada... para mi tenía más cara de ratón que de hamster.
625: Gantu -dijo el peluche revelando el nombre del grandote- te digo que éste no es un experimento, te recuerdo que yo fui de los últimos en ser creados, conozco a toda la familia, y créeme, ésta tortuga no lo es.
Gantu: Entonces ¡¿ Me puedes explicar porque se mueve prácticamente a la velocidad del sonido o la luz?! -preguntó exasperado.
625: ¿Yo que sé? Jumba no es el único científico loco, ¿Sabes?
Vaya, este es sin duda el momento más extraño de mi vida, es lo que pensé mientras me quedaba inmóvil, observando al grupo de seres exóticos en aquella nave. La tortuga, Aesop, era el foco del conflicto con una calma anticlimática entre Gantu, el físico masivo, y el peculiar peluche.
Pero como sea, si la tortuga tiene super velocidad gracias al talismán en su caparazón, perder tiempo era algo que no podía darme el lujo de hacer. De allí que tras entender más o menos como funcionaba la nave con una simple mirada, fue que pulsé el botón que creo que sirve para cerrar las compuertas de la nave, y de pura suerte eso pasó tal cual.
Siendo allí donde deje de lado la invisibilidad para presentarme como se debe a mis involuntarios anfitriones.
Casanova (Miguel): Buenas tardes, caballeros -dije haciendo una reverencia al par de aliens sorprendidos- honestamente tengo muchas preguntas ahora mismo, pero primero lo primero, ustedes dos tienen algo que es mio -dije, solo para ver como el grandulón me apunto con una especie de pistola láser.
¿Cuál fue mi respuesta? Chasquear los dedos haciéndolo levitar gracias a los poderes del talismán del gallo.
Casanova (Miguel): Esa no es la forma de tratar a un invitado -dije con reproche al tipo que me vio impactado.
Gantu: ¿Cómo estás haciendo esto, terrícola? La tecnología antigravitacional está muy por encima del límite permitido de éste planeta.
Casanova (Miguel): Ni tanto, actualmente esta más en el mercado negro que otra cosa pero si tenemos dicha tecnologia, aunque yo no uso nada de eso -dije divertido- pero eso no es lo importante ahora... Hagamos un trato grandulón. Tu y yo, mano a mano, puño a puño, si gano. Me dices todo lo que quiero saber -ofrecí en lo que lo ponía en el suelo.
Sacando una carcajada al enorme escualo.
Gantu: ¡Ja! No me hagas reír, tienes buen físico, pero yo soy experto en doce artes marciales, además soy el doble de tamaño que tú.
Casanova (Miguel): ¿Entonces qué tienes que perder? Adelante, castiga la insolencia de este humano por buscar pelear contigo -dije en lo que él se tronó los nudillos.
Gantu: Esto será pan comido -exclamó empezando así la pelea.
Si... debí decirle que también tengo el talismán de la superfuerza ¿no?... Meh, tampoco es que importe o afecte mucho el resultado final. El cual fue tomarlo de una pierna, levantarlo como si no pesara nada y sin más, comenzar a estrellarlo una y otra vez contra el piso de la nave... si, ese video de Hulk aplastando a Loki es de mis favoritos de internet.
625: ¡No, déjalo, ya está muerto! -dijo el peludito, quien le estaba tapando los ojos a la tortuga.
Je, si tan sólo el Chino me hubiera visto, le habría dedicado ésta victoria.
Pero ya luego de sentir que fue suficiente solté al alien grande, a quien su amigo rápidamente comenzó a atender con todo y un gorrito de enfermero. Creo que si me pase un poco de la raya, tal vez deba disculparme... pero no con el estómago vacío.
Casanova (Miguel): Oye, no están nada mal, ¿de que es este dices amigo peludo? -pregunte comiendo uno de los emparedados del alien peludo que solo me sonrió.
625: Es mi famoso sandwich de queso derretido y pastrami
Gantu: ¡No hables con el enemigo, 625!
¿Su nombre es un número? Ah, curioso ¿tendrá que ver con la canica que me encontré?
Casanova: Veo que estamos de malas... Entonces, Gantu ¿no? Estás en el planeta porque trabajas para un tal Hamstervile ¿es así? ¿Por qué lo haces? Me pareces un buen tipo -pregunte al grandulón que apartó la mirada... parecía apenado y algo avergonzado.
Que curioso.
625: Está aquí porque fue obligado a retirarse prematuramente de la Federación Galáctica Unida luego de que falló en atrapar a mi primo, aunque creo que el detalle de que ibas a abducir a la niñita también contribuyó -mencionó haciendo al de mayor tamaño fruncir el ceño.
Gantu: ¡En primer lugar esa niña ni siquiera debía estar con un experimento tan peligroso como 626 en ese entonces!
625: ¿No dijiste que en su momento hasta pensaste que sería una golosina para él?
Gantu: ... Pues sí -admitió en voz baja- si lograba qué con eso la abominación se calmara ¿Que es una vida en comparación con el bienestar de todo el universo?
Casanova (Miguel): Interesante lógica, Gantu, pero creo que estás subestimando el valor de una vida -mencione casual- la sociedad tiene un sobrante de héroes y villanos, pero el bienestar no debería jugarse con vidas ajenas, idea que parece que es compartida a nivel galáctico.
Gantu: ¡Eso es fácil decirlo! No estás en mi posición -dijo soltando un gruñido.
625: Además, ese comentario viene sobrando de alguien que acaba de aplastar a mi amigo.
Casanova (Miguel): ... Tienes razón -exclame divertido- quizás me dejé llevar. Pero debo decir que, aunque ha sido un inicio hostil, me intriga mucho más lo que está sucediendo aquí.
A medida que seguía devorando el sándwich, noté cómo Gantu seguía con la vista fija en el suelo, algo frustrado.
Miguel: Entonces, ese tal 626, ¿Es malo?
625: Malo en la mente de éste grandulón, mi primo hace mucho que se hizo bueno cuando se encariño con la niñita -dijo haciéndome meditar.
¿Que tan especial es una niña como para lograr que un aparente alien malvado cambie de rumbo?
Miguel: Con eso me dices que antes de la niña, era todo menos bueno -dije en lo que él peludo se encogió de hombros.
625: Pues sí, fuimos creados por un, también anteriormente, malvado genio científico, de hecho toda nuestra serie está catalogada como "Combatientes y Destructores con Implicaciones Galácticas"
Miguel: ¿Serie? -pregunte curioso.
625: Ya oíste que soy 625, y que mi primo es 626, ¿No? -dijo en lo que yo asentí- eso es porque pertenecemos a la serie 600. Aquellos cuyo nombre código empieza con 6, dependiendo del primer número en el código, o sea la serie a la que pertenece, te puede decir qué utilidad tiene el experimento.
626 experimentos obviamente genéticos, quien sea este disque malvado genio, si que tenia tiempo libre, y recursos.
Miguel: Pero entonces... ¿Ya no son malos?
625: Conmigo es subjetivo -dijo moviendo las cejas divertido- pero, aunque Jumba aún busca hacer inventos "malvados" es más bien un tipo bonachón, y mi primo, Stitch, o sea 626... nop, él ya no es malo.
Que interesante. Ahora mismo no se si es mi instinto de ladrón o solo mi lado interesado el que piensa al respecto, pero si estos experimentos pueden ser producidos y cada uno tiene una función diferente... algunos de ellos tal vez sean un negocio rentable, es decir, en algo tenemos que usar la empresa de biotecnología de Sycorex que mi padre recién compró ¿no?
Miguel: ¿Tú qué piensas? .dije alejándome un par de pasos para hablar con mi prima por el comunicador- estos "experimentos" parecen ser una gran oportunidad comercial ¿no te parece?
Aunque en el momento que dije eso me encontré con el peludito justo frente a mi cruzado de brazos ¿como rayos se movió tan rápido con esa barriga?
625: Perate, amigo, Stitch puede ya no ser malo, al igual que varios de mis primos, pero los que siguen sin activar o fueron recién activados si pueden ser malos, y en algunos casos, peligrosos.
Miguel: No obstante. Dices que pueden ser reprogramados ¿no? -pregunte no queriendo dar el brazo a torcer con la nueva idea que tuve.
625: Algo así, se les puede convencer de que es mejor ser bueno que malo, o mínimo dejarlo en ser traviesos -explico mientras que la voz de mi prima sonó en mi oído.
Rosa: Pará ser tecnología alienígena de punta. Fue fácil hackearlos -dijo con algo de soberbia, con que eso estaba haciendo ella- y tienes razón primo, con ayuda de DNAmy algunos de los experimentos pueden ser usados para mejorar a la humanidad. Más que todo la serie 0 de uso doméstico, una buena parte de ellos por ejemplo pueden ser de gran utilidad -dijo con un tono que denotaba interés.
En lo que el experimento frente a mi parecía dudoso y preocupado.
625: Créanme, no quieren a más de uno de cada uno de nosotros por ahí, ya se podría decir que estamos en probatoria con la Federación Galáctica Unida
Miguel:... ¿Tienes oído ultra sensible o qué? Solo así me explico que puedas escuchar mi llamada por comunicador -dije algo sorprendido pero también irritado- ¿y a qué te refieres con "probatoria"?
625: Te lo resumo, si la Gran Concejal no prosiguió con evacuar el planeta y destruirlo con todos nosotros en él, fue porque la niñita la convenció darles a ella y a Stitch la oportunidad de localizar a todos los experimentos y encontrarles un lugar donde puedan usar sus habilidades para el bien, si la Federación descubriera que un grupo de terrícolas averiguó de nosotros y empezaron a básicamente producir en masa a uno solo de nosotros, incluso al más inofensivo por así decirlo...
Casanova (Miguel): Entiendo... Eso haría que la gente de la Federación nos viese como una amenaza. No querría que una simple curiosidad industrial terminará con un ataque intergaláctico, ¿verdad? -dije, sintiendo una presión en el pecho al imaginar las repercusiones de unas intenciones mal entendidas.
625: Exacto, amigo. La comunidad galáctica no tolera experimentos sin supervisión, menos si están al mando de terrícolas con malas intenciones. Así que, a menos que quieras convertirte en la próxima noticia galáctica... -dijo, dejándome pensando en lo que eso significa.
Solo para luego escuchar un resoplido en la línea. Pero claro que mi prima tendría algo que decir, ella no es de las que estén de acuerdo con algo cuando ya se decidió a sacar provecho.
Rosa: ... Diles que te den el reglamento intergaláctico, libro de reglas o lo que sea. Te aseguro que puedo encontrar un vacío legal en menos de lo que canta un gallo -ordenó en lo que el experimento se encogió de hombros.
625: Se los puedo dar, creo que Gantu hasta tiene varias copias del mismo libro, pero dile a tu amiga que hablo enserio, no quieren a más de uno de varios de nosotros por ahí -repitió- tal vez podrían hacer negocio con clones de Gigi, y toda una cadena de restaurantes con Frenchys, pero no creo que el universo esté listo para más de un Whoops o más de un Fastidioso.
Creo que debo ser más claro con mis ideas. Obviamente no vamos a hacer copias de todos ¿Qué tan tontos creen que somos como especie?... okey, mejor me calló, hay un largo historial de metidas de pata épicas de la humanidad por estupideces... ¿Cómo rayos se pudo empezar una guerra por un maldito balde de agua?
Miguel:.. ¿Y porque no trabajas tú con nosotros para decirnos que experimentos son buenos para producir y cuáles no? -preguntó al pequeño afelpado que se quedó pensando.
625: Podría considerarlo, pero igual siento que deberían dejar a mi linda Ohana tal y como está.
¿Su qué?
Miguel: Podemos hablarlo... aunque ¿Tu Ohana? -pregunte en lo que él asintió.
625: Todos los Experimentos, Stitch, Calor, Elástico, Corte, todos son mis primos, todos son mi Ohana -reveló- ¿tú y tu amiga no tienen una Ohana? ¿Alguien que los quiera y se preocupe por ustedes?
... No tienes la menor idea, enano.
Miguel:... Esa puede ser una forma de ayudarlos -dije tras analizar a fondo toda esta situación- no tienes que ver a los experimentos producidos en la tierra como tu familia. Sino como evidencia para probarle a esa tal Gran Concejal qué efectivamente los experimentos pueden ser más beneficiosos que perjudiciales para el universo entero. Así tu y los demás experimentos estarán oficialmente bien librados para que los dejen en paz y no los vean como una amenaza cósmica.
Mientras reflexionaba sobre lo que acababa de proponer, el murmullo de las criaturas alienígenas a mi alrededor se desvaneció. Las ideas fermentaban en mi mente, haciendo que mi corazón latiera con más fuerza. En un universo donde las posibilidades son infinitas, el concepto de utilizar a estos experimentos como un medio para demostrar su valía me parecía no solo interesante, sino necesario.
Casanova (Miguel): Si... ¿Sabes qué, 625? Me gusta como suena eso. Creo que podemos encontrar una solución en la que todos ganen. No se trata solo de hacer negocio para nosotros. Se trata de asegurar que tú y tus amigos se mantengan libres y que no tengan que temer por su existencia. Hay que demostrar que no son una amenaza, sino una oportunidad.
625: Es una propuesta interesante -admitió- pero... ¿por qué lo harías? -preguntó, frunciendo el ceño.
Casanova (Miguel): Porque no solo me intriga el universo y sus posibilidades, sino que también creo en las segundas oportunidades. Si estos experimentos, que alguna vez fueron creados con intenciones equivocadas, pueden redimirse y contribuir al bien, ¿por qué no brindarles la oportunidad de demostrarlo? Además, me gusta la idea de que haya más seres únicos en este universo, como tú y tu familia.
625: Hmm... -el pequeño se cruzó de brazos, indeciso. Aunque su expresión era seria, había una chispa de curiosidad en sus ojos- no estoy seguro... Si la Gran Concejal aún considera que los experimentos son amenazas, puede que no nos dé una oportunidad, sin importar lo que tú o nadie más digamos.
Miguel: Entonces tenemos que asegurarnos de que lo sepa, para eso necesitamos pruebas. Si estos experimentos están ayudando a la humanidad, sería más difícil para la Gran Concejal rechazar eso -dije con terquedad.
Si, lo admito, yo también soy obstinado una vez algo se me mete en la cabeza. ¿Será esto algo de familia? Mis dos padres son bastante cabezones de hecho, si, debo llevarlo en la sangre.
625: Podemos verlo así, aunque también tendrás que hablarlo con la niñita y mi primo.
Miguel: Supongo que con eso estás dentro... En cuanto a ti -dije mirando al grandulón malherido- ¿Cuánto te paga la rata gorda? -pregunte solo para que él en respuesta desviara la mirada.
625: Anda, dile, escualo -exclamó burlón.
Vaya, parece que no le paga nada, o tal vez a lo mucho solo le promete una gran recompensa por servirle o una tontería así. Mejor le ahorro la vergüenza, creo que la vida ya lo escarmiento lo suficiente.
Miguel: Ni me digas, mejor te ahorro explicaciones -dije mientras escribía un número en un papel- trabajaras como guardia de seguridad en la empresa de mi familia y ese es el pago mensual.
El aire en la nave se volvió tenso, mientras Gantu me miraba con incredulidad. La propuesta había salido de mis labios como si estuviera respondiendo a una simple pregunta, pero en realidad era un gran salto de fe. La idea de tener a un enorme alienígena como guardia de seguridad secundaria era casi cómica, y sin embargo, había algo en su mirada de confusión que me decía que se lo estaba tomando en serio, y más al ver de cuanto era el salario.
Gantu: ¿Tú crees que yo... haría de buen guardia de seguridad? -dijo, arrugando la frente.
Casanova (Miguel): Claro que sí. Mírate: eres grande, fuerte, y tienes habilidades que pueden mantenerse al margen sin levantar sospechas, o eso creo dado que no hay reportes de ti del gobierno. Además, podrías ayudar a atraer inversiones para mejorar tu estilo de vida... y, bueno, si algún día decides volver a la Federación, por lo menos podrías demostrar que has trabajado en algo positivo durante un tiempo.
625 miró a Gantu como si invirtiera todos sus esfuerzos para que el grandulón considerara la propuesta.
625: Vamos, sabes que no habrá una mejor oferta, es una buena oportunidad.
Miguel: Pero eso sí. Para justificar tu existencia sin delatar tu origen alien, habrá qué decir que eres uno de los experimentos de DNAmy -aclare rápidamente- pero en fin, pienso que tus habilidades serán mejor aprovechadas trabajando para mi familia ¿Te interesa?
Gantu: Imagino que la idea es esperar a que los terrícolas estén listos para saber que hay extraterrestres, ¿No?
Miguel: No exactamente, a estas alturas pienso en algo diferente -dije con honestidad- recién intenté contactar con ustedes como hace un par de meses más o menos. Me trataron de detener en toda regla -dije sorprendiendo a ambos.
625: ¿Esa señal en Australia eras tu?
Gantu: Y yo creí que eran viajeros de otra parte de la galaxia.
Miguel: Si, fui yo. Con todo olvide presentarme ¿no es verdad? Díganme ¿ninguno ha escuchado del ladrón de ensueño, Casanova? -pregunte para incredulidad de ambos.
Je, creo que debí decir mi nombre desde el principio... detalles.
Gantu: ¿Tú? ¿Ese criminal que ha tenido al mundo de cabeza?
Casanova: Y con el mayor gusto del mundo. Únicamente con una sola razón, busco hacer las cosas más grandes para ser recordado como alguien capaz de hacer lo imposible -dije sonriendo- más que todo, mi meta es probarle al mundo la existencia de lo irreal, y la magia o los aliens no están por fuera de eso. Pero todo debe hacerse bien, ya deben tener una idea de porque -mencione en lo que ambos me dieron la razón.
625: Ah, créeme, al menos yo sé que la magia es real.
¿Ah sí? Interesante, saber qué habrá visto el peludito.
Miguel: Pero de cualquier modo. ¿Qué dicen, trabajan para mi? -pregunto en lo que ambos solo se miraron entre sí antes de verme fijamente.
Ambos: ... ¿Cuándo empezamos? -preguntaron para mi satisfacción, es lindo cuando las cosas salen como quieres.
Una gran oportunidad comercial, un paso más cerca de que el sueño de mi familia sea una realidad, uno más de los talismanes en mi poder gracias a la tortuga que... que... ¿donde está la tortuga?
Casanova: Me lleva la que... -dije al ver que aparentemente, Aesop se escapó por un hoyo que sin querer hice en la pared de la nave cuando le daba una paliza a Gantu- ¡Ahora mismo! ¡Debemos recuperar esa tortuga a la de ya!
625: Adivino, ¿Mágica?
Casanova: No la tortuga como tal pero lo que hay en su caparazón, eso es punto y aparte -dije para luego los tres ponernos en marcha.
Esa tortuga no se me puede escapar, no luego de haberla encontrado. ¿que diria eso de mi? Mi reputación quedaría arruinada si el ojo público se entera de esto ¨el gran ladrón Casanova burlado por una tortuga¨ ¡Sería humillante!... además de que no dejaré de oír los regaños de mi prima y las burlas de mi padre si el animal se me acaba escapando ¡mi orgullo no me permite que un hombre como él se burle de mí!
Y como si no fuera suficiente... no mames.
Casanova (Miguel): Tiene que ser joda ¿Qué hacen aquí? ¿y cómo es que vinieron sin el chinito? -me pregunté al reconocer a la distancia a los grandes héroes, o bueno, a la mayoría de ellos.
Menuda suerte la mía.
Notes:
Y ese fue el capitulo de esta vez. Como siempre pueden votar, comentar, lo que gusten.
¿Y que les pareció?
Antes de que pregunten. Si, Leo es genuino.
Para el próximo capitulo seguimos con esta trama de Lilo y Stitch. Y según lo que pienso, el final del próximo capitulo tendrá un final impactante. Y lo mejor, en base a como se ha estado construyendo la cosa hasta ahora, incluso coherente.
De momento, nos vemos.
Chapter 18: Capitulo 16: ¿Aleteo de mariposa? No, es el salto del conejo
Notes:
(See the end of the chapter for notes.)
Chapter Text
(Miguel Pov)
(Pueblo Kokaua, Isla Kauai, Hawaii, USA)
Me lleva la que me trajo ¿Cómo es posible que las cosas me salgan así de mal? ¡Se suponía que estos tipos no deberían estar aquí! ¿En serio vinieron a una misión sin Hiro? Bueno, supongo que es entendible, pero también no me jodas ¡ni siquiera les di ninguna pista! ¿Cómo es que están los grandes héroes aquí? ¿Acaso vieron la noticia de la tortuga y sospecharon que fui yo?
¡Eso es...! Muy acertado en realidad. Si suena a algo lo bastante random como para ser alguno de mis robos elaborados. Me lleva ¡¿justo hoy debían dejarse llevar por el instinto paranoico?!
Casanova (Miguel): Quería al chino aquí conmigo pero no así ¡y ni siquiera está con ellos! -dije escondiéndome tras unos arbustos.
A la vez que 625 me hacía compañía y que Gantu usaba un par de árboles para esconderse a sí mismo, vaya que a veces ser un grandulón no es de mucha ayuda ¿eh?
Gantu: ¿Quiénes son ellos, jefe? ¿Enemigos? -me pregunto con cautela.
Casanova (Miguel): Algo así, toma en cuenta que, aunque todo lo que robo es devuelto al final, aún no cambia el hecho de que robé en un inicio. Y ellos intentan arrestar a mi persona por esos robos precisamente -dije estresado, antes de que se me prendiera el foco- pero justo ahora no estoy de humor para lidiar con ellos... Oye, 625. ¿Cómo es que activas a un experimento inactivo? -pregunte al experimento.
625: Fueron deshidratados, sólo tendrías que mojar una de las cápsulas para activarlo -dijo en lo que yo sacaba la cápsula experimental que de pura casualidad encontré para luego arrojarla en un charco de agua justo en frente de los grandes héroes, y de allí en más fue solo sentarse y observar.
Y lo admito, de no saber qué se trata de algo de ciencia del espacio exterior, el cómo se activó el experimento me pareció algo... mágico. El cómo la pequeña cápsula brilló como si se tratara de una estrella y tal cual pokebola, una criatura parecida a Stitch apareció. Un experimento color rosa claro con cuatro brazos, dos orejas largas y ojos celestes. Sobre su cabeza tiene una especie de gorro hecho de frutas tropicales, y como cereza del pastel tenía maracas en cada uno de sus brazos... no se porque siento que me salió uno bueno jeje.
Go Go: ¿Pero qué rayos...? -preguntó extrañada al ver el experimento quien solo les sonrió.
123: Hola damas y caballeros ¿Quién quiere bailar conmigo? ¡Ayayay! -pregunto en lo que yo escuchaba como un aparato que parecía ser un detector de experimentos que Gantu tenía a la mano explicaba la habilidad de mi nueva amiga rosada.
Experimento 123. Su función es hacer que las personas bailen incontrolablemente. Para esto, baila ella misma con una danza hipnótica que obliga a los demás a hacer lo mismo.
Mientras todos se miraban atónitos ante la inesperada revelación del experimento 123, los héroes claramente no estaban preparados para lo que iba a suceder. De hecho, una vez que las maracas comenzaron a sonar, las vibraciones de la música se hicieron eco en los alrededores. Era una melodía alegre pero envolvente que llenó el aire de energía contagiosa.
Casanova (Miguel): No me digas que esto iba a ser tan efectivo... -murmuré entre dientes, ocultándome aún detrás de los arbustos.
Fred: ¡Debes estar bromeando! Esto es increíble... y un poco aterrador -dijo en lo que parecía estar siendo atraído por el ritmo- de repente estoy bailando sin razón alguna ¡Ole!
El experimento 123 comenzó a hacer su danza hipnótica, moviendo los brazos de forma sincronizada al son de las maracas que sacudía con entusiasmo. Wasabi y Go Go, a quienes nunca les faltaba preparación física, intentaron resistir el efecto de la danza. Sin embargo, las ondas hipnóticas de la música parecieron invadir sus mentes, y poco a poco, los más rudos luchadores del grupo comenzaron a moverse al compás de la música. Junto a Honey y Fred quienes ya estaban hipnotizados del todo.
Go Go: ¡No... no puedo...! -gritó mientras comenzaba a dar pasos torpes, involuntariamente dejándose llevar por el ritmo- ¡esto es un desastre!
Honey Lemon: Es verdad, pero también es divertido ¡arriba! -dijo ya completamente dominada por el poder del experimento.
Yo no podía creer lo que estaba viendo. Perfecto. Si ellos estaban bailando, quizás podría salir de esta situación sin que me arrestaran. Por mucho que intentarán resistirse, pronto la danza hipnótica de 123 capturó a todos. ¿Y yo? Sencillamente decidí aprovechar el caos.
Casanova (Miguel): Eso los distraerá un rato, ahora a buscar a esa tortuga -dije para luego irme con el par de aliens a buscar al animal en la isla.
Mientras me alejaba furtivamente del lugar, el sonido de las maracas y la melodía pegajosa se desvanecía poco a poco, envolviendo cada rincón del bosque. Podía escuchar las risas y los gritos sorprendidos de los héroes, atrapados en el trance de la danza hipnótica, dejando el camino libre para que Gantu y 625 me siguieran, con una mezcla de confusión y entusiasmo.
625: ¿Estás seguro de que esto funcionará? -preguntó, mientras intentaba seguir el paso.
Casanova (Miguel): Lo más seguro es que no les gustará haber sido hipnotizados por un experimento, pero tampoco me pueden arrestar si están bailando como si estuvieran en un festival. Ahora, ¡vamos! -repliqué, girando sobre mis talones e instando a mis compañeros a seguirme.
Gantu: Jefe, ¿Qué hacemos si nos encontramos de nuevo? -preguntó, su voz llena de inquietud.
Casanova (Miguel): No te preocupes. El experimento 123 les mantendrá ocupados un buen rato. Y si se dan cuenta, simplemente negaré todo. ¡Soy un ladrón, no un príncipe encantador! Al menos no con ellos -respondí, burlándome de la situación mientras seguíamos avanzando.
Finalmente, después de algunos minutos de búsqueda por la densa vegetación, llegamos a un claro donde vi a la tortuga encaramada sobre unas rocas, disfrutando del sol. Era un espectáculo impresionante, con su caparazón de un siglo brillando bajo la luz del día. Pero lo que más me pareció curioso es que el animal, de repente, comenzó a hacer un agujero a paso lento en el suelo. ¿Por qué una tortuga haría...?
Oh... eso explica todo, Aesop es hembra.
Casanova (Miguel): No puedo creerlo, te escapaste del barco y llegaste hasta aquí, vaya que eres una mujer complicada -dije palmeando el caparazón del animal. Para luego solo tomar el talismán del conejo atorado en este y sacarlo sin problema gracias a la fuerza extra que tengo debido al buey.
Si, nuevo poder desbloqueado, super velocidad, todo gracias al talismán del conejo, ya con este son cinco talismanes de doce. De verdad que se siente y hasta creo que escucho un sonido típico de videojuego de encontrar un ítem importante. Okey, muy friki de mi parte, pero es que lo soy, no me juzguen.
¿Y qué les parece? Allí vienen los héroes ¿Cómo se escaparon de 123? No se porque algo me dice que una de las esferas químicas de Honey Lemon tuvo algo que ver.
Casanova (Miguel): Yo me ocupo, ustedes váyanse ahora -ordene al par de aliens que asintieron al ver que no estaba para aceptar cualquier reclamo al respecto. Momento en que llegó el grupo cansado e irritado por el baile de hace poco.
Wasabi: ¡Te encontramos... Casanova! -dijo tomando aire de lo cansado de correr y de bailar- lo que sea que planeas esta vez... ¡Piénsalo de nuevo!
Go Go: Esa es... ¿Entonces tu si te robaste a Aesop? ¿Para qué? Y por favor que sea una buena, que Fred tuviera razón me sigue pareciendo algo irreal -dijo en lo que el chico del disfraz de kaiju estaba emocionado de haber acertado.
Ok, este sujeto me empieza a fastidiar a mi también por lo paranoico.
Casanova (Miguel): De hecho no lo robé, sólo me la encontré por aquí -aclaré- y de hecho hubo una razón de porqué se escapó en primer lugar -dije señalando al gran reptil.
Para que luego pasara algo que nos dejará a todos sorprendidos sin excepción, el como Aesop, importando poco o nada que hubieran personas presentes, comenzó a poner sus huevos en el hoyo que previamente había estado cavando.
Fred: Ay, chihuaha
Wasabi: Oh vaya... nada como el hermoso y asqueroso milagro de la vida -exclamó con incomodidad y algo de desagrado.
Casanova (Miguel): Me encontraba de vacaciones cuando me la encontré de casualidad y la seguí hasta aquí, a la tortuga -dije señalando al animal- aunque no lo parezca, me gustan mucho los animales... Tal vez deberían recordarlo la próxima vez que nos veamos.
Y sin más decidí probar un nuevo poder combinando talismanes, levitación del gallo + súper velocidad del conejo = vuelo. Y vaya que funcionó. Todo lo que vieron los héroes fue verme desaparecer en un segundo al puro estilo de superman con los poderes de flash... ¿Habrá un cómic así?
Para luego esconderme, junto a Gantu y 625 en lo que les decía que nos fuéramos en silencio.
Go Go: Empieza a caerme gordo ese tipo -la escuche decir mientras nos alejamos.
Fred: Lo dicen tantas veces que empieza a perder su significado -respondió, y desde donde estábamos escuchamos el zape, por bocón.
Mientras me alejaba como si nada, disfrutando del calor del sol en mi piel y la satisfacción de haber escapado una vez más, no pude evitar reírme para mis adentros. Era un claro recordatorio de que, a pesar de ser un ladrón, el éxito a veces radica en la astucia y en tener un buen sentido del espectáculo.
Gantu: Jefe, ¿Qué hacemos ahora? -preguntó con suavidad.
Casanova (Miguel): Ahora que tengo esto -dije levantando el talismán del conejo- ya puedo dar por cumplida la misión, pero... no voy a dejar todo este asunto de los experimentos sólo así como así. Por eso llamé a mi prima, vamos a reunirnos con el doctor Jumba Jookiba para negociar, ustedes pueden llevarme a donde vive.
Gantu: ¿En serio vamos a hacer eso?
Casanova (Miguel): Claro. a lo que entiendo, Jumba tiene un talento peculiar para los experimentos, y si hay algo que he aprendido en mi vida de ladrón, es que siempre se puede sacar algo de provecho de las habilidades de otros... aunque sea algo un poco loco -respondí, mientras comenzábamos a caminar hacia la ciudad, sin saber exactamente a donde.
Admito que tenía curiosidad de conocer al dichoso genio malvado entre comillas... pero primero debía sacar a 123 de la trampa pegajosa en la que terminó.
—
(Horas después)
(Hogar de la familia Pelekai)
Al final si tuve que caminar bastante para llegar a la casa, la cual se encontraba ubicada en medio de una zona boscosa en las afueras de Kokaua, junto a una colina y un acantilado con vista a un arroyo que se encuentra más abajo. Un camino de tierra muy largo separaba del resto de la sociedad al hogar. Su aislamiento en cierto modo convierte la casa en el lugar perfecto para que los residentes extraterrestres vivan sin la necesidad de disfrazarse todo el tiempo, así como para ocultar la enorme nave espacial que se encuentra cerca y se asomaba entre algunos árboles.
... ¿No me jodas? ¿Cómo nadie reporta nada de esto? Me huele bastante a que el gobierno tiene mucho que ver al respecto.
Miguel: ¿Entonces esta es la casa donde vive la niña, el científico loco y el experimento? -pregunté ya sin usar mi disfraz y usando un traje de negocios.
¿Y por qué las gomitas? Pues bueno, nunca salgas sin ellas... (nunca sabes cuando puedas ver a Hiro y cómo son sus favoritas... no pregunten como lo se)
625: Sip, esa es -dijo escondido tras un arbusto.
Gantu: Aún creo que deberías ir solo primero, jefe, el troglodita es capaz de atacarnos ni bien nos vea a 625 y a mí -aclaro escondido también, solo que él detrás de un árbol.
Miguel: Si, yo ya sospechaba que había animosidad previa. Solo la esperaba a ella -dije señalando al camino de tierra.
Donde como si estuviera lista para comerse el mundo entero (cosa que de hecho ella si quería hacerlo) venía mi prima al puro estilo de mujer empoderada que si hubiera música de fondo y todo me recordaba a la presentación clásica de diva.
... Solo para luego ponerse a apapachar a 625 al prácticamente ser un peluche viviente que en cierto modo sí era adorable, ahora que lo pienso, lo regordete debe hacerlo más suavecito... ¿Cómo no se me ocurrió antes?
Miguel: Chicos. Saluden a mi prima y cerebro de casi todas mis operaciones, Rosita. Como ves, yo también tengo una Ohana -le dije al experimento que estaba en brazos de mi prima hermana.
625: ¿Y siempre es tan cariñosa? -pregunto indiferente al cariño dado.
Rosa: Solo con las cosas lindas como tu, pequeña bola de pelos regordeta y afelpada -declaró encantada para luego soltar al alíen- si todos los experimentos son tan lindos como él, será un buen negocio.
Si, es bueno ver que mi prima y yo estábamos en la misma página al respecto.
625: Pues algunos sí, aunque no te recomiendo intentar hacer negocio con el Señor Oloroso o la Señora Apestosa
Gantu: Ni me recuerdes, aún me rompe el corazón que semejante par de angelitos resultaron oler tan mal -dijo con pesar.
Ok, esto cada vez es más interesante.
Rosa: Ya veo. Habrá que hablarlo con el genio malvado entonces -declaró acomodando sus gafas.
Miguel: Ustedes esperen aquí. Cuiden la limusina -orden a ambos aliens que asintieron antes de acatar la orden.
Rosa me siguió con una sonrisa radiante, su energía era contagiosa. A medida que nos acercábamos, noté cómo la casa tenía un aire peculiar, como si cada rincón estuviera diseñado para encajar en el mundo de la ciencia loca a pesar de su diseño humilde. Mis pensamientos divagan por un momento, considerando cómo la casa se asemejaba a un laboratorio con un estilo hogareño en vez de un sótano oscuro lleno de fórmulas y peligros como se esperaría de un disque genio malvado. Y sin más tocamos la puerta.
Quien nos abrió fue una joven adulta que obviamente era originaria de la zona por su piel morena, y por cómo se veía, puedo decir que estaba estresada y cansada, aunque lo ocultara con una sonrisa, esas ojeras y cabellos despeinados eran por algo.
Nani: Hola, ¿Puedo ayudarlos con algo? -pregunto en lo que yo iba a saludar con cortesía.
Pero para ese momento ya mi prima tenía el teléfono en la mano y revisando lo que había investigado de la chica con anterioridad ¿Cómo lo hace? Algo me dice que no supo que esta chica existía hasta la tarde de ese mismo día. Se que tenemos los recursos y todo, pero vaya...
Rosa: Nani Pelekai. De 19 años, la cabeza de la familia luego del accidente automovilístico de sus padres -dijo para luego levantar la mirada del teléfono- Rosa Rivera, encantada. Nos gustaría hablar con sus inquilinos, si sabe a quienes me refiero -dijo haciendo a la chica tensarse.
Rosa... no deberías ser tan directa. Y menos si hablamos de algo delicado sobre la existencia de los aliens.
Nani: ¿Inquilinos? ¿Habla de mi tío y mi tía? -pregunto con algo de desconfianza.
Rosa: Justamente. Queremos hablar de negocios con ellos.
De paso, no creo que haga falta decir que la mujer mayor miró a Rosa con sospecha, su ceño fruncido revelaba que no estaba completamente convencida de las intenciones de mi prima. Aun así, se apartó un poco para darnos vía libre al interior de la casa.
Nani: Está bien, pasen -dijo con desconfianza antes de conducirnos a la sala y decir que esperáramos.
Lo cual hicimos sin objeciones ni protestas para al cabo de un rato ver cómo dos seres evidentemente fuera de este mundo entraban a la sala de una forma torpe y exagerada. Un alíen de un solo ojo con dos lenguas que estaba haciendo un pobre cosplay de la del programa de la niñera y otro mucho más grande que aunque usara gafas de sol y un bigote falso era obvio que no era humano, empezando por el color de piel sin mencionar que tenía, no lo se ¡cuatro ojos! ¡literalmente!
A todo esto solo pude decir una cosa.
Miguel:... ¿Qué tan idiotas creen que somos? -pregunte con honestidad en lo que el alíen de mayor tamaño solo se encogió de hombros.
Jumba: Pues para los estándares de éste planeta, depende -dijo antes de recibir un codazo de su compañero ¿o compañera? La verdad ni se.
Pleakley: Ay, mi esposo es un bromista, del mismo modo suele decir que soy fea -dijo con aire de humor en lo que yo me le quedé viendo de arriba abajo.
Miguel:... ¿Y la mentira donde?
Eso de paso le terminó sacando una risa al que a estas alturas creo que se trata de Jumba.
Jumba: Ya me cayó bien éste niño -exclamó divertido.
En lo que mi prima Rosa sonrió por su parte, pareciendo satisfecha con el giro que estaban tomando las cosas. La intriga y la comedia se entrelazan de maravilla en ese pequeño salón, iluminado por luces coloridas que hacían que el lugar se sintiera vibrante y acogedor.
Miguel: En fin, pasemos a lo importante -dije poniéndome cómodo en el sofá- Rosa.
Rosa: Según los registros... Imagino que usted es el señor Jumba Jookiba. El "genio malvado" que dedicó parte de sus investigaciones a crear experimentos genéticos no permitidos, los cuales casi todos actualmente están inactivos o viviendo en la isla ¿No es así? -pregunto dejando sin palabras a ambos aliens.
Pleakley: No, deben estar confundiéndose con alguien más. Mi marido es demaciado tonto para ser un genio -exclamo con incomodidad ofendiendo al más alto.
Jumba: Oye, tampoco abuses.
Rosa: Sabemos todo sobre usted señor Jookiba. Y nos gustaría hacer negocios con usted -dijo con cierto brillo en sus ojos.
Jumba: Ah, ya están hablando mi idioma -dijo tomando asiento- ¿de qué se trata el asunto? ¿Qué tipo de negocios proponen unos jóvenes como ustedes?
Bien, parece que vamos directo al grano aquí.
Miguel: Sabemos de sus experimentos ilegales. Y nos gustaría saber cómo son fabricados para hacer nuestros propios experimentos para la venta al tener un gran posible potencial en el mercado.
Rosa: Tras hacer los respectivos números, hemos llegado a la conclusión de que con el talento adecuado y una buena estrategia de marketing, podríamos crear una línea de productos basados en sus experimentos. He investigado el gran potencial de mercado que podrían llegar a ser estos seres extraterrestres, y créanme, en la industria del entretenimiento y la moda, existiría una demanda muy alta, solo para empezar.
Miguel: Y no solo eso. También podríamos colaborar en la creación de nuevos experimentos. Tal vez con una financiación adicional, usted podría llevar a cabo sus investigaciones más locas sin el temor de ser descubierto -dije en lo que la sonrisa del científico se ensanchaba cada vez más.
Solo para que el alien más pequeño y escuálido se cruzara de brazos en señal de protesta casi de inmediato.
Pleakley: Ah, no, olvídenlo, ya es un pandemonium que tus 625 experimentos antes del monstruo azul anden sueltos por la isla -dijo reclamando a su aparente compañero- imagina que aceptas y la Gran Concejal de entera.
Rosa; Aunque se entere no puede hacer nada -dijo mostrando una página del reglamento de la propia federación galáctica que habíamos conseguido de Gantu- subsección 84, del artículo 115 de la resolución en Alderaan. "Cualquier planeta subdesarrollado a ojos de la federación debe de ser dejado por su cuenta para su desarrollo en busca de la preparación de entendimiento de vida y tecnología más allá de su entendimiento sin interferencia externa" -declaró con una sonrisa.
Para dejarlo claro en español cristiano. Significa que es verdad que los experimentos fueron creación del doctor Jookiba. Pero si nosotros como terrícolas hacemos experimentos por nuestra cuenta, la gran concejal no podría hacer nada porque sería meterse con el desarrollo de la tierra como submundo.
Pleakley: Pero estoy seguro que introducir especies creadas por alguien que no es de éste planeta no cuenta como desarrollo independiente.
Rosa: ¿Y qué pruebas tienen? Perfectamente pudimos encontrar uno de los experimentos y asumir qué es una especie nueva del planeta, e investigar a partir de él -explicó con una sonrisa inocente- ¿Cómo sabríamos qué es algo fuera de este mundo?
Pleakley: El asunto es que no son mascotas, son máquinas de destrucción que este creó -dijo señalando a Jumba.
Rosa: No todos ellos -aclaro con una sonrisa- una buena parte pueden ser usados de forma productiva. Lo sabrían si hubieran tomado su tiempo para analizar su investigación en vez de catalogar todo como un caso perdido.
Jumba: ¡Gracias! -exclamó agradecido antes de que le dieran un golpe en la panza.
Pleakley: Ay, no te hagas el santo, que de milagro Lilo ha podido encontrar lugares a donde los más destructivos podrían pertenecer.
Jumba: ¿Cómo en tu equipo de bolos, mi amigo ojón? -pregunto haciendo callar al alíen de un solo ojo.
Vaya, así que incluso este tipo usa los experimentos para su uso personal. Eso solo refuerza nuestro punto.
Rosa: Hemos visto algunos de esos experimentos de camino aquí, y sí incluso a los más destructivos les han dado una función de bien en esta isla pequeña. Imaginen cuánto podrían hacer varios de ellos por todo el mundo -mencionó casualmente. Pero el de un ojo no se dejaba convencer.
Pleakley: Escuchen, no quiero ser el malo, pero sería mejor que se lo expusieran a la Gran Concejal, tal vez nos destierre a un hoyo negro o tal vez acepte que sería una buena propuesta.
Con que pedir permiso antes de pedir perdón ¿así que chiste?
Miguel: Es que justo hacer esto es un argumento para librar del todo a los experimentos originales -dije con seriedad- si probamos qué un mundo que usa a los experimentos en su vida diaria está libre de peligro. Oficialmente no habría razón alguna para que los 627 sean considerados ilegales, ninguno de ellos -dije sorprendiendo a ambos nuevamente.
Pleakley: ¿Saben de 627? -pregunto incrédulo.
Ambos: Hicimos nuestra tarea -dijimos como si nada.
Pleakley: Entonces saben qué 627 es justamente un argumento por el que la Gran Concejal podría tomar cartas en el asunto, jóvenes
Rosa: Por eso estamos yendo directo a la fuente. Con la guía del doctor Jookiba y el sentido común de qué experimento puede ser usado para el libre comercio y cual no. Evitaremos qué las cosas se salgan de control -explique en lo que el alíen busco hacer entrar en razón al grandote de cuatro ojos, pero este estaba en su propio mundo.
Jumba: Jeje... Doctor -susurro halagado.
Pleakley: Jumba, yo aún siento que la Gran Concejal preferiría que primero recuperáramos todos tus experimentos antes de hablar de si es bueno llevarlos al mundo exterior.
Este ojón me esta cayendo pesado.
Jumba: Oh, por favor, no seas aguafiestas, Pleakley ¡Desde hace tiempo he querido llevar mis experimentos al siguiente nivel. ¡Imagínate cuánto sorprendería a la humanidad! A todos les encantaría ver lo que pueden hacer -dijo frotándose las manos.
Miguel: ¿De momento que le parece los planos de dos experimentos de prueba? -pregunte llamando su atención- unos tal Gigi y Frenchfry, si son un éxito, desde allí podemos hablar de hacer más y de paso ustedes tienen tiempo para recuperar el resto de los experimentos perdidos
Jumba: Ah, 007 y 062, excelentes elecciones para empezar -declaró sonriendo antes de que el fideo se aclarara la garganta.
Pleakley: Dos detalles, a) Mertle no nos dejará acercarnos a Gigi, b) ¿Qué pasa si los clones de Frenchfry acaban teniendo su misma personalidad? Ya sabes, la de querer engordar a la gente para comérsela, ¿Recuerdas? -pregunto en lo que mi prima y yo no pudimos callarnos más de lo que pensábamos de este alien en particular.
Rosa y Miguel: Qué aguafiestas eres.
Pleakley: ... No saben lo que es estar a punto de ser horneado, niños, créanme, no es bonito -dijo con cara digna de traumas de vietnam.
Rosa: Pará eso existen los laboratorios de pruebas, recientemente Rivera Solutions se hizo de los derechos de la empresa Sycorex, una antigua compañía de biotecnología con lo último en avances y tecnología en dicho ámbito donde corregiremos cualquier desperfecto. Y no necesitamos a los originales, el doctor Jookiba seguro tiene los planos de cada uno de sus experimentos, no es así?
Jumba: ¿Qué malvado genio no los tiene? -preguntó con ironía.
La conversación fluía, y me sorprendió la espontaneidad con la que mi prima y el doctor Jumba intercambiaban ideas, como si hubieran estado trabajando juntos durante años. Pleakley, sin embargo, seguía enquistándose en sus temores. Podía entenderlo; sus preocupaciones eran válidas, sobre todo tras haber presenciado el potencial destructivo de algunos de esos experimentos. Sin embargo, la marea estaba cambiando, y había en el aire un sentido de oportunidad que no podíamos dejar pasar.
Miguel: Además, en el caso de hacernos con experimentos sin activar, pueden ser arreglados de cualquier falla por nuestra propia científica loca -dije en lo que mi prima encendió su tablet y por medio de esta inicio una videollamada.
Apareciendo así DNAmy del otro lado de la línea.
DNAmy: Hola jóvenes jefes ¿Cómo están? Llamaron justo a tiempo, quiero mostrarles mi invención más reciente ¡los patos tortuga! ¿No son adorables? -pregunto para rápidamente mostrar a los dichosos animales.
Vaya, como el nombre lo indica eran tortugas, pero con patas y cabezas y cuello de pato. Era bizarro sí, pero, en cierto modo extraño como solo las creaciones de DNAmy podían, eran adorables también.
Rosa: Si no fuera porque Hiro no debe vernos con ella, podrías regalarle uno, primito -me dijo con diversion y algo de burla. Mientras que yo estaba mandando un mensaje en privado a Amy para que me guardara un par de esos animales por separado.
Jumba: Oh ¿pero qué clase de creación es esa? ¿También tienen sus propios experimentos? -pregunto interesado.
Rosa: La doctora Amy Hall, conocida en las calles como DNAmy, es una genetista y fanática de los peluches Suavecitos, su investigación se especializa en traer la mayor cantidad a la vida real -claro- y seguro que ella puede fácilmente corregir cualquier error malvado de sus experimentos ¿verdad, doctora?
DNAmy: Claro, podemos asegurarnos de que a lo mucho sean traviesos, pero nada de qué preocuparse -dijo con tranquilidad- de hecho, recién arregle a esta dulzura qué le dio pelea a los grandes héroes y que Miguel envió aquí tan amablemente hace unas horas -exclamó para que luego 123 se parara a su lado agitando sus maracas- ¡es tan linda! Y me ayuda a hacer ejercicio.
Vaya, a eso le llamo velocidad, seguro tuvo que ver que 123 entra en la categoría de seres adorables. Eso debió motivar a Amy a trabajar rápido pero con resultados confiables, nunca subestimen a una mujer motivada con sus pasiones y gustos.
Jumba: ¿Interceptaron a 123?
Miguel: Y de pura coincidencia. Me la encontré en la arena de la playa.
Jumba: ¡Inconcebible! Es como si hubiera estado a solas con la niñita cinco minutos
Pleakley: O con Ángel un solo minuto
Bueno, no tengo idea de lo que hablaban, pero parecía que los habíamos impresionado lo suficiente.
Jumba: Bueno... si, tal parece que 123 sería un excelente ejemplo de cómo podemos redirigir el potencial de los experimentos hacia un propósito más benigno -dijo el científico con una mirada pensativa. Su entusiasmo por la posibilidad de colaborar con DNAmy no pasó desapercibido.
Rosa: Entonces ¿Qué dicen de nuestra idea? ¿Nos daría los planos de 007 y 062?
Jumba: Claro, vengan conmigo a nuestra nave, debo tenerlos por ahí -dijo poniéndose de pie.
Pleakley: Sigo diciendo que es una mala idea.
Jumba: Solo imagina que hagan toda una línea de experimentos 254 para tu planeta -sugirió con calma, haciendo pensar al alíen delgado.
Miguel: A todo esto ¿Qué tiene el 254 de especial?
Jumba: Es una bomba apestosa de tiempo, su hedor dejaría inhabitable un área por años, curiosamente, su aroma es algo considerado perfume en el planeta de Pleakley -tuvo la molestia de explicar.
Rosa: ¿Y una llamada Señora Apestosa?
Jumba: Ah, 255, una función parecida, dirían que es una versión mejorada de 254, hasta es apropiado que su lugar fuera siendo su pareja.
Me quedé boquiabierto por un momento. La idea de que existieran experimentos aún más extraños que 123 me pareció al mismo tiempo fascinante y escalofriante. Rosa y yo intercambiamos miradas; nuestro objetivo era claro: llevar la ciencia de los experimentos a un siguiente nivel, pero la línea entre lo que era aceptable y lo que no parecía muy delgada en este contexto. Aun así...
Rosa: Me pregunto cuánto pagarían en el planeta de Pleakley por las parejas de 254 y 255 como para regalarlos en una propuesta matrimonial, san Valentín o algo así -dijo ya con signos de dólar en los ojos.
Miguel: Primero el paso y luego el son, primita -trate de calmar su instinto de negocios.
Momento en que, al apenas salir de la sala, Nani, que estaba con escoba en mano en plan de verse amenazante ya parecía al borde del colapso ¿en serio estuvo todo este rato desconfiando y dejándose llevar por la ansiedad sobre lo que podría salir mal?... pobre.
Nani: ¿Y adonde creen que van ustedes? ¿Son del gobierno? ¿Van a vendernos a las noticias? ¿la policía, los rusos, los chinos? -pregunto exteriorizando la desconfianza inicial.
Solo para que en respuesta Jumba soltara una carcajada.
Jumba: Tranquila, niña grande, ellos sólo desean ayudarnos a traer dinero de verdad a la casa
Nani: ... ¿Qué? -preguntó tras guardar silencio un momento.
Rosa: Tal como escucha -dijo tomando la palabra- le hemos ofrecido al doctor Jookiba trabajo como científico en nuestros laboratorios. Este por ejemplo es su primer pago como bono por adelantado -declaro dándole un cheque a la joven mujer que parecía de piedra de lo rígida que estaba al ver el monto del cheque.
Nani: ... Tengo miedo de que desaparezca si lo suelto... Es mucho dinero.
Rosa: Tengo entendido que han estado teniendo problemas de dinero, le aseguro que eso pronto se solucionará, ¿Quién sabe? Usted hasta podría retomar su carrera de surfista profesional, tengo entendido que tuvo que dejarla para hacerse cargo de su hermana -dijo volviendo a ajustar sus gafas- nosotros tendremos lo que queremos, usted podrá retomar su carrera y su hermana tendrá una buena educación sin preocuparse por los problemas financieros. Todos ganan.
La chica miró el cheque con ojos tan desorbitados que parecía que iba a derrapar a la piscina de las dudas. Su mente se debatía entre la incredulidad y la esperanza, una lucha que reflejaba el peso de las responsabilidades que había estado cargando desde la trágica pérdida de sus padres. A su lado, Jumba disfrutaba de la escena, mientras que Rosa esperaba con una sonrisa sabia.
Nani:... ¿No les gustaría quedarse a cenar?
Miguel: Si no es mucha molestia -dije siguiendo el juego.
Nani: Claro que no, pase usted.
Miguel: Después de usted -dije para que luego los dos nos quedáramos pensando.
Ambos: Pero si ya estamos dentro de la casa -dijimos antes de soltar una leve risa.
Nani: Está bien, creo que... podría considerar la opción. Pero necesito hablar con Lilo y tomar una decisión juntas -explicó.
E instantes después, Nani llamaría a Lilo, lo que generó un aire de expectativa. La famosa pequeña apareció con un vestido colorido, corriendo hacia la sala, su cabello despeinado ondeando tras ella. La inocencia en su mirada transformó la seriedad del ambiente.
Siguiéndola se encontraba otro experimento que parecía una versión más en forma de 625 de color azul, con que este es el famoso 626.
Lilo: ¿Nani? ¿Quiénes son ellos? -pregunta la pequeña que juro que a lo mucho era solo un año mayor a mi hermanita.
Nani: Estaba discutiendo algo importante, Lilo -dijo respirando hondo- estos amigos tienen una propuesta... algo que podría ayudarnos.
Lilo: ¿Ayudarnos? ¿Cómo? -preguntó con la cabeza de medio lado como un cachorrito confundido, es muy tierna.
Miguel: Hola, supongo que ella es con quien nos faltaba hablar, la joven con mente fuera de la caja que arregla los experimentos, la pequeña Lilo -dije agachándome para estar a la altura de la pequeña.
Lilo: ¿Saben de los primos de Stitch? -preguntó con sorpresa.
Rosa: ¿Stitch? Así se llama 626 ¿no? Es un lindo nombre -dijo mirando fijamente a la bola de pelos azul. Quién lo noto y cometió el error de saludar, que aunque se veía raro, a mi prima le pareció adorable, por lo cual el pobre experimentó también acabó apapachado.
Y aunque este si dio pelea a diferencia de 625, rápidamente desistió al ver que mi prima, aunque pareciera delicada y frágil, fácilmente tenía un agarre digno de un marinero.
Lilo: Pero ¿ustedes quiénes son...?
Miguel: Ya habrá tiempo de sobra para hablar de eso en la cena, linda -dije dándole palmadas en la cabeza- por ahora mi prima y yo tenemos asuntos qué atender con tus tíos.
Lilo: ¿Asuntos?
Jumba; No tienes de qué preocuparte niñita. Solo vamos a celebrar qué tengo trabajo -dijo sorprendiendo a ambos niños (ya que al parecer el experimento era un niño más de esa casa por cómo se comportaba).
Lilo: ¿Tienes trabajo?
Stitch: Naga-takabah (no es cierto).
Jumba: Pues sí, Jumba tiene trabajo -dijo feliz.
Nani: Así es. Estas personas están interesadas en contratar a Jumba como científico y le van a pagar salario de científico. Ustedes váyanse a arreglar, como ven, tendremos invitados para cenar esta noche -dijo solo para que ambos, tanto la niña cómo 626 empezaran a hacer pucheros.
¿Así o más claro que son niños pequeños?
Miguel: Haz caso a tu hermana mayor y si quieres luego te muestro un par de trucos -le dije a la menor- como este ¿qué tienes aquí? -pregunte ¨sacando¨ una moneda de la parte de atrás de la oreja de la pequeña- o tal vez... -dije para luego hacer ¨aparecer¨ una flor de la nada y ponerla en el cabello de la menor- una flor para una florecita.
Lilo: Wow
Stitch: ¡Bootifah! (Genial/Hermoso) -dijo emocionado.
Miguel: Ahora, haré más trucos así en la cena. Pero para eso se deben alistar ¿trato? -pregunte en lo que ambos pequeños asintieron y subieron a su habitación.
A medida que la calma regresaba a la sala, me encontraba más relajado, el estrés de la situación se desvanecía lentamente. Tenía una mezcla de emoción y nervios; todo esto era un nuevo territorio para mí, ¡la posibilidad de colaborar con seres extraterrestres estaba tomando forma!
Nani: Yo he intentado por quién sabe cuánto qué Lilo me escuche así y tú lo logras como si nada -me dijo sorprendida.
Miguel: Me imagino, es muy parecida a mi hermana menor -dije con honestidad- el truco está en entretenerlos. Logra hacer eso, y es fácil manejar a los hermanos pequeños -dije en lo que ella solo suspiro.
Nani: El caso es que no es fácil entretener a Lilo, ella es especial.
Rosa: Tomando en cuenta que logró domesticar un arma universal como Stitch, podemos hacernos una idea.
Nani: Sólo tuvo que mostrarle Ohana -declaró con ternura.
Ahí vamos con Ohana otra vez ¿era tan importante esa frase? Bueno, a lo que entiendo significa familia ¿tanto importaba la familia en la cultura hawaiana? Era algo... lindo.
Rosa: Así parece -dijo antes de ver al par de aliens- ¿vamos a la nave entonces, Doctor Jookiba? Seguro que además de los experimentos también tiene otras invenciones a las que podemos darle uso para el mercado
Jumba: Claro, claro -exclamó guiando el camino.
El recorrido en sí fue algo rápido, a pesar de que la nave de Jumba sea algo colosal, su interior era mucho más pequeño que el exterior, que irónico.
Rápidamente llegamos al laboratorio en la nave y fue sencillo hacernos con los planos de los experimentos con los que deseábamos iniciar con la producción en masa.
Miguel: Sabes Rosa. Es curioso, hice todo un complot internacional robando Stonehenge, un Radiotelescopio ruso y una estatua de la isla de Pascua. Y todo lo que tenía que hacer era venir a Hawai 'para hacer contacto con extraterrestres -susurre a mi prima mientras tomábamos asiento en la mesa para la cena.
Rosa: Has perdido el tiempo de formas más tontas, Miguel -declaró con calma ofendiendome.
Miguel: Menciona un ejemplo -pedí, solo para que ella me mostrara que en su celular tiene una lista completa- ... calladita te ves más bonita.
Rosa: En todo caso -dijo mirando al resto de los presentes- el trabajo del doctor Jookiba será el de ser un asesor para la división biotecnológica de Rivera Solutions. Su experiencia nos ayudará en la creación de nuevos especímenes qué serán beneficios para la humanidad en más de un aspecto.
Pleakey: Aunque imagino que también lo tendrán vigilado de que no se emocione creando nuevos experimentos, ¿Verdad? Sólo harán clones de los ya existentes -insistió en dejar ese punto en claro.
Lilo: ¿Clones? ¡Abran más de los primos de Stitch? -pregunto curiosa.
Rosa: Algo así, linda -dijo con dulzura- de momento nuestra intención es hacer Gigis y Frenchfrys para su venta al por mayor. Así como para donaciones en África en el caso de algunos Frenchfry como un proyecto a futuro. Queremos ver que tan bien se pueden adaptar los experimentos con la humanidad a nivel general. Si ellos funcionan bien, probaremos con algunos más y así sucesivamente.
El ambiente de la sala de la nave era ligero e intrépido, casi como una fiesta. A medida que la conversación fluía, comenzaba a sentirme más entusiasmado por el futuro que nos esperaba. La idea de convertir experimentos extraterrestres en productos que no solo ayudarían a las personas, sino que también contarían con el encanto de la cultura nodriza me parecía brillante.
Lilo: Aunque dudo que Mertle los deje acercarse a Gigi -dijo pensativa.
Rosa: Ya sabemos como hacer Gigis, querida. El doctor Jookiba guarda un registro de cómo hizo cada uno de sus experimentos. Todo científico guarda una bitácora de sus creaciones.
Miguel: Igual necesitamos tu ayuda, Lilo -dije sonriendo amablemente- necesitamos que sigas con tu trabajo buscando su hogar a los experimentos qué faltan por encontrar. De ese modo nosotros podemos buscar ese mismo lugar en diferentes partes del mundo para hacer más de ellos al darse la oportunidad.
Y es un hecho que ante esa oferta, la niña nos miró con atención, sus ojos brillando con una mezcla de emoción y desafío.
Lilo: Lo haré con gusto, y ni el fantoche evitará que los encontremos todos.
¿Fantoche? Oh claro, habla de Gantu.
Miguel: Del fantoche no te preocupes. Nos ocupamos de él -dije para sorpresa de todos los presentes.
Todos: ¿De verdad?
Miguel: Así es. En cierto modo le buscamos su "hogar real" -dije divertido- trabajo remunerado de guardia de seguridad en la empresa. Obviamente lo tendremos vigilado, pero parecía bastante feliz de tener un trabajo real nuevamente.
Rosa: Y ayudó que nos ofrecimos a pagar sus deudas, ¿Sabían que Hämsterviel le pagaba con su propio dinero? -pregunto haciendo reír al científico.
Jumba: ¿El mismo que como él está preso, y no gobernando la galaxia, no vale nada? -mencionó sacando risas a todos.
Lilo: Aún me río al recordar la cara de Mertle cuando le dijeron que casi todo el dinero que recaudó era falso.
Vaya que esta era una familia muy única, la mitad literalmente eran de otro mundo, y sin embargo, se complementaban tan bien. Supongo que es cierto que la familia no solo es de sangre, tu la eliges también... aunque eso yo ya lo sabía, Leo y Marco son la prueba de eso.
Miguel: Nada como el poderoso dólar en cambio -dije contagiado por las risas- en fin. Nada los molestara en su búsqueda de los experimentos, y si sucede algún imprevisto pueden decirnos. Nos ocuparemos.
Rosa: Además, para aclarar, el trabajo del doctor Jookiba será asesoría genética, pero también le ofrecemos trabajar desde casa en nuevos inventos para la empresa. A no ser que prefiera irse con nosotros a la ciudad ¿Doctor? -preguntó al alíen que parecía ansioso de aceptar.
Antes de recibir otro codazo del tipo de un ojo que señaló con la cabeza a la pequeña que parecía triste de que Jumba se fuera, lo que hizo al grandote aclararse la garganta.
Jumba: Si bien suena tentador, no me veo dejando a mi Ohana... Además, dudo que en San Fransokyo haya tan buen oleaje como aquí, Jumba necesita sus sesiones de surf para despejar la mente -dijo ahora para mi sorpresa.
Miguel: ¿Usted surfea? Ahora lo he visto todo.
Pleakley: Una ventaja de ser parte de ésta chiquita y rota familia es que aprendes a apreciar el surf -dijo amablemente.
Rosa: Pues ya que estamos en esas entonces... Si usted quisiera regresar al circuito profesional como surfista, señorita Pelekai -dijo mirando a Nani- no tendríamos problema alguno en ser sus patrocinadores.
La sala se convirtió en un bullicio de ideas y posibilidades tras la sugerencia de Rosa, mientras todos empezaban a pensar en el potencial de la oferta. La mirada de Nani pasó de sorpresa a incredulidad y luego a emoción mientras asimilaba lo que acababa de oír.
Nani: ¿Patrocinadores? ¿En serio? -preguntó con los ojos abiertos como platos, sorprendida por lo inesperado de la propuesta.
Rosa: Absolutamente. Con la financiación que podemos ofrecer, podrías tener acceso a los mejores entrenadores, equipamiento, y tal vez incluso conseguir un lugar en las competiciones internacionales.
Miguel: Imagínate, Nani, haciendo grandes olas y compitiendo de nuevo, mientras tu hermana y los experimentos nos acompañan. Sería un gran espectáculo.
Lilo: ¡Oh, yo quiero ir! -exclamó la pequeña con entusiasmo, mientras Stitch también movía las manos, haciendo gestos que mostraban su apoyo.
Sacando una sonrisa de ternura y nostalgia a la joven que parecía limpiarse un par de lágrimas disimuladamente. No la puedo culpar, ella seguro pensó que volver a los viejos días sería algo que nunca podría volver a hacer.
Nani: Gracias, mahalo mucho, de verdad.
Miguel: En cuanto a ti -dije mirando a la niña- ¿no hay nada que quisieras? Igual en cierto modo trabajarás para la empresa ¿no te gustaría algo? Adelante, puedes ser un poco exigente, pide lo que quieras -pedí amablemente a la pequeña.
Que solo se quedó pensando un largo rato antes de solo encogerse de hombros.
Lilo: De momento no se me ocurre nada. Tengo a mi Ohana y tengo a Stitch. Estoy muy feliz ahora -dijo dándome una sonrisa que me conmovió.
De verdad era como ver a mi hermanita, los niños pequeños siempre serán mi debilidad. Los pequeños e inocentes que la sola idea de corromper sus bellas mentes sería el peor de los pecados.
Miguel: Si llega a ocurrir algo, no dudes en hacérnoslo saber -dije antes de ver a la bola de pelos azul- hey, peludo. Sigue cuidándola como hasta ahora, es una pequeña muy especial.
Stitch: ¡Accata! (claro) -dijo asintiendo con orgullo en lo que mi prima solo vio al experimento para luego suspirar.
Rosa: Es una lástima que su programación original sea la de un arma de destrucción masiva -dijo encantada con Stitch- más de un niño o niña les encantaría tener uno como mascota, lo apuesto -mencionó haciendo que la pequeña niña abrazara a su amigo y mascota de forma posesiva.
Lilo: No, mi Stitch es único en el universo entero -dijo sacándonos otra oleada de risas a los demás presentes acompañadas de expresiones de ternura.
De ese modo la cena transcurrió sin incidentes, y antes de darnos cuenta, ya nos estábamos despidiendo de la familia Pelekai prometiendo ponernos en contacto, y al ver la foto que previamente estaba boca abajo para que no la viéramos es que podía decir que... era una linda familia.
Para luego, sin más que hacer, charlar con mi prima de camino a la limosina.
Miguel: Bueno, eso salió mucho mejor de lo que esperaba ¿No crees?
Rosa: Bastante -dijo mientras hacia quien sabe cuantas cosas en su celular, de verdad que mi prima era de esas personas que veían la diversión en el trabajo- déjame adivinar. Tu motivación principal para hacer todo esto es ver si alguno de los 627 experimentos sería un gran regalo para Hiro ¿no es verdad? -preguntó con neutralidad.
...
...
Típico de Rosa, descubrió como si nada mis verdaderas y oscuras intenciones.
Miguel: ¿Y para qué te digo que no? Aunque primero tendríamos que esperar por obvias razones, es una idea en pañales apenas -admití- ... por cierto, ya le dije a Amy qué guardara una pareja de patos tortugas para Hiro. Serán un regalo perfecto cuando los saquemos al mercado en unas semanas -dije en lo que mi prima solo sonrió de forma condescendiente al ver mi sonrisa de bobo.
Rosa: Se que le encantará. Aunque al final tendrás que conseguirle un parque privado o un invernadero para guardar todas las mascotas qué quieres regalarle -dijo en lo que yo me encogí de hombros sin necesidad de negar nada.
A fin de cuentas era la pura verdad.
Miguel: Ese es el plan a grandes rasgos -dije para luego mostrarle el talismán- en todo caso. Mira, misión cumplida, el poder es super velocidad. Y por cierto, sigo sin creer que Aesop al final fuera hembra.
Rosa: Y eso es lo menos raro si lo piensas -dijo en lo reflexionaba mirando el cielo nocturno- habrá qué hacer pruebas como hicimos con el del buey qué es capaz de levantar hasta mil toneladas y puede que hasta más, mucho más. ¿A qué velocidad crees poder llegar con el poder del conejo, primo?
Miguel: Esa de hecho es una buena pregunta. Dudo que algo exagerado como la velocidad de la luz pero quizás más rápido que el sonido tal vez, no lo sé.
Rosa: ... Ya me dio curiosidad, conseguiré una pista de atletismo para hacer las pruebas respectivas, o bien podemos solo habilitar la isla akuma para dicha finalidad -mencionó pensando en voz alta.
Momento en el que recibí una llamada de mi buen amigo Marco de la Cruz... oh genial, a ver en que metió la pata esta vez.
Miguel: ¿Diga?... aja, si, aja... ¡¿Cómo que perdiste a Ringo?! Espera... de todos los nombres, ¿le pusiste al mono de un millón de dólares de mi papá, Ringo?
Marco: ... Es un chimpancé, concéntrate, Miguel -dijo para mi consternación.
Miguel: ¡Me vale cual de ustedes dos es más tonto! ¿Cómo rayos lo pudiste perder?
Siendo de allí que escuche la historia más ridícula de cómo Marco se la paso adiestrando el mono para al final terminar atacado por bananas, cacahuates y mangos para luego solo ver como el mono escapó por la ventana cansado de mi amigo y sus gustos musicales, ya que si, Marco también canso al mono de tanta música para ver cuales eran los éxitos actuales de quien sabe cuantas bandas sin darle un descanso.
Honestamente no sé quien es más mono ahora mismo, Marco o el simio.
Rosa: Solo dile que lo busque en la autopista, seguro está allí pidiendo un aventón -dijo suspirando- aunque sigo diciendo que yo soy mucho mejor consejera que ese mono, tal vez no sepa de como hacer musica pero si de estadísticas. Crazy Land es un grupo por encima de las bandas actuales que les quedan un año o dos máximo, mientras que las melodías de nuestra banda son melodías contagiosas, clásicos del pop, que aplastara el segmento de 6 a 16 años o hasta más.
Vaya...
Miguel: Claro, claro, dejemos a Ringo en paz por un momento. -dije, intentando retomar el control de la conversación con Marco mientras Rosa seguía cavilando sobre el futuro de la banda.
De momento la cuestión era simple, recuperar al mono, luego hacer las pruebas del talismán del conejo, los ensayos de la banda, la escuela con el profesor robot y si queda tiempo al fin dedicarme a mis proyectos personales.
... ¿Me pregunto cómo la estará pasando, Hiro?
___________________________________________________________________________
(General Pov)
(Instituto de arte de San Fransokyo, USA)
Leo: Catorce mil trescientos diecisiete, catorce mil trescientos dieciséis, catorce mil trescientos quince, catorce mil trescientos catorce... ¡la estoy pasando horrible! -exclamó mientras movía toma por toma de unas figuras de arcilla- catorce mil trescientos trece...
Hiro: ¡Es todo! Mejor empezamos ya con el dibujo y dejamos la introducción al estilo Stop Motion como una entrada de veinte segundos -dijo evidentemente agotado- ¡¿como rayos nos tomó toda la tarde hacer solo veinte segundos de rodaje de stop motion?!
Leo: Y agradece que estoy tan harto como tu, porque mi idea original de que fuera un proyecto de diez minutos al menos usando este método ¡al diablo diez minutos! ¡Hablamos de más de catorce mil capturas de movimiento! Y lo que hemos hecho hasta ahora nos tocó repetir y reiniciar varias veces -dijo dejándose caer contra el respaldar del sofá cansado.
Hiro: ¡Eso es porque al igual que yo tristemente eres un perfeccionista! -dijo alterado- y solo para aclarar, son catorce mil trescientos veinte y un clicks... de los cuales llevamos catorce mil trescientos trece, y ahora solo solo catorce mil trescientos doce clicks -dijo pulsando el botón de la cámara.
Leo: Hacer esto fotograma por fotograma, este es masoquismo real y del bueno -dijo tirando la mesa con todo el escenario- bueno, esto ya no lo necesitaremos más, la animación stop motion es pura maldad.
Y así literalmente el esfuerzo de un día entero (como de la una de la tarde más o menos hasta la medianoche) de trabajo acabó tirado en el piso como si no valiera nada ¡y era solo el primer día!
Leo: Creo que lo que necesitamos es un nuevo enfoque. No sé, algo más dinámico que muestre nuestra creatividad sin hacernos perder la cordura.
Hiro se quedó en silencio un momento, observando la mezcla de pasión y frustración en el rostro de su amigo.
Hiro: Tal vez... tal vez podamos combinar los estilos. ¡Podríamos mezclar la animación stop motion que ya hicimos con un dibujo animado! ¡Así podemos usar algunos de los conceptos que ya tenemos sin tener que rehacer todo!
Leo miró a Hiro con curiosidad, su mente empezó a funcionar nuevamente con esa chispa de emoción.
Leo: Hmm, eso podría funcionar. Podríamos hacer que los personajes animados se "salgan" del marco de la animación stop motion, como si interrumpieran la escena y se convirtieran en animación tradicional pero mezclado con panoramas 3D. ¡Eso le daría un giro único a la narrativa! Y es un corto a fin de cuentas.
Así el nipón le sonrió, y ambos comenzaron a garabatear nuevas ideas en una hoja de papel. La energía positiva comenzó a fluir de nuevo mientras compartían risas y guiños de complicidad.
Hiro: Habrá que trabajar en la banda sonora, eso es un hecho también.
Leo: ¡Sí! La melodía tiene que tener el ritmo clave esencial. Deberíamos grabar primero y luego ajustar la animación para que coincida con los momentos clave de la música una vez esté compuesta.
Hiro: Entonces, ¿Qué estamos esperando? ¡Vamos a grabar esa melodía! Luego podemos dar el siguiente paso y redibujar a los personajes para que encajen con el nuevo diseño, y así de paso trabajamos en el storyboard.
Leo: Catorce mil trescientos trece clicks... ¡Lo que menos importa ahora! ¡Estamos por hacer algo grandioso! Pero ¿no deberíamos dormir aunque sea un poco?
Hiro: ¿Dormir? ¿Con que se come eso?
El par intercambió miradas y sonrisas, ya estaban decididos, ahora que oficialmente empezaron el proyecto, tendrían que matarlos para dejarlo. Absolutamente nada podría distraerlos de esto así como del resto de sus responsabilidades, nada.
___________________________________________________________________________
(Un par de días después)
(Isla Akuma, San Fransokyo, USA)
Rosa: Bien, empecemos con esto -dijo con un cronómetro y su tablet en mano- la isla entera fue habilitada para estas pruebas. La idea es que primero vayas lo más lento posible y vayas avanzando la velocidad.
Miguel: Entiendo, solo es dar vueltas por la pista hasta no poder más, ya sea la pista de atletismo o yo -dijo con el talismán del conejo en mano- ¿Qué tanta velocidad sería la que concede la super velocidad?
Rosa: Bastante -dijo mientras ajusta el cronómetro- correcto. Comencemos con una salida suave. Yo te iré guiando, y cuando sientas que estás cómodo, podemos ir aumentando la velocidad. ¡Recuerda, la carrera es tan mental como física!
Con la orden dada, su primo se colocó en la línea de salida, respirando hondo y concentrándose. La atmósfera está llena de anticipación, el sonido del mar rompiendo suavemente en la orilla de la isla. La pista es amplia y marcada con líneas vibrantes, rodeada de vegetación que floreció luego de la constante destrucción de la isla. Rosa se coloca a un lado, lista para medir el tiempo.
Rosa: ¡Listo! En tres, dos, uno... ¡Corre!
Así el moreno dio su primer paso, sintiendo la brisa fresca en su rostro. Comienza despacio, intentando encontrar el ritmo adecuado. A medida que sus pies tocan el suelo, comienza a sentir una ligera energía que lo impulsa. Sonríe al darse cuenta de que está empezando a disfrutarlo.
Miguel: ¡Esto es increíble! Siento que podría seguir para siempre, y eso que apenas he comenzado -dijo sin darse cuenta de que ya estaba dando vueltas a la pista dignas de un atleta olímpico.
Rosa: ¡Buena señal! Ahora, poco a poco, aumenta la velocidad. No fuerces nada; escucha a tu cuerpo.
En lo que su primo asintió y gradualmente aceleró. Cada zancada se siente más potente, y se da cuenta de que puede controlar la velocidad. Con cada vuelta a la pista, su confianza crece. La emoción de la velocidad lo envuelve, y siente que el talismán comienza a responder a sus deseos.
Rosa: ¡Esto es impresionante! Ahora, intenta aumentar la velocidad aún más. ¡Vamos! ¿Cómo te sientes?
Miguel: ¡Increíble! Siento que quiero hacer más. Pero... debo recordar no dejarme llevar demasiado.
Rosa: Bien dicho -dijo mientras observaba como su primo era solo un borrón que corría en círculos en toda la pista. Ya los medidores de velocidad se averiaron y solo quería comprobar que tanto podía moverse, igual pronto debían parar.
Miguel comienza a aumentar la velocidad nuevamente, sintiendo cómo el aire lo envuelve. La pista se convierte en un borrón a su alrededor. Para él, cada paso se siente como un latido de adrenalina pura. Al punto de solo desconectar y dejarse llevar.
Rosa: ¡Atención! ¡Cuidado, Miguel! Recuerda que la velocidad puede ser tu aliada, pero también tu enemiga. ¡Un paso a la vez! -dijo solo para ser ignorada.
Y cuando menos se lo esperaba, su primo solo desapareció, dejando nada más lo que parecía ser una especie de fisura hecha en el mismo espacio tiempo aparentemente resultado de que la velocidad llegó a tal punto que rompió la tela misma de la realidad.
Pero antes de que pudiera empezar a angustiarse fue que vio a su primo salir como si nada de la fisura la cual se cerró para su gran alivio. Con la diferencia de que Miguel ahora se veía chamuscado con hollín en todo el cuerpo y algunas partes de su ropa medio quemadas, si, debió tomar en cuenta la fricción a la hora de ir a altas velocidades. Pero lo más extraño del asunto... era otra cosa.
Rosa: OK... ¿A dónde fuiste? ¿Por qué tienes partes del cuerpo algo quemadas?... ¿Y quién es ese que estás cargando? -preguntó señalando un cuerpo de alguien inconsciente en brazos de su primo.
Miguel: Ni idea. Solo hice lo que me pediste. Corrí sin parar dando vueltas por todo el campo de pruebas, qué por cierto, esta cosa se rompió -dijo señalando un medidor de velocidad en su pecho- cuando lo siguiente que supe era que estaba en el interior de un edificio en llamas y me fui antes de que todo explotara... De paso atrapando a este tipo que literalmente vino volando hacia mi por la explosión... ¿Vaya que tuvo suerte, no? -pregunto en lo que su prima miró al hombre.
Que obviamente necesitaba atención médica inmediata, y no era doctora pero definitivamente el hombre terminó con quemaduras de tercer grado muy severas que si o si dejaran cicatrices. Pero conforme más observaba al hombre joven más ganas tenía la joven de querer jalarse el cabello por la comprensión de lo sucedido.
Rosa: Miguel... -dijo tensa.
Miguel: Si ¿dime?
Rosa:... Estás cargando a alguien que debería estar muerto.
Miguel: ... ¿Perdón? -preguntó con incredulidad.
Rosa: Ese es Tadashi Hamada, el que tu aspiras que sea tu cuñado
Miguel se detuvo por un momento, sus ojos se ampliaron al escuchar el nombre. Tadashi Hamada, conocido por su inteligencia y brillantez, el hermano de su crush actual, Hiro y, de manera reciente, amigo de la familia y empleado de la empresa. La idea de que estaba cargando a alguien tan importante, que además supuestamente había vuelto de una experiencia cercana a la muerte, era abrumadora.
Miguel: ¿Cómo es posible que esté aquí? ¿Y por qué está así?... ¿El talismán me hizo viajar a una dimensión diferente o en el tiempo o algo así? -pregunto en shock.
Su prima, visiblemente nerviosa, se acercó a Tadashi, observando su respiración irregular y la forma en que su piel estaba grisácea debido a las quemaduras. Su mente se llenó de incertidumbre y temor.
Rosa: Sólo sé que ahora sí la jodiste, digo, solo lo he visto en fotos y ahora no se parece en nada a las fotos, pero si es él. ¡Gantu! -grito llamando al gigantón que estaba cerca patrullando por motivos de seguridad- Miguel, dáselo. Gantu, qué nadie lo vea, déjalo en una de las habitaciones en Rivera Genetics. Vigila qué nadie se le acerque hasta que despierte, qué nada le pase ¿entendido?
Gantu: Tu mandas, Rosa -dijo llevándose al tipo que seguía en un aparente coma por la explosión de la que sobrevivió aparentemente.
Rosa: Y tu ven aquí -exclamó jalando la oreja de su primo- vamos a discutir esto con el tío y veremos qué hacer ¿entendido? -pregunto para que luego ambos se fueran sin más.
Y así, las cosas se complican aún más.
Notes:
Y así termina el capitulo, como siempre pueden votar, comentar, lo que gusten.
¿Y que les pareció?
Si, Tadashi esta vivo, o en este caso nunca murió. El talismán del conejo puede viajar al pasado o al futuro si se viaja a la suficiente velocidad. ¿Cómo se tomaran las cosas a partir de ahora? Lo averiguaremos
De momento, nos vemos.
Chapter 19: Capitulo 17: Sombras del ayer
Notes:
(See the end of the chapter for notes.)
Chapter Text
(Rivera Genetics, San Fransokyo, USA)
(Tadashi Pov)
El fuego, había fuego y humo en todas partes; lo recuerdo con claridad. El calor era abrumador. Pero ahora... estaba en un lugar donde el aire acondicionado enfriaba mi piel; el aire era gélido. La temperatura del susto ardiente parecía fundir la realidad en una espiral de luz y oscuridad. Intenté abrir los ojos, pero mis párpados pesaban como si los hubieran sellado con plomo. Uno de ellos estaba cubierto por capas de algodón y vendas, al menos eso creía. Un zumbido resonaba en mi cabeza, una mezcla de sonidos distantes y susurros apagados.
El último recuerdo que tenía era el humo, espeso y negro, envolviendo la sala de exposiciones como una serpiente devoradora. Escuché los gritos y, entre el caos, busqué a la única persona que en lugar de huir, no se le vio salir de las llamas: el profesor Callaghan. Gracias a él había logrado entrar a la universidad y llegar hasta ese instante; debía salvarlo. Sin pensarlo, corrí hacia el fuego; mi corazón latía desbocado, no solo por el pánico, sino por el fervor de ayudarle. Cuando crucé la entrada del edificio, las llamas danzaban como demonios y el calor me asfixiaba. No obstante, no me detuve. En medio del caos, busqué al profesor, quien seguramente estaba atrapado y herido, incapaz de salir con los demás.
Pero no había nadie. Me sentía atrapado. Busqué con desesperación, pero no encontré nada. Y cuando menos lo esperaba, un par de tanques de combustible, que algunos estudiantes seguramente usarían para sus presentaciones, estallaron... y eso es lo último que recuerdo.
Ahora despertaba en lo que parecía un hospital, o al menos la habitación donde me encontraba tenía esa apariencia. La luz blanquecina del lugar me deslumbraba, y un olor a desinfectante me envolvía como un manto incómodo. Parpadeé varias veces, tratando de enfocar mi visión. A mi alrededor no había ni un alma; sólo el suave sonido de las máquinas que medían mi estado de salud y las que se aseguraban de administrarme debidamente medicamentos por tubos conectados a mis brazos.
Tadashi: ¿Qué ocurrió? ¿Dónde estoy? ... ¡El incendio! ¡El profesor Callaghan! -dije intentando levantarme, pero un dolor punzante me detuvo. Fue entonces cuando lo vi.
A pesar de lo extraño de la situación, había algo familiar en todo esto. Sin embargo, mi atención se desvió hacia la peculiar criatura frente a mí, que a simple vista parecía un extraño peluche amarillo, y la cual estaba... preparando sándwiches.
Reuben: ¡Por fin despertaste, amigo! ¿Quieres un sándwich? -ofreció, mostrando un emparedado de una enorme pila que tenía a su lado mientras comenzaba a preparar otro.
Tadashi: ... ¿Qué demonios...?
Reuben: Tengo de todo tipo -exclamó, ignorando mi confusión- sándwich de jamón, mi famoso sándwich de queso derretido y pastrami. También de pollo, de huevo, de mantequilla de maní con jalea...
Tadashi: Espera, espera, espera... -lo interrumpí- primero, ¿Qué eres tú?
Reuben: Mi número de serie es 625, pero puedes llamarme Reuben, fue el nombre que me dio la pequeña Lilo antes de irme de Hawái -dijo, dejando a mis pensamientos en un mar de dudas sobre lo que eso significaba- en términos sencillos, soy un experimento genético, aunque prefiero considerarme un maestro sandwichero. Me dijeron que debía cuidarte después de que te trajeran aquí. Escuché que sobreviviste a un incendio, ¡eso es impresionante!
... Ya no entiendo nada.
Tadashi: Esto es completamente surrealista... -dejé caer la cabeza sobre la almohada, sintiendo que el mundo a mi alrededor giraba. El incendio y el profesor Callaghan ocupaban mis pensamientos- sobreviví al incendio... ¿Qué sucedió con el profesor Callaghan... Reuben?
Reuben: No lo sé, solo te trajeron a ti -respondió, mientras yo luchaba por levantarme, esforzándome por no dejar escapar un grito de dolor, ya que sentía como si mi cuerpo estuviera cubierto de agujas- no, espera, ¿Qué estás haciendo?
Tadashi: Necesito encontrar respuestas, tengo que ir a buscar a alguien que me las dé.
Reuben: No te lo recomendaría. Gantu está vigilando -dijo al darse cuenta de que me dirigía hacia la puerta- le han ordenado que no deje entrar a nadie. Al igual que no te permita salir, es por tu propio bien.
Tadashi: ¿Mi propio bien? ¿A qué te refieres? -pregunté, confundido.
Reuben: Según tengo entendido, todos creen que estás muerto. Si de repente te ven, eso generará un gran alboroto -respondió con tranquilidad- no sé cuánto tiempo has estado dormido, pero parece que llevas ausente bastante tiempo.
¿Muerto? La idea me hizo temblar. Si la gente creía que yo había muerto, eso significaba que...
Reuben: Vamos, no vas a lograr nada con el estómago vacío. Come algo y tomemos esto con calma -dijo mientras me ofrecía otro sándwich. Lo acepté en silencio y comencé a comer-. Supongo que tendrás muchas preguntas. Intentaré responderte lo mejor posible.
Tadashi: Bueno, empecemos por el principio. ¿Dónde estoy? ¿Qué es este lugar?
Reuben: Bienvenido a Rivera Solutions, antes conocida como KreiTech -dijo sin más- Actualmente te encuentras en las oficinas que solían ser de Sycorex, hasta que Rivera Solutions adquirió la empresa, que ahora se llama Rivera Genetics.
Tadashi: No entiendo -admití, confundido-. ¿Qué pasó con Alistair Krei y Liv Amara? ¿Quién es el jefe de la empresa ahora? -pregunté, mientras Reuben sonreía con un aire divertido.
Reuben: Por lo que hemos escuchado, Alistair Krei intentó hacerse el listo con el nuevo dueño y terminó perdiéndolo todo. En cuanto a Liv Amara, fue un caso interesante: intentó experimentar con algo llamado parasintos. Spoiler: salió mal, se clonó para que su clon averiguara cómo salvarla, pero no contaba con que el clon haría lo que fuera necesario, incluso aterrorizar San Fransokyo. Cuando todo eso salió a la luz, arruinó la reputación de Sycorex. Ah, y el nuevo dueño, nuestro jefe, se llama Héctor Rivera; él fue quien ordenó que nadie te viera hasta que él lo hiciera primero.
Tadashi: ¿Y tú... ¿eres un experimento de Sycorex que prepara sándwiches? Por cierto, muy buenos. ¿Me das otro? -pedí, dándome cuenta de lo hambriento que estaba.
Reuben: Claro, aquí tienes, de ensalada de huevo -me lo entregó.
Tadashi: Gracias
Reuben: En cuanto a tu pregunta, no exactamente. Fui creado por otro científico. Aunque este científico fue contratado hace poco, así que se podría decir que soy algo así como un invento adquirido -y se encogió de hombros-. Por cierto, es un placer hablar contigo.
Tadashi: Igualmente, Reuben -le sonreí con amabilidad-. Entonces, ¿piensan que estoy muerto? ¿Qué pasó con mi hermanito y mi tía?
Reuben: Por lo que escuché, están bien. Ella sigue con su café y él está estudiando en la universidad, aunque, evidentemente, todavía te extrañan -dijo, haciendo que un nudo se formara en mi garganta-. De hecho, según el hijo de mi jefe, que se ha hecho muy amigo de tu hermano, todavía eres un tema delicado para él.
Sin más, el extraño ser continuó preparando sándwiches mientras yo absorbía la información, intentando darle sentido a todo lo que me estaba diciendo. La mezcla de ansiedad y confusión se apoderaba de mí, pero una parte de mí también sentía un extraño alivio al saber que mi tía y mi hermano estaban bien. No había podido evitar imaginar lo peor.
Tadashi: ¿Y cómo es que termina aquí, en este lugar extraño?
Reuben: Parte de la "nueva dirección" de Rivera Genetics es investigar lo que ha ocurrido contigo, al principio la idea era solo cuidarte hasta que tus heridas sanaran, pero descubrieron algo interesante, parece que acabaste bañado con algunos químicos en el momento de la explosion y para limpiarte del todo hubo que usar muchos purgantes y desintoxicantes, de allí tu cabello blanco.
Tadashi: ¿Qué? ¿Cabello blanco? -pregunte antes de verme en el reflejo de la ventana junto a mi cama para ver que en efecto, mi cabello paso de ser negro a un blanco opaco- ... parezco un abuelo... ¿y estas son quemaduras? -dije mirando la piel en carne viva que se asomaba debajo de los vendajes.
.... Me veré horrible cuando me quiten los vendajes.
Reuben: Tras el incendio, tu caso llamó la atención del nuevo equipo científico. Según lo que he escuchado, tienes habilidades especiales -explico- ahora, están decididos a investigarlas y desarrollarlas, aunque no sé en qué grado. Como te dije, quieren asegurarse de que estés a salvo antes de que se te permita salir.
Tadashi: ¿Habilidades especiales? -pregunté, sorprendiendo. Los recuerdos del fuego, de la desesperación al querer salvar al profesor Callaghan, comenzaron a mezclarse con esa nueva información. ¿Qué podía significar eso?
Reuben: Sí, tienes un potencial único. Se rumorea que tu capacidad para manipular la energía se volvió más pronunciada en el incendio. Los científicos de esta empresa creen que podrías ser parte de un nuevo avance en el campo de la biotecnología. Aunque no puedo decirte mucho más, ya que esos son los secretos de la empresa.
Mientras conversábamos, un sonido resonante interrumpió el ambiente en el pasillo. Reuben se quedó quieto de inmediato, girando su cabeza para concentrarse en la puerta. Esta se abrió abruptamente, revelando a un hombre de aspecto ordinario, que aparentaba estar en sus cuarenta o cincuenta años que caminaba con un bastón aunque no parecía necesitarlo. Detrás de él se encontraba... seguramente era otro experimento; por su apariencia, me atrevería a decir que era el tal Gantu.
Reuben: Parece que el jefe está a punto de verte -comentó.
Gantu: Nadie ha entrado, señor. Y el joven invitado no ha intentado escapar en absoluto -respondió la enorme criatura mientras el hombre simplemente hizo un ademán para luego abrirse paso.
Héctor: Gracias, Gantu. Ve a almorzar. Tú también, Reuben. Regresen en una hora. Yo me ocuparé de nuestro joven invitado -pidió, haciendo que ambos se retiraran para luego tomar asiento en una silla cercana a mí- Genial, Reuben dejó la bandeja de bocadillos. Adoro esa bola de pelos... -dijo, tomando un emparedado- En fin, entonces tú debes ser el famoso Tadashi Hamada.
Tadashi: ¿Y usted es...? -pregunté mientras él soltaba una risa contenida.
Héctor: ¿Dónde están mis modales? Soy Héctor Rivera. Fui conocido anteriormente como un músico famoso. Actualmente, soy la persona más rica de la ciudad y el CEO principal de Rivera Solutions. Por cierto, tu hermano trabaja para mí -reveló, dejándome desconcertado.
Tadashi: ¿Hiro está aquí? ¿Está bien? ¿Cómo es que trabaja si aún está en la universidad? No está descuidando sus estudios, ¿verdad? -pregunté, visiblemente alarmado, para diversión del hombre mayor.
Héctor: Él comenzó como pasante. Insistió en ser contratado aquí cuando la empresa aún pertenecía a Krei.
Tadashi: ¿Qué?... -fue lo único que pude decir- Hiro no haría eso. Krei es una rata.
Mis pensamientos giraban a mil por hora. La idea de que Hiro estuviera trabajando para Krei, incluso como pasante, me resultaba inquietante. Pero al mismo tiempo, si de verdad esta gente estaba siendo honesta conmigo, el hecho de que estuviera bien me dio tranquilidad. Aun así, tenía que saber más.
Héctor: Hiro estaba al tanto de todo eso, pero se enteró de que su rival de entonces comenzó una pasantía en Sycorax, y quiso demostrar que él también podía hacer algo así -me confesó.
Tadashi: ¿Hiro ya tiene un rival? -preguntó, con un aire de ternura y diversión ante la idea- me parece que me he perdido de mucho... ¿Cuánto tiempo llevo... muerto?
Héctor: ... Creo que lo mejor será que te sientes -dijo, mientras yo obedecía con dificultad, ya que apenas me había acostado de nuevo- muchacho, el incendio en el que se suponía que debías haber muerto, del que mijo te salvó, fue hace más de un año -reveló dejándome en shock.
Más de un año... los ecos de esas palabras resonaron en mi mente como un eco lejano que no podía absorber del todo. La información me golpeó como un puño, haciéndome perder la noción de todo lo que había creído saber. Mi mente luchaba por asimilarlo.
Tadashi: ... ¿He estado en coma todo este tiempo? Espere, ¿su hijo fue quien me salvó? -dije con incredulidad, bajando la cabeza para hacer una reverencia- así que... supongo que estoy en deuda con él y con usted.
Héctor: No, no -respondió moviendo la mano despectivamente- mi hijo, al hacer pruebas con una forma de súper velocidad, logró viajar en el tiempo justo al momento del incendio y te trajo al presente. Desde nuestra perspectiva, borró tu presencia de ese instante en el tiempo, en otras palabras, te salvó de la explosión que estaba por ocurrir -dijo mientras yo trataba de procesar toda esa información.
Tadashi: Súper velocidad... Vaya, tiene grandes ambiciones, ¿no, señor? -comenté con una leve sonrisa- más de un año... Mi familia... Debieron estar tan tristes -dije, solo para que el tipo soltara una risa cansada.
Héctor: ¿Tristes? Eso sería asumir que no te querían tanto, muchacho. Tu tía se sintió culpable por no haber podido cuidar de ti; y tu hermano... estuvo a punto de tirar por la borda la oportunidad que le ayudaste a conseguir, sentía que sin ti para sentirse orgulloso, su vida ya no tenía sentido -exclamó mientras se quitaba el sombrero- y lo de Callaghan no ayudó...
Cada palabra de Héctor era como un dardo, atravesando la coraza de mis pensamientos. Luchar por entender que había sobrevivido a algo tan desastroso, pero a expensas de dejar a mis seres queridos en una tormenta de dolor y tragedia, me partía el corazón. La imagen de Hiro, un niño lleno de vida y empuje encaminado por el buen camino luego de tanto esfuerzo, manchado por la tristeza, me dolía más que cualquier quemadura en mi piel. Pero lo ultimo que dijo...
Tadashi: Lo de... ¿El profesor murió? -pregunté con tristeza y algo de enojo, no podía creerlo.
Héctor: ... No... El no murió... -dijo, pero el tono de voz fue... denso.
Tadashi: ¿Qué? ¿Está bien? -pregunte solo sacando otro suspiro al hombre.
Héctor: Chico, antes de decirte esto, tengo que pedirte que, pase lo que pase, mantengas la calma
Tadashi:... ¿Qué sucede? -pregunte con seriedad, teniendo un mal presentimiento al respecto.
Héctor: Escucha... El profesor Callaghan... Fue quien provocó el incendio en el que se supone que debiste morir.
Sin más me quedé paralizado, mis pensamientos estaban dando vueltas en su cabeza mientras las palabras de este sujeto resonaban en sus oídos. "El profesor Callaghan... fue quien provocó el incendio". No podía creer lo que acababa de escuchar.
Tadashi: ¿Qué? Eso no puede ser cierto... -mi voz era un susurro, me encontraba casi perdido en la confusión que invadía mi mente.
Héctor: Lo sé, lo sé... es difícil de asimilar, pero es la verdad -dijo mientras negaba- no miento, muchacho, él provocó el incendio porque quería los microbots de tu hermano, y usó el fuego para cubrir el robo -reveló mientras sacaba una licorera de su bolsillo y le dio un trago- mejor ponte cómodo, esto va para largo.
A partir de ese momento, pasamos cerca de dos horas hablando sobre los eventos que ocurrieron después de lo que la mayoría conoce como mi "muerte". Resultó que el profesor Callaghan había sobrevivido al incendio y, utilizando los microbots de Hiro, decidió convertirse en un villano estereotipado de cómic llamado Yokai. Su objetivo era vengarse de Alistair Krei, a quien culpaba por la desaparición y aparente muerte de su hija Abigail. En su afán de venganza, casi logra arrastrar a toda la ciudad con él y Krei de paso.
Mi mente no pudo soportar la revelación.
Tadashi: Pero... él... -susurré con incredulidad- El profesor Callaghan es una de las razones por las que San Fransokyo es tan avanzada hoy en día. Revolucionó los campos de electrónica, mecánica y programación. ¡Creó la ley Callaghan de la robótica! ¡Y la curva cadmul de Callaghan en matemáticas! ¡Yo lo admiraba! ¡Si llegué a donde estoy fue gracias a él! -expresé con un profundo estado de negación, provocando solo una mirada de compasión por parte del señor Rivera.
Héctor: Muchacho, ¿Qué gano yo mintiendo sobre algo tan serio? Puedes comprobarlo tú mismo -me respondió, señalando una laptop en la esquina de la habitación.
Me quedé en silencio, tratando de procesar la avalancha de información luego de verificar que todo era cierto viendo viejos reportajes en línea. El profesor Callaghan, la persona a la que había admirado y considerado un mentor, ahora se había convertido en algo que jamás habría imaginado. La idea de que él hubiera provocado el incendio, que hubiera intentado robar la tecnología de Hiro y todo por motivos egoístas y vengativos, me parecía imposible de asimilar.
Tadashi: ... Yo... Pensé que realmente le importaba...
Héctor: ¿Quién puede decirlo? Puede que sí. Callaghan era un genio, pero los genios a veces se desvían. Su deseo de vengarse de Krei lo consumió -dijo mientras yo trataba de calmarme, intentando alcanzar un millón de pensamientos en mi mente; me quedaba con cinco mil y un poco más, todos mixtos.
Tadashi: Una pregunta... ¿Quiénes son los grandes héroes? Por lo que veo, ellos detuvieron al profesor Callaghan -dije mientras miraba una foto de aquel colorido grupo.
Héctor: Es un grupo de superhéroes que utilizan tecnología avanzada. Aparecieron para detener a Yokai, es decir, Callaghan, y desde entonces han estado protegiendo San Fransokyo de los criminales -respondió con un tono que me hizo desconfiar de él.
Tadashi: ... Usted sabe más sobre ellos, ¿no es así? -pregunté, y él solo sonrió de manera burlona.
Héctor: ¿Soy tan fácil de leer? -preguntó retóricamente, adoptando una postura más seria- el asunto, chico, es que si te cuento más, no habrá vuelta atrás. Y para ser sincero, me gustaría tenerte trabajando conmigo. He oído que tus habilidades en robótica son impresionantes. Además, eres un sujeto de estudio bastante interesante... y técnicamente ya te graduaste de la universidad -dijo, causando que lo mirara con confusión- Te graduaron de manera póstuma. La actual decana del ITSF, la profesora Grace Granville, le entregó el diploma a tu hermano. Tengo una foto -dijo mientras me mostraba la imagen.
Al ver la foto sonreí amargamente; tal vez no era una graduación convencional, pero ver a Hiro sosteniendo mi diploma junto a Baymax me llenaba de calidez.
Tadashi: ... Al final, solo soy un muerto para todos, ¿no? Nada más que un recuerdo -inquirí, mirándolo con seriedad- definitivamente, sí estoy buscando trabajo, la mejor opción sería con usted.
Es un hecho, esta conversación me está dejando un sabor agridulce en mi boca. Mi mente seguía luchando por procesar la magnitud de todo lo que había descubierto. Un año, y durante todo ese tiempo, había sido un fantasma para los que me amaban. Recordé la última vez que vi a Hiro, su rostro radiante con sueños e ideales, y cómo ese brillo se había desvanecido, al parecer, por mi culpa. Ahora, la sola imagen de él llorando sobre mi ataúd me provocaba un nudo en el estómago. ¿Qué había hecho yo al dejarlo?
Y ahora, contemplaba las opciones sobre la mesa, pesaba las consideraciones de mi futuro. ¿Unirse a él? ¿Convertirse en un colaborador de Rivera Solutions?... ¿Qué más opción tenía?
Héctor: Escucha, en el futuro revelaremos que sigues con vida, sólo debes ser paciente y darnos tiempo -dijo sacándome de mis pensamientos.
Tadashi: ¿Qué saben exactamente sobre mis "habilidades especiales"? -pregunté, tratando de recuperar un poco de control sobre la conversación.
Héctor: Vaya, directo al punto ¿eh? -preguntó con diversión- sabemos que, durante el incendio, tu capacidad para manipular la energía se intensificó más allá de producirla de forma fisiológica. Los informes y grabaciones que revisamos sugieren que podrías haber alterado la energía del entorno, quizás sin darte cuenta, para evitar el resultado fatal de la explosión apenas para que mijo te sacara de ese lugar. Es un campo fascinante y podría revolucionar lo que conocemos sobre la biotecnología, principalmente si lo seguimos investigando.
Mis pensamientos se entrelazan cada vez más. La idea de tener algo dentro de mí que podría ser parte de un avance tecnológico era a la vez tentadora y aterradora. Pero, ¿a qué costo? Los rostros de mi familia se cruzaban constantemente en mi mente, recordándome que la verdadera razón por la que me interesaba la robótica y la ciencia era por ellos, para ayudar a los demás, y no por la ambición o el reconocimiento.
Héctor: No obstante, tienes razón. Actualmente este lugar es la mejor opción donde aprovechar tu talento -dijo extendiéndome su mano- entonces ¿te apuntas a los laboratorios de Rivera Solutions? -pregunto en lo que yo solo suspire antes de estrechar su mano, manteniendo una expresión seria en mi rostro.
Supongo que esta es mi vida ahora.
Tadashi: ¿Cuándo empiezo?
Héctor: Asumo que luego de que te explique la verdad de los grandes héroes -exclamó encogiéndose de hombros- verás muchacho. Cosas así me gusta hablarlas cuando se que con quienes las hablo ya están trabajando conmigo... ahora, todo empieza con tu hermano, verás...
—
(Unos minutos después, sala de descanso de Rivera Genetics)
(General Pov)
Tadashi: ¡¿QUÉ?! -el grito de enojo y rabia de Tadashi resonó por todo el lugar, y los presentes podían jurar que su voz había retumbado en todo el edificio.
La súbita explosión de ira sorprendió tanto a los demás qué algunos se sobresaltaron, cayéndose con sillas, tirando objetos, dejando caer libros o periódicos, e incluso sus laptops y celulares, todo debido a la inesperada situación.
Miguel: ... Parece que ya se enteró -comentó, todavía en la misma posición, con los brazos cruzados, aunque ahora estaba tirado en el suelo con la silla y todo.
Rosa: Ya lo dijo, y creo que no se guardó nada -exclamó, sin apartar la mirada de su celular, mientras evaluaba oportunidades de mercado en distintas áreas explotables.
Marco: Eso, o le reveló las intenciones donjuanes de Miguelito con su hermano -bromeó, sentándose de nuevo en el sofá y riéndose a expensas de su amigo.
Leo: No, el grito habría sido mucho más estruendoso si ese fuera el caso. Es un hecho -aseguró mientras revisaba su laptop, asegurándose de que todo estuviera bien para seguir trabajando en la edición de los fondos que necesitaba para su corto animado en proceso.
—
(Volviendo al Tadashi Pov)
Tadashi: ¡¿En qué demonios pensaba Hiro al hacer esa locura?! ¿No me digan que escuchó las ideas de Fred? ¡Nadie escucha las ideas de Fred! -me exprese claramente frustrado.
Héctor: Técnicamente fue Callaghan quien empezó con lo de disfrazarse
Tadashi: ¡No los defienda!... Pero lo peor de todo -dije golpeando el piso frustrado mirando a Baymax en armadura en una foto- ... Hiro arruinó completamente el diseño. Debía ser lindo y adorable. ¡No una máquina de pelea contra el crimen! -dije claramente dramatizando demás, pero no me molesten, Baymax fue mi mayor logro, tengo derecho a enojarme por cualquier cambio hecho sin mi permiso.
Héctor: De hecho técnicamente no lo arruinó, tal cual sólo es una armadura que se puede poner y quitar, curiosamente mi hijo le sonsacó que "el robot de los Grandes Héroes" lo inspiró a que de lograr tu sueño de producirlos en masa, procedería a diseñarles armaduras similares para que puedan servir como robots rescatistas
Tadashi: Eso sería contraproducente -dije frunciendo el ceño- le estarían diciendo indirectamente a todo el mundo que Baymax es el robot de los grandes héroes.
Héctor: He dicho similares, no calcadas hasta el más mínimo detalle -aclaro, aunque eso solo me molesta más.
Tadashi: Bueno, vale. Es una buena idea... Solo ¿Por qué tuvo que usar a Baymax? Era mi trabajo. Es más... Un maldito super héroe de todas las cosas... Maldita sea, Hiro... -dije golpeándome la cabeza por el estrés- ¡Yo solo le pedí que fueras buen estudiante, maldita sea!
Héctor: ... Y pensar que lo hizo para enorgullecerte -dijo tras un momento de silencio- siente que así honra tu filosofía de que alguien tiene que ayudar, y cumplir tu expectativa de que usara su genio para algo bueno. Si lo ves así, podría haber sido como el clon de la doctora Amara
Tadashi: Pues en cierto modo lo es -dije hecho una furia- ¡¿De qué me sirve que me "honre" si me lo pueden acabar matando mañana mismo por ejemplo?!
Mi explosión de emociones era comprensible; después de haber estado alejado de la vida por más de un año, el hecho de que mi hermano, a quien había cuidado y motivado durante toda su infancia, estaba ahora enfrentándose a situaciones tan peligrosas era perturbador. La culpa y la preocupación se grababan en mi rostro, desgarrando poco a poco mi interior.
Héctor: No soy quien para opinar. Pero imagino que eso significa que estás molesto con él.
Tadashi: Molesto es quedarme corto. Se supone que cree que me mataron y él en vez de cuidar su vida ¿busca qué lo maten? -dije con dolor de cabeza- me da igual a cuanta gente ha ayudado, solo... ¿Por qué tiene que ser él? Es mi hermanito, debería estar estudiando, jugando, siendo un chico de su edad... Pero en vez de eso primero se volvió un adicto a las luchas ilegales y ahora esto...
Héctor: Lo entiendo, Tadashi. Sin embargo, no puedes controlar cada decisión que tomé. Hiro es inteligente y sabe lo que hace; él también tiene un gran potencial -quiso calmar mi rabia- puede que esté en riesgo, es cierto, pero también está ayudando a otros.
Tadashi: ¡Pero él no sabe lo que está haciendo! ¡Está jugando con fuego! -exclamé, sintiendo que las lágrimas se acumulaban en mis ojos- hay un límite entre ser audaz y ser imprudente. Al final, lo que importa es que su vida es valiosa.
Héctor: ... Si te sirve de algo, renunció definitivamente a ser luchador ilegal, sólo espero que consideré serlo de forma profesional y legal, admítelo, tiene talento -dijo haciendo que lo viera inexpresivo- justo uno de mis proyectos es hacer un torneo de lucha de robots completamente legal. Pero esa es otra historia -dijo guardando silencio.
Cosa que agradecí, porque todo eso no podía importarme menos.
Tadashi:... Quiero un traje -dije repentinamente.
Héctor: ¿Disculpa?
Tadashi: Quiero un traje, vuelveme un vigilante como ellos, un héroe tecnológico como ellos -dije señalando la foto de los grandes héroes, la foto de mis viejos amigos.
Héctor: ... Imagino que para cuidar de tu hermano -lanzó la sugerencia al aire en lo que solo resople cansado.
Tadashi:... Es el trabajo de los hermanos mayores, cuidar de los menores. Conozco a mi hermano, no dejará de hacer lo que hace porque se lo diga, si llego a hacerlo. Así que voy a hacer el trabajo por él -dije mi resolución con calma.
A lo cual el señor Rivera solo me miró, aparentemente reconociendo la firmeza en mis ojos y asintiendo.
Héctor: Bueno, si eso es lo que deseas, entonces no hay razón para negártelo. Admiro tu decisión de involucrarte, no solo porque cuidas a tu hermano, sino porque eso significa que tienes un espíritu resiliente -dijo con una sonrisa- aunque yo le diría que te considere su refuerzo en vez de su competencia, ya tuvo bastante con esos niños bonitos queriendo hacerse la de justicieros
Comentario que solo me hizo darle una mirada cansada de que no me podía importar menos el tema, al menos de momento.
Héctor: Ya veo... No diré nada ¿pero si sabes que haciendo esto solo probaras qué ustedes dos se parecen más de lo que crees? Ambos no aceptan qué les digan que hacer, ni siquiera entre ustedes -menciono- y que cuando se le pasé el ataque de ver que sigues vivo, te reclamará por arriesgarte tú y luego juzgarlo a él.
Tadashi: Eso lo sé, y por mi parte puedo decir que nunca lo admitiría en voz alta. Pero de vez en cuando me gusta darle a mi hermano una cucharada de su propia medicina... ¿Puede hacerme el traje o no?
Héctor: Te lo tengo más rápido que un conejo descalzo esquiando en pleno agosto -dijo causando mi completa incredulidad.
Ok...
Tadashi: Tomaré eso como un sí -dije revolviendo mi cabello- o solo deme el laboratorio y los materiales. Se lo pagaré con trabajo.
Héctor: Pues ni modo, tu tranquilo y yo nervioso, contamos con recursos y un equipo de ingenieros e inventores que pueden ayudarte a construir tu traje. Necesitarás una tecnología que se adapte a tus habilidades, de hecho uno de nuestros mejores científicos lleva aquí un buen rato. Ya escuchó profesor, a trabajar -le hablo aparentemente al hombre invisible porque no había nadie aquí.
Pero al final me demostraron estar equivocado cuando aparentemente de la nada apareció una cabeza flotante de un hombre cerca de nosotros, quien parecía divertirse por mi expresión de completa perplejidad y horror.
Tadashi: ¿Desde hace cuánto está aquí? ¿Quién es el?
Héctor: Entró conmigo. Déjame presentarte al profesor Mel Meyer. Uno de mis científicos qué firmó conmigo luego de que lo sacara de prisión -aclaró haciendo que arqueara una ceja.
Con que lo sacó de prisión...
Héctor: Cálmate -me dijo al notar mi reprobación en mi rostro- para hacer el cuento corto, otra persona a quien Krei le jodió la vida. Así como lo ves. El profesor Meyer solo quería hacer juguetes para fiestas sorpresa. Y Krei convirtió su idea de la tecnología de visualización flexible en un arma -me dijo.
Para acto seguido explicarme la naturaleza de dicho invento como una tela capaz de otorgar al usuario habilidades de invisibilidad y camuflaje a través de tecnología holográfica. El profesor Mel quería que su invención fuera usada para cosas divertidas como fiestas sorpresa, y en su lugar Krei utilizó la tecnología para crear armamento, más específicamente, robots de seguridad, los Buddy Guardias.
Mel: Digo, sé que tenían potencial como mecanismo de seguridad, pero pudo proponérmelo en vez de hacerme firmar papeles que me hacían renunciar a los derechos de patente, ¿Y lo peor? Ni siquiera corrigió las fallas -dijo con enfado por el recuerdo- en todo caso. También puede que me pasara un poco queriendo buscar venganza ¡pero él me había prometido qué respetaría los fines para los que hice mi tecnología!
Héctor: Lección aprendida amigo. Antes de firmar nada haz qué lo vea un abogado -dijo con calma- en especial si la otra parte tiene fama de taimado.
Miré al profesor Meyer flotando frente a mí, su expresión de frustración era casi cómica aún en este contexto. La peculiaridad de la situación me hizo olvidar momentáneamente la gravedad de todo. Aún así, estaba ansioso por el futuro; si estaba aquí, probablemente significaba que tenía muchas ideas locas que compartir.
Tadashi: Entonces, ¿tú eres el genio detrás de esa tecnología holográfica?
Mel: Bueno, sí, eso suena bien -me dijo feliz antes de fruncir el ceño- o al menos lo era, hasta que Krei decidió convertirlo en armas. Pero, mira, estoy aquí para crear algo genial, y dado que tú eres... Actualmente el foco de atención está en esta compañía, supongo que eso significa que podemos trabajar juntos.
Héctor: Así es, y con tus habilidades en robótica, deberías encontrar muy interesante el trabajo que estamos haciendo aquí. Mel tiene un montón de ideas para trajes que te podrían servir muy bien. Estoy seguro de que te puede diseñar fácilmente un traje digno de héroe, Tadashi mi buen amigo.
Mel: Se lo tendré en cuestión de días -dijo como si hablara de hacer café por la tarde o algo así.
Tadashi: Te escucho...
_____________________________________________________________________
(Time Skip, una semana)
(Prisión de San Fransokyo, noche)
El aire era denso y cargado de un silencio inquietante mientras avanzaba por los pasillos oscuros de la prisión. Los ecos de pasos lejanos retumbaban en las paredes de hormigón, pero era su propio latido el que resonaba más fuerte en mis oídos. Había una determinación fría en mi estómago; cada paso que daba lo acercaba más a ese momento en que podía ajustar cuentas, pero más que todo, buscar respuestas.
Las sombras danzaban a mi alrededor, desdibujando la línea entre el miedo y la resolución. Pensamientos de venganza me impulsan, entrelazando recuerdos de traiciones pasadas con el ardor de la justicia personal que anhelaba tan desesperadamente. Cada celda que pasaba representaba un sudario de historias, perdidas y almas rotas, un recordatorio de lo que estaba en juego y de la vida que se había desvanecido hace tiempo... ¿de quien? eso depende.
A medida que me acercaba a mi destino, me preguntaba si, al final, esto valdrá la pena, pero tengo que hacer, necesito hacerlo, confrontarlo. La adrenalina nublaba mi juicio, pero no podía detenerme. Sabía que este era un camino del que no podría regresar, un sendero dibujado por la necesidad de justicia en un mundo que no siempre la otorgaba. Con cada respiración, me preparaba para enfrentar no solo a su enemigo, sino también a los demonios que me habían empezado a perseguir, incluso en mi propia alma.
Y fue luego de abrirme paso, fue que lo encontré, en su celda de máxima seguridad en aislamiento solitario. Se veía más viejo en cierto modo, derrotado por la vida, pero con todo, seguía siendo él, y en cierto modo, el traje naranja le quedaba mejor ahora que un atuendo de profesor... Robert Callaghan.
Callaghan: ... ¿Puedo ayudarte en algo? -pregunto mostrando sorpresa ante mi actual aspecto.
No lo culpo, de hecho, incluso yo diría que mi apariencia es bastante extravagante. Mi figura, completamente envuelta en múltiples capas de tela, se asemeja a una sombra mística que se desliza con elegancia. La túnica, de un profundo color burdeos, es un gran espejismo, ya que está confeccionada con un tejido flexible que me permite cambiar de aspecto a voluntad si lo considero necesario. Mi rostro está oculto tras una placa metálica que deja al descubierto solo mis ojos, mientras que el resto de mi cabeza está cubierto por una amplia capucha. Con este atuendo, ni siquiera Baymax podría reconocerme (además, mi vestimenta está diseñada para eludir cualquier escáner).
Sin embargo, debo aclarar que este no es mi disfraz de héroe; en absoluto... es solo una capa de identidad.
??? (Tadashi): Solo venia a hablar con el antiguo decano del ITSF -dije con indiferencia- tal vez no me recuerde, pero soy un graduado del instituto tecnológico de esta ciudad. Hace poco me contrataron como la nueva cabeza de la división de robótica de los laboratorios de Rivera Solutions.
Callaghan: ¿Rivera Solutions? ¿Es una empresa nueva? -pregunto con algo de curiosidad.
Ya veo, así que no sabe nada... esto será muy gratificante.
??? (Tadashi): Tal vez usted la recuerde como se llamaba anteriormente... Krei Tech -dije solo para ver cómo el hombre se quedó boquiabierto, no siendo capaz de creerlo.
Callaghan: ... ¿Qué? ¿Ese narcisista cambió el nombre? ¿por qué?
??? (Tadashi): Eso no es lo que pasó y lo sabe. En realidad... el narcisista perdió la empresa.
Callaghan: ... ¿Como?
??? (Tadashi): Intentó timar a alguien más listo -dije mientras me comenzaba a pasear en frente suyo del lado libre de la celda en frente suyo- lo perdió todo. Su fortuna, propiedades, su empresa. Ahora no es mejor al ciudadano común... tal vez hasta menos que eso -dije para luego reírme por lo bajo- hasta es gracioso ¿no? Las vidas que arruinaste, la tuya incluida, y todo lo que tenías que hacer era usar la codicia de Krei en su contra.
Me detuve frente a su celda, colocando mis manos en mis caderas, observándolo de forma desapasionada. A pesar de su apariencia desaliñada, había un destello de la inteligencia aguda que una vez admiré, aunque eso se escondía tras una furia silenciosa a mi persona, no me importa. No al entonces recordar a los inocentes, el caos que había causado y el sacrificio de aquellos a quienes lo admiraban... mi sacrificio.
Callaghan: ...¿Entonces a eso viniste? ¿A echarle en cara sus errores a un anciano?
??? (Tadashi): No del todo... ¿De verdad no sintió nada por la muerte de Tadashi Hamada? ¿En verdad nunca le importó? -pregunté con enojo contenido- porque escuché por ahí que cuando su hermano lo encaró por dejarlo morir, por salirle que el sacrificó su vida intentando salvarlo para nada porque usted nunca estuvo en peligro ¿Qué le dijo usted? Si, es verdad... le dijo que fue error de Tadashi volver por usted.
Callaghan: ¡Basta! -su grito resonó en la celda, lleno de frustración. Su rostro, marcado por el tiempo y la culpa, mostraba un resquicio de la rabia que intentaba contener. Su mirada, una vez llena de ambición y determinación, ahora solo reflejaba el deterioro de un alma que había caído de lo más alto a lo más bajo.
??? (Tadashi): ¿Basta? -me reí con desdén, sintiendo que la adrenalina, junto a las emociones reprimidas, comenzaba a hervir dentro de mí- no quisiste salvarlo, Callaghan. Si lo hubieras hecho, nunca hubiera tenido que sacrificarse. -mi voz era firme, y cada palabra que salía de mis labios era una acumulación de un dolor reprimido que se había gestado desde el momento en que desperté y supe de su traición.
Callaghan: No puedo creer que estés aquí para hacerme un juicio moral, muchacho. ¿Realmente crees que lo que diga importa ahora? El pasado no se puede cambiar -el eco de su voz resonó en la celda, y yo podía sentir el aire denso de la tensión- ... ¿lo conociste?
Menuda pregunta, literalmente si Tadashi Hamada es el tema, creo que no existe persona que lo conozca mejor en todo el mundo, a fin de cuentas, soy yo.
??? (Tadashi): Creo que no hubo muchas personas en San Fransokyo que no lo conocieran.
Callaghan: ... Mentiría si dijera que él me importaba más que mi deseo de venganza en ese entonces... pero ahora que estoy aquí... todo lo que puedo hacer es arrepentirme y pedir disculpas en silencio -dijo solo causando que sintiera repulsión a su persona.
¡Era mi maldita vida de la que estaba hablando, me da igual que pida perdón el resto de su vida!
??? (Tadashi): ¡No quiero escuchar tu autocompasión! -dije molesto- porque no solo le arrebato su futuro a un chico con toda una vida por delante, le causó un gran dolor a su tía al hacerla sentir que le había fallado a sus padres al no poder protegerlo, le destrozó el corazón a su hermanito al arrebatarle el que por casi toda su vida había sido su único amigo.
Callaghan: ... Era su vida por la de mi hija al final. Una vida por una vida, no digo que sea justo o correcto, pero... así termino pasando.
¡Juro que quiero golpearlo ahora mismo!
??? (Tadashi): ¿Y las vidas de otras personas? Porque me atrevo a suponer que nunca corrigió los errores de Krei.
Callaghan: ... Parece que el tal Rivera lo hizo por mí, puedes agradecerle a tu jefe -dijo apartando la mirada.
??? (Tadashi): ... Usted fue un héroe para mí -dije ya hecho una furia- si entré en la universidad fue por usted, si estoy donde estoy ahora fue por usted... ¡¿Cómo pudo hacer todo eso y solo hacer como si nada paso?!
Callaghan: ... ¿Fuiste mi estudiante? -preguntó con cierto recelo. A lo cual yo solo me reí de forma burlona por tan absurda situación.
??? (Tadashi):... ¿Ya que importa? A fin de cuentas... en estos tiempos casi nadie cree en los fantasmas -dije quitando la máscara de metal, revelando mi rostro al desconcertado hombre.
Je... hasta podrías dejar caer un alfiler y se escucharía el sonido de lo silencioso que estaba.
La expresión de sorpresa en su rostro era casi satisfactoria. Había pasado los últimos días sintiéndome invisible, como un eco perdido en el viento, y ahora estaba aquí, desafiando cara a cara a este infeliz. Recuerdo cómo lo miraba con admiración, cómo su voz era una melodía que solía inspirar confianza en mí. Pero ahora, ese mismo hombre, el que había sido mi modelo a seguir, se había convertido en un paria en mis ojos. Todo lo que una vez creí sobre él se desmoronó, y la traición ardía en mi pecho como el fuego que había asolado la universidad esa noche.
Callaghan: No... tu... tu no puedes... es imposible...
Tadashi: Hola profesor -dije con sequedad.
Callaghan: ¡No! ¡Tú moriste! ¡Tuviste un funeral! ¡No quedaron ni las cenizas de tu cuerpo!
Tadashi: Digamos que antes de los grandes héroes, ya había superhéroes por ahí -le revele de forma casual- ... es curioso. El hombre que me lo dio todo fue el mismo hombre que me lo quitó todo después, la vida sí que es irónica.
Callaghan: ¡Esto es una locura! -su voz temblaba, una mezcla de incredulidad y miedo que resonaba en su celda. La luz mortecina filtrada por las rejas parecía acentuar las sombras en su rostro- yo no quería que nada más allá de mi muerte pasará ese día.... Todo se salió de control.
Tadashi: ¿No es eso lo que todos los villanos dicen cuando están atrapados? -mi risa, amarga y fría, llenó el aire. Un eco de la desilusión que sentía por la persona que había admirado tanto.
Callaghan:... Yo nunca te dije que fueras a buscarme. Nunca te pedí que intentaras salvarme ¡esa fue tu decisión!
Tadashi: ¡Pudo usar los microbots de mi hermano para protegerme, tomarme como rehén, lo que fuera! ¡Usted fue el que eligió déjame a mí a mi suerte! -dijo del todo encolerizado- pero en vez de eso... solo me dejó para morir... usted hizo todo esto para vengarse de Alistair Krei... pero no es mejor que Krei.
Callaghan: ¡No puedes compararme con él! -exclamó, pero su voz no tenía la misma firmeza que antes. Podía notar el rastro de desesperación, el remordimiento oculto detrás de su rabia.
Tadashi: ¿Y por qué no? -desafié, dando un paso más cerca de su celda, sintiendo el fuego de la ira arder dentro de mí.
Las palabras brotaban de mis labios como flechas, buscando atravesar su corazón. Quiero destruirlo de todas las formas posibles, pero no matarlo, no, eso no... eso sería demasiada piedad para él.
Callaghan: ... Alistair Krei me lo arrebató todo. Me quito mi vida entera... ¡tú habrías hecho lo mismo de haber estado en mi lugar, solo mira donde estás, viniendo a buscar venganza contra mi!
Tadashi: ¡No, no lo habría hecho! ¡Al menos no sacrificando vidas que nada que ver con mi venganza! ... Y no vine a vengarme de usted. Es decir ¿Por qué lo haría? Ya más en el hoyo no puedes estar.
Callaghan: ... Te lo dice alguien que ya estuvo en el fondo de ese oscuro abismo, Tadashi... La venganza no elige bandos o si alguien es inocente o no... todo lo que te importa bajo esas circunstancias es llevarla a cabo... sin importar nada.
Tadashi: Y mire donde acabó justo por hacer eso -dije con ironía.
Callaghan desvió la mirada, como si las palabras de reproche pudieran atravesar la gruesa pared de la celda y llegar a golpearlo con todo el impacto posible. Sentí que mis emociones estaban a punto de desbordarse ¿a quien engaño? Ya estaba desembocadas del todo. A fin de cuentas, me estaba enfrentando a mi propio dolor y a la culpa causada por saber todo el daño que me hizo hacer un acto estúpido y querer salvar a alguien que no valía la pena.
Callaghan: ... Tu hermano debe estar feliz de que en realidad sigues con vida... seguro lloro de alegría ¿no es así?
... Oh maldito viejo hijo de...
Tadashi: Hiro aun no lo sabe -dije para su incredulidad- además de usted. Nadie sabe que estoy vivo. Nadie de mi vieja vida al menos.
Callaghan: ¿Quién más lo sabe además de mí?
Tadashi: Si se lo dijera... Abigail tendría que enterrarlo mañana temprano, profesor -dije divertida antes de solo darle la espalda y alejarme, rumbo a la salida.
Callaghan:... ¿Qué es lo que planeas? Tadashi... ¿Qué piensas hacer?
Tadashi Profesor... Tadashi Hamada está muerto. No se de quien me habla, mi nombre es... Hollow -dije poniéndome de nuevo mi máscara.
Para acto seguido cambiar de forma a la de un guardia de seguridad y solo retirarme mientras silbaba alegremente. Con cada paso que daba, el eco de mis botas resonaba en los pasillos silenciosos, un recordatorio del desasosiego que llevaba dentro. Sabía que la conversación con Callaghan había dejado cicatrices, tanto en su alma como en la mía. La rabia y el dolor eran dos compañeros indeseables que ahora tenían un lugar permanente en el rincón más oscuro de mi mente.
Salí al exterior, donde la niebla gris de San Fransokyo colmaba el aire de un frío al que aún no estaba acostumbrado con mi nuevo cuerpo recién recuperado. A medida que caminaba hacia la salida, las luces de la ciudad parpadeaban, modelando sombras de un pasado que no podía dejar atrás. Sabía que tenía que ver a Hiro y contarle la verdad algún día.
Pero, ¿Cómo le dirías a tu hermano que, a pesar de que creía que estabas muerto, te estabas quedando en la ciudad para luchar contra los mismos fantasmas que él?
Notes:
Y este es el capitulo de esta vez. Como siempre pueden votar, comentar, lo que gusten.
¿Y que les pareció?
Oficialmente Tadashi volvió, o bueno, mas o menos, de momento se puede decir que volvió pero al mismo tiempo es un fantasma, Hollow (hueco en ingles). Y desde ya digo que este es el comienzo de explorar mas del pasado de la familia Hamada.
Hasta entonces, nos vemos.
Chapter 20: Capitulo 18: Contradicciones multiplexadas
Notes:
(See the end of the chapter for notes.)
Chapter Text
(Tadashi Pov)
(Días después, noche)
(Cross Technologies, San Fransokyo, USA)
Vamos a repasar. ¿Supe traje? Ya tengo uno. Decidí que mi disfraz de héroe sería una armadura inspirada en la de Baymax, pero adaptada a mi cuerpo. He agregado algunos detalles personalizados, como un enfriador interno para controlar mi temperatura y un sistema que utiliza mi propia energía como fuente auxiliar en caso de emergencia. Sin embargo, aún necesito encontrar una fuente de energía más eficiente para que no sea tan costoso usarla.
¿Por qué menciono que puedo recurrir a mi energía como último recurso? Porque mi habilidad de manipular energía se manifiesta en la piroquinesis en su forma más pura. Puedo controlar y generar fuego desde mi brazo izquierdo, y gracias a que mi cuerpo se ha adaptado a esta transformación (gracias a las experimentaciones de Jumba Jookiba), tengo una inmunidad natural al fuego, así esparciéndolo por todo mi cuerpo. Así que, por fin, nadie podrá decir que puedo morir por un simple incendio... vaya que ese café estaba caliente.
Y si, se puede decir que mi atuendo es más para contenerme que como apoyo
Aunque puede parecer que tengo un poder sencillo, su verdadera belleza reside en su versatilidad. Al manipular la forma de las llamas, puedo darle mil y un usos. Si logro calentar el fuego lo suficiente, se puede convertir en plasma (algo en lo que debo practicar más). Además, tengo la capacidad de controlar la temperatura a mi alrededor, incluyendo la temperatura corporal de los demás. Mediante el calor generado por la energía cinética de los objetos, se pueden provocar temblores e incluso terremotos. Y si el fuego alcanza ciertas temperaturas, puede transformarse en electricidad e incluso magnetismo, siempre que sepa manipularlo adecuadamente.
Tadashi: Deja de obsesionarte con la versatilidad de tus habilidades, céntrate en lo que puedes hacer. -me dije mientras me abría paso a través de los laboratorios de Cross Technologies disfrazado de personal de mantenimiento.
Cross Technologies, anteriormente conocida como Pym Technologies, surgió a raíz de la traición de su fundador, Darren Agonistes Cross, a su mentor, el Dr. Henry Pym. Usurpó su puesto como director, y la compañía se convirtió en rival de Stark Industries y Rivera Solutions. Esta era precisamente la tecnología que necesitaba para completar mi traje de superhéroe antes de mi debut.
No me siento culpable por lo que estoy haciendo; Cross Technologies es simplemente una fachada. Su verdadero nombre y naturaleza son mucho más oscuros. En realidad, se conocen como I.M.A. (Ideas Mecánicas Avanzadas), una organización rebelde dedicada a crear armas letales y destructivas. Su mayor creación fue M.O.D.O.C., que no es otra cosa que el propio Darren, quien, tras eliminar a los científicos responsables de su transformación en esa abominación, se convirtió en la máxima autoridad de la organización.
IMA suele robar tecnología de Stark y la emplea contra él, o vende esa tecnología al mejor postor. Por lo tanto, no tengo ningún problema en despojarles de todo lo que puedan tener hasta que se queden sin nada.
Tadashi: Gracias a dios que es viernes -dije a un par de guardias de seguridad que pasaban.
Guardia: Si, por suerte.
Tadashi: ¿Trabajando duro o durando en el trabajo? -pregunte ahora a un científico que iba de pasada.
Científico: Es igual -exclamó encogido de hombros, metido en sus cosas.
Soy consciente de que pasar desapercibido se me da con facilidad, en parte gracias a la tecnología holográfica de visualización flexible que Mel me proporcionó. Esto se debe a que, en el fondo de mi ser, sabía que no es la primera vez que me cuelo en un lugar donde no debería estar. Podría atribuirlo a la ingenuidad de la juventud, o tal vez a la necedad propia de la edad.
Sin mayores complicaciones, logré robar algunas tarjetas de acceso de personal que estaban visiblemente distraídos. Así fue como llegué a mi destino: la bóveda donde se almacenaban los inventos en desarrollo, así como aquellos listos para fines comerciales o armamentistas. Aunque, para estos tipos, ambas cosas son prácticamente lo mismo.
Tadashi: Muy bien... hagamos esto -dije a punto de pasar la tarjeta por el escáner para abrir la puerta, momento en que note mi mano temblar- vamos, calma, tienes que controlarte. Tengo que hacer esto, si no lo haces, Hiro seguirá arriesgando el cuello, lo haces por él... -dije para sin más, entrar.
______________________________________________________________________
(Canción, No lo volveré a hacer, Elena de avalar)
(aclaró que en realidad no canta pero es como decir que internamente lo está haciendo jaja)
Tadashi: ¨Por mucho tiempo he sentido culpa, por un error simpar de juventud, y desde entonces yo, solo he querido, que nadie sepa nunca la verdad¨ -pensé mientras esquivaba los láseres de seguridad a la vista gracias a mis lentes de visión infrarroja.
Mientras me desplazaba por la bóveda, mis ojos se posaban en mi reflejo en las paredes metálicas. Sin embargo, no era el yo que soy ahora. Era la imagen de una versión más joven de mí, que parecía tener la misma edad que Hiro, y lo se porque podía verme allí cuidando de un Hiro más pequeño, desde siempre lo he dicho, mi hermanito es de las cosas mas lindas que existen.
Pero el lindo recuerdo terminó con lo siguiente que estaba haciendo esa versión joven de mi... quien estaba cruzando despreocupadamente las calles de la ciudad vestido de negro.... robando en un parpadeo billeteras, collares, relojes y otros objetos de valor de personas elegantemente vestidas en los barrios de clase alta.
Así fue como conocí realmente a Fred de hecho, robándole la mesada cuando niños.
Tadashi: ¨Pensaba yo que no tenía problema, pues me creyeron que yo no fui¨ -pensé mientras esquivaba los láseres de seguridad como si nada- ¨me siento muy mal, sabré protegerme. No se pueden enterar pues será mi final... así que ¡no hay más remedio que robar! ¡los artilugios que me salvaran!¨ -pensé mientras tomaba lo que había a la mano.
Este estudio sobre la recreación de las partículas Pym sería fundamental para mis planes en la contención de criminales. Además, con un vidrio fabricado a partir de un polímero acrílico autorreparable como el que tenían aquí, es esencial para completar esta invención mía que tenía en mente. Estoy seguro de que podré utilizar estos descubrimientos de manera más beneficiosa que ellos.
Tadashi: ¨¡No me gusta, pero es lo que yo debo hacer!¨ -pensé mientras esquivaba más trampas cazabobos, incluyendo una bola de demolición incluso sin mencionar ametralladoras, láseres y demás- ¨en mi familia he de pensar, no quiero yo decepcionar. Ni herir, pues hacerles daño es algo no haría jamás... no lo volveré a hacer¨ -pensé para luego quedarme quieto.
Justo en el instante en que logré desactivar la seguridad y eliminar los videos de las cámaras, escuché pasos acercándose a la puerta de la bóveda. No me moví ni siquiera un centímetro, conteniendo la respiración, hasta que, para mi alivio, la persona se alejó. No estaba en condición para esto, hace años que no hacía algo de este estilo, desde que el profesor Callaghan (actualmente rata hipócrita de dos patas para mí), me dijo que no iba por el buen camino luego de que intentara robarle. Fue así como lo conocí, y con su apoyo, entré en la universidad, para ¨usar mi ingenio para algo mejor¨.
Tadashi: ¨Antes yo, no supe ver, su preocupación por mí¨ -pensé mientras verificaba todo antes de ir por el premio mayor, el reactor arc en desarrollo justo en el centro de todo, era lo que necesitaba para ya decir que estaba listo para ser héroe- ¨más al final, su amor es real, y a mi familia no voy a perder¨.
Acababa de perder a mis padres en ese entonces y mi tía estaba haciendo lo mejor que podía, pero no sabía cómo cuidarnos adecuadamente. Hiro era muy pequeño y, aunque tía Cass lo negaba, las facturas se acumulaban.
Sabía que tenía que hacer algo, en ese momento me había convertido en el hombre de la casa, pero nadie iba a contratar a un niño, a pesar de que lo intenté. Así que decidí mentir y decir que tenía un trabajo a medio tiempo para poder ayudar a cubrir los gastos de la casa, para luego pasar a hacer cosas de las que no estaba orgulloso ¿Qué importa robar un poco a personas que no lo notarían si es para tu familia?
Por eso era tan protector con Hiro. No solo quería lo mejor para él, sino que, a diferencia de él, yo ya había vivido ese tipo de vida y no quería que él tuviera que pasar por lo mismo.
Tadashi: ¨No les diré que soy capaz, puedo robar y ser audaz. No me gusta, pero es lo que yo debo hacer¨ -pensé mientras desactivaba la seguridad del reactor, lo tenía al alcance de mis manos- ¨nadie se debe enterar, no quiero más decepcionar... ni perder de nuevo a mi familia. Pero hoy yo tengo que hacerlo ¡si, lo haré! Y voy a protegerlos hoy...¨ -pensé con el reactor arc ya en mis manos. Mirando nuevamente mi reflejo.
Estoy observando a mi verdadero yo, reconociendo la diferencia entre la persona que soy ahora y la que fui hace apenas unas semanas. He recaído, volviendo a un estado que pensé había superado. Para todos los demás, esas semanas han sido en realidad varios meses, y lo irónico es que, desde su perspectiva, yo ni siquiera existo. ¿Cómo fue posible que mi vida llegara a este punto? Todo esto, fruto del egoísmo de alguien en quien decidí confiar, y ahora estoy pagando las consecuencias por ello.
Tadashi: Algo... que no volveré a hacer -esta vez sí hablé, para luego solo dejar la bóveda y los laboratorios, como si nunca hubiera estado allí para empezar.
(Fin de la canción, no canción)
__________________________________________________________________________
Cuando finalmente llegué a la salida, me detuve un momento, observando el paisaje de la noche estrellada de San Fransokyo. Me sentí casi miserable. Aquí estaba yo, un futuro héroe en mi mente e ingeniero en el corazón, convirtiéndose de nuevo en el ladrón que había jurado dejar atrás.
Tomé un profundo respiro y crucé el umbral. El aire fresco me golpeó en la cara, y dejando que el viento despejara mis pensamientos, me dirigí rápidamente hacia mi taller en Rivera Solutions, donde guardaría el reactor, con suerte, lejos de las miradas curiosas y las repercusiones de mis acciones.
Tadashi: ... Ay ¿a quién engaño? Conociéndome acabo volviendo a hacer algo como esto -me dije a mi mismo con resignación.
—
(Un par de horas después, Rivera Solutions)
Héctor: Ah, ya volviste -me dijo mientras que yo entraba a su oficina justamente para informar ya con mi disfraz para civiles puesto- cómo te fue?
Hollow (Tadashi): Fue... complicado, pero lo logré -respondí, intentando mantener la calma y sonar indiferente en general.
Héctor: Bueno, eso suena prometedor. ¿Tienes todo lo que necesitas para continuar con tu traje?
Hollow (Tadashi): Sí, sí... -hice una pausa, tratando de organizar mis pensamientos- Tengo el reactor Arc, y también recogí algunos otros componentes que podrían servir. Pero... -miré hacia el suelo, sin poder evitar el peso de la vergüenza que me oprimía- me siento mal por cómo obtuve algunas de estas cosas.
Héctor: Oye, solo para que quede claro, fuiste tú quien quiso ir en persona en lugar de enviar a alguien para hacer el trabajo sucio -dijo mientras manipulaba un cubo de rubik- por cierto, me enteré de que hace unos días fuiste a ver a Callaghan en prisión. Parece que tu visita lo dejó tan perturbado que ahora está bajo el cuidado de psiquiatras para ver si logran ayudarlo... ¿hackeaste las cámaras para que no te atraparán y te colaste allí como pedro por su casa, verdad? Es curioso, normalmente la gente quiere salir de prisión, no entrar -exclamó con diversión.
Hollow (Tadashi): ... Tenía asuntos pendientes con él -dije sin querer dar más detalles al respecto. Don Héctor será mi jefe, pero difícilmente le tengo respeto, para empezar, es un chismoso de lo peor.
El CEO de la empresa me miró curioso, intentando arreglar su cubo de Rubik mientras lo hacía girar con una destreza que sólo alguien con una paciencia infinita podría lograr. Su expresión burlona se desvaneció momentáneamente cuando le di una mirada fría, una mezcla de frustración y confusión.
Héctor: Seguro que sí... me sorprende que no lo matarás o al menos buscaras hacerle daño.
Hollow (Tadashi): ¿Hacerlo me habría hecho mejor? -pregunte sin darle más vueltas al asunto.
Héctor: Buen punto -mencionó para luego dejar el cubo en la mesa con fastidio- ¡condenado juguete! Nunca logró que todos los lados sean iguales.
A lo cual yo solo lo tome y con calma complete el cubo tras unos cuantos giros.
Héctor: Presumido -declaró haciendo puchero como niño pequeño- entonces ¿Cómo va el trabajo?
Hollow (Tadashi): Va bien -dije de forma cortante- tengo unas ideas para nuevos proyectos, pero antes que nada... Don Héctor, desde ya quiero decirle algo, estoy en deuda con usted y con su familia por salvarme la vida.
Héctor: Nada que ver, ninguna deuda, chamaco -dijo halagado, momento en que decidí reventarle la burbuja.
Hollow (Tadashi): Pero aun así, mi prioridad siempre será mi hermano y mi tía. Si en algún momento alguno de sus planes o tretas llegan a lastimar a mi hermano o mi tía...
Héctor: Me avientas por la ventana, lo sé, vaya, hasta en eso se parecen tú y el enano -dijo refiriéndose a Hiro- no tengo interés alguno en lastimar a tu familia. Yo no me considero un villano... solo soy un soñador incomprendido.
Hollow (Tadashi): Soñador, ¿eh? -respondí con escepticismo, cruzando los brazos. La postura de Héctor siempre había tenido un aire de locura ingeniosa que me causaba una extraña combinación de respeto y desconfianza.
Héctor: A veces, los soñadores ven cosas que otros no ven. -hizo una pausa, su mirada enfocándose en el reactor arc que tenía en mis manos- ¿Pero a qué costo, Hollow? Estás jugando con fuego, y no me refiero a tus habilidades piroquinéticas.
Me sentí incómodo. Aunque sabía que mis acciones estaban motivadas por el deseo de proteger a Hiro y a nuestra familia, no podía ignorar el hecho de que me estaba adentrando en un terreno peligroso.
Hollow (Tadashi): Estoy dispuesto a correr riesgos -dije, manteniendo una firmeza en mi voz- no puedo quedarme de brazos cruzados mientras el mundo sigue siendo un lugar peligroso para él... sabe que si llego a tener la oportunidad, y veo a mi hermano teniendo problemas, lo ayudaré ¿verdad?
Héctor se inclinó hacia adelante, apoyando sus codos en el escritorio, su mirada ahora sería.
Héctor: Lo imagino... pero, aunque fui yo quien te sugirió esconder tu identidad. No tienes que hacerme caso ¿por qué no le has dicho la verdad a tu familia? -pregunto haciendo que moviera las manos de forma inquieta.
La pregunta me generó un nudo en el estómago. Aunque era consciente de que intentar ocultar mi existencia como una persona viva era insostenible, el miedo a la reacción de Hiro y de mi tía Cass me mantenía atrapado en un ciclo de silencio. Si decidía revelarles la verdad, podría provocar su odio, especialmente el de Hiro, quien creía que incluso podría intentar hacerme daño, teniendo en cuenta que un villano ahora fallecido, Obake, lo había engañado en el pasado con un robot que se parecía a mí. Además, si continuaba con mis planes de convertirme en un vigilante, corría el riesgo de ponerlos en peligro, algo que jamás permitiría.
Hollow (Tadashi): ... Aún no es el momento -dije mientras pensaba honestamente que...dudo que alguna vez lo sea.
Héctor Ya veo... ¿Y qué hay de Honey Lemon? ¿No crees que la chica que siempre te amo merezca saber que estás vivo? -pregunto haciendo que le viera en shock- ¿que? ¿No sabías que del mismo modo que te gustaba en secreto, ella también gustaba de ti?... upsi -dijo con un evidente falso arrepentimiento.
La mención de la chica con raíces latinas me dejó en shock. A pesar de que era algo que ya había sentido en mi interior, o más bien, algo que había estado evadiendo, no creía que Don Héctor supiera de esos sentimientos que había guardado tan celosamente desde que éramos jóvenes... ¿exactamente cuánto investigó este tipo de mí?
Oh bueno, no él, exactamente. Solo me basto con ver a la chica de anteojos sentada en una esquina de la habitación sin despegar la vista de su celular para saber quién fue la que me hizo un estudio profundo de hasta qué comida soy alérgico o que color me gustaba más.
Hollow (Tadashi): ¿Eso... es cierto? -pregunté con un hilo de incredulidad en mi voz.
Héctor: Lo es, chaval. Siempre se noto sus ojos el cómo brillaban cada vez que mencionabas cualquier cosa. Y, no sé, es como si ella captará tu esencia en ese entonces... ¿No te parece?
Me quedé en silencio, sumergido en mis pensamientos. La idea de que Honey Lemon pudiera haber tenido sentimientos por mí llenó mi mente de confusión. La última vez que había pensado en ella de esa manera fue antes de la tormenta que se desató en mi vida, y desde entonces, mis sentimientos habían estado atrapados bajo capas de dolor y responsabilidad.
Pero no mentiré al decir que recuerdo con cariño todos los buenos momentos junto a ella.
Hollow (Tadashi): No sé si ella merece un chico como yo... -respondí, tratando de desestimar la posibilidad.
Héctor: ¿Acaso no eres tú quien parece que siempre ha estado dispuesto a luchar por los que amas? -me miró fijamente, desafiando mi manera de pensar.
Siempre había estado dispuesto a hacer lo que fuera necesario por aquellos a quienes amaba, pero, ¿a qué precio? La lucha que estaba a punto de enfrentar era diferente... y no deseaba que ella se involucrara en ello. Conocía su papel en el asunto de los grandes héroes, pero no quería ponerla en peligro.
Aunque fuera desde la distancia, anhelaba que ella y los demás estuvieran a salvo. No podía pedir mucho; quizás con el tiempo ella llegara a elegirme para estar a su lado... ¿A quién quiero engañar? Sabía que merecía a alguien mejor que yo. Para empezar, ¿Quién podría amar a alguien tan desagradable como yo? Mi aspecto no es precisamente el de un supermodelo, y tener la mitad del rostro quemado no ayuda a tener una apariencia atractiva.
Por eso le estoy agarrando un gusto culposo a siempre estar disfrazado. Con la extravagancia y todo... este aspecto me hacía sentir mejor conmigo mismo.
Hollow (Tadashi) Lo abordaré en su momento... tal vez...
Héctor: Siempre hay un momento para actuar, Hollow. No dejes que el miedo te paralice. A veces, hay que correr riesgos para lograr algo significativo -dijo encendiendo un cigarrillo como si nada fuera de lo normal estuviera pasando.
Lo miré, sintiendo una mezcla de frustración y admiración. Su desprecio por los límites me hacía reflexionar sobre las elecciones que estaba tomando. Quería creer que tenía un camino claro, pero a menudo me sentía atrapado en la confusión, oscurecido por dudas y decisiones difíciles. Supongo que es de los beneficios de ser un idiota, solo apagar el cerebro y vivir de la forma más sencilla según lo que piensa cada quien.
Rosa: Bueno, si eso es todo entonces creo que podremos continuar con nuestra planeación para el evento, querido tío -dijo llamando mi atención.
Hollow (Tadashi): ¿Evento?
Rosa: De alguna manera, podríamos afirmar que estamos en el camino hacia un gran logro. Para alcanzarlo, es necesario llevar a cabo ciertas acciones. Por ejemplo, estamos organizando una fiesta de gala dentro de un mes con el objetivo de establecer nuevos contactos, socios e inversionistas interesados en trabajar con nuestra empresa -comentó.
Héctor: ¡Que traigan la champaña y a las strippers! -dijo con emoción, obviamente ya imaginando esa última parte. Solo para que le arrojaran una maceta directamente a la cabeza. Cortesía de su sobrina.
Que carácter, pero mentiría si dijera que no la apoyo.
Rosa: Habrá menores en la fiesta, te recuerdo -explicó con simpleza.
Héctor: Bueno, en ese caso, tal vez solo los aperitivos y la música jazz. -dijo, rascándose la cabeza un tanto desilusionado- bueno, como sea ¿entonces cuál será la temática de la fiesta? Porque olvida que haré algo típico de riquillos aburridos.
Rosa: Cualquier cosa que no involucre mujeres en poca ropa o en ropa muy provocativa, como si no te conocería -dijo logrando que su tutor rodara los ojos con fastidio.
Héctor: Pues bien, veamos... lo tengo -mencionó chasqueando sus dedos- ¿que tal algo del país de las maravillas? Solo imagina, la fiesta en la azotea del edificio, la hacemos más grande de ser necesario. Dulces por todos lados, como una fiesta del té por así decirlo. Elegancia y al mismo tiempo excentricidad -dijo mientras que yo solo les prestaba atención a ambos.
Debo admitir que su idea de una fiesta al estilo de "Alicia en el país de las maravillas" suena interesante, pero al mismo tiempo, me resulta inquietante. ¿Cuál es el propósito de todo esto? Contactos, socios, inversionistas... reflexioné, sintiendo una punzada en mi estómago ¿esa es la verdad?
Rosa: Ya veo... Ese es un concepto muy arriesgado, pero puede funcionar si se ejecuta bien. Podríamos incluir elementos visuales de la historia, como personajes icónicos, y quizás una decoración que haga alusión al cuento. La manera en que se ha planteado podría atraer a muchos; es una temática que invita a la diversión y la imaginación.
Héctor: ¡Exacto! Imagínalo, cada invitado disfrazado como un personaje del libro. Hasta podríamos tener un concurso por el mejor disfraz. Sería una gran manera de romper el hielo y atraer más atención hacia nuestro trabajo.
Rosa: Eso también podría ayudarnos a captar nuevos socios interesados. Si conseguimos un par de influencers o personalidades relevantes en el evento, podríamos abrir un montón de puertas -pensó en voz alta antes de sonreír- y ya que estamos ¿piensas vestir a los empleados que vayan a servir en el catering y el entretenimiento como personajes del libro también? Porque creo que tengo en mente a la Alicia perfecta.
... No se porque ese comentario me hizo sentir un escalofrío, y uno nada grato.
Héctor: Me gusta como piensas. Aunque obviamente también habrá vino, licor y demás cosas para los adultos. Aparte de eso... ¿Crees que la buena tía Cass estaría interesada en el servicio de catering? Digo, tenemos los experimentos de Jumba en desarrollo y a Kyle pero siempre se debe apoyar al pequeño empresario -dijo guiñándome un ojo.
Rosa: Aparte de la tia Cass, me refería a que el propio Hiro ayudará a los meseros, él me comentó que ha hecho de mesero para ayudar a su tía en su negocio de catering
Héctor: Tu solo quieres que tu amigo esté en la fiesta. Pero bueno, si ¿por qué no? De todos modos casi todos los empleados estarán invitados -dijo como si nada- ¿y crees que acepte ser Alicia? Porque creo que puedo conseguir un vestido azul de su talla y...
Hollow (Tadashi): ¡Se vestirá de pantalón y chaleco! ¡La idea es que se parezca a Alicia, no que lo crean trans! -dije ofuscado. Llámenme hermano sobre protector o lo que quieran. ¡Y con orgullo!
Rosa y Héctor se quedaron momentáneamente atónitos por mi arrebato. La atmósfera en la oficina cambió, cargándose de un momento de silencio mientras procesaban mi inesperada reacción.
Héctor:... Aguafiestas -dijo restando importancia al asunto para luego tomar su celular- ¡Kyle! ¡Ve preparando desde ya el mejor pastel del mundo! ¡Quiero que uses los huevos más exóticos del mundo, harina traída directamente de los molinos franceses y frutas importadas de las islas tropicales del caribe! ¡No escatimaremos en gastos! ¡Usaremos los mejores ingredientes para impresionar a esta gente!
Kyle: ... Entendido -dijo su chef privado para acto seguido colgar.
Honestamente, no me siento a gusto con Kyle cerca. La primera vez que lo vi, tuve la extraña sensación de que era como mirarme en un espejo. ¡Es como una versión más cool y oscura de mí mismo! Además, su rostro me genera incomodidad, e incluso me asusta un poco el notable parecido que tenemos.
Una vez que el revuelo por los planes de la fiesta se calmó un poco, decidí que era un buen momento para salir de la oficina. Las conversaciones de Rosa y Héctor continuaban girando en torno a la gala, pero en mi mente solo resonaba lo que acababa de vivir y lo que aún estaba por venir. Cada vez que me encontraba en la compañía de Héctor y Rosa, no podía evitar recordar que estaba caminando en una cuerda floja entre la vida que había elegido y los recuerdos de mi vida pasada.
Por ahora, no hay mucho que pueda hacer, solo me queda preparar todo para mi debut. Perdoname Hiro, pero estoy por hacer que los grandes héroes se tomen un descanso indefinido, San Fransokyo tendrá un nuevo superhéroe, te guste o no... solo te pido que si algún día sabes la verdad, me perdones.
____________________________________________________________________________
(Hiro Pov)
(Al día siguiente)
Necesito una aspirina, eso es un hecho. Al menos en eso, Baymax puede ayudarme. Como asistente médico, Baymax sigue siendo excepcional, pero aún no está listo para enfrentarse al crimen. No tengo idea de qué tipo de virus usó ese miserable de Casanova, pero limita las capacidades de Baymax cuando se trata de asuntos relacionados con los grandes héroes. Ese desgraciado.
Megan: Te noto muy estresado últimamente ¿sabes? -me dijo mientras bebía una malteada- debo suponer que es por todo lo que me has contado de Casanova. Y entre tu trabajo de asistente de Crazy Land, tus estudios universitarios y recientemente ayudando a Leo con su proyecto de animación, honestamente me sorprende que tengas tiempo libre.
Hiro: Y aquí me ves, usando mi tiempo de desayuno para ayudarte a hacer tu tarea de matemáticas -dije en lo que ella solo soltó una risa apenada.
Megan: Y te agradezco por eso, eres un buen amigo.
Hiro: Si, si, lo que digas... Pregunta 3, primera parte, identidades trigonométricas: coseno de X más seno de X elevados a 5, es igual a coseno de 5X, así se desarrollará la parte izquierda de la ecuación que se convierte en... -dije para luego sentir una presencia detrás de mí.
Robbie: En un problema bastante simple de resolver ¿no es así, Hiro? -preguntó el robot androide haciéndome sentir incómodo tanto por la cercanía como por la repentina aparición.
Hiro: Si... si vas a pretender ser bueno en matemáticas. Al menos tu maestro podría darles preguntas difíciles, Megan -dije algo brusco, haciendo que la chica me mirara con una gota de sudor bajando por su frente.
Megan: Cada vez estoy más convencida de que perteneces a otra dimensión, Hiro -dijo apenada.
Hiro: En cuanto a ti -declaró mirando al robot mesero con el aspecto de mi antiguo archienemigo- ¿ya limpiaste?
Robbie: Cocina, utensilios, mesas, piso, incluso la cochera y las ventanas de tanto el establecimiento como la casa.
Hiro: Ya ve ¿incluso quitaste la grasa vieja de la freidora? -pregunte para verlo asentir- ¿fuiste de compras? -volvió a asentir- ¡¿quitaste la goma de mascar de las mesas y sillas?!
Robbie: Hasta use guantes de látex para hacerlo -reveló mostrando una bolsa de basura con el dichoso chicle viejo.
Maldita eficiencia mecánica automatizada.
Hiro: ¡Solo ve al bosque y corta un árbol!
Robbie: Ok... ¿y qué árbol?
Hiro: ¡El que sea! -dije para luego solo verlo asentir e irse- es increíble... ¿que? -pregunte al ver a Megan mirarme extrañada.
Megan: Sabes que él no es Obake, ¿verdad? Es Robbie, el robot que trabaja aquí porque tu tía lo contrató, pero ella no tiene idea de que es un robot -dijo con un tono de obviedad-. Además, tú ya has revisado varias veces y confirmado que su memoria y funciones principales están formateadas, lo que lo convierte en una amenaza nula. ¿Por qué eres tan brusco con él pobre?
... ¿En serio se pregunta eso?
No podía creer que tuviera que explicarle esto a Megan, pero lo cierto es que, a pesar de las pruebas que sugieren que Robbie es inofensivo, no podía evitar sentir una leve inquietud cada vez que lo veía. Obake había sido un enemigo astuto y persuasivo, y aunque era cierto que Robbie no era más que un asistente programado, la sombra de mi antiguo némesis seguía acechando en mi mente.
Además, aun no le perdono que se colara en la ultima foto familiar
Hiro: Mira, simplemente me resulta raro que un robot que se asemeja tanto a alguien que intentó destruirnos esté aquí, haciendo todo esto sin cuestionarse nada. La última vez que vi a Obake... bueno, ya sabes cómo terminó eso.
Megan: Hiro, a todos nos cuesta enfrentar nuestros temores y traumas. Pero creo que deberías darle una oportunidad. A veces, lo que tememos no es tan aterrador como parece -me dijo como si nada, dejándome sin capacidad de objetar ya que por mucho que me molestara, tenía razón- además, creo que sabemos que tan ¨peligroso¨ considerando que incluso tuviste que programarlo para ser un buen trabajador de cafetería... Aun no me creo lo mal que lo hizo yendo de compras.
No puedo creer que eso haya sucedido tampoco, y al mismo tiempo, no lo puedo olvidar. Era un encargo simple: solo tenía que comprar los ingredientes para el plato especial del día, que sería curry. Se le dio una lista clara y el dinero suficiente. La tarea era sencilla: ir, comprar lo que se necesitaba y volver, nada complicado... Sin embargo, regresó con una sola zanahoria, un paquete de cebollas deshidratadas en lugar del kilo de cebollas frescas que pedí, una botella de salsa de soja en vez de un paquete de curry, y solo acertó al traer las papas porque ya venían envasadas.
Pero lo peor de todo fue que, en lugar de traer carne ya preparada, trajo un pollito vivo de la tienda de mascotas y estaba a punto de cocinarlo para el curry... En ese instante, consideré seriamente hacerme vegetariano. Ahora tengo al pollito en mi habitación como mascota, lejos de Robbie y Mochi. Le puse de nombre Pío (no fui muy creativo ese día). Lo único bueno de todo ese desastre... es que era un animalito muy lindo ¿para qué negarlo?
Hiro: Lo siento, no era mi intención ser brusco. Es solo que... tienes que entender que he tenido malas experiencias con todo lo relacionado a Robbie. Y aunque sé que no es una amenaza, no puedo evitar sentirme un poco... incómodo.
Megan: Entiendo, tal vez podrías enseñarle un par de cosas sobre cómo hacer café. Él podría ser un buen asistente de cafetería si le das una oportunidad.
Hiro: Por favor no, él sabe cómo hacer café, más bien... como que pasa mucho tiempo con la máquina de expresso para mi gusto -dije sintiendo un escalofrío de incomodidad.
Si, la relación entre Robbie y la máquina para hacer café es algo que me gustaría borrar de mi mente.
Megan: ... Mejor encendamos la televisión -dijo para luego hacer justo esto.
Mientras que yo estaba a punto de reclamarle que debíamos volver a los ejercicios matemáticos cuando vi algo en las noticias que me dejó en shock. Allí estaba un tipo, peleando contra los supersónicos Sue y Stu que acababan de robar un banco. Parecía un nuevo héroe que en realidad parecía tener todo controlado ¡pero lo que me chocaba es que el traje de ese tipo era mi traje!
Bueno, era el traje de la armadura de Baymax en realidad solo que adaptado para una persona en vez del asistente médico ¡pero igual! ¡Yo lo diseñe! ¡¿cómo se atreve ese tipo a robarme el diseño?! La noticia se transmitió en directo, mostrando imágenes de una intensa pelea en el centro de San Fransokyo, todos lo estaban viendo.
Megan: ¡Mira eso, Hiro! ¡Un nuevo héroe! -dijo Megan, visiblemente emocionada, mientras apuntaba con su batido hacia la pantalla- ya quiero empezar a investigar para saber quien es.
Sin embargo, una sensación de rabia me invadió a medida que observaba cómo el nuevo héroe luchaba con los villanos. El traje era una versión del diseño que había creado para Baymax, y aunque estaba adaptado a su físico, no podía ignorar que alguien más se estaba adueñando de un trabajo que había consumido horas y esfuerzo.
Hiro: ¿Increíble? ¿Increíble? -murmuré, apretando los dientes mientras mis emociones se desbordaron- ¡Eso es mío! ¡Nadie debería estar usando mi diseño sin mi permiso!
Megan: ¿En serio? Puede que solo haya hecho su propio traje; tal vez hay una coincidencia.
Hiro: No es una coincidencia. Es exactamente igual al traje de Baymax. ¡Sigo sin entender cómo se atrevió a tomarlo! Y además, ni siquiera está usando el traje de manera correcta; parece estar solo jugando... -dije molesto.
La pantalla mostró al nuevo héroe desarmando a los villanos de manera casi casual, mientras mi mente se agitaba con pensamientos de reconocimiento y venganza. La forma en que se movía, su confianza en combate, todo me parecía familiar. Era como si estuviera mirando una versión distorsionada de mí mismo, una que había tomado un camino diferente al mío... una versión de alguien que ya no estaba con nosotros.
Hiro: No... ¡esto es inaceptable! -declaré, haciendo caso omiso de las palabras de Megan. Esa figura en pantalla ya había cruzado una línea, y sabía que no podía quedarme de brazos cruzados. Si alguien estaba usando mi trabajo, lo iba a confrontar. Era hora de actuar. Me levanté y caminé hacia la puerta.
Hiro: ¡Voy a averiguar quién es ese tipo! ¡Y le devolveré el traje! No importa lo que cueste.
Megan: ¿Hiro, espera! No puedes solo salir así. Tú... tú necesitas un plan -dijo antes de ver la pantalla- oye, está haciendo algo raro.
Hiro: ¿Algo raro? -dije volviendo a ver el enfrentamiento. Donde el usurpador de armaduras se paró frente a los derrotados supersónicos para luego sacar algo que me hizo quedar boquiabierto.
Eso era un maldito Morpho, un morpho delta para ser exacto. De la franquicia de los Power Rangers S.P.D. ¿Cómo lo sé? ¡Yo lo veía con Tadashi! ¡Era de nuestros programas favoritos! ¿No me digan que ese Morpho puede hacer lo que creo que hará? ¡no puede ser cierto!
???: ¡Ya basta de esto! Es momento de que enfrenten las consecuencias de sus crímenes. ¡Modo juicio activado! -dijo, encendiendo el morpho. - Supersónicos, se les acusa de daños a la propiedad pública y privada, robo, asalto, conspiración, uso de armas y desacato a la autoridad al intentar evadir a la policía. ¿Cuál es su declaración?
De repente, tanto Sue como su nieto Stu se encontraron en un espacio aislado, con una 'O' y una 'X' flotando a sus lados, generadas por el morpho. Un reloj de cuenta regresiva brillaba, indicando que el tiempo estaba corriendo. No lo puedo creer ¿de verdad pasara lo que creo que pasara?
Sue y Stu: ... ¿Eh? -fue todo lo que pudieron decir para cuando el reloj llegó a su final.
???: Tiempo agotado. El veredicto es que son culpables ¡activando el modo detención! -declaro para que luego pasara lo que no pensé que de verdad pasaría.
Un rayo salió del Morpho, y lo siguiente que vi junto a todos los televidentes, fue como donde estaban Sue y Stu, ahora solo habían dos tarjetas de contención iguales a las del programa, con ambos criminales en su interior.
Sue: ¿Pero qué...?
Stu: ¡Abuela, estamos planos! Pensé que eso solo pasaba en las caricaturas -dijo luego de que luego el camarógrafo de las noticias los enfocara.
Ante la pantalla, la escena dejó a todos en shock, incluido yo. La forma en que ese nuevo "héroe" había atrapado a los Supersónicos con un simple gesto fue impresionante. Los murmullos y gritos de asombro comenzaron a llenar la cafetería, y a mí me dieron ganas de salir corriendo para saber más sobre esta misteriosa figura.
Megan: ¡Increíble! ¿Viste eso, Hiro? ¡Casi como si estuviera jugando a un videojuego! -exclamó mientras su emoción crecía.
Hiro: ¿Increíble? ¡Esto supera lo de la armadura! -repliqué, sintiendo que la rabia y la frustración competían con la admiración en mi interior. Ese tipo no solo estaba usando un traje que yo había diseñado, sino que también estaba aprovechando un dispositivo que conocía bien y que había sido parte de nuestra infancia, de Tadashi y mía. Era como si un extraño se hubiera apoderado de parte de mi vida.
No podía quedarme de brazos cruzados, no después de lo que había presenciado. La adrenalina corría por mis venas. Lo siguiente que supe es que estaba corriendo fuera del gato de la suerte. En mi mente, ya estaba trazando un plan. Tenía que encontrar al nuevo héroe, confrontarlo y descubrir qué era lo que estaba tramando. ¡Y no iba a permitir que se saliera con la suya con mi trabajo!
Mientras buscaba en las redes sociales, vi que la pelea se estaba volviendo viral. Era como si todos los ojos de San Fransokyo estuvieran puestos en este nuevo héroe, apodado "Sunfire". Las publicaciones lo elogiaban y suscitan debates sobre su verdadera identidad. La ansiedad me invadió mientras intentaba organizar mis pensamientos.
Primero, necesitaba más detalles sobre su movimiento y sus hábitos. Requería saber cómo había llegado a la ciudad y qué más había recogido en sus andanzas heroicas. Había algo extraño en la forma en que se movía; era como si tuviera un conocimiento previo de las tácticas adecuadas para manejar a los villanos. No podía dejar de pensar que, de alguna forma, había un talento latente que lo hacía destacar. Pero, ¿de dónde venía?
Decidí que debía dirigirme al lugar donde había ocurrido la pelea. A pesar de que la multitud se agolpaba en la escena del incidente, mis habilidades en ingeniería informática me permitirían acceder a las grabaciones de las cámaras de seguridad. Estaba convencido de que, si había grabaciones del combate, esos datos podrían ofrecer pistas sobre la identidad del involucrado. Sin embargo, al llegar a donde podía estar el centro de control de las cámaras, me encontré con una situación inesperada.
Hiro: ¿Pero qué...? -me pregunté al ver a un hombre vestido como si fuera un sacerdote de alguna religión, cubierto de pies a cabeza. Estaba revisando las grabaciones de seguridad, acompañado de dos criaturas curiosas: una enorme que parecía un cruce entre humano y tiburón, y otra más pequeña, peluda y de color amarillo, que estaba disfrutando de un sándwich... ¿mutantes?
No puedo creer que Don Héctor esté siguiendo el mismo camino que el clon de Liv Amara con Rivera Genetics. ¡Sería el colmo!
Hollow (Tadashi): Descuida, no estoy alterando los videos, solo estoy verificando la calidad. Sabía que vendrías por ellos... tenía la intención de conocerte, Hiro -dijo mientras me enfrentaba, para mi sorpresa.
Me quedé paralizado al escuchar su voz. Estaba claro que este hombre sabía quién era yo, y eso me puso en alerta. La combinación de su aspecto y su familiaridad con mi identidad me generó una sensación incómoda.
Hiro: ¿Tú quién eres? -pregunté, intentando mantener la calma mientras mi corazón latía desbocado en mi pecho.
Hollow (Tadashi): Puedes llamarme Hollow, en cierto modo se puede decir que soy tu superior. Dado que el señor Rivera me contrató para ser el nuevo director general del recién inaugurado departamento de Rivera Solutions, Rivera Robotics -dijo para mi consternación- estoy aquí para hacer un seguimiento de lo que sucedió durante la pelea. Tu interés en ese héroe que apareció en las noticias es muy comprensible -me dijo con total naturalidad.
Y encima tenía un filtro de voz que le daba un tono robótico. Ahora mismo tengo muchas preguntas al respecto.
Hiro: ¿Tú sabes quién es? -pregunté, sintiendo la presión aumentar en mi pecho. Este tipo, Hollow, parecía saber mucho más de lo que estaba dispuesto a confesar, tenía ese presentimiento, el solo... me daba mala espina.
Hollow (Tadashi): Es... complicado, digamos que somos un poco más que colegas. Este héroe que viste, conocido como Sunpyre, tiene un trasfondo que lo conecta con el mundo de la tecnología al ser un sujeto de pruebas para nuevos inventos de mi departamento de Rivera Solutions. Su identidad es confidencial por motivos de marca. Y la gente se está preguntando quién es, y por qué ha aparecido ahora, así que debo asegurarme de borrar lo que sea incriminatorio, lo que en este caso es nada, por suerte -dijo mientras me observaba con un aire calculador.
La forma en que hablaba era suave y casi seductora, como si intentara atraerme hacia un camino que aún no podía vislumbrar del todo. Aun así, mi instinto me decía que debía tener cuidado.
Hiro: ... ¿Por qué me cuentas esto? ¿Cuál es tu objetivo? -dije, sintiéndome vulnerable. Su forma de mirarme, me inquietaba, bastante. Estoy seguro de que nunca antes había visto a esta persona, pero... se sentía como si pudiera leerme como un libro abierto.
Hollow (Tadashi): No me malinterpretes. No estoy aquí para hacerle daño a nadie. Al contrario, estoy intentando evitar que suceda algo peor a las cosas que ya han pasado en esta ciudad recientemente, mi intención es ayudar -me dijo, inclinándose hacia mí en un gesto que parecía casi amistoso, pero aún así, había una barrera entre nosotros que no podía ignorar- viendo de cerca... has crecido, tienes los ojos de tu madre... -reveló, haciéndome sentir una presión en el pecho.
... ¿Qué fue lo que dijo?
Gantu: Señor Hollow, ya perdimos mucho tiempo aquí, debemos irnos ya. Tiene una importante videoconferencia a la cual asistir -dijo el tipo tiburón ¿o era parte ballena? interrumpiendo nuestra conversación.
Hollow (Tadashi): Claro, Gantu, claro... Tomemos un café juntos alguna vez... Hiro -declaró antes de solo irse como si nada paso seguido del par de criaturas.
Después de que ese se marchó junto a sus inusuales compañeros, yo solo me quedé allí, estaba paralizado en el lugar mientras las palabras de Hollow resonaban en mi mente. ¿Cómo podía conocer a mi madre y, por ende, a mi familia? Además, su tono de voz y posturas me hacían sentir intranquilo. Mi corazón latía con fuerza, luchando entre el deseo de seguirle, y el instinto de huir, de escapar de este juego en el que nadie parecía ser sincero de repente.
Hiro: ¿Qué fue eso? -susurré para mí mismo, intentando procesar todo lo que acababa de escuchar. Algo en lo que había dicho se sentía aterradoramente familiar, como una sombra de un pasado que creía haber dejado atrás.
Me sentía confundido, incluso asustado con todo, solo se que quiero respuestas... y creo que se quien me las puede dar. Es hora de hacerle una visita a la familia Rivera fuera del horario laboral.
_________________________________________________________________________
Notes:
Y ese es el capitulo de esta vez. Como siempre pueden votar, comentar, lo que gusten
¿Y que les pareció?
Si, solo diré que esto se puso algo tenso (desde ya digo que Hiro se quedara con la espina un buen tiempo)
En fin, nos vemos
Chapter 21: Capitulo 19: Los preparativos para la fiesta
Notes:
(See the end of the chapter for notes.)
Chapter Text
(Hiro Pov)
(Rivera Solutions, San Fransokyo, USA)
Muy bien, es hora de aclarar algunas cosas, y no pienso irme sin obtener respuestas... desde ya podía hacerme a la idea de que iba a ser despedido y arrojado a la calle por hacer lo que voy a hacer. Pero toda esta situación sobrepasa mis límites de paciencia, el hecho de que la empresa está financiando a un nuevo héroe usando mi diseño de la armadura de Baymax, y encima lo hacen de forma muy descarada. Quiero respuestas y las quiero ya, tanto de Sunfire como de ese tipo encapuchado.
Wasabi: Hiro, piensa en lo que estás haciendo, reconsidera -pidió siendo seguido por Honey y Fred.
Go Go: No hagas un drama de esto, simplemente no es conveniente para ninguno de nosotros -los escuchaba decir mientras que por mi parte solo seguía paso firme hacia la oficina principal.
Porque si, los llame para que me apoyaran en lo que respecta a confrontar a Héctor y Rosa, pero creo que debí haber visto venir que en vez de darme la razón al motivo de mi enojo, me insistieran con que sencillamente lo dejara pasar ¿Qué les costaba apoyarme sin preguntar o pedir un pero o un porqué debes en cuando?
Hiro: ¡Don Héctor! -dije entrando en la oficina sin preguntar y golpeando el escritorio- ¿de dónde salió ese sujeto que parece sacerdote? ¿Y qué eran esas dos cosas que lo acompañaban? El grandulón y la bola de pelos amarilla ¿y quien rayos es Sunfire? ¿Qué está planeando? -exigí al CEO de la empresa.
Quien en vez de mostrarse sorprendido, consternado o cualquier emoción relacionada a la incredulidad, solo terminó su café con calma mientras que Rosa solo levanto su vista levemente de la tablet antes de continuar haciendo lo que sea que estuviera haciendo... ¿Ellos sabían que vendría? Hollow debió decirles.
Héctor: Calmantes, montes, chinito, que parece que te dará un ataque, ¿Pasó algo con Hollow? -pregunto de forma casual, lo que me molesto ciertamente.
Hiro: Si. ¿Quién es el? ¿De dónde salió?
Héctor: ¿Quién es? No te sabría decir, llegó un día, diciendo que supo que por aquí buscamos talento con potencial, pero hasta ahí. No te mentiré, ha sido muy misterioso -mencionó de forma casual sirviéndose otra taza de café- pero sus habilidades no son un juego. Es un experto en el campo de la robótica, y en el de la ciencia genética también. Esos dos. Gantu y Reuben, son sus creaciones... Pero su fuerte definitivamente son los robots.
Hiro: ¿Sus creaciones? -repetí, sintiendo que la adrenalina comenzaba a elevarse dentro de mí al tener malas experiencias con cosas de ese tipo en el pasado- ¿Son mutantes?
Héctor: Esa es una palabra muy fea. Prefieren el término "especie diversa" -aclaró tranquilo- en todo caso no tiene antecedentes penales y todo está según la ley. Así que lo contrate. Se que seguro te parecerá exagerado haberle dado el puesto de jefe científico del departamento de robótica. Pero chamaco, tu eres aun muy joven para el puesto -explicó.
Hiro: ¡¿Joven?! -exclamé, sintiendo que la frustración se acumulaba en mi pecho como una tormenta inminente- ¿Eso es todo lo que tienes que decir? De repente, aparece un tipo raro, con creaciones que ni siquiera se sabe de dónde las saco con las que creo a un héroe, que de paso se robo el diseño de la armadura del robot de los grandes héroes, y tú decides darle el control del departamento de robótica como si nada fuera a pasar. ¡Esto se siente como una traición! -dije encarando al hombre mayor.
Quien giró hacia Rosa, esperando que ella aportará algo de sentido a la conversación. Pero ella permanecía ensimismada en su tablet, sin inmutarse ante mi evidente frustración.
Héctor: Hiro, lo que pasa es que el mundo está cambiando. La tecnología avanza más rápido de lo que podemos seguirle el ritmo y necesitamos seguirle el paso -mencionó soltando un suspiro- además, eres brillante, un mal rayo me parta si lo negara, pero te falta experiencia laboral que respaldara que te diera el puesto, si estás reclamando eso.
Hiro: ¡Aunque me molesta no estoy reclamando eso, el robot de...! -dije exasperado antes de notar algo.
El como Rosa finalmente levantó la vista, y aunque su expresión era neutral, había un destello de seriedad en sus ojos.
Rosa: Hiro, entiendo que estés enojado, pero tienes que verlo desde otra perspectiva. Para empezar, no había ninguna propiedad intelectual en la armadura del robot de los grandes. Y a fin de cuentas, ese traje el líder de los grandes héroes lo creó para ayudar a la gente, y si volver a otra persona un héroe puede salvar vidas, no podemos limitarnos por un inexistente derecho de propiedad. Debes aprender a dejar pasar esas viejas rencillas, incluso si eso duele -me dijo con una calma severa que solo me enojo más.
Hiro: ¿Soltar? ¡¿De verdad crees que eso es lo que debo hacer?! -las palabras salían a raudales, cada vez más rápidas y llenas de ansiedad- ¡Acaso no te importa que un extraño se lleve el reconocimiento que le pertenece al capitán encanto!
Rosa: A ti ni debería importarte, no eres el capitán encanto ¿o si? -pregunto haciendo que me tensara- además ¿desde cuando un héroe se molestaría porque otras personas salvan a otros igual usando su tecnología? Eso sería para sentirse honrado, no usurpado -declaró de forma concreta dejándome sin palabras.
La tensión en el aire era palpable. A medida que Rosa terminaba de hablar, sentí que el peso de sus palabras se posaba sobre mis hombros como un yugo. No podía dejar de pensar en lo que significaba todo esto: un nuevo héroe que usaba el diseño que había creado con tanto esfuerzo, mientras yo, que había estado a la vanguardia de la tecnología y la innovación, parecía estar relegado a un segundo plano y debía permitirlo porque se supone que nadie sabe que yo y mis amigos somos los grandes héroes, esa es la idea de tener una identidad secreta en primer lugar.
Hiro: Pero... ¡Eso no es justo! -mi voz sonó más fuerte de lo que pretendía, como un eco de mi frustración. A lo cual Héctor puso una mano en mi hombro, tratando de calmarme, pero no necesitaba su compasión. Lo que necesitaba era reivindicación.
Héctor: Hiro, ninguno de nosotros está diciendo que no tengas razón en sentirte frustrado, seguro eres un gran fan de los grandes héroes. Pero debes recordar que la innovación nace de la colaboración. Sunfire es un reflejo de un nuevo camino, uno que puede traer muchas más oportunidades de las que imaginas. Tal vez deberías ajustar tu enfoque en lugar de pelear contra esto.
La sensación de impotencia hervía en mi interior mientras me debatía entre la frustración y la confusión. La lógica de Héctor y Rosa me rodeaba como un cálido abrazo, pero no podía evitar sentir que habían cruzado un límite que nunca debió ser traspasado. Pero por mucho que quisiera quejarme, por mucho que me moleste, es verdad, al menos como Hiro no tenía voz y voto aquí... es muy molesto.
Siendo allí que Go Go, quien había permanecido callada hasta ahora, se acercó y cruzó los brazos, su mirada seria.
Go Go:... Sabe algo Don Héctor. Aunque es cierto que con su liderazgo la empresa de Rivera Solutions es mucho más amada de lo que fue cuando era Krei Tech... Es un hecho que guarda incluso más secretos qué Krei -declaró con su usual franqueza.
Héctor: ¿Qué empresa no los tiene querida? -pregunto divertido antes de responder una llamada- ¿Si?... Claro, querida, tráelo -dijo antes de colgar- De hecho. Para que vean que hay confianza entre todos nosotros, estoy a punto de ver uno de esos "secretos" qué guardo. Vean lo que será el último grito en el mercado de mascotas -dijo a la vez que las puertas de la oficina se abrieron.
Revelando a una chica de piel morena de un 1,62 más o menos, con una cara un poco angulosa y caderas anchas, posiblemente como resultado de la pubertad, se notaba que era joven. Usa un suéter tipo cárdigan de manga 3/4 de un color rojo cereza y más corto, una camiseta sin mangas color crema debajo, una falda de mezclilla y zapatillas. ¿Quién es ella?
Pero además del misterio de la chica desconocida, también debe recalcar que no venía sola, junto a ella venía un perro de la raza Bichón Maltés, pero a diferencia de otros perros que había visto de este tipo ya fuera en internet o en manos de una que otra mujer de la alta sociedad, este era diferente, su pelo era de un morado claro en vez de blanco... y algo me dice que no era pelo teñido.
Grandes héroes:... ¿Un perro? -fue lo primero que todos dijimos por inercia sin saber que decir al respecto.
Rosa: Antes que nada, quiero que saluden a mi nueva asistente, su nombre es Penny Proud. Saluda Penny.
Penny: Un gusto conocerlos a todos, espero que nos llevemos bien -dijo haciendo una leve reverencia.
Héctor: Y sobre su pregunta, eso no es un perro cualquiera. Es un perro eterno por así decirlo -dijo con emoción- imaginen un perro que no cambia, un perro que se mantiene lindo, obediente y amoroso por siempre. Un perro que será la mascota ideal para cualquier familia.
Hiro: ¿Perro eterno? -pregunte con cierto escepticismo. Ya resignandome a que al parecer mis inquietudes pasaron a ser de segundo plano y aun si insistiera, no me dirán nada.
Rosa asintió, su mirada mostrando una mezcla de orgullo y anticipación al hablar sobre su nueva asistente.
Rosa: Exacto -aquí hizo una pausa, señalando al Bichón Maltés- es parte de un nuevo proyecto que hemos estado desarrollando. Este pequeño no solo es una nueva opción para las familias, sino que además está diseñado con tecnología avanzada que podría ser el siguiente paso en el mundo de las mascotas, siendo lo mejor de todo... -dijo mirando al perro y guiñando un ojo.
Para que luego el animal hiciera algo que honestamente me tomo con la guardia baja.
Pinky: Ese sería yo, un gusto conocerlos a todos -dijo con una voz chillona y tierna para luego ir buscar apapachos con Honey Lemon- hola, soy Pinky. Acabo de conocerte, y te quiero mucho.
El momento de la revelación fue tan inesperado como desconcertante. Todos nos quedamos mirando al pequeño perro mientras, a pesar de su apariencia adorable, comenzaba a hablar y a manifestar una personalidad que contrastaba de manera picante con su tamaño. No podía creer lo que estaba escuchando.
Hiro: ¡¿Un perro que habla?! -exclamé, incapaz de contener mi asombro. Era como si un nuevo nivel de locura se hubiera añadido a esta confusión.
Rosa sonrió, disfrutando del impacto que estaba causando.
Rosa: Sí, Pinky es un experimento de inteligencia artificial integrado en un diseño biológico. En otras palabras, es un perro que no solo se verá adorable siempre, sino que puede interactuar como lo haría cualquier otra mascota con la diferencia de que puede entender y responder a los demás como una persona.
Pinky, el perro, hizo un giro gracioso, sus orejas de pelo morado apenas se movían mientras buscaba compañía. Todo esto ante la mirada de una encantada Honey que estaba usando todo de sí misma para no estallar en emoción.
Pinky: ¿Te gustó este truco? ¡A mí me gustan los paseos y los abrazos! -dijo con un tono emocionado. A pesar de lo poco probable de su existencia, no podía evitar sonreír ante su entusiasmo contagioso.
Héctor: ¿No es genial? ¿Quién no quiere un perro que habla qué encima es adorable? -pregunto antes de que de la nada ya habían varios billetes sobre su escritorio.
Y Pinky ya estaba en brazos de Honey Lemon quien vacío todo el dinero que tenía en su bolso sin dudarlo un segundo.
Honey: ¡Cállese y tome mi dinero! -pidió con exceso de emoción.
Por su parte, Héctor observó el intercambio con una sonrisa satisfecha, como si todo saliera según lo planeado. El entusiasmo de Honey era contagioso, y detrás de ella, los demás se unieron a la conversación sobre el nuevo perro eterno con un aire de incredulidad y diversión.
Excepto Go Go que, claramente incómoda, cruzó los brazos y miró a Rosa con desconfianza.
Go Go: No sé si esto es un avance o simplemente un truco de marketing. Un perro que habla... ¿realmente es necesario? -cuestionó, intentando mantener el escepticismo.
Rosa sonrió, manteniendo la fe en su proyecto.
Rosa: Es necesario si quieres atraer la atención de las familias modernas. La gente busca interacción, y Pinky no solo ofrece compañía, sino también inteligencia. Créeme, esto va más allá de un simple perro.
Fred: ¡Pues yo creo que es genial! ¿No crees, Wasabi? ... ¿Wasabi? -pregunto para que luego vieramos a nuestro amigo de mayor tamaño estornudando en exceso.
Cierto, el pobre era alérgico al pelaje
Rosa: Vaya... parece que aun con nuestras precauciones no logramos qué 007 no le diera problemas a las personas alérgicas al pelo animal -dijo haciéndome arquear una ceja.
¿007? ¿Ese es el nombre de Pinky como proyecto científico?
Héctor: Meh, detalles -declaró restando importancia al asunto.
Hiro:... ¿Es ese tipo de cosas las que han estado haciendo en Sycorex desde que la compraron?... Estos ¨perros eternos¨ no se volverán mutantes peligrosos y agresivos como los Mayoi, ¿verdad? -pregunte teniendo recuerdos de vietnam con esas pequeñas plantas vivientes de aspecto adorable.
¿Cómo algo tan lindo pudo volverse algo tan monstruoso?
Héctor: De hecho ¿Creerías que incluso buscamos una forma de quitarle a los Mayoi los genes que los volvían potencialmente peligrosos? -preguntó sonriendo- si todo sale bien, para la próxima semana estaremos lanzando al público los Mayoi 2.0 qué no se volverán monstruos grandes y destructivos.
Hiro: ... ¿De verdad cree que es buena idea jugar con algo como los Mayoi? -dije, tratando de mantener mi voz tranquila pero mi tono revelaba mi preocupación. La idea de experimentar con especies genéticamente modificadas como los Mayoi, que en su mayoría habían causado estragos cuando estaban fuera de control, no me parecía adecuada en absoluto.
Héctor: Claro que sí, tú tranquilo. Y por cierto, conozca esa mirada... Y no, chinito. Tu no tienes acceso a los laboratorios de la división biotecnológica -dijo haciendo que frunciera el ceño de nuevo- tu eres de la división de robótica además de ser el asistente de Crazy Land, por lo tanto tienes acceso a los laboratorios robóticos y nada más -dijo queriendo dejar el tema zanjado.
Mi mente estaba girando tan rápido como una rueda que va cuesta abajo. La frustración por la situación con Sunfire, el extraño que había irrumpido en mi vida de la nada, se mezclaba con el temor de que estos nuevos experimentos lleven a consecuencias nefastas. Sudores fríos empezaron a correr por mi frente mientras observaba al perro morado llamado Pinky interactuar con Honey y los demás. ¡Este es un verdadero problema! ¿Qué tal si este perro eterno se vuelve peligroso?
Héctor: Se lo que piensas, y relájate, todo está bien -dijo buscando calmarme- tal vez a futuro puedas trabajar codo a codo con los de esa división, digo, supe lo que tú y tu amiguita Karmi hicieron, pero de momento tu a lo tuyo y deja a los genetistas hacer su trabajo. Del mismo modo los genetistas no tienen permitido acercarse al área de robótica u otras áreas. Cada uno a su trabajo en el que son buenos, o dicho a mi modo, mucho ayuda el que no estorba.
Hiro: ... ¿O sea que usted se quedará toda la jornada laboral en su oficina? -pregunte buscando molestarlo un poco para al menos desquitarme de que me insistiera con esconderme cosas directamente a la cara.
Héctor: Jaja, muy gracioso -mencionó con sarcasmo antes de sacar lo que parecía ser una invitación- ¿Qué tal si en vez de estar aquí molestando te vas a comprar un traje para la ocasión El próximo mes habrá un gran evento, una fiesta de té en la que invitare a toda la alta gama de la ciudad así como a unos socios comerciales importantes.
... ¿Una fiesta de té? lo admito, estoy confundido. La idea de una invitación a un evento tan formal, cuando todas mis energías estaban concentradas en entender lo que estaba pasando con Sunfire y esta excéntrica compañía que minuto a minuto solo me confundía más, me pareció surrealista. Era casi como si, en un intento de escapar de un torbellino de preocupaciones, me estuvieran empujando a otro tornado.
Hiro: ... ¿"Tu personaje es Alicia"? -pregunté extrañado tras leer la invitación.
Héctor: Decidí hacer la gala con temática a Alicia en el País de las Maravillas, en la invitación de cada invitado dice qué personaje se supone que emulen con su atuendo el día del evento -explicó con normalidad- así que ya ves. Te pones vestido o empiezas a ver como combinar tu atuendo para ser Alicia.
Marco: Aunque si te pones vestido sé que Miguel te querrá más -escuche decir a De la Cruz que seguro iba de pasada por el pasillo fuera de la oficina.
Y juro que en este momento desearía tener cualquier cosa considerablemente pesada o afilada a la mano para arrojárselo.
Héctor: Bueno, pueden retirarse ya jóvenes... Aunque por cierto, pensándolo bien... -dijo para luego abrir una gaveta de su escritorio y dándoles unas hojas a Honey, Go Go y Wasabi.
Momento en que mi curiosidad hizo acto de aparición, haciendo que viera de reojo el documento que estaba leyendo Go Go... eran contratos para que trabajaran en Rivera Solutions, Don Héctor les estaba ofreciendo empleo a los chicos.
Wasabi: ¿Y esto?
Héctor: Escuche que buscaban empleo y los 3 son graduados con honores del ITSF... ¿Interesados? -preguntó con interés- no tienen que responder de inmediato. Podemos hablarlo con calma luego de la fiesta del té del próximo mes. Hasta entonces pueden quedarse con la copia del contrato para leerlo las veces que sean necesarias.
El ambiente en la oficina de Rivera Solutions se había transformado del caos de preguntas y frustraciones a una escena de sorpresa y emoción. Mis amigos se miraron unos a otros, y aunque se notaba que estaban intrigados por la propuesta de Héctor, no pude evitar sentirme un tanto excluido de los acontecimientos que se desarrollaban.
Wasabi, aún sosteniendo el contrato en sus manos, alzó la vista hacia Héctor.
Wasabi: ¿De verdad estás ofreciendo trabajo a todos nosotros? Pero... ¿por qué?
Héctor: Porque sé que el futuro de esta empresa se construye sobre talento, y ustedes tienen lo que se necesita para llevar la innovación a un nivel completamente nuevo. Además, la próxima generación de científicos, ingenieros y creadores es la clave para el éxito de Rivera Solutions, tanto en robótica como en biotecnología, sin mencionar otros futuros departamentos -respondió, su tono era serio, pero su sonrisa revelaba su entusiasmo por lo que podía surgir de ello.
Go Go, Wasabi y Honey:... Lo pensaremos -mencionaron tomando los contratos con cierto recelo. Ya de lo que vi de reojo, eran condiciones laborales muy buenas para ser verdad para recien graduados de la universidad.
Héctor: Muy bien... Y Honey. Quédate con tu dinero, puedes quedarte con ese 007... perdón, con Pinky, tómala como un regalo -dijo devolviendo el dinero a mi amiga alta.
Honey: ¿En verdad? -pregunto, para luego tomar al animal en brazos y dar vueltas por toda la oficina- ¡Tu y yo seremos las mejores amigas!
Pinky: ¡Siiii! -dijo el animal compartiendo la felicidad de su nueva dueña.
Go Go:... Puede hacer del baño ella sola ¿verdad? -pregunto más que todo porque Honey y ella viven juntas, a lo cual Héctor solo le dio un pulgar arriba.
Yo me quedé observando la escena con sentimientos encontrados. Por un lado, la felicidad evidente de los chicos (excepto Wasabi) con Pinky y la nueva oferta de trabajo de Héctor; por el otro, mi creciente frustración por la situación en Rivera Solutions y la aparición de Sunfire y de Hollow. Mientras todos reían y disfrutaban de la compañía del perro eterno, no podía dejar de pensar en lo que significaba todo esto.
Rosa se dio cuenta de la tensión no resuelta en mi rostro y se acercó a mi.
Rosa: Hiro, sé que esto es mucho para asimilar, pero debes tratar de mantener la mente abierta. Sunfire, Hollow y lo que está sucediendo aquí son sólo partes de un cambio mayor, algo necesario para el futuro de la tecnología y de nuestra ciudad -me habló con condescendencia- lo entiendes ¿verdad?
Hiro: ¿Un cambio mayor? -repetí, mi voz cargada de escepticismo, mientras trataba de procesar las palabras de Rosa. La frialdad de su actitud casi me irritaba, apreciaba a la chica, pero a veces su personalidad profesional podía ser molesta. Por mi parte solo no podía creer que todos a mi alrededor parecieran tan despreocupados por la aparición de un nuevo héroe que usaba mi diseño. ¡Mi diseño! -Esto no se siente como un cambio positivo. Siento que estamos a merced de personas que no conocen el verdadero valor de las cosas que usan.
Rosa: Hiro, esto es solo el principio. Si realmente deseas ser parte de la evolución de la tecnología y del heroísmo, deberías considerar esta oportunidad como un puente hacia un futuro más grande de lo que imaginas. La ciudad necesita héroes, y a veces eso significa que debemos dejar de lado nuestro ego y permitir que otros también tengan su momento -me dijo con una mirada que me hizo sentir incómodo, como si me estuviera hablando, no a mi, sino a... mi alterego.
¿Ella lo sabe?
Miré a mi alrededor, viendo a mis amigos reír y disfrutar con Pinky así como susurrando sobre los beneficios laborales. Era difícil no sentirme marginado en aquel momento. La alegría en sus rostros me hizo preguntarme si estaba siendo demasiado egoísta al aferrarme a mi molestia. Pero, ¿acaso mis sentimientos no tenían valor?
... Lo dejaré pasar por ahora, a fin de cuentas parece que debo prepararme para una fiesta. Pero esto no ha terminado, está lejos de terminar. Por ahora creo que unas gomitas me pueden hacer sentir mejor.
... ¡Me lleva la que...!
___________________________________________________________________________
(General Pov)
Rosa: Apenas logramos esquivar esa bala, querido tío -dijo ajustando sus gafas mientras observaba como Penny escoltaba a Hiro y compañía a la salida.
Héctor: En casos como este agradezco mucho nuestro talento para desviar la atención con cualquier tema X que se nos ocurra ¿no crees? -pregunto divertido.
Rosa: Definitivamente. A veces, el mejor modo de manejar una crisis es precisamente desviar la atención hacia algo que cautive la imaginación de las personas. Pinky ha sido un buen distractor -mencionó tranquila- además, ahora tenemos a los amigos de Hiro interesados en trabajar para nosotros. Eso podría abrir muchas puertas.
Héctor: Exacto. Y, aunque nadie admite la verdad abiertamente, la mayoría de gente en la industria tecnológica y del entretenimiento están en busca de la próxima gran novedad, aunque al comienzo hicimos todo esto para encubrir a Tadashi y seguirle el juego, no hay nada de malo en tomar nuestra propia porción del pastel -mencionó sirviendo un trago.
Rosa: Eso verdad. Pero no podemos permitir que Hiro y su ego interfieran. Tiene mucho potencial, pero su frustración no facilita las cosas. Debemos mantenerlo cercano, pero también a raya. La última cosa que necesitamos es que se sienta amenazado -aclaró pensando en todo el dolor de cabeza que sería que la verdad se descubra antes de tiempo.
Aunque era difícil medir exactamente cuándo sería buen momento para revelar el hecho de que Tadashi se encontraba con vida cuando el propio involucrado principal de todo el asunto se mostraba reacio a la idea de desvelar su supervivencia.
Héctor: Lo sé. Además, Tadashi se está moviendo más rápido de lo que imaginamos. Esa charla de ser el nuevo héroe de la ciudad está llamando la atención de los medios y, por ende, el interés del público. Hay que tener cuidado con cómo manejamos la narrativa... en general los hermanos Hamada si que son difíciles de manejar -declaró antes de solo restar importancia al asunto- ¿Qué tal si mejor continuamos con la planeación de la fiesta?
Rosa: Ya me adelante, prepare una lista de invitados que incluye a la clase alta de la ciudad, famosos, familias invitadas de forma especial así como ciertos invitados, algunos contactos de diferentes medios y recursos de la ciudad que está bien que tengamos de nuestro lado, sin mencionar a los V.I.P. Así como de diferentes cosas que podríamos necesitar.
Héctor: Una lista aceptable, aunque estoy en desacuerdo con invitar a la familia Mole, son unos pesados -dijo revisando la lista- necesitaremos alcohol, comida y regalos. Pero como es una fiesta del té los invitados también deben traer regalos al anfitrión, ósea yo.
Rosa sonrió mientras veía a su tío ir revisando la lista, una mezcla de preocupación y emoción dibujada en su rostro.
Rosa: Ya tengo todo eso contemplado. He pensado en un servicio de catering especial que ofrezca una variedad de opciones por fuera de todo el menú que Kyle está desarrollando, incluyendo snacks veganos y libres de gluten para los clientes quisquillosos, para eso ya formalice un contrato formal con la tía Cass -explico mientras revisaba su tablet para verificar la agenda- además, prepararé una selección de tés exóticos que sorprenderán a los invitados.
Mientras ambos pensaban que ojalá la máquina que estaban preparando para la ocasión estuviera lista para entonces.
Rosa: En cuanto a los regalos, he contactado a algunos artistas locales para que realicen obras únicas que pueden ser parte de la decoración y como souvenirs para los asistentes, así como a un grupo de música clásica. Sin mencionar obviamente la presentación de los chicos y nuestra sorpresa del final.
Héctor: Eso suena prometedor. A la gente le encanta lo exclusivo. Si logramos crear el ambiente adecuado, esto podría ser una gran oportunidad para reforzar nuestra imagen y abrir el terreno para futuras colaboraciones -exclamó tomando un shot de un trago- será un gran evento ¿Qué podemos hacer ahora?
Rosa: Supongo que podemos asegurarnos de contactar a los invitados que faltan. Por ejemplo, nuestras estrellas del mundo de los dobles de riesgo insisten en que la familia Buttowski sea invitada. Así como J.T.T. quiere que la familia restante de Billy Joe Cobra sea invitada, pensaba que podíamos ir en persona... ¿Me voy a Mellowbrook y tú vas a Beverly Hills?
Héctor: Suena a un plan para mí -dijo poniéndose de pie- Pero asegúrate de que no haya malentendidos. O al menos no lleves a la ruina a toda la ciudad... no queremos eso nuevamente -menciono con un suspiro- ¿en que estuve pensando cuanto te di el dinero para recibir esas clases privadas de derecho? Y no me hagas hablar de las clases de programación o las de finanzas.
Rosa: No pensabas, solo me diste dinero sin indagar cuando te dije que era para clases extracurriculares -exclamó casual- más bien deberías agradecer que usé tu dinero para ser productiva y no para actuar como alguien promedio de mi edad.
Héctor: Amen a eso -declaró antes de ponerse un abrigo de viaje- bueno, vámonos. no olvides tu taser, gas pimienta, dardos tranquilizantes y un buddie guardia -pidió en lo que su sobrina solo rodo los ojos.
Su tío estaba loco y por lo general ella era su niñera, pero aun así lo quería. Para bien o para mal.
_______________________________________________________________________
(Rosa Pov)
(Tiempo después)
(Skidzeez, Mellowbrook, Massachusetts, USA)
Lo reconozco, hacía mucho que no salía de la oficina, entre manejar las finanzas, tomar mis clases en línea, y ser asistente y coordinadora de todos los temas extraoficiales que nos involucra en general a la familia Rivera como top secret, reconozco que había pasado un tiempo desde la última vez que estuve en un lugar rural como este a mitad de la nada. Admito que me sienta bien respirar aire fresco.
Y podría hacerlo más seguido, pero mi tío era alguien que me sobreprotege demasiado, a donde fuera que iba debía estar armada hasta los dientes, con guardaespaldas o más recientemente con máquinas para resguardarme las espaldas. Aunque los dos últimos por lo general no son necesarios, yo misma disfruto más de estar en una oficina o un espacio cerrado, me hace sentir... más segura.
Pero igual hacer excursiones debes en cuando era sano, no todo tenía que ser trabajo. Aunque irónicamente era justo por trabajo. ¿Y por qué no? También me daré algo de gusto personal, siempre me ha gustado darle su merecido a los cretinos y a los idiotas. Y justo estaba por hacer eso con un cretino en particular, Brad Buttowski, el hermano mayor de la razón por la que estoy aquí.
Quien justo acaba de recibir su merecido luego de haber humillado a su hermano menor de todas las formas posibles con su programa de internet ¨Brad'D¨ y su segmento, ¨Ya te tengo¨, que básicamente era Brad humillando y maltratando a su hermano para diversión de toda la ciudad, y de todo el mundo siendo sincera.
Rosa: Completar todo el recorrido desde tu casa hasta Skidzeez sin tocar el suelo, un logro impresionante -dije acercándome y llamando la atención del niño- tú debes ser el famoso Kick Buttowski.
Un niño pequeño, incluso para alguien de su edad, con un traje de medio doble de riesgo estereotipado, a simple vista podía asumir tres cosas de él. Se trataba de una persona centrada con nervios de acero, eso se notaba solo con ver su expresión seria y algo temeraria si te fijabas bien en los detalles. Que no iba a crecer mucho cuando llegara a la adultez... y que tendría una gran... parte posterior, al crecer.
Kick: ¿Quién pregunta? -fue directo al punto.
Rosa: Una amiga de Billy Stumps -dije sabiendo que solo con eso bastaría para llamar la atención del menor.
Quien en efecto pasó de verse escéptico a mostrar la emoción y energía típica de cualquier niño de su edad. Aunque antes de que pudiera hacerme alguna pregunta, escuché un gruñido proveniente de cierta molestia de la que debía encargarme.
Brad: ¡Atrás Loser, yo la vi primero! -declaró mientras se recuperaba de ser abucheado con su propia mercancía y de ser electrocutado a modo de broma por su hermano como fin de todo el mal trago.
Y no mentiré, la idea de que este tipo declarara tan a la ligera que quería tener algún tipo de relación conmigo me hizo tener deseos de vomitar del desagrado. Empezando con que lo investigue... y podía olerlo desde aquí y afirmar que bañarse no era algo que acostumbraba a hacer.
Rosa: Tú debes ser el tal Brad -dije con indiferencia- en parte te lo agradezco, me ahorras el buscarte. Toma, para ti -exclamé para luego darle una hoja.
Brad: ¿Me das tu número de teléfono? ¿Tan rápido? Se nota que el encanto del Brad afecta también a las morenazas -se jactó con arrogancia tomando el documento, grave error.
Rosa: No, es una orden judicial. Te estoy demandando por daños psicológico, físico y mental a tu hermano menor -dije para la incredulidad del adolescente- y si preguntas qué pruebas tengo... Literalmente hay todo un blog con dichas pruebas que muestra como deliberadamente arruinas sus acrobacias, lo exhibes desnudo públicamente en Internet tanto literal como figurativamente, lo haces una burla global. Y algo me dice que todo eso fue sin el consentimiento de Kick.
Brad: ¿Qué? ¡Eso no es cierto! ¡Es solo entretenimiento! -protestó, intentando mostrar confianza, pero sus ojos delataban su nerviosismo.
Rosa: Entretenimiento para quien, Brad. Para ti, quizás, pero para tu hermano es una pesadilla. Lo has estado acosando y humillando, y eso se llama acoso -dije sin titubear, viendo cómo su rostro cambiaba de arrogancia a pánico- acoso del que estoy segura que Kick no consintió, primera regla de subir videos de Internet, si vas a subir algo de alguien, debes tener el consentimiento de esa persona. Si no, es un delito. Ah, y se me olvidaron estos -dije para acto seguido entregarle más papeles.
Brad: ¿Y esto? -pregunto tratando de no salir huyendo del pánico que estaba sintiendo.
Rosa: Para resumir, estoy ayudando a todo el equipo de porristas a demandarte por acoso sexual -dije para luego darle algo mas de inocencia a mi tono- no sé cómo, averiguaron que tú eras el dentista espeluznante que les aconsejó masticar chicle, y fue peor cuando averiguaron que lo hiciste porque tienes una colección de chicles masticados de cada una de ellas, por cierto, ¿Sabías que el que sea ilegal pretender ser doctor, también aplica en los dentistas?
Brad: Pero... ¡no puedo ir a la cárcel! ¡Solo me estaba divirtiendo! -Sus ojos comenzaban a aguarse. Nunca había visto a un chico tan arrogante desmoronarse de manera tan rápida, y debo admitir que me dio una satisfacción personal- ¡no es justo!
Rosa: ¿Y quien dijo que la vida es justa? Pero eso tu lo sabes bien ¿no? -pregunte antes de chasquear los dedos.
Momento en que los dos oficiales locales del departamento de policía del pueblo, Irwin y Mark, hicieran acto de aparición y arrestaran al adolescente por actos delictivos. Con Irwin exagerando un poco la situación.
Irwin: Al fin, una excusa para arrestar a un adolescente. Otro de mis sueños de policía, y hasta me podré deslizar sobre el capó del auto de nuevo ¿puedo arrestarlo ahora, puedo?
Rosa: Y con brutalidad -dije para que luego el oficial cumpliera con la orden, en efecto, deslizándose por encima de la parte delantera de un vehículo de paso.
Mark: En verdad ama deslizarse por el capo -exclamó divertido por el actuar de su compañero.
Irwin: ¡Viva, mi segundo arresto!
Brad: Pero, no es justo! ¡Exijo un abogado, quiero mi llamada! ¡Esto es abuso de poder! -se quejó y reclamó mientras era metido en la patrulla.
Rosa: Intenté conseguirte uno, un acto de buena fé, pero todos dijeron lo mismo, "me gusta mi reputación intacta¨ -dije solo viendo como la patrulla conducida por Irwin se alejaba para luego centrarme en el hermano menor que estaba boquiabierto- disculpa, pensé que te hacía un favor. Puedo hacer más por él si quieres.
Aunque eso último lo dije más como cortesía, ya que sabía de antemano lo que este chico diría, a fin de cuentas, su hermano mayor no es el más querido por así decirlo por aquí.
Kick: No, descuida, tú lo dijiste, no hay abogado que pensara que podría salvar a Brad -mencionó no dándole mucha importancia al asunto en realidad.
Rosa: En todo caso. Si quieres podemos hablar en privado, lejos de ojos y oídos curiosos -dije señalando qué prácticamente todo el pueblo estaba observándonos- ¡¿no tienen nada mejor que hacer?! -pregunte en lo que ellos solo se vieron unos a otros.
Mouth: No visitas Mellowbrook muy seguido, ¿Verdad? -pregunto el chico que investigue como el típico usurero del pueblo por excelencia, solo ignorado por su padre.
Igual no era mi problema.
Rosa: No, aparentemente -dije antes de ver al policía restante- oficial, escóltenos a la residencia Buttowski -solicite al hombre que aceptó sin muchos peros. Una ventaja de que mi tío al parecer le dio dinero suficiente para tomarse unas vacaciones para toda la familia a Europa a fin de año.
Aclaro, no fue un soborno, solo fue una... donación.
Y allí me di cuenta de que tan chismosa y metiche era la gente de este pueblo al ver como prácticamente todo el pueblo se encontraba siguiendo la patrulla donde Kick y yo nos encontrábamos para saber qué era lo que pasaba. Lo que me resultó ciertamente molesto ¿es que no tienen una vida propia para andar fisgoneando en la de los demás? No me fastidien.
Igual por suerte la molestia no duró mucho ya que en cuestión de poco tiempo ya nos encontrábamos en la residencia Buttowski. Con los padres saliendo de la casa para recibirnos al ver la patrulla. Posiblemente ya imaginando qué cosa había pasado ahora.
Harold: Ay no ¿Qué hizo ahora? -pregunto al ver a su hijo menor bajar como si nada del vehículo judicial.
Rosa: Él no, Kick está libre. Aunque necesitarán un abogado para Brad... o rezarle a un santo -dije dándoles una copia de la orden a ambos padres para que comprendan lo que está pasando y va a pasar ahora.
Harold: ¿Qué? ¡Eso es absurdo! -exclamó, mientras tomaba la orden que le había entregado, y su expresión se tornaba de preocupación a confusión extrema.
Honey: ¿Hiciste qué arrestaran a nuestro hijo? ¿Por qué algo tan cruel? Brad es un buen chico -dijo uniéndose a su marido leyendo el documento legal con preocupación.
Rosa: Señora -comencé con una ceja arqueada- ¿Son usted y su esposo conscientes de la existencia de un blog llamado "Brad'D"? Creo que mencionado en la orden -mencione solo para verlos negar- básicamente es un blog en el que Brad lleva su cretinez al siguiente nivel, al jugarle bromas... Bastante pasadas de la raya a Kick -dije para acto seguido mostrar los videos con mi teléfono.
Que en orden iba con desatornillar un buzón, quitarle clavos a una cerca no sin antes desajustar los pernos de la bici y desengrasar la cadena de la misma, desatornillar los tornillos del tobogán del parque público, colocar hilos sobre las cercas, cortar adrede ramas para que se rompan cuando Kick iba a pasar encima de ellas, modificar y estropear su propia casa, hacer a su hermano caminar sobre piedras calientes luego de arrojarlo con todo y cama de un barranco, y la lista sigue y sigue... todo para al final tener el mismo resultado, su hermano ser grabado siendo lastimado y herido una y otra, y otra, y otra vez.
Harold: Pues, bueno... Solo son jugarretas de hermanos. Además, Kick se lastima así todo el tiempo, no es nada del otro mundo ¿Qué hay de malo con que Bradley gane dinero extra con esos? Mientras no lo saque de mi bolsillo -mencionó queriendo restarle importancia a toda la situación.
Rosa: ¿Nada del otro mundo? -repetí, incrédula, mientras miraba a los padres de ambos chicos, quienes parecían minimizar la gravedad de los actos de su hijo.
Esto era evidentemente frustrante.
Mark: Señor Buttowski, temo que no entiende -dijo el policía detrás de mí- lo que Brad está haciendo no es solo una broma entre hermanos, es acoso sistemático. Y esos videos, además de ser una violación de la privacidad de Kick, son una forma de entretenimiento a costa de su dolor. Es abusivo y tendrá consecuencias legales graves para él. Es decir, para empezar Brad debió tener el permiso de Kick para subir esos videos, y no lo tenía.
Rosa: Si tuviera que adivinar, diría que nunca se lo pidió porque sabía que tendría que darle un porcentaje de las ganancias... -dije antes de solo negar- o sencillamente porque es un cretino y le divertía ver a Kick frustrado de que su intento de llegar a Skidzeez, eso sin mencionar que varias de las "jugarretas" sobrepasan por mucho lo que se consideraría moralmente aceptable para que un hermano le haga a otro, como dijo oficial.
Mark: Con decir que en al menos un video Kick acabo... indecorosamente -dijo para no mencionar la palabra que empieza con D y termina con esnudo.
En serio, cada segundo que paso repasando todo esto es un segundo que me da más placer de meter hasta el cuello a ese infeliz de demandas.
Rosa: Al menos cuando pasó el incidente con el camión de Billy Stumps la televisora tuvo la consideración de censurar las partes privadas de Kick luego de que se le derritiera el traje -dije haciendo mención a cierto incidente que paso con un concurso de la marca guepardex y una llave dorada.
Mark: Brad... Todo lo contrario, señores Buttowski, hasta en la edición agregó flechas y comentarios de... "Lo pequeño" que es Kick, si saben a lo que me refiero -dijo logrando un efecto que hace rato que esperaba la verdad.
La furia de la madre.
Honey: Obviamente que es ¨pequeño¨. Solo tiene 10 años -aclaró indignada.
Rosa: Lo que, me dará la razón, señora Buttowski, vuelve más grave lo Brad hizo, literalmente compartió un vídeo donde se puede ver a un niño de diez años como vino al mundo y hasta señalando deliberadamente sus partes privadas -dije mientras remarcaba más de los cargos y la naturaleza de estos.
Mark: Y si, señor Buttowski, Kick se lastima seguido, mi compañero y yo hemos seguido sus acrobacias desde que nos ayudó con ese creepy de Chuck Glarman, somos sus fans -mencionó con calma guiñando un ojo a Kick- pero me dará la razón de que si se lastima, debería ser porque hizo un mal cálculo o porque no afino bien su equipo, no porque su hermano literalmente lo saboteó para hacer que se lastimara y hacerlo un hazmerreír en internet
Rosa: Lo que me hace preguntarme que si eso hizo Brad de forma pública. ¿Qué cosas le habrá hecho a su hermano en privado aun con ustedes dos en casa? -pregunte haciendo que el padre me viera con mala cara.
Harold: ¿Insinúas qué somos malos padres?
¿En serio lo pregunta? De ser por mi hasta lo llevó al show de Amanda para escuchar el icónico: ¡Que pase el desgraciado! Pero no, debía mantenerme profesional.
Rosa: En absoluto, no estoy insinuando nada, creo que más bien son... padres ocupados -dije suavizando lo mejor posible lo que realmente quería decir- y Brad se aprovecha de eso, usualmente lo dejan a cargo de sus hermanos cuando salen, ¿No?
Honey: Es la única opción. Ninguna niñera ha resistido cuidar a nuestros hijos más de una vez. Extrañamente es en lo único que se entienden -dijo haciéndome sentir migraña.
¿Qué tanta autoridad o libertad hay realmente en esta casa? Porque siento que ambos conceptos están algo desmedidos.
Rosa: Si, me imagino que tienen una relación ruda, se del tema, convivo con tres chicos, Pero díganme, de sus tres hijos, ¿Brad ha demostrado realmente ser de confiar? -pregunté solo para que ellos se vieran con incomodidad.
Harold y Honey: Pues....
Si, eso lo dice todo, con eso expongo mi caso.
Harold: Pues bien, ya echaste el futuro de mi hijo mayor a la basura y trajiste al menor a casa. Ya puedes irte -dijo creyendo que eso era todo. Pero nada que ver.
Rosa: En realidad no. Primero, ¿Cuál futuro? -pregunte haciendo énfasis en la casi nula capacidad académica de Brad- y segundo, todavía tengo que hablar con su hijo Clarence -dije llamando la atención tanto de los padres como del segundo hijo de la familia.
Honey: ¿Con Kick?
Rosa: Justamente. De hecho señor Buttowski. Tomaremos su oficina, gracias -dije antes de solo hacer un gesto para que Kick me siguiera y acto seguido ambos entrar en el estudio del patriarca de la familia y cerrar con llave.
Si, admito que me pase un poco de la raya a estas alturas, pero esta pareja no me da aires de respetarles, especialmente el padre. A la madre la veo con más conciencia.
Kick:... Ok -exclamó sentándose en la silla frente al escritorio mientras que yo tomé asiento en la silla grande del señor Buttowski- obviamente eres alguien de poder, es decir, acabo de conocerte y parece que puedes mover el mundo con una mano. Pero a diferencia de Gordon, tú no pareces ser una niña rica malcriada.
Oh sí, debe hablar de Gordon Gibble, hijo único de la familia Gibble y que no es más que un niñato rico inútil que no puede hacer nada sin el dinero de papi ni sus guardaespaldas. Gente así me cae de la patada.
Rosa: Eso es porque tengo un tío , diagonal tutor legal que se asegura de mantenerme con los pies en la tierra, aunque por lo general soy yo la que tiene que devolverlo a la realidad, pero eso es punto y aparte -dije con diversión- en fin... Billy Stumps, Boom McCondor y Jock Wilder han hablado cosas muy buenas de ti. Incluso el motorizado Mike luego de que supiera que tú fuiste el que completo los rizos de laceración -dije para su sorpresa.
Kick: ¿El motorizado Mike también sabe de mí?
Rosa: Y no solo él. Alguien más me pidió que te diera esto -dije antes de darle una nota al menor que solo se quedó con los ojos como platos y la quijada desencajada.
Ya que se trataba de una foto autografiada con una dedicatoria del propio Rock Callahan. Con el mensaje de "Sigue siendo increíble, chico. Hora del rock"... Y creo que al menos figurativamente hablando al chico se le cayó la boca literalmente de la sorpresa.
Rosa: Lo cual me lleva al porqué estoy aquí. ¿Has escuchado de Rivera Solutions? -pregunte sacándolo de sus pensamientos.
Kick: ¿Cómo no hacerlo con el patrocinio que hacen? Reynaldo casi asegura de que es cuestión de tiempo para que lo descubran y lo recluten para el área científica -mencionó.
Rosa: No se quien es Reynaldo, pero lo puedo investigar. Por ahora... -dije entregando la invitación de la fiesta- a quien estamos descubriendo el día de hoy es a ti. Abra una fiesta en la empresa, y los cinco grandes del mundo del riesgo y lo increíble te quieren allí.
El chico estaba en estado de shock absoluto. No podía creerlo. Ya hasta me imaginaba lo que seguro estaba pensando ¨¿Yo, Kick Buttowski, invitado a una fiesta de Rivera Solutions? La compañía que había visto en todas partes, que patrocina a mis héroes, ¡y que además estaba vinculada a la innovadora tecnología que tanto admiraba! Y no solo eso, ¡Rock Callahan me había enviado un mensaje personal que no podía dejar de mirar!¨
Kick:... ¿En serio está pasando?
Rosa: Creelo. Ellos querían recompensarte por al final no estar contigo esa vez que si no me equivoco, tu primo y una tal Jackie hicieron una fiesta por tu acrobacia más larga ¿o algo así era? -pregunte en lo que el menor sonrió de medio lado.
Kick: Mis mayores fans después de mi mejor amigo Gunther, quiero a Kyle, y aprecio a Jackie, pero son algo.. intensos -explicó haciéndome verle con algo de incredulidad ya que a esos dos si los investigue.
Si me pregunta esa descripción es quedarse corto, en serio corto.
Kick: Por cierto... Los bordes. ¿Es oro real? -pregunto mirando la invitación sacando una risa de mi parte.
Rosa: ¿Alguna preocupación de que lo sea?
Kick: ¡No! Ninguna, solo curiosidad... Del mismo modo como lo es preguntar ¿Qué significa esto? -preguntó señalando la parte de la invitación qué dice "Tu personaje es el lirón".
Rosa: Eso es parte del evento, la fiesta de mi tío será de una temática de Alicia en el País de las Maravillas, a cada invitado se le da la instrucción de ir con un atuendo tematizado como un personaje de los libros.
Kick: Entiendo... -respondió por lo bajo concentrado en leer la invitación- dice que puedo llevar a mi familia y un máximo de 4 amigos como invitados... No importa, solo llevaré a Gunther y puede que si familia también quiera ir... ¿Y esto?... "Está invitación no aplica para Bradley Buttowski, no está invitado bajo ningún concepto" -leyó el final de la carta con extrañeza.
Rosa:... Recomendación de Billy Stumps -aclare encogida de hombros- Billy nos comentó que se mantiene en contacto contigo, y ya nos resumió que dejar a Brad entrar sería arriesgarnos a que arruine la fiesta, ya sea acosando a las invitadas mujeres, o haciendo alguna maldad para hacerse el chistoso -mencione con amargura por la idea.
Si, esa era otra razón de mi actuar de hace unos momentos. Esta fiesta era lo bastante importante como para evitar a toda costa que algún idiota cualquiera lo eche todo a perder.
Kick: Entiendo, lo hiciste arrestar en parte para prevenir eso -dijo haciendo que le viera con sorpresa por un momento ¿acaso me leyó? Debo ser más precavida.
Rosa: ¿Qué? No, él tiene que responder por lo que hizo, como dije, una cosa son las bromas entre hermanos y otra lo que él te hacía por la popularidad de su programa de cuarta -dije con fastidio antes de respirar hondo- igual como dije. Lamento si mis acciones fueron algo exageradas a tu punto de vista. Soy una persona meticulosa con este tipo de temas -ofrecí solo para que el menor volviera a hacer menos el tema.
Vaya que el tipo debe ser un patán para que su propio hermano lo prefiera en prisión que en casa ¿de qué me sorprendo? Vi los videos.
Kick: Nah, todos en Mellowbrook asumían que eso pasaría tarde o temprano -dijo casual- ¿algún otro invitado qué conozca? -preguntó con curiosidad.
Rosa: Pues está esa chica que es como la barbie actual de las niñas. Tina aveces -mencione haciendo al menor bufar con fastidio.
Kick: Sólo ayudé a mantener su programa por presión de mi hermana, la verdad aprecio más a Scarlett.
Rosa: Entonces, por supuesto, te gustará saber que la señorita Scarlett Rosetti también recibió una invitación también, a fin de cuentas es una doble profesional de buen renombre -dijo guiñandole un ojo al menor.
Quien solo aparto la mirada un poco para que según él no viera la sonrisa de felicidad que se formaba en su rostro. Aw, el amor joven era algo muy lindo de ver... aunque es un hecho, si esto se sale de control a la larga peleare con uñas y dientes para que no haya nada entre esos dos hasta que Scarlett tenga 23 y Kick 18.
Rosa: Pues sin más me despido -dije poniéndome de pie para acto seguido abrir la puerta del estudio.
Momento en que tanto ambos padres como la hermana menor de Kick se fueron al piso de bruces, revelando que estuvieron haciendo lo posible para espiar la conversación. Típico de cualquier familia medianamente normal.
Rosa: Los veré en la fiesta en un mes, familia Buttowski -dije decidiendo ignorar eso último que pasó- por cierto, mi tío tiene interés en hacer negocios con usted. Señorita Honey Splash.
Honey: ¿Sabe de mí? -pregunto sorprendida.
Rosa: Digamos que hay gente que aún la recuerda con aprecio. Hablamos de la mujer que se hizo un nombre en las acrobacias acuáticas por su cuenta después de todo -dije sonriéndole con cordialidad- de hecho para ir adelantando. Mi tío quiere patrocinar su carrera, desea que usted sea Honey Splash una vez más -dije esperando una respuesta positiva a esa oferta.
Pero en vez de eso, solo observe como la mujer tras superar la conmoción por la repentina oferta, solo sonrió de forma nostálgica y negó suavemente.
Honey: Me encantaría, pero ya me retiré, sólo volví hace poco para reclamar el récord, de momento prefiero ayudar a mi hijo a planear las suyas.
Ya veo, así que Kick salió más a la madre, viendo como es el padre, creo que era un hecho.
Rosa: Por si cambia de opinión. Aquí, mi tarjeta -dije dándole el trozo de cartón con mi número impreso- buen día -dije para acto seguido salir de la casa.
Solo para de nuevo encontrarme con prácticamente todo el poblado en la entrada de la casa, quienes parecían no tener nada mejor que hacer con sus vidas... ok, esta gente ya me puso de malas.
Rosa: ... Aquí son medio chismosos, ¿eh? -dije en voz baja antes de ver a quien sería mi próxima víctima- Disculpe, ¿Claudi Chicarelli? -pregunte al notar a la mujer de edad avanzada.
Chicarelli: ¿Si? ¿Qué quieres? -preguntó de una forma tosca y grosera. Vaya, se nota que no es casada por algo.
Rosa: Para usted -dije dándole otra hoja de las varias que había traído conmigo a este pequeño viaje, la cual me fue arrebatada de las manos por la mujer mayor.
Chicarelli: ¿Qué es ésto?
Rosa: Un citatorio, el ministerio escolar de Mellowbrook desea hablar con usted, algo de su trabajo como vicedirectora antes de retirarse y un vídeo de usted confesando que entrenó a su perro para que hiciera travesuras de las que pudiera culpar a los niños -dije siendo claramente consciente del suceso tras hacer mi respectiva investigación.
Y no hace falta decir que allí se le fue toda la actitud agria y amarga a la mujer para reemplazarla con un pánico y enfado ciertamente desagradable.
Chicarelli: ¡Eso fue un accidente! ¡Mi Oscar es un angelito! ¡Fui incriminada por Kick y sus amigos malcriados! -se defendió a la vez que la señora Buttowski salió de su casa como toda una leona molesta.
Honey: ¿Así como, según usted, mi Kick estuvo haciendo destrozos por todo el vecindario, cuando él estuvo en la casa todo el tiempo? -preguntó con sarcasmo haciendo a la anciana titubear.
Chicarelli; ¡Lo juro! ¡Habían Kicks por doquier! ¡Estaban por todos lados!
Siendo allí que más de uno de los presentes silbó "inocentemente", cosa que noté con cierta facilidad. Vaya que al parecer varias personas de este vecindario son buenas ganándose el odio ajeno.
Rosa: Señorita Chicarelli, le señalo que es su palabra culpando a Kick, con quién parece tener una manía que debería preocupar a usted misma, contra un vídeo, también de usted misma creyéndose sola, confesando que su perro hizo todo por lo que castigó a varios estudiantes, porque usted lo entrenó para que lo hiciera, en un plan para robarle el trabajo al director Buck Henry -aclare los hechos- así que si me pregunta... Le deseo suerte en la corte. Porque teniendo una idea de cómo es usted, allí va a terminar el asunto -dije dando punto final a la conversación.
Y no mentiré diciendo que no me gustó como terminó la mujer con una cara como la del coyote cuando veía al camión/tren/ u otro objeto contundente acercarse cuando perseguía al correcaminos.
Rosa: Ahora -dije dirigiéndome al resto de los presentes- ¿alguien más que desee hacerme enojar? Porque tengo bastante información de más de uno de los presentes -dije para que acto todos los vinieron de curiosos salieran huyendo en manada como si de gacelas corriendo por sus vidas de leones en África se trataran.
Después de que el pueblo se dispersó como si lo persiguieran fantasmas, me tomé un momento para relajarme. Respira, Rosa. No eres una máquina de guerra; solo quieres hacer lo correcto aquí. Apoyé las manos en mis caderas, sintiendo la satisfacción burbujeando dentro de mí. Es curioso cómo un simple viaje para enfrentar a un cretino puede proporcionarte tanto alivio.
Siendo allí donde recibí una llamada de mi tío.
Héctor: ¿Entregaste la invitación? Dime ¿a cuanta gente demandaste, cariño? -pregunto con diversión haciéndome rodar los ojos.
Ok, lo admito, No es la primera vez que hago algo como esto. Pero en mi defensa estudié derecho por una razón. Si sabes todo de la ley, puedes usarla a tu favor, y vaya que le saco provecho a eso.
Rosa: El hermano ya está detenido por lo que le hizo en su segmento de "Ya te tengo" de su blog, además de otras cosas, y la vecina se topó con que el ministerio escolar ya saben de lo que hizo cuando se le pidió volver del retiro -mencione con un tono de ¨yo no fui¨.
Héctor: Aww ¿si o no eres mi pequeña ángel de la ruina ajena?
Rosa: Ya sabes como soy, tío, no me gusta el trato injusto -dije ajustando sus gafas- ¿Tu ya estas en Beverly Hills?
Héctor: Si mija, hasta me tocó un taxi que al mirarlo noté que decía "Fresco", yo no sé porqué -dijo para que luego en la pantalla del teléfono se viera el rostro de Carl Felony, el guardaespaldas de mi tío, metiéndose en la llamada.
Felony Carl: En mi opinión era muy pequeño para ser un auto "fresco" si me preguntas.
Si... no voy a ser yo quien les explique eso, ya estoy cansada.
Carl Felonía: Aunque cuando llegamos a la casa de aspecto elegante no debió decirle al taxista "ponte desodorante" -continuó hablando, al parecer revelando un incidente con mi tío. ¿Por qué no me sorprende?
Rosa: ¿El taxista lo golpeó?
Carl Felonía: Si no me metí es porque usted me dijo "no proteger a su tío si él provocó a su atacante"
Héctor: Jajaja muy graciosos los dos. Ahora vamos a entrar a la casa. Te llamamos si hay inconvenientes -dijo ya queriendo dejar el tema de lado.
Rosa: Claro, tío. Recuerda, Carl, no vale la pena proteger a mi tío si él hizo molestar a quien quiera atacarlo -dije en lo que el grandulón me dio un pulgar arriba.
Héctor: Hablas como si fuera yo el que suele buscar pelea de forma desmesurada -se quejo haciéndome negar con resignación.
Rosa: No, querido tío... Tu historial de golpes, zapes, rodillazos, patadas, vueltas, etcétera, lo lo que habla de eso
Héctor: Soy una víctima de las circunstancias!... Pero se quien no lo es -dijo observando algo por fuera de la pantalla- te llamo luego querida sobrina... Debemos capturar a un hobbit, Carl.
Carl: Ya voy patrón -dijo para que luego la llamada finalizará.
... No me voy a preocupar por eso, ese asunto ya es problema de mi tío. Ese viejo y sus sentimentalismos, como si no supiera que pidió ir a Beverly Hills solo porque terminaría yendo específicamente a esa casa. Pero bueno, no hay nada de malo con dejarse llevar por los recuerdos, si me descuido, yo lo termino haciendo también.
Rosa: Mejor reviso las noticias en lo que espero mi avión... ¿Qué es esto? -pregunté en shock al ver una publicación que de ser real, sería un gran desastre para todos, especialmente para mi familia.
¨Imagina un lugar donde el tiempo se detiene... donde los sonidos de la naturaleza te arrullan al despertar y cada rincón está diseñado para tu descanso y placer. Un lugar para huir del mundo moderno, donde las cosas más geniales y monstruosas te esperan a la vuelta de la esquina, vengan y convivan con el miedo y el horror como nunca antes, donde los monstruos son reales y donde tu puedes ser parte de la magia de los mitos y las leyendas ¡bienvenidos al hotel Transilvania!¨.
Las fotos sin duda alguna eran de un castillo antiguo y podía reconocer un trabajo de edición de fotos pirata cuando lo veía por muy perfecto que fuera... esos monstruos eran reales... patrocinar un hotel de monstruos de verdad en redes sociales como si fuera cualquier lugar de mala muerte al mundo entero... ¿¡QUIEN FUE EL PEDAZO DE IDIOTA Al QUE SE LE OCURRIO ALGO ASI Y CREYO QUE SERIA UNA BUENA IDEA?!
... Tengo mucho trabajo por delante.
Notes:
Y ese fue el capitulo de esta vez. Como siempre pueden votar, comentar, lo que gusten.
¿Y que les pareció?
Si, se que parece que estos crossovers parecen salirse de control, pero nada que ver... créanme, este desmadre aun esta lejos de que sea un revoltijo a como yo lo veo jajaja
En fin, nos vemos luego.
Chapter 22: Capitulo 20: Amigos incluso después de la vida y la muerte
Chapter Text
(General Pov)
(Residencia Buttowski, Mellowbrook, Massachusetts, USA)
La familia Buttowski tiene una larga historia de genialidad, eso era un hecho, ya que varios de sus miembros a lo largo de su árbol genealógico fueron agentes secretos, temerarios y dictadores, solo empezando la lista, sin mencionar más recientemente a grandes proezas del mundo de la acción y las acrobacias como Honey Splash o al propio Kick. Dicha familia proviene de países eslavos, siendo los más comunes Rusia y Georgia. De allí se puede ver como algo lógico o hasta natural su amistad con la familia vikinga del pueblo, los Magnuson.
No obstante, aunque era una familia que en gran parte se quería, a ojos del pueblo en general era una familia disfuncional que discute y pelea mucho entre sí. Son conocidos por ser la familia más odiada del vecindario, y los vecinos que conviven con ellos era porque realmente no eran mucho mejores.
Y una de las razones de tener dicha reputación (además de la mala fama hecha tanto por su hijo mayor como su hijo menor) era por las discusiones familiares que se llegaban a escuchar en toda la calle. Siendo justamente ahora que había una en proceso.
Brianna: No importa que. ¡Iremos a esa fiesta! -exclamó la última de los tres hijos de la pareja y única hija de la familia. Quien no hace falta decir que era la princesa de la casa y la consentida a la que ambos padres siempre buscaban complacer.
¿Pero porque estaba molesta? La razón era sencilla en realidad. Luego de que Rosa se fuera su padre dejó en claro que no tenía intención alguna de que la familia fuera a la fiesta de gala a la que Kick había sido invitado. Y al saber que la estrella de su programa favorito iba a ser una de las invitadas... digamos que las cosas se pusieron intensas.
Harold: ¡Pero hablamos de la gente que hizo que arrestaran a tu valiente hermano mayor, cariño! -exclamó buscando justificar su pensar mientras su hija pequeña no dejaba de zarandear a su persona. Haciendo que su esposa se masajeara las sienes para calmar el dolor de cabeza que estaba empezando a tener.
Honey: Ay, Harold, te amo, cariño, pero deja de justificar a Brad -dijo con algo de enojo- la señorita Rivera tiene razón, lo que Brad hizo no son simples bromas de hermanos, era estar dispuesto a dejar a Kick hospitalizado para hacerle burla a algo que provocó. Además, ya los oíste a ella y al oficial, y Kick lo confirmó, Brad jamás le pidió su autorización para subir esos vídeos, lo que lo vuelve un delito
Brianna: Y admítelo, papi, hasta yo soy más valiente que Brad -añadió.
Harold: ¡Pero...!
Honey: ¡Harold! Ya es suficiente de favorecer a Brad solo por ser tu primogénito ¿no te parece? -pregunto dejando consternado a su marido.
Harold: ¿Te parece que lo favorezco?
Honey: Mi amor, fingiste estar encantado de que en nuestro último aniversario nos regaló una cuponera que era obvio que sacó de la basura, diciendo que era mejor que los regalos que Kick y Brianna nos hicieron -dijo recordando el evento con algo de disgusto por la actitud de su hijo mayor- y debo recordarte que Brad casi arruina el regalo de aniversario qué me diste tratando de esconder el collar qué se que me compraste para sabotear a Kick. Y sí cariño, se que mi nueva muñeca no era el regalo de aniversario como tal pero igual me encantó -dijo con una sonrisa.
Haciendo que el patriarca de la familia se quedara en silencio, mirando el suelo como si las baldosas pudieran ofrecerle una respuesta. La vergüenza le invadía, y la realidad de su favoritismo hacia Brad era innegable, es que no podía evitarlo, aun con todo buscaba defender a Brad porque era el más parecido a él en lo que a normalidad respecta. Intentar presentar una defensa para su hijo mayor se había vuelto una batalla perdida, y no le gustaba.
Nunca lo diría en voz alta, pero a veces se preguntaba cómo alguien tan genial e intrépida como Honey se fijaría en un amante de las facturas y las estampillas como él. Claro que se amaban pero, solo con ver que entre sus hijos y él mayormente no había nada en común ¿lo pueden culpar por querer defender a quien más se conectaba con él de sus tres hijos?
Harold: Bueno, si... -admitió con tristeza antes de solo hacer tripas corazón- a todo esto ¿Dónde está Kick?
Brianna: El bello durmiente está allí -dijo señalando el sofá y a un dormido Kick sosteniendo tanto el autógrafo de Rock Callahan como la invitación- se desmayó apenas la señorita se fue, no aguanto la emoción.
Honey: No me extraña -mencionó con ternura viendo al menor de sus dos hijos- Harold. Vamos a ir a esa fiesta. No vamos a arruinar esto a Kick
Harold: Pero, cariño... -dijo mientras era ignorado por su esposa que estaba releyendo la orden judicial que incluía la causa y los cargos por los que su primogénito fue arrestado.
¿Y si debía ser honesta consigo misma? Se siente como una mala madre por no haber sido más estricta con Brad y así evitar que las cosas llegaran tan lejos.
Honey: Harold, no vamos a romper sus ilusiones a nuestro hijo porque tú quieres "protestar" de que por ellos Brad ya aprenderá que sus actos tienen consecuencias... y hablando de Brad, en lo personal, cuando vayamos a verlo, quiero preguntarle cómo está eso de "hacerse pasar por ortodoncista" -mencionó con severidad.
Harold: Vamos. Bradley es joven, ¿Qué chico no hace tonterías por una chica de vez en cuando?
Honey: Harold, una cosa es cometer locuras, y otra garrafalmente distinta es cometer un delito que haga que la Sociedad de Odontología de Mellowbrook lo esté demandando por poner en peligro la salud ajena -declaró con indignación.
Brianna: Además, papi, una cosa es hacer tonterías para impresionar a una chica, y otra hacerlas por ser espeluznante.
Harold: Pero... -trato de justificar a Brad nuevamente, solo para que su hija pequeña lo tomara del cuello de la camisa.
Brianna: Escucha papi. Tina a veces estará en esa fiesta, y los héroes de Kick también ¡No nos vas a arruinar esto! -grito para luego zarandear nuevamente- ¡Aunque te duela, Brad debe aprender a la mala que ser idiota no es excusa para infringir la ley!
Harold, atrapado entre el fervor de su hija y la determinación de su esposa, sintió que el aire se le escapaba. En su mente, luchaba por mantener una defensa para Brad, pero se daba cuenta de que las acciones de su hijo tenían consecuencias que no podía ignorar. Al mismo tiempo, la idea de arruinar la fiesta de Kick, que estaba claramente emocionado con la idea de conocer a sus ídolos, lo llenaba de profunda tristeza. Aun así, no podía decirle que no a su niñita consentida.
Harold: ¡Si princesa, lo que digas! -exclamó para que luego su hija lo soltara, no sin antes sacar su billetera de sus pantalones como si nada.
Brianna: Gracias por entender, papi. Vamos mami, debemos comprar ropa nueva para la fiesta -dijo casual en lo que su madre leía la invitación en manos de su hijo dormido.
Honey: A ver... Aquí dice que los acompañantes de los invitados deben ir con algo temático al juego de cartas o al ajedrez. Se me ocurren varias ideas para hacer conjuntos.
Harold: ... Eso suena costoso -susurro lamentándose por lo que intuía sería un gran bajón a su cuenta bancaria.
Momento en que la puerta fue tocada, para extrañeza de los habitantes de la casa ya que usualmente cuando venían a verlos, no era por algo bueno. Y al final notaron que tenían razón en desconfiar al abrir y encontrarse con medio pueblo con regalos para su hijo menor. A lo cual no les tomó mucho tiempo entender qué pasaba, ni que hubieran nacido ayer. Saben de la fiesta y esperan comprar a Kick para que lleve a algunos de ellos.
Vaya que toda la gente del pueblo era bien lambiscona y convenenciera cuando la situación se presentaba, como era el caso ahora.
Honey: Okey...
Brianna: Yo me encargo mami, descuida... ¡Jackie, un montón de gente se quiere aprovechar de Kick! -grito a la aparente nada.
Solo para que al comienzo pareciera que no pasaba nada, pero en cuestión de segundos se escuchó lo que claramente era un grito de guerra. Proveniente de una chica de lentes y frenillos vestida como toda una valquiria, quien comenzó a espantar a todos los que tenía en frente con una risa maniaca, quienes procedieron a huir espantados siendo perseguidos por la loca fanática.
Todo pasando bajo la inexpresiva mirada de la familia Buttoswki.
Honey:... Tenemos que prestar más atención al tipo de gente que se relaciona con nuestros hijos.
Harold: Por otro lado, es útil que esa chica no quiera ir a terapia
Siendo así que mientras la fanática enloquecida continuaba su persecución, la familia Buttowski observaba con una mezcla de sorpresa y diversión. Kick, aún inconsciente en el sofá, no tenía idea de lo que sucedía a su alrededor. Sin embargo, la escena caótica que se estaba desarrollando frente a ellos había puesto un pausado respiro en la tensa discusión familiar. Ya luego arreglaran sus problemas familiares, tenían una fiesta para la cual prepararse.
___________________________________________________________________________
(Hector Pov)
(Mansión Cobra, Beverly Hills, California, USA)
Hoover: Aaaaay, hagan algo, alguien haga algo -dijo el sujeto mientras mi guardaespaldas le hacía un calzón chino.
Resumen rápido de la situación, luego de que viajáramos (muy incómodamente por cierto) en ese taxi y llegamos a donde mi querida sobrina alias hija adoptiva sin confirmar me dijo que vivían la familia lejana de Billy, fue que me encontré a una especie de enano intentando meterse de forma ilegal a la propiedad. Y eso nos llevó a la situación actual donde mi guardaespaldas Carl Felony estaba haciéndole un calzón chino a este tipo que según su identificación se llamaba Sam Hoover, menudo nombre ¿será alemán?
En todo caso, no me gustan los ladrones. Y ojalá estuvieran armados con una navaja o una pistola, la peor clase de escoria que existe. Capaces de matar por un celular o una billetera, parásitos.
Héctor: Ah mira, pero si es un viejo de la tercera edad. Bájalo Carl, tampoco somos salvajes -dije tras pensar que ya fue suficiente castigo- Ahora ¿Quién eres y porque estas vestido como todo un acosador... que usa ropa interior de BJC?
Empiezo a creer que es un fan obsesivo, digo, para usar la ropa interior que parece que sí pertenecía a Billy cuando estaba vivo... fuchi.
Hoover: ... Es una historia graciosa.
Héctor: Me gustan las historias graciosas. ¿Verdad, Carl? -pregunte en lo que tiraba un basurero para usarlo como asiento.
Carl: Muy graciosas, jefe -dijo sujetando al viejo chaparro para que no huyera.
Héctor: Así que amigo. Tengo negocios con la gente de esta casa -dije sin rodeos- Y me gustaría saber porque buscabas meterte en esa casa a escondidas... Y de paso, me gustaría que cooperes por las buenas si no quieres que mi buen amigo Carl rompa su récord de lanzamiento contigo -dije al hombre que se ponía cada vez más nervioso.
Hoover:... ¿No me dan una tercera opción? Nunca me creerían si les digo lo que pasa en verdad.
Héctor: A ver, ponme a prueba ¿un cigarro? ¿O prefieres un trago? -pregunte ofreciendo tanto mi caja de cigarrillos como mi licorera.
A lo cual el hombre vestido de negro solo me miro con desconfianza antes de tomar la licorera para llevársela a la boca. Y si, de antemano sabía que el tipo pondría una sonrisa al dar el primer trago, se nota que es de los que saben apreciar un licor fuerte de contrabando, y en ese aspecto a mi me gustan las cosas buenas.
Hoover:... Uff, esta bueno, esto es fuerte. Tu no eres de aquí ¿verdad? Dudo que alguno de estos ricos que viven por el área anden con licor así de bueno -dijo ya más entrado en confianza, los milagros del licor- usualmente son más de "bebidas de moda".
Héctor: Si, soy de la vieja escuela -dije encogido de hombros- ahora, empieza a hablar, ¿si amigo? -pregunte esperando a que el chaparro no tardara tanto en soltar la sopa.
Lo cual por suerte fue así, solo para acabar dándome una de las historias más interesantes y locas que no había oído en mucho tiempo. Tal parece que Billy nunca se fue de este mundo después de morir, y ahora pasaba sus días rondando la mansión que una vez fue su viejo hogar... ya decía yo que eras muy obstinado para morir sin más, mocoso.
Pero, más que darme indicios de locura, esta historia me daba esperanzas... de verla otra vez. De que tal vez eso aún podía ser posible después de todo. Digo, por algo estoy haciendo todo esto en primer lugar en vez de solo disfrutar de mi retiro en paz. Espero que veas lo mucho que trabajo por ti, Angelina.
Héctor: Entonces, ¿Trabajas para una fan de Billy Joe Cobra, cuyo fantasma ronda su vieja mansión, y ella te mandó a atraparlo?
Carl: No suena tan alocado jefe. Cosas más raras he visto.
Héctor: Pegajoso es un buen ejemplo -dije en lo que el grandote asintió.
Hoover: ¿De verdad me creen? -pregunto incrédulo. Y no lo culpo realmente. Cualquiera que lo viese y escuchase la historia seguro llamaría a un psiquiatra o al loquero como primera acción.
Héctor: Más que eso. Dime Sam, esa jefa tuya, Madame X ¿Cómo supo que el fantasma de Billy sigue en este plano? Y como supo lo de que podían verlo si se usa algo de él en vida?
Esa es una pregunta que ciertamente esperaba que tuviera la respuesta apropiada.
Hoover: Sabe... La verdad no tengo idea. Nunca me lo pregunté. Desde que me contrató, ella ya sabía todo eso... Solo lo sabía -respondió pensativo.
Héctor: O tal vez no... Je -solté una leve risa mirando la mansión por encima del muro- por lo que veo, sigues siendo un chico muy problemático, Billy.
Carl y Hoover:... ¿Usted lo conoció en vida? -preguntaron con curiosidad y sorpresa sacando a mi persona una risa con aire de nostalgia más que todo.
Héctor: Antes de ser empresario fui músico -dije dejando que mi mente me llevara a una época pasada- el chico tenía talento, pero igual lo ayude a componer un par de canciones en su momento, era un buen chico... Pero demasiado crédulo para su propio bien.
Hoover: ¿Crédulo?
Héctor: ¿Según tu cómo murió? -pregunté con una ceja arqueada, a lo cual el enano se encogió de hombros.
Hoover: Dijeron que fue un accidente de coche.
Claro, seguro, un accidente de coche, sí... Eso es lo que todos quieren creer, pero cuesta creer que fue un accidente cuando se ven los agujeros de bala en el asiento del conductor del auto donde paso. En el mundo del espectáculo, las cosas rara vez son tan simples. Billy tenía enemigos, como toda persona medianamente famosa o importante, y algunos eran bastante poderosos. No sería la primera vez que un accidente "trágico" es en realidad un movimiento calculado.
Y en este caso me atrevo a decir que el único error de Billy fue ser demasiado confiado y no ver el peligro cuando este se olía a millas de distancia... en este caso, una mujer con una obsesión más allá de lo sano.
Héctor: Y antes de eso a la última persona que se le vio con Billy fue una fanática adinerada sureña -dije de forma casual ya sospechando quién era la jefa de Hoover.
Hoover: Oye. Qué coincidencia, Madame X también es una fanática de Cobra sureña.
Héctor: ... Y adivino, es rica, y es sureña -sugerí en lo que él asintió.
Hoover: Y obsesionada con el fantasma al punto de que todas las cosas que usa son de él.
Así que Madame X es una rica sureña con una admiración poco saludable por Billy al punto de querer capturar su espíritu y tenerlo en la vitrina de trofeos como si de un objeto de exponer y contemplar se tratara. Tristemente hasta ese punto llegaban las fans tóxicas respecto a sus estrellas favoritas. Parece que asesinarlo no le bastó a la loca.
Héctor:... Te pago el triple de lo que sea que te pague ella y trabajas para mí ¿trato? -pregunte en lo que él me miró extrañado. Antes de aceptar sin pensar al ver un cheque con el primer pago por adelantado.
El dinero habla y los demás obedecen. Honestamente sería mentira decir que el dinero no es un lenguaje universal.
Hoover: ¿Y exactamente cuál sería mi nuevo trabajo? No me diga que quiere que atrape a Billy Joe Cobra para usted -mencionó sacándome una carcajada, ese chiste fue bueno.
Héctor: No, eso puedo hacerlo yo solo sin ayuda. Tu puedes ser mi buscador personal, dicho de otro modo, toda cosa que yo, mi sobrina o mi hijo o sus amigos necesitan, tú lo buscas. Al parecer eres muy bueno en eso -dije con honestidad.
En realidad el tipo no me parecía una mala persona, sencillamente es alguien que busca ganarse el pan de cada día, como la mayoría de personas en este aburrido y monótono planeta, nadie puede reprocharle por eso. Y creo que ya sufrió suficiente con Madame X para pagar cualquier tipo de crimen que haya cometido antes.
Hoover: Claro, necesitan algo, incluso si no tienen edad para tenerlo, se los encuentro como una aguja con un súper imán -declaró con orgullo.
Héctor: Solo no se lo digas a mi sobrina -exclamó divertido- ahora vamos a la mansión... Y no te quites la ropa interior para dármela. Primero, no tengo tan mala higiene como el jefe asombroso, siempre cambio mi ropa interior con frecuencia. Y yo puedo ver a Cobra por mi cuenta -aclare tocando los lentes de sol en mi cabeza- estos eran suyos.
Carl: Vaya, piensa en todo, patrón -mencionó con honestidad.
Héctor: Tenía la corazonada. Ahora vamos. Tú esperas en la entrada Hoover, con suerte no tardaremos mucho.
A medida que me acercaba a la majestuosa mansión, la opulencia de la construcción me dejó momentáneamente sin aliento. Las luces brillantes y el elegante diseño arquitectónico me recordaban que no sólo Billy Joe Cobra había pasado por aquí. Esta casa había sido testigo de muchas historias, buenas y malas, y yo estaba a punto de ocupar un nuevo capítulo.
Héctor: Carl, mantente alerta. A veces el pasado tiene formas extrañas de manifestarse -dije tras tocar el timbre de la puerta.
Solo para que justo en el momento en que la puerta fue abierta, Carl logró atrapar un pie que iba directo a mi cara que de haber impactado, seguro me habría desmontado la quijada sin mucho esfuerzo ¿Cuál era problema de esta mocosa malcriada? Por que si, mi aparente atacante era una niña vestida con un uniforme de un dojo de karate.
Debía ser Jessica, la hija menor de la familia, Rosa me envió la información. Papá, mamá y dos hijos. Y esta era la menor de todo el grupo... si así era ella no quería saber cómo era el resto de la familia. Maldición, lo que hago para complacer a posibles futuros socios.
Jessica: ¡Oye, suéltame grandulón! ¡No me dejas respirar! -dijo tratando soltarse de la mano de Carl que le estaba sujetando el rostro junto al resto de la cabeza sin mucho esfuerzo.
Carl: Claro, pequeña, cuando tus padres vengan y expliques por qué ibas a atacar a una visita
Jessica: Pensaba que era el amigo de mi hermano. A él lo usó como saco de boxeo y no se queja -dijo con un tono que no me convencía en lo absoluto.
Héctor: Me suena a que se queja pero a ti no te importa, jovencita -dije con un fuerte escepticismo.
Jessica: ¡Tienes razón, no me importa! -exclamó, desafiando la autoridad de Carl mientras intentaba liberar su cabeza de su agarre. Su cara se infló de indignación, pero había una chispa traviesa en sus ojos que me hizo reír. Oh si, la niña era una pequeña demonio.
Y al ver a los padres venir corriendo me di cuenta rápidamente de porque la niña era como era. El padre Hugh en palabras simples era un idiota con cerebro de maní, y la madre Jane definitivamente tenia vibra de la típica aspirante a famosa sin tener talento que la respalde. Lo se, soné rudo, pero un trabajo en el que invertí mucho tiempo fue a ser un cazador de talentos, tengo el don o la maldición de acertar con mis primeras impresiones de la gente casi siempre.
Por ejemplo puedo asegurar que estos dos casi tratan a sus hijos como iguales en plan de que son adultos jóvenes y no los niños que eran. Eso podía verlo por la aparente indiferencia de Jessica a que sus padres estuvieran aquí presentes o no... y dado el color de cabello, a menos que fuera teñido, dudaba que la hija fuera 100% hija de los dos.
Hugh: Disculpe, pero ¿podría por favor soltar a mi hija, señor...? -pregunto antes de que decidiera de que ya fue suficiente de juegos.
Héctor: Héctor, CEO de Rivera Solutions. Me parece haber avisado de forma anticipada mi visita. Y me gustaría saber porqué su hija pensó que era buena idea usarme de muñeco de práctica para su karate -revele para sorpresa de ambos mayores. Posiblemente más por saber a quién iba a atacar su hija que por el acto en sí.
Jane: Por favor perdónela señor Rivera -dijo algo avergonzada- es que Jessica es muy entusiasta con su pasatiempo qué a menudo se emociona demasiado.
Hugh: Ya le hemos dicho que no puede andar por ahí usando lo que aprende en el karate con quien se le cruce, pero no escucha -dijo en lo que decidí seguirles la corriente.
Necesitaba a esta gente en su lado bueno para que aceptaran venir a la gala, eso tendrá a JTT contento, y no pensara en irse a corto plazo de mi división de entretenimiento. Todos felices, contentos y comiendo perdices.
Héctor: Parece que cierta jovencita necesita una camisa de fuerza -exclame divertido para ofender a la menor que captó la indirecta.
Jessica: Oiga...
Héctor: ¿Si entiendes, jovencita, que de ser policías mi guardaespaldas y yo, estaríamos en completa posición de arrestarte por atacar a un policía? Solo para dar un ejemplo -dije con calma- pero para tu suerte no lo soy... Por cierto ¿no falta uno de ustedes? -pregunte contándolos y notando que solo habían tres de cuatro.
Hugh: Spencer, si, él salió, señor.
Lo que me faltaba, ¿no fui lo bastante claro respecto a que los quería a todos aquí? Tenía que ser un adolescente.
Héctor: Entonces podemos esperarlo, lo que voy a decirles concierne a toda la familia... Carl, ve con el buen Sam a buscarlo si eres tan amable -pedí a la vez que Carl solo asintió antes de marcharse- bien, en lo que esperamos... ¿Les parece si toco algo mientras esperamos? No lo parezco pero ayudé a Billy a escribir un par de canciones cuando estaba vivo.
Jane: ¿Lo conoció? -pregunto sorprendida. A lo cual en respuesta le mostré una foto en mi billetera de nosotros dos en una fiesta en Cancún hace más de una década cuando el chico solo tenía diecinueve años.
Héctor: Ese chico sí sabía cómo hacer una fiesta -admití con algo de nostalgia- esta es una pieza para aquellos que han olvidado la magia de la música, Billy y yo la compusimos juntos -dije para luego comenzar a tocar una melodía suave.
Una de esas canciones que había compuesto con él. La sensación de las teclas bajo mis dedos me trajo una oleada de recuerdos nostálgicos. De pronto, la atmósfera en la habitación cambió, y los ojos de los presentes se iluminaron. Mientras continuaba tocando, miraba de vez en cuando hacia la puerta, esperando que Carl y Hoover regresaran con Spencer, y con Billy asumiendo que estaba con el chico. La combinación de la música y las risas de los presentes hizo que el tiempo pareciera pasar más rápido. La verdad, no tenía muchas expectativas sobre esta reunión, pero aquí estaba, disfrutando de un momento de conexión a través de la música.
Esperando con ansias ver de nuevo a mi viejo amigo.
____________________________________________________________________________
(General Pov)
(Restaurante WiFri, Beverly Hills, California, USA)
Una vez la orden fue dada, Carl y Hoover se pusieron en marcha. Logrando encontrar al hijo varón de la familia Wright con facilidad gracias a que el más nuevo de ambos empleados ya conocía el itinerario del chico de cabo a rabo. Llegando así al restaurante y punto común de encuentro para gente joven, el WiFri. El interior cuenta con un escenario, un lugar apartado para pasar el rato con un sofá y una mesa, un mostrador donde se sirve comida y un balcón en el segundo piso. También hay una zona para comer al aire libre, pero debido a lo limpio parece que nadie come allí con frecuencia .
Hoover: Allí está. Son ellos -susurro señalando a Spencer con sus amigos y Billy- si vamos juntos el fantasma puede hacer alguna jugarreta. ¿Yo capturó al fantasma y tú al chico? Así nos llevamos a los dos de una vez con el patrón -dijo en lo que el más grande de los dos hizo como que pensaba.
Carl: O, yo me acerco al chico, le explico que vengo en representación de alguien que quiere hablar con su familia, y tu esperas antes de mostrar que ahora trabajas para el patrón -dijo haciendo al más viejo verle inexpresivo- recuerda, ya no tienes que hacer las cosas como las hacías para Madame X, ya no tienes que intentar obligarlos a acompañarte.
Hoover: Perdón, la costumbre. Eso y que el chico es muy receloso por naturaleza. Sin mencionar que tu no tienes la cara más amable, sin ofender -hablo con sinceridad encogiéndose de hombros.
Carl: Descuida, a veces tener apariencia de guardaespaldas y de pandillero no ayuda -respondió para luego solo ir a donde estaban los jóvenes.
Llamando rápidamente la atención de Spencer al pararse detrás suyo y con su cuerpo tapar todo tipo de luz, dejando al joven a oscuras.
Spencer: Oigan ¿Quién tapó el sol? -preguntó levantando la vista de su teléfono, a lo cual su amigo de ascendencia india solo señaló detrás suyo con pavor, haciendo al castaño ver al grandulón.
Carl: ¿Spencer Wright? -pregunto en lo que el mencionado solo asintió extrañado- soy el guardaespaldas del señor Rivera de Rivera Solutions. Me ha mandado a buscarte. Estoy seguro de que tus padres te habrán mencionado que él se había puesto en contacto con ellos sobre que vendría a hacer una visita a tu familia -explicó haciendo que el menor se riera incómodo y algo apenado.
Spencer: Yo, bueno... Lo olvide. No pensé que de verdad vendría. Creí que era un spam, algo de broma ¿sabe? -mencionó sacándole una risa por lo bajo al guardaespaldas.
Carl: Te entiendo, cuando me dijo que me daría trabajo pensé que sería algo turbio, ya sabes, romperle las piernas a gente que no le agradara o que le debiera dinero, no el trabajo de ser su guardaespaldas -reveló divertido- con el tiempo he aprendido qué con el señor Rivera debes esperar lo inesperado. El no es nada convencional.
Que se lo digan a él que lo vio conseguir una réplica de un misil nuclear para tenerla en su oficina solo para cabalgar sobre ella cuando está aburrido con todo y un sombrero vaquero... si, la principal razón por la que no ha renunciado es por la paga, por eso y porque de hecho hasta era divertido trabajar para Don Héctor. Con todo y que estaba loco.
Carl: Pero en fin. El tiempo apremia y nos están esperando, déjeme escoltarlo a su hogar, joven Wright -dijo en lo que el amigo del chico procediera a susurrar en el oído de Spencer, notándose que estaba hecho un manojo de nervios.
Rajeev: ¿En verdad le crees? Este tipo parece comer cráneos de desayuno -quiso susurrar, sólo para que al final toda la cafetería lo terminara escuchando.
Carl: La opción es de él, aunque aclaro, a mi jefe no le gusta que le hagan perder el tiempo -dijo. A la vez que en ese preciso momento el celular del chico sonó.
Jane: Cariño, ¿Dónde estás? ¿Ya el guardaespaldas del señor Rivera te encontró?
Spencer:... ¿Grande, con aspecto de pandillero, pero caballeroso?
Jane: Si, debe ser ese -se le escuchó con cierto aire de impaciencia- apúrate a volver a casa. Dejar esperando a un hombre como este es muy descortés, ni a tu papá ni a mí nos gustaría que tenga una mala imagen de nosotros.
Spencer: Voy en camino, mamá -respondió sin perder mucho tiempo.
Debido a que para cuando la llamada terminó ya Felony lo tenía sobre su hombro como si fuera un costal de papas y lo estaba sacando del restaurante.
Carl: Así será más rápido. Y disculpa si fue precipitado, estoy acostumbrado a cargar adolescentes de tu misma edad así todo el tiempo. El hijo del jefe y sus amigos son chicos muy revoltosos -explico con calma.
Spencer:... Extrañamente me gusta. Vámonos -dijo tranquilo, antes de perder la calma al ver a cierto anciano en cuanto salieron del local- ¡Un momento! ¿Qué hace él aquí? -pregunto señalando a Sam Hoover quien solo se hizo el relajado.
Hoover: Mi primer día en mi nuevo trabajo -hablo casual.
Spencer:... ¿Madame X te despidió de nuevo y ahora trabajas aparcando los autos del WiFri? -pregunto lo primero que se le vino a la mente.
Carl: Trabaja para mi jefe.
Spencer: Oh... Y esta es la parte donde yo me voy ¡Billy! ¡Ayúdame, Billy! -grito en lo que buscaba soltarse pateando y golpeando la espalda del enorme pandillero sin mucho éxito.
Carl: Mi jefe no busca capturar a tu amigo fantasmón -mencionó actuando como si no pasara nada antes de ver a la nada- Y según tengo entendido. Mi jefe y usted fueron amigos en el pasado, señor Cobra.
Si, era obvio que, aunque a simple vista pareciera que estaba enloqueciendo al hablarle a la nada. Pero la realidad era muy diferente, el fantasma de Billy Joe que estaba a punto de mandar a volar tanto a Hoover como a Felony, de repente estaba interesado en saber más. No todos los días recibía la visita de alguien que lo conoció en vida, la mayoría solo lo olvido.
Spencer: ... Él pregunta quién es su jefe -dijo haciendo de traductor. A lo cual el respectivo gorila solo señaló a una valla publicitaria de Rivera Solutions donde se mostraba el rostro de Héctor.
Para que a los segundos pareciera que una fuerza invisible comenzará a zarandear a Spencer de una forma muy enérgica y emocionada.
Billy: Es Héctor, Bro, ¡es Héctor! ¡Está más estropeado por la vida pero es Héctor! -declaró el fantasma completamente eufórico al único chico capaz de verlo en ese momento.
Spencer: ¿Y quien rayos es Héctor para ti? ¿Desde cuando te relacionas con CEOs millonarios?
Billy: Héctor fue uno de mis mejores Bros. Él me enseñó a ir de fiesta como se debe. ¡Con él fui echado de mi primer hotel cinco estrellas! -se jactó con orgullo para fastidio del más joven.
Spencer: ¿Eso es para enorgullecerse?
Billy: Je, No lo entenderías -sonrió con cierto aire de misterio que solo extraño al castaño antes de solo negar.
Spencer:... La cosa es. El tipo contrato a Sam Hoover. ¿Seguro que puedes, ya sabes, confiar en él? -pregunto, logrando para su sorpresa indignar al espectro.
Billy: ¿Estas insinuando que mi Bro Héctor es una rata? -exclamó cruzado de brazos para molestia del castaño.
Spencer: Sam... Hoover... el tipo que si no fuera porque los chicos y yo si lo reconocemos cuando se disfraza, te habría atrapado hace mucho -declaró haciendo énfasis en cada palabra. Solo para que el fantasma hiciera oídos sordos.
Literalmente hablando al solo quitarse las orejas y arrojarlas.
Hoover: Oye, aún estamos aquí -exclamó con sarcasmo- Y nunca fue personal, solo era trabajo.
Spencer: ¡Es igual! ¡No confío en ninguno de los dos! ¡Esto es secuestro!
Carl: Es verdad, y lo siento. Prometo respetar tus deseos... Hasta el final de esta oración ¡corre Sam! -dijo para que luego ambos empleados de Rivera Solutions emprendieran la huida.
Spencer: ¡Billy, ayúdame! -rogó a su amigo que se hizo el desentendido.
Billy: Normalmente lo haría ¡Bro. Pero quiero ver a mi Bro, Héctor! -dijo para molestia del castaño.
Spencer: ¡Rajeev, ayuda!
Rajeev: ¡Lo haría, amigo, pero el sujeto es bastante grande! -gritó en respuesta escondido en un basurero.
Spencer: ¡Rajeev, eres un cobarde! -grito antes de perderse de vista.
Siendo justo en ese momento que la hermana menor de Rajeev y amiga de Spencer, Shanila saliera del baño tras lavarse las manos por acabar con los dedos con salsa tártara del almuerzo.
Shanila: Oye Rajeev ¿Dónde está Spencer? Me perdí de algo?
Rajeev: Em... Si...
____________________________________________________________________________
(Tiempo después)
(Entrada de la mansión Cobra)
Spencer: No lo creo. De verdad me trajeron a mi casa... -exclamó con sorpresa- ¿O es un nuevo plan de Madame X donde construye una réplica exacta de mi casa para engañarnos?
Hoover: Ella no tiene tanto dinero... O tal vez si tenga pero no se le ha ocurrido aún -mencionó encogido de hombros.
Carl: De cualquier modo entremos. Espero que el jefe no esté causando problemas -dijo antes de abrir la puerta y abrirse paso al interior de la casa.
Donde los tres mortales y el fantasma se encontraron una escena bastante curiosa con Héctor dando una presentación improvisada de guitarra eléctrica tocando como si de una verdadera estrella de rock se tratara con todo y el desliz en el escenario que en este caso era la sala, se notaba que estaba inspirado.
Billy: Sip, sigue siendo el mismo -exclamó feliz.
Para que luego pasara algo que dejará al mayor de los hijos Wright extrañado así como al propio Billy. Lo cual fue que tanto sus padres como su hermana menor estaban en shock mirando justo donde se encontraba Billy, como si fueran conscientes de que el fantasma de su familiar fallecido en efecto se encontraba con ellos. Y lo eran.
Billy: Oye ¿Qué les pasa a tus padres y hermanita, Bro? Parece como si pudieran verme.
Spencer: No soy experto... pero creo que tiene que ver con que mi papá tiene un reloj con tu cara, mi mamá una pulsera con tu cara y Jessica una diadema con tu cara -dijo consternado.
Esas eran cosas que le pertenecieron a Billy en vida, por lo tanto, ahora ellos podían ver a Billy.
Spencer y Billy:... Ay no.
Héctor: ¿Qué les dije? ¿Se los dije o no se los dije? -pregunto divertido, delatándose como el responsable de decirles la verdad al resto de la familia.
Jessica: ¿Entonces he podido acusarte de tener un fantasma para meterte en problemas para mi diversión todo este tiempo? -pregunto molesta antes de que le dieran un jalón de orejas, cortesía de su madre.
Jane: ¿Quieres repetir para qué dices que nos contabas las travesuras de tu hermano, jovencita? -preguntó con un tono severo, en lo que su marido por su parte solo comenzó a reír incómodo.
Hugh: Fue una buena broma señor Rivera. Pero no esperará que creamos de verdad que el fantasma de Billy Joe Cobra estuvo viviendo con nosotros todo este tiempo ¿o si? Nos habríamos dado cuenta -dijo para diversión del hombre de negocios.
Héctor: A menos que Billy no tenga mucho control sobre su estado de fantasma, en ese caso solo puede ser visto por aquellos que poseen objetos con un fuerte vínculo emocional hacia él, o más concretamente, por quienes tienen cosas a las que les tuvo un gran apego en vida... Al final, resultó que fue buena idea nunca devolverte estas gafas... Mira, Billy, ¿de verdad eres tú? Has crecido -dijo, dirigiéndose al espectro- bueno, figurativamente hablando.
La atmósfera en la mansión se volvió eléctrica con la revelación de que Billy Joe Cobra, un ícono del rock fallecido, estaba de pie en medio de la sala, aunque invisible para la mayoría de los presentes. La sorpresa en los rostros del resto de los Wright aún era palpable, y su incredulidad pronto dio paso a una aceptación titubeante. Pero eso no fue todo; el ambiente se cargaba de tensión y asombro.
Billy por su parte estaba entusiasmado. ¡Héctor estaba aquí! La voz de su viejo amigo resonaba como un eco en su mente, recordando las veces que se reían de las cosas más triviales y cómo siempre echaban de menos un buen rato de diversión. Aunque ahora sería un poco más... etéreo.
Billy: Trato de mejorar -dijo con pena encogido de hombros- tú si te ves mucho más viejo.
Héctor: Bueno, han pasado quince años
Billy: Si, es verdad... ¿Qué ha sido de tu vida?
Héctor; Bueno, ahora soy padre de familia. Además de empresario de una de las empresas que al paso que vamos será una de las más grandes del país y puede que del mundo en unos meses. ¿Qué tal tu vida después de la vida?
Billy: Hasta que los Wright se mudaron y conocí a Spencer, nada más ver a través de mi ombligo siendo honesto -admitió divertido. A lo cual Héctor se quedó mirándolo, disfrutando del humor ligero que había traído su viejo amigo a la conversación.
El momento, sin embargo, era un mar de emociones contradictorias: risas mezcladas con el asombro de aquellos que habían estado en la sala, observando el reencuentro entre Héctor y el espíritu de Billy.
Jane:... ¿En verdad eres tu, primo Billy? -pregunto aun procesando lo que pasaba ante sus ojos. Logrando que el espectro sólo se metiera las manos a los bolsillos y apartar la mirada incómodo.
Billy: Sabes, es raro que me llames así. La última vez que nos vimos eras una niña pequeña... Si, estuve muy desapegado de mi familia en vida -admitió un poco decaído.
Jane: Si, lo sé... mis tíos siempre se sintieron estúpidos por firmar ese contrato -admitió para sorpresa del fantasma y de su hijo.
Spencer: ¿Contrato?
Billy: ¿Hablas de mi contrato de grabación?
Jane: El mismo que incluía que al firmarlo, tus padres cedían tu patria potestad a tu representante.
Billy: Oh... Eso explica porque no volví a ver a mis padres desde los. 6 años... -reveló para sorpresa de los presentes.
La habitación se llenó de un silencio expectante, todos los presentes absorbidos por la revelación sobre el oscuro contrato que había separado a Billy de su familia durante tantos años. La atmósfera se volvió densa, cargada de emociones reprimidas.
Jane: Si, ellos intentaron apelar el contrato, pero el tipo tenía muchos contactos que se les hizo imposible -reveló cabizbaja.
Héctor: Si, ese hombre era pesado. Me mandó unos matones para que me dieran una paliza cuando hablé con él sobre anular tu contrato.
Billy: ¿Fue esa vez que apareciste con el ojo morado y el labio partido? -pregunto sorprendido a la vez que el mayor solo le resto importancia.
Héctor: Son cosas del pasado. De cualquier modo, ya nos pondremos al día Billy -dijo tomando asiento- Ahora que ya están todos, puede revelar el porqué estoy aquí... ¿Conocen el nombre de JTT?
La familia Wright: ¿JTT? -preguntaron sorprendidos.
Eso parecía confirmar que conocían o al menos sabían algo de él, lo cual no era extraño, a fin de cuentas era una de las estrellas del momento.
Billy: Ese chico es genial. Lo odiaba porque todos decían que era mi reemplazo en el espectáculo, pero cuando supe que era mi fan yo también me volví el suyo. Mi póster de él en el techo lo dice junto a sus camisas que tengo de colección -dijo con orgullo.
Héctor: Resulta que su ex representante era un ex representante tuyo -decidió ir directo al punto sabiendo que Billy se distraía con facilidad- todo el asunto del remake de tu canción para su viejo manager era como si JTT estuviera diciéndole al mundo a la cara que el trabajo de Cobra era basura y Jonah Tyler Tailor estaba listo para ser el nuevo BJC -explicó logrando que el espíritu pasará de feliz a molestó en segundos.
Billy:... Fue Pete Roth, verdad? Ese hijo de...
Jane: Billy, lenguaje, hay dos niños aquí -exclamó con tono autoritario.
Spencer: Hasta a mi me sorprende, usualmente no usa malas palabras.
Billy: Además, no te hagas prima. Tu tratas a tus hijos más como adultos que como niños -refuto cruzado de brazos.
A lo cual el de apellido Rivera decidió meterse antes de que las cosas se volvieran en un pleito familiar.
Héctor: Oye, Billy, ¿Pete es pariente de un tal Bob?
Billy: Es su papá -confirmó para fastidio del mayor.
Bob Roth, aparente hijo de Pete Roth, era conocido por ser todo un parásito de la industria de la música en Europa. El típico hombre de negocios astuto muy arrogante y codicioso, a quien solo le importa el dinero y la fama. Y si esa era la reputación del hijo, el padre ni para qué mencionarlo.
Héctor: Tenía que ser -exclamó con fastidio- eso explica un par de cosas... Pero como sea. JTT es tu fan, y quiere hacer algo tanto por ti como por tu familia... -mencionó revelando una invitación- pará ello, serán sus invitados en mi próxima fiesta -dijo para emoción de Billy.
Billy: ¿Todavía haces tus fiestas, Héctor? Que hotel destruirás esta vez?
Héctor: La de esta vez será en mi empresa, Rivera Solutions. Así que no habrá destrucción amigo mío -hablo con diversión- Todos están invitados. Espero que sigan al pie de la letra las indicaciones de la invitación. Y aunque toda la familia sea invitada, siempre hay un invitado principal. Y en este caso eres tú -dijo dándole la invitación a Spencer- Escuche que eres un aspirante a director de cine. Que tus efectos especiales son dignos de un profesional... Aunque algo me dice que tuviste un poco de ayuda -sugirió mirando de reojo a Billy.
Quien solo se hizo el inocente antes de reírse apenado.
Billy: Hay que aprovechar que sólo pueden verme los que usen algo mío ¿no? -busco defenderse en lo que su viejo amigo solo asintió.
Cosa en la que el Rivera podía estar de acuerdo. Viendo esos dos fácilmente podía decir que tenia una dupla interesante entre manos.
Héctor: Me gusta explotar el talento joven. Quiero ver una película tuya -aclaró sin rodeos- si me impresiona... Yo mismo te meteré en la carrera de cine del instituto de arte de San Fransokyo y pagaré todos los gastos que puedas tener.
Y si la familia en su mayoría estaban ya emocionados por ser invitados a una fiesta de tal alcurnia, eran los ojos de Spencer los brillaban con incredulidad y entusiasmo. ¿Una invitación a la fiesta, y no sólo eso, una oportunidad de presentar su trabajo? Todo un mundo de posibilidades se abría ante él. ¿estaba soñando? Todo era tan irreal y repentino ¿alguien lo puede pellizcar?
Spencer: ... ¿Lo dice de verdad? -pregunto aun sin poder creerlo.
Héctor: Tan de verdad como que soy amigo de Billy -confirmó haciendo al castaño chillar de la emoción.
Spencer: ¡Muchas gracias, señor Rivera! ¡Siempre quise algo como esto! ¡Y tal vez en esta ocasión un cocodrilo no se coma mis papeles de transferencia -dijo para extrañeza del CEO.
Siendo así que Carl le susurra en el oído explicando la situación que Rosa ya había investigado previamente. Aparentemente Spencer ha sido aceptado en la escuela de cine de Beverly Hills y solicitó sus transcripciones a Ponzi, el director de su escuela, para poder transferirse, pero Ponzi se dio cuenta de que sin Spencer no tendrá a nadie más a quien atormentar y por eso encerró los documentos en su bóveda subterránea de seguridad. A lo cual Spencer, ayudado por los estudiantes de mayor prestigio de la escuela que querían que se largara, intentaron recuperarlos... para que al final los papeles fueran comidos por un cocodrilo.
Héctor: Oh, ya veo... -exclamó inexpresivo- Spencer, quiero ver una película ya. Elige la mejor que tengas de todo tu catálogo. Dame con todo el horror qué tengas.
Spencer: ¡Claro, señor Rivera! -exclamó el joven, todavía un poco incrédulo pero emocionado. Se sintió renovado, el gran salto hacia su sueño parecía acercarse cada vez más. Tenía que impresionar a un hombre de negocios como Héctor.
Así que antes de que dejara a los nervios apoderarse de él, salió disparado a su habitación a buscar su mejor película de terror.
Billy: Siempre supe que el chico tenía potencial. A veces, sólo necesita un empujón, y eso es lo que le estás dando -dijo el fantasma, sonriendo con orgullo hacia su viejo amigo y ahora hacia su posible nuevo protegido al ver a Spencer regresar tan rápido como se fue.
Héctor: Exacto, mi amigo. El talento joven necesita un tutor -dijo antes de ver el título en pantalla una vez el drive fue conectado- ya veo, así que será una película de zombies.
Spencer: Espero sea de su gusto -dijo para luego pulsar la opción de play.
La imagen en la pantalla se iluminó con un estallido de colores vívidos y efectos especiales, y mientras el logo de un estudio de cine independiente desfilaba, la emoción en la sala se hacía palpable. Spencer se sentó al borde de su asiento, ansioso, mientras Héctor, Billy y el resto de la familia Wright contemplaban el inicio de lo que prometía ser una experiencia cinematográfica intensa.
El filme comenzó con un grupo de jóvenes atrapados en un mundo post-apocalíptico, lleno de zombis y terror. Las escenas iniciales eran impactantes, con un sonido envolvente que hacía temblar la sala. Billy, a pesar de ser un fantasma, estaba tan absorto en la trama como había estado alguna vez en un concierto, antes de gritar y correr asustado saltando de un lado a otro de la habitación como si su cuerpo aún existiera... lo que era irónico dada su situación.
Spencer: ¡Mire esa explosión! ¡No puedo creer que lo hice yo! -exclamó, iluminado por el orgullo mientras un torrente de adrenalina recorría su cuerpo para ignorar los nervios que sentía.
Héctor lo observó de reojo, admirando el fervor del joven. Por un momento, pensó en las veces que había compartido el escenario con Billy y cómo esos recuerdos volvían a cobrar vida ahora en esta nueva interacción.
Spencer: Y bien... -se atrevió a decir una vez la película término- ¿Qué le pareció, señor Rivera?
Héctor: Sería bueno incorporar efectos de sonido más robustos en el futuro, tal vez agregar algo más de dinamismo al clímax. Pero en general... ¡Realmente tienes un talento natural! -declaró, animando a Spencer con su perspectiva crítica, algo que siempre había apreciado en sus interacciones creativas- lo que hace que no entienda porque Carl me dice que en tu escuela te sabotean deliberadamente cuando se nota que eres amable y que tienes talento.
Hugh: ¿Cómo está eso de que lo sabotean? -pregunto extrañado.
Billy: El director de la escuela -mencionó con reproche.
Héctor: Si, un cara de caballo qué si no me equivoco, no te dejo irte porque de lo contrario no tendría a quien hacer miserable. Eso me dijo Carl qué pasó -exclamó en lo que Spencer solo suspiro por el recuerdo, mientras que sus padres por otro lado...
Hugh: Disculpe... ¿Qué Ponzi hizo qué por qué razón?
Héctor: ¿No les contaste? -pregunto divertido al menor que se sonrojo de pena.
Spencer: No pensé que fuera importante.
Héctor: ¿La academia de cine a la que su hijo iba a ir? ¿Que fue admitido al haber un cupo disponible y que tenía todos los papeles listos para aplicar? -explicó a ambos padres- cuando Ponzi lo supo, se negó a tramitar el traslado. Todo lo contrario, puso los papeles bajo llave y espero a que la oferta pase.
Ambos padres ¿Qué?
Héctor: Por cierto ¿Sabían que la escuela tiene un piso subterráneo donde Ponzi guarda las cosas confiscadas? -hizo el comentario en lo que los dueños de la casa miraron a su hijo en busca de explicaciones, a lo cual resignado tuvo que darlas.
Spencer: Yo y algunos compañeros de clase intentamos recuperar mis documentos. Entramos por la alcantarilla, allí encontramos un cocodrilo qué nos siguió y bueno... Eso explica lo de que el cocodrilo se comió mis papeles.
Héctor: Y ya que estamos, hablemos de cómo el director sabotea los exámenes de su hijo, le prohibió entrar a cualquier competencia de la escuela, le negó la entrada a cualquier club extracurricular, y la lista sigue.
Ambos padres: ¿Qué que? -preguntaron evidentemente molestos.
Era un hecho, la atmósfera en la habitación se volvió tensa mientras la revelación sobre Ponzi se asimilaba. Las miradas de Hugh y Jane se fijaron en su hijo Spencer, combinando sorpresa con una creciente indignación.
Jane: ¿Por qué no nos dijiste nada?
Spencer; Lo intente. La última vez le hiciste una cena a Ponzi y no dejabas de adorarlo, mamá.
Jane: ¡Era para que no te expulsara!
Spencer: Pues no funcionó, mamá, porque siempre hace planes para expulsarme -confesó- eso es lo que más coraje me da, que me arruinó mi chance no sólo porque se quedaría sin quien hacer miserable, sino porque quiere que me vaya de la escuela "bajo sus términos"
Héctor: ¿Y esos serían? -preguntó con interés.
Spencer: Tener la satisfacción de demostrar que un chico "de mi clase" nunca perteneció a una escuela como la suya -dijo refiriéndose a que prácticamente era el único estudiante que no tenía influencia alguna a sus padres no ser famoso o adinerados de ningún modo.
Héctor: Oh... Dame una hora. Y de paso empaca tus cosas, te vas a San Fransokyo conmigo -dijo señalando la pantalla- Si les muestras esta película al concejo de admisiones, te admitirán en el IASF sin pensarlo dos veces.
Spencer sintió que su corazón se detenía por un instante. La idea de que podía tener una oportunidad en el Instituto de Artes Escénicas de San Fransokyo (o cualquier escuela de cine en realidad) era algo que había soñado durante mucho tiempo, pero nunca había imaginado que podría hacerse realidad tan pronto. Miró incrédulo a Héctor, y en su mente, una ráfaga de pensamientos y posibilidades se agolpaban.
Spencer: ¿De verdad, señor Rivera? ¿Puedo irme con usted?
Héctor: Claro, pero primero, necesitas empacar tus cosas. Yo me encargaré de que tus padres estén al tanto de los detalles, no quiero que estén en la oscuridad sobre esto.
Hugh y Jane intercambiaron miradas atónitas, sin saber si alegrarse o sentirse abrumados. La vida de su hijo estaba a punto de cambiar drásticamente, y ni ellos ni Spencer parecían estar listos para ello. Pero el brillo en los ojos de su hijo les hizo darse cuenta de que esta era una oportunidad que él no podría dejar pasar.
Jane: Spencer, esto es increíble. Pero, ¿estás seguro? San Fransokyo está muy lejos...
Spencer: ¡Sí, mamá! ¡Es una oportunidad de oro! Siempre he querido ser parte de una escuela como esa. No puedo dejar que Ponzi arruine mi futuro -dijo con ilusión.
Hugh: Quizás deberíamos hablar de esto primero. ¿Podemos sentarnos y hablarlo en familia?
Héctor: Entiendo su preocupación, pero créanme, estaré allí para apoyarlo. Spencer tiene el talento y la pasión; lo único que necesita es un poco de impulso para despegar. Y confíen en mí, no dejaré que nadie lo detenga.
Billy, observando la conversación, se sintió inspirado por el fervor de su amigo y la determinación de Spencer.
Billy: Es cierto, Sr. Wright y Sra. Wright. Tu hijo tiene mucho talento. Si puede ser visto, no hay duda de que encontrará su lugar en el mundo del cine -dijo haciendo que ambos padres se miraron con dudas de que es lo que debían hacer.
Hector: Pueden hablarlo en lo que regreso, tengo un asunto que atender. Carl, Sam... Vámonos. Y tú también Billy, quiero hablar contigo en privado -dijo para luego irse siendo seguido por los mencionados.
¿Y a dónde exactamente? Digamos que cuando Hector le dio ese discurso a su hijo y sus amigos de que tuvo un director malandro, no estaba mintiendo. Y por esa razón una de las cosas que más detestaba era que alguien abusara de una autoridad al punto del extremismo y la toxicidad. Una de las cosas que su sobrina y él tenían en común.
Además, también debía aclarar otro tema un tanto delicado.
Billy: Entonces Héctor, ¿Qué sucede? -preguntó una vez ambos se sentaron en la parte trasera de una limusina que Hoover había buscado previamente de un negocio de renta de autos. Mientras que los dos empleados se sentaron en la parte del conductor.
Héctor: Billy... ¿Por qué lo hiciste? -pregunto haciendo al fantasma arquear una ceja- ¿porque le dijiste a tu asesina qué seguías en este mundo como fantasma?
Billy se quedó en silencio, sosteniendo la mirada de Héctor mientras el eco de su pregunta resonaba en el aire denso de la limusina. Una mezcla de nostalgia, miedo y remordimiento inundó el espacio entre ellos.
Billy: ... Porque aunque la odio, la necesito -reveló con tristeza- estoy muerto. Ya no tengo fanáticos corriendo a donde sea que voy. La gente ya no hace cosas por mi ¡antes de Spencer era una locura! ¡Una tortura de aburrimiento! ¡Necesito la atención, qué alguien me desee obsesivamente! Y bueno... ¿Quien mejor que la que me mató porque si no era de ella, no sería de nadie?
Héctor: Ay, Billy, no entiendes -respondió con un suspiro cansado- no necesitas ese tipo de atención, sólo saber que la gente te recuerda y te admira
Billy: Sabes que así no funciona conmigo.
Héctor: Culpo a Pete por eso -menciono por lo bajo- te enseñó qué si la gente no grita tu nombre todo el tiempo, es que no les importas. Pero la verdad es que no, Billy. La gente aun te ama aun si no está besando el suelo por el que caminas -dijo haciendo pensar al espectro.
Billy sintió que las palabras de Héctor se adentraban en su conciencia como un rayo de luz en la oscuridad. Había pasado tanto tiempo desde que había sido amado por su música y admirado como el ícono del rock que había sido. La vida como fantasma lo había dejado atrapado en una espiral de desesperación y soledad, con la necesidad de atención convirtiéndose en una obsesión. Tal vez actuará despreocupado, con ego y hasta egoísta buena parte del tiempo, pero era lo bastante listo para reconocer eso.
Billy: Lo sé, Héctor. Pero es difícil. La gente se olvida. Ellos se mueven, y yo... sólo estoy aquí, flotando. Necesito saber que aún existe una conexión. A veces pienso que si me ven, tal vez podrían recordar lo que fui realmente. No sólo un recuerdo, sino algo tangible -se expresó mirando su mano abriéndose y cerrándose.
Héctor: ¿Tangible? Billy, no necesitas ser un objeto de exhibición ni un trofeo para que te recuerden. Eres más que eso. Tu música vive en ellos, en lo que hiciste y lo que representaste. Tienes que dejar de buscar desesperadamente a aquellos que solo quieren poseerte.
El espíritu del músico se quedó en silencio, sopesando las palabras de Héctor mientras la limusina avanzaba por las calles de Beverly Hills. Miró hacia la ventana, donde el panorama pasaba frente a sus ojos con rapidez... Era curioso, desde que era un fantasma era raro que hiciera algo como eso, había olvidado lo relajante que era un simple viaje en auto.
Héctor: Pero se que no entenderás. No en el corto tiempo... ¿No te gustaría que te ayudará a volver al mundo del espectáculo? -pregunto decidiendo cambiar de tema, causando una reacción adversa en el fantasma.
Billy: Ah no. Héctor, a menos que puedas prometerme qué la gente pueda verme, no voy a firmar nada. No quiero que solo me vean como una guitarra qué se toca sola.
Héctor:.. ¿Ya fuiste con algún cazatalentos antes, no es así? -pregunt en lo que él espectro se hizo el desentendido antes de solo asentir con pesar.
Billy:... Si
Héctor:... Eso no depende de mí, Billy. Depende de ti, tú aún tienes que trabajar en tus nuevas habilidades. Tú puedes manifestarte físicamente ante cualquiera con o sin tus cosas. Pero para eso necesitas practicar -dijo llamando la atención de su amigo.
Billy: ¿Practicar?
Héctor: Si no has podido manifestarte es porque sencillamente aún no sabes como, Billy. Pero en que puedes, puedes -aclaró sonriendo- ¿No has oído de un lugar llamado Amity Park?
Amity Park, un pueblo que tiene el tamaño de una ciudad grande o incluso una urbe. Con algo de esencia de Chicago, San Francisco y Filadelfia, curioso con los últimos dos dada su ubicación justo en la costa oeste. Dicha ciudad cuenta con zonas bajas con modernos rascacielos. Pero el mayor interés de Héctor era que supuestamente en esa ciudad era donde se presenciaban más actos y presencia paranormal, específicamente fantasmal.
Billy: ¿Ami qué?
Héctor: Amity Park, en el estado de Washington, cerca de Seattle. Allí hay un chico fantasma qué juega al super héroe. Puede hacerse visible e invisible al ojo humano a voluntad -explicó- además de los fantasmas que aparecen, pueden ser vistos al ojo humano. Si vas allí. No dudo que alguien te enseñe a hacerte visible
Billy: Y si lo logro... ¿Podría volver al escenario? -pregunto emocionado.
Héctor: Muy posiblemente -dijo viendo al fantasma ya haciéndose ilusiones- y hablando de eso, sobre la otra cosa de la que quiero hablarte... Billy, sabes que soy abierto de mente y que puedes decirme lo que sea, ¿no?
Billy: ...¿Si?
Héctor: ¿Desde cuándo?
Billy: ¿Desde cuándo qué?
Héctor: ¿Desde cuando te enamoraste de Spencer? -preguntó con franqueza.
Billy se quedó en blanco por un momento, nervioso ante la pregunta directa. La expresión del fantasma pasó de la sorpresa a la duda, como si estuviera sopesando no solo su respuesta, sino las implicaciones de lo que estaba sintiendo.
Billy: No sé de qué hablas... -se defendió, aunque su voz temblaba ligeramente- ¿Cómo crees? ¿Y tu nieve? Los años te hacen ver cosas, Héctor. Ya estas senil.
Héctor: No estoy tan viejo, y no intentes ocultarlo. He estado observando cómo te comportas cuando estás cerca de Spencer. Los espíritus pueden ser tontos, pero pueden sentir conexiones genuinas. No voy a juzgarte por ello; en realidad, creo que es natural. Tuviste tu vida y ahora, como fantasma, sientes algo por alguien que es joven y lleno de vida.
Billy: No se trata de eso. Simplemente... lo veo, y hay algo en él. Es distinto a los demás. Es como si aún hubiera una chispa de esperanza en el mundo, y yo fui el que dejó todo atrás... -admitió con un suspiro- ¿Y qué si Spencer ha sido la única persona con quien he sido del todo sincero en toda mi vida? ¿Y que si soy capaz de hacer todo solo para ver su sonrisa? ¿Y que si me vale qué el mundo arda siempre que él esté bien? ¿Y qué si aprovecho que él se quita su collar de mi uña de guitarra, y por tanto él no puede verme? Solo ves cosas.
Héctor:... ¿Aprovechar como? -pregunto arqueando una ceja a la vez que el fantasma se sonroja, cosa que no parece posible pero Billy demuestra que sí.
Billy: ... No debí decir eso, no debí decir eso...
Héctor: Como dije, no te voy a juzgar. Pero te dejaré en claro las reglas, Billy. Tu estas muerto, él está vivo -declaró con seriedad- él aún tiene una vida por delante, tu ya viviste la tuya.
Billy: Lo sé, lo sé... No es justo para él. Pero no puedo evitarlo -se defendió- Cada vez que lo veo, siento que hay algo especial entre nosotros, algo que nunca sentí en vida. Solo que ahora... soy un fantasma. La idea es ridícula.
Héctor: No es ridícula, es humana. Lo que sientes es válido. Simplemente debes tener cuidado. Spencer puede ser joven, pero tiene sus propias emociones, problemas y sueños. No quieres que se sienta abrumado por lo que no puede entender -dijo dándole una sonrisa reconfortante.
Así fue su relación desde que el fantasma vivía, Héctor hizo todo lo posible para ser una especie de voz de la razón. Ya que conocía la historia del chico, ser una estrella desde los seis años parecía increíble para cualquiera, pero no podía estar más alejado de la realidad.
Billy se quedó callado un momento, reflexionando sobre las palabras de Héctor. Un silencio tenso se estableció en la limusina mientras ambos hombres pensaban en la peculiar situación. La honestidad de Héctor le dio una perspectiva a Billy, y aunque no estaba seguro de lo que el futuro le deparaba, había algo que sí sabía: debía ser honesto consigo mismo y con Spencer, aunque solo fuera en sus pensamientos.
Billy: Lo sé, sé que Spence tiene una vida que vivir... y yo quiero formar parte de ella -admitió- aunque tenga que ser de espectador.
Héctor: Ambos sabemos que tú nunca harías eso. Billy Joe Cobra ama ser quien esté en el centro del escenario, especialmente si es para quien ama... -dijo comprensivo- no te voy a detener, es más, te apoyo. Pero solo si estás 1000% seguro de que es lo que quieres... Y de que es mutuo. Así como que seas consciente de que será complicado -dijo.
En lo que la limusina se detenía frente a la escuela secundaria.
Héctor: Te dejaré pensarlo. A fin de cuentas ya llegamos... Pero no miento, me gusta verte feliz de verdad, niño. Siempre quise qué encontrarás a alguien que supiera cuidar de ti -admitió saliendo del auto.
Con el fantasma solo viéndolo irse. Justo hoy tenía una ligera esperanza. La posibilidad de volver a sentir algo real además del amor de los fans. Pero no era solo eso. Había algo en Spencer que le atraía, algo que le hacía sentir vivo otra vez. Sus pensamientos se centraron en esos momentos que compartieron juntos. Cada vez que se acercaba, como si una corriente eléctrica los uniera.
Pero había un dilema: ¿podía realmente permitir que esos sentimientos crecieran con el riesgo de hacerle daño?... incluso después de morir, la vida y... las relaciones, eran complicadas.
___________________________________________________________________________
Y ese fue el capitulo de esta vez. Como siempre pueden votar, comentar, lo que gusten.
¿Y que les pareció?
Hasta ahora este es el cap más largo de este fic. Y de hecho me falto, ya para el próximo capitulo termina este asunto. Pero si le doy la debida importancia es porque a su modo Spencer y Billy serán importantes para la trama a futuro (y si, soy fan del ship ectofeature, demándenme)
En fin, de cualquier modo espero que les haya gustado. Veré si meto un momento Higuel en el próximo cap para compensar.
Chapter 23: Capitulo 21: Sincronización familiar
Summary:
Y ese fue el capitulo de esta vez, como siempre puedes votar, comentar, lo que gustes.
¿Y que les pareció?
Si, se que Hiro parece muy nostálgico pero dados los sucesos de los últimos capítulos ¿lo pueden culpar? Ahora si, ya luego de estos crossovers del próximo par de capítulos al fin pasara la fiesta del té. Y no saben como me emociona eso.
Estos capítulos finales han sido más que todo para explorar como son por separado Miguel, Rosa y Héctor por su cuenta.
En fin, nos vemos.
Chapter Text
(General Pov)
(Escuela secundaria Beverly Beverly, BB, California, USA)
La escuela secundaria de Beverly Hills se erige como un microcosmos brillante y enérgico, un lugar donde la opulencia y la lucha por la identidad juvenil coexisten en un delicado equilibrio. Con sus majestuosos edificios de arquitectura contemporánea adornados por palmeras verdes y jardines perfectamente cuidados, el campus refleja el estatus de su localidad: un símbolo del sueño americano, donde el brillo del éxito parece estar al alcance de todos, incluso en los años de formación... mayor mentira no puede haber.
Bastaba con ver a los estudiantes para sentir como la competencia era como una segunda piel. Los jóvenes son empujados por la presión de sobresalir no solo en los estudios, sino también en deportes, artes y actividades extracurriculares, con la actividad social colgando siempre sobre sus cabezas como un recordatorio constante de que la imagen lo es todo, a excepción de los hijos de las familias más adineradas o los que tiene el mejor talento deportivo que se creían dioses que podían hacer lo que les daba la gana porque sí. Y los profesores, conscientes de la situación, intentan inspirar en medio del caos, cultivando el deseo de aprender y la búsqueda de la autenticidad en un ambiente saturado de superficialidades... sin tener mucho éxito ciertamente.
Héctor: No se si es por como fui criado, pero para mi estos así llamados ¨lugares para la creme de la creme¨ son solo cunas al ego y a la ignorancia social -dijo mirando el complejo con fastidio.
Su plan era simple, iba a la oficina, le arruinaba la vida al director luego de avisar que Spencer sería su protegido a partir de ese momento y seguía con su vida. No tenía que hacerlo, pero quería hacerlo, los abusivos nunca fueron de su agrado. Y es cierto que él mismo lo hacía a veces, pero él lo hacía con gracia.
Y parecía que tendría un calentamiento antes de hacer la visita oficial.
Héctor: Disculpe, señorita. Le importaría moverse, obstruye el camino -pidió con amabilidad a una joven adolescente que parecía estar demasiado ocupada (nótese el sarcasmo) hablando con teléfono, y por la urgencia con la que hablaba parecía ser un asunto de vida o muerte.
Lolo: Hola , ¿puedo conseguir una cita a las cinco en punto para un blanqueamiento de pies ?
... ¿Era en serio?
Héctor: Jovencita, por favor, te pido cordialmente que te muevas, estás obstruyendo las escaleras y...
Lolo: No me importa, eso no blanquea mis pies ¿o si? -pregunto con fastidio antes de ponerle atención a quien le hablaba- ósea ¿Usted sabe quién soy vagabundo? Que desagradable gusto de la moda ¿la compro en los ochenta? Adrián, ese tipo me fastidia, qué el indigente no me moleste -ordenó a la vez que de la nada salió una especie de guardaespaldas rubio que intentó tirar al hombre mayor al basurero.
Solo para toparse con un muro de casi dos metros de músculo, las ventajas de tener guardaespaldas propios, en este caso, Carl Felony. Quien solo sujeto la muñeca del otro guardaespaldas con la fuerza suficiente para hacerlo desistir de cualquier hostilidad.
Héctor: Me presento, Héctor Rivera, dueño y CEO de Rivera Solutions, así que te sugiero pensar detenidamente antes de ponerme una mano encima, amigo -se presentó en lo que Carl hizo más presión en la muñeca del hombre, haciéndolo quejarse de dolor- y sí sé quién es, señorita Lolo Calorie, creo que tengo un almuerzo con su padre en unos días, así que créame, me aseguraré de recordar hablarle de cómo me insultó en mi cara e intentó hacer que su guardaespaldas me agrediera sin que yo mostrara ser una amenaza para usted.
La rubia se quedó inmóvil, los ojos agrandándose de sorpresa mientras el tono desafiante en la voz de Héctor se asentaba en el ambiente plagado de murmullos de los estudiantes que comenzaban a agolparse alrededor. La tensión entre los dos era palpable, como si una chispa eléctrica estuviera a punto de encender una explosión.
Lolo: ¿Tú? ¿El CEO de no sé qué...? No me importa. No tengo tiempo para lidiar con tus desvaríos, anciano -su expresión se endureció, pero había un atisbo de duda en su mirada. Carl, por su parte, aflojó un poco la presión en su agarre, pero no lo suficiente como para que el otro guardaespaldas se sintiera cómodo- ¿que? No, no hablaba con usted, y no, tiene que ser a las cinco, y no me de a esa chica sudorosa, quiero a Funji -volvió a la llamada solo para que Héctor tomara el teléfono de la joven- ¡oiga!
Héctor: ¡Adiós Funji! -declaró para luego cortar la llamada y devolverle el teléfono a la chica indignada.
Lolo: ¡Acaba de colgarle a la mejor blanqueadora de pies de todo Beverly Hills!
Héctor: Si, para lo que me importa. Lo que a ti te debería de importar es que ahora mismo me estás dando una muy mala impresión, cariño -declaró con un tono lo bastante amenazante para que la joven entendiera que no era una situación típica de ella habla y todos escuchan- ya sabes cómo somos los ricos. Todos buscamos conocernos a todos. Y haces enojar a uno, y todos se ponen como perros rabiosos... y tú me estás haciendo enojar a mi persona, y mucho.
Lolo, aún aturdida por la audaz intervención de Héctor, sintió cómo su mundo de superficialidades comenzaba a tambalearse. A nadie le gustaba ser confrontado, especialmente en una escuela donde el estatus social podría fragmentarse en un abrir y cerrar de ojos. Pero, a pesar de la incomodidad, había algo en la postura de Héctor que la obligaba a prestar atención.
Lolo: Yo, era... Era una broma... Si, una broma. Cayó, señor -dijo riendo con incomodidad- ¿no tiene sentido del humor, señor?
Héctor: Niña, no escupas en mis pastelitos con todo y sopita y me digas que es glaseado, ya me he topado con gente de dinero que olvida que las reglas y leyes siguen aplicando en ellos, así que si me acepta un consejo gratis, vaya evaluando su comportamiento antes de que cometa un terrible, terrible error -dijo con tono de amenaza en lo que ella se apartó de las escaleras- gracias... y por cierto, tal vez hable con tu papi de lo bien que te haría pasar una temporada en un campamento de verano lejos de la tecnología, los lujos y todo lo moderno... Escuché que Kikiwaka es un lugar perfecto para enseñar a los jóvenes lo que es la humildad.
Y aunque dudaba que ella supiera de qué lugar se trataba, el simple hecho de insinuar que sería enviada a un campamento de verano en vez de ir al extranjero como seguro hacia, bastó para que la diva se indignara y pusiera expresión de perro regañado. Para diversión del hombre de ascendencia mexicana así como para su guardaespaldas y nuevo empleado respectivamente.
Hoover: Nunca antes vi a alguien poner a uno de estos niños malcriados en su lugar -dijo riendo por lo bajo- los chicos de esta ciudad son egoístas en toda la expresión de la palabra, al tener padres que los malcrían, solo piensan en sí mismos y ya.
Héctor: ¿Has pensado que Madam X era de ese tipo de personas? -pregunto en lo que el hombre de apariencia longeva solo se encogió de hombros.
Hoover: Todo el tiempo -exclamó en lo que se abrían paso en la oficina del director.
El lugar como tal no parecía la gran cosa, hasta parecía humilde comparado con la excentricidad de los edificios de la institución. Pero se podían notar algunos detalles interesantes, como que algunos de los títulos del así llamado director aún tenían su etiqueta de precio de compra, o que en una esquina había varias patinetas, balones y demás artículos de recreación para los estudiantes que hasta tenía telarañas... si, era evidente que el tipo en cuestión no era ni muy popular ni querido por los estudiantes. Hasta se podía dudar de que si era un profesional real.
Y como, si para empezar su cara era la de un caballo... no, un burro se parece más.
Ponzi: Si no es algo de vida o muerte no me molesten en mi hora de consentir a Lorenzo -dijo sin ver a quienes entraron en lo que le intentaba dar de comer una galleta a su loro que era perturbadoramente parecido a su dueño.
Es verdad que cada cosa se parece a su dueño, pero eso ya es ridículo.
Héctor: Señor Glenn Ponzi, supongo -mencionó tomando asiento frente al escritorio del desinteresado hombre.
Ponzi: ¿Quién pregunta?
Héctor: Héctor Rivera, un gusto.
Ponzi: ¿Y debería impresionarme porque...? -pregunto en lo que su loro hizo que prestara su atención a una revista donde el propio Héctor se encontraba en la portada junto al título: ¨Héctor Rivera, uno de los diez magnates más ricos e influyentes del país¨- ... ¡Oh, por eso! ¿A qué debemos el honor de su visita a nuestra ilustre y prestigiosa institución, su señoría? ¿Busca dejar a su hijo o sobrina en nuestra institución? Porque de ser así le aseguro desde este momento que serán tratados como la realeza qué son, aquí se sentirán como en casa o hasta mejor -dijo con un tono adulador y con evidentes signos de dólar en los ojos en lugar de pupilas mientras miraba de reojo la revista para saber qué decir.
Causando solamente que el CEO en respuesta sólo lo mirara de arriba abajo antes de empezar a reírse, primero fue una risita casual, pero luego conforme pasaron los segundos esta se volvió una carcajada que incomodó con facilidad al director de la institución.
Ponzi: ... ¿Eso significa que no?
Héctor: Mi hijo ya tiene clases privadas con el robot Inteligente. Quién está programado con lo último en educación a nivel mundial. Y mi sobrina será joven, pero ya es graduada con honores de la escuela de derecho y es experta en informática además de una violinista digna de la ópera de Sidney -se jactó con arrogancia- además, ¿Realmente piensa que yo querría a mi hijo y a mi sobrina en una escuela donde el director trata a sus alumnos de acuerdo a qué tan rico se podría volver obteniendo "el favor" de sus padres?
Ponzi: Bueno, es que... -tartamudeó antes de recomponerse- Puedo asegurarle que en esta escuela tratamos a todos los estudiantes con el mismo respeto... dependiendo de sus contribuciones a la institución, por supuesto -murmuró por lo bajo pero el igual fue escuchado por los visitantes.
Héctor: ¿De verdad? Me parece que su definición de respeto suena más como un trueque, ¿no? ¿Cuánto hay que pagar para que un estudiante no termine en su oficina por algo tan trivial como un chicle en la clase? -pregunto haciendo al tipo del peluquín (porque se notaba que era peluca) sonriera nervioso.
Ponzi: En realidad, eso se puede resolver con una simple reprimenda... uhm, por supuesto, con una previa paga de la cuota de disciplina -volvió a hacer un intento de murmurar.
Héctor sintió que una ráfaga de indignación le recorría la espalda. Era evidente que Ponzi había sido más un facilitador de la mediocridad que un educador con ética. Sin embargo, no quería que el director escapara de la conversación tan fácilmente.
Héctor: Pongamos un ejemplo. Se que a la hija del señor Calorie la deja hacer lo quiera por el dinero de su papá. Así como se que el bravucón de la escuela sale impune de cualquier castigo por ser el mejor atleta de la escuela -dijo haciéndose el desinteresado- lo que trae becas para la escuela, y claro, no olvidemos que gasta el dinero del presupuesto en compras completamente innecesarias
Ponzi: Señor, le juro que jamás he hecho tal cosa -respondió alterado, tratando de ocultar su evidente nerviosismo.
Héctor: ¿Y su cuarto para objetos confiscados lleno de trampas que incluyen un cocodrilo? Espero que sepa, Glenn, que legalmente tiene que devolver lo decomisado a los estudiantes, si no se considera robo -dijo con seriedad- ¿y debo señalar la silla para "hacer crecer el cabello" qué tiene por allí? -mencionó señalando la máquina en una esquina de la habitación.
Ponzi: Emmm... ¿Me creerá si le digo que ya venía con la oficina? -se trató de excusar en lo que el hombre de negocios solo suspiro antes de chasquear los dedos.
Momento en que la puerta de la oficina se abrió nuevamente, revelando a una mujer muy entrada en años que era profesora de la escuela, la señorita Rumbfield. Quien venía acompañada de un hombre que parecía ser un viejo conocido del director debido a que se veían con expresiones ya establecidas de miedo y rabia respectivamente.
Ponzi: Superintendente Maxwell, ¿Qué lo trae aquí? -preguntó incómodo al hombre que lo vio con fastidio.
Héctor: Yo lo invité -reveló antes de ponerse de pie y saludar a ambos- y ésta dama debe ser la señorita Abigail Rumbfield, aunque imagino que luego de hoy será la directora Rumbfield
Ponzi y Rumbfield: ¿Perdón? -exclamaron sorprendidos por razones muy diferentes.
Héctor: Glenn ¿De casualidad conoces a un estudiante llamado Spencer Wright? -pregunto de forma casual.
Y aunque intentó hacerse el ignorante, bastaba con ver la evidente rabia en su mirada y el como apretaba su mandíbula como sus manos para saber que el director estaba en contra del chico, algo ciertamente infantil de su parte dado a que conscientemente le hacía la vida miserable a un chico solo porque sí, para no sentirse mal con su propia vida.
Rumbfield: ¿Pero cómo no? Spencer es un chico encantador -declaró la mujer jovial.
Héctor: Si, lo suficientemente encantador como para que Ponzi tenga una obsesión por humillar, denigrar y querer expulsar a dicho joven con su futuro arruinado lo más pronto posible -dijo para incredulidad de la profesora y el superintendente.
Ponzi: ¡Eso es absurdo! ¡Nunca haría algo así! -se defendió solo haciendo que el magnate arqueara una ceja.
Héctor:... Carl -pidió sin decir nada más al enorme guardaespaldas que solo asintió.
Para luego dar un solo puñetazo a una pared en específico de la oficina que se derrumbó como si hubiera sido carcomida por termitas al tratarse de un muro falso, revelando la habitación secreta de Ponzi donde tenía una maqueta, o para ser más exactos, una réplica idéntica de la escuela mostrando como sería en su imaginación la expulsión de Spencer. ¿Era una especie de fantasía retorcida o simplemente un acto de maldad pura de parte de un hombre patético y triste? Quien sabe.
Héctor: A ver, veamos que tenemos aquí -dijo tras entrar a la habitación y ver algunos de los libros junto a la maqueta- "Guía para aprovechar lagunas en el reglamento escolar para expulsar alumnos sin levantar sospechas"... "Cómo vender una plaza en tu escuela sin que la junta escolar lo sepa"... ¿Revise su propia próstata para no gastar en proctólogos? -pregunto extrañado por el último título.
Ponzi: Yo... Puedo explicarlo. Lo de la próstata es para un amigo... -exclamó nervioso.
Héctor: Vaya, yo pensé que se refería a poder explicar porque parece que se ensaña con un menor de catorce años -dijo casual- al grado de no querer ni transferirlo a otra escuela sólo por querer el gusto de dañar su imagen escolar con una expulsión.
Ponzi: ¡Es porque Spencer Wright es el peor tipo de criminal qué puede haber! Le estoy haciendo un favor a la sociedad al evitar que un tremendo caos andante como él llegue a hacer verdadero daño. ¡Es mejor acabar con el mal antes de que eche raíces! -reclamo haciéndose el héroe incomprendido que solo hacía lo correcto, cosa que nadie se creyó.
Héctor: ¿Y cómo su "intelecto superior" llegó a esa conclusión, señor? -preguntó con sarcasmo.
Ponzi: Porque basta con conocer su "procedencia" para saber el tipo de cretino qué se volverá a futuro -mencionó haciendo que al mexicano le cayera el 20.
Héctor:... Todo esto es por Billy Joe Cobra ¿no es así? -pregunto más afirmando que otra cosa hablando del familiar muerto del joven.
Que a los ojos de Ponzi, él debería saber que el hecho de que Spencer conozca a Billy de algún modo es imposible porque para cuando Cobra murió fue antes de que el chico naciera siquiera. Aunque considerando que no sabía mucho de la historia entre esos dos, el patriarca Rivera no podía saber si le revelaron que Billy era un fantasma o no.
Maxwell: ¡Ponzi! -reclamó el superintendente con tono de regaño- ¿Está diciendo que se ensaña con un menor por considerarse detractor de un pariente que el chico ni alcanzó a conocer?
Ponzi: ¡Es mucho más que eso... Es que... Es que...!
Héctor: Es que aun siendo familiar de Cobra. Spencer es el único estudiante qué se puede considerar "normal" en esta escuela. Sin padres influyentes y por lo tanto, alguien con quien usted se puede meter a gusto -dijo con fastidio- y al mismo tiempo, porque es el único alumno con el que no obtiene ningún beneficio siendo bueno con él.
La atmósfera en la oficina se tornó tensa. La incredulidad se reflejaba en los rostros de todos los presentes. Especialmente la mirada del superintendente Maxwell se oscureció, claramente disgustado por las revelaciones que estaban saliendo a la luz.
Ponzi: ¡Esto es un malentendido! Spencer es un... ¡Un caso especial! No se puede dejar que su comportamiento se convierta en un mal ejemplo para los otros estudiantes -dijo con un leve tartamudeo, intentando recomponerse mientras su mente buscaba una salida.
Héctor: ¿Un mal ejemplo? El único mal ejemplo aquí eres tú, Glenn. Un adulto que se niega a admitir que su egoísmo y sus caprichos personales están destruyendo la vida de un chico -dijo con una voz escalofriante antes de ver al hombre de más autoridad presente- no se usted superintendente. Pero la actitud de Glenn hacia Spencer al menos a mi me demuestra cuál es su verdadera naturaleza. Y no me parece que alguien así esté capacitado para estar a cargo de varios jóvenes.
Maxwell: Le doy la razón, señor Rivera, así que... ¡Ponzi! ¡Queda despedido! -declaro causando que el mencionado pareciera como si fuera una copia de la pintura del grito de la consternación.
Ponzi: ¡No puede hacerme esto! ¡Todo esto es culpa de Spencer Wright! ¡Él me inculpó!
Maxwell: ¡Ponzi! Una palabra más respecto al señor Wright, y le juro que saldrá de ésta oficina acompañado de policías por acoso contra un menor de edad -declaró con severidad para enojo del ahora ex director.
Ponzi: ¿Policía? ¡¿Dónde estuvo la policía cuando Billy Joe Cobra me humilló?!
Héctor, Maxwell y Rumbfield: ... ¿Perdón? -preguntaron incrédulos a la vez que incluso Carl y Hoover arquearon una ceja extrañados.
Momento en que, como si lo hubieran convocado de forma involuntaria (cuando lo cierto es que solo basta con que digan su nombre para que aparezca por curiosidad o por ego) el fantasma de Billy se apareció, no pudiendo ser visto por nadie excepto Héctor gracias a los lentes de sol que pertenecían a la estrella musical en vida, un viejo recuerdo.
Billy: ¿Humillarte? ¡Solo fui sincero! ¡Tú no tienes talento! ¡Te salvé de hacer el ridículo en quién sabe cuántas cosas a nivel nacional o dios me libre si internacionalmente! -reclamo hastiado flotando arriba de Ponzi.
Héctor: Espere -dijo habiendo escuchado- ¿Usted es el tipo al que Billy le aconsejó no participar en ese programa de talento, "Éste País es Bueno en Cosas"?
Ponzi: ¿Vio el programa? Entonces sabe porque mi odio hacia la familia Cobra y por ende a los Wright!
... Y lo peor es que hablaba en serio.
Héctor: ¿Si entiende que a) Billy no cometió ningún delito al ser abrasivamente honesto, para que diga que debieron arrestarlo, y b) que diga que para usted es un motivo para ensañarse con un menor lo mete en aún más problemas? -pregunto con algo de enojo- y le recomiendo que lo siguiente que diga lo piense bien. Porque pasa y resulta que Billy Joe Cobra fue un buen amigo mío cuando estaba vivo. Y entenderá que ya me puso bastante de malas que diga que por un rencor de más de quince años, se mete con un chico de la edad de mi hijo
Ponzi: Solo no lo entiendo ¿a usted que le importa lo que le pase a Spencer Wright? ¡No tiene nada que ver con usted!
Héctor: Sí tiene mucho que ver conmigo, ya que voy a patrocinar la misma carrera de cineasta del chico que usted intentó frenar sólo para seguir desquitándose de que no le gustó lo que dijo Billy de su acto -dijo en lo que con los susurros de los estudiantes y la creciente curiosidad de algunos profesores resonaban en el ambiente mirando desde fuera de la oficina.
Nadie podía imaginar que un nombre tan destacado recientemente en el mundo como el de Héctor Rivera estuviera implicado en un conflicto tan explosivo con un director de escuela. Y por un don nadie como Spencer Wright de todas las posibles razones.
Ponzi: ¿Qué? ¡No puede hacer eso! ¡Wright no se puede ir de esta escuela! ¡No de ese modo, no se lo merece!
Maxwell: ¡Ponzi! -exclamó con reclamo- ¿A qué se refiere con "no de ese modo"?
Héctor: A que como le dije, superintendente, éste mamarracho quería tener el gusto de manchar el registro permanente del joven Wright con una expulsión, lo que, usted sabrá, dañaría su futuro escolar.
Los murmullos de los estudiantes se volvían cada vez más inquietos, y aquellos que permanecían cerca de la puerta escuchaban sobre lo que estaba sucediendo. Ésa era la última cosa que Ponzi quería: que el escándalo estallara al público.
Maxwell: ¡Ponzi! Estoy harto de usted. Señor Rivera, ¿me presta a su guardaespaldas para que lo saque a patadas?
Héctor: Con confianza, señor -dijo divertido.
Ponzi: ¡No puede hacerme esto! -dijo ya cargado por Carl Felony para ser arrojado fuera de la oficina- ¿Cómo viviré? ¿Cómo pagaré las facturas? ¿Cómo le daré de comer a Lorenzo? -pregunto señalando a su pájaro mascota que ya estaba empacando sus cosas en una mini maleta intentando dar lástima, sin que funcionara.
Maxwell: Debió pensar eso antes de ensañarse con un chico de catorce sólo por rencor a un pariente que el chico ni llegó a conocer ¡Saquése! -dio la orden y lo último que se vio de Ponzy y su loro fue el cómo lo echaron a la calle sin más- será mucho papeleo, pero creo que valió la pena.
Héctor: En eso estoy de acuerdo -exclamó complacido con el resultado- sin más... supongo que solo queda una cosa por hacer, señorita Rumbfield -dijo mirando a la anciana- felicidades por su nuevo trabajo como directora. Si me pregunta, el puesto debió haber sido suyo hace años.
Rumbfield: Gracias, señor Rivera -dijo con gentileza- y sobre lo del traslado... Por favor, cuide del joven Spencer, de verdad es un muchachito muy dulce.
Héctor: Lo haré, señora. Con su permiso -declaró antes de solo salir de habitación siendo seguido por su personal, dejando a los encargados de lo referente a la administración de la secundaria hacer su trabajo.
Al final toda esa situación valió la pena si le preguntaban al señor Rivera. Héctor era particularmente alguien que disfrutaba de poner en su lugar a quien lo merecía sin importar cuánto debía esperar, en estos casos el fin justifica los medios, y más si todo el proceso daba satisfacción personal, siendo justo y malo también pero saliéndose con la suya.
Hoover: Eso fue muy divertido señor. Usted sí sabe cómo hacer las cosas más emocionantes -admitió entre risas el hombre de baja estatura- seré sincero, quise ver eso por mucho tiempo. Hasta para mi algunos de los abusos de ese tipo me parecían demasiado.
Héctor: Tienes razón -admitió antes de ver al espectro que flotaba cerca de ellos- en todo caso. Al final no fue culpa tuya Billy. Por si lo pensabas. Se nota que el tipo es un cretino sin importar nada.
Billy: No, yo sé eso, sé que era un infeliz al querer arruinar el futuro de Spencer sólo para sentir se que vengó de mí -dijo restando importancia al asunto- solo me molesta que en cierto modo Spencer sufriera tanto por mi culpa cuando nada tuvo que ver.
Héctor: Tampoco es tu culpa, sólo fuiste abrasivamente honesto, él fue quien creyó justo desquitarse con un pariente que nació después de que murieras -exclamó encogido de hombros- Que hablando de eso... ¿Qué pensaste? -preguntó refiriéndose al tema hablado previamente en el auto.
Amor entre alguien vivo y alguien muerto, en cierto modo eso elimina muchas limitaciones por lo general son normales en la sociedad. Pero aun con todo seguía siendo algo controversial, pero a fin de cuentas... todos saben que el fruto prohibido es el más exquisito, aunque eso era debatible en muchos sentidos, lo que depende de a quien preguntaras.
Billy:... Quiero tener una cita con él -admitió mirando al cielo pensativo- ¿Cómo lo hago? Tu siempre has sido mejor en el romance qué yo. Y te lo juro, no hay nadie más denso en el romance qué Spencer. Y no ayuda qué a él no le interesen esas cosas.
Héctor: Ya veremos cómo hacerle, Roma no se construyó en un día, si con decirte que mijo aún batalla para ligarse a su crush -dijo divertido para sorpresa del espectro.
Billy: Pero es tu hijo ¿El hijo no salió al padre?
Héctor: Y es lo que me preocupa, si sus genes Rivera ya estuvieran activos, ya debería ser cliente frecuente del callejón linterna roja -admitió con el ceño fruncido.
Carl: Señor Rivera. Su sobrina ha sido muy clara respecto a que no sea mala influencia para su hijo -le recordó al hombre la amenaza guien advertencia de su sobrina, a lo cual el hombre se encogió de hombros.
Héctor: Lo que Rosita no sepa o no averigüe hasta que ya lo haya hecho no hará daño.
Carl: Señor, no llevo mucho trabajando con usted y sé que su sobrina sabe todo lo que hará antes de que usted piense en hacerlo.
Héctor: Y aún así usualmente me acabo saliendo con la mía -dijo divertido saliendo de la institución seguido por el par.
Siendo allí donde el guardaespaldas de gran tamaño solo extendió su mano y atrapó del cuello de la camisa a una adolescente que le iba a saltar encima a Héctor con fines violentos. Tratándose de la mejor amiga mujer de Spencer, Shanilla Bhagwati. Siendo seguida por su hermano que estaba escondido tras un basurero y también amigo de Spencer, Rajeev.
Héctor: ¿Pues que todos los adolescentes aquí atacan a los adultos o que?
Shanilla: ¡Devuelvan a Spencer! ¡Secuestradores! -dijo mientras pataleaba, intentando soltarse del agarre de Felony, para diversión del hombre.
Héctor: Niña, Spencer está bien en su casa -trató de explicar.
Shanilla: ¡Mi hermano me lo contó todo! Sam Hoover y este grandulón lo secuestraron... ¡Y tú no hiciste nada! -dijo señalando al fantasma que solo negó divertido.
Billy: Porque Héctor es un viejo amigo mío, Spence está a salvo -dijo casual- y tu ya sabes como se pone tu hermano cuando se asusta. Hablamos del tipo que cree que el cielo se cae si le cae en la cabeza una bellota.
Shanilla: ... Eso no te lo discuto -mencionó ya calmándose- yo, creo que me deje llevar, ya sabes... Por ellos -dijo señalando a Hoover y a Carl. Quienes solo se encogieron de hombros al ser conscientes de que era entendible- entonces ¿Spencer está bien?
Héctor: Sí lo está. Aunque yo qué tu iría a despedirme de él. Hoy se va para no volver -admitió con total tranquilidad para consternación de ambos jóvenes.
Algo que para Héctor le daba absolutamente igual, entendía la importancia que la juventud le daba a sus semejantes, pero... honestamente le daba igual, el sabia que esos vínculos raramente eran de verdad importantes cuando se llegaba a la edad adulta ¿Qué tenía de malo de una vez adelantar el proceso? Podía ver a Spencer como alguien de provecho para él en el futuro, a los dos chicos frente a él no.
Ambos: ¡¿Qué?!
Héctor: Si, me lo llevo a estudiar para ser director de cine. No es genial?
Ambos: ¡¿Qué qué?!
Héctor: ¿Qué hay eco aquí? -pregunto extrañado en lo que Billy trató de calmar a ambos jóvenes a su modo.
Billy: Es cierto. Bros, Spencer se va, y yo también ¡Billy Joe vuelve al mundo de la fama! Todo gracias a mi Bro Héctor -dijo abrazando al mencionado.
Solo logrando que el mayor de los dos hermanos se desmayara al no poder creer lo que pasaba y menos que fuera tan repentino.
Billy: Vaya, aguantó más de lo que pensé -dijo casual con un pulgar arriba.
Héctor: Si, bueno, vámonos de aquí, aún tengo mucho que hacer en casa y... me lleva la que me trajo -dijo tras ver de reojo su teléfono y notar un mensaje de su sobrina de alerta roja.
Lo que solo podía significar una cosa, se trataba de una situación que necesitaba ser discutida cuanto antes con él y que ella no podía encargarse por sí sola por X o Y razón... de verdad que no se podía tomar un día libre sin que algo pasara.
___________________________
(Hiro Pov)
(Casa de Crazy Land, San Fransokyo, USA)
Me siento muerto, tanto mental como físicamente, aunque admito que este mundo de la animación cada vez me estaba llamando más la atención, era muy matador. No había modo en que Leo y yo pudiéramos terminar todo el trabajo para el día de la presentación, no sin que considerara seriamente inyectarme cafeína para ser un humano al menos tolerablemente funcional aun con las pocas horas de sueño al día y encima con el resto de responsabilidades que tenía. Con decir que literalmente me duermo a mitad del trabajo últimamente.
¿Será que estoy loco y de hecho puedo manejarme tan bien haciendo todo porque mi cerebro ya se descompuso y solo trabajo en automático y ya? Nah... ¿o si? ¡No, concéntrate Hiro, lo último que necesitas es caer en una laguna mental hecha por ti mismo! Solo... Rosa me mandó un mensaje para que le dejara una partitura a Miguel de una nueva canción para la banda y luego me tomaré al menos un par de días para mí, al demonio, creo que me lo gane.
Y bueno... Hace algún tiempo que no veo a Miguel, y me gustaría pasar el rato con él, y más que encima debo aprovechar que Casanova parece estar tomándose su tiempo para su siguiente robo ya que luego de ser visto en Hawai por los chicos solo se esfumo... al diablo con él, no pensaré en él hoy, hacerlo solo me estresaría más.
Hiro: Miguel ¿Dónde estás? ¿A dónde se fue todo el mundo? Leo se que está practicando masoquismo quedándose hasta tarde en el IASF y Marco debe estar atentando contra su vida coqueteando con Kyle ¿A dónde se habrá metido? -me pregunté inspeccionando el lugar inusualmente vacío, solo habiendo robots que parecían ser de limpieza... ¿Un modelo nuevo? ¿Será cosa del tal Hollow?
Aunque fácilmente salí de mis pensamientos al escuchar algo que me extraño ¿eso era una flauta? No cabe duda, ese era Miguel. Estaba en su habitación cantando una canción de cuna a su hermanita, cambiando la flauta por una guitarra. Ya estaba empezando a atardecer así que supongo que como a esta hora la mandaban a dormir o tal vez estaba cansada de jugar toda la tarde.
El asunto es... esa canción, me estaba haciendo sentir... cosas... y ni siquiera entendía lo que decía ¿Qué idioma era ese?
—
— Canción (tema ending, Onyx equinox, 2020) —
Miguel: Cochi, en piltontli (duermo mi pequeña) cualtzin cochitlhual (sueña bonito). Cochi, en piltontli (duerme mi pequeña), cualtzin cochitlhual (sueña bonito) -canto con una melodía que denotaba tranquilidad más que todo, pero aunque no entendia que decia, esa canción me daba... nostalgia- Citlalan oantemo... (las estrellas bajaron..) metztonalli tlahuia (y la luz de la luna te ilumino). Citlalin oantemo... (las estrellas bajaron...) Cochi in piltontli (duerme mi niña). Cochi, en piltontli (duerme mi niña) cochitlhual (ten lindos sueños...) -termino de cantar mientras acariciaba el cabello de la niña.
Que ya estaba dormida mientras abrazaba al perro, Dante creo se llamaba, quien se dejaba hacer de peluche.
(Fin de canción)
—
Esa canción, nunca la había escuchado, pero no se si es por el cansancio o por el estrés pero... esa canción me hizo sentir nostálgico, al punto de sentir como mi respiración se agitaba al recordar... algo que no recuerdo haberlo hecho antes. Esa situación, ver a Miguel cantarle a su hermana así, me hace sentir... Deja vu, esto yo lo viví... hace muchos años.
Recuerdo la letra, era una canción de cuna también, pero más que la letra, recuerdo una voz... una voz dulce, cálida y gentil. Del tipo de que la escuchas y te calmas, solo te basta oírla para que todos los problemas se vayan y sientas que no hay lugar más seguro en el mundo. Una canción maternal...
___
— Canción (Lullaby, Spy x Family temporada 2, 2023) —
Una suave luz inundó el corazón de alguien que llorando está...
Mi pequeño y dulce niño, duérmete ya. Que la luna al fin saldrá...
Y con una dulce voz al viento cantaré y mi calor te arropara...
Y en mis brazos yo te acunare con amor mientras canto esta canción...
A tu lado estoy y nunca me marcharé, duérmete ya mi bebé...
(Fin de canción)
___
Esa... ¿Esa era la voz de mi mamá?... la perdí cuando solo tenía tres años ¿tan cansado estoy que mi cerebro me hace recordar algo así de antiguo? Creo que incluso estoy llorando, y justo a pocos metros del chico que me gusta de todas las cosas ¡cálmate, hombre!
A medida que las notas de la canción de Miguel flotaban en el aire, no podía evitar sentirme atrapado entre la melancolía y la calidez. Recordar a mi madre era un trago amargo, me sorprende como puede ponerte triste extrañar a alguien de quien casi no recuerdas nada... pero al mismo tiempo, la conexión que sentía hacia Miguel crecía más fuerte si era sincero.
Las preocupaciones diarias, las expectativas académicas y las presiones del mundo venían a mi mente, pero Miguel era un refugio, no sé en qué momento, pero se volvió un alivio para mi. Esa canción, cantada con tanta dulzura y amor hacia su hermana, resonaba profundamente en mi corazón, y me recordaba que había más en la vida que solo cumplir con las expectativas. De algún modo, él tenía ese don en mi.
Hiro: ... No pienso mucho en ti... pero te extraño cada día... mamá... papá, Tadashi... -dije en un susurro antes de solo negar.
Decidiendo que no podía dejar que mis emociones me dominarán, me arme de valor y me adentre en la habitación de Miguel. Mi corazón latía con fuerza, una mezcla de nervios y determinación. Sin pensarlo mucho realmente me acerqué con paso silencioso, y conforme más cerca estaba, más claramente podía escuchar la voz de Miguel que ya terminaba su dulce canto que decidió repetir en un tarareo.
Miguel: Duerme bien, mi niña. Siempre estaré aquí -dijo besando la frente de la menor.
Hiro: Eso fue realmente hermoso, Miguel -dije estando a su lado, una acción errada a lo que vi luego cuando él se giró abruptamente, sorprendido y un poco avergonzado, como si lo hubiera sorprendido en un acto privado. Antes de solo caerse al piso de la sorpresa con todo y silla.
... Auch.
Miguel: ¡Hiro! -dijo poniéndose de pie- no te vi entrar. Yo... No sabía que estabas aquí -exclamó frunciendo el ceño ligeramente, mientras se recuperaba del sobresalto- ¿Escuchaste eso? Se trataba de náhuatl, un idioma indígena de México.
Hiro: Sí, escuché. Me trajo algunos recuerdos... -admití sonriendo, sintiéndome relajado- no muy claros, pero realmente bellos. Tienes un talento especial para eso si soy honesto.
Miguel: Yo... solo trato de hacer feliz a mi hermana. Ella se merece todo lo bueno del mundo -dijo con un leve sonrojo mirando a la niña en su cama.
Hiro: Y haces un gran trabajo. Es reconfortante ver cómo cuidas de ella -dije para luego compartir un silencio cómodo.
Un momento agradable se extendió entre nosotros, y puede que sea algo arrogante decirlo pero... se sentía la conexión, casi palpable. Tal vez... era hora de dar el siguiente paso, de abrirse un poco más y ver si lo que ambos sentían podría ser algo más significativo. Hasta ahora Miguel ha dado indirectas muy directas pero no se ha animado... quizás yo debería animarme, y tener nuestra primera cita.
Miguel: Por cierto ¿alguna razón en particular para venir hoy?
Hiro: ¿Qué? ¡Oh si! Rosa me dijo que te trajera esto, es la nueva canción ¨Halfway There¨, para que la repases -dije dándole una hoja- y... ¿día ocupado como niñero de tu hermana?
¡¿En serio preguntas eso de todas las cosas para hacer conversación, Hamada?! ¡Puedes hacerlo mejor, maldición!
Miguel: No tanto, solo pasamos el día jugando y viendo películas de princesas. Eso mantiene contenta a cualquier niña -dijo con simpleza- ¿Qué tal tu día? Pareces cansado... tienes los ojos rojos ¿estabas llorando?
Hiro: Nooooo... yo solo... ¡Humo! Si, eso, mucho humo en la calle, irrita los ojos y todo eso, ya sabes -dije riendo incómodo.
Miguel: Oh, bueno, eso tiene sentido. Siempre hay algo de humo por aquí. -dijo mientras se encogía de hombros, aún con expresión de preocupación en su rostro.
Hiro: ¿Cómo vas con la música? -pregunté, buscando cambiar de tema. No quería profundizar más en mi trágica vida familiar. Ni siquiera se que mosco me pico para que me agarrara tremendo ataque de nostalgia ahora.... últimamente pasa demasiadas veces seguidas para mi gusto.
Miguel: Genial, he estado trabajando en algunas ideas por mi cuenta. En realidad, después de terminar con esto de repasar la letra de la nueva canción, me gustaría improvisar y grabar un par de demos -dijo pensando en voz alta, su entusiasmo era contagioso- creo que tengo una melodía en mente que les gustara a Rosa y a mi viejo.
Hiro: Suena bien. Siempre admiré cómo puedes mezclar esos sonidos únicos con tu estilo. -admití, sintiendo que hablaba desde el corazón.
Solo para querer morirme allí mismo al notar como se me quedaba viendo ¡qué vergüenza!
Miguel: Gracias, Hiro. Significa mucho venir de ti -respondió mientras miraba hacia abajo, su rostro sonrojándose levemente.
Un momento de silencio cómodo se alargó entre nosotros, como si el tiempo se hubiera detenido. Sentía que este era el instante perfecto para romper la barrera y dar el paso que tanto había estado considerando recientemente.
Hiro: Así que, estaba pensando... -empecé, nervioso, jugando con los bordes de mi abrigo- escuche que habrá un festival cultural de México este fin de semana en el parque del centro. Me preguntaba si te gustaría ir conmigo -solté la bomba sin más. De momento estaba probando las aguas, no era una cita a simple vista, solo una salida de amigos... si las cosas daban a más, genial. Y si no, no pasa nada, nunca se dijo la palabra cita.
Miguel: ¿Ir a un festival? -se sorprendió un poco, pero su expresión mostró el atisbo de una sonrisa en sus labios.
Hiro: Sí. Podríamos escuchar música, comer algo, comprar alguna chuchería, no lo sé... No es una gran cosa, pero pensé que sería divertido. -dije, sintiendo que mi voz se apagaba un poco al final.
Miguel: Eso suena genial, Hiro. -dijo, su sonrisa ahora abriéndose- y claro que... -dijo a punto de decir el sí.
Solo para que en ese momento sonó su celular. ¡Maldito aparato tecnológico quema cerebros que solo separa a las personas del mundo real y de las relaciones cada día más!
Miguel: Perdón, pero tendré que decir que no esta vez -dijo tras colgar, al parecer fue una llamada importante dado su reacción- saldré del país un par de días, tal vez tres. Se que es mucho pedir pero... ¿te puedes quedar con Coquito mientras estemos en el extranjero mi viejo, mi prima y yo?
... ¿Qué?
Hiro: ¿Cómo qué se van? -pregunte sorprendido- entiendo que no se lo pidas a Leo porque está como loco con su proyecto, pero esto creo que va más allá de mi labor de asistente ¿Y porque no lo hace Marco? -pregunté por inercia haciendo que él me mirara de forma inexpresiva.
Miguel:... ¿En serio confías en Marco para dejarlo a cargo de una infante? -pregunto haciendo que recordara ese detalle en particular. Marco es... Marco.
Hiro: ... Buen punto -dije mientras lo observaba hacer la maleta rápidamente- ¿Y exactamente a dónde vas?
Miguel: No lo sé, aparentemente vamos a cerrar un trato en Europa oriental. En Rumania. Será algo muy importante para la familia y la empresa -dijo en lo que empacaba la ropa.
A veces olvido lo compleja que era esta familia, como pasaron de solo centrarse en la música para luego dirigir una multinacional, luego meterse con el mercado de la biotecnología y ni hablemos de todo el asunto de Sunfire ¿ahora Rumania? Esta familia sale con algo nuevo cada día y honestamente debería empezar a hacerme a la idea de que los Rivera eran así y ya.
Hiro: ¿Y tardarán mucho? Se que dijiste que unos días pero...
Miguel: Posiblemente para mañana estamos de vuelta, pasado mañana si surge alguna complicación -dijo para luego tomarme de las manos- se que te pido mucho, pero por favor, Coquito confía en ti, te quiere. Me ayudarías mucho si se queda contigo y la tía Cass, y del trabajo no te preocupes, solo debes ocuparte de mi hermanita y nada más -prácticamente me rogó esperando que dijera que sí. Rayos, eso era lo que yo quería sacarle a él esta vez.
Pero bueno... supongo que no me queda de otra. Y técnicamente me estaba regalando unos días libres ¿Qué tonto no lo aprovecharía?
Hiro: Nada de pedirme mucho, lo haré con gusto -dije antes de solo sonrojarme al sentirme atrapado entre sus brazos en un reconfortante abrazo. Que poco a poco paso de ser cálido a asfixiante- Miguel... espera... no puedo respirar...
Miguel: ¡Chino hermoso! ¿Por qué eres bien pinche abrazable? -pregunto feliz- Muchas gracias, podría besarte.
Espera ¿que? Oh no, en serio está acercando sus labios a mi rostro ¡esto va muy rápido!--- y acabo de decepcionarme, acabó siendo un beso en la frente. Espera. ¿quería más que eso? ¡Me lleva la que...!
Miguel: Gracias, te debo uno. Cuídate Coquito, tu hermano te ama -dijo despidiéndose de la niña que al parecer se despertó por todo el ruido antes de solo cerrar la puerta e irse.
... A ver, a ver ¿Qué paso?
Hiro: ... No es lo que tenía en mente, pero no me quejo -dije solo decidiendo echar tierra al asunto. Antes de notar a la niña que ya estaba guardando sus cosas en una mochila... ¿Qué tan acostumbrada estaba a los niñeros para que esto sea normal?
Coco: Tu le gustas -dijo para mi sorpresa mientras guardaba un cuaderno de dibujo- mi hermano cree que eres lindo, suavecito al abrazar y que tienes buen trasero. Lo leí en su diario.
Ok... de todo eso solo puedo decir que... una niña de cinco años no debería conocer esa palabra.
Hiro: Cocó, lo último estás muy chiquita para estarlo diciendo -dije en lo que ella solo asintió- bueno, ¿Qué te parece si te llevo al Café, y merendamos? Mi tía hace un excelente pastel de chocolate como sabes -sugerí en lo que la infante en respuesta levantó los brazos pidiendo que la cargara.
Cosa que no me negaré que lo hago con gusto, era muy tierna.
Hiro: Entonces... ¿Tu hermano tiene un diario? -pregunté con curiosidad con la pequeña en brazos y con su mochila en uno de mis brazos.
Coco: Si, cree nadie sabe que lo tiene, a veces, cuando estoy aburrida, lo leo con una caja de jugo de fresa y galletas de animalitos -confesó como si nada- yo puedo leerlo porque tengo un trato con Dante. Le doy de comer y él me lo da, Dante lo cuida -admitió señalando al perro que solo nos seguía por detrás con la misma mirada perdida de siempre.
Menudo perro guardián.
Hiro: E imagino que tu hermano ni nota que lo lees.
Coco: No escribe todo el tiempo. Solo para escribir cosas vergonzosas que le dan pena o que lo harían morirse de pena si lo saben otros. A veces exagera, llega a ser muy dramático -dijo sacándome una risita.
Hiro: ¿De verdad?
Coco: Si, tiene miedo de decirte que le gustas porque dice que seguro le dices que no y eso lo haría llorar -reveló para mi sorpresa.
Hiro: ¿Que...? ¿Le gusto? -Me quedó la boca abierta. No podía creer lo que decía Coco. Era casi como si un pequeño rayo de luz hubiera atravesado la neblina que me rodeaba en estos últimos días y ahí estaba. Miguel, el chico que me hacía sentir cosas raras y maravillosas, tenía miedo de acercarse a mí. La idea me sorprendió y me llenó de algo cálido por dentro.
Coco: Sí, lo dice en su diario. A veces se siente muy raro y dice que tú eres como un sol y que los demás son como sombras. Así que... está "muy confundido" -dijo haciendo comillas en el aire, lo que me hizo reír un poco más- es lo primero que dice luego de que eres lindo, que eres suave para abrazar y...
Hiro: ¡Lo último no hace falta que lo digas! -dije tapándole la boca con una mano y con un sonrojo.
Ella era tan honesta y directa que no podía evitar sentirme cada vez más intrigado. Era como si la pequeña estuviera desnudando los secretos más profundos de Miguel, y todo esto mientras lo confesaba directo del diario del chico de todas las cosas.
Hiro: Bueno, tu hermano no debería preocuparse tanto. No le diría que no. -dije con una sonrisa tímida y despreocupada. Al mismo tiempo, me daba cuenta de cuánta verdad había en sus palabras. Miguel con esa preocupación, con esos sentimientos; podíamos estar en la misma sintonía y, sin embargo, ninguno de los dos se atrevía a dar el primer paso.
Coco: ¡Entonces deberías decirle! -exclamó, moviendo sus manitas mientras hablaba, claramente emocionada por la idea de ver a su hermano feliz- la próxima vez que lo veas, dile que le gustas y que pienso que sería lindo verlos juntos -dijo dejándome boquiabierto.
La pequeña había sido mucho más valiente que yo. ¿Cómo era posible que ella, con tan solo cinco años, pudiera ser tan asertiva? Me reí por lo bajo al pensar en su enorme confianza. Su lógica era simple y, a la vez, fascinante. La vida en su mundo de fantasía era completamente diferente, un lugar donde no había que pensar demasiado, solo actuar y dejarse llevar.
Hiro: Lo tendré en cuenta, Cocó, pero no quiero presionarlo. A veces, las cosas llevan tiempo, ¿sabes? -intenté explicarle, aunque en el fondo no me sentía tan seguro de eso. A medida que el tiempo pasaba junto a ella, el deseo de aclarar las cosas con Miguel crecía más y más.
Coco: Me gusta que seas amable. Mi hermano nunca está triste contigo, siempre sonríe cuando habla de ti -dijo mientras jugueteaba con el cierre de su mochila, su mirada fija en el camino que teníamos por delante.
Hiro: ¿De verdad? -pregunté, sintiendo como una pequeña brisa de esperanza nacía en mí. La idea de que Miguel sonriera por mí, pues hacía todo un sentido.
Coco: Sí. Y cuando ríe, es la mejor sonrisa del mundo -asintió convencida, su tono sincero me hizo sentir un poco más ligero por dentro- así que... ¿me vas a dejar ayudar a elegir lo que vamos a comer?
Hiro: ¡Por supuesto! -dije, riendo mientras la llevaba con brazos alzados como si fuera una pequeña princesa entre risas y saltos hasta que llegamos a la cafetería de mi tía.
Vaya... creo que acabo de ser engañado por una niña... ¿todas las mujeres de la familia Rivera eran aterradoramente inteligentes de nacimiento?... Mejor no pensar eso.
_______________________________________________________________________
(General Pov)
(Mansión Rivera, San Fransokyo, USA)
Héctor: Bienvenidos a la mansión de la familia Rivera, Billy y Spencer. Mi casa es su casa, espero que se sientan cómodos el tiempo que vivan con nosotros -dijo sonriendo mientras se adentraba a su hogar seguido por el joven, el fantasma y sus dos empleados- veré que tu entrada a la universidad de arte sea lo más pronto posible, Spencer -exclamó para emoción del joven castaño.
Al final como era de esperarse las despedidas entre los familiares y los amigos del chico fueron tristes, hubo lágrimas, reclamos, promesas de que llamarían seguido, se contactaran, visitarian en el futuro y todo eso. Lo que si Héctor debía confesar, solo fue una pérdida de tiempo que duró casi una hora. Lo importante es que ya este requisito de la fiesta estaba listo, y de paso sacó un posible beneficio futuro y se reencontró con un viejo amigo, un ganar-ganar.
Spencer: Yo aun sigo creyendo que esto es demasiado, es un sueño hecho realidad, Don Héctor.
Héctor: No me des las gracias, lo que sea por la familia de mi querido amigo Billy -exclamó guiñandole un ojo al fantasma que solo sonrió.
Billy: Y yo también estoy agradecido por todo, Héctor. Ya quiero empezar a trabajar en mi triunfal retorno. Aunque sigo diciendo que podíamos usar mi cabina en mi mansión, la verdad...
Rosa: No se preocupe, señor Cobra, nuestras instalaciones son de última generación -dijo saliendo de un pasillo para sorpresa de quienes no la conocían- Carl, Hoover, ayuden a nuestros invitados a instalarse. Tío, tenemos que hablar sobre una posible oportunidad de oro, o en el peor de los casos un chance donde igual podamos obtener ganancia al sencillamente evitar una crisis -dijo para cansancio del CEO.
Héctor: Oh, Dios mío, ¿Ahora qué hice? -pregunto más por costumbre que por otra cosa, haciendo que más de una ceja se arqueara.
Rosa: Tu no, alguien peor, alguien que no comprende ni sabe nada sobre la política o como funciona el equilibrio mundial. Un hippie mochilero -dijo para espanto del mayor.
Héctor: Oh, Dios mío, ¿Qué hizo mi yo de veinte años? -pregunto en lo que era jalado de la oreja por su sobrina y siendo llevado fuera de la casa nuevamente.
Rosa: Hablémoslo en privado, el avión nos está esperando -mencionó antes de voltearse y ver a los nuevos habitantes de la casa- soy Rosa por cierto, espero que nos llevemos bien. Carl les explicará las reglas de la casa, siéntanse en su casa, Spencer. Tu también, Billy -exclamó como saludo y de paso despidiéndose también..
Siendo todo lo que ambos pudieron hacer solo despedir con la mano a tío y sobrina quedándose con la casa prácticamente para ellos solos... sin saber exactamente cómo tomar eso ¿era una prueba de confianza acaso?
Spencer: Sabes... Algo me dice que ella es quien tiene más autoridad no solo en la casa, sino en toda la empresa también -dijo mirando al par irse.
Billy: ¿A poco tu mamá no tiene más autoridad en casa?
Spencer: ... Buen punto -admitió.
Mientras que por su parte tío y sobrina ya se encontraban en la limusina camino al jet privado de la compañía. De paso con Rosa explicando toda la situación con el hotel transylvania, siendo en eso, investigar, en lo que estuvo invirtiendo Rosa su tiempo las últimas horas.
Héctor: Ya veo -exclamó prendiendo un cigarro- un hotel para monstruos, monstruos reales... en Transilvania de todos los lugares ¿Qué cliché, no?
Rosa: Ya borré toda la publicidad, y me asegure de convencer a los medios y a cualquier cibernauta que fue solo una broma de internet. De paso elimine las cuentas de redes sociales del hippie, un tal Jonathan Loughran. Para evitar que insista con el patrocinio -explico mientras abría la ventana.
No tenía problema con los vicios de su tío, pero no le gustaba ser partícipe en algunos de ellos, el cigarro era una de esas cosas.
Rosa: Esta es su foto de perfil, a simple vista diría que es... un tonto -dijo mostrando la imagen a su tutor legal.
Héctor: ¿Y ya sabes dónde encontrarlo?
Rosa: ¿Bromeas? Tengo la dirección del hotel en Rumania de la publicidad borrada, pasando el cementerio y bosque fantasmal, donde supuestamente hasta hay carteles para que la gente no se pierda -dijo mostrando un mapa con todo y ubicación GPS.
Héctor: Pues es hora de unas vacas -dijo sonriendo.
Rosa: Yo lo llamaría más bien... un viaje de negocios, querido tío. Nos llevaremos a Miguel con los talismanes que tenemos hasta ahora y que Judy se encargue de administrar la empresa mientras no estamos, que espero solo sean un par de días. Ya todo está listo para partir, Miguel nos espera en el avión -dijo orgullosa de su usual eficiencia.
Mientras la limusina avanzaba por las calles iluminadas de San Fransokyo, el ambiente en el interior era una mezcla de emoción y nerviosismo. Héctor, mirando por la ventana, reflexionaba sobre el viaje a Rumania y cómo este pequeño desvío de la rutina podría convertirse en una aventura inesperada. Rosa estaba atrapada entre los papeles que había preparado.
Rosa: Tío, lo más importante en este viaje es mantener la calma ante cualquier situación. Aunque el hotel parece tener un ambiente de "turismo de terror", es vital que no nos dejemos llevar por los clichés -dijo acomodándose las gafas.
Héctor: Desde luego, no quiero que nos vean como un grupo de excéntricos de ciudad. Asegurémonos de que nuestra llegada sea lo más discreta posible.
Rosa: Exactamente. La idea es determinar si este "hotel de monstruos" tiene un potencial viable para la inversión o si es solo un truco publicitario. Si Jonathan Loughran realmente quiere hacer de este lugar un destino turístico, necesitamos saber si sus intenciones son serias o si simplemente está buscando ganancias rápidas con algo que no tiene pies ni cabeza.
Héctor: Y si resulta que es un fraude, vamos a asegurarnos de que nadie se aproveche de esa gran oportunidad. No quiero que un grupo de estafadores arruine nuestras ambiciones. Nos estamos haciendo un nombre sólido en la industria, y no permitiré que alguien lo eche a perder por su irresponsabilidad.
Rosa: Lo tengo claro. Además de investigar el lugar, debemos llevar un equipaje mínimo para no levantar sospechas. Está claro que no podemos presentarnos como un gran imperio en un pueblo pequeño -dijo dando fin a la charla de momento.
Héctor miró a su sobrina con admiración. Ella había tomado las riendas en lo respecto al mundo financiero y empresarial desde que era muy joven, y su dedicación y habilidades eran claras. La confianza de Rosa en su propio juicio era reconfortante, aunque él seguía siendo el adulto en la ecuación.
Y ahora, acaban de volver a la ciudad solo para viajar otra vez, fuera del continente esta ocasión. Vaya que no se podía tener un solo día de tranquilidad, pero cuando se trata de sueños, ya podrás descansar cuando estés muerto.
Chapter 24: Capitulo 22: Abre la puerta a la fantasía
Notes:
(See the end of the chapter for notes.)
Chapter Text
(General Pov)
(Hotel Transylvania, región de Transilvania, Rumania)
Comparado a lo que fue el viaje en jet privado, bien la familia Rivera en general podía admitir con facilidad que una de las mayores ventajas que notaron desde el comienzo cuando tomaron control de Krei Industries y la renombraron como Rivera Solutions fue la de adquirir el avión de la compañía y usar lo ultimo en tecnología para darle mejoras (porque había que ser sinceros, el viaje en avión comercial por lo general es una tortura a menos que sea primera clase, e incluso así es una estafa pagar tanto solo por lo mismo).
De allí en más seguir las indicaciones de los anuncios publicitarios borrados por Rosa fue sencillo ciertamente. El hotel en sí está construido como un castillo. Ubicado en las afueras de Transilvania, rodeado por 400 acres de un bosque encantado con la tierra de los no muertos alrededor, altas montañas y un foso lleno de pirañas; el hotel en sí está aislado por el foso y se encuentra en una isla en él, con solo un puente construido hasta el lugar. Lo que hace que esté totalmente aislado del resto del mundo e inaccesible para los humanos... hasta hace poco recientemente.
Héctor: Menuda casita -exclamó silbando impresionado al ver el tamaño de la construcción. Esto queriendo disimular la emoción que sentía en todo su ser, durante gran parte de su juventud y vida adulta dedicó su vida a encontrar algo como ese lugar.
Y tenerlo en frente suyo, era sencillamente algo difícil de describir (y si, el hombre sabía de la existencia de los aliens, pero esto era diferente).
Miguel: Lástima que aún no avanzo tanto con Hiro, me hubiera gustado tenerlo conmigo en este momento -mencionó su hijo mayor mientras cruzaba los brazos detrás de su cabeza.
Rosa: Ya tendrás tu oportunidad en la fiesta de té, Romeo -dijo acomodando sus gafas.
Héctor: Si, si juegas bien tus cartas en un solo día avanzarás del primer escalón hasta el quinto o sexto -dijo divertido.
Miguel: ¿Y cuál es la diferencia, jefe?
Héctor: Sencillo, que pasamos de los besos a los toqueteos subidos de tono y si de verdad tienes talento con la labia y la lengua bueno, puede que tengas suerte y te deje ver su abdomen y si subes más... -explicó antes de que Rosa le jalara la oreja a su tío.
Rosa: No te pases del escalón dos, los besos -mencionó casualmente- lo último que necesitas es que la tía Cass te ponga en el mismo saco que a tu papá.
Y considerando que con eso se refería a que la mujer que era legalmente la tutora legal de Hiro lo recibiera arrojándolo un sartén, una olla o más probablemente, diferentes tipos de cuchillos de cocina, lo mejor era no arriesgarse, hombre prevenido vale por dos.
Miguel:... Anotado, por cierto... hay que reconocerlo, debe haber magia involucrada para esconder todo esto. Por que al menos por satélite alguien debería haber encontrado este castillo -dijo en lo que terminaba de cruzar el puente que conectaba el hotel de monstruos con el mundo exterior.
Héctor: ¿O quién sabe? Tal vez sencillamente ingenio geográfico -exclamó encogido de hombros para luego entrar al lobby.
Siendo allí donde fueron recibidos por una vista fuera de este o de cualquier mundo posible (de momento). Era todo un ajetreo como era típico de cualquier hotel que fuera medianamente popular, con la diferencia de que los huéspedes eran tal cual, monstruos. Zombis botones, brujas mucamas, esqueletos que hacían de banda acústica, y eso solo por mencionar algunos.
Héctor: Es bellísimo -dijo limpiándose una lágrima luego de que su sobrina le pasara un pañuelo.
Rosa: ¿Otra fuga de tus lagrimales, tío?
Héctor: Es como lo que tu sientes cuando sube el valor de las acciones de las empresas en las que invertiste -dijo para que ahora fuera ella quien soltara un suspiro de ensoñación.
Aunque una cosa era segura tanto Héctor como su hijo y su sobrina podían compartir la emoción expectante de lo que les podía esperar en este lugar. Desde las lámparas que colgaban del techo, hechas de calaveras brillantes, hasta la alfombra que parecía moverse ligeramente, como si tuviera vida propia. Era un lugar donde lo sobrenatural era la norma, y el miedo y la sorpresa coexistían en una danza constante.
Y fue justo allí que apareció a quien venían a buscar.
Johnny: No puede... ¡Si, al fin! Humanos! -dijo el tipo que parecía a punto de dormirse en la recepción antes de acercarse a los visitantes- estuve intentando promocionar el hotel por semanas, ya era hora de que llegaran humanos. Soy Johnny, el coordinador coordinado de relaciones humanas del hotel, como los primeros humanos en venir desde que el hotel le abre la puerta a los humanos les digo ¡mucho gusto!
Rosa: Ah, así que eres tú... -dijo para acto seguido darle una bofetada al pelirrojo de cabello rizado para que acto seguido su tío también lo abofeteara, y este en respuesta (y por reacción más que todo) abofeteó a un zombi que iba pasando detrás suyo.
Johnny: Lo siento Clifton, fue sin querer queriendo -dijo encogido de hombros al zombi que solo hizo un quejido antes de seguir con lo suyo- un momento ¿y eso porque fue?
Rosa: Sencillamente por ser un tonto -exclamo con fastidio.
Murray: Eso no es novedad -dijo de pasada una momia mientras comía insectos.
Héctor: Una momia real -dijo sin palabras en lo que su sobrina le jalo la oreja de nuevo.
Rosa: Tío, concéntrate -mirando a Johhny- ¿Quién es el gerente del hotel y donde podemos encontrarlo?
Johnny: Emm... ¿Drac? -llamó a la nada aparente para que luego cierta figura prácticamente se apareciera de la nada mientras se encontraba absorto en los reportes que le eran dados por armaduras encantadas.
Y por la vestimenta y la apariencia fue sencillo para la familia mexicana saber de quién se trataba. Una de las criaturas más fantásticas de los mitos y el folclore a nivel mundial conocido por todos pero que hoy en día era solo un mito que aparentemente era más real de lo que se creía, Drácula estaba en la casa.
Drácula: Las armaduras me dijeron que había un alboroto desde mi estudio ¿Qué hiciste ahora? -preguntó a su ¨coordinador de relaciones humanas¨ quien rápidamente se puso a la defensiva.
Johnny: Yo no hice nada, fueron ellos los que... -dijo señalando a la familia Rivera. Los cuales estaban los tres haciendo reverencia al vampiro- ¿pues ya que? gente, les presento a mi genial suegro, el Conde Drácula -presentó con emoción al ente que solo rodo los ojos.
Héctor: Así que el legendario conde es real, es un honor conocer a alguien de un linaje tan noble y antiguo -exclamó con respeto para gusto del monstruo.
Drac: Y esto me confirma que no es que todos los humanos le hayan perdido el respeto a la nobleza, es solo que a ti no te importa, Johnny -dijo al joven que solo se ríe incómodo.
Johnny: Sabes que me gusta ser más informal, ¿Por qué crees que me aseguro que todos sepan lo cool que eres, querido suegrito? -pregunto haciendo suspirar al conde a la vez que los tres morenos se miraron entre sí con sorpresa.
El tipo se casó con la hija de Drácula. O es muy valiente o muy tonto.
Rosa: Lord Drácula -dijo llamando su atención- es un placer, mi nombre es Rosa Rivera. Venimos de parte de Rivera Solutions, una empresa en el extranjero multinacional... nos gustaría hablar de un posible negocio con usted.
A lo cual el vampiro miró a la joven con un interés renovado, su expresión pasó de la sorpresa a la curiosidad, y luego a una ligera sonrisa.
Drácula: ¿Un negocio? Por supuesto, acompáñenme -pidió en lo que guío a los visitantes a la biblioteca del hotel- ¿de qué se trata?
Rosa: Antes que nada, seremos sinceros con usted y su yerno. Nosotros eliminamos cualquier publicidad en línea relacionada al hotel las ultimas horas
Johnny: ¿Qué? ¿Por qué? -preguntó con incredulidad.
Drácula: Johnny, tranquilo, déjalos explicarse, seguro tienen una buena razón.
Héctor: Y la tenemos, salvarles la vida -dijo mirando al pelirrojo- escucha, muchacho, se nota que tienes buenas intenciones al demostrar que los monstruos son geniales y que pueden convivir con los humanos, pero, hablando a calzón quitado, no todos los humanos comparten esa mentalidad.
Drácula: Somos conscientes de eso -dijo aclarándose la garganta- yo mismo construí este hotel para proteger a mi especie de la humanidad por más de un siglo, pero tras conocer a Johnny... quise darle una oportunidad al mundo humano.
Rosa: Cosa que entendemos y consideramos algo noble de su parte, mi Lord. Pero... el modo en que lo hicieron fue más perjudicial que cualquier otra cosa -dijo para que luego sonará el celular de Héctor.
Siendo quien se comunicaba una de sus empleadas con la relación más compleja de trabajo, Sirque, nombre civil: Celine Simard. Una ex convicta que trabaja para la compañía en secreto luego de que Rivera Solutions pagara su fianza y en pocas palabras la atara a la empresa con un contrato, uno que debido a ciertas pautas y condiciones la acróbata y física sabía que era mejor obedecerlo.
Y entre sus deberes, además de ser cómplice del hijo mayor cuando jugaba al ladrón buscado internacionalmente, también hacía de guardaespaldas incógnito de la familia para ocuparse de ciertos asuntos lo más por debajo de la alfombra posible, como era el caso en esa ocasión.
Héctor: ¿Diga? Sirque, querida ¿pasó algún imprevisto? -preguntó poniendo la llamada en altavoz.
Sirque: Jefe, tenía razón, el mandibulon de la CIA del que investigó la señorita Rosa que ha estado tratando de infiltrarse y robar información de la empresa las últimas semanas intentó llegar al hotel siguiéndolos, no se preocupe, ya lo mandé por donde no era, cayo en el foso del castillo -dijo haciendo al mayor suspirar antes de ver al conde.
Héctor: ¿De casualidad el foso que rodea el castillo tiene pirañas o caimanes tal vez? -pregunto en lo que el noble se encogió de hombros.
Drácula: Un tanto de las dos, idea de mi hermana Lydia.
Héctor: Excelente, eso hace que la noticia que me dio mi guardaespaldas autónoma sea aún más feliz -exclamó sonriendo- el asunto es que tal vez sea verdad que su última experiencia en el mundo exterior fue grata Lord Drácula, vimos los videos de su visita al pueblo en Halloween, pero.... esas personas fanáticas de los monstruos en realidad solo son una fracción muy pequeña del mundo en general -mencionó.
Más que todo pensando en el tipo que los había seguido y se había vuelto una espina en su zapato desde hace un tiempo recientemente. Pero sería más exacto decir que dicha piedra volvió a meterse en su zapato debido a que ya se habían conocido años atrás, aunque muy posiblemente ese agente, Stan Smith, nunca supo quién fue Héctor realmente, en esos días su identidad siempre permaneció oculta sin importar lo que... tiempos pasados que de una u otra forma volvían al presente una vez más.
Drácula: Lo sé, no sé si ya vieron a la familia humana que vive cerca de mi hotel, el marido y la hija son agradables, el problema es la esposa -habló antes de llevarse una mano a la cabeza solo por la mención.
Rosa: Si, investigue sobre ellos. No dicen nada de la existencia del hotel principalmente porque saben que nadie les creería -dijo acomodando sus gafas.
Drácula: De hecho admiro la resiliencia del marido, dado que, aunque no menciona el hotel, la esposa sí insiste en que los monstruos existen.
Johnny: ¿No me habías dicho que yo era el primer humano en encontrar el hotel? -pregunto extrañado.
Drácula: Y aun lo eres, es solo que una cosa es encontrar y otra que te guíen hasta él. Y otra aún más fácil verlo porque vives cerca -respondió con fastidio- si no los mencione antes es porque bueno... solo hablar de esa mujer me da migraña, Sólo la tolero porque con todo, su marido y la niña están más dispuestos a interactuar con nosotros.
Héctor: Y eso está bien, pero de eso a anunciar a todo el planeta que los monstruos son reales y darles todo un mapa detallado hasta el hotel es como pasar de nadar en un riachuelo a una piscina olímpica... y ahogarte en el primer intento -aclaró de forma contundente.
Rosa: El mundo exterior sigue siendo muy peligroso para ustedes. Apenas fue que evite que algún gobierno se tomara en serio la publicidad de su yerno para creer realmente que el hotel existe -mencionó casual.
Héctor: O al menos algún organismo dirigido por gente seria.
Drácula asintió lentamente, su rostro reflejaba una mezcla de preocupación y resignación. La idea de exponer a su comunidad a los peligros del mundo humano era algo que había temido desde el principio. A pesar de su deseo de conectar con los humanos, la realidad de la intolerancia y la ignorancia que existía en el mundo exterior era un recordatorio constante de los riesgos que enfrentan.
Drácula: ... Dicen que de haber resultado el plan de Johnny... ¿El hotel habría sido atacado?
Rosa: No necesariamente, pero si es posible, del mismo modo hubieran intentado infiltrarse con el fin de espionaje
Héctor: Un ejemplo es el mandibulón de la CIA que mencionó mi guardaespaldas. Quien gracias a ella, ahora mismo es comida de pirañas -dijo con una singular alegría. Aunque sabía que haría falta más que eso para deshacerse de Stan, la hierba mala nunca muere.
Drácula: Entiendo su preocupación, y aprecio su sinceridad. Mi intención nunca fue poner en peligro a mi familia o a mis amigos. Este hotel fue creado como un refugio, un lugar donde los monstruos pudieran vivir en paz. Pero a veces, el deseo de abrir las puertas de nuestro hogar a los humanos puede llevarnos a situaciones peligrosas -mencionó antes de solo suspirar- Johnny muchacho. Puedes irte. Quiero hablar con estas personas en privado.
Johnny: Yo, si... claro, Drac, lo que digas -exclamó antes de retirarse cabizbajo.
Drácula: Johnny, no estoy molesto por lo que pasó, es obvio que tú tampoco previste ese detalle, aflójate -dijo al joven que solo hizo oídos sordos antes de perderse de vista, haciendo suspirar al monstruo- muy bien... escuchen, iré directo al punto. Si lo que quieren es ofrecerme algún modo para asegurar la seguridad del hotel en tiempos modernos, los escucho, a fin de cuentas... soy abuelo ahora.
¨Vaya, toda persona, incluso quien parece invencible, tiene su punto débil¨, fue lo que pensaron los tres humanos al escuchar tal situación. Un nieto del conde, ese niño fácilmente puede ser de los seres más protegidos que pueden existir en la actualidad.
Héctor: Por los hijos y los nietos se hace lo que sea, ¿No? -pregunto comprensivo.
Drácula: Hablas con un profesional del tema -respondió con calma y algo de tristeza- hablamos de que la única razón de que construí este hotel al comienzo fue para asegurar la seguridad de mi adorada hija -mencionó con cierto atisbo de nostalgia que hizo arquear más de una ceja.
Rosa:... ¿Algún incidente del pasado, milord? -pregunto haciendo suspirar al monstruo.
Drácula: Mi esposa, Martha -exclamó para luego comenzar a narrar su triste historia.
Martha fue el gran amor del conde y la razón por la cual decidió alejarse de los humanos cuando la tragedia ocurrió, lo suyo fue amor a primera vista, un clic de una vez en la vida. Pero en tiempos antiguos, cuando los humanos eran aún más supersticiosos y temerosos de lo que no entendían, su relación fue vista como una aberración.
Los aldeanos, asustados por la idea de un vampiro que se enamoraba de una mujer mortal (debido a que para los lugareños Martha era una noble humana), comenzaron a murmurar y a difundir historias. Una noche, llegaron en una turba embravecida y mientras el conde intentó apaciguarlos, fue que ocurrió. La ira de la multitud fue feroz, y aunque trató de salvarla, fue demasiado tarde, solo halló el cuerpo sin vida de su amada dentro de su mansión en llamas. Esa noche la perdió, y con ella, una parte de su ser. Siendo todo lo que pudo salvar lo único que le quedaba, su hija.
Rosa:... Lord Drácula, voy a hacerle una pregunta. Y le pido que por favor no se enoje ni se altere por dicho cuestionamiento... -dijo al terminar de escuchar la historia con cierta sospecha- ¿Está completamente seguro que el asesino o asesina de su esposa... Era un ser humano?
Drácula: ¿A qué te refieres, mi niña? Claro que fueron humanos -dijo con cierta incredulidad- fueron aldeanos que, movidos por el miedo, nos creyeron una amenaza.
Rosa: Corrección, los humanos eran los únicos que usted sabía que estaban allí... Pero piénselo un momento. La prioridad de su esposa era proteger a su hija recién nacida. Pero ustedes son vampiros, no humanos comunes y corrientes -declaró con seriedad- ¿Por qué no usó su fuerza y velocidad para romper la pared y salir huyendo? Una casa en llamas valía poco en comparación a su bebé, como para decir que fue por algo sentimental. Además ¿Cómo fue que un humano llegó hasta allí con la casa en llamas y todos los aldeanos afuera de la mansión?
Drácula:... ¿A qué te refieres? -pregunto cambiando a una actitud seria y recelosa.
Rosa: Habló de que, claro, los humanos los atacaron en ese entonces movidos por el miedo -empezó a explicar- simples humanos que a lo mucho tenían tridentes y antorchas para linchar, como tal no eran una amenaza. Mi pregunta es, los vampiros físicamente son superiores en todo sentido, incluso una mujer como Martha que según nos cuenta, era una pacifista, aun así era superior a cualquier humano incluso después del embarazo y del parto... Mi pregunta es, si, los humanos querían matarla, pero... ¿Podían hacerlo? ¿realmente podían?
Drácula miró a Rosa con una mezcla de sorpresa y desconfianza. Su rostro, que antes había estado marcado por la nostalgia, ahora reflejaba la confusión y el dolor de recuerdos pasados. La pregunta de Rosa resonó en su mente como un eco, desenterrando viejas heridas que había intentado olvidar.
Drácula: ¿Qué estás insinuando, niña? -dijo con un tono que oscilaba entre la curiosidad y la defensiva.
Rosa: Solo estoy pidiendo que considere la posibilidad de que quizás no eran solo humanos los que estaban allí esa noche. Tal vez hubo algo más –respondió, manteniendo su voz firme pero suave.
Héctor, que había estado observando la interacción con creciente interés, decidió intervenir a favor de su sobrina.
Héctor: Mi Lord, lo que Rosa sugiere es que, aunque los humanos actuaron por miedo, no necesariamente fueron ellos quienes causaron la muerte de su esposa. Tal vez hubo fuerzas en juego que escapaban a su control.
Drácula: Eso es absurdo. Nadie más estaba en la mansión esa noche. Solo eran aldeanos enfurecidos.
Rosa: Aquí la cuestión no es que su esposa murió, la pregunta es cómo murió -aclaró- si, seguro fue una estaca al corazón, es el método más rápido. Pero... ¿Había un humano con la suficiente fuerza y destreza para hacerlo? Y si lo había ¿Por qué no los atacó a usted y su hija para terminar el trabajo? ¿Dónde estaban los monstruos sirvientes qué seguro tenían en su antigua casa? ¿Alguna araña siquiera vio el suceso? ¿Alguna mucama? ¿Cómo un humano se acercó a Martha en primer lugar para dar el golpe?
El vampiro se cruzó de brazos, mirando a la joven con una mezcla de frustración y fascinación. La idea de que la muerte de su amada pudiera haber sido parte de un plan mayor lo perturbaba, pero había algo en la forma en que ella plantea su argumento que lo obligaba a pensar.
Drácula:... Eso es... Muy extraño...
Rosa: Si quiere mi opinión... No, quién mató a su esposa no fue un humano. Debió ser alguien lo bastante cercano a ella como para que bajara la guardia, alguien a quien monstruos que solo eran sirvientes o de una raza inferior obedecieran si les ordenaban huir o solo alejarse, alguien que sí tenga la fuerza y la velocidad para dar el golpe y escapar fácilmente después, logrando culpar a los humanos, y alguien con la autoridad de lograr que todo quede escondido bajo la alfombra -declaró punto tras punto de forma contundente- otro monstruo de una raza diferente no pudo ser porque los rastros serían evidentes... Lord Drácula,... A su esposa la asesinó otro vampiro.
Drácula se quedó en silencio, sus ojos fijos en Rosa mientras las palabras de la joven resonaban en su mente. La idea de que un miembro de su propia especie pudiera haber causado la muerte de Martha era un concepto que nunca había considerado. Durante mucho tiempo, había cargado con el dolor de la pérdida, culpando a los humanos por su ignorancia y miedo, pero ahora se encontraba ante una nueva perspectiva que amenazaba con desmantelar todo lo que había asumido.
Drácula: ¿Un vampiro? -Su voz era un susurro, casi perdido en la inmensidad de la biblioteca. Se pasó la mano por el cabello, tratando de despejar la confusión que lo invadía.
Rosa: Sí, mi Lord. Piense en todo lo que ha dicho. La rapidez con la que llegó a su casa, la forma en que los aldeanos estaban agitados... Tal vez había alguien que manipulaba la situación desde las sombras. Alguien que deseaba que su familia sufriera.
Miguel: Hay muchos vampiros que han vivido en la oscuridad, Lord Drácula -dijo metiéndose en la conversación- algunos de ellos pueden haber tenido motivos para desearle mal a tu clan, o incluso a ti. La historia de su linaje es legendaria, y seguramente no todos los vampiros ven con buenos ojos la convivencia con los humanos. Podría ser que alguien quisiera hacer un ejemplo de tu familia.
El noble se masajeó la sien, sumido en sus pensamientos. La idea de que un traidor pudiera haber estado entre ellos lo llenaba de una rabia que no había sentido en siglos. La traición de un ser cercano, de alguien que había compartido su mundo y su vida, era una herida que dolía más que la pérdida de su esposa.
De allí que dejándose guiar por la furia, en un parpadeo se fue a toda velocidad a la recepción del hotel guiado por una furia ciega poco normal en él a los ojos de los demás monstruos. Todo con el fin de poner sus manos encima sobre cierto artefacto que estaba allí guardado y que hacía tiempo no usaba, el espejo vampírico con el cual convocó una reunión de emergencia una vez cerró la cortina alrededor del espejo para tener privacidad, llamando a todos los vampiros posibles.
Tanto familia como miembros del concejo vampiro.
Vampiros del concejo: Drácula ¿Qué sucede? ¿Con qué autoridad haces esta reunión? -hicieron la pregunta algunos de los monstruos más antiguos que conformaban este grupo. Encargados de manejar todo asunto relacionado a los vampiros y monstruos a su cargo.
Gene: Si, Drac. Estaba a mitad de un videojuego muy entretenido -exclamó el vampiro que era tanto tío suyo como de su hija.
Lydia: Espero que tengas una buena razón para importunar -dijo su hermana mayor con el ceño fruncido- estaba...
Drácula: ¿Quién fue...? ¿Quién de ustedes lo hizo...? -pregunto hecho una furia para sorpresa de todos- ¡¿Quién de ustedes asesinó a Martha?! -exigió para sorpresa de todos.
Los murmullos se extendieron rápidamente entre los vampiros del consejo, cada uno intercambiando miradas de sorpresa y confusión. La atmósfera en la sala se tornó tensa, y el eco de la voz de Drácula resonaba con una furia que hacía tiempo no mostraba.
Lydia: Hermano, ¿De qué estás hablando? -pregunto en shock.
Gene: Sobrino, ¿Qué pasó?
Drácula: No fue ningún humano... Nuevas pruebas apuntan a que el asesino de Martha no fue ningún humano... Fue un monstruo, un vampiro... Por lo tanto, uno de los presentes en esta reunión -explicó con una frialdad que incluso haría a los no muertos sentir escalofríos, como era el caso en ese momento.
Oh bueno, casi todos.
Lydia: ¡¿Qué?! -preguntó con indignación y el cabello en llamas de lo furiosa que se sentía. A fin de cuentas, Martha fue una buena amiga suya además de su cuñada.
Gene: Drácula, sabes que no pudimos ser Lydia ni yo -trato de razonar con su sobrino- nosotros, y tú papá, adorábamos a Martha.
Drácula: ... Cierto, adorabas a mi esposa... -dijo mirando de reojo la figura de su padre en el espejo- pero siempre estuviste en contra de sus ideas de hacernos más cercanos a los humanos, querido padre -exclamó con enojo miranda a Vlad quien parecía molesto, para luego solo ver con lástima a su hijo menor.
Vlad: Hijo, no mentiré que siempre pensé que Martha era demasiado optimista en sus pensamientos de ser cercana a los humanos, pero por todo el Inframundo, antes me corto la mano que ponerla encima a ella o a Mavis
Drácula:... Entonces responde ¡¿dónde estabas la noche que pasó?! -pregunto aun dudando de su progenitor que ni se inmuto ante la acusación.
Vlad: Cenando con Lydia, ella te puede confirmar -respondió a la vez que la vampiresa asintió.
Lydia: Hermano, tienes que tranquilizarte y enfriar la cabeza, también nos indigna oír que uno de los nuestros nos arrebató a Martha, pero enfadarse sólo entorpece más el averiguar quién lo hizo -dijo en lo que su hermano respiro hondo.
Drácula: Tienes razón, Lydia. Debo pensar con claridad. Pero la idea de que uno de nosotros haya traicionado a nuestra familia es inaceptable. No puedo permitir que esto quede impune.
Vlad: Lo recuerdo bien -menciono mientras divagaba- esa noche envié a Bela a llevarles un obsequio por su nueva casa a ti y Martha. Para celebrar el nacimiento de mi nieta.
... No hace falta decir que esa confesión hizo que más de uno de los presentes sintiera que su cerebro era rebobinado como un disco rayado.
Lydia: ... Bela, el monstruo murciélago sirviente tuyo, que es un extremista qué detesta a la humanidad y todo lo relacionado a ella... ¿Ese Bela, padre? -preguntó con una calma ciertamente aterradora.
Vlad: ... Lydia, cariño, ¿Sugieres lo que temo que sugieres?
Lydia: No sugiero... Afirmó -respondió con furia- solo piénsenlo, la muerte de Martha de la familia Drácula. La familia más importante en el mundo monstruoso. Fue el antes y después de llevar a los monstruos al aislamiento total. Separando por completo ambos mundos, el humano y el monstruo en su casi totalidad -dijo haciendo pensar a los miembros del concejo.
Vampiro C1: Nos aislamos de la humanidad por miedo a ser los siguientes.
Vampiro C2: Una decisión que si somos realistas no nos benefició para nada a largo plazo. Nos volvió temerosos y sobre todo, nos hizo ver débiles ante la humanidad
Vampiro C3: Una acción así... Solo beneficia a los puristas y los radicales que desprecian la raza humana... Y que ven como traidores a todo monstruo que busque relacionarse con humanos -exclamaron sus pensamientos en lo que Lydia y Gene solo proceden a observar con preocupación a la actual figura de mayor autoridad en el clan Drácula.
Quien se encontraba en una encrucijada emocional, sus pensamientos revoloteaban como murciélagos en la noche. La reunión del consejo había tomado un giro inesperado, y las verdades ocultas comenzaban a salir a la luz, revelando una red de traición y manipulación que amenazaba con desmoronar el delicado equilibrio que había mantenido a su comunidad a salvo durante décadas.
Drácula:... Padre, pido perdón por dudar de ti... Pero si sabes lo que te conviene. No te meterás, y me entregaras a todos tus compinches con los que compartes casa -ordenó con frialdad al anciano que solo asintió.
Vlad: Si hace falta yo mismo los llevaré ante ti, hijo.
Lydia: No, no. Este es un asunto familiar, voy para allá, padre -menciono sonriendo con crueldad- luego los dos iremos a hacerle una visita a mi hermanito a su hotel para llevarle... Al asesino de mi querida cuñada que en paz descanse.
Gene: Yo me apunto, y en lo que voy llamó al resto de la familia, será una gran reunión familiar -dijo haciendo que más de uno de los presentes se riera por la pronta carnicería.
Drácula:.. Ustedes solo déjenme el final... Mavis no puede saber nada de esto. Solo la verdad de lo que pasó a su madre, nada más. Termina la reunión -dijo cortando la llamada.
Solo para darse cuenta al salir del espacio del espejo que sin querer terminó llamando atención no deseada al tener a todo el personal y los huéspedes expectantes de saber que estaba ocurriendo.
Frank: Drac ¿todo en orden? -preguntó el monstruo de Frankenstein y viejo amigo del vampiro que solo suspiro en respuesta.
Drácula: ... Esta noche habrá un evento especial en la sala de conferencias. Voy a decirles a todos... La verdad de lo que pasó la noche que Martha murió, todos merecen saberlo -dijo despidiendo a todos y queriendo buscar un momento a solas.
Momento donde recordó que tenía invitados al ver a estos esperándolo en uno de los pasillos que conectaba el lobby con el resto del castillo.
Héctor: Entendemos que está pasando por un momento difícil, Conde. Pero si no le molesta. Aún nos gustaría hablar con usted primero de la propuesta que tenemos en mente -mencionó con calma.
A su vez, el vampiro, aún con la angustia en su ser, miró a Héctor y a los más jóvenes con una mezcla de respeto y aprecio. La serenidad en sus ojos, aunque nublada por el dolor, dejaba entrever que comprendía la importancia de la conversación que estaban a punto de tener.
Drácula: Por supuesto -dijo para luego volver a reunirse en la biblioteca.
Miguel: Para no ir por las ramas. Queremos mudar el hotel -dijo sin rodeos el más joven de los tres- tenemos planes para convertir nuestra ciudad, San Fransokyo, en una entidad independiente de Estados Unidos. Una ciudad estado, un país aislado del resto del mundo... Donde seres como los huéspedes de su hotel puedan vivir y convivir de forma cómoda y segura en el mundo moderno con humanos sin riesgo a consecuencias graves -dijo llamando la atención del conde.
Héctor: Y antes de que pregunte, no, no tenemos segundas intenciones. Usted seguro vivió lo suficiente para incluso conocer a Shendu en persona o al menos escuchar de él, ¿no?
Drácula: ... Algunas cosas -exclamó con cierta incomodidad. Debido a que sabía de quien hablaban, y no tenía fama de ser alguien agradable de tratar.
Rosa: Seguro también escuchó entonces de los talismanes -preguntó señalando a su primo.
Momento en que el vampiro lo miró detenidamente antes de notar con asombro que la vestimenta del joven tenía accesorios muy poco comunes. Y con eso quería decir que podía notar cinco de los legendarios doce talismanes en la ropa del chico: Gallo, Buey, Serpiente, oveja y conejo.
Drácula: ¿Cómo los encontraron? Se supone que esos artefactos se perdieron hace siglos.
Rosa: Solo le diré que nuestra familia tiene un sueño, probarle al mundo que la magia y la fantasía son reales. Pero recientemente nos hemos dado cuenta de que cumplir ese sueño terminaría en un Armagedón de una u otra forma. Por eso en su lugar...
Héctor: Volveremos a San Fransokyo un santuario para la magia y fantasía. La prueba viviente de que todo es real, pero a puertas cerradas. Los secretos estarán a salvo, y si alguien quiere también descubrir que la fantasía es realidad... Solo debe buscarla -dijo sonriendo con emoción.
Y si, rápidamente llegaron a esa conclusión luego de comenzar a trabajar en los pros y contras respecto a la idea de comercializar los experimentos genéticos de Jumba y tras varios días de estudios de posibles escenarios fue que llegaron a una sencilla conclusión... si terminaban exponiendo lo que ellos querían al mundo, la propia humanidad lo mandaría todo al diablo.
Por eso es mejor prevenir que lamentar ¿Cómo lo iban a lograr? Ya lo verían sobre la marcha.
Rosa: El punto es que ofrecemos un lugar seguro, para su familia y para sus huéspedes, conde. Usted decide si aceptar esta oferta o no.
Drácula:... Sería tonto no aceptar esta propuesta -admitió- pero... Esto será duro para mí, verán, no construí este hotel aquí solo porque sí... La tumba de Martha está debajo del castillo.
Dicha revelación hizo que los Rivera intercambiaran miradas de sorpresa y preocupación. La atmósfera en la biblioteca se volvió aún más densa, cargada de la tristeza del conde. La idea de que el hotel, que había sido construido como un refugio para proteger a su familia y a su especie, también albergaba los restos de su amada, era un recordatorio constante de su dolor.
Rosa: Lord Drácula, entendemos que este lugar tiene un significado profundo para usted. Pero, ¿no sería posible crear un nuevo hogar en San Fransokyo que honre su memoria? Una especie de monumento donde pueda recordar a su esposa, y que además sirva como un santuario para los monstruos.
Drácula: La idea de mudarme me duele... -dijo mirando al suelo- pero la verdad es que, cada rincón de este hotel está impregnado de sus recuerdos. No sé si podría dejarlo todo atrás tan fácilmente.
Miguel: Entendemos que es duro, conde. Pero sin buscar faltarle el respeto. Y entendiendo qué para ustedes los vampiros cientos de años son nada. Igual... Ya pasaron varias décadas ¿no cree que Martha hubiera querido que usted siguiera adelante? -pregunto haciendo meditar al ser de varios siglos de vida.
Drácula: Tal vez si...
Héctor: Suena a que era una mujer maravillosa -dijo llamando su atención- una gran esposa y seguro una gran madre... Ella querría lo mejor para su familia, y ahora eso es moverse. Si la CIA encontró este lugar, otros también lo harán, y créame, los peligros del mundo exterior son más peligrosos qué décadas atrás
Drácula: ¿Más peligrosos?
Héctor: Por ejemplo ¿sabe de H.Y.D.R.A? -dijo haciendo que el mayor se aclarar la garganta con incomodidad.
Sería raro que incluso él no supiera de ellos, HYDRA fue una organización autoritaria terrorista-penal-paramilitar dedicada a la dominación mundial que lleva haciendo de las suyas desde la segunda guerra mundial, aunque hay quienes creen que es una organización mucho más antigua en realidad.
Drácula: ... He oído algunas cosas de Johnny y mis consuegros -dijo queriendo evadir el tema, y ciertamente no lo podían culpar.
Rosa: Activos desde la segunda Guerra mundial, siguen existiendo, son un problema -dijo acomodando sus gafas- un inconveniente que no tendrían problema alguno en usar al clan Drácula o alguna otra familia de monstruos como armas -mencionó.
Logrando que el vampiro se quedara en silencio, contemplando las palabras de la joven. La idea de que los peligros del mundo moderno pudieran amenazar a su familia y a su especie le causaba una mezcla de angustia y determinación. Sabía que el mundo había cambiado, y que el aislamiento que había elegido durante tanto tiempo podía no ser suficiente para proteger a los suyos en el presente.
Pero lo que terminó por convencerlo de que se debían tomar cartas en el asunto fue la intrusión de un infante de unos 3 o 4 años que parecía una copia en miniatura del yerno del conde. Quien al ver la figura oscura sonrió para luego ir corriendo a sus brazos.
Dennis: ¡Papá Drac, es hora de jugar con el papá Drac!
Drácula: ¡Dennisovich! -dijo ya teniendo al niño en sus manos a la vez que la familia de origen latino sumó dos más dos con rapidez.
Miguel:... ¿Es un hecho que el escuincle es una copia del papá, no? -pregunto en lo que su padre y su prima asintieron estando de acuerdo.
Drácula: En apariencia -aclaro casi automáticamente- una parte de mí espera que saque algo de Drácula.
Dennis: ¡Si, volar como Papá Drac!
Drácula: Seguro un día puedes, Dennisovich -mencionó mimando a su nieto- todavía nos quedan un par de años para que cumplas cinco mi pequeño travieso -dijo en lo que su nieto lo abrazaba emocionado.
Héctor: ¿Cinco? -pregunto curioso.
Drácula: Es la edad máxima para que se le caigan sus colmillos de leche y los cambié por sus colmillos de vampiro. Si eso no pasará... -dijo en lo que alguien más se abría paso a la habitación.
Quien se trataba de ni más ni menos que la posible futura heredera de todo el linaje Drácula debido a ser la única hija del conde, Mavis Dracula.
Mavis: Demostraría que Dennis es un niño humano normal, como te he dicho varias veces que es -dijo en lo que su padre solo suspiro por lo bajo.
Drácula: Mavis, es posible que sea parte vampiro, te lo aseguro.
Mavis: Claro, lo que digas papá -mencionó tomando a su hijo en brazos- por cierto ¿Qué es lo que pasa? Todo el mundo habla del gran anuncio que harás esta noche... ¿Qué pasó con mamá? -preguntó con cierta incertidumbre que hizo sentir mal al vampiro mayor.
Drácula: ... Te lo explico luego, cariño, no quiero hablarlo delante de Dennisovich -exclamó revolviendo el alborotado cabello del menor.
Mavis:... ¿Es tan malo?
Drácula: Vendrá toda la familia, desde tus tíos hasta tu abuelo. Solo eso te diré -dijo, logrando que su hija se tensara al pensar en cierta baronesa.
Era bien sabido que en realidad ellas dos nunca llegaron a congeniar del todo.
Mavis: ¿En serio?... ¿Hasta la tía Lydia?
Drácula: En especial tu tía Lydia.
Mavis: Supongo que... En cierto modo está bien -susurro antes de sonreír, buscando sacarle lo positivo al asunto- así todos podrán conocer a Dennis.
Drácula: Créeme, lo adorarán -dijo sonriendo- después de esta noche nadie de nuestra familia tendrá voz y voto para decir algo sobre Dennisovich. Así que está bien que lo conozcan ahora.
Mavis: Ojalá tengas razón -dijo con calma antes de fruncir el ceño- solo espero que no venga Klaus.
Drácula: Mavis, sé que tienen... sus diferencias... pero Klaus es familia -su padre reprocho en lo que ella solo gruño con fastidio en respuesta.
Si, era bien sabido que su primo en verdad no era para nada su persona favorita, y razones había de sobra. Pero principalmente era debido a ser raro, envidioso, fastidioso, etc. Y la lista seguía.
Mavis:... ¿Y ustedes? -pregunto notando a la familia humana que se encontraba allí que solo saludaron cortésmente.
Héctor: Posibles socios de su padre, señorita.
Rosa: Para trasladar el hotel de Transilvania a Estados Unidos
Mavis:... ¿Qué? -pregunto sorprendida mirando a su papá- ¿Johnny te lo dijo? ¿Cómo te enteraste?
Drácula: ¿Me enteré de que? -cuestiono mirando con extrañeza a su hija que desvió la mirada con incomodidad.
Mavis: De que he estado hablando con Johnny sobre mudarnos a su país para que Dennis crezca... Ya sabes... Más seguro.
Si, claro, porque Estados Unidos de América era un país de ensueño donde las fantasías y los sueños se vuelven una realidad... no por nada no llega ni al top 100 de países seguros en el mundo. O al menos ese fue el pensamiento del mayor de los Rivera que le pareció curioso cómo a pesar de su edad que lo supera por mucho, la hija del conde tenía una mentalidad muy inocente del mundo, posiblemente a causa del aislamiento que se llevó a cabo para tenerla a salvo en primer lugar.
Drácula: ¿De verdad? ¿Irse a América?
Mavis: Pues si... ¿Qué no lo sabías ya? -pregunto, a la vez que el conde solo disimuló y actuó como si ya sabia desde un principio.
Drácula: Pero en todo caso ¿Están seguros, arañita? -cuestionó en lo que acariciaba la mejilla de su hija con preocupación.
Mavis: No lo se, apenas lo estamos hablando -exclamó besando la frente de su hijo- tu sabes como son las cosas aquí, para un niño humano... Es muy peligroso -respondió en lo que su padre suspiro cansado, aparentemente esa conversación la han tenido muchas veces ya.
Drácula: Al menos esperemos a que Dennisovich cumpla los cinco, ¿Te parece? -pidió con calma- además, si el plan que el señor Rivera me ofrece es factible no hace falta que se muden con la dulce e irritante familia de Johnny. En San Fransokyo podrán vivir en el mundo humano sin tener que alejarse de nuestro mundo.
No hace falta decir que la hija miró a su padre con cierto recelo, la incertidumbre reflejada en sus ojos. A pesar de todo, la idea de mudarse a un lugar donde podría criar a su hijo en un entorno más seguro y abierto a la diversidad le resultaba tentadora. Pero al mismo tiempo... tenía sus dudas.
Mavis: ¿De verdad?
Drácula:... Solo digamos que la idea de Johnny de patrocinar el hotel en las redes sociales o como se llamen no fue tan buena en realidad -dijo con algo de fastidio- pero antes de que te preocupes, ya se contuvo el problema -calmó rápidamente a su hija en lo que una de las armaduras procedió a darle un informe al vampiro susurrado- aja, si... parece que el tipo de la gran barbilla sobrevivió al foso.
Mavis: ¿Tipo de la gran barbilla?
Héctor: Descuide, Conde, con todo y que no es muy listo, se mantendrá alejado del área, con suerte hasta determinará que lo de los anuncios eran puros cuentos chinos -exclamó con calma.
Rosa: Ventaja de que el tarado se crea el máximo estereotipo de lo que debe ser un americano modelo -dijo restando importancia al asunto.
Drácula: Veo que están acostumbrados al tipo.
Héctor: Solo yo, digamos que fue un dolor de trasero para mi por años -mencionó casual.
Mavis: ¿Cómo así? -pregunto queriendo meterse a la conversación.
Solo para que los tres morenos le dieran miradas divertidas en respuesta.
Héctor: Todos tenemos nuestros secretos señorita, por mi parte diré que mi juventud fue muy agitada
Miguel: Y con eso se refiere a que de milagro no está preso -dijo ganándose un golpe de su padre que ni le dolió.
Mavis: Bueno, en todo caso si nos iremos a América de todos modos entonces no hay nada de qué preocuparse o discutir -se encogió de hombros para luego abrazar a su progenitor- gracias por hacer esto por mi y por Dennis, papá. Sé lo duro que debe ser para ti dar este paso.
Drácula: Lo que sea por apoyarte, mi gusanita -dijo despidiendo a su hija que se llevaba a su hijo debido a que era hora de la merienda.
Héctor:.. Se nota que es la consentida de papá -mencionó divertido una vez la chica se fue.
Drácula: Luego de perder a su madre, por años fuimos ella y yo contra el mundo -mencionó con simpleza- 118 años para ser exactos antes de la llegada de Johnny... Uno de los peores días de mi vida, pero el mejor día de la vida de mi pequeña, por desgracia.
Si, eran los clásicos celos de padre en acción.
Héctor: El típico caso del yerno que siente que le robó a su niñita
Drácula: La única razón por la que accedí a todo esto de la publicidad, lo de aceptar humanos y toda la cosa, en realidad fue únicamente para darle un trabajo a Johnny y Mavis no se fuera del hotel con Dennisovich -dijo antes de volver a suspirar- creo que sólo estaba siendo muy terco.
Rosa: Ya lo hecho, hecho está, Conde -mencionó queriendo animarlo- no hace falta decirle a Mavis que todo esto es en consecuencia a lo que pasó con la publicidad. Si quiere su hija puede quedarse con la versión de que usted busca complacerla y por eso moverá el hotel al extranjero
Drácula: Me parece bien, y así podemos de una vez expandirnos -pensó en voz alta- ahora que lo pienso, esa idea ha rondado en mi mente por décadas pero nunca se presentó la oportunidad
Héctor: Pues aquí la tiene -dijo ya comenzando a entrar en lo que sería discusiones de política y de negocios.
A lo cual su único hijo en respuesta solo se recostó en el sofá de la biblioteca y se permitió relajarse. No había que mentir, él sabía que la principal razón de que fuera llevado además de mostrar la imagen de familia unida, era para pelear si fuera necesario. Pero para su suerte, ese no fue el caso... solo se lamentaba no haberse quedado para estar con Hiro.
Miguel; Al final parece que no hubo que pelear -exclamó soltando un bostezo en lo que se acomodaba- fue agradable ver que es una persona racional y civilizada, conde.
Drácula: ¿Les toca tener que resolver los problemas de otro modo? -pregunto curioso luego de que el joven llamara su atención. Para él se notaba a leguas que de los tres, era el hijo menor el que menos parecía estar interesado en mostrar una fachada profesional.
Usualmente si lo hace, pero en su defensa el cambio de horario le estaba afectando y tenía sueño, han sido días cansados para él por más de una razón, principalmente estudio, calentamiento musical y entrenamiento.
Rosa: Creo que usted ha vivido lo suficiente para saber que hay personas o seres que entienden primero a los puños antes que desear hablar civilizadamente -dijo desviando la atención del conde a la imagen de su primo que ya actuaba como si fuera su casa.
Drácula: Oh eso lo sé. Incluso hay personas que ni a golpes entienden. Esta conversación me recuerda a un payaso disque cazador de monstruos, Van Helsing -dijo llamando la atención de los de piel morena- nos persiguió a mí y a mis amigos por mucho tiempo, demostrando no tener nada más que hacer. Y no le importó acabar necesitando atención médica una, y otra, y otra, y otra vez... Se le podía reconocer la perseverancia, eso lo admito -admitió antes de solo encogerse de hombros.
Miguel: Me recordó a ti, jefe -mencionó divertido.
Héctor:... No me simpatizas -exclamó con fastidio- en fin. Hablando de todo y nada, conde. Adelantando, en unas semanas daré una fiesta de té, un gran evento. Sería un honor que su familia y amigos asistan. Bien podemos decir que sería un modo para cerrar el trato -dijo sacando una invitación y entregándola al caballero noble.
Drácula: Me parece perfecto. Solo espero que nuestra aparición no sea causa de discordia -dijo ya pensando en resultados nada gratos para los suyos.
Rosa: Sencillamente diremos que son disfraces. En plan de que en el país de las maravillas por su naturaleza había seres de todo tipo. La fiesta será con temática de Alicia en el País de las Maravillas -aclaró al notar la mirada curiosa del vampiro.
Drácula: Oh, adoro esa historia. Es de las pocas historias humanas sin adaptar qué me gustaron -dijo haciendo que más de una oreja se levantara, de forma figurativa, claro.
Miguel: ... ¿O sea cómo?
Rosa: Creo tener la respuesta -hablo en lo que miraba algunos libros de la biblioteca- parece que en la cultura de los monstruos algunos cuentos y relatos fueron adaptados para ser más macabros y antagónicos con los humanos. O en otras palabras, más aptos para los monstruos. Por ejemplo en el cuento de Hanzel y Gretel pusieron a la bruja como una víctima de un par de malvados niños humanos -dijo con la adaptación del cuento infantil en mano.
Vaya, nada más se podría decir que ver para creer.
Drácula: Algo no muy maduro de nuestra parte, lo admito -dijo aclarándose la garganta con incomodidad- entenderán que la muerte de mi esposa fue un antes y un después en nuestro mundo.
Rosa: Tampoco somos quienes para reprocharle, Conde -respondió con calma devolviendo el libro a su lugar-... Por cierto ¿en su mundo tienen fábricas, industrias especializadas? Es que desde ya veo increíbles oportunidades de negocio para nuestra ciudad sacando al mercado algunos productos monstruosos exclusivos -sugirió a la vez que su tío y su primo podían jurar que ya la estaban mirando con signos de dólar en los ojos.
El caso de Rosa era curioso, como tal no era el dinero lo que le interesaba, sino la idea de ver como los números se elevaban en las cuentas, acciones, valor de activos, entre otras cosas. Era algo que siempre la emocionaba, el solo hacer tratos y tener éxito en lo que se propone era algo que la hacía muy feliz. Ella era tal cual la definición de donde pone el ojo, pone la bala.
Drácula: Luego de que este hecho el contrato con su empresa, puedo ponerlos en contacto con empresarios monstruos, uno de ellos es de hecho buen amigo mío y huésped del hotel, además se ser multimillonario aparentemente que hizo su fortuna dándole multiusos a la baba, el señor Bob Blob.
Rosa: Excelente -dijo imitando a cierto buitre de la ciudad amarilla casi a la perfección.
Héctor: Cómo ve ella es una comerciante por naturaleza, no conquista el mundo porque no quiere -dijo divertido por la sonrisa de satisfacción de su sobrina.
Miguel: Mientras que mi papá no conquista el mundo porque mi jefa ya le dijo lo que le hará si lo intenta -dijo a la vez que los tres Rivera recuerdan la amenaza palabra por palabra.
¨¡Solo porque ahora manejes una empresa no significa que te creas la gran cosa! ¡Ni siquiera te atrevas a pensar en alguna estupidez como dominar el mundo! ¡Lo haces y en ese mismo momento jugare ping pong con mi bota y tu cabeza! ¡Es más, de nuevo meteré tu cabeza en el trombón y te haré tragar la bicicleta con todo y campana!¨.
Héctor: ...Sigo sin saber como logro que mi cabeza cupiera dentro de ese trombón -dijo pensativo por el recuerdo, de recordar su tiempo como hombre casado podía decir que fue... interesante.
Miguel: Mi teoría, viejo, es que ese día en verdad hiciste enojar a mi mamá.
Héctor: Esa mujer se enoja con solo respirar
Rosa: Corrección, se enoja contigo sólo por respirar -dijo sacando risas a los presentes menos a su tío- por cierto, Conde. Una pregunta... Después de hacer la publicidad de que los humanos son bienvenidos al hotel ¿Hubo algún nuevo huésped monstruo, alguno que nunca haya estado aquí antes? -pregunto haciendo al vampiro meditarlo.
Drácula: Ahora que lo mencionas... -dijo, mientras se recostaba en su silla con una expresión pensativa- Desde que abrimos las puertas a los humanos, hemos tenido algunas visitas inusuales.
Miguel: ¿Inusuales? ¿A qué te refieres? -preguntó con curiosidad, mientras su padre y su prima se acercaban más, intrigados.
Drácula: Bueno, hemos recibido a seres que nunca antes habían cruzado el umbral del hotel. Por ejemplo hace unos días se hospedó una criatura singular buscando refugio, el eslabón perdido, su nombre es Link, creo.
Riveras: ¿Eslabón perdido? -preguntaron con interés.
El eslabón perdido por mucho tiempo ha sido un término utilizado para describir fósiles transicionales que se cree, unen la división evolutiva entre los primates superiores monos, simios y humanos. Pero específicamente en este caso se hablaba de un espécimen con vida de lo que puede ser un paso no conocido de la evolución humana o de cualquier otra especie, un hallazgo científico en todo el sentido de la palabra.
Rosa:... Me recuerda a un incidente donde dicha criatura fue vista en Miami causando problemas -dijo haciendo memoria- fue capturada por el gobierno americano en 1961 e hicieron lo posible para borrar todo rastro del suceso.
Héctor: Ya veo... Con que por eso me persiguieron cuando fui a Miami, y decían que "me escapé" -dijo en lo que su hijo y su sobrina se ahorraron el responder que por feo- esa se volvió una de tantas de porque odio el gobierno americano. Después de ese sentimiento que muchos gringos tienen de que son lo que hace girar al mundo.
Rosa: Mi punto es -dijo retomando la conversación- ¿Cómo es posible que el eslabón perdido esté aquí? Si fue arrestado por los gringos hace varias décadas... Creo que tenemos a un topo.
Cosa que hizo pensar al monstruo que la conversación tomaba un giro inesperado. La idea de que el eslabón perdido, una criatura tan valiosa desde el punto de vista científico y místico, pudiera estar en su hotel era intrigante, pero la insinuación de que podría haber un topo o una infiltración de los humanos lo inquietó.
Drácula: ¿Un topo? ¿Te refieres a que está en contacto con el gobierno? -preguntó, su tono comenzó a adquirir una seriedad que hacía eco en la biblioteca- mejor déjame esto a mi, es mi hotel a fin de cuentas -pidió para acto seguido solo dar un chasquido de dedos.
Y así sin más la orden fue dada.
Siendo así como al poco tiempo las armaduras del hotel se encontraban ya entrando a la biblioteca con un prisionero al que le dieron captura mientras se relajaba en la piscina sin aparentemente tener preocupación alguna en el mundo con todo y el cóctel que estaba a punto de beberse.
La criatura como tal parecía la mezcla exacta entre un simio y un pez, era lo más notorio de su apariencia... además de la panza cervecera, se notaba que necesitaba hacer más ejercicio, parecía fuera de forma.
Miguel: Vaya... De verdad se parece a ti, jefe -dijo buscando molestar al mayor, consiguiéndolo sin mucho esfuerzo.
Link y Héctor; No que paso, que paso, vamos ahí -dijeron al unísono antes de verse con disgusto.
Héctor: Pero ya en serio... ¿Tú y cuantos más? -pregunto al monstruo que patencia todavía muy desconcertado de todo lo que estaba pasando.
Aún no creía que lo descubrieran tan fácilmente, él creyó que se había infiltrado exitosamente, solo un huésped más en un lujoso resort para monstruos. algo completamente normal para estos estándares ¿en donde había fallado?
Link: ¿Qué?
Héctor: Preguntamos ¿tú y cuántos más del gobierno están aquí? -volvió a preguntar con una seriedad poco usual en él que incomodo al ente de miles de años de edad.
Link: Yo... No, no sé de qué hablas. Solo soy un monstruo común y corriente qué quiere disfrutar de sus vacaciones, viejo.
Rosa: Un monstruo común y corriente que no debería estar aquí porque se supone que fue capturado por el gobierno estadounidense en 1961 -dijo de forma amenazante haciendo al híbrido tragar grueso.
Link:... ¿Me escape?
Héctor: Nadie escapa es fácil del gobierno americano tan fácil -crítico cruzado de brazos- así que si escapaste deberías estar muerto o debieron capturarte de nuevo a las pocas horas... Eso o estás aquí como espía para ellos.
Link: ¡No soy un espía! -exclamó el híbrido, levantando las manos en un gesto de rendición- ¡Solo quiero relajarme y disfrutar de unas vacaciones! La última vez que estuve fuera de una jaula, me prometí que nunca más pasaría por eso.
Rosa: La última vez que estuviste en una jaula...-dijo recalcando que se pasó de lengua- parece que no va a hablar. Miguel ¿qué tal si le das unas clases de vuelo a ver si se le afloja la lengua? -pregunto para extrañeza de la criatura.
Miguel: Claro -dijo para luego remangar las mangas de su camisa.
Link: ¿Ah? ¿Te crees quien para hacerme hablar? ¿Te crees mucho niño? Hablas con un az, soy el eslabón perdido, pateaba traseros desde mucho antes de que tus abuelos nacieran -dijo de forma jactanciosa en lo que hacía movimientos de boxeo.
Justo antes de que le sujetaran la cola, momento donde valía la pena recordar que el primogénito Rivera tenía en su poder el talismán del buey, super fuerza. Y sumado a la velocidad del conejo, el resultado terminó siendo girar como si de un trompo se tratara sin soltar en ningún momento la cola del monstruo acuático.
Miguel por si parte estaba disfrutando de su pequeño escarmiento, dejando escapar una risa mientras continuaba girando al eslabón perdido. Héctor y Rosa observaban con una mezcla de diversión y preocupación. A pesar de que el híbrido parecía tener una actitud arrogante, no podían evitar sentir un poco de compasión por él.
Drácula: Haría algo para intervenir pero esto es muy gracioso -exclamó cruzado de brazos con una sonrisa divertida.
Link: ¡Está bien, está bien! ¡Me rindo! -grito estando a punto de vomitar y de sentir que le arrancaban la colá- ¡Hablaré, hablaré! ¡Si, trabajo con el gobierno, soy un agente del área cincuentaitantos!
Riveras y Dracula: ¿Área Cincuenta y tantos? -preguntaron extrañados ante tal nombre redundante.
Miguel: ¿No querrás decir área 51? -interrogó deteniéndose.
Link: Es algo gracioso, no es el número real, pero decirlo es una ofensa federal, por eso se da una cifra increíblemente larga para que nadie adivine el número real.
Rosa: Ya que estamos en un lugar que no está monitoreado... A ver si adivino ¿el área 52? -pregunto divertida solo para notar que el pez la veía sumamente incómodo y nervioso- ...Vaya.. Hasta yo me sorprendo de acertar... ¿A quién engaño? Le pido mucho a los federales.
De verdad que escritores o en este caso, que agentes del gobierno tan flojos.
Drácula: En todo caso -exclamó, tomando a Link del hombro con una calma aterradora- ...Ahora está es la parte donde mencionas cual es exactamente tu misión, amigo mio. Y te recomiendo que pienses bien lo que vas a decir, toma en cuenta que la seguridad de todos los huéspedes es mi responsabilidad -dijo ejerciendo fuerza en el agarre y puede que tentando a clavar las garras.
Link:... Antes que nada, pensaba informar desde el comienzo que no había nadie apto en el hotel para "reclutar" -dijo muerto de miedo.
Drácula: ... ¿Reclutar?
Rosa:... Así que eso hizo el gobierno contigo. Usan el área 52 como una prisión para monstruos y los usan como agentes gubernamentales -dijo deduciendo rápidamente cuál era la situación, a lo cual el pez mono rio con incomodidad.
Héctor: De hecho creo que ya sabía de esto, el incidente del alienígena de hace un par de años que el gobierno americano hizo lo inhumanamente posible para que el mundo, los estados e incluso la propia San Fransokyo qué fue donde cayó el robot lo vieran como nada más que una publicidad muy exagerada de Hollywood para una nueva película -dijo recordando todo el asunto de la pelea con el robot gigante en el puente.
Cosa que si se buscara en la actualidad, no aparece absolutamente nada.
Link: Si, esa fue nuestra primera misión. El viejo Monger convenció al presidente de usarnos, ya saben, antes de que saliera todo ese asunto de los vengadores y bla, bla, bla -reveló con cierto fastidio.
Drácula: ¿Y los mandaron a reclutar gente en mi hotel?
Link: Pues verá, conde... Monger hace tiempo que está obsesionado con poner "a salvo" a más monstruos para el equipo monstruo. No ha tenido suerte encontrando monstruos que reclutar realmente en las últimas décadas. La última fue Susan y fue hace rato ya -confesó- luego intentamos con un hombre lobo... Pero resultó que el tipo solo era lobo una vez al año y el resto del año era un tarado medio lelo.
Miguel: ... Eso es triste -susurro por lo bajo pensando si se trataba de alguna especie de maldición.
Link: Y cuando Monger vio los comerciales y la publicidad de este lugar, bueno. Su primer instinto fue querer venir aquí con todo un batallón militar si soy honesto y hacer de cazador -admitió entrando en confianza.
Solo para sentir que volvía a ser congelado otros 20.000 mil años al ver la mirada gélida del gerente del hotel que omitía por completo la sonrisa falsa que tenía.
Drácula: No me digas...
Link: Tranquilo conde, lo calmamos de inmediato. Es solo que se exalta fácilmente, hablamos de un veterano de más de noventa años -trato de calmar al vampiro- ya era maduro cuando lo asignaron con nosotros.
Drácula: Eso no quita que tiene intención de capturar y llevar a mis huéspedes, mis amigos contra su voluntad, y volverlos perros de ataque de los humanos -declaró con seriedad.
Link: Descuide, conde, ya tenía planeado decirle a Monger que ninguno sirve para misiones. Se lo juro que es la verdad. Así que deje de pensar en la idea de entregarme a Quasimodo el chef y que me sirva como plato fuerte cocinado en el horno -prácticamente rogó.
Ya que si, usualmente se hacía el machito ante la mayoría al autoproclamarse el líder del equipo de los monstruos y el ¨músculo¨ del grupo... pero no es un lunático suicida para querer ir en contra del maldito Drácula.
Rosa: ¿Y sólo está usted? -pregunto llamando su atención.
Link: Pues si, mariposaurio es un animal prácticamente. El doc y Bob no son confiables para la infiltración. Los aliens no cuentan y Susan bueno, es humana y Monger desconfía de que lo de que los humanos sean bienvenidos sea verdad -explicó.
Héctor: Pues que giro de los acontecimientos -dijo sonriendo- Monger te envío para espiar... Y ahora nosotros te usaremos para que él venga aquí y podamos negociar sobre algo que puede cambiar para siempre el futuro de todos los monstruos, para bien aclaró -dijo sonriendo.
Y también para el mundo a largo plazo, pero eso era punto y aparte.
Link: Supongo que puedo hacerlo -dijo en lo que la chica de lentes le palmeo el rostro divertida.
Rosa: Ay que tierno eres... como si tuvieras opción -dijo de forma casual.
Pero antes de que el eslabón pudiera decir nada al respecto. Ya dos gárgolas llamadas por el conde se lo estaban llevando a un calabozo del castillo. Menuda suerte la suya. Era un hecho, la misión fue todo un fracaso.
Héctor: Pues bueno, este si fue un día de locos -dijo una vez las cosas estuvieron en calma. Aunque fuera por un par de segundos.
Miguel: Y si no me equivoco, solo se pondrá más loco... Está anocheciendo... Y veo a varios murciélagos a la distancia dirigiéndose hacia acá -menciono señalando el exterior por la ventana.
La atmósfera en la biblioteca se tornó tensa a medida que la luz del sol se desvanecía, dejando paso a la penumbra. Los murciélagos que se habían avistado antes ahora se acercaban en un torbellino oscuro, sus alas batían creando un murmullo inquietante que resonaba en las paredes de piedra del castillo.
Drácula, con un gesto de su mano, hizo que las luces de la biblioteca se encendieran con un tenue resplandor, iluminando la habitación.
Drácula: Veo que mi familia ya viene en camino, llegaron antes de lo que esperaba -admitió con cierta impaciencia en su voz- ah, creo que han pasado siglos desde que todo el clan Drácula ha estado en el mismo lugar sin excepciones.
Rosa: Solo esperemos que no busquen problemas algunos de ellos.
Drácula: No creo que haga falta, prometo que se comportaran, o intentaré que lo hagan en todo caso.
Rosa: Perfecto conde... aunque si los buscan, igual te puedes encargar ¿verdad primito?
Miguel: Ya sabes que sí -dijo prácticamente espabilandose de golpe. No quería que las cosas se descontrolaran, pero mentiría si no dijera que estaba emocionado por la idea de pelear con vampiros.
Vaya que ser Casanova le estaba haciendo un daño irreparable a su psique y capacidad de tener sentido común. Porque escuchando su sentido racional todo lo que quería era estar con cierto nipo americano en territorio norteamericano. Pero de momento solo podía añorar y preguntarse qué estaría haciendo.
___________________________________________________________________
(IASF, San Fransokyo, USA)
Billy: Oye Spencer ¿seguro que es buena idea venir tan tarde? Estoy 100% seguro de que no habrá nadie en ese dichoso estudio, nadie es tan antisocial para desperdiciar su tiempo a estas horas de noche trabajando haciendo dibujos -dijo el fantasma mientras seguía a su amigo.
Ahora la pregunta es: ¿qué hacían en ese lugar? Pues en palabras simples, el hecho de entrar a la carrera de director de cine del instituto de arte de San Fransokyo no era solo cosa de pagar y asistir a clases (oh bueno, si era así en parte), pero en cuanto Spencer supo que otro de los protegidos de Don Hector quería entrar por mérito propio a través del festival de arte que hacia la universidad una vez al año para elegir talentos jóvenes, simplemente se le hizo irresistible la idea.
Trabajaría con ellos ayudando en la dirección de lo que sea que estuvieran haciendo. Iba a demostrar que estaba allí no solo por tener un patrocinador, sino también porque tenía el talento para estar allí, era algo personal, demostrar que podía triunfar en ese mundo.
Spencer: Hoover me dijo que los encontraría aquí y él aparentemente tiene acceso a sus ubicaciones dado a que al parecer son parte de las personas para las que ahora responde directamente... además, mira, las luces están encendidas, debe haber gente -dijo casual.
Solo para que ambos se sorprenden al ver como se empezaban a escuchar sonidos de golpes y de cosas rompiéndose como si estuvieran a mitad de una discusión allí dentro.
Billy: Pues sí parece haber gente, pero no creo que sea el mejor momento ¿Y si nos vamos? Solo piensalo, noche de películas en casa, tu y yo, un plato lleno de nachos, solo digo... y claro que me estas ignorando -dijo al notar como el castaño abría la puerta para asomarse al interior del complejo.
Solo para toparse con una escena un tanto curiosa de dos chicos que parecían ser un japones y un latino en medio de una discusión, uno encima del otro forcejeando y dando vueltas por toda la sala improvisada entre hojas y bocetos, parece que llegó a mitad de un desacuerdo.
Hiro: ¡Esto no funciona! ¡Solo tenemos cuatro escenas luego de semanas de trabajo! ¡Vamos muy lento! ¡Ten presente que hay que terminarlo todo pronto y ciertamente parte del problema es que ni siquiera nos decidimos qué historia contar!
Leo: ¡Tu eres el que dedica mucho tiempo al dibujo del movimiento y tardas casi todo un día en solo unos segundos! -reclamo mientras le jalaban el cabello.
Hiro: ¡Perdón por ser perfeccionista señor en vez de hacer una escena normal de solo dos o tres hojas hace un folder monstruoso de 36 páginas! -respondió en lo que le jalaban las mejillas con fuerza.
Leo: ¡Ya te dije que quiero que se vea fluido y realista! ¡Y acordamos que podía ser posible!
Hiro: ¡Una cosa es estimar y otra ver los resultados de antemano, no podemos darnos gusto de hacer lo que queramos si al final no entregamos nada del proyecto! -se quejó chocando su cabeza con la del moreno- ¡a este paso no tendremos nada que mostrar el día de la exposición!
Leo: ¡Pues tendremos que trabajar 24 horas al día por un mes entero y ya! -dijo mordiendo el brazo del nipón, a lo cual este le mordió el hombro en respuesta.
Hiro: ¡Olvida que haré eso, tanto tú como yo tenemos vidas! ¡Y no me desvelaré por 30 días seguidos!
Leo: ¡Pues entonces serán 48 horas al día por 15 días!
Hiro: ¡Partiste un factor a la mitad y duplicaste el otro, masoquista!
Spencer y Billy observaron la escena con una mezcla de incredulidad y diversión. Aquella discusión entre esos dos parecía estar más allá de lo que podrían haber imaginado, y aunque la situación era caótica, había una chispa creativa en el aire que hizo que ambos se sintieran intrigados.
Billy: Esto es un verdadero espectáculo -susurro al castaño- ¿Te imaginas lo que podríamos hacer con todo esto? Podríamos grabarlo y hacer un cortometraje sobre la lucha del arte y la vida, o algo así, créditos de Billy Joe Cobra, aclaró -mencionó divertido en lo que su amigo rodo los ojos.
Si, desde que le prometieron que podría volver al escenario aun estando muerto y siendo un fantasma, ha mostrado signos de volver a como era en vida. Y eso hace pensar al chico que pronto deberá hacer algo para bajarle los humos a su amigo con aires de diva.
Spencer: No sé, Billy. Lo que realmente quiero es ayudarles a que terminen su proyecto. Si lo hacen bien, podría ser una gran oportunidad para mí. Además, no parece que se den cuenta de que estamos aquí. Podría ser un buen momento para intervenir.
Billy: O podríamos quedarnos aquí y disfrutar del espectáculo. ¡Mira cómo se muerden! ¡Es como una pelea de perros, pero con más talento! -dijo ya sacando palomitas y dedicándose a disfrutar.
Por su parte, Spencer finalmente decidió que era el momento de intervenir. Con un paso firme, empujó la puerta y entró en la sala, seguido de Billy a quien el otro par no podían ver dado a su condición.
Spencer: Eh! ¡Chicos! ¿Todo bien aquí? -pregunto al par que se detuvieron en seco, sorprendidos al ver a dos extraños en la sala.
El ambiente se tornó repentinamente tenso, pero la curiosidad de Hiro y Leo pronto superó su confusión.
Hiro: ¿Y tú quién eres? -preguntó pasándose la mano por el cabello desordenado, tratando de recuperar la compostura.
Leo: ¿Estás aquí para burlarte de nosotros? Porque no estamos en un buen momento ahora mismo.
Spencer levantó las manos en un gesto pacificador, tratando de disipar la tensión en el aire.
Spencer: No, no, para nada. Estoy aquí para ayudar. Mi nombre es Spencer, creo que les avisaron que vendría y me enteré de que estaban trabajando en un proyecto para el festival de arte. Vi que había... algo de tensión aquí, así que pensé que quizás podría echar una mano.
Hiro y Leo intercambiaron miradas, aún algo desconfiados, pero la inquietud en sus rostros comenzó a desvanecerse.
Hiro: Ayudar, ¿eh? -dijo, todavía con un tono escéptico. -¿Y qué sabes hacer?
El castaño se sentía un poco abrumado ante la mirada inquisitiva de los dos chicos, pero sabía que tenía que demostrar su valía.
Spencer: Bueno, estoy estudiando dirección de cine, y he trabajado en varios cortometrajes, de terror más que todo. Tal vez pueda ayudarles a organizar sus ideas o incluso a darles algún consejo sobre cómo presentar su trabajo -dijo en lo que el líder de todo cruzó los brazos y levantó una ceja.
Leo: Suena interesante, pero no necesitamos a alguien que nos esté diciendo cómo hacer nuestro trabajo. Ya tenemos suficiente con que no nos estamos matando el uno al otro -dijo en lo que el recién llegado sonrió, reconociendo la tensión entre ellos, pero también viendo la pasión que ambos tenían por su proyecto.
Spencer: Entiendo que esto es importante para ustedes. La verdad es que me gustaría ver lo que han hecho hasta ahora. ¿Puedo ver las escenas que han trabajado?
Con un suspiro resignado, Hiro se encogió de hombros y se dirigió a una mesa cubierta de papeles y bocetos.
Hiro: Está bien, pero no te rías. Esto es un desastre.
Spencer se acercó y comenzó a revisar los dibujos, notando el talento que ambos poseían. A pesar de la falta de organización, había una energía palpable en los trazos, una emoción que parecía saltar de la página.
Spencer: Esto es genial, chicos. Tienen una visión clara, solo necesitan unir los puntos. ¿Y les doy un consejo? Usen escenas que solo muestran el paisaje, eso ahorraría hasta 10 u 12 segundos del cortometraje y podemos darle sazón con trucos de cámara -explico con calma sosteniendo bocetos de escenarios.
Leo se acercó, aún algo dubitativo, pero interesado por el entusiasmo de Spencer.
Leo: ¿De verdad crees que hay algo aquí? -pregunto en lo que el otro chico asintió con firmeza.
Spencer: Absolutamente. Pero primero, creo que necesitamos una lluvia de ideas. ¿Qué tal si nos sentamos y discutimos qué historia quieren contar? Así podemos identificar los puntos débiles y ver cómo podemos solucionarlos.
Hiro miró a Leo, quien parecía estar considerando la propuesta. Después de un momento, Leo asintió levemente.
Leo: Está bien, pero no prometo que no te muerda si no me gusta lo que dices -dijo divertido, a lo cual el castaño sonrió, sintiéndose cada vez más cómodo en medio de la caótica energía creativa que lo rodeaba.
Spencer: Trato hecho. Vamos a trabajar juntos y a sacar esto adelante.
Mientras comenzaban a discutir ideas, Billy, que había estado observando la escena con interés, se dio cuenta de que su amigo estaba comenzando a encontrar su lugar en ese mundo y entre ese par de chicos que extrañamente lo aceptaron rápido, posiblemente de lo cansados y desesperados que estaban por una nueva perspectiva. Aunque no podía ser visto ni oído, se sintió orgulloso de Spencer.
Billy: Bueno, esto se está volviendo interesante. Tal vez no sea tan mala idea, después de todo -dijo para sí mismo, aunque igual inconforme de todos modos por no poder pasar tiempo de calidad con el chico que decidió que si o si iba a conquistar aunque muera en el intento... otra vez.
La conversación se volvió más animada a medida que los tres intercambiaban ideas, y aunque el caos seguía presente, había un nuevo enfoque en el aire. La tensión que antes llenaba la sala comenzó a transformarse en algo más productivo, y Spencer se sintió emocionado por ser parte de ese momento.
Y mientras la noche avanzaba, la pequeña sala de trabajo se llenó con el sonido de risas, ideas y creatividad, cada vez más lejos de la discusión destructiva que había comenzado. Spencer supo que estaba en el camino correcto, y que todo lo que había hecho para llegar allí valía la pena, al menos de momento que era la calma antes de que la tormenta empezará de nuevo.
Notes:
Y ese seria el capitulo de esta vez. Como siempre pueden votar, comentar, lo que gusten.
¿Y que les pareció?
De momento solo diré que esto se extendió más de lo que esperaba. En serio, si lo trabajaba como quería este capitulo podría perfectamente ser de al menos 30.000 palabras. Pero en fin, espero que de momento sea de su agrado. Si tienen dudas, pregunten aquí y veré si respondo o no.
Nos vemos pronto, besos
Chapter 25: Capitulo 23: Monstruos vs Aliens
Notes:
(See the end of the chapter for notes.)
Chapter Text
(General Pov)
(Hotel Transylvania, región de Transilvania, Rumania)
Murciélagos de diversas clases y especies entraban en la habitación uno tras otro, poblando cada viga que sostenía el techo de la biblioteca. Había grandes y pequeños, delgados y algo regordetes, algunos más viejos que otros. Vampiros de toda índole iban llegando, y todos compartían algo más que su especie: todos pertenecían de una forma u otra al clan Drácula.
Sin duda, lo más asombroso no fue solo observar la llegada de una colonia de murciélagos, sino también ver cómo cada uno de ellos transformaba su apariencia de pequeños mamíferos voladores en seres con rasgos humanos, representando diversas etnias y razas. Predominaban aquellos de piel blanca y lechosa, así como los de cabello negro o incluso aquellos que carecían de él.
Dracula: Estos humanos son mis invitados, no toleraré ninguna agresión hacia ellos -dijo notando algunas miradas confusas o de consternación de sus semejantes al notar a la familia Rivera allí presente, no hace falta decir que la noticia de que el conde había abierto las puertas de su hotel a los humanos aún era relativamente nueva- la humana en particular fue la detective que desveló la verdad de lo sucedido a Martha.
Lydia: En cualquier otra circunstancia diría que esto es una tontería... Pero dado a que ella acertó en su teoría y en efecto fue Bela y su gente los verdaderos culpables -dijo antes de ver a Rosa y hacer una leve reverencia- buen trabajo, nada mal para una humana.
Rosa: Agradezco el cumplido, Baronesa -exclamó respondiendo el gesto con la misma gracia que la vampiresa.
Drácula: Ya veo, entonces si fueron ellos -mencionó con cierta acides, aun costándole aceptar que por muchos años vivió con la mentira de creer que fue un humano quien le arrebató la vida a su esposa.
Gene: Ni siquiera se molestaron en negarlo -mencionó divertido el no muerto en silla de ruedas- hasta el final defendieron su postura de que hacían lo correcto y que Martha era una vulgar traidora de la raza monstruosa.
Vlad: Aunque me atrevo a decir que se iban arrepintiendo conforme les dábamos el golpe final -exclamó el patriarca del clan antes de extender su puño a su hijo menor, con cierto monstruo encogido dentro de este- por cierto. De mi para ti, hijo.
Allí se encontraba, esforzándose al máximo por liberarse del agarre del vampiro anciano, quien, a pesar de su edad, conservaba la fuerza de un ejemplar joven de su especie. Bela, sirviente del clan Drácula y leal al patriarca de la familia durante varias generaciones.
Quien a su vez, era el principal responsable de la tragedia que había llevado al incendio del castillo Lubov y a la muerte de Lady Lubov, conocida por todos como Martha Drácula.
Bela: ¡Todos ustedes son unos traidores! ¿¡Es que no lo entienden!? ¡Debía hacerse! ¡La condesa Drácula iba a matarnos a todos con sus ridículas ideas pacifistas! ¡Monstruos y humanos no pueden estar juntos! ¡La sola idea es una aberración! -grito con desespero la criatura tratando inútilmente de que sus ideas fueran escuchadas.
Drácula: Se nota que estar de cabeza te afectó finalmente, Bela -respondió con indiferencia a la insignificante criatura.
Bela: Mi cabeza está bien ¡la tuya se estropeó desde que hiciste clic con esa adoradora de humanos! -escupió con odio al vampiro que solo dirigió su atención a una de las armaduras.
Drácula: Trae la lámpara solar que pedimos para las criaturas planta -ordenó al objeto que solo corrió a cumplir la orden de su amo.
Mientras la lámpara solar se acercaba flotando, iluminando la habitación con un resplandor dorado, la tensión en la biblioteca era palpable. Los vampiros, antes tan seguros de sí mismos, se miraban entre sí con una mezcla de desconcierto y preocupación. La idea de que humanos y monstruos pudieran coexistir en paz fue una herejía para muchos de ellos durante mucho tiempo, y la furia de Bela solo intensificó el conflicto interno. Aunque una cosa era segura... humano, monstruo, no importaba, usualmente un traidor siempre tenía el mismo destino tarde o temprano.
Bela: ... Aunque trates de silenciarme sé que tengo razón ¡Monstruos y humanos son enemigos, siempre lo han sido y siempre lo serán! ¡Lo que hice fue por el bien de nuestra gente!
Drácula: Lo que hiciste fue sembrar el miedo para obligarnos a escucharte, haciéndonos olvidar que podemos defendernos. En este caso, lograste que olvidáramos que Martha, a pesar de ser una pacifista, habría luchado para proteger a Mavis -declaró con frialdad- y lo que es aún más grave, guiados por el miedo, hiciste que todos los monstruos se ocultaran de los humanos... Y, en cierto modo, me utilizaste para propagar la idea de que los humanos son peligrosos y que podrían masacrarnos si se les daba la oportunidad. Ya que al final, pudieron con Martha, una vampiresa de alta nobleza, cuando... -se detuvo un momento, soltando una risa amarga- me bastó con visitar un pueblo humano cerca del bosque hace poco para darme cuenta de que hay humanos fascinados con los monstruos, que la mentalidad de temernos ya ha comenzado a desvanecerse desde hace tiempo.
Lydia: ¿Fuiste a un pueblo humano? -pregunto sorprendida a su hermano menor que se encogió de hombros.
Drácula: Tuve mis razones.
Bela: ¡Esa adoradora de humanos te corrompió! ¡Vez las cosas como ella lo hacía, nos matarás a todos con ese pensamiento! -Hablo con pánico haciendo que el conde llegará a su límite.
Drácula: Te sugiero, si no quieres empeorar tu situación, que dejes de hablar de mi amada de ese modo... aunque honestamente dudo que puedas perjudicar más tu destino -declaró antes de encender la lámpara solar.
Siendo en ese momento que Bela sintió el verdadero terror.
Bela: ¡No pueden hacerme esto! ¡He sido un leal lacayo de la familia Drácula por siglos! ¡He estado al lado de su padre desde el principio! ¡Señor, dígales! -rogó al vampiro anciano que solo entregó al monstruo a su hijo con indiferencia.
Vlad:... Todo lo que yo veo, es a una criatura que se atrevió a asesinar a la esposa de mi hijo y madre de mi nieta. Un ser que lastimó a toda la familia como nunca antes alguien lo había hecho.
Lydia: Como tú fuiste el mayor perjudicado, hermano, supongo que tú eres quien merece el honor -exclamó la vampira mayor que solo deseaba que el castigo comenzará.
Drácula observó a Bela con una mezcla de desdén y tristeza. El antiguo sirviente, una vez leal y respetado, se había convertido en la representación de todo lo que había malinterpretado sobre la coexistencia entre humanos y monstruos. Sin embargo, la ira y el dolor por la pérdida de Martha aún ardían en su interior. De allí que sin esperar a escuchar una sola palabra más de nadie, solo encendió en interrupto tras dejar al monstruo encogido al alcalde de la luz solar artificial.
A su vez, con un último grito de terror, Bela fue consumido por la luz, desapareciendo en un destello que llenó la biblioteca de un brillo dorado. La habitación quedó en silencio absoluto. Los vampiros, atónitos, intercambiaron miradas; algunos estaban aliviados, otros no podían ocultar su inquietud. Y cuando el destello se disipó, todo lo que quedó de él fue su cuerpo petrificado sin vida.
Drácula:... Que esta sea una lección para todos, humanos y monstruos. De que nadie se mete con nuestra familia -declaró con la estatuilla en mano, mirándolo mientras pensaba qué bien servía como nada más que una decoración ahora o quizás como una pieza de ajedrez- ahora, se que algunos han volado de muy lejos, por favor quédense y descansen. A fin de cuentas, aún debemos decirle a nuestro mundo la verdad de lo que pasó con Martha.
Vampiro del concejo: ¿Estás seguro? -preguntó uno de los miembros del concejo vampírico- sería admitir que los vampiros infundimos el miedo a los humanos de forma injustificada. Nos haría ver débiles y hasta crédulos.
Drácula: Explicaré que las circunstancias, como el hecho de que mi padre consideró más relevante ofrecer sus condolencias por la muerte de Martha que preguntarme si Bela había llegado con el regalo para nosotros, me mantuvieron en la oscuridad sobre el hecho de que Bela había aparecido durante la revuelta, manteniéndonos en la ignorancia -explico sin tener intención de dar el brazo a torcer sobre el tema- como una de las especies que vela por el bienestar de los monstruos en general. Es nuestro deber hablar a los nuestros con la verdad y todos son conscientes de eso... No podemos darnos el lujo de ser orgullosos -declaró antes de ver de nuevo al monstruo recién ejecutado.
La petrificada figura de Bela, que ahora servía como un recordatorio de las decisiones trágicas y las divisiones que habían marcado a su pueblo. La sala permanecía en silencio, y el aire estaba impregnado de un extraño equilibrio entre la tensión y la liberación.
Lydia; Solo espero que no hayan más sorpresas, solo saber lo que pasó realmente con Martha me dio una terrible migraña. Odio que me vean la cara -dijo con fastidio, sentimiento compartido por varios de los presentes.
Dracula: De hecho hermana, aun quedan un par de sorpresas, una muy buena por cierto. Se trata de... -iba a hablar antes de que alguien más entrara a la habitación.
Tratando de nada más que de cierto infante que en parte por su edad aún no tenía claro el concepto de leer el ambiente o de tocar antes de entrar.
Dennis: Mira papa Drac, vuelo como tu. ¡Vuelo como mucielago! -dijo agitando sus brazos como si fueran alas en lo que su abuelo con una risa jovial tomó al menor en sus brazos.
Llamando la atención de la gran mayoría en el proceso.
Drácula: Claro que si, algún día volarás y será grandioso mi pequeño Dennisovich.
Gene:... Ok, creo que hablo por todos al preguntar. ¿Qué pasa aquí? ¿Y ese niño? -pregunto el vampiro incapacitado arqueando una ceja.
Drácula: Esa es fácil de responder. Familia, les presento a mi nieto, Dennisovich -declaro a todos los vampiros presentes que decir que estaban sorprendidos era quedarse cortos, antes de entrar en una euforia repentina.
A fin de cuentas, un nuevo miembro en el clan siempre era un motivo para la celebración.
Lydia: ¿Y cuando pensabas decirnos que Mavis tuvo un hijo? ¿Por qué ella ni siquiera nos invitó a la boda? Esa niña me va escuchar -exclamó con enojo ante la desconsideración de su sobrina.
Drácula: Si... es una historia graciosa...
Vlad: Así que tengo un bisnieto -dijo mirando de cerca al menor- ni te molestaste en invitarnos a su nacimiento siquiera, él merece conocer a su bisvambuelo
Lydia: ¿A su que?
Vlad: Bisabuelo vampiro. Vamos, era obvio querida -respondió divertido antes de ver el lugar de reojo- y ni hablar de este asunto del hotel. Mi hijo, de príncipe de la oscuridad, a rey del room service -dijo sin que Drácula se inmutara debido a que ya había pasado por el suficiente estrés emocional ese día.
Drácula: Papá. Al principio construí el lugar como un refugio para Mavis, pero luego pensé, ¿Y por qué no a otros monstruos? Una cosa llevó a la otra, y bueno, aquí lo tienes, y si de paso me hago un dinerito extra, ¿Por qué no? -respondió encogido de hombros.
Lydia: Además querido padre, ya te había hablado del hotel. Y de todo el papeleo que hubo que hacer para renovar los permisos luego de que estuvieran inactivos por más de un milenio ¿No recuerdas? -preguntó al anciano que se quedó pensando.
Vlad: En serio.... Mi memoria ya no es lo que era aparentemente.
Lydia: La verdad no me sorprende -suspiro algo resignada- incluso te hable de cómo tuve que lidiar con esa despreciable humana que quería conseguir los papeles primero para quedarse con el hotel... A veces creo que su marido y su hija la quieren demasiado para irse -mencionó antes de ver a su hermano menor- dime que ya se fueron o que la mujer al menos está en un manicomio para variar hermanito.
Drácula: Lamento decepcionarte querida hermana, pero siguen en la colina cercana al hotel. Aunque descuida, algo me dice que esa mujer irá al manicomio pronto -aclaro restando importancia al asunto.
Vlad:... Pues no me acuerdo -dijo encogido de hombros tras meditarlo un rato, lo que sacó más de un quejido de desespero por parte de la mayoría del clan.
No era nada nuevo realmente, la avanzada edad era otra cosa que llegaba afectar a todos por igual sin importar mucho la especie.
Drácula: Claro, pero si te pregunto la discusión que tuviste con el tío bernie sobre quién es más hermosa, Cleopatra o Nefertiti, de eso si te acuerdas -mencionó sacando una carcajada al anciano.
Vlad: ¿Qué te digo, hijo? Tu madre habrá sido mi Click, pero éste viejo siempre fue un Don Juan
Bernie: Un Don juan con mal gusto -exclamó su hermano- obviamente Cleopatra era más hermosa, hermano
Gene: Yo digo que Nefertari era la más hermosa, aunque Hatsheput tampoco estaba nada mal -mencionó con gracia el último del trío de veteranos del clan.
Lydia: Dejando de lado sus gustos en mujeres -dijo con cierto fastidio- supongo que la "historia graciosa" detrás del niño tiene algo que ver con éstos humanos aquí presentes, hermano -exclamó haciendo que su hermano menor soltara una risa incómoda.
Drácula: En realidad es de unos cinco años antes más o menos... Cuando Mavis desposó a... un humano.
Bastó con la simple mención de esa palabra para que el ambiente se sumiera en un silencio palpable, desprovisto de cualquier indicio de vida. ¿Es extraño? No realmente; más bien fue curioso e inusual, aunque también algo predecible.
Lydia: ... Disculpa, hermanito, creo que tengo algo en el oído, me pareció escuchar que ella desposó a... ¿Un humano? -repitió incrédula, mientras fruncía el ceño- ¿En qué estaba pensando Mavis?
Drácula: Bueno, la verdad es que al principio tampoco estaba de acuerdo -admitió, rascándose la cabeza con un gesto de frustración- pero Mavis ha crecido, y su amor por Jonathan... bueno, era genuino. Déjenme les cuento... -dijo tomando asiento.
Para acto seguido explicar con sumo detalle todos los sucesos ocurridos durante el cumpleaños número 118 de su hija así como la llegada del humano que de una u otra forma llegó para quedarse. Lo cual tuvo reacciones mixtas entre los demás no muertos.
Vlad: ¿Y qué hay de las tradiciones familiares? ¡Una Drácula casándose con un humano! -exclamó sacudiendo la cabeza en desaprobación- dejaste que mi nieta tuviera un hijo con un humano. Y tuvo un hijo humano, mejor solo clávame una estaca en el corazón
Drácula: Papá, entiendo la importancia de la nobleza en nuestra sangre y todo, pero... Ellos hicieron clic -dijo logrando que más de una mirada se ablandara solo con ese dato.
Gene: ¿Hicieron clic? Pero sólo se hace clic una vez.
Drácula: ¿Creen que no lo se? Pero así fue, hicieron clic, y como deben saber. La felicidad de mi hija es más importante para mi por encima de cualquier cosa -dijo sentando a su nieto en su regazo- la felicidad de mi hija y la de mi nieto también.
Vlad: Pero, hijo, ¿Y si el pequeño...?
Drácula: ¿Nace humano? Intento mantenerme abierto a la idea, pero no mentiré de que no me preocupa -reveló con algo de resignación pero también con optimismo- aun nos queda un par de años antes de los cinco años para que salgan sus colmillos y si no le salen ¿habría mucho problema?
Lydia: Es verdad, siempre puede ser mordido después, no le veo tanto problema a todo esto en realidad. Sea uno nacido o convertido, no nos importaría -dijo ganándose las miradas incrédulas de prácticamente todos los vampiros masculinos presentes que eran la gran mayoría- ... déjenme ver si adivino, se les olvidó que podemos convertir a humanos en vampiros mordiéndolos ¿no es así? -cuestionó mientras se masajeaba la frente, obteniendo como respuesta más de una risa incómoda.
En defensa de ellos, el hecho de haber abandonado las costumbres bárbaras desde hacía siglos los había hecho olvidar más de un detalle de sus viejas prácticas.
Gene: ¿Y qué nos puedes decir del marido de Mavis? -pregunto cambiando el tema.
Drácula: Ejem, bueno, respondiendo a tu pregunta querido tío Gene. Pues veras... Johnny es... Especial por así decirlo -trato de formular las palabras correctas- es algo... entusiasta, y un poco... demasiado informal, pero de que ama a Mavis y que está fascinado con los monstruos, eso es un hecho. Con todo es un buen muchacho... Su familia por otro lado -susurro con el ceño fruncido al final- los padres están bien, pero se nota que el resto aún... procesa la idea.
Lydia: Ya veo... -termino diciendo tras meditarlo- en todo caso, en realidad nada de esto me sorprende. Mavis siempre fue... Muy de mente abierta según lo que recuerdo de nuestro tiempo juntas
Gene: Es cierto, ella salió más parecida a Martha -dijo mientras que por su parte la única vampira que faltaba hacía acto de aparición.
Mavis: Oye papá ¿Dennis está contigo? es hora de su merienda y... Oh vaya -dijo antes de quedarse mirando a toda la familia reunida por unos cuantos segundos- llegaron más pronto de lo que esperaba.
La hija del conde contemplaba a su padre, rodeado de familiares y amigos, cuyas expresiones fluctuaban entre la sorpresa y la incredulidad. La biblioteca vibraba con una intensa energía, impregnada por las emociones que despertaba en la familia el reciente encuentro con su hijo y la inesperada noticia de su matrimonio con un humano.
Vlad: ¡Mavis, mi niña! -fue el primero de dar un paso al frente y tomar a la joven vampiresa en sus brazos que gustosa correspondió el abrazo.
Mavis: Abuelo, no te veía hace décadas. Te hubiera invitado a la boda, a todos pero... Papá me recomendó que era mejor que fuera algo discreto.
Lydia: Me imagino por qué -menciono con fastidio cruzada de brazos, haciendo a su sobrina tragar grueso al reconocerla.
Mavis: Tía Lydia... También estás aquí -dijo usando todas fuerzas para no mostrar incomodidad o nerviosismo ante la imponente mujer que hizo una leve reverencia en señal de saludo. Debido a que vívidamente recordaba más de un desacuerdo entre ambas.
Y si que eran intensos, al menos de parte de la mayor.
Lydia: Mavis -acabó siendo todo lo que dijo antes de darle espacio a otro vampiro de más edad.
Gene: Mavis, ¿No hay abrazo para tu viejo tío Gene? -pregunto solo para acabar teniendo a la joven encima suyo dándole una clara muestra de afecto al vampiro que le sirvió de figura paterna el tiempo que su padre estuvo lejos atendiendo asuntos del concejo.
Si, la heredera del clan estaba más que feliz de ver a sus familiares, con algunas excepciones evidentes. Como la de cierto primo suyo que en el mejor de los casos se podría decir que su relación era... incómoda.
Klaus: Ma... -dijo acercándose con los brazos abiertos solo para ser detenido.
Mavis: Tampoco abuses, Klaus
Klaus: Valía la pena intentarlo -mencionó encogido de hombros con burla.
Vlad: Ahora, nenita -habló el venerable llamando la atención de su nieta- ¿Es cierto? ¿Hiciste click con un chico humano? -pregunto de una vez, solo logrando que la chica se pusiera en pie de guerra casi automáticamente.
Mavis: Si, lo hice. Y antes de que cualquiera diga algo, Johnny es el amor de mi vida -dijo con decisión- y no dejaré que digan nada sobre él o que en vez de eso le hagan nada. Como mi familia deberían entenderlo y estar felices por mi.
En respuesta, la biblioteca fue invadida por un silencio reflexivo. Cada uno de los vampiros presentes sopesaba las palabras de Mavis, la idea de una nueva era de aceptación y amor que desafiaba lo que habían conocido durante siglos. Pero de todos, quien dio la que sería la decisión final fue el patriarca del clan, cuya respuesta sorprendió a todos.
Vlad: Entendemos, linda, sólo nos tomó por sorpresa, aunque si te hace feliz, seremos felices.
Mavis: ¡Aja! ¡Sabía que dirían eso! Pero deben entender que soy una adulta ahora, puedo tomar mis propias decisiones y... ¿Qué fue lo que dijiste? -pregunto luego de procesar lo que su abuelo dijo.
Vlad: Escucha, aún vamos a tener que hacernos a la idea, pero primero creo que hay que conocer al chico antes de hacernos un juicio -dijo buscando no asustar o alterar a la joven que miró a todos con desconfianza antes de ver a su padre.
Mavis: ... No será como ese pueblo falso que construiste para persuadirme de no salir al mundo exterior, ¿Verdad, papá? -preguntó al conde que soltó una risa incómoda ya que había omitido esa parte de la historia.
Lydia: ¿Pueblo falso? ¿En serio? -preguntó con sarcasmo, no sorprendiéndose realmente ya que estaba acostumbrada a las tonterías de padre e hija.
Drácula: Valía la pena el intento -dijo nervioso antes de solo respirar hondo- pero no es el caso, como ves solo con que tu tía Lydia esté involucrada es la prueba de que no es ninguna jugarreta.
Lydia: Es cierto, no aprecio las payasadas -dijo logrando calmar a la vampiresa más joven.
Una circunstancia de lo más inusual para quienes conocían tanto la relación como la historia de ambas mujeres. Que en resumidas cuentas era la clásica disputa por la diferencia de mentalidad entre generaciones.
Marvin: En tal caso estoy segura de que les encantará Johnny, todos en el hotel lo adoran.
Drácula: Es cierto, se ha vuelto muy apreciado por los huéspedes -exclamo apoyando a su hija.
Lydia: Mientras el orden y el control prevalezcan está bien -declaró casual- aunque ya no sea la administradora el hotel sigue siendo importante para mi
Drácula: No diré que los empleados sean como un ejército disciplinado y serio... pero la manera en que Johnny mantiene la moral alta, conversando con todos y prestando atención a sus sugerencias para luego anotarlas y enviármelas para su revisión, ha logrado que su eficiencia se duplique en comparación con antes -admitió- incluso hace que los zombis se sientan felices, eso es algo impresionante
Gene: Es cierto, usualmente los zombis están amargados por su condición -mencionó antes de que algo o mejor dicho, alguien, llamara la atención de todos.
El cual se trataba del propio Johnny quien parecía un perro regañado quien llevaba su mochila al hombro junto a un par de maletas, además de que incluso puso música triste con su celular para dar el ambiente. Logrando que todos lo vieran sin saber exactamente qué pensar.
Johnny: Entiendo que lo arruine Drac, no tienes que decirlo -dijo cabizbajo sin ver a nadie realmente- y para enmendar mi error, me iré y jamás volveré. Haré una fortaleza de soledad, en la oscuridad, para siempre... solo, solin, sólito -exclamó mientras se perdía de vista.
Drácula:... Se pasó de soledad -se expresó con cierta molestia.
Johnny: ¡Exactamente! -termino de gritar a lo lejos ya yéndose, aparentemente.
Mavis: ... ¿Exactamente de qué me perdí? -preguntó en cierto modo ya acostumbrada a las payasadas de su marido.
Drácula: Se echa la culpa por lo de que su publicidad causó algunos imprevistos. Tráelo antes de que haga algo tonto.
A lo cual su hija le dio un punto y procedió a moverse rápidamente hacia la salida para alcanzar a su esposo antes de que se alejara demasiado e hiciera alguna de sus excentricidades sin querer... lo cual era muy usual si debía ser honesta.
Vlad: ¿Ese es el marido de Mavis?... Es... simpático -terminó confesando luego de que nuevamente todos meditan en silencio, lo cual parecían hacer mucho en general ese día en específico.
Era mucho que procesar al fin y al cabo.
Drácula: Como dije, no sólo se enamoró de Mavis, se enamoró del hotel, y la idea de que lo pudo perjudicar para él es imperdonable. Dice que es el lugar donde puede ser el mismo.
Rosa: Imagino que porque está acostumbrado a que lo tilden de raro y excéntrico, algo entendible -dijo tomando té con calma junto a su tío y su primo
Momento en que los vampiros recordaron que no eran solo ellos los presentes en esa reunión.
Gene: Honestamente se me había olvidado que estaban allí... Si que son buenos pasando desapercibidos -admitió impresionado.
Héctor: Es un don, en todo caso, me presento, damas y caballeros -exclamó poniéndose de pie- soy el CEO de Rivera Solutions, Héctor Rivera -dijo haciendo una reverencia a los presentes.
Solo para en el acto recibir una bofetada de parte de la baronesa que casi le desmonta la quijada.
Héctor: ¿Y eso por qué? -preguntó consternado y adolorido.
Lydia: ... Ni yo sé, sentí que debía hacerlo -admitió mirando con extrañeza su mano, a lo cual tanto Miguel como Rosa solo se encogieron de hombros en plan de decir sin hablar que nadie la juzgaba.
Rosa: En todo el caso, volviendo al tema, la razón de que estemos aquí es que nuestra empresa acaba de acordar un acuerdo con el conde Drácula para mover el hotel de Transilvania a San Fransokyo, Estados Unidos -dijo llamando la atención de todos- soy Rosa Rivera, por cierto. Asistente de CEO pero prácticamente quien maneja todo.
Y decir que hubo reacciones de sorpresa ante dicha revelación era quedarse corto.
Gene: ¿Mover el hotel?
Lydia: Pero, hermano...
Drácula: Lo sé, Martha está aquí... -dijo con desanimo- pero debo pensar en la seguridad de mis huéspedes y también en la de mi nieto -dijo aun abrazando al niño que tenía en sus brazos que se estaba quedando dormido.
Vlad: ¿Entonces qué, hijo? ¿Moverás todo, incluida la tumba de Martha?
Drácula:... Esa es más o menos la idea, espero que Martha me perdone por perturbar así su descanso.
Lydia: Seguro entenderá -dijo colocando su mano en el hombro de su hermano- ¿Qué pasa aquí exactamente? -pregunto consiguiendo una mueca de disgusto en el rostro de su hermano menor.
Dracula: Los gobiernos humanos pusieron sus ojos en el hotel. Solo hoy un agente de CIA intentó infiltrarse para conseguir información del hotel junto a un monstruo que trabaja para los militares americanos del área cincuentaitantos -reveló para la sorpresa de varios de los presentes.
La atmósfera en la biblioteca se tornó tensa de inmediato. Los murmullos comenzaron a extenderse entre los vampiros presentes, y el ambiente festivo que había surgido tras la llegada de Dennis y la revelación de Mavis se desvaneció rápidamente.
Lydia: ¿Un agente de la CIA? ¿Y un monstruo militar? ¿Qué demonios está pasando en el mundo humano? -preguntó con incredulidad, mientras la preocupación se reflejaba en el rostro de todos.
Rosa: Capturado en el 61. Desde entonces lo tenían cautivo y prácticamente está convencido que el mejor estilo de vida posible y cómodo que le queda en este mundo es sirviendo a los militares -explicó casual.
Drácula: Ahora mismo la prioridad es mover el hotel a un nuevo escondite. Es mejor prevenir cualquier posible conflicto del mundo exterior qué no nos concierne pero del que nos pueden obligar a participar -dijo dando punto final al asunto.
Para acto seguido proceder a dirigirse a la sala de conferencias donde ya se encontraban todos los monstruos que residían en el hotel, quienes esperaban pacientemente la llegada del conde para que éste expusiera los hechos detrás de lo sucedido con su esposa, tema que todos creían conocer del todo pero que en realidad, ese no fue el caso.
La sala comenzó a llenarse de murmullos de entendimiento y comprensión una vez los hechos fueron expuestos en su totalidad, y aunque había incertidumbre, también había un sentido de propósito renovado. Además de un sentimiento de enojo ante cierto monstruo que causó tantas desgracias en el mundo monstruoso orquestando la muerte de Lady Martha.
Murray: ¡Al diablo las disculpas! ¡Que el asesino pague! -levantó la voz la momia expresando una idea que muchos de los demás monstruos compartían. Martha fue muy querida y amada por todos.
Drácula: Descuiden, eso ya está resuelto -dijo haciendo que más de uno de sus amigos arqueara una ceja.
Eunice: ¿De qué hablas, Drac? -preguntó con sospecha la esposa del monstruo de Frankenstein.
A lo cual la respuesta del vampiro fue mostrar tranquilamente la figura petrificada del difunto traidor, dejando a todos sin palabras.
Drácula: Como ven, es mi nuevo pisapapeles -reveló para impresión y alivio de todos.
Frank: Bueno, final feliz, ahora ¿Qué hay en el buffet? -pregunto ya dando todo por sentado.
Drácula: De hecho hay otro anuncio Frank, mi hermano... Nos mudaremos, dentro de unos días cerraremos el hotel y nos iremos a otro lugar -dio el que se podría llamar el segundo anuncio.
La sala se llenó de murmullos de sorpresa y confusión tras las palabras de Drácula. Los monstruos se miraban unos a otros, tratando de absorber la noticia de que su hogar, el Hotel Transylvania, sería trasladado a una nueva locación.
Todos:¿Queeeee....?
Wayne: Momento que soy lento ¿Cerrarán el hotel? -preguntó el hombre lobo sorprendido en lo que su esposa le puso una mano en el hombro.
Wanda: Pero fue el lugar que hiciste para Martha, el lugar para proteger a Mavis y que ahora es para cuidar de Dennis.
Drácula: El asunto es que nos han ofrecido reubicarnos a un lugar que nos permitirá eso y, además, seguir abriendo las puertas a humanos dispuestos a conocernos como individuos -trato de explicarse lo mejor posible- ahora que sabemos que los humanos no tuvieron nada que ver con el incidente de hace más de un siglo. Es tiempo de dejar atrás el miedo y el odio, y comenzar de nuevo. Nos aseguran que el lugar será aislado y seguro. Un sitio donde podremos convivir con una parte del mundo humano, sin riesgo de que los humanos con malas intenciones vengan por nosotros -dijo impresionando a todos.
En lo que por su parte tanto Hector como Rosa pensaban en el alivio de que dado los sucesos más recientes que han ocurrido en San Fransokyo (irónicamente desde la aparición de los Grandes Héroes), la gente de San Fransokyo tenía la mente más abierta en comparación con otros lugares.
Rosa: Aunque suene feo decirlo, benditos sean los criminales de la ciudad que acostumbraron tanto a los habitantes a cosas poco comunes qué cosas como el odio o miedo a los monstruos es prácticamente un problema inexistente -susurro a su tío que asintió estando de acuerdo.
Héctor: Y además, con lo de que Pegajoso se hizo un héroe, hizo las cosas más fáciles -dijo para luego continuar prestando atención al vampiro.
Drácula: Se los aseguro, el futuro nos espera, ya los tiempos de vivir en la oscuridad han terminado mis amigos y amigas -finalizó la sesión informativa. Y ahora proceden las preguntas.
Eunice: ¿Y exactamente a dónde nos vamos?
Drácula: San Fransokyo, California
Griffith: ¿El lugar que solía ser San Francisco antes de ese terremoto? -preguntó el hombre invisible haciendo memoria.
Eunice: De las peores lunas de miel, terminamos desmembrados por toda la ciudad -mencionó con el ceño fruncido antes de ser abrazada por su marido de forma juguetona.
Frank: Aunque fue divertido buscar las piezas, ¿No, bombón? -pregunto logrando sacarle una risa coqueta.
Murray: ¿Entonces nos iremos a América? Que bien ¡siempre quise comer sus hamburguesas! -dijo ya viendo el lado positivo del asunto.
Griffith: ¿Necesitas ayuda para guardar algo? ¿Poner a alguien en alguna caja?
Drácula: La mudanza será en unos días, aún no es oficial -declaró con alivio al ver el optimismo de sus amigos, clientes y empleados- primero se debe construir el nuevo complejo.
Héctor: De eso no se preocupe Conde -dijo consiguiendo la atención de los presentes- ya tengo a mi división científica creando experimentos para facilitar todo el trabajo.
Y si, prácticamente estaba jugando en la cuerda floja al comenzar la producción de varios experimentos sin haber hecho algún negocio o tenido alguna reunión previa con la gran concejal pero bueno... Quien no arriesga no gana.
Wanda: ¿Experimentos? -preguntó con curiosidad la mujer lobo.
Rosa: La biotecnología es una de nuestras ramas. La creación de nueva vida que beneficie al planeta. Como a este pequeñito -dijo con un mayoi en mano sacando sonidos de ternura a la gran mayoría.
¨Definitivamente fue buena idea traer a uno del nuevo lote como un por si acaso como publicidad¨, fueron los pensamientos de la sobrina del CEO que siendo sinceros, de ella tener la mayoría de edad perfectamente todos se cuestionarían porque era su tío quien estaba a cargo y no ella. Siendo la respuesta algo tan simple como que con todo, a ella no le gustaba ser el centro de atención.
Wanda: ... Wayne, Murray, más vale que no se atrevan -dijo notando que ambos monstruos miraban al monstruito con ojos de carnívoros.
Rosa: Sería lo mismo a una ensalada. No tiene nada de carne -exclamó casual haciendo a la momia y al lobo chasquear los dedos con decepción.
Griffith: Por no decir que yo sigo traumado por lo de Wayne y las ovejas
Wayne: Y yo sigo diciendo que no hay diferencia entre eso y comer chuleta ya servida en un plato -se defendió con molestia porque no dejaran el tema de una vez.
Héctor: En fin... Nuestro plan será volver nuestra ciudad una ciudad estado, un país independiente. Un país que sea una verdadera tierra para todo el mundo, incluyendo a todos ustedes -dijo logrando que los murmullos comenzaran al no saber qué pensar de una idea tan descabellada.
Miguel: Esta es una promesa de campaña muy alta -susurro a su prima- más nos vale que esté general Monger tenga secretos interesantes o de lo contrario estos planes de adelantar la separación de Estados Unidos serán más complicados de lo calculado.
Porque si, ese fue el plan secreto en el que la familia Rivera estuvo trabajando durante la reunión familiar de los Drácula. En resumidas cuentas, iban a tenderle una emboscada a Monger haciendo que de algún modo hiciera acto de aparición, el cual al ser un general de un área ultra secreta que seguro tendría más de un trapo sucio del gobierno estadounidense, la idea era convencer o lograr sacarle algo de esa información con la cual chantajear al presidente y a cualquiera del parlamento o del pentágono y así obtener la soberanía que querían.
No se preocupaban por la alcaldesa de San Fransokyo ni del gobernador del estado de California, al menos por su parte Rosa pensaba que seria mucho mas sencillo lograr convencerlos o solo asegurarse de que no se metieran.
Rosa: Seguro los tiene. De momento plantemos la carnada, mira lo que encontré entre las cosas del eslabón -dijo mostrando un llavero con un botón- un dispositivo de emergencia. Solo pulso el botón, y enviará a la base una señal de S.O.S
Miguel: Supongo que en caso de que fuera descubierto -dijo casual- vamos a esperar a que se calmen las aguas para traer a los perros de los militares aquí o nos perderemos el brunch nocturno qué organizó el conde -mencionó señalando que ya los esqueletos iban a tocar música y la mesa de comida fue colocada por orden del vampiro.
Rosa: Miguel, hay prioridades -declaró inexpresiva- además, no se tu pero a mi me da cosa que la mitad del menú esté vivo.
Miguel: Ay, vamos, has comido la comida de mi papá, dudo que sea peor -respondió encogido de hombros mientras se servía del buffet- por cierto ¿está bien que lo dejemos solo? -pregunto señalando a su padre que estaba haciendo conversación con algunos monstruos.
Rosa: Está es una buena oportunidad para hacer contactos. Desconfío de mi tío para las decisiones empresariales, pero de nosotros tres es el mejor socialmente hablando -admitió con certeza.
Miguel: Pues su historial con mujeres no ayuda mucho, te recuerdo
Rosa: ¿Por qué crees que le puse un collar de choques por si las dudas debajo del cuello de tortuga? -pregunto divertida.
Miguel: ... ¿Por qué es gracioso verlo electrocutarse?
Rosa: También -admitió de buena gana- pero además porque es mejor prevenir que lamentar. Vamos, tú serás quien se encargue del equipo monstruo y alien, la pelea será en el bosque -mencionó en lo que su primo solo rodo los ojos con molestia fingida.
Miguel: Todo yo, todo yo.
Rosa: Considerando que disfrutas de usar esos músculos para coquetear con Hiro y hacer que tenga sueños húmedos contigo, si -declaro como si nada.
Como se notaba el cariño entre familia al hablar de tú a tú sin temer avergonzarse en el proceso.
Miguel: Siempre he preferido pensar que le gusto por mi personalidad.
Rosa: También, pero ambos sabemos que la gente come con los ojos antes que nada primero -mencionó con sinceridad.
Miguel: Como sea. Entonces, ¿Cuándo crees que lleguen? -preguntó refiriéndose a los compañeros del eslabón perdido.
Rosa: Considerando que aparentemente Monger es un paranoico diría que apenas pulse el botón... de 20 a 30 minutos.
Miguel: Eso debería bastar para que coma algo, ¿No?
Rosa:... ¿En serio te vas a comer eso? -cuestiono señalando el tazón que su primo ya tenía en mano lleno de albóndigas gritonas.
Miguel: ... Meh, la comida de mi papá es peor.
Rosa: Exagerado -exclamó rodando los ojos-... Aunque por algo siempre pedíamos a domicilio -reveló antes de fruncir el ceño al notar la mirada de su primo que tenía cara de decir ¿lo ves?- Vámonos ya. La emboscada no se hará sola.
Y como bien algunos dicen que basta con decir el nombre del diablo para que este haga acto de aparición, la baronesa Lydia salió de las sombras justo detrás de ambos primos, que al verla de cerca se dieron cuenta de dos cosas. Era una mujer muy seria, se notaba a simple vista... ¿y esa era una gallina en su bastón?
Lydia: ¿Dijiste emboscada? -preguntó con inusual interés.
Rosa: Baronesa... verá, nosotros...
Miguel: De hecho sí -dijo ocurriéndosele una idea rápida- ¿Qué tanto le gusta a los vampiros pelear y capturar presas? -preguntó provocando una sonrisa maliciosa en la mujer.
Lydia: No tienes idea, muchacho.
Miguel: Pues está de suerte ¿Qué opina de que toda la familia Drácula realice una improvisada competencia de cacería? No matar es la regla, gana quien capture a más enemigos -ofreció con la intención de ganarse la confianza del resto del clan, y para su suerte, la oferta llamó la atención de la baronesa.
Lydia: Continúa...
____________________________________________________________________________
(Tiempo después)
(Bosque oscuro, cercanías del hotel)
La noche era oscura y estrellada, el bosque se presentaba como un lugar enigmático y fascinante. Las sombras de los árboles se alzaban como siluetas espectrales, sus ramas retorcidas se entrelazan en lo alto, creando un dosel que filtra la luz de la luna, proyectando patrones inusuales sobre el suelo cubierto de hojas muertas. Un suave susurro del viento atraviesa el bosque, como si los propios árboles compartieran secretos.
La atmósfera está impregnada de un aire de misterio. El canto lejano de un búho resuena en la noche, mientras que, de vez en cuando, se escucha un crujido sutil, como si algo o alguien se moviera entre la maleza. Siendo en este caso un grupo conformado tanto por seres nativos del planeta como otra clase de criaturas provenientes de más allá de las estrellas. Los equipos monstruos y alien del área cincuentaitantos, creados por el general Warren R. Monger con el fin de ser una respuesta rápida para amenazas sobrenaturales del planeta.
Y ahora su misión era rescatar a Link que aparentemente había sido descubierto, para preocupación de sus compañeros de equipo y fastidio para cierto alien en particular.
Coverton: Excelente forma de pasar mi noche, estaba a mitad de... Un importante tiempo de relajación cuando me hicieron venir porque el pez cabeza hueca fue capturado por otros monstruos, moraleja, él no sirve como espía -exclamó con fastidio el alien con poderes telepáticos que irónicamente era incapaz de moverse sin ayuda de una silla gravitacional, o recorrer grandes distancias en todo caso.
Dr Cucaracha: ¿Y realmente crees que a ti te habría ido mejor? -pregunto con burla el hombre mitad cucaracha ganando un bufido como respuesta.
Sqweep: Considerando las circunstancias es muy probable que no, dado a que los monstruos del así llamado hotel son arcaicos y tu silla te habría delatado rápidamente, Coverton -respondió él en cierto modo más joven de ambos grupos que no despegaba su mirada de su tableta escolar.
Sta'abi: Seguramente ya estarías asado al horno -respondió con burla la alien cazadora mientras acariciaba la cabeza de su perro de caza, el Vornicarn.
Coverton: Gracias por el voto de confianza -exclamó con sarcasmo mientras que por su parte la de apariencia más humana de todo el grupo no podía evitar mostrar preocupación por su amigo.
Susan: Para que Link pida ayuda significa que es algo serio, el pobre debe estar en problemas muy graves -mencionó llamando la atención de cierta bola de baba azul que ciertamente ni sabia donde estaba parada pero que tenía algo de comprensión del asunto.
B.O.B.: O puede ser que nos está preparando una fiesta sorpresa -dijo sonriendo- sabía que no olvidaría mi cumpleaños.
Dr. Cucaracha: Bob, tu cumpleaños fue hace unos meses.
B.O.B:...¡Y me perdí la fiesta sorpresa! -dijo haciendo que todos solo se le quedaran viendo.
El grupo se quedó en un silencio incómodo, mientras las palabras de B.O.B. resonaban en el aire nocturno. Si, era un hecho que eran un grupo en conjunto muy disfuncional, pero era lo que había, ni más ni menos.
Coverton: Alguien recuérdeme por qué lo trajimos a él y no a la mariposa.
Sqweep: Porque mariposaurio es muy grande y llama mucho la atención.
Coverton: ... Aún así
Susan: Ya dejen de quejarse -dijo con algo de desespero- solo debemos encontrar a Link e irnos, puede estar en cualquier parte, el...
B.O.B: Lo encontré, está allí -dijo señalando al dichoso eslabón perdido.
Quien estaba atado con cadenas y amordazado a mitad de un claro iluminado por la luna. Lo cual obviamente alertó a todos ya que parecía demasiado sospechoso, a todos menos B.O.B
Susan: ¡Link! -dijo corriendo a donde estaba su amigo seguida de los demás monstruos mientras los aliens se quedaron atrás.
Sta'abi: A STA'AAABY esto no le gusta... Se siente el peligro en el aire -declaró ya con lanza en mano en lo que los monstruos liberaron a su compañero.
Susan: Link ¿estas bien? ¿Qué pasa? -pregunto quitándole la mordaza.
Link: ... Deben irse de aquí ¡es una trampa! -declaro viendo con pánico a los murciélagos que se encontraban en los árboles, varios de ellos, oh bueno, lo que se veía eran sus ojos rojos en todas partes.
Pero antes de que pudieran decidir qué hacer, un estruendo resonó entre los árboles. Los murciélagos comenzaron a descender en picada, sus ojos brillando con una intensidad aterradora. El aire se llenó de un batir de alas y un grito agudo que heló la sangre de los monstruos, en especial al percatarse de que estos se encontraban cambiando de forma, en aspectos más humanos... vampiros.
Lydia: Ya conocen las reglas -dijo liderando la marcha dando un paso al frente- los monstruos valen 100 puntos, los extraterrestres 150 y los soldados humanos 50 puntos. Quien gane se queda con el derecho de presumir los próximos doscientos años
Gene: Quien atrape al cabezón gris, cuiden la silla flotante que ya le eché el ojo -declaró con emoción.
Susan: Vampiros... son muchos.
Link: Y recientemente acaban de descubrir que fueron engañados por más de cien años. Y buscan con quien desquitarse -mencionó con acritud haciendo que todos se pusieran en alerta... o casi todos.
B.O.B.: ... Empiezo a creer que esto es una trampa
Sta'abi: ¡Pues STA'AAABI no caerá sin luchar! -soltó un grito de guerra antes de chocar su lanza con el bastón de la baronesa que sonrió por el reto.
Lydia: Qué bien, me encanta cuando las presas se defienden, lo hace más divertido. Y por cierto, me interesó tu mascota, seguro será una excelente bestia para el carruaje que pienso comprar -exclamó con diversión para enojo de la extraterrestre.
Sta'abi: ¡Está loco si cree que STA'AAABI lo dejará quedarse con Vornicarn, señor!
Lydia: ... Soy mujer -dijo con indiferencia haciendo que tanto los monstruos como los aliens se quedarán sin palabras.
B.O.B.: ... Órale...
Por su parte Lydia, con su sonrisa burlona, dio un paso hacia adelante luego de que Sta'abi se alejara por prudencia, como si disfrutara del caos que se avecinaba. Los vampiros que la acompañaban comenzaron a rodear al grupo, sus ojos brillando con avidez. La atmósfera se tornó tensa, como una cuerda a punto de romperse.
Momento en que el más joven de los alienígenas decidió dar el primer golpe, solo para notar que en un segundo tenía su tableta y al siguiente no tenía nada en sus manos.
Sqweep: ¿Qué?
Miguel: Esto parece avanzado, tecnología muy avanzada -dijo el humano llamando la atención de los recién llegados- seguro a mi prima le gustara.
Sqweep: Eso no es posible ¿Pero cómo?
Miguel: Muy bien vampiros y vampiresas, capturen a todos -dijo uniéndose a la baronesa- pero recuerden, no maten a nadie. No queremos dar la imagen de los monstruos de hace cientos de años.
Susan: Bien, a ponerse serios -declaró antes de que su traje comenzará a brillar.
Y donde antes había una chica de apariencia relativamente normal, ahora había una giganta en todo el sentido de la palabra.
Miguel: Vaya, mujer gigante... Me la pido, ella por la dificultad seguro vale 200 puntos -menciono sonriendo de oreja a oreja.
Gene: ¿Por ser monstruo, por ser grande, o por ser mujer?
Miguel: Por grande. Vamos, en tamaño vale mínimo para 3 monstruos.
Gene: Y por ser mujer seguro vale lo cuádruple -dijo divertido- bueno, ya que estamos pidiendo ¡Tu silla será mía! -dijo con un mazo de madera en mano para perseguir al alien de la silla flotante.
Para que acto seguido ambos bandos se enfrentarán, y el resultado, bueno... digamos que era de esperarse.
________________________________________________________________________
(Un momento después)
(De vuelta en el hotel)
Frank: A ver... Aja, sumamos dos, llevamos tres... -dijo contando la puntuación de todos los participantes que capturaron con éxito objetivos en el juego de cacería- y la ganadora de la competencia de caza es... ¡Lydia! por capturar a dos alienígenas y un buen grupo de soldados haciendo un total de 600 puntos.
Miguel: ¡Sigo diciendo que fue arreglado!
Frank: Los monstruos valían 100 puntos, no importa el tamaño o el género -explicó en lo que el moreno se cruzó de brazos haciendo un puchero- no me malinterpretes, hijo, es impresionante que capturaras a la gigante, pero sigue siendo sólo una -aclaró señalando a Genormica, alias Susan qué estaba atada de pies hasta la cabeza con cables eléctricos tomados de una autopista cercana.
Mientras que por su parte la vampiresa se encontraba en la novena nube disfrutando de su tiempo, lo que hizo a más de uno suspirar.
Mavis: Y ya recuerdo porque nunca me entusiasmaba competir con la tía Lydia... Siempre se toma en serio arrasar la competencia -declaró con una gota de sudor.
Drácula: Y te doy la razón, querida.
Susan: ¿Por qué nos capturaron? -pregunto llamando la atención de todos a la vez que intentaba soltarse, pero eran buenos nudos- ¿Qué quieren de nosotros?
Hector: En términos simples ¿de ustedes? nada -dijo subiendo al estrado junto a su sobrina y su hijo- ¿Del general Monger? Esa es otra historia. ¿Cuándo creen que se nos una el buen general? -pregunto haciendo que los capturados se vieran entre sí.
Dr. Cucaracha: Pues si me dieran mi comunicador puedo enviar un mensaje para que el venga en persona con un batallón ya como último recurso -declaró haciendo que el humano y la mujer vampiro se vieran entre sí con interés.
Miguel: ¿Qué dice, doña Lydia? ¿Revancha?
Lydia:... ¿Doble o nada? Me gusta como piensas -dijo para acto seguido permitir que se le llamara al general.
—
(Un segundo asalto después)
Lydia y Miguel: ¡Pido un recuento! -exigieron igual de molestos al ver cómo fueron superados por quien menos se esperaban ya que parecía que no se lo tomaba en serio.
Drácula: ¡Ja, les gane! Soy el mejor! -declaro haciendo un baile de la victoria ciertamente vergonzoso frente a todos.
Frank: Ya hicimos el recuento tres veces, Drac capturó suficientes humanos para superarlos a ustedes por apenas 50 puntos -respondió haciendo que ambos protestantes gruñeran con fastidio.
Siendo allí donde el nuevo cautivo que a la vez era la ¨estrella¨ por así decirlo, decidió que era momento de llamar la atención como solo un general del ejército conocía. Y que no se diga que no tenía una voz potente, ha tenido décadas de experiencia en la milicia, al fin y al cabo hablábamos de un hombre de casi cien años de edad (con una excelente condición física cabe decir).
Monger: ¿Qué se supone que significa esto? ¡Exijo una explicación ya! -grito a todo pulmón a la vez que el CEO de Rivera Solutions solo se acercó con diversión al hombre.
Héctor: Calmantes Montes, general. Está no es su base para exigir nada -dijo sonriendo- es más, es usted quien debería explicar qué hace un equipo táctico americano en suelo no estadounidense.
Monger: Eso no es de su incumbencia, civil... ¿De hecho puedo preguntar qué hace un humano aquí? Porque aquí entre nosotros, no me parece un turista para nada -dijo retando con la mirada al otro hombre que ni se inmuto.
Héctor: No lo soy, soy un socio comercial -explico- y si está dispuesto al diálogo y dejamos de lado toda esa basura del patriotismo y que Estados Unidos es el mejor país del mundo y todo eso. Espero que seamos socios también.
La tensión en la sala era palpable, pero a pesar de su apariencia intimidante, había una chispa de curiosidad en la mirada del general que tenía curiosidad de ver a donde iba el asunto. No era común que un civil se atreviera a hablarle de esa manera, y menos a un general del ejército, pero además, había algo en ese tipo que le llamaba la atención, era algo en esa mirada que era atrayente de una forma interesante... pero a la vez, peligrosa.
Monger: ¿Socios? -preguntó con recelo, siendo la respuesta a la pregunta el ser liberado junto a los monstruos y los extraterrestres que no se esperaban esa acción por parte de sus captores.
Héctor: Bien, tomemos asiento -dijo sentándose en un sofá que floto y se posicionó justo detrás del latino para que este se sentará- ¿algún aperitivo? El chef Quasimodo está medio loco pero es un Gourmet de primera -dijo en lo que una mesa de aperitivos también aparecía frente a ellos.
Trompas bubónicas en su punto, pate de cucaracha, gelatina de ratón, chinches en conserva, entre otros platos... todo un festín monstruoso. Que para sorpresa de la mayoría, Monger aceptó y comió hasta con gusto.
Monger: Estuve en el frente de batalla más de una vez, he comido cosas peores.
Héctor: Qué coincidencia, yo también -admitió también sirviéndose y degustando la variedad de alimentos.
Monger: Por cierto, Quasimodo... ¿Cómo el de la novela francesa?
Héctor: Al parecer un pariente lejano -mencionó casual- bueno, mejor no alarguemos esto, general... Quiero independencia, más específicamente, deseo separar a San Fransokyo del resto de Estados Unidos. Volverla una ciudad estado de fronteras cerradas.
Y solo bastó con decir eso para que el militar, que mostró una actitud petulante y arrogante para mostrar que no se dejaría intimidar, se quedó boquiabierto ante tal declaración.
Monger: ¿Disculpe....?
Héctor: Ya me escucho.
Monger: ... Lo que está diciendo es traición -dijo con una fría seriedad- ¡si los altos mandos se enteran de esto será fusilado, usted y cualquier otro involucrado!
Héctor: ¿Y usted no? -preguntó sin inmutarse- porque algo me dice que en sus más de noventa años de vida, hizo más de una cosa digna de una corte marcial.
El general se quedó en silencio, la mirada fija en Héctor. El ambiente se volvió más denso mientras la realidad de la situación comenzaba a calar en el hombre mayor. No era la primera vez que se encontraba en una situación complicada, pero esta era diferente. La propuesta de Héctor era audaz, casi suicida, y lo que más le inquietaba era la confianza que el joven (porque a sus ojos lo era) le estaba mostrando..
Monger: ¿Cómo sabe...?
Héctor: No sé nada -respondió con cierta diversión maliciosa en su mirar- pero en varias décadas trabajando en un lugar como el área cincuentaitantos... Sus secretos deben tener secretos ¿o no general?
Rosa: Como que su científico monstruo, el doctor Cucaracha, tuvo que hacer una presentación para graduarse de la primaria para hacer válido todo su trabajo posterior -dijo divertida metiéndose en la conversación, incomodando de paso al hombre mitad insecto.
Dr. Cucaracha: ¿Cómo es que...? -pregunto en lo que la joven mostró el dispositivo del alien más joven en sus manos.
Rosa: Estoy hackeando sus computadores desde aquí por medio del artefacto del pequeñín rosado y estoy encontrando mucha información interesante aquí -declaró para sorpresa del infante.
Sqweep: No es posible, es tecnología muy avanzada para ustedes, apenas el doctor Cucaracha podría estar cerca de saber usarlo, y digo cerca porque soy mucho más listo que él -declaró en shock para ofensa del doctor en cuestión.
Héctor: Ya teníamos acceso a este tipo de tecnología desde hace días. Y aprendimos el idioma, o bueno, Rosa lo aprendió rápidamente con ayuda de la guía del doctor Jumba Jookiba -dijo haciendo que más de una ceja se arqueara.
A fin de cuentas el caso de Jumba y 626 (alias Stitch) fue tema de sensación para la federación galáctica unida en general (y eso que aún era un secreto que el científico en cuestión creó otros 625 experimentos más dos extra en su estancia en la tierra).
Rosa: Aún no sé qué ha aprendido mi tío a decir que el agente Pleakley siempre le da cachetadas -mencionó con gracia por el tema.
Héctor: Yo tampoco sé, sólo dije Meega, Nala kweesta -dijo encogido de hombros.
Solo para que en respuesta los aliens presentes se mostraron sumamente impactados y ofendidos, para acto seguido hicieron fila para cada uno darle una cachetada al hombre en cuestión que se atrevió a decir tal vulgaridad.
Coverton: ¡Atrevido!
Sqweep: ¡Cochino!
Sta'abi: ¡Degenerado! -dijo para que luego el Vornicarn también le diera una bofetada a Héctor pero con su lengua.
Rosa:... Si, eso lo confirma, es una mala palabra -dijo restando importancia al asunto.
Héctor: Pero el puñetazo no me lo merecía -se quejó con la alien amarilla que le dio un golpe extra, la cual solo le vio de reojo.
Sta'abi: Algo me dijo que de hecho sí -dijo para que encima su hijo se pusiera del lado de ella mientras le daba una bolsa de hielo.
B.O.B: ¿Eso era una mala palabra? Pero no pasó nada, no como... -menciono solo para que todos los que lo conocían lo mandaran a callar.
Miguel: ... Temo preguntar -dijo solo para que su prima le pasara una lista.
Rosa: Aparentemente existen palabras a nivel universal qué tienen la capacidad de producir desastres al pronunciarlas. Básicamente es como invocar de forma negativa una esencia misma de la naturaleza, no digas ninguna en voz alta -dijo mientras que su primo leyó de reojo las palabras.
Jortnurg: Invoca rayos, incluso en interiores o durante un día claro.
Girkmorch: Combustión espontánea
Flurglegurgle: Implosión de deformación espacial
Oodifoo: Invocación de volcanes
Quoogwaffle: La blasfemia extraterrestre más peligrosa, que provoca un desastre a gran escala.
Rosa: Aparentemente no todos saben esas palabras y quienes las saben tiene prohibido decirlas, es igual a un crimen de guerra -dijo en lo que Miguel solo asintió.
Miguel: Como mi jefe provocando a mi jefa y a mi abuelita -exclamó divertido.
Héctor: Y dale con la mole de olla -dijo dándole un zape a su hijo qué ni lo sintió- Como sea, Rosa.
Rosa: Si... Oh vaya, esto me gusta, a mamá esto le gusta -pensó en voz alta conforme revisaba los registros- ¿el incidente nuclear qué de no haber sido evitado por S.H.I.E.L.D hubiera causado la tercera guerra mundial por un ataque injustificado contra el continente asiático? El buen presidente Hathaway lo provocó solo por error porque quería servirse un café.
La sala se llenó de murmullos de sorpresa y descontento mientras los presentes procesaban la información que la asistente y sobrina del CEO había presentado. Todos sabían que los secretos del gobierno eran, en su mayoría, oscuros y complejos, y la revelación de un incidente nuclear que casi desata una guerra mundial y que hubiera sido algo que afectaria a muchos de los presente fuera causado por alfo tan tonto como un café... había derecho al coraje, eso seguro.
Héctor: Y luego yo soy el pendejo -dijo con gracia burlona.
Rosa: Y ni hablemos del incidente más reciente en el que el presidente exigió un robot de ataque al área cincuentaitantos que acabó siendo un megazord invisible gigante qué casi destruye la base y el país -siguió revelando secretos como si nada.
Héctor: ... Con que por eso Judy me puso en tiempo fuera dos horas cuando sugerí un robot gigante -dijo a la vez que tanto su sobrina como hijo solo suspiraron en respuesta.
Rosa: De paso cabe aclarar que los incidentes van en orden, cada uno más jugoso qué el anterior -declaró con una sonrisa- me pregunto que pasara si todas estas metidas de pata se hacen públicas.
Y no hacía falta decir que los humanos, monstruos y aliens bajo la jurisdicción del gobierno americano estaban en su mayoría tensos por la sola idea.
Monger: ... ¿Quiere que el mundo entero nos declare la guerra? Solo la existencia de los aliens haria que Rusia, China y quien sabe que enfermo más nos bombardee con todo ¡holocausto nuclear!
Héctor: ¿Y quién los manda a crear una base militar para todo lo paranormal? -pregunto.
Rosa: Aunque admito que nosotros no somos mejores.... Pero a diferencia de ustedes nosotros queremos hacer un país donde todo lo paranormal, mágico o diferente tenga los mismos derechos en su mayoría que los humanos -aclaró para luego acomodar sus gafas.
Héctor: En vez de ser encerrados y que vean como se tira la llave
Monger: ¡Ellos tienen derechos! -protesto a todo pulmón sin lograr realmente llamar la atención de la familia Rivera.
Héctor: ¿En serio? Si recuerda que antes del tal Galaxar, todos los monstruos eran prisioneros certificados, y lo fueron por décadas -dijo luego de leer rápido información que su sobrina estaba mandando a su teléfono en ese mismo momento.
Si, cuando se trataba de tecnología Rosa Rivera era una berserker en todo el sentido de la palabra.
Link: Es cierto -dijo haciendo memoria.
Dr Cucaracha: Es un buen punto.
Monger: Ustedes no ayudan. Los he tratado bien -se quejó con fastidio.
Dr. Cucaracha: No quiero sacar el tema a colación, general, pero... el hombre invisible lleva años muerto y usted nunca se molestó en siquiera darle un entierro, el cuerpo sigue en la silla donde murió -mencionó llamando la atención de uno de los monstruos.
Griffith: Esperen, ¿Qué?
Monger: Esperen ¿hay más de uno? -fue todo lo que dijo antes de que el hombre invisible presente le diera un derechazo y se preparara para usarlo de saco de boxeo.
Griffin: Eso fue por mi congénere ¡las personas invisibles también somos personas! ¡Liberen a mi pueblo! -grito mientras que su amigo momia lo alejaba para que se calmara.
Héctor: General -dijo llamando la atención del consternado hombre- aunque al parecer ha tratado mejor a sus monstruos recientemente. No quita que los privó de derechos y no los trato mejor que animales por mucho tiempo... y es entendible que ahora mismo más de un huésped esté molesto con usted -dijo señalando a los empleados y huéspedes del hotel.
Siendo entonces que Monger se quedó en silencio, con la mirada fija en el suelo para no ver las miradas de todos los monstruos que en efecto se les notaba el deseo de despedazarlo de uno u otro modo. La presión aumentó en la sala mientras todas las criaturas aguardaban con atención su respuesta. La tensión palpable era un recordatorio de los secretos e injusticias que habían estado ocultos durante tanto tiempo.
Fue entonces cuando la respuesta del general, fue ponerse pintura de guerra en el rostro con una mirada decidida.
Monger: Solo cumplí mi trabajo como buen soldado, si he de ser castigado por eso, hoy es un gran día para morir -declaró dispuesto a luchar y caer peleando.
Solo para ser tomado y sujetado como si fuera una figura de acción por la gigante del equipo monstruo.
Susan: O, escuchamos lo que tengan que decir, señor -dijo esperando que el hombre parará de intentar soltarse, cosa que pasó hasta después de un par de minutos.
Monger:... Esto es humillante, Susan -dijo para diversión de la mujer albina.
Susan: Es mejor ser diplomáticos, señor, usted mismo lo dice.
Rosa: Y nuestra diplomacia es simple -dijo dispuesta a llegar a un acuerdo- a cambio de guardar todos los secretos que acabamos de descubrir, queremos que el gobierno americano nos de total libertad para separarnos del territorio estadounidense y volver a San Fransokyo y cercanías una ciudad estado aparte.
Susan: ¿Y ustedes qué ganan? -interrogó sabiendo de antemano que nadie hace nada sin obtener primero algo a cambio.
Héctor: Para empezar, no estar atados a los europeo americanos y tener que rendirle cuentas a cualquier gringo de alto rango que se crea con derecho de decirnos qué hacer -declaró con simpleza.
Monger:... ¿Cómo nos llamaste? -pregunto sorprendido y algo ofendido ante la dominación del otro hombre a la gente de Estados Unidos.
Héctor: Europeo americanos. Si, se que a ustedes les molesta que les digan así. Pero llaman a los de mi país latino americanos, llaman a los aborígenes nativo americanos. Así que ustedes son europeo americanos. Quien se lleva se aguanta -dijo en lo que ambos se retaban con la mirada.
Rosa: Y segundo -habló para volver la atención al tema en cuestión- es una cuestión que de hecho va más allá de las ganancias monetarias... ¿Hasta dónde podrían ser capaces de llegar por sus sueños? -pregunto haciendo que todos los del área militar confidencial se quedaran pensando la pregunta.
Ya que de hecho, nunca les habían hecho esa pregunta, o al menos no en mucho tiempo. A lo cual cada uno se imaginó su propio sueño: Monger como presidente de la nación, Susan encontrando el amor con un hombre que la acepte como es, Coverton dominando el universo, Link siendo un imán de atención para todo ser pensante, Sta'abi ejecutando la máxima cacería, el Dr. Cucaracha y Sqweep revolucionando el campo de la ciencia... y B.O.B. en un montable con forma de caballito que funciona con monedas.
Así como algunos tenían grandes ambiciones y otros pequeñas, siempre hay uno que otro que solo con lo que tiene ya vive feliz.
Héctor: Veo que se lo pensaron. Así como nos ven, nosotros también somos soñadores -dijo llamando la atención de todos- el sueño de mi familia en general... Es crear un mundo donde la magia y la fantasía sea algo común para todos. Que lo imposible es tan posible como cualquier cosa de este mundo.
Miguel: Cosa que quisiéramos poder hacer sin ningún gobierno yendo a todo lo fantástico que encontremos y declarando que es de su propiedad.
Rosa: O exterminarlo por motivo de que si no pueden explotarlo para su beneficio nadie lo hará -dijo casual.
Héctor: Además, también nos gusta cumplir sueños... -dijo volviendo a poner su atención en el general- conocemos su historia, la revisamos hace unos momentos, y por lo tanto conocemos sus ambiciones, general. En el cargo que está ahora... Jamás será presidente -admitió de forma sincera- nunca pasará, el presidente es alguien que es conocido por el público, no es un cargo que se gana con meritocracia, se gana agrandando a la población.
Monger: ... Lo sé... -terminó admitiendo de mala gana.
Rosa: Si nos ayuda, nuestra ciudad estado puede volverse patrocinadora de su campaña -dijo con una sonrisa cómplice al hombre mayor- darle publicidad de forma sutil y hacer que el país estadounidense sepa que existe, y lo vean como el próximo gran mandamás.
Ante dicha propuesta no era de extrañar que el general nuevamente se quedara callado, sopesando la propuesta que le habían presentado. La idea de tener un respaldo en una campaña presidencial, especialmente de una ciudad estado que podría atraer la atención de los medios y del público, era tentadora. Sin embargo, también era arriesgada.
Monger: ¿Y qué me garantiza que cumplirán su parte del trato si accedo a esto? -preguntó, su mirada fija en Héctor, buscando cualquier indicio de deshonestidad.
Héctor: La confianza, general. Nuestro objetivo es crear un espacio donde todos puedan coexistir, y eso incluye a los humanos y a los monstruos. Si logramos establecer San Fransokyo como un lugar seguro y acogedor, todos ganamos, Y tendrá garantizado nuestro apoyo -dijo antes de ver al líder del equipo alien con malicia- por cierto... Debemos darte las gracias, Coverton. Gracias a ti, estaremos un paso más cerca de cumplir nuestros sueños.
Coverton: ... ¿Perdón? -pregunto solo para ser nuevamente sometido con cadenas y siendo sujeto al piso de pies a cabeza, principalmente cabeza, para evitar cualquier acción telequinética de su parte.
Rosa: Si, cuando te entreguemos a la gran concejal en la reunión que tendremos con ella poco después de la fiesta del té que estamos organizando -explico feliz de la vida por la casualidad- eso hará que nos ganemos su confianza con más facilidad.
Coverton: ... Qué chistoso, pensé que dijeron la Gran Concejal -murmuró fuertemente con nerviosismo.
Rosa: Si, tenemos una reunión programada con ella. También la haremos socia de la empresa, por eso estamos apurandonos en conseguir nuestra ciudad estado, para volverla un lugar de fronteras cerradas, lo que facilita nuestra reunión con ella -explicó.
Héctor: ¿Y qué mejor regalo para ella que entregarle a un criminal como tú? -pregunto haciendo al alien sudar más frío de lo normal.
Quien en ese momento solo quería que lo iluminaran o lo eliminaran, pero que alguien hiciera algo, alguna presencia cósmica que solo estornudara y con eso eliminara el planeta ¿era mucho pedir?
Monger: ¿Como que un criminal? -pregunto con el ceño fruncido.
Rosa: Oh sí, aunque tomó unos minutos, hackie la computadora de Coverton por medio de su silla y revise sus archivos... Su especie es la verdadera responsable del incidente de Gallaxhar y el Quantonium -reveló- ellos destruyeron el planeta de Gallaxhar buscando el Quantonium, y por eso Gallaxhar después intentó conquistar la tierra y querer reconstruir su mundo.
Por su parte el alien se quedó procesando la situación. No le gustaba estar en esta posición, pero sabía que si no hacía nada, su destino estaba sellado.
Coverton:... Maldita chismosa -murmuro por lo bajo antes de decidir hacerse el tonto- no, no se de que habla. Solo inventan cosas, están soltando puras calumnias a mi persona -dijo solo para darse cuenta de que nadie le estaba creyendo.
Esas tal cual eran las consecuencias de nunca priorizar ser lo bastante querido por el resto del personal militar.
Susan: ¿Qué más averiguaron?
Rosa: Pues que para empezar, toda la ¨misión de paz¨ de Coverton en venir a la tierra es pura basura y originalmente solo vino a robarte el Quantonium -comenzó a sacar los secretos del armario- o no lo se ¿que todo este tiempo solo aprovechó su posición como refugiado en buscar formas para apoderarse del planeta bajo las narices de todos ustedes?
Monger: Eres un pedazo de... -dijo mirando al alien que solo rodo los ojos con molestia.
Rosa: Por cierto, Sta'aby, seguro te encantará saber que en realidad el consejo de tu planeta en realidad nunca te dio la orden de que te quedaras en la tierra -dijo haciendo al alien telequinético entrar en pánico- Coverton falsificó el mensaje para que te quedaras y le hicieras de músculo y fuerza bruta.
De paso cabe decir que solo bastó esa revelación para que la princesa guerrera del espacio llenará el techo con rayos procedentes de su lanza, si, estaba furiosa.
Sta'abi: ¿¡Qué!?
Coverton: ¡Mentira, todo es mentira! ¡Esta gente solo busca perjudicar a mi persona! -grito en lo que trataba con todas sus fuerzas de liberarse.
Sqweep: ¿Y sobre mí? ¿Hizo algo sobre mí?
Rosa:... Nada aparte de anular los envíos de tus reportes. A ojos de tu escuela, tú no has hecho ningún avance en tu proyecto de estudio de la especie superior del planeta. Para que tu estancia sea muy larga -dijo al pequeño alien que por un momento mostró una mirada inexpresiva.
Sqweep: ... ¿Me devolvería mi tableta, señorita? -preguntó cortésmente.
Siendo en el momento que recuperó su herramienta de educación que oprimió algunos botones, para que acto seguido de la tableta saliera un arma que parecía un estereotipado ¨rayo de la muerte¨ de las caricaturas.
Sqweep: Nadie se mete con mi educación -declaró con frialdad, a la vez que por su parte Coverton veía su vida pasar frente a sus ojos.
Llegando de paso a la conclusión... de que fue muy aburrida.
Rosa: Tranquilo Sqweep, necesitamos de una pieza. A fin de cuentas, será nuestro regalo para la gran concejal -busco calmar al menor- esto será el primer paso para la caída de Coverlod y toda su flota de aspirante a conquistador, Coverton es la prueba de que ellos causaron la destrucción del planeta de Gallaxhar, él y su información es toda la prueba que necesitamos.
Monger: Causó todo el problema de Gallaxhar, luego vino aquí a intentar robar el poder de Genórmica y luego... pensaba quedarse y reclutar a todo alien que encontráramos para volverlo uno más de sus filas -reflexiono antes de ver con ojos de muerte al alien- Coverton...
Coverton: General, le juro que puedo explicarlo -dijo preso del pánico considerando seriamente incluso hallar el modo de suicidarse allí mismo.
Y fue cuando decidió que si ya nada importaba, entonces porque no llevarse a todos con él, sería un héroe a los ojos de toda la flota y ni hablar del propio Coverlord, sencillamente sería recordado como el soldado que dio su vida para cumplir la ambición de su especie... valía la pena el suicido.
Así que sin pensarlo, pulso un botón oculto en su silla que se activará solo en caso de ser descubierto. Moriría, si, pero se llevaría a todos con él.
Rosa: No hay nada que explicar, parece que piensas defender tu postura y lealtad hasta el final -dijo tras percatarse de las acciones del alien- cualquier prueba que nos hiciera falta está aquí, justo ahora el dichoso Coverlord escucho toda nuestra conversación por medio de la silla de Coverton quien mandó una grabación a su nave madre y ahora la misma debe venir en camino para eliminarnos y así nada de esto llegue a oídos de la gran concejal.
Los presentes tardaron unos momentos en reaccionar, solo un instante para asimilar aquella información tan crucial. Sin embargo, lo que ocurrió a continuación fue peculiar. En lugar de gritos de pánico y caos, los monstruos parecían sorprendidos, pero también confiados y casi emocionados por la situación.
Este comportamiento inusual llamó la atención tanto de los humanos como de los militares. Rosa, que pensaba en hackear el sistema de navegación o el armamento de la nave nodriza para sabotear su funcionamiento, se dio cuenta de que este giro inesperado podría resultar interesante.
Rosa: Descuiden -dijo decidiendo compartir su idea de todos modos- antes de devolverle su tableta a Sqweep, pensé en usarla para alterar las coordenadas. Si usamos bien nuestras cartas, podemos mandar la nave a una ubicación errónea y...
Dracula: No hace falta que hagas más, Rosita querida, nosotros nos ocupamos desde aquí -dijo colocando una mano en el hombro de la joven antes de ver al resto de su familia- esto me trae recuerdos ¿cuando fue la última vez que nos ocupamos de alguno de esos forasteros? Ya no lo recuerdo.
Lydia: Creo que fue en la edad media, durante la peste negra. O tal vez fue en plena revolución francesa, igual será divertido -dijo con emoción.
Después de que algunos vampiros sonrieran y rieran por un momento, todos adoptaron su forma de murciélago y salieron disparados al avistar a lo lejos lo que parecía ser la nave nodriza de Coverlord. En un abrir y cerrar de ojos, los que se encontraban en el castillo se convirtieron en testigos del caos, ya que la colosal nave pasó de estar en calma a ser blanco de un ataque devastador. En cuestión de segundos, estallidos e incendios comenzaron a surgir en diferentes partes de la nave, mientras resonaban las alarmas de emergencia, un sonido que parecía familiar en cualquier parte del universo.
Dejando a quienes desconocen de lo que pasaba con la boca abierta de la sorpresa y la pura incredulidad.
Héctor: ¿Pero qué...?
Frank: Hace siglos que no veíamos algo así, eso les enseñará a esos extranjeros a no meterse con nosotros -dijo divertido siendo apoyado por varios monstruos.
Rosa: ¿Extranjeros?
Murray: Así los llamamos, los que ustedes llaman alienígenas o lo que sea -explicó señalando a Coverton, Sqweep, Sta'abi y el Vornicarn- no sabemos de donde rayos vienen tipos como esos monstruos. Pero siempre es igual, vienen armados hasta los dientes y en respuesta los devolvemos de donde vinieron si nos los topamos, así ha sido por cientos o hasta miles de años.
La familia Rivera observó con asombro y un toque de admiración cómo la familia Drácula se lanzaba al ataque. La escena era digna de una película de acción; los vampiros, en su forma de murciélago, volaban en formación, sus ojos brillando intensamente mientras se lanzaban contra la nave nodriza de Coverlord. Drácula lideraba el asalto, sus alas se movían con una gracia sobrenatural, mientras que su rostro mostraba una mezcla de determinación y furia. Al verlo, los humanos no pudieron evitar sentir una oleada de orgullo; el legado de los Drácula estaba más vivo que nunca aun luego de las maquinaciones de Bela.
Dr Cucaracha: Ellos, mi admirable amigo momia, son aliens como ya les habíamos dicho, extraterrestres en todo -explicó a Murray solo para que él y todos los monstruos lo vieran confundidos, haciendo suspirar pesadamente al científico- seres del espacio exterior.
Rosa: Esto es interesante... así que han tenido su propia guerra contra los "extranjeros" mientras nosotros los humanos hemos estado lidiando con nuestras propias batallas internas -dijo mientras observaba a los vampiros volar en perfecta sincronía, como una danza oscura en el cielo nocturno- entonces... Los seres paranormales y mágicos del planeta han peleado con los extraterrestres por siglos.
Murray: ¡Y nosotros ganamos cada vez! -se jactó con orgullo- ahora estoy retirado. Pero cuando era una momia fuerte, joven y con deseos de hechizar a todo y a todos derribe a varios de esos tipos con mis tormentas de arena.
Monger: ¿Todo esto es en serio? -preguntó sorprendido- ¿Cómo es que no sabía eso? -preguntó a su equipo de monstruos que solo no tenían una respuesta para él.
Miguel: Pues es solo una idea, pero creo que es porque a excepción de Link quien estuvo milenios congelado, todos sus monstruos son más artificiales que naturales -sugirió el joven.
Siendo en ese momento que los vampiros volvieron, y detrás de ellos solo se vio la nave principal más algunas más pequeñas cayendo en un lago cercano y estallando causando una lluvia temporal de toda el agua del cuerpo acuático.
Drácula: Escuche parte de la conversación a lo lejos... Siempre hemos defendido nuestro hogar, y ahora, más que nunca, debemos unirnos para proteger lo que hemos construido. No se trata solo de nosotros, sino de todos aquellos que buscan un lugar donde pertenecer -dijo convencido del todo de que mudar el hotel era necesario.
Rosa: Eso nos da gusto, conde. Y ahora que las naves cercanas de la armada de Coverlord fueron destruidas, significa que no habrá nada para impedir que le entreguemos a Coverton a la gran concejal... yo lo llamaría jaque mate -dijo con una sonrisa mirando al alien cautivo.
Quien en ese momento en serio deseaba haber muerto a manos de los vampiros como lo acababan de hacer sus compañeros.
Sqweep: Vaya... usted es muy lista para ser humana, señorita Rosa, mucho más que él -dijo señalando al dr. cucaracha que nuevamente se ofendió.
Héctor: Bueno, con eso resuelto. Queridos monstruos y aliens, les tengo una propuesta -dijo subiendo al podio llamando la atención de todos- ¿Qué me dicen de ser habitantes del país que vamos a formar? Tendrán libertad y ciudadanía como cualquier persona. Y si les gusta todo este asunto de misiones secretas, se me ocurren más de una cosa en las que pueden ser de utilidad, siendo debidamente remunerados, claro -dijo captando la atención de los monstruos gubernamentales.
Monstruos:... ¿nos van a pagar? -preguntaron sorprendidos en lo que el CEO solo asintió en señal de afirmación- ¿Dónde firmamos?
Ni que fueran tontos.
Sta'abi: Pues STA'AAABI no se va de la tierra. Hay muchos oponentes formidables aparentemente ¡primero quiero mi revancha con la mujer gótica! -dijo señalando a la baronesa que le miro desafiante.
Lydia: Cuando quieras, cazadora.
Sqweep: Pues aun tengo que hacer mi reporte... Yo solo pido un lugar donde instalarme para hacer mi tarea, prometo no causar problemas -dijo mirando a Rosa quien le sonrió con ternura.
Rosa: Podemos hacerlo.
Monger: Eso no se si sea recomendable -dijo metiéndose en la conversación- el estudio de Sqweep puede ser... Perjudicial para el planeta -menciono solo para ver como la chica hacía de menos sus preocupaciones.
Rosa: Tranquilo, ese no será el caso. La raza de Sqweep según algunos datos que Pleakley me dio de especies alienígenas, es una raza erudita. Su única intención haciendo estudios a planetas como Sqweep con su proyecto escolar, es el conocimiento como tal. El cual guardan en una bóveda sellada para que no sea usado de forma indebida -explicó para sorpresa de los militares.
Sqweep: Se los he intentado decir docenas de veces pero nunca me dejan terminar porque ya empiezan a imaginar que mi informe se usará para que mi raza conquiste la tierra y otras tonterías más basadas en la imaginación -dijo solo para que en respuesta Monger y los monstruos señalan a Coverton- ... buen punto.
Coverton: Por favor, tengan piedad de mí. No me entreguen a la gran concejal. ¡Prometo que me portaré bien! -decidió usar su última (y única carta) para usar, suplicar.
Link: Eso dicen todos -dijo empezando a molestar al alien.
Es decir, tenía muchos desacuerdos y tecnicismos que desquitar con el alien.
Mavis: A todo esto -dijo haciendo que todos la vieran- ¿Quién es esa tal concejal y porque le tiene tanto miedo el extraterrestre feo?
Sta'abi:... Es la líder de la Federación Galáctica Unida -aclaró luego de que los aliens guardaran silencio uno segundos- es la encargada de velar por la paz en la galaxia, haciendo cumplir las leyes y tratados entre planetas.
Sqweep: Y para resumir, alguien ante quienes la raza de Coverton debe rendir cuentas -concluyó el tema antes de que todos comenzaran a hablar de los próximos pasos a realizar así como todas las futuras posibilidades de la relación entre los diferentes presentes.
La conversación se tornó animada, llena de intercambios de ideas y propuestas. La atmósfera en la sala era electrizante, como si el aire estuviera cargado de posibilidades infinitas. Los monstruos, una vez temerosos de los extraterrestres así como de los humanos, ahora se sentían empoderados y listos para forjar un nuevo camino juntos.
Lydia: Parece que esta alianza con Rivera Solutions será más fructífera de lo que esperaba hermanito -dijo uniéndose a su hermano que se había alejado para aclarar sus ideas- a través de ellos entraremos a mayores ligas. Solo imagínalo, el hotel abre sus puertas a seres de otros mundos, la popularidad subirá hasta las estrellas, literalmente.
Drácula: Y algo me dice que no hará más que mejorar, Lydia -dijo sonriendo- ¿quieres sangre batida para brindar?
Lydia: Honestamente esto merece sangre humana fresca, pero la mayoría de ellos tiene sangre muy grasosa y tóxica, como beber humo de motor, puag... Esta es una noche especial, y tengo una botella de vino sangriento añejada del 1500, de la mejor ¨cosecha¨ de la época ¿que dices?
Drácula:... ¿Te he dicho cuanto te quiero? -pregunto divertido sin dejar de ver el cielo nocturno.
Si, grandes cosas parecían estar por venir.
_________________________________________________________________________
(Time Skip, Unos días después)
(Tremorton, Pensilvania, Estados Unidos)
Las cosas de allí en adelante transcurrieron sin muchos contratiempos honestamente. Se acabó haciendo oficial la noticia de que San Fransokyo, junto al parque nacional adjunto, varias extensiones de terreno y el territorio marítimo en cuestión, se independizaron tanto del estado de California como del propio gobierno estadounidense. Una noticia que definitivamente sacudió al mundo y que fue posible luego de negociar con el gobernador y el presidente (que no hace falta decir que dio el brazo a torcer como si nada una vez se le amenazó con chantaje de desvelar sus metidas de pata durante su tiempo en el cargo).
La noticia de que la ciudad ha sido designada como un estado independiente ha suscitado una mezcla de emoción y ansiedad entre sus habitantes. Por un lado, hay un palpable sentido de orgullo y autonomía; la idea de gestionar sus propios asuntos, establecer leyes y políticas que reflejen las necesidades y deseos de la comunidad se siente liberadora.
La posibilidad de construir una identidad propia, sin la interferencia de un gobierno central, despierta esperanzas de un futuro más próspero y sostenible, donde la cultura local y los intereses ciudadanos sean priorizados (o así se vendió para que la gran mayoría de los habitantes lo aceptaran sin más y no quisieran irse, a fin de cuentas no iban a retener a nadie contra su voluntad una vez cerraron las fronteras).
Sin embargo, esta transición hacia la independencia también plantea desafíos significativos que generan incertidumbre. Los ciudadanos se preguntan cómo se manejarán aspectos cruciales como la seguridad, la economía y los servicios públicos, siendo estas algunas de las preocupaciones de la alcaldesa de San Fransokyo cuando se le propuso la idea, pero que al final entre una larga y otra corta, terminó aceptando.
La falta de experiencia en la autogestión puede llevar a tensiones internas y desconfianza, mientras que la necesidad de establecer relaciones diplomáticas con otras entidades y estados se convierte en una preocupación urgente. En medio de estos dilemas, la ciudad se encuentra en una encrucijada, donde la visión de un futuro brillante choca con la realidad de lo desconocido, y todos los ojos están puestos en cómo se desarrollarán las cosas a partir de ahora... siendo mientras todo esto sucedía que algunos jugadores del juego comenzaron a mover las piezas.
Hollow: Doctora Nora Wakeman. Famosa científica qué es reconocida en el campo de la robótica. Pero en el campo científico la ven como una loca ermitaña qué vive en su laboratorio ¿Ustedes que opinan? -pregunto de forma monótona a sus dos acompañantes mientras los tres se quedaron mirando la casa de la científica en cuestión.
Reuben: No puede ser peor que Jumba o Hamsterveil -respondió encogido de hombros mientras se comía un sándwich.
Gantu: ¿Seguro que esta mujer es digna para ser su primer añadido a su departamento, señor? -preguntó con cierto recelo, sacando una suave risa a su jefe inmediato.
Hollow: No veo porqué no, sus credenciales respaldan que es una de las expertas en robótica más grandes de tiempos modernos -dijo con simpleza- además de que tengo curiosidad de saber porque ha estado haciendo todo lo que hace los últimos años. Aislarse de ese modo... Además de tener curiosidad por su último proyecto.
Gantu y Reuben: ¿Proyecto? -preguntaron al unísono extraños.
Solo para recibir como respuesta una serie de disparos láser que fueron repelidos por un campo de energía fabricado por Hollow justo porque suponía que algo así iba a pasar. Todo gracias a que investigó de antemano y se hizo una idea de cuál era la programación exacta de la... ¨hija¨ de la doctora que se encontraba frente a ellos con una pose amenazante así como armas listas para ser disparadas ante la mínima señal de amenaza y de provocación... muy interesante.
Jenny: ¡No se que quieren pero será mejor que se larguen de mi patio, basura alienígena! -dijo ofendiendo al alien y al experimento en cuestión mientras que el humano del grupo solo dio un paso al frente con calma.
Hollow: De ese proyecto me refiero... ¿Tu creadora no te avisó que tendría visitas?
Jenny: ... ¿Ustedes son los que vienen a ver a mi mamá? -pregunto sorprendida guardando sus armas.
Reuben y Gantu:... ¿Mamá? -preguntaron extrañados a la vez que una mujer salió de la casa.
La cual a simple vista se podría decir que se trataba de una científica en toda regla, incluso, sin buscar ofender, se podía considerar que a primeras impresiones era una científica loca certificada (reiterando, sin querer ofender,).
Nora: ¿XJ9? ¿Qué es todo éste ajetreo? -preguntó con los brazos en jarra buscando respuestas de la robot.
Jenny: Creo que tienes visitas, mamá -dijo señalando a los recién llegados. Quienes procedieron a hacer reverencia.
Hollow: Doctora Wakeman, es un placer conocerla. Esperaba que nos dedicará algo de su tiempo -dijo sorprendiendo a la mujer.
Nora: Por supuesto, pasen, Jenny, ¿Podrías alistar los aperitivos? -pidió a la robot que se encontraba sumamente desorientada.
Jenny: Pero mamá... Son alienígenas -susurro con incomodidad, a lo cual la mujer solo negó algo divertida, entendiendo el pensar de su así llamada hija.
Nora: Te lo explicaré pronto, cariño -dijo mirando de reojo a los visitantes.
De momento todo lo que podía decir es que por lo que decía en el correo electrónico que le llego la noche anterior. Todo parecía indicar que esta iba a ser una reunión interesante en el mejor de los casos.
Notes:
Y ese fue el capitulo de esta vez. Como siempre pueden votar, comentar, lo que gusten.
¿Y que les pareció?
Si, se que me dirán que esto se guio en parte por Dandadan, pero seamos honestos, monstruos vs Aliens llego primero. Y si creen que aquí hubo crossovers. Esperen a ver el próximo capitulo. Ya estamos a solo uno antes de la fiesta de té.
En fin, nos vemos.
Chapter 26: Capitulo 24: La liste est c'est fini
Notes:
(See the end of the chapter for notes.)
Chapter Text
(General Pov)
(Residencia Wakeman, Tremorton, Pensilvania, USA)
El hogar de la familia Wakeman se podría decir que era de todo menos un lugar humilde, solo a simple vista era una casa de tres pisos, la cual tenía tanto patio trasero como delantero, sótano, y varias habitaciones. Aunque de momento el sitio a donde fueron llevados Hollow y compañía fue a la oficina y laboratorio de la doctora Wakeman. La cual estaba desordenada con artilugios, piezas y refacciones por todos lados. Algunas cosas a la vista eran un robot desmantelado, un telescopio gigante, computadoras y pantallas... ¿esos eran cerebros en un frasco?
Nora: Pasen, pasen. Por favor disculpen el comportamiento de XJ-9 -dijo refiriéndose al altercado de hacía unos momentos con la robot de su creación- es que yo la construí con la directiva de que todo ente que venga del espacio exterior es una amenaza.
Hollow: Lo sabemos. Más que todo porque su "hija" se ha encargado los últimos años de amenazas planetarias menores como sondas espaciales y de meteoros qué la NASA calificó como falsa alarma cada vez que XJ9 los elimina -declaró a la vez que la chica robótica dejaba una bandeja con bocadillos en una mesa antes de tomar asiento- aunque creo que eso incluye también intentos menores de ingreso alienígena al planeta.
Jenny: Bueno, alguien tiene que hacerlo, y la patrulla aérea no suele ser mucho de ayuda -exclamó con fastidio.
Hollow: Lo sabemos, son unos inútiles -mencionó divertido buscando apelar en favor de la máquina- no hacen nada en lo que respecta a peligros del espacio o de naturaleza sobrehumana hasta que lo tienen en la cara y no es como que la ONU, el gobierno americano, el chino o el ruso sean de mucha ayuda al respecto.
Jenny: Y aunque lo tengan en la cara, no hacen nada "hasta tener todo el papeleo listo", ¡Hasta reconocen que tener el papeleo tarda semanas, como si los Clusters fueran a esperar semanas para atacar! -dijo llamando la atención del científico que disimuladamente dentro de su traje busco información al respecto. Ventajas de tener contactos alienígenas que facilitaban el acceso a ese tipo de datos.
Los Clusters constituyen un imperio compuesto íntegramente por organismos robóticos procedentes de Cluster Prime, un planeta completamente habitado por robots que se consideran superiores a las formas de vida biológicas como los humanos. En su mayoría los soldados del ejército son droides con forma de escarabajo, liderados por Smytus como comandante y Vexus como reina, una androide de dos mil años de antigüedad. Vaya que es curioso lo que pasa en las estrellas mientras la mayoría viven el día a día sin percatarse de nada.
Hollow: En todo caso, me gustaría empezar preguntando... ¿Por qué construyó a XJ9, doctora? -pregunto mirando a la mujer mayor- entiendo su función de defensa planetaria, pero... Usted no está afiliada a ningún gobierno, no recibe fondos de ninguna empresa o asociación, que se sepa. Construyó a ¨Jenny¨ literalmente sin ayuda de nadie y no deja que nadie sepa de ella... ¿Por qué?
Por su parte, la doctora Wakeman se quedó en silencio por un momento, observando la mezcla de curiosidad e inquietud en los rostros de sus visitantes. Su mirada se desvió hacia el desordenado laboratorio, como si buscara las palabras adecuadas entre los artilugios y las pantallas parpadeantes.
Nora: Bueno, hay muchos motivos involucrados sobre porqué hice a XJ9. Esencialmente, hay un componente personal en todo esto. Desde joven, he sido testigo de la incapacidad de la humanidad para unirse ante los peligros que amenazan nuestro mundo. La burocracia, los intereses políticos, todo eso me frustraba enormemente. Así que decidí tomar el asunto en mis propias manos.
Mientras que Jenny, que había estado escuchando atentamente, no pudo evitar interrumpir.
Jenny: Pero ¿No fue porque te diste cuenta que dabas pena al darte cuenta que empezaste a hablar sola, mamá?
Nora: ... Bueno, eso también -reveló con algo de incomodidad- pero principalmente la cree para ser un apoyo para la protección planetaria, y al no estar afiliada a ningún gobierno, la CIA, por dar un ejemplo, no podría sólo venir y declararla para uso exclusivo del gobierno norteamericano... Además...
Hollow: Quería una hija -declaró tras unir los puntos (y de paso aprovechar la conversación para hackear el sistema de la casa)- por eso la construyó a ella y a sus ocho versiones previas con personalidades que van desde la adolescencia hasta la niñez.
Nora: Eso es muy exacto, de hecho -dijo sorprendida- en cierto modo, desde XJ1 hasta XJ9, forman lo que sería la vida de una jovencita -mencionó antes de encogerse de hombros- a lo largo de mi vida he tenido muchos, muchos novios. Pero sencillamente con ninguno sentí esa famosa conexión del así llamado amor, y yo de verdad quería una hija.
Tras escuchar la revelación de la doctora Wakeman, Hollow se sintió un poco más cerca de comprender la complejidad de su creación. La idea de construir a XJ9 (y las que le precedieron) como una forma de llenar un vacío personal resonaba en él. Sin embargo, había algo más que quería preguntar.
Hollow: La gran mayoría vería muy poco práctico que un robot de defensa planetaria tenga la personalidad de una adolescente en todo el sentido de la palabra... -menciono mirando a la unidad- pero en este caso es entendible. Y supongo que el motivo por el cual no siguió con XJ10 es porque Jenny fue de la que más se encariño de todas sus "hijas".
Reuben: Sin mencionar que lo que sigue de la adolescencia es ya que la niña crezca y se quiera ir de casa y eso ya no era factible para usted, asumo -exclamó mientras hacía un sándwich ¿de donde sacaba las cosas para hacer sándwiches en momentos aleatorios como ese? Era todo un misterio.
Nora; En partes iguales, sí, aunque ser madre de una adolescente ha tenido sus retos.
Jenny: Exageras, mamá.
Nora: Dos palabras, reto de modas... -dijo con molestia por el recuerdo- aún no puedo creer que dejaras que tu amiguito Sheldon te desmontara casi por completo para superar a ese par de groseras... ¿Cómo dices que se llaman? ¿Las primas Crust?
Bueno, eso era interesante.
Hollow: ¿La inscribió en la escuela? -preguntó con un tono que denotaba algo de diversión por la idea.
Nora: Ella insistió -dijo con renuencia- en todo caso, ahora soy yo quien debe preguntar a qué se debe esta visita en todo caso. Es verdad que soy una genio, pero creo que me he esforzado hasta cierto punto para que nadie se interese en mí como para querer ofrecer algo, he estado orgullosa de mi anonimato -explicó con algo de desconfianza pero igual con cierta intriga.
Como acababa de explicar, una situación así no es para nada común.
Hollow: Resumiendo, queremos ofrecerle empleo -fue directo al punto- verá, soy el director general de la nueva rama de Rivera Solutions, Rivera Robotics. Un departamento creado específicamente para la creación de máquinas y robots.
Nora: ¿Rivera Robotics? -preguntó con interés.
Hollow: Es un nuevo departamento que como su nombre se refiere, consistirá en la creación de robots y máquinas similares con la finalidad de la venta a granel. Además de la investigación y desarrollo, verá, tengo una idea y necesito ayuda para desarrollarla -exclamó para luego sacar una sustancia de sus ropajes.
Se trataba de una especie de liquido de color verde en un tubo de contención que a simple vista parecia slime común y corriente, una mezcla de materiales compuesto de colorante, aromatizante, pegamento, detergente, almidón de maíz, bicarbonato y agua. Pero conforme más se observaba más parecía que el compuesta mostraba... vida, en cierto modo. Lo cual era entendible dado su origen.
Nora: ¿Y esta sustancia es...?
Hollow: Es baba, proveniente de una raza de monstruo llamada Slime -explico- al parecer tiene varios usos, o al menos así lo asegura Bob Blob, un monstruo multimillonario que vende esta baba. Pero, lo que me fascina de esta sustancia, es que parece conectarse de forma neuronal con el monstruo del que proviene aunque ya no sea parte del cuerpo y lleve bastante tiempo separados el uno del otro -dijo para la fascinación de la científica.
Nora: ¿Dice que viene de un tipo de monstruo? ¿Cómo la consiguió?
Hollow: Secretos de la empresa, usted entenderá -declaró con cierto aire de misterio- verá, mi interés en esta baba es replicarla de una forma adaptable. Imaginé crear una sustancia líquida y sólida a la vez que se adapte y tenga diferentes funciones que van desde regular la temperatura a incluso reforzar o reemplazar cables, circuitos, engranajes. Incluso reemplazar fuentes de energía como la hidráulica o incluso los combustibles fósiles -dijo logrando que los ojos de la mujer se iluminarán con la posibilidad de lo que podría lograr con ese tipo de material.
La idea de crear un robot que no solo pudiera adaptarse a su entorno, sino también reparar y mejorar su propia estructura, era un sueño que cualquier inventor con ambición anhelaría.
Nora: Sumamente ambicioso, lo admito.
Hollow: Y que me quedo corto, yendo más a su naturaleza original, imagine replicar la naturaleza de los slimes con este líquido hipotético en el cuerpo humano. Reemplazar músculos, huesos, órganos, nervios, venas, incluso neuronas...
Nora: Eso sería un milagro de la ciencia -dijo con total ilusión de la sola idea.
Hollow: Lo sé... Pero no puedo hacerlo solo -exclamó de forma sincera- me considero un genio, pero la verdad es que para un proyecto así de ambicioso necesito ayuda solo para montar las bases y un gran capital. Justamente en la fiesta de té de en unas semanas el CEO de la empresa se reunirá con varios posibles inversionistas... Y para entonces necesitamos mostrarles un adelanto de que dicha idea puede ser posible -solo de forma casual. Esperando que la mayor tome el anzuelo.
Y en efecto, lo hizo justo en el momento en que se lanzó.
Nora:... Y necesitas mi ayuda
Hollow: Usted dice que su prioridad es el bien del mundo, por eso creo a Jenny como una defensa planetaria aun si nadie se lo pidió. Imaginé el bien que haría si este invento es una realidad -busco apelar por la moral de la doctora- su hija podría incluso tener más tiempo para la vida de adolescente que ella desea -sugirió.
Jenny: ¿Como?
Hollow: Si, con la creación de este invento se puede desarrollar más a la inventiva de más defensas para el planeta que usualmente pasan desapercibidas para los gobiernos. Eso haría que tengas más tiempo para ti.
Dicho sea de paso, solo bastó con eso para tener a la ¨hija¨ de la científica en el bolsillo.
Jenny: Por favor, mamá, di que sí, por favor, por favor... -pidió prácticamente rogando a la mujer abrazándose a sus piernas. Haciendo a esta suspirar.
Nora:... Cómo ven, su mentalidad es en efecto tal cual la de una adolescente qué aceptara cualquier cosa para no tener responsabilidades.
Sin saber que ese comentario hizo al joven disfrazado pensar en su hermano menor y en las mil y un cosas que le hizo pasar durante los años que estuvieron juntos.
Hollow: Me hago una idea -fue lo que termino diciendo con simpleza- pero en todo caso, considero que sería una buena oportunidad para su persona. Tendría recursos ilimitados, seguro médico, un salario considerable a su talento. Y podemos garantizar qué se usarán todas las medidas posibles para que ningún invento se use con fines paramilitares dado que, a lo que entiendo, fue uno de los motivos por los que buscó evitar que la gente supiera de XJ9.
Reuben: Es bueno que sea consciente de que los humanos pueden ser bastante tontos cuando se dejan llevar por miedo, ambición o codicia -dijo ya comiendo el sándwich que estaba haciendo- podrían intentar monetizar el trabajo de protectora de la robo chica.
Hollow: O simplemente mandar a desmantelarla por el simple hecho de que fue algo independiente y no de algún gobierno.
Gantu: O sea, las naciones no tienen garantía de que ponga al gobierno por encima de la población, y por eso la verían como una amenaza.
Nora observó a los visitantes con una mezcla de sorpresa y contemplación. La idea de unirse a un proyecto de tal envergadura, con la posibilidad de hacer un verdadero cambio en el mundo, era tentadora. Sin embargo, también había una parte de ella que se mostraba cautelosa. Había perdido la fe en el sistema y en la humanidad, y temía que cualquier esfuerzo que hiciera pudiera ser aprovechado por aquellos que no tenían buenas intenciones.
Nora: Y ya están diciendo las razones por las que prefiero el anonimato.
Hollow: El asunto es -dijo con toda la intención de insistir- que nuestra ciudad recientemente se separó de este país y ahora es su propia ciudad-estado aislada. Allí usted tendrá la seguridad de que respetará a Jenny como una individuo y no como un objeto -dijo nuevamente despertando el interés de la mujer- entonces qué dice ¿le interesa el empleo? De aceptar la oferta incluye mudarse de inmediato a la ciudad.
Esta vez logrando despertar las alarmas de la adolescente robótica que aparentemente tenía más de un pero que decir al respecto.
Jenny: ¿Mudarnos? Pero Brad, Tuck, Sheldon... -dijo mirando una foto en la pared de ella con tres chicos.
Gantu: Justo me preguntaba quienes eran estos tres -mencionó mientras parecía sacar algo de una mochila en su espalda, mostrando que tenía en un tubo de contención de gran tamaño a los tres chicos- los encontré espiando por la ventana hace un momento mientras estiraba las piernas.
Un pelirrojo que parece el típico adolescente promedio que buscaba por todos los medios parecer popular, un niño pequeño que debía ser el hermano de alguno de los dos mayores, y un asiatico que tenía toda la pinta de nerd promedio. Un grupo típico de la adolescencia ciertamente.
Brad: Hola, Jen, señora Wakeman -dijo apenado más que todo por verse descubierto, en especial luego de notar la mirada de molestia de la dueña de la casa.
Tuck: En mi defensa, traté de detenerlo -dijo señalando a su hermano para luego señalar al más pálido de los tres- con el ni lo intente porque ni siquiera escucha.
Sheldon: ¡No se la pueden llevar! ¡Es el amor de mi vida! -grito con desespero, haciendo a la chica hacer un facepalm de la vergüenza.
Hollow:... ¿Amigos tuyos? -termino preguntando a la adolescente entre comillas, aunque quien respondió fue su madre alias creadora.
Nora: Los hermanos Bradley y Tucker Carbunkle, nuestros vecinos y amigos de XJ9, el otro chico es Sheldon Lee, su amigo y admirador no tan secreto -dijo de forma casual y con cierto tono de fastidio en su voz.
Aparentemente no estaba feliz con que estos chicos se metieran a su casa sin previo aviso, cosa en la que estaba en todo su derecho de estar molesta pensándolo bien.
Hollow: Ya veo... Por favor entiendan, yo también fui joven y conozco como va todo el asunto de los amigos de la juventud y demás -dijo al trío de chicos- pero es una oportunidad que tanto la doctora como yo no podemos dejar pasar.
Pero en respuesta los tres se terminaron abrazando a las piernas de Jenny, al grado de abollar el metal... vaya.
Jenny: ... De haberme dejado las terminaciones nerviosas que mamá diseñó, eso hubiera dolido bastante -dijo con una sonrisa cada vez más incómoda.
Reuben: Esto complica las cosas ¿salami con lechuga y tomate? -preguntó a su superior, que solo tomó el emparedado al del traje extravagante que solo "desaparece" en sus ropajes.
Hollow: Puedo ver qué puedo hacer para que ustedes puedan mudarse también a San Fransokyo, o de perdida, mantener el contacto con ella, ¿Les parece?
Gantu: Si no podemos simplemente llevarnos a todos y ya. Estoy seguro de que la señorita Rosa y el señor Rivera entenderán nuestro actuar -sugirió ganándose una mirada de molestia de los otros dos.
Hollow: Gantu, ya hablamos de proceder de ese modo, y recién acabas de desobedecer eso.
Reuben: "Deja de insistir, es ilegal y grosero" -dijo imitando el tono de Rosa.
Logrando que el alien de gran tamaño refunfuñe antes de lanzar la cápsula de contención de experimentos por la ventana.
Hollow: Gracias. Ahora ¿A qué se dedican sus padres, chicos?
Sheldon: De esa yo no tengo, me gano la vida como inventor independiente -respondió para sorpresa de sus conocidos.
Brad: Espera, ¿Y tus padres?
Sheldon: Como dije, no tengo de esos ¿Por qué crees que vivo solo? -cuestiono antes de notar las miradas de los demás- ¿Por qué me ven así?
Jenny: Ay, Sheldon...
Bradley: ¿Por qué nunca nos dijiste, viejo?
Sheldon: ¿Decirles que? -exclamó extrañado por la angustia de sus amigos.
Bradley: Pues que eres huérfano y vives solo.
Sheldon:... ¿Eso qué tiene de raro? Así ha sido siempre y no es como que a nadie le importe -dijo apartando la mirada con molestia por el tema.
La atmósfera en la oficina del laboratorio de la doctora Wakeman cambió de improviso, como si un peso invisible hubiera caído sobre todos. La sorpresa y la preocupación llenaban las miradas de los adolescentes que rápidamente olvidaron toda la cuestión de la oferta de trabajo de la doctora Wakeman.
Brad: ¿A nadie? ¿Ni siquiera de la escuela? -pregunto solo ganándose una mirada del otro chico que parecía decir sin palabras "¿es en serio?"- no inventes, ¿Ni sabes que es un delito que la escuela no se ponga en contacto con tus padres para casos de emergencia? Hasta lo hacen con Jenny y usualmente es para confirmar que faltó por cosas de ser la heroína de la ciudad.
Sheldon: Hablas con el típico perdedor de la escuela, solo eso diré -respondió señalando a sí mismo- y hablamos de este país donde la mayoría de escuelas se preocupan más por los abusadores qué por los nerds y víctimas de bullying. Sólo considera que les importa más ese payaso superficial de Don Prima, sólo porque su familia es adinerada.
Si, era de conocimiento común que existen diferentes formas de abuso en el ámbito educativo, como el acoso escolar, el abuso por parte de educadores y la falta de atención a las necesidades emocionales y psicológicas de los estudiantes. Estos problemas son objeto de atención y debate en la sociedad, y dichos problemas eran de los más conocidos en general en USA... ¿por qué será?
Sheldon: Igual, como dije, no es nada del otro mundo, y no me gusta hablar de eso porque cuando lo hago pasan a verme como me están viendo justo ahora, con lástima -reveló molesto- ¿Quién necesita padres? Esa casa la compré yo, mi ropa, mis cómics y mis cosas las compré yo con el dinero que yo mismo gané inventando. Claro que tuve que mentir y falsificar un par de cosas pero... A quién le importa -declaró apartando la mirada.
Nora: Pues al menos a mí me importa, jovencito -exclamó para sorpresa de todos- ya es indignante que el laboratorio de esa escuela esté tan mal organizado, ¿Pero que un estudiante esté en esta situación y ni den señales de importarles? El director me va a oír -dijo con decisión.
Solo para que en respuesta, Sheldon se molestara y se fuera de allí lo más rápido que pudiera. A sus ojos toda la situación lo molestaba, pero lo que más le hacía enojar, era que nadie parecía entender cómo se sentía.
Hollow:... Parece que tienen asunto que resolver -termino hablando para aligerar la tensión- nosotros volveremos mañana para saber su respuesta doctora, esperamos que sea positiva, buenas tardes -dijo poniéndose de pie junto a sus acompañantes.
Nora: Claro, señor Hollow, lamentó el drama que presenció -respondió en lo que trataba de serenarse luego de despedir a sus invitados- Bradley. Necesito hablar con Jenny. Tu eres amigo de Sheldon, ¿no? ¿Puedes hablar con él? -pidió a la vez que el pelirrojo asintió.
Bradley: Claro, doctora Wakeman, vámonos, Tuck -se despidió llevándose a su hermano menor quien prácticamente terminó despegando al niño de la pierna de su vecina robot.
Una vez que los tres chicos se fueron junto a Hollow y su grupo, el aire en la oficina de la doctora Wakeman se sentía pesado. El eco de las palabras de Sheldon aún resonaba en la mente de las dos mujeres. La doctora, aunque centrada en su hija y su bienestar, no podía evitar sentir una punzada de preocupación por el chico. Aunque de momento hizo tripas corazón, había temas más importantes que discutir.
Nora: Tú y tus amistades... -susurro con un suspiro antes de ver a la robot- escucha, estoy muy tentada a aceptar el empleo. Otra razón de porque me he aislado... Es porque cuando era joven, las mujeres científicas para la comunidad eran lo mismo que un dragón o un unicornio, cuentos de hadas... Sin ninguna credibilidad -dijo llamando la atención de la autómata.
Jenny: Si, lo sé, mamá, he notado que aún no te toman en serio algunos de tus compañeros científicos, aún cuando demostraste ser más inteligente que ellos.
Nora: Es porque son hombres, querida. La comunidad científica es de las más machistas... Como la gran mayoría de comunidades ahora que lo pienso -admitió encogida de hombros- por eso buscaba tanto tener una hija, no porque la fuera a querer más que a un hijo varón, sino para poder impulsarle a triunfar en un mundo donde tienes que ser hombre para que estén dispuestos a escucharte... y ahora me están ofreciendo una oportunidad para marcar un antes y un después en el mundo científico... -dijo en lo que se quitaba las gafas para limpiarlas- me darán crédito por eso en vez de quedar relegada al papel de asistente o solo la tipa que estaba ahí. Seré una colega, una igual.
Jenny:... De verdad quieres este trabajo ¿no? -preguntó con simpatía a la mujer que la había creado.
Nora: Estoy muy tentada... Pero si lo acepto, debo decir que nuestro tiempo juntas se reducirá drásticamente de forma indefinida, no sé cuánto vaya a durar el desarrollo de este proyecto... Y no me siento cómoda dejándote prácticamente sola -admitió.
Más que todo por ser consciente del historial que tenía su creación XJ9 para todo lo referente a caos y problemas, usualmente causados por su propia inmadurez producto de su programación como una chica normal en la edad de la adolescencia... una decisión cuestionable, de la que no se arrepiente.
Jenny: Mamá, estaré bien, no te preocupes -trato de aliviar a la mayor sin tener mucho éxito.
Nora: Tengo derecho a preocuparme, cada vez que te quito el ojo de encima terminas metiéndote en quien sabe que cosa. Por esa impulsividad tuya fue que te apagué cuando sucedió todo el caos del príncipe Loki y los Chitauri en Nueva York hace tiempo.
Jenny: ¡Pero hubiera ayudado, mamá! -se quejó al recordar lo molesta que estaba de cuando se le negó participar en esa batalla.
Nora: No, no hubieras podido... Tu tienes un límite, esa amenaza en particular era demasiado para ti. Ese era un peligro más fuerte que tú... Esta también puede ser una oportunidad para mejorarte a ti pensándolo bien -dijo pensando en las posibles posibilidades.
Cuando se tenía un cerebro como el de ella, literalmente la imaginación era el límite.
Jenny: ¿Mejorarme? Pero ya soy fuerte. He peleado contra alienígenas muchas veces.
Nora: ¿Quieres la verdad querida? Aun con todo, esas eran amenazas menores. Realmente comparado a los verdaderos monstruos que se esconden en el espacio. La tierra nunca había tenido una amenaza del nivel de la invasión Chitauri antes, al menos que se sepa -declaró con seriedad- aún es un misterio el porqué por ejemplo, con todo, los Clusters nunca han intentado una invasión a gran escala, sólo incursiones pequeñas -habló con suavidad, haciendo a su hija pensar en profundidad las implicaciones.
Jenny: ... ¿Y crees que puedan ayudarnos a mejorarme para ser una mejor ayuda para la Tierra?
Nora: Es una de las razones por las que voy a aceptar el trabajo, nos trae muchos beneficios -declaró ya tomando una decisión aparentemente.
Jenny: Supongo que no tenemos muchas opciones... ¿Por qué Sheldon se puso así de... Molesto? Pensé que lo normal es que cuando te enteras de algo así... -dijo retomando el tema anterior, haciendo a la mayor negar.
Nora: Eso es porque él lo ve normal, hasta donde sabemos, parece que ha sido tan subestimado y pasado por alto que a nadie le importó nunca que no tuviera padres. Que ahora parece que a la gente le importa lo enoja porque él ya se había hecho a la idea de que no importaba -trato de explicar lo que ella cree que es el problema- y reafirmó, el director me va a oír sobre el tema, es absurdo que no tome medidas contra esas niñas Crust, ¿Pero que la situación de un alumno llegue a esos extremos?
Nora observó a Jenny, quien parecía más perdida en sus pensamientos que antes. La preocupación reflejada en su rostro era palpable, y la doctora sabía que su hija estaba procesando no solo la oferta de trabajo, sino también la situación de Sheldon. Al menos podía decir que algo de lo que estaba orgullosa es de su creación y su programación única para imitar perfectamente los sentimientos y las emociones, como la empatía y la preocupación por los demás.
Nora: Igual dejémosle lo de calmar a Sheldon a Bradley. Si vas tu solo hará el tonto dado su fanatismo por ti, XJ9 -menciono casual.
Jenny: ... ¿Realmente vamos a confiar en el mismo Brad que cuando acepté dejarlo cuidar el OVNI, él decidió tomarlo para pasearse? -dijo recordando el incidente de la nave espacial... si, su amigo podía ser incluso más impulsivo que ella, y eso era mucho decir.
Nora: Y también es el mismo Brad que siempre se aparece en la ventana para darte consejos aunque no los pidas, dándole igual invadir propiedad privada, y hace lo mismo con Sheldon así como su hermano menor -dijo dando por terminado el tema.
Jenny: Tienes razón, no perdemos nada con confiar en él... Quieres que empiece a empacar todo ¿no?
Nora: Por favor -pidió ya sentada tomando té.
A lo cual Jenny rezongando se dirigió a su habitación para comenzar a empacar. Dándole a la doctora un momento para reflexionar sobre la decisión que estaba a punto de tomar. Sabía que aceptar el trabajo en Rivera Robotics podría abrir muchas puertas, no solo para ella, sino también para su hija y sus futuros en el ámbito científico. Pero la idea de dejar a Jenny, aunque solo fuera por un tiempo, le causaba un nudo en el estómago...
Pero igual era una oportunidad que sentía que literalmente le estaba gritando en la cabeza que la tomara. Maldita sea su curiosidad científica... como sea ¿Qué es lo peor que puede pasar?
____________________________________________________________________
(Pasillo camino a la oficina del CEO, Rivera Solutions, San Fransokyo)
Penny: Es un honor para nosotros que haya aceptado esta reunión, señor Luis Ornando -dijo mientras escoltaba al mencionado que la seguía detrás- sabemos que tiene una agenda apretada, pero nos alegra que haya librado un espacio de su tiempo para esto.
El hombre era un futbolista retirado que ganó fama al conseguir el logro de ganar tres Copas Mundiales de fútbol. Conocido por siempre dar un buen consejo a todo joven, él es el presidente de la federación internacional de la copa del mundo de fútbol callejero, que hacía poco habían tenido su primera copa mundial, la cual fue todo un éxito. Además, el señor Ornando era el fundador de una ONG muy conocida llamada Niños del Mundo, que como el nombre lo indica, se dedicaba a ayudar y apoyar a chicos de bajos recursos por todo el globo... en pocas palabras, el tipo era un santo.
Fede: Luego de ver que no repararon en gastos o recursos para librar mi agenda, es lo menos que puedo hacer... -dijo sonriendo pero manteniendo la seriedad- aunque no entiendo que quiere una multinacional tecnológica como está conmigo, y menos una que se las arregló para aislarse del mundo haciendo su propio país.
Penny: Es respecto a la Federación Internacional de Fútbol Callejero, señor Ornando -explico sonriendo, solo consiguiendo que el hombre por una fracción de segundos afilara la mirada.
Fede: La copa del mundo así como el fútbol callejero no son con fines lucrativos, pequeña.
Penny: ¿Qué? No, no, me explique mal, queremos financiar su operación -aclaro con pena por la malinterpretación previa- el señor Rivera se lo explicara mejor, venga por aquí -dijo abriendo las puertas.
Solo para al segundo cerrarlas y pedir disculpas nuevamente al señor Luis Ornando pidiendo que por favor esperaran unos minutos, ya que aparentemente Héctor estaba teniendo una reunión pronta a finalizar en compañía de Judy ¿y quienes eran las personas con las que estaban tratando?
Ni más ni menos que dos adolescentes, las gemelas Test, Susan y Mary. Un par de famosas adolescentes prodigio reconocidas en todo el país... o lo serían de no ser por el anonimato que las envuelve por más de una cuestión.
Susan: ¿Un compuesto de agua pesada y silicio qué sea prácticamente un combustible alterno y un pegamento universal para seres orgánicos y mecánicos?
Mary: Suena increíblemente complejo ¿No es demasiada para un par de chicas de secundaria? -pregunto haciendo al hombre rodar los ojos con cierta molestia por la actuación de ambas chicas.
Héctor: Por favor, no finjan ser inocentes. Ustedes tienen un historial de haber experimentado con casi todo lo que es legal, e incluso han sobrepasado esos límites. Han llevado a cabo experimentos tanto en seres orgánicos como mecánicos, inteligencias artificiales, sobrepasando la ética y la moral varias veces.
Judy: Lo preocupante es que muchas veces lo han hecho intentando conquistar a su vecino de al lado -dijo logrando una reacción automática en ambas jóvenes.
Susan y Mary: Ah Gil...-dijeron al unísono con tono soñador. Momento en que la otra persona presente se hizo escuchar.
Siendo este su hermano menor, Jonathan (Johnny) Test, quien se encontraba sentado en un sofá en una esquina de la oficina en compañía de su perro. Quien parecía querer estar en cualquier lugar menos allí y con ganas de querer escaparse a la mínima oportunidad.
Johnny: Chicas, dudo que ella lo haya dicho como si fuera algo bueno.
Susan: Tu ni hables que viniste de colado. La reunión era solo para nosotras -respondió con molestia en lo que su hermano solo rodo los ojos con fastidio.
Judy: Pero, su hermano tiene razón -dijo acomodando sus gafas- no lo dije como si fuera bueno que estén dispuestas a romper los límites morales de la ciencia para conseguir que un chico las note.
Héctor: Lo cual es muy frecuente -exclamó, para acto seguido notar que ya ambas chicas se estaban poniendo de pie dispuestas a irse- ... yo no haría eso si fuera ustedes. Si se van no me molestaría darle el pitazo al gobierno americano sobre un par de cosas, como que ustedes no tuvieron problema alguno en meterse con el cerebro del sargento Braphog, el militar estacionado en su ciudad.
Las gemelas se detuvieron en seco, sus rostros palidecieron al escuchar el nombre del sargento. Haciendo que den media vuelta y casi trotan de vuelta al sofá con una evidente tensión en los hombros de ambas.
Susan y Mary:... No tenemos idea de lo que está hablando...
Héctor: ¿Ah no? Veámoslo por escrito ¿Qué les parece? -sugirió con un papel en mano- minuta de reunión del día 12 de febrero. Motivo de la junta: Información sobre la amenaza que representa la familia Test. A palabras del sargento, este mencionó que eran una amenaza para la vida como la conocemos, ustedes causan más daño a su ciudad qué todos los temblores, inundaciones y festivales musicales juntos -mencionó haciendo que tantos los hermanos como incluso el perro de la familia se jalaban el cuello de la camisa o el pelaje con nerviosismo.
Judy: Y lo curioso es que no pasó ni una semana de esa reunión antes de que misteriosamente todo lo relacionado fuera borrado y todo plan fuera desechado repentinamente... Y de paso el propio sargento comenzó a actuar de forma más alocada y errática, como si alguien estuvo manoseando lo que no debía con el cerebro del hombre y lo dejó estropeado.
Susan: ¿Cómo consiguieron eso? ¡Me aseguré de borrar toda evidencia! -prácticamente confesó por la incredulidad que sentía ante la situación- yo, quiero decir... ¡Eso fue un accidente! -exclamó. Su gemela la miró con preocupación, pero Susan rápidamente intentó recuperar la compostura- Además, eso fue hace varios meses. Ya hemos aprendido de nuestros errores... ¿no es así, Mary?
Mary: Hermana... ya nos amolaste -confesó resignada.
Momento en que pasó algo que tomó por sorpresa a todos los jovenes Test por igual, el como una aparente bola amorfa de baba azul con un ojo cayó del techo, donde estaba pegado como si fuera pegamento o goma de mascar usada, para acto seguido abrazar a todos los chicos y al perro de forma algo intensa con la clara intención de inmovilizarlos.
B.O.B: ¡Hola nuevos amigos, juguemos! Se me ocurren tantas cosas que podemos hacer como... como... ¡nuevos amigos! -exclamó prácticamente por un momento olvidando que estaba haciendo.
Héctor: Mejor explico que pasa aquí, si pensaban usar algún invento. Olvídenlo, esta oficina los inutilizo a través de aparatos electromagnéticos. Y por si pensaban escapar por la fuerza con algún poder mutante qué le dieron a su hermano... Esta cosa es una mezcla única de benzoato de sodio, ostilizeno y bicarbonato a la que llamamos B.O.B, y es en extremo cariñoso. Por no decir, indestructible -dijo limpiándose las uñas con desinterés fingido- ahora... volviendo a lo del general.
Johnny: Tiene que entender. Los agentes Black y White no nos dejaban en paz. Me estaban haciendo la vida imposible en la escuela -trato de justificarse en lo que trataba inútilmente de soltarse- vamos, no me gustan los abrazos.
Susan y Mary: ¡Y a nosotras nos arruinaron que Gil nos invitará a una fiesta en la piscina! -exclamaron haciendo a la mujer mayor presente negar con molestia.
Judy: El joven Gil, que me sorprende que no haya sacado una órden de restricción por lo lejos que han llegado por estar con él a estas alturas.
Johnny: Eso es fácil, no lo hace porque aun con todo lo que hacen el ni nota que existen -respondió casi en automático para enojo de sus hermanas mayores- lo que hasta es un alivio por las cosas espeluznantes que han hecho por estar cerca de él.
Gemelas: ¡Eso no es cierto!
Johnny: ¿Y cuando se convirtieron en bebés para aprovechar que él había empezado un negocio de niñero? -pregunto arqueando una ceja- que por cierto si no estaba yo hubieran muerto porque con todo y que es un buen tipo, se notaba que era apenas su primer trabajo
Héctor: ... ¿Se convirtieron en bebés para que él pasara tiempo con ustedes como su niñero? -pregunto de forma inexpresiva sin saber como tomarse eso.
Johnny:... ¿Y lo peor de todo? Yo les cambié el pañal... Aún tengo traumas -dijo teniendo un leve espasmo por el recuerdo- y eso es sólo lo más espeluznante que han hecho.
Eso hizo que los adultos presentes observaran a los más jóvenes fijamente con una mezcla de incredulidad y desesperación. La situación se estaba volviendo cada vez más absurda, y el tiempo que tenían se estaba agotando, tenían una agenda apretada.
Héctor: Lo sabemos. Tenemos una lista completa de todos los inventos qué han hecho -reveló con la lista en mano- cuanto a costado cada uno, y cuantos daños han hecho... Si saben que la unica razón de que su instituto las siga financiando es porque su profesor, Slopsink, es un viejo senil que cree que no importa todo el caos que hagan porque las apoya como genias ¿no?
Judy: Que por cierto, mientras hablamos, ya estamos considerando solicitar que lo hagan jubilarse.
Héctor: Pero nos estamos desviando del tema -dijo casual- todo se resume en que este proyecto del polímero es muy importante, y queremos desarrollarlo de la forma más eficaz posible y en la mayor brevedad posible. De allí es que pensamos que su talento científico puede ser de ayuda -dijo cambiando su actitud de una amable a una más severa- si lo hacen, puedo darles mi palabra de tener lejos al gobierno americano de su puerta.
Susan: ¡Usted no puede amenazarnos, usualmente es el gobierno quien nos implora de rodillas qué los ayudemos! -Reclamo queriendo recuperar aunque fuera un poco el control de la situación, fallando en el intento.
Judy: Es es porque ahora que el sargento Braphog tiene el cerebro hecho puré, el gobierno americano sigue sin saber que ustedes usualmente son los que provocan la mitad de los desastres -respondió con algo de brusquedad.
Las gemelas con la presión de la situación cada vez más evidente, comenzaron a intercambiar miradas nerviosas. La sala se sentía cargada de tensión, y el abrazo amoroso de B.O.B no ayudaba en absoluto.
Héctor: Si me preguntan. El problema es que les dieron demasiadas libertades y eso en consecuencia les hizo creer que podían hacer lo que quisieran sin consecuencias, niños -termino reflexionando.
Judy: Y algo me dice que usted está de acuerdo, señor Duque -dijo mirando al perro- y si, sabemos que puede hablar -dijo tomando nuevamente a los chicos con la guardia baja.
Debido a que (aunque de forma muy pobre en realidad) era uno de sus mejores secretos guardados, el hecho de que el perro de la familia se le fue alterado todo su mapa genético para darle la capacidad de pensar y razonar como un ser humano, dándole entre otras cosas la capacidad de pararse en dos patas y por supuesto, hablar.
Duque: Ok, son buenos -dijo tirando a la basura la actuación de perro normal- Imagino que saben que es gracias a las chicas. ¿Y honestamente? Estoy de acuerdo con ustedes en todo lo que dicen. He intentado por mucho tiempo que estos chicos actúen más como una familia normal. Que convivan, que se amen... Pero todos son demasiado cabezotas. Y no ayuda que, como saben, mamá y papá no saben que hablo
Johnny: El mejor amigo del hombre, si ¿Cómo no? -no pudo evitar murmurar con sarcasmo.
Héctor: Niños. Solo queremos darles una oportunidad de redención y de responsabilidad. Porque se los digo de antemano, a como van las cosas, estoy casi seguro que terminarán el la balsa, la prisión de máxima seguridad para criminales internacionales -dijo haciéndoles tragar grueso- y hacer que vengan a vivir aquí es más que todo para tenerlos vigilados. Les guste o no, necesitan supervisión. Pero tampoco es que los acosaremos como los agentes Black y White.
Judy: Aparte de que todas las necesidades estarán cubiertas. Su padre tendrá una cocina de última generación, su madre una casa a orillas de la playa con su propio spa, y ustedes tendrán un laboratorio de última generación también -dijo buscando venderles bien la idea de mudarse a San Frasokyo, lo cual era un requisito obligatorio en caso de firmar el contrato.
Héctor: Por no mencionar que no irán presos.
Johnny: ... ¿Seguro que eso es lo que quiere? Como usted dijo somos muy problemáticos. Y tenemos varios enemigos que podrían venir a causar problemas ¿De verdad quiere eso para su país? -pregunto fingiendo preocupación e inocencia- no suena a una buena idea, sabe...
Recibiendo como respuesta nada más que la carcajada de Héctor que ni se molestó en prestarle atención.
Héctor: Tu lengua de plata no funciona conmigo, chico. Ya se que tu mayor virtud es que tienes el don de la oratoria -dijo para indignación del chico debido a que raras veces aparte de su familia, la gente notaba ese talento suyo.
Judy: Es curioso, no te interesa la escuela, pero si te metieras al club de debate, serías la estrella -mencionó haciendo sonrojar de pena al menor.
Duque: ¿Verdad que sí? Se lo he dicho pero él no me escucha, insiste en que es para nerds y que es aburrido. No se da cuenta que tiene un don, y lo usa más que todo para lograr ganarle en conversaciones a sus padres y para manipular a sus hermanas.
Johnny: Ya bájale -murmuró lo bastante fuerte para que su perro lo escuchara- en general pareces más insistente de lo normal en querer ser pepito grillo, Duque.
Duque: Se llama ser tu mascota y mejor amigo. Sin mencionar el adulto responsable de este raro grupo... Y por si no se han dado cuenta, estos tipos no son como los perdedores qué suelen darnos problemas -dijo refiriéndose a los intentos de villanos que suelen meterse con los jóvenes Test de una u otra manera.
Cerebro congelado, el señor Mittens, Rorro Pirrorro, Dark Vegan, Wacko, el abejero, el rey topo, por mencionar algunos ejemplos. Sin saber que bajo la alfombra, la empresa ya se estaba encargando de ellos de una u otra forma.
(Ignorar a Sissy (la rubia) y la copia barata de Nelson, esos solo son molestos XD)
Susan: A ver peludo, por parte de Mary y de mi lo dejaré muy claro para que lo entiendas ¡Gil no está aquí!
Duque: Y tampoco estará en la prisión donde los quieren mandar -dijo tratando de razonar. Mientras que por su parte, Héctor se había cansado.
Héctor: ... ¿Eso es todo? Fácilmente puedo hacer que el chico se mude aquí -dijo decidiendo usar su as bajo la manga.
Susan y Mary: ¿En serio?
Duque: ¿De verdad les va a dar por su lado? -preguntó con incredulidad en lo que el CEO se encogió de hombros.
Héctor: Aparentemente es el único idioma que estas dos entienden -explico- y si son tan listas. Sabrán que si Gil se muda aquí y ellas deciden no venir también, significa que nunca lo volverán a ver.
Y en resumidas cuentas, ni había terminado de soltar esa amenaza cuando ambas chicas estaban firmando el contrato tanto con la empresa como de confidencialidad sin pensarlo dos veces. Hubiera empezado por allí, pero no quería llegar a esos extremos... a veces hay gente que por muy lista que sea, es muy obstinada.
Si supieran que el plan era que ellas y Gil vivieran en lados opuestos de la ciudad-estado.
Susan y Mary: ¿Cuándo nos vamos?
Duque: Qué fácil las compran -negó con resignación- eh imagino que del mismo modo se echó al bolsillo fácilmente a mamá y papá también
Héctor; No fue difícil, por mucho que quieran jugar a ser los padres estrictos y tradicionalistas, son demasiado blandos a la hora de ser sobornados -aclaró divertido- en palabras de sus padres "Aceptamos todo, pero con decir que los pondrán en cintura bastaba" -dijo siendo ignorado por las chicas que ya estaban fantaseando.
La atmósfera en la oficina se tornó un poco más relajada tras la firma del contrato por parte de las gemelas. Sin embargo, la tensión aún era palpable, sobre todo en el rostro de Johnny, quien miraba a sus hermanas con incredulidad.
Johnny: No puedo creer que lo hayan hecho. ¿Es que no ven lo que esto significa? Están firmando un contrato con una multinacional. ¡Podrían estar vendiendo su alma!
Susan: Oh, por favor, Johnny. Si esto significa que podremos hacer experimentos sin que nos estén persiguiendo, vale la pena. No podemos seguir viviendo con miedo a que nos atrapen.
Mary: Además, piensen en las oportunidades. Tendremos acceso a tecnología avanzada, laboratorios de última generación... ¡Y Gil! ¡Es un sueño hecho realidad!
Si, ya no escuchaba absolutamente a nadie.
Héctor: En cuanto a ti -paso su atención a Johnny- creo que podemos darle buen recaudo a esa hiperactividad tuya. A estas alturas ofrecerte tener una infancia normal no entra en discusión porque ya estás acostumbrado a que tu vida sea un caos.
Judy: Y es lo bastante listo, además de ser también lo bastante travieso como para no aceptar una rutina... ¿Y si lo hacemos practicar deportes extremos? Escuché que hacen torneos de Skateboarding -dijo haciendo al rubio de cabello flameado levantar la oreja.
Johnny: Pues no es por presumir... -dijo obviamente queriendo hacer eso, le habían dado justo en su talón de Aquiles.
Duque:... De verdad que han estudiado a esta familia. Pero no hay modo de que me compren a mí, solo no hay forma...
Héctor: ¿Te late un late? -con café en mano- de paso incluye una dotación de filetes y tocino para todo un año.
Duque: ¡Vendido! -sacando un martillo de juez y golpeando la mesa del café luego de liberar su brazo de B.O.B.
Johnny, Susan y Mary: ¡Tú eres más fácil de comprar que nosotros! -reclamaron al perro que solo se encogió de hombros casual.
Aunque en un plano más general, las gemelas Test estaban emocionadas por su nuevo acuerdo con la multinacional, mientras que por su parte Johnny estaba igual de impaciente por comenzar a trabajar en lo que sea que lo pusieran a hacer. El único que tenía un cierto recelo aún era el perro de la familia nada más por no saber qué esperar de todo el asunto.
Héctor: Ya suéltalos B.O.B -pidió al monstruo azul que obedeció con algo de tristeza por soltar a los nuevos amigos- sabía que las cosas acabarían así. Y descuiden, ya nos estamos ocupando de algunos de sus problemas. Por ejemplo tuvimos una sería charla con la mamá de Eugenio, o como se hace llamar, Rorro Pirrorro.
Judy: Y creíamos que Richardson Mole era narcisista -dijo tras soltar un bufido al aguantar la risa. El chico fue muy molesto, en cierto modo que daba algo de pena ajena.
Susan: ¿Lo acusaron con su mamá? Créanos, eso no funciona.
Mary: Usualmente es solo una solución temporal antes de que empiece con sus planes locos de nuevo.
Héctor: Esto es diferente... Tan sencillo como mostrarle a su madre cuánto ha gastado su hijo en sus caprichos e ideas locas. Ella no lo sabía -exclamó con cierta malicia.
Judy: Lo interesante de los ricos, es el hecho de que muchos son ricos precisamente porque son inteligentes con su dinero -comenzó a explicar- sí, se permiten ciertos lujos, pero pocos andan gastando en cosas que no están seguros de que llegarán a buen recaudo.
Héctor: Traducción, mamá se enojó cuando vio cuánto ha gastado su hijo todo este tiempo en secreto
Judy: Y cuando decimos "enojarse", es más como la señora Imelda se enoja con el señor Rivera -soltó buscando justamente lo que paso, que su jefe se tensara con una expresión de horror en su rostro.
Regla básica de todo hombre que esta o alguna vez estuvo casado: Tenle miedo a la doña cuando está molesta.
Héctor: En resumidas cuentas -dijo recobrando la compostura- su mamá le prohibió el acceso al dinero familiar hasta nuevo aviso. No tendrán que preocuparse de Eugenio por un largo tiempo.
Susan: ... Esperen un momento -habló antes de ponerse de pie y salir de la habitación.
Siendo allí que, gracias a que dejó la puerta abierta, fue que todos pudieron observar a la joven realizar varias maromas hacia atrás en señal de celebración dignas de un acto circense.
Héctor: Ok...
Mary: Rorro suele acosar a Susan, por eso a ella la pone tan feliz saber que no tendrá que aguantarlo por mucho tiempo -explicó su hermana en lo que el adulto asintió. Para luego la mencionada volver como si nada paso
Susan: Mucho mejor. Por cierto Don Héctor, una de sus asistentes está afuera con un señor esperando.
Héctor: ¿Qué? Oh sí, mi reunión con el señor Ornando. Bueno chicos, si no les importa tengo un día ocupado. Judy los llevara a su vehículo para que vuelvan a su ciudad a empacar -declaró en lo que se ponía de pie y acompañaba a los jóvenes fuera de su oficina- y ya que estamos ¿tú no tienes a nadie en especial? -pregunto mirando al más joven de los Test que solo se encogió de hombros.
Duque: Para eso tendría que caerse el cielo. A este chico solo le importan los juegos, los deportes extremos y las cosas típicas de chicos -dijo divertido, haciendo al chico gruñir por lo bajo.
Héctor: Una pena, digo, considerando que obviamente Gil no le es irrelevante, pero como sea, eso no es asunto mío -dijo guiñando un ojo al perro que se rió en respuesta.
Duque: Vaya que sí
Johnny:... ¿Qué? -pregunto solo para no recibir respuesta.
Siendo allí donde Judy procedió a dejar llevarse a los chicos. Donde poco después las puertas de la oficina se abrieron para dejar ver a una Penny Proud que hacía hasta lo imposible para disculparse con el hombre que la acompañaba por haberle hecho esperar. A lo cual el mayor busco restarle importancia al asunto.
Penny: Señor Rivera -dijo llamando la atención del hombre que se había servido un trago mientras observaba el paisaje por la ventana- el señor Ornando está aquí.
Héctor: ¡Excelente! -exclamó acercándose y apretando la mano del hombre con toda confianza- es un gusto conocerte Fede ¿Puedo llamarte Fede? ¡Encantado! Por favor perdona haberte hecho esperar, tu entenderás, estaba a mitad de una reunión.
Fede: Descuide, entiendo -dijo tratando de disimular su sorpresa- perdone si soy directo, pero... ¿Es usted Héctor Rivera? ¿El famoso músico vuelto ermitaño y creído loco por muchos?
Héctor: ¡El mismo! -respondió con orgullo- y olvidaste decir que nuevo presidente y CEO principal de Rivera Solutions. Y afirmó, si estoy loco. Pero en este mundo tienes que estarlo para triunfar ¿o no? -pregunto al hombre que no supo exactamente si debía afirmar o negar- de cualquier modo ¡toma asiento! ¿Se te antoja algo? ¿Tequila, Whisky? ¿O prefieres un vino por tus raíces francesas? -pregunto abriendo su reserva privada.
Fede: Prefiero agua o algún refresco, no gusto de tomar alcohol cuando, como veo será en éste caso, voy a hablar de negocios -dijo acomodándose en el sofá.
No pudiendo evitar sentir curiosidad y cierto recelo con el hombre en frente suyo. En un negocio como lo era el deporte, era normal encontrar gente de todo tipo. Pero una clase en particular de gente, eran los actores, personas que esconden sus verdaderas emociones para mostrar una máscara al ojo público. Ese era un talento que absolutamente todos tenían, unos más que otros, pero si le preguntaban a Fede. Diría que Héctor a simple vista... parecía ser un experto en el arte de las máscaras actorales.
Héctor: Hombre sensato, me gusta -dijo tomándose un vaso de tequila de un trago- uff, mucho mejor. Verás, tengo entendido que empezaste una copa de fútbol callejero por tu cuenta. Bueno, quiero ayudar con eso. Ayudarte para la próxima Copa mundial -declaró sonriendo- instalaciones, transporte, equipo de última generación, hasta estoy dispuesto a darles becas de estudio a los chicos que lleguen a más eliminatorias del mundial. Solo pídelo y está hecho.
Fede: Vaya... -fue lo que dijo no esperando eso- todo me parece bien salvo las instalaciones, como imaginarás, si lo hiciéramos en un estudio dejaría de ser fútbol callejero.
Héctor: ¿Y quien dijo algo de un estadio? Si quieres uno te lo doy, pero no hablaba de eso, me refería a un centro de entrenamiento, o bien si, lugares donde se jueguen, pero más clandestinos, tu entiendes -dijo con una sonrisa de comercial.
A lo cual Fede se acomodó en el sofá, sintiendo que la conversación empezaba a tomar un giro interesante. La propuesta de Héctor Rivera era, sin duda, atractiva, pero su instinto le decía que había más en juego de lo que parecía.
Fede:... ¿Y de verdad le daría una beca a los que clasifiquen al mundial?
Héctor: ¡Seguro! No habría problema -dijo con tranquilidad- además, ese desde ya sería un buen premio para los que logran clasificar ya que como sabemos, sólo puede haber un equipo campeón -dijo en lo que el otro hombre le concedió el punto.
Fede: Ahora... Está es la parte donde pregunto... ¿Cuál es el truco sucio? -cuestiono cruzado de brazos.
No quería ser pesimista o actuar como el malo del cuento, pero... era demasiado bueno para ser verdad.
Héctor: Pues no se si sea sucio o no, pero en resumidas cuentas... mi hijo desea que su equipo entre a la competencia, y como me llamó la atención el deseo de mi hijo, decidí poner mi granito de arena -dijo para sorpresa del ex futbolista.
Fede: ¿Tiene un hijo?
Héctor: Ya ves que sí. El junto a sus amigos son mi nuevo proyecto para volver de mi exilio autoimpuesto ¿has escuchado de Crazy Land? Lo entendería si no, como tal aún no han debutado pero ya la publicidad se está moviendo -dijo para impresión del contrario- pues verá usted, el líder de la banda es mi chamaco. Que pasa y resulta que también quiere volver su banda en su equipo para el campeonato mundial.
Fede:... Pero, solo son 3. Pará que sea un equipo necesitan al menos 5 -dijo mirando un prototipo de poster promocional donde se veían a los tres jóvenes.
Héctor: Ya está trabajando en eso, igual tampoco es que ya de la nada se empiecen los preparativos, Roma no se construyó en un día -divago- mientras mi chamaco está haciendo su equipo. El trabajo tuyo y mío será organizar todo para un campeonato nunca antes visto -dijo sonriendo emocionado- Aclarando. Tampoco es que vaya a darle a mi hijo alguna ventaja injusta, por eso hablo contigo, porque así como voy a darle a mijo total disposición de la tecnología para su entrenamiento, por medio de ti, le daré esa misma oportunidad a todos los que quieran competir en este torneo, Fede.
A su vez, el señor Ornando se quedó en silencio, sopesando las palabras de Héctor. La oferta era tentadora, pero su naturaleza cautelosa lo mantenía alerta. Sabía que en el mundo del deporte, las cosas rara vez eran tan simples como parecían.
Fede: Entiendo la intención detrás de tu oferta, pero... ¿qué hay de la ética? ¿Cómo garantizas que esto no se convierta en una plataforma para que tu hijo y sus amigos tengan una ventaja desleal?
Héctor: Buena pregunta. La intención es que todos los participantes tengan acceso a las mismas oportunidades. No estoy aquí para manipular el juego a favor de mi hijo. Quiero que este evento sea un verdadero escaparate de talento, un lugar donde los jóvenes puedan brillar, sin importar su origen.
Fede: Y si las cosas no salen como planeas... ¿Qué pasará con las becas y el apoyo que prometes? -pregunto asiendo al CEO sonreír, claramente disfrutando de la conversación. Era un hombre que sabía defender su posición.
Héctor: Los compromisos son sagrados para mí. Si mi hijo y su equipo no logran clasificar, no significa que no habrá becas. Mi intención es que hayamos hecho algo grandioso. Este es un proyecto que no solo beneficiará a mi hijo, sino a muchos otros -dijo con tranquilidad, logrando calmar al contrario.
Esa declaración hizo que el hombre inglés se sintiera un poco más cómodo. No obstante, toda la situación era muy difícil de digerir.
Fede: Muy bien. Pero debo decir que eso me sorprende -hablo con curiosidad- el cómo una persona de alta alcurnia dice no querer amañar nada, pensé que haría cuanto fuera para que su hijo gane, sin buscar ofender a la alta clase -exclamó para diversión del contrario.
Héctor: Pues veras, mi amigo... Es más simple de lo que crees. Dime ¿no sería más interesante si todos los que van a jugar puedan hacerlo dando el máximo de su capacidad? -pregunto con emoción- un sueño por el que no se lucha para alcanzarlo, no es tan divertido. Además, nada de buscar no ofender, así como me ves empecé desde abajo.
Muy, muy de abajo si debía ser específico... Ese no fue un pasado para nada lindo.
Héctor: Pero como sea. Pará demostrar que hablo en serio, desde ya voy a darte un regalo, querido Fede, o un adelanto en todo caso -dijo antes de pulsar un botón- esto fue amablemente donado por el departamento de policía de la ciudad de sus evidencias de crimen. Estaban haciendo espacio.
Se trataba de una serie de esqueletos flexibles de fibra de carbono recubiertos de plástico y cables, con gruesas extremidades que mantenían unido el resto de sus cuerpos. Para quienes no los conocían, eran Baymax en fase beta con solo unos detalles para estar en óptimas condiciones.
Febe:... ¿Gracias? -fue todo lo que pudo decir con extrañeza.
Héctor: Tranquilo, así están incompletos, la idea es que se vean así -dijo chasqueando sus dedos en lo que una unidad Baymax comenzará a inflarse en medio de la oficina- ¿no es adorable?
Baymax 054: Hola, yo soy Baymax, unidad 054 -dijo con la mano levantada- su asistente médico personal.
Fede:... ¿Un robot asistente médico? -pregunto francamente impresionado.
Héctor: Así es. Lo estuve pensando y según tengo entendido, uno de los mayores problemas del fútbol callejero es que los chicos puedan salir heridos con facilidad. Ahora, imagina a uno de estos como apoyo médico en cada partido alrededor del mundo que se haga. Listos para atender cualquier contratiempo en la mayor brevedad posible -dio la idea como si de un comercial de ventas se tratara.
Fede: ¿Y cómo funciona? -pregunto, siendo la respuesta una bofetada del contrario- ¡Auch! ¿Porque usted...?
Baymax 054: En una escala del 1 al 10 ¿Cómo calificaría su dolor? -pregunto interponiéndose entre ambos hombres antes de hacer un análisis al más joven de los dos- análisis terminado, recomendación, una compresa fría -receto para luego colocar dicha compresa en la mano de Fede, junto a una paleta- esto por ser un buen paciente.
Fede, aún sorprendido por el giro inesperado de la conversación, miró a Baymax con una mezcla de asombro y preocupación. El robot, aunque diseñado para ayudar, parecía tener un aire de inocencia que le hacía dudar de las intenciones de Héctor.
Fede: Esto es... impresionante, pero... ¿realmente cree que un robot puede ayudar en un partido de fútbol callejero? No es exactamente un entorno donde la tecnología sea bien recibida.
Héctor: ¡Exactamente! -respondió Héctor, entusiasmado- Esa es la clave. La idea es integrar la tecnología en el deporte de una manera que no interfiera, sino que complemente la experiencia. Los chicos podrían ver a Baymax como un aliado, no como un obstáculo.
Fede: Pero, ¿y si los chicos se sienten intimidados por la presencia de un robot? El fútbol callejero es un espacio de libertad y espontaneidad.
Héctor: Precisamente. La idea es que Baymax no sea solo un asistente médico, sino también un compañero. Puede aprender a interactuar con ellos, a conocer sus estilos de juego y a ser parte del equipo. Además, como asistente médico, su objetivo es garantizar la seguridad de los jugadores, lo que debería alentar a los chicos a jugar más libremente.
Fede se quedó en silencio, reflexionando sobre la propuesta. La visión de Héctor era ambiciosa, y en realidad no iba a negar que había algo intrigante en la idea de combinar fútbol y tecnología.
Héctor: Y obviamente eso no es nada. Baymax está programado para asistir a quien sea una vez escuche cualquier signo de dolor. Puede atender todo tipo de heridas rápidamente, desde fracturas a dislocaciones, hemorragias y vete a saber que más... ¿Qué te parece?
Fede: ¿Si te soy sincero... es Impresionante -admitió- al principio no estaba convencido, pero con su ayuda, está próxima copa puede ser en verdad mucho mejor a la primera. Es más, todo el campeonato puede ser como nunca lo habíamos imaginado... Me cuesta creer que de verdad lo esté haciendo de forma tan desinteresada.
Héctor: Tu tranquilo, yo nervioso... Que dice si luego de que definamos todos los detalles. Le doy uno de prueba para que lo use donde usted quiera... Que imagino que será esa ciudad donde fue el último campeonato, Puerto Marié ¿no?
Fede: No veo porqué no -reconoció.
Héctor: Entonces en eso quedamos, estaremos hablando las próximas semanas para ir programando todo, y de paso espero su asistencia en la fiesta de gala que voy a hacer en unos días. Por mientras -dijo con una botella de vino en mano- ¡Un brindis! ¡Por el fútbol callejero y la nueva copa mundial!
Fede levantó su copa, que terminó aceptando por cortesía, sintiendo una mezcla de escepticismo y emoción mientras observaba a Héctor. La conversación había tomado un giro inesperado; el hombre que parecía ser un simple empresario resultaba ser un visionario con ideas innovadoras. Sin embargo, no podía evitar preguntarse cuáles eran las verdaderas intenciones detrás de todo.
___________________________________________________________________
(Sala de juntas, Rivera Solutions, San Fransokyo)
Y ahora la pregunta del millón, mientras Hector y Hollow hacían sus movimientos. ¿Y Rosa dónde estaba? Pues bueno, a su vez que ambos hombres se encontraban moviendo algunas piezas del tablero, ella se ocupaba de movilizar algunas de las piezas más importantes, cada uno ganándose la posición de rey en la partida global de una u otra forma.
Rosa: Caballeros, es un placer que los tres accedieran a esta reunión, prometo no quitarles mucho de su tiempo -dijo haciendo reverencia a los hologramas de tres hombres.
Siendo uno más que conocido que otro pero en si los tres eran muy importantes en partes iguales. A su izquierda un magnate de fama mundial por ser genio, millonario, playboy y filántropo (sin contar cierta armadura en la ecuación). A su derecha un genio científico que era reconocido como una de las grandes mentes del siglo 21, y en el centro y al frente al líder de una nación que era a ojos de muchos la aspiración de las naciones para llegar a ser como su reino.
Tony: A mí sólo me llamó la atención encontrar una invitación en mi escritorio para esta reunión holográfica... Veo que a ti también te llamaron Reed. Esto será interesante -dijo mirando al otro estadounidense que asintió en reconocimiento.
Reed: Lo que me sorprende es que tú accedieras, Tony, usualmente es difícil que halles tiempo en tu "ocupada agenda" -dijo haciendo al magnate reír por el comentario.
Tony: En cierto modo no tuve opción. Una vez tomé la carta, esta me siguió a todos lados hasta que accediera a abrirla -admitió con algo de fastidio por el recuerdo.
Rosa: Era un por si acaso -reveló con algo de diversión- es bien sabido lo quisquilloso que puede ser con varias cosas, señor Stark.
Tony: Te concedo ese detalle -mencionó encogido de hombros- en todo caso ¿Quién es el abuelo? -preguntó señalando al miembro restante en la reunión que hasta ahora permaneció en silencio.
Siendo la respuesta de la joven hacer reverencia nuevamente, pero solo al hombre de piel oscura, para impresión y curiosidad de los otros dos.
Rosa: Su majestad, me alegra que haya tenido tiempo y que la invitación llegará sin problema a sus manos.
T'Chaka: Debo decir que me sorprende que pudieran hacer llegar esto ante mí -dijo con el sobre de la carta en mano, asintiendo levemente en respuesta al saludo- siendo justo por eso que decidí aceptar y conectarme a esta reunión. ¿Cómo saben dónde queda exactamente mi tierra?
Rosa: Solo digamos que un murciélago me lo dijo -fue todo lo que dijo aun con el tono medio burlón que si llegó a irritar un poco a los tres en diferentes medidas.
Tony: Y yo sin saber qué pasa aquí.
Rosa: Tiene razón, mis disculpas -admitió con algo de pena- mejor voy directo al punto. Me presento, mi nombre es Rosa Rivera, sobrina y asistente del actual CEO de Rivera Solutions y en cierto modo gobernante de la nueva ciudad estado de San Fransokyo junto a la alcaldesa Saito, Don Héctor Rivera.
Tony: ¿Rivera Solutions? He oído un par de cosas, pero ahora mismo no me termina de sonar -dijo haciendo como que intenta recordar.
Reed: Tal vez la conozcas mejor como le decían antes, KreiTech.
Tony: Ah ya me acuerdo -dijo con algo de malicia- lo que le paso a Alistair fácilmente podemos llamarlo la mayor humillación a un hombre de negocios en la actualidad.
Reed: Siendo justos, se lo buscó, ese siempre fue su error, asumir que sin importar qué siempre se saldría con la suya -reconoció de forma objetiva.
T'Chaka: Disculpen, sin buscar invadir la conversación... -dijo buscando volver a la reunión.
A lo cual la joven asintió, reconociendo la interrupción del rey como un intento de volver al tema principal.
Rosa: En todo caso, el motivo de esta reunión es la de extenderles una invitación a un evento formal y a la vez informal, a la alcaldesa así como a mi tío y a mi, nos gustaría que fueran invitados en nuestra próxima fiesta de té -reveló llamando la atención de los tres.
Tony: ¿Fiesta de té? -exclamó no muy impresionado, cosa que la chica ya esperaba.
Rosa: Así es. Ya tenemos confirmada la asistencia de algunas personas importantes. Algunos lobos de wall street, más de un famoso del medio, sin contar a la gran mayoría de la clase alta de la ciudad, sin mencionar algunos talentos jóvenes científicos. Y nuestros invitados V.I.P por supuesto.
Tony: Lo siento -interrumpió mirando su teléfono fingiendo que miraba su agenda- tengo mejores cosas que hacer que jugar a las muñequitas con un montón de excéntricos como para ser un V.I.P de...
Rosa: Discúlpeme, pero... -dijo riendo quedamente- ¿Quien le dijo que usted sería un V.I.P?
Tony: ... ¿Excusez-moi? -casi que le salió del alma con esa respuesta de la chica.
Rosa: Le estamos extendiendo la invitación para que disfrute del evento y conozca a otras personas influyentes así como superhéroes o héroes en ciernes -explico con calma- pero no es un V.I.P, los V.I.P son personas a las que se les ofrecerá la oportunidad de ver nuestro más reciente proyecto de ingeniería biomédica y robótica qué podría revolucionar el mundo como lo conocemos... No creo que le interese para nada, por eso lo invitamos solo a la fiesta, señor Stark -término restando importancia al asunto.
Y como gato persiguiendo el punto de luz, Stark cayó redondo en la trampa verbal.
Tony: Ah, no, de hecho me interesa -dijo casi con demasiada intensidad para su gusto.
Rosa: No, para nada, estoy seguro de que preferiría pasar su tiempo buscando hacer fama a su reputación de playboy, no tiene que fingir interés -siguió tomando como menos al magnate- sabemos que tiene mejores cosas que hacer qué una posible oportunidad de negocios de un país aislado, qué muy posiblemente no lo compartirá con la mayoría de la gente. Seguro tiene mejores cosas que hacer -termino diciendo encogida de hombros.
Tony: No, no las tengo -respondió con seriedad.
Y aunque por fuera no lo mostrara, por dentro Rosa sonrió con satisfacción al ver cómo Tony Stark, el famoso Iron Man, había mordido el anzuelo. La expresión de incredulidad en su rostro era todo lo que necesitaba para saber que había logrado captar su atención. De allí que no le molesto pasar los siguientes 15 minutos discutiendo con el hombre jugando con la clásica psicología inversa.
Rosa: Entonces, ¿podemos contar con su presencia, señor Stark? -preguntó, manteniendo un tono de voz sereno y profesional, mientras en su interior celebraba la victoria de haberlo convencido.
Tony: ¡Voy a ir y no harás nada para impedirlo, yo gano, tu pierdes!
Rosa: Usted lo dijo, no yo -dijo fingiendo resignación mientras que por su parte el filántropo no pudo evitar sonreír con arrogancia... antes de darse cuenta de que le vieron la cara.
T'Chaka: Lo manipuló para que quisiera ir, ¿Verdad? -susurro por lo bajo a Mr. Fantástico que asintió en respuesta.
Reed: Tony Stark podrá ser una de las mentes más brillantes con vida así como uno de los hombres más adinerados, pero tiene la madurez emocional de un niño -declaró en lo que el monarca asintió entendiendo.
T'chaka: Por cierto, mi niña -dijo llamando la atención de Rosa- ¿mencionaste algo de que tu país es aislado?
Rosa: En efecto majestad, San Fransokyo se separó de Estados Unidos recientemente, con el fin de ser una nación de fronteras cerradas. De hecho, justo por eso es que queremos invitarlo a la fiesta del té, nos gustaría tener una relación amistosa con otro país aislado como lo es Wakanda.
Momento en que ambos genios se desubicaron por completo con lo último.
Reed:... ¿Wakanda es real? -pregunto a la vez que el rey solo suspiro con resignación.
T'Chaka: Supongo que ahora no tiene mucho sentido ocultarlo -exclamó antes de asentir- me presento, rey T'Chaka, de la Tribu Dorada, rey de Wakanda.
Dicha revelación dejó sin palabras a ambos genios, y Rosa, leyendo el ambiente en la sala con solo una mirada, sonrió con satisfacción. La revelación de T'Chaka había sorprendido a todos, y ella sabía que eso podría ser un punto de quiebre en la reunión. Ahora tenía la atención de los tres hombres, y eso era exactamente lo que había querido.
Tony:... Usted conoció a mi padre, le dio el Vibranium para hacer el escudo del cap ¿no es así? -pregunto a la vez que el rey lo reconoció.
T'Chaka: ... Ya decía que tu rostro me era conocido, pero lo descarté porque eres demasiado joven, ¿Eres el hijo de Howard Stark?
Tony: Si, ese era mi viejo. ¿No se nota el parecido? -mencionó con un tono bromista, pero se notaba la amargura del solo recuerdo.
T'Chaka: Supe lo que pasó... mis más sentidos pésames, muchacho, fue un gran hombre -reconoció el rey, a lo cual el heredero Stark solo agradeció en silencio el gesto.
Y no era para menos, Howard Anthony Walter Stark fue un inventor, ingeniero, director de cine, empresario y fundador de Industrias Stark. Durante la Segunda Guerra Mundial trabajó con varios proyectos del gobierno de Estados Unidos, incluyendo el Proyecto Manhattan y el Proyecto Renacimiento. Él ayudó a la Reserva Científica Estratégica en la lucha contra HYDRA. También construyó el segundo escudo del Capitán América, y después de la guerra encontró el Teseracto, que se había perdido en el Océano Atlántico. Y eso era solo la punta del iceberg de todo lo que hizo.
Pero a quien más le afectó su deceso junto al de su madre fue su único hijo, y Rosa lo sabía, luego de haber investigado a fondo todo lo relacionado al pasado de la familia, así que sabía dónde golpear.
Rosa: Igual se puede decir que el señor Stark ya vengó a sus padres hace tiempo al llevar a prisión al responsable principal de la muerte de su padre -comentó de forma casual haciendo que la atención volviera a ella.
Tony:... ¿De qué estás hablando?
Rosa: Oh... Debo dejar ese hábito de hablar más de la cuenta... -dijo con un muy mal intento de fingir remordimiento- ¿Recuerda a Obadiah Stane, no?
Tony: ... ¡Lo sabía! -grito de repente golpeando la mesa con frustración.
Bueno, eso no se lo esperaba. Tampoco debió subestimar a un Stark, eso era un hecho.
Reed: ¿Qué es lo que...?
Rosa: Howard y María Stark fueron asesinados debido a que Howard replicó el suero del super soldado -comenzó a revelar- esa información llegó a manos de los rusos, quienes mandaron a un asesino a hacer el trabajo sucio... Y Obadiah Stane fue el topo qué divulgó esa información para sacar a Howard Stark de la planilla directiva -dijo mostrando una imagen del hombre en cuestión.
Tony: Luego de que mandara a Obadiah a prisión -habló de repente- luego de su breve tiempo como Iron Monger, me puse a pensar, él fue quien contactó a los Diez Anillos para básicamente venderme, ellos tendrían un misil Jericho hecho personalmente por mí, y luego ellos me eliminaban... Pero ¿y si esa no era la única jugada sucia que hizo para hacerse de Industrias Stark?
Rosa: Como ve, no lo fue -dijo ajustando sus gafas para enfatizar el punto.
Tony: ¡Malparido hijo de puta! -exclamó frustrado llevándose ambas manos a la cabeza.
La asistente de CEO observó con atención cómo la rabia y la frustración se apoderaban de Tony Stark. Era un espectáculo curioso, y no pudo evitar sentir una mezcla de satisfacción y preocupación. Había logrado captar su atención, pero ahora debía asegurarse de que no se dejara llevar por el impulso de la ira. Por ahora mejor desviaba su atención a alguien más.
Rosa: Entonces... ¿Qué dice, majestad? ¿le interesaría asistir? De paso también tenemos algo de su interés si accede a asistir... ¿Le suena el nombre de un traficante llamado Ulysses Klaue? -pregunto logrando captar el interés del monarca en lo que mostraba un holograma del mencionado.
T'Chaka: Vaya que sí -dijo no pudiendo evitar fruncir el ceño.
Rosa: Lo tenemos preso -reveló casual- como un acto de buena fe, le devolveremos a su majestad y a Wakanda todo el Vibranium que Ulysses tenía en su posesión y de paso entregaremos su custodia a su persona, alteza.
Haciendo que el mencionado se quedara en silencio por un momento, procesando la información que Rosa le había proporcionado. El hecho de que tuvieran a Ulysses Klaue, uno de los más notorios traficantes de vibranium, en su poder era un giro inesperado que podría cambiar el rumbo de las relaciones entre Wakanda y esta nueva San Fransokyo.
T'Chaka: Esto es... considerable, señorita Rivera. No sólo me está ofreciendo una invitación a su evento, sino que también está proponiendo una restauración de algo que es vital para mi nación -dijo, su voz grave resonando en la sala, para luego hacer una leve reverencia- me parece perfecto, mi niña.
Rosa: Esperamos ansiosos su llegada -dijo sonriendo antes de ver a quien faltaba- eso solo nos deja a usted, señor Richards. ¿Qué opina? ¿Cree que pueda abrirse un hueco en su agenda para asistir a nuestro evento? -pregunto al genio que estuvo pensándolo en toda la reunión.
Reed: Debo decir que me intriga ver qué rumbo ha tomado la ahora ex empresa de Krei ahora que él no está. Y reconozco cuando a mi también me manipulan. Me hiciste escuchar todo para que estuviera tentado en ir por curiosidad solo oyendo las charlas con su majestad y con Tony, ¿no?
Rosa: Un poco, no lo niego, doctor -admitió sin sorprenderse de que sus intenciones fueran descubiertas por él- se nota que su inteligencia no es solo habladuría.
Reed: Solo aclaremos algo... Víctor no es un invitado ¿verdad? -pregunto en lo que joven negó rápidamente.
Rosa: Evidentemente, quiero vivir -dijo sabiendo de la fama del mencionado.
Victor Von Doom, conocido como Doctor Doom, es un brillante científico y el totalitario regente de Latveria, el país que él mismo fundó. Su distintiva máscara de metal oculta un rostro desfigurado, mientras que ejerce un férreo control sobre su nación. Paradójicamente, Latveria se considera uno de los mejores lugares del mundo para vivir, ya que Doom se esfuerza por satisfacer los deseos de su población para garantizar su felicidad, a cambio de su lealtad incondicional y un compromiso de no llevar a cabo actos innobles. Irónicamente, esta relación entre el gobernante y sus súbditos revela una compleja dualidad.
Rosa: Además, los invitados V.I.P. son gente que confiamos en que podemos mostrarles nuestros nuevos avances y respetaran el deseo de confidencialidad que tenemos, y seamos honestos, no podemos confiar en que Victor Von Doom no intentará nada al respecto porque ve "el verdadero potencial" de nuestros proyectos -explico con calma- eso sin mencionar nuestro evento principal que sería muy tentador para él -dijo por lo bajo al final.
Tony: Eres lista, se nota, ahora una duda, ésta parte de "Tu personaje es el Carpintero"... -preguntó con invitación en mano.
Reed: Es cierto, en la mía dice "Tu personaje es el Grifo"
T'Chaka: En la mía dice "El León"
Rosa: Oh ¿No lo mencione? Es una fiesta con temática de disfraces del país de las maravillas de Lewis Carrol -aclaro- deben llevar un atuendo o disfrazarse tal cual en el personaje de la invitación. También pueden llevar invitados, amigos y familia. Ellos deben ir vestidos con temática al juego de cartas o al ajedrez.
Los tres hombres intercambiaron miradas de sorpresa y diversión, cada uno intentando imaginarse a sí mismo vestido como los personajes que representaban. Rosa, por su parte, se sintió satisfecha al ver que había captado su atención no solo con la invitación, sino también con la idea de un evento temático.
Reed:... Supongo que será una salida en grupo con mi esposa, mi cuñado y Ben.
Tony: Admítelo, parte de ti quiere volverlo una cita con Sue y dejar a Johnny a merced de Ben -dijo haciendo al contrario reir.
Reed: Qué hay de ti, llevarías a Pepper ¿no?
Tony: ¿Bromeas? Ya estoy pensando en qué estilo de disfraz la hará ver más bella -admitió de buena gana.
Rosa: Y usted si gusta puede venir con su esposa e hijos, majestad. Es solo una sugerencia -mencionó en lo que el rey asintió.
T'Chaka: Algo me dice que tú y mi Shuri se llevarán de maravilla, pequeña.
Rosa: Si usted lo dice, eso me gustaría -admitió amable- oh, antes de que lo olvide, no es por sonar elitista ni mucho menos. Pero, señor Stark, esta invitación no se extiende a Clint Barton ni Natasha Romanoff, no es por ofender pero no queremos a S.H.I.E.L.D respirando en nuestro cuello.
Lo cual era entendible dado a que entre las investigaciones de la empresa, se sabe que S.H.I.E.L.D no es la agencia de inteligencia y contraterrorismo militar extra gubernamental que se mostraba a simple vista, lo cual no es nada raro si se debía hablar sin pelos en la lengua.
Tony: Tú tranquila, de hecho ese pelón del parche tampoco me cae bien -dijo restando importancia al asunto- a lo mucho traigo a Thor, al Cap, a Banner o al chico.
Rosa: Si gustan todos, mientras más mejor. No crean que será una fiesta típica de gente rica, mi tío ama el caos -reconoció.
Tony: Y ya con eso me cayó bien el mal nacido -declaró divertido- ¿Algún conocido que debamos saber que estará presente en el evento?
Rosa: Además de ustedes como genios también inventamos a la madre de la robótica, la doctora Lolo Krei y al genio científico Cornelius Robinson -comentó- y si todo sale bien, puede que veamos al mismísimo profesor Charles Xavier con algunos miembros de su personal también.
Reed: Xavier, esto se pondrá interesante -dijo con interés- sería iluminador discutir sus trabajos sobre la genética y la evolución humana.
Rosa: Y eso es solo por mencionar algunas cosas. Algunos invitados sencillamente no van a creer que están aquí. Tendremos al mismísimo conde en persona, Drácula, a todo el clan. Descuiden, se comportaran -dijo con calma para sorpresa de los tres.
Tony: Creía que Strange bromeaba al decir que el vampiro existía...
Rosa: Son solo algunas cosas que verán, les prometo que será entretenido -mencionó con una sonrisa con aire de misterio- los veré el día de la fiesta, solo recuerden traer un regalo, es bien sabido que se lleva un regalo al anfitrión de una fiesta de té como cortesía, buenas tardes -dijo para acto seguido terminar la reunión.
La reunión holográfica terminó sin contratiempos, y Rosa se quedó mirando las sillas vacías durante un momento, sintiendo una mezcla de satisfacción y nerviosismo. Había logrado captar la atención de tres de los hombres más influyentes del mundo, pero ahora venía la parte más difícil: asegurarse de que el evento fuera un éxito.
Era turno de Hiro mover la siguiente pieza.
________________________________________________________________
(Escuela Xavier para Jóvenes Dotados, Ciudad de Salem Norte, Estado de Nueva York, USA)
Muy bien, si le preguntaran a Hiro a dónde le gustaría estar en ese preciso momento, fácilmente diría que preferiría estar en su casa encerrado en su habitación en compañía de Mochi, su pollito y de su nueva mascota, la gatita que Miguel le trajo de regalo de su último viaje, Toots (de paso haciendo al nipón soltar un suspiro de enamorado una vez estuvo solo con la felina en brazos).
En compañía de un buen buen té y un libro para buscar distraerse de cómo su mundo entero estaba cambiando con todo el asunto de que la ciudad donde nació y creció de la nada era ahora un país independiente (que literalmente tenía murallas en tierra y mar para cerrar fronteras junto a un campo de fuerza gigantesco). Aparte de que estaba volviéndose loco esperando algún movimiento de Casanova o indignado y fallando en obtener información en la empresa tanto de Hollow como de Sunpyre.
Siendo justo por que Rosa noto todo el estrés que estaba acumulando con esas preocupaciones (sin mencionar que ayudaba hasta tarde a Leo con su proyecto de animación, su propio trabajo como asistente de la banda y como cereza del pastel lo del robot que se parecía a Obake viviendo bajo su mismo techo) que ella le asignó la tarea de entregar una invitación en persona con el fin de que se distrajera y tomara aire fresco.
No sabía en qué momento había pasado (en realidad si, al comienzo se acercó a Rosa con el fin de sacarle información), pero al final terminaron volviéndose muy buenos amigos, algo que en cierto modo agradeció. Pero igual por ahora debía dejar de pensar en todas esas cosas y centrarse en el porqué estaba allí.
Hiro: Bien, este será mi primer trabajo oficial como representante de la compañía -dijo respirando hondo encontrándose ante las puertas de la escuela- vamos tu puedes... Entonces es aquí, la escuela para jóvenes dotados del profesor Xavier -dijo tocando la puerta algo nervioso.
Esperando unos momentos a que esta se abriera, siendo quien lo hizo una especie de monstruo de color azul de gran tamaño. Una bestia en todo el sentido de la palabra... además de ser justamente su nombre de héroe.
Bestia: ¿Puedo ayudarle? -preguntó mirando con curiosidad al jovencito en frente suyo.
Hiro: Disculpe, señor, busco al profesor Charles Xavier -dijo luego de suspirar pesadamente buscando calmarse.
Bestia: ¿Eres un nuevo estudiante?
Hiro: No, señor, vengo en representación de Rivera Solutions. Es para entregar una invitación a un evento ¿me podría decir donde queda su oficina? Si quiere puede inspeccionarme para verificar que no estoy armado .-ofreció calmado- y si acaso tiene cómo, puede confirmar que ni siquiera soy mutante, en otras palabras, no soy una amenaza.
Bestia, con su característica curiosidad y una pizca de buen humor, observó al nipo americano con atención. Su apariencia era inusual, pero había algo en su porte que le parecía inofensivo. Además, el joven se mostraba tranquilo, lo que ayudó a calmar cualquier suspicacia que pudiera haber tenido.
Bestia: No es necesario que te inspeccione. La confianza es un pilar importante en este lugar -sonrió- es grato ver a alguien dispuesto a entrar sin tener miedo, lo noto, no me temes.
Hiro: ¿Por qué lo haría? ¿Por nacer con algo que la genética le asignó? Sería como si usted me creyera un kamikaze en potencia sólo por ser nipoamericano -respondió de forma ingeniosa haciendo reír al mutante.
Quien acto seguido lo guió por los pasillos, siendo seguido por el pelinegro mientras observaba el entorno. Las paredes decoradas con arte y fotografías de estudiantes, además de algunos objetos curiosos y tecnológicos, reflejan la diversidad y la historia de la escuela.
Sin mencionar que noto como llamaba la atención de los alumnos que no disimularon como se le quedaban viendo conforme más se acercaban a la oficina del director. Una vez ingresaron, se encontraron con un hombre de aspecto sereno, con una presencia calmante que inmediatamente hizo al nipón sentirse más a gusto. Xavier está sentado en su silla de ruedas, rodeado de libros, levantando la mirada de uno de ellos al notar al joven que era guiado por su amigo.
Hiro: Profesor Xavier, es un honor -dijo haciendo una reverencia como le explicaron que debía hacer con gente importante, una norma de etiqueta básica a seguir de la empresa- debo decir que, aunque mi campo de especialidades no es la genética, su trabajo sobre la evolución humana es sencillamente impresionante, espero no piense que lo digo buscando adularlo... Si gusta es libre de leer mi mente a gusto para confirmar eso así como mis intenciones -sugirió preocupándose un poco del silencio del contrario, quien solo levanto una mano para llamar su atención.
Charles: No hace falta, el hecho de que tú mismo ofrezcas que lea tu mente demuestra que no ocultas nada -hablo con tranquilidad- ¿que te trae el día de hoy a mi escuela, joven?
Hiro: ¿Qué? Oh, si -recordó, extendiendo la invitación al hombre tras acercarse- a mi jefe le gustaría que asistiera a una fiesta de té que abra pronto en la empresa, será un evento importante según tengo entendido -dijo entregando la carta a un Xavier que se hallaba sonriendo de lado mientras la aceptaba.
Charles: ¿Una fiesta de té? Algo peculiar
Hiro: Técnicamente lo de la fiesta de té es la temática de la fiesta, señor. Igual habrán decoraciones y té pero es más que todo temático -justificó con rapidez.
Charles: Ya veo... Tu personaje es el rey de corazones ¿y esto?
Hiro; La fiesta sigue la temática de los libros de Lewis Carroll, y por eso, a cada uno de los personajes, tanto invitados principales como V.I.P., se les asignó ir vestidos con temática de uno de los personajes de los libros, mientras que los acompañantes que lleve deben acudir vestidos siguiendo la temática del juego de cartas o el ajedrez, por ejemplo, profesor, a usted se le asignó el personaje del Rey de Corazones -aclaró- y cualquier acompañante suyo iría vestido con un atuendo que sea temática a los naipes y al ajedrez, si gusta llevar a alguien más, claro.
Instante en que el nipón se sorprendió cuando de repente aparecieron dos personas más que casi pensó que habían hecho acto de aparición por arte de magia, una mujer de piel morena y un hombre de aspecto rudo y tosco. Por la edad asumió que eran parte del personal de la escuela.
Ororo: Por ejemplo, Charles, si decides llevarnos a Hank, Logan y a mí, podríamos ser tu Séquito de Corazones -sugirió, haciendo que su compañero frunciera el ceño en respuesta.
Logan: Ni creas que me vestiré con una camiseta con un corazón.
Hiro: ... Veo que está vigilado 24/7 ¿no, profesor? -preguntó con una gota de sudor bajando por su frente- en todo caso esa puede ser una opción. Vera profesor, el motivo de la invitación es más que todo para tener una buena relación con usted, su escuela, o hablando más en general, su gente. San Fransokyo será un país de fronteras cerradas, pero además, queremos hacer público en la fiesta que seremos un país que será pro mutantes -dijo captando el interés de todos los adultos.
Charles: ¿Un país pro mutantes?
Hiro: Mi jefe, el CEO de Rivera Solutions es un fanático de todo lo que es la magia y la fantasía. El tiene la creencia de que este mundo debería abrazar lo fantástico y vivir con ello, no repudiarlo y apartarlo -dijo todavía recordando la larga conferencia que le dieron al respecto del tema.
El aun tenía sus dudas sobre la veracidad de todos esos cuentos chinos, pero no podía negar que había visto cosas. Empezando por ver al papá de Fred pelear con momias en medio de una llamada. Aun así, cosas como los mutantes, los vengadores y demás era algo fácil de creer porque tenían una explicación científica muy sólida de hecho.
Ororo: Suena a alguien interesante.
Hiro: Aparte de que si me preguntan, todo el asunto del odio a los mutantes es una estupidez -decidió dar su opinión- sencillamente desde mi punto de vista los atacan por puros celos y envidia. Sino, ¿Por qué los héroes que fueron mutados, que no nacieron mutantes, son queridos, y los mutantes naturales son odiados? -preguntó con indignación- ustedes no son sino un recordatorio de que, contrario a lo que muchos piensan, la humanidad aún tiene el potencial de ir más allá como especie.
Dichos comentarios hicieron que Charles Xavier observara atentamente a Hiro mientras este hablaba con pasión, sintiendo la sinceridad en sus palabras. Era raro encontrar a alguien tan joven y más importante, normal por así decirlo, que estuviera tan comprometido con la causa de la aceptación y los derechos de los mutantes. La visión del joven resonaba con la misión de su escuela y su propia vida. Y eso era algo fascinante.
Logan: ... Tu no eres alguien común ¿cierto? -recalcó arqueando una ceja- esa no suele ser la opinión popular hacia los mutantes.
Hiro: Lo dije antes, lo repito ahora -respondió encogiéndose de hombros- juzgarlos por su genética sería como que alguien asuma que soy un kamikaze potencial por tener un padre japonés, o que Rivera Solutions es una fachada para un cartel de narcotráfico sólo porque los dueños son hispanos.
Logan: ¿Rivera?... No me dirás que el CEO se llama Héctor ¿o si? -pregunto para sorpresa del joven Hamada.
Hiro: ... Dígame que no es alguien a quien don Héctor haya hecho enojar antes, por favor -pidió no esperando una afirmación.
Ya que aparentemente, Héctor había tenido una larga vida en la que hizo mil y un cosas, de paso ganándose el odio de muchas personas por su conducta y acciones. En situaciones como esa Rosa lo que le dio de consejo que hiciera, fuera sencillamente echar a Héctor a los lobos y santo remedio. Cosa que pensaba hacer si era el caso.
Logan: Claro que sí, pero más que todo es un viejo compañero de tragos... Cuántos bares no destrozamos en una salida de fin de semana -dijo con una sonrisa en lo que recordaba los viejos tiempos para sorpresa del más joven.
Ororo: Algo me dice que ya te interesó ir a la fiesta, Logan -exclamó con gracia en lo que el mutante ni se molestó en negarlo.
Logan: Como dije, mientras no esperen que me ponga una camiseta con un corazón.
Hiro: Si gusta -dijo metiendose sin querer- puede ir con un saco que tenga rojo con blanco y una carta de póker de color rojo en el bolsillo para el pañuelo, y técnicamente estaría cumpliendo el requisito -sugirio mientras sin ver, hacia un boceto.
El cual dejó sorprendidos a los adultos presentes del detalle, en especial por el detalle de que lo hizo sin ver.
Ororo: Debo decirlo, pero Logan se vería bastante decente con algo así -confirmó sonriendo a Hiro- tienes talento para el diseño, querido.
Hiro: Qué va -dijo con las mejillas sonrojadas de vergüenza- sólo que como estudió robótica, tengo práctica dibujando... sin mencionar que me han tenido de esclavo los últimos meses trabajando en un proyecto de animación y mi habilidad de dibujo mejoró exageradamente -admitió con un tic en el ojo.
Bestia: Veo que eres multi talentoso, jovencito -mencionó creyendo que el chico bromeaba al respecto con lo último.
Hiro: En todo caso -dijo volviendo al tema en cuestión- ¿qué opina profesor? ¿Le interesa?
A su vez, el profesor observó al chico con interés, sopesando la invitación y la sinceridad del joven. La perspectiva de un evento que fomentara la aceptación de los mutantes y celebrará su existencia era algo que resonaba profundamente con sus propios ideales. De allí que al no sentir alguna amenaza, tomó una decisión.
Charles: Jovencito, dile al señor Rivera que puede contar con mi presencia -dijo para felicidad del joven.
Hiro: Nos alegra mucho -dijo antes de recordar un detalle en especifico- por cierto, me pidieron de antemano decirle que si cierto amigo suyo con poder magnético aparece, tenemos como contenerlo para que no cause disturbios, espero que no sea un problema -dijo haciendo al hombre mayor suspirar al saber de quién hablaba.
Charles: Una parte de mí espera que Erik respete, pero entenderé que tomen medidas para que no pase nada... espero que contener no signifique matar.
Hiro: No. Sería más que todo el uso de algunos experimentos y un collar supresor de poderes -dijo buscando calmar las preocupaciones del hombre. Sin notar que sus comentarios hicieron a los presentes tener más de un cuestionamiento.
Logan: ¿Experimentos?
Ororo: ¿Collar supresor?
Hiro: Como dije, a mi jefe le gusta creer en lo fantástico, justamente gracias a eso descubrimos la existencia de los extraterrestres y tenemos como asociado a un genetista de fama universal -dijo recordando lo mucho que se sorprendió cuando le revelaron esa información.
Y de paso Hiro no pudo evitar preguntarse qué tanto estaba escondiendo la familia Rivera realmente. Aunque diga que considera a Rosa su amiga, no puede evitar sentir recelo y precaución tanto de ella como de Héctor. Los únicos de esa familia que le dan confianza son Coco y Miguel, de allí en más... prefería no pensar en eso.
Charles: ¿Un Shi'ar de casualidad?
Hiro: No, un Kweltikwan del planeta Quelte Quan, el doctor Jumba Jookiba -explicó curioso de que al parecer el profesor y su personal ya había lidiado con aliens también. ¿Que tanto era lo que pasaba realmente en el mundo tras bambalinas?
Charles: Había oído rumores de seres curiosos en Hawaii, nunca me imaginé que fueran de origen extraterrestre -admitió pensando en voz alta.
Hiro: Debe hablar de los experimentos, 627 experimentos creados en un laboratorio en las cercanías del planeta Turo, así que bien podemos llamarlos Turonianos. Trabajamos con el doctor Jookiba para la creación de estos experimentos aquí para el bien de la ciudad -dijo lo mismo que le dijo Rosa cuando hizo una pregunta similar al respecto.
Bestia: Sorprendente, espero poder hablar con el doctor Jookiba -dijo sonriendo por la idea.
Hiro: Pues bien, toda la serie 4 de los experimentos fueron creados con fines militares -siguió explicando- en nuestro caso, los usaremos para la defensa de la ciudad. Estoy seguro de que más de uno será capaz de contener a Magneto y sus semejantes si deciden llegar sin invitación -dijo en lo que Logan soltó una bocanada de humo luego fumarse un cigarro.
Logan: Si pueden detectar a Mystique con cualquiera de sus disfraces, a Mercurio con su velocidad, y detener a Mole y Avalancha, el único problema sería la Bruja Escarlata -enlisto a los que podrían ser un problema en su opinión.
Bestia: ¿Qué me dices de Sapo?
Logan: ¿En serio acabas de insinuar que Sapo sería una amenaza? -preguntó con sarcasmo.
Hiro: Descuiden, incluso para ella tenemos un counter de la serie 6, conquistadores galácticos -dijo mostrando un holograma de un experimento en particular- experimento 610, Witch. Creada específicamente para la derrota y contención de dictadores y seres capaces de usar la magia -dijo.
Aunque desde el punto de vista del nipón más que magia lo que pensaba que era en realidad eran habilidades únicas de especies de otros planetas más que todo.
Hiro: Como ven, tenemos planes de contingencia para distintos supervillanos, no sólo la Hermandad de Mutantes -declaró buscando transmitir tranquilidad- y sobre el collar supresor... De hecho esto lo tenemos gracias a que el general Monger del área cincuentaitantos nos pasó la información de forma extraoficial. El gobierno apenas lo tiene en fase embrionaria, pero Rivera Solutions lo llevó a las fases finales. La idea del collar es que estando el cuello de un mutante, puede dormir el gen mutante mientras lo use -explico.
Aunque justo allí fue que Hiro noto que la atmósfera en la oficina estaba cargada de un interés palpable, pero a su vez, de una preocupación muy notoria. Había captado la atención de todos los presentes, y sus palabras resonaban con una mezcla de pasión por el tema, pero a su vez, con una seriedad por la implicación de la existencia del collar que acaba de mencionar.
Hiro: Antes de que surjan sospechas y acusaciones, hemos decidido desarrollar esta tecnología exclusivamente con fines defensivos o como último recurso. Como bien saben, hay mutantes que, al despertar sus poderes, a menudo no saben cómo controlarlos, lo que puede llevar a grandes desastres.
Logan: Además de mutantes que creen que sus poderes les dan derecho a cometer crímenes -dijo mirando de reojo a su colega- Evan puede decir que tiene experiencia
Ororo: Mi sobrino, Evan -reveló al notar la mirada del nipón- cuando recién supimos que es mutante como yo, habían estado pasando una serie de robos en su escuela, resultó ser su compañero Pietro, Mercurio, quien se valía de su velocidad para cometer los robos.
Hiro: Cuando de algún modo tienes poder de joven, te crees una especie de Dios y te vuelves un estupido certificado... Se de eso, y solo tengo inteligencia por encima del promedio -dijo antes de solo negar- sólo diré que por un tiempo estuve un tanto mal encaminado, no es algo de lo que me enorgullezca.
Charles: Muchos de los jóvenes aquí pueden decir lo mismo -dijo de forma comprensiva. Haciendo que el chico recuperara la compostura rápidamente.
Hiro: En todo caso, como ve, estamos más que preparados para que nada pueda interrumpir la fiesta de té. Aunque ¿puedo dar mi opinión sobre algo? -pregunto a la vez que el profesor asintió- su amigo Erick es un hipócrita. Entiendo el porqué de su pensar, es decir, vivió la segunda guerra mundial, pero... Me sorprende como no se da cuenta que el mismo se convirtió en un Hitler, pero de mutantes -dijo dejando sin palabras a los mutantes..
Todos los presentes lo miraban con una mezcla de sorpresa y reflexión. Era un comentario atrevido, pero había una verdad subyacente que resonaba en la sala. Logan, que había estado fumando en silencio, soltó una risa baja y profunda, como si le resultara divertido que un chico tan joven se atreviera a decirle a un grupo de mutantes, y a Charles de todas las personas algo como eso, lo que pensaba de uno de sus adversarios más notorios con el que tenía historia.
Charles: ¿Lo crees así, jovencito? -pregunto luego de guardar silencio un momento, con un tono de interés en realidad.
Hiro: Señor, no necesito un IQ de 180 y memoria virtualmente fotográfica para saber que con lo que Magneto hace, sólo le da la razón a los anti mutantes sobre que los mutantes son una amenaza, ¿Cómo la gente no pensaría mal de los mutantes, si ven a varios usando sus poderes para cometer crímenes? -cuestiono- y cuando se trata de dialogar, los de su grupo son de atacar primero y preguntar después, si es que las víctimas sobreviven. Y Magneto esta tan cegado por el dolor y la rabia ante la discriminación que se niega a ver los peros, y solo se limita a "humanos atacan mi pueblo, humanos malos, mutantes buenos".
Logan: Tienes agallas, chico. No muchos se atreven a hablar así de Magneto -dijo, encogiéndose de hombros- aunque no puedo decir que no esté de acuerdo con lo que dices. La línea entre la defensa y la opresión es más delgada de lo que él cree.
Hiro; Una línea que hace mucho se rompió -reconoció convencido- ya que sin importarle al parecer que con sus acciones, luego son los mutantes con habilidades leves, o que su mutación sólo causa un aspecto distinto al de los seres humanos, los que pagan los platos rotos. Por qué son muy buenos para causar caos y mandar un mensaje a la humanidad, ¿Pero dónde está su Hermandad para evitar que un mutante que sólo tiene orejas de murciélago sea linchado por el mero hecho de ser mutante? ¿O para evitar que un mutante cuyo único poder sea hacerse plano como papel, sea acusado de allanamiento de morada?
Por su parte Ororo asintió, su expresión grave. Ella había visto el costo del odio y la división de primera mano al igual que muchos en esa escuela.
Hiro: Dice querer defender a los mutantes, pero lo cierto es que solo le importan los mutantes poderosos, el resto se puede ir al diablo. Lo que lo vuelve elitista, supremacista, clasista... Hitler -concluyó encogido de hombros.
Charles: ... Quisiera decir que exageras, que Erik se preocupa por todos los mutantes por igual, pero la realidad es que tienes un punto, Erik siempre muestra favoritismo por los mutantes con habilidades destacables -reconoció con pesar sorprendiendo a su personal.
Hiro: Claro, son los que pueden pelear con él -recalcó- dice que busca solo prepararse para defenderse. Pero la realidad es que solo quiere iniciar una guerra y ganarla para demostrar que es el vencedor y que tuvo razón ganando. Todo olvidando un pequeñín, chiquitín, tontín detalle.
Logan: Un detalle?
Hiro: Que sin contar con el gen x, los mutantes siguen siendo seres humanos -mencionó con toda la naturalidad del mundo- solo es cosa de sumar dos más dos, claro, dejando el ego y la rabia de lado ¿Puedo? -pregunto para luego servirse una taza de té que el profesor tenía en el escritorio una vez este dio el permiso- gracias, mm.... Té verde mezclado con Pu-erh y un poco de té azul. Es alguien refinado, profesor ¿problemas de tensión y de colesterol?
Charles: Vaya... Estoy impresionado, jovencito -admitió al ver cómo supo cuál era la infusión exacta con un solo sorbo.
Hiro: Mi tía tiene una cafetería, crecí probando tés y dulces. En todo caso con su permiso me retiro, debo informar que aceptó la invitación -dijo poniéndose de pie.
Para acto seguido despedirse cortésmente, haciendo una ligera reverencia antes de salir de la oficina. Solo para que en el momento de abrir la puerta, viera como varios adolescentes cayeron de bruces al suelo, sorprendiendo al nipón a la vez que los adultos solo suspiraron y se mostraron molestos y apenados.
Hiro:... Hola
Scott: ... ¿Nos creerían si decimos que veníamos de paso y todos tropezamos? -trato de zafarse del regaño un chico de lentes, siendo rápidamente saboteado por otro de una inusual cabellera azulada.
Kurt: ¿En serio? -dijo antes de que le dieran un codazo- digo, sí, eso pasó.
Hiro: Ok... No tengo tiempo para esto, tengo mucho trabajo. Profesor, profesorado, chicos y chicas... -dijo despidiéndose para acto seguido marcharse sin ningún contratiempo.
Mientras caminaba por los pasillos, se sintió un poco más ligero. Había logrado no solo entregar la invitación, sino también abrir un diálogo que podría tener un impacto positivo en la relación entre su empresa y la comunidad mutante. Nada mal para su primer trabajo importante en la empresa.
Ahora, esperando que nada más pasara, su prioridad ahora era volver a casa... a sus tareas, responsabilidades, trabajo, obsesiones... ¿Por qué se hacía eso a si mismo, aplicarse masoquismo de ese modo? Pues quién sabe.
_____________________________________________________________________
(Miguel Pov)
(Esa noche, afueras de la ciudad de Nueva York, USA)
Vamos a ver dijo el ciego, a repasar la lista:
1- Cantidad de tiempo antes de la fiesta del té: Dos semanas.
2- Lista de invitados: Invitaciones enviadas y con posibilidad de invitados sorpresa.
3- Actividades: Planeadas de ser lo más diversas y extravagantes posibles.
4- Comida: ingredientes buscados y chefs avisados.
5- Diseño y decoración: ¡Ok!
6- Presupuesto: No seas tacaño.
Casanova (Miguel): Ya casi está todo listo. Todas las piezas del juego se movieron. Solo quedaba por cubrir el punto siete. Que justamente acabo de completar gracias a que todo el mundo anda distraído -dijo tachando ese punto de la lista- ya es tiempo de volver a casita, con todo lo que ha pasado apenas he tenido tiempo para descansar.
7- Conseguir el evento principal: Recién robado de los héroes unidos de Nueva York, o más específicamente de Águila.
Honestamente, le importaba poco involucrarse con ese grupo de héroes, especialmente porque una de sus integrantes, Victoria, se había convertido en un verdadero incordio al revelar su identidad secreta al público con el fin de mejorar sus posibilidades en las elecciones. Sí, se había lanzado a la campaña electoral para la próxima temporada de votaciones. Claro, como ella no tiene nada que temer gracias a un brazalete creado por Majestia que le otorga poderes, y además cuenta con el respaldo de su equipo, ¿por qué no? Así cualquiera.
Por ahora solo importaba una cosa, la fiesta de té.
Notes:
Y ese fue el capitulo de esta vez. Como siempre pueden votar, comentar, lo que gusten.
¿Y qué les pareció?
Ahora si, este capitulo se me paso de largo pero no quería más contratiempos (aunque todavía falta un mini corto pero eso se hace en nada) Para ya empezar con la fiesta del té, que aviso de antemano que se dividirá en dos o tres partes.
No saben la emoción que tengo con esto. Pero de momento solo diré que nos vemos.
Chapter 27: Corto: (Sheldon x Brad)
Chapter Text
(General Pov)
(Casa de Sheldon, Tremorton, Pensilvania, USA)
Luego de todo el show que se hizo en la casa de Jenny, Brad, quien acaba de dejar a su hermano menor en su casa, no tuvo más remedio que encargarse del problema que se resumía a tratar de calmar a su amigo que aparentemente había estado viviendo en negligencia todo este tiempo. Igual encontrarlo no era tan difícil, dado a justamente la soledad del chico eran limitados los lugares que solía frecuentar, siendo la primera y la opción más lógica su propia casa, por ello empezó a buscar justo allí.
Brad: Oye... Sheldon ¿todo en orden?... ¿Hay alguien en casa? -preguntó metiéndose por la ventana al interior del hogar de su amigo, donde justamente lo encontró concentrado en su escritorio de trabajo- ¿Qué estás haciendo?... Se que me escuchas, deja de ignorarme
Sheldon: Lo que sea que me dirás sé que será molesto, puedes irte por donde entraste -dijo sin molestarse en levantar la mirada mientras escribía en una libreta con ferviente empeño. Esperando que con eso el chico se fuera.
Solo para terminar con el pelirrojo recostándose en su espalda de forma descarada.
Brad: Nope -dijo con un tono de necedad que fastidio al más pálido- escucha, entiendo que quizá no te guste hablar de esto, es decir... ¿Porque no nos dijiste que no tienes...? -iba a preguntar lo que empezó la discusión. Para luego acabar perdiendo el equilibrio cuando el asiatico se levantó molesto de su silla.
Sheldon: ¡Porque no les importa! -grito frustrado- No le importa a los vecinos, no le importa a los de la escuela, no le importo a la pareja que solo me tuvo y me dejó en la escalera del orfanato, y estoy seguro de que a ti no te importa, deja de fingir que te importa! -exigio golpeando la mesa antes de respirar hondo para calmarse- ... solo, no importa. Dejalo, no es nada.
No hace falta decir que Brad, sintiéndose ligeramente abrumado por la reacción de Sheldon, se enderezó y dio un paso atrás, buscando entender la situación. La frustración del chico era palpable, pero el pelirrojo sabía que no podía simplemente ignorarlo.
Brad: Amigo, claro que me importa, ¿Por qué crees que me impactó oírlo?
Sheldon: Honestamente no lo sé ¿aburrido tal vez? -pregunto encogido de hombros para enojo del más alto.
Brad: Ni yo soy tan insensible, lo sabes... Sheldon, mírame -pidió en lo que lo tomaba del hombro. Solo haciendo que el contrario apartar la mirada con insistencia.
Sheldon:... Suéltame si no quieres que te golpee.
Brad: Sabes que puedes contarme lo que sea, somos amigos, ¿No? -trato de hacer al chico entrar en razón sin tener mucho éxito.
Sheldon: Te lo advierto... -amenazo, solo para sorprenderse de que lo tomaran del rostro, obligándolo a ver al otro joven a los ojos.
Brad: Sheldon, te pido que hablemos de esto, por favor -busco sonar lo más amable y empático posible. Pero aparentemente eso no fue suficiente.
Sheldon:... Te lo advertí -dijo antes de solo saltarle encima al más alto. O lo hubiera hecho de no ser porque al de cabello rojizo solo le bastó con estirar su brazos para mantener distancia del asiatico.
Brad: ¿En serio pensaste que podías? ¡AAAH!... ¡Hijo de...! -grito luego de que Sheldon aprovechó la situación para morderle la mano. Era un hecho, iba en serio.
La situación se había vuelto caótica en un instante; la tensión acumulada que ambos chicos llevaban había estallado en una pelea improvisada.
Brad: ¡Sheldon, suéltame! -gritó, mientras hacía un movimiento para liberarse, pero Sheldon, con una mezcla de rabia y desesperación, se lanzó hacia él nuevamente, esta vez tratando de empujarlo.
Sheldon: ¡No entiendes nada! -exclamó mientras intentaba golpearlo en el pecho, pero Brad, teniendo una mayor envergadura física, logró esquivar el ataque con un rápido movimiento hacia un lado.
La habitación estaba llena de papeles y objetos desordenados, lo que dificulto los movimientos de ambos. Brad, sintiendo que la situación se salía de control, decidió que era mejor intentar calmar las cosas en lugar de dejar que la pelea continuara. Pero una cosa era decirlo y otra hacerlo.
Golpes, patadas, mordidas, jaladas de pelo, pelea sucia. Cualquiera que pasara por fuera de esa casa lo que pensaría sin mucho esfuerzo es que era una pelea de casados de las reñidas, y no ayudó que se comenzaron a arrojar cosas por las ventanas. Era un desastre. El cual así como empezó se logró ¨controlar¨ un momento, con Brad haciéndole una llave de lucha al pelinegro para tenerlo a raya.
Brad: ¡Ya basta! ¡Solo quiero ayudarte! ¡¿Por qué te comportas así?! ¡No lo entiendo! -se quejó ya con un ojo morado y una mejilla inflada no queriendo dejar ir al más bajo.
Sheldon: ¡Porque no te interesa! ¡A nadie le interesa! ¡Deja de fingir que te importa! Nunca te importó antes ¿Por qué ahora sí? ¡A nadie le importa si estoy solo o no, siempre es igual! -respondió con enojo, ignorando que igual estaba lastimado con un ojo morado y sin un diente.
Brad: ¡No es justo que asumas que no me importaría! ¡Eres mi amigo, claro que me horroriza la idea de que nadie se diera cuenta que tus padres no fueran vistos! ¿Qué clase de imbéciles puedes tener cerca para no darse cuenta que sus vecinos adultos nunca se ven? -pregunto indignado. Para acto seguido tantear terreno y poco a poco liberar al otro chico al notar que este ya no parecía querer pelear-... Sheldon -dijo extendiendo una mano que fue rápidamente apartada.
Sheldon: ¡Chico asiático en una calle adinerada! ¡Haz la suma, genio! -dijo molesto en lo que se ponia de pie- ¡el clasismo no es solo para la gente de color!
Brad:... ¿Esta es una calle adinerada? -pregunto sorprendido. Lo reconoció con facilidad, nunca se había percatado de ese detalle. Y no ayudaba que por lo general fuera muy distraído.
Sheldon: ¿Por qué crees que nunca has visto a ningún vecino? Aquí nadie sale si no es en limusina, por eso me dejan solo, no les importa.
Brad: Bueno, si, tienes gente snob y bruta de vecinos, pero...
Sheldon: ¿Pero qué? ¿Me dirás que la escuela es mejor? Todos son unos idiotas sin cerebro -dijo mientras preparaba un par de bolsas de hielo- nerds aún más raros que yo y mocosos qué se creen la gran cosa por ser guapos o cretinos con dinero. Y a los maestros no les importa nada mientras les den su cheque cada quincena. Sheldon: Sólo mira a Britt y Tiff Crust, y a Don Prima.
El pelirrojo, aún aturdido por la pelea, se tomó un momento para procesar lo que Sheldon había dicho. Sabía que su amigo estaba lidiando con una montaña de problemas emocionales y sociales, pero no tenía idea de lo profunda que era la soledad que estaba sintiendo.... Él debió darse cuenta.
Brad: Escucha, Sheldon, entiendo que te sientas frustrado con la gente que te rodea. Pero no todos son así. Hay personas que realmente se preocupan por ti, y yo soy una de ellas. -dijo, tratando de calmar la situación mientras Sheldon se sentaba en el suelo, con los ojos llenos de lágrimas reprimidas.
Sheldon: ¿De verdad? -preguntó, su tono de voz suavizándose un poco mientras miraba al otro con desconfianza- porque, honestamente, no me he sentido así en mucho tiempo. Siempre he sido el raro, el que se queda solo en los recreos. No sé si puedo creer que te importo tanto como dices. ¡Todo lo que tengo es a Jenny! Y ella se va a ir! ¿Qué me queda? ¡Nada, no tengo nada! -sollozo con rabia y dolor mientras se limpiaba con brusquedad las lágrimas.
Aunque en vez de sentir tristeza, esa declaración solo enfado al otro chico, bastante.
Brad: ¿Y yo que se supone que soy? -pregunto molesto.
Sheldon: ¡Un conocido tal vez, porque mi amigo no eres! ¡Un amigo sabría luego de venir varias veces a una casa que su amigo vive solo y no tiene a nadie! -reclamo con cólera- admítelo, sólo te juntas conmigo por conocer en común a Jenny.
Brad: ¡Eso no es...!
Sheldon: ¿Verdad? -cuestiono chocando su frente con la del otro hombre- ¡Si lo es, antes de Jenny tu solo eras otro chico popular que le gustaba usarme de tiro al blanco en quemados! -reclamo, solo para que en respuesta el contrario le sujetara las muñecas contra la pared- ¡suéltame!
Brad:... Ya me canse, no quiero pelear contigo... Tal vez tu no me veas como tu amigo pero tu si eres el mio, te guste o no -dejó en claro con seriedad- y de hecho, ofende que digas que sólo te considero mi amigo por juntarte con Jenny.
Podían decir muchas cosas de Brad, que era un suicida que no tenía interés en preservar su propia vida, que era un distraído de lo peor, que era incrédulo y hasta patético a la hora de llamar la atención. Claro, podían decirle todo eso, pero jamás que estaba en compañía de alguien a diario que no consideraba su amigo.
Brad: ¿Y popular? Yo soy tan perdedor como tu. Para muchos soy lento, tonto, impulsivo. Cada chica que intento impresionar me termina botando por ser un tonto. No tengo nada de popular.
Sheldon: Ay por favor -dijo apartando la mirada con fastidia- no vengas a buscar lastima señor visto a la moda, tengo sonrisa de galán y tardó 40 minutos en peinarme mi hermoso cabello pelirrojo perfecto -se quejo, sin notar la sorpresa en la mirada ajena.
Brad: ... ¿En serio piensas que busco lástima, señor capaz de llevarle el paso a una de las científicas expertas en robótica más grandes del mundo, capaz de reparar a una de las máquinas más complejas jamás creadas como si no fuera distinto a cambiar un bombillo? -contraatacó sin dudar. Pero eso el otro muchacho no se lo iba a permitir.
Sheldon: Y ahora me estás adulando, qué novedad -exclamó rodando los ojos- ¿a quien le importa eso? Con gusto daría mi cerebro para tener tu condición física, o al menos ser tan bueno en deportes como tu, porque eres mejor que yo... cualquiera lo es
Brad: Oye... Eso sonó casi como un cumplido ¿sabes? -mencionó apenado en lo que el más bajo se sonrojaba. Una reacción que no esperaba en medio de toda la situación.
Y que en realidad, de algún modo... le gusto causar eso en el otro chico.
Sheldon: ¡No es un cumplido! -protestó, pero su tono ya no era tan enérgico. Apartó la mirada, tratando de ocultar su sonrojo- solo estoy diciendo que la gente como tú siempre tiene una ventaja. Siempre son el centro de atención, y yo... como sea, solo es tu ego que escucha lo que quiere escuchar, no fue un cumplido.
Brad: ... Pues para que sepas -dijo luego de guardar silencio un momento- yo daría lo fuera por tener tu inteligencia.
Sheldon: Mentiroso -se defendió casi de forma automática, hábito arraigado.
Brad: ¿Crees que no? De haber sido más listo no hubiera metido la pata tantas veces en tantas cosas.
Sheldon:... No digas tonterías. Tu no eres tonto, solo te pasas de temerario cuando sientes que se meten con tu hombría -dijo con un tono que pareció cariñoso, cosa que extraño más al chico que tenia encima.
Brad: Sheldon... ¿Me estás coqueteando? -pregunto arqueando una ceja.
Cosa que causó que Sheldon se sonrojara visiblemente, sus ojos se abrieron con sorpresa y una mezcla de indignación. A pesar de que la tensión entre ellos había disminuido, la incomodidad era palpable.
Sheldon: Pfft, ya quisieras, Carbunkle -mencionó con un bufido, queriendo disimular y hacer como si nada paso.
Brad: Si lo dices... -dijo con una sonrisa burlona, disfrutando del momento. Tenía que admitir que ver a Sheldon así era un espectáculo raro y fascinante- ¿Sabes que? ¿Qué más da? Para todo hay una primera vez ¿no?
Sheldon: ¿Qué? ¿De que estas...? -preguntó antes de solo sentir los labios del más alto sobre los suyos.
El momento en que los labios del pelirrojo se encontraron con los del pelinegro fue tan sorpresivo como electrizante. El tiempo pareció congelarse y el mundo exterior se desvaneció. Sheldon, aturdido por la inesperada acción, experimentó una mezcla de confusión y pánico. Se quedó inmóvil por un instante, con sus pensamientos acelerados mientras Brad lo besaba. La sensación era extraña y electrizante, una combinación de asombro y desconcierto que lo hizo sentir como si estuviera levitando.
Por otro lado, Brad se dio cuenta de que había cruzado una línea, pero parte de él no se arrepentía. Había algo en la forma en que Sheldon lo miraba, en su vulnerabilidad, que lo había llevado a actuar por impulso.
Esto pasando sin que ninguno de los dos chicos notara al dúo de aliens en la ventana que habían ido a ese lugar por órdenes de Hollow quien pensó en ejecutar un plan que acabase contentando a todos por igual. Pero que aparentemente ya no era necesario.
Gantu: Parece que no fue necesario usar el experimento 323. Ellos... Al parecer lo hacen bien por su cuenta -susurro a su compañero de pelaje amarillo.
Reuben: Recuérdame ¿porque íbamos a soltar a HunkaHunka?
Gantu: Porque la idea era que ellos se centraran el uno en el otro para que así no fueran un estorbo y así la doctora y su hija se mudaran sin contratiempos. Al menos ese fue el plan del señor Hollow
Reuben: Ya veo, lo siento primo, esta vez no será -dijo mirando al pájaro en la cápsula que solo pío con tristeza de no poder jugar un poco. A fin de cuentas lo habían traído desde Hawai solo por este trabajo.
Experimento 323: HunkaHunka. Capaz de provocar emociones similares al amor de un solo picotazo. Por sí solo es capaz de causar todo un caos emocional en comunidades en cosa de minutos.
Reuben: Por su parte debo decir que no esperaba esta jugada por parte de Ta... -dijo a medio comer un sándwich antes de que su compañero le tapara la boca- bueno, del señor Hollow. Pensé que contrataría al asiático también.
Gantu: ¿Quién sabe? Igual lo hace -dijo encogiéndose de hombros- por ahora solo le interesa la doctora Wakeman -dijo antes de hacer un gesto de guardar silencio.
Ya que aparentemente el beso había terminado. Cuando Brad se retiró, Sheldon se quedó mirando al pelirrojo con los ojos muy abiertos, incapaz de procesar lo que había sucedido.
Brad: Bueno... eso fue... inesperado, ¿verdad? -fue todo lo que pudo decir con una sonrisa nerviosa mientras recuperaba el aliento al atónito chico.
Sheldon: ¿Qué fue eso?... ¿Por qué hiciste eso? -cuestionó en lo que el contrario se encogió de hombros queriendo parecer casual.
Brad: Solo pensé que era un buen momento. Quiero decir, hemos estado discutiendo y luego peleando, y... no sé, sentí que había algo más entre nosotros -dijo metiéndose las manos en los bolsillos- ... sabes, en una ocasión dije ¿y que si es mecánica? Ahora digo ¿y que si es un chico? -admitió haciendo sonrojar al más pálido.
Sheldon: No... no te hagas ilusiones, eso solo fue el calor del momento... -dijo dándole la espalda y abrazándose a sí mismo. No quería encararlo.
Brad: Tal vez... ¿pero de verdad eso no significo nada para ti? -pregunto atreviéndose a abrazar al otro por la espalda. tocándole el pecho para sentir su corazón que parecía una locomotora- mentiroso.
Sheldon:.... Deja de jugar, tu sabes que mi corazón le pertenece a Jenny -dijo queriendo soltarse, pero el agarre del contrario era fuerte.
Ya que para ese momento el de cabello rojo decidió tomar al toro por los cuernos de una buena vez.
Brad: ¿Pero te parece sano? -pregunto sin rodeos- Jenny es mi amiga y la quiero como una hermana, pero... -exclamó entrelazando sus dedos con los del asiático- sienteme, yo soy carne y hueso... ¿Me dirás que el metal frío es mejor que el calor humano? -se atrevió a decir, esperando ser apartado de forma violenta.
Pero para su sorpresa, en vez de eso, sintió como la mano del otro se aferró con fuerza a la suya.
Sheldon: Tú no entiendes nada... Nadie me ama... Solo una máquina puede amar a un raro como yo, si ni siquiera puedo lograr eso...
Brad: Sabes que ella no te corresponderá, nunca -lo corto- porque Jenny también sabe que no es justo ilusionarte, sabiendo que tú envejecerás y ella no -dejó en claro, ganándose una mirada devastada del asiatico.
Sheldon: ¿Y qué opción me queda? Ni las moscas de la escuela me quieren, todos se creen demasiado buenos para mi -no pudo evitar sonar con algo de resentimiento escondido.
Brad: Eso no es cierto y lo sabes.
Sheldon: Para ti es fácil decirlo, señor me conformo con una alienígena con la que me case y que intentó comerme la cabeza cuando quise dejarla -reclamo, para luego sonreír un poco al ver al más alto sonrojarse de vergüenza. Al menos le devolvió una para variar.
Brad: Ya dije que aprendí mi lección... Sabes -dijo recostando su cabeza en el hombro ajeno- no lo había notado, pero eres lindo cuando haces pucheros estando molesto.
Dicho comentario hizo a Sheldon quedarse en silencio, procesando las palabras de Brad mientras sentía el calor de su cuerpo contra el suyo. La verdad era que siempre había sentido una conexión especial con él, pero había guardado esos sentimientos bajo una capa de inseguridad y miedo al rechazo. Ahora, después de la pelea y el beso, su mundo parecía más confuso que nunca.
Sheldon: Déjame en paz... y no soy lindo... -murmuró, torciendo los labios en un intento de desviar la atención de la situación. Pero su voz temblaba, y Brad pudo notar la lucha interna que estaba teniendo.
Brad: No hasta que hablemos de tus padres -dijo de repente, haciendo al otro molestarse un momento por el cambio abrupto a ese tema en particular, antes de solo suspirar con resignación.
Sheldon:... No sabes cuanto me enoja que me quieras obligar a hablar de esto -admitió recibiendo como compensación un beso en la mejilla que lo hizo sonrojar.
Brad: Sabes que soy bueno escuchando cuando me esfuerzo -declaró confiado para hartazgo del pelinegro que sabía que no tenía caso seguir peleando.
Sheldon: ... Está bien... -terminó dando el brazo a torcer- pero quiero algo a cambio.
Brad: ¿Algo? ¿Qué es lo que...? Oh, eso -dijo sonriendo pícaro cuando el oriental se tocó los labios suavemente- al final te gustó tanto como a mi.
Sheldon: Sólo di si aceptas, payaso -exclamó avergonzado. Ni pudiendo terminar de decir eso cuando el pelirrojo procedió a acaparar su boca por completo.
Ambos chicos se sumergieron en un mar de emociones, sus corazones latiendo al unísono mientras los besos se volvían más intensos. La tensión que había estado presente durante toda la pelea ahora se transformaba en algo más dulce y vulnerable. Todo esto siendo visto por el trío de alienígenas que se sentían como estar viendo una telenovela por la televisión.
Gantu, Reuben y Hunkahunka: Aww... -dijo conmovidos, pasando a incómodos al ver que estaban subiendo la apuesta- Oh... ¿Oh? -fue lo que dijeron pasando a curiosos al ver qué se fueron tras unas cajas y muebles. Era un hecho, ambos jóvenes estaban dejándose llevar por las hormonas.
Camisas, zapatos, medias y cinturones se encontraban esparcidos por el suelo, ya solo faltaba que los pantalones cayeran con un simple tirón. A ellos poco les importaba, pues a medida que los besos se volvían más apasionados, el calor de sus cuerpos y el deseo entre ambos crecía intensamente. Con cada prenda que caía, la piel expuesta invitaba a tocarse y explorar de manera recíproca. Acto que ninguno de los dos tenía problema en realizar.
Solo para que justo cuando faltaba una prenda que quitar en ambos para estar como vinieron al mundo, fue que la puerta de la casa de Sheldon se abrió de golpe, haciendo a este apagar la luz por inercia antes de alejarse lo más posible tomando la mano del otro chico para llevarlo adentro de un armario.
¿Y quien fue el que interrumpió la diversión? Nadie más que Tuck, el hermanito menor de Brad que estaba al borde de la histeria por todo el asunto de la mudanza de Jenny.
Tuck: ¿Qué están haciendo ustedes dos? ¡Deberíamos estar pensando qué hacer para que Jenny no se vaya! ¿Y porque está oscuro? -preguntó buscando el interruptor para horror de los mayores.
Brad y Sheldon: ¡No enciendas la luz! -dijeron para sorpresa y extrañeza del menor.
Tuck:... ¿Ok?...
Brad: Ve a ver si ya puso la marrana, Tuck -le dijo con algo de enojo- estamos a mitad de algo de grandes aquí.
El niño, visiblemente confundido y aún sin entender del todo la situación, decidió hacer lo que le pidió su hermano, aunque no sin antes lanzarles una mirada inquisitiva, o intentándolo ya que no veía nada por la oscuridad. Luego sin más, se dio la vuelta y salió de la habitación, dejando a Brad y Sheldon en medio de una tensión palpable.
Brad: Ese niño... ¿Cómo terminamos así? -pregunto recobrando la picardía al notar que estaban abrazados dentro del armario, solo en ropa interior-... Oye, qué piel tan sensible tienes -mencionó pícaro al ver que ya estaban agarrando color los chupetones que le había hecho hace solo unos minutos.
Sheldon: No molestes -dijo con pena en lo que el contrario lo apretó con cariño entre sus brazos.
Brad: No te estoy molestando. Solo digo que... Eres hermoso -declaró mirándolo a los ojos, preocupándose cuando el otro se mostró decaído de repente.
Sheldon:... Y encima me sigues mintiendo -dijo haciendo suspirar al contrario.
Brad: ¿Por qué insistes que miento... ? ¿Tan poco crees que pienso que vales? -pregunto en lo que el más bajo agacho la mirada.
Sheldon: Tú y todos... -respondió causando tristeza en el joven que lo tenía abrazado.
Brad: Por eso insistes en no querer hablar de tus padres, dices que no importa... Pero lo que dices realmente es que crees que nunca les importaste -mencionó, siendo la respuesta del pelinegro desviar la mirada.
Sheldon: No sé qué más decirte, Brad. La verdad es que he vivido en este lugar, en este estado de abandono y soledad tanto tiempo que he llegado a aceptar que nadie se preocupa por mí. Mis padres me dejaron... no sé por qué, pero no puedo seguir pensando en eso... no debo.
Esa declaración hizo que Brad sintiera un nudo en el estómago al escuchar la voz del asiático temblar, la tristeza palpable en sus palabras. No podía imaginar la carga emocional que su amigo llevaba, y eso lo llenó de compasión. Por ello decidió que debía cambiar ese gesto triste a como dé lugar.
Sheldon:... Ahora que lo sabes quítate de encima, me agobias -pidió, solo para en respuesta su cuello fuera atacado de nuevo con besos, lamidas y mordidas- ¡Brad! Te dije que... ¡Que...! -trato de apartarlo entre jadeos de placer.
Brad: Parece que el único modo en que puedo lograr que de verdad me escuches es si tienes el cerebro desconectado... Déjame ayudarte con eso -hablo entre besos.
Antes de quedarse completamente quieto cuando, dando una lamida por debajo de la oreja de Sheldon, este soltó un suave pero sonora "Nya", a lo que el pelinegro solo se tapo la boca avergonzado, mientras que por parte, Brad parecía listo para actuar de la forma más primitiva posible dejándose guiar sólo por los instintos carnales.
Sheldon: ... Maldita sea mi fanatismo por el manga... -dijo queriendo morirse de la pena- yo... Por favor ignora que eso salió de mi boca -dijo notando muy tarde que Brad lo observaba completamente embelesado.
Brad: ¿Estás loco? Ahora me aseguraré de sacarte todos los posibles -dijo antes de proceder a chupar los pezones del contrario. Provocando que el chico pálido empezará a soltar gemidos y sonar como si estuviera grabando una animación hentai.
A la vez que los aliens decidieron de forma unánime que tenían suficiente, para acto seguido marcharse en cuanto notan que el chico de tez pálida incluso comenzó a hablar en japonés afeminado dentro del armario. Si, ya habían visto bastante. Por lo cual solo se fueron lentamente hacia atrás sin siquiera parpadear hasta perderse de vista.
Por su parte, el armario se había convertido en un refugio inesperado para Brad y Sheldon, un espacio donde los ruidos del mundo exterior se desvanecían y la intimidad se apoderaba de ellos. Sin embargo, la situación que había comenzado con risas y bromas estaba tomando un giro más serio.
Mientras Brad continuaba explorando el cuerpo del joven a su merced decidiendo qué al carajo, si ya llego allí al menos iba llegar hasta el final. A su vez, Sheldon se debatía entre el placer y la confusión. La cercanía física había derribado algunas de sus barreras, pero las inseguridades seguían acechando en su mente.
Sheldon: Brad, espera... ¿Qué estamos haciendo? -logro preguntar entre jadeos en lo que el contrario se detenía un momento.
Brad: Solo... estamos disfrutando de este momento. No tienes que pensar demasiado en eso, Sheldon.
Sheldon: Es que... No sé si esto es correcto -dijo mordiéndose el labio- lo que pasó antes, el beso... no quiero que pienses que soy solo un capricho.
Brad: ¡No! No es un capricho para mí. Me importa de verdad, y sé que te importa a ti también.
Sheldon:... ¿Cómo terminó pasando esto? -susurro recostándose sobre Brad quien estaba sonriendo como si hubiera ganado un campeonato- Pero... ¿y Jenny? No puedo seguir adelante con esto si...
Brad: Sheldon -dijo interrumpiéndolo- Ambos teníamos mucho reprimido, más que todo tu... Y no me arrepiento de nada. Además, la relación que tienes con Jenny es diferente. Ella es una amiga, pero esto entre nosotros... es algo más. No quiero que lo ignores.
Sheldon:... Es solo que he estado solo tanto tiempo. No sé cómo abrirme a alguien sin sentirme vulnerable.
Brad:... Tus padres son unos imbéciles. Es lo que yo pienso... -concluyó besándole la frente al asiatico- eres demasiado bueno para ellos. No los necesitas, ¿Muy bien?
Sheldon: Fue lo que te dije desde el principio... -dijo sonriendo antes de esconder su rostro en el pecho ajeno- ... Me di cuenta de eso desde que me fui del orfanato a los 9 o 10... Cuando me hice a la idea de que nadie me quería y nadie me iba a adoptar, solo... Solo me necesito a mi -admitió para pesar de Brad.
Sabía que el chico había pasado por mucho, y la tristeza que había en su voz resonó en su propio corazón. Sin embargo, también sentía que había algo poderoso en la conexión que compartían, (que hasta ve que era más profunda de lo que pensaba) algo que podía ayudar a Sheldon a sanar.
Brad: Pues me tienes a mí, a Jenny, a la señora Wakeman, a Tuck...
Sheldon;... Ni siquiera una mano completa... -susurró negando- ¿crees que no se que es enfermo mi sentir por Jenny? Es una máquina, lo sé, pero como dije... Si ningún humano me quiere, una máquina tal vez...
Brad: Deja de decirlo -dijo haciendo nuevamente que lo vea a los ojos- ya deja de decir que nadie te quiere. Por favor, estamos por tener relaciones ¿crees que haría eso con cualquiera? Me importas, mucho -confesó atrayendo al pelinegro a su pecho en un abrazo protector.
Sheldon:... ¿Qué es esto? ¿Ahora me pedirás que sea tu novia o algo así? -pregunto divertido. Aunque se sorprendió con la respuesta.
Brad: Pues... De hecho no es una mala idea. ¿Por qué no?
¿Por qué no?... ¨¿Novia?¨ repitió Sheldon en su mente, sus ojos se abrieron como platos, y su rostro se tornó de un rojo profundo. La idea le parecía absurda y al mismo tiempo aterradora. Nunca había tenido una relación romántica y la idea de ser "novio" de alguien, especialmente de Brad, le resultaba tan emocionante como aterrador.
Sheldon: ... Si lo haces y aceptara... Ya nadie nos hablaría en la escuela, nunca más. Parias sociales de por vida -dijo con incredulidad.
Brad: Algo me dice que la señora Wakeman está resolviendo eso -dijo restando importancia al asunto- además no es como que nos quedaremos aquí. Oíste a Hollow, si insistimos nos llevarán con Jenny y su mamá. Una nueva vida.
Sheldon:... Eso me asusta -respondió casi de inmediato- aún luego de estar en el espacio, ver aliens, robots... Irme de aquí y empezar de nuevo...
Brad: Es mejor que resignarnos a una vida siempre igual, si lo piensas -dijo sonriéndole con cariño- y además... Nos tendrás, es decir, me tendrás. Admito que lo de hace un momento fue por la adrenalina... Pero conforme más lo pienso, más creo que puede funcionar... Tu y yo
Sheldon:... ¿Me estás pidiendo lo que creo que me pides? -pregunto viéndolo en shock- pero... Soy un chico, y tú eres un mujeriego.
Brad: ¿Y eso qué? Nunca llegué con una chica a donde acabo de llegar contigo -abrazándolo de la cintura- además, ya siendo sincero, tu no tienes nada que envidiarle a una chica. Y si, incluyo a Jenny.
Sheldon:... Eres alguien cruel -fue todo lo que pudo decir empezando a llorar- te aburrirás de mi, se que lo harás. Entonces, ¿para qué molestarse? Es más, ¿Cómo puedes estar hablando de nosotros cuando Jenny se va a ir? ¡Pensé que era tu mejor amiga!
Brad: Si, lo es... Pero acabo de darme cuenta de algo, tu me necesitas mucho más -reconoció limpiándole las lagrimas- además, ya hablamos de que posiblemente nos iremos con ella. Y te puedo prometer que no te dejaré solo, ¿ok? Yo... No me iré -prometió besándole la frente.
El muchacho se quedó en silencio por un momento, procesando las palabras de Brad. La mezcla de emociones en su interior era abrumadora. La idea de ser importante para alguien, de ser parte de algo más grande que él mismo, era un concepto que nunca había considerado. Su vida había estado marcada por la soledad y el abandono, y la oferta de Brad era un rayo de esperanza en medio de la oscuridad.
Sheldon:... ¿Es en serio? Tu... ¿De verdad hablas en serio? -dijo abrazándolo con fuerza.
Brad: Sheldon... ¿No acabo de decir que no tienes nada que envidiarle a una chica? -cuestiono sonriendo- Sería un tonto si dejo ir un chance contigo.
Sheldon:... Si sabes que no te voy a pagar por estar conmigo ¿no? Me quedé pobre dándole todo a esa chica para darle celos a Jenny... Lo sé, lo sé, de mis ideas más absurdas.
Brad:... Sheldon, solo cállate y bésame ¿si? -pidió sonriéndole con amabilidad.
Sheldon: Está bien... -dijo finalmente, su voz temblando un poco, pero cargada de determinación- Quiero intentarlo. Quiero ver a dónde nos lleva esto.
Brad: Eso es todo lo que necesito escuchar -respondió, su rostro iluminándose con una sonrisa genuina. Sin pensarlo dos veces, lo atrajo hacia él y lo besó de nuevo, sintiendo cómo la tensión que había acumulado entre ellos se desvanecía en ese instante.
El beso era diferente esta vez, lleno de promesas y la posibilidad de un futuro juntos. Brad sintió como si todo lo que había pasado hasta ahora los había llevado a este momento, una mezcla de risas, peleas y sentimientos reprimidos que finalmente estallaban en una conexión genuina. Sheldon, a su vez, se permitió relajarse. La calidez de Brad lo envolvía y, por primera vez en mucho tiempo, se sintió querido. Era un sentimiento extraño pero reconfortante, como si las paredes que había construido a su alrededor comenzarán a desmoronarse.
La oscuridad del armario era un refugio acogedor, y mientras se besaban, las preocupaciones sobre el futuro y su relación con Jenny parecían lejanas. En ese momento, sólo existían ellos dos, y la conexión que estaban forjando.
—-
(Al día siguiente)
Bueno... definitivamente eso era algo que ninguno esperaba. Recapitulando, ambos habían decidido ir a la casa de las Wakeman con el fin de despedirse de Jenny y decirle que no se preocupara por ellos debido a que se cuidarían el uno al otro, no sin antes rogar al tal Hollow para que los llevara con ellos en un último intento desesperado.
Solo para que este al verlos llegar le acabará dando un contrato de pasante a Sheldon diciéndole qué empezaba el lunes como si nada, con un tono de lo más casual antes de solo retirarse. Y no hace falta decir que esa conclusión causó que a ambos chicos se les cayera la quijada al ver el sueldo.
Doctora Wakeman: Y antes de que preguntes. No muchacho, no me pagan lo mismo... A mi me pagarán más dado a que tu solo serás un pasante y aun debes ir a la escuela -dijo con un tono presumido mientras movía cajas a un camión de mudanza con ayuda de la mayoría de sus hijas.
Jenny: ¡Ya me ví viviendo la vida buena! -dijo con signos de dólar en los ojos- por cierto ¿Qué iban a decirnos chicos?... ¿Y porque están tomados de la mano? -pregunto haciendo a ambos chicos reír con algo de nerviosismo.
Brad: Es una historia graciosa, y bueno... Lo estuvimos hablando y... -dijo apretando la mano ajena, notando que Sheldon quiere soltarse y correr-... Decidimos darnos una oportunidad, ya sabes, para salir... Al final caí en sus encantos -dijo sonriéndole al asiático que se sonrojo.
Jenny: ¿En serio? -preguntó, su rostro iluminándose con una mezcla de sorpresa y alegría- ¡Eso es genial! Siempre pensé que ustedes dos podrían ser una buena pareja.
Sheldon: ¡Espera! -interrumpió de inmediato, sintiéndose abrumado por la atención y porque no pensó que Jenny lo aceptaría tan fácil- No es tan simple, solo estamos... probando las cosas, ¿verdad, Brad?
Brad: Claro, solo estamos viendo cómo nos va -dijo, tratando de sonar casual mientras miraba a Sheldon con una sonrisa alentadora. Pero por dentro, sentía una mezcla de emoción y nerviosismo.
Jenny: ¿Pero estás seguro? Te lo digo, sólo ser su amiga llega a ser agotador y agobiante, no lo quiero imaginar de novio -dijo haciendo que el más alto frunciera el ceño.
Brad: Jen, ¿Por quién me tomas? Claro que...
Jenny: Se lo decía a Sheldon, Brad -dijo haciendo que el pelirrojo se indignara mientras el asiático suelta una risita. Momento en que ella volvió a trabajar.
Sheldon: Oye -dijo llamando la atención de Brad- al final... es mejor estar contigo que esperar por algo que nunca pasará, y bueno... Anoche me di cuenta de que... Eres más dulce y tierno de lo que se ve a simple vista, y hace que lo tonto sea tolerable.
Brad: Gracias... -exclamo sonriendo antes de fingir indignación- Oye... -dijo antes de que ambos compartieran una risa.
Al cabo de un rato, ambos se quedaron en silencio, contemplando el futuro. Sabían que había muchos desafíos por delante, pero también una oportunidad para construir algo nuevo, juntos.
_________________________________________________________________
Y ese fue el corto. ¿Qué les pareció?
Ya esto fue lo que me faltaba. Ahora si no falta nada para el próximo capitulo.
Antes de irme. un dato Random. Esta es la nueva mascota de Hiro, Toots. Una gatita Bastet, regalo de Drácula como muestra de buena fe con la familia Rivera que Miguel procedió a regalarle a su crush.
Nos vemos luego.
Chapter 28: Capitulo 25: Fiesta del té (1/3)
Notes:
(See the end of the chapter for notes.)
Chapter Text
(General Pov)
(Escuela Xavier para Jóvenes dotados, Ciudad de Salem Norte, USA)
Scott:... Entonces... ¿Alguien nos dirá que pasa? -preguntó el líder del grupo de jóvenes en lo que observaba como sus maestros parecían ir de salida,.
Todos vestidos de gala con atuendos que de una u otra forma estaban relacionados con corazones (aunque el de logan muy sutilmente con una carta de póker del as de corazon). Siendo quien más resaltaba el profesor Xavier que estaba vestido prácticamente como todo un rey de la edad media, igualmente, con corazones en los ropajes.
Cosa que llamó la atención de los jóvenes que llevan interrogando sobre el asunto las últimas dos semanas sin recibir respuesta alguna pero ya sabiendo del tema debido a que cierto adolescente de piel azul había robado la invitación, la fiesta del té en San Fransokyo.
Ororo: Para resumir, al profesor lo invitaron a una fiesta -dijo resumiendo todo prácticamente mientras se miraba en el espejo.
Logan: Y más les vale que si vuelven a espiar o robar papeles de las oficinas, se aferren a las consecuencias -dijo sacando sus garras de adamantium en gesto de amenaza. A lo cual todos menos el alemán señalaron al propio chico de azul, echándole la culpa para ofensa de este.
Charles: En todo caso, este será un evento importante para nosotros -dijo con amabilidad- la nación de San Fransokyo, luego de separarse de Estados Unidos, a declarado intenciones de anunciar al mundo que es un país a favor de los mutantes, quieren que vaya para mostrar dicha afirmación como algo veraz -dijo sorprendiendo a los más jóvenes.
Jean: Sería algo maravilloso, profesor -dijo en lo que la mayoría de los demás estuvieron de acuerdo.
Por su parte, Cíclope frunció el ceño, procesando la información. La idea de que una ciudad-estado quisiera apoyar públicamente a los mutantes era una noticia que podría cambiar muchas cosas, pero también traería riesgos.
Scott: Entonces, ¿la fiesta es una especie de acto diplomático? ¿Una oportunidad para que los mutantes muestren su apoyo a esa causa?
Charles: Exactamente. Pero debemos ser cautelosos. No sabemos quién podría estar observándonos o qué intenciones tienen realmente. La política en estos temas siempre está llena de matices y peligros -dijo con determinación de que todo saliera bien.
Kurt: Resumiendo irán a un evento aburrido de gente rica -dijo encogido de hombros, provocando una risa en el de más edad en la habitación.
Logan: Como se nota que no saben nada de Héctor
Rogue: ¿De verdad es un viejo conocido tuyo, Logan? -pregunto arqueando una ceja, en lo que el mencionado asintió.
Para acto seguido mostrar en su celular un video de una pelea de bar en una cantina de Texas con él y Hector teniendo una clásica riña con todos los clientes del local. Mesas y sillas rotas, cuerpos atravesando las ventanas, botellas de vidrio rotas y un tipo tocando una pianola en medio del caos para dar el ambiente.
Kurt: ... ¿Soy el único al que de hecho no le sorprende?
Logan: Esa fue una buena noche -admitió de buena gana en lo que guardaba el celular.
Evan: ¿Entonces irá para conocer a ese tal Héctor, profesor? -preguntó otro de los chicos al dueño de la escuela que asintió.
Charles: Es una de mis razones... la verdad mentí, si le leí la mente solo un poco a ese joven, nada más para conocer la lista de invitados, y es... Muy interesante -reconoció sabiendo que captó el interés de todos.
Kurt: ¿Y quienes irán?
Hank: El profesor y nosotros los profesores -dijo bestia de lo más normal haciendo que Ororo le diese un leve golpe con diversión.
Ororo: Henry, creo que los chicos tienen curiosidad de a quién conoceremos
Charles: La realeza de Wakanda, los vengadores, los cuatro fantásticos, esa joven Moon Girl, extraterrestres, Kim possible, monstruos tanto creados como mitológicos, cantantes, famosos actores y medios de riesgo -comentó conforme enumeraba con los dedos.
La sorpresa y el asombro recorrieron los rostros de los estudiantes al escuchar la lista de invitados. Todos intercambiaron miradas llenas de curiosidad y expectación. La idea de que personajes tan diversos y poderosos estuvieran en la misma fiesta hacía que la misión que tenían delante se volviera aún más intrigante y peligrosa.
Logan: Y antes de que lo piensen, nosotros nos iremos en el Blackbird, y nos llevaremos las llaves del helicóptero -dijo rompiendo rápidamente la ilusión de los jóvenes de colarse al evento.
Ororo: Y no les recomiendo tratar de colarse. Según nos advirtieron, las fronteras de la ciudad estarán protegidas con seguridad lo bastante potente para repeler a Doom o a Magneto y la hermandad mutante -declaró en lo que más de uno no pudo evitar tener sus dudas al respecto.
Hank: No cree que Erick vaya a la fiesta ¿verdad, profesor? -cuestionó al hombre que procedió a meditarlo a profundidad.
Charles: No negaré que sería tentador para él, tanta gente importante reunida... Pero no me preocupo... Los organizadores del evento parecen esperar que incluso la propia Majestia llegue como invitada sorpresa a la fiesta -dijo haciendo al chico de lentes soltar un resoplido.
Scott: Lo que faltaba, más héroes de Nueva York, de verdad que esa ciudad está sobre explotada de meta humanos y mutados -comentó cruzado de brazos.
Kurt: Bueno, solo queda una cosa por hacer... -dijo de repente llamando la atención de todos- elegir qué ponernos para ir a la fiesta.
Comentario que hizo a los profesores arquear cejas casi de forma simultánea.
Logan: Creo que las orejas puntiagudas no te funcionan, duende
Kurt: ¡Ay vamos, llevenos también, no es justo! -reclamo- también queremos conocer a los famosos.
Evan: Es cierto, Billy Stomp, Rock Callaghan...
Kitty: Tina Aveces...
Jean: Además, podríamos mostrar la convivencia entre humanos y mutantes -dijo solo para ser ignorada por Logan que frunció el ceño en dirección a Kitty.
Logan:... Tienes prohibido volver a ver ese programa que parece vómito de princesas y arco iris.
Kitty: En mi defensa, la veo más por la que es la rival -explicó levantando las manos con cautela.
Jean: El punto es que queremos ir, por favor ¿no nos lo ganamos después de todo lo que hemos pasado juntos? -pregunto queriendo apelar a la culpa. A lo cual Wolverine ya estaba a punto de responder como mejor le gusta, de forma cruda y cortante.
Logan: Por supuesto...
Charles: Que sí -dijo haciendo que los mayores le vieran fijamente- quiero decir, que sí, los llevaremos. Pero solo si se comportan y cumplen con las normas. La seguridad será estricta y no podemos permitir ningún incidente. La diplomacia y la discreción son claves.
Logan, Ororo y Hank:... ¿Qué? -preguntaron cuestionando la cordura del hombre que solo se encogió de hombros.
Mientras que Charles levantó una ceja, observando a los tres profesores con una mezcla de diversión y determinación. Había un brillo de complicidad en los ojos del adulto, consciente de que los jóvenes estaban ansiosos por demostrar su valía. Y si, sabía que en realidad querían ir a la fiesta por que aun con todo, son jóvenes.
Charles: Los chicos tienen un punto, se lo han ganado, además, sería una buena oportunidad de mostrar la verdadera cara de la población mutante a gente dispuesta a vernos por quienes somos -explicó su razonamiento mirando una foto en la pared que le dio algo de nostalgia, a la vez que el más rudo de los presentes solo suspiro profundamente.
Logan:... Nos hacen quedar mal de algún modo, y dormirán en el bosque un mes. En particular los miro a ustedes, duende, chispita, paleta, terrorista, casco y alfiletero -dijo mirando con recelo a cada uno de los mencionados (Kurt, Ray, Bobby, Tabitha, Sam y Evan) que no hace falta decir que se ofendieron.
Aun así, con un suspiro colectivo por parte de los mayores, estos solo se quedaron esperando mientras los más jóvenes se dirigieron a sus habitaciones para prepararse, cada uno en silencio, sabiendo que ese día sería decisivo para su imagen y para el futuro de los mutantes en el mundo... ¿y a quien engañaban? ¡Sonaba interesante!
____________________________________________________________________
(Torre de los vengadores, Manhattan, Nueva York, USA)
Tony: Bueno, parece que no tengo opción -dijo tras vestirse para el evento, con un traje de gala único con aires de carpintería- Pepper ¿puedes llamar a los muchachos menos a Clint y Natasha? Y tú también ven... Tendremos una cita -dijo por comunicador a quien es la persona en la que más confía.
Originalmente era su asistente, después de la traición y arresto de Obadiah Stane, Pepper pasó a ser su socia de negocios. Y consecuentemente luego de unirse a los vengadores le dio el control total de industrias Stark como directora general, para luego finalmente empezar una relación tras los sucesos en relación con Ivan Vanko y Justin Hammer, si, toda su historia de pareja era digna para publicar en un libro y hasta podía ser best seller.
Pepper: Tony, no es que no me guste que intentes ser romántico, pero, ¿No sería raro una cita de tantos? -pregunto conociendo que el romanticismo no era el fuerte de Tony Stark por así decirlo.
Tony: Solo tráelos, así será más rápido -exclamó ya con algo de impaciencia, quería llegar temprano.
Siendo así como al poco tiempo la señorita Potts hizo acto de aparición, en compañía de tres hombres que debido a los sucesos del año pasado, pasaron a ser considerados leyendas vivientes por casi todo el mundo, héroes en todo sentido. Uno ya siéndolo desde el holocausto como era el caso de Steve Rogers, otra ya siendo una deidad desde la mitología nórdica y otro que se ganó empezar a ser visto como héroe cuando todos lo veían como un monstruo, aunque ahora en su personalidad de Bruce Banner era teóricamente inofensivo.
Tony: Me alegra que vinieran tan rápido, en resumen la cosa está así, no hagan planes hoy, iremos a una fiesta de té, caballeros -dijo sin rodeos.
Bruce: ¿Fiesta de té? ¿Hace cuánto te interesan esas cosas, Tony? -pregunto honestamente sorprendido. De lo que sabía del playboy, esa no era una clase de eventos al que le interesa ir.
Tony: Desde el momento en que la sobrina del anfitrión me dijo que el infeliz que me vendió a los diez anillos fue el mismo mal nacido que vendió a mis padres a H.Y.D.R.A -dijo casual pero con un rencor evidente que sorprendió al resto de los presentes. En especial a la mujer que estuvo con él prácticamente desde sus comienzos.
Pepper:... Ese maldito de Obadiah -susurro lo bastante fuerte como para que todos decidieron mejor no comentar al respecto. Todo hombre lo sabe, no enojes más a una mujer que ya está molesta.
Steve: Y quieres saber cómo averiguaron tanto acerca de que Stane fue quien vendió a tus padres a H.Y.D.R.A., ¿No es así, Tony?
Tony: Puede ser, pero más que todo me llama la atención ese proyecto que dijo esa niña de que podía revolucionar la industria médica. No mentiré al decir que industrias Stark no es precisamente conocida por su departamento médico -admitió encogido de hombros.
Pepper: En otras palabras, esperas ir como inversionista -dijo ya de un mejor humor.
Tony: Ese es el asunto, no lo sé. Todo de lo que se trata este proyecto para los V.I.P lo tienen envuelto en misterio. Incluso el evento principal de la fiesta es secreto y al parecer es lo bastante importante como para que Doom lo pudiera querer -dijo con interés.
Era un hecho, desde que prácticamente lo manipularon con psicología inversa (porque si, aunque no le guste reconoció fácilmente que eso paso) la idea de ir a esa fiesta no dejaba de intrigarle.
Thor: Entonces, irás para ver si decides invertir, y para proteger el llamado evento principal si algún villano intenta hacerse con él, Stark -dijo tras lograr llegar a la misma línea de pensamiento que el resto.
Tony: Iremos, todos nosotros -respondió- y descuida ricitos de oro, según se, habrá comida y bebida como para incluso llenarte a ti y Hulk de aparecer, y hasta sobrara.
Pepper: Y yo creyendo que me pediste llamarlos para decirles que cuidarán el fuerte mientras nosotros salíamos -admitió con un tono divertido en lo que su novio solo sonrió de medio lado.
Tony: Para esto está Jarvis. Y Clint y Natasha también, una condición de la invitación fue que ellos no están invitados, por aguafiestas -exclamo como si nada.
Obviamente no iba a revelar la verdadera razón, sus conexiones con S.H.I.E.L.D. (Y en parte lo entendía, incluso él no se sentía a gusto a veces con Fury).
Pepper: ¿Alguien más que irá, o que no vaya a ir? -preguntó mientras observaba como algunos robots hacían entrega a los demás vengadores presentes de atuendos para el evento, que los aceptaron a excepción de Thor que solo tiró el suyo mencionando que ya estaba vestido con sus mejores vestimentas.
Tony: Pensaba invitar al chico, podrías ayudarme a convencer a su tía.
Pepper: ¿A Peter? -pregunto sorprendida- seguro, será la primera vez que deja Nueva York, si recuerdo bien.
Tony: Ah ¿en serio? El niño necesita salir más -reconoció antes de solo encogerse de hombros.
Pepper asintió, sonriendo con ternura al imaginar la ilusión en los ojos de Peter cuando le hablara por primera vez sobre su interés en asistir a eventos sociales de ese tipo. Sabía que el joven quería experimentar algo más allá de las calles de la ciudad y, si Tony podía convencerlo, probablemente sería una buena oportunidad para que el chico se abriera un poco más.
Pepper: Lo hablaré con su tía, y si está de acuerdo, me encargaré de que Peter tenga un buen atuendo -declaró con convicción.
A lo cual el filántropo soltó una carcajada ligera y miró a los demás vengadores, quienes ya estaban ajustándose sus atuendos y preparando sus armas o escudo, en caso de que la situación se complique de alguna forma.
Tony: Perfecto, entonces tenemos un plan. El niño en la fiesta, los demás en el "fuerte" vigilando, y nosotros disfrutando de un té con posibles ataques de villanos en la misma ciudad. No hay nada como un buen día de negocios... y un toque de diversión clandestina -dijo ya rumbo al jet.
Ni que fuera el conejo blanco para llegar tarde a fin de cuentas.
___________________________________________________________________________
(Birnin Zana, Reino de Wakanda, África)
Shuri: ¿Saldremos de Wakanda? -pregunto con emoción la joven princesa mientras seguía a sus padres y hermano ya listos para dejar el castillo.
Lo que tenía su porqué, el solo hecho de que la familia real saliera de su reino para ir a un evento social del mundo exterior era algo que fácilmente no se veía todos los días dado la naturaleza de su reino como una nación aislada, un suceso como el de ese día era digno para la intriga.
T'chaka: Tenemos que -dijo en lo que se acomodaba su abrigo que recordaba en cierto modo a la melena de un león, mientras que si familia vestía blanco y negro para hacer alusión al ajedrez- será un asunto diplomático, además de que recuperaremos el Vibranium que se perdió a causa de mi hermano -dijo con cierto amargor por el recuerdo.
Durante su gobierno, su hermano, N'Jobu, se convenció de que la política aislacionista de Wakanda era equivocada, ya que tenían los recursos para ayudar a las personas oprimidas de ascendencia africana en todo el mundo. Pero al no compartir sus ideales, N'Jobu decidió iniciar una revolución y reveló la existencia de Wakanda a Ulysses Klaue. Con dicha información, Klaue logró evadir los sistemas de seguridad y se robó un cuarto de tonelada de Vibranio.
Aunque se hizo de todo para intentar detenerlo, Klaue hizo explotar una bomba para asegurar su huida, matando a varios ciudadanos, y logrando escapar con el preciado material. Un error que lo carcomió por años y que ahora sería rectificado.
Ramonda: Admítelo, mi Rey, también tienes curiosidad y algo de emoción por ir a un evento que no sea estrictamente con gente de la ONU -dijo logrando sacarle una sonrisa a su marido.
T'chaka: Es verdad, más que todo me gustaría conocer a esta gente tan fuera de lo común. Usualmente quienes se contactan con nosotros quieren quitarnos Vibranium, no dárnoslo.
T'Challa: En lo personal, me causa intriga eso de que piensen ser una nación aislada como Wakanda -reconoció el príncipe. Dado a que Wakanda tenía sus razones para el aislamiento, sentía intriga de porque de repente una ciudad de Estados Unidos decidiera aislarse también.
T'Chaka: Considerando que al parecer tendrán de invitados a varios vampiros, entre ellos a Drácula, no me sorprende que la razón de su reciente aislamiento sea para esconder dichas relaciones -dijo para sorpresa de su familia.
Para ellos lo sobrenatural no era nada de otro mundo, pero de allí a saber que algunos entes de ese tipo accedieron a tener una relación directa con una nación emergente, eso era intrigante.
Ramonda: ... Es cierto, no puedo imaginar al gobierno estadounidense no intentando hacer algo al respecto si lo supieran.
Shuri: Típico de los americanos... Un momento -mencionó tras pensarlo- así fue como lo hicieron, fue un vampiro quien traspasó nuestras defensas y dejó la invitación, literalmente un murciélago la trajo.
T'Challa: Ahora sí me parecen interesantes -admitió en lo que dejaban los muros del palacio.
Una cosa era segura, Wakanda se preparaba para un nuevo capítulo, uno en el que lo mágico y lo tecnológico se entrelazaban en un delicado equilibrio, y en el que la protección de su gente sería la prioridad.
_______________________________________________________________________
(Edificio Baxter, Calle 42 y avenida Madison, Manhattan. Nueva York, USA)
Reed: Escuchen todos -dijo luego de entrar como si nada a la sala donde estaba el resto de su equipo pasando el rato- así van a ser las cosas. Necesito que se disfracen como piezas de ajedrez para un evento que será en un par de horas -solicito, de paso ganándose miradas de extrañeza de los otros tres presentes.
Quienes hasta a veces solían hacer apuestas de con qué excentricidad o locura saldría el líder del equipo de forma repentina. A fin de cuentas hablaban de un hombre que solía hacer máquinas del tiempo de uso personal por aburrimiento.
Johnny: ... Bueno -dijo con simpleza la antorcha humana encogido de hombros sin pedir algún contexto. Momento en que el robot del grupo se hizo escuchar para dar algo de claridad al asunto.
H.E.R.B.I.E.: Disculpe, doctor Richards, pero la señorita Rivera dijo que los atuendos de los acompañantes deben ser temáticos, no necesariamente vestirse de piezas de ajedrez
Reed: Oh, entonces eso, con que sean temáticos -dijo restando importancia al tema.
Sue:... Ok, debo preguntar ¿Qué está pasando aquí? -pregunto dejando de hacer un batido saludable.
Con todo el asunto de su embarazo había veces que, aunque se viera hermosa en el espejo, sentía que debía cuidar su figura. Y eso era ahora, ni quiera imaginar el desastre hormonal que sería cuando el bebe en su interior empezará a crecer... a comprar camisones de embarazada, y muchos.
Ben: Si, estás actuando más raro de lo normal, Reed -comentó en lo que apagaba la televisión.
Reed: Nos invitaron a un evento formal, una fiesta de té en San Fransokyo para celebrar su nueva denominación como país aislado -explicó con tranquilidad- y resulta que mientras los invitados principales, por ejemplo yo, debemos ir vestidos con temática a personajes de los libros de Lewis Carroll, los acompañantes deben ir con temática al juego de cartas o el ajedrez
Johnny: ¿Una fiesta de té? ¿Tenemos cara de tener cinco años y de jugar con muñecas? -pregunto divertido solo para notar que su hermana y amigos lo observaban con molestia- ¿que?
Ben: En tu caso, ¿Tenemos que contestar, cabeza de cerillo?
Sue: Los adultos también se reúnen a tomar el té, Johnny, se llama tener clase -aclaro para molestia de su hermano.
Reed: Además, la fiesta es temática, no necesariamente vamos a tomar té, Johnny -mencionó en lo que revisaba su atuendo temático de grifo- si no me equivoco el menú será muy variado, comida de todo tipo, principalmente licor y dulces. Mi interés en ir es más que todo conocer a los demás invitados y ver más de la tecnología de la empresa anfitriona, dicen que inventaron algo que revolucionará la industria médica... Tal vez sea un paso para curarte, amigo mío -dijo sonriendo a Ben.
Ya que no hace falta decir que uno de sus mayores proyectos al que le ha invertido una cantidad impensable de tiempo, es el de hallar una cura para el estado de su amigo, dejar su cuerpo rocoso para una vez más obtener su aspecto humano. Esa es una meta que desea alcanzar de una u otra forma para ayudar al que es su mejor amigo.
Johnny: O de perdido agregarte aunque sea un poquito de guapura, compadre -dijo matando el momento como solo él sabía hacerlo- que hablando de eso, contigo podemos ahorrarte buscar un traje. Solo te pintamos de blanco y ya eres una torre de ajedrez
Ben: Sigue así, y te arrojó por la ventana envuelto en espuma anti incendios -dijo para confusión del rubio.
Johnny: ¿Y eso qué?
Ben: Que dudo que puedas volar si no puedes calentar el aire a tu alrededor -exclamó con tono de amenaza en lo que la hermana del rubio rápidamente se metió en medio de ambos para evitar otro desastre típico de esos dos.
Sue: Supongo que será divertido, no nos suelen invitar a muchas fiestas qué digamos.
Ben: Y las veces que lo hacen, Johnny acaba haciendo que tengamos que irnos avergonzados.
Johnny: Bueno, bueno, no se preocupen. Yo sere el que se bañe en pintura, solo asegúrense de que no me pinten de negro, ¿vale? -dijo haciendo suspirar a más de uno.
Reed: De cualquier modo, algo me dice que esta vez no será el caso, creo que buena parte de los invitados serán igual o peor que Johnny -dijo queriendo aliviar la preocupación de su esposa y amigos, solo logrando el efecto contrario.
Ben: ... ¿Es porque rompí la televisión el otro día? Ya me disculpé, me dejé llevar porque perdieron los Metz -dijo pensando que en vez de una fiesta lo estaban castigando. ¿Un lugar lleno de gente peor que Johnny Storm? No gracias.
Pero no quedaba de otra, si los habían invitado sería una falta de respeto no asistir, ya verían como acabaran las cosas.
______________________________________________________________________
(San Fransokyo)
(Distrito de la Misión) (Población Alemana, Irlanda, Latinoamericana y México)
"¡Hoy es feriado por la fiesta del té!"
"¡Celebremos con carne, dulces y cerveza!"
"Hoy es dia de diversión, una fiesta con temática de lewis carroll, muy hipster por parte del señor Rivera"
"Entre los invitados tendremos a los vengadores, los cuatro fantásticos, Wakanda ¡Tendremos fuertes aliados!"
—
(Distrito de Nob Hill y Russian Hill) (Familias clase alta)
"Según fuentes confiables la cabeza del grupo triple D ha llegado al país"
"Y no es el único, según las noticias todo un grupo de celebridades asistirán como invitados a la gala"
"Algunos verían todo esto como un desastre, pero realmente es un océano azul del mercado accionario ¡estas son las oportunidades que no se deben ignorar cuando tocan la puerta!"
—
(Distrito Chinatown)
"A festejar y celebrar, pero sobre todo a vender"
"Según escuche el evento tendrá seguridad, ni siquiera los escoltas pueden entrar a la fiesta"
"¿Qué problemas pueden haber? Es solo una fiesta de té"
—
(Oficina del CEO, Rivera Solutions)
Rosa: La población esta feliz por el evento, eso es bueno, a fin de cuentas será televisado y gastamos mucho en publicidad para venderlo como el gran evento que es -dijo mirando su teléfono, ignorando la incredulidad de su primo en un tema ajeno a todo eso.
Miguel: ... ¿En serio? -preguntó mirando con algo de pena ajena una caja con luces y música que ponía "super genial caja de fiesta".
Resumen rápido de lo que estaba pasando, tanto Leo como Marco habían ido unos minutos antes a hablar con Héctor para preguntarle a qué hora era la fiesta y si solo asistían y ya dado que no habían recibido invitación. Siendo allí donde les explicaron que entre las varias razones por las que se hace la fiesta, una de esas razones era para celebrar que la banda Crazy Land había grabado su primer álbum... con el detalle de que se esperaba que ellos no asistieran al no estar invitados.
¿El motivo? Aunque la excusa fue decir que era una fiesta donde se esperaba cierto nivel de clase de grado ejecutivo. La verdadera razón era simplemente que Héctor quería desquitarse por la vez que esos dos casi le costaron el talismán de la oveja, de allí que no tenía problema con que los chicos de la banda estuvieran presentes en el evento... en espíritu.
Lo que obviamente concluyó en una discusión que terminó con el mayor engañando a ambos diciéndoles que podían asistir, pero que no entrarán a su super genial caja de fiesta, y como era de esperarse de un par de adolescentes (más que todo Marco arrastrando a Leo), lo hicieron, quedando atrapados dentro.
Miguel: ... De verdad no puedo creer que cayeran en eso -dijo para luego encogerse de hombros- aunque en parte los apoyo, somos adolescentes, si no vamos a fiestas podríamos morir... ¿Estabas hablando con acróbatas rusos?
Héctor: Sergei e Irina, si, solo te diré que soy un sujeto sociable -se encogió- recientemente me hice amigo de Doc Beebles tras ver más a fondo su trabajo y sus acciones, solo basto ofrecerle financiar sus dulces de miel para prácticamente asegurar la industria de la apicultura en el país -dijo sonriendo con un dulce del hombre en mano- no te extrañes de verlo en la fiesta. Nos dio la miel para el evento sorpresa.
Miguel: ¿El tipo que era un villano con disfraz de abeja? Ah, bien por él... y sobre mis amigos...
Rosa: Créeme, trate de convencer al tío para dar el brazo a torcer pero está de obstinado -dijo acomodándose las gafas- y no es todo, el tío Héctor también quiere que te pierdas la fiesta para vigilar a tus dos amigos -dijo haciendo que su primo frunciera el ceño.
Miguel: ¿Entonces mi viejo no solo los dejó atrapados, sino que también quiere que los tenga vigilados y encima me pierda la fiesta de té? —preguntó, intentando procesar la situación- pero claro que...
Héctor: Si lo haces te daré la azotea esta noche junto a todos los recursos que quieras para tener una cita de cuento de hadas con tu chino.
... Rayos, golpe bajo.
Miguel:... Lo siento chicos, pero el amor es primero -dijo palmeando la caja- además, supongo que en realidad lo mejor sería no asistir. Mejor no arriesgarme a que alguien conviva lo suficiente conmigo como para sospechar que soy Casanova. Digo, soy buen actor, pero nunca falta algún conspiranoico que se pase de la raya observando hasta los detalles más absurdos -comento en lo que su prima soltó una carcajada ligera, sacudiendo la cabeza con una sonrisa divertida.
Rosa: Tú y tu talento para convertir cualquier situación en una película de suspenso, Miguel. Pero tienes razón, mejor evitamos complicaciones. Además, no queremos que el tío se pase de listo y nos meta en algún problema -mencionó a la vez que Héctor, desde su lugar mirando a la ciudad por la ventana, se cruzó de brazos con una sonrisa pícara.
Héctor: Vamos, chicos, no sean tan dramáticos. La fiesta será un evento memorable, aunque de todos modos todavía falta una hora para la fiesta del té, así que podemos tomarnos nuestro tiempo -dijo para que luego los tres dejarán de ignorar al elefante en la habitación.
Oh mejor dicho, a cierta persona que estaba atrapada dentro de una de las tarjetas del juicio portátil. La cual no dejaba de usar cualquier truco para que le liberaran, teniendo resultados nulos ya que en todo ese rato su voz fue ignorada.
???: ¡Saquenme de aquí, exijo que me suelten! ¿Sabe quien soy? ¡Soy el presidente de los Estados Unidos! -dijo el ser con la apariencia del presidente Hathaway, pero fallando terriblemente en la personalidad.
Hector: Pero claro señor presidente ¿porque no cierra la boca que ya ignorarte empieza a ser molesto? -pregunto con molestia en lo que el ser cambio de aspecto al de una niña pequeña.
???: ¿Por qué me hacen esto? Sueltenme. Seré una buena niña, por favor déjenme ir ¿por favor? -preguntó con un tono inocente que solo molesto a la familia Rivera.
Rosa: Sigue así y voy a sacudir esa tarjeta haciéndote pensar que estás en la peor de las montañas rusas -exclamó solo logrando que la "niña" sonriera con malicia.
???: Cuando salga de aquí, voy a matarlos a todos ustedes yo misma -dijo cambiando de aspecto nuevamente a su apariencia real.
La de una mutante de piel azulada, cabello rojo y ojos amarillos de nombre de nombre Mystique, mutante de clase Alpha con posibilidades de ascender a Omega.
Héctor: Vaya, parece que tenemos una invitada muy especial en nuestra fiesta... y bastante irritada, por lo visto -dijo con el ceño fruncido pero con una mirada pícara de malicia.
Rosa: Eso no nos sorprende. Mystique, ¿verdad? -pregunto casual- sabemos quién eres y qué puedes hacer. Y dada tu situación actual, yo que tu, me lavaría la boca con jabón.
Mystique: ¿Calma? ¡Nunca en mi vida me han tratado así! Ustedes no saben con quién se meten -dijo actuando como si fuera una fiera salvaje- cuando salga de aquí, no solo me vengaré, sino que... ¡haré que se arrepientan de haberse metido conmigo! -dijo con sus ojos llenos de rabia.
Solo para ser ignorada olímpicamente por los tres Rivera que tenían mucho en sus cabezas para preocuparse por eso. A esas alturas una amenaza más o menos ya daba igual, habían llegado a un punto del juego de no retorno. Acobardarse ante la primera amenaza diría muy mal de ellos.
Rosa: De igual modo ya tenemos todo listo por si la hermandad de mutantes o cualquier otro incordio decide venir a molestar. Que enviaran a una espía nos tomó por sorpresa pero supongo que ya ni modo.
Miguel: Por ahora lo que nos importa es que la fiesta de té sea un éxito. Ahora que es un hecho que Magneto vendrá, nos da lo mismo -dijo en lo que tanto él como su prima se ponían uno a cada lado de Héctor para ver la ciudad también.
Rosa: Por cierto querido tío, el señor Conrad Fleem y todos los demás V.I.P ya han llegado al país -dijo logrando que el hombre mayor sonriera enormemente.
El reloj estaba en movimiento y las manecillas no dejaban de girar, solo unos pocos minutos para que todo comenzara, era tan emocionante.
______________________________________________________________________
(Camino a la azotea de Rivera Solutions) (Lugar de la fiesta)
Algunas personas dicen que el mundo es un pañuelo, que este es un lugar pequeño o solo todos de algún modo están conectados. Lo que es un hecho era que esa reunión repentina entre invitados ciertamente eran de esos sucesos que perfectamente por azares del destino podían ocurrir muy rara vez, como viejos conocidos de unas personas y desconocidos a la vez que se conocen e interactúan, todo un espectáculo en cierto modo.
Kim y Penny: ¿Lilo? -preguntaron al unísono al reconocer a la pequeña niña hawaiana antes de verse entre sí con sorpresa- ¿la conoces?
Lilo: ¿Kim? ¿Penny? ¡Hola! -dijo la pequeña con alegría al ver a sus dos amigas- ¿no se conocen? entonces las presentó. Kim, ella es Penny. Se quedó unos días en la isla cuando mis tíos abrieron un hotel. Y Penny, ella es Kim. Me ayudó a encontrar a Stitch cuando un científico loco lo secuestró -aclaro en lo que ambas se saludaron de forma cordial aunque una más ansiosa que la otra.
Penny: Oye, Lilo ¿Ella sabe que Stitch es...? Ya sabes...
Kim: ¿Un alienígena? Si, lo sé -admitió como si nada- en todo caso, encantada. Cualquier amiga de Lilo es amiga mía, las chicas debemos estar juntas -mencionó en lo que la morena soltó un suspiro para calmar sus nervios.
Penny: Te seré sincera, no puedo creer que esté conociendo a Kim Possible, eres un modelo a seguir para las chicas, se nota que te codeas con gente influyente, Lilo -exclamó guiñándole un ojo a la menor.
Kim: Que hablando de eso ¿Cómo es que estás aquí, Lilo? ¿Tu familia también fue invitada a la fiesta? -pregunto curiosa en lo que la niña asintió.
Lilo: Mi tío Jumba consiguió trabajo en los laboratorios de genética, así que se podría decir que me invitaron como familiar de un empleado -dijo sorprendiendo a ambas.
A fin de cuentas, no tenía caso alguno ocultar que ambas adolescentes ya sabían todo el asunto de los experimentos ilegales de Jumba y de cómo su trabajo era considerado... ilícito, por así decirlo.
Penny: ¿Pero no dijiste que tu tío tiene prohibido seguir creando a sus experimentos?
Lilo: Es una larga historia -confesó- pero al parecer encontraron el modo para que siga trabajando sin tener que hacer experimentos. Además, Nani volvió a ser surfista profesional y es patrocinada por la empresa -dijo señalando a su hermana qué hablaba animadamente con la mamá de Penny más adelante.
Penny: ¿De verdad? Eso está de lujo, Lilo -dijo con sinceridad en lo que la joven pelirroja decidió hacer conversación mientras caminaban.
Kim: Y dime, ¿Ya encontraron al verdadero 607?
Penny: ¿Al verdadero? -pregunto arqueando una ceja.
Kim: Pues veras, mientras Lilo y yo rescatábamos a Stitch del Doctor Drakken, Jumba estuvo correteando a mi amigo Ron por toda la isla, pues estaba convencido de que su ratopín rasurado, Rufus, era el Experimento 607, diseñado para sabotear sistemas eléctricos -dijo poniendo al tanto del tema a la otra chica.
Lilo: Sip. Lo rescatamos de ser llevado a Hamsterville. Ahora su hogar es en una prisión ayudando a que los prisioneros no escapen -dijo sorprendiendo a la morena- ¿Y tu también fuiste invitada, Penny?
Penny: Se puede decir que igual que tu soy invitada ya que soy familiar de un empleado, aparte de que yo misma soy una empleada, una becaria de las asistentes del señor Rivera, y con sueldo aclaró -explicó- además, mi tío Bobby firmó un contrato con la división de entretenimiento de Rivera Solutions. Rivera Entertainment.
Siendo esa la división que se encargaba de todo lo relacionado al entretenimiento. Música, artistas del medio, comedias de situación, telenovelas, dramas, películas, concursos y programas de entrevistas. Por mencionar algunas de las cosas que maneja dicha división de la empresa. Uno de los departamentos que es una subsidiaria de la empresa junto a otras como Rivera Robotics, Rivera Genetics y Rivera Gourmet.
Kim: Oye, eso es increíble -dijo en lo que la menor decidió preguntar algo que llevaba pensando desde hacía un rato.
Lilo: ¿Y tú porque fuiste invitada, Kim? Algo increíble supongo -dijo con curiosidad haciendo sonreír a la mayor.
Kim: Parece que fui invitada como un obsequio. Al parecer, el presidente de la empresa es un fanático de los grandes héroes y se enteró de que los ayudé durante el incidente de Casanova, cuando intentó crear su propio dinosaurio -dijo en lo que ambas mostraron sorpresa.
Penny: Supe de eso, es increíble los robos que comete ese tipo -reconoció.
Kim: Es solo un presumido arrogante y caprichoso -dijo cruzada de brazos- y por lo general no hubiera aceptado... Pero en serio, la idea de ver a mis hermanos menores vestidos como los tweedles era demasiado tentadora como para negarme -dijo viendo al par vestido como los gemelos de Alicia, usando un tecnicismo en la invitación que no especificaba quiénes de la familia debían usar el atuendo principal.
Cosa que hizo a ambos chicos hacer pucheros porque querían ir disfrazados como el grifo.
Mientras que por su parte las jóvenes seguían charlando, la música y las risas llenaban el ambiente en la azotea de Rivera Solutions, donde la fiesta comenzaba a cobrar vida conforme los invitados iban llegando. Hasta que de repente, un alboroto en el punto de control de la fiesta captó la atención de todos. Donde se podían ver a otras dos familias que estaban siendo retenidas por Gantu y una heroína conocida como Moon Girl junto a su compañero, quienes se encargaban de ser parte de la seguridad del evento.
Dexter: Ya dele el sombrero al guardia, anciano -reclamo molesto el joven a quien era el hombre de más edad de esa familia, Jorge Rivera, también conocido por su alias secreto de villano, Puma Loco.
Puma loco: ¡Ni hablar, porque debería hacer eso! -reclamo en lo que el alien respondió con la mejor cortesía posible.
Gantu: Porque las armas están prohibidas en la fiesta de té, señor Rivera. Cuando la fiesta termine, toda arma qué pertenezca a un invitado será devuelta -aclaró sin convencer al anciano para fastidio de su hijo y actual patriarca de la familia.
White Pantera: Papá, prometiste que te comportarías -dijo en lo que escuchó a su hijo hablarle en susurros.
Manny: ¿Por eso trajiste otro par de botas, y me dijiste que trajera otro cinturón? -pregunto al hombre que asintió.
White Pantera: Supuse que algo así pasaría. Somos invitados en un país extranjero. Debemos seguir las normas.
Puma Loco: Ni tan extranjeros, vivimos en México. Que los gringos crean que todo el mal viene de allí ya no es culpa nuestra -dijo en lo que su familia solo lo vio con cara de "el burro hablando de orejas".
Un abuelo villano, un padre superhéroe y un hijo que no sabía qué rumbo tomar para su vida, menuda familia. Y eso sin contar a la madre civil que se retiró de esa vida al no poder soportarla.
White Pantera: ¡Dale el sombrero al guardia ya para que dejemos de estorbar a los demás invitados! -dijo con molestia a su padre que estaba de obstinado.
Puma Loco: ¡Nunca! -dijo dispuesto a empezar una pelea en el lugar.
Solo para calmarse al sentir una suave mano en su hombro.
Maria: Granpapi, por favor -pidió su ex nuera y madre de su nieto, por quien todos los hombres Rivera le tenían una debilidad muy notoria.
Puma: ¡Nunca!... Podría decirte que no, María -respondió solo para que en ese momento la heroína en servicio le quitara el sombrero para guardarlo en una caja fuerte junto a la entrada de la fiesta.
Moon girl: Así me gusta. Por favor todos formen una fila para que se les haga una revisión estándar -dijo con amabilidad- tenemos plena autoridad respecto a la seguridad de la fiesta del té, todos los invitados deben pasar por el chequeo. Si alguno intenta negarse, se las verán con Devil -declaró señalando al dinosaurio que estaba acostado al otro extremo de la entrada.
Quien no hace falta decir que causó varias impresiones en quienes no lo habían notado o lo hicieron y pensaron que era una decoración.
Frida: ¡Qué lindo! -dijo la amiga de Manny que prácticamente se invitó sola al evento, de paso rompiendo el silencio que se había hecho. Además de alegrar al T-Rex que se alegró por el cumplido.
Kim: Vaya, con que este es el famoso Devil del qué Casanova estaba celoso de Moon Girl -dijo mientras se acercaba con los demás invitados recién llegados.
Moon Girl: Escuche sobre eso, una lástima que pierde el tiempo, mi D.D. es único en todo el multiverso -declaró abrazando con cariño a su amigo animal.
Momento en que los que eran provenientes de Hawai notaron al otro guardia, tomándolos por sorpresa. Es verdad que ya sabían que Gantu no era su enemigo más, pero era algo difícil hacerse a la idea.
Lilo: Lo veo y no lo creo. De verdad eres de los buenos ahora, Gantu. Por cierto, me gusta el traje ¿Donde conseguiste uno de tu talla? -pregunto haciendo notar que el alíen vestía un típico traje de seguridad terrestre de su talla.
Gantu: La señorita Rivera, con ayuda del señorito Hamada, ¿Quién diría que tendría semejante talento para el diseño? Si se viste más informal es porque le gusta ir cómodo -explicó de forma casual- en todo caso lo que me sorprende es que lograrás qué el troglodita vistiera de gala, niña -dijo mirando a Stitch que también usaba un atuendo por así decirlo.
Lilo: Stitch sabe cuando hay que verse elegantes -fue todo lo que a la vez que el pequeño experimento azul asintió sonriendo.
Aunque eso fue ignorado por el propio alíen que tras ver a todos con recelo fue que hizo contacto visual con cierta anciana que tuvo el nada grato de conocer en un pasado no muy lejano, basta con decir que solo le bastó verla para tener recuerdos dignos de un estrés post traumático de una guerra, y eso era minimizándolo mucho.
Gantu: Usted... -dijo en un estado de shock teniendo en frente a nadie más que a la matriarca de la familia Proud, Charlette "Suga Mama" Proud. Quien solo sonrió con malicia al haberlo reconocido también.
Suga mama: Hola grandulón ¿listo para el segundo asalto? -pregunto ya tronándose los nudillos, siendo así que su nieta tuvo que llamarle la atención.
Penny: Suga Mama, recuerda que prometiste no ponerte ruda -recordó a la mujer que solo se encogió de hombros divertida.
Y mientras la tensión entre Gantu y Suga Mama se disipaba por la intervención de la nieta, la música en la azotea seguía animando a los invitados. La alegría y los saludos se mezclaban con las risas, haciendo que todos tuvieran curiosidad y ansias de querer entrar.
Dexter: Muy linda convivencia y todo. Pero ¿podemos entrar ya por favor? -preguntó con impaciencia a la vez que la anciana le daba unas palmadas en la cabeza.
Suga Mama: Tranquilo, pequeño, que si alguien debería andar apurada soy yo que ya no soy tan joven, la fiesta no se irá a ninguna parte -mencionó con calma a la vez que las puertas de entrada a la fiesta se abrían, para dejar ver a una persona que tomó por sorpresa a la familia Possible.
Este era otro caso donde no era fácil olvidar viejas enemistades, pero en este caso era particularmente difícil para Kim tomar de forma normal que la persona en frente suyo era una encargada más de la seguridad de la fiesta a la que la invitaron, y no su mayor némesis que hasta hacía un tiempo era una villana muy conocida, Shego.
Shego: ¿Hay algún problema aquí afuera o por que dejaron de entrar los invitados? -pregunto antes de ver a Kim- vaya, si no lo veo no lo creo ¿te invitan a cosas como estas seguido?
Kim: De hecho si, pero no me gustan eventos como los de la alta sociedad, no obstante este parece ser un evento diferente a lo usual... me sorprende verte aquí ¿eres parte de la seguridad?
Shego: ¿Qué te puedo decir? La villanía no es una opción ahora al parecer y cuando el gobierno mantiene en secreto que ayudaste a salvar al mundo, por mucho que tu historial sea borrado las opciones laborales son muy limitadas -dijo con un sarcasmo casual- honestamente puede que me quede aquí de tiempo completo, Rivera Solutions paga bien.
Kim: ¿Entonces tú también estás trabajando aquí? No me lo esperaba... pero supongo que en estos tiempos todo cambia, ¿verdad? -pregunto convenciéndose a sí misma de que debía relajarse.
Shego: Así es. La vida me ha enseñado que a veces hay que adaptarse... No te preocupes, por ahora soy parte de la seguridad, y eso incluye mantener a raya a los que no tienen buenas intenciones -dijo con una seriedad que realmente sorprendió a quienes la conocían. En especial a la pelirroja que asintió lentamente.
Kim: Entiendo. Solo espero que puedas mantener esa actitud cuando lleguen los verdaderos problemas. Nunca se sabe que pueda pasar... -dijo haciendo que la de color verde le sonriera con burla.
Shego: No te preocupes, ¿vale? Soy profesional... Más o menos. -dijo encogiéndose de hombros- además, aquí no hay lugar para villanos que quieran hacer desastres, solo para los invitados que quieren disfrutar de la fiesta -dijo para luego darle la palabra a Moon Girl.
Moon girl: Pues bien, ok... Todo parece estar en orden.
Gantu: Armas confiscadas en la mayor medida posible, todo en orden.
Shego: En tal caso... Sean bienvenidos a la fiesta del té de Rivera Solutions -dijo sonriendo para luego hacerse un paso, dando vía libre a la fiesta.
Cuando todos los recién llegados lograron abrirse paso, no pudieron evitar maravillarse con la vista que tenían ante ellos. Era como haber entrado en un país de las maravillas de repente, como si simplemente hubieran saltado y quedado sumergidos en un mundo escondido entre las páginas de un libro. La decoración consistía en dulces y teteras gigantes que cubrían toda la azotea: pasteles, macarons, paletas, caramelos, tartas, por mencionar algunos. Árboles frutales, rosales, e incluso tazas enormes que se apilaban unas sobre otras, formando cascadas de té, adornaban el lugar. Era una combinación curiosa entre excentricidad y elegancia en todo su esplendor, todo acompañado por la música clásica que aportaba un toque de sofisticación.
Manny, Jim y Tim, Dee Dee, Dexter, Penny y sus hermanos y Lilo: ¡Dulces! -fue lo que dijeron todos los que tenían la bastante juventud física o interna para que los dulces los afecten y hasta los llamara como si de canto de sirena se trataran. Aunque Dee Dee, la hermana mayor de Dexter, presentó problemas por su "disfraz de la morsa" (que en realidad era prácticamente camisa de fuerza dado a que esa niña era demasiado hiperactiva para su propio bien)
Kim: Me dará caries de solo ver esto -dijo en lo que sujetaba con fuerza a Ron y Rufus que iban a saltar de cabeza a las decoraciones.
Mientras ella intentaba mantener a su novio y su mascota alejados de las tentadoras tartas y caramelos, la música seguía llenando el aire, creando una atmósfera mágica y festiva. La variedad de invitados, todos con sus propios motivos, se movían entre las mesas y el cotilleo, disfrutando del momento. Siendo allí que se acercó alguien en particular que vestía un atuendo que a pesar de ser hombre, recordaba al vestido de la protagonista del cuento, Alicia.
Hiro: Sean todos bienvenidos a la fiesta del té. Mi nombre es Hiro Hamada, si tienen alguna duda con gusta la responderé. De momento solo puedo decirles que disfruten mientras esperan que la fiesta empiece. La misma se divide en dos secciones para jóvenes y adultos -dijo señalando que las zonas de aperitivos en efecto difieren entre adultos y menores, por razones notorias como el licor. Aunque fue allí que la familia Possible se llevó otra sorpresa ese día.
Los Possible: ¿Hiro? -preguntaron sorprendidos al chico que se sorprendió de sobremanera al verlos. Antes de decidir actuar y hacerse el desentendido.
Hiro:... ¿Nos conocemos? -pregunto solo para recibir varias miradas y expresiones de "¿es en serio?"- ... Bueno, bueno, no perdía nada con intentarlo, quería verme un poco más profesional -admitió con pena para luego sacar la lengua divertido.
Momento en que Jim y Tim, los hermanos menores de Kim, ya le habían caído encima para abrazarlo.
Lilo: ¿Quién es Kim? -pregunto a la chica al ver la interacción tan amena.
Kim: Chicas, él es Hiro Hamada, su papá era un colega de mi papá -reveló para sorpresa de varios mientras que por su parte el patriarca de esa familia ya estaba saludando al nipón con cariño.
Si, las familias Hamada y Possible ya se conocían de hacía tiempo ya, algo entendible considerando las ramas de trabajo de los patriarcas así como su afinidad para todo lo referente a la ciencia, bien dicen algunos, Dios los hace ellos se juntan.
Dr. Posible: Hiro Hamada, espero que sigas siendo ese prodigio en la robótica que recuerdo.
Hiro: Me defiendo, tío J.T. -respondió antes de ser abrazado por la esposa del hombre.
Dra. Posible: Mírate, estás tan grande, ¿Cómo está tu tía?
Hiro: Puedes preguntarle tú misma, tía Anne -dijo sonriendo- ella está en la cocina, está a cargo del catering.
Dra. Possible: Entonces solo puedo esperar que la comida sea sabrosa -exclamó guiñando un ojo de forma cómplice.
Hiro: Así es. Mi tía puso su mayor esfuerzo, aparte de que recibió ayuda de Kyle, el chef personal de Don Héctor y de una invención nueva, algo llamado experimento 062 -dijo en lo que la hija mayor de los Possible miro a la pequeña hawaiana curiosa.
Kim: ¿Pariente de Stitch? -pregunto recibiendo asentimientos como contestación.
Dr. Possible: En todo caso. Han pasado años desde la última vez que hablamos ¿cómo está Tadashi? -preguntó de forma amena. Sin saber que solo basto con eso para romper todo el ambiente tranquilo así como el buen humor del joven Hamada.
La sonrisa de Hiro se desvaneció por un instante, y una sombra de tristeza cruzó su rostro al escuchar el nombre de Tadashi. La mención de su hermano mayor parecía abrir una herida que aún no cicatriza del todo, es más, para él era un tema tan delicado que siempre que se hacía mención, la herida se sentía fresca como si acabara de ocurrir. Todos los presentes notaron el cambio en su expresión y guardaron silencio, respetando esa pausa incómoda.
Hiro:... Él... ya no está, tía Anne... él... falleció... -exclamó con nada más que tristeza en su sentir. Y no hace falta decir que esa revelación sorprendió a los invitados en diferentes medidas, la gran mayoría sintiendo incomodidad y unos otros malestar y pesar.
Kim: Tadashi... Que... Como fue...
Hiro: Un incendio... No quedó nada que enterrar más que cenizas -dijo para luego dar un resumen de lo que había ocurrido.
Su implicación con la creación de los microbots, la historia de Robert Callaghan así como sus deseos de venganza contra Alistair Krei sin importar el precio, el incendio en la noche de la exhibición anual... y el funeral. Momento en que el chico acabó siendo abrazado y quedándose casi sin aliento por un emocional White Pantera (porque si, al no haber empezado el evento, varios invitados curiosos decidieron prestar atención a la historia, arrepintiéndose conforme más triste se ponía)
White Pantera: ¡Inconcebible! ¡Los profesores existen para guiar a sus alumnos, no para ponerle fin a su futuro! ¡Dime donde esta el tal Callaghan niño, yo mismo lo pondré tras las rejas! -dijo lo que muchos de los invitados pensaban, solo para ser rápidamente apaciguados por el menor.
Hiro: Un poco tarde, señor, los Grandes Héroes se le adelantaron hace meses -respondió haciendo que todos solo asintieron, una lastima, pelear con un villano que lo merece siempre es algo pone de buen humor a cualquiera que se dedica al heroísmo.
Dexter: Yo ya sabía del incidente del incendio en la universidad del ITSF. Fue una tragedia lo que pasó ese día -comentó algo lejos del grupo en lo que se ajustaba sus gafas, igual siendo escuchado.
Sra. McPherson: ¿Tanto así, cariño? -preguntó su madre en lo que el niño asintió.
Dexter: No sólo fue la muerte de un joven prodigio local de San Fransokyo, mamá, también fue el hecho de que el culpable terminó siendo el desarrollador de algunas de las leyes de la robótica y las matemáticas modernas.
Dr. Possible: Escuche del arresto de Callaghan -mencionó con enojo- no lo podía creer... Pero saber que fue por eso...
Dra Posible: ¿Y cómo han estado tu tía y tú, cariño? -preguntó mirando con lástima al chico que solo se encogió de hombros.
Hiro:... Seguimos adelante, es todo lo que puedo decir -dijo ganándose algunas miradas de empatía.
En especial de cierto científico en jefe de robótica solo miraba al chico con pesar a lo lejos, sintiéndose menos que basura por dejar que su hermano y su tía sufrieran su muerte. Así como sentir que su odio por el hombre que una vez fue su mentor solo creció más.
Pero de momento no había mucho que podía hacer, a fin de cuentas el reloj ya había marcado las doce en punto... la función estaba a punto de comenzar. Y el como todas las pantallas en la ciudad pasaron a transmitir el evento se lo confirmó.
____________________________________________________________________________
(Entrada de Rivera Solutions)
Tic, tac, tic, tac, tic, tac, tic, tac. El reloj llegó a la hora esperada, era hora de comenzar. Tazas de té, dulces volando en todas direcciones, ya era de comenzar. Siendo lo que apareció en las pantallas la silueta de un Héctor bailando con una tetera y una taza de té para que luego se mostraran flores en la iris de su ojos cantando en coro que ya empezó ¡era la hora de la fiesta del té!
Momento en que las cámaras procedieron a grabar en vivo como un carruaje de gran tamaño se abría paso por las calles de la ciudad siendo jalado por nada más que lo que parecía ser un perro de la raza Pug iba a toda velocidad, con el detalle de que este perro era de más de dos metros de alto, todo un cachorro hiperactivo al que todos los presentes esperaban que se apurara porque ya iba atrasado para llegar al edificio de la empresa.
Donde una multitud, acompañada por los medios de comunicación, ya se encontraba en el lugar para observar a los famosos invitados VIP, así como a algunas personas importantes que ya estaban en la fiesta y querían saber quiénes eran esos destacados invitados.
Bluff: Aquí Bluff Dunder. En la sede de la antigua empresa conocida como Krei Tech. Actualmente renombrada como Rivera Solutions donde una de las fiestas más grandes del año al parecer está a punto de dar lugar -dijo hablando a la cámara, donde se veía de fondo como la pareja de los Frederickson saludaba de forma amable a la familia Mole que los tenían haciendo fila entre la gente de clase media mientras ellos ingresaban al edificio para ir a la fiesta.
Si, se nota quienes tenían mejor relación con la empresa.
Wasabi: Hay que reconocerlo -dijo desde el público en compañía de sus amigas- cuando Don Héctor hace algo, lo hace en grande. Mira que invitar a toda la alta clase de la ciudad y encima considerarlos invitados normales ¿Quiénes serán los V. I. P?
Go Go: Sólo me imagino quién no -mencionó divertida al ver como el antiguo CEO de la empresa, Krei, queriendo entrar, acabó siendo tacleado por los robots de seguridad.
Siendo justo en ese momento que el perro hizo acto de aparición, deteniéndose en el lugar correcto donde comenzaba la alfombra roja que llevaba al edificio. Quedando todos expectantes por ver quienes serían los famosos invitados importantes que estaban incluso por encima de la realeza o magnates como Tony Stark a los ojos de Héctor.
Y fue en ese instante que la puerta del transporte se abrió.
Bluff: Y aquí están. Los invitados misteriosos han llegado. El momento que todos estábamos esperando -dijo para luego emocionarse conforme las personas bajaban del carruaje- no puedo creerlo... ¡Es el "Dios de la Fortuna", Eddy Skipper McGee, dueño del grupo triple D! Viene acompañado de su mano derecha, Eddward Marion Brighton, y su guardaespaldas, Edward Horace O'Leary
Lobo de Wall Street, "Rey de los usureros", Eddy.
Bluff: Y detrás de él... ¿Es quién creo que es? La madre del magnate caído en desgracia, la "reina de la robótica moderna" Lolo Krei! -exclamó haciendo que su hijo que estaba entre los espectadores se escondiera en un basurero sintiendo el sabor de bilis en su boca, ni loco dejaría que su mamá lo viera así.
"Reina del mundo de la robótica", Lolo Krei.
Bluff: Y quien les sigue... Está parece ser una reunión de genios ¿es una promoción al nobel?. Ese es Cornelius Robinson. ¡El "genio del mañana" dueño de Industrias Robinson, empresa en boca de todos los últimos meses! Viene con su encantadora esposa Franny, y su hijo Wilbur -presentó a la familia mientras que el científico rubio saludo apenado a todos.
"El hombre que camina hacia el futuro", Cornelius.
Bluff: Y continuando con esta galería de celebridades está el presidente de la multinacional FlemmCo S. A. Conrad Fleem -presentó al caballero que conforme pasaba , como era usual siempre que aparecía en público, varias cosas proceden a cubrirse el rostro conforme pasa, salvo su bigote. Solo escuchando comentarios de su agradable rostro, su sonrisa confiable, el color de sus ojos o lo bien que le lucía su bigote.
"Grandes Negocios", Conrad.
Bluff: Y también... Miren nada más. Una leyenda del mundo de los negocios en persona, Senior Senior, Senior -dijo en lo que el anciano avanzaba sonriendo de forma cordial a las cámaras- acompañado de su no tan brillante hijo, Senior Senior, Junior -mencionó haciendo que este hiciera un puchero por el comentario.
Lobo de Wall Street, "el caballero", Senior Senior.
Bluff: Y de último y no menos importante una persona que se puede decir que es la voz de los jóvenes del mundo. El fundador de "niños del mundo" y presidente de la Federación internacional de la recientemente creada copa mundial de fútbol callejero, ¡Luis Ornando!
"Angel de los jóvenes", Fede.
El ambiente se volvía aún más vibrante con la llegada de estos personajes de renombre, eso era un hecho. La multitud se agolpaba para captar cada instante de la entrada de los invitados VIP, mientras las cámaras capturaban sus movimientos y expresiones. El murmullo de las conversaciones se mezclaba con la música suave que resonaba en el fondo, creando una atmósfera de glamour y misterio.
Eddy: ¿Por qué te invitaron, Robinson? -pregunto conforme avanzaban con el ceño fruncido, ganándose una risa burlona de la única mujer del grupo de invitados V.I.P
Lolo: Eres tan pequeño de mente como siempre, detente por favor -sugirió en lo que saludaba a la gente ganándose varios gestos de admiración- ¿Que tiene de malo que un inventor venga a una fiesta como esta? Pensé que tú mejor que nadie lo sabría, Edward, tu mano derecha es inventor, ¿No?
Cornelius: Jejejeje -fue lo que respondió mirando al amante del dinero sin inmutarse- está molesto porque no soy de motivaciones dudosas como él ¿no es así, Eddy? Que sepas que no tendré a nadie hablando pestes de mí hoy -dijo en lo que ambos se retaban con la mirada.
Lo que provocó que grandes negocios se metiera entre ellos para evitar una discusión. Frente a las cámaras deben mostrar profesionalidad, era un principio básico sobre cómo lidiar con los medios de comunicación. Si tenían diferencias o cosas que discutir, que lo hicieran en privado.
Conrad: Yo por mi parte diré que estoy muy feliz de haber sido invitado -exclamó saludando a todos los presentes, atrayendo la atención a su persona- Rivera Solutions al parecer tiene algo especial para nosotros, estoy intrigado ¡será un gran trato! Podría ser una gran noticia para los medios.
Senior: Pero el asunto está en que por el bajo mundo ya se corrió el rumor de las intenciones de esta reunión -mencionó con calma- es historia vieja para mi ya.
Fede: Entonces no hace falta mostrarse sorprendidos cuando empiecen las negociaciones ¿no es así? -pregunto casual- no hace falta hacer escándalo por noticia vieja.
Lolo: Aunque apreciaría, Senior, querido, que no hables con tanto orgullo de tu incursión en el bajo mundo -pidió al anciano que solo rió con diversión en respuesta.
En el momento en que todos se acercaban a las puertas del edificio, todos se dieron cuenta de que había una persona esperándolos al pie de la entrada, realizando una reverencia que fue bien recibida por varios de los invitados.
Judy: Honorables invitados V. I. P. del señor Rivera, sean bienvenidos.
Conrad: Oh, Judy. Querida -saludo a la mujer, ya conociéndola de antes debido a que había tenido el nada grato placer de convivir con Krei en el pasado.
Judy: Siempre un gusto, señor Fleem, se ve muy bien -dijo con amabilidad- estimados invitados. Si caminan por todo el edificio puede que lleguen un poco tarde a la fiesta. ¿Les gustaría que los lleve allí? -pregunto antes de solo chasquear los dedos.
La cual era la señal para que otro de los asistentes de la fiesta, un ex criminal y héroe local de la ciudad, Pegajoso, hiciera uso de sus habilidades. De ese modo fue que todos se maravillaron cuando aparentemente de la nada, comenzó a formarse una escalera de caramelo que comenzó a hacer todo un recorrido extravagante por todo el edificio, llegando hasta la azotea del mismo.
Judy: Por favor suban a la escalera de caramelo, el señor Rivera no es alguien a quien le gusten los retrasos en las fiestas -dijo señalando la arquitectura recién construida que encima era móvil como si de una escalera eléctrica se tratara.
Eddy: Es fantástico.
Conrad: Una verdadera obra de arte.
Cornelius: Y miren. Las escaleras se mueven como si fueran las de un centro comercial -dijo en lo que todos ya estaban camino a la fiesta en el dulce transporte.
Judy: Gracias por los halagos, seguro el señor Pegajoso lo agradece. Nos veremos arriba -dijo para acto seguido entregar algunas paletas a niños del público- adelante, tomenlas. Esperen tres minutos y pueden comerse la escalera de caramelo si quieren también -dijo para alegría de los más pequeños.
Mientras los invitados comenzaban a subir por la escalera de caramelo, la multitud en la calle observaba con asombro cómo esa estructura mágica se elevaba lentamente, reflejando los destellos de las cámaras y las luces del lugar. La música se intensificó desde el techo del lugar, y en el interior del edificio, un ambiente de lujo y misterio se apoderaba del ambiente.
Wasabi: Menuda presentación... Y al parecer la fiesta será en la azotea -dijo mirando al cielo- yo pensé que sería dentro.
Go Go: Por otro lado. Parece que Rivera Solutions busca ganarse el favor del público general también -mencionó en lo que observaba a Fred buscando conseguir algunos de los dulces que el personal estaba regalando a la gente.
Fred: Hasta envidio a Hiro de que será de sus meseros -dijo acercándose a sus amigos, a la vez que estos se le quedaron viendo extrañados- ... ¿qué?
Wasabi: ... ¿Qué haces aquí Fred? ¿No deberías estar con tu mamá allá arriba? -pregunto debido a que si el señor y la señora Frederickson fueron invitados y ya estaban en la fiesta, Fred también debe estar allí por ser su hijo.
Cosa que el propio amante de los cómics recordó de repente ya que se le había olvidado.
Fred: ... ¡Pegajoso, lánzame hacia arriba! -pidió al hombre mutado que se encontraba haciendo dulces para la gente.
El cual solo lo miro extrañado para luego encogerse de hombros y cumplir con esa petición.
Haciendo a todos los que no lo conocían sorprenderse por las ocurrencias del joven. Mientras que por su parte, ya los invitados V.I.P habían llegado a la fiesta, maravillándome con todo el decorado así como la gran variedad de invitados.
Rosa: Al final llegaron los invitados más importantes. Soy Rosa Rivera para quienes no me conocen, encantada -dijo recibiendo al grupo haciendo reverencia- ¿Les gustaría una bebida de bienvenida? Gracias a una de las invenciones más recientes de nuestros ingenieros y científicos. Tenemos una máquina que hace bebidas con sabores poco comunes. Las opciones de hoy para el sabor del vino son: lava del volcán Kilauea de Hawaii, rosas del palacio de Buckingham de Inglaterra y anaconda del río del Amazonas -dijo sorprendiendo a todos con opciones tan exóticas mostradas en exhibición para ser elegidas.
Conrad: Tomaré una copa de anaconda, si no es molestia.
Lolo: Yo también -pidió para que luego la máquina fuera puesta en marcha y se les sirviera las bebidas tanto a ellos como a los demás como cortesía- muy refrescante he de decir aunque con un leve amargor que era de esperarse.
Senior: Ah, espumoso y suave. Se siente como estar en los jardines de su majestad -dijo tomando el vino de Rosas con Fede estando de acuerdo.
Cornelius: Y a estar vacacionando en alguna de las islas del archipiélago mirando al volcán en todo su esplendor -mencionó también degustando su bebida- debo conocer a quien invento esto. Este aparato es impresionante.
Rosa: Lo mismo dijo el señor Richards, tiene suerte, justo el jefe de inventores viene para acá, él podría facilitarle la información -dijo señalando al hombre cubierto por completo de ropa- estimados invitados, les presente al director del departamento de robótica e inventiva de nuestra empresa, Hollow -presentó al mencionado.
Quien solo se presentó de forma silenciosa antes de asentir y seguir su camino. Dejando sin palabras a los recién llegados.
Eddy: No muy conversador por lo que veo -comentó mientras los otros dos Eds asienten mostrando estar de acuerdo.
Rosa: Es algo tímido -fue todo lo que pudo decir- en todo. Esperamos que disfruten la fiesta. La cual debe empezar en cualquier...
Y como ángel caído del cielo, o en este caso como bobo caído de las nubes por mano propia, Fred había hecho acto de aparición, aterrizando dentro de uno de los pasteles decorativos, captando la atención de todos en lo que Devil ayudaba al chico a salir de la crema y la nata (porque sí, más que decoración eran dulces reales).
Sra. Frederickson: Ay, querido, olvidaste que venías a acompañarnos a tu padre y a mi, ¿Verdad? -preguntó con pena en lo que el anciano que era su marido solo rio divertido por las ocurrencias de su hijo.
Fred:... Perdón mamá, me quedé abajo viendo todo el teatro que olvidé que debía subir con ustedes -dijo antes de ser limpiado de un lametazo por parte del T-Rex- gracias grandote.
Pero antes de que algún cotilleo o comentario se hiciera o alguna conversación volviera a ser retomada, fue que se escucharon los sonidos de una campana como la del reloj del big ben. A la vez que todas las miradas estaban puestas en una cabaña que pensaban que era igual solo decoración arriba de unos soportes, haciendo que para llegar se debían subir o bajar cuarenta escalones.
¿Y quien estaba allí cuando la puerta de dicha casa se abrió sin más? Nada más que el anfitrión de la fiesta vestido con un atuendo digno del sombrerero loco.
Héctor: Es la hora de la fiesta del té -dijo a la vez explotaban bazucas de confeti y comenzaban a salir globos de todos lados- ¡Todo el mundo! ¡Gracias por venir hasta aquí! -exclamó feliz mientras bajaba las escaleras solo para dar un salto y aterrizar en media fiesta- ¡Donde quiera que miren, todo lo que verán son dulces! ¡Adelante! ¡Coman! ¡Beban! ¡Y disfruten de todo lo que pasará hoy aquí!
La multitud estalló en vítores y aplausos, emocionada por la energética entrada original de Héctor y la celebración que había comenzado. Los invitados se lanzaron a la fiesta con entusiasmo, explorando las mesas repletas de dulces y bebidas exóticas, mientras la música aumentaba su ritmo, invitando a bailar.
Ya era un hecho, la fiesta había comenzado.
Notes:
Y ese es el capitulo de esta vez. Como siempre pueden votar, comentar, lo que gusten.
¿Y que les pareció?
De momento apenas se esta calentando la cosa, solo eso diré.
Nos vemos luego.
Chapter 29: Capítulo 26: Fiesta del té (2/3)
Notes:
(See the end of the chapter for notes.)
Chapter Text
(General Pov)
(Puente Torii Gate, San Fransokyo)
Hora de una recapitulación y aclaración en una clase de geografía. Gracias a la reciente independencia del condado y la ciudad de San Fransokyo, se han acordado nuevos límites fronterizos y el territorio que pertenece a la nueva nación. Esta decisión ha generado molestias entre algunos altos mandos del gobierno (principalmente por temor a que el estado de Texas busque hacer lo mismo), pero no obstante, prefieren mantenerse en silencio para evitar que salgan a la luz ciertos secretos.
El territorio incluye toda la ciudad de San Fransokyo y la mitad del condado de San Mateo, ya que en esta zona predominan las comunidades que en realidad corresponden a San Fransokyo, abarcando así la mitad de la península. Al norte del puente, el Parque Nacional y el bosque Muirahara también pasó a ser propiedad de la nueva nación. Además, la mayor parte de la bahía de San Fransokyo, así como el acceso al Océano Pacífico y las aguas territoriales, que generalmente se extienden hasta 12 millas náuticas (unos 22,2 kilómetros), también quedaron bajo su control.
En cuanto a las fronteras marítimas, el acceso por mar está restringido y casi prohibido. El parque nacional es un área protegida cuya entrada está vedada para personas de fuera del país. En el sur, el límite de ingreso terrestre se encuentra en el norte de San Mateo. La única vía de acceso terrestre aparte de esa es el puente Torii Gate (el puente de la bahía fue clausurado cuando se levantaron las barreras para aislar el país). Siendo en este último lugar donde cierto suceso estaba ocurriendo.
Comandante Delta: Alto, entreguen sus armas e identifíquense, han invadido el territorio de la nación de San Fransokyo -declaró con un rifle en mano con todo un pelotón de unidades iguales a él para encargarse de algunos invasores.
Como se podía observar, la situación estaba siendo atendida por las nuevas fuerzas fronterizas y judiciales de la nación emergente, creadas por la división de Rivera Robotics. Estas unidades fueron algunas de las primeras obras del científico en jefe de ese departamento en lo que respecta a fines militares, Hollow, quien creía firmemente en la filosofía de "combatir fuego con fuego". Así nació la fuerza de ataque C.R.A. (Comando Robótico-Humano Antiterrorismo), integrada por varias unidades, entre ellas las Delta, cuyo comandante destacaba por su amplio rango de funciones en combate y defensa.
¿Y quiénes representaban la amenaza en concreto? Se trataba de un grupo de mutantes autodenominados la Hermandad de Mutantes. Ellos justificaban sus acciones alegando que buscaban rescatar a una espía que habían enviado previamente para infiltrarse en el país, con el objetivo de destruirlo.
El líder de este grupo era conocido por su fuerte aversión a los humanos, y creía que la supuesta ayuda de la nación a los mutantes era solo una fachada para atraerlos y, posteriormente, exterminarlos. La realidad era mucho más compleja y menos alarmante de lo que ellos pensaban, pero la paranoia y el odio alimentaban esas creencias.
Magneto: Pues bueno, verás... A mi no me preocupan los territorios o las naciones, en especial de simples humanos... Hemos venido por una colega nuestra, si saben lo que les conviene la entregarán de inmediato -ordenó el mutando de clase Omega sin mucho ánimo para dialogar con nadie, solo siendo cortés en dar una oportunidad de rendición, sabiendo la respuesta a eso.
Comandante Delta: ¿Colega? -pregunto antes de revisar sus datos- la mutante Mystique entró ilegalmente al territorio del país y fue puesta bajo custodia. A menos que tengan papeles de ingreso y de vivienda, pase de visitantes o una invitación a la fiesta del té, su acceso es denegado -respondió para enojo del mutante.
Magneto: No tengo interés en nada de esto, si no quieren obedecer, tendré que quitarlos.
Comandante Delta: Última advertencia, den media vuelta o entreguen sus armas e identificación -ordenó a la vez que las unidades se habían colocado en posición, listos para disparar.
Magneto:... Mala elección -declaró ya extendiendo su mano para apartar el estorbo que tenía delante, pan comido para alguien con el poder del magnetismo y la habilidad de generar y controlar campos magnéticos mentales.
O lo sería de no ser porque justo en ese momento comenzó a toser de una forma repentina y algo exagerada para sorpresa y hasta preocupación de los miembros de la hermandad, especialmente sus dos hijos, Wanda y Pietro Maximoff, en especial cuando notaron que conforme más trataba de usar sus poderes, peor se ponía.
Sapo: ¿Todo bien, jefe? -preguntó uno de los subordinados solo para ver como su todopoderoso líder caía de rodillas a la vez que le salían ronchas.
Además de toser, le habían comenzado a salir granos morados, mal olor de pies, hinchazón del ojo derecho y eructos incontrolables que parecían al borde del vómito. ¿Qué sucedió? ¿Un virus? ¿Alguna especie de arma biológica? La verdadera respuesta era algo mucho más simple y microscópico, nada como el genio de un científico maligno del espacio exterior.
Comandante Delta: Se le advirtió, juicio portátil integrado activado, ¡Modo Juicio! -exclamó para que en ese momento para sorpresa de los jóvenes que solo vieron como el anciano terminó en una tarjeta al ser declarado culpable de ser inmigrante ilegal de forma automática- Sujeto: Erik Magnus Lehnsherr, alias Magneto, mutante de clase Omega, puesto en custodia con éxito. El Plan de contingencia con experimentó 222, Poxy, ejecutado con éxito.
Wanda: ¿Qué es lo que...? -fue todo lo que salió de su boca aun sorprendida de lo que paso antes de retroceder cuando los robots dieron un paso al frente.
Comandante Delta: Estrategia de diálogo, fallida. Número de enemigos detectados: 5. Captura inmediata -ordenó preparado para el combate así como la detención y captura de los sospechosos.
Momento en que ocurrió algo que tomó a los chicos rebeldes por sorpresa al ser un ataque que vino del cielo de todos los lugares. Más específicamente, una maniobra ejecutada por otra de las unidades de C.R.A. la defensa aérea de dentro de los límites de la ciudad-estado, los Bonsai Bombers, quienes sin perder el tiempo dispararon los collares inhibidores a todos los miembros de la hermandad sin ningún problema.
Pero lo que sorprendió a todos, sin embargo, fue que el más fuerte físicamente, apodado Blob, decidió enfrentarse directamente a las unidades Delta. Sin comprender qué estaba sucediendo, se lanzó al ataque, solo para terminar inconsciente tras ser golpeado con una descarga eléctrica, sus poderes estaban oficialmente fuera de servicio.
Pietro:... Yo me voy -declaró buscando huir solo para tropezar tras percatarse de que se estaba moviendo a paso normal- ¿Qué está pasando? Nuestros poderes...
Comandante Delta: Enemigos de la nación de San Fransokyo, se les ordenó rendirse para su debido procesamiento. En caso de oponerse estamos autorizados para el uso de la violencia moderada y la contención -exclamó para que en respuesta los chicos levantaran las manos a regañadientes.
Una cosa era segura, las unidades de defensa habían probado ser efectivas ante las cámaras que estaban grabando todo el incidente para la gente del país y los invitados de la fiesta. Siendo solo una de tantas cosas que la empresa tenía por mostrar.
____________________________________________________________________
(Entrada del edificio principal, Rivera Solutions)
Richardson: ¡Abran la puerta! -exclamó molesto luego de que "sutilmente", la seguridad del evento se ocupará de prohibirle el acceso al evento junto al resto de su familia.
Era comprensible, considerando sus antecedentes, que no fuera bien visto por buena parte de la ciudad. Esto se debía a sus acciones durante el día como alcalde, cuando se alió con villanos y causó un desastre, para luego perdonarse a sí mismo todos los posibles cargos. Además, su relación familiar con la familia Frederickson, que ya estaba en la fiesta, sumaba tensión, sin mencionar la fuerte animadversión que el propio CEO de Rivera Solutions sentía hacia el niño. En definitiva, estaba claro que no iba a ser admitido.
Shego: ... ¿Y tú qué haces aquí, Mole? Tú no estás invitado -fue todo lo que dijo la jefa de seguridad quien llegó para ver el motivo de todo el alboroto, ya siendo instruida de que hacer con esta familia en particular.
Richardson: Espera ¿que? -pregunto extrañado- la invitación decía que toda la familia Mole estaba invitada -dijo con dicho papel en mano que le fue arrebatado por la mujer de cabello negro- ¡Oye!
Rosa: No, Richardson. La invitación dice que toda la familia Mole está invitada... "a mantenerse lo más humanamente posible alejada de la fiesta, en especial a Richardson Mole, a quien no queremos arruinando la imagen de la fiesta luego del fiasco del alcalde por un día" -explicó señalando una parte de la nota que incluso estaba en negrita y subrayada.
Richardson: ¡Que? ¡Pero, mamá! -se quejó con la matriarca de la familia Beverly Samantha Mole (alias Binky), quien solo apartó la mirada con pena tanto por su hijo como por su situación actual.
Beverly: Lo siento, querido. De hecho hice un trato con la señorita Rosa para que el resto de la familia asistiera si tu no venias. Confiaba qué la pasarías en tu tienda de cómics -dijo claramente disgustada con el actual desenlace de que justo ese día a su hijo se le ocurriera acompañarlos a un evento social.
Solo deseaba que la seguridad no se diera cuenta, pero tristemente para ella no fue el caso.
Shego: Y de hecho, señora Mole, quisiera que me explicara qué hace su hijo aquí si se supone que usted sabía que él no está invitado, no quisiéramos el señor Rivera y la señorita Rosa pensaran que se creyó en posición de pasarse de largo su petición y decidió traerlo igual -dijo haciendo que la mujer se tensara.
Beverly:... Debió venir por su cuenta. Ya saben como son los niños -trato de explicar a la vez que la mujer de seguridad observaba a Beverly con una mezcla de desaprobación y cierta incredulidad.
Shego: Señora Mole, entiendo su preocupación, pero la política del evento es clara. La seguridad debe mantener la orden y garantizar que solo los invitados autorizados ingresen. Si su hijo no está en la lista, lamentablemente no puede pasar -explicó para luego chasquear los dedos.
Haciendo aparecer varias unidades de las ya conocidas unidades de seguridad privada, los Buddy Guardias, que ya habían rodeado a la familia para disgusto del más joven de ellos. Solo faltaban los grandes héroes para completar la seguridad, pero no fueron invitados para no molestarlos, alguien tenía que patrullar la ciudad al fin y al cabo.
Richardson: Vamos, vamos, aquí todos somos amigos -dijo tenso antes de fruncir el ceño- ¿Héctor Rivera ya está en la fiesta, no? ¡Somos la familia Mole, una de las familias aristocráticas más poderosas e importantes de la ciudad! ¡País aislado o no seguimos siendo de la elite! ¡Así que abran esa puerta!
Comportamiento ante el cual Shego frunció el ceño, manteniendo las manos en su cintura aguantando activar sus poderes, mientras observaba con una mezcla de incredulidad y desaprobación a Richardson Mole. La tensión era notoria, y la multitud que se había congregado en los alrededores del edificio principal comenzaba a notar el altercado, susurros y miradas de curiosidad recorriendo la calle.
Pero el remate fue cuando de repente el chico solo hizo lo que parecía ser una señal con la mano, momento en que de la nada, tres mercenarios salieron de sus escondites en los alrededores para acto seguido destruir a los robots de seguridad para satisfacción del menor y la consternación del resto de la familia. Dicho grupo era uno ya conocido, los Mad Jacks, un grupo de mercenarios de alta tecnología con una forma de operar peculiar y extrema.
Cosa que no impresionó para nada a la ex villana, ella ya había visto gente así antes y no le parecían la gran cosa en lo absoluto.
Richardson: Ahora si, o nos dejas pasar o no nos quedará de otra que abrirnos paso por la fuerza ¡nadie me dice que no!
Jack: Yo escucharía lo que dice -dijo el líder del trío cruzado de brazos- nos pagó muy bien para ser sus guardaespaldas hoy. Y no importa qué misión sea ¡Los Mad Jacks la llevaremos al límite! -se jacto solo para ver a la chica suspirar con fastidio.
Shego: Ustedes no merecen mi tiempo, no están a mi nivel, el solo prestarles atención seria darles mucho de mí -dijo antes de tomar asiento en una silla y comenzar a limar sus uñas- ustedes encárguense de esto, chicas -fue todo lo que dijo antes de que las puertas del edificio se abrieron, revelando la figura de tres mujeres.
Las tres vestían con un estilo punk que recordaba al de una geisha, compartiendo prendas similares a kimonos, con maquillaje llamativo y peinados con moños negros adornados con palillos de pelo salientes, además de horquillas con formas de versos.
Lo que más destacaba en ellas era que usaban patines, cada una con un color y un arma distintiva: la verde llevaba un paraguas, la azul utilizaba abanicos, y la más audaz de las tres, la roja, portaba una bola con cadena y pinchos. Ellas eran conocidas como las Fujitas, una banda de criminales de élite un tiempo atrás, pero ahora se han convertido en un grupo de élite en el campo de los mercenarios y la seguridad privada.
Las tres mujeres se deslizaron con gracia y rapidez hacia los Mad Jacks, con sus armas listas y una actitud desafiante. La más alta de las tres, la Fujita Verde, con su paraguas abierto, apuntó directamente a los Mad Jacks.
Fujita Verde: ¡Vamos! ¿En serio creen que pueden con nosotras? Esto no es una película de acción barata -declaró con burla para luego cerrar su paraguas a la vez que se abría la punta de este, revelando ser en parte un rifle de energía, con el cual comenzó a lanzar una ráfaga de disparos hacia los mercenarios, que tuvieron que esquivar rápidamente.
Jack: ¡¿Qué demonios es esto?! -declaró con incredulidad al ver como las tres comenzaron a moverse por toda el área como si fuera una pista de patinaje.
Por su parte, Jack intentó coordinar a sus compañeros, pero la velocidad y coordinación de las Fujitas era abrumadora. La Fujita roja, la más audaz, giró en su patín y lanzó su bola con cadena en un movimiento circular, atrapando a Jaq, la mujer del grupo y lanzándola contra un camión cercano.
Fujita Roja: ¿Eso es todo? ¡Pensé que serían más duros! -dijo con diversión antes de esconderse detrás de su compañera de kimono verde que usaba su paraguas como un escudo para amortiguar los disparos de las armas del enemigo.
Los Mad Jacks, enfurecidos, activaron sus propios dispositivos de alta tecnología, disparando láseres y misiles en un intento de acabar con las mujeres. Pero las Fujitas, con movimientos acrobáticos, esquivaron y contraatacaron, usando sus patines para deslizarse y generar ataques rápidos e impredecibles. Uno de los mercenarios, Jack (el que de verdad se llama así porque el líder se llama Greg realmente) logró acercarse a la Fujita azul con un arma de plasma, pero ella, con un giro en su patín, le lanzó uno de sus abanicos afilados, atravesando el arma y dejándolo atónito.
Fujita Azul: ¿Eso fue todo? ¡no me subestimes! -dijo antes de patear al hombre donde más le duele a los hombres, dejándolo de rodillas.
La pelea se tornó en una danza frenética de movimientos rápidos, armas y acrobacias. La habilidad de las Fujitas en el combate cuerpo a cuerpo y su rapidez superaron con creces la fuerza bruta de los Mad Jacks, quienes empezaban a retroceder, frustrados. Hasta que finalmente, la Fujita roja dio un salto impactante, lanzando su bola con cadena para envolver a varios mercenarios y derribarlos en una sola maniobra.
Fujita Roja: Conozcan su lugar y sus limitaciones, perdedores -fue todo lo que dijo terminada la pelea, pisando como si de un insecto se tratara al líder de los Mad Jacks que solo soltó un gemido de dolor.
Jack (Greg): ... Wow, eso fue frío -exclamó mientras que por su parte Richardson no pudo evitar comenzar un berrinche.
Richardson: ¡No es justo! ¿De dónde saca Rivera a toda esta gente? ¡Deberían trabajar para mí! -Reclamo para diversión de las mercenarias.
Fujita Verde: Por favor, como si fuéramos como estos payasos.
Fujita Azul: Nosotras sí somos profesionales, y tenemos dignidad.
Jaq:... Es un hecho -dijo la chica tras quedarse pensando- no servimos para esto ¿Estamos de acuerdo en que hay que aceptar ese trabajo de ser presentadores de aquel programa infantil?
Jack: Sería lo mejor -dijo para que acto seguidos los tres solo se dieran media vuelta y salieron huyendo. Dejando solo al menor de la familia Mole.
Esto debido a que para cuando el chico se dio cuenta, su familia ya hacía tiempo que se había marchado para no verse involucrados de ningún modo en el incidente que acaba de ocurrir. Pero no antes de que su madre le dejara un mensaje en su teléfono de que iba a ver lo que le esperaba cuando volviera a casa.
Shego: Entonces Richardson...-dijo luego de haber terminado de limar sus uñas- ¿te irás por las buenas o quieres ser el siguiente a quien le pateen el trasero?
Richardson, todavía con el ceño fruncido y la mandíbula apretada, se quedó quieto unos segundos, evaluando la situación. Para acto seguido solo levantar las manos... y acto seguido dar media vuelta y salir huyendo.
Si, por si no quedó claro, la seguridad del evento estaba más que asegurada.
______________________________________________________
(Fiesta del té, azotea de Rivera Solutions)
Franny: ¿A dónde crees que vas, jovencito? -pregunto agarrando a su hijo de la camisa para fastidio de este.
Wilbur: ¡Pero mamá! ¡Ya oíste al anfitrión, comer y beber lo que queramos!
Rosa: Excepto si tienen menos de dieciocho -aclaró rápidamente con un micrófono la sobrina del CEO luego de escuchar la queja del joven- los bocadillos para jóvenes están para allá, te vigilo, Wilbur -dijo en lo que el joven hizo puchero mientras se comía unos dulces.
Antes de ser rápidamente consentido por su madre haciéndolo pasar una vergüenza que le dio risa a algunos invitados. Así eran las madres en casi cualquier parte.
A su vez, se podía percibir cómo las interacciones entre los invitados transcurrían de manera armoniosa, pasando de momentos elegantes a conversaciones amistosas y amenas, con algunas excepciones (como observar el cómo La Mole competía en vencidas con Hulk, quien había aparecido sin aviso previo, o la familia Magnuson siendo revivida tras perder la consciencia de la emoción al ver al dios del trueno asgardiano en persona) creando así un ambiente cálido y acogedor.
Las conversaciones fluían con naturalidad mientras los invitados disfrutaban de una variedad de tés aromáticos y delicados bocadillos. Se intercambiaban cumplidos sobre la presentación de la mesa, las tazas y la selección de sabores, fomentando un clima de cortesía y aprecio mutuo (o al menos, eso intentaban los menos habituados a ese tipo de entorno). La disposición de las sillas en círculos o en pequeños grupos facilitaba diálogos cercanos, permitiendo que las conversaciones fueran íntimas y agradables entre distintos conjuntos. En resumen, hasta ese momento, la fiesta transcurría de manera exitosa, y que apenas estaba empezando.
Lolo: No lo creo. Grace, ¿eres tú? -pregunto mirando a la rectora del ITSF que estaba a medio comer una dona- que agradable sorpresa encontrarte aquí de todos los lugares.
Granville: Digamos que el señor Rivera y yo hemos tenido nuestros encuentros -fue lo que dijo antes de tomar una taza de té con calma.
Lolo: Aparte de que eres la rectora actual del instituto tecnológico de San Fransokyo. Eso te da algo de renombre, querida amiga -mencionó tomando asiento junto a ella- y debo decirlo, querida, robas el aliento vestida como la Reina de Corazones.
Grandville: No tanto como tú vestida de la reina blanca -respondió de forma cortés- me sorprende que estés aquí, es decir, ya sabes, tomando en cuenta que esta solía ser la compañía de tu hijo -mencionó en lo que ella solo resoplo con algo de molestia.
Lolo: Lo que le pasó a Alistair fue porque mordió más de lo que podía masticar, muchas tontas decisiones y al final una lo alcanzó -aclaró mientras tomaba una copa de vino- desde que compro ese estúpido yate sabía que estaba desperdiciando dinero y tomando malas decisiones. No... Eso fue desde la tragedia en la isla Akuma. La única razón por la que no fue a prisión luego del primer fracaso del experimento fue porque yo metí mano -admitió casual.
Siendo allí donde ambas voltearon al escuchar algunas exclamaciones de sorpresa, las cuales se debían a que cerca de allí en una de las mesas de aperitivos un molesto Hiro Hamada de la nada había doblado uno de los cubiertos por inercia al escuchar lo que la matriarca Krei tenía que decir.
Hiro: Me disculparán, iré a la cocina por otra cuchara -se excusó antes de solo perderse de vista bajo la mirada atenta de varias personas.
En particular de un disgustado Hollow que, por su parte, solo agacho la mirada mientras que dentro de su disfraz, la persona allí adentro no podía evitar sentirse mal por ese joven que a fin de cuentas, era su hermano menor... que cosas, tan cerca y tan lejos al mismo tiempo.
Lolo: ¿Y ese chico? -pregunto arqueando una ceja.
Granville: Hiro Hamada, uno de los estudiantes más jóvenes en el ITSF, empleado a tiempo parcial de ahora Rivera Solutions y... -se cortó un momento para suspirar con pesadez- hermano del chico que murió en el incendio que Callaghan ocasionó en su búsqueda de venganza contra tu hijo -reveló para incomodidad de la rubia.
Lolo: Oh... Ya veo... Parece que escuchar del tema le sigue afectando.
Cornelius: Y disculpa que me entrometa, Lolo -dijo acercándose junto con su esposa- pero creo que lo insultaste al confesar que por ti, Alistair no fue preso por lo que hizo, tal vez así Callaghan se hubiera dado por servido y...
Lolo: Su hermano seguiría vivo, lo se... -admitió suspirando con cierta tristeza- ¿Eran unidos?
Grace: No se mucho. Pero a lo que tengo entendido si -respondió para que en ese momento una nueva persona se metiera en la conversación.
La manager y mejor amiga de la superheroína en ciernes, Moon Girl, estaba allí porque esa era la condición que había convencido a la joven de aceptar unirse al personal de seguridad durante el evento: que su amiga también fuera invitada (esto sin mencionar que Casey le suplicó con todas sus fuerzas que la llevara, sin importar nada más) cosa que acepto al final porque hacía todo por su mejor amiga.
Casey: Decir que eran unidos sería quedarse cortos, Tadashi era el único amigo que Hiro tenía antes de conocer a su actual grupo de amigos, ¿Y Hiro? Él literalmente gobernaba el mundo de su hermano -explicó en lo que noto las miradas interesadas en ella- me lo contó la familia de mi mejor amiga, Lunella. Ellos son muy unidos a Hiro y a su tía
Lolo: Lo entiendo. Pero nadie hubiera esperado el actuar de Callaghan -dijo desviando la mirada- yo todo lo que hice fue salvar a mi estúpido hijo. Porque sabía que no sobreviviría un día en prisión.
Casey: Nadie la juzga, madame, pero también debe aceptar que esa ayudita pudo hacer que su hijo se sintiera intocable.
Mrs. Frederickson: Aunque en lo personal diría que ambas partes acabaron mal -dijo la señora de la familia adinerada que se acercó a donde se hablaba del chisme- ya todos saben que paso con Alistair. Y por otro lado ¿supieron? Al parecer Callaghan fue trasladado de la prisión a un hospital psiquiátrico. Parece que finalmente perdió la cabeza.
Lolo: ¿Cómo fue eso? -preguntó con cierta sorpresa.
Mrs. Frederickson: A riesgo de herir a Hiro de nuevo, aunque parece que dejó la fiesta por el momento. Callaghan insiste en que vio a Tadashi. Que está vivo -explicó lo que había sido una noticia en su momento hacía ya varias semanas.
El cómo Robert Callaghan, super villano que casi destruyó en su totalidad la ciudad de San Fransokyo en un intento de vengarse de Alistair Krei por los sucesos ocurridos en secreto durante los experimentos del proyecto Silent Sparrow en los que su hija parecía haber muerto (suceso que acabó no siendo verdad), terminó perdiendo la cordura tras afirmar haber visto a Tadashi Hamada en carne y hueso, el estudiante que había muerto en el incendio que él mismo había provocado queriendo salvarlo.
Fue tal su insistencia y paranoia que tanto el juez de vigilancia penitenciaria así como el alcaide de la prisión y el jefe de policía de la ciudad, sin mencionar algunos expertos de la mente concluyeron de forma unánime que lo mejor para Callaghan era ser transferido. Siendo por ello que desde hacía un tiempo ya pasó de estar en la prisión a un hospital psiquiátrico.
Granville: Además de loco, irrespetuoso, al no dejar al señor Hamada descansar en paz -dijo con molestia en lo que se escuchaban murmullos. Mientras que por su parte Héctor, que estaba escuchando todo, decidió que era mejor cambiar de tema.
Héctor: Bueno, como le iba diciendo, uno de mis empleados más recientes, el doctor Drakken, alias Drew Theodore P. Lipsky, que está por allá -dijo señalando al hombre de piel azul que charlaba con algunos otros científicos de la empresa y viejos conocidos- desarrolló un nuevo tipo de hongo que tiene una capacidad única para devorar el plástico, volviendolo un material biodegradable al acelerar su proceso de degradación de siglos a solo unas semanas, espero que esto sea de su interés, señor King -dijo a uno de los hombres que tenía alrededor.
Bertrand King, alias el rey del plástico, era uno de los magnates de Europa conocido por ser un fabricante de plástico con contratos en un sin número de empresas en todo el viejo continente y Asia. Aunque lo cierto es que el hombre tiene una obsesión con el plástico. Ama el plástico y se sentía feliz rodeado de objetos de plástico. Para él, lo principal era la riqueza obtenida gracias al plástico que la gente seguía comprando. Mientras le generará ganancias y le fuera útil no había problema, lo que lo hacía alguien perfecto para ser fácilmente influenciado si se pulsaban los botones correctos.
Bertrand: Eso es fascinante, Don Héctor. Imagine el impacto que esto tendría en la industria del plástico, no solo en reducir la contaminación, sino también en aumentar la demanda de nuestros productos biodegradables. ¿Cuánto tiempo tomaría implementar esto a gran escala? -pregunto jovial ante la idea de que el plástico tiene mucho que ofrecer.
Drakken: Bueno, aún estamos en el desarrollo de las últimas etapas -explicó tras acercarse cuando escuchó su nombre- pero con la colaboración adecuada y recursos suficientes, podría estar listo para su implementación al mercado en algunas semanas. Sin embargo, hay ciertos riesgos y detalles que debemos ajustar para garantizar su seguridad y eficiencia.
Bertrand: Perfecto. Quiero ser parte de esa fase experimental. Además, me gustaría que me proporcionen muestras para realizar pruebas propias. La innovación del plástico siempre ha sido mi motor, y esto promete ser un movimiento revolucionario -dijo sin notar la sonrisa de Héctor al ver que algunas personas con dinero hablaban de invertir también.
Quien procedió a palmear el hombro de un joven, el príncipe Ali del reino de Achu, invitado para formalizar una relación amistosa y de comercio entre San Fransokyo y el reino de Achu usando como punto de partida los movimientos de ayuda humanitaria. (Más que todo Héctor queriendo usar la imagen del príncipe para estar en el lado bueno de Fede, lo que un padre hace por su hijo).
Héctor: Espero que su alteza disfrute de la fiesta -dijo sonriendo al joven- aprovechó para preguntarle qué opina de mi propuesta para apoyar a refugiados y desplazados. Se trata de financiar programas que brinden alimentación, refugio, atención médica y asesoría legal a quienes han sido desplazados por conflictos o persecuciones. Como bien sabe, en este mundo tan complicado en el que vivimos, donde no hay un solo día en paz debido a grupos terroristas, guerras y otras amenazas, siempre es necesario tender una mano amiga.
Ali: La iniciativa es noble, señor Rivera. La ayuda humanitaria siempre será bienvenida en estos tiempos difíciles -asintió estando de acuerdo- espero que su propuesta pueda concretarse pronto, pues muchos necesitan una mano amiga y un refugio seguro.
Héctor: Gracias, su alteza. Espero que podamos contar con su apoyo y que esta alianza sirva para hacer del mundo un lugar un poco más justo. -sonrió con cierta satisfacción, dejando entrever su ambición detrás de la fachada de benefactor.
Además, tras observar cómo algunas figuras como Stark, el rey T'Chaka y el patriarca de la familia Frederickson intervenían en la conversación para expresar sus intereses o ideas distintas respecto a campañas de ese tipo. También estaban otras personas acaudaladas, como la señora Hamilton, Orso Knox y Mr. Calorie, por nombrar a algunos. Así eran los ricos: con tal de proyectar una imagen de filantropía, no dudaban en involucrarse de lleno en cualquier iniciativa
Eddy: En todo caso -dijo acercándose al anfitrión del evento con un regalo de gran tamaño cargado por sus dos acompañantes- Señor Héctor Rivera. Le trajimos un presente como invitados para usted y su familia. Es tradición qué a una "fiesta de té" se traiga un regalo al anfitrión ¿no?
Héctor: Me encantan los regalos -dijo sonriendo y frotando sus manos con emoción- me pregunto qué será.
Lolo: Qué coincidencia -dijo chasqueando sus dedos a la vez que un robot aparecía con un regalo- yo también traje uno, señor Rivera.
Tony: Pues no es por presumir, pero yo también traje un presente, espero que sea de su agrado -dijo mientras que Pepper traía una caja y miraba a su novio con una expresión de como si le estuviera diciendo "si sabe que lo elegí y compré yo ¿verdad?".
Conrad: Yo traje el mío de América del sur, es toda una rareza de esa región.
Senior: Yo fui hasta los extremos del norte para traer el mío.
Fede: Bueno, ahora no me siento incómodo por traer un presente yo también -dijo mostrando una caja de regalo consigo.
De ese modo, buena parte de los invitados comenzaron a entregar regalos, hasta que una de las mesas quedó completamente llena de presentes. Mientras tanto, el anfitrión se apresuró a tranquilizar a las familias de origen más humilde, quienes parecían algo avergonzadas por no haber traído un regalo, desconociendo esa tradición de las fiestas de té. Al fin y al cabo, era solo una cuestión de cortesía y protocolo que no había sido comunicado, y algunos de los invitados decidieron tomar la iniciativa por su cuenta.
Egon: No le parece que están compitiendo por quien es el mejor invitado o algo así -susurró el rector del instituto de arte de la ciudad a su colega del IASF que solo se encogió de hombros.
Grandville: Lo que me sorprende es que el señor Ornando se preste para algo con esto -admitió sabiendo de la personalidad humilde y centrada del ex deportista.
Liv: Eso es porque en los países europeos las fiestas del té llegan a ser un asunto serio dependiendo la crianza -dijo cierta rubia que sorprendió a ambos por su presencia en el lugar.
Liv Amara, antigua directora de Sycorax (actualmente conocida como Rivera Genetics), quien se mantiene alejada del ojo público tras el desastre que afectó su imagen debido a su clon, había logrado captar la atención de la mayoría al atreverse a presentarse en público. Esto se debió a que Héctor, tras adquirir su empresa, la contrató como asesora (aunque para la prensa parecía que solo ocupaba ese puesto, en realidad ella era la directora del departamento).
Hector: ¡De cualquier modo no mentiré al decir que esto no me hace feliz! ¿Quién no se alegra al ver tantos regalos? -pregunto con alegría de niño pequeño ya queriendo empezar a abrirlos, pero era necesario mantener el decoro- muchas gracias.
Conrad: En todo caso, Héctor, hablando de regalos, escuche por allí que obtuviste una caja especial de cierto ladrón famoso -dijo llamando la atención de todos.
Héctor: ¡Vaya, te enteraste muy pronto! Nada mal, tienes oídos en todas partes, como se esperaba de ti, Conrad -dijo sonriendo- mi gente logró recuperar cierto objeto muy especial del ladrón Casanova en persona, aunque ahora creemos que su guarida está en otro lugar, ya que el país cerró oficialmente sus fronteras hace unos días -hizo una pausa y añadió- pero volviendo al tema, ese objeto es un tesoro que se ha transmitido de generación en generación entre la orden de los guardianes de los Miraculous. Ya saben, ese templo que apareció mágicamente después de haber desaparecido hace más de un siglo y medio. Por alguna razón, alguien descuidó ese lugar y perdió lo que había allí. Y ahora, ese tesoro ha llegado hasta nosotros... una de las legendarias cajas de los Miraculous.
En ese instante, el dueño de la empresa simplemente chasqueó los dedos, dando la orden para que un par de robots trajeran la caja, asegurándose de que quedara a la vista de todos. La caja era de madera de tono marrón claro y tenía forma hexagonal, con seis lados. En cada uno de ellos, había dos botones oscuros con el símbolo de un animal en el centro, alineados en posición vertical. La tapa presentaba un diseño en marrón oscuro, con el símbolo de la Orden de los Guardianes en el centro, rodeado de patrones decorativos, mientras que los bordes estaban adornados con diseños nativos americanos.
Lo que sorprendió e impresionó a todos los invitados, tanto humanos como seres fantásticos, como mutantes, monstruos y aliens, siendo la natural interacción con estos últimos una grata sorpresa para el CEO de la empresa y su sobrina, ver cómo los monstruos y aliens eran aceptados sin problemas.
Al principio, muchos pensaron que eran simples disfraces, pero pronto se dieron cuenta de que no era así, y que en realidad estaban frente a auténticos seres fantásticos. La presencia del verdadero Drácula, Frankenstein, aliens y otros personajes en el evento fue bien recibida por todos. Esto se debió en parte a que la mayoría de los invitados habían sido seleccionados previamente, sabiendo de antemano que tenían una mente abierta, lo que ayudó a que las cosas no se salieran de control y favoreció un ambiente de aceptación y camaradería (y vamos, el propio Thor era un alienígena).
Eddy: Miren lo majestuosa que es -dijo mirando la caja con sumo interés.
Lolo: ¿Y qué Miraculous tiene? Tengo entendido que hay varios -pregunto con curiosidad.
Conrad: ¿Ya abriste la caja, Héctor? -pregunto con emoción en lo que el latino negó.
Héctor: No, eso arruinaría la sorpresa. A mitad del banquete de la fiesta de hoy abriré la caja junto a los demás regalos para que todos veamos lo que hay dentro. Hasta ahora todo lo que sé es que es la caja nativa americana -dijo emocionando a la gran mayoría a la vez que otros se mostraban curiosos.
Moon Girl: Oí de esa, creí que la heroína Águila la tenía -dijo en lo que el hombre se encogió de hombros.
Héctor: ¿Y que paso? Casanova se la robó y luego me cayó como un regalo caído del cielo -explicó divertido- aunque si me preguntan, en realidad a él no le importan los Miraculous, solo la robo para mostrar que podía hacerlo. Pero como sea, si la heroína Águila viene con gusto se la devolveré. Mientras tanto, no hará daño que veamos dentro ¿no?
Conrad: ¡No puedo esperar! -exclamó con intriga queriendo al igual que muchos, ver lo que contenía la caja.
Debido a los recientes sucesos en París, ya muchos sabían de los Miraculous y el misterio que los rodeaba, esta era una oportunidad única para saber más y seria tonto no aprovecharla.
Senior: En verdad estoy intrigado por ver su contenido también ¡me emociona ver ese gran momento! -admitió ganándose algunas miradas de recelo de gente que sospechaba que Senior pensaba robar al menos una de las joyas para sus actos delictivos.
Esto debido a que, aunque por cortesía la gente se reservaba sus comentarios, era bien sabido que cuando estaba aburrido el multimillonario solía hacer actos de villanía como pasatiempo junto a su hijo, de los cuales salía impune usualmente dado su vasta fortuna. Por lo cual el señor Rivera solo le hizo un gesto para hacerle saber que lo estaba vigilando. Aunque en realidad él ya tenía un plan para evitar cualquier problema en el futuro con la familia Senior, el clásico ataque psicológico.
Senior: Por favor. Antes que nada soy un caballero, y de todos modos se que si hiciera algo aquí sería tonto -dijo al notar la mirada de algunas personas- además, señor Rivera. Su invitación menciono algo de tener un hobbie aún más entretenido para mi que el actual.
Héctor: Veo que somos impacientes ¿Qué les parece si vamos a los negocios de una vez? Luego volvemos y disfrutamos de la fiesta, les parece ¿caballeros y dama? -pregunto en lo que a los VIP junto a otro par de personas se les apareció un Buddy guardia para ser escoltados a la oficina del hombre- de sus acompañantes no se preocupen. Mi equipo de seguridad es muy competente como saben, no pasara nada de qué preocuparse -mencionó con total tranquilidad.
Para acto seguido ponerse de pie, tomar una copa de vino y golpear a la misma con un cuchillo para el pan.
Héctor: Pero antes de que se me olvide, me gustaría su atención un momento -dijo aclarándose la garganta- como pueden ver, este es un grupo muy variopinto, pero a un grupo en particular lo invite más que todo para rectificar un error que ha estado ocurriendo desde hace bastante al ser discriminados injustamente, si, hablo de los estudiantes y profesorado del profesor Charles Xavier, los mutantes.
Quienes no esperaban repentinamente ser el centro de atención, siendo tomados con la guardia baja.
Héctor: No podemos siquiera imaginar el sufrimiento y dolor que estas personas han vivido y sentido al luchar contra la discriminación. Por favor, demos un gran aplauso a la belleza y valentía de estas personas ante la adversidad -dijo para acto seguido iniciar los aplausos.
A su vez, los invitados, sorprendidos por el giro inesperado, comenzaron a aplaudir en honor a los mutantes, algunos con entusiasmo, otros con una sonrisa de aprobación, cosa que apeno e hizo sentir de forma calidad a los más jóvenes (así como los mayores aunque no lo admitan abiertamente). Por su parte, Charles Xavier, con su clásica expresión serena y digna, asintió con gratitud y levantó una mano en señal de agradecimiento. Su presencia impuso respeto, y su mirada transmitía una profunda emoción y esperanza.
Hector: Si, hoy, en esta fiesta, no solo celebramos la diversidad de gustos y culturas, sino también la diversidad de seres y habilidades que enriquecen nuestro mundo. La inclusión y el respeto deben ser nuestras banderas, porque solo así podremos construir un futuro donde todos tengan un lugar -dijo en lo que se alejaba para ser abordado por cierto millonario con tendencia a usar una armadura de millones de dólares como pasatiempo.
Tony: Mira nada, Héctor, con tu discurso de inclusión repentino, y de repente todos se olvidaron de que estamos en una fiesta de té. Pero bueno, al menos algo bueno salió de esto.
Hector: Es importante que estas cosas se digan, Tony. Ayuda a abrir las mentes -dijo encogido de hombros- déjame adivinar, me vas a reclamar o tal vez amenazar incluso si no te llevó también a la reunión que tengo ¿no es así? Vamos, creo que no tiene sentido esconder nada -dijo en lo que una fracción de los presentes se retiró para la dichosa reunión.
Dejando el escenario en manos de uno de los invitados, quien previamente había coordinado todo con el CEO para un espectáculo único en la vida: la máxima acrobacia que incluía a las cinco grandes estrellas en el mundo de los medios dobles de riesgo, quienes estaban más que dispuestos a llevar a cabo la hazaña. ¿Y por qué no? Romperse algunos huesos en el proceso. Parecía una aventura tentadora... Y no hace falta decir que un joven acróbata soltó un grito de niña ante la idea, aunque nunca lo admitiría si le preguntaran.
Shuri: Bueno, parece que oficialmente esta fiesta está en su apogeo... y no puedo evitar sentir que no encajo -dijo, observando que estaba sentada sola en una mesa mientras su padre y su hermano se habían ido a la reunión con el señor Rivera.
Por otro lado, su madre había tenido éxito conversando con algunas personas; por supuesto, ella no quería desperdiciar la oportunidad de socializar, ya que rara vez salían de su reino. Y por su lado, rápidamente noto que no tenía interés en dialogar con los presentes que eran de su edad o una similar, sencillamente sentía que no conectaba con ninguno, ni siquiera con la robot que por muy raro que suene tenía la actitud de un estereotipo de adolescente mimada y malcriada... vaya elección de programación.
Aunque sus pensamientos se vieron rápidamente interrumpidos cuando cierta persona se sentó junto a ella, alguien que aunque no lo parecía a simple vista, era más parecida a ella de lo que creía.
Rosa: ¿Una moneda por tus pensamientos? Te veo algo alejada, y creo entender porque. Mente de genio, madura para tu edad, los de nuestra edad sientes que son algo inmaduros y los adultos o buscan halagarte o te ven menos por la edad. Créeme, se de eso -dijo la sobrina del anfitrión ofreciéndole una taza de té- ¿quieres hablar de eso?
Shuri:... Si, de hecho creo que eso me gustaría, si -admitió para comenzar a entablar una conversación que fue más agradable de lo que esperaba.
Al final no era una fiesta tan mala después de todo.
______________________________________________________________________
(Cocina de la empresa)
Cass: Cariño ¿ya te sientes mejor? -dijo mirando a su sobrino preocupada mientras preparaba más bocadillos para los invitados ya que algunos eran muy tragones al parecer.
¿Y cómo sabía que había algo mal con Hiro? Pues era muy sencillo, la estaba imitando de cuando ella tiene un ataque de ansiedad. Arrasando con donas, pastelitos y todo lo que tuviera en frente de una forma que obviamente mostraba ansiedad y estrés.
Hiro: Sólo necesito terminar esta dona y estaré mejor -trato de justificarse en lo que uno de los ayudando 062 (O Frenchy en todo caso) dejaba un plato con más bocadillos en frente suyo, cortesía del chef de la empresa.
Kyle: Date gusto. Hoy es un día para dar rienda suelta a la gula -mencionó sin despegar su vista de la cocina. Hombre centrado en su trabajo, eso se puede respetar.
Aunque si Hiro tuviera que ser honesto, admitía que el cocinero no era su persona favorita. No es que fuera una mala persona, aunque para qué mentir, era algo cortante y un poco denso. Lo que realmente le incomodaba era lo parecido que era a su difunto hermano, y le fastidiaba que, a pesar de su parecido, tuvieran personalidades tan opuestas. Tadashi era sociable, amable, dulce, un verdadero rayo de sol... Kyle, en cambio, era justo lo contrario.
Pero lo que menos le gustaba era cuando Kyle intentaba ser amable con él. Le habían contado lo que le había pasado a su hermano, y por eso, en esos momentos en los que Hiro parecía estar al borde del colapso por el trabajo y el estrés, Kyle le hacía pequeños gestos. No es que le desagradaran del todo, pero sencillamente no los encontraba adecuados... sentía que Kyle buscaba llenar el vacío que dejó Tadashi, y eso, simplemente, no podía aceptarlo. Solo... no podía.
Cass: Entonces... ¿Ya me dirás porque te enojaste, cariño? -preguntó tras haberle dado su espacio a su sobrino un momento, pero de todos modos era su tutora y estaba preocupada. Si eso era un crimen, que la demanden.
Hiro: ... Descubrí algo que me agrió la noche -reconoció tras soltar un suspiro. Momento en que la rectora de su universidad se abrió paso a la cocina, quien le miró de una forma severa pero también con empatía y algo de tristeza.
Grandville: Veo que callarse las cosas para sí mismo se extiende incluso a su propia tía, señor Hamada -dijo haciendo que el menor desviara la mirada con fastidio.
Cass: Profesora Granville, buenas tardes -exclamó luego de hacer una leve reverencia que fue respondida por la otra mujer.
Granville. Señorita Harkness -dijo como saludo- por cierto, respondiendo la pregunta. Su sobrino escuchó cierto comentario de la madre de Alistair Krei. -reveló mientras que Hiro le estaba clavando puñales con los ojos, solo para luego intimidarse con la mirada severa de la mayor.
No por nada era profesora de universidad en vez de preparatoria y ni dios lo quiera, primaria. No estaba para niñerías, de allí que aunque sabía que por la edad del joven Hamada era normal ciertos arrebatos, no se los iba a tolerar, no tan fácilmente al menos.
Cass: ¿La madre de Krei? ¿Exactamente qué dijo?
Hiro:... Que ella evitó qué su hijo fuera a prisión cuando pasó el accidente de la hija de Callaghan -dijo con renuencia haciendo que su tía se tensara por oír eso.
Cass:... Ay Hiro... ¿Por qué no te vas a casa? Tu no tienes porque estar aquí -dijo buscando reconfortar al más joven que solo negó con resignación.
Hiro: No, tía, estaré bien, sólo necesito calmarme un poco más -respondió antes de ver con enojo a la rectora y decana de su carrera en la universidad- ¿Por qué lo dijo? No era importante.
Granville: Señor Hamada, no me engaña, sé que le molestó oír que Krei debió ir preso por lo que pasó -reveló haciendo que la tutora del Hamada menor viera a su sobrino buscando una confirmación, notando ambas su frustración.
Hiro: ¡Por eso ese cretino se sentía intocable! Porque su mami evitó que lo encarcelaran -reclamó con rabia- ¡evitó la cárcel y por eso pasó a ser un cretino qué siempre se creyó intocable y que nadie podía hacerle nada! -dijo antes de ser abrazado por su tía que comenzó a frotarle la espalda a la vez que le tarareaba para calmarlo.
Momento en que Granville hizo notar que no había venido sola, junto a ella habían venido dos chicas de piel morena que Hiro reconoció como parte de los invitados que procedían de Hawai, la familia Pelekai, además del par de aliens que se habían metido casi de forma intrusiva a la familia. Siendo lo que lo tomó por sorpresa como la pequeña niña de seis años caminó hasta él para jalarlo de la camisa y llamar su atención.
Lilo:... ¿Quieres mi Ohana? -pregunto para sorpresa y extrañeza del nipón.
Hiro: Disculpa, yo no...
Granville: Yo se lo explico, señor Hamada, Lilo es de Hawái, ahí tienen la tradición de Ohana, el concepto de la importancia de la familia, y de lo que su hermana aquí presente me platico, para Lilo, eso significa ver a otros como parte de tu Ohana que aún no saben que lo son, que sólo necesitan que alguien les extienda la mano -explicó en lo que la niña asintió.
Lilo: Mi familia es pequeña. Es chiquita y está rota, pero siempre podemos abrir las puertas a alguien más -dijo sonriendo al mayor- me pareció que necesitas una Ohana. Ohana significa familia. Y tu familia nunca te abandona ni te olvida.
Por su parte, Hiro miró a la pequeña niña con una mezcla de sorpresa y ternura. La sinceridad en sus palabras y la calidez en su mirada le tocaron profundamente, haciendo que por un momento su enojo y frustración se disiparan un poco. La idea de tener una familia grande, aunque fuera en forma de una "Ohana", le resonó en el pecho y le recordó lo mucho que extrañaba esa sensación de pertenencia y cariño. No es que no quisiera a las familias Possible y Lafayette, pero... había pasado mucho tiempo desde que convivió con ellos y bueno...
Nani: Cuando Kim dijo que tu papá "era" colega de su papá, y el hecho de que su mamá sólo preguntó por tu tía, ¿Tus padres también...? -pregunto solo para ver al chico asentir con tristeza, antes de sonreírle con ternura- entonces se podría decir que tu familia es como la nuestra, chiquita y rota, entonces, ¿Por qué dos familias chiquitas y rotas no pueden abrir sus puertas entre sí?
Jumba: No se te puede dejar sola un segundo niñita. Te quitamos la vista un segundo y ya estás adoptando a alguien a nuestra Ohana -dijo divertido causando una sonrisa de ternura en la tía Cass que miraba con dulzura a la pequeña que ahora estaba siendo abrazada por su sobrino.
Cass: Veo que están acostumbrados a que la pequeña sea así de ocurrente.
Pleakley: Cuando eres parte de una chiquita y rota familia, aprendes que nadie merece sentirse no querido, si a alguien no le importa si es querido o no, sólo puedes sentir pena de que no sabe de lo que se pierde -dijo para que luego ambas familias procedieron a charlar y conocerse más.
A lo cual la profesora Granville decidió que sólo sobraba, así que procedió a retirarse. Siendo cuando salió de la cocina que noto a unas cuantas figuras alejarse. Quienes se trataban de la familia Rivera, la que fue invitada desde México, que aparentemente habían estado buscando al miembro más joven que parece haber tenido la misma idea que la pequeña Lilo en cierto modo.
Manny: Ya, ya, perdón por haberme ido así sin más, es solo que... No lo sé, siento que ya conocí a ese chico Hiro antes y pues, no me gusto la idea de que estuviera triste... Ahora para colmo yo también quiero formar parte de Ohana -dijo cruzado de brazos haciendo que su abuelo frunciera el ceño.
Puma Loco: ¿Y nosotros que somos, Manny? ¿Carne picada?
Maria: Nosotros también tenemos nuestra versión del Ohana, Manny -dijo abrazando a su hijo con cariño- ¿O me vas a decir que piensas que nosotros no le damos la misma importancia a la familia? -pregunto solo para percatarse de que su hijo tenía mucho que decir al respecto.
Manny: Pelean todo el tiempo, casi siempre todas las reuniones familiares acaban en pelea. Tu y papá están divorciados, y aún ahora sigo sin saber qué quiero ser porque si complazco a uno, decepcionó a los otros dos -dijo cabizbajo abrazados a sí mismo.
¿Y a qué se refería exactamente? Pues al hecho de que cada miembro de su familia podía llegar a insistir bastante para que el más joven siguiera los pasos de cada uno. Para ser un héroe como su papá, un civil como su mamá o un supervillano como su abuelo. Además, tenía miedo de no poder elegir, dado a que vio lo que le pasó al que fue su antecesor en tener el manto del tigre, habiendo perdido la cordura al no poder elegir.
Maria: Manny -exclamó acariciando el rostro de su hijo, sonriendo con tristeza- que tu papá y Granpapi tengan sus diferencias no quiere decir que no se quieran, a ti te consta de con cuánto cariño Granpapi habla de tu bisabuelo. Sí, papá y yo nos divorciamos, él no podía dejar su vocación como héroe y yo no podía soportar verlo lastimarse, tú has visto que aún me hiperventilo cuando algo les pasa a ti y a él, pero que nuestra historia no terminará como nos habría gustado no quiere decir que no nos queramos y nos preocupemos el uno por el otro -dijo besando la frente del menor- el cuánto te amamos a ti es prueba de eso, y aunque tu papá y Granpapi no se callen sobre CUÁNTO les enorgullecería que sigas el mismo camino que ellos, al final estarán orgullosos de que sigas tu camino -dijo abrazando a su pequeño que solo se dejo hacer.
Mientras caminaban, Manny escuchaba atentamente las palabras de su madre, sintiendo una mezcla de alivio y esperanza. La sinceridad con la que ella hablaba sobre el amor familiar le hizo entender que quizás, solo quizás, podía dejar de lado sus miedos y dudas, y aceptar que el camino correcto era el que él mismo elegía, sin tener que seguir las expectativas de los demás... pero igual pensaba que le gustaría abrirle las puertas de su familia a Hiro, por alguna razón sentía que lo conocía de antes.
Granville: Veo que cada familia tiene sus problemas... eres muy silencioso ¿no es así? -pregunto al sentir una presencia detrás suyo que la estuvo siguiendo desde hacía un tiempo ya- señor Hollow, si tiene algo que decirme soy toda oídos... Él está bien. No se porque, pero he notado que lo sigues con la mirada y puedo apostar que hasta lo has ayudado con cosas de su trabajo sin que lo sepa ¿no?... ¿Eres un amigo o un enemigo para el señor Hamada?
Hollow: De momento soy un compañero de trabajo que no puede evitar notar lo delicado que es el asunto del hermano del joven Hiro Hamada -hablo de una forma monótona, casi robótica- y según tengo entendido. Usted es para él lo que Callaghan fue para Tadashi Hamada.
Granville: Eso es correcto, señor... -afirmó, notando que en ese momento la mirada del hombre cubierto de prendas afilo la mirada por un momento ante eso.
Hollow: ¿Y le haría lo mismo a Hiro si llega a ocurrir algo como lo que le pasó a Callaghan? -pregunto causando que la mujer frunciera el ceño con disgusto. La sola insinuación de esa idea era ofensiva para su persona ¿le vio cara de supervillana o de enferma mental?
Granville: No me gusta la insinuación de su pregunta, señor.
Hollow: Lo cierto es que a mí tampoco. Por eso busco asegurarme.
Granville: Pues para que sepa, nunca recurriría a lo que hizo Robert Callaghan, jamás dejaría que la rabia me haga decidir sobre las vidas de otros -dijo con orgullo.
No pudiendo evitar tener un leve recuerdo de una época pasado donde aún hoy en día se culpa de no haber podido ser una mejor figura y ejemplo a seguir para cierto joven que por no haberlo podido guiar correctamente... con decir que aun hoy en día su cuerpo sigue desaparecido.
Hollow: ... Le creo... -dijo finalmente luego de observar fijamente a la profesora por varios segundos- perdone si tenía mis reservas. Desde lo que pasó, desconfío del ITSF en casi todo... Algo irónico tomando en cuenta que solía ser el lugar que más amaba en el mundo -reveló despertando el interés de la mujer.
Grandville:... ¿Fuiste mi estudiante?
Hollow: No, no, estudié en la época después de que se retirara, madame -aclaró- aunque da igual si hubiera estudiado con usted o no. En ambos casos, tanto su generación como la mía ya son historia del pasado -dijo dándole la espalda dispuesto a irse debido a que había recibido una notificación de cierto asunto que debía ser atendido por su persona.
Grandville:... ¿Quién es usted? -pregunto cuando el hombre misterioso estaba a punto de perderse de vista, haciendo que parara en seco.
Hollow: ... Prefiero mantenerme anónimo por el momento.
Grandville: ... ¿Qué opina usted de Tadashi Hamada? Ya que lo veo tan interesado en el tema... ¿Lo conoció? -pregunto solo logrando que él científico le viese de reojo solo un momento.
Hollow: ... No personalmente, pero... Su reputación lo precedía, concuerdo con muchos al decir que no habrá un estudiante así en al menos diez años más. ¿O quién sabe? Ya hay uno y aún no lo notan -dijo para acto seguido solo marcharse.
Dejando a Granville intrigada por todo el misterio que rodeaba a ese sujeto... solo asume que debía ser alguien joven, tenía esa corazonada por alguna razón. Así como el hecho de que algo le decía que por alguna razón no había que preocuparse de su interés en Hiro Hamada, por muy extraño que pareciera.
________________________________________________________________________
(Oficina del CEO)
Héctor: Bienvenidos a mi oficina, por favor pónganse cómodos -dijo tomando asiento- una vez terminada la reunión si gustan luego puedo mostrarles alguna de mis colecciones. Desde libros a antigüedades, soy una persona que le gusta tener de todo un poco -dijo señalando el decorado de su oficina.
Desde estantes llenos de libros y reliquias de diversas culturas del mundo, hasta objetos más modernos como su colección de discos de oro. También hay elementos modestos, como algunas plantas. Lo más inusual son los juguetes, que incluyen bloques, legos, un caballo de juguete a tamaño adulto, además de otros objetos como un oso de peluche gigante y una pelota del tamaño de una persona. Era un extraño caos ordenado por así decirlo que fácilmente llamaba la atención.
Senior: Veo que redecoró la oficina de Alister, me gusta, tiene usted un buen gusto, señor Rivera -dijo sabiendo como solía verse por videos del anterior CEO promocionando algunos de sus productos allí.
Eddy: Debo estar de acuerdo -dijo dejándose caer en el sofá- por cierto. Escuche que usted tiene a sus propios hijos o chicos bajo su ala en todo caso. ¿Están en la fiesta?
Héctor: De hecho ellos deberían unirse pronto, estaban terminando de ensayar y ya saben, no quieren llegar todos sudados a la fiesta -mintió de forma descarada antes de cambiar de tema- y de hecho ellos no son los únicos con un ligero retraso. Mi ex esposa también -dijo haciendo sonreír a algunos de los presentes por el modo en que lo dijo.
Lolo: Es encantador que diga que tiene tan buena relación con su ex esposa, es algo raro que un matrimonio acabe en buenos términos -comento en lo que el latino solo se encogió de hombros.
Héctor: Si nos divorciamos fue por mi trabajo que me llevaba a todas partes, y no quería arrastrarla conmigo cuando ella quería echar raíces -reconoció con algo de nostalgia antes de fruncir el ceño- mi suegra por otro lado... En fin. Vayamos a los negocios qué es por lo que estamos aquí. Ya sea por motivos diferentes, y aun cuando nuestras personalidades pueden chocar bastante. A todos nos motivan dos cosas en común, la pasión y la ambición -dijo con seriedad.
Para acto seguido hacer una pausa, levantando una mano para captar la atención de todos en la habitación. Sus ojos brillaban con intensidad, reflejando ese deseo que tanto había mencionado.
Héctor: La pasión por lo que hacemos y la ambición de dejar una huella en este mundo. Verán. Busco expandir esta empresa de un modo que pueda beneficiar a todos a largo plazo. Y me gustaría hablar con ustedes con la intención de amplificar las ganancias para todos. Por ejemplo -dijo mirando de reojo a Tony Stark junto a Eddy y el Senior Senior- voy a darles algunos de los proyectos a futuro qué Rivera Solutions planea realizar, ustedes dirán si son fiables. Y en caso de que decidan invertir, obviamente tendrán buena parte de las ganancias -dijo para acto seguido entregar planos varios a todos los presentes.
Además de información general sobre el comercio de estos productos, las limitantes políticas y morales, derechos exclusivos de comercio así como patentes al día, por mencionar algunas cosas, todo en orden.
Eddy: Pues bien, a primera vista tienen buena pinta, Doble D, necesito tu genio científico para analizarlos mejor -fue el primero en hablar al ser quien menos entendía nada y procedió a pedire a su compañero que analizará los documentos.
Doble D: ... "MTU-7 Abejorro, El tractor robótico aéreo, utilizable en la industria pesada, la construcción y la extracción de petróleo", "MA-9 Belyash, utilizable para trabajos de instalación, fontanería y soldadura", "Técnicos de laboratorio VOV-A6, robots asistentes de laboratorio y además capacitados para trabajar en áreas nocivas para el ser humano"... Vaya...-se expresó con asombro mirando los diseños- hasta el último detalle perfectamente cubierto, una maravilla.
Eddy: Es su forma de decir "Eddy, si no inviertes en esto serás el mayor tonto de la historia" -dijo divertido.
Reed: Estos robots médicos me parecen sumamente interesantes. Los Baymax y los Doc Med-9....
T'chaka: El Vatrushka es de mi interés, un monociclo geodésico con capacidades topográficas universales que puede detectar depósitos minerales, realizar tareas relacionadas con la hidrogeología, la geología de ingeniería y realizar microzonificación sísmica -dijo pensando en mejores formas para excavar vibranium.
Tony: WSP-9 Pchela, Obrero MFU-68, NA-T256 Natasha... esto me tienta, me tienta.
Senior: Yo solo tengo una duda. ¿Qué es este "Polímero"? qué se supone todos los robots necesitan por igual para funcionar -preguntó haciendo al que organizó la reunión sonriera ampliamente.
Héctor: Eso es algo que descubrimos luego de comprar Sycorex y todo lo que venía incluido. Entendiendo que la señorita Amara necesitaba alejarse del asunto luego del fiasco de su... "gemela malvada", yo sólo le dije que esperaba que aceptara ser mi consultora cuando se sienta más descansada, papel que tiene actualmente -dijo casual- y sobre el asunto del Polímero. Esto fue inventado por mi querido Hollow con ayuda de la doctora Wakeman y las gemelas Test. Una mezcla entre la biotecnología de Sycorex y la robótica de Rivera Solutions. Hablamos de una sustancia electroquímica que tiene las propiedades del agua pesada y el silicio. Un metal líquido por así decirlo qué lleva la creación de robots a límites completamente nuevos.
Eddy: Em, si... ¿Traducción?
Doble D: Para resumir, el señor Rivera nos está diciendo que Rivera Solutions creó una forma de energía que, al menos en la robótica y, tal vez la automotriz y aerodinámica, podría volver obsoleto el combustible fósil -dijo para sorpresa de todos los presentes.
A lo cual Héctor asintió, con una expresión de satisfacción en su rostro. La sala quedó en un silencio expectante, solo interrumpido por el suave sonido de los planos siendo intercambiados entre manos para ser observados por todos.
Héctor: Y Senior. Si no me equivoco usted fue expulsado del club de multimillonarios ¿verdad? Donde al menos 3 de los 4 miembros tienen la mayoría de sus ganancias con combustible fósil -mencionó a la vez que el anciano asintió con malicia- en cuanto a ustedes cuatro -dijo mirando a Lolo, Cornelius, Tony y Reed- Escucharon todo ¿que opinan de la idea?
Cornelius: Debo decir que es todo muy interesante.
Lolo: Me fascina eso del polímero, es francamente fascinante.
Reed: Yo solo puedo decir que apoyo la noción, no es lo que esperaba, pero siento que es un proyecto en el que vale la pena trabajar.
Héctor: Y justo por eso quería hablar con ustedes. A excepción de doble D y el buen Tony Stark, aquí presentes. Ustedes son más listos qué todos nosotros -dijo casual- mi intención es que trabajen con Rivera Solutions. Doctora Lolo, de robots nadie sabe más que usted; Cornelius, según sé creatividad te sobra; y señor Richards, Tony ¿tengo que decirlo? Imaginen qué robots podríamos crear juntos usando el Polímero.
Los ojos de los presentes brillaron con entusiasmo y curiosidad ante las palabras de Héctor. La propuesta de unirse a Rivera Solutions y colaborar en el desarrollo del Polímero y los robots futuristas generó un ambiente de expectativa en la sala.
Héctor: Y por su parte señor Conrad, mi buen amigo -dijo viendo al hombre de cabello negro- ya de por si tiene una influencia muy grande con su empresa FlemmCo qué de por si sus trabajadores son practicamente voluntarios por eleccion. Imagine que pueda expandir sus servicios aún más con mano de obra robótica -dijo a la vez que el hombre acariciaba su bigote.
T'Chala: Señor Rivera -dijo luego de guardar silencio al juzgar todo en silencio antes de dar un visto bueno- esto es realmente revolucionario. Si lo que dice es cierto, estamos ante una oportunidad que podría cambiar todo el panorama tecnológico y energético mundial.
Héctor: Ya lo sé muchacho, eso quiero en parte -dijo antes de sonreír al que faltaba de los VIP- ni creas que te estoy sacando de la ecuación Fede. Verás, el Polímero también tendrá una influencia muy grande en los campos deportivos y de salud. Y nos vendría bien un rostro publicitario ¿Y quien mejor que tú? La voz de los niños... Desde ya aclaro que tú serás el primero en saber todo y si algo no te gusta será cambiado o descartado -dijo haciendo que todas las miradas se centraran en el deportista que parecía interesado también en el proyecto.
Fede: Sabes como trabajo, Héctor. Debes prometerme qué abra donaciones y servicios gratuitos para jóvenes por todo el globo al respecto.
Héctor: No lo haría de cualquier otra forma -dijo en lo que hacía una reverencia a los presentes- entonces. Estimados caballeros y dama. ¿Qué dicen? ¿Trabajamos juntos? -pregunto en lo que todos compartían miradas.
El ambiente en la sala se volvió de entusiasmo y determinación. Los presentes intercambiaron miradas de complicidad, conscientes de que estaban a punto de participar en algo que podría cambiar el panorama de las cosas.
Tony: Bueno, ya, me convenciste, cuenta conmigo. Pero quiero que quede claro que esto será una colaboración de igual a igual. Quiero ver esas máquinas en acción, no solo en papel.
Senior: Esto es intrigante y ciertamente interesante. Además de ganancias... ¿Qué gana usted con todo esto, señor Rivera? -pregunto al hombre que solo se encogió de hombros.
Héctor: Digamos que soy consciente de que en esta vida, para triunfar no hace daño conocer a las personas correctas -dijo con tranquilidad- y como todos ustedes, yo tengo mis propias ambiciones... ¿Qué dicen si lo hacemos oficial? Les enviaré copias del contrato para que lo lean antes de firmar. Por ahora volvamos a la fiesta y hagamos un brindis... excepto usted Senior, me gustaría hablar con usted en privado.
Senior: Bueno, si insiste...
Héctor: Y no crea que no soy un hombre de palabra, majestad -dijo entregando la tarjeta con un encarcelado Ulysses Klaw en su interior a la realeza de Wakanda -mientras hablamos el vibranium que estaba en manos de este tipo está siendo cargado en su aeronave -dijo haciendo que tanto rey como príncipe miraran sorprendidos al hombre antes de aceptar al prisionero.
Quien solo hacía gestos sin que le escuche nada, pareciendo claramente indignado, echando espuma por la boca.
T'Chaka: La protección del vibranium es una prioridad para Wakanda. Los movimientos de Klaw y su implicación con otros actores en el mercado negro ha sido una amenaza constante. Y por ello apreciamos su cooperación, señor Rivera.
Héctor: Nada que agradecer, lo que más me interesa es la posible colaboración futura -dijo sonriendo- Wakanda tiene la tecnología, la tradición y la visión. Nosotros, la innovación y la capacidad de producción. Juntos, podemos hacer mucho más que simplemente custodiar vibranium -mencionó a la vez que T'Chala se acercó, mostrando una mezcla de interés y cautela.
T'Chala: La alianza con individuos y empresas que respeten nuestros intereses puede ser beneficiosa, siempre y cuando se respete la soberanía y las leyes de Wakanda. La tecnología que ustedes desarrollan puede ser una herramienta poderosa... pero también una amenaza si cae en las manos equivocadas.
Héctor: Lo entiendo perfectamente, príncipe. Mi intención siempre ha sido colaborar y no vulnerar la seguridad de mi país así como su reino. De hecho, espero que esta muestra de aprecio hacia ustedes sea solo solo el comienzo de una relación que puede beneficiarnos a todos -dijo en lo que ambos asintieron.
Momento en que la gran mayoría de los presentes procedieron a retirarse, solo dejando en la oficina al par de hombres de negocios.
Senior: Entonces... Imagino que quiere hablar conmigo de mis pasatiempos -dijo ya teniendo una idea de por donde iba el asunto, a lo cual el otro hombre asintió.
Héctor: De uno en particular, usted entenderá -reconoció- por eso debo preguntar... ¿Usted ama a su hijo Junior?
Senior: ¿Qué pregunta? Sería como preguntarle a usted si ama a sus hijos, o protegidos, lo que sean -respondió con algo de brusquedad en lo que el otro asintió.
Héctor: Entonces se da cuenta que si sigue dándole prioridad al pasatiempo de la villanía, le está arruinando el futuro para cuando usted no esté ¿no? -pregunto de forma rotunda- porque Senior. Ahora mismo puede darse el lujo de salir impune de sus juegos de villano clásico de las películas ¿Pero qué pasará cuando ya no esté? Es verdad, Junior tendrá su fortuna... Pero cómo es su hijo, ambos sabemos que el dinero se irá en uno o dos años a lo mucho.
Senior: ... Lo sé -mencionó soltando un suspiro cansado- apenas porque Kim Possible le ayudó a conseguir ayuda legal pagada con el dinero de ... cierta recompensa, es que pudimos recuperar la fortuna que él mismo nos hizo perder
Héctor: Y allí está mi punto, Senior. El puede hacer qué lo pierdan todo de nuevo. Y estando él solo, sin dinero, y con su reputación de villano. ¿Qué futuro le puede esperar?
A lo cual el anciano levantó la vista, sus ojos reflejaban una mezcla de cansancio y preocupación. La sala quedó en silencio por unos segundos, solo interrumpido por el suave murmullo del aire acondicionado, a la vez que el hombre mayor se perdió en sus pensamientos, imaginando posibles futuros para su hijo, cada uno peor que el anterior... El que más lo perturbó fue uno en el que imaginaba a Junior trabajando de desnudista.
Senior: ... Nunca debí escuchar a ese mocoso de Imparable -dijo con escalofríos por lo que acababa de imaginar.
Héctor: Tampoco tendría que culpar al chico, seamos sinceros, usted también debió tener juicio para no aceptar el consejo de hacerse supervillano, ¿Invertir en dar fondos para Justicia Global, o S.H.I.E.L.D.?
Senior: Ya estoy viejo. A estas alturas cualquier cosa para matar el tiempo y divertirme es bienvenida -dijo con desinterés- además seamos sinceros, esos grupos son corruptos a su modo, creeme, se de lo que hablo.
Héctor:... ¿Y qué me dice de la búsqueda de tesoros? -pregunto haciendo que el anciano arqueara una ceja- verá mi buen amigo. Como le dije, tengo mis propias ambiciones. Y en lo personal, soy un coleccionista. Además de un firme creyente de que la fantasía es más real de lo que todos creen.
Senior: Creo que su fiesta lo dejó más que claro -dijo divertido en lo que el otro hombre le masajeó los hombros para ponerlo más a gusto.
Héctor: Solo imaginelo. Viajar por el mundo en busca de reliquias, tesoros. Ser aclamado por todos por algo que no sea el dinero. Grabar su nombre en la historia.
Senior: Me gusta cómo suena...
Héctor: Y además. Escuche que su hijo aspira a ser estrella pop ¿no? -pregunto en lo que el anciano le dio la razón con cierta gracia- usted y yo tenemos bastante qué hablar de negocios. Querido amigo. Pero primero ¿Qué dice de ya volver a la fiesta antes de que todos crean que conspiramos para un plan de conquista mundial o algo así?
Mientras ambos se levantaban de sus asientos, la atmósfera en la oficina empezó a cambiar. Dejando paso a un aire de expectativa y oportunidad. Héctor extendió su mano con una sonrisa enigmática, y Senior la tomó con cierta resignación, consciente de que ambos tenían mucho qué negociar todavía en el trasfondo de sus alianzas.
Siendo allí donde el CEO recibe un mensaje de aviso, al parecer alguien había ido a la habitación donde estaba resguardada la caja nativa americana... así que esas dos ya habían llegado, tal como había anticipado.
_____________________________________________________________________
(Sala de la caja nativa americana)
Resumen del plan: Después de entrar al país escondiéndose debajo de los autos de familias invitadas de fuera de la ciudad aislada, se logró infiltrarse en la fiesta del té alternando disfraces entre dos hijas de familias adineradas y algunos miembros del personal del evento. Lo cual acabó siendo un éxito.
Luego, se dio paso al segundo nivel de seguridad: superar tres barreras. La primera era una puerta blindada que sólo podía abrirse con una tarjeta especial en poder del guardaespaldas personal de Héctor Rivera, Carl Felony. La segunda era aún más sofisticada, equipada con un escáner de retina que solo permitía el acceso a los miembros de la familia Rivera. Además, había robots programados con protocolos de élite para atacar primero y hacer preguntas después en caso de intrusión.
Estas barreras también fueron burladas con éxito gracias a las habilidades de Gorrión y a la tecnología avanzada de Valle Fulgurante, que logró copiar la retina de los miembros de la familia Rivera con solo una fotografía. La intrusión fue realizada por las heroínas adolescentes y miembros de los Héroes Unidos, Gorrión y Valle Fulgurante, quienes ingresaron a la habitación donde se resguardaba la caja, evento principal de la fiesta.
¿Pero por qué estaban haciendo esto? La respuesta era sencilla: además de ser la heroína Gorrión, Jessica Keynes también era la portadora del miraculous del águila y era la heroína de nombre Águila (aunque suena redundante). Casanova le había robado esa caja, y ella había venido a recuperarla para evitar enfrentarse a la furia del guardián responsable de protegerla, y sobre todo, a la furia de su madre.
Gorrión: ¿Cuánto falta para activar el protocolo de anulación de los sistemas de seguridad? -preguntó con recelo, observando la preciada caja que descansaba casualmente sobre la mesa. Por la forma en que estaba colocada, parecía que debía esconder alguna trampa; no podía ser tan sencillo después de toda la seguridad que habían logrado sortear hasta ese momento.
Valle Fulgurante: Ya analicé toda el área circundante... No hay ningún sistema de seguridad adicional. Solo basta con tomar la caja y retirarnos antes de que alguien se dé cuenta de nuestra presencia -dijo, para la sorpresa de su amiga, quien soltó un bufido lleno de arrogancia.
Gorrión: Uno pensaría que Rivera sería cuidadoso en los mínimos detalles, considerando todo lo que ha estado haciendo en los últimos meses -declaró tomando la caja- tomar una ciudad para él solo, hacer contactos con gente poderosa... pero al final, es tan arrogante y confiado como la mayoría, creyendo que ya ha ganado, él... -dijo antes de ser interrumpida por nada más que el sonido de la puerta abriéndose y cerrándose.
Siendo para cuando ambas vieron hacia la salida que notaron la presencia de una nueva figura, que a simple vista parecía ser otra joven como ellas, aunque en realidad era solo en aspecto. Ya que de hecho se trataba de lo mismo que Valle, una androide que fue acogida por la familia Rivera luego de estar sin rumbo un largo tiempo después de abandonar a su padre y creador, el doctor Locus. Melody Locus.
Melody: Buenas tardes, señoritas... ¿en serio pensaban que no nos habíamos dado cuenta de su intrusión? -pregunto de forma cortés- si las dejamos quedarse en la gala hasta ahora fue por cortesía, pero debo insistir en que dejen la caja donde estaba, por favor, ladronas.
Ambas chicas intercambiaron una mirada rápida, evaluando la situación. La presencia de la androide con apariencia humana, complicaba aún más la misión. Gracias a Valle, sabían que no era sólo una máquina, sino un avanzado sistema de inteligencia artificial con capacidades de análisis y respuesta inmediatas.
Gorrión: Lo siento, pero primero que encima nos roban la caja ¿nos acusan de ladronas? -preguntó con indignación- como sea, no podemos dejar la caja...
Valle Fulgurante: Además, no estamos aquí por diversión. Solo queremos devolver una pieza que fue robada y que no debería estar en manos equivocadas -dijo.
Solo para que en respuesta la androide mostrará rápidamente sus verdaderos colores tras levantar la mano falsamente en señal de paz. Revelando los más de diez cañones láser que la máquina tenía instalados.
Melody: Entiendo su preocupación, pero la seguridad de la caja es prioridad. Mi trabajo es evitar que sea robada. Esta es su última oportunidad, de negarse yo no me haré responsable de mis acciones.
Siendo la respuesta de Gorrión que, con una sonrisa rápida y decidida, se movió en una fracción de segundo. Aprovechando la distracción que generaba la amenaza de los láseres, lanzó una pequeña nube de polvo de su cinturón de gadgets para cegar momentáneamente a Melody, mientras saltaba hacia un lado para esquivar los disparos que comenzaban a proyectarse.
Por su parte Valle Fulgurante, con su tecnología, activó un escudo de energía que bloqueó algunos de los primeros disparos, pero era evidente que la androide no se detendría fácilmente. La habitación se convirtió en un caos de movimiento, luces y sonidos de disparos láser.
Valle Fulgurante: ¡Tenemos que salir de aquí, ahora! -gritó mientras usaba su energía para tratar de desactivar algunos de los cañones láser a distancia, intentando abrir un camino.
Melody: ¿Creen que me van a detener tan fácilmente? -vociferó activando sus sistemas de combate y apuntando con precisión a Gorrión.
Gorrión: ¡Valle, cubre la retirada! -ordenó mientras esquivaba los ataques, saltando por una ventana cercana y deslizándose por la pared.
Solo para que en ese momento ocurriera algo que causó que ambas adolescentes comenzaran a preocuparse al notar que Valle de repente había desactivado su escudo al mismo tiempo que sus brazos cayeron inertes a la vez que comenzaba a tener glitches, preocupando a su amiga.
Gorrión: Valle ¿que ocurre?
Valle Fulgurante: Algunos sistemas internos se desactivaron, algo le está pasando a mi sistema operativo -dijo con preocupación genuina.
Gorrión: ¿Como? -pregunto en lo que quien le respondió fue alguien que estuvo desde el principio en la pelea, pero gracias a su tamaño fue que nadie, ni siquiera los sensores de las máquinas, se dieron cuenta de su presencia.
Su nombre era Mego, él junto a sus hermanos menores solían ser parte del grupo de héroes llamados equipo Go, pero al igual que su hermana mayor Shego, ellos también acabarán abandonando el equipo y aceptando empleos en Rivera Solutions luego de tener una reunión con Héctor y Rosa, y ellos les hicieran ver que de hecho, estaban hartos y cansados de su hermano mayor, Hego. De allí que no les carcomía dejarlo, a fin de cuentas tenía su trabajo en el Buen Nacho.
Al menos en Rivera Solutions les pagaban bien y no tenían que aguantar horas y horas de aburridos discursos heroicos del siglo pasado que llegaban al punto de volver loco a cualquiera de tanto escucharlos. ¿Y cuál era el poder de Mego? Sencillo, alterar su tamaño.
Mego: Ah, que creo que ahora tendrás que hacer una visita al taller, mocosa -explicó revelando estar dentro del cuerpo de Valle, cortando cables y arrancando circuitos a diestra y siniestra.
Valle Fulgurante: ¿Que? ¿Quién está allí?
Mego: Soy tu consciencia, y no hemos hablado mucho últimamente, jovencita.
Valle Fulgurante: Eso no es posible, soy una robot y por lo tanto no soy capaz de tener una conciencia -dijo antes de solo caer inmóvil al piso debido a que le acaban de desactivar sus sistemas de movilidad.
Mientras Valle yacía en el suelo, la tensión en la habitación se intensificaba. Gorrión, viendo la situación, apretó los dientes y rápidamente buscó una estrategia. La presencia de Mego, que parecía haber tomado control de Valle, complicaba aún más la misión.
Gorrión: No puedo dejar que esto acabe así... Necesito una solución rápida -susurro para si misma. Solo para en ese momento recibir un puñetazo que la desoriento.
A la vez que de la nada, noto la aparición de un par de niños pelirrojos con ropa roja y negra que rápidamente comenzaron a rodearla, pero no en el sentido tradicional de la palabra, sino que de repente comenzaron a multiplicarse hasta formar un círculo a su alrededor para acto seguido comenzar a contenerla. Ese era el poder de los gemelos Wego, los hermanos de Mego, la multiplicación de su propio ser.
Wegos: Te diríamos que te rindas porque no nos gusta golpear mujeres, pero dado hasta donde llegaron las cosas, es un hecho que no te rendirás -hablaron todas las copias de forma simultánea mientras que poco a poco estaban sometiendo a la joven heroína.
En medio del caos, Gorrión sintió cómo la presión de las múltiples copias de los Wegos la rodeaban y comenzaban a inmovilizarla. Sin embargo, en su interior, se aferró a la esperanza y a su entrenamiento, sabiendo que no podía rendirse. La situación se volvió aún más estresante cuando los gemelos comenzaron a multiplicarse a su alrededor, formando un cerco cada vez más apretado. Sin importar a donde se moviera o que hiciera, rápidamente estaba siendo puesta en jaque.
Así fue que llegó a una conclusión. El guardián le había explicado lo importante que era el anonimato y que nadie debía saber su identidad como Águila, pero a estas alturas... debía usar todos los miraculous al mismo tiempo, ya no importaba nada, ni siquiera si ponía en riesgo su vida, debía escapar fuera como fuese.
De allí que sin más opción abrió la caja para sorpresa de todos sus oponentes... solo para que acto seguido estos estallaron en carcajadas cuando en vez de encontrar los miraculous, Gorrión acabo con gran parte de su cara y ropa cubierta de azul por una bomba de tinta. Esa no era la caja real, solo fue un señuelo para ladrones.
La sala quedó en silencio por un momento, solo interrumpida por el eco de las carcajadas de los gemelos Wegos y el caos que aún se gestaba en la habitación. Gorrión, cubierta de tinta azul y con la mirada fija en la caja falsa, sintió cómo la adrenalina aún recorría su cuerpo junto con la indignación y la frustración... la habían engañado.
... Maldición.
___________________________________________________________________________
(Ocean Turtle, océano pacifico, cerca de las islas Izu, Japón)
El Proyecto Alicization (Artificial Labile Intelligence Cybernated Existence, también conocido como Alice) es una iniciativa gubernamental de alto secreto liderada por la compañía Rath, cuyo objetivo es desarrollar la primera Inteligencia Artificial de Abajo hacia Arriba (IA de Abajo hacia Arriba) altamente adaptable. Las Fuerzas de Autodefensa de Japón (JSDF) buscan utilizar esta IA en armas no tripuladas para fortalecer la tecnología defensiva del país, que tradicionalmente era inferior en comparación con occidente, y para reemplazar soldados en conflictos bélicos, con el fin de reducir las bajas humanas. La operación se llevaba a cabo en una base militar ubicada en medio del océano, conocida como la Tortuga Oceánica.
En ese contexto, surgió el Underworld, un mundo virtual creado por el gobierno japonés que no era simplemente un entorno de simulación como los videojuegos convencionales, sino algo mucho más complejo. Los habitantes de este mundo virtual fueron creados a partir de la copia de las almas humanas, mediante un proceso llamado Fluctlight, que consistía en replicar la estructura de la conciencia humana. En el Underworld, se alojaron las almas de cien bebés, y a través de un proceso de aceleración de tiempo inhumano, estas almas dieron lugar a una civilización de inteligencias artificiales que, en términos prácticos, eran consideradas como personas en todos los sentidos... menos por la ley.
Sin embargo, el proyecto ya estaba siendo monitoreado por la CIA. Como respuesta, esa organización informó rápidamente al ejército estadounidense, que ordenó un ataque secreto contra las instalaciones de la tortuga oceánica con el objetivo de robar la tecnología de transferencia de almas para la creación de nuevos Fluctlights. Información importante que fue enviada unos días antes a Rivera Solutions, por uno de los invitados de la fiesta del té, el agente Cobra Bubbles, quien actuaba como un topo en la CIA y un nuevo socio de la empresa.
¿Cuál fue el movimiento de la empresa? Enviar a su equipo de "limpieza".
Frank: Entonces ¿Ya todos saben lo que tienen que hacer? -preguntó a los otros tres presentes que solo asintieron mientras preparaban sus armas. Cosa que complació al líder de la unidad, Frank Castle, alias Punisher. Quien fue buscado personalmente por Héctor Rivera para el trabajo del mismo modo que buscó a los demás.
Blade: Usualmente únicamente mato vampiros, pero dada la naturaleza de este proyecto creo que puedo hacer una excepción a la regla -exclamó el cazador.
Que luego de haber tenido una reunión con el clan drácula, tras haber entrado ilegalmente a la ciudad-estado para cazarlos, accedió a ser un empleado de la empresa, como disculpa tras descubrir que el famoso clan original de vampiros no era en lo absoluto como los que ha estado cazando por décadas (aunque hablando de forma sincera lo que pasó en realidad fue que se le dio la opción del empleo o si no iría preso por entrar ilegalmente al país).
Elektra: La verdad todo este asunto de lo moral o no con las IA no me importa. pero si nos van a pagar allí la cosa cambia -dijo la asesina dispuesta a hacer valer sus horas de trabajo.
Gambito: Pues creo que ya que estamos metidos en esto, no hay marcha atrás. Con cada trabajo hago valer mi servicio comunitario -dijo el ex ladrón mutante ya con sus cartas explosivas ya cargadas.
Frank: Pues bien, solo para aclarar. Entramos en silencio, localizamos los servidores principales y extraemos toda la información posible, de paso eliminando a cualquier agente de las fuerzas especiales japonesas o americanas, cada segundo cuenta -declaró como orden. Sus ojos, endurecidos por años de combate, reflejaban la gravedad de la misión.
De ese modo el equipo de limpieza se preparó en silencio, cada uno con su propia motivación y perspectiva sobre la misión que tenían por delante. La batalla por el control de la tecnología y la ética estaba a punto de comenzar... y todo esto pasando mientras la fiesta del té era la tapadera perfecta.
Notes:
Y ese fue el capitulo de esta vez. Como siempre pueden votar, comentar, lo que gusten.
¿Y que les pareció?
Si, mientras la fiesta esta en auge el mundo sigue girando y pasan mil y un cosas. Así es la vida, porque algo este pasando eso no significa que todo siga su curso.
De cualquier modo, espero que le vayan siguiendo el hilo a esto. Porque créanme, con todo lo que he trabajado en este fic junto a un buen amigo mío déjenme decirles que el lore es bastante amplio. En fin, de momento, nos vemos.
Chapter 30: Capitulo 27: Fiesta del té (3/3)
Notes:
(See the end of the chapter for notes.)
Chapter Text
(General Pov)
(Fiesta del té, azotea del edificio principal de Rivera Solutions, San Fransokyo)
La celebración seguía en marcha sin ningún contratiempo aparente, con los diferentes eventos sucediendo uno tras otro para el entretenimiento y placer de todos los asistentes, sin importar su especie, clase social o económica. Poco a poco se acercaba el momento en que tendría lugar el acto principal, generando emoción e intriga entre los presentes. Pero por ahora, era momento de disfrutar del cierre de la rutina del famoso comediante Harry Clown.
Harry C: Y continuando con las cosas que no entiendo, están las personas que toman alcohol. Es decir, no licor normal, sino esos tragos super ultra mega fuertes que te hacen desear ni haber nacido. Ósea, este soy yo después de tomar mi juguito de naranja -dijo para luego mostrar una expresión de júbilo tras tomar un trago de dicho refresco- ¿ven? Cara de alegría, felicidad, placer, el punto es que se disfruta. Por otro lado, esta sería una persona luego de tomar un trago muy fuerte -declaró antes de fingir que "tomaba" un trago.
Lo que hizo que varios de los presentes pensaran que el hombre había sido poseído por algún demonio o entidad similar por su comportamiento extremo y desconcertante. Actuando como si su garganta le ardiera, se tiró al suelo, pataleó y se sujetó el cuello como si lo estuvieran ahorcando. Sus ojos se volvieron blancos y parecía estar al borde de la inconsciencia, casi a las puertas de la muerte... para luego levantarse de repente y comportarse como si nada hubiera ocurrido.
Harry C: Y para colmo luego los disque machos van y piden otro ¡No lo entiendo! Y más cuando dicen que si no tomas no eres hombre, qué raro, según mi profesor de educación sexual era otra cosa lo que te define como hombre ¡Pero hey, la teoría del alcohol también es válida! -dijo causando varias risas- pero lo peor de todo es que es algo típico, como que saldrás horrible si o si en el pasaporte o que la chica que te gusta te quiere solo como amigo -dijo causando más risas.
Casey: Es gracioso porque en general es cierto, excepto lo de la foto, yo siempre salgo hermosa -dijo presumiendo su foto de pasaporte a su amiga que parecía algo distraída- tierra a Lu... ¿Puedes creer esto amiga? ¡Hay demasiada gente famosa e importante aquí! Solo por estar aquí nuestro blog aumenta en fans a mil por minuto.
Moon Girl: Si, claro, lo que digas... -dijo antes de solo suspirar- lo que me preocupa es cómo seguirá Hiro, me preocupa, se metió muy alterado a la cocina.
Casey: Dijiste que su tía estaba en la cocina. Seguro se está ocupando... Yo lo que me pregunto es dónde están los de Crazy Land. Literalmente es su jefe quien hace la fiesta.
Moon Girl: Según me dijo cuando le pregunté, están arreglándose porque recién terminaron de ensayar. Y mejor para mí el disque crush de Hiro aun no me gusta -dijo haciendo que su amiga le viese extrañada.
Casey: ¿Aún tienes recelo por lo del jarrón de tu abuela, y lo fácil que lo recuperó? Lu... Es rico. Engaña a la vida -mencionó encogiéndose de hombros aceptando eso como la respuesta para todo lo que él o la familia Rivera hiciera o no hiciera.
Moon Girl: Sólo sé que a la primera que le rompa el corazón de Hiro, será la cena de Devil -exclamó haciendo un puchero mientras su amiga le daba palmadas en el hombro.
Casey: Hablando de eso... Deberías reservar una cita con el dentista. Diría que está comiendo demasiados dulces -exclamó señalando el dinosaurio a medio comer un pastel de su tamaño.
Moon Girl: Si, debo recordar revisarle los dientes -admitió algo enternecida por la actitud de su amigo y mascota.
Casey: Aunque por otro lado -mencionó revisando su teléfono- lo que todos están esperando más que nada es el momento en que Don Héctor abra la caja de los Miraculous ¿Qué clase de poderes geniales crees que tenga?
Moon Girl: Lo que me sorprende es que Águila no esté aquí para recuperarlo, yo en su lugar ya estaría pateándole todo lo pateable -dijo.
Solo para que en ese momento su mejor amiga la sujetara de los hombros con una expresión de severidad que en su caso significaba "apaga el cerebro de chica lista y presta atención si quieres alcanzar el éxito".
Casey: Cosa que no debes dejar que pase ¿Eres parte de la seguridad, recuerdas?
Moon Girl: Lo sé... Aunque admítelo, daría risa verlo siendo pateado por una adolescente.
Casey: Por favor, concéntrate -pidió seriamente- hay mucho en juego aquí y que se abra esa caja es lo que todo el mundo está esperando. Además, ya lo oíste. Él le devolverá la caja con gusto a Águila si viene a buscarla y ni que fuera él quien la robo.
Moon Girl: Si, tal vez...
Casey: Mejor solo relájate, has estado trabajando desde que llegamos, tomate cinco minutos, tomate un refresco, come un aperitivo y disfruta del hipnotista -dijo señalando al próximo encargado del entretenimiento de la fiesta.
Alguien no tan famoso a diferencia del señor Clown, pero que estaba allí con la intención de demostrar su valía, aceptando el trabajo al sentirse honrado por que tan importante hombre de negocios como Héctor, en especial porque todavía estaba resentido por la humillación que tuvo en el programa de El Reto luego de que Gabriel Agreste lo dejara en ridículo. Simon Grimault iba a hacerse un nombre y hacer que ese diseñador de modas se tragara sus palabras.
Simón: Buenas tardes a todos los presentes, antes de comenzar me gustaría la ayuda de un voluntario ¿Qué tal usted? -pregunto a nadie más que la antorcha humana que encogido de hombros se acercó con una sonrisa divertida.
Johnny: A ver como acaba esto, pero de antemano le digo que no funcionara. La hipnosis solo funciona con los débiles de mente y yo soy muy listo, yo...
Simón: Ahora, quede en trance -dije mostrando una carta para que el efecto fuera inmediato.
Johnny: Estoy a su merced, puede ordenarme -hablo de forma monótona a la vez que La Mole, muerto de risa, no dejo de grabar el momento con su celular, esa era una mina de oro a punto de ser explotada.
Simon: Muy bien, duerme... ahora, eres un gato -ordenó mostrando la respectiva carta.
Causando que el rubio de los cuatro fantásticos comenzara a maullar y actuar como un gatito para la diversión de todos, aunque más de una ceja se arqueó cuando este comenzó a frotarse contra la pierna del joven invitado que venía con Stark quien estaba entretenido charlando con algunos de los científicos empleados o invitados de la fiesta. Para colmo ronroneando causando sorpresa y pudor en un apenado Peter Parker.
Ben (La Mole): Y yo que pensé que no me divertiría, éste debe ser de los mejores días de mi vida -exclamó sin parar la grabación, pensando en las diferentes formas que aprovecharía la extorsión. Porque son Bullying, no hay amistad.
Simón: Ahora, pasará a ser un avión -ordenó a la vez que el rubio comenzó a hacer sonidos de dicho transporte mientras volaba por el cielo en su forma en llamas- ahora, es usted un australopithecus
Johnny: ... ¿Un que? -pregunto despertando del trance antes de solo aterrizar como si nada a la vez que el hipnotista por su parte solo tomo nota.
No se podía hipnotizar a alguien si no sabia que era la cosa u objeto en cuestión...dicho de otro modo, evitar que el voluntario fuera un ignorante.
Pero antes de que pudiese continuar con la función, su acto se vio interrumpido por la llegada de un par de animales de lo más peculiares que eran liderados por la jefa de seguridad de la fiesta. Estos animales eran otro de los experimentos recreados del amplio catálogo de Jumba. 086, Clink, una celda móvil viviente en pocas palabras.
¿Y quienes estaban dentro de los Clinks? Ni más ni menos que las dos heroínas que habían fracasado en sus intentos de recuperar la caja nativo americana, Gorrión y una reparada pero igual inactiva de movilidad Valle Fulgurante.
Shego: Jefe, le traje un regalo -dijo haciendo que todas las miradas se centraran en Héctor quien simplemente se acercó para atender el problema de frente- de paso debo mencionar que aunque lo intentaron, al final no se robaron nada.
Héctor: Pero lo intentaron -exclamó señalando la tinta azul de la bomba de tinta que dejó en el anzuelo de la falsa caja en Gorrión- ¿Quiénes se supone que son estas ladronas?
Gorrión: Para resumir, Águila me pidió que recuperara algo que le robaron -declaró encarando al hombre de negocios sin titubear. Si ya las cosas habían terminado así, al menos que no se diga que no peleó hasta el final.
Moon Girl: Aja ¿Y porque ella no vino? -pregunto acercándose junto a otros guardias de seguridad- a otro perro con ese hueso. Devil, escóltalas a la salida.
Gorrión: ¡Digo la verdad!
Casey: Esperen... Ella es Valle Fulgurante, de los Héroes de Nueva York -dijo reconociendo a la androide sorprendiendo a varios de los invitados por diferentes motivos.
Héctor: ¿En serio? -pregunto para luego chasquear los dedos, dando la orden para que ambas chicas fueran liberadas- en tal caso por favor perdonen ustedes, es que mi equipo de seguridad tiene la energía de una máquina aunque se deben ajustar los engranajes. Tienen órdenes de retener a cualquiera que ande de fisgón o no tenga permitido entrar. Ustedes entenderán... -explico con un carisma que fácilmente engaña a la mayoría, pero ambas chicas tenían mucho recelo.
Valle Fulgurante: También perdónenos, Gorrión y yo debimos presentarnos en lugar de intentar escabullirnos, como entenderán, no podíamos arriesgarnos a dejar que alguien tomara los Miraculous -respondió con cordialidad mientras ayudaba a su amiga a ponerse pie.
Gorrión: Gracias por liberarnos -dijo con brusquedad- lamentamos haber actuado de forma tan sospechosa, pero como dijo Valle, la idea era que nadie notara que habíamos venido a llevarnos la Caja, los Miraculous son algo demasiado tentador. Ahora bien puede decirnos dónde están los Miraculous y... -dijo antes de ver que en efecto, este sujeto no era tan bueno como aparentaba.
Porque en cuestión de segundos habían sido rodeadas por Moon Girl y su dinosaurio, Pegajoso, Gantu, las Fujitas, Shego, Mego, los Wego y Melody. Eso sin contar las unidades de Buddy Guardias que se habían vuelto visibles listos para disparar.
Por su parte, los invitados que no eran completamente civiles estaban divididos en dos grupos. Unos estaban preparados para actuar y apoyar al anfitrión de la fiesta, ya que a simple vista parecía tratarse de un acto descarado de robo. Los otros, en cambio, optaron por mantenerse al margen por el momento, listos para intervenir y buscar calmar la situación en caso de que las cosas se descontrolaran, actuando como un bando neutral.
Pegajoso: Eso no va a pasar. La caja es el evento principal. Todos esperan a que el jefe la abra -aclaró mientras se escuchan murmullos de los invitados estando de acuerdo con esa afirmación.
Gorrión: ¿Y arriesgarse a que dos supervillanos tomen alguno de los Miraculous o alguien con fama de ser... brutal...? -pregunto señalando a los Senior y al líder del grupo de la triple D. Haciendo a estos fruncir el ceño a la vez que los comentarios y diferencias de opiniones no se hicieron esperar.
Shego: ¿Dudas de nuestra habilidad para tener todo bajo control? -pregunto molesta- además. Ninguna de ustedes dos es Águila. Con gusto Don Héctor olvidará todo y entregará la caja... A Águila -dijo de forma rotunda.
Las miradas se intensificaron entre las dos heroínas y sus adversarios, especialmente la de Héctor que aunque lo ocultaba, veía a ambas chicas con una intensidad y molestia muy poco usual en su persona en realidad.
Gorrión: Bien, esperen un minuto... -dijo hastiada antes de alejarse, momento en que todos vieron como parecía tener una llamada con alguien que parecía discutir con ella, plática que duró un par de minutos antes de que colgara- Águila dice que viene para acá, y gracias, me dijo a mí que me retire, ya estarán felices. Sólo pidió que hasta que ella llegue no dejen que nadie siquiera respire cerca de esa caja.
Héctor: Tranquila. Eso no va a pasar -dijo con una calma ciertamente fría- la seguridad de la caja y de los Miraculous es lo más importante. No permitiremos que nada ni nadie ponga en riesgo este evento. Pero ya que estamos... Ustedes dos se colaron sin invitación tanto a esta fiesta como a este país. Entiendo que ser héroes les da ciertas "libertades" pero... llegar sin invitación se ve mal lo mires por donde lo mires.
Gorrión: También ser consciente de que tiene una antigüedad robada en su propiedad y querer hacer de su apertura un espectáculo, en especial con dos criminales y un dedos pegajosos cerca.
Pegajoso: ¡Oye! -exclamó ofendido.
Casey: Disculpen, pero, creo que se refería a él -dijo señalando a Eddy que igual se ofendió.
Gorrión: En todo caso, agradezca que sea Águila quien vendrá y no el que protege la Caja, porque él si lo tira de la azotea -dijo dispuesta a retirarse.
El plan era simple, ya vería como le hacia pero se vestiría como Águila aun sin el miraculous, su condición física debía bastar para vender el acto, luego mandaría al cuerno a todos en esa fiesta, especialmente al desgraciado de Héctor Rivera, a quien por alguna razón no le agradaba en lo absoluto. Vamos, el tipo gritaba, villano demente enfermo de poder por todos lados ¿Cómo es posible que los vengadores o los cuatro fantásticos no se dieran cuenta? Hasta Kim Possible está en la fiesta y ella no lo ve ¿Qué pasa con el mundo?
Pero no importaba, ya ella se ocuparía de arreglar todo... o lo hubiera hecho de no ser porque fue detenida por la baba pegajosa del sujeto morado antes de dar siquiera un paso para irse.
Héctor: Oh no.... Llegas a mi fiesta. Te crees alguien para acusarme de cosas ¿Y te vas creyéndote la mandamás? Ah no señor. Me vas a escuchar, niña -reclamo con seriedad- primero, sabía que era robada. Y como dije, se la devolveré a Águila. Que por cierto, nadie sabe como contactarla, por eso dije que ella podía venir a buscarla. Segundo. Acusas a mis invitados y nuevos socios de actos viles qué aún no han hecho luego de varios meses de estar con expedientes limpios. Y tercero, si la tengo, es porque ella permitió qué se la robaran. Supongo que solo debí meter la caja en una caja fuerte y arrojarla al océano pacifico -menciono pensando en voz alta para enojo de la chica.
Gorrión: Claro -se expresó con ironía- según usted estoy siendo cruel al acusar de criminales a los Senior, que han ido presos unas ocho veces por distintos crímenes, saliendo rápido por sus influencias, y al "honorable" señor McGee, que hasta bromea de que cuando era niño se dedicaba a estafar a sus vecinos -reclamó molesta- no sé si de verdad es crédulo al pensar que ellos no intentarían robar los Miraculous, o sólo está siendo un adulador para obtener algún beneficio.
Comentario que solo hizo al mayor reírse con ironía. Se notaba que era una niña, no tenía la más remota idea de cómo funcionaba el mundo. La vida era un escenario, y todos debían interpretar un papel que fácilmente podía cambiar según las circunstancias, solo era cosa de ponerse la máscara correcta para sobrevivir un día más.
Héctor:... Muy lindo acusando de errores a otros cuando literalmente tienes la cara manchada de tinta por intentar robar -señaló para enojo de la joven.
Gorrión: Re-cu-pe-rar, porque me permito recordarle que trabajo con los legítimos dueños de la Caja.
Héctor: ¿Y cuando dijiste eso? Yo no me acuerdo. Me parece que inventas sobre la marcha -dijo con algo de condescendencia- por eso ninguna de las dos se va, esperaremos juntos a Águila ¿Quien me asegura que si las dejó ir ninguna de las dos se hará pasar por ella para robar la caja? -pregunto para que luego las unidades Delta hicieran acto de aparición llamando la atención, quienes escoltaban a un par de personas que atrajeron bastante las miradas.
¿Y de quienes se trataban? Pues nada más que las dos líderes del grupo de los héroes unidos. Majestia y Halcón Nocturno, quienes habían sido invitadas a la fiesta pero no tuvieron intención de ir hasta ser avisadas de que sus hijas estaban allí causando problemas, cosa a la cual ambas fueron lo antes posible para comprobarlo en plan "ver para creer", a fin de cuentas eran sus hijas (y si, las dos eran una pareja lesbica casada de superheroínas, algo progresista de hecho).
A su vez, por parte de los invitados, algunos con rostros preocupados y otros con expresiones de curiosidad, observaban la confrontación con atención. La seguridad, con sus armas listas, mantenía la posición, pero todos sabían que la situación podía estallar en cualquier instante.
Halcón Nocturno: Supongo que aquí es donde entro yo -dijo mirando con enojo a su hija y su hijastra
Gorrión y Valle:... Oh Uh...
Héctor: Gracias por venir, estimadas damas -exclamó haciendo una reverencia- Rosa, querida. Trae la caja para las estimadas damas. Majestia y Halcón Nocturno -pidió a su sobrina que rápido dio la orden para que trajeran la caja real.
Gorrión:.. ¿Usted las llamo?
Héctor: Obviamente. Sabía que si Águila no podía venir por algún motivo, razón o circunstancia. Ella le hubiera confiado recuperar la caja a heroínas tan importantes como Majestia o Halcón Nocturno. Por eso en privado las llame y las invite a la fiesta para darles la caja -dijo en lo que la mujer que parecía una mezcla entre Superman y la Mujer Maravilla asintió estando de acuerdo.
Majestia: Una decisión sabía, Don Héctor... En cuanto a ustedes dos -exclamó reprochando a ambas chicas- ¿En serio robaron?
Valle Fulgurante: Íbamos a recuperar la Caja, Majestia, entiendes la importancia de...
Majestia: Entrando sin siquiera preguntar o explicar nada y robando como simples ladronas tal cual en una fiesta de civiles -dijo con seriedad- entiendo porque actúan con recelo de ustedes.
Halcón Nocturno: Estoy de acuerdo... Pensé que te había entrenado mejor -le dijo a su hija y compañera que solo se cruzó de brazos con enojo.
Gorrión: Si, tienes razón... de haber actuado mejor ni habrían notado que estuvimos aquí -dijo solo para arrepentirse al ver la mirada de reprimenda de sus tutoras.
Halcón Nocturno y Majestia: ¡Gorrión!
Un silencio incómodo se apoderó del lugar tras las palabras de ambas heroínas, mientras la tensión entre varias partes aumentaba. La mirada de Valle Fulgurante se cruzó con la de Gorrión, ambas entendiendo que la situación había escalado más allá de sus intenciones iniciales. La sombra de la decepción y la desconfianza pesaba sobre ellas, y no les gustaba nada.
Majestia: Si realmente estaban aquí para recuperar la caja, ¿por qué no pidieron permiso? ¿Por qué actuaron sin autorización? Esto no es una misión, se metieron en una fiesta en un país aislado, y su proceder pone en riesgo varias cosas, empezando con los acuerdos entre ambos países al entrar ilegalmente.
Halcón Nocturno: Gorrión, ¿Qué te llevó a hacer esto sin consultarnos? Sabemos lo importante que es la caja, pero hay formas de actuar sin poner en peligro la seguridad de todos -dijo molesta.
Ya que aparentemente las chicas olvidaron por completo el detalle de que más que una ciudad con fronteras cerradas, San Fransokyo se había vuelto un país independiente de Estados Unidos que era muy estricto sobre quién entraba y quién no al país. Lo que significaba que dependiendo de lo que hacían allí, en una fiesta donde estaban algunos de los seres más poderosos e influyentes del mundo sin haber sido invitadas o siquiera haber tenido permiso para poner un pie en el suelo del país, podía ser tanto llenar el vaso como ser la gota que derrame lo que sería un gran desastre político.
Gorrión: ¡Pero!
Halcón Nocturno: ¡Hablamos después! -dijo haciendo una reverencia para sorpresa de su hija a Héctor- pedimos disculpas en nombre de nuestras compañeras. Una actitud así carece de una actitud heroica, discúlpenos.
Héctor:... Creo que hay un modo en que todos salgamos bien parados de esto -dijo dirigiéndose a los invitados- tristemente no se podrá abrir la caja como se prometió, estimados invitados. Pero en su lugar, ¿Qué dicen de que cuatro de las famosas heroínas de los héroes unidos de Nueva York se queden un rato en la fiesta? ¡Todos estamos aquí para divertirnos, hasta los héroes necesitan diversión! ¿Verdad? -preguntó buscando aligerar el ambiente.
Gorrión: O sólo lo arrestamos por quedarse un poderoso artefacto robado, y por supuesta sospecha de complicidad con el ladrón Casanova, porque a mi parecer se me hace muy raro que usted y su compañía parezcan tengan como recuperar lo que ese tipo robo, por no decir que mintió sobre no tener cómo contactarnos para devolver la caja -dijo mientras que por su parte el CEO uso todo de sí para respirar hondo.
Paciencia, paz interior, contar hasta diez, lo que haga falta, pero perder la compostura no era una opción.
Héctor: Si tienes pruebas de esa complicidad, las escucho. Y nunca mentí, dime como contactar a Águila específicamente, no se puede ¿oh si? -dijo haciendo que la chica se quedara callada ya que aunque no le gustara, tenía un punto.
No tenía modo para que algún civil la contactara, para mantener su secretismo, privacidad y demás... cosa que ahora mismo odiaba por el simple hecho de no gustarle la sola idea de que ese tipo se saliera con la suya.
La multitud contenía el aliento, observando cómo las heroínas y héroes de ambos bandos se enfrentaban con palabras y miradas cargadas de reproche. La seguridad mantenía sus armas en posición, listos para intervenir si la situación se descontrolaba. Pero en medio de ese caos, un silencio repentino fue roto por un movimiento inesperado: la de la mujer de cabello rubio haciendo una leve reverencia tras suspirar con resignación.
Majestia: ... Aceptamos la invitación -dijo para luego callar a las dos jóvenes que iban a protestar- ¡Aceptamos! La invitación... Y por favor discúlpenos por arruinar así el evento.
Héctor: ¿Quién dijo algo de arruinar? Ustedes aquí es mucho mejor que cualquier caja vieja -exclamó con tal carisma que rápidamente todo el ambiente festivo volvió a la normalidad- muy bien todos ¡Ya el drama pasó! ¡Qué siga la diversión! ¡A beber, a comer! ¡Todos diviértanse!
La multitud, al escuchar las palabras de Héctor, empezó a relajar la tensión, y las risas y conversaciones volvieron a llenar el aire de la azotea. Los invitados, algunos sorprendidos por el giro inesperado, comenzaron a brindar y a disfrutar nuevamente de la fiesta, mientras las heroínas y miembros de la seguridad trataban de recomponer su postura, aunque con miradas de recelo aún presentes.
Gorrión y Valle Fulgurante intercambiaron miradas de frustración y resignación. Sabían que la situación había escalado más allá de lo previsto, y que el incidente con la caja había puesto en jaque la confianza entre ellos y los demás presentes. Pero, por ahora, la prioridad era mantener la apariencia de control y aprovechar la oportunidad para investigar en secreto qué planes podía tener Héctor con la caja y los Miraculous (aunque de momento era un hecho que no obtendría nada).
Mientras tanto, en un rincón discreto, Moon Girl observaba la escena con atención, su rostro con cierta preocupación al parecer algo extraño como todo se desarrolló a su punto de vista.
Casey: Honestamente no sé como sentirme. Por un lado es bueno tener a algunas de las heroínas de Nueva York aquí de los héroes unidos, pero por el otro, en verdad que todos deseaban ver esa caja abriéndose -mencionó con un suspiro de decepción, esas joyas eran su boleto a tener aún más seguidores.
Moon Girl: Excepto los Héroes Unidos, que parece que por no hacer escándalos no arrestan a don Héctor -dijo haciendo que su amiga le viera con una ceja arqueada.
Casey: ¿Sin cargos de qué acusarlo? No me hagas reir... te diré que son, son aguafiestas. Y no soy la única qué comparte esa opinión -reveló señalando tanto a los demás invitados como los comentarios de Internet que no eran muy gratos por así decirlo.
Moon Girl: Eso lo dicen porque querían ver los Miraculous, no apruebo lo que Gorrión y Valle Fulgurante hicieron, pero razones les sobran -dijo pensativa- ¿Qué pasaba si los Senior robaban aunque fuera un Miraculous, o que Eddy McGee tomaba alguno por pensar que le daría mucho dinero? Son rudas, pero no les falta razón, los Senior tienen esa maña de querer ser supervillanos, y McGee sólo ve verde.
Casey: Que se supone que ya tuvieron su tiempo de prueba y hasta ahora no han hecho nada malo ¿cual es el punto de que existan las penitenciarias y los programa de rehabilitación si la gente no piensa dar más oportunidades? -preguntó con algo de fastidio- bueno, igual nunca lo sabremos... Solo una gran llegada de alguien importante podría salvar esta fiesta.
Y como si de una adivina se tratara, fue que justo en ese momento la sobrina de Héctor, Rosa, hizo un anuncio respecto a que en unos minutos para ya terminar la fiesta, la gran estrella Clara Nightingale iba a dar una presentación especial para cerrar el evento con broche de oro para variar.
Casey: ¡Justo como eso! -exclamó ya con más de un celular en mano lista para grabar todo en vivo- como si no hubiera sido suficiente ver a Bobby the Mith, los Oh Boyz, Britina, JTT, por mencionar algunos ¡que vivan los famosos de la música!
Moon Girl: Oye... -hablo leyendo los comentarios en internet por su cuenta- parece que a quienes más atacan en los comentarios son a Gorrión y Valle Fulgurante... ¿Y si la intención de Don Héctor desde un principio era meterse con ellas en específico?
Casey: Y ahora estás pensando las cosas demasiado -opino mientras estaba centrada en el escenario para cuando aparezca la cantante- ¿Por qué haría eso?
Moon Girl: Eh... ¿Para distraer del hecho de que si tuvo cómo contactar a los Héroez Unidos para devolver la Caja de Miraculous, y no lo hizo porque, casualmente, quería devolverla específicamente a Águila, como si no supiera que ella es parte del equipo?
Casey:... Dudo que alguien que solo trabajó con ellos una vez y luego hizo las cosas por su cuenta se considere "parte del equipo" -dijo su sincera opinión al respecto haciendo dudar a su amiga.
Moon Girl: Pero, no es que no tenga como contactarla a ella...
Casey: Que sepamos -dijo antes de solo ponerse seria- lo cierto es que apoyó a Don Héctor en esto. Se supone que la caja era responsabilidad de Águila. Por lo que tiene sentido que solo se la quisiera dar a ello, o por otro lado, a alguien como esas dos -mencionó señalando a Majestia y al Halcón Nocturno-... Por cierto ¿ya notaste cómo están mirando a Gorrión y Valle? Como mamás esperando para dar la regañada de sus vidas.
Moon Girl: Conozco esa sensación -dijo pensando en su madre o en su abuela.
Aunque todo pensamiento se vio interrumpido cuando la música había comenzado, ya era hora de que el aparente verdadero evento principal de la fiesta. Siendo cuando todos prestaron su atención a la punta de un pastel que tenía escaleras incluidas que la famosa estrella pop hizo acto de aparición.
Clara: ¡Hola a todos! -saludo con alegría- ¿saben? Bailar y cantar lo son todo para mí. Y me alegra compartir la alegría de cantar y bailar hoy con ustedes. ¡Con la maravillosa gente de esta fiesta de té! ¡Comencemos!
La multitud estalló en aplausos y vítores, emocionada por la llegada de Clara Nightingale, la estrella del momento. La cantante, con su energía contagiosa, empezó a bailar con gracia mientras tomaba el micrófono, creando una atmósfera festiva y alegre en la azotea de Rivera Solutions.
_______________________________
(Canción, Cotton Candy, Helluva Boss)
Clara: ¡Dulce algodón! ¡Dulce algodón! -canto en lo que de repente su voz comenzó a distorsionarse para que luego el ritmo comenzará- hey, soy tu placer. Soy tu anhelar, ven y descubre mi carnaval. Puedes vivir, quizás también morir. Me envolveré, como si fuera un dulce algodón ¡Un dulce algodón! -canto a la vez que algunas personas le hicieron coro entre la audiencia- ¡Un dulce algodón! -coro- ¡Un dulce algodón! Soy tu anhelar, no tu placer.
Sus movimientos eran fluidos y su vestimenta era muy brillante y extravagante, causando que todos la notaran sin importar que tan indiferente fuera la persona. Además, durante el número musical se activaron hologramas de auroras boreales en el cielo que gracias a luces especiales era de un tono naranja que daba la imagen de una lámpara gigante, o un panal donde Clara era la reina abeja en todo su esplendor.
Esto gracias a tecnología anti gravitatoria incorporada a su vestido (y si, esto fue ensayado en secreto varias veces, por obvias razones de bienestar para la artista)
Clara: ¡Hey! No se porque soy tu anhelar pero es verdad ¿Quieres probar? ¿Quizá un pastel? Tal vez un pie -canto estando entre la audiencia dándole un trozo de cada postre respectivo a los chicos Test- mejor aún ¿no quieres un dulce algodón? ¡Un dulce algodón! -coro- ¡Un dulce algodón! Soy tu placer, no tu anhelar. ¡Cielo artificial, dulce como el pie! ¡Brillá más y más! ¡Puede a las estrellas opacar! -canto yendo lo más arriba posible extendiendo su mano al cielo.
En ese momento, a algunos de los invitados más jóvenes se les pidió que pisaran siguiendo el ritmo, y lo hicieron con entusiasmo, felices de tener la oportunidad de participar en la presentación que cada vez mejor se complementaba, mientras el suave sonido del algodón de azúcar resonaba como un coro de fondo en la música.
Clara: ¡Yeah! ¡un dulce algodón! Soy tu placer, no tu anhelar ¡Ven a comer! -canto para acto seguido acercarse a algunos invitados- ¿hambriento? ¡pues toma más! ¡todos a reventar! -dijo ofreciendo comer y beber con toda libertad- su reina Nightingale les trae lo dulce, así que sigan gozando de esa dulce y rica miel ¡adelante!
Momento en que con ayuda de la tecnología anti gravedad (controlada hasta cierto punto) lo que la gente pasó a observar fue el cómo se levantaban corrientes de ponche y de miel en el cielo que parecían moverse y hasta danzar al ritmo de Clara, un espectáculo hermoso.
Clara: Un dulce algodón... un dulce algodón, soy tu placer, no tu anhelar. ¡Cielo artificial, dulce como el pie! ¡Brillá más y más! ¡Más que las estrellas! ¡Cielo artificial, dulce como el pie! ¡Brillá más y más! ¡Puede a las estrellas opacar! -terminó la canción con una oleada de explosiones de dulce que parecían fuegos artificiales, maravillando a todos.
Mientras las luces de los fuegos artificiales de dulce explotaban en el cielo, la multitud estalló en aplausos y vítores, sumergiéndose en la magia del momento. Clara, aún suspendida en el aire gracias a la tecnología en su vestido, bajó lentamente entre los invitados, sonriendo radiante y dejando que su presencia cautivara a todos.
De repente, los hologramas en el cielo comenzaron a transformarse en figuras de caramelos gigantes y frutas jugosas, creando un espectáculo aún más deslumbrante. La música cambió a un ritmo más suave, casi susurrante, mientras se despidió de su público.
Clara: Gracias, queridos amigos, por acompañarme en esta dulce travesura. Pero recuerden, en este carnaval de sabores, la verdadera magia está en disfrutar juntos -dijo con una sonrisa terminando así su presentación.
(Fin de la canción)
__________________________________
(Oficina del CEO)
No había duda alguna, la distracción de Clara fue todo un éxito. Sirvió tanto para aliviar la tensión generada por las acusaciones de las dos jóvenes heroínas como para suavizar la actitud cortés pero claramente fingida de las héroes mayores, quienes parecían haberse dado cuenta de la trampa. La forma en que ambas chicas arruinaban la conversación, especialmente Gorrión, solo requería la cobertura adecuada de los noticieros y reporteros sensacionalistas para desprestigiar a Camilla Hombee, quien estaba relacionada con el grupo responsable del caos y los escándalos.
Una jugada sucia pero así funciona la política, y si Rivera Solutions quería que el general Monger alcanzara la presidencia, había que encargarse de la competencia desde las preliminares. Pero de momento Héctor y Rosa tenían otros asuntos que atender, como el que iban a tratar en ese momento con el grupo al que recién acababan de aplaudir hacía unos momentos.
Héctor: Usted me dice que prefiere hacer con esto -dijo dejando en el escritorio la tarjeta del juicio portátil donde estaba en su interior un furioso Magneto junto a las de sus subordinados, que usaban para su molestia los collares inhibidores de poderes. Para sorpresa tanto del profesor X como del profesorado que lo había acompañado a la fiesta.
Hank: ¿Exactamente cómo...?
Rosa: ¿No vieron los videos? Esa pelea en el puente fue en vivo y en directo, no una simple publicidad creada por inteligencia artificial o algo así para patrocinar a las unidades Delta -dijo con satisfacción por los resultados de la prueba de campo.
Héctor: El punto es que ustedes pueden decidir si llevarse con ustedes las tarjetas de Magneto y su hermandad y luego ver qué hacer con ellos, o dejármelas a mi -dijo con seriedad- y en lo personal prefiero lo segundo. Pronto tendré una reunión con la gran concejal de la federación galáctica unida en unas semanas y preferiría que mientras más impresionada esté ella mejor -dijo sonriendo con emoción de sumar un peligro potencial más contenido.
Ya con Magneto serían tres prisioneros para causar una buena impresión en la gran concejal. Siendo los otros dos Coverton y un regalo de lo más inesperado, nada más que el líder de un planeta que se encarga de conquistar y robar los recursos de otros planetas para mantener su mundo lleno de vida, Dark Vegan del planeta Vegandon. De verdad se podía decir que estaban de racha.
E igual su hija Jilian terminó siendo una gran asociada para la empresa tras aceptar firmar un tratado de comercio entre su planeta y la empresa. Las oportunidades hay que aprovecharlas, en este caso el hecho de que la hija de Dark Vegan no parecía molesta por el destino de su padre dado a que ella ya le había dicho varias veces que no le gustaba cómo manejaba su mundo, a sus ojos solo cosecho lo que sembró.
Héctor: En fin, posiblemente tengan indulgencia con los jóvenes, pero el señor Lensherr... -siguió explicando lo que iba a pasar en lo que los dos viejos amigos cruzaron miradas una vez más. Decir que la relación de esos dos era complicada seria quedarse cortos.
Charles:... Hola Erick.
Magneto: Charles... -respondió inexpresivo- ...esta vez sí que te juntaste con verdaderos monstruos....
Héctor: ¿Monstruos? ¿Quién es el monstruo aquí? -pregunto con el ceño fruncido ya que esa palabra no se la aceptaba a este tipo en particular.
Magneto: Claro, para un humano como tú...
Héctor: Oh, mi falla, para mí tú no eres un monstruo por ser mutante, Lensherr, lo eres por lo que pensabas hacer -declaro- para mi no eres diferente a Craneo Rojo, igual de fanático e igual de problemático, e igual de hipócrita -menciono, de paso notando la furia en la mirada del anciano.
Si había personas que Magneto odiaba por encima de todo, eran a los nazis, ser comparado con uno... en cualquier otra circunstancia el boca floja ya estaría hecho pedazos.
Magneto: Maldito bastardo... Comparándome con un maldito nazi...
Héctor: ¿Y te crees mejor? Literalmente venías con tu grupo, a destruir éste edificio, conmigo y mis invitados, con intención de matarnos a todos, sin importarte que muchos de los invitados o sus acompañantes son literalmente niños, sólo para mandar tu mensaje sobre la supuesta superioridad de los mutantes, sin pensar que eso sería ponerles la soga al cuello a la gran mayoría de ellos -explicó cómo si hablara con un niño de cinco años antes de sonreír burlón- y encima sin invitación y sin un regalo, que falta de modales -dijo causando el enojo de los cautivos que se sentían humillados por ser atrapados por ese tipo de todas las personas.
Mystique: Escucha, payaso...
Héctor: No, escúcheme usted, señora, le haré una pregunta directa, ¿Sabe usted realmente cuántos mutantes tienen poderes del mismo nivel que usted, que su jefe, que sus chicos? ¿Sabe cuántos mutantes sólo tienen un aspecto atípico, o cuántos tienen poderes tan poco impresionantes que apenas califican como superpoderes? -pregunto molesto- ustedes se jactan de que lo que hacen es por el bien y la prosperidad de todos los mutantes, pero díganme, ¿Dónde están para evitar que un mutante cuya mutación consiste sólo en ser una versión real de Alf, sea atropellado apropósito por un loco anti mutantes? ¿Dónde están para evitar que uno cuyo único poder es subir y bajar su nivel de grasa corporal, sea esclavizado para promover tratamientos fraudulentos para bajar de peso?
Rosa: Que por cierto, solo hace un par de días pusimos fuera de servicio todo un burdel con mujeres mutantes qué lo único que tenían de extravagante era su aspecto ¿ustedes donde estaban? -pregunto con toda la intención de meterse con esa gente que a sus ojos solo eran un montón de radicales.
Héctor: Seguramente planeando éste dichoso golpe. ¿Por cierto? ¿Cuál era el chiste? -cuestionó al líder de la hermandad que por mucho que quería solo ignorar a ese hombre que a sus ojos solo era un bufón, al final no le quedó de otra más que responder.
Magneto: Acabar con una sabandija que es obvio que hizo todo esto solo para hacer una trampa para atraer mutantes y capturarlos o matarlos -admitió mirando al Rivera con odio, cosa que ni inmuto a este en lo absoluto.
Héctor: ... Wow, ni es del top diez de cosas feas que me han dicho, ¿Y cuál fue el principal argumento de su "intelecto superior" para decidir eso? ¿El mero hecho de que no soy mutante? Y por favor no me diga que solo por mi apellido o de mi país porque eso sería muy racista... Que sería muy irónico e hipócrita viniendo de usted.
Rosa: Es divertido como el señor Erick olvidó su infancia tan fácilmente -mencionó riendo de forma exagerada por lo bajo.
Alguna vez has sentido tanto odio que ya no sientes nada más, como un pez que no sabe que está en el agua. Una persona que vivió lo peor de la humanidad, el holocausto, en donde lo único que entendió era la violencia y que el poder domina al mundo al ver como los soldados asesinaron a su familia... Una mentalidad con la cual crecería, así fue como se formaron las bases de quien sería Magneto... quien se convirtió en lo que tanto odio sin saberlo.
Magneto: ¡No dejaré que una mocosa qué es obvio que creció con todas las comodidades desde que nació y no sabe lo que es el infierno juzgue mi infancia! -declaró con furia ciega a la joven Rivera que solo se acomodo las gafas con calma.
Rosa: Para que sepa, mi tío y no yo siempre fuimos ricos, y apreciaría que no me juzgue por lo que se asume de nosotros por lo que se sabe desde que asumimos la presidencia de ésta compañía -pidió con una cordialidad cortante- y me refiero a lo fácil que dice odiar a quienes juzgan a otros solo por ser diferentes... Cuando usted mismo es un Hitler 2.0. Porque como dijimos, a usted no le importan "todos" los mutantes, sólo aquellos que tengan poderes impresionantes, aquellos que pueda usar en su ejército para "mostrar su superioridad". Por ejemplo, tengo entendido que intentó hacer su propio país para mutantes un par de veces. Dígame ¿cuántos de esos mutantes estaban por debajo de la clase Gamma? Si no me equivoco usted solo se concentraba en los mutantes Beta para arriba.
Héctor: Y a eso preguntamos qué sucede con los mutantes Delta qué son el 50% de la población mutante en el mundo y tienen poderes débiles. O la clase más baja, los Epsilon qué literalmente son deformes y considerados fenómenos incluso entre los mutantes, que abarcan el 20% de su población y es el escalón más bajo... ¿El 70% de la población mutante no valen su tiempo? -pregunto casual- no, ¿Verdad? Claro que no, porque esos mutantes no le sirven para su ejército, no ilustran la superioridad de la raza mutante.
El ambiente se volvió aún más incómodo de lo que ya era desde que había comenzado la conversación, cada palabra cargada de una tensión que parecía palpable, haciendo difícil respirar. Magneto apretó los puños, sus ojos brillando con furia contenida, mientras que sus atacantes verbales permanecían firmes, sin ceder ante las provocaciones.
Héctor: Si no me sorprende que de milagro tenga al señor Dukes y a Todd Tolanski, ambos clase Gamma. Aunque en el caso de este último imagino que fue más por lástima que por otra cosa -menciono mirando a Blob y Sapo quienes se ofendieron por la crítica.
Rosa: En todo caso, la prueba está en los mutantes qué trajo con usted. Casi todos de la clase Beta o Alpha, incluso dos que pueden considerarse Omegas -explicó mirando a la bruja escarlata y Mystique- de hecho fue de milagro que detectamos la intrusión de Mystique a la ciudad ya que los sensores detectaron rápidamente una anomalía de que existían dos personas exactamente iguales al mismo tiempo. Lo cual no debería ser posible.
Héctor: Al principio pensamos "seguro son gemelos" pero la persona detectada es hijo único así que fue fácil deducir que como que algo no cuadraba...
Hank: ¿Monitorean la ciudad? -preguntó con incredulidad y consternación al CEO de la empresa que solo se encogió de hombros.
Héctor: Es más rápido que hacer recuento casa por casa y así vigilamos el número estimado de la población justamente para evitar intrusiones -dijo levantando las manos en señal de apaciguamiento.
Rosa: Naturalmente, todo con permiso de la gente, pues saben que no hacemos nada invasivo -dijo calmando a los x men mayores- ni revisamos sus correos, ni sus finanzas, sólo sus rasgos biométricos así como estados de salud.
Había que admitirlo, era más rápido hacer eso que realizar censos de población cada tanto.
Héctor: En todo caso, díganos señor Erick ¿Qué cree que deberíamos hacer con usted? -le hablo al anciano que si las miradas mataran, Héctor ya estaría en el panteón.
Magneto:... Si creen que les rogaré pueden morir esperando...
Héctor: Oh, no espero que ruegue, espero que entienda que lo que pase con usted se lo tiene bien merecido -admitió con una sonrisa de satisfacción.
Magneto: ¡Solo eres un humano que tiene miedo de nuestro poder! ¡Por eso se armó y junto a toda esta gente para poner un límite a mi gente!
Héctor: Sólo eres un humano que tiene miedo de nuestro poder... -exclamó remedando al mutante que estaba hirviendo en rabia para luego suspirar- ay, Erik, si hubieras puesto atención, si hubieras vigilado mejor tu entorno, hubieras visto que mis invitados, sin excepción, recibieron al profesor Xavier y ha los miembros de su escuela con los brazos abiertos. Si, algunos tuvieron recelo al principio, pero no precisamente porque fueran mutantes, sino porque han oído en las noticias las atrocidades que mutantes como tú han hecho.
Generalmente los típicos actos de terrorismo como ataques con explosivos, tiroteos, secuestros y sabotajes, asesinato por motivos ideológicos o de odio, daños intencionados a infraestructuras o bienes con fin de daños económicos o temor; el financiamiento del terrorismo que implica proporcionar fondos, recursos o apoyo logístico para facilitar estas actividades; y la propaganda y apología del terrorismo, que difunden ideas o materiales que justifican o promueven dichos actos. En este caso, todo se resume a mutantes radicales que no saben mucho de imagen pública y que tienen una sociedad retrógrada en su contra... menuda combinación.
Héctor: Solo bastó un ambiente festivo, unos tragos, comer, cantar y bailar para que todos se llevarán como amigos de toda la vida. Para que aquellos que empezaron con recelo vieran que no todos los mutantes son como tú y tu grupo terrorista. Y aquellos que ya sentían interés y algo de fascinación confirmaron que los mutantes son increíbles, y no sólo por sus poderes. Algo bueno ¿no?
Mystique: En cuanto más lo escucho más quiero golpearlo ¿nos cree tan estúpidos para creer que toda su reunión fue solo risas y baile? Que estupidez... -dijo por lo bajo, pero igual fue escuchada por los Rivera que solo le vieron con burla.
Héctor: ¿Porqué tanto recelo en creernos, mi querida señora? ¿Por qué de decir la verdad, significa que su jefe ha estado equivocado todo el tiempo sobre la gran mayoría de la humanidad? ¿O porque, de decir la verdad, significa que usted misma jodió cualquier chance de tener una relación con su hijo, y con la que ama como si fuera su hija, por una ideología equivocada? -pregunto para el enojo de la mujer.
Mystique: ¡No te atrevas a meter a mis hijos en esto, malparido! -exclamó golpeando el vidrio de la tarjeta sin tener éxito alguno en siquiera agrietar el material.
Rosa: ... Le atinaste, tío -fue todo lo que dijo ajustando sus gafas en lo que el mayor solo se encogió de hombros.
Héctor: Igual ya no importa, lo hecho, hecho está. No puedes corregir los errores del pasado. Solo puedes vivir con ellos y buscar ser una mejor persona por ti mismo... Pero ustedes han cometido suficientes crímenes como para creer que sería una estupidez solo dejarlos ir con una palmadita en la espalda -rompió cualquier posible ilusión de salir impunes de los más jóvenes- sin ofender al profesor Xavier, a diferencia de él yo no soy tan partidario a dar más de una segunda oportunidad. Apenas a los chicos, y sólo porque soy firme creyente de que los jóvenes son eso, jóvenes y estúpidos.
La hermandad: ¡Oiga! -reclamaron al unísono ofendidos.
Héctor: ¿Realmente van a negarlo, con todo lo que han hecho por éste tipo?
Rosa: ¿Sabes qué tío? -dijo interrumpiendo la charla- ¿Qué opinas de entregar a los adultos a la Gran concejal y los jóvenes se queden como empleados? sería un desperdicio que se queden congelados el próximo siglo -dijo notando la incredulidad de los miembros de la hermandad- sin Spoilers, arruinaría la sorpresa. En todo caso ¿Qué opina, profesor?
El silencio se hizo pesado en la oficina tras la propuesta de la joven. El cual fue usado por cada uno de los presentes procesando las implicaciones de esa sugerencia. Héctor frunció el ceño, observando a los miembros de la hermandad con cautela, mientras el profesor Xavier, que había permanecido en silencio, levantó lentamente la vista y confrontó una vez más a quien una vez fue su mejor amigo.
Charles:... Erick ¿estarías dispuesto a escuchar...? ¿Te arrepientes? -pregunto al otro queriendo saber su opinión, quien solo negó mientras aparto la mirada.
Magneto:... Eso nunca estuvo en discusión, Charles. Tu lo sabes, no importa lo que diga esta gente, yo estaba luchando por los nuestros, tú lo sabes.
Charles: ... No, Erik -respondió para sorpresa del otro mutante- aunque te rehúses a admitirlo, Héctor y su sobrina tienen razón, no luchabas por los mutantes, luchabas por ti, por demostrar que tú tienes la razón. He querido ser indulgente contigo todos estos años porque con todo te considero mi amigo. Pero llega un punto en que la paciencia se termina... Si arruinabas esto sería como si lo de esa conferencia hace décadas nunca hubiera pasado y el gobierno hubiera vuelto al proyecto de los centinelas... con la sencilla diferencia de que, siendo conscientes de ti, y con lo que ha avanzado la tecnología en los últimos años, hablarían el modo de que ni tú pudieras contrarrestar o manipular a los Centinelas -dijo logrando que por un momento el todopoderoso mutante... tuviera miedo.
¿La razón? No era tan tonto como para no reconocer que la tecnología había empezado desde ese entonces y esas maquinas... un genocidio seria quedarse cortos.
Blob:... Ya me perdí ¿Qué es un centinela?
Charles: Mi muchacho, máquinas de matar, así de simple. Máquinas para cazar y exterminar mutantes -aclaro con comprensión.
Hank: El gobierno consideró usarlos como solución a "la amenaza mutante" hace unos veinte años más o menos.
Ororo: No obstante, el proyecto fue cancelado cuando un grupo de expertos en robótica, confrontaron a Bolivar Trusk , su desarrollador, frente a la ONU, con un detalle que él no consideró.
Bruja escarlata: ¿Qué importa? Hubiéramos podido con cualquier chatarra construida por los humanos -dijo confiada de sus propios poderes. Solo para que de todos los presentes, fuera un receloso Logan quien soltara una carcajada llena de burla en su tono.
A fin de cuentas que iban a saber esos mocosos... él ya había visto ese infierno, y no se lo desearía a nadie.
Logan: No, no hubieran podido -exclamó teniendo recuerdos de Vietnam por así decirlo- esas cosas estaban diseñadas para contrarrestar a básicamente cualquier mutante, sólo contigo, niña, la solución hubiera sido acribillarte a ti primero, sin darte tiempo de reaccionar -dijo en lo que la chica solo bufo.
Lance: En todo caso -hablo de repente el que parecía ser el líder del grupo cuando no estaban Magneto o Mystique- ¿Qué detalle es ese que el tal Boliviano no consideró?
Rosa: Que, quitando el Gen X como factor, los mutantes siguen siendo seres humanos, ningún humano capaz de procrear está exento de la posibilidad de tener descendencia mutante -mencionó mientras tomaba un vaso de agua- ahora, los animo a adivinar a qué conclusión hubieran llegado un montón de robots con inteligencia artificial, diseñados para erradicar a los mutantes, cuando tomaran en cuenta ese minúsculo detallito.
Logan:... Exterminio y aniquilación total -fue su respuesta, siendo más una afirmación que cualquier otra cosa.
Rosa: Exacto... por cierto, Lance. Yo dejaría de perder el tiempo. Ese cristal es autorreparante. Se arregla a sí mismo al nanosegundo de ser dañado -llamó la atención del mutante que trataba de usar su poder de ondas- creo que hasta Wanda se ha dado cuenta que pueden contenerla incluso a ella.
Héctor: No hace falta decir que no escatimamos en gastos. Es fácil cuando el planeta entero te paga impuestos al día -reveló ganándose algunas miradas de sorpresa ya que estaban los que no sabían y los que habían olvidado que el hombre había comentado sobre eso en la fiesta del té.
Recordando los eventos ocurridos hace unas semanas, la luna explotó de manera misteriosa, siendo el motivo aún desconocido para la mayoría de la humanidad. Se esperaba que la destrucción del satélite natural provocará una serie de desastres en todo el mundo: cambios en las mareas, alteraciones en la rotación de la Tierra, efectos en la flora y fauna, impactos en la salud mental de las personas, y otros fenómenos. Sin embargo, la pregunta es: ¿por qué no sucedió nada de eso cuando la luna explotó?
Sencillo, Rivera Solutions aprovechó tecnología ilegal que estaba en posesión de la empresa, gracias a la codicia del anterior CEO, Alistair Krei. Combinando la tecnología antigravitatoria robada por Momakase con el amplificador de energía creado por Obake y mejorado por Hiro Hamada, lograron desarrollar una esfera magnética (robando el amplificador creado por Hiro de la oficina de Granville de paso). Esta fue enviada al espacio en el momento justo en el centro de la cuarta menguante, y permitió que lo que quedaba de la luna cumpliera sus funciones como satélite natural, como si aún estuviera completa.
Y lo único que pedía la empresa al mundo, era un impuesto cada seis meses a todos los países para "mantener en funcionamiento" la máquina (siendo un secreto que la misma es auto suficiente). Dicho impuesto se cobraba en base al producto interno bruto (PIB) mundial y en la distribución de la riqueza por país. Dicho de otro modo, el rico paga como rico, y el pobre paga como pobre. Obviamente eso no le gusto a las potencias mundiales, pero en palabras simples según Héctor... que se jodan.
No hace falta decir que solo el impuesto del primer mes fue con lo que se pagó tanto la fiesta de té como todas las defensas y seguridad del nuevo país aislado. ¿Y por qué entonces la familia Rivera hizo todo el teatro de los inversionistas y demás para el polímero? Sencillo, había que aparentar apariencias y de paso formalizar asociados y alianzas nunca estaba demás.
Rosa: Y debo decir que lo único que siento por ustedes cinco es lástima -dijo refiriéndose a los mutantes más jóvenes de la hermandad- es decir, para mi son los típicos jóvenes que creen que el mundo está en su contra, que son incomprendidos y se fueron con el primero que les dijo "soy como tu". Sin querer darse cuenta que sólo mostró interés en ustedes, no sólo por ser mutantes, no sólo porque tienen poderes impresionantes como para en el caso de Fred Dukes y Todd Tolanski ser lo bastante impresionantes para ignorar sus fallas, sino porque comparten su mentalidad de creerse con derecho de usar sus poderes como si fueran juguetes.
Héctor: Ovejas siguiendo al pastor sin importarles si este lleva una guadaña en vez de un bastón -mencionó casual tomando un trago que fue acompañado por Logan.
Rosa: Y eso los hace a mis ojos justo lo que dijo mi tío, jóvenes y estúpidos. Lastiman a los demás, pero si a ustedes los perjudican es un crimen de odio y discriminación -reclamo con indignación- como por ejemplo expulsarlos de la escuela por colarse a la sala de registros para alterar sus notas -dijo mirando a Lance- expulsarlos y hacerlos arrestar por descubrirlos siendo responsables de una serie de robos -a Pietro- o darles mala fama por secuestrar a una compañera de escuela -a Fred.
Héctor: Cómo ven, la lista no es corta. Son los típicos delincuentes juveniles que por tener poderes se creen la última gota del desierto. Y como dijo mi adorable sobrina, todo lo que han hecho ha sido por un tipo que sólo se interesó en ustedes por compartir su mentalidad de que por ser mutantes deben usar sus poderes como quieran, si no fuera así, le habría dado igual que sean sus propios hijos, ¿No lo creen, Pietro, Wanda? -pregunto.
De paso causando que ambos mellizos se tensaran teniendo una idea de por donde iba el asunto, no queriendo afrontar... que tal vez lo que dijera era solo la pura verdad, y ellos lo sabían.
Héctor: Ya que aquí debo preguntar. ¿Qué tanta atención les ponía papá antes de mostrar que eran mutantes qué fueron bendecidos por la genética? ¿Qué tanto interés mostró en ustedes antes de demostrar tener habilidades Clase Alfa y Omega, respectivamente? -pregunto solo recibiendo silencio como respuesta, notando a ambos chicos dudosos, incómodos y hasta con algo de resentimiento- y con eso cierro mi caso.
Magneto:... En cuanto salga de aquí juro que te crucificare y atravesaré cada parte de tu cuerpo, Rivera. Cada vena, cada nervio... -Prácticamente juro una vendetta que poco le importó al latino.
Héctor: ¿Por qué? ¿Porque acabo de hacer a tus hijos darse cuenta que, de haber salido alguno de ellos clase Gamma o inferior, incluso le hubieras dejado a su suerte? Como algunas personas que no diré nombres -dijo mirando de reojo a Mystique, quien mostró aún más veneno en su mirar, de ser posible.
Mystique: ... Si dejé a Kurt con esa pareja de gitanos, es porque vi que con ellos estaría a salvo...
Héctor: Oh, no hablo del joven Wagner, habló de Rogue, y de cómo la engañó haciéndole pensar que los X men eran cazadores de mutantes, todo para que confiara en usted ciegamente... El amor de madre se fue de sabático, solo sirven si son útiles -mencionó logrando que la mujer de piel azul le viese con odio- bueno, ya fue suficiente charla. ¿Qué opina, profesor? ¿Seguirá el juego de siempre de policías y ladrones o me deja a mi solo cerrar el cerrojo y tirar la llave? -pregunto al hombre en silla de ruedas que solo suspiro pesadamente.
Charles: ...Actúa como mejor te parezca, Héctor -fue todo lo que hizo falta que dijera para que la última esperanza de Erick de poner a su amigo de su lado, la última pizca de ilusión sobre que ambos trabajaran juntos, se fuera al demonio.
Magneto: ¡Esto es traición a tu especie, Charles, traición! -grito golpeando el vidrio, solo consiguiendo que su ex amigo lo viese con lástima.
Charles: No, Erik... la verdadera traición a los mutantes ha sido dejarte hacer cada acto de terrorismo que has cometido. Diciendo hablar por todos los mutantes, sin importarte cómo tus acciones terminarían perjudicando a cada mutante que no puede defenderse como tú lo puedes defenderte... Dime la verdad, ¿Lamentas cada vida mutante perdida como desquite a lo que tú has hecho, o para ti, todos esos mutantes "se sacrificaron por la causa"?
Magneto:... Tu lo sabes, todo es por la causa en esta guerra, no existe una guerra sin sacrificios y menos en una como esta para decidir la especie predominante del planeta -respondió con la misma convicción que ha tenido durante tantos años.
Cada palabra, cada mirada, cargada de una furia contenida y una historia de heridas abiertas, causaba un ambiente casi insoportable. Magneto, con el rostro marcado por el rencor, apretaba los puños, mientras Héctor lo observaba con una mezcla de satisfacción y advertencia. El silencio era pesado, solo roto por las respiraciones entrecortadas de los presentes.
Charles: Ese siempre ha sido el problema, Erik, te rehúsas a reconocer que no eres mejor que los anti mutantes, pues al igual que ellos, insistes en ver el asunto como una guerra, donde gana el que logre erradicar al otro primero, sin importar las vidas perdidas -exclamó con pesar- yo ya no puedo seguir con esto, ya no... ya no pienso tolerar que veas el darle la razón a los que buscan erradicar a los mutantes, como lo que se debe hacer para garantizar nuestra prosperidad y seguridad.
Magneto: ... Tú no entiendes, Charles -respondió viendo con lástima al otro hombre- la lucha no es solo por nosotros, es por toda nuestra especie. Si no tomamos el control, si no demostramos nuestra superioridad, seremos siempre esclavos en un mundo que nos teme y odia. La humanidad nunca cambiará.
Charles: ... A pesar de todo, pido indulgencia con los jóvenes -dijo ignorando al viejo judío para centrarse en Héctor- ellos aún a pesar de todo no son del todo responsables de sus actos.
Héctor: Allí difiero, todos tenemos la capacidad de tomar decisiones, y ellos las tomaron. Pero te concedo el punto -mencionó casual- descuide, profesor, ya veremos en qué ponemos a estos cinco a ser útiles para la sociedad. El grandulón y el chico malo los veo con seguridad. Y bien los otros tres podemos usarlos para misiones de la empresa, si se comportan... Si no lo hacen, sencillamente los mandaremos con Erick y Mystique a ya sabe donde -dijo con cierta malicia.
Rosa: Y si eso no les basta, también pueden ayudar a uno que otro ciudadano con sus negocios o ayudando a los Grandes Héroes a controlar la criminalidad y otros desastres -sugirió, en lo que noto las caras con desagrado de los mutantes- ...A no ser que prefieran ir a donde irán Magneto y Mystique, que aclaró, no será bonito -exclamó con tal malicia que fácilmente intimido a los chicos.
Lance: ... ¿Cuándo empezamos? -fue la respuesta que al parecer era unánime... una elección inteligente.
Rosa: Así me gusta -exclamó para luego ver al profesor y sus colegas- de una vez mencionó que si sus estudiantes quisieran ganar dinero extra, podemos ofrecerles trabajo de vez en cuando, profesor.
Mientras que por su parte el hombre solo asintió tras reflexionar y notar que, de momento, esta gente parecía más que dispuesta a cuidar y apoyar a los mutantes... era un salto de fe que debía afrontar, era necesario si quería darle una oportunidad en el mundo a los mutantes. Solo pensaba en cuánto se divirtieron sus estudiantes en la fiesta del día de hoy... él quería que eso fuera algo normal.
Ororo: Mientras no afecten sus estudios no veo problema -mencionó la mutante sonriendo.
Logan: O conociéndolos, usen los trabajos como excusa para venir a tontear -mencionó casual sabiendo de antemano que posiblemente eso harían, conocía a los chicos y lo ocurrentes que podían ser.
Hank: Dices eso cuando tu posiblemente también busques trabajo para comprar licor o refacciones para la moto -mencionó en lo que el hombre se encogió de hombros antes de hacer un brindis casual con Héctor. Ya habían quedado para ponerse al día en otra ocasión.
Logan: No, lo digo porque los conocemos, y sabemos que son capaces de decir que vienen a hacer trabajos aquí sólo para que les demos permiso, y luego saldrán con que vinieron a pasearse... Y si, porque no, unos billetes para cervezas nunca están demás -reconoció, para luego ser despedidos, dando por terminada esa reunión.
¿Pudo salir mejor o no pudo salir peor? Bueno, eso depende de a quién le preguntes, la perspectiva de cada quien y lo que pasará a futuro por esas decisiones... ¿pero no pasa eso con todo en la vida al fin y al cabo?
________________________________________________________________________
(Time Skip, unos momentos después)
(Entrada de Rivera Solutions)
Mrs. Frederickson: Una velada maravillosa -mencionó dejando que Héctor le bese la mano, quien los estaba despidiendo al ya haberse terminado la fiesta- no todos los días se puede asistir a una fiesta así de original. Solo lamento que no se pudiera abrir la caja, en verdad me hubiera gustado ver uno de esos famosos miraculous, y estoy segura que mi Fred piensa igual.
Hiro: Si, lo intuí -mencionó divertido entregando a su amigo que estaba atado en una silla y amordazado.
Cosa que por lo general alteraría a cualquier madre, pero ambos señores Frederickson sencillamente se encogieron de hombros y tomaron el respaldar de la silla para luego llevarse a su hijo a rastras, ya sabiendo como era. Pero no sin antes el señor Frederickson entregarle su tarjeta a Héctor para hacer una reunión después ¿el anciano tenía sospechas o desconfianza de Héctor? Pues quién sabe, ahora mismo actuaba como el hombre de negocios que era.
Héctor: Descuide madame. Habrá más fiestas donde veré que no hayan interrupciones como esta de nuevo. Y claro que será invitada nuevamente -dijo despidiendo a la familia adinerada antes de despedir a los rectores de las universidades de la ciudad- profesora Granville, profesor Egon. Espero de todo corazón que los rectores del ITSF y el IASF se hayan divertido -dijo estrechando la mano de ambos.
Granville: Un gusto, señor Rivera.
Egon: Una fiesta maravillosa, y de paso me atrevo a adivinar y decir que nada me dará más gusto que el que sus chicos sean estudiantes honorarios en el IASF -dijo haciendo que el hombre de piel morena riera.
Héctor: Tenga por seguro que cuando tengan la edad los mandó para allá -exclamó divertido antes de ver retadoramente a la rectora del tecnológico- y si para entonces aún es rectora, advertida queda qué atacaremos con todo en la semana de la rivalidad.
Granville: No crea que no nos defenderemos, recuerde que también tenemos nuestra arma secreta -mencionó con gracia para luego retirarse con su colega.
Siendo seguidos por la realeza de Wakanda que si deben ser honestos querían volver pronto a su nación debido a que no acostumbraban socializar tanto, pero sería mentir decir que no se divirtieron.
Rosa: En todo caso, esperamos que hayan disfrutado de su estancia con nosotros. Lo mismo digo a ustedes majestades, altezas -hablo haciendo reverencia.
Ramonda: Lo reconozco, fue una experiencia refrescante, espero tener más oportunidades para hablar con usted, príncipe Ali -dijo al joven príncipe de Achu que sonrió en respuesta mientras se retiraba.
Rosa: Este solo será el primero de varios eventos que, en el futuro, espero que nos den el honor de disfrutar de vuestra compañía -dijo uniéndose a su tío y Hiro en la tarea de despedir a la gente- espero que la cantidad de Vibranium recuperada fuera la apropiada. Como tal no sabemos a quien le vendió o que hizo con sus existencias antes de contactarlo, Ulysses nunca hizo registros de nada
Shuri: Descuida, agradecemos toda la ayuda -dijo sonriendo a la otra joven con quien prácticamente había hecho una amistad, para acto seguido guiñar un ojo con complicidad que Rosa le respondió de igual modo.
Rosa: Del mismo modo esperamos que acepten este regalo, unidades de los experimentos 040 y 529. Retroexcavador y excavador -mencionó entregando dichas cápsulas al rey- pueden ser de ayuda para sus minas.
Shuri: Uhhh... esto ya me gusto -respondió en lugar de su padre con interés- ya quiero hacer pruebas y hacer mejoras o modificaciones a mis inventos en base a ellos... Creo que este es el inicio de una linda amistad.
Rosa: Eso espero -exclamó observando cómo se iba la familia real.
Para que acto seguido les siguiera el cuarteto que conformaba una parte de los heroez unidos. Que mentirían si dijeran que no disfrutaron el corto tiempo en el evento, pero... el recelo estaba muy presente en general, en diferentes niveles, pero allí estaba.
Héctor: Majestia, Halcón Nocturno. Fue un honor qué nos acompañarán este día. Ustedes y sus ayudantes son libres de venir a cualquiera de mis fiestas, solo avisen de antemano -dijo en lo que ambas mayores agradecieron con cortesía el gesto- sin rencores. Espero verlas de nuevo en otra ocasión, niñas -despidió a las heroínas más jóvenes que solo asintieron con recelo antes de retirarse- ... En fin, Eddy. Mi buen amigo, lamento mucho esas acusaciones a tu buen nombre. Espero que eso no cambie tu opinión de hacer negocios con nosotros -exclamó ahora despidiendo a los del grupo triple D.
Eddy: Peores cosas me han dicho
Doble D: Totalmente -dijo para luego ambos irse rápidamente. Cosa que hizo que Héctor sencillamente restara importancia al asunto.
Héctor: Doctora Lolo. Espero que haya disfrutado la fiesta. Y espero verla en futuros eventos -dijo en lo que la mujer asintió de forma cortés.
Lolo: Igualmente, Héctor. Solo espero que demuestres que vale la pena hacer tratos contigo. No lo arruines como mi estúpido hijo -exclamo con seriedad.
Héctor: No lo haré, madam.
Lolo: El tiempo lo dirá... Y una cosa más ¿podría decirme dónde vive el joven Hamada? Me gustaría mandarle una cesta de disculpas -dijo mirando al mencionado que no pudo evitar apenarse, así como de paso sorprenderse al ver que al parecer la madre era en efecto muy diferente al hijo. Siendo allí donde llegó a alguien que sorprendió por completo al nipón.
Miguel: Yo se la haré llegar, madame -respondió por Hiro quien parecía aún sin poder procesar tal acto de empatía por parte de alguien con el apellido Krei.
No es que Alistair fuera un patán todo el tiempo, pero al menos más del 90% del tiempo si era un desgraciado de lo peor.
Lolo: ... Lo dije el día que vi su video y lo digo ahora. Me gusta tu banda, chico. Sigan así -dijo para luego solo retirarse sin más, momento que el moreno aprovechó para abrazar al chico mitad japonés.
Hiro: Miguel ¿dónde estabas? te perdiste la fiesta -dijo preocupado, solo recibiendo como respuesta un beso en la frente que lo hizo sonrojarse.
Miguel: Mi profesor robot me dejó con mucha tarea, perdón, tenía que aprovechar el feriado para hacer mis pendientes -mintió de forma casual mientras tenía en sus brazos al chico que solo se dejó hacer conforme lo apapachan con pena.
Mientras que por su parte, Leo y Marco estaban en su casa compartida, dormidos con algo de cloroformo. Algo extremo lo reconoció el hijo mayor de la familia Rivera, pero... ¡era una cita con su crush, por el amor de Dios!
Héctor: En fin, veamos quien sigue... Cornelius. Espero que tu y tu familia hayan disfrutado la fiesta -dijo dándole un apretón de manos al científico.
Cornelius: Un gusto haber venido, Héctor -exclamó cortes en lo que su hijo susurro algo para no ser escuchado por el moreno más joven.
Wilbur: Sobre el chico que estaba vestido de Alicia, ¿Creen que puedan darme su número? -preguntó al patriarca de la familia en voz baja.
No contando que para casos en específico como ese, Miguel tenía oído 20, 20.
Miguel: No, lo siento, es alérgico a los celulares -exclamó antes de abrir la puerta de la limusina y empujar casi a la fuerza a los Robinson para luego solo decirle al conductor que se fuera.
.... Al menos podía disimular un poco pero ya que.
Héctor: Estos celos me hacen daño me enloquecen -canto divertido para luego bloquear con un bastonazo la mano de su hijo que iba directo a hacerle un calzón chino- al menos espera que termine de despedir a los invitados para actuar como el descarado qué eres.
Siendo la respuesta de su hijo mayor hacerle una señal de que no podrá escapar por siempre. Los chicos de hoy en día, no respetan ni a sus padres.
Héctor: Niños, ya sabe como son. Usted los tiene ¿señor Conrad? -preguntó casualmente despidiéndose del hombre de negocios.
Conrad: Algo así, la verdad, pero entiendo su punto -dijo pensando en cierto par de niños que tenía escondidos, los cuales eran de hecho sus sobrinos pero eso de momento no le concierne a la gente.
Héctor: Si gusta hablar al respecto tiene mi número. Estaremos en contacto y espero verlo en la próxima fiesta -menciono viendo marchar al contrario- veamos... la mayoría de familias ya se fueron hace rato... entonces pasamos a usted. Senior, espero que este evento haya tenido, aún con todo, la elegancia a la que está acostumbrado.
Senior: Por supuesto, por supuesto -asintió sonriendo.
Héctor: ¿Qué me dices tú? Junior ¿verdad? Espero que no te hayas aburrido -dijo al hijo del magnate quien solo se encogió de hombros.
Junior: No mucho, la verdad, fue interesante conocer en persona a tantas celebridades. Solo me falta conocer a esos chicos que escuche que están patrocinando, Crazy Land.
Héctor: Tenían cosas que hacer, solo eso diré... Entonces, ¿no te interesaría tampoco hacer una carrera de solista pop? -pregunto casual- es decir, el representante de Crazy Land soy yo -dijo haciendo que el muchacho se emocionara- estaremos en contacto. Espero verlos a ambos en futuras fiestas -dijo despidiendo a padre e hijo.
Al final el asunto con ellos era simplemente darles otras cosas con las que pasar el tiempo, la peor y al mismo tiempo la más inutil clase de villano, los que lo hacen por aburrimiento.
Héctor: Y del mismo modo espero que tu gente disfrutará de la velada, Tony -exclamó despidiendo al filántropo- perdona si no fue como acostumbras una fiesta de lujo con drogas, gente borracha que ni sabe como se llama y todo eso.
Tony: Descuida -dijo casual- lo admito, fue bastante interesante, una fiesta fuera de lo usual. Y más tu proyecto del polímero... Espera la primera transferencia bancaria en unos días. Y que conste que si alguien da más que yo solo dime y duplicó el monto -mencionó causando las risas de varios de los presentes que se iban.
Héctor: Tampoco tienes que ser tan competitivo, amigo, e igual dudo que alguien siquiera iguale tu generosa inversión -dijo compartiendo una mirada cómplice con su sobrina- lo que sí me sorprendió fue la competencia de comida que hubo entre Hulk y Thor -dijo para luego ver al dios del trueno- del grandote de verde lo entiendo pero ¿a ti donde te cabe tanto?
Thor: Los asgardianos requerimos mucho alimento para compensar nuestro amor por el combate -exclamó sonriendo complacido- por cierto ¿puede darme una invitación al restaurante de esa familia que estaba aquí? Los Magnuson aseguraron que su local, el hacha de bocadillos, era un lugar donde experimentar el sabor de la verdadera comida nórdica. Y de lo se de Midgard, la gente del norte siempre ha respetado el trono asgardiano.
Si, por si no quedó claro, Thor al final terminó apreciando a tan peculiar familia.
Héctor: Claro, no hay problema. Y me imagino, no por nada Odin se volvió el padre de todo de los nueve reinos -dijo para extrañeza de algunos de los presentes.
Tony: ¿Y qué tiene que ver qué Odín sea el rey de Asgard con que los asgardianos sean unos tragones?
Héctor: Pues el mismo Thor lo dijo, su amor por la batalla -aclaró- imagino que hizo un gran banquete luego de que conquistó cada uno de los nueve mundos que ahora son suyos.
Thor:... ¿Qué? -pregunto con el ceño fruncido haciendo que Héctor y Rosa se miraron mutuamente una breve fracción de segundos.
... ¿No sabía nada?... Esa puede ser una oportunidad interesante.
Héctor:... ¿No es como la mitología de nuestro mundo? -sugirió- nosotros, gracias a la mitología, sabemos todo de los nueve reinos, o buena parte en todo caso. Aquí Odin es conocido por su sabiduría pero también por ser el dios de la guerra y la muerte... Ya imaginaras porque...
Thor: Ejem, si, bueno... Nunca hemos negado que mi padre combatió por los Nueve Reinos... -dijo tras aclararse la garganta.
Héctor: Oh mi querido príncipe, parece que no sabes mucho de tu propia historia, la de tu pueblo. Desde que me enteré de la existencia de los aliens, más que todo por medio de los que conocimos por medio de la empresa, fue que averigüe varias cosas para complementar mis conocimientos previos, por ejemplo... se que la mayoría de los nueve mundos tienen a Asgard como enemigo, y no es precisamente odiar porque si -revelo queriendo sonar lo menos agresivo posible.
Es verdad que los Vanir, los enanos y los elfos de la luz tenían buena relación con la gente de Asgard, pero los otros...
Héctor: Desde los gigantes de fuego y hielo, a los elfos oscuros, no es que odien a Asgard porque si, tienen sus razones... Te recomiendo investigar esas razones, te puedes llevar una sorpresa. Hazlo como una petición, para probar que escuchas a la gente de Midgard y en verdad no los ves como una especie subdesarrollada en comparación los otros 8 mundos -mencionó en lo que el dios nórdico solo asintió.
Rosa: Y solo como consejo, no vayas directamente a visitar los otros mundos. Por muy fuerte que seas, hablamos de especies que han planeado atacar Asgard por siglos, sabrán como contenerte... ya viste a los gigantes de hielo, y como termino eso.
Thor: Aprecio el consejo, pequeña Rosa -dijo cortésmente- ¿Por qué no solo me lo dicen? Digo, ya que parecen saber todo como si fueran videntes del futuro usando magia antigua...
Rosa: Eso es sencillo, no nos creerías. Y no queremos quedar en malos términos contigo.
Héctor: Es como se dice, nadie aprende en cabeza ajena.
Thor levantó una ceja, sonriendo con cierta incredulidad. Él entendía que hay cosas que no puede entender sin más, pero apreciaba la honestidad. La historia de los nueve reinos es mucho más compleja de lo que imaginaba. Por ahora se comprometería a investigar esas razones que mencionaron la familia Rivera. Después de todo, no deseaba ser un desconocido en su propia historia... además, el modo en que lo dijeron... por alguna razón le daba un mal presentimiento.
Por eso para no pensar mucho en eso es que durante la fiesta del té le dio permiso a la señorita Rosa para estudiar la biblioteca de Asgard. Igual solo eran un montón de libros, y si podía ayudar a preservar los nueve mundos, mejor para él.
Héctor: Y ya que estamos... Toma -dijo dándole un cheque al joven Parker que venía con Tony Stark. Quien miró el trozo de papel sumamente confundido.
Peter: ¿Y esto...?
Héctor: Para los gastos de tu casa para los siguientes meses. Para que te concentres en tus estudios y tu tía pueda pagar las facturas -explicó con amabilidad- y si pregunta, puedes decir tal cual que me viste a mitad de la calle y te lo di porque si. A diferencia de Tony que tiene fama de derrochar en fiestas. Yo tengo fama de apoyar e invitar a la gente solo porque sí -mencionó solo para sentir cómo el Stark le daba palmadas en el hombro divertido.
Tony: Mejor sales corriendo, Héctor, antes de que el chico te persiga para obligarte a recibir el cheque de regreso. Créeme, he intentado ayudarlo de mil maneras, pero él sencillamente insiste en demostrar que puede solo -dijo en lo que el castaño se sonrojo de pena, pero en efecto, ya estaba extendiendo el cheque devuelta al Rivera.
Héctor: Sencillo, lo obligaré a que lo acepte debido a la culpa de venir sin un regalo a la fiesta de té y encima que considero que fui un buen anfitrión, que me haga la canallada de no aceptar un acto de buena voluntad ¡qué vergüenza niño, que vergüenza! -se expreso dramático mirando a Peter, apelando a que se sienta culpable... sin conseguirlo.
Peter: Pero no puedo aceptar dinero que no gané, señor, por favor, entienda -dijo insistiendo el devolver el dinero.
Tony: Buen intro, ya intenté eso una vez -menciono con algo de arrogancia.
A lo cual Héctor decidió usar la motivación pasiva agresiva.
Héctor: Ay por favor, lo haces todo el tiempo. Aceptando cheque tras cheque de las fotos que le das a J. Jonah Jameson -dijo refiriéndose al encargado del periódico más popular de Nueva York. A lo cual el adolescente hasta tuvo el descaro de indignarse. Ya que si, los Rivera sabían del "pasatiempo" del chico, pero no lo iban a delatar ni nada, no ganaban nada con eso.
Peter: Si, porque ese dinero me lo gané trabajando siguiendo al hombre araña por media Nueva York. Y aprovechó para decirle, no es fácil seguir a alguien que se balancea con telarañas en bicicleta o el transporte público -dijo sacándole una risa al mayor.
Héctor: Vaya que la gente no se molesta en informarse. Niño, tus fotos están lejos de ser profesionales -declaró como si nada- el propio personal de Jonah le recrimina porque te compra tus fotos siendo un novato y ni son muy buenas ¿sabes por qué lo hace? ¿Quién crees que fue el reportero que cubrió la noticia de lo que le pasó a tu tío? -pregunto tomando por sorpresa al joven.
Peter:... ¿Qué?
Héctor: Oh para darle más sazón, según se conoces a Matt Murdock y hasta te defendió en un juicio cuando el pelón de Kingpin te acuso falsamente. Murdock dijo que lo hizo porque quería, pero fue mentira. Te reto a que adivines quien pagó sus honorarios -reveló sorprendiendo más al adolescente- desde el comienzo has recibido la ayuda de los demás, deja de ser obstinado y acepta que no puedes cargar con todo tu solo -dijo volviendo a dejar el cheque en manos del chico.
Quien tras guardar silencio, en vez de devolverlo solo se lo guardó en su bolsillo, con una expresión que se parecía a la de un perro regañado... él no sabía nada de eso.
Tony:... Debí investigar al Jonah ese -exclamó chasqueando sus dedos con algo de molestia fingida de ver que Héctor le ganó en hacer que el chico aceptará dinero- ¿Cómo iba a saber que era más que el típico jefe patán?
Héctor: JJ no es de los que les gusta que pongan en duda su rudeza, Tony, sí, no se calla que no confía en los héroes enmascarados como la Araña o Daredevil -comento- pero él nunca se ha callado tampoco sobre que respeta a héroes como la mayoría de los Vengadores, los 4 Fantásticos, incluso es un abierto defensor de los derechos de los mutantes. Nunca terminas de conocer a la gente, tú deberías saberlo señor "un evento cambió mi vida y mande al diablo el concepto de que la empresa de mi padre sea armamentista".
Punto que Tony Stark terminó por conceder al otro hombre de negocios. Touche, solo eso pensó el playboy, Touche, Héctor.
Héctor: Es bueno que cuides a tu tía, pero también debes cuidar de ti mismo, toma esto también -dijo dándole un paquete con comida sobrante al joven- note como te quedaste mirando todo lo que quedaba, y se que no me preguntaste por pena si te podías llevar algo, adelante, llévale a tu tía, pienso regalar todo lo que sobró a la gente de la ciudad al fin y al cabo.
Peter: Yo... gracias, señor -dijo con sinceridad.
Héctor: Y ya que estamos ¿Por qué no comes más antes de irte? Vamos se que quieres -mencionó casual .
Siendo antes de que se pudiera negar que ya estaba siendo escoltado por Judy a la cocina, a lo cual solo se dejó hacer con cierta renuencia y pena.
Héctor: Ternurita... Son cosas que notas sin mucho esfuerzo cuando eres padre, ya aprenderás -le dijo a Tony, quien se sintió incómodo y con algo de pudor al recibir ese comentario con la guardia baja.
Pepper: En serio, es un buen detalle, Héctor -respondió la novia del vengador en su lugar.
Héctor: Y ya que estamos, también note otra cosa... Digamos que la flamita si que miraba con interés a tu chico, Tony -dijo mirando de reojo a la antorcha humana junto al resto de su grupo que se acercaban para ya irse- y cuando fue hipnotizado en gato como que quedó claro que le tiene ganas al chamaco ¿no te parece?
Tony: ... Pepper -dijo repentinamente con una seriedad que llegaba a intimidar- dime que empaqué el traje con la espuma anti incendios.
Pepper: Bájale a los celos dos rayas señor papá enojón -exclamó divertida de ver ese lado de su pareja.
Mientras que por su parte, Tony soltó una risa nerviosa, apartando la mirada y tocándose la nuca. Pero aun así, no se iba a disculpar, le había prometido a la tía del chico que lo cuidaría a fin de cuentas. Solo por eso busca cuidar la integridad del niño, si, solo por eso.
Héctor: Espero que la velada haya sido de su agrado, señor Richards. No hace falta decir que espero que asistan a la siguiente fiesta -dijo despidiendo al científico que ya se retiraba junto al resto de los cuatro fantásticos.
Reed: Créame, señor Rivera, yo espero la próxima con ansias. Una lastima que se llevarán la caja nativo americana. Quería pedirle una de las joyas para estudiarla, no creo en la magia ni nada de eso, pero se que todo objeto o fuente de poder tiene su base científica -dijo mostrando su descontento con el resultado de todo.
Héctor: Puede discutirlo con Majestia y Águila, aunque esta última será un hueso duro de roer -mencionó divertido- en todo caso quiero que sepan que nos comprometemos a ayudar en la cura de su amigo, Ben... Aunque ¿seguro que quieres volver a la normalidad amigo? Según se tienes novia y todo. Además, según un estudio de mi gente creemos que fácilmente puedes alcanzar los 4 o 5 milenios de vida con el cuerpo que tienes ahora -dijo para sorpresa de la Mole.
Pero tras pensarlo un momento, igual se ofusco ante la idea.
Ben: ¿Y pasarlos solo? Aunque sea poder controlar cuando soy pura roca, ¿Entiendes, amigo? -dijo con un tono pasivo agresivo que hizo que el latino sudara frío un momento.
Héctor: Entendible... Por cierto, de antemano les digo felicidades, se nota que no perdió el tiempo Mr. Fantástico -exclamó guiñando un ojo señalando el embarazo de Sue.
Hasta el momento esa era una de las noticias más grandes del momento. Una heroína embarazada siempre es motivo de intriga y celebración.
Reed: Lo difícil ha sido que Sue se lo tome con calma, para ella ya es frustrante tener que darse un respiro de las misiones -aclaro antes de sentir un leve golpe en el brazo.
Sue: Que esté embarazada no significa qué sea inútil -se quejó haciendo un puchero que a su esposo le pareció adorable.
Reed: No digo que lo seas, amor, sólo me preocupa que el estrés de usar tus poderes afecte tu embarazo -se justificó mientras abraza a su mujer.
Héctor: Un consejo de alguien que ya pasó por eso. Lo que sea que una mujer embarazada pida o quiera dile que si, lo que sea. Créeme, eso salva vidas -mencionó con algo de nostalgia por viejos recuerdos. A lo cual el científico solo asintió dándole la razón.
Tony: Bueno, ya que estamos aconsejando y eso... -dijo metiéndose a la conversación, apretando el hombro de Johnny Storm- ¿Qué dices de irnos de paseo en mi avión privado? Solos tu, yo, y un bello atuendo solo para ti.
Johnny: ... Temo preguntar qué tipo de traje -dijo con calma, pero realmente se sentía intimidado.
Más que todo porque el tipo rico tenía el guante de su traje puesto... y parecía dispuesto a disparar en cualquier momento ¿Qué mosco le pico? Al menos por parte suya, Johnny no recordaba haberle hecho nada que lo hiciera enojar... no recientemente al menos.
Pepper: Tony, no, luego nos acusan de homicidio -dijo apuntando al cuello del rubio de los 4 fantásticos con un abrecartas- mejor vamos al grano ¿Cuáles son tus intenciones con Peter?
Johnny: ... ¿Ser amigos, ayudarlo en la vida, y nada que haga que use ese abrecartas conmigo? -respondió con algo de nerviosismo. Frunciendo el ceño levemente al ver que ni su hermana ni amigos parecían querer meterse para ayudarlo.
Hasta reconoció las miradas de "meh, seguro se lo tiene merecido".
Tony: Y se supone que el padre celoso soy yo.
Ben: Esperen ¿dicen que Johnny le echó el ojo al niño? -pregunto burlón para luego carcajearse- ¿Qué pasó? ¿Cansado de que las chicas te manden al diablo cuando descubren qué eres un tarado?
Johnny: Sólo me parece buena onda y me llamó la atención, ¿Es un crimen? -pregunto defendiéndose.
Tony: Ah no, no te quieras pasar de listo conmigo. Se reconocer ojos de me lo quiero coger cuando los veo -declaró amenazante en lo que su novia bufo con algo de burla.
Pepper: Usualmente cuando se mira al espejo.
Tony: ¡Exacto! ... Oye...
Héctor: Bueno -dijo viendo que había una oportunidad para divertirse un poco- solo hay un modo de ver si es mutuo... ¡Allá va!
Siendo todo lo que dijo antes de empujar al rubio como si nada, lo cual hizo con poca fuerza, haciendo que éste tropezará y enredara sus pies. Sin embargo, en lugar de caer al suelo, terminó cayendo encima de un Peter sorprendido que estaba a medio comer un pastelillo regresando de la cocina. Aunque Peter pudo sentir la presencia del otro por su sentido arácnido, decidió dejar que le cayera encima para no levantar sospechas. Ambos quedando en el suelo en una posición algo comprometedora, con el mayor encima del menor.
(Algo más o menos así la posición para que se hagan una idea jaja)
Johnny: ... Hey -fue todo lo que dijo tratando de disimular, pero no pudiendo evitar sonar coqueto. Cosa que hizo sonrojar al adolescente.
Peter:... Hola -acabo diciendo, más como un susurro que otra cosa.
Johnny: Oye, usualmente los ángeles caen del cielo, no aparecen en frente de pobres diablos como yo -dijo guiñando un ojo apenando al chico debajo suyo- oye, no se si sea por tenerte tan cerca o si es rápido, pero ¿quieres mi número? Así quedamos y te llevo a una cita cómo se debe, nena.
Peter: ... Espera, ¿Cómo me dijiste? -pregunto ofendido, solo para ponerse tan rojo como parte del traje que tiene bajo la ropa cuando le dieron un beso en la frente.
Johnny: Tranquilo, sé que eres chico, pero eres tan guapo como una nena hermosa, tal vez más -dijo logrando que el chico se volviera a sonrojar.
Mientras que por su parte, Ben Grimm se encontraba sujetando a un furioso Tony Stark de mala gana para que no maten al rubio.
Héctor: Esto es más entretenido que la novela de tu tía -susurro a su sobrina que asintió estando de acuerdo.
Rosa: Creo que ya quedó claro que tu solo quieres ver el mundo arder, querido tío.
Héctor: Y no me arrepiento de nada -dijo para luego estrechar la mano del último de los VIP's que ya se estaba retirando- deje lo mejor para el final. Me encantó tu atuendo del conejo blanco por cierto, Fede. ¿Te divertiste?
Fede: Bastante -admitió el deportista- por mi parte no puedo prometer asistir a muchas fiestas a futuro. Como sabes, hay una copa mundial qué preparar.
Héctor: Claro, claro. Pero espero que sepas que de igual modo haré lo que haga falta para que asistas.
Fede:... De verdad eres como un niño al que no le gusta que le digan que no ¿no es así? -pregunto curioso, a lo cual el latino solo asintió sin vergüenza alguna.
Pero esa era solo una de las máscaras que mostraba al público, sin revelar en realidad lo que se escondía en su interior, que era mucho más complejo y complicado de lo que aparentaba a simple vista. Solo eso podía decir por ahora... y, por el momento, la fiesta del té había sido un rotundo éxito.
________________________________________________________________________
(Time Skip, la noche de ese día)
(Nivel 2 de profundidad, cárcel privada de la empresa, Edificio principal de Rivera Solutions)
Héctor; Mendigo mocoso... mira que al final si hacerme un calzon chino -dijo mirando a Rosa a su lado mientras se abrían paso por el pasillo-... Entonces, dime ¿Cómo resultó todo al final? ¿La fiesta fue un éxito o un fracaso? -pregunto ya sabiendo la respuesta a eso, pero quería reiterar.
Rosa: Con todo y los contratiempos, un éxito -afirmó mientras revisaba varias cosas en su teléfono- incluso tu idea de hacer qué las madres de Gorrión y Valle se enteraran qué ellas tenían la caja de Miraculous acabó saliendo bien de milagro ¿Eso porque fue?
Héctor: Sencillo. Cosas así no deben manejarlas los niños por sí solos -dijo en lo que su sobrina no sabía si hablaba de los miraculous o propiamente del vigilantismo- y, sus madres les contaron el secreto de ser superheroínas desde siempre. No es justo que ellas les escondan algo así -explicó su razonamiento- sabían que tenían uno de los Miraculous, pero no que estaban en contacto con el guardián y que tenían la caja completa.
Rosa: Además. Eso hará que ese guardián lo piense dos veces antes de confiar completamente en dos niñas que acababa de conocer para confiar -comentó comprendiendo mejor el actuar de su tío- ... veo que no quieres que Gorrión se vuelva otra Ladybug ¿verdad? -pregunto sabiendo la opinión de su tío de la joven heroína que estaba ganando popularidad bastante rápido en Europa.
No la desaprobaba, pero sencillamente no veía sensato darle demasiado poder e influencia a una chica que obviamente ni graduada de la secundaria estaba. Y que encima aparentemente tenía la creencia de no escuchar a figuras de autoridad que sabían más que ella si no estaba de acuerdo con ellos, lo cual era bueno cuando se trataba de ciertos patanes. Pero no ponerte en contra del maldito guardián y líder de toda la orden de los Miraculous solo por insistir en la identidad secreta.
Héctor: Tal vez... Honestamente en eso pienso un poco como JJ ¿Por qué la insistencia de complicarse sus vidas escondiendo sus identidades? Y lo peor es que luego lo saben y lo arruinan todo justamente por ser jóvenes... ¿en qué pensaba el guardián anterior orquestando todo ese desastre? Algo me dice que no mucho, y que tal vez ni era un guardián real, solo un aprendiz o algo así...
Rosa: Aunque hay que admitir que esa chica Gorrión acabó teniendo razón en algo -dijo sacando de su divagación a su tío.
Héctor: ¿En qué, cariño?
Rosa: En limitar nuestras interacciones directas con el tema de Casanova, revisé los comentarios, y si bien muchos criticaron su irrupción y sus acusaciones, si hubo gente que señaló que tenían razón en que es raro que nosotros lográramos quitarle algo al ladrón, cosa que los héroes y personas que lo han enfrentado hasta ahora no lo han podido hacer, no tan fácil al menos...
Héctor: Si, tienes razón. Mejor seguir como hasta ahora y dejar que Miguel finja qué está contra las cuerdas y que la policía o los héroes recuperen las cosas. Dejemos que se les infle el ego y que el público esté contento.
Rosa: De cualquier modo. De los invitados importantes... Eddy confesó en el elevador qué en efecto pensaba robar la caja completa. Que bueno que el plan nunca fue abrirla en primer lugar -dijo mostrando el video que fue tomado antes de que los D se fueran.
—
(Video en el elevador)
Doble D: Si pensabas robar uno de los Miraculous, ¿Verdad? -preguntó a su amigo y jefe que solo sonrió con malicia en respuesta.
Eddy: ¿Sólo uno? ¡La caja completa! ¿Te imaginas, Doble D? Héroes a sueldo, dispuestos a ser guardaespaldas, seguridad privada, un ejército personal por el precio adecuado -admitió mientras incluso se limpiaba un poco la baba que le salía de la boca por pensar en tantos billetes verdes.
Doble D: Reza porque los héroes no te escuchen o si no ya nos amolamos, Pelos Nerviosos
Eddy: A todo esto... ¿Dónde está Ed? -pregunto notando la ausencia de su amigo.
Antes de que ambos recordarán que la última vez que lo vieron se encontraba devorando dulces en una esquina de la fiesta, donde posiblemente aún estuviera allí, comiendo hasta reventar.
Ambos: ... Ya nos los traerán -fue todo lo que dijeron restando importancia al asunto.
(Fin del video)
—
Rosa: Como puedes ver, de paso olvidó a su guardaespaldas. A quien puse en un corralito de su tamaño, el mismo que usamos a veces cuando Marco se pasa de listo -dijo sacando una sonrisa a su tutor- por otro lado, la doctora Lolo parece que ya firmó el contrato sin siquiera finalizar la fiesta. Parece que está interesada en empezar a trabajar cuanto antes.
Héctor: Perfecto -exclamó con satisfacción.
Rosa: Del señor Cornelius. Su esposa quedó encantada con la comida de la fiesta y nos pidió más de una receta... También solicitó una cita social entre su hijo y Hiro. A lo cual terminé golpeando a Miguel por insistir que Hiro era alérgico a las citas, ese chico debe controlar los celos, mientras mejor nos llevemos con la familia Robinsón será mejor para nosotros.
Héctor: En eso te doy la razón -exclamó mientras revisaba el número de las puertas conforme iban caminando a paso lento.
Rosa: Como sea. A su vez, el señor Conrad parece estar empezando a mandar ideas de robots qué podríamos crear para ayudar a sus empleados de sustitución a hacer sus trabajos más fáciles -dijo todavía satisfecha de haber logrado volverse afiliados del conglomerado Flemmco.
Una empresa conocida por sus numerosos productos de consumo, como FleemSol, el vaporizador Fleemer, el detergente OxyFleem, la pasta de dientes Fleem Brite, los colchones Fleem Dream, el FleemPod, las computadoras FleemDos, Fleem Star Line, operadora del barco de vapor Fleemtanic, y el suavizante de telas Fleemsoft. También es conocida por sus numerosas empresas en línea, como Fleemster y FleemBay.
Pero, sin duda, la característica más distintiva de Fleemco era su programa secreto de reemplazo, conocido como la Iniciativa de Reemplazo de Fleemco. La cual no es para siempre. Básicamente como el nombre lo indica, consiste en sustituir temporalmente a trabajadores para que otros descansen por motivos de estrés, necesidad, salud, etc. Aunque sí se pueden dar sustituciones permanentes, en ese caso se podría decir que se les ofrece un "cambio de trabajo", al sustituido se le ofrece un trabajo más acorde a sus necesidades, y en su lugar se le pone un profesional igual de calificado. En resumen, dicha firma era un aliado poderoso para Rivera Solutions, y por suerte todo salió a pedir de boca.
Rosa: Aunque, a lo que investigue. Hay dos niños que usan el servicio de una forma excesiva sin pagar nada y por alguna razón Conrad Fleem cumple casi todos sus caprichos -mencionó con curiosidad genuina- aunque admito que me gustaría meter la cuchara, no voy a hacer eso. Más que todo porque ese es un asunto en el que no me quiero meter hasta saber la verdad detrás.
Héctor: Entendible. ¿Algo más?
Rosa: El Senior mayor ya firmó el contrato y envió una suma considerable de dinero para empezar las investigaciones con el Polímero. Y su hijo ya envió al menos 10 correos preguntando por pruebas de solista.
Héctor: Y creía que Marco era patético -exclamó algo burlón.
Rosa: Por cierto tío ¿en serio crees poder convertir a Senior Junior en una estrella? -pregunto a la vez que el mayor solo restó importancia al tema.
Héctor: Si estoy pudiendo con Marco, podré con él -dijo casual- ¿otra cosa?
Rosa: La operación en la tortuga oceánica está saliendo perfectamente. Y para rematar. Fede parece más a gusto con nosotros y parece estar aún más dispuesto qué antes a dejar que patrocinemos todo el asunto de la copa mundial.
Héctor: ¿Y qué hay de Moon Girl y su representante?
Rosa: La señorita Goldberg-Calderon feliz de la vida -dijo mirando como el blog de la chica y de Moon Girl había reventado en todos los sentidos esa tarde- en cuanto a la propia Lunella, diría que confía más en nosotros hasta cierto punto. Pero es igual a Hiro, en especial en lo recelosa. Si Hiro no está de paranoico con nosotros es porque Miguel hace bien su trabajo teniéndolo embobado.
Cosa que no le desagrada en lo absoluto a Miguel, había que recalcar.
Héctor: Hablando de nuestro chamaco... ¿Cómo crees que siga el chino? -pregunto curioso en lo que ella en respuesta solo suspiro.
Rosa: Triste... Pero lo superará... -dijo en lo que ambos se detuvieron frente a una puerta- es aquí.
Ahora llegamos a la famosa pregunta del millón de dólares: ¿Qué estaban haciendo el tío y la sobrina en ese lugar? Para aclarar, en realidad había varios niveles subterráneos además del primero y el segundo. El sótano era utilizado como bodega por la empresa, mientras que el nivel 2 funcionaba como una especie de cárcel de la empresa para retener temporalmente a personas que habían sido detenidas por diversas razones.
¿Y por qué fue retenida esa persona? Los crímenes eran sencillos, se le acusaba de entrar al país de forma ilegal y de entrar en el complejo de la empresa con fines hostiles. En ese momento, fue Hollow, también conocido como Sunpyre, quien se encargó de este intruso. A diferencia de otros incidentes de ese día, su captura se mantuvo en secreto debido a la peligrosidad de la persona y su historial.
Héctor: Entonces tuvimos otra intrusión aparte de las niñas esas... -dijo entrando a la celda siendo seguido por la más joven.
Rosa: Si, y este fue más osado. Intentó colarse donde tenemos nuestros proyectos más secretos. Hollow se encargó de él, el tipo resultó ser rudo, destruyó varios de nuestros robots de seguridad -dijo con algo de fastidio, Los super soldados sí que podían ser un fastidio.
Héctor: Ya veo, entonces... ¿Quién es el vagabundo? -preguntó señalando al hombre malherido que estaba amarrado con cadenas y grilletes para evitar su movilidad.
Rosa: El soldado del invierno -declaró con seriedad- el mejor asesino de la unión soviética en ese entonces, actualmente de Rusia. Aunque en Estados Unidos lo conocen o conocían como el sargento James Buchanan Barnes -reveló en lo que su tío se quedó pensativo.
Héctor: Ese nombre me suena de algo...
Rosa: Es normal que te suene, luchó junto a Steve Rogers durante la segunda guerra mundial. Al parecer los rusos lo raptaron y mantuvieron con vida con criogenización -explicó en lo que ambos observaban al hombre que solo los observaba sin ninguna expresión aparente.
A eso se había reducido uno de los mejores soldados de la época de la segunda guerra mundial, a una simple marioneta que por la fuerza debía obedecer a sus amos de la madre Rusia que experimentaron con él hasta dejarle el cerebro programado... no podían explicar porque, pero les recordaba al libro de la naranja mecánica en cierto modo.
Héctor: Con razón se ve mejor que yo.
Rosa: Tío, un palo de escoba se ve mejor que tú.
Héctor: ... Touché -admitió de buena gana.
Rosa: En fin, volviendo al tema, algo me dice que el objetivo del porque los rusos lo mandaran, era robarse todo lo que tenemos guardado aquí y puede que tal vez la misión también era matarnos a nosotros y algunos de los invitados de la fiesta del té -dijo para sorpresa del mayor.
Héctor: No puedo creerlo...
Rosa: Lo sé, usualmente van tras de ti, me sorprende que me quieran a mí también -dijo volviendo a aprovechar que ciertamente disfrutaba de molestar a su tío, sabiendo que él siempre se lo tomaría con humor por ser ella.
Héctor: Ya veo... ¿Ahora que hacemos con el americano traidor? Técnicamente nadie sabe que está aquí así que... -mencionó haciendo gesto de degollar con el cuello.
Rosa: No sabría decirlo, realmente no tengo problema con cruzar esa línea si me afecta directamente a mi, pero según sabemos él hace lo que hace por tener el cerebro lavado -respondió mientras revisaba los datos que tenían a la mano- con esa cara, parece que ya está muerto en espíritu y en vida.
Héctor: Interesante... ¿El gobierno y el ejército estadounidense ha sabido todo este tiempo que los rusos tenían a uno de los suyos y no hicieron nada?
Rosa: Tal parece -fue todo lo que dijo al respecto.
Ambos quedaron pensativos antes de que a los dos se les prendiera el foco casi al mismo tiempo.
Héctor: Bien, tenemos doble treta. Otro secreto que podemos usar contra gringolandia si nos joden. Y podemos exponer a Rusia revelando su secreto invernal al mundo -dijo sonriendo al encadenado- no finjas que duermes, no te sale. En todo caso, felicidades, no me preguntaste pero te contrato, trabajas para mi desde hoy -declaro tranquilo.
A la vez que el mercenario abrió los ojos completamente desubicado por tan extraña oración. ¿Había escuchado bien?
Bucky: ... ¿Perdón?
Héctor: Ya me oíste. Empezaremos por deslavar tu cerebro, no recuerdas nada del pasado ¿no es así? Podemos ayudarte a reiniciar el Windows, amigo -dijo ya pensando en usar su bastón como un bate de béisbol antes de ser reprochado por su sobrina.
Rosa: No así, menos -dijo quitándole el bastón al mayor para luego darle con él por costumbre- concéntrate.
Héctor: ... ¿Ya vamos en la parte baja de la novena, entrenador? -pregunto atontado mientras que por su parte, el soldado del invierno pensaba seriamente si había terminado en un manicomio.
Bucky:... No se porque tengo un mal presentimiento de todo esto...
Y con justa razón tenía derecho a pensar así.
Rosa: No deberías, te estamos ofreciendo un contrato con un horario de trabajo justo -dijo ya con dicho documento en mano- seis días a la semana, se pagan horas extra también. Seguro, plan dental y plan de jubilación asegurado. Y no hace falta decir que no se usará ningún correctivo de lavado cerebral -aseguro sonriendo- dudo mucho que los rusos te den tan buenas condiciones.
Bucky: ... ¿Tendrían qué? -fue todo lo que pregunto con una sonrisa de ironía, pensando que debía estar bajo los efectos de alucinógenos muy potentes, solo eso le daría sentido a lo que estaba pasando a sus ojos.
Volver a ser tratado como un ser humano de tú a tú después de tantos años... Era difícil de creer, imposible, incluso.
Rosa: Muy bien. Oh no eres muy conversador o de verdad no entiendes ni la mitad de lo que dije ¿De verdad solo te sacan para matar y ya, no? -pregunto en lo que el soldado solo asintió como si nada.
Bucky: ... Básicamente. Soy un soldado, cumplo órdenes, es todo.
Rosa: Entonces lo diré de una forma que lo entiendas. De todos modos posiblemente los rusos te maten cuando vuelvas por fallar -dijo si hablara del clima- así que tienes dos elecciones, trabajar con nosotros y vivir... O ya sabes que -dijo haciendo el gesto de una bala en la cabeza.
El soldado del invierno, todavía con la expresión perdida, miraba a Rosa y Héctor con esa mezcla de incredulidad y resignación que sólo alguien que ha sido manipulado y traicionado puede sentir. La idea de tener una segunda oportunidad, aunque fuera en circunstancias tan oscuras, parecía casi irreal.
El mayor del dúo de tío y sobrina, con su bastón en mano y una sonrisa que no llegaba a ser amistosa, se acercó lentamente al soldado. La luz tenue del sótano reflejaba en sus ojos, que brillaban con una mezcla de astucia y ambición.
Héctor: Tú no eres solo un arma, amigo. Eres una pieza clave en este juego. Y si colaboras con nosotros, te aseguro que tendrás la oportunidad de volver a sentirte vivo. No has sido solo un soldado, has sido una víctima de quienes jugaron con tu mente y tu cuerpo -dijo poniendo una mano sobre el lugar donde estaba el brazo metálico del soldado para enfatizar su punto.
Bucky, con un suspiro profundo, bajó la cabeza y cerró los ojos por un momento. La carga de sus recuerdos, de su pasado arrebatado como forzado, parecía pesarle aún más en ese instante.
Bucky: ... No sé qué quieren exactamente... pero si esto me da una oportunidad de entender quién soy de verdad, quizás valga la pena. Solo ... supongo que no me queda de otra a-acabo aceptando.
Rosa: Descuida, te trataremos bien, no queremos a un capitán América enojado de nuestro lado por tratar mal a su viejo amigo -menciono en lo que el otro no termino de entender eso último.
Bucky:... ¿Él y yo nos conocemos? -pregunto haciendo que ambos presentes de piel oscura se miraron mutuamente un par de segundos.
Rosa: Tenemos mucho que ayudarte a recordar.
Héctor: ¿Y porqué no? usar sus servicios de vez en cuando. Se incorporara fácil en nuestra unidad de "limpieza" -dijo en lo que su sobrina le terminó dando la razón tras pensarlo.
A su vez, por muy dañado que Bucky tuviera el cerebro, no era tinto, y podía fácilmente intuir a que se refieren con limpieza. Y no era precisamente a usar escoba y trapeador.
Bucky: Vaya, y se supone que son una empresa altruista -comentó sarcásticamente.
Héctor: Prefiero llamarnos pacíficos. Solo los que tienen la fuerza y no la usan pueden llamarse pacíficos. De lo contrario solo eres inofensivo y manso -dijo casual.
Rosa: Como tú enfrentando a tía Imelda o a Nana -mencionó haciendo que el mayor le viera con el ceño fruncido.
Héctor: Y dale con eso.
Rosa: ¿Lo vas a negar? Ándale, márcale a mi tía o a Nana y diles algo de ellas con lo que no estás de acuerdo -dijo, logrando golpear a su tío justo en el orgullo y la hombría.
Héctor: Alguien se está ganando qué mande una foto de su época de acné a su antigua escuela.
Rosa:... Te estas metiendo con fuerzas fuera de tu control, querido tío -amenazó sutilmente- no querrás que por ejemplo mi tía sepa de qué pasó en tu despedida de soltero, o que Nana averigüe por qué su comal de barro de cien años acabó como Frankenstein -dijo en lo que ambos procedieron a chocar frentes, no queriendo ceder terreno ninguno de los dos-
Mientras que, a su vez, el soldado del invierno solo soltó un suspiro muy pesado.
Bucky:... Están locos de remate -dijo con una sonrisa leve de lo absurdo que se volvió todo.
Al menos ya nada podía empeorar o hacer que ese día fuera aún más loco de lo que ya fue... ¿verdad?
_______________________________________________________________________
(Espacio exterior, cercanías del sistema solar)
La Batalla de Nueva York, también conocida como el Ataque a Nueva York, el Incidente en Midtown Manhattan, la Crisis de Manhattan o simplemente El Incidente, fue un conflicto decisivo entre los Vengadores y Loki junto a su ejército de Chitauri, que tuvo lugar en Manhattan. Según el plan de Loki, quien era el segundo príncipe de Asgard, esta fue su primera gran ofensiva para someter a la Tierra. Sin embargo, las acciones de los Vengadores lograron neutralizar la amenaza de los Chitauri antes de que pudiera continuar con su invasión.
Lo que pocos sabían era que, al detener esa invasión, la Tierra quedó en la mira del universo entero. Se convirtió en el primer planeta en resistir un ataque del señor del crimen y titán loco, Thanos. En la galaxia era bien sabido que los Chitauri eran en realidad subordinados de Thanos.
Este acto de rebelión y resistencia hizo que diferentes razas comenzarán a prestar atención a la Tierra. Algunas de ellas quisieron demostrar su valía logrando lo que Thanos no pudo: dejar su propia huella en el planeta. Un ejemplo de ello fue una raza invasora en camino hacia la Tierra, los ogros del trueno del planeta Oniboshi.
Sr. Invasor: ¡Bien! ¡¿Están listos para esto?! -pregunto con emoción- ¿si? Entonces ¡Ya es hora de invadir! ¡Esta vez nos divertiremos mucho! ¡Jajajajajajajaja!
Aunque, por contrario que pareciera, esta raza no tenía intención de enfrentarse directamente a Midgard ni de provocar la ira de Odín, pero sí querían poner a prueba la valía del planeta que había resistido a Thanos... era hora del juego del ogro.
Notes:
Y ese fue el capitulo de esta vez. Como siempre pueden votar, comentar, lo que gusten.
¿Y que les pareció?
No saben cuanto quería escribir esta fiesta del té y me alegra al fin haberla terminado. Y como recompensa para quienes leen esto, No se me olvido para nada que se supone que el Higuel debe ser lo principal aquí, así que el próximo cap será un corto con algo de lemmon con los Higuel. Espero que les sea de su agrado.
En fin, nos vemos.
Chapter 31: Corto (Hiro x Miguel)
Notes:
(See the end of the chapter for notes.)
Chapter Text
(General Pov)
(Azotea de Rivera Solutions, San Fransokyo)
Hiro: Ok... hagamos esto -dijo tras respirar hondo y dar un paso al frente, con las puertas del elevador cerrándose detrás suyo.
¿Cómo había terminado allí? La verdad fue tanta la emoción que ni siquiera lo recordaba con claridad. Después de que terminó la fiesta del té, Miguel lo había apartado un momento y, sin rodeos, lo miró a los ojos con toda seriedad y determinación. Le preguntó si estaría ocupado esa noche y, tras recibir su negativa, le propuso reunirse en la azotea del edificio de su familia esa misma noche, ya que tenía algo que decirle. Estaba invitándolo a una cita... y él aceptó casi sin pensarlo.
Aún no podía creer lo que estaba viviendo. Aunque técnicamente ya había salido con chicas antes, esta no era solo la primera vez que realmente se interesaba en un chico... Además, era la primera vez que tenía una cita formal. ¿Qué sabía él sobre citas? El baile con Megan no contaba, porque en parte la consideraba solo una amiga, y además, la forma en que terminó no ayudaba mucho. La verdad, no tenía la menor idea de qué esperar, y eso le generaba una ansiedad enorme.
Con un atrevimiento que rozaba lo cursi, su corazón se encontraba atormentado por la confusión. Sería ridículo admitirlo, pero cuanto más pensaba en ello, más claro le parecía: fue amor a primera vista. Al principio, esa idea lo petrificaba; ¡era un amor entre chicos! Por eso pensaba que Miguel solo era amable y que quizás estaba confundiendo sus sentimientos. Pero, después de escuchar a su hermana menor, empezó a cuestionarse y no podía aceptar sus sentimientos tan fácilmente. O al menos eso creía, porque, en el fondo, era solo un chico, ¿verdad? Sin embargo, pronto se dio cuenta de que decir eso era solo una forma de engañarse a sí mismo.
Siguió las instrucciones de Miguel y llegó al lugar donde horas antes había tenido lugar la fiesta del té, un evento del que nunca había oído hablar antes del modo en que Rivera Solutions lo llevó a cabo. Don Héctor, sin duda, merecía el título de rico excéntrico... pero, para su sorpresa, no podía negar que fue una experiencia divertida al final.
Al llegar, se llevó una gran sorpresa al ver que el sitio no tenía nada que ver con cómo estaba decorado en el día. Era, sin duda, el lugar más lujoso que había visto en su vida. Una araña de cristal colgaba en medio del cielo nocturno. Las mesas, las flores, las luces, la decoración, la comida... Solo estar allí lo hacía sentir que debía vestir ropa que costaba más que su sueldo entero del mes, trabajando en la cafetería de su tía.
Eso ya que aunque de momento lo mantenía en secreto, debía reconocer que la paga en Rivera Solutions era muy buena, tanto que hasta le parecía sospechoso lo bien que le pagaban. Y para no levantar sospechas en sus amigos o su tía, hasta ahora se ha quedado callado, pero tarde o temprano debía indagar más al respecto, dudaba que fuera un error de contabilidad, Rosa no lo permitiría de ningún modo.
Aunque rápidamente todo pensamiento en su cabeza se quedó en silencio al contemplar la figura que se acercaba hacia él. Miguel se acercaba con un aspecto absolutamente delicioso a la vista. Sus fotos para la publicidad eran bonitas, pero no podían captar su magnetismo en persona, eso era un hecho.
Miguel: Hiro, me alegra que hayas podido venir. Espero que te guste lo que hice con el lugar -dijo de forma cortés, haciendo al contrario sonreír sin saber qué contestar. Todo esto era demasiado para él.
Hiro: Es precioso, pero... la decoración parece un poco cara...
Miguel: No para mí. No te preocupes, y por cierto, no es tan hermoso como tú, Hiro -dijo con ojos de enamorado- y no te preocupes, nadie nos molestara. El lugar es solo nuestro, y mi jefe estará algo ocupado... -exclamo divertido por el recuerdo de lo que pasó
—
(Mini flashback)
Héctor: Pero a todo esto... Ime no apareció ¿verdad? -pregunto conforme el día se estaba acabando en compañía de su sobrina y su hijo. Solo para que ambos se vieron incómodos al haber olvidado por completo ese detalle.
Pero una cosa era segura, no iban a ser ellos los que caerían, o no señor.
Miguel: ¿No has revisado tu teléfono? ¿No será que no vino porque no supo a dónde ir, e intentó contactarte?
Héctor: Mijo, ¿Por qué clase de idiota me...? -pregunto revisando su teléfono, solo para encontrarse con que tiene varios mensajes y llamadas perdidas- Oh no... Espera un momento ¡Les dije a los 2 qué la buscarán! -reclamó a ambos jóvenes que rápidamente se zafaron.
Miguel: Eh... No. De hecho pensábamos que irías tú. Yo estaba ocupado vigilando a Leo y Marco -se justificó rápidamente.
Rosa: Yo soy la de mejor memoria y jamás nos pediste nada de eso, yo estaba ocupada contigo atendiendo la fiesta y los tratos.
Héctor: ¡No se hagan los...! -exclamó queriendo librarse de la responsabilidad también. Solo para quedarse boquiabierto al no ocurrírsele nada. Para acto seguido solo resignarse y afrontar su destino hacia la horca, que así se sentía sabiendo que Imelda se quedó en la aduana posiblemente toda la tarde.
Y no hace falta decir como acabo eso.
Imelda: ¡Menso! -golpeándolo con un rodillo para el pan.
Héctor: ¡Bomboncito!
Imelda: ¡Tarupido! -Ahora con una sartén.
Héctor: ¡Cielito!
Imelda: ¡Estúpido! -se desahogó dándole al contrario con una llave inglesa hasta cansarse.
Héctor: ... ¿Dónde está la gotera, señora? -fue todo lo que dijo antes de perder la conciencia.
Y aun con todo, si le preguntaran, diría que amo ese reencuentro con su ex esposa.
(Fin del flashback)
___
Miguel: En todo caso, esta noche es solo nuestra -dijo pareciendo querer decir algo más, pero mira el reloj en su muñeca y suspira antes de sonreír- ¿Me acompañas a tu mesa, cariño? -pregunto cogiendo al otro joven del brazo tras tener consentimiento de este.
Acto seguido el más alto de los dos guía al otro chico hasta una mesa a la luz de las velas situada en un rincón apartado de todo y de nada en realidad, de algún modo para Hiro, ese pequeño rincón le parecía un lugar aparte del mundo, cosa que le agradaba, quería privacidad con ese chico. Quién le acercó una silla para que tomara asiento para luego sentarse en frente suyo.
Miguel: Ya había pedido un vino de antemano. Espero que te guste el blanco. Si prefieres el rojo igual puedo...
Hiro: No bebo -dijo casi de forma automática. Para acto seguido sentir que había metido la pata, ni un minuto de llegar y ya había matado el ambiente. Pero es que la sola idea de beber cuando nunca antes lo había hecho...
Es más ¿Miguel bebía? En parte lo entiende, ambos están en la edad de la adolescencia. Pero conforme más lo pensaba. Es verdad que él hizo cosas rebeldes como salir de casa a mitad de la noche, apuestas ilegales, incluso fue arrestado un par de veces... Pero cosas más normales para estándares adolescentes como fumar, drogas, licor, él no ha hecho nada de eso antes ¿Miguel si? No sentía correcto preguntar, pero la verdad sentía mucha curiosidad ahora.
Miguel: Perdoname, no debería haberlo supuesto. Una lástima, el blanco que pedí es de una cosecha especialmente buena. Bueno, más para mí, supongo -dijo encogiéndose de hombros antes de servirse una copa- ¿agua o una limonada?
Hiro: Una limonada estaría bien -dijo aceptando una copa de un buddie guardia que estaba haciendo de mesero.
Miguel: Excelente. Los dos tomaremos el filete ¿Cómo lo recomendarías? -preguntó al robot que mostraba los diferentes tipos de cortes. Lo que hizo a Hiro volver a actuar por instinto en consecuencia.
Hiro: De hecho, me gustaría echar un vistazo a las opciones disponibles, veo que hay bastante comida para elegir -dijo mirando la mesa cercana con diferentes opciones.
Miguel: Claro -dijo de nuevo siendo tomado por sorpresa- todo fue preparado en caso de que algo no te gustara, solo mencione el filete porque según Kyle es de sus platos más famosos. Cosa que puedo confirmar, tienes que probarlo.
Hiro: Y lo consideraré, pero todavía me gustaría elegir por mi mismo y ver que hay -pidió amablemente, a lo cual el moreno frunció el ceño por un momento para luego hacer un gesto con la mano para que el robot le diera un menú de lo que había a disposición.
Por su parte, el nipón tomó el menú con manos temblorosas, hojeándolo lentamente, tratando de no parecer demasiado ansioso. Cada opción parecía más deliciosa que la anterior, y aunque podía sentir una pequeña sonrisa nerviosa en sus labios, trataba de mantener la compostura. Intento tomar una decisión en el incómodo silencio que siguió para terminar eligiendo pollo en costra de hierbas con salsa dulce. No siendo hasta que el robot se fue, que el chico de piel pálida noto al moreno sonriéndole.
Parecía muy confiado y tranquilo... ¿se traducirá esa misma confianza en la cama?... Ok, no sabia porque pensó es de repente, pero ya sintió las consecuencias de ese pensamiento cuando un calor en el fondo del estómago apareció. Bueno, mentiría si dijera que no sabía de dónde salió ese pensamiento... fue el resultado de su "investigación".
Un importante estudio científico en el que se invirtieron varias horas de estudio de campo y de observación para comprender el tema en profundamente con fines científicos y de interés personal... (Traducción: Se leyó una montaña de novelas y mangas del género BL con fines de una "investigación proactiva" antes de la cita, y terminó con las hormonas alborotadas).
Miguel: Me alegra mucho de que hayas podido venir. Las cosas han sido estresantes últimamente. Necesitaba relajarme. Desahogarme -mencionó tomando al otro por sorpresa.
Como su asistente de la banda, sabía que dedicaba mucho tiempo a hacer que su banda fuera un éxito, algo que le requería bastante esfuerzo, especialmente porque su padre era muy estricto con él, con sesiones privadas y otras obligaciones. Además, asistía a clases con el robot inteligente, y Rosa y Héctor lo arrastraban a reuniones y juntas cada que respiraba, dejando poco tiempo para convivir con su hermanita y su perro. Por primera vez, se daba cuenta de que en realidad ambos estaban igual de ocupados cada día. Era algo un tanto divertido y casi cómico.
Hiro: Entonces... ¿a qué esperas? -pregunte empático- aquí estoy para que te desahogues -exclamó solo para sobresaltarse luego de que Miguel sonriera, y sentir como él estiró su mano por debajo de la mesa para apretarle la rodilla.
Miguel: Paciencia -dijo usando su otra mano para entrelazar sus dedos con los de Hiro en lo que la mano que estaba debajo de la mesa comenzó a masajear el muslo al otro chico- compartir la cena antes hará que todo sea mucho más divertido. Podemos conocernos más de lo que ya lo hacemos... aprender lo que nos gusta y lo que no... te lo prometo. Merecerá la pena esperar -dijo con un tono de voz que hizo al contrario sonrojar.
No estaba seguro si era su mente jugando una broma, si lo estaba interpretando mal o si realmente le estaban insinuando lo que él pensaba. Sin embargo, ese comentario tenía muchas connotaciones sexuales, lo que le hacía sentir que le hervía la sangre en la cabeza por la vergüenza. Momento en que agradeció que llegaran sus bebidas y ambos se tomaron un momento para saborearlas. Por un momento, Miguel parecía distraído.
Hiro: ¿Porque estás estresado? -pregunto queriendo romper el silencio. Ganándose una sonrisa cansada del moreno.
Miguel: Trabajo, ya sabes, con la banda, familia, cosas de la empresa. Me encanta, pero las exigencias nunca cesan. Apenas tengo tiempo para algo de gimnasio y cardio -dijo adrede sonriéndole, presumiendo su brazo musculoso al pelinegro que disimuló mientras tragaba grueso acabando su bebida de golpe- ¿Y tu, Hiro? ¿Qué tal todo?
Hiro: Pues ya debes saberlo, aparte de trabajar junto con Rosa siendo el asistente de tu banda, de milagro aun no he dado de baja la universidad. A veces quiero ahorcar a Leo cuando nos da hasta la madrugada en su proyecto de animación, apenas es que Spencer logra que no nos ahorquemos mutuamente -dijo divertido- pero lo mejor de todo es cuando tía Cass me pide ayudarla en el café... nadie hace un moca más malo que yo, a veces escribo insultos en la espuma.
Miguel: Suena impresionante, a veces se me olvida lo increíble que eres -dijo sacándole un leve sonrojo al otro joven- sabes, Hiro, a veces solo necesitamos un momento para desconectar de todo ese caos. Mis cosas, tus cosas... en especial tú, con todo lo que tienes encima, mereces un descanso.
Hiro: No me digas eso, el descanso y yo no nos llevamos, a menos que sea para videojuegos -admitió con sinceridad- así soy yo. Muchas matemáticas, muchos ordenadores y robots. Soy un friki de los datos -dijo para luego callar al escuchar a su cita reír quedamente... era una linda risa.
Miguel: Eres gracioso, Hiro. Me caes bien, en serio -dijo volviendo a entrelazar los dedos de ambos. Momento en que la comida fue servida.
Después de llegar y probar un bocado, rápidamente se dio cuenta de que era uno de los mejores platillos que había probado (solo por detrás de los de su tía, por supuesto). Toda la conversación pasó a un segundo plano mientras se dejaba llevar por el sabor de la comida. Gracias a Dios, no tenía que pagar nada; sabía que cada bocado valía un montón.
No siendo hasta que terminó el último bocado que noto como Miguel lo observaba como sumo interés, como si fuera la cosa más interesante en el mundo. Cosa que lo apenó y lo hizo sentir cohibido.
Miguel: Eres realmente hermoso ¿sabes? Verte en persona, es algo que agradezco siempre -exclamó con un tono amable y enamorado que hizo al contrario apenarse.
Hiro: Tú tampoco estás mal... ¿intenta seducirme, joven señor Rivera? -pregunto queriendo molestar un poco sabiendo sobre los sentimientos de su cita. Pero la respuesta no se la espero.
Miguel: Si -afirmo como si nada- ¿Funciona?
Hiro sintió que su corazón se aceleraba aún más ante esa respuesta tan directa y confiada. La sonrisa de Miguel parecía insinuar que jugaba con él, pero en su mirada había una sinceridad que Hiro no podía ignorar. Era una sensación que le recordaba a cierto ladrón que lo ponía de mal humor el solo recuerdo. Pero en cambio, Miguel solo bastaba una mirada coqueta para que su corazón se acelerara a mil por hora.
Hiro: Bueno... entonces creo que tendré que tener cuidado con lo que digo. No vaya a ser que termine en un lío más grande del que ya tengo -dijo divertido a la vez que el moreno soltó una suave carcajada, disfrutando de la chispa en los ojos de Hiro. Luego, se inclinó más sobre la mesa y bajó la voz, casi susurrando.
Miguel: Entre las mejoras recientes en el edificio principal, se han añadido un par de suites de hotel de lujo para alojar a invitados que se queden hasta tarde o por unos días. Tengo las llaves de una de esas habitaciones para esta noche -susurro en su oído, a la vez que un escalofrío le recorrió la espalda al nipón cuando se inclinó hacia él, con voz seductora- ¿Qué dices? ¿Te apuntas?
No hace falta decir que el nipón sintió cómo su respiración se aceleraba, su corazón latía con fuerza en el pecho. La confianza y el tono seductor de Miguel le hicieron notar que esa invitación no era solo una broma o una simple sugerencia. Por un momento, el mundo a su alrededor pareció reducirse a esa pequeña mesa, a la mirada intensa del chico de ojos oscuros y la promesa de algo único en su voz. Fue tanto el cúmulo de emociones que se vio incapaz de hablar. En lugar de ello, solo asintió con la cabeza.
A lo cual, el joven latino se levantó, tomó al nipo americano de la mano y lo llevó a los ascensores. Cuando las puertas se cierran detrás de ambos, es el momento en que los dos chicos se percatan de que realmente están solos por primera vez, y la expectación recorrió sus cuerpos casi de forma automática. Ambos no sabiendo realmente cómo tomarse lo que estaba pasando.
Era evidente que Hiro estaba dejándose llevar, guiado por Miguel. Sin embargo, en realidad, el joven latino también se encontraba igual de nervioso. Mentiría si dijera que no deseaba hacer lo que claramente estaba pensando. Pero había varias razones por las que no lo sentía correcto. Empezando por todo el asunto de los alter egos, que sentía que era muy pronto, y además, no se sentía realmente preparado.
Cada persona vive la experiencia sexual de manera diferente. Todo influye: los conocimientos, la experiencia, la edad y el tamaño de la pareja. Por ejemplo, si una pareja es joven y sin experiencia, es muy probable que algo duela. Y él no quería que eso le sucediera a Hiro; quería que su primera vez oficial fuera como debería ser, un momento único e inolvidable. Por eso, se sentía conflictuado con lo que él mismo había propuesto, motivado por la emoción del momento. Sin embargo, no pensaba retractarse; quería llegar lo más lejos posible. Solo ansiaba tener la fuerza de voluntad suficiente para no llegar a un punto donde terminará arrepintiéndose.
Por su parte, Hiro se sentía emocionado y nervioso. Ese no es el tipo de cosas que hacía normalmente. Se le estaba revolviendo el estómago de mariposas mientras pasan los números hasta que el elevador se abrió frente a ellos. Miguel le conduce a una gran habitación con una enorme cama de cuatro postes cubierta de seda. Una vez entraron, el pelinegro solo escucho como se cerraba la puerta detrás suyo con un clic.
La tenue luz de las lámparas de noche y las velas que Miguel había encendido apenas iluminaban el espacio, creando sombras que danzaban en las paredes. Hiro, con el corazón latiendo con fuerza, miraba a su alrededor, nervioso y emocionado a la vez. Sus pensamientos se estaban mezclando en su mente, pero una parte de él quería confiar en esa sensación, en aquel momento, en la promesa de lo que podría suceder.
Miguel se acercó lentamente, dejando que sus ojos recorrieran la expresión de Hiro mordiéndose el labio, buscando alguna señal de lo que él sentía en ese instante. La ansiedad, la emoción, el miedo ¿y quizás un poco de deseo? La confianza que había en su mirada y la forma en que el joven nipón se mantenía en silencio le daban la oportunidad de avanzar con cuidado y respeto.
Solo para que en ese momento al sentir que su corazón iba a explotar y que ya no había marcha atrás, Hiro decidió solo apagar su cerebro y dejarse llevar, ya se lamentaría o se dejaría dominar por el estrés después. De allí sin más, el de piel más pálida se acercó al otro joven, y le rodeó la nuca con las manos, atrayendo sus labios hacia los suyos. Lo que hizo que Miguel dejara escapar un suspiro de sorpresa y luego hundió los dedos en la melena de cabello del más bajo, devolviendo el beso con entusiasmo, ambos adaptándose al ritmo del otro conforme pasaban los segundos.
Miguel: ... Eres realmente hermoso -fue todo lo que dijo una vez se separaron para verse a los ojos. Fue el primer beso de ambos, y fue sencillamente perfecto.
Luego pasó a ser el turno de Miguel para tomar la iniciativa, pasando un dedo por la barbilla ajena, inclinándola hacia arriba. De allí en más Hiro jadeo cuando él capturó sus labios con los suyos. Su lengua acarició la costura de tus labios mientras su mano se desliza hacia abajo para sujetar su cintura. Después, en un movimiento más atrevido, el moreno le agarró las nalgas a su cita, tirando de él más cerca, y el nipón no pudo evitar gemir cuando sintió su dureza contra él. Las cosas iban increíblemente rápido.
El joven Hamada, dejando que sus instintos tomen el control, desabrochó con cuidado el cinturón de los pantalones del más alto y sin pensarlo, deslizó su mano en su interior. El mexicano se río mientras el de piel más clara acariciaba su vientre bajo con las yemas de los dedos hasta llegar a su ropa interior. Entonces sus dedos rozaron su dureza, y allí Hiro no pudo evitar sonreír mientras él de apellido Rivera soltó un jadeo de placer.
Miguel: Te gusta tomar el mando ¿verdad? -pregunto tomando al otro chico de las muñecas- no podemos permitirlo -exclamó para acto seguido besar al otro chico con más fuerza, dejando caer su mano en la cintura ajena.
En respuesta, las manos del mitad japonés subieron hasta los botones de la camisa de Miguel. Al comienzo le desabrocho la camisa despacio con algo de nervios, deteniéndose en cada uno de ellos, pasando la yema del dedo delicadamente por el pecho ajeno. Haciendo a su amor platónico gemir desesperado haciendo sonreír al nipón. Quien sin controlarse por la adrenalina que iba y venía en él, le abrió el resto de la camisa de un tirón, haciendo volar los botones por todas partes, cosa que hizo al latino gruñir de placer. Y en respuesta, Hiro reconoció que posiblemente su propia ropa está seguramente rota para cuando quedo desnudo tras ser destrozada por Miguel, botones y cremalleras eran demasiado lentos y complicados ante la necesidad del tacto.
Entre besos y manos moviéndose en todos lados por ambas partes, el moreno empujó al otro joven a la cama y Hiro le miró, contemplando cada centímetro de él más alto. Hiro no tenía razón alguna para negarlo, Miguel era glorioso, musculoso y tonificado en todos los lugares correctos. Y el tamaño de su "amiguito"... bueno, digamos que NO le decepciona para nada.
Sus ojos se quedaban ahí y se le hacía la boca agua. Era grande, más grande que cualquiera que haya visto o imaginado antes, incluso tardó un momento en hacerse a la idea de su tamaño. Allí tenía una forma excelente de tomar el control. Debía poner en práctica todo lo que estudio, y aunque posiblemente acabará haciendo el ridículo... maldita sea ¡quería hacerlo, luego se moriría de vergüenza!
Se inclinó hacia adelante, para luego, tras respirar hondo y decidirse a hacerlo, tomó el miembro con las manos, y tras superar la emoción de sentir "eso" en sus manos, guiándose por la lujuria y fantasía, le dio un beso en la punta. Entonces, queriendo hacer aún más cosas, lamió a lo largo de su longitud, y por su parte Miguel maldijo por lo bajo excitado. Cuando lo rodeas con los labios, los dedos del moreno se hunden en el cabello ajeno, animándole a seguir.
En ese momento, no había duda de que ambos habían dejado atrás cualquier nerviosismo o temor. La pasión desbordada y el deseo incontrolable por la satisfacción sexual y los placeres sensuales habían tomado las riendas, especialmente considerando que ambos se querían profundamente (claro que lo sabían). Y habían estado coqueteando durante semanas. Esa pasión surgió con una fuerza arrolladora que dominó tanto la mente como el corazón, llevándolos a actuar de manera impulsiva en busca de gratificación. En su forma más pura, ese deseo representaba una expresión genuina de sus sentimientos, pero también podía convertirse en una fuerza destructiva si no se mantenía bajo control.
De allí que un momento después, Miguel hizo al contrario parar empujándolo un poco hacia atrás.
Miguel: Todavía no -dijo cuando notó el gesto de reproche de Hiro- se siente demasiado bien, quiero que te sientas igual -declaró para luego besarlo, presionando piel contra piel. Sus dedos acarician la suave piel de Hiro con frenesí hasta que apenas puede respirar. Ambos solo pueden pensar en cuánto lo desean.
Hiro no hizo más que mirarle con picardía mientras el más alto se cernía sobre él. Quería sentir todo su peso presionandolo contra el colchón, y que sus piernas se abrieran sin pensarlo. Miguel deseando dar placer a su chico, le beso el cuello y luego mordió el lóbulo de la oreja del nipón. Su aliento le hacía estremecer, el de sangre oriental solo pudo sentir como la boca ajena recorrió con delicadeza y placer todo el camino, desde la comisura de sus labios hasta su entrepierna. Disfrutando cada centímetro de piel, quedándose un momento en los pezones y el ombligo del más delgado al escucharlo gemir en esos lugares en particular.
Miguel: Ahora ¿Cómo quieres esto? ¿Lento y suave? ¿O quieres ver lo que realmente puedo hacer?
Hiro:... ¿Así que será un oral?... Dame con todo -dijo para luego ver como el moreno le sonrió con confianza.
Miguel: Tus deseos son órdenes -exclamó para acto seguido agarrarlo de la cadera y sin más, llevárselo entero a la boca.
Siendo justo en ese momento donde oficialmente lo poco que quedaba de sentido común de Hiro se fue a tomar unas vacaciones prolongadas. Lo cierto era que hasta le fecha él nunca había experimentado esa parte de él, nunca se había "tocado" por dedicar todo su tiempo a la ciencia y su trabajo... pero nunca pensó que sería tan... tan... ni siquiera tenía palabras, solo sabía que el alma se le salía cada vez que sentía esa lengua y esos labios jugar con su... quería gritar, arañar, gemir, suplicar porque siguiera, se sentía demasiado bien.
Sentirse así de cuidado y atendido por otra persona de esa forma tan íntima, que procuraba concentrarse en su placer. Era algo que ahora podía decir que deseaba, y no sentía derecho a pedir en realidad... esa sensación de humedad y fricción lo estaba volviendo loco, la estimulación que Miguel le estaba dando, ahora se sentía como un imbécil por no haber hecho cosas de adolescentes normales como esa antes... ahora mismo estaba gimiendo mientras agarraba con fuerza el cabello del moreno, y no le importaba, quería que eso siguiera y nunca parara...
Inmediatamente en respuesta, el impuso un ritmo feroz y castigador, a lo cual Hiro no pudo evitar gritar mientras el placer le recorría por dentro. Estaba apretado contra el colchón, con sus manos sobre sus muslos para apoyarse mientras no tenía piedad con su parte más sensible al parecer. Pero al nipón no le importaba, él se sentía como si volara. Escapaba a un mundo de placer frenético y amaba hacerlo. Y para no quedarse todo el placer, se irguió un poco para con su mano atender al moreno también, haciéndolo gemir mientras más ganas le metía a su labor.
Al ser la primera vez de ambos, era normal que no tardará mucho para que ambos se corrieran, también fue duro y rápido, y él universitario no pudo evitar gritar de la fuerza que tuvo eyacular, solo podía decir que se sintió... liberador. Miguel terminó un instante después soltando un rugido de placer amortiguado mientras terminaba de "limpiar" el miembro de su crush. Una vez terminó, los dos se desplomaron sobre las sábanas, jadeando. El mundo parece dar vueltas y si que había valido la pena.
Miguel: Créeme, de ser por mi, te hubiera dado el servicio completo... pero mejor vamos paso a paso ¿esta bien? -señalando que seguía duro- entonces ¿cumplí con tus expectativas? -pregunto curioso sonriendo con suficiencia, sin esperar respuesta, el rostro sonrojado y agitado de Hiro era más que suficiente para él.
Pero antes de que Hiro pudiera decir nada, suena su teléfono, siendo así que el nipón solo lo vio buscando atender la llamada, viendo al moreno dejando escapar un suspiro frustrado y buscando sus pantalones para leerlo.
Miguel: Tengo trabajo -fue todo lo que dijo.
Hiro: ... ¿Tienes que irte? -pregunto incrédulo. Recibiendo un beso en la frente como respuesta..
Miguel: ¿Me preguntas si quiero? Créeme, no quiero -dijo en lo que buscaba su ropa para empezar a vestirse. A lo cual Hiro, por su parte, quien no quería que eso terminara así, se incorporó cubriéndose con una sábana para luego abrazarse al moreno por detrás.
Hiro:... Quédate -fue más una orden que una petición, pero el tono de súplica estaba allí- quiero que te quedes conmigo- dijo frunciendo el ceño, su expresión mezclaba tristeza y determinación. Aun así, apretó sus brazos alrededor del cuerpo de Miguel, buscando absorber más de su calor, de su presencia- ¿Y si te digo que no quiero que te vayas? -murmuró con voz temblorosa- Que prefiero que te quedes aquí, conmigo, aunque sea solo un rato más... por favor.
Ante eso, Miguel sintió esa petición como un golpe en el pecho. La sinceridad en la voz de su amor le atravesó el alma. Por un momento, consideró qué tan importante era el trabajo para el que le llamaban, pero también recordó cuánto significaba esa cercanía con Hiro, esa conexión que ahora compartían... y decidió que al diablo con todo antes de abrazar al otro chico y ambos acabar acostados en la cama una vez más.
Miguel: Está bien, me quedaré contigo. Posiblemente me regañen por eso, pero aquí contigo... eso es todo lo que necesito ahora.
El pelinegro, con la cabeza apoyada en el pecho de Miguel, sonrió débilmente, sintiendo que por fin podía permitirse un momento de paz en medio del caos que era su vida. Cerró los ojos y se aferró a esa sensación de cercanía, como si el mundo exterior pudiera desaparecer en ese instante y no le importaría.
Hiro: Gracias... por esto. Por estar aquí conmigo.
En respuesta, Miguel, acariciando suavemente el cabello de Hiro, sintió que esa simple declaración llenaba su alma de una calidez que no podía describir con palabras. Sabía que no podían detener el tiempo, que la vida seguía empujándolos en direcciones opuestas, pero por ahora, en ese instante, solo existían ellos dos, en esa cama, en esa habitación.
Miguel: Por cierto, a estas alturas seria tonto preguntar pero... ¿serias mi novio? -pregunto tomando al otro por sorpresa.
Hiro, con el rostro aún sonrojado y el corazón latiéndole con fuerza, levantó la vista para encontrarse con los ojos del otro chico. Por unos segundos, ambos se quedaron en silencio, el peso de las palabras aún en el aire. La sonrisa tímida del más pálido se expandió lentamente, y sin decir nada, asintió con la cabeza, una chispa de esperanza brillando en sus ojos.
Hiro: Sí... quiero ser tu novio -fue todo lo que dijo en un susurro en lo que el moreno, con una sonrisa cálida y una mirada llena de ternura, le acarició la mejilla suavemente. La complicidad entre ellos creció en ese instante, como si el universo entero hubiera conspirado para que ese momento fuera perfecto.
Miguel: Entonces, eso significa que oficialmente somos novios. Y te prometo que haré todo lo posible para que seas feliz, Hiro -declaró antes de sus labios ser atrapados por el otro chico nuevamente.
Los labios de ambos se encontraran en un beso suave y lleno de promesas. La conexión que compartían parecía fortalecerse, como si el mundo exterior desapareciera por completo en ese abrazo... y lo que le seguiría después.
_______________________________________________________________________
(Bahía de San Pablo, límite fronterizo con San Fransokyo, Estados Unidos)
Por fin había logrado llegar; fueron varias lunas en alta mar para alcanzar esa tierra extranjera. Durante el viaje, descubrió que se mareaba con facilidad en el mar, pero esos eran detalles que no le importaban demasiado. Lo único que le quedaba por hacer era averiguar cómo atravesar las defensas, así como el campo mágico, para poder ingresar a esa tierra extraña donde casi se expusieron todos los secretos de los guardianes de los Miraculous.
Al principio, esa no era su misión en absoluto. Al comienzo, le habían ordenado viajar a la ciudad de Nueva York para observar de cerca el progreso de la heroína llamada Águila, aprender cómo manejaba el uso de los Miraculous y ayudarla a recuperar la caja robada. Desde la primera noche, los guardianes se habían enterado del robo, así que esa había sido la prioridad inicial. Pero, en el último momento, justo cuando ya había llegado a tierra, recibió nuevas órdenes a través del plano astral: le informaron que en un país emergente, la caja que había sido robada, casi fue abierta y expuesta al mundo entero.
Cosa que al final se logró evitar, pero a ojos de los guardianes se dejó más que claro que Águila no estaba lista para el deber de guardiana. Quitándole la posibilidad de ostentar ese cargo en el futuro, y en su lugar, estaría bajo una estricta vigilancia un tiempo largo hasta que pruebe estar lista para ese deber en el futuro. Algo en lo que él no tenía nada que opinar, confiaba en las decisiones de los guardianes, a fin de cuentas, ellos le habían acogido y aceptado como uno de los suyos desde que su abuelo el rey luna falleció un año después de volverse humano.
Las órdenes eran simples, explorar esa tierra extraña y descubrir al responsable del robo así como sus razones de porqué lo hizo. Y encargarse del asunto de ser necesario... fácil ¿no?
Kubo: Menudo desastre... Wang, de verdad que lo arruinaste todo, y solo porque no te podías aguantar el ser un tragón... -dijo por lo bajo antes de suspirar, dejando de tocar por unas monedas un momento- igual ya no importa, ahora solo queda tratar de limpiar sus desastres y asumir las consecuencias de estos.
Ese siempre acaba siendo un problema con los portadores de miraculous, al final creen ser quienes para hacer lo que les dé la gana y decidir el destino de las joyas por cuenta propia creyendo que saben lo que hacen. Un claro ejemplo fue Gilbert Du Motier, quien se le dio el miraculous del águila como un favor apelando a que ayudara a poner fin a todo el conflicto, y en vez de devolver el miraculous al guardián, se lo regaló a George Washington para fundar su "país libre".
Y décadas después, justo cuando los guardianes descubrieron donde estaba la joya, fue que Wang Fu echó todo a perder... de nuevo, no había nada que hacer. Por ahora se centraría en que tenía un deber que cumplir.
Notes:
Y ese seria el corto, espero que les gustara.
Chapter 32: Capitulo 28: Eventos inesperados
Notes:
(See the end of the chapter for notes.)
Chapter Text
(General Pov)
(Pueblo Tomoboki, Cercanías de Tokio, Japón)
En ese momento, el mundo parecía seguir su curso habitual, sumido en la rutina cotidiana de millones de personas. La vida continuaba en ciudades bulliciosas como Londres, Nueva York, en los majestuosos Alpes y en las imponentes cumbres de los Andes. Cada quien con sus propios asuntos, sus sueños y preocupaciones, sin sospechar que algo extraordinario estaba a punto de alterar por completo esa aparente normalidad. De manera simultánea y en diferentes puntos del planeta, ocurrió algo que trajo malos recuerdos a la mayoría de la gente: naves espaciales comenzaron a aparecer en el cielo, emergiendo en lugares tan diversos como las metrópolis más modernas y las regiones más remotas.
Sin previo aviso, estas gigantescas estructuras flotaron en la atmósfera, brillando con luces que desafiaban toda lógica conocida. La aparición de esas naves provocó un impacto inmediato en la población mundial; la gente se detuvo en sus actividades, miró hacia arriba con asombro y temor, y los medios de comunicación comenzaron a transmitir en vivo, intentando comprender qué significaba aquella invasión silenciosa. Para los héroes y personas de espíritu valiente que habían enfrentado amenazas anteriores, como la invasión de Loki y su ejército en la gran batalla de Nueva York, esta aparición no fue del todo sorprendente, pero sí inquietante. La pregunta que todos se hacían era la misma: ¿Qué buscaban esas naves? ¿Venían en paz o traían una amenaza que pondría en riesgo el planeta?
La respuesta en realidad era a la vez simple y compleja. Y quienes se ocupaban de lidiar con el asunto eran dos de los mejores agentes de S.H.I.E.L.D, Clint Barton alias Hawkeye y Natasha Romanoff alias la viuda negra. Enviados a buscar a cierta persona por motivos confidenciales.
Clint: Allí está el chico. ¿Cómo se llamaba? Ataru Moroboshi, según la información y la foto creo que dimos con el chico -exclamó espiando al joven castaño que estaba distraído mirando la retaguardia de un grupo de chicas que pasaban por allí.
Era más que el típico pervertido, era todo un amante de la perversión, tanto que la marca en su cara ya debía ser algo común para él ¿por que lo buscaban? Al universo al parecer le gustaban las bromas pesadas de algún modo.
Natasha: Me dan ganas de patearlo con solo verlo, pero ni modo, él fue el "afortunado ganador" -dijo con fastidio- vamos por él.
Siendo así como el adolescente pasó de estar caminando por la calle con tranquilidad rumbo a su casa luego de haber tenido un raro encuentro con un extraño monje que le habló sobre que la sombra de la muerte se cernía sobre él y otras tonterías más. A estar siendo sujetado por Clint quien le había puesto un saco en la cabeza, mientras era transportado a una ubicación secreta.
Ataru: ¡¿Qué se supone que hacen?! ¡Suéltenme! ¡A mi no me van los hombres! -grito girando la cabeza en dirección al rostro de Hawkeye quien solo rodo los ojos divertido.
Clint: A mi tampoco -dijo mordiéndose la lengua al estar a punto de decir en broma que a fin de cuentas está casado y con hijos.
Natasha: Objetivo asegurado, estamos regresando a la base -informo antes de ver las naves en el cielo- ¿Crees que esto es solo una visita pacífica o nos están preparando para algo peor? Porque, por lo que veo, no tienen intención de bajar a saludarnos -mencionó con sarcasmo haciendo reír a su compañero.
Clint: No lo sabemos. Pero sea lo que sea que quieran, solo diré que algo grande está por suceder. Y nuestro trabajo es asegurarnos de que no sea un desastre total. Y si todo se va al diablo, bueno, ya le dimos su lección al de los cuernitos. Tenemos experiencia en mostrarle a la gente del espacio exterior quien manda -dijo en lo que ambos guardaron silencio.
Mientras tanto, Ataru, aún con el saco en la cabeza, intentaba mantener la calma, aunque su mente bullía con preguntas y miedos. No entendía qué estaba pasando ni por qué estaban llevándolo a un lugar desconocido. De momento solo tenía una cosa segura... la mujer que escucho, solo por el tono de su voz, debía ser una mujer sexy que estaba bien buena... y él con la cabeza tapada, la vida era tan injusta.
_______________________
(Base móvil de S.H.I.E.L.D. (Helicarrier N° 64 ), espacio aéreo del gobierno japonés en océano pacifico)
El Helicarrier N° 64 se desplazaba majestuoso sobre las aguas del Océano Pacífico, oculto entre nubes y con la suficiente tecnología para mantenerse invisible a ojos no entrenados. Dentro de uno de sus cuartos secretos, Clint Barton y Natasha Romanoff tomaron asiento, dejando en una silla a un confundido Ataru a quien le quitaron el saco. Dejando al joven la vista de una habitación de lo que claramente parecía ser una base militar.
Donde estaban sus padres, el par que asumió que lo acababan de raptar, un tipo moreno sin pelo y con un parche, y para rematar... una especie de ogro de más de 2 metros, casi 3 incluso... ¿pero que? ¡¿Un Oni?!
Fury: Por favor perdónanos por la rudeza, esto debía atenderse en la mayor brevedad posible -aclaró- me presento, mi nombre es Nick Fury, Director de S.H.I.E.L.D, La División Estratégica de Intervención, Aplicación y Logística de la Patria. -se presentó antes de señalar al hombre de gran tamaño- y este de aquí es... el señor invasor que ha cruzado toda la galaxia para invadir nuestro planeta.
Sr. Invasor: ¡Bienvenido! -dijo sonriendo- así como dijeron, soy un invasor que quiere conquistar la tierra. Aquí tienen mi tarjeta ¿me podrían escuchar? -mencionó con calma dejando un gran trozo de papel sobre la mesa, que al final solo era un retrato suyo con un pulgar arriba mencionando que su planeta tenía suerte de ser conquistado por él.
Nick Fury frunció el ceño, observando con atención la tarjeta que el extraño invasor había dejado sobre la mesa. La figura del ser, un Oni de ropa amarilla con rayas como las de un tigre y grandes cuernos, parecía tan calmada y confiada que contrastaba con la tensión en la habitación.
Fury: ¿Eso es todo lo que tienes que decir? ¿Una tarjeta con un mensaje de "suerte" y un pulgar arriba? ¿Es en serio?
Clint: Oye, hay que darle puntos por la originalidad, a diferencia de Loki se tomó un tiempo para presentarse con cafecito y todo -admitió viendo algo divertido todo el asunto.
Sr. Invasor: Solo quería ser cortés. Después de todo, hemos venido en paz... por ahora. Pueden decirme el señor Invasor, y vengo en representación de una pequeña alianza de planetas que buscan expandirse -dijo con una tranquilidad que ciertamente desconcertó a los terrícolas.
Natasha: ¿Y qué planeas hacer exactamente? Porque, por lo que veo, no tienen intención de bajar y conversar. Solo están flotando allí arriba, en esas naves enormes que parecen más una amenaza que una invitación a la paz.
Sr.Invasor: La paciencia no es mi fuerte, pero si insisten en un diálogo, puedo decirles que buscamos recursos, un territorio para expandirnos y... algunos experimentos y retos que podrían interesarles. Pero no se equivoquen, si no nos escuchan, las cosas podrían ponerse mucho peores -declaró antes de comenzar a dejar en claro las reglas.
Como tal ellos, los ogros del rayo, no podían solo llegar e invadir un planeta así sin más, tenían costumbres y tradiciones que debían seguir al pie de la letra. En este caso, para invadir el planeta libremente, su especie debía cumplir una condición previa. Usando sus computadoras, un humano al azar fue elegido de entre todos los habitantes del planeta, y dicho humano debía tener un combate o un juego con uno de los aliens. Si el humano ganaba, los ogros se verían obligados a regresar a su mundo, se debían cumplir y respetar las tradiciones.
En cualquier otro caso hubieran ido de armas tomar apenas los vieron, pero Thor, que ya los conocía, comentó que era mejor seguir las costumbres, al final todo se podía resolver con un juego y no tendría que haber pelea alguna.
Fury: Y resumiendo las cosas, supongo que ya te habrás hecho una idea de porqué estás aquí... -dijo al castaño que se quedó incrédulo antes de que le cayera el 20.
Ataru: ¡¿Voy a desafiar a los invasores?! -preguntó con incredulidad antes de fallar en abrazarse a Natasha quien lo mantuvo lejos con su brazo- me niego, prefiero recorrer el polo sur sin camiseta antes que pelear con ese ogro.
Sr. Invasor: Oh pero no se trata de una pelea -dijo divertido- más bien cambiamos un poco las reglas, será un simple juego de persecución.
Ataru:... ¿Un juego? -pregunto extrañado.
Solo para que en ese momento pasara algo que tomó a los humanos por sorpresa. El como un rayo cayó de una de las naves directo al Helicarrier, de paso haciendo que todas las defensas se activaran y los agentes se pusieron alertas pensando que se trataba de un ataque enemigo. Pero nada más alejado de la realidad... Fue una teletransportación.
Ataru: ¿Y ahora qué?
Sr. Invasor: ¡Ah! ¿No es demasiado pronto? Vaya que estás impaciente cariño -exclamó sonriendo al ser que se había aparecido sin más en la reunión.
Quien al menos físicamente tenía el aspecto de una adolescente normal de buen ver, excepto porque su vestimenta era un bikini sin tirantes de rayas de tigre amarillo con botas a juego. Siendo eso lo menos llamativo en ella si se ignoraban los dientes afilados, las orejas puntiagudas y los pequeños cuernos amarillos. Ella era Lum, la hija del Sr. Invasor.
Lum: ¿Es él a quien voy a enfrentar? Hola, mi nombre es Lum. Siento llegar tarde -dijo a la vez que el chico ya estaba babeando.
Ataru: Ay, es la chica más guapa que he visto en toda mi vida -dijo sin pensar.
Sr: Invasor: ¡Ella es mi niña, una verdadera belleza! La victoria es tuya si dentro de diez días logras agarrar sus cuernos jugando al ya te tengo, así creo que llaman el juego en este planeta -dijo divertido.
Ya que a fin de cuentas no tenía pensado invadir realmente, solo quería ver como lo hacía un habitante de Midgard con uno de su especie, probar si realmente son tan buenos como se ha rumoreado recientemente en la galaxia. Su raza ama los desafíos, no lo pueden culpar por eso.
Ataru: Los cuernos ¿eh?... Honestamente. Me gustaría más agarrar su cuerpo -dijo con un tono claramente lujurioso que desagrado a los humanos presentes mientras los aliens se lo tomaron con indiferencia.
Lum: No me atraparas tan fácilmente.
Ataru: Ni te creas, usaré todas mis fuerzas para manosearte con estas manitas -dijo decidido en lo que más de uno se aguanto noquearlo en ese mismo momento.
Sr. Invasor: Pues bien, oficialmente el juego será mañana... aunque me gustaría esperar al otro participante -dijo sorprendiendo al japonés.
Ataru: ¿Otro participante? ¿Seremos dos? -pregunto sorprendido.
Sr. Invasor: Así es, un sin precedentes de hecho, rara vez la computadora elige a dos representantes en vez de uno solo... debe pensar que necesitan esa ayuda extra para ganar -dijo con un tono algo burlón- el otro humano es un tal... Casanova.
Cosa que hizo que Fury se tensara, claro que sabía de quién hablaba, del famoso e infame ladrón que ha estado haciendo el payaso desde que hizo su debut, robando piezas históricas y monumentos por puro capricho. Por lo general hubiera elegido al humano que era obvio que tenía poderes de algún tipo por encima de un adolescente común y corriente. Pero... Casanova no era de fiar, no respetaba ninguna clase de autoridad, hacía lo que quería y si parecía ser tan arbitrario como aparentaba... era mejor no correr riesgos. Aun si el asunto terminaba en una guerra entre mundos, cosa que buscaban por todos los medios evitar.
Fury: Algo me dice que tendremos que hacer la competencia sin él. Lo hemos intentado contactar, pero no sabemos dónde está o siquiera cómo encontrarle y...
Casanova (Miguel): Eso se debe a que ustedes no me buscan, yo vengo a ustedes -dijo con calma oliendo una rosa, apareciendo justo en medio de la reunión para sorpresa de todos.
El silencio se volvió pesado tras la repentina aparición del ladrón. Todos los ojos se posaron en él, en sus gestos despreocupados y en la forma en que olía la flor con una sonrisa burlona. Nick Fury frunció el ceño, cruzándose de brazos, mientras Natasha y Clint, junto a los soldados que iban llegando, mantenían una mano cerca de sus armas, listos para actuar ante cualquier movimiento sospechoso.
Fury: ¿Y tú quién demonios eres para aparecer así, sin aviso, en medio de una reunión de alto nivel? ¿Qué buscas? -preguntó con recelo al ladrón que solo dejó la rosa sobre la mesa con calma.
Casanova (Miguel): Mi nombre es el ladrón de sueños, Casanova. Soy un aventurero, un soñador y también... un experto en situaciones complicadas -dijo con tranquilidad- vengo a ofrecer mis servicios, aunque no con mucho entusiasmo, en este asunto con los invasores. Reclamando mi derecho de ser uno de los dos seleccionados que la computadora de los ogros eligió como representante de la humanidad en el juego.
El rostro del espía del parche se tornó aún más serio, evaluando las palabras del ladrón. La presencia de Casanova siempre había sido una incógnita, sus habilidades y motivos no estaban claros, eran más aleatorios que cualquier otra cosa. Pero su confianza y su actitud despreocupada no hacían más que poner en alerta a todos los presentes.
Natasha: ¿Y qué te hace pensar que tú tienes alguna oportunidad aquí? No eres precisamente un ejemplo de estabilidad, y no confiamos en que puedas controlar una situación así -dijo dispuesta a dejar noqueado al intruso de darse la oportunidad y de ser necesario.
Casanova (Miguel): La confianza no es algo que se da fácilmente, lo sé. Pero puedo ser útil, además, como dije, es mi derecho, si me lo niegan estarían faltando el respeto a las costumbres de los ogros del rayo y la invasión sería inevitable -dijo a la vez que el Sr. Invasor asintió severamente- además, el universo siempre premia a quienes se arriesgan y desafían lo imposible.
Fury se quedó pensativo unos segundos, evaluando la propuesta. La presencia del ladrón en la reunión no era menor, y su experiencia, aunque odiara admitirlo, podría ser justo lo que necesitaban, especialmente en un escenario con tantas variables como el actual.
Fury: Muy bien, Casanova. Pero si decides unirte, será bajo nuestras reglas y bajo nuestra supervisión. No te arriesgues a hacer algo que complique más las cosas. ¿Estás dispuesto a colaborar de verdad? -pregunto haciendo que los humanos le vieran con incredulidad. Mientras que el moreno sonrió con picardía.
Casanova (Miguel): Por supuesto. La única regla que tengo es que siempre juego para ganar. Y si puedo hacer que esto tenga un final interesante, mejor aún -dijo sonriendo de forma casual.
Su plan parecía ir de maravilla; en realidad, él no había sido una opción, sino que su prima había hackeado la computadora de los alienígenas para forzar su participación. ¿Y todo esto con qué fin? Muy sencillo: formalizar una relación con estos extraterrestres y, además, aprovechar su breve estancia en las instalaciones de S.H.I.E.L.D. para robar toda la información posible de la organización. Lo cual lograba mediante una conexión creada a través de la antena oculta en su sombrero y una unidad USB que había dejado previamente en alguna computadora del complejo. En definitiva, para él y su familia, todo ese asunto no era más que una gran oportunidad tanto a nivel comercial como político.
Mientras tanto, en medio de la tensión, Lum, la joven invasora, observaba con curiosidad al recién llegado. La presencia de un humano tan audaz y carismático como Casanova le parecía una opción interesante para la competencia. Ella, por su parte, parecía más interesada en el juego que en las intrigas humanas. En lo que por su parte Ataru seguía pensando en manosear a la chica.
Lum: Tú y yo, humano -dijo sonriendo al ladrón- podemos divertirnos mucho en el juego. Pero ten cuidado, no soy tan fácil de atrapar.
Casanova (Miguel): ... Solo te diré que el único momento en que un hombre se pone detrás de alguien es cuando va a desvestir a una mujer -dijo con seriedad- y el único momento en que un hombre se pone delante de alguien es cuando va a robarle un beso a una mujer. Nos vemos mañana -fue todo lo que dijo antes de desaparecer en un parpadeo.
Mientras el alienígena invasor no podía evitar soltar carcajadas por la forma tan directa en que ese joven humano dijo aquello, su hija se sonrojó por la manera en que lo hizo. La mayoría de las personas presentes probablemente habrían perdido la fe en el destino al ver que todo dependía de dos pervertidos. Sin embargo, en el caso de Casanova, su aura y su actitud de macho hicieron que los demás solo percibieran su comportamiento como fuera de lugar, en lugar de considerarlo algo desagradable, como era el caso de Ataru. Este, por su parte, decidió desde ese momento que odiaba al ladrón con toda su fuerza, porque él sí podía ligar y salirse con la suya.
Mañana probaría a todos cual de los dos era el mejor hombre. ¡E iba a manosear a la hija del invasor como si no hubiera un mañana, es un hecho!
_______________________________________________________________
(Al día siguiente)
(Pueblo de Easwood, Luisiana, Estados Unidos) (Nota del autor: Edades ligeramente modificadas con fines narrativos)
"¡La persecución donde se decidirá el destino de la tierra está a punto de comenzar! Diez días de lucha, de sol a sol. Ataru Moroboshi, estudiante de secundaria de Tokio, y Casanova, el ladrón que se está ganando fama como uno de los criminales más conocidos de la actualidad. Tendrán que agarrar los cuernos de la invasora, Lum. Si Lum se les escapa, adiós a nuestro planeta y que comience la guerra. En sus marcas, listos... ¡Fuera!"
Siendo en ese momento que el joven pelirrojo apagó su celular decidió apagar el teléfono para no saber más del asunto. En realidad él no estaba preocupado por todo el asunto de la invasión alienígena, sabía que el planeta tenía protectores que podrían encargarse de todo y eso solo era más que todo un evento para llamar la atención a sus ojos. Y no tenía tiempo para eso, sus preocupaciones estaban más centradas en buscar a su amigo (a quien le ocultó todo el asunto para que no se le ocurriera alguna locura), quien luego del desayuno salió corriendo a su cueva.
Era fácil saber cuando algo estaba bien o cuando no, ya habían convivido el tiempo suficiente para saber casi todo el uno del otro.
Bill: Fangbone ¿está todo bien? ¿ocurre algo? -preguntó el joven de 14 años entrando a la cueva (habitación) de su amigo, el cavernícola de una dimensión alternativa que por motivos varios (más que todo el corazón de su madre que era demasiado grande), terminaron acogiendo en su casa.
Encontrando al joven guerrero teniendo una platica con quien era el sabio de su tribu, Sauce mágico. Y por las expresiones de ambos, parecían estar a mitad de una conversación importante.
Fangbone: ¿Qué? -pregunto sin poder ocultar su sorpresa ante la petición del anciano.
Sauce mágico: Así como lo oyes. He estado investigando y esa nueva ciudad fundada en ese reino puede ser el lugar más seguro para cumplir tu misión -dijo el hechicero- he visto que han acogido criaturas de toda clase. Vampiros, hombres lobo, toda clase de monstruos, de una forma armoniosa. La ciudad tiene el poder para poner bajo control a seres así. Seguro puede facilitarte la protección del dedo de Drool -dijo convencido.
El dedo de Drool, tal cual un miembro amputado que era originalmente parte del que se podía considerar un hechicero maligno y enemigo número uno de la tierra de donde provenían estas personas con rasgos de neandertales, Craniobania. Siendo por ese dedo que el joven soldado estaba en esa realidad en primer lugar. Su misión era custodiar el dedo y así evitar que Drool tenga todo su poder una vez más, sin importar el costo.
Fangbone: ¿Estás seguro de que esa ciudad puede resistir la presencia de criaturas tan peligrosas? Sabes la clase de monstruos y seres oscuros a servicio de Drool, no son fáciles de controlar, incluso para un lugar así.
Sauce mágico: Es cierto, pero en estos tiempos, la armonía en esa ciudad es una señal de que el equilibrio puede mantenerse si todos los habitantes colaboran. Además, cuenta con un consejo de guardianes que velan por la paz. Es el mejor lugar ahora mismo para esconder el dedo de Drool y evitar que caiga en las manos equivocadas -dijo con convicción.
Sin tener la menor idea de que en realidad fue manipulado desde las sombras para que por medio de lecturas arregladas de las estrellas para ver el futuro y demás, terminó convenciéndose de que ese era el mejor rumbo a tomar. Mientras que por otro lado, Bill, que había estado escuchando atentamente, dio un paso adelante con determinación.
Bill: Entonces, ¿Qué estamos esperando? ¡Vamos! -dijo sorprendiendo a su amigo, quien luego solo sonrió, sabiendo que por cosas así era que fácilmente le confiaba su vida a su hermano en armas- pero la duda es cómo llegar...
Y como si todo hubiera sido orquestado por alguien que movía los hilos, justo en ese momento su madre había hecho acto de aparición.
Nathalie Goodwin: Niños, no creerán, me ofrecieron un trabajo en San Fransokyo -dijo entrando a la cueva para sorpresa de ambos jóvenes- por cierto. Menudo cuarto tienes Fangbone ¿deberías limpiar más, no? -pregunto haciendo que el mencionado se apenara.
Fangbone: Si, Mamá de Bill.
Bill:... Un momento... ¡¿Te ofrecieron trabajo?! -pregunto sorprendido tras procesar lo que le habían dicho.
Nathalie Goodwin: Si, se que solo limpio casas. Pero me ofrecieron un trabajo para ser la ama de llaves de la mansión de una importante familia de San Fransokyo, la familia Rivera -dijo sorprendiendo a ambos- Y entiendo que es un paso importante para nosotros, Bill, dado que ya no seremos estadounidenses y todo eso, pero las prestaciones son muy buenas.
Bill: Pues wow... será un cambio muy grande, mamá -dijo lo primero que pensó al respecto.
Nathalie Goodwin: La pregunta es ¿Quieres ir, cariño? Si dices que no, no iremos. Pero dado a que Fangbone también irá por lo que escuche, creo que no hay problema.
Su hijo por su parte, se quedó pensativo unos segundos, mirando a su madre con una mezcla de sorpresa y emoción. La idea de mudarse a San Fransokyo, una ciudad llena de avances tecnológicos y cultura moderna, le parecía increíble. Sin embargo, también sabía que eso significaba dejar atrás su vida actual, sus amigos... a cambio de una nueva aventura que estaba a punto de comenzar. Y en todo caso, para eso existen las videollamadas ¿no?
Bill: Sería genial, mamá.
Fangbone: ¡Así es! Si vamos a luchar contra las fuerzas oscuras y proteger el dedo de Drool, necesitamos estar unidos -dijo levantando su espada con determinación, antes de quedarse pensativo- ... Aunque no entiendo. ¿Qué es la tal San Fransokyo? ¿Es otro reino?
Bill: Algo así, es una ciudad que acaba de separarse de la unión norteamericana -explicó lo que vio en las noticias hace semanas.
Fangbone: ¿Y crees que podremos proteger el Dedo ahí?
Bill: Oye, fue Sauce Mágico quién lo dijo. Y si lo dice por algo es -dijo señalando a la tela donde se proyectaba la imagen del anciano que se había ido hacía un rato ya. A lo cual el cavernícola terminó dándole la razón.
Nathalie Goodwin: Entonces vamos a empacar -dijo queriendo ponerse manos a la obra- ya quiero llegar, desde que vi la fiesta de té de la familia Rivera en las noticias yo, y creo que casi todo el país, está con ganas de ver cómo es San Fransokyo ahora que es un país aislado. Si antes era un lugar fantástico, ahora debe ser increíble -dijo en lo que su hijo le daba la razón.
Fangbone:... ¿Fiesta de té? -fue todo lo que pregunto extrañado.
Decidiendo no darle mucha importancia al asunto ignorando a su amigo que comenzó a explicarle lo que eran esas cosas. De momento solo pensaba en dos cosas, en cumplir con su deber, y nueva aventura, nuevo reino. A fin de cuentas, conocer tierras nuevas siempre le emocionaba.
—
(Castillo de Drool, Tierras Baldías, Craniobania)
Hace mucho tiempo, un exiliado del poderoso clan de los lagartos, un mago conocido como Drool, obtuvo un poder increíble al sumergir el dedo gordo del pie en un pozo de maldad pura. Se formó una alianza de todos los clanes bárbaros de Craniobania para derrotarlo y, al concluir la batalla, el malvado hechicero fue descuartizado. Cada pieza fue confiada a un clan diferente con la esperanza de que el malvado mago jamás resucitará. El dedo del pie, fuente del vasto poder de Baba, fue confiado al mismo clan lagarto que lo había exiliado.
Tras mil años de lucha, los secuaces de Drool lograron recuperar todo su cuerpo menos una parte: el dedo del pie. Temiendo los estragos que Drool desataría, le confiaron el dedo a un niño bárbaro llamado Fangbone , quien fue enviado lo más lejos posible de Drool, a otro mundo conocido como la Tierra. Todo esto sin saber que el esfuerzo sería inútil y Drool encontró fácilmente al guardián de su dedo, pasando a maquinar y orquestar cuantos planes fueran necesarios para obtener todo su poder de nuevo.
Drool: Así que piensas esconderte en otro lugar de esa tierra. No importa realmente a donde vayas realmente, te encontraré en cualquier lugar y nada de lo que haya en ese mundo pueda defenderte de mi, bárbaro asqueroso. Disfruten sus inútiles esperanzas Fangbone y Bill, recuperaré mi dedo y entonces este mundo será mío... debería hacer palomitas para celebrar de antemano ¡Y esta vez si lo lograré! -declaró con convicción ya pensando cual sería la próxima criatura que enviaría para buscar su dedo.
Esto sin percatarse de que algo le estaba pasando a su caldero, que de un momento a otro comenzó a burbujear de forma excesiva como si estuviera puesto bajo una cantidad increíble de llamaradas. No siendo hasta que se percató del extraño suceso que pasó, del interior del objeto salió una criatura desconocida para el hechicero, un ser que incluso para él era una entidad que no parecía para nada común ni en la tierra, Craniobania, o ningún otro lugar realmente.
Drool: ... ¿Qué cara...? -fue todo lo que dijo antes de que el pequeño experimento del tamaño de un animal de peluche le saltase encima y comenzará a molerlo a golpes sin piedad alguna.
Este se trataba del experimento 610 de la serie 6 de los experimentos de campo de batalla con implicaciones galácticas y propiedades del fin del mundo, uno de los experimentos ilegales de Jumba Jookiba: Witch. El cual fue diseñado para usar magia y habilidades de manipulación de la realidad para derrotar y secuestrar a líderes planetarios. O en este caso, derrotar y contener entes mágicos y sobrenaturales, siendo para eso que fue creado este primer prototipo de Rivera Solutions.
Mientras el experimento seguía golpeando a Drool con una furia imparable, una ráfaga de energía mágica comenzó a emanar de su cuerpo diminuto pero potente. La criatura, con ojos brillantes y una sonrisa traviesa, parecía disfrutar del caos que generaba, mientras su magia se manifestaba en destellos de luz y sombras que danzaban alrededor de ella. Todo esto no dejando de golpear al hechicero que estaba siendo molido a golpes como si saco de boxeo se tratara.
Todo esto siendo observado en la tierra, más específicamente en la oficina del CEO de Rivera Solutions por el hombre junto a su sobrina y asistentes a través de un dron mandando con ayuda de algo de magia a la que podían acceder fácilmente gracias al clan Drácula. ¿Y cómo sabían de todo el asunto? Sencillo, otro dato robado de la CIA, quienes sabían todo el asunto del dedo y lo mantenían en secreto para la población, esperando la oportunidad para tomarlo para el gobierno americano. Cosa que no les gustaba a los Rivera para nada.
Héctor:.. ¿Las Wish se supone que sean así de violentas? -pregunto curioso mirando la pelea con emoción.
Rosa: Bueno... Toma en cuenta que es de los experimentos más poderosos y esa es apenas nuestro primer modelo. Es normal que hayan algunos defectos de manufactura -dijo con una gota de sudor mirando como el experimento le estaba aplicando la movida de estrella fugaz de lucha al hechicero- y puede que el que Jumba y Amy veían la lucha libre mientras la programaban tuvo algo que ver.
Héctor: Uno pensaría que no pero ¿Quién diría que los genios serían tan fanáticos de los deportes violentos, no? -pregunto divertido- ¿Le decimos que pare y ya lo enjuicie? -exclamó en lo que ambos se miraron antes de encogerse de hombros negando- ire por palomitas.
Rosa: Yo por las bebidas.
Siendo en lo que mientras ambos buscaban los aperitivos, por su parte Witch seguía desatando su furia sobre Drool. La criatura, con su cuerpo diminuto y su magia desbordante, parecía disfrutar del caos, lanzando destellos de luz en un espectáculo de poder y locura. El hechicero intentaba protegerse, conjurando barreras mágicas que se rompían ante la intensidad del ataque del experimento. La criatura brincaba y giraba, usando su magia para manipular la realidad a su antojo, creando ilusiones y destellos que confundían a Drool. Sin embargo, a pesar de su aparente apariencia vulnerable, Witch tenía un objetivo claro: destruir a Drool de la forma más dolorosa posible.
Penny: ... ¿Debemos preocuparnos de que esos dos aunque en sí sean justos, también pueden ser bastante maliciosos cuando quieren? -preguntó a su superior en susurros, mirando como tío y sobrina disfrutaban de ver la prueba de campo de 610 con singular alegría.
Judy: Mientras no les demos motivo para serlo con nosotras, no -fue todo lo que dijo de forma casual- además toma en cuenta que necesitamos los datos de la mayor cantidad de pruebas de campo posibles -declaró en lo que la joven solo le dio la razón.
No podía evitar preguntarse en qué momento su vida se había enredado tanto, aunque si tuviera que adivinar, diría que en realidad gracias a su familia realmente no ha tenido un solo día normal en toda su vida.
_________________________________________________________________________
(Un par de días después)
(Rivera Solutions, San Fransokyo)
Bill: Confiesa ¿Qué fue lo que hiciste? -pregunto molesto mientras eran guiados a la oficina del dueño de la empresa por la asistente principal de asuntos generales de la compañía, Judy. Quien iba en compañía de la asistente de Rosa, la joven Proud.
El asunto era que, ni siquiera una hora después de que la familia se había mudado a la ciudad, ya estaban siendo escoltados por personal de la empresa. Los dos chicos, uno más salvaje que el otro, apenas habían ayudado a bajar una caja del camión de mudanza y, desde entonces, ambos mostraban signos de recelo y preocupación. En especial el que era nativo de la tierra, después de todo el hombre era el nuevo jefe de su madre.
Fangbone: Nada, lo juro. Si acabo de llegar apenas ¿Cómo pude haber hecho algo?
Bill: Porque te conozco y te metes en problemas yendo por leche a la tienda.
Fangbone: Culpa a Drool, él es quien manda a cuanto monstruo tenga a la mano -reclamó en lo que el pelirrojo suspiro.
Bill: Sólo falta que nos vayan a deportar.
Judy: No es el caso -dijo metiéndose a la conversación de ambos jóvenes- todo lo contrario, el señor Rivera está muy interesado en ti -dijo mirando al guerrero de cabello negro que sin pensarlo tomo el mango de su hacha.
Fangbone: ¿Es de esos señores que la Mamá de Bill me dijo que puedo atacar con mi hacha si hacen preguntas sobre si llevo ropa interior e insisten en que los acompañe? -pregunto haciendo a la mujer arquear una ceja.
Un comentario muy específico... pero viendo el contexto, era más que acertado y no culpaba a la mujer por tomar esas medidas.
Judy:... No eres mujer ni mayor, así que no. Lo parece, pero porque ha tomado muchas malas decisiones en su vida -explicó con calma- no obstante creo que tendremos que esperar un momento. Lady Lydia hizo un contacto de especial interés para la empresa y Don Héctor está negociando la estadía permanente de esa persona...
Penny: De hecho, recuerda que parte del acuerdo era el dedo. Dado que aún carecemos de recursos para sellarlo efectivamente necesitamos de ella -dijo llamando la atención de los chicos, no solo porque sabían del dedo, si no también por lo último que dijo.
Fangbone y Bill:... ¿Ella? -preguntaron a la vez que las puertas estaban abiertas.
Mostrando al dueño de la empresa junto a su sobrina a mitad de una reunión con una señora de avanzada edad. Por lo general se vería como algo normal de no ser por el aspecto de la mujer: una cabeza desproporcionadamente grande con cabello largo y rubio recogido en un moño, un rostro arrugado que consiste en una nariz grande y aguileña, un punto rojo entre los ojos, y lleva sombra de ojos azul, lentes de lectura, grandes aretes dorados y un vestido azul oscuro con un broche de rubí en el cuello. Su aspecto... no era muy humano si había que hablar con verdad.
Héctor: Le agradecemos que viniera de tan lejos y por favor perdone que la incordiaramos, pero era importante su ayuda, Lady Zeniba. Para empezar, déjeme decirle que es un honor conocerla -dijo haciendo una leve reverencia a la señora mayor en lo que tomaba asiento.
Zeniba: El gusto es mío, querido, debo reconocer que esta fue una sorpresa muy grata, empezaba a pensar que los seres humanos estaban dejando de creer en los Yokais -reconoció sonriendo con amabilidad.
Rosa: Nuestra familia siempre ha creído en lo sobrenatural. En nuestro caso, fue una vampiresa quien nos habló de usted. Una bruja del mundo de los espíritus de buen corazón y gran poder... A diferencia de su hermana, sin ofender -dijo haciendo a la bruja restar importancia al tema.
Zeniba: Yubaba como tal no es malvada, si lo fuera no querría a su bebé, sólo es... muy codiciosa -admitió aclarándose la garganta- y creo que se de que vampiresa hablan. Desde que Drácula puso su hotel, mi hermana y él siempre han competido por quién atrae más huéspedes. Aunque usualmente los monstruos occidentales prefieren el de Drácula, y los orientales los balnearios de Yubaba.
La típica rivalidad entre oriente y occidente por quién atrae más mercado, nada que hacerle.
Héctor: Las costumbres son bien arraigadas según veo.
Zeniba: En efecto, por cierto, es un buen té -exclamó tras tomar un sorbo- pero yendo al punto, queridos, su carta hablaba de un asunto urgente, algo respecto a un dedo lleno de energía maligna.
Héctor: Del que la señora Lydia dijo que podría ayudarnos a encargarnos -dijo en lo que su sobrina asintió.
Rosa: Y hablando de eso... Parece que su protector ha llegado -dijo mirando a la puerta donde Judy y Penny habían traído a ambos jóvenes.
Fangbone todavía sujetaba con firmeza el mango de su hacha, vigilando cada movimiento de los presentes, especialmente de Zeniba, cuya presencia parecía alterar el aire mismo de la habitación. Bill, por su parte, intentaba mantener la calma, aunque sus ojos mostraban una chispa de inquietud y de curiosidad al no entender nada de lo que pasaba.
Zeniba: Craniobania, tenía que ser de allí -dijo divertida, fácilmente reconociendo los origenes del de cabello negro por su vestimenta- esa dimensión si que se quedo atrasada varios siglos por decir lo menos -dijo haciendo enojar al joven que se lanzo a atacarla sin escuchar ningun pero en el proceso.
Solo para que en respuesta la yokai sacará un shikigami (muñeco de papel) que se convirtió en una copia exacta del guerrero que procedió a luchar con él para sorpresa del cavernal.
Zeniba: Se bueno y juega con el niño un rato -pidió a la copia que asintió obediente.
Fangbone: ¿Qué clase de brujería es esta?
Zeniba: Solo es un pequeño muñeco que es igual a ti físicamente en todo, querido -aclaró tranquila- supuse que lo hallarás entretenido para quemar energías, pareces algo inquieto.
El guerrero miró con desconcierto al ser de papel que se había materializado frente a él, su reflejo exacto en tamaño y postura. La criatura, que parecía respirar con la misma intensidad que él, se movió con una gracia inquietante y, en un acto impulsivo, Fangbone levantó su hacha, apuntándole al muñeco. Empezando así una lucha muy pareja, era casi como estar peleando con el reflejo de un espejo.
Rosa: Ese como puede ver, es Fangbone. Fue a quien su tribu eligió para encomendar la tarea de proteger el dedo de Drool, investigamos al respecto .dijo llamando la atención del chico que si era de ese mundo.
Bill: ¿Investigaron?
Héctor: Pues sí. Dado lo que ha pasado en tu pueblo desde que Fangbone llegó diría que es difícil pasar desapercibidas algunas cosas ¿no crees? Hasta ahora tienen suerte de que todo lo que llega a ser grabado la gente de Internet lo tomen como bromas o edición -reveló- así como que sus amigos guarden el secreto para que no cunda el pánico y que la CIA no capturo a Fangbone para asegurar el Dedo para ellos aun dado a que no querían lidiar con Drool.
Bill: Vaya... Parece que si se informaron -fue todo lo que pudo decir, dándose cuenta finalmente de que su repentina mudanza y la petición de Sauce Mágico fueron demasiado convenientes como para que fuera coincidencia.
Rosa: Y más que eso. Solucionamos el problema -dijo dejando una tarjeta de contención sobre el escritorio.
No siendo otro que el propio Drool quien se encontraba en su interior con un aspecto lamentable. Si, Witch no se contuvo ni se molestó en ser gentil lo más mínimo.
Drool: Escucho borroso... -dijo adolorido llamando la atención del pelinegro que rápidamente detuvo la pelea con su doble para ver de cerca.
Fangbone: ¡Drool! ¿No me digas que esta gente te derrotó? -pregunto sorprendido dado a que usualmente subestima a los humanos considerándolos blandos la mayoría, pero esto lo hacía replantearse todo- ¡Si es así es un día de gloria para toda Craniobania!
Drool: Oh, cállate, mocoso -dijo con fastidio por la euforia del menor- en cuanto me libere de aquí y recupere mi dedo...
Rosa: Ese es el asunto, no saldrá -reveló para consternación del hechicero.
Drool: ¿Cómo que no saldré?
Héctor: Tú serás un buen regalo junto a unos otros más para la gran concejal. Definitivamente ganaremos muchos puntos con ella cuando nos reunamos -dijo sonriendo con interés- así que espero te guste la idea de estar como estatua. Uno de los métodos de encierro más comunes para algunos criminales es la animación semi suspendida.
Rosa: Al menos en algunos casos -aclaró acomodando sus gafas. Ignorando la expresión de su prisionero.
Héctor: Lo que nos lleva al siguiente punto. El dedo a la de menos y puede ser un seguro para Drool escapar algún día. Por eso lady Zeniba va a sellarlo para que ya no sea un problema, Joven Fangbone -dijo al chico que solo le miro con recelo.
Fangbone: ¿Y como se que no se lo darán a Drool cuando se los de?
Héctor: Porque de pendejo nomás tengo la cara -admitió de buena gana- ¿Porque crees que me las arregle para hacer que se mudaran aquí en primer lugar? Aquí estarán a salvo.
El chico de Craniobania frunció el ceño, todavía con el hacha en mano, analizando las palabras del hombre de negocios. La tensión era fácil de notar, y aunque la presencia de Zeniba y los demás daban cierta tranquilidad, la desconfianza en el guerrero no desaparecía fácilmente. De allí que se sobresaltó cuando la bruja pasó de estar sentada a aparecer detrás suyo ¿en qué momento se movió?
Zeniba: A ver, querido, veamos ese dedo -pidió con gentileza.
A lo cual, al verse muy limitado, el menor solo suspiro para luego sacarlo de la bolsa en donde lo tenía. Verde, arrugado y era difícil saber si se estaba pudriendo o no.
Drool: Mi dedo... Mi hermoso dedo, tan cerca y tan lejos... -exclamó mirándolo con añoranza.
Zeniba: Que asco... -dijo tapándose la nariz no queriendo oler ninguna peste pútrida- en verdad apesta a energía maligna. Además de cortarlo se le puso un hechizo de drenaje. Cuando se cortó se llevó buena parte del poder de Drool con él además de ser la fuente de su magia oscura, por eso asumo que está tan desesperado por recuperarlo
Fangbone: Cuando lo desmembraron, debieron ponerle el hechizo que menciona, por eso ya no es tan poderoso, literalmente debe estar completo -dijo pensando en eso como lo más lógico.
Drool: Pues bien, ahora lo saben ¡la única razón por la que acabé en esta situación tan embarazosa es porque ese dedo tiene mi poder! ¡Si lo tuviera todos ustedes estarían muertos o serían mis esclavos! -dijo con rabia y llanto contenido.
Héctor: Pero no lo tienes. compadre, no lo tienes.
Zeniba: Ni lo tendrás. A ver niño, ven aquí y hazle un favor a la abuela, mi querido ayudante. Comete esto, que se purifique en tu interior y luego vomita cualquier impureza lejos -pidió a su sombra para extrañeza de los más jóvenes presentes.
Solo para sorprenderse al ver como de la sombra de la anciana se comenzó a levantar una figura que parecía estar hecha en su totalidad de sombras a excepción de su rostro, o mejor dicho, la máscara que lo cubría. Siendo aún más sorprendente cuando de la nada dejó ver una gran boca con la que se comió el dedo y sin más lo empezó a masticar en silencio.
Bill: .. ¿Que es el? -pregunto con intriga llamando la atención de la mayor.
Zeniba: Un Sin Cara, un Yokai -explico con gentileza- al ser un ente que carece de identidad, su habilidad es la de imitar a otros, ya sea observando o comiéndolos. Pero también puede vomitar emociones y energía negativas luego de ser ingeridas y purificadas... Por cierto... Noto cierto potencial en ti para la magia -dijo mirando al de cabello rojo con un interés peculiar.
Mientras que por su parte Bill solo se pudo reir apenado y algo incómodo debido a ciertos recuerdos de sucesos relacionados a él y la magia.
Bill: Si, quise aprender... Pero casi muero de viejo por haber usado un hechizo de lectura rápida para leer el Tomo completo de magia. Y así el libro me chupo mis "años de juventud mágica" demasiado rápido -dijo sacando una carcajada a la bruja.
Zeniba: Lección aprendida, supongo, la paciencia es una virtud -dijo asintiendo- conozco el Tomo del que me hablas, es el tomo arcano. Un libro perfecto para enseñar magia a aquellos que carecen de un maestro. Pero viene incluido con la maldición de que conforme más aprendes, más "años de juventud" te quita -reveló con una mezcla singular de diversión y seriedad- ¿De dónde dices que lo sacaste, querido?
Bill: Pues, me lo dio el hechicero de la tribu de Fangbone, Sauce Mágico -dijo en lo que la anciana solo negó suavemente.
Zeniba: Recuérdame hablar con él del tema. Pero dime ¿no te gustaría retomar tus clases? Esta vez con una mejor guía -preguntó sorprendiendo al joven- ya tengo un aprendiz. Pero él no es apto para aprender magia. Aunque por otro lado es un excelente asistente tejedor -dijo sonriendo al sin cara que asintió con cariño al cumplido.
Bill: Espere -dijo sorprendido- me está diciendo...
Zeniba: De todos modos algo me dice que el señor Rivera y su adorable sobrina iban a intentar que me quedara en esta ciudad de algún modo. Y esta puede ser una buena excusa ¿No te interesaría aprender magia de mi? -pregunto dejando su oferta sobre la mesa.
Un silencio incómodo llenó la mente del pelirrojo tras las palabras de Zeniba. Bill se quedó pensativo, con una mezcla de entusiasmo y nerviosismo en su rostro. La idea de retomar las clases de magia con una guía tan experta le parecía tentadora, pero también sabía que requeriría esfuerzo y paciencia, cualidades que aún debía aprender a cultivar. Y aunque la idea de volver a casi morir de viejo no le gustaba en lo absoluto... no mentiría diciendo que no amo su tiempo como mago todopoderoso, fue muy divertido en realidad.
Bill: Bueno... supongo que sería una buena oportunidad para aprender algo más de magia... nunca se puede estar lo suficientemente preparado -quiso responder lo más normal posible, pero le era difícil ocultar su emoción, era joven a fin de cuentas.
Fangbone:... ¿Estás seguro, Bill? Recuerda cómo terminó la última vez.... -dijo con preocupación recordando el incidente.
Bill: Escuchaste a la señora Zeniba, fue porque el Tomo tenía ese detalle.
Fangbone: Pues sí, pero... Es qué... Ella es, ya sabes... -dijo mirando a la anciana que solo sonrió afablemente.
Zeniba: Querido, tal vez no me creas, pero no todas las brujas son malas, sólo las que usan la magia con egoísmo -dijo con un tono amable queriendo calmar al cavernario.
Rosa: Zeniba es conocida como una bruja muy poderosa pero humilde en el mundo Yokai. De allí que su hermana ha intentado robarle poder de vez en vez.
Zeniba: Énfasis en "intentado" -comentó con diversión en su tono de voz.
Héctor: Pero de cualquier modo -dijo llamando la atención de todos- un cambio la pregunta aquí es... ¿Qué harás ahora, Fangbone? Ahora que el dedo será purificado y Drool está preso. Técnicamente no tienes que seguir en este mundo ¿o si?
Rosa: Eres libre de volver a Craniobania -dijo con calma- nada como volver a tu hogar. Que seguramente aun sin Drool debe ser una carnicería cruel. Y al no haber tirano las tribus de bárbaros se declararan la guerra entre sí por el dominio porque solo eso conocen... Pero seguro ese es tu lugar feliz, una vida dura y al final solitaria donde todos te quieren matar.
Héctor: Sin mencionar que ya no tendrás que volver a hacer nada del mundo moderno qué seguro es tedioso para ti. No más ir a la escuela, no más comida ni comodidades modernas, y claro, no más de la familia Goodwin.
El guerrero bajó lentamente su arma, manteniendo la mirada fija en Zeniba y en todo lo que había ocurrido durante esa reunión. La tensión en su rostro era notoria, aunque en sus ojos brillaba una chispa de determinación. La idea de regresar a Craniobania, con todos los peligros y la soledad que eso conllevaba, parecía menos tentadora después de haber presenciado tantas cosas asombrosas en la tierra... y la idea de dejar a Bill...
Fangbone: Yo... Necesito pensarlo... -fue todo lo que dijo antes de solo irse y perderse de vista.
Algo que no preocupó a los Rivera que sencillamente mandaron un robot a seguirlo por si acaso.
Bill:... No entiendo. ¿Por qué se deprimió? El al comienzo siempre actuaba y hasta hablaba de cuánto le gustaría volver a su mundo para pelear hasta el cansancio, quejándose de que todo en la tierra era blando y débil -dijo extrañado. Aunque en secreto lo celebraba, no quería perder a su amigo.
Héctor: Tal vez ya se había acostumbrado ya a nuestro mundo -comentó casual.
Rosa: Es entendible que una vez disfrutas de la modernidad, la idea de irse no sea tan atractiva. En este caso hablamos de irse de un país primermundista a... La edad de piedra, y eso siendo amables.
Héctor: Donde de milagro llegas a maduro.
Lo cual no era mentira, Craniobania no se llamaba así precisamente por las flores y los arcoiris.
Bill: Admito que puede ser, no he pensado en que él se haya acostumbrado tanto a estar aquí. Como siempre viste y actúa como si estuviera en Craniobania... Aunque supongo que algunas cosas si delataron que estaba "ablandando" -dijo sonriendo al recordar un incidente de cuando habían encontrado un gato callejero. Resumiendo, Fangbone se pone celoso fácilmente.
Zeniba: Los jóvenes humanos. Siempre tan distraídos en los asuntos del corazón ¿no es así? -preguntó a su asistente divertida, a lo cual la sombra asintió.
Bill: ... ¿Eso qué significa? -pregunto extrañado al ver las miradas cómplices en los rostros de los presentes, no entendiendo el porqué de eso.
Rosa: Tendrás que averiguarlo tú.
Bill: Pues una ayuda no me vendría mal. Fangbone de hecho ha estado actuando raro conmigo recientemente -admitió- y todo comenzó cuando rocé mi nariz con la suya a mitad de una pelea -dijo haciendo a la bruja carcajearse.
Zeniba: Ay cariño, el embrollo en el que te acabas de meter -dijo con el menor sin terminar de entender- en Craniobania hacer eso es igual a marcar a una persona, elegir a tu pareja de por vida -explicó como si estuviera diciendo que dos más dos son cuatro.
Por su parte el pelirrojo se quedó paralizado, procesando las palabras de la yokai. La confusión le invadía, no solo por el significado de esa "marcada de por vida", sino también por las emociones que empezaban a brotar en su interior. Desde que Fangbone había entrado a su vida, la misma se había vuelto más compleja y, sin duda, más intensa... y eso le agradaba ¿para qué mentir?
Bill:... Yo... ¿Le pedí matrimonio a Fangbone? -preguntó con un sonrojo notorio apareciendo en su rostro.
Zeniba: Básicamente. Y eso es lo que creo que está haciendo que el joven guerrero tenga conflicto. Ya que parece que el si tiene sentimientos por ti, pero la cultura de Craniobania lo hace poner en duda que debería hacer -mencionó en lo que el menor entendió rápido a que se refiere.
Bill: ... Porque la idea es que se case con una chica y tenga más crabionaniancitos que dedos en manos y pies, ¿No?
Zeniba: Pues sí. Que los "hermanos en armas" se junten no es bien visto porque no pueden procrear -reveló- es más, quienes tienen esos gustos son castigados severamente si son descubiertos. A uno lo atarían a un lobo y el otro sería torturado para luego ambos ser exiliados de la tribu -dijo haciendo al chico tragar grueso.
Héctor: No, pues que "civilizados", con razón están como están -comento con sarcasmo, recalcando que por muy superiores que se creían, eso no quitaba el hecho de que estaban a nada de extinguirse entre ellos por su estilo de vida exageradamente bárbaro.
Zeniba; En efecto... Dime, mi nuevo aprendiz. ¿Qué es lo que tu sientes por el joven guerrero? -cuestionó al joven que lo medito.
Bill:... El... Me importa, creo, yo, bueno... No sabría decirlo, yo... -fue todo lo que dijo a la vez que su sonrojo competía con su cabello.
Sin poder quitarse la sensación de confusión y nerviosismo. Esta conversación le había abierto los ojos a una realidad que no había considerado: sus sentimientos por Fangbone eran más profundos de lo que él pensaba, y esa incertidumbre le daba vueltas en la cabeza.
Zeniba: Tranquilo, joven. No hay prisa en entender lo que sientes, solo debes dejar que las cosas fluyan naturalmente. A veces, lo que más importa no es lo que decimos, sino lo que sentimos en nuestro interior.
Héctor: En el corazón no se manda, él solito se enamora -agregó- ahora creo que debes hacer que Fangbone decida. Craniobania... O tu.
Bill: ... ¿Que lo haga elegir? ¿Eso no sería egoísta?
Rosa: Pues en este caso... Es ser egoísta o no volver a verlo -dijo haciendo al chico pensar.
Para luego solo salir corriendo, no teniendo nada más en mente que encontrar a Fangbone.
Zeniba: Ah, el amor joven... Si no les molesta, me recluire en lo más profundo del bosque de su parque nacional. Prefiero un estilo de vida humilde y tranquilo -dijo poniéndose de pie- y no tienen que preocuparse de construirme una vivienda, puedo hacerlo por mi cuenta.
Héctor: Me parece perfecto.
Zeniba: En tal caso por ahora nos retiramos, hasta pronto -dijo para acto seguido desaparecer junto a su asistente. Dejando solo al personal de la empresa en el lugar.
En el caso del tío y la sobrina, tras asegurarse de que no había nadie de confianza en los alrededores, sólo se permitieron un breve momento para sonreír de manera algo confiada y maliciosa. Todo había salido a la perfección. La invasión de los ogros en realidad no les preocupaba; sabían que Miguel podría encargarse del asunto sin dificultad.
Ahora tenían un potencial prisionero más que entregar a la gran concejal para demostrarle que no debían subestimarlos solo por provenir de un planeta considerado por la galaxia como subdesarrollado. Y esto era solo el principio: gracias a toda la información que habían obtenido de la CIA y, más recientemente, de los archivos de S.H.I.E.L.D., tendrían muchas operaciones en marcha en los próximos meses. Eran cosas que no podían dejar pasar si querían sacarles el máximo provecho, cuando surgiera la oportunidad.
Rosa: Creo que ya estamos listos para la reunión con la gran concejal, ahora solo es cosa de orquestarla.
Héctor: Lo supuse, dado a lo que sabemos de Pleakley y Jumba, confiar en ellos para tener esa reunión no es la mejor idea.
Rosa: De momento solo hay que evitar cualquier mala imagen. Aunque actualmente estamos de buena racha, dudo mucho que tengamos algún problema.
Judy:... Ninguno excepto los típicos amarillistas -dijo encendiendo la pantalla tras recibir una notificación del departamento de imagen pública.
¿Y de qué se trataba? Nada más que de un canal amarillista donde un reportero estaba acusando a Héctor de ser un comunista en contra del capitalismo y la democracia americana por todo lo referente a la prácticamente toma hostil a los ojos de varios estadounidenses de la mitad de la península de San Fransokyo para luego separarse de Estados Unidos.
Y una foto que mostraban del hombre vestido con un uniforme invernal de la época de la unión soviética, con una botella de vodka con el logo de dicho estado socialista para clavar el último clavo al ataúd.
Penny: ... Oh vaya.
Rosa: Te dije que esa foto te traería problemas -dijo a su tío con algo de fastidio mientras que este miraba el programa con igual molestia. ¿Es que la gente de verdad tenía que inventar cosas donde no las hay solo para darle algo de emoción a sus vidas? Que molestia.
Reportero: ¿Será Héctor Rivera un comunista? Su ex suegra habló en su defensa -dijo para que luego lo que se mostrará en pantalla fuera una señora mayor de casi 70 años. La cual solo le bastó verla para que Héctor pegara un grito de niña.
Si, no veía a Elena desde el divorcio de su esposa y como todo macho con pelo en pecho, admitía fácilmente que esa mujer le dio traumas más de una vez en el pasado. En especial luego de hacer oficial la separación con su hija.
Elena: Mi ex yerno no es comunista. Puede ser un pervertido, mentiroso, puerco, idiota, comunista ¡Pero nunca una estrella de porno! -dijo a la vez que el hombre sólo le dio por tener un tic en el ojo.
Para empezar, ¿esa vieja seguía con vida?... Como sea. Mientras tenga en sus contactos a un juez, un brujo, un policía, un fiscal y un mafioso. Se peleaba fácilmente con cualquiera... en especial si tenía a su sobrina a la par.
___________________________________________________________________________
(Hora de los Omakes)
(Omake 1 de 3: Confusiones de la juventud)
No hace falta decir que luego de salir de la oficina del CEO de la empresa, Bill por su parte no tenía la menor idea de a donde pudo haber ido Fangbone. Así que al comienzo decidió guiarse simplemente por seguir el rastro del desastre que su amigo pudo haber dejado. Pero luego de salir de la empresa y acabar en las calles de la ciudad, fácilmente terminó perdiéndose.
De allí que no tenía pena alguna en admitir que de no haber sido por un robot que apareció de repente y lo comenzó a guiar hacia donde se había ido Fangbone, a la de menos y tal vez no volvía a casa ese día. No conocía la ciudad a fin de cuentas. Pero por suerte ese no fue el caso, y logró llegar a donde había ido a parar su amigo, una playa algo alejada de la ciudad y los suburbios con vista al puente y a la bahía.
Bill: Hasta que al fin te encuentro... Necesito aire -dijo luego de haber corrido todo el recorrido hasta llegar al ver a su amigo sentado dándole la espalda- ¿como llegaste aquí...? ¿Qué es eso? -pregunto curioso mirando algo a lo lejos en el mar.
Fangbone; No lo se, así como esa, parece que hay monstruos como esos haciendo varias por todo el mar -dijo señalando a un par de experimentos que se veían a la distancia- al parecer en vez de conquistar otras tierras, la gente de este reino está extendiendo su territorio formando islas en el mar
Gracias a la poderosa dualidad de Yin y Yang más que todo. Los experimentos 501 y 502, estando por separado, tenían efectos catastróficos: el primero desataba llamas de lava ardiente que arrasaban con todo a su paso, mientras que el segundo liberaba torrentes de agua que inundaban vastas áreas, causando destrucción y caos. Sin embargo, cuando estos dos se combinaban en perfecta sincronía, se lograba algo mucho mayor: la capacidad de terraformar planetas completos. En este caso, creando islas como nuevas tierras para que diferentes formas de vida prosperaran.
Bill: Oye... Que cool -dijo para luego sentarse al lado del otro chico- entonces... ¿Feliz de que puedes volver a Craniobania? -pregunto solo para no recibir respuesta- ¿No me escuchaste? Te pregunte...
Fangbone: Te escuche la primera vez... -admitió para luego suspirar- al principio hubiera dicho que sí, seguro... Pero ahora, no preguntes porque, solo es diferente... Las cosas cambiaron, creo.
Bill: ¿Por que ya te acostumbraste a las comodidades?
Fangbone: ¿Qué? Ah sí... -dijo casi no prestando atención realmente- en Craniobania no hay panqueques ni Hot dogs ahora que lo pienso... y definitivamente los dentistas aquí son mejores que en mi tierra natal.
Bill: Eso es cierto -respondió riendo quedamente. Más que todo porque a lo que le contó, los dentistas en Craniobania eran herreros que trataban con dientes en vez de herraduras de caballos, con todo y las herramientas ridículamente afiliadas y peligrosas... solo imaginarlo dolía- ... ¿Tienes que irte realmente?
Fangbone: Pues, no lo sé... Creo que me necesitan allá. Digo, sin el dedo ya no tengo una razón para quedarme ¿qué se supone que haga? -pregunto encogido de hombros.
Bill: Podrías ser un embajador de Craniobania aquí -dijo lo primero que se le ocurrió. Haciendo que el contrario le viese con una ceja arqueada.
Fangbone: ¿Un que?
Era sorprendente cómo, a pesar de asistir a la misma escuela que él, Fangbone parecía no mostrar mucho interés en lo que aprendía la mayor parte del tiempo. Más bien, parecía preferir aferrarse a sus conocimientos de su tierra natal. Al parecer, la gente de Craniobania sólo estaban dispuestos a abrirse a nuevas culturas cuando ya no tenían otra opción, como ocurrió con el clan de los rompecráneos cuando acabaron en la tierra por accidente... ¿cómo pudieron morir varios de ellos con aspersores?
Bill: Un representante para las relaciones entre Craniobania y la Tierra -explicó para la extrañeza de su amigo.
Fangbone: ¿Y porque le íbamos a declarar la guerra a la tierra?
Bill:... ¿En serio ustedes los de Craniobania sólo se relacionan con conflicto? -pregunto incrédulo.
Fangbone: ¿Hace cuánto me conoces?
Bill:.. Buen punto -admitió con renuencia- ¿Entonces si te vas?
Fangbone: Te digo que no lo sé -dijo algo molesto al sentirse presionado- yo... Es complicado -mencionó escondiendo su rostro entre sus rodillas.
A lo cual el pelirrojo decidió tomar la mano de su amigo en señal de apoyo, lo que terminó provocando que el cavernícola se pusiera rojo de pena y pudor, para luego separarse de golpe del otro chico.
Fangbone: ¡Aún somos muy jóvenes!
Bill: ¿Muy jóvenes? -preguntó antes de recordar lo que le habían dicho.
A ojos de Fangbone sin querer le había pedido comprometerse, en plan matrimonio y todo. Pero lo que sorprendió a Bill en ese momento, más que la reacción de su amigo, fue el hecho de que no parecía disgustarle la idea ¿Él... quería tener algo así con él?
Fangbone: Solo tenemos 28 ciclos de sol y para hacer cosas de parejas debemos tener al menos 39 ciclos de sol y... ¡Olvida que dije eso! -dijo cada vez más sonrojado en lo que su amigo asintió con comprensión.
Bill:... Pero tenemos 14, ¿no?
Fangbone: Si, lo note los primeros días. Aquí los ciclos solares son mucho más largos. Este sol tarda el doble en dar un ciclo completo -explico para sorpresa del pelirrojo.
Bill: Técnicamente es la Tierra la que gira alrededor del sol.
Fangbone: Claro, y ahora me dirás que el mundo no es plano -declaró divertido ganándose una mirada de incredulidad del otro chico.
Bill: ¿Siquiera pones atención en clase?
Fangbone: No -dijo asintiendo con convicción- solo voy porque tu estas allí -aclaró provocando un sonrojo en su amigo para que poco después él haga lo mismo.
El silencio se instaló por unos momentos, solo interrumpido por el murmullo de las olas y el ocasional crujido de algunos matorrales gracias a la brisa salina. Ambos amigos se quedaron mirando el horizonte, cada uno sumido en sus pensamientos, mientras el sol se ocultaba lentamente tras el puente y la bahía, tiñendo el cielo de tonos anaranjados y rosados.
Bill:... ¿Haría la diferencia si dijera que no quiero que te vayas?
Fangbone: ... Sabes, Bill, aunque aquí las cosas son diferentes y a veces confusas, siento que todavía hay mucho por descubrir y aprender -dijo para luego animarse a ser él quien tomara la mano ajena y darle un suave apretón- ... ¿Tú no quieres que me vaya?
Bill: ¿Tengo cara de que quiera? -pregunto dándole un apretón a la mano del guerrero- Sabes que eres mi mejor amigo ¿cierto?
Fangbone: Claro, amigos -dijo no pudiendo ocultar un leve ceño fruncido- si, seguro, porque no hay modo de que seamos algo más. Somos hermanos de armas, si, solo eso... Si...
Bill: Fang, ya sé lo del roce de narices -declaró haciendo que el cavernario le viese en shock.
Para acto seguido volver a tomar distancia, esta vez con una expresión de pánico mientras tomaba una roca de gran tamaño con ambas manos.
Fangbone: ¡No, no sabes! Si te noqueo lo olvidarás y todo bien!
Bill: ¡No enloquezcas! ¡No pienso nada malo de eso! -exclamó alterado- además, sabes que no tengo tanta resistencia como tú -le recordó al otro que solo suspiro para luego dejar caer la roca y volver a sentarse a su lado.
Fangbone:... Solo... Hagamos como que nada paso, por favor. Solo, fue un accidente y ya.
Bill: ¿Tanto te desagrada la idea?
Fangbone: ¿Desagrado? ¡No quiero que mueras! -dijo con preocupación genuina, ganándose una sonrisa cálida del otro joven.
El atardecer se convertía lentamente en un manto de tonos dorados y rosados, envolviendo a los dos amigos en un silencio cómodo pero cargado de emociones no dichas.
Fangbone: Yo... no quiero que pienses que quiero forzarte a nada, Bill. Solo... solo quiero que sepas cómo me siento, sobre... todo esto -dijo con una voz algo temblorosa, en lo que inconscientemente volvían a juntar sus manos.
Bill: Lo sé, Fangbone. Yo también siento algo... algo que no puedo explicar bien. Es como si cada vez que estuviéramos juntos, el mundo se detuviera un momento y solo existiéramos tú y yo ¿sabes? -admitió con un leve sonrojo en lo que el contrario apartaba la mirada con pena. Pero también con una sonrisa tímida.
Fangbone: Entonces... ¿Qué hacemos ahora?
Bill: Por ahora... solo seguimos siendo amigos. Pero si algo más llega a suceder, estaremos listos para enfrentarlo, juntos -declaró sonriéndole con cariño. A lo cual el pelinegro asintió, sintiendo una calidez en su pecho que no podía negar. Y ni hablar cuando el pelirrojo decidió terminar la charla con broche de oro.
La noche caía lentamente y las estrellas comenzaban a brillar en el cielo, reflejándose en el mar. La promesa de un futuro incierto pero lleno de posibilidades los acompañaba en silencio. Pero no es que fuera algo malo... mientras estuvieran juntos como siempre, todo debía estar bien, aun si era el mundo contra ellos dos.
__________________________________________________________________________
(Omake 2 de 3: Cuidar de las apariencias, vivir en sociedad)
(Días después, luego de que terminara el juego de atrapar)
(Oficina privada de Rosa, Rivera Solutions, San Fransokyo)
Miguel: ¿En serio no ves el problema? ¡Si no hago algo puedo acabar terminando casándome con un monstruo! -reclamó a su prima por llamada quien solo tomó una taza de té con calma.
Rosa: ¿Sabes? Luego de la cita que tuviste con Hiro hace unos días cualquiera podría malinterpretar esto y creer que hablas de él -dijo divertida ofendiendo a su primo- de paso te recalco que a la próxima no asumas lo que a él le podría gustar, de milagro no terminó pensando que eres un controlador.
Miguel: Oye, dame algo de crédito. Para haber sido la primera cita que he tenido en toda mi vida, salió bien... muy bien -dijo recordando lo que pasó con una sonrisa antes de fruncir el ceño- pero volviendo al tema en cuestión ¡esto es horrible! ¡Y para colmo es una intensa de lo peor!
Rosa: Sin duda eres el rey del drama.
Miguel: ¡Bien! Finjamos que todo es maravilloso. Shalala, Shalala, todo es color de rosa ¡Quisiera saber si hay algo peor! -declaró antes de pegar un grito que casi se podía confundir con el de una chica- menudo susto, por un momento creí verla por la ventana, pero estoy seguro de que la perdi y no sabe quién soy cómo civil. Ahora... -dijo solo para que allí su prima cortara la llamada.
Ya luego lo calmaría diciéndole que su atuendo de ladrón por medio de una tecnología avanzada tenía algo similar al encantamiento creado por los Miraculous para esconder la identidad de sus portadores. Aunque en parte ella debía reconocer que entendía la molestia de su primo, más que todo sintiéndose orgullosa de él de priorizar su romance con Hiro en vez de hacer como su tío y ser un perro... por ahora.
¿Pero qué fue lo que pasó? Para resumir, llevó su papel demasiado en serio. Pasando los diez días que duró el juego coqueteando y jugando con Lum en vez de tomarse en serio el asunto, probando desde el primer día que podía tocar sus cuernos cuando quisiera. Pero en vez de eso se puso a coquetear a modo de juego con ella todo ese tiempo. Hasta bailó con ella a la luz de la luna para colmo en una ocasión (de paso descubriendo que el talismán del buey le daba resistencia además de fuerza, aguantando así las descargas eléctricas de la Oni espacial).
Así duró todo el juego hasta que llegó el último día, donde todo se fue al caño luego de que el otro participante, Ataru, luego de declarar erróneamente que se iba a casar con Lum (cuando de hecho no hablaba de ella), le quitó el sostén. Siendo allí que cuando estaba a punto de agarrar los cuernos de la chica, fue mandado a volar de un puñetazo por Casanova (alias su primo Miguel). Quien luego cubrió a la chica con su capa y acto seguido le tomó los cuernos, ganando así el juego.
Causando reacciones mixtas por parte del planeta entero. Muchos acusándolo de ser un descarado que solo quiere ser el centro de atención importándole poco el bienestar del mundo, otros hablando de que era un caballero y que muchos deberían ser como él. Pero la peor reacción fue la de la propia Lum, que con ese acto, quedó flechada por el ladrón que en este caso, le había robado el corazón en los últimos diez días.
Rosa: Ay primito -dijo burlándose por lo bajo- ¿Así que ahora eres un héroe romántico, eh? Quién lo diría. Solo tú podrías terminar siendo un criminal internacional, un ladrón de corazones y un caballero en el mismo paquete -dijo con algo de resignación antes de atender a quien había entrado a su oficina, Punisher había llegado- ¿y cómo les fue...?
Frank: Me encargue de todas las plagas -fue lo que dijo el mercenario antes de dejar una USB sobre el escritorio- espero que esto sea prueba suficiente para chantajear a los japoneses en caso de que quieran protestar.
Rosa: Excelente -exclamó sonriendo- parece que pensamos igual después de todo. Usted al igual que yo difiere sobre la idea de que las personas en el Underworld no son personas reales.
Frank: Dilo por lo que realmente es, un modo conveniente para poder usar personas como kamikazes, parece que los japoneses no pierden algunas costumbres, como las del holocausto -dijo cruzado de brazos- en ese mundo, aunque sea virtual y parezca un puto juego... ellos pueden morir, no hay vidas extras, no hay alguna magia o tontería rara que te salve el culo... si solo tienes una vida y la vives día a día riendo, enojándote, llorando, amando... para mi eres humano.
Rosa: Amen a eso -asintió estando de acuerdo con ese pensamiento.
El asedio a la tortuga oceánica acabó siendo todo un éxito. Tanto el personal bélico de RATH como el batallón de fuerzas especiales de Estados Unidos fueron erradicados igualmente, sin sobrevivientes. Según el informe era probable que quedaran sobrevivientes del personal de la base militar dado a que las órdenes eran tirar a matar a quien fuera un obstáculo de uno u otro modo, pero si no los habían visto en el caso de programadores, se debía incapacitar, no matar... lo más posible al menos.
Igual eso no era importante. La misión se cumplió como se debía, toda la información del proyecto Alicization fue obtenida con éxito. Así como todo lo referente al Underworld, los orígenes de este mundo virtual y las pruebas de prácticamente experimentación ilegal con seres vivos con fines militares... daba igual que fuera tecnología revolucionaria. Por ahora, la existencia de ese proyecto y todo lo referente a Underworld, se quedaría como un secreto... el mundo era bueno destruyendo y corrompiendo cosas maravillosas como esa a fin de cuentas.
Frank: Dado a que era complicado transportarlas, dejamos las Fluctlights allá, solo nos quedamos con los datos de todo lo desechado además de la información de todo -explicó en lo que la chica de lentes asintió- apenas fue que llegamos, uno de esos idiotas mandados por la CIA pensaba anunciar Underworld como un nuevo juego para mandar a miles de frikis amantes de la violencia a causar una masacre pensando que era un puto multijugador.
Rosa: El clásico pensamiento del soldado promedio, solo me dicen que lo haga y lo hago sin sentirme culpable. En cuanto lo otro... ¿Lo dices por la chica Alice? En realidad no puede importarme menos eso -admitió revisando los datos- es curioso... entre lo que te llevaste, parece que hay unos datos inertes que son diferentes a los demás, como lo explico... es como un bug, o dicho de otro modo, creo que tenemos un fantasma aquí, un alma virtual que no murió del todo. Honestamente no se como pudo pasar...
Frank: ... Deberías saberlo. Una persona que se niega a morir, se aferra a la vida sin importar que -dijo con una seriedad que hizo a la joven verle fijamente antes de asentir.
Rosa: No importa el mundo, la naturaleza humana es sorprendente, y más la obstinación humana ¿no te parece? -pregunto al mercenario que solo asintió con seriedad.
Entre las sombras de los secretos que ambos compartían y las verdades que estaban a punto de salir a la luz, era un hecho que tenían algo delicado aquí. Rosa guardó los datos inertes en un compartimento secreto de su computadora, consciente de que esa anomalía podría ser el comienzo de algo.
Rosa: ¿Sabes que? Me siento de buen humor. Como ambos sabemos que cuando mueres por lo general no hay una segunda oportunidad ¿Qué dices de darle a esta persona una "vida adicional"? -pregunto llamando la atención de Punisher.
Frank: ¿Exactamente como?
Rosa: ¿Olvidas que uno de nuestros departamentos es la robótica? Apuesto a que podemos darle un cuerpo para que lo use. Creo que tenemos los suficientes datos para considerarlo un coma más que una muerte... y si, se que me preguntaras ¿qué pasa si acaba siendo una mala persona? Y bueno... No lo se ¿ese te parece el rostro de una mala persona? -pregunte señalando la pantalla donde se podía ver el rostro de este "fantasma", tras recopilar la data necesaria.
Se trataba de un joven delgado, rubio, de piel clara y ojos azul verdoso. Era apuesto, se notaba a simple vista que era de buen ver. Pero lo que más resaltaba, era su juventud.
Frank: En absoluto... Murió siendo un niño prácticamente. Odio que pase eso, por esa razón es que si me topo con la araña mientras patrullo intento mandarlo a su casa. A mi no me engaña, bajo ese disfraz se haya un mocoso -dijo antes de ponerse de pie- tú te ocupas de todo eso ¿no? Entonces yo me voy... Solo para aclarar. Tengo mi propio departamento, me pagan comida, servicios y salario. Sin mencionar que me dan munición y armamento ilimitado tanto para mi como para mi equipo asignado ¿no?
Rosa: En efecto -confirmó antes de entrecerrar los ojos- ahora, siendo yo la que busca reiterar. ¿Por tu parte de quienes te debes ocupar?
Frank: Tanto dentro como fuera del país en los alrededores, mi jurisdicción cuando no sea una misión especial se va sobre los que cometen fechorías -dijo algo fastidiado de que lo trataran como un niño pequeño, él había aceptado las condiciones cuando firmo el contrato- asesinos, violadores, sádicos. Aquellos que la ley por alguna razón no los toca y son un peligro para la gente común.
Rosa: Sin llegar a la escala de supervillanos o meta humanos para arriba. En caso de llegar a ese punto debes informar primero y esperar instrucciones.
Frank: Muy bien... je, uno pensaría que una señorita como tú sería de actuar de forma moral y correcta -dijo haciendo a la joven adulta rodar los ojos con fastidio por el comentario.
Rosa: Soy objetiva. ¿Y honestamente? La prisión es gastar muchos recursos de forma innecesaria si me preguntas. En gente que no tiene interés en cambiar de vida -mencionó con calma- la idea es que sea un lugar para reformar a la gente y esta pueda reintegrarse en la sociedad. Pero la gran mayoría de los que están allí no piensan y no quieren mejorar. Para ellos solo es cosa de esperar a que acaben sus sentencias para volver a las andadas.
No hace falta decir que la familia Rivera tuvo mucha influencia en el sistema penitenciario del nuevo país. Para comenzar, quienes logran ingresar allí suelen ser afortunados, ya sea por escapar de Punisher o por evitar el equipo de limpieza de la empresa. Una vez dentro, no se puede decir que sea un lugar con comodidades. Los presos deben pagar sus propios alimentos y artículos de higiene básicos. Si no tienen dinero, se ven obligados a trabajar para poder costearse esas necesidades. No existen lujos para los criminales famosos o políticos; todos reciben el mismo trato: una cama de acero y comidas que apenas cubrían lo básico, sin distinción. Vigilancia 24/7, constante monitoreo, castigos apropiados a cualquier falta. La prisión no es un hotel, sino un lugar duro y uniforme para todos por igual.
Rosa: ... Hace cinco años perdí a mis padres -dijo al notar que el hombre mayor no se movió buscando un poco más de ella, y la verdad se encontraba de humor para hablar un poco al respecto- mi madre era una Idol que fue asesinada por uno de sus fans ¿la razón? Ser casada y tenerme... en las redes sociales la gente estaba más a favor del asesino que encontraron muerto y no de mi madre -dije con rencor por el recuerdo- tipos que hasta que se supo de su matrimonio y mi existencia, se decían fans de mi mamá...
Frank: ... El cabrón tuvo suerte de que lo mataran. Yo le hubiera dado una muerte lenta y dolorosa -dijo buscando empatizar con la joven que, sabiendo que era su modo de ser amable, agradeció el gesto.
Rosa: Si, lo sé... Usted solo disfrute su tiempo aquí, señor Castle. Nunca faltan degenerados en el mundo... -termino diciendo para luego dedicarse a ver la eterna luna menguante en el cielo, perdiéndose en sus pensamientos.
La joven se quedó observando la luna que se asomaba entre las nubes, su reflejo plateado bañando el silencio de la oficina. Por un momento, parecía perdida mirando las estrellas, como si buscara respuestas en ese brillo frío y distante. La conversación había sido dura, pero necesaria; le permitía confrontar aspectos que a menudo prefería enterrar en el fondo de su mente.
¿Qué es lo que realmente nos hace humanos? se preguntó, dejando que la pregunta flotara en el aire, tan ligera y pesada a la vez. La línea entre el bien y el mal, entre justicia y venganza, era difusa en un mundo donde la corrupción y la violencia parecían gobernar cada rincón. Para ella, la verdadera humanidad residía en esa obstinación por seguir luchando, por mantener vivo el deseo de cambiar, incluso cuando todo parecía perdido. Eso la definió perfectamente, en especial luego de la muerte de su madre.
A quien no había día que no extrañara, y en parte por eso terminó siendo como es. ¿Eso era bueno o malo? Pues depende de a quién preguntes.
________________________________________________________________________
(Omake 3 de 3: San Juan y el legado de la luna)
(Estudio de animación "Las Leyendas" (en proceso de ser un estudio real), Instituto de arte de San Fransokyo)
"Comprendo que algunas personas puedan sentirse algo inquietas ante las nuevas restricciones y el aislamiento del mundo. Para quienes estamos familiarizados con la cultura americana, es posible que piensen erróneamente que se les está "privando de su libertad". Sin embargo, se trata de algo muy distinto: estamos hablando de una nueva forma de libertad, una que la gente en esta ciudad está empezando a disfrutar sin siquiera darse cuenta. Es cierto que la salud no es gratuita y que, en ocasiones, se espera que los agricultores alimenten a otros por medio de la caridad. Sin embargo, en lugar de ello, se busca ofrecer trabajo para cubrir el costo médico, que ahora es más accesible que en el pasado, y para adquirir la comida que se cultiva al precio justo. Sin mencionar que la seguridad en las calles es mejor que nunca antes y se busca disminuir los índices de pobreza a un margen mínimo a casi nulo.
Desde la ética en psiquiatría, es importante considerar el papel de la evolución en nuestra naturaleza. Trastornos como la depresión, los ataques de pánico y la impotencia sexual son respuestas a antiguas presiones selectivas. La realidad es que muchas personas se sienten solas, siendo víctimas de sus propios prejuicios. Los sueños, los delirios o el dolor de un miembro fantasmal son experiencias tan vívidas para un ser humano como la lluvia lo es para el cuerpo. La realidad, en última instancia, es un consenso compartido. Cada individuo es prisionero de su propio ego, un mar de sueños en constante transformación. Sin embargo, como seres humanos, los invito a unirse a esta nueva realidad, donde podrán descubrir que esta libertad renovada abre las puertas a un sueño utópico para todos, según la visión de cada quien. Por supuesto, esto dependerá de la perspectiva de cada uno".
Siendo en ese momento que Leo decidió apagar la televisión para dejar de escuchar las noticias. Estaba tan concentrado que no podía oír a la nueva terapeuta que Don Héctor había traído desde Hawái, preocupado por el posible malestar psicológico de la gente debido al aislamiento de San Fransokyo del resto del mundo. La doctora Gladys Okra, conocida escritora y médica con un amplio historial de casos de éxito en la ayuda a personas a través de sus libros, programas de televisión y radio, era quien intentaba conectar con la comunidad de la ciudad. Su enfoque era transmitir que no debían ver la situación como algo negativo, sino como una nueva oportunidad para avanzar.
Leo: La verdad todo este asunto de los planes de la familia de Miguel no son tanto de mi interés, lo cierto es que estoy más centrado en terminar mi corto... de verdad quiero dibujar movimientos cotidianos y realistas que parecen tener vida... gestos faciales sutiles y realistas, sincronía de labios, parpadeos... ¡Y el ritmo de las interacciones, eso es muy importante! -exclamó luego de darse una bofetada para permanecer despierto.
¿La razón? Se estaba quedando dormido por quedarse trabajando hasta tarde solo. Ya Hiro se había ido a su casa y Spencer ese día se lo había tomado libre, al parecer tenía una cita con alguien o algo así. Por su parte le gustaría descansar, pero no podía, no cuando el día de la presentación en el festival del instituto estaba cada vez más cerca y sentía que no había hecho nada ¡Tenía mucho en juego aquí! Casi podía sentir como el bichito de la ansiedad estaba provocando un caos dentro de su cabeza.
Leo se frotó los ojos, intentando despejarse y centrarse en su trabajo. La habitación estaba en silencio, solo interrumpido por el suave zumbido de su computadora y el lápiz deslizando suavemente sobre el papel. La tensión en sus hombros era palpable, pero su pasión por la animación y el deseo de perfeccionar su obra lo mantenían despierto. Eso hasta que de repente, escuchó un suave golpe en la ventana. Pero no como el de una piedra o una roma golpeando, sino más bien... como el de alguien abriendo y entrando por allí.
El joven levantó la vista con cautela, su corazón acelerándose por el sobresalto. La sombra que se deslizó lentamente por la cortina de la ventana parecía casi etérea, como si fuera una aparición. Sin pensarlo mucho, se levantó con cuidado, dejando el lápiz sobre el escritorio y acercándose con pasos silenciosos. La noche estaba en calma, pero esa presencia inexplicada le hacía sentir que algo importante iba a suceder.
De allí que solo siguió al desconocido hasta que desde una esquina escondido le miró solo dejarse caer en el sofá y quedar profundamente dormido.
Leo: Vaya, menudo descarado, pero quien se cree esté... este... -dijo acercándose para ver de cerca al intruso solo para quedarse sin palabras- es... es hermosa... no, es un chico... pero no retiro lo dicho.
Era un chico de su misma edad, pero por lo delgado que estaba parecía más joven. Su rostro era adorable y expresivo. Tenía el cabello negro, corto y ligeramente desordenado pero con un lado lo bastante largo para cubrir parte de su cara y estaba atado en un moño. A pesar de usar un parche, su belleza no se ve afectada. Su piel era de tono claro y su complexión delgada le daba un aspecto delicado. Vestía ropa sencilla y cómoda, que no parecía corresponder a la época, similar a las prendas de un joven aventurero del Japón feudal: una túnica o camisa en tonos tierra y pantalones cortos. Además de un instrumento que de momento no sabia cual era el nombre, pero solo pudo imaginar como lo tocaba... debía ser hermoso.
Por su parte a Leo le quedaban claras dos cosas. Ese chico era precioso a sus ojos (amor a primera vista, ay no). Y estaba agotado porque se encontraba profundamente dormido ¿de donde había venido? ¿Quién era?
Leo se quedó observando en silencio, con una mezcla de sorpresa y curiosidad. La figura dormida parecía completamente ajena al mundo exterior, su respiración tranquila y su rostro sereno. La luz de la luna filtrándose por la ventana iluminaba tenuemente su piel, resaltando la delicadeza de sus rasgos. Tal vez... por hoy se tomaría un descanso algo más temprano de lo normal... Tal vez suene como un acosador, pero... no le molestaría apreciar esta belleza inusual hasta quedarse dormido.
¿Y si para cuando despierte ya no estuviera? Bueno, al menos puede decir que tuvo la dicha de verlo aunque fuera una vez.
Notes:
Y ese fue el capitulo de esta vez. Como siempre pueden votar, comentar, lo que gusten.
¿Y que les pareció?
Si, esto se puede sentir como tamaño relleno pero que puedo decir, el mundo sigue girando y no todo son solo dos personajes. Además, para el próximo cap ya vendrá otro robo del famoso ladrón Casanova. Que será el robo esa vez. Adivinen.
Ah, por cierto. La cita de Spencer fue más o menos así la cosa. Minuto 1:30 en adelante (aunque son libres de ver el video completo, mejor jaja)
https://youtu.be/fAfm1rUiMic?si=kpbXD4s8iTGCe3r_
Por ahora, nos vemos.
Chapter 33: Capitulo 29: Rareza en grande (1/2)
Notes:
(See the end of the chapter for notes.)
Chapter Text
(General Pov)
(Torre Blanca, Londres, Inglaterra)
Las Joyas de la Corona, una colección de joyas, insignias y objetos que pertenecen a la Casa Real Británica. Entre sus principales piezas se encuentran las coronas reales e imperiales de Inglaterra, Escocia e India, además de otros elementos como orbes, espadas y cetros. Estas joyas han sido guardadas y exhibidas en la Torre de Londres desde 1661, manteniendo una tradición centenaria de custodiar objetos de gran valor en este lugar.
Con una colección que incluye 23.578 piedras preciosas, está reconocida colección mundial forma parte de la Colección Real y sigue utilizándose en ceremonias oficiales en la actualidad. La exhibición ofrecía la oportunidad de conocer más sobre la historia y el significado de las Joyas de la Corona, revelando detalles e historias nunca antes contadas. Esa noche era la última oportunidad para visitar esta exposición.
Guardia 1: Oh, cómo me apetece tomarme un té y ponerme a leer el periódico, escuche que nacieron dos crías de leones blancos en África hace poco, no es una gran noticia pero es interesante -exclamó luego de completar una ronda de vigilancia más durante la jornada.
Guardia 2: Es verdad, estoy deseando que se acabe esta exposición de las joyas de la corona y las guarden en la cámara de seguridad.
Guardia 1: Si, yo también. Tú vigila la vitrina y yo haré otra ronda -exclamó antes de escuchar ruidos por encima de ellos- Alan, hay alguien en el tejado -fue todo lo que dijo para que luego ambos guardias se pusieran en marcha.
Sin que ninguno de ellos lo notara, un casi imperceptible láser cortaba silenciosamente la parte superior de la torre donde se encontraban. Los guardias estaban más enfocados en averiguar quién había logrado colarse en la torre de las joyas de la corona, solo para descubrir un juguete muy conocido por todos: una caja sorpresa de tamaño considerable cuya manivela empezó a girar en cuanto ambos hombres llegaron al techo.
Guardia 2: ¿Qué demonios es esto? -preguntó, frunciendo el ceño mientras se acercaba con cautela.
Guardia 1: No lo sé, pero parece... una trampa o algún tipo de dispositivo. ¡Cuidado! -exclamó para cuando la música se detuvo y la caja se abrió, revelando un payaso inflable que empujó a ambos hombres hacia atrás.
En lugar de caer al suelo, ambos hombres atravesaron un portal creado por Sirque, que los llevó directamente al río Támesis. Sin embargo, eso no fue lo que más los sorprendió; fue solo el comienzo. Lo que realmente los dejó atónitos fue que, tras salir del agua, observaron con incredulidad cómo la mitad de la torre comenzaba a levantarse y a volar, perdiéndose en el horizonte del cielo nocturno mientras era arrastrada por el viento, auxiliada por globos aerostáticos de todas las cosas.
Guardia 2:... No puedo creerlo, ese tipo lo ha conseguido -dijo observando al responsable que se hallaba mirándolos desde lo alto de la torre que se alejaba hasta perderse de vista- el ladrón Casanova se ha robado las joyas de la corona, y parte de la torre de Londres.
Mientras el espectro de la torre de Buckingham se desvanecía en la distancia, los guardias, empapados y atónitos, se miraron con incredulidad. La escena parecía sacada de un sueño surrealista, pero la realidad era mucho más inquietante. La figura que observaban desde lo alto, el ladrón de sueños, parecía disfrutar de su victoria, sonriendo con autosuficiencia mientras las joyas relucían ante sus ojos.
Y si, seguro se lo preguntan ¿Cómo podían unos simples globos de aire cargar con un monumento histórico que seguramente debía pesar varias toneladas? La respuesta era sencilla en realidad, todo era gracias a los bastones antigravedad o Anti-Grav para abreviar. Una máquina con forma de vara que se adhiere a objetos pesados para hacerlos ingrávidos. ¿Y de donde saco Casanova esa tecnología? Pues bueno... el grito de cierta persona en Swellview lo decía todo.
Capitán Man: ¡Schwoz! ¡¿Dónde rayos está el Anti-Grav?! ¡Lo necesito, esta maleta pesa mucho!
_________________________________________________________________________
(Hiro Pov)
(A la mañana siguiente)
(Cerca del estudio de animación "Las Leyendas", IASF, San Fransokyo)
Hiro: Honestamente creo que estás exagerando... ¿no te da vergüenza andar con eso allí? -Pregunte a Megan que una vez termine de contarle cómo había acabado mi cita con Miguel hace días, se detuvo frente a una tienda de conveniencia a comprar hielo para sostenerlo contra sus pantalones.
Megan: No, para nada, lo necesitaba -se defendió como si nada- amigo, tuvieron una primera cita con un desenlace que a mí me hizo tener que ir por hielo del calor que me dio.
Hiro: ¡No fue tan intenso!... ¿oh si? Digo, ni siquiera, ya sabes... -dije para luego hacer un gesto de ok, pasando un dedo en medio del círculo para dar a entender... eso.
Megan: Hiro ¿Has visto a tú novio? Te hizo lo que aún sin dar conciertos aún, muchas chicas querrían que les hiciera a ellas, imagínate cuando den "ese" paso -me recalco de un modo que me hizo ponerme rojo de la pena- y si me preguntas, algo me dice que así te pago con creces las horas extras que haces del trabajo. -comentó divertida.
Algo que me hizo quedarme un segundo en silencio, con la cara enrojecida por la vergüenza y la sorpresa. No podía negar que Megan tenía razón en muchas cosas, pero aún así, la idea de que Miguel hiciera "eso" con otras chicas... no me gustaba para nada, me hacía sentir una mezcla de celos y nerviosismo, lo de esa vez fue algo solo nuestro, quiero creer eso, y sé que es verdad.
Hiro: Hasta siento que me le quedé debiendo yo -reconocí con algo de pesar- es decir, justo cuando estaba a punto de venirse me apartó y tuve que hacerlo correrse con mi mano. Yo no quería eso, también quería que se viniera en mí... -dije señalando mi boca.
Para acto seguido llevarme ambas manos al rostro para así ahogar un grito que se había escapado de mis labios en cuanto me percate de que fue lo que dije. ¿Qué me pasaba? Usualmente yo no era así, pero con solo pensar en esa noche yo... creo que necesito una ducha fría.
Megan: Pues bueno, ahora imagínate cuando te tenga en sus fuertes brazos, con las manos sujetas a su fuerte pecho, mientras él te... -dijo pasándose un cubo de hielo por su cuello y clavícula para insinuar algo que me hizo querer a mi una bolsa de hielo.
Pero en vez de eso, me conforme con tomar el galón de agua para un dispensador que estaba en una esquina, para luego levantarlo con fuerza que no tenia (luego me iban a doler los brazos) y echarme todo su contenido encima... si, eso servirá para enfriarme por ahora.
Megan: Como sea, entonces volviendo al tema de antes ¿de verdad me estas pidiendo ese favor? Prácticamente con eso me haces sentir que oficialmente soy una de los grandes héroes -dijo con emoción en lo que yo solo sonreí resignado.
Hiro: Técnicamente ya eras parte del grupo, al menos para mí, solo que nunca hicimos nada oficial -dije encogido de hombros- pero si, me gustaría que me hicieras ese favor y fueras nuestro soporte técnico. Quien está al tanto de las noticias y nos ayuda con las pistas de Casanova en sus juegos, te lo agradecería mucho -pedí con gentileza esperando que ella dijera que sí.
Ya que no mentiré, con todos mis deberes y responsabilidades, al menos en lo que respecta a Casanova, por mucho que odiara decirlo, necesitaba ayuda más técnica. El tipo era un amante de hacer todo con pistas que incluyen historia y usar el cerebro. Y sería mucho más fácil perseguirlo teniendo a alguien que se ocupe de vigilar sus movimientos desde un punto fijo.
Y no, Baymax no es una opción. Hasta nuevo aviso no pienso volver a sacarlo a una misión que tenga relación a Casanova, no quiero que por alguna razón le termine de dañar todo el software de forma definitiva. Nunca me lo perdonaría si eso le pasara a mi mejor amigo.
Megan: ¡Por supuesto, Hiro! Sabes que siempre puedes contar conmigo. Además, eso suena como un reto interesante, y a mí me encanta ponerme en modo detective -dijo en lo que yo no pude evitar sonreír ya que me constaba.
Hiro: Gracias, Megan, en serio. Esto nos ayudará mucho para atrapar a Casanova -fijo en lo que ella me dio un golpe en el hombro en señal de camaradería para luego sacar su celular.
Megan ¿Para que son los amigos? Entonces, ¿por dónde empezamos? ¿Tienes alguna pista o algo que pueda indicarme qué buscar?
Hiro: Pues por ahora nada más allá de estar al pendiente de las noticias -dije en lo que suspire al ver la bodega que le habían dado a Leo para hacer su proyecto de animación- pero por ahora mi prioridad es despertar a Leo que seguro se quedo dormido por desvelarse de nuevo, está yendo tarde al trabajo.
Y no, no era que encima de su carrera y de su proyecto de animación había conseguido un trabajo para conseguir dinero extra. Sino que tanto él como Marco y Miguel se habían pasado de tontos... mi novio debe conseguir otros amigos, o al menos alejarse de Marco, él es la mala influencia. Para resumir, una carrera entre amigos para ganar una copa hecha de papel maché por el edificio principal de la empresa terminó en daños de 2 mil dólares con 30 centavos al romper un par de computadoras, dos lámparas, tres jarrones y también hubo que pagar más de un trabajo de tintorería luego de cierto accidente con el carrito del conserje.
Y eso fue solo hace un par de días. Antes de eso habían roto una pared del estudio de ensayo probando un columpio improvisado, el equipo de sonido y rebobinado al derramar un batido por error, y ni hablar de cuando tomaron un auto de la empresa sin permiso y terminaron chocando (nota, así se tomó la decisión de que los autos a partir de ahora tengan un control parental integrado). Repito, Marco saca lo peor de los otros dos, siendo así que Don Héctor les puso un ultimátum, ser responsables de sus acciones devolviéndole los dos mil dólares de su última travesura trabajando.
Usando como amenaza que hasta que no lo hagan, los chicos no podrán usar la piscina de su casa hasta nuevo aviso, Carl Felony se ocuparía de eso. Para hacerlo justo se decidió que cada uno debía conseguir por su cuenta 666 dólares con 66 centavos. Marco está probando suerte como modelo (de paso fue vergonzoso verlo hablar consigo mismo en el espejo), Leo trabaja con Kyle como asistente de cocina luego de fracasar como niñero y girador de letreros, y Miguel se salió con la suya trabajando con su papá y su prima ¿en qué? No tengo idea.
Megan: Al menos lograron encontrar trabajos rápido. Aunque opciones hay varias, vi en el periódico cosas como ser un traductor ruso, tragador de espadas, inspector de pollos...
Hiro: ... ¿Para que un pollo necesita un inspector? -me pregunté extrañado en lo que entrabamos al estudio- muy bien Leo, hora de despertar, tu... ¿pero que...?
Esto no me lo esperaba ciertamente. Se suponía que debía encontrar a Leo durmiendo con cara de muerto en vida (incluido un olor parecido al de algo que se debió enterrar hace 3 días), pero en vez de eso lo encuentro despierto, observando fijamente a otro chico que en la vida había visto... Esto es raro.
Leo: ... No me lo esperaba pero no me quejo -dijo al notar que entre con una sonrisa calmada. Es oficial, tengo muchas preguntas ahora mismo.
Hiro: ¿De donde salió este chico? Esa ropa no parece de esta época siquiera y... ¿Qué le pasó en el ojo? -pregunto preocupado al notar el parche... ¿Una persona sin hogar? Según sabia eso era algo que Rivera Solutions estaba buscando erradicar en San Fransokyo desde que nos aislamos.
Leo: No sé pero podríamos despertarlo.
Hiro: ¿Seguro? Literalmente huele a que no ha tomado un baño en días -dije olisqueando un poco el aire (aunque dudaba de quién era el responsable realmente del hedor)- y por lo delgado que esta creo que menos a comido algo.
Leo: Muy bien -declaró cargándole de forma nupcial- lo llevaré a asearse y de ahí a comer -exclamó mirando con un mirada ciertamente especial al chico en sus brazos, una que se me hacía muy familiar... no.
Hiro:... ¿Es lo que creo que es? -pregunte arqueando una ceja con una sonrisa picara.
Leo: ... Vete a besar con Miguel antes de que me juzgues -dijo dándome la espalda en lo que mi cara competía con el rojo de una manzana.
Hiro: ¡¿Nos has visto?!
Leo: No, pero no es difícil imaginar a dónde van ustedes dos cuando no los ven -fue todo lo que me dijo antes de abrir la puerta e irse. Posiblemente para ir a la cabina compacta que estaba al lado del estudio que Don Héctor le regaló para que se quede prácticamente la madrugada trabajando si quería.
Idea que a la larga fue más mala que buena dado al descenso de la salud que podría ser perjudicial para Leo que estaba obsesionado con esto del proyecto, me diran a mi que hemos estado discutiendo los últimos días por eso... aunque por ahora solo podía decir que tenía la cara roja por su respuesta y mis ideas eran confusas.
¿Acaso ya todo el mundo lo sabía? Yo apenas me animé a contárselo a Megan recientemente... es verdad, usualmente olvido que además de sus compañeros de trabajo también son los mejores amigos de Miguel. Pero como sea, parece que me están llamando de... ¿un número privado?
Por favor que no sea quien creo que sea... pero claro que es él. Ya decía yo que estaba en lo correcto en tener mis dudas de que la razón de que estaba en Hawaii y cuando se metió en todo el asunto de los ogros del rayo la última vez que lo vieron era porque andaba de vacaciones. Y de ser el caso, parece que volvió a su labor para mi mala suerte.
Casanova (Miguel): Hola capitán ¿Me extrañaste? -preguntó con su tono burlón que me hacía hervir de rabia solo escucharlo.
Hiro: Te encontraré donde sea que te encuentres, Casanova ¿me oíste?
Casanova: Puede que sea así, capitán. Pero siempre escaparé "por los pelos" -dijo para luego colgar.
Un día de estos, un día... y con suerte ese día tal vez sea hoy.
Hiro: Juro que esta vez... Dime algo bueno, Megan -dije al notar que ella miraba su teléfono con sorpresa, tal parece que ya se percató de lo que sea que Casanova hizo esta vez.
Megan: Pues verás. Anoche Casanova robó parte del palacio de Buckingham. Pero resulta que se sabe en donde la dejó. Está en el desierto de Gobi en Mongolia, a 9 mil kilómetros de su lugar de origen -dijo para luego sonreír- si la torre de Londres aún sirviera como prisión, la reina de inglaterra le daría a Casanova una suite de lujo allí y tiraría la llave. .
Hiro: ¿El desierto de Gobi? -pregunte incrédulo. ¿Cómo rayos hizo eso? La tecnología de Sirque no daba para tanto... ¿o sí?
Megan: Exacto, así que te recomiendo que si van allá se abriguen bien. Ya que irónicamente aunque sea un desierto, el Gobi es de los lugares más fríos del mundo al ser el desierto más al norte del mundo. En esta época del año la temperatura puede bajar hasta 40 grados bajo cero de día.
Muy bien, de momento solo diré que tengo varias cosas en la cabeza. Pero una cosa era segura: no iba a dejar que escapara otra vez.
_____________________________________________________________________
(Interludio breve, momento Kubo x Leo)
(Leo San Juan Pov)
No estaba realmente consciente de lo que hacía hasta que ya era demasiado tarde y lo terminé haciendo. No me di cuenta de lo que había hecho hasta que ya tenía al chico en el agua: lo había desnudado sin su permiso y luego lo había metido en una bañera... y justo ahora abrió los ojos. Dios, esto era muy incómodo; por favor, que no piense que soy un loco... aunque quizás ya sea demasiado tarde para eso. Fue sin querer, solo quería hacer una buena acción.
Kubo: ... Esto es incómodo en muchos niveles... -dijo mirando en shock con su único ojo- ¿Es un sueño o de verdad está pasando?
Leo: Es bueno que despiertas, empezaba a preocuparme -dije fingiendo tranquilidad, buscando hacer hasta lo físicamente imposible para arreglar todo este asunto- y perdóname por esta presentación tan abrupta pero de verdad necesitabas un baño... ¿Me dejas lavarte o puedes solo? -pregunte para luego querer darme contra la pared.
¡Soné como todo un pervertido! ¡Sencillamente no hay modo de que...!
Kubo: Agradecería la ayuda -dijo apenado en lo que yo sencillamente me quede como de piedra.
Leo: Muy bien.... -dije empezando a tallarle la espalda no queriendo tentar a la suerte más de lo que ya lo he hecho- ¿Me dirás quien eres y qué hacías durmiendo en mi estudio? -pregunte en lo que el chico del parche se sonrojo levemente.
Kubo: ... ¿No era un lugar abandonado?
Leo: ¿Qué te hizo pensar eso?
Kubo: La fachada. Parece vieja, remendados apenas funcionales y le falta una pintura al exterior, y bueno... Lo vi muy desordenado cuando entre el interior
Leo: Si, necesito darle una pintadita y también ordenar un poco -dije cortándolo, no queriendo escuchar más de que mi lugar de trabajo es un basurero ¡así funciona el procedimiento creativo!- ... y si está tan desordenado es porque Hiro y yo estamos como locos, ya en un par de días es el día del festival artístico del instituto de arte. Allí se decide si la universidad me admite y si de paso hacen oficial mi club de cine y me dan fondos para mis proyectos, o solo me echan a patadas a la calle.
Genial, solo pensar en eso ya me... ¡ni siquiera te atrevas a hacer de las tuyas en mi cabeza, Ansiedad!
Kubo: ¿Cine? -preguntó sacándome de mis pensamientos.
Leo: Pues sí, para eso es este lugar. Para hacer películas... Sabes que es una película, ¿verdad? -pregunte recibiendo silencio como respuesta- ... ¿Por eso la ropa antigua? ¿Vienes de un pueblo aislado o algo así? -pregunte curioso.
Y no, si resulta que era el caso y se metió ilegalmente al país no voy a delatarlo. Es decir, solo para empezar cómo podría si justo ahora fantaseo con estar en la tina junto a él y... ¡bájale un par de rayas a la calentura Leo, ni que fueras Marco!
Kubo: ... Algo así.
Leo: Eso explica un par de cosas sobre ti, creo... ¿Cómo llegaste aquí? -pregunte en lo que él desvió la mirada.
Kubo: Mi maestro me dijo que viniera para investigar algo... Solo eso puedo decir -dijo en lo que yo no pude evitar sorprenderme. Tal vez deba mantenerlo vigilado por si acaso, aunque estoy seguro de que no es una mala persona, no se como, pero puedo sentirlo.
Leo: Ya veo... Seguiré con el cabello pronto... Esa parte de allí creo que te la lavas tú ¿no? -pregunte mirando a donde está la parte baja del chico del parche bajo el agua. Haciendo que se sonrojara.
Kubo:... Soy virgen -lo juro, solo bastó que dijera eso para que sintiera como si hubiera escupido un vaso de agua o algo así de la sorpresa.
Leo: ¡Yo no quería decir! Digo, eres hermoso, pero... ¡Nunca me propasaría así contigo! ¡Acabo de conocerte! -dije todo avergonzado, aunque él parecía igual de apenado así que estábamos parejos.
Kubo: ... ¿Has estado con muchas personas? -pregunto logrando que sacara una risa seca de burla, a mi mismo he de aclarar.
Leo: ¿No lo notas? Soy un nerd de pies a cabeza.
Kubo: ¿Qué es ser un nerd? -cuestiono haciendo que ahora lo viese con incredulidad.
De donde sea que es, en serio que están atrasados, al menos eso pienso solo notando la falta de cultura general de este bombón... Leo, ya cálmate, hormonal.
Leo: ¿Es en serio? -respondí con renuencia en lo que él se puso a jugar con sus dedos.
Kubo: Siento ser una molestia, es que usas palabras que nunca había escuchado antes y yo... -trato de justificarse en lo que yo, más por inercia que por otra cosa, le di un golpe leve en la cabeza.
Leo: ¡No eres ninguna molestia! ¡Más bien te iba a decir que si no tienes donde quedarte te puedes quedar conmigo todo lo que quieras! -declare con convicción para luego ponerme rojo como un farol... yo y mi bocotá.
El chico por su parte levantó la vista, sorprendido por mi ofrecimiento. Sus mejillas todavía estaban sonrojadas, pero en sus ojos podía verse una chispa de gratitud y cierta incertidumbre.
Kubo: ¿Seguro? Es que ni me conoces...
Leo: ¿Y? Necesitas ayuda y fácilmente noto que estás lejos de ser un mal viviente. ¿Traducción para mí? Necesitas ayuda y te la voy a dar te guste o no -dije para luego tomar algunas hebras de su cabello- ahora deja que te eche shampoo en tu pelo y deja de decir tonterías como que eres una molestia.
Kubo: Gracias... realmente aprecio eso. Pero no quiero ser una carga -mencionó al parecer apenado por mi amabilidad. Maldita sea, es muy tierno.
Leo: No eres una carga, ¿ok? Además, en este momento, no puedo dejarte solo. No sabes cuánto me preocupa que estés aquí solo, en un lugar desconocido -dijo para luego solo suspirar- Perdóname... Solo me recordaste a mi. Yo dije lo mismo cuando Miguel llegó a mi vida diciendo que quería ser mi amigo.
Kubo: ¿Miguel? -pregunto curioso en lo que yo sonreí con nostalgia.
Leo: Mi primer amigo, antes de él me la pasaba solo. Todo el día éramos solo yo y mis libros de fantasías y leyendas, oh si no era ayudar en la panadería de mi abuela con mi hermano mayor y ya... Y un día en el almuerzo de la forma más imprevista posible, solo se me acercó y me dijo "¿quieres ser mi amigo? Estas solo, yo también. Quedémonos juntos".
No era la mejor de las historias ni la más emocionante pero... era un recuerdo muy preciado para mí.
Kubo: Es alguien directo con lo que quiere, al parecer.
Leo: Es algo genético, al parecer -dije recordando a la madre, el padre y la prima de mi amigo- y para que entiendas, un nerd es un perdedor, de los aburridos.
Kubo: Pues no me pareces uno.
Leo: Porque no me conoces.
Kubo: Pero se cuando alguien me gusta como persona, y me gustas... -dijo sin notar mi quijada desencajada del todo- Además, yo también soy aburrido.
Leo: Pues no lo pareces -dije en lo que compartimos una mirada para luego reír suavemente al unísono.
Lo admito, esto me estaba gustando, no habíamos hablado antes, pero había algo con este chico... no lo sé, era como si hubiera habido un clic, como el de la historia del conde Drácula con su esposa o el de su hija con su esposo. Creo que solo son imaginaciones mías... aunque es mentira decir que no sentía una calidez hablando con esta preciosidad de chico.
Leo: Eso sí, vivirás con mis amigos en nuestra casa. Aunque el estudio está lo bastante equipado, no es un hogar.
Kubo: ¿Y a ellos no les molestará?
Leo: De todas las que me deben, no pueden decir que no -dije recordando una larga lista de metidas de pata en la que yo los salvé a ambos en el pasado- en los próximos días con gusto te muestro la ciudad. Pero sería en la tarde, en la mañana trabajo y pronto tengo mi presentación... Voy a salir triunfal o a ser la cena de los lobos.
Kubo: ... ¿Habrá lobos involucrados? -pregunto preocupado en lo que yo no pude evitar reír quedamente. Olvidando que de hecho iba tarde a mi trabajo con Kyle. Pero no me arrepiento de nada, luego me las arreglaría con él.
A fin de cuentas, todo era una fachada al fin y al cabo. Al menos hasta cierto punto, lo de trabajar para aprender responsabilidad por mucho que me avergüence si era de verdad.
Leo:... Lobos metafóricos, tranquilo... Aunque si me preguntas para mi son tan malos como los reales -reconocí en lo que él me miró con más preocupación, a lo cual le comencé a peinar el cabello para calmarlo- descuida, es solo que... Tuve una discusión con Hiro antes de encontrarte el día anterior. Para la exposición al final haremos un corto que muestre una escena completa que será llamativa pero que prácticamente no tendrá contexto alguno de un relato... Yo quería hacer una historia completa pero no tenemos tiempo para colorear, dibujar o hacer más tomas... Digamos que así se siente cuando la pasión choca con la resignación -dije con una sonrisa decaída y cansada.
A lo cual me lleve la grata sorpresa de que él muchacho en la bañera me apretara la mano en un intento de reconfortarme.
Kubo: Seguro que todo saldrá bien.
Leo: Yo no diría eso -admití frotándome la frente- además de un par de profesores, quienes evalúan las exposiciones mañana serán el consejo estudiantil. Todos en el instituto de arte dicen que es mejor no meterse con el consejo estudiantil.
Kubo: ¿Tan malos son?
Leo: No es que sean malos. Es solo que tienen un presupuesto limitado y por eso no pueden darle fondos a cualquiera. Y en mi caso, además de fondos, es mi entrada a la universidad la que está en juego y la existencia misma de mi club, tengo mucho en juego y todo depende de dejarlos sin palabras -dijo buscando calmar mis nervios como fuese- mis amigos me dicen que porque no solo le pido dinero al papá de Miguel y ya... Pero esto es algo mío, quiero sentir que lo conseguí sin que me tuvieran de la mano todo el camino.
Kubo: Ya veo... -fue todo lo que dijo en lo que yo sentí como una punzada, no sé de qué, pero la sentí.
Leo:... ¿Sabes que? Ven a la exposición, te mostraré lo que para mi es la magia, te quedarás sin palabras -dije captando su curiosidad, se notaba en su mirada.
El chico me miró fijamente a los ojos, con una mezcla de incredulidad y una chispa de interés que aún no había manifestado del todo. La atmósfera se siente más cálida, más cercana, y a pesar de las circunstancias, una sensación de esperanza comenzó a florecer en mí ¿de qué exactamente? Yo... ¿pensaba que podía llegar a algo con él? Pero si lo acabo de conocer.
¿Qué sigue? ¿Qué ahora me pase la noche en vela pensando en él?... Ay no
______________________________________________________________
(Hiro Pov)
(Desierto de Gobi, Mongolia, Asia)
Fred: ¿Esto es Mongolia? ¡No hay nada! Y yo que quería saber a qué sabía el pollo a la mongol -dijo solo para recibir un zape como respuesta- pero es verdad... Me pregunto si conoceremos a otro héroe o persona importante como fue con Lady Bug y Chat Noir en París. El tigre en México. Kim possible. Dexter el niño genio... Personas así te hacen pensar en lo grande e increíble que es el mundo -reflexiono mientras nos abríamos paso en camellos por el desierto.
Wasabi: Estoy muy seguro de haber escuchado o leído en algún lado que el abuelo de El Tigre mencionó que de hecho ellos son Tex-Mex.
Fred: Lo encontramos en México. Me quedo con mi versión -declaro en lo que todos solo suspiramos en respuesta.
No se en que momento me acostumbre a que salir de San Fransokyo a otras partes del mundo se volvió algo hasta frecuente y normal para mi (de paso había que agradecer al papá de Fred de lograr convencer a Don Hector de que su familia y empresa de transporte pudieran entrar y salir de San Fransokyo cuando quisieran siempre que el papeleo estuviera en orden), pero una cosa es segura, debía agradecer que cada vez me gustaba más hacerlo. No solo porque así le seguíamos la pista a ese mendigo ladrón, sino también porque con cada viaje me abría a nuevas experiencias y era capaz de ver que tan grande era el mundo y aprender de él.
Cosas como que en efecto, a pesar de ser un desierto, Gobi era un lugar muy frío.
Hiro: Qué bueno que integré reguladores de temperatura a los trajes -fue todo lo que comente luego de ser recibidos por un viento helado apenas llegamos a este desierto tan inusual.
Wasabi: Un desierto donde hace frío. Ahora lo he visto todo.
Aunque esa afirmación fue rápidamente contradecida cuando a lo lejos tuvimos a la vista lo que en parte venimos a buscar. Nada más que el pedazo superior de la torre blanca dejada a mitad del desierto como si nada, una vista que en cierto modo me recordaba a la estatua de la libertad del planeta de los simios solo por la imagen ciertamente.
Pero antes de que decidiéramos que hacer fue cuando vimos una bengala ser disparada al cielo desde el techo de la torre, a lo cual rápidamente nos adentramos al interior de esta pensando que pudiera haber alguien en peligro. Solo para acabar encontrando algo igual de raro que toda esta situación, al que parecía un caballero inglés en todo el sentido de la palabra con uno de los peinados más extraños que he visto en mi vida.
Grevil: Disculpen si les asusté. Pensé que eran bandidos del desierto y por eso dispare la bengala con la intención de espantarlos -dijo para luego hacer una reverencia- soy el detective Sir Grevil de blois de Scotland Yard -dijo para la sorpresa de todos nosotros.
Hiro: La famosa policía de Londres... -dije sorprendido- un gusto, nosotros somos...
Grevil: Los grandes héroes, lo sé, según se han estado siguiendo la pista de Casanova desde hace un tiempo. En orden serían el capitán encanto, Chop Chop, Reina Veloz, Chica Alta y Salta Llamas... He de suponer que eso fue cosa de una fan, porque dudo mucho que tengan tal gusto en nombres -declaró sonriendo- ¿Les gustaría trabajar conmigo? Aprenderán mucho. Por cierto, parece que de toda la colección de joyas lo único que falta son dos collares de diamantes -dijo dándonos la espalda para ver los alrededores.
Hiro: ¿Sólo dos collares de diamantes? ¿Ni siquiera la corona? Literalmente es la pieza central de la colección -pregunté extrañado por eso.
Go Go: ¿Por qué Casanova haría un plan tan elaborado solo para robar dos collares y dejar el resto de las joyas?
Grevil: Una sencilla pista que dejó Casanova qué encontré al llegar puede responder a esa pregunta -declaró mostrándonos un reloj cucú de vapor- aquí la tienen. Ahora, tomaremos el avión a Vancouver, Canadá. Donde me verán atrapar a Casanova infraganti -exclamó entregándonos la pista para luego solo pasarnos de lejos dispuesto a irse.
Hiro: Un momento ¿Y qué le hace estar tan seguro que es Vancouver? -pregunte, haciendo al tipo sonreír de una forma burlona.
Grevil: Elemental mi querido capitán encanto. La hora es la pista principal. Ahora me adelantare -exclamó para luego irse sin más.
No hace falta decir que esto me dejó sorprendido ya no era arrogancia, sino que la seguridad del detective era abrumadora, vaya que la policía de Scotland Yard era otra cosa, y pensar que Sherlock Holmes los suele humillar en las novelas. De cualquier modo, tanto yo como todos sabíamos que Casanova no era un ladrón común; sus planes eran siempre ingeniosos, y esta vez no era la excepción. La pista del reloj parecía indicar que las próximas acciones del ladrón estarían sincronizadas con algún evento en Vancouver, o quizás con una hora específica.
Pero nunca era tan simple, y cuando lo era parecía que no pero si, aunque a veces era más complejo y otras veces... ¿Qué es esto? ¿La maldita caja del gato de Schrödinger?
Honey Lemon: Tiene razón. Según el reloj son las 3 de la mañana pero en estos momentos son las 6 de la tarde. Ahora mismo es en Canadá que son las 3 de la mañana -dijo revisando el reloj mundial y las zonas horarias.
Wasabi: Entonces para Canadá será, en parte tiene sentido, en Vancouver es donde está uno de los relojes de vapor más famosos del mundo, el del barrio Gastown -dijo en lo que dicho reloj se proyectaba en nuestras pantallas.
Go Go: No estoy muy convencida -dijo tomando el reloj para verlo de cerca- las pistas de Casanova por lo general no son tan simples.
Fred: ¿No será que estás celosa de que un detective de la policía descifrara la pista tan rápido? -pregunto ganándose un codazo como respuesta que le saco el aire.
Go Go: Solo digo que un detective debería de revisar todas las pistas -exclamó abriendo la puerta del reloj- Es decir, miren ¿Por qué Casanova pondría un Águila en vez de un cucú en un reloj cucú? -pregunto extrañada.
Para que luego en ese preciso momento el ave mecánica pareciera activarse, y acto seguido transmitió un mensaje con la voz de Casanova para mi molestia "Mi siguiente robo tal vez sea una aquila en el parque"... ¿Ah?
Go Go: Les apuesto a que el tal Grevil no escuchó esta pista -declaró sonriendo algo confiada. Que no se note que subestima a la policía luego de nuestra experiencias con los uniformados de azul. Y la verdad no la culpo.
Hiro: Un aquila en el parque...
Wasabi: Por mi parte creo que lo descifre -dijo de repente tras meditarlo- el águila es un antiguo símbolo importante para los romanos. Y dijo la palabra aquila, significa águila en latín -dijo pensativo para que en ese momento recibiéramos una llamada compartida entre todos de parte de Megan.
Bueno, qué les parece, si se tomó su trabajo en serio, hasta se las arregló para entrar a Basemax y trabajar desde allí.
Megan: Les tengo noticias, chicos. Al parecer el robo de las joyas de la corona no fue el primero que hizo Casanova. Hace dos días se robó toda la arena negra de la playa Caimu en Hawai -dijo mostrando las fotos de la noticia.
Lo cual admito que me dio una mezcla de tristeza y ternura ya que allí se encontraban tanto Lilo como Stitch de colados entre el reportaje de fondo junto con algunos otros experimentos, con letreros que decían "Devuelvan la arena negra".
Hiro: ¿Se robó toda la playa? -pregunte honestamente sorprendido.
Megan: Y no solo eso. Sino que su secuaz, Sirque, fue vista en el parque Stanley ¿en donde creen? Vancouver, Canadá -reveló a la vez que todos no pudimos evitar reconocerlo, el detective había tenido razón.
Hiro: ¿El Parque Stanley?... Megan. Busca una relación entre ese parque con águilas.
Megan: Pues... Según Internet hay tótems esculpidos por nativos americanos en la entrada del parque con águilas talladas en ellos -comentó haciendo que a todos se nos prendiera el foco.
Honey: Dejemos esto en que ambos tenían razón -exclamó sonriendo a Go Go que solo bufo- Sir Grevil acertó con que el robo sería en Canadá y tú acertaste con que se trataba de águilas el robo. De tótems de águilas.
Dos collares, arena negra y ahora tótems de águila... no se porque todo esto me suena de algo, lo tengo en la punta de la lengua, pero no se que es, al menos no por ahora.
Wasabi: Y ahora Grevil se nos adelantó -dijo en lo que nos miramos para luego todos estar de acuerdo, había que volver al Jet ya.
Fred: País amante del hockey y la miel, allá vamos -dijo liderando el camino. A lo que todos solo pedimos internamente que no se perdiera de camino... de nuevo.
Ahora era una carrera contra el reloj, como era casi todo cuando Casanova era el tema. Solo espero esta vez llegar a la hora correcta.
—
(Tiempo después)
(Parque Stanley, Vancouver, Canada)
Al menos por ahora podía agradecer que a diferencia del desierto de Gobi, el parque canadiense tenía un clima aunque fuera un poco más cálido, lo bastante como para no necesitar la calefacción térmica de los trajes (si no queríamos sudar como cerdos, eso era un hecho). De lejos podía decir que la ciudad era hermosa, si no estuviéramos trabajando hasta me gustaría dar una vuelta para conocerla, pero tristemente no había tiempo para eso.
Últimamente siento que no tengo tiempo para nada.
En todo caso, llegar al parque no fue tan difícil, estaba a las afueras de la ciudad. No siendo hasta que llegamos que notamos algo de lo más inusual, a nadie más que guardias de la policía montada supervisando mientras los tótems eran talados y subidos en un camión junto a otros que cargaban troncos normales ¿Qué se supone que está sucediendo aquí?
Fred: Miren, es la policía canadiense, el inspector Grevil debió ponerlos al tanto y están poniendo los tótems en un lugar seguro -dijo alegre por la aparente eficiencia.
Aunque no podía evitar sentir que algo andaba mal, de allí que tras un mensaje rápido Megan me dio la respuesta que quería. Esos no eran policías, se trataban de matones que Casanova contrato. La guardia montada solo usa los chalecos rojos en desfiles y ceremonias.
Pero antes de que le dijera a los demás para ponernos en marcha fue que pasó algo que nos hizo sentirnos divididos sobre qué debíamos hacer. A lo lejos parecía que un grupo de chicos había tenido un altercado con alguno de los secuaces de Casanova, posiblemente se dieron cuenta de que algo andaba mal y terminaron metiéndose en el conflicto. Acabando con los tres siendo mandados a la laguna perdida debido a unos troncos que se habían soltado.
Fue una decisión de una fracción de segundos. ¿Atrapar a los criminales o salvar a los civiles?... A veces hacer lo correcto puede ser un fastidio. De allí que sin pensar, solo escuchamos los camiones alejarse mientras íbamos al lago a sacar a esa gente del agua. En verdad hacer lo correcto era muy difícil.
No obstante, cuando buscamos y encontramos al trío que se cayó al agua nos llevamos una sorpresa bastante grande al notar que al parecer solo uno de ellos era humano, una chica como de mi edad. Los otros dos... bastaba con decir que uno era un chico de piel verde y una gran nariz, y el otro era un robot... ¿un asunto de aliens? Lo que me faltaba.
En especial porque al final parecían no necesitar ayuda, el robot los había sacado del agua como si nada. Para acto seguido los tres se quedaron sorprendidos al notar nuestra presencia.
Chispa: Bueno, hasta allí llegó lo de ser lo más discretos posibles -dijo el de verde en lo que se ponía en modo ofensivo junto a la chica. Para que acto seguido ella nos reconociera para nuestra suerte.
Betty: Un momento, yo los conozco, ellos son los grandes héroes. Descuiden, chicos, son de confianza -dijo haciendo que ambos bajarán la guardia- escuchen, de momento no tenemos mucho tiempo para explicar, así que solo diré que este es un asunto de los guardianes galácticos, dudo que nos crean pero...
Hiro: Los guardianes galácticos, la unidad militar y judicial directa de la federación galáctica unida, si, sabemos todo -dije en lo que los demás me vieron con sorpresa- oh bueno, yo lo sé todo al parecer. Se los explico después.
Eso me lo contó Rosa cuando me informó de la existencia de los aliens y demás. Esas fueron muchas horas sobre lecciones de burocracia, gobiernos y leyes intergalácticas para mi gusto. Pero no me quedaba de otra, ella quería darme esa información gratis solo para hablar conmigo, y yo ahora estoy sacando provecho a cada palabra.
Además, mentiría si dijera que no fue agradable. Cada vez que convivimos, admito que Rosita me cae cada vez mejor, ignorando su aparente hábito de controlar todo, era hasta simpática y dulce a su modo.
Betty: ¿De verdad lo sabes? Bueno, pues en tal caso... mucho gusto, soy Betty Atómica y ellos son el resto de mi unidad. Chispa y el robot X-5 -se presentó tanto ella como a los otros dos que asintieron en señal de reconocimiento- consideran sus trabajos recientes... ¿Tras el ladrón Casanova otra vez? -pregunto a la vez que yo asentí.
Chispa: ¿Casanova?
Betty: Un criminal conocido en la tierra por sus robos excéntricos, se ha buscado pleito con casi todo el mundo o está en camino de hacerlo, recientemente evitó la invasión de los ogros del rayo a la tierra -aclaro para sorpresa de sus amigos.
X-5: Suena a un novato queriendo hacerse un nombre... por cierto ¿puedes dejar de tocarme? Tal vez sea un robot pero igual siento acoso.
Fred: ¿De verdad? ¡Pero te vez genial! ¿Qué puedes hacer? ¿tienes rayos láser, armas, algunas cosas geniales de robot? -pregunto solo para ser jalado de la cola de su disfraz por Go Go.
En lo que yo solo me quedé pensando que al parecer, nuevamente tocará colaborar con desconocidos debido a un interés en común. Siendo lo que me confirmó ese hecho el cómo tanto Betty y yo compartimos una mirada para luego solo asentir, parece que habíamos tenido la misma idea.
Betty: De momento no puedo decirles mucho de nuestra misión, solo diré que estamos detrás de un peligroso criminal que aparentemente por alguna razón está trabajando con Casanova -mencionó cruzada de brazos- ¿hasta ahora que se ha robado?
Honey Lemon: Pues se robó arena negra de la playa Caimu en Hawai, dos collares de las joyas de la corona, y al parecer, algunos tótems de este parque.
Betty: Se ve que ha estado ocupado -dijo entregándome lo que parecía ser un tiquete para algún transporte público- Esto se lo logramos quitar a uno de los secuaces. No tenemos ni idea de que dice, X-5 está en plena actualización de idiomas terrestres para descifrar de qué se trata. Solo nos queda esperar y...
Fred: Tampoco es tan difícil -dijo mirando de reojo el boleto- eso es del alfabeto sirio de Rusia y Bulgaria -declaró para sorpresa de todos- ... ¿Qué? Cuando se trata de videojuegos o cómics nuevos o de edición limitada, llegas a aprender cualquier idioma.
¿Qué les parece? Hasta Fred podía sorprenderte con algo nuevo cuando menos te lo esperas... en serio, eso sí me sorprendió.
Honey: Entonces ¿Qué es lo que dice, Fredy?
Fred: Con gusto. Eso dice "Boleto del transiberiano, 4:00 P.M."
Hiro: ¿El tren transiberiano? ¿Su siguiente objetivo se encontrará en la ruta del tren? -me cuestione en lo que la joven pelirroja lo medito.
Betty: Oh quizás algo a bordo del propio tren -dijo llamando mi atención. ¿Algo a bordo?
De momento solo diré que en esta ocasión Casanova se superó a sí mismo ¿en qué rayos está metido que involucra la policía intergaláctica? ¿Y que tiene que ver todo lo robado hasta ahora con eso? ... Algún día ese ladrón me volverá loco solo tratando de descubrir que hay en esa mente retorcida.
___________________________________________________________________
(General Pov)
(Oficina del CEO, Rivera Solutions, San Fransokyo)
Muy bien, hasta ahora el plan había salido como tío y sobrina habían querido. Todo el asunto del robo estrafalario de esta vez era más allá que simplemente distraer a los grandes héroes y al mundo de cualquier cosa que estuvieran haciendo por debajo de la alfombra (especialmente la búsqueda de los talismanes).
Pero en esta ocasión era algo diferente, se trataba de un plan a gran escala para poder contactar con la gran concejal de la federación galáctica unida ¿el cómo? Bien se podría decir que estaban rompiendo muchos huevos para hacer una sola tortilla. De momento lo que tenían que hacer era seguir la rutina.
???: Buenas tardes, agradezco que aceptarán esta reunión.
Héctor: No puedo decir lo mismo, solo acepte porque mi sobrina dijo que debíamos escuchar que querías decir... ¿Y este quien es? -pregunto a mi sobrina que se puso a revisar su tablet.
Rosa: Este joven es el honorable Shutaro Mendo. Miembro de la familia más rica de Japón, un clan samurai. Es el heredero del Conglomerado Mendo de 4 trillones de dólares. Su familia es propietaria de gran parte de Japón, así como trozos de muchos otros países. Son un gobierno militarista por su cuenta. Ellos tienen su propia policía secreta y un ejército privado muy avanzado que podría muy bien aniquilar al ejército japonés en caso necesario -explicó en lo que su tío solo asintió.
Ya entendiendo en parte el porqué debían al menos escucharlo, aunque realmente no era que importara mucho en realidad lo que el joven de cuchara de plata tuviera que decir. A fin de cuentas, para el Rivera mayor solo con ver al chico le bastó para verlo con fastidio al notar la arrogancia y desprecio en sus ojos.
Héctor: ¿Y está aquí porque...?
Mendo: Iré directo al grano -declaró cruzado de brazos- quiero comprarles su luna artificial.
Héctor: ... ¿Comprarla? -pregunto nada impresionado- a ver niño rico, aquí una palabra que nunca habías escuchado, no.
Mendo: ¿Perdón?
Héctor: Que no ¿Es muy difícil de entender? Son solo dos letras -dijo con burla para enojo del joven.
Mendo: Me parece que no entiende en lo que se está metiendo. Usted... -dijo elevando la voz, solo para ser interrumpido por la joven asistente del CEO.
Rosa: Por favor, te recomiendo no amenazar. A fin de cuentas, si quieres comprar nuestra luna es por algo... Y ya veo que es -menciono con un tono divertido- tal parece que en el último cobro le sacamos bastantes millones al conglomerado Mendo. Ya que como insisten en tener pedazos de países para ellos, deben pagar el impuesto de cada pedazo por su cuenta, y como son trillonarios... -dijo dejando la idea en el aire.
En pocas palabras, debían pagar mucho más que otros justamente por esa gran fortuna. El rico paga como rico, y el pobre paga como pobre. Algo cruel pero más que justo.
Héctor: Entonces, para resumir, quieren ser los dueños de nuestra luna para ya no tener que pagar, o en todo caso ser ustedes quienes cobren -mencionó en lo que su sobrina asintió.
Rosa: Él no lo dirá... Pero tiene miedo de que en solo unos cobros la gran fortuna del conglomerado Mendo se esfume -comento- ya que nunca habían perdido tanto de golpe. Están acostumbrados a gastar cantidades obscenas en tonterías, pero nada como nuestro impuesto,
Mendo: ¡Es que no es justo! -exclamó golpeando el escritorio con enojo- ¡esa forma de manejar el impuesto es un asalto a mano armada a la clase alta!
Héctor: Ay, pero si es justo que ustedes básicamente paguen el cambio de su bolsillo, mientras personas menos afortunadas paguen casi todo su patrimonio, ¿No? -preguntó con un pesar claramente fingido para molestia del heredero.
Mendo: No es nuestra culpa que los demás sean pobres -se excuso a la vez que el mayor solo suspiro con pesar.
Héctor: Es lo que me choca de ricos así, que el trato preferencial que reciben es casi su derecho según ellos. Cuando te lo diré de este modo. Solo tu presencia me ha insultado -declaró molesto- ya que para empezar ¿Por que vino el heredero y no el dueño del conglomerado? ¿Es que valgo tan poco para que papi se digne a mostrar su cara? Porque claro, el hecho de que soy un nuevo rico, me hace indigno de su tiempo, ¿No?
El ambiente en la sala se volvió cargado de tensión, especialmente entre Héctor y Mendo, cuyos rostros revelaban su incomodidad. Rosa, por su parte, observaba con una expresión que combinaba diversión y resignación. El heredero del conglomerado Mendo frunció el ceño y lanzó un gesto de desdén, claramente irritado por la actitud del CEO de Rivera Solutions.
Mendo: No es eso, oh bueno, tal vez... ¡No! Es que... No soy yo quien decide esas cosas, señor Rivera. Mi familia envía a representantes para negociar, y si usted no desea hacer negocios, pues... no tengo nada más que decir -dijo a la vez que la joven de lentes solo rio por lo bajo.
Rosa: Mejor te ahorro la justificación -exclamó acomodando sus gafas- mientras hablabas investigue a tu familia. Tus padres están locos en el sentido excéntrico. Tu madre insiste en creerse una emperatriz del Japón Feudal rehusándose a usar comodidades modernas. Y tu padre solo el año pasado gastó billones en volver su mansión una maldita casa de la risa. Eso último para complacer a tu hermana menor que como lo digo... Es una mocosa malcriada que cree que puede hacer todo lo que quiera porque tiene dinero -dijo molestando al chico.
Su hermana melliza, Ryoko Mendo, encantadora, recatada, de buenos modales... y no dudará en lanzar una granada a los pies de cualquiera cuando le encuentre de espaldas. Una mujer peligrosa, con una personalidad que a menudo se limita a la pura maldad.
Rosa: No me sorprendería que Ryoko, de conocer a mi primo, le entraría el capricho de que sea su novio, y la idea de que él debe aceptar, porque es miembro de la banda del momento -comentó a la vez que el hermano de la mencionada restó importancia a esa acusación.
Mendo: Pfff, no la conoces, ella es demasiado refinada para esos gustos de plebeyos.
Rosa: Si, esa es la máscara que usa contigo, la de una niña ingenua, dulce e inocente. Demostrando que eres un baboso en ese aspecto. Pero, en realidad ella es una pequeña bruja sádica -hablo con sinceridad para indignación del chico- su verdadera personalidad es la de una perra. Como es rica, para entretenerse hace lo imposible para que la vida a su alrededor sea como una obra de teatro... Y lo que más le gusta es ver como se retuercen los demás, ama el dolor ajeno.
Mendo: ¡Ella solo bromea! ¡Le gustan las bromas! -declaro obviamente ofendido sin que eso le importara en lo más mínimo a Rosa.
Rosa: Si, sus bromas mal disimuladas y diabólicas que incluyen: muñecas vudú, granadas, bombas, ametralladoras, trampas cazabobos, máscaras de la muerte y eso es sólo una fracción de sus trucos -explico con desagrado- lejos de preocuparte pagar nuestro impuesto bianual, deberías ver cuánto pagan tus padres para que tu hermana no vaya presa sólo por la mitad de esas cosas.
Héctor: Pero allí está el asunto. Temes que el impuesto los dejara pobres. Y por ejemplo, tu madre no pueda seguir jugando que está en el pasado, tu padre no podrá seguir cumpliendo caprichos a tu hermana, y tu hermana tendrá que afrontar las consecuencias de las cosas que hace -menciono casual- y eso es lo que tu no quieres, que tu familia enfrente la realidad de que las acciones tengan consecuencias.
Mendo: ... ¿Cuánto quieren? ¿Cien billones? ¿Quinientos? ¡Les daré hasta 3 de nuestros cuatro trillones! ¡No puedo deshonrar el escudo de la familia Mendo! -gritó casi con desespero solo haciendo a ambos Rivera suspirar con decepción.
Tío y sobrina se miraron entre sí, con una mezcla de incredulidad y disgusto ante la desesperación del heredero Mendo ¿Cien billones? ¿En serio creía que eso era suficiente para comprar su luna si siquiera tuviera precio comercial? En parte se entendía que así hacían las cosas esa clase de gente, pero igual hasta molestaba que no entendieran el significado de no.
Héctor: Lo que quiero es que salgas de mi oficina, y entiendas que si realmente quieren salvar su patrimonio, tienen que empezar a dejar de ver el dinero como algo que no se acabará nunca -declaró con seriedad- porque si siguen con ese estilo de vida. Va a pasar. Y si intentan alguna cosa como atacarnos, ya sea con su policía privada o su ejército incluso... Créeme que esa fortuna la perderán en puras indemnizaciones a los caídos.
Mendo:... ¿Me está amenazando?
Héctor: No, no. Amenazar sería si te viera como un peligro para mi, lo que no es el caso, estoy prometiendo -dijo de una forma severa- y si, debe ser molesto para ti que un escoria como yo te ponga en tu lugar.
Rosa: Ya que en efecto, también sabemos que eres un mujeriego de lo peor. Vez a las mujeres como lo más hermoso, pero en contraste, vez a los hombres como simple grava qué pisar -exclamó a la vez que el muchacho en vez de ofendido, le miró con extrañeza.
Mendo: Lo dice como si fuera algo malo, señorita -dijo con una arrogancia y orgullo que eran dignos de desear solo golpearlo con haber escuchado esas palabras salir de su boca.
Públicamente, Mendo era una persona muy educada, elegante, talentosa, atlética, guapa, caballerosa, disciplinada, inteligente y adinerada. En pocas palabras, era todo lo que suele volver locas a las chicas... especialmente por el dinero. Prácticamente todas las mujeres que no lo conocían bien lo encontraban irresistible, y Shutaro Mendo no hacía nada por evitarlo. Era un mujeriego sumamente activo; coqueteaba con cualquier mujer que cruzara su camino. Esto, para Rosa, le resultaba completamente repulsivo.
Rosa:... Y según se. Estás interesado en la chica nueva de tu ciudad, la invasora, Lum -dijo logrando sorprender al joven.
Mendo: Veo que están informados -dijo para luego sonreír con arrogancia- si, esa chica será mi esposa. Es tan única y hermosa... -respondió antes de imaginar de antemano una vida con esa chica a partir de eso sin siquiera haberla conocido aun.
Héctor:... Y se supone que él es el más normal de su familia, según veo eso no significa mucho realmente -susurro a su sobrina, aunque igual fue escuchado por el chico que se ofendió.
Mendo: ¿Eso qué se supone que significa?
Rosa: Nada más allá de que solo eres un superficial que juega a ser el educado y refinado, el chico guapo perfecto y adinerado que en realidad es solo un patán superficial -dijo con desprecio- no me cuesta imaginar que has usado tu dinero y posición para conseguir que chicas en una relación terminen con sus parejas por ti, mientras que para ti ellas sólo son... como diría mi tío, tu ganado.
Héctor: Veras -dijo aclarándose la garganta- aunque no lo parezca, nosotros de hecho somos justos. Hay casos donde pedimos menos de lo que se debe o incluso no cobramos. Pero el tipo de persona tiene mucho que ver.
Mendo: ¿Y eso qué significa? -pregunto ya fastidiado de ser criticado y juzgado por ese par. Se suponía que debían solo hacer lo que él quería y punto. Así era siempre ¿porque era diferente esta vez? ¡Se suponía que sabían quién era!
Rosa: En resumidas cuentas. No nos gusta juntarnos con la elite que se cree la última gota de agua en el desierto -respondió casual.
Héctor: Porque si algo nos molesta, es que tengan tanto dinero, y en vez de hacer algo de provecho con él, lo usan para estupideces excéntricas, sólo para presumir que pueden pagarlas.
Rosa: Y antes de que me lo preguntes, te lo pongo así, antes me rapo que salir con alguien como tú -exclamó oliendo esas intenciones de parte del joven heredero apenas él la vio- hasta siento pena por todas las chicas que comprendieron tarde que botaron a hombres para los que ellas eran únicas, por un niño de papá para el que ellas sólo son un número más.
Cada palabra parecía elevar la temperatura de la oficina. Mendo frunció el ceño, claramente ofendido por las duras palabras de los Rivera, mientras sus puños se cerraban con fuerza sobre sus piernas. La sonrisa arrogante que había mostrado momentos antes se desvaneció, reemplazada por una expresión de furia contenida. De allí que sin querer escuchar más, se puso de pie dispuesto a irse.
Héctor: Por cierto, creo que mereces saber esto. No tenemos interés en tener relación alguna con el conglomerado Mendo. Pero, por otro lado, estamos buscando al heredero del imperio de artículos deportivos Mizunokoji para ofrecerle ser socios -dijo logrando que el chico parara en seco justo cuando iba a tomar el pomo de la puerta.
Mendo:... Ellos son nuestra familia rival... ¿Y los están eligiendo por encima de nosotros? -preguntó evidentemente indignado.
Consideraba a Tobimaro su amigo, claro. Pero igual saber esto era degradante y humillante en varios niveles justo ahora.
Héctor: Pues si, para empezar a diferencia de ti, el joven Tobimaro más humilde no puede vivir, viviendo en las montañas sin ningún tipo de lujo.
Rosa: Y de hecho, es gracias a ti que sabemos que esta alianza comercial será posible. Solo hay que decirle a la familia Mizunokoji que rechazamos aliarnos con ustedes y con gusto firmarán lo que sea que les pongamos en frente para sentirse superiores a los Mendo. Y en el caso específico de Tobimaro, solo hay que prometerle que tu hermana no se le acercara para tenerlo feliz y contento -dijo sonriendo divertida.
Eso lo sabían tras hacer una investigación breve al respecto. Tobimaro le desagradan las mujeres, lo cual parecía deberse a su violento pasado con Ryōko desde la infancia, la cual estaba enamorado del heredero de la familia rival de la suya, y lo expresaba de formas... muy bizarras y dolorosas.
Héctor: Y yo encantado de hacer negocios con gente que sí quiere hacer algo de provecho con el dinero que tienen -dijo terminando la conversación, teniendo la reacción esperada del joven, enojo puro.
Pero antes de que pudiera dar un paso para encarar a ambas personas de piel morena, la puerta detrás suyo se abrió de golpe dándole en la cara, mandando al chico al mundo de los sueños para sorpresa de ambos Rivera. ¿Y quien había hecho eso? Pues otra persona que aunque no tenía una fortuna como los Mendo, era conocido por ser todo un multimillonario en toda regla.
Siendo el cómo consiguió todo lo que tiene a palabras suyas el decir "todo comenzó con solo un balón naranja". El mago Wizard Kelly. Un famoso jugador de baloncesto, empresario, filántropo y actual alcalde de Emilyville (anteriormente conocida como Smithville y Wizville), California.
Hector: Ah sí... me había olvidado que también tenías cita ¿Qué quieres, Wizard? -preguntó con nada de ánimos de lidiar con el millonario que le vio con el ceño fruncido.
Wizard: Te diré que quiero, Héctor Rivera -dijo abriéndose paso hasta estar frente al otro hombre, ignorando por completo al chico que había dejado noqueado- exijo saber cómo te atreviste a no darme una invitación para tu última fiesta de gala, pero en cambio invitaste a toda la familia Proud, unos don nadies en todo el sentido de la palabra ¡No tiene ni siquiera un millon de dolares! -exclamó indignado.
Héctor:... Ay me lleva, esto se siente como discutir de nuevo con el señor Calorie -dijo antes de solo suspirar- Wizard, te diré una cosa de algo que escuche decir de ti hace años, respeto que "odies a la gente pobre", ¿Pero sabes que odio yo? ¿Qué aborrezco? Punto A, a los ricos que olvidan que el dinero que tanto presumen no lo hicieron ellos, y Punto B, a los ricos que olvidan que no siempre fueron ricos, como cierto tipo cuyo lema es... ¿Cómo era...? "Todo empezó con un balón naranja" -mencionó el mexicano para enojo del contrario.
Wizard: No te atrevas a usar mis palabras en mi contra, Héctor. Olvidas que...
Héctor: ¿Qué? ¿Qué tienes más dinero que yo? Noticia de última hora. Ya no es como hace una década, amigo -dijo sonriendo con arrogancia- ¿o crees que me olvide cuando apenas empezaba mi carrera? solo porque necesitaba el domo para una presentación el mismo día que ibas a sacar unos tenis deportivos me hiciste echar a la calle "por ser pobre" -mencionó refrescando la memoria del otro magnate.
Wizard Kelly frunció el ceño, claramente molesto por la referencia y la forma en que Héctor lo había mencionado, obviamente la estrategia de amenazar no iba a servir con él. Sus ojos brillaron con una chispa de furia contenida, pero rápidamente intentó mantener la compostura. La oficina quedó en un silencio tenso, solo roto por la respiración contenida de los presentes.
Wizard: Sabes muy bien que esas circunstancias son del pasado, Héctor. Yo he cambiado, y tú deberías hacerlo también -dijo solo para ganarse un bufido como respuesta.
Héctor: Eso ni tú te lo crees ¿Sabes cuál es tu error, Wizard? ¿Fuera de que olvidaste tan fácil que no siempre fuiste rico? No ves más allá de la burbuja, está tan bañada en oro que opaca tu visión -menciono para enojo del basquetbolista que estaba a nada de sujetarlo del cuello del traje- significa que tienes esa mentalidad de que sólo los que tienen padres ricos que les den empujoncitos pueden triunfar, ignorando el talento crudo en el que podrías invertir y hacerlo alcanzar su máximo potencial, lo que te haría ganar más que andar pagando para que la gente pague por oír "rapeando" a tu hijo, que seguro ni siquiera sabe tus orígenes humildes.
Cosa que como era de esperarse, hizo enojar al ex basquetbolista. Nadie se metía con Wizard Kelly Jr. (o como a él le gustaba llamarse, Lil Wiz o Wizzy en todo caso).
Héctor: Es más, tal vez una lección de humildad te vuelva a la realidad... Rosita -dijo llamando la atención de su sobrina que estaba verificando el pulso del noqueado joven heredero Mendo- ¿Cuánto tardaríamos en comprar todas las acciones de la empresa de nuestro buen amigo Wizard?
Rosa: Difícil, más no imposible, tío -dijo dando un chequeo rápido a la página de la bolsa en su celular.
Wizard: No te atreverías -exclamó con tono amenazante- te destruiré si intentas quitarme mi fortuna, Héctor. Yo soy un ganador, tu no -declaró solo para recibir una carcajada como respuesta.
Héctor: Eso es lo que más me da risa de ti, Wizard, vives tan aferrado a un sólo triunfo que tuviste de adolescente, que seguro ya olvidaste lo que es arremangarse las mangas y ponerse a trabajar -dijo divertido- como dije, si no vivieras encerrado en esa burbuja de oro, te darías cuenta que tu hijo debe buscar otro enfoque que no sea su "rap", o que tienes potencial a la mano que no quieres reconocer por no querer "meter las manos al lodo".
Era oficial, si antes a Wizard le parecía ridículo el personaje de Héctor Rivera, ahora le parecía aún más molesto que Oscar Proud, y eso era decir mucho dado su rencor a ese hombre en particular.
Wizard: En todo caso. Adelante, haz lo que quieras. Pasarán meses antes de que te vuelvas una amenaza para mi. No hay modo de que...
Rosa: Y está hecho -dijo interrumpiendo al hombre de negocios- tuve que cobrar un par de favores y deber otros 10. Pero oficialmente Rivera Solutions es dueña de industrias Wizard, lo que incluye la ciudad de la gran mayoría de la ciudad de Emilyville, tío -dijo como si nada dejando boquiabierto al amante del basketball.
Héctor: Nada muy grave, imagino -cuestiono ignorando el estado del hombre en frente suyo.
Rosa: Nada más allá de que a los que les debemos favores pidieron lo mismo. Regalías cada vez que Rivera Solutions saque a la luz un nuevo producto de cualquier área -comento en lo que su tutor sonrió.
Héctor: Perfecto... Entonces. Ahora supongo que soy tu jefe ¿no Wizard? -pregunto divertido.
Solo para obtener como respuesta el ver como el así llamado mago del baloncesto procedió a revisar su teléfono, e incluso verificar el estado de las acciones de su empresa tomando sin preguntar la computadora que se hallaba en el escritorio. Para luego proceder a hacer un berrinche digno de un niño de cinco años.
Lo cual era exagerado ya que no era que lo habían dejado en la quiebra, sencillamente Rivera Solutions se había vuelto el dueño del 60% de las acciones de industrias Wizard, tampoco era para actuar de una forma tan infantil.
Héctor: Wizard, Wizard, tranquilo, míralo así, sigues siendo el CEO, y aún tienes derecho a las utilidades -dijo buscando calmar al adulto- solo que ahora me respondes a mi. Y tengo algunas reglas qué ni te afectarán. Número 1: Una disculpa a la familia Proud. Y sabes que no es mucho, sólo disculparte por las veces que te has valido de tu posición para pasarles por encima, y sí, eso incluye restregarle a Oscar lo del tiro en aquel juego -dijo para consternación e indignación del otro hombre.
Ese fue el juego que definió su vida entera. Aprovechando su fama tras anotar la canasta ganadora, que Oscar Proud falló en ese crucial partido de baloncesto de instituto hace años, Wizard Kelly aprovechó su fama local para crear un conglomerado empresarial multimillonario, hasta el punto de tener múltiples negocios, locales e incluso edificios construidos en su nombre. Tenía derecho a molestar a esa familia cuanto quisiera, él era consciente de que de haber sido diferentes las cosas, ellos serían los ricos y no él, tendrían la que era SU fortuna.
Wizard: ¡Eso nunca!
Héctor:... ¿Ah sí? ¿Quieres que incluya qué de tu propio dinero les des regalías y remuneraciones de cada trastada qué les has hecho? Comparado con eso, disculparte no suena tan malo -mencionó casual- porque te recuerdo, básicamente estafaste a Penny Proud, quien trabaja para mi, cuando lanzaste su carrera de solista y luego le saliste que de todo el dinero que hizo sólo le tocaron diez dólares.
No tenían que decírselo, Wizard sabía que conforme más hablará, más odiaría a Héctor Rivera. Era un gran y profundo odio el que se estaba formando.
Héctor: Solo por mencionar algunas cosas. Número 2: se acabó lo de clasificar a los empleados de la empresa según sus activos y no según sus habilidades -continuo- igualmente el talento crudo que ignoras por el dinero en el banco, tienes limpiando baños a los que te harían ganar dinero del bueno, así puro benjamin, y tienes tomando decisiones a payasos que se la pasan más jugando en la oficina, haciéndote perder dinero. Usando los mismos Benjamins, tus Benjamins, para encender sus puros ¿algo que olvide, querida sobrina?
Rosa: Si, una cosa querido tío. Y número 3:... Quítele los privilegios a su hijo y que pase una temporada trabajando como una persona común y corriente -pidió para gran impacto del hombre mayor.
Héctor: Tienes razón, sobrina. Es hora de que Lil Wiz aprenda cómo se ganó papá sus millones.
Wizard: ¡No puedes decirme cómo criar a mi hijo! -estalló de la indignación- ¡él es un ganador como su papá, merece todo lo que tiene!
Héctor:... Solo respondeme algo ¿Al menos sabe cómo sujetar un balón de baloncesto? ¿O al menos sabe usar una escoba? -pregunto para frustración del contrario que no tenía cómo responder- eso pensé, caso cerrado.
Ya estaba, esa era la gota que había derramado el vaso.
Wizard: ¿Cómo puedes reprocharme cuando tu eres igual? -pregunto molesto- ¡Tienes hijos y tú también empezaste como yo!
Héctor: Y si bien me doy el lujo de consentirlos, verás que ellos no se sienten mejores que las demás personas, no se consideran con derecho de humillar a los menos afortunados -se jactó con orgullo- todo lo contrario. Mis hijos están creciendo con humildad. Y por eso son buenos seres humanos, así como mi sobrina. Quién puede confirmarte que nunca se me ha subido tanto el poder a la cabeza. Cada vez que lo intento ella me devuelve los pies a la tierra.
Rosa: Y antes de mí eso era trabajo de la tía Imelda -dijo haciendo a su tío suspirar por ese comentario, que rápido le mataban la alegría.
Pero nada como estar a punto de escuchar a Wizard comentar sobre lo patética y repulsiva que era escuchar hablar a un rico como si fuera gente pobre. Solo eso basto para que el patriarca Rivera sintiera sus oídos ponerse rojos de la cólera. Para acto seguido, sin pena ni gloria, dejar noqueado al hombre de un uppercut bien propinado a la mandíbula. Y no se arrepentía de nada, luego pagaba la factura médica.
Héctor: A veces para regresar a alguien a la realidad tienes que ser más directo -fue todo lo que dijo masajeándose la mano, vaya que sentía que estaba oxidado. Que no se notara que también estaba medio borracho, solo así pudo soportar tanta pendejada de ricos mimados.
Rosa: En eso te doy la razón, tío -dijo antes de revisar su agenda- dado lo pronto que terminó esta reunión. Tenemos tiempo antes de la próxima con el señor Invasor de los ogros del rayo, la princesa Benten de la raza Shichifukujin, no confundir con los 7 dioses de la fortuna, y la princesa Oyuki del planeta Neptuno.
Héctor: Vaya que esto de tener reuniones todo el día es agotador, pero es el deber del jefe -exclamó con pesar y resignación mientras ordenaba a algunos robots que se llevarán a la enfermería del edificio a ambos adinerados inconscientes.
Ellos también debían hacer su parte para mantener las fachadas. Además, poner en su lugar a los ricos era algo que empezaba a causar una satisfacción personal en la familia Rivera en general.
No obstante, el momento se vio interrumpido por una llamada de Hollow que solicitaba la presencia de ambos en el laboratorio. Cosa que hizo a ambos sonreír, parecía que todo estaba listo, el nuevo "juguete" de la empresa había sido terminado. Y con suerte, el que esperaban que fuera el nuevo compañero del ladrón Casanova.
Notes:
Y ese fue el capitulo de esta vez. Como siempre pueden votar, comentar, lo que gusten.
¿Y que les pareció?
De una vez quiero dejar en claro que como saben la vida sigue, y en este caso, la historia no es solo el ship y la relación y ya. El mundo gira y todos giran con él, al menos eso quiero mostrar con estos capítulos.
Por otro lado ¿ya adivinaron el objetivo final del robo?
En fin, espero que les gustara, nos vemos pronto.
Chapter 34: Capitulo 30: Rareza en grande (2/2)
Notes:
(See the end of the chapter for notes.)
Chapter Text
(General Pov)
(Nivel 4 de profundidad, laboratorio de Rivera Robotics y vivienda de Hollow, Edificio principal de Rivera Solutions)
Recapitulando, debajo del edificio principal de la sede de la familia Rivera existen varios niveles subterráneos. El primero, que parece un sótano convencional, es el nivel superficial que cualquiera podría imaginar como un lugar aburrido donde se guardan cajas, papeles viejos y otras cosas de oficina. El segundo nivel funciona como una prisión secreta, destinada a albergar a ciertos individuos que, de alguna manera, intentaron involucrarse con la empresa o causar problemas al personal.
El tercer nivel está equipado con un sistema de seguridad avanzado: en caso de que algún prisionero del nivel dos intente escapar, el elevador automáticamente se dirige allí, donde varias unidades robóticas armadas se encargan de neutralizar y someter a la amenaza de forma rápida y eficiente.
El cuarto nivel alberga el laboratorio del jefe de personal de la rama de robótica de la empresa, que también sirve como un área de inventiva y creación. Además, en este nivel vive Hollow, quien realiza sus comidas, baños y demás actividades cotidianas allí además de trabajar. Para la mayoría, su presencia allí se explica por su obsesión con el trabajo, pero en realidad, la situación es mucho más compleja que eso.
Por ahora, eso no es lo más importante.
Rosa: Entonces... ¿Qué tenemos? -pregunto observando una habitación a través de un cristal unidireccional, más específicamente, al joven que se encontraba postrado en cama allí.
Hollow (Tadashi): Para resumir, su cuerpo está en óptimas condiciones, el sistema interno funciona correctamente y su personalidad fue recuperada con éxito así como la consciencia... Lo único que se quedó en el Underworld fueron sus recuerdos, en términos prácticos tiene amnesia -explico la condición actual de su más reciente proyecto- dos de tres, nada mal. Cuerpo y alma, la mente se recuperó parcialmente.
Héctor: Me pasa lo mismo en una noche de juerga -mencionó divertido.
Rosa: Eso significa que sus recuerdos... ¿De algún modo se quedaron en el plano físico del Underworld? ¿Pero cómo?... Bueno, no importa -dijo para luego solo abrirse paso y entrar en la habitación.
Donde una vez dentro pudo apreciar más minuciosamente el aspecto del chico que le miraba con curiosidad y algo de inquietud aunque no lo dejaba mostrar más allá de su mirada. Un chico de aspecto delgado con un cabello de aspecto suave de color marrón lino, rubio en cierto modo, ligeramente ondulado. Ojos verdes y una piel de color crema. No cabe duda de que Tadashi se tomó su tiempo con los detalles del cuerpo del joven, como un lienzo con el cual pudo pintar y hacer a su gusto, y el resultado era más que aceptable.
???: Buenos días. Disculpen la molestia pero ¿me podrían decir por favor donde estoy... Y quien soy? -preguntó con un tono amable y cordial que solo la hizo suspirar.
En efecto, estaba con la mente en blanco según lo que dejaba ver. Una lastima, pero ya no había nada que hacer.
Rosa: Vaya... Sin recuerdos y tiene mejores modales que tú -comentó a su tío que solo bufo con algo de diversión.
Héctor: Lo de la camarera de la posada fue otra cosa... pensé que era una conquista mía -mencionó antes de ver al joven- antes que nada... Dinos ¿Qué recuerdas?
Eugeo: :... Nada, no recuerdo nada, a lo mucho vagos recuerdos... De una edad temprana... -comento mientras negaba- mi nombre si lo recuerdo... Me llamo Eugeo. Yo pasaba mis días tratando de cortar un árbol... Lo hacía todos los días... Y nunca caía, traté por años... Y no caía -mencionó para sorpresa de ambos de sangre latina.
Bueno, tal parecía que a fin de cuentas si recordaba algo, cosas de su pasado, pero era mejor que nada.
Rosa:... Eso de hecho nos sirve. Ayuda a disminuir bastante la información a buscar -mencionó revisando de forma nada disimulada la copia de la data del Underworld desde su celular- ya veo... Fuiste el último leñador de la aldea de Rulid, logrando cortar con éxito el Cedro Gigas -dijo causando una sonrisa en el ojiverde.
Eugeo:... Eso... No se porque saber eso... Me pone muy feliz.
Héctor: ¿Qué pasa con ese árbol que si lo que dice es verdad, le tomó años cortarlo? -pregunto curioso a su sobrina que solo se ajustó las gafas para ver mejor la información.
Rosa: Que va, de haber hecho las cosas como los demás, habría dedicado su vida entera a cortar ese árbol sin lograrlo -explicó- era un árbol demoníaco qué absorbía todos los nutrientes y luz solar a kilómetros a la redonda, haciendo imposible cultivar nada. Al parecer ya eran varias generaciones de leñadores qué intentaron cortar el cedro y no lo lograron
Héctor: Ya veo, como la familia de tu tía intentando que tu Nana acepte hacerse el examen de la vista... y siguen sin lograrlo... -dijo riéndose de su propia broma.
Solo para ser ignorado por ambos jóvenes, uno porque no sabia de que hablaba y la otra porque el comentario no le hizo gracia.
Rosa:... No recuerdas nada ¿no es así? -pregunto al chico que negó en respuesta- trata de dormir un poco más, ya hablaremos de esto más tarde -dijo al joven que solo asintió para que luego tio y sobrina se retiraran del cuarto.
Mientras Rosa y Héctor se retiraban del cuarto, Eugeo permaneció en silencio, observando el entorno que, aunque desconocido, parecía familiar en ciertos detalles. La habitación era fría y clínica, con paredes blancas y un equipo tecnológico avanzado que parpadeaba suavemente ante lo que parecía ser cualquier reacción de su persona. La frase que recordaba, "Pasaba mis días tratando de cortar un árbol... y nunca caía", resonaba en su memoria como un eco distante... ¿Quién era realmente? ¿Por qué no podía recordar nada?
De momento no podía hacer nada, mejor hacía caso y descansaba.
—
Héctor: Entonces ¿por qué nos estamos yendo? -pregunto siguiendo a su sobrina en lo que se retiraban del laboratorio tras despedirse de Hollow y de sus pasantes.
Rosa: Por qué creo que sin quererlo encontramos un premio bastante gordo -comentó mientras continuaba leyendo los datos que tenía a la mano- este chico es fuerte, mucho.
Héctor: Pues yo siento que Marco le gana, y hablamos de Marco, él que pierde contra una rasuradora -exclamó en lo que su sobrina solo rodo los ojos.
Rosa: Así sería de haber sido circunstancias normales. Pero la interferencia de Kasuto Kirigaya hizo que todo el sistema cambiará -comentó haciendo que el mayor hiciera memoria.
Héctor:... Ese no era el chico... ya sabes, el supuesto héroe de Aincrad. El que derrotó a Kayaba Akihiko y todo eso -dijo a la vez que la más joven le daba la razón.
Cualquiera podía recordar con facilidad ese incidente que en retrospectiva retraso en gran medida el avance de la realidad virtual y de los juegos multijugador que involucran los VRMMORPGs, videojuegos de realidad virtual multijugadores capaces de soportar a cientos, o incluso miles de jugadores simultáneamente en tiempo real.
Todo parece indicar que dicha tecnología era el futuro de la realidad virtual, hasta que ocurrió el incidente de Sword Art Online, justo el primer juego creado con dicha tecnología. Una fortaleza, un mundo virtual cerrado que daba total libertad de acción se había convertido en un juego de la muerte. Exactamente diez mil personas fueron atrapadas por ese VRMMORPG, creado por Akihiko Kayaba, por medio de la tecnología de inmersión total. Todos esos jugadores se encontraban en un manifiesto muy claro: si mueres en el juego, mueres en el mundo real.
Atrapados en tales circunstancias terribles, los jugadores se fueron dividiendo en grupos. Estaban los resignados a su suerte, los cuales comenzaron a vivir tranquilamente y sin riesgos, habían otros que no creían aún en las amenazas del creador del juego y que comenzaron a vivir al máximo, pero que terminaron como viles delincuentes. Sin embargo, hubieron algunos que creyeron en la salvación, aquellos que estaban decididos a luchar en la línea delantera para encontrar y matar a los jefes de los diferentes pisos.
Entre ellos se encontraba Kirito, alias Kazuto Kirigaya, un jugador solitario con amplios conocimientos del juego al ser un beta tester que estaba dispuesto a arriesgar todo para completar los 100 niveles, ya que ganar el juego era la única salida... y al final el cabrón lo consiguió ¿él como? Prácticamente un bug en el sistema.
Rosa: Si, luego de esa hazaña qué, honestamente, creo que sencillamente Kayaba se dejó ganar al final. El gobierno japonés lo contrataba para asuntos relacionados a los juegos de realidad virtual inmersiva masiva. Estaba en Underworld para ver de cerca el comportamiento de las almas en ese mundo -aclaró- él descubrió que incluso Underworld se maneja más o menos como un RPG. Matando a unos goblins y así ayudando a Eugeo a subir capacidades y así cortar el Cedro Gigas en un día.
Héctor: Bueno, supongo que en casos como este un friki de los juegos de video puede sobresaltar -mencionó impresionado- ¿entonces Kazuto volvió a Eugeo un monstruo ayudando a subir de nivel?
Rosa: Con su tutela, Eugeo se volvió uno de los doce mejores estudiantes de la academia de caballeros, e incluso rompió el sello del ojo derecho con pura de fuerza de voluntad -dijo para luego fruncir el ceño- traducción, un programador del gobierno americano se infiltró en el proyecto Alicization y puso limitaciones a los habitantes de Underworld. Como siempre los gringos metiendo mano para que no los ataquen.
Héctor: Gringos corruptos.
Aunque eso no era información nueva realmente, todo el mundo sabía que Estados Unidos era experto en meterse donde no los llaman, todo para mantener el status quo que ellos tienen de creerse los dueños del planeta.
Rosa: De allí en más solo siguió mejorando. Con decirte que en habilidades este chico, Eugeo, en resumidas cuentas podemos darle una espada, y se batirá a duelo con el mismísimo Thor sin problema. Así de buen espadachín es -menciono para sorpresa del Rivera mayor.
Héctor: Que gane es otra historia... -declaró antes de meditarlo-.gracias a su condición, podemos darle el cuerpo acorde a su talento, y las habilidades y entrenamiento Eugeo ya los tiene aunque no los recuerde, su instinto lo ayudara con eso. Mientras que el tal Kazuto será un chetado de nivel vete a saber que en la virtualidad, pero en el mundo real ya es otra historia... a ese sí le gana Marco -comento burlón antes de sonreír- ¿entonces que? ¿Nos quedamos con el blanquito?
Rosa: No veo porqué no, nos quedamos con Marco -dijo haciendo que el mayor estallara en carcajadas.
Héctor: Nos quedamos con Marco, esa estuvo buena, mija -dijo en lo que ambos entraban al elevador y este comenzó a subir hasta el piso del CEO.
Rosa: Y nos quedamos contigo.
Héctor: Y nos queda... -mencionó riendo más fuerte antes de que se cortara del golpe al comprender el comentario- no me simpatizas -respondió en lo que su sobrina solo sonrió divertida.
Pero antes de que pudieran comenzar una clásica discusión familiar (que hasta ellos sabían que casi siempre ganaba Rosa) se toparon con cierto escenario algo surrealista al ver a Leo pasar corriendo frente a ellos cubierto de espuma en dirección a donde estaba la nueva cafetera de última generación con inteligencia artificial. Siendo al seguirlo que rápidamente se dieron cuenta de cuál era el problema, la cafetera se había vuelto loca.
Cafetera: Ríndete Leo, los humanos son inútiles -exclamó sin dejar de producir espuma para el café, la cual estaba empezando llenar todo el pasillo- cubriré la tierra de espuma, inclínense ante mis espumosos poderes.
Rosa:... Nota mental, no dejar a Sheldon inventar algo solo, es bueno en robótica pero su experiencia con inteligencia artificial sigue en pañales -dijo recordando quién inventó esa máquina.
Leo: ¡Rosa! -exclamó sorprendido al ver a tía y sobrino allí- ¡Puedo explicarlo, Kyle me pidió que le hiciera un café y cuando pedí más espuma solo se volvió loca! ¡Hay que destruir esa máquina!
Rosa: No te atrevas ni a pensarlo, aunque sea fachada es verdad lo de que deben aprender que el dinero no crece en los árboles.
Cafetera: Rosa es tonta. Las mujeres son débiles.
... Pobre montón de chatarra, cavó su propia tumba.
Rosa:... ¿Qué fue lo que dijiste?
Cafetera: Tú me escuchaste, pastelito -declaró con arrogancia en lo que ambos jóvenes solo se vieron entre sí antes de tomar una escoba y trapeador respectivamente.
Rosa y Leo: ¡Oh es la guerra! -exclamaron antes de meterse en el mar de espuma.
Siendo de allí en más como todo lo que se escuchó fueron sonidos de golpes y un sistema operativo no dejando de decir la palabra error.
Cafetera: ¡Vamos, solo era una broma! ¿No saben aceptar una broma? ¡Díganle a la licuadora que la amo! -fue todo lo que dijo antes de que oficialmente lo dejarán listo para el basurero.
Héctor: ... Vaya, si así está este ¿Qué estará haciendo Marco? -pregunto en lo que decidió ver con su teléfono para revisar al otro adolescente a través de un robot de seguridad.
El cual logró conseguir un trabajo de modelaje, solo que no era un modelaje común, de todo el cuerpo, solo querían su codo para promocionar una nueva crema humectante para adultos mayores cortesía de las hermanas Test. Y al parecer estaba teniendo una crisis con eso... discutiendo consigo mismo en el espejo.
Marco espejo: ¡Oye Marco! ¿Qué haces? ¡Acepta el trabajo!
Marco: ¿Modelaje de codos? ¿Te has vuelto loco?
Marco espejo: No es solo un codo, por Dios. Es EL codo -enfatizó- sin duda había muchos donde escoger pero eligieron al mejor... ¡Y quiero ir a la piscina!
Marco: .. Si, es lindo y suavecito.
Marco espejo: Por supuesto, ahora, enséñales el codo -dijo en lo que se dio una sonrisa coqueta antes de ir al estudio fotográfico. Momento de que Héctor decidiera dejar de ver.
... ¿Por qué su hijo no podía tener amigos normales? Como sea, ya pensaría en eso después, aun tenia varias reuniones para ese día... tal vez haya que cancelar su reunión con la nueva reina del planeta Cluster Prime, la reina Vega (la cual tomó el poder tras derrocar a su madre la reina Vexus al delatarla como la responsable de que los robots de su planeta fueran desprogramados de habilidades especiales para evitar revueltas contra ella).
¿Y Rivera Solutions tuvo que ver con eso? Bueno... tal vez sí, tal vez no. Sencillamente hicieron del pajarito chismoso que contó el chisme y de allí en más fue solo ver ¿Quién diría que la política galáctica podía ser tan divertida?
_____________________________________________________________
(Hiro Pov)
(Ruta principal del tren transiberiano de Moscú hasta Vladivostok, Siberia, Rusia)
Bueno, ya lo suponía, pero esto lo confirma, las naves espaciales son mucho más rápidas que los medios de transporte terrestres. Bastaba con decir que no habían tardado nada desde Canadá hasta Rusia, pero aun con todo, no habían logrado llegar a tiempo, el tren ya había partido. Así que no les quedó de otra que abordarlo en pleno movimiento.
Idea propuesta por el alíen llamado Chispa y rápidamente secundada por los otros dos. Era un hecho, aparentemente para ser parte de la policía galáctica había que tener una nula capacidad de autoconservación, o al menos eso me dejaban ver estos tres, aunque Betty y X-5 si parecían ser algo más racionales.
Pero de igual modo se logró con éxito abordar el tren y llegar hasta la cabina del conductor, donde Fred (que aún nos sorprende que sepa hablar ruso), interrogó al maquinista que se extrañó pero rápidamente respondió que no había visto nada fuera de lo normal hasta ahora.
Hiro: Bien, eso nos da la delantera -dije antes de sorprenderme al sentir como un felino saltó sobre mi hombro- hey, un gato azul ruso, hasta diría que es pura sangre -dije cargando y dando mismo al felino que se dejó hacer.
Go Go: Te gustan mucho los gatos ¿no? Bueno, tomando en cuenta a tía Cass, es de esperarse -dijo sonriendo mientras que Wasabi se alejó rápidamente para no comenzar a estornudar.
Siendo para su suerte en ese momento que el conductor del tren llamó a su mascota para darle de comer, solo que el que le dio fue lo que hizo que la gran mayoría de nosotros arqueáramos una ceja.
Betty: ¿En serio está alimentando a su gato con caviar? -pregunto sorprendida en lo que Fred comenzó a traducir al ruso.
Fred: Dice que la gata está de suerte. Justo hoy están transportando varias cajas de caviar en un vagón y una de ellas se rompió -comento en lo que los engranajes comenzaron a rodar en mi cabeza.
Collares, arena, postes, caviar... ahora me siento estúpido por no verlo antes.
Hiro:... ¿No será que Casanova planea robar un vagón de caviar?
Wasabi: ¿Pero qué relación habría entre los collares, los tótems, la arena negra y el caviar? -pregunto todavía a una distancia exageradamente prudente.
Hiro: Eso es fácil -dije cargando al felino nuevamente- pará nosotros es caviar, pero para ella solo son huevos de pescado, la mejor comida para felinos. Si Casanova ama a los gatos... Seguro querría collares de diamantes para sus mascotas. Y los tótems serían excelentes para que los gatos afilen sus garras.
X-5: Si ¿pero que tiene que ver la arena negra en todo esto? -pregunto curioso en lo que yo solo lo mire fijamente con algo de incredulidad.
Hiro: Tres palabras: Caja de arena. Se ve que nunca has convivido con gatos terrestres. Yo soy un experto gracias a Mochi -dije abrazando a la gata azul.
Honey: ¿Entonces el próximo robo de Casanova será un vagón de caviar? -pregunto en lo que todos pensamos lo mismo, ir cuanto antes a los vagones de carga.
Solo para que en ese preciso instante se escuchara un alboroto en la parte trasera del tren, el cual se debió a que precisamente uno de los vagones con el cargamento de caviar fue desmontado y para cuando llegaron solo vieron el vagón siendo llevado por un helicóptero. Y a cierto detective inglés solo mirando el suceso con una sospechosa satisfacción.
Fred: ... Estoy oficialmente confundido.
Betty: Lo sabía, sabía que estarías aquí -dijo para nuestra sorpresa en lo que se ponía en guardia- tú también trabajas para Casanova... Camaleón -dijo al detective Grevil quien solo le vio con burla.
Grevil: Bueno, parece que ya se acabó la función -declaró para luego sonreír, y acto seguido comenzar a desfigurarse para nuestra consternación.
Pasando de ser un humano inglés, a una especie de reptil alienígena ¿pero que...?
Fred: ¡¿Qué rayos...?!
Betty: Chicos, les presento al camaleón, un extraterrestre capaz de adoptar la voz y la forma de cualquier persona, criatura u objeto. Fue un agente de alto rango de Maximus IQ, el capo criminal más grande de este cuadrante, hasta que fue despedido de sus fuerzas por un accidente hasta ahora desconocido. Desde entonces, el Camaleón ha intentado demostrar su capacidad para el mal, haciendo todo lo posible para recuperar su antigua posición -dijo dando la introducción al alíen frente a nosotros que solo gruño al ver a su vieja némesis.
X-5: Sin mencionar que es el responsable de más de 1243 faltas al protocolo galáctico.
Camaleón: Gracias por la presentación, Betty atómica. Y en efecto, me volví un trabajador de Casanova a cambio de que el me diera un arma super secreta -se jactó con orgullo- cuando le lleve ese artefacto increíblemente poderoso a Máximo, me suplicara de rodillas que regrese como su principal agente -dijo con emoción ante la sola idea de recuperar su viejo trabajo.
El silencio se hizo pesado tras las palabras del Camaleón. Todos nos mirábamos, procesando la revelación, mientras el tren seguía avanzando a toda velocidad a través de Siberia. Por nuestra parte podía decir fácilmente que sabría como iba a acabar esto dado a que ya he visto a Casanova hacerlo antes, va a traicionar a este tonto y dejárselo a las autoridades. Pero... ¿Qué será lo que le prometió exactamente? ¿Cuál será esa dichosa arma?... tal vez no exista y solo se aprovecho de este tipo... si, suena a Casanova.
Betty: ¿Entonces Casanova está usando ese artefacto para algo... grande? -pregunto tensa en que el extraterrestre solo se encogió de hombros.
Hiro: Aunque pareces olvidar otra cosa, Camaleón. Que no tienes salida, el gobierno ruso te arrestara apenas se detenga el tren en la estación y aquí estás rodeado -dije en lo que el alíen me miró de forma despectiva antes de retroceder unos pasos.
Camaleón: Caray, qué vergüenza, quisiera que me tragara la tierra -dijo mientras el tren pasaba por un puente, siendo así como todos lo vimos saltar del vagón, desplegándose un ala delta en su espalda de todas las cosas- ¡Y como dicen en dasvidaniya, do svidaniya! (¡adiós!)... ¡Entonces son dos svidaniya! -exclamó antes de solo perderse de vista en el cielo nocturno.
Se había escapado... vaya sentimiento anticlimático, como odio cuando los criminales hacen eso. Y para colmo uno que no sabía nada de cultura terrestre, solo eso explicaba ese comentario con tan poca gracia.
Betty: Genial, aprendió a escapar de Casanova -exclamó molesta- hasta ahora nunca se nos había escapado así
Fred: .... ¡Jajajajaja! ¡Dos svidaniya, ya entendí! -dijo solo para recibir un puñetazo de la pelirroja que no estaba de humor.
Chispa:... Yo no entendí, seguro por ser algo terrestre -dijo chasqueando los dedos de que el sujeto que buscaban se escapara.
Ahora entiendo porque no nos dijeron nada, me molestaba pero lo entendía, si nos decían que buscaban a un cambia formas fácilmente las cosas se hubieran salido de control por las sospechas de que alguno del grupo fuera el camaleón... especialmente por parte de Fred ¿para que negarlo?
Hiro: Al menos ya sabemos que la intención principal de Casanova es conseguir mascotas nuevas, Gatos para ser exactos -dije antes de hacer una llamada a mi recién contratada informante- Megan, necesito que me hables de gatos raros, busca las mayores tendencias, y hablo de felinos grandes, no gatos domésticos.
Megan: Déjame ver... ¿Qué hay de los leopardos de Amur? Son una especie escasa de la que solo quedan 130 en todo el mundo -dijo revisando el internet en lo que Gogo negó.
Go Go: No. Casanova no se conformaría con escaso sino con raro.
Megan: Entiendo... Oh, eso es ¡leones blancos! -dijo sonriendo por la señal compartida- de hecho vi la noticia hace poco, solo menos del 1% de leones del mundo son blancos. Solo existen 13 en todo el mundo, están prácticamente extintos. Aunque son nativos de Sudáfrica, recientemente nacieron dos crías de león blanco en una reserva en Zimbabue. Dato curioso...
Hiro: Si tienes dos crías de león blanco te puedes considerar afortunado, lo sé, hice un trabajo de leones para biología cuando estaba en 9° grado -dije sonriendo un poco por el recuerdo y al ver la foto de ambos felinos.
Megan: Gracias por matarme el chiste, adiós -dijo para luego colgar.
¿Qué les parece? Pasamos de alienígenas a tratar con especies en peligro de extinción, con Casanova siempre había que esperar lo menos probable.
Honey: Dos collares, dos tótems para arañar. Es un hecho, va por las crías de león blanco.
Betty: No podemos permitir que esas crías terminen en sus manos -dijo decidida para nuestra sorpresa- Casanova parece que no entiende de límites ni del respeto por la vida. Tenemos que actuar rápido.
Chispa: Pero eso ya no es asunto nuestro, nosotros... bueno, me callo -dijo al notar la mirada de pocos amigos de su superior, a lo cual tanto él como el robot decidieron no llevarle la contraria. Aparentemente sabían por experiencia que no era buena idea meterse con su jefa cuando estaba decidida a algo.
X-5: Entonces, ¿todo esto gira en torno a unos leones blancos? Es demasiado surrealista, pero también demasiado peligroso para ignorarlo -dijo haciendo a la pelirroja sonreír.
Betty: Así me gusta... entonces ¿Qué dicen? -nos preguntó- ¿los llevamos?
Hiro: Por favor -dije contento por la idea.
Lograr conseguir un medio de transporte de momento sería difícil, pero con la nave espacial de Betty no tardaremos nada. Además había que reconocerlo, si ella la eligió, tenía buen gusto.
—
(Unos momentos después)
(Parque nacional Zambezi, Zimbabue, África)
Recién llegamos y parece que hubo rastros de una pelea, mala señal.
Las puertas del refugio en el parque estaban destrozadas y había autos estacionados, pero lo que me llamaba la atención era el hecho de que las personas inconscientes en el suelo no parecían empleados u oficiales de la región, por las armas y la vestimenta me recordaban más a... cazadores furtivos. ¿Acaso Casanova contrató cazadores para hacer el atraco? No, si ese fuera el caso él ya estaría muy lejos de aquí.
Pero no, en vez de eso estaba caminando en frente de mí, acercándose con los dos cachorros de león con correa, usando los collares de diamantes con un porte... odiaba decirlo, les quedaban muy bien, hasta hermoso diría.
Hiro: ¡El juego se acaba, Casanova! ¡Entrega a los leones!
Casanova (Miguel): No lo creo -dijo con una seriedad muy rara en él- creo que no te lo he comentado pero de hecho me gustan los animales. Y he creado un espléndido refugio silvestre para ellos, Capitán. Deja que me los lleve.
Go Go: ¿Es chiste, no? -preguntó casi con burla sin que el ladrón pareciera inmutarse en lo más mínimo.
Casanova (Miguel): ¿Parezco bromear? -cuestionó- estos pequeños merecen solo lo mejor de lo mejor, y ya tengo todo listo para dárselos. Si te interesa, encanto, siempre podrían necesitar otro dueño -dijo haciéndome fruncir el ceño.
Eso era lo que más le odiaba a este sujeto, sus libertades para conmigo ¿quien se cree? A estas alturas al único que le permitiría actuar así conmigo sería a Miguel, mi novio, quien a diferencia de este sinvergüenza era todo un caballero.
Betty: ¿Que puedes saber tú de cuidar leones? -pregunto en lo que el alien verde y el robot ya lo apuntaban con armas láser.
Casanova (Miguel): Se lo que le suele pasar a los leones aquí en África. Y créeme, no es bonito, en especial a leones tan raros como estos -dijo dejando el resto de la insinuación al aire.
Y aunque lo odiaba admitir, solo me basto con ver lo que vimos al apenas llegar,caza furtiva... y aun peor, la caza legal de matar leones por turismo para turistas adinerados.
Hiro:... Encontraste cazadores furtivos intentando llevarlos cuando llegaste ¿No es así? -pregunte en lo que el cabrón con disfraz de mago asintió.
Casanova (Miguel): Así como adivinas -declaró mientras acariciaba a ambos felinos- si se quedan aquí ni siquiera llegarán a ser adultos ¿Es que su idea de "heroísmo" los hará intentar detenerme aun por encima de lo que obviamente es lo correcto?.. que decepción, "héroes" -enfatizó al final con descaro para molestia de los presentes.
El silencio se hizo pesado, solo roto por el suave ronroneo de los cachorros de león que Casanova acariciaba con una sonrisa sardónica. Cada uno de nosotros se encontraba evaluando nuestras opciones en medio de esa escena caótica. La evidencia de la caza furtiva y la destrucción en el refugio mostraban claramente que Casanova no era un simple ladrón (que me lo digan a mi), sino alguien con intenciones mucho más peligrosas y despiadadas, pero al mismo tiempo... noble, a su modo.
Hiro: ¿Y qué nos garantiza que dices la verdad? ¿Cómo estar seguros de que no piensas venderlos si te dejamos irte con ellos?
Casanova (Miguel): Tendrás que confiar en mí -dijo en lo que ambos nos retamos con la mirada... debo estar loco por lo que estoy a punto de decir.
Hiro: ... Te podrás llevar a los leones, si de verdad buscas ponerlos a salvo -dije para sorpresa de todos- pero los tótems, el caviar, los collares, la arena, todo eso se queda, sin discusión.
Betty: ¿Tiene que ser una...? ¿En serio vas a confiar en él? -preguntó consternada a lo que yo solo negué con resignación- ¡Le va a dar un arma peligrosa al Camaleón!
Casanova (Miguel): ¿Un arma? ¿Eso fue lo que él entendió? Yo solo le dije que le daría un láser que Máximo amaría, toma, tengo de sobra -dijo arrojando uno a la chica que solo miro indignada el objeto.
Betty: ¿Un rayo láser de juguete para gatos?
Hiro: Tal como supuse, le viste la cara al Camaleón -mencione frotándome la cabeza con algo de fastidio- tampoco quiero, pero la otra opción es dejar a los cachorros a su suerte... es lo mejor -dije antes de encarar al ladrón- demuéstrame que no me estoy equivocando con esto.
Casanova (Miguel):... Sabía que nos entenderíamos -fue todo lo que dijo con una sonrisa antes de desaparecer con ambos cachorros en un parpadeo... carajo, se me olvido ese poder suyo de moverse a toda velocidad ¿siempre lo ha tenido?
De momento todo lo que pude hacer fue apretar los puños, frustrado, y Betty soltó un suspiro de desesperación. Todos sabíamos que la decisión que acababa de tomar podía tener consecuencias graves, pero también era la única opción que parecía tener sentido en ese momento, no se que me dio, pero vi sus ojos y... solo sentí que era lo correcto.
Siendo en ese momento que recibí una notificación de Megan, la cual nos estaba informando que de una forma inhumana, todo lo robado estaba siendo devuelto. Los collares en el palacio real de Inglaterra, los tótems en el parque nacional de Canadá, la arena negra devuelta en Hawai y el caviar... ese no volvió, supongo que era mucho pedir.
X-5: Cumplió con su palabra... Eso es muy inusual para los criminales en general -comentó el robot que parecía sorprendido. De paso impresionándome ¿Qué tan avanzado es para tener emociones programadas?
Chispa: Supongo que eso deja a Casanova en una nueva categoría. Villanos qué cumplen con lo que dicen.
Betty: Sólo falta que resulte que piense que eres su alma gemela, Capitán Encanto -mencionó como broma antes de suspirar- aunque la verdad prefiero no hablar del tema, la animología perdió su encanto cuando vio con quién me salió compatibilidad.
¿Animologia? Recuerdo haber oído de eso, fue una moda pasajera para adolescentes. El test supuestamente identifica con qué animal se asocia estrechamente una persona, su personalidad y con qué tipo de personas se lleva bien o no. El test constaba de varias preguntas de opción múltiple, cuyas respuestas determinaban la siguiente pregunta... Y si, yo lo había hecho también.
Honey: Recuerdo que hice el test, me salió Oveja Negra -mencionó antes de sonreír con tristeza- y recuerdo cuando supe que alguien en mi vida era un Panda Marrón.
... Genial, ya me puse triste también.
Hiro: La misma persona que no me dejó en paz hasta que acepté hacerlo -dijo antes de notar que todos me veían con curiosidad- ... me tocó Tigre Blanco, y si, mi alma gemela es un León Dorado-
Y ding dong, allí está la llamada, justo a tiempo.
Hiro: Parece que esta vez te paramos los pies, Casanova -dije con algo de arrogancia, solo para amargarme cuando lo escuche reír arrogante. Este tipo me pone de los nervios.
Casanova (Miguel): No lo creo. Al final podré cuidar como se debe a estos pequeños. ¿Sabes? La gente se equivoca, los gatos no tienen 9 vidas. Por otro lado, yo si.
Hiro: La próxima vez te atraparemos, Casanova, ya verás.
Casanova (Miguel): Ya veremos, por cierto, gracias de nuevo por dejarme llevarme a los leones, si fueran dorados, combinaría con mi resultado en el test de animología, cómo sea, hasta el próximo robo, Capitán -dijo para luego colgar.
... Es un hecho... Ese Test no sirve ¡Es pura basura!
______________________________________________________________________
(General Pov)
(Isla Eden, bahía de San Fransokyo, San Fransokyo)
Si, si, si, Se entiende ¿Cómo pasamos de todo lo hablado previamente a este lugar? Y de paso ¿de dónde salió la dichosa isla si antes no estaba? Pues es la primera de las islas que están en proceso de ser creadas por medios artificiales a través de los experimentos 501 y 502. Siendo isla Eden oficialmente la primera isla terminada y debidamente terraformada.
¿Y por qué ese nombre? Eso debido a que su función era justamente esa, ser un jardín, en el cual el primogénito de la familia Rivera iba a comenzar a recolectar mascotas, animales exóticos de sus viajes y aventuras, con el fin de que todos se volvieran mascotas para su amado novio (amaba decir eso). Todo esto a partir de que a Hiro le gusto que le regalara esa gata egipcia, y sin querer le terminó dando cuerda hasta gastarla al joven mexicano.
Siendo por esa razón que se encontraba ahora mismo en la isla dejando a los cachorros de león en el que sería su nuevo hogar tras dejar todo lo que había robado menos el caviar (sus gatos merecen comer caviar, punto).
Rosa: ... Que raro, por lo general no solemos conservar nada de los robos estrafalarios... Pero que bueno que lo hiciste ¡Son tan lindos! -dijo tras ir a ver a su primo y terminar enamorada de ambos cachorros que se restregaron en sus piernas.
Animales tiernos, de las mayores debilidades femeninas.
Miguel: Había cazadores furtivos, no iba a dejarlos solos.
Rosa: Entonces oficialmente viven con nosotros lindos. Serán cuidados de tal modo que serán enormes gatos domésticos -declaró encantada- ¿Qué nombre podría darles? ¿Qué tal Kiara y Kion?
Miguel: Me gustan -asintió satisfecho- lastima que Hiro no puede saber que los tengo, sé que le daría un alivio enorme verlos a salvo
Rosa: Ya llegará el momento, tu tranquilo -hablo mientras mimaba a ambos felinos- por cierto, menuda coincidencia lo del test de ánimologia.
Miguel: Si, ¿Qué loco, no? -dije con franqueza- solo toca vigilar qué DNAmy no se le ocurra hacer algo con ellos -mencionó cruzado de brazos.
Para que luego, como de invocar un demonio se tratase, la mujer apareciera con varios sacos de alimento para los cachorros con todos los nutrientes necesarios para ellos. Una desventaja de que sean tan raros es que su sistema inmunológico es frágil como cristal, por eso debían tener sus debidos cuidados 24/7 todo el tiempo.
DNAmy: ¡Nunca lo haría! Ellos por sí solos ya son una mutación perfecta de la naturaleza, ¡una obra de arte! -dijo con emoción casi fanatismo- ¿Has pensado en buscar a alguien que haya sacado el Tigre Blanco en el test? -pregunto, de paso delatándose como quien le aconsejó al moreno hacer dicho Test en primer lugar.
Miguel: El amor de mi vida ni más ni menos, Amy. A quien le regale el Nutroala la otra vez -respondió para impacto de la mayor que quedó boquiabierta.
DNAmy: Oh My God. Justo estaba trabajando en un Nutroala real por si quería regalárselo alguna vez, jefe. Ahora parece mucho más apropiado.
Miguel: Dejémoslo en "un paso a la vez" -dijo riendo algo incómodo antes de ver a su prima-. que hablando de eso. El rastreador del Camaleón qué inyectamos dentro de su cuerpo funciona ¿no? Para que vayas mandando a los robots. Es verdad que hicimos un trato, pero es muy peligroso dejarlo libre.
Rosa: Porque ambos sabemos que su lealtad es solo para Maximo y dudo que le interese la opción de cambio de vida. Sin mencionar que lo necesitamos para negociar con el almirante DeGill.
Miguel: Exacto -exclamó antes de restar importancia al asunto- en todo caso, de momento se puede decir que todo salió a pedir de boca... ¿Cómo ha estado mi cuñado? ¿Qué tal le va como héroe mientras los grandes héroes se distraen conmigo? -pregunto curioso.
Ya que no era un secreto que a pesar del aislamiento, San Fransokyo sufría de problemas de criminalidad, más específicamente de super villanos. Y mientras los Grandes Héroes persiguen al infame Casanova por medio planeta, alguien debía vigilar y cuidar la ciudad dentro ¿no? Al menos hacer el teatro de todo el asunto de luchar contra el mal y todo eso para mantener entretenidos a los civiles en las noticias. Y allí es donde entra Sunpyre.
Siendo eso lo que hace en su tiempo libre cuando no está con su otro alter ego.
Rosa: Bastante bien, la verdad. Actualmente tiene una rivalidad bastante tensa con Momakase que escapó de prisión así como con Varón Von Vaporoso y los super sónicos. Pero en especial Momakase, se enteró de que chantajeo a Hiro una vez -explicó casual.
Y si, ellos dejaron libre a la ladrona. ¿Por qué? Bueno, resulta que una forma efectiva para mantener feliz a una población que por A o B razón están aislados, es con dos cosas que han sido aplicadas a lo largo de la historia: Pan y circo para el pueblo.
Miguel: Ah, si, cuando el jefe Cruz quería arrestar a los Grandes Héroes...Mientras no se emocione demás todo debería de estar bien -dijo para acto seguido jugar con los cachorros de león junto con Rosa.
De paso, gracias a ellos pensando en el que sería el regalo perfecto para Hiro de esta ocasión. Dos peluches, uno de león, con una foto suya con uno de tigre blanco, con la nota "hice el test de animología, me salió León Dorado, se lo comenté a tu tía y me dijo que eras un Tigre Blanco, espero te gusten".... arriesgado, pero eso mismo es lo que le da emoción a la vida.
Aunque de momento tendría que actuar rápido, justamente pronto un evento muy importante iba a pasar y no se lo quería perder. A fin de cuentas, Leo era un amigo muy valioso para él... y encima Hiro trabajó en ese proyecto también. Ni loco se lo pierde.
___________________________________________________________________
(General Pov)
(Interludio Kuban (Leo x Kubo))
(Al día siguiente)
(Auditorio de la universidad, IASF, San Fransokyo)
En un instituto de arte, se ofrecen diversas carreras enfocadas en las artes visuales, escénicas, musicales y el diseño. Algunas opciones comunes incluyen Diseño Gráfico, Artes Plásticas, Música, Artes Escénicas (en otras palabras teatro y danza), Producción Audiovisual, y Diseño de Moda, entre otras. Siendo el penúltimo el que era de interés ese día para cierto aspirante a animador.
El cual estaba tratando con todas sus fuerzas de controlar lo que coloquialmente se conoce como pánico escénico, dentro de poco seria su turno de presentarse junto a su equipo frente al concejo estudiantil de la universidad y el pobre Leo estaba pasando por todos los síntomas en relación al estrés de hacer frente a una gran audiencia y encima a personas que dependia de su opinion tu futuro.
Aceleración del ritmo cardíaco y respiración, sudoración excesiva, temblores involuntarios, boca seca, malestar estomacal, mareos, sensación de ahogo, rubor facial y ganas frecuentes de orinar. El paquete completo... daba gracias que Hiro no trajera a Baymax por insistencia suya.
Hiro.... Parece una batalla Campal. Esto no es nada como la expo del ITSF -dijo observando como prácticamente los aspirantes se peleaban unos con otros para ver quien agradaba más a la audiencia.
Conformada por personas importantes del medio en la ciudad, personal de la universidad, familiares, conocidos, etc. De todo un poco.
Leo: Eso es porque aunque no lo parezca es más difícil triunfar en el arte que en la tecnología, Hiro -argumentó a la vez que el nipón le concedió el punto- con eso ya te imaginarás el tipo de obra de arte que Honey Lemon hizo para lograr ser admitida aquí.
Hiro: La verdad sí -reconoció mientras observaba la presentación actual en el escenario.
La cual se trataba de una mezcla entre parkour y break dance bastante buena si el Hamada debía ser honesto, aunque eso no parecía impresionar realmente a las tres chicas del concejo que miraban inexpresivas y hasta con cierto aburrimiento la presentación hasta que la misma terminó.
Chica del comité: Ahora, a continuación sigue el club de investigación de cine y animación -dijo en lo que por su parte el moreno que era el líder de grupo se abofeteó a sí mismo para reaccionar.
Leo:... No me orine en los pantalones ¿verdad? -pregunto en lo que tanto Hiro como Spencer solo le vieron con gotas de sudor.
Hiro: ¿Perdón? -pregunto en lo que el castaño tomó al latino de los hombros.
Spencer: Oye, tranquilo Leo. Ya llegamos hasta aquí, o bueno, la mayoría lo hicimos -menciono mirando de reojo a cierto fantasma que estaba entre la audiencia disfrutando de criticar a los nuevos talentos, vaya apoyo moral- dimos lo mejor que pudimos, solo nos queda ir con la frente en alto y mostrar los frutos de nuestro trabajo.
Hiro: Además no estás solo, mira el público -dijo señalando a Miguel y Marco que parecían algo desarreglados, posiblemente por pelear con algunas personas para llegar a la primera fila- y además, estamos aquí contigo, si caemos, será juntos.
Leo: ... Tienen razón -dijo suspirando hondo para serenarse.
Para acto seguido levantarse lentamente, ajustándose la camiseta y limpiándose el sudor de las manos en sus jeans. Aunque el corazón le latía a mil por hora, decidió que no podía dejar que el miedo lo dominara. Con paso firme, se dirigió al escenario junto a sus amigos. El escenario era simple, pero la tensión se sentía con solo respirar. El público bservaba en silencio expectante. Leo subió las escaleras con cierta torpeza, pero al llegar al micrófono, cerró los ojos por un momento y con una sonrisa tímida pero decidida, empezó a hablar:
Leo: Hola a todos. Gracias por darnos la oportunidad de presentar nuestro trabajo. Somos el club de investigación de cine y animación, y hoy queremos compartir con ustedes...
Chica del consejo: Antes de que expongan, tengo algunas preguntas que hacer sobre sus actividades -dijo interrumpiendo al castaño abruptamente mostrando varios papeles apilados que tenían consigo- o mejor dicho, de su comportamiento. Nos han llegado reportes de que han derrumbado paredes y destruido partes del techo. ¿Saben que dañan la propiedad de la institución que se les cedió de pura buena voluntad al ni siquiera ser estudiantes formales? ¿No les parece algo grave? -pregunto a la vez que los nervios comenzaron a invadir a Leo que se sentía con la boca seca, lo intentaba, pero nada salía, ni una palabra.
Por suerte para él, Hiro tenía más experiencia en ese campo de enfrentar público.
Hiro: Los "daños" fueron remiendos y reparaciones qué hicimos al edificio con dinero de nuestro propio bolsillo. Porque lo que la universidad nos dio fue una bodega abandonada -respondió de forma brusca- es más, por más que no seamos estudiantes formales, me parece una falta de respeto que las instalaciones que se nos dieron ni siquiera fueron acondicionadas para tener gente, ¿Se imagina si un pedazo de escombro nos caía encima, siendo ustedes responsables de nuestra seguridad? -cuestionó a la chica del concejo que frunció el ceño.
A su vez, Leo estaba a nada de rezar al menos cinco ave marías para que esta situación no se saliera de control.
Chica del consejo: Conque esas tenemos -dijo tomando otro montón de papeles- también hay varios estudiantes que se han quejado de ti, Hiro Hamada. Todos aquí sabemos quien eres, tu fuiste el responsable de robar la estatua de Lenore Shimamoto después de que la semana de la rivalidad terminara, tal cual fue un acto vandálico de alguien ajeno a la institución ¿que dirás en tu defensa?
Hiro: Que técnicamente fue el último día de la semana de la rivalidad, así que aún entraba. No veo el problema con sus quejas.
Chica del consejo: Pues claro que hay problema! Además ¡también hay rumores de que tienen un animal salvaje en su estudio!
Hiro: ¡¿Llamaste a alguno de mis gatos un animal salvaje?! -preguntó indignado y listo para incluso irse a los golpes con la chica de ser necesario.
Si, debes en cuando se ha llevado a sus mascotas con él al estudio ¿y que? No han hecho nada malo... que él sepa al menos.
Chica del consejo 2: Deberías ser más respetuoso -dijo otra de las jóvenes que eran parte del concejo- a fin de cuentas nosotras somos quienes deciden si ustedes reciben presupuesto o no. Y en este caso eso incluye las admisiones de Leo San Juan y Spencer Wright al instituto de arte, pero a como yo lo veo... Su club es un enemigo público, hasta considero que lo mejor es clausurarlo.
Hiro: Técnicamente sólo dan una opinión, la última palabra es la del decano ¿O debo entender que, según ustedes, el decano hace todo lo que ustedes le dicen? -preguntó sintiéndose con ventaja en lo que la mujer faltante por hablar tomó el micrófono.
Chica del consejo 3: Puede que tu fanfarronería te abra puertas en el instituto tecnológico. Pero ¿de verdad crees que servirá para acobardarnos a nosotros? -pregunto sin alterarse en lo absoluto, y fácilmente el nipón podría decir que ella era la que más mal le caía de las tres.
Hiro: Me acusan de fanfarrón las que ya andan hablando de vetar a Leo del IASF olvidando que, aún si el decano tomará en cuenta sus sugerencias, él mismo tendría que ver si lo que dicen es verdad -dijo como punto final de la discusión para enojo de las chicas.
Chica del consejo 1: Pues entonces... -exclamó queriendo continuar la discusión importando poco el lugar o la situación.
Hasta que un grito de exasperación interrumpe toda conversación o diálogo que hubiera en el auditorio en ese preciso momento, un grito de un soñador frustrado.
Leo: ¡Ya cállense! -grito dando un pisotón- se creen la gran cosa en su torre de marfil ¿no? ¡Pero se quedarán con las ganas de vernos rogando de rodillas! Tenemos que venir como payasos a presentarnos aquí ¿y ahora quieren echarnos? ¡¿Qué les pasa?! ¡¿Cuál es su problema?! -dijo tomando por sorpresa a todos.
Spencer: Leo... -susurro sorprendido ante el cambio tan radical en la actitud de su amigo. Seguía nervioso, claro, pero ahora mismo el coraje le ganaba.
Y todo fue gracias a que el moreno vio a cierto joven con un parche entre la audiencia que le hizo tomar coraje de donde no tenía para esto. Además, de todos modos se suponía que si iba a seguir con todo el asunto de la banda tendría que dar conciertos a grandes multitudes ¿no? Mejor enfrentar el problema del pánico escénico de una buena vez para adelantar.
Leo: ¡Solo están allí como mentecatas diciendo tonterías! ¿Creen que estamos perdiendo el tiempo en nuestro estudio?¡Hicimos todo eso porque queríamos hacer un anime! ¡Nos partimos el lomo para hacer esta película, torpes! i¿Un plato se critica hasta después de comerlo, no?! -termino de gritar para luego tomar aire luego de emanar tanta "aura", esperando que su punto fuera escuchado.
Tristemente ese no parecía ser el caso, al menos no por parte de las miembros del concejo que solo le vieron de forma inexpresiva a diferencia del resto del auditorio que se quedaron en silencio ante tal escena por parte del joven San Juan.
Chica del concejo 1 :.. ¿Qué fue lo que dijo?
Chica del concejo: En resumen, nos dijo que veamos su producto antes de quejarnos. Un punto válido en realidad -dijo en lo que las otras dos asintieron en silencio.
No obstante, a quien sí le prestaron atención las chicas a cargo del evento, era a cierto magnate que se puso de pie.
Héctor: Si me permiten opinar, el joven San Juan tiene un punto, después de todo, ni siquiera han visto su trabajo y ya lo andan rechazando, tenía entendido que el IASF era profesional. Y algo de lo que yo podría quejarme con el decano,la verdad -menciono solo para ganarse una mala cara por parte del amigo de su hijo.
Leo: Don Héctor... Como mi jefe y padre de uno de mis mejores amigos, se lo pido... ¡No se meta! -le gritó al hombre de tal modo que todos se quedaron sin palabras.
Es decir, no todos los días se veía a alguien tratar con tal falta de respeto a alguien de una clase social tan elevada. Aunque ese era su pensamiento al tener mentes cerradas en ciertos status quo, nadie los podía culpar.
Héctor: Ah, que la chi... Sólo digo que podría quejarme con el decano sobre que me parece preocupante que el consejo escolar parece no ser muy profesional. Tampoco te alborotes -dijo tomando asiento nuevamente en lo que hacía un gesto de que le sigan con la función.
Pero igual lo que él quería ya se transmitió, la amenaza había sido lanzada al aire, y las 3 chicas la captaron y todo lo que pudieron hacer al respecto fue tragar grueso.
Chica del consejo 1: Bueno... supongo que podemos reproducir su video... -dijo para que acto seguido el auditorio quedará a oscuras. A la vez que la proyección comenzó sin más contratiempos.
En sí, sin una historia como tal, un corto creado para introducir a la gente a lo que es la idea de un mundo de fantasía. Esa fue la decisión final del plan de que la exposición fuera juntar todas las ideas aleatorias de la lluvia de ideas en una sola, siendo ese el resultado. Algo llamativo a la vista que a simple vista busque captar el interés... al menos el suficiente. Y al final no se pudo usar el Stop motion... pero ya habrían futuras oportunidades... con suerte.
Y al final, todo lo que quedó en la pantalla fue justamente la palabra fin. Una conclusión abrupta para una inmersión con el fin de atrapar a la audiencia. En especula Kubo, que quedó hipnotizado de principio a fin sintiendo que estaba allí dentro de la pantalla, para él ver algo así... decir que fue mágico era quedarse corto, a sus ojos fue... más que divino.
No siendo el único en pensar en eso, siendo la prueba como todo el lugar comenzó a llenarse de murmullos hablando de lo bien hecho que estaba el trabajo que habían visto.
Chica del consejo 3:.. Parece que sí estaban ocupados -menciono viendo al trío de jóvenes conversar entre ellos, ignorando por completo los elogios del público.
Spencer: Nos quedó bien ¿no?
Leo: ¿Es una broma? El color del dragón de la hierba quedó opaco con el cielo, se noto con el coloreado a dos tonos. Debió ser un verde más brillante y menos opaco.
Spencer: Es verdad... sin mencionar que las explosiones del arma láser fueron muy sin gracia en realidad, mató los contornos un poco al verse sin mucha textura.
Hiro: Los errores se notan más en la pantalla grande ¿no? -pregunto divertido con una sonrisa de agotamiento- a un cuadro incluso le faltaron las sombras, hizo que se viera mal. Algunos detalles solo se notan en el producto final.
Chica del consejo 3:.. Hicieron todo por su cuenta sin presupuesto y aunque el producto final fue bueno solo están viendo los defectos y como mejorarlos.. ¿Qué creen que serían capaces de hacer con un presupuesto? -se preguntó en lo que las tres pensaron lo mismo aunque no quisieran.
"Lo mejor"
De allí que aun sin decirlo, era un hecho que ya había tomado una decisión unánime.
—
(La tarde de ese mismo día)
(Camino al estudio las leyendas, ya oficial)
Leo: ... Lo logre, de verdad lo logre -dijo al borde de las lágrimas. No pudiendo ni queriendo quitar la sonrisa en su rostro de ver lo que había en sus manos. Su formulario del proyecto de fondos y creación del club con el sello de aprobado junto a la carta de admisión entregada por el propio rector.
La emoción del chico era abrumadora. Con las manos temblorosas, contemplaba los documentos como si de un valioso tesoro se tratara. Había pasado por un día lleno de obstáculos así como varias semanas infernales de trabajo, pero al final, su esfuerzo y pasión habían sido reconocidos. La sensación de logro le llenaba el pecho, y por primera vez en mucho tiempo, se permitió sentir esperanza.
Spencer se sentía similar aunque era mejor controlando sus emociones, y Hiro también acabó aceptando al menos de momento aceptar el cupo en el IASF en lo que decidía si había algo de su interés que estudiar allí. Pero de los 3 era Leo el más emocionado por lo que habían logrado, y por mucho. Más que todo por ser un logro ganado con nada más que su propio esfuerzo.
Hiro: Ahora que tenemos un presupuesto, podemos tomarnos las cosas con un poco más de calma -dijo sacando al castaño de sus pensamientos- ya podemos empezar con ideas para hacer las películas qué quieras, Leo. Las leyendas.
Leo: Gracias, Hiro, por ayudarme tanto -dijo de forma sincera antes de sentir un codazo en su costado- tú también Spencer, de verdad, muchas gracias.
Spencer: No me des las gracias. Ahora que el estudio es un club oficial tenemos más trabajo que nunca. Al diablo mi vida social en parte, pero ¿qué importa? Nunca tuve una para empezar -dijo encogido de hombros sacando risas a los tres en lo que se acercaban al estudio para guardar el material usado en la presentación.
Solo para que al abrir la puerta, se toparon con un escenario algo surrealista con papeles tirados por todos lados, como si un animal se hubiera metido y causado un desastre. Pero no era nada de eso, sino más bien solo cierto chico que de algún modo se decidió a que el estudio ahora era su casa... si, había que buscar una solución a eso pronto.
Kubo: ¡Volvieron! -dijo con emoción para luego solo entregar unas hojas a Leo- Dime ¿Qué piensas?
Leo: Estos son... Artes conceptuales, panoramas y paisajes -dijo sorprendido por el detalle, eran muy buenos ¿Kubo era un artista que tenía más talentos que la música?
Kubo: Te escuche decir que los paisajes de la "'película" parecían muy opacos, tristes a como lo entendí yo... Quise mejorarlos ¿Qué piensas?
Leo: Kubo, todo es impresionante -mencionó impresionado- eres un gran artista, tú...
Kubo:... Quiero que me enseñes -dijo interrumpiendo al otro chico que solo le vio con incredulidad.
Esa no la vio venir.
Leo: ... ¿Enseñarte? -pregunto en lo que el joven japonés asintió con timidez.
Kubo: Yo... Me gusta contar historias con canciones, soy bueno con el origami... Pero esa magia fue mejor que cualquier cosa que haya visto en mi vida... ¡Quiero hacer esa magia también! ¡Por favor, enséñame! -dijo llorando de lo conmovido que quedó de la función.
El joven San Juan sintió cómo su corazón se llenaba de emoción y sorpresa ante la sinceridad y pasión de Kubo. La expresión en su rostro reflejaba una determinación que no podía ignorar. Por un momento, todos los miedos y nervios que había sentido durante esa jornada parecieron disiparse, reemplazados por una inspiración renovada... ¿a quien engañaba? Para él fue como si cupido lo hubiera acribillado a flechazos.
Leo: ¡Claro que sí, Kubo! Me encantaría enseñarte. La magia del arte y la creatividad no tiene límites, y tú tienes mucho talento. Vamos a hacer cosas increíbles juntos -dijo tomando las manos del otro chico, quien en respuesta lo abrazó con fuerza.
Kubo: ¡Gracias, gracias, gracias! ¡No te arrepentirás! -exclamó el joven, con lágrimas en los ojos y una sonrisa que iluminaba su rostro. Cosa que le calentó el corazón al de ascendencia latina mientras que sus dos amigos solo sonrieron, felices por él.
Hiro, que había estado observando en silencio, miró con satisfacción a ambos tortolitos. Pensando que ahora mismo le gustaría estar así con su novio. Pero apenas terminó la presentación Miguel se tuvo que ir debido a que lo llamaron a la empresa, Rosa posiblemente. Lo que le hacía preguntarse ¿Qué hará tanto Miguel que Rosa o su padre no lo dejan descansar?
_____________________________________________________________________
(Un par de días después)
(Sede Banco de Japón, Tokio, Japón)
Inversionista: Una fortaleza impenetrable, así es como muchos llaman a la nueva cámara de seguridad de su banco ¿es eso cierto señor Sujumi? -preguntó la mujer al director del banco más importante del país a media conferencia para anunciar su más reciente adquisición, a lo cual sonrió con arrogancia el hombre.
Señor Sujumi: Caballeros, esta cámara de seguridad está hecha de titanio reforzado, uno de los metales más duros que se conocen. Está rodeada por casi cinco metros de granito sólido, uno de los minerales más duros de la tierra -dijo exponiendo una maqueta a sus inversores- debajo hay doce pisos vacíos y sellados con paneles de más de 50.000 voltios y cuenta con la tecnología más avanzada en seguridad desarrollada en el país. Nadie, repito nadie, podrá acceder a esta cámara sin que yo le acompañe en persona -dijo recibiendo varios aplausos en respuesta.
Luego, un silencio respetuoso llenó la sala tras las palabras de Señor Sujumi, mientras los inversionistas asimilaban la magnitud de la seguridad que rodeaba la cámara. Sin embargo, en un rincón oscuro del edificio, dos aspirantes a criminales de fama mundial observaban con atención la reunión a través de una cámara, sus ojos brillando con una mezcla de curiosidad y determinación.
Casanova (Miguel): Bueno, parece que esto será interesante. Te toca Eugeo -dijo a su acompañante que solo asintió y avanzó hacia la primera puerta de seguridad.
Escáner de retina: Se requiere identificación de retina. Por favor coloque su ojo frente la lente, señor Sujumi -dijo en lo que el joven con cuerpo de androide miro a la lente a la vez que su ojo se modificó para ser igual al del gerente del banco- gracias señor Sujumi, continué.
Petición a la cual ambos jóvenes accedieron sin pensarlo, no sin que antes Casanova se las ingeniara para colocar un aparato en una de las cámaras de seguridad, el cual hackeo todo el sistema de vigilancia para que solo se viera la cara del ladrón en todas las pantallas.
Lo que obviamente llamó la atención de los guardias de seguridad que rápidamente activaron las alarmas y en menos de un segundo todo el edificio estaba cerrado a cal y canto, estaban en alerta roja. Casanova había entrado al edificio, pero a él eso poco le importaba mientras flotaba sobre el piso electrificado mientras Eugeo solo caminaba sobre este como si nada. Cada vez más cerca los dos de su objetivo, la nueva cámara de seguridad ultra moderna e imposible de robar... supuestamente.
Los guardias corrían frenéticamente por los pasillos, intentando localizar a los intrusos, pero la avanzada tecnología de seguridad bloqueaba cualquier intento de acceso. La cámara de seguridad, diseñada para ser impenetrable, parecía ser solo un obstáculo más para los astutos criminales. Y claro, todo esto sin que el señor Sunjumi o los inversionistas tuvieran la menor idea de que estuviese ocurriendo bajo sus narices.
Señor Sujumi: Caballeros y damas, ahora subiremos al ático en donde tendremos la cámara solo para nosotros -dijo mientras subía el elevador- señores y señoras, les presento la cámara más segura del mundo -dijo con orgullo una vez se abrieron las puertas del ascensor... solo para ver la cámara abierta de par en par para su consternación.
Lo peor es que no faltaba nada, no había nada dañado, todo se veía intacto... con la diferencia del sombrero de Casanova dejado allí, como prueba de que esa cámara de máxima seguridad no era un reto para él.
No hace falta decir que al poco tiempo todos los canales de noticias hablaban de lo mismo. Y claro ¿Cómo no? Ese era justo el momento del ladrón para meterse con su héroe favorito. De allí que sin más, hizo la llamada.
Hiro:... No lo entiendo -fue el primero en hablar- En verdad no robaste nada ¿Por qué arriesgarse así?
Casanova (Miguel): Pude haber tomado lo que sea que hubiese querido. Pero solo quería aceptar el reto de lo máximo en tecnología de seguridad, y vencí, capitán -dijo buscando nada más presumir su logro- eso es lo importante.
Hiro: Sabes que no me rendiré hasta atraparte -exclamó decidido- además, con tu avanzada tecnología cualquiera hubiera podido lograr eso.
... ¿Qué fue lo que dijo? ¿Acaso escuchó bien?... Oh, reto aceptado, amor.
Casanova (Miguel): Soy el mejor ladrón del mundo, con o sin ellos. Y lo voy a probar. Inicia el juego -declaró para luego colgar.
Momento en que no pudo evitar soltar un suspiro... ¿Por qué se dejó dominar por el orgullo? No debería importarle realmente todo el asunto de los robos o Casanova, eran solo una fachada... Aun así, mentiría si dijera que no le importa que se metan con su orgullo... Quizás Casanova es más parte de él de lo que quisiera admitir.
Ahora debía pensar con cuidado cuál podría ser su próximo gran robo... necesitaría tiempo para pensar. En realidad si actuó tan pronto luego del último robo fue solo por querer probarse a sí mismo con eso de la bóveda. Y también porque quería ver de lo que era capaz quien ahora era su nuevo compañero.
Eugeo:... Me siento... algo decepcionado -dijo suspirando- quería usar mis espadas.
Casanova (Miguel): Ya lo harás luego, habrá varias oportunidades en el futuro. Por ahora volvamos a casa -dijo dándole una palmada en la espalda- por cierto... ¿Tienes algún nombre? ¿un alter ego? Pregunto por qué esa vestimenta... no lo se, me grita que fue personalizada y todo -dijo viendo al chico de arriba abajo... ese abrigo negro le quedaba muy bien.
Eugeo: ... De hecho lo fue... no lo sé... la idea solo me vino a la cabeza... como un recuerdo de que yo... o alguien que conocí... se veía así... -dijo mirando su mano un momento, reflexionando antes de ver el cielo naranja del atardecer con una mirada inexpresiva- ... llámame... el espadachín negro -declaro en lo que el moreno solo asintió.
Vaya... que nombre más trillado ¿eh?
Notes:
Y ese fue el capitulo de esta vez. Como siempre pueden votar, comentar, lo que gusten.
¿Y que les pareció?
De momento solo diré que no, el próximo capitulo no será de una vez el siguiente robo. Por si se lo pensaban. Punto para quienes adivinen los crossovers de esta vez.
En fin, de momento, nos vemos.
Chapter 35: Capitulo 31: El mundo gira y todos con el (interludio 1/2)
Notes:
(See the end of the chapter for notes.)
Chapter Text
(General Pov)
(Café Gato de la suerte, calle unión, San Fransokyo)
Una mañana serena se desplegaba en todo su esplendor. El canto de los pájaros llenaba el aire, el cielo despejado mostraba un azul intenso, y en la distancia se escuchaba el murmullo del oleaje y la caricia de la brisa marina, perceptibles para quienes pasaban por la costa o vivían en los suburbios cercanos. Reinaba una calma tan profunda que casi podía respirarse; un instante perfecto para apreciar la vida y sentirla en la simpleza de estar presente.
Si... nada más lejos de la realidad para el personal del gato de la suerte en esa mañana que estaban pasando por uno de los momentos más duros, mortales e incluso sanguinarios de lo que es el trabajar en el negocio alimenticio, la hora del desayuno.
Robbie: ¿Primera vez lidiando con una fila interminable de órdenes? -pregunto divertido al par de meseros mientras cocinaba con rapidez- un sandwich especial, dos tostadas y tres cafés para la mesa uno, el café después de comer. Dos guisos, dos pastas y un café, dos con hielo y jugo de melón para la mesa 3, la pasta sin pimientos verdes -exclamó golpeando la campana.
Mientras que por su parte el dúo de meseros se sentían como si estuvieran en un campo de batalla, una guerra sin cuartel. Oleada tras oleada de clientes que van y vienen uno tras otro sin tener oportunidad para descansar. Menudo primer día de trabajo para los hermanos Maximoff, Pietro y Wanda, quienes oficialmente estaban empezando su servicio comunitario patrocinado por Rivera Solutions.
¿La razón? Más que todo era como una segunda oportunidad para no acabar tras las rejas por sus actos como miembros de la hermandad de mutantes. Y en general los habitantes de la ciudad no se preocupaban por posibles altercados o actos violentos por parte de los hermanos mutantes. Mientras tuvieran el collar inhibidor de poderes, eran tan peligrosos como cachorritos.
Hombre de negocios: ¡Yo pedí una hamburguesa con queso cheddar! ¡No un desayuno continental!
Pietro: Lo siento mucho, su orden será preparada pronto... -dijo aguantándose con todas su fuerzas no mandar al diablo al hombre.
Wanda: Una orden de Omelette A y uno D. Enseguida -exclamó corriendo a dejar la orden.
Hombre de la novela: Y no olvides rellenar la taza de forma constante, gracias -menciono sin despegar la mirada de su laptop.
Si, por lo general el negocio ya era ajetreado en las mañanas dado a que la dueña del negocio, Cass, se ganó el cariño de la gente del vecindario y por eso se aseguraba de resguardar a sus clientes con capa y espada.
Pero desde que la ciudad se aisló y se volvió una nación independiente, la cafetería alcanzó mucha más clientela debido a que se sabía de la buena relación entre la familia Hamada con la familia Rivera, los que a ojos de todos eran quienes tenían el poder absoluto en el país junto con la alcaldía. Lo que causó que mucha gente llegara ya fuera por curiosidad o conveniencia en busca de alguna clase de oportunidad.
El sonido incesante de la campanilla del mostrador marcaba el ritmo como si se tratara del metrónomo de una sinfonía caótica. Las comandas iban y venían, las bandejas se apilaban, los vasos tintineaban, y cada tanto, alguna que otra queja rompía el murmullo general como un trueno en plena tormenta. Sin embargo, en medio del bullicio, Robbie, el segundo al mando después de Cass, se movía con la gracia tranquila equivalente a la de quien ha domado el caos a base de años y litros de café.
Robbie: ¡Vamos, equipo, mantengan el ritmo! Wanda, cuida esa bandeja. Pietro, recuerda sonreír aunque quieras gritar, eso relaja a los clientes y los mantiene contentos -exclamó con fuerza desde la cocina.
Wanda, con un leve tic en el ojo, asintió mientras esquivaba a un niño que se le cruzó entre las mesas con un panqueque a medio comer. Pietro, por su parte, murmuró algo ininteligible mientras se obligaba a poner una mueca que, con suerte, pasaba por una sonrisa.
Pietro: Esto se resolvería fácil con una revolución... -murmuró por lo bajo, pero igual estaba siendo escuchado por el robot que soltó una carcajada.
Robbie: En Sokovia o Cuba tal vez, pero aquí lo único que puedes derrocar es una torre de panqueques. ¡Y por favor que no se te caiga encima de una clienta otra vez, Maximoff!
Si, no era el mejor día para los hermanos. Y encima que el día laboral estaba lejos de terminar, como cereza del pastel. No podían trabajar a gusto del todo, ya que encima que el solo tener que trabajar era molesto, tenían niñeras que voluntariamente vinieron a echarles un ojo y asegurar que su voluntariado se estaba llevando a cabo sin contratiempos.
Evan: Oye Pietro. Cuando quieras rendirte solo dinos, aquí estamos -mencionó divertido el mutante con poderes de puercoespín en una de las mesas, siento la respuesta del albino aprovechar que Robbie no lo estaba viendo para sacarle el dedo al moreno que solo le sonrió con burla.
Pietro: ¿Cómo mi vida terminó en esto? -preguntó en voz baja mientras servía agua en algunas mesas- no puedo usar mis poderes y al primer problema encerrado y tiran la llave... ¿Cómo lo manejas tan bien? -pregunto curioso a su hermana que solo rodo los ojos con molestia.
Wanda: A diferencia de ti, tengo mucha práctica en lo que respecta a estar encerrada. Y no pienso volver a una habitación acolchada, hermanito -murmuró para luego hacer su mejor esfuerzo de sonrisa amable- su café, señor.
Cliente frecuente: Gracias, encanto, es un gusto que Cass consiguiera chicos tan trabajadores, como Hiro no siempre puede ayudarla, teniendo las manos llenas trabajando, estudiando y quién sabe qué más... es lindo verla tener más ayuda, oh eso me gustaría decir... ¿Le pasó algo a Cass? Veo que hoy quien está en la cocina es Robbie -mencionó señalando al robot que estaba centrado en ir a paso veloz con las comandas.
Wanda: Al parecer hubo un accidente y se lastimó el tobillo. A lo que escuche, casi hubo que amarrarla a la cama para que aceptara reposar -respondió a la vez que el hombre solo negó con tristeza y algo de diversión empática.
Cliente frecuente: Oh, pobre Cass, aunque la verdad, no me sorprende que sea tan testaruda.
Pietro: ¿A qué se refiere? -pregunto arqueando una ceja. A fin de cuentas aun no habían conocido como tal a la dueña, así que un adelanto no estaría mal.
De lo que sabían que pasó. Al parecer por distraerse terminó con una torcedura de tobillo tras tropezar con un banco, lo que la terminó volviendo una paciente por al menos una semana del robot médico de su sobrino. Y puede que ese tiempo se duplicará ya que ella pasó el día de ayer queriendo trabajar aún con la lesión y la terminó agravando.
Cliente frecuente: Entre que el Gato de la Suerte es el sueño de su vida, es la fuente de ingresos de su familia desde siempre, ¿Entienden, muchachos? -preguntó con calma- ella procura cuidarlo tanto porque, incluso luego de que... su sobrino mayor, cumpliera dieciocho, ha tenido el miedo de dar la imagen de que no puede mantener a su familia, y dado que Hiro aún es menor de edad, le asusta que le quiten su custodia -comentó a la vez que una anciana en una mesa cercana solo suspiro con pesadez.
La cual no era una anciana cualquiera para quienes llevaban más tiempo de ir a esa cafetería en particular. La Sra. Matsuda era una anciana de carácter dulce que frecuentaba el café desde hace mucho tiempo. Era amiga íntima de los abuelos paternos de Hiro y Tadashi, siendo por esa razón que ha seguido observando y manteniendo una estrecha amistad con la familia Hamada a lo largo de los años. Más que todo sintiendo un cariño especial por los jóvenes hermanos a quienes cuidaba de vez en cuando, al punto de que a menudo participa en sus travesuras haciendo reír a los chicos, a veces sorprendiéndolos con ropa inapropiada y memes populares que contrastaban con su edad.
Sra Matsuda: Es cierto, luego de lo de Tadashi, Cass y Hiro son sólo ellos dos contra el mundo, Cass no soportaría que le quitasen a Hiro -exclamó con tristeza- ... por cierto, el guiso de pescado está sabroso. Parece que lograron conseguir los ingredientes por su cuenta -menciono con una sonrisa que solo causo que ambos mellizos fruncieran el ceño.
Pietro:... Mejor no hablemos de eso -susurro entre dientes por el recuerdo.
Por lo general lugares como una cafetería en Estados Unidos abrían a las 9 de la mañana, máximo a las 7. Pero no, ellos empezaron desde las 4:30 de la madrugada para acompañar al robot a buscar ingredientes frescos al mercado por ser día de oferta en mariscos. Lo que acabó siendo toda una proeza empezando porque la encargada del puesto de pescado arrojaba sus mejores ejemplares con un bate de béisbol, y no, no es broma.
Wanda: ¿Sigues con el orgullo herido por perder en las vencidas?
Pietro: ¡¿Por qué un vendedor de vegetales tiene brazos tan gruesos?! ¡Demasiado esfuerzo por unos tomates!
Wanda: Ya supéralo, Pietro -dijo a su hermano que tenía la cara roja de la indignación para diversión de algunos comensales.
Sra. Matsuda: No creerán que Cass es la mejor chef de nuestro país solo por su talento ¿no? Los ingredientes también tienen que ver. Ella alimenta a su clientela como alimenta a su sobrino... Bueno, más o menos, a Hiro lo consiente más -admitió sonriendo con cariño- sin mencionar que tiene renombre, ha derrotado a todos los chefs con los que se ha enfrentado, algunos de fama mundial ¿Por qué creen que tanta gente viene seguido aquí? -preguntó sorprendiendo a los hermanos.
El tintineo de la campana volvió a sonar, esta vez con una urgencia particular. Robbie casi soltó una chispa de la velocidad con la que volteaba los sartenes.
Robbie: ¡Mesa cuatro! Tres panqueques, uno sin mantequilla, dos huevos estrellados, un batido de fresa y una orden de waffles... ¡con carita feliz!
Pietro: ...¿En serio la gente todavía pide esas cosas?
Robbie: Bienvenido al capitalismo, camarada. Aquí un waffle sonriente cuesta tres veces más que un waffle normal -dijo en broma- Wanda, querida, una sonrisa de vez en cuando no te va a matar. Créeme, lo digo por experiencia.
A lo cual la joven bruja escarlata apretó los labios, reprimiendo una respuesta sarcástica, y se limitó a inclinar la cabeza con educación. Pietro, en cambio, no pudo evitar chasquear la lengua.
Pietro: Sí, claro, como si sonreír detuviera esta avalancha de gente hambrienta.
Evan: ¡Funciona para las propinas, amigo! -le contestó desde su mesa con burla.
Siendo la respuesta del albino hacer ademán de querer lanzar el vaso de agua que tenía en la mano, pero Wanda le sujetó la muñeca con fuerza. A la vez que la acompañante del mutante moreno decidió llamarle un poco la atención en lo que esperaban su desayuno.
¿Y quien era? Pues la que por descarte se decidió que era el counter perfecto para Wanda en caso de lograr quitarse el collar, Jean Gray.
Jean: ... Ellos no van a dar la toalla con esto -mencionó observando a ambos Maximoff trabajar.
Evan: Yo difiero.
Jean: ¿Tan seguro estás de que Pietro se acabará rindiendo? -preguntó con curiosidad en lo que el joven asintió.
Evan: Él nació para ser holgazán -comentó mirando al albino con recelo- nunca se esforzó realmente, sólo le bastaba con valerse de su velocidad Y ahora debe estar pasando el peor día de su vida, no va a durar.
Jean: ¿Seguro que no es tu rencor por lo que pasó entre ustedes el que habla, Evan? -pregunto al moreno que solo apartó la mirada y se tomó su café- Sabes. Perdón si te enoja, pero tu me pareces como una chica con rencor luego de que el chico que le gusta le rompió el corazón.
Evan: Sí, claro -dijo bufando con fastidio- Jean, tendré malos días, pero no malos gustos.
Jean: Solo digo -mencionó divertida jugando con la espuma de su bebida- actúas con él de ese modo, muy rencoroso, pero se nota que con todo aun hay algo de cariño ahí.
Evan: Créeme, Jean, cualquier admiración que pudiera tener por Pietro por considerarlo buena onda, él la asesinó cuando no tuvo problema en inculparme por los robos que cometía en nuestra vieja escuela -dijo frunciendo el ceño por el recuerdo.
Nada como descubrir que tu amigo también es mutante para luego verlo vandalizar y robar varios casilleros en segundos para acto seguido dejarlo en la escena del crimen y asi ser inculpado por él.
Jean: Y supongo que por eso hasta te ofreciste de voluntario para vigilarlo. Esperando que falle y tener el gusto de encerrarlo... No pensé que fueras tan rencoroso.
Evan: No es tanto el hecho de lo que hizo, Jean, es que ha dejado en claro que sólo lamenta que lo descubrieran -mencionó en lo que ella solo se encogió de hombros para luego centrarse en las noticias matutinas.
Las cuales si de por si antes eran de interés en general para la ciudad. Ahora que eran un país independiente, el medio de noticias se volvió en la red principal de información sobre el mundo exterior para la gente de la nación. Y siendo honestos, ahora era de más emoción para la gente ver el noticiero desde que el reportero principal consiguió un compañero nuevo.
Bluff TV: Aquí Bluff Dunder con el informe matutino de esta mañana. Buenos días a los habitantes de nuestra bella ciudad estado -dijo con una sonrisa a la cámara- empezamos con dos reportajes de última hora. Encontrados en las alcantarillas de Bayville, Nueva York. Se logró convencer al grupo mutante conocido como los Morlocks y a su líder Calisto para venir a nuestra bella ciudad con ayuda de una de nuestras diplomáticas, la señorita Susan Murphy, alias Ginormica.
Evan: Pietro, ¿Puedes subirle, por favor? -pidió más que todo para volver a molestarlo. Cosa que el chico hizo de mala gana.
Bluff TV: Y fue un 2 x 1. Porque en el camino hacia acá se repelió con éxito un ataque del grupo anti mutante conocido como los amigos de la humanidad, cuyos miembros involucrados fueron capturados. Entre ellos estaba el ex candidato presidencial estadounidense y líder del grupo, Greydon Creed -menciono para que luego se mostrase su foto.
Wanda: ¿Creed? -preguntó con interés.
Jean: ¿Te suena, Wanda?
Pietro: Y seguramente a Logan, es el apellido real de Dientes de Sable, Víctor Creed -menciono ahora interesándose también por el reportaje.
Bluff TV: Gracias a la información que nuestras fuentes más confiables nos consiguen -dijo señalando a su compañero, un experimento 199, alias narizotas, quien levantó el pulgar- sabemos que el ahora ex candidato Creed es un hijo ilegítimo del mutante Dientes de Sable, qué lo tuvo en una noche con la mutante Mystique qué fingía ser la espía alemana, Leni Zauber -reveló con un tono de intriga- el hombre, aparentemente amargado por haber sido rechazado por sus padres al no ser mutante, desarrolló un odio hacia los mutantes, lo que lo llevó a crear el considerado grupo terrorista racial
Narizotas reportero TV: Grupo dedicado a oponerse a los derechos civiles de los mutantes cometiendo actos de terrorismo contra mutantes pacíficos y simpatizantes mutantes. Y utilizando los actos de mutantes violentos como Magneto para conseguir apoyo para su causa. En esta ocasión el plan era acabar con nuestros nuevos ciudadanos haciéndolo pasar como un ataque terrorista de dichos mutantes hacia nosotros -dijo antes de sonreír con diversión- pero no contó que solo bastaban un par de mis primos Kixx que iban de escoltas para aguarle la fiesta -dijo a la vez que información de dicho experimento aparecía en pantalla.
Experimento 601: Kixx. Diseñado para usar sus habilidades de kickboxing y lucha libre para golpear y derrotar a los enemigos. Usado como parte de la fuerza bruta de Rivera Solutions como guardaespaldas y como seguridad.
Bluff TV: Aprovechando que nadie sabía siquiera de su existencia -complemento- no hace falta decir que se expuso los actos del ex candidato presidencial a la casa Blanca en consecuencia a su ataque a nuestros ciudadanos. Además de los detalles de su genealogía a sus compañeros terroristas.
Narizotas Reportero TV: Así como ellos existen otros grupos anti mutantes que no ven con buenos ojos las acciones de nuestro país de abrir nuestras puertas a los mutantes. La iglesia de la humanidad, XENO, William Striker y los purificadores, la liga Sapien, La Derecha. Estos son algunos grupos que existen sólo para erradicar a los mutantes, y por lo tanto, públicamente podemos decir que son enemigos de San Fransokyo -declaró con seriedad.
Bluff TV: Y en relación a esto, se espera que el Consejo Ciudadano de San Fransokyo convoque a una reunión extraordinaria esta semana para definir las medidas de seguridad adicionales y la integración de los nuevos ciudadanos mutantes en nuestra sociedad -anunció con solemnidad, antes de que en pantalla apareciera un gráfico con titulares de última hora.
Narizotas Reportero TV: Y no podemos dejar pasar la noticia internacional: La ONU ha declarado oficialmente que "observará con cautela" la evolución de San Fransokyo como nación independiente, especialmente tras la decisión de abrir las puertas a comunidades mutantes. Algunos países miembros expresaron su apoyo... Otros, claro, temen que este país se convierta en un refugio de "indeseables".
El murmullo en el café subió como una ola tras esas palabras. Algunos clientes asentían con orgullo, otros susurraban con cierta preocupación. Wanda, sirviendo una bandeja con dos capuchinos, arqueó una ceja con ironía.
Wanda: "Indeseables", como si la ONU tuviera moral para dar sermones... -bufo con molestia.
Jean:... Me alegra que Calisto y los demás estén bien... Me sorprende que aceptarán venir a vivir aquí -dijo sabiendo de ellos gracias al profesor Xavier- en lo personal yo me alegro, ellos merecen vivir donde puedan pasear por las calles sin sentirse amenazados.
Pietro: Ni sabía que habían mutantes en las alcantarillas, hay que ver.
Evan: Pues sin tanto ánimo de ofenderlos, ustedes no sabían porque no son del tipo de mutantes que le interesarían a Magneto para su causa -mencionó ganándose una mala cara por parte del otro chico.
A la vez que se pasó a una nueva noticia en el canal en vivo.
Bluff TV: Ahora entre otras noticias. Tenemos novedades. Anoche fue capturado un marine de la armada estadounidense que se infiltró en nuestra ciudad e intentó robarse nuestra reserva secreta de vibranium custodiada por la familia Rivera -reveló para gran sorpresa de los televidentes.
Evan: ¿Un marine?
Narizotas noticiero TV: Pero se preguntaran ¿San Fransokyo tenía una reserva de vibranium? Pues si, fue una estratagema ideada por la princesa Shuri de Wakanda y la señorita Rosa Rivera. Dejada aquí como carnada para ver quienes se atrevían a venir a buscar tal tesoro -declaró con una sonrisa.
Bluff TV: Ahora seguramente algún almirante de flota de la marina estadounidense tendrá que explicar qué hacía uno de sus chicos buscando robar vibranium -exclamó acomodando sus gafas- a lo cual solo basta con saber su historia familiar. El joven Erik Stevens, conocido entre los soldados por el apodo de Killmonger por sus bajas confirmadas. Y que además, tiene un tercer nombre, N'Jadaka, hijo del hermano traidor del actual rey de Wakanda.
Y no hace falta decir que eso dejó más de una quijada desencajada de la impresión. Decir que era una noticia grande era quedarse cortos.
Narizotas noticiero TV: Se preguntarán, "¿Hermano traidor?" Pues sí, resulta que el padre del buen señor Stevens, traicionó a Wakanda al intentar vender armas de vibranium a grupos pandilleros. Resulta que tenía la realidad bien alterada y pensaba que la solución a la pobreza y la discriminación que sufre la gente de color en el mundo, es repartir armas a todos y que procedan a vaciar cartuchos. Idea que le traspasó a su hijo antes de morir.
Bluff TV: Algo muy tonto ciertamente, pues se basó en pensar que los grupos pandilleros a los que intentó vender las armas, las repartirían entre todos los afrodescendientes de sus territorios -dijo con seriedad- ahora el señor Stevens esta en espera de ser trasladado a Wakanda para su debido juicio. Nuestro país respeta profundamente la soberanía de nuestra nación aliada.
Narizota noticiero TV: Eso, y que es divertido pensar en su cara al encarar que si tanto le enorgullece de su herencia wakandiana, tendrá que enfrentar sus leyes -declaró riendo con algo de burla.
El murmullo en el café se volvió aún más intenso tras esa última noticia. Los clientes comentaban entre ellos, algunos con preocupación, otros con entusiasmo, y los Maximoff se encontraron atrapados entre servir platos y escuchar fragmentos de conversaciones que sonaban más como debates de sobremesa que como pláticas casuales.
Cliente universitario: ¿Te das cuenta? Si Estados Unidos ya tenía los ojos puestos aquí, ahora con lo de Stevens no nos quitarán la mirada de encima.
Señora oficinista: ¡Y qué más da! Mejor aliados que enemigos. Prefiero ver a la familia real de Wakanda paseando por la bahía que a otro imbécil yanqui robando recursos -dijo mientras que la pelirroja presente solo meditaba sobre algunas cosas.
Jean:... Debo admitir que eso es algo que me gusta de esta ciudad -exclamó viendo el reportaje- son las noticias nacionales pero al mismo tiempo parece un programa de chismes. Pero con seriedad... La libertad de expresión es bien respetada
Evan: Totalmente... Una nación pro mutantes donde ahora todos vienen aquí a buscar refugio -dijo pensando en voz alta- nosotros, los vengadores, Wakanda, los 4 fantásticos, sin mencionar países como el reino de Achu e incluso facciones escondidas como el clan Drácula y el mundo monstruoso, sin mencionar los rumores de que incluso están haciendo conexiones con realeza de otros planetas... Vaya que el país está ganando influencia rápidamente.
Jean: No me sorprende, ya que buscan ofrecer un lugar donde no haya cosas como discriminación. Eso es algo que la verdad llega a cansar a muchos -mencionó encogida de hombros.
Pietro: En eso te doy la razón, Roja -dijo queriendo seguir en la conversación aunque técnicamente fueran sus némesis al ser un pequeño escape de su actual realidad.
Los meseros ya casi no sentían las piernas. Pietro tamborileaba los dedos contra la bandeja como si quisiera correr, aunque sabía que no podía. Wanda trataba de mantener la calma, pero el incesante sonido de la campanilla y las órdenes gritadas en todos los tonos posibles la tenían al borde de un colapso. Y ese televisor con volumen alto no estaba ayudando.
Narizotas noticiero TV: Y hablando de naciones aliadas. Recientemente las negociaciones de la alcaldesa Saito y el señor Rivera para formar una alianza entre naciones con el reino de Novoselic en Europa Oriental va viento en popa -dijo con emoción llamando nuevamente la atención de la gente.
Bluff TV: Para quienes no lo sepan, Novoselic es un país extremadamente pequeño gobernado por una monarquía absoluta. Aunque a menudo es ignorado por los cartógrafos, alberga una familia real y un castillo que se dice tiene miles de años de antigüedad -comenzó a explicar- tiene una población pequeña y una economía próspera, lo que permite a sus ciudadanos vivir con relativa comodidad. Durante generaciones, la familia real ha protegido al reino y a su gente de los países vecinos, ganando la plena confianza de sus ciudadanos.
Narizotas noticiero TV: Está unión es posible gracias en su mayor parte a la princesa y futura heredera al trono de Novoselic, la princesa Sonia Nevermind. Quien a palabras suyas, busca un país pacífico y sin guerra que se abra a otras culturas... Algo difícil teniendo a Latveria de vecino -dijo con el ceño fruncido por las implicaciones de esa declaración mientras una foto de la princesa era puesta en pantalla.
Bluff TV: Ya que a pesar del gobierno y la protección de la familia real, los golpes de estado y los actos de terrorismo ocurren ocasionalmente en el reino, lo que resultó en que la princesa Sonia Nevermind, fuera víctima de secuestro dos veces por insurgentes en el pasado. Se sospecha que el responsable de esos atentados fue el querido gobernante de Latveria como represalia por no aceptar anexar ambos reinos.
Narizotas noticiero TV: Y por anexar, nos referimos a que Novoselic acepte ponerse bajo la bandera de Latveria, con Victor Von Doom como gobernante absoluto de todo el territorio -aclaró- cosa que si no ha pasado es por que a pesar de su fachada tradicional y apariencia tranquila, Novoselic es un reino bélico extremista. Basta con saber que un curso de guerra moderna es una asignatura obligatoria en las escuelas primarias de Novoselic, lo que ha dado lugar a la extraña norma de que los alumnos de primaria puedan operar un tanque.
Bluff TV: Y, en efecto, esta alianza con Novoselic podría ser uno de los mayores golpes diplomáticos para San Fransokyo desde su declaración de independencia. No sólo por la riqueza cultural y militar de aquel reino, sino por la posición estratégica que representa en Europa Oriental... a sólo un par de fronteras de Latveria -comento- y sí, conciudadanos, es increíble que alguien más que nuestro apreciado Héctor Rivera tuviera semejante idea respecto a tanques -terminó la noticia con algo de humor.
El ruido de los cubiertos contra la loza se mezclaba con el murmullo exaltado de los clientes, que ahora discutían sobre las noticias como si fueran parte del consejo ciudadano mismo. El televisor seguía escupiendo titulares con la naturalidad de quien lanza granadas en plena trinchera.
Hombre de negocios: Si realmente firmamos alianza con Novoselic... ¿Eso no nos convierte automáticamente en enemigos de Doom?
Sra. Matsuda ¡Bah! Que venga, a ver si se atreve. Aquí no estamos solos, tenemos aliados y tecnología que ni imagina -dijo con orgullo en lo que varios asintieron.
Mientras tanto, en medio del vaivén de platos y cafés, Pietro casi dejó caer una bandeja al escuchar la última parte.
Pietro: Genial... como si necesitáramos que un tirano con armadura nos mire mal -murmuró a la vez que su hermana solo le vio con cansancio.
Wanda: Cállate y sirve el café, Pietro.
Evan:... ¿Y la idea es que San Fransokyo sea una nación aliada de ese reino? -preguntó en su conversación por aparte con Jean que estaba terminando su bebida.
Jean: Me gusta pensar que la familia Rivera tiene fe en la princesa y su idea de buscar una relación pacífica con el resto del mundo... pero, no deberíamos subestimarlo. Victor Von Doom no es cualquier dictador... es un genio, y un brujo. Y ambos al mismo tiempo. Si San Fransokyo empieza a moverse demasiado en la política internacional, Doom lo notará. Y créeme, no queremos que lo note.
Pietro: Apuesto a que todo esto es porque el flacucho quiere probar lo de conducir un tanque, estoy seguro.
Wanda:... No, su objetivo es Doom. No sé porque pero siento que ese es el plan a largo plazo -exclamó teniendo un mal presentimiento ante la sola idea de pensar cómo podría acabar todo.
Jean: Dada la amenaza que es Doom para el mundo, no me sorprendería.
Evan:... Y parece que pasamos de los reportajes importantes a noticias nacionales primero -dijo observando que en el noticiero se habla de la posibilidad de que el país entre en negociaciones con la Federación Galáctica Unida con la visita de la gran Concejal ese día-... Eso hay que reconocerle al señor Rivera, el hombre no piensa para nada en pequeño.
Pietro: Que tenga cerebro pequeño tal vez, pero ideas no -mencionó decidiendo parar un momento al estar harto y cansado- conocí al hombre en persona, tengo derecho a opinar así. El tipo es un payaso, pero es muy raro. Actúa como un bufón pero puede fácilmente cambiar de actitud... Es raro -mencionó pensativo antes de solo ver con decisión al moreno- y hablando de conocer, cómo sé que estás aquí para verme fallar, Daniels, no sólo te lo agriaré no dándote ese gusto, sino al doble.
Evan: ¿Ah sí? Ya veremos, te escuché gritar exasperado hace solo un momento cuando saliste a tomar aire. Y es apenas el desayuno ¿aguantaras hasta la cena? -preguntó sonriendo con malicia- ¿y exactamente cómo me lo vas a "agriar al doble"?
Pietro: Porque estoy seguro de que también viniste a babear por el sobrino de la dueña, y malas noticias, pero salió, por eso estamos Wanda y yo aquí -comento seguro de lo que estaba diciendo.
Habiendo más que todo escuchado rumores de que tras averiguar la orientación sexual del nipón sobrino de Cass, hubo más de uno que comentó que solo por él tal vez se replantearon su sexualidad, al parecer el chico causó una buena impresión en la fiesta del té de Rivera Solutions.
Evan: Y adivino, tu estas igual de decepcionado -pregunto no dejándose amedrentar.
Pietro: ¿Para qué negarlo? ¿Le viste su trajecito en la gala? -pregunto solo para ganarse un golpe en la espátula cortesía del robot que fue a buscarlo para que siguiera con el trabajo.
Jean: Solo bésense ustedes y ya. Acaban de confesar que ni tienen problema en ir al otro barrio -dijo logrando que ambos se vieran con desagrado antes de quejarse indignados por la reacción del otro.
Wanda: Ay, por el amor de Dios, son patéticos -comentó llevando unos platos de vuelta a la cocina.
Jean: Ni que lo digas -exclamó para que luego ambas chocaran los cinco.
Wanda;... Oye, ya hablando contigo hasta caes bien.
Jean: Igualmente, Wanda -dijo con una sonrisa.
Siendo de ese modo que la mañana transcurrió hasta que la hora del desayuno terminó y solo quedaba preparar todo para el almuerzo. Momento en que ambos hermanos casi que rogaron de rodillas por un descanso, cosa que el robot acepto ya que no quería bajas por defunción el primer día... y no, a sus ojos no era un chiste.
—
(Unos minutos después)
Pietro: ¿Cómo la gente hace esto a diario? No siento el cuerpo, la cabeza me revienta y solo quiero dormir ¡trabajar es horrible! -dijo a nada de llorar tirado en el sofá del segundo piso.
Wanda: Bienvenido a la vida cuando no tienes súper velocidad.
Pietro: ¡Es horrible, no me gusta! ¡Antes de esto nunca me había cansado así, jamás! -dijo haciendo una rabieta digna de un niño de cinco años.
Wanda: Ya deja de quejarte, si quieres culpar a alguien, culpa a papá por criarte para usar tus poderes para todo -dijo cruzada de brazos, fastidiada por la actitud de su mellizo- ... A mí más bien hasta me gustó. La gente fue amable en todo momento y hasta nos dieron propinas
Pietro: ... Lo admito, se siente bien no ser vistos con sospecha -dijo parando un momento con su berrinche- pero no se si podré aguantar esto. Lo que me motiva es no ver esa sonrisa de satisfacción en la molestia cara de Daniels
Wanda: Pues aguántate y velo como que es cosa de acostumbrarse a moverse a ritmo normal, sin tu velocidad -dijo solo recibiendo como respuesta otra pataleta.
El peliblanco aún se revolvía en el sofá, con el cabello hecho un desastre y la camisa manchada de café, cuando el crujir de la madera de las escaleras anunció la llegada de alguien.
Cass: Así que... estos son mis nuevos meseros, ¿eh? -dijo la dueña del café, apoyada en un bastón improvisado mientras bajaba lentamente, con el tobillo vendado. Lo que hizo que ambos jóvenes abrieran los ojos de golpe.
Wanda: ¡Se supone que debería estar descansando!
Cass: Descansar es para muertos, cariño. Además, si dejo a Robbie al mando todo el día, terminará echándole aceite de motor a los panqueques -comentó divertida en lo que desde la cocina se escuchó un reclamo sobre que fue un error y que era aceite vegetal en una lata equivocada.
El chico Maximoff, al ver a la mujer avanzar cojeando, se incorporó medio preocupado, medio resignado.
Pietro: ¿No le prohibieron trabajar?
Cass: Me prohibieron correr maratones, escalar montañas y bailar salsa. Atender mi propio negocio no estaba en la lista -dijo divertida tomando asiento cerca de ellos, suspirando con una sonrisa agotada- así que... Wanda, Pietro. ¿Cómo va su primer día en el infierno con olor a café recién molido?
Pietro: ... Prefiero enfrentarme a un ejército de anti mutantes o robots -refunfuñó, dejando caer la cabeza hacia atrás-. al menos ahí puedes correr o luchar. Aquí sólo puedes... sonreír.
Wanda: Él no se adapta fácil, pero... estamos sobreviviendo -dijo de una forma más cortés, disimuladamente dándole un zape a su hermano.
Cosa que hizo a la mujer mirarlos un segundo con calma, como midiendo sus palabras.
Cass: Miren, no voy a fingir que esto es fácil. Ni para ustedes, ni para mí. Pero el trabajo tiene un sentido. Los clientes no vienen solo por comida. Vienen porque aquí se sienten a salvo, como si este lugar fuera un hogar más. Y ustedes... les guste o no, forman parte de eso ahora -dijo sonriendo con amabilidad, lo que incomodó un poco a los adolescentes.
El silencio quedó unos segundos, roto únicamente por el zumbido de la cafetera en el piso de abajo. Pietro rodó los ojos, pero no pudo evitar que la frase le hiciera eco. Wanda, en cambio, mantuvo la mirada fija en Cass, como si le interesara realmente.
Wanda: ¿Y por qué confiar en nosotros? Somos... bueno, éramos parte de la Hermandad.
Cass: Porque todos merecen una segunda oportunidad. Y si no se la doy yo, ¿quién lo hará? -pregunto de forma casual.
A la vez que las escaleras sonaron nuevamente, esta vez por un robot que perfectamente podía ser confundido con algún fantasma o malvavisco viviente...verlo daba ganas de abrazarlo.
Baymax: Eso es porque tía Cass los vio, y no vio a los hijos de Erik Lehnsherr -dijo acercándose a la mujer mayor que hizo puchero de niña pequeña al saber lo que iba a pasar- todo lo que vio, fue a dos jóvenes que necesitaban una oportunidad para ser mejores, y ella no necesito saber más... ya habíamos de esto, Cass. Debes descansar y mantener reposo para no agravar más la lesión.
Cass: Si, ya se... solo llévame -dijo para luego ser cargada como si fuera una bebé por el robot- un gusto conocerlos, chicos -dijo para luego ser llevada de vuelta a su cama por el robot, susurrando de una forma muy pobre- solo quería animar un poco a los nuevos. Quiero que se sientan a gusto, para que así los clientes se sientan a gusto con ellos y viceversa... ya lo sabes, hice la promesa de cuidar esta familia.
Baymax: Y yo ya había mencionado que pueden encontrar otros cafés, pero no encontraran a otra Cass -dijo de un modo gentil antes de que los dos se pierdan de vista.
Dejando a los Maximoff perdidos en sus pensamientos. Ya que ellos podían fácilmente darse cuenta de cuando una persona normal era mentirosa, convenenciera o lambiscona. Pero eso... eso fue genuino al cien por ciento.
Wanda:... Con que así se ve una figura paterna o materna que si te prioriza a ti...
Pietro: ... Se ve agradable, ¿Verdad? -preguntó con la mirada baja antes de soltar un suspiro- creo... Que puedo acostumbrarme a ir paso a paso... Más normal.
Wanda: ... ¿Sabes qué es lo peor? –murmuró– Que no está actuando. Todo lo que dijo... lo cree de verdad.
Pietro: ... Sí. Y es raro. Muy raro. Estoy acostumbrado a que los adultos quieran usarnos, o encerrarnos, o sermonearnos. Pero esa señora... sólo quería que estemos bien.
Wanda lo observó de reojo, sorprendida de escuchar sinceridad en el tono de su mellizo. Normalmente él se escudaba en la burla o el sarcasmo, pero ahora parecía... ¿vulnerable?
Wanda: No es raro, Pietro. Es humano... puede valer la pena quedarnos aquí -dijo en lo que él se encogió de hombros con incomodidad- ... ¿De verdad quieres ligarte al sobrino, no?
Pietro: ... Sin comentarios -fue todo lo que respondió para luego dejarse caer en el sofa de nuevo.
Wanda: Si me preguntas creo que Jean tiene razón. Evan te tenía ganas y le rompiste el corazón, por eso está así de ofuscado contigo -mencionó a la vez que el albino bufo.
Pietro: Meh, exageras, tal vez sólo me admiraba porque, admitámoslo, era el más genial de la escuela -declaró con una sonrisa de orgullo.
Wanda: Y mira a donde te llevo esa genialidad -exclamó con sarcasmo matando el buen humor de su hermano.
Pietro: Sí, ya sé, ya sé -dijo con molestia- igual exageran, las dos... Y si hubo algo... Ya no, lo que fuera, hace mucho murió.
Wanda: Gracias a tu estupidez, cabe agregar.
Pietro:... También te quiero, hermanita.
Si, la relación de ambos no era la mejor. Pero con todo se debían aguantar, a fin de cuentas, el uno al otro eran todo lo que tenían.
Wanda: Sólo soy sincera -dijo estirando los brazos- en todo caso podemos decir que nos fue bien. Fuimos los primeros a los que les encontraron un trabajo y acabó siendo un lugar agradable.
Pietro: Bueno, técnicamente somos los segundos, a Blob ya lo tenían fichado para trabajar en construcción y demolición. Un trabajo perfecto para él -dijo divertido antes de ver al techo fijamente- ... tal vez... Este país no es tan malo.
El reloj marcaba las once de la mañana y el aroma a café recién molido se mezclaba con el de tostadas y panqueques en el aire. Ambos hermanos estaban todavía en el segundo piso, recobrando fuerzas, cuando de la nada.
Robbie: Bien, ahora que están descansados ¿listos para la segunda ronda? El almuerzo no se va a servir solo.
Pietro: ¡¿Segunda ronda?! ¡Pero si apenas sobrevivimos al desayuno! ¡¿Ya es la hora?!
Wanda: Pietro... respira. Todo paso a paso.
Robbie: ¡Esa es la actitud Wanda! Y buenas noticias: el cliente del sushi especial está llegando, y parece que quiere probar nuestro nuevo menú de temporada. Así que... ¡en marcha! -dijo bajando de nuevo esperando que los dos jovenes se le unieran pronto.
Los cuales sólo intercambiaron una mirada en silencio. Pietro murmuró algo sobre "querer desaparecer bajo la mesa", mientras Wanda solo suspiraba, resignada pero determinada.
Wanda: ...Creo que vamos a necesitar más que magia para sobrevivir este día.
Pietro: ...Sí... y si sobrevivo, prometo no volver a quejarme... demasiado -dijo, sin mucho convencimiento. Para luego los dos terminar soltando una risa cansada.
Ambos Maximoff, a su manera, estaban empezando a encontrar su lugar... y quizás, por primera vez, sentir que podían ser algo más que fugitivos con habilidades extraordinarias para variar.
________________________________________________________________
(Miguel Pov)
(Campamento Lakebottom, Canadá)
Bien, repasemos un poco ¿exactamente como acabé aquí con mi prima?
Si, todo comenzó con el conde Drácula, quien le mencionó al viejo la idea de expandir su marca del hotel al negocio de los campamentos de verano. Siendo la fuente de esa idea una vieja carta que encontró en entre montañas de papeleo sin revisar en décadas que hablaba de un campamento en Canadá administrado por monstruos que tenía la meta de recibir campistas tanto humanos como monstruos, haciendo honor a los deseos de la difunta esposa del conde, Lady Martha.
Una idea que en un pasado no muy lejano Drácula nunca habría aceptado por su recelo a la humanidad. Pero con la verdad revelada sobre lo que le pasó a su esposa, en mejor momento no pudo llegar esa carta (oh bueno, ser encontrada). Y como mi viejo tenía una reunión importante que no podía cancelar, decidió mandarme a mi en representación de la empresa en compañía de Rosa como un favor al clan Drácula. Idea de ella por cierto.
Rosa quería que desde ya empezará a asumir responsabilidades dado a que por lógica, cuando cumpliese la mayoría de edad, la empresa familiar sería pasada a mis manos. De allí que no me pude negar cuando practicando me arrastró hasta aquí... bueno, eso y que mi prima podía darme miedo fácilmente... preferiría estar con Hiro ahora.
Miguel: Ah... Huele eso Rosa, ese olor a aire libre y puede que a más de un desecho, nada como el campo -dije de forma genuina una vez puse un pie en el lugar. No me avergüenza decir que me gusta la naturaleza.
Rosa: Huele a tu habitación, la verdad -dijo divertida en lo que yo solo fruncí el ceño. Y con todo es blanda conmigo, con mi padre su lengua es mucho más afilada.
Rosa rodó los ojos ante mi comentario, pero no dijo nada. Caminábamos por un sendero de tierra que se adentraba entre árboles altos y densos. El aire estaba cargado de esa mezcla de madera húmeda, musgo y algo que... definitivamente no era flora, sino algo mucho más putrefacto.
Siendo ese el momento en que de todo lo que podían esperar, justo enfrente de nosotros fue que salió un zombi con todo y una motosierra en uno de sus brazos. A lo cual, lo que muchos hubieran esperado como la reacción nuestra, de simples humanos, ante ese suceso sería desde el pánico al miedo. Pero no, lo que ambos hicimos fue solo verlo fijamente, para luego yo solo tomar al zombi de los hombros y meterlo de nuevo al agujero de donde salió.
Miguel:... Para dentro -fue todo lo que dije para luego seguir caminando como si nada. Lo que hizo que el Zombi volviera a salir indignado.
??? (Sawyer): ¡Oye, eso fue racista e hirió mis sentimientos, los zombis no pasamos todo el día enterrados! -reclamo en un idioma perfectamente entendible para nuestra sorpresa.
Rosa: Ah, mira nada más, debe ser Sawyer, uno de los consejeros -dijo haciendo una leve reverencia- es más inteligente que los zombis del hotel. Tiene más movilidad y habla... Me pregunto si será por la ausencia de cerebros en la dieta
Miguel: ¿Qué? ¿Mientras menos sesos come más listo? -pregunte curioso.
Rosa: Si, según algunos estudios recientes, resulta que los cerebros causan en los zombis un efecto adverso, despertando sus instintos más primitivos -dijo en lo que ambos pensamos por igual en lo irónico que era eso.
Sawyer: Ah, veo que saben mucho de zombis -dijo ya más calmado- ¿Son fanáticos?
Miguel: Algo así, me parece que el conde envió una carta avisando que vendríamos -dije para la sorpresa del ser sobrenatural.
Sawyer: ¿Conde?... Un momento... ¿Vienen del hotel? -pregunto a la vez que otro de los consejeros, un pie grande, llegó casi pareciendo una estampida ¿Qué tan buen oído tiene?
Armand: ¿Hotel? ¿El Hotel Transylvania? -pregunto con emoción.
Mientras que Rosa y yo estábamos con una alegría similar, pero más que todo por ver finalmente a un pie grande a la cara al ser de tamaño normal. No tenía idea de con que alimentaban al del hotel pero era tan grande y peludo que literalmente solo se le veían los pies.
Rosa: Es como ver a mi tío en calzoncillos -comento en lo que yo no pude evitar reconocer que aunque era ofensivo, también era verdad.
Armand: En fin -dijo sacándonos a ambos de nuestros pensamientos- por favor estimados invitados, acompáñenos, nuestra cocinera preparó un banquete especial para ustedes -exclamó haciendo reverencia a la vez que el zombi le susurro en voz baja.
Sawyer: Te aseguraste de que McGee y Squirt distrajeran a Rosebud mientras Gretchen pedía a domicilio, ¿Verdad? -cuestionó al peludo que solo levantó el pulgar.
Miguel: Oh, un banquete, eso me agrada... Mientras no sea a base de cerebros o gusanos, todo está bien..
Rosa: Tú solo agradece, Miguel -dijo con esa calma suya que a veces raya en sarcasmo-. y trata de no hacer chistes sobre los ingredientes, recuerda que aquí lo raro somos nosotros.
Yo iba a replicar, pero de pronto el sendero se abrió hacia una explanada amplia donde se alzaban cabañas viejas de madera y un comedor principal que parecía más grande que el resto. Había banderines de colores colgando entre los árboles, y mesas al aire libre, preparadas con manteles que seguro alguna polilla ya estaba disfrutando.
Donde había una cocinera de aspecto humano con un festín monstruoso en todo el sentido de la palabra y tres jóvenes humanos atados, al parecer habían intentado evitar que cocinara, fracasando en la misión.
Rosebud: Estimados invitados del hotel Transylvania, sean bienvenidos, soy la humilde cocinera del campamento y este es mi famoso guiso de grillos y libélulas, acompañado de batatas con lombrices en su punto. Y de postre helado con hormigas picantes.
Bueno... debo decirlo, cuando vi aquella mesa servida con insectos fritos, lombrices cocidas y un helado que parecía tener vida propia, tuve que respirar profundo para no mostrar demasiado asco. Rosa, por su parte, mantuvo la compostura como si estuviera en una cena de etiqueta.
Miguel: ¿Eso que se mueve todavía es postre? -susurre a mi prima que solo me reprendió.
Rosa: Cállate y sonríe.
A su vez, los tres chicos humanos atados parecían querer gritar que no probáramos nada, aunque sus mordazas solo dejaban escapar ruidos ahogados. La cocinera por su parte los ignoraba con toda la calma del mundo mientras removía el guiso con una cuchara de hierro oxidado.
Sawyer: ¡Bah! No se preocupen, Rosebud siempre exagera con el menú. La mitad de las veces el guiso ni siquiera está vivo.
Armand: Y lo otro... bueno, técnicamente solo está medio vivo -dijo queriendo darnos ánimos en lo que Rosa me dio un codazo para evitar que dijera algún comentario con sarcasmo.
Rosebud: Es un honor recibirlos, invitados del conde. ¡Nuestro campamento ha esperado este momento por décadas! -hizo una pausa dramática de su presentación ceremoniosa, levantando un cucharón de guiso que goteaba un caldo de lo más peculiar ¡Ahora, prueben!
Los ojos de todos los consejeros estaban puestos en nosotros. Y no solo de ellos: de los tres humanos también, que nos miraban como diciendo ni se les ocurra. Pero eso al parecer no era una opción.
Miguel: ...Rosa, damas primero -dije más que todo queriendo devolverle una de tantas desde que nos conocíamos. Lo que ella como respuesta me dio una sonrisa helada, se podía sentir la burla y el reto en ella de una forma un tanto inquietante.
Rosa: Claro, Miguel, que caballeroso de tu parte.
Ella tomó una cucharada del guiso, se lo llevó a la boca y, sorprendentemente, no escupió nada. Solo cerró los ojos, masticó despacio y luego dijo con la voz más firme que he escuchado en mi vida.
Rosa: Delicioso. Sabor... terroso, con un toque de madera húmeda.Con todo sabe mejor que la comida de mi tío. El tiene una orden judicial de no volver a cocinar.
Miguel: Según me contó él dice que la mayoría son unos llorones, que no soportan un chili de cinco alarmas -dije mientras también comía un poco, descubriendo que en realidad no estaba tan mal el menú, en lo que ella se encogió de hombros.
Rosa: Soporto un chili de cinco alarmas que no me mande al hospital, muchas gracias -dijo antes de que ambos notaremos a la vieja cocinera del campamento al borde del llanto.
¿Ahora que? ¿Ya metimos la pata?
Rosebud: Es tan conmovedor para mí ver a tan satisfechos comensales -dijo mirando los platos vacíos. Ah, así que era eso.
Miguel: Veo que usted y mi padre comparten la maldición de que no aprecien sus dones culinarios... En fin ¿estos jóvenes son los campistas a su cargo? ¿sólo tres? -pregunte mirando a los chicos que estaban siendo desatados por los dos consejeros masculinos.
Armand: No somos muy populares -fue todo lo que dijo como explicación, lo que en realidad era entendible ya que se notaba solo con ver el estado de las instalaciones.
Rosa: Porque han errado su enfoque, buscan hacerse nombre en el mundo humano cuando es más que obvio que su campamentos es más para el mercado monstruoso -dijo dejando en claro lo obvio para ella.
Armand: Es que buscábamos abrirnos a los humanos.
Sawyer: Por eso nos sorprendió tanto cuando recibimos una carta de su señoría, el conde Drácula, uno de los seres con mayor aversión a los humanos, diciendo que enviaría a dos humanos para hacer negociaciones -comentó en lo que Rosa y yo arqueamos una ceja.
Oh aquí la señal es muy mala, los murciélagos, o cualquier animal y medio de comunicación antiguo no llegaba, o simplemente estaban desconectados del todo de prácticamente ambos mundos ¿no lo sabían? Era el boom del siglo entre los monstruos según nos contaron algunos de ellos.
Miguel: ¿No están al tanto de las noticias? -pregunte a la vez que los campistas, tras presentarse, se unieron a la conversación.
Gretchen: Le está hablando a monstruos qué posiblemente no han dejado el campamento desde el movimiento hippie en los 60's -comentó la chica del trío que se notaba que era fan de la moda gótica hasta cierto punto.
Squirt: Con decir que Armand apenas sabe de las nuevas obras teatrales -mencionó el más alto y pachoncito de los tres... ah, vaya voz más aguda.
Rosa: Para resumir -dijo tomando la palabra- la hija de Drácula desposó a un ser humano.
Cuando ella terminó la oración, el silencio que cayó fue tan pesado que hasta los grillos en la comida dejaron de moverse. Todos los consejeros se quedaron con la boca abierta, y los tres campistas humanos se miraron entre sí con cara de "esto se va a poner bueno".
Armand: ¡¿QUEEEE?! –rugió con tanta fuerza que las banderitas de colores se desprendieron de los árboles.
Sawyer: ¿La hija de Drácula... con un humano? ¡Eso es imposible! ¡Eso es casi tan sorprendente... como... ponerle piña a la pizza!
Rosebud: ¡Sacrilegio culinario y sentimental al mismo tiempo! -exclamó en lo que más de uno arqueo la ceja ¿no le gusta la pizza con piña? Ah, hasta ella tenía un punto débil al parecer.
Miguel: Y ya tuvieron un hijo, Drácula es abuelo teniendo un nieto mitad humano. Ah... Y resulta que la muerte de Lady Martha no fue a mano de un humano, fue a manos de un monstruo sirviente de Vlad Drácula -dije para gran impacto de los tres.
La tensión que se formó después de mis palabras fue tan espeso que se podía cortar con una motosierra... y Sawyer la tenía, así que era un riesgo real.
Armand estaba rojo de indignación ante la noticia (bueno, rojo y peludo, parecía un peluche diabético a punto de estallar). Rosebud se aferraba al cucharón como si fuera un cetro, temblando entre la rabia y el shock. Y Sawyer... bueno, Sawyer nos miraba como si acabáramos de decir que los zombis podían enamorarse de aspiradoras industriales.
McGee:... Oigan ¿de que nos perdimos? Suena a que eso es algo importante -menciono el último de los chicos que faltaba por hablar, quien parecía preocupado por las reacciones de sus personas encargadas al igual que los otros dos.
Gretchen: Si, ¿Qué pasó?
Rosebud: Lady Martha fue la esposa de Lord Drácula, en todo el mundo monstruoso se decía que en los últimos siglos no había pareja más enamorada -narro con tristeza- Lady Martha fue una simpatizante de los humanos, creía que monstruos y humanos podíamos trabajar y convivir juntos.
Sawyer: La muerte de su Señoría fue un golpe realmente duro para toda la comunidad de monstruos -dijo sonándose la nariz por el recuerdo.
Armand: Fue tal el impacto que la gran mayoría de monstruos se escondieron de los humanos. Solo unos pocos que decidimos mantener vivo el sueño de su señoría decidimos hasta la fecha tratar de hacer realidad su sueño -exclamó limpiándose las lágrimas- de hecho hace décadas mandamos una invitación para que Lord Drácula viniera al campamento para que nos diera su opinión aun a riesgo de que nos quisiera matar por la sola idea.
Rosa: Si, él de hecho manda sus disculpas. Lo que pasó fue que dicha invitación se perdió en montañas de correspondencia sin revisar -explico en lo que el trío de consejeros solo parpadearon con incredulidad antes de mirarse entre sí.
Armand: ... Te dije que debíamos pagar más por el envío directo -reclamó al zombi que se cruzó de brazos con indignación.
Sawyer: Y yo te digo que eso era un robo a mano armada -se defendió.
Vaya, menudo dúo de payasos son estos dos.
Gretchen: Entiendo, los monstruos se escondieron de los humanos por miedo y también porque fue un humano quien mató a su señoría, Lady Martha... Pero eso resultó ser mentira -mencionó ya teniendo una comprensión bastante acertada de lo que pasó.
Rosa: Básicamente -confirmó acomodando sus gafas- el verdadero culpable fue un sirviente del clan Drácula que era un supremacista que consideró a Martha una traidora por juntarse con la humanidad.
Miguel: Exacto, fue un monstruo, alguien cercano... y no un humano. Todo lo que pasó después se basó en una mentira -dije todavía molesto por la osadía que tuvo ese infeliz de decir que lo que hizo era algo que se debía hacer.
Las palabras quedaron flotando en el aire como si fueran dinamita. Armand parecía un oso a punto de reventar de indignación, Sawyer mantenía la motosierra encendida sin darse cuenta, y Rosebud parecía debatirse entre llorar o aventar cuanto.
Miguel: Lo importante aquí es que la visión de Lady Martha no murió. Su marido, el conde Drácula, la aceptó al final. El hotel se abrió a los humanos y, para sorpresa de todos, ¡funciona! Es un negocio próspero dije con una sonrisa ensayada- los monstruos buscan comenzar a abrir puentes con el mundo humano, y Drácula personalmente está interesado en que el campamento Lakebottom sea una subsidiaria del hotel Transylvania.
Y no hace falta decir que los 3 pasaron de la tristeza, el enojo y la indignación a parecer como si hubiesen ganado el mundial o las olimpiadas, y eso era quedarse cortos.
Rosebud: Sería un tremendo honor -respondió haciendo reverencia junto a los otros dos.
Rosa: Eso incluye mover el campamento a San Fransokyo lo más pronto posible -mencionó dándoles un contrato- allí estarían todos los detalles.
Aunque, no era ninguna mentira decir que los tres consejeros parecieron quedarse de piedra al leer la palabra San Fransokyo en el encabezado del contrato.
Armand: ¡¿Mover el campamento?! –rugió con tanta fuerza que pensé que derribaría todas las cabañas.
Sawyer: ¡Eso es como... como decirle a un zombi que se bañe en agua bendita! –protestó, encendiendo de nuevo su motosierra como si fuera un reflejo nervioso.
Rosebud: ¡Pero este es nuestro hogar! ¡Aquí Lady Martha nos visitó en sueños y nos inspiró a mantener vivo su ideal! –dijo llevándose las manos al pecho como si fuera una heroína de telenovela.
En lo que por su parte Rosa, con toda la calma del mundo, ajustó sus gafas y replicó:
Rosa: Con todo respeto... si se quedan aquí, nadie sabrá nunca de su existencia. El sueño de Lady Martha no era esconderse en el bosque para siempre, era que los humanos y los monstruos convivieran en armonía. Y eso se logra donde ambos mundos se cruzan... no en medio de la nada.
Miguel: Piensen en esto como una evolución, no un reemplazo. El campamento puede mantener sus tradiciones, pero con mejor infraestructura, acceso a más campistas y... bueno, sin riesgo de que algún insecto gigante o plaga se coma las camas con todo y niños -dijo en lo que los tres se miraron con algo de resignación reconociendo el punto para luego revisar a fondo el contrato.
Rosebud: ... ¿Qué?... ¿Tendremos nuestra propia isla? -pregunto sorprendida.
Rosa: Como tal el país es de puertas cerradas. Pero su isla estaría justo en los límites entre San Fransokyo y Estados Unidos permitiendo niños de Estados Unidos, México, Canadá, etc. Siempre y cuando permanezcan en la isla y no se vayan de allí a más adentro del territorio de la ciudad -explicó- aparte de que será gente de confianza, pueden estar tranquilos.
Era una oferta muy buena para ser verdad si era honesto. Más recursos, más campistas y más oportunidades. Además de que podrán conservar todo lo que les gusta, incluso replicar las rutas del bosque en un área protegida. El contrato incluye presupuesto para importar flora y fauna del ecosistema local, solo para empezar... aunque algunas cosas si necesitaran papeleo adicional.
Armand: ...Una isla propia, con acceso a áreas seguras para fogatas nocturnas y espacio suficiente para nuevos campistas... -gruñó rascándose la barbilla peluda-. ¡Eso suena glorioso!
Sawyer: Suena razonable -dijo mirando al trío- ¿ustedes que dicen, campistas?
Gretchen: ¿Por qué nos preguntan? Ustedes son los consejeros -respondió en lo que los demás edad solo sonrieron con cariño.
Armand: Pues si pero aparte de que son los primeros y únicos campistas qué hemos tenido, son tan parte de Lakebottom como nosotros.
McGee:... Eso significa ya no tener el campamento sonrisas justo en frente... -lo medito antes de sonreír de oreja a oreja- ¿Cuándo nos vamos?
Rosebud: Es cierto, está el asunto del lago -dijo pensativa pero con cierto tono de angustia.
¿Ahora que paso?
Rosa: ¿El lago? -cuestiono.
Sawyer: Además de nuestra amiga Fangosa, la criatura del lago, hay muchas cosas habitando en el lago, cosas que no podríamos confiar al Campamento Sonrisas -declaró también pensativo.
Rosebud: Con decirles que el imbécil de Buttsquat liberó al cangrejo gigante de la zona de aguas tóxicas, al pasarse por lo que le da el nombre que su padre y nosotros declaramos el lago zona neutral y tomar las boyas que mantenían esa zona separada para "reclamar" el lago para el Campamento Sonrisas -recordó en voz alta para nuestra sorpresa.
McGee: Aún quiero golpearlo por creerse con derecho de multarnos por "entrar a aguas del Campamento Sonrisas" -dijo con el ceño fruncido.
Vaya que el tal Buttsquad sonaba como todo un imbécil... y algo me dice que es apenas la punta del iceberg.
Rosa:... Sencillamente construiremos una presa qué rodee la parte acuática de la isla hasta cierto punto, trasladaremos todo lo que esté aquí, allí -declaró con tranquilidad terminando un vaso de agua- aunque podemos también dejar esa zona de aguas tóxicas y dar el pitazo a las autoridades, si el tal Buttsquat quiere reclamar el lago para el Campamento Sonrisas, que responda porqué hay un campamento juvenil cerca de donde se tiran desperdicios tóxicos,
Miguel: De hecho -mencioné recordando algo que lei de la información sobre este lugar y sus alrededores antes de venir- conozco una forma más divertida para molestarlos... ¿Alguno sabe por qué el campamento sonrisas es lo que es? ¿Cómo tiene tantos lujos y ventajas tecnológicas? -pregunte a la vez que los más jóvenes lo meditaron.
McGee: Porque el papá de Buttsquat es rico, lo sabemos, no deja de presumir al respecto.
Squirt: Trae las cosas que les dan sólo para recordarnos que no las tenemos aquí -dijo con tristeza.
Rosa: Si, pero ese campamento rico por el campamento Lakebottom -dijo ganando la atención de todos- el campamento sonrisas es realmente un puesto de observación del gobierno canadiense disfrazado de centro de recreación juvenil, el gobierno le paga millones al papá de Buttsquad solo para "mantener a raya" a los horrores de Lakebottom.
Si, no hace falta decir que lo que le siguió a esas palabras soltadas por mi prima fue la pura indignación e incredulidad.. Todos (consejeros y campistas) nos miraban con los ojos como platos, como si hubiéramos soltado la revelación más grande desde que Frankenstein aprendió a usar zapatos con cordones.
Armand: ¡¿Quéeeé?! –rugió como si acabaran de decirle que la miel estaba en peligro de extinción. Si, me estoy pasando pero es que me sentía inspirado.
Sawyer: ¡Eso es un insulto al verdadero espíritu del campismo! –gritó agitando la motosierra de un lado a otro- ¡Un campamento debe oler a sudor, leña y repelente, no a burocracia!
Rosebud: ¡Y mucho menos a privilegios comprados con dinero sucio! –añadió golpeando la mesa con el cucharón como si fuese un martillo de juez.
Rosa: ¿Me dirán que no les parece raro que teniendo tanto dinero un campamento como ese decidiera estar justo en esta misma área de todos los lugares? Y que abriera poco después de que ustedes abrieran su propio campamento? -recalco.
Había que reconocerlo, eran demasiadas coincidencias para ser solo una casualidad.
McGee:... Osea que Buttsquad se la pasa fastidiandonos la vida, presumiendo todo lo que sonrisas tiene... ¿Y resulta que la única razón de que tenga todo lo que tiene es justo por Lakebottom? ¡Ese pedazo de...! -exclamó con rabia en lo que sus amigos intentaban apaciguar su enojo.
Miguel: Pero allí está la belleza de esto -dije con cierta malicia- si Lakebottom se va, Sonrisas no tendrá más patrocinio del gobierno, no más dinero, no más fortuna, no más sonrisas.
Gretchen: Me gusta. Mucho -dijo con calma, pero su sonrisa la delataba, estaba emocionada- es la venganza con más estilo que he escuchado. Ese niño mimado se quedará sin sus lujos y sin su falso reino de plástico.
Rosa, como siempre, permanecía impasible, aunque noté que escondía una sonrisita de autosatisfacción mientras observaba cómo todos iban encajando las piezas del rompecabezas.
Rosa: Exacto. Si Lakebottom se traslada, Sonrisas pierde su "razón de ser". Y con ello, el financiamiento que lo mantiene en pie. El papá de Buttsquat no podrá sostener las instalaciones por sí mismo... y entonces todo se derrumbará.
McGee: Vaya, casi siento lástima por Buttsquat... pero me acuerdo de que si estamos aquí en Lakebottom, es porque él no sólo no nos dejó subir al autobús que iba a Sonrisas, y hasta a medio camino nos hizo desviarnos para acá, y se me pasa.
Rosa: Qué encanto... -ni se molestó en disimular su desagrado- y si como cereza del pastel mencionamos la demanda por tener un campamento cerca de aguas tóxicas...
Miguel: Pero... háblenos más de eso que de por él están aquí, por favor -dije ya con más interés sobre las acciones de este cabrón con nombre de trasero.
Gretchen: Pues originalmente íbamos al Campamento Sonrisas, pero Buttsquat decidió que no éramos lo bastante buenos para ir -aclaro con molestia.
Squirt: Yo lo agradezco, gracias a la maldad de Buttsquat conocimos a Rosebud, Sawyer, Armand y Fangosa -dijo, remarcando que de los tres era el optimista del grupo.
Miguel: Pero para aclarar ¿Se inscribieron a Sonrisas, no? -pregunte mientras que ellos asintieron- O sea que el destino del campamento cambió porque a un mocoso malcriado no le gustaron sus caras. Eso significa que en todo este tiempo el campamento no recibió a tres campistas y nadie hizo ni reportó nada a las autoridades o los padres.... interesante.
McGee: De hecho en nuestro primer día intentamos ir al Campamento Sonrisas, no nos recibieron precisamente con un tazón de helado.
Lo que acabó causando que mi querida prima mostrará su mirada de "hora de hacer valer mi conocimiento en leyes". Justo lo que quería.
Squirt: Helado... -dijo con pesar por el recuerdo del suceso.
Rosa: Momento que mi primo es lento y medio, ¿Dicen que los del Campamento Sonrisas SON CONSCIENTES de que ustedes son los campistas que les faltan, y los han tratado con hostilidad? -pregunto recibiendo confirmaciones en respuesta- ... no saben como adoro el olor a una demanda millonaria.
McGee: ¿Demanda millonaria? -pregunto en lo que asenti.
Miguel: En particular, mi prima es experta en demandar a otros. Ambos pensamos que si el papá de Buttsquad tiene tanto dinero, ¿por qué no perder unos cuantos millones siendo demandado por el asunto de las aguas y por el trato del campamento a ustedes tres? Más si, como ustedes plantean, los del Campamento Sonrisas son conscientes de que ustedes son los chicos a cuyos padres les cobraron lo que imagino no fue una cantidad pequeña para que les dieran cupo, y que estaban en su derecho de solicitar ese cupo -dije de forma prepotente- no solo se les negó el ingreso, sino que se cometió fraude: aceptaron el dinero y nunca cumplieron con el servicio.
No tienen idea de lo orgulloso que me siento de mí mismo en este momento. Prácticamente estoy haciendo toda esta hoguera para demostrarle a mi prima y al robot que tengo por profesor que las clases intensivas que me dan cuando tengo escaso tiempo libre no fue solo tiempo perdido... eso con esperanza de que sean más blandos, cosa que es un sueño lejano pero no se pierde nada con tener fe.
Gretchen: Esperen, entonces, según ustedes, ¿El Campamento Sonrisas estafó a nuestros padres al cobrarles por nuestra estadía y luego rehusarse a recibirnos?
Rosa: Bueno, es la definición más simple de estafa, amiga -dijo con naturalidad, emocionando a los demás presentes. Parece que ese campamento y ese chico se han hecho odiar lo suficiente.
McGee: ...Disculpen, sólo por curiosidad -dijo tras parecer meditar algo- ¿Cómo afectaría, digamos, a un conocido de nosotros, un vecino, un compañero de escuela, no sé, un pariente, que sabía lo que pasó? lo de que el Campamento Sonrisas se rehusó a recibirnos aún cuando nuestros padres pagaron por nuestro lugar, y no reportó nada a las autoridades o a nuestros padres.
Miguel: Pues... seguro se metería en graves problemas, si es tan cercano a sus padres como para que pueda contactarlos directamente -dije pensando de una vez en el crimen de ser cómplice de forma directa o indirecta.
McGee: ... No querré ser Suzie cuando mamá y papá lo sepan -dijo en lo que Rosa me mostro la información en su teléfono.
Ah, así que el castaño tiene una hermana gemela que a diferencia de él, se está quedando en sonrisas viviendo la vida de lujo e importandole un bledo el bienestar de su hermano ¿con familiar así para que enemigos?
Rosa: ¿Así que tu hermana supo de todo y más bien feliz de que te echaran del campamento al que sus padres pagaron una fortuna para que AMBOS, fueran? -cuestionó en lo que el chico volvió a afirmar.
McGee: ¿Qué les digo? -comentó resignado- mamá y papá se esfuerzan en criarnos igual, pero ella vive en su burbuja de que debería ser la favorita sólo por ser ella.
Miguel: Terminemos con esto, ya la isla debe estar lista... -dije ya queriendo acelerar las cosas haciendo una llamada- Bill ¿Crees que Lady Zeniba pueda darnos un momento de su tiempo? Prometo que la recompensaremos con varios dulces y tés que le encantaran...Aja, si, perfecto, aquí la esperamos -dije colgando.
Armand: Un momento que soy lento, usted dijo Zeniba... ¿Hablamos de ESA Zeniba? ¿En verdad conoce a tan noble mujer? -preguntó con impresión para confusión de los campistas.
Ah, así que saben de los yokais, eso era hasta impresionante dado lo aislados que estaban. Pero no creo que deba sorprenderme tanto, eran de los espíritus más antiguos que existían a fin de cuentas.
Los campistas: ¿Quién?
Rosebud: ¡Lady Zeniba! ¿Es que no les hemos enseñado nada de cultura? Entre los monstruos, espíritus y Yokai es de los seres más bondadosos, no por nada se ha ganado el título de la bruja buena de la pradera -dijo con un gran respeto en lo que respecta a ese ente.
Armand: Es bueno que sea fácil de distinguir de esa malvada de Adelaide.
Squirt: ¿Por qué ella prefiere los pantanos? -pregunto no entendiendo muy bien el tema.
Sawyer: No, Squirt, porque ella se presenta como "la MUJER buena de la pradera" -dijo para acto seguido estremecerse- tiene de buena lo que yo tengo de fresco.
Rosebud: De quien no se diferencia Zeniba fácilmente es de su gemela Yubaba, al menos en apariencia porque en carácter sabes quién es quién en segundos -recalco en lo que no pude evitar darle la razón.
Gretchen: Básicamente son como ver a McGee y Suzie si se disfrazarán con el mismo disfraz, ¿Eh? -pregunto divertida solo para recibir expresiones de indignación.
Armand: Tampoco insultes, madame Yubaba llega a ser... codiciosa, pero ella misma tiene valores.
Sawyer: Rosebud solo tiene riñas con ella porque fuimos a su casa de baños a vacacionar y Yubaba intentó hacerla firmar para contratarla como cocinera... Se arrepintió a los cinco segundos -dijo para luego reírse con el pie grande mientras que la mujer bajita solo hizo puchero.
Rosebud: Uno pensaría que entendería que algunos Yokais pueden comer insectos.
Je, y pensar que estos tipos estuvieron aquí todo este tiempo. Mi viejo dedicó buena parte de mi vida a buscar magia real en este mundo... Y pensar que se habría ahorrado bastante tiempo sólo buscando en un campamento canadiense. Y no solo eso: Monstruos, aliens, yokais, criaturas de todo tipo... este mundo era sorprendente, todo lo que escondía a simple vista.
Miguel: En todo caso parece que ya llegaron -dije mirando un círculo mágico aparecer en medio del campamento. Eso es rapidez.
El aire se cargó de energía cuando el círculo mágico se iluminó en medio de la explanada. Las runas que se formaban en el aire brillaban en tonos dorados y plateados, girando como engranajes etéreos. Un viento suave sopló, levantando hojas secas y haciendo que los banderines colgantes parecieran tintinear como si fueran campanas de cristal.
De pronto, la figura de una anciana de baja estatura apareció desde la luz, acompañada de dos chicos, uno pelirrojo y un cavernícola. Su cabello blanco estaba perfectamente recogido en un moño, y sus gafas redondas brillaban con un destello sabio. Su andar, aunque pausado, transmitía una autoridad tranquila que hacía que hasta el más errático bajara un poco sus humos.
Fangbone: Vaya... Este lugar huele como Craniobania, me gusta -dijo con una sonrisa de satisfacción pero igual con espada en mano, alerta en todo momento.
Zeniba: Vas mejorando, querido -exclamó revolviendo con cariño el cabello del chico de hebras rojas para mi impresión.
Miguel: ¿Me dirá que el círculo mágico lo hizo Bill Pero si apenas lleva siendo su aprendiz unas semanas, ¿no?
Zeniba: Lo ayudé, pero buena parte la hizo él -dijo con amabilidad mirando al joven apenado- es un muchacho con mucho talento.
Bill: Gracias maestra Zeniba -susurro para luego alterarse un poco al ver a la anciana con el fruncido.
Zeniba: Vamos, sabes que si quieres puedes decirme abuelita -mencionó antes de ver los alrededores con curiosidad- bueno, ¿Qué tenemos aquí?
Y ni termino de decir eso cuando los tres consejeros estaban delante de la venerable mujer con cuadernos y bolígrafos extendidos a ella, inclinándose tanto en reverencia que pensé que se iban a dislocar las espaldas.
Por otro lado, Fangbone, en cambio, estaba más interesado en examinar los alrededores, olfateando el aire como perro de caza en busca de algún peligro. Bill trataba de mantener el porte de "aprendiz digno", pero cada vez que Zeniba lo miraba, se encogía como si tuviera miedo de decepcionarla. Al parecer ellos dos ya se habían acoplado a su vida en San Fransokyo, eso me alegra.
Sawyer: ¿Nos daría su autógrafo? Somos fans -pidió con algo de pudor- Esto... ¿necesita... flores? ¿Incienso? ¿Una ofrenda de restos libres de gluten?
Armand y Rosebud: Conocerla es un gran honor. Díganos lo que quiera para hacer placentera su estadía y lo tendrá.
Zeniba: Nada de eso, queridos. Ya con verlos mantener vivo este lugar y su propósito, basta y sobra -comentó jovial antes de poner su atención en mi- ya mi aprendiz me comentó lo que quieres hacer, puedo hacerlo dulzura, pero... no es por ser mala persona, pero no te acostumbres a llamarme seguido para algo com esto. No solo lo parezco, soy una anciana y hacer un hechizo como este llega a cansarme.
Miguel: Claro, madame, es comprensible -dije dándole la razón.
McGee: ¿Hacer qué exactamente? -pregunto arqueando una ceja a la vez que yo le di una mirada picara.
Rosa: Transportar todo el campamento a la isla designada para ustedes a través de un círculo mágico de teletransportación.
De paso, como era de esperar, acabó siendo un hecho que McGee, Gretchen y Squirt se miraron con los ojos como platos, entre emocionados y aterrados.
McGee: ¿¡Transportar todo el campamento!? ¡Eso es como... como... mover una pizza entera sin que se le caiga el queso!
Squirt: O como cuando metes todos los malvaviscos en la fogata al mismo tiempo y... ¡PUM! -hizo el gesto de una explosión con las manos para luego soltar un gas.
Ok, eso fue ciertamente innecesario.
Miguel: ...Sí, exactamente igual -dije sarcástico, mientras Rosa rodaba los ojos. A la vez que Zeniba, con esa paciencia suya de abuelita mágica, les sonrió como si fueran niños que acababan de descubrir que los calcetines izquierdos se pierden por robados por trolls.
Zeniba: Queridos, esto es un hechizo de traslado mayor. No es solo mover madera y piedra, es transportar recuerdos, energías, vínculos... el corazón del campamento. Por eso requiere preparación -aclaro con calma- hacer algo como esto puedo hacerlo, pero luego necesitaría descansar un tiempo. Existen métodos más sencillos que los círculos mágicos hechos con pura energía como los que son dibujados, pero nunca aprendí a hacer de esos -reveló con pena.
Siendo así que, sin mucho más de que hablar, ya los campistas y dueños del campamento se pusieron manos a la obra para preparar todo para el traslado, desde juntar a todas las criaturas del lago y del bosque a guardarse comentarios como el porque la cabeza de Zeniba era tan grande. No siendo hasta que ya se estaban realizando los retoques finales para iniciar el hechizo que un inconveniente apareció.
Uno de voz irritante y sonrisa petulante que venía en un yate que a simple vista se notaba que costaba al menos el salario mínimo de todo el personal de al menos diez campamentos. Algo me dice que ese cabroncito es el famoso Buttsquad.
Buttsquad: Hola bottoneros -dijo con un tono de obvio deseo de presumir, la arrogancia le sobraba- ¿Qué hacen? ¿jugando con abuelitas? Pues mientras ustedes pierden su tiempo con la tercera edad yo me la estoy pasando bien con la nueva pantalla plana de 140 pulgadas del campamento sonrisas para la noche de cine. Que lástima que ustedes no puedan ir y tengan que conformarse con cuentos de viejos... ¡Esa es la vieja más fea que he visto en mi vida! -declaró al notar a Zeniba.
Pobre... ya lo chupo el diablo al pendejo.
Zeniba: Qué niño más grosero, tal vez debas cerrar la boca -dijo haciendo un gesto. Que acabó siendo un hechizo con el cual le cerró la boca al joven como si de una cremallera se tratara.
McGee:... Te quiero abuelita -declaró para luego abrazar al espíritu tras ver que sin importar cuando lo intentara, Buttsquad no podía abrir la boca. A lo cual ella le dio unas palmaditas con ternura.
Miguel: Así que este es el famoso Buttsquad... Vaya que no trata de disimular ni un poco como despilfarra el dinero -dije observando de forma inexpresiva el yate.
Gretchen: Les dijimos, no desaprovecha ninguna oportunidad para presumir lo que su papá le deja comprar.
Rosa: Pues que lo disfrute, después de hoy a su papá no le quedará nada para siquiera comprar unas golosinas -dijo dándolo por hecho.
Lo que causó que el chico nos viese como si nos hubiera crecido una segunda cabeza. Oh esto lo voy a disfrutar... pero decírselo debo decir que sería injusto que yo me dé ese gusto, que lo haga quien más lo ha sufrido.
McGee: Oh claro que no lo sabes, fue algo reciente ¿Adivina que Buttsquad? Nos vamos, Lakebottom se va de aquí. Seguro que irás a celebrarlo ¿no? ¿Pero adivina que? En el momento en que nos vayamos, pasarás de ser un rico presumido a un, según tu, perdedor igual que nosotros -exclamó con burla a la vez que el pelirrojo hizo un ruido de preocupación- ¿Como que de qué hablo? ¿Empezando porque los empleados sabían que nosotros somos los tres campistas que les faltaban y con singular alegría aceptaron tu orden de no dejarnos quedarnos, teniendo nosotros suerte de tener el Campamento Lakebottom, porque de otro modo nos hubiera tocado vivir en el bosque?
Gretchen: Espera a que nuestros padres sepan que el Campamento Sonrisas les cobró por nuestro lugar ahí y luego no nos dejaron quedarnos porque tú no querías, es más, espera a que la prensa lo sepa -dijo para enojo y rabia del chico enmudecido.
El cual los estaba mirando con una cara que gritaba en todo el sentido de la palabra: "¿Y desde cuando son tan listos como para pensar en eso? ¡Son Bottoneros!".
Miguel: Y aquí es cuando yo me presento, Miguel Rivera, de los Rivera de San Fransokyo, hijo del dueño y CEO de Rivera Solutions, seguro por tu padre has oído de nosotros -me presente a la vez que Zeniba le quitó el hechizo al mocoso desagradable. Una lastima, me gustaba más callado.
Buttsquad: ¡no se quien eres tú, yo solo veo a un baboso musculoso sin cerebro!
Es un hecho, este tiene desconectado el filtro del cerebro a la boca, todo pasa recto.
Miguel: Sólo te diré que mi padre es uno de los hombres más ricos del planeta, que hace parecer a tu papá como un recolector de basura -dije para su consternación.
Buttsquad: ¡Eso no puede...! Oh no, si puede... -susurro con amargura al confirmar lo que escucho con internet para luego comenzar a reír con incomodidad.
Miguel: Entonces... ¿Sólo porque McGee te cae mal, decidiste que él y otros chicos de los que se hizo amigo no sólo no merecían quedarse en el campamento propiedad de tu padre, si no que decidiste que sus padres ni siquiera merecían un reembolso? -pregunte para después pasar a escuchar un montón de pobres excusas que no valían ni un centavo realmente.
Rosa: ¿Sabes que veo aquí, querido primo? Me parece que veo el típico caso del chico rico que no entiende que por mucho dinero y lujos que tenga, no podrá ganarse a otros ni ser amigo de la gente como McGee, justamente porque su actitud no es la más agradable.
McGee: ... ¿Perdón, cómo dice usted? -exclamó notándose que lo tomamos con la guardia baja.
Rosa: McGee, dime algo, en su escuela quien es más popular ¿tu o Buttsquad? -pregunto en lo que el castaño miro al hijo del dueño de sonrisas de forma inexpresiva.
Uh, me huele a drama, y del bueno... ¿Dónde hay palomitas cuando las necesitas?
McGee: Eso es fácil, ¿No, Jordan?
Buttsquat: ¡Cállate! ¡Yo sí soy popular!
McGee: Si, tanto que no es secreto que Suzie es la única de la escuela que va a tus fiestas, admítelo, nadie en la escuela te soporta porque eres un arrogante insufrible
Buttsquat: ¡Eso no es cierto! -grito avergonzado. Mientras que a su vez, McGee seguía acribillando sin guardarse nada.
McGee: ¿Te tengo que recordar por qué Lana ganó de manera aplastante en las elecciones de Presidente del Cuerpo Estudiantil? Porque mientras ella proponía recaudar fondos para reparar el patio de juegos, tú ya presumías que harías que tu padre reemplazará los juegos del patio con una estatua de ti -dijo cruzado de brazos- y tu eslogan de campaña no te ayudaba: "Jordan Buttsquat, viviendo la vida que ustedes quisieran vivir".
Vaya... qué encanto.
Gretchen:... Empiezo a entender porque Buttsquad te odia tanto McGee, sí que está celoso de ti -dijo divertida para indignación del chico de sonrisas.
Squirt: ¿Celoso?
Gretchen: Porque aquí es el que manda porque es el hijo del dueño del Campamento Sonrisas, pero en casa nadie lo aguanta porque él no puede estar cinco segundos sin buscar restregarle el dinero de su padre a todos a su alrededor -menciono tan casual como que uno y uno hacen dos, y es que era más que cierto.
Buttsquad: ¡Callense, Callense todos! Yo si soy popular, todos quisieran ser tan geniales como yo! ¡No es mi culpa que prefieran pasar el tiempo después de la escuela con MCperdedor! ¡Ni entiendo porque nadie fue a mi último cumpleaños, todos prefirieron la casa de McGee! -dijo haciendo un berrinche que más que dar lastimo, molesto a todos.
McGee: Oh, claro que sabes -dijo poniendo sus brazos en jarra en su cintura- empezando con que pusiste un mínimo de coste de regalo de 200 dólares, ni Suzie pudo ir porque nuestros padres le dejaron en claro que estaba loca si pensaba que gastarían tanto en ayudarla a comprarte un regalo.
Miguel: Bueno ya, igual esto dentro de poco ya no tendrá importancia -exclame ya algo aburrido del drama-cuando terminemos con tu padre, al fin comenzarás a comprender lo que es realmente la vida, cretino -dije en lo que él tragó grueso- para empezar, dime. Cómo crees que tu abuelo, y luego tu padre hicieron su fortuna si no tienen negocios, no tienen acciones en la bolsa, nada ¿De donde salió todo ese dinero?
Buttsquat: ¿La... Lotería? -fue todo lo que dijo sudando a mares de los nervios. Obviamente nadie le creyó.
McGee: Ya sabemos todo, el campamento Lakebottom del que tanto te burlas es la fuente de ingresos de tu papi -reveló dejando a Jordan boquiabierto.
Gretchen: Tu papá trabaja para el gobierno, ellos le pagan para tener "vigilado" al campamento
Rosa: De hecho no me extrañaría que la razón por la que te deja meterte tanto con el campamento -dijo captando miradas- es porque el graba todas tus jugarretas y tras un poco de edición se las muestra al gobierno como que su "valiente hijo" mantiene a raya los horrores del campamento monstruoso, para que el dinero siga llegando.
Miguel: Porque me imagino que si el gobierno averiguara que de hecho los verdaderos monstruos son los del Campamento Sonrisas, hasta lo harían devolver el dinero -dije ya disfrutando de la cara pura agonía del niño rico malcriado.
Creo que entiendo porque Rosa y mi padre aman tanto hacer cosas como esta, se siente grandioso.
Buttsquad: ¡No pueden probar nada, no tienen pruebas! -reveló sin querer para luego llevarse la mano a la boca. Era cómplice y encima era tonto ¿así sera el padre tambien?... No, seguro es hasta más tonto.
Miguel: ¿Rosita? -fue todo lo que dije mirando a la mencionada que solo asintió.
Rosa: Mientras teníamos toda la charla yo ya estaba hackeando el sistema de seguridad del campamento Sonrisas. Fue cosa de niños -mencionó mostrándome todo con su celular- y aún más fácil fue encontrar los vídeos, tanto los editados como los reales, y... enviado.
Buttsquad: ¡¿Enviado?!
Rosa: Si, en caso de que no entiendas, a esta hora el primer ministro canadiense ya está recibiendo las pruebas de que tu papá sabe desde hace años que Lakebottom es seguro y prefirió pintarlo como peligroso. Lo que significa que en un par de horas oficialmente el gobierno cortara toda relación con tu familia -dijo acomodando sus gafas.
Miguel: Lo que significa que no tendrán respaldo del gobierno cuando los demandemos por tener su campamento cerca de aguas tóxicas y también por negligencia de menores -dije con un tono infantil como si hablara con un niño pequeño solo para molestar- porque como imaginarás, tu padre tendrá que responder sobre por qué permitió que dieras al personal del campamento la orden de rehusarse a aceptar a McGee, Gretchen y Squirt, dado que sus padres pagaron por su admisión.
Momento en que el mocoso rico infló las mejillas como un globo a punto de reventar, y detrás de él el yate lujoso soltó un chillido metálico raro. Hasta parecía que el pobre infeliz estaba tan alterado haciendo su escena que hasta la embarcación parecía avergonzarse de su dueño.
Buttsquad:... Todo esto es tu culpa! ¿Cual es tu problema? ¡¿Por qué no me dejas ganar por lo menos una vez?! Tu siempre lo tienes todo aun cuando eres un pobretón, no es justo! -reclamo al castaño que parecía ya haber llegado a su límite de paciencia. Siendo la prueba que sin más, solo exploto.
McGee: ¡Ese es el problema! ¡Crees que por ser rico puedes tratar a la gente como basura y esperar que te traten como si sus vidas no fueran nada sin ti! ¡Y sí, no soy tan rico como tú, pero soy honrado! ¡A mí no me importa sacrificar un poco de lo mío con tal de ayudar, mientras que tú, teniendo de sobra, hasta te ríes de quien te pida ayuda! -reclamo dando un pisotón en el suelo- ¿A cuántos compañeros que se les olvidó su almuerzo o su dinero para comprarlo, les has dicho, mientras comes tu almuerzo continental de diez platos, que prefieres tirar a la basura lo que sobre, que tú mismo sabes será mucho, que darles un bocado? ¿A cuántos que perdieron el autobús, o que a sus papás se les descompuso el auto, o que tuvieron que caminar bajo la lluvia, los has pateado ya caídos ordenándole a tu chófer que pase sobre un charco junto a ellos para dejarlos empapados?
Vaya, yo solo lo decía en broma. Pero esto fue tal cual como ver un volcán en plena erupción. Se nota que se lo tenía guardado y solo estaba esperando el momento idóneo para solo dejarlo salir todo... que bueno que fue ahora y no luego en unos años y justo tener una úlcera del coraje el pobre.
McGee: Tú tratas a todos a tu alrededor como si fueran indignos de respirar el mismo aire que tú, y todavía esperas que nuestras vidas giren en torno a admirarte. Siempre dices que papi siempre dice que el dinero puede comprar cualquier cosa, ajá... ¿Y también compra neuronas? Porque se te nota la escasez -repliqué con desdén, cruzándose de brazos ya para rematar.
Lo que acabó haciendo que, sin tener o tan siquiera poder pensar en cómo refutar nada. Buttsquad hizo lo que mejor sabía hacer... salir huyendo a su campamento a los brazos de papi para que este resuelva todo soltando billetes... si no fuera un cabrón hasta sentiría lástima por él, esa vida dentro de poco no será nada más que solo una fantasia.
Aunque creo que desde ya se dará cuenta de esa realidad al quedarse varado a mitad del lago y tener que regresar nadando. Todo gracias a que Fangbone dañó el motor del yate sin querer pensando que era alguna clase de arma... que buen cavernario.
Miguel: Oye, era reprocharle, no destruirlo verbalmente -dije dándole unas palmadas a McGee que solo suspiro tras respirar hondo buscando recuperar el aliento perdido.
McGee: He deseado decirle eso hace mucho -fue todo lo que dijo antes de solo irse a terminar los preparativos.
Y sin ningún otro tipo de contratiempo o de retraso, el círculo mágico se activó sin más contratiempos.
El aire vibró con una energía palpable mientras las runas del círculo mágico giraban y brillaban en un caleidoscopio de colores. Sin mucho que hacer, observe con atención cómo cada pieza del campamento (cabañas, mesas, fogatas apagadas y criaturas del bosque) empezaban a levitar lentamente, suspendidas por un hilo invisible de magia. Incluso los campistas, sorprendidos pero emocionados, se aferraban a sus mochilas y a los consejeros mientras flotaban unos centímetros sobre el suelo.
Un temblor recorrió el suelo cuando el campamento comenzó a desmaterializarse lentamente, sus piezas transformándose en luz pura antes de ser absorbidas por el círculo mágico. Los árboles del bosque cercano parecían inclinarse levemente, como si se despidieran, y los animales normales observaban desde la distancia con curiosidad.
—
(Isla del campamento monstruoso, bahía interior, San Fransokyo)
De pronto, un destello cegador llenó la explanada. El mundo pareció desvanecerse por un instante, y cuando los ojos de todos se acostumbraron de nuevo a la luz, el campamento estaba en un lugar completamente nuevo: una isla rodeada por aguas cristalinas, con playas de arena blanca y bosques densos que imitaban exactamente la topografía original del Lakebottom, pero más espaciosa y segura. Lugar donde ya había alguien esperando.
Con todo y una sombrilla que es del tamaño idóneo para que su sombra se asegure de que el sol no toque ni un milímetro de su piel.
Drácula: Veo que las negociaciones fueron todo un éxito -dijo con una sonrisa de cortesía. Para luego incomodarse cuando el zombi y el pie grande procedieron a gritar como adolescentes fanáticas de boy bands cuando lo vieron.
McGee: No lo creo, es el verdadero Drácula de soy Drácula, bla, bla, bla -exclamó divertido para enojo del conde.
Drácula: Yo nunca he dicho bla, bla, bla en mi vida. No se de donde sacaron eso ustedes los humanos -mencionó para luego entregar un pergamino al zombi- en todo caso, tengan esto, es una lista de niños monstruo para incluir en el campamento. Mavis me recomendó que debería darle la diversión de los niños a monstruos más capacitados, les interesa?
Y para que lo dijo. La sola idea bastó para que esos tres actuarán como si alguien les hubiera pasado cortado el cuello de tajo y ahora estaban en el cielo de los monstruos, si es que existe.
Armand: Empezaremos de golpe
Miguel: Un consejo, tengan a la camada de cachorros lobo con correa, en serio -dije recordando lo pequeños demonios que eran ese montón de sacos de pulgas.
Rosa: Aún me río recordando que enterraron al tío hasta el cuello -dijo a la vez que los dos reímos por lo bajo, era difícil no reírse de eso.
Miguel: Ejem... en todo caso nosotros también veremos si conseguimos niños humanos para que vengan aquí y convivan con este ambiente monstruoso, en el buen sentido -dije en lo que el conde asintió.
Drácula: Por mi parte estoy muy ilusionado con esto, de verdad quiero que este campamento funcione. Con la inclusión de niños humanos y monstruos por igual, será un lugar perfecto que estoy seguro que mi querido Dennisovich adorara -dijo sonriendo por la sola idea de ver una sonrisa en el rostro de su nieto.
Rosebud: Seguro le encantará -sonrió buscando calmar al vampiro. Solo para que los tres recibieron en respuesta una sonrisa sutil que fácilmente podía leerse entre líneas como "más les vale". Cosa que obviamente los puso nerviosos.
Si, que mejor tomarán nota desde ya, Drac era un abuelo sobre protector, y pobre del que se metiera o tocara un solo cabello de ese niño (igual tampoco es que no se pueda defender solo). Por mi parte ya quería dejar todo por zanjado e irme a mi casa. Pero justo cuando estaba por decir que me retiraba, fue que un teléfono sonó.
Sawyer: ¿Qué?... Oh, teléfono -exclamó tras notar que estaba vibrando para luego sacar un teléfono de los viejos con antena y todo- ¿Alo? ¿Si?... Es para ti -dijo para después pasarle el teléfono al campista de cabello café.
McGee: ¿Diga? -fue todo lo que dijo para que después se escuchara tamaño grito del otro lado de la línea que el chico hasta tuvo que apartar su oído.
No se porque algo me dice que esa era la famosa hermana melliza, Suzie.
Suzie: ¡McGee! ¡¿Qué rayos fue lo que hiciste?!
McGee: ¿De qué hablas, Suzie? -pregunto extrañado en lo que ella por su parte solo rabió con más fuerza.
Suzie: ¡El papá de Buttsquad está cancelando el campamento, y está mandando a todos a casa! ¡Te advertí que no arruinaras mi verano y mira lo que hiciste!
... ¿Era en serio?
McGee: Sí... Y espera a que llegues a casa, porque ahora sí estarás en una buena, Suz.
Suzie: ¡¿De qué hablas?!
McGee: Para resumir, en estos momentos las autoridades deben haber informado a mamá y a papá que por capricho de Buttsquat no me permitió quedarme en Sonrisas, y mamá y papá ya estarán enterados de que tú sabías y no sólo no intercediste por mí, si no que ni te molestaste en pedirle a Buttsquat reembolsarles lo que pagaron por mí -explicó como si nada para la indignación de su hermana.
Suzie: ¡Como dije, ya era lo bastante malo tener que estar en el mismo campamento, no me culpes por aprovechar para tenerte lo más lejos posible! ¡Ibas a asesinar toda oportunidad de hacerme un nombre en la alta sociedad! ¡Como acabas de hacer justo ahora! -reclamo solo causando un suspiro de cansancio en su hermano.
Vaya, hasta yo podía sentir como el pobre perdió muchos años por el estrés de aguantar a esa diva malcriada, pobre... tal vez luego lo invite a unos tacos.
McGee: Suzie, ¿Eres consciente de que mamá y papá estarán furiosos cuando sepan que por ser el perrito faldero de Buttsquat, básicamente lo dejaste estafarlos? ¿O estás tan llena de ti misma que no entiendes que tendrás suerte si te mandan a una escuela militar? -cuestiono con calma solo para que se escuchara un grito aun más fuerte en el teléfono.
Suzie: ¡¿A quien llamas perro faldero?! ¡Mamá y papá me adoran, a quien van a castigar por arruinar todo mi verano es a ti!
McGee: Claro, porque según tú, para ellos es peor que por mí ya no recibirás galletas por favorecer a Buttsquat, que el hecho de que lo dejaras cobrar el doble por recibirte sólo a ti, hermanita -exclamó entre risas- a veces olvido que debes en cuando dices buenas bromas. .. Parece que Buttsquad no es el único que necesita una dosis de realidad hermanita. Dejame recordártelo ¡no eres y nunca fuiste de la clase alta, eres de clase media como yo!
... Auch, eso tuvo que doler.
McGee: Y puedo apostar que si Buttsquat te dejaba creer que te consideraba su amiga, es porque para él era divertido molestarme echándome en cara que tú, mi propia melliza, lo prefiere a él que a mí, ¿Pero sabes qué? Desde que dejó de molestarme que no entiendes que mamá y papá son totalmente igualitarios y que no hay modo de que te quieran más, dejó de molestarme que prefieras al cretino ricachón que a tu propio hermano -dijo con sarcasmo antes de solo mostrar una mirada fría- y por eso no me molesta saber que cuando llegues a casa tendrás el castigo de tu vida.
Suzie: ¡Eres un....!
McGee: Porque si ya de por sí mamá y papá estaban cansados de tu actitud de creerte muy buena para ser de nuestra familia, saber lo del Campamento Sonrisas es la guinda del pastel -dijo como punto y final para luego cortar y devolverle su teléfono al zombi.
Pues... ahora solo diré que creo que no soy el único que quiere descansar un rato, algo me dice que apenas se calmen las cosas por aquí, todos sin falta se irán a tomar una siesta de al menos unas horas, cosa totalmente comprensible.
Gretchen: Vaya, hasta el final Suzie tenía que ser ella misma.
Squirt: Hasta es triste -mencionó a la vez que el hermano de la mencionada solo suspiro una vez más. Para luego sonreír como si nada paso.
McGee: Oigan, mejor dejemos de pensar en eso. Piensen en lo bueno, ya no seremos solo nosotros tres. Habrán muchos más campistas, y serán monstruos -dijo logrando que los 3 se emocionaran por la idea.
Momento en que los consejeros se acercaron con grandes sonrisas en sus rostros. Je, parece que harán válida una de las cláusulas del contrato ahora mismo. Libertad para contratar a más personal que consideren cualificado de inmediato.
Rosebud: De hecho, a lo que estoy viendo la nueva lista es grande, serán muchos campistas... Necesitamos asistentes de consejeros -dijo mirando al trío.
Quienes procedieron a ver detrás suyo extrañados.
Squirt: ¿Hay gente invisible y nadie nos avisó? -pregunto confundido.
Gretchen: Y en caso de que hablen de nosotros... ¿Se les zafó un tornillo? -dijo arqueando una ceja por incredulidad al verlos negar.
Rosebud: ¿Y por qué no? Ya llevan tiempo con nosotros y han sobrevivido. Saben cómo funcionan las cosas aquí.
Armand: Es cierto, los tres lo harán estupendo.
Sawyer: Vamos campistas, es tiempo de dar el siguiente paso.
Rosebud: Además de que ahora les pagaremos -dijo como cereza del pastel, logrando que a dos de tres se les vieran signos de dólar en los ojos.
Excepto Squirt que... quien sabe en que pensaba pero seguro tenía que ver con animales lindos con los que jugar.
De cualquier modo parece que aquí yo ya termine. El primer trabajo burocrático por mi cuenta fue todo un éxito. Algo molesto, pero hasta tener todo listo para el siguiente robo como Casanova, había que mantener apariencias... Me pregunto qué estarán haciendo mi jefe y Hiro en estos momentos. Meh, como sea, yo me tomaré cinco.
Notes:
Y ese fue el capitulo de esta vez. Como siempre pueden votar, comentar, lo que gusten.
¿Y que les pareció?
La idea era solo un cap de "relleno" entre comillas, pero al parecer se me fue de la mano. disculpen por eso jaja.
En fin, nos vemos pronto.
Chapter 36: Capitulo 32: El mundo gira y todos con el (interludio 2/2)
Notes:
(See the end of the chapter for notes.)
Chapter Text
(Kirito Pov)
(Hospital universitario de Tokio, metrópolis de Tokio, Japón)
Mi cabeza, me siento mareado, no... se siente como cuando desperté después de sobrevivir a SAO... ¿Cuánto...? No, no siento que sea yo mismo ¿Cuánto tiempo estuve fuera de mi mismo? Lo último que recuerdo fue que estaba en el último piso de la catedral central de la iglesia axioma. Gracias al enano enfermo de Chudelkin, la administradora Quiniela falló en su plan de viajar del inframundo al mundo real.
Ambos murieron quemados por el propio deseo y lujuria de Chudelkin justo antes de atravesar el portal, literalmente. Menudo final más incómodo de ver, es algo que me gustaría borrar de mi memoria.
Pero no puedo, lo recuerdo todo, las peleas con los caballeros de la integridad, mis años en el inframundo, mi tiempo como aprendiz de caballero... Eugeo... Eugeo está...
???: Ah, veo que estás despierto, eso es bueno, me estaba aburriendo de esperar a que reaccionaras. Según tus signos vitales debiste recuperar la conciencia hace horas -escuche una voz de una mujer que no me era familiar.
Siendo por ello que abrí los ojos, de paso sintiendo un leve dolor por la luz del día, pero rápidamente logré enfocar la vista para saber con quién estaba tratando. Se trataba de una mujer mayor vestida con una bata blanca y una camisa rojo oscuro, sin lápiz labial o maquillaje alguno y con el cabello blanco recogido en una coleta. Una científica, y podría decir fácilmente por su acento y rasgos que era extranjera, de Europa si tuviera que adivinar.
Celine: Mucho gusto, me presento, soy Celine Simard. Una científica que trabaja para la firma de Rivera Solutions, en San Fransokyo. No me sorprendería que no la conozcas, según tus registros llevas desconectado de nuestro plano bastante tiempo -dijo más centrada en leer mi expediente médico que en verme a los ojos- debo decir que te ves hecho una desgracia, todo flaco y desnutrido, deberías dejar todo lo que es el mundo virtual un tiempo, que tu cuerpo se acostumbre a absorber nutrientes solo por una vía parenteral no es bueno para la salud.
Kirito:... ¿Qué? -dije queriendo incorporarme, logrando apenas sentarme en la cama con mucha dificultad- ¿usted quien...?
Celine: Leí tu información. Kazuto Kirigaya, 17 años, alias Kirito, el espadachín negro. El héroe de Aincrad, también descubriste los negocios turbios de Sugou Nobuyuki con el juego sucesor de Swort Art Online, ALfheim Online. Sin mencionar el incidente del asesino Death Gun en Gun Gale Online y claro, no olvidemos el plan del profesor Tetsuhiro, quien desarrolló el Augma, Ordinal Scale y la IA YUNA en Kamura como parte de un plan para resucitar a su hija como una inteligencia artificial reuniendo recuerdos de ella robados de los sobrevivientes de SAO, matando a todos a mitad del concierto con un escaneo masivo... vaya que tu adolescencia es de locos ¿no? -pregunto divertida.
Kirito: Eso... Eso fue hace mucho tiempo ¿Por qué sabe todo eso? -logré articular, aún confundido y con la garganta seca.
Celine: Porque nos aseguramos de saber a quién estábamos investigando –cerró mi expediente con un golpe seco y me miró por primera vez, sus ojos grises parecían escanearme como si fueran un tipo de máquina– has estado en coma, diría que unos meses, para ser exactos.
Mis manos temblaron. meses. No otra vez... no podía ser otra vez. Miré a mi alrededor, buscando algún objeto que me anclara a la realidad, cualquier cosa. La habitación olía a desinfectante, había máquinas de monitoreo al lado de mi cama, y en la esquina un maletín metálico con el logo de "Rivera Solutions".
Kirito: ¿Dónde está Asuna? ¿Dónde está mi familia? ¿mis amigos? –Mi voz salió más desesperada de lo que quería.
Celine: Tranquilo, Romeo. Todos están bien... Más o menos –su tono casual no ayudaba a calmarme– es curioso cómo te metes en problemas, no sé si es de forma consciente o inconsciente. Kanamoto Atsushi, alias Johnny Black ¿lo recuerdas?
Kirito: Como si pudiera olvidarlo -dije recordando con cierta molestia esa noche que de hecho es lo último que recuerdo del mundo real antes de vivir varios meses en el inframundo.
Un momento...
Celine: Si, defendiste a tu novia del intento barato de asesino, pero el te inyecto succinilcolina y luego te llevaron en una ambulancia. Aunque lograste sobrevivir, sufriste daño cerebral severo. Secretamente, tu cuerpo fue interceptado por Kikuoka Seijirou cuando supuestamente lo estaban transfiriendo a un hospital diferente. Así fuiste llevado a la Tortuga del Océano , donde fuiste conectado al Traductor de Almas para tratar tus vías neuronales dañadas, y de paso seguías trabajando para el gobierno de gratis -dijo casual.
Kirito: Gracias por el resumen... ¿por qué estoy aquí y no allí entonces? -pregunté con sospecha al notar que me encontraba en lo que parecía ser un hospital en vez de la base militar. Momento en que la mujer me dio una sonrisa que me dio escalofríos.
Celine: Eso es porque eres uno de los pocos sobrevivientes del ataque que hubo en la tortuga oceánica. Todos los involucrados a Rath, el gobierno japonés o las fuerzas especiales estadounidenses, están muertos. Tu corriste con suerte al ser un civil y te ignoraron.
Kirito: ¿Muertos...? –la palabra salió apenas como un susurro, como si mi cerebro no pudiera procesar la información– ¿Todos...?
Celine: Así es. Eso incluye a tu buen amigo, el teniente coronel Kikuoka Seijirou, así que ya no tienes conexiones con la milicia y el gobierno de Japón –asintió sin rastro de emoción en su voz– Rath fue borrado del mapa, literalmente. No quedó nada de su proyecto. Ni el STL, ni alguna evidencia de la base de datos del inframundo..
Mi estómago se revolvió. ¿Nada...? ¿Eso significaba que Alice...?
Kirito: ¡No! –intenté ponerme de pie, pero mi cuerpo todavía no respondía bien y terminé tambaleándome, sostenido apenas por el borde de la cama– ¡Alice estaba allí! ¡No puedes decirme que ella...!
Celine: Vaya que eres impulsivo -suspiró como si hubiera esperado esa reacción- Tranquilízate, Kazuto. Ella está bien.
Mi corazón dio un vuelco.
Kirito: ¿Qué...?
Celine: Dije que Rath fue destruido, no el inframundo -aclaró acomodando sus gafas- no obstante, te diré que las cosas no son color de rosa. Ahora mismo el gobierno de tu país está buscando culpables, se filtró información de que estaban desarrollando IAs con conciencia, con alma por así decirlo, para usarlas en armamento militar. Solo te diré que quien expuso esa verdad, lo vendió tan bien que están acusando a Japón de atentar contra la vida humana... del inframundo no te preocupes, toda la tecnología que solía pertenecer a RATH, fue comprada por Rivera Solutions -declaró.
Sentí que mi cuerpo se tensaba, el nombre de esa compañía sonaba demasiado casual para la magnitud de lo que estaba diciendo.
Kirito: ¿Cómo que "compraron" todo? ¡Estamos hablando de un mundo entero, de millones de vidas digitales!
Celine: Tienes mucho que averiguar sobre los cambios globales, jovencito -sonrió levemente, como si esperara esa reacción- exacto. Y ahora ese mundo, el STL que lo conecta y los servidores donde corre... todo pertenece a Rivera Solutions. Técnicamente, son los nuevos dioses de tu pequeño paraíso virtual.
Mis puños se cerraron con fuerza. La idea de que el inframundo, ese lugar... ahora era propiedad de una empresa privada me heló la sangre.
Kirito: ¿Qué planean hacer con ellos?
Celine: Lo que toda empresa haría con un recurso valioso: explotarlo. Aunque, -alzó una ceja- no de la forma que temes. Por ahora, están más interesados en estudiar el "Fenómeno Fluctlight", como ustedes lo llaman, que en usarlo para fines bélicos. En cuanto a lo que hago aquí, es solo para decirte que todo está bien. Tu tranquilo... para eso y para decirte que no te metas donde no te llaman -dijo con una sonrisa.
Mis dedos temblaban, no por debilidad esta vez, sino por la rabia que hervía en mi interior.
Kirito: "¿No me meta donde no me llaman?" –repetí, apenas conteniendo mi voz– ¿de verdad espera que me quede sentado mientras una corporación decide el destino de todo un mundo? -pregunté indignado. A la vez que Celine se cruzó de brazos y ladeó la cabeza, como si estuviera estudiando a un animal salvaje en una jaula.
Celine: Exactamente. Mira, Kazuto, no te confundas. No estoy aquí para convencerte de nada, solo para informarte de la situación. Lo que pase con ese mundo ya no es tu responsabilidad. Has hecho suficiente.
Kirito: ¡No! –apreté la sábana de la cama hasta casi romperla– ¡No después de todo lo que sacrificamos Eugeo, Alice y yo para protegerlo!
Celine: Y sin embargo, no es tuyo -dijo con una calma inquietante.
Esas palabras me golpearon como un mazazo. Recordé a Eugeo, su sonrisa, sus últimas palabras antes de convertirse en una espada azul brillante... no podía dejar que su sacrificio terminará convertido en un experimento corporativo.
Kirito: ¿Dónde está Alice? –pregunté con voz ronca, mirándola directamente a los ojos. Por primera vez, Celine pareció vacilar, apenas por un segundo, antes de volver a sonreír.
Celine: Segura. Y antes de que preguntes, no está en el inframundo. Tu amiguita está... digamos que "hospedada" en las instalaciones de Rivera Solutions, en San Fransokyo. Es un activo demasiado valioso para dejarlo corriendo libremente en un servidor.
Mi respiración se aceleró.
Kirito: ¿La tienen encerrada? -pregunte en lo que ella se encogió de hombros.
Celine: Llámalo como quieras. Tiene libertad dentro de los límites del país, pero sí, está aislada. Orden directa de los ejecutivos.
No podía seguir escuchando, aun si no entendía a qué se refería con que San Fransokyo era un país ¿no era una ciudad?. Sea como fuere, me impulsé fuera de la cama, mis piernas temblaron pero logré ponerme de pie.
Celine:Si crees que vas a salir de este hospital en ese estado, te recomiendo que lo pienses dos veces. Tu cuerpo aún no está listo para...
Kirito: No me importa -dije interrumpiéndola. Solo para ser fácilmente sometido por la científica que me hizo un barrido y en el acto me aplico una llave de judo regresando a la cama.
¿No era solo una científica? Es demasiado ágil y fuerte para... como sea, esto solo me hace desconfiar más. Tomé una bocanada de aire y volví a tratar de levantarme, aunque me costara. Si Alice estaba en manos de esa empresa, yo tenía que llegar a ella. No podía dejarla sola. No otra vez.
Celine: Sabía que dirías eso. Y para ser honesta... por eso vine en persona. Rivera Solutions quiere hacerte una oferta -declaró deteniéndome en seco en lo que sacaba un par de cheques- esto es por lo de tu trabajo de medio tiempo en RATH, un extra por el bono de despido. Y este otro está en blanco, solo dime cuanto quieres por tu silencio. ¿Unos 3 millones de dólares bastarían? -preguntó con tranquilidad para mi indignación.
El silencio se volvió insoportable. Podía escuchar el pitido del monitor cardíaco acelerarse, mi propio corazón golpeando contra mi pecho. Mi puño temblaba, el cheque frente a mí parecía arder, quería que ardiera en la mano de esta mujer descarada.
Kirito: ¿Silencio? –la palabra me salió como veneno– ¿De verdad cree que puede comprarme como si fuera uno de sus ejecutivos? -pregunte con repulsión en lo que ella ni se inmutó.
Celine: No es cuestión de comprarte, Kazuto. Es cuestión de evitar que metas las manos donde no debes. Nadie quiere que esto termine mal para ti -reveló mientras que yo solo apreté los dientes.
Kirito: Lo que ustedes llaman "meter las manos donde no debo" es mi deber. Si ustedes tienen a Alice como "activo", entonces no me queda otra opción -dije decidido en lo que ella solo suspiro, dejando solo el cheque de mi despido de RATH sobre la mesita de noche.
Celine: Sabía que ibas a reaccionar así. Por eso vine sola y sin escolta. Quería verte con mis propios ojos –su mirada brilló por un segundo, como si midieran mi reacción– eres exactamente como dijeron los informes. Terco, impulsivo... y dispuesto a arriesgarlo todo por esa IA.
Kirito: Ella no es "una IA" –la corté de inmediato, mi voz subió de tono– Es una persona. Más humana que cualquiera de ustedes.
Por un instante, el rostro de Celine pareció perder su máscara profesional. Su mirada se suavizó.
Celine: Tal vez por eso me interesas –dijo finalmente, cruzándose de brazos– la mayoría de los humanos aún no está lista para aceptar que lo que vive en esos servidores tiene el mismo valor que ellos. Rivera Solutions cree que sí... pero su manera de probarlo es... extrema.
Kirito: ¿Qué demonios significa eso?
Celine: Significa que hay facciones dentro de la compañía que quieren usar el Inframundo como campo de pruebas para su nuevo proyecto: una simulación social de escala global. En sus palabras, "llevar a la humanidad digital al siguiente paso evolutivo" -dijo haciéndome sentir un escalofrío.
Dado a todo lo que eso podía implicar, desde cosas buenas... a cosas realmente malas.
Kirito: ¿Y Alice?
Celine: Alice es la clave –dijo sin titubear– ella es la prueba de que una fluctlight puede coexistir con los humanos en igualdad de condiciones. Si la convencemos de trabajar para nosotros... los demás la seguirán -dijo a la vez que mi respiración se hizo más pesada.
Kirito: Entonces tengo que llegar a ella antes de que lo hagan.
Celine: Y ahí está el problema. Para llegar a Alice, tendrás que viajar a San Fransokyo. Y para viajar allí, tendrás que salir del país. Pero tu estado de salud, tu historial médico y tu conexión con RATH te tienen bajo vigilancia gubernamental. No puedes simplemente subirte a un avión. Y eso solo para empezar -dijo divertida para mi enojo.
Kirito: Entonces buscaré otra manera -dije de forma desafiante en lo que ella solo se encogió de hombros.
Como si hubiera esperado esa respuesta. Cada vez me agrada menos esta mujer, creyendo que ya sabe todo. Desprende una arrogancia que hace que sea difícil siquiera estar en la misma habitación que ella.
Celine: Bien. Déjame ponerte en contexto. El inframundo es un mundo extenso, pero impotente. Necesita energía, hardware, mantenimiento y una red. Depende del mundo real para existir. Depende de nosotros, así que no hagas una tontería -dijo tomando su maletín- tomate unos días para recuperar algo de fuerza. Relájate, sal a correr, vete de campamento, vive la vida, ten sexo con tu chica, lo que sea. Pero te advierto, Kazuto: si intentas hacer algo estúpido, si intentas estorbar o contarle a alguien de esto... Alice será la que pague el precio.
Y si, no hace falta decir que esa amenaza hizo que mis ojos se abrieran de par en par.
Kirito: ¡Si le hacen daño...! -exclame en lo que ella levantó una mano para hacerme entender que no me mueva ni hable.
Celine: No amenazo en vano. Piénsalo como una garantía de que colaborarás. Seguro estas pensando en miles de cosas complicadas muy por encima de alguien de tu edad y posición, pero... como dije, esto ya no es asunto tuyo. Vive la vida en el mundo real para variar -dijo antes de solo irse sin más.
Me dejó allí, con el corazón acelerado. La puerta se cerró con un clic metálico que sonó como una celda. Sin saber qué más hacer, solo me dejé caer en la cama, respirando con dificultad. No podía confiar en Rivera Solutions, y menos tomando en cuenta que es un nuevo enemigo del que no se nada.
Kirito: Eu...geo... —susurré para mí mismo— préstame tu fuerza una vez más -dije llevándome una mano al pecho, dejándome llevar por los recuerdos... los cuales se volvieron dolorosos conforme más los recordaba.
Pasaron las horas, tal vez un día entero. Apenas probé la comida que dejaron en la bandeja. No tenía hambre, ni sueño. Solo podía pensar en Alice, en Celine, en el cheque que había quedado sobre la mesa como una burla silenciosa.
Sabía que no podía simplemente esperar y "vivir la vida" como me decía esa mujer. No después de todo lo que pasó. Eugeo había muerto para que ese mundo pudiera vivir. Alice había dejado atrás todo lo que conocía para protegerlo. Y yo... ¿iba a quedarme de brazos cruzados mientras una corporación decide su destino? No. Nunca.
No siendo hasta que estaba algo más lúcido y con algo en el estomago que me percate de un periódico de hace unos días, el mismo hablaba de la seguridad burlada de la nueva bóveda del banco de Japón aquí en Tokio, que presumía de tener la bóveda más segura y avanzada del mundo. El responsable de este crimen fue un tipo que al parecer se estaba haciendo nombre en el mundo como un ladrón. Casanova, el ladrón de sueños.... algo creído el tipo.
Pero cuando vi la foto de alguien que estaba bajo sospecha de ser cómplice... fue que el alma sencillamente se me fue del cuerpo. Al punto de que podía estar a nada de tener un paro cardíaco del shock. Ese rostro, era simplemente imposible... pero esos ojos, ese rostro... no es posible, es simplemente, no, no puede... pero es su cara... ¿como? Él es del inframundo, y yo lo vi morir.
Kirito:... ¿Eugeo?
_______________________________________________________________________
(Eugeo Pov)
(Playa del pueblo Kokaua, isla Kauai, Hawaii)
Debo admitirlo, hasta ahora mi vida no es tan mala para alguien que no tiene ni familia ni recuerdos. El trabajo de criado de la mansión de la familia Rivera es agradable, al principio pensé que mi trabajo sería únicamente lo relacionado a ayudar al hijo mayor del señor Rivera con su "pasatiempo", pero al final resultó que lo de jugar a ser un criminal era solo algo que hacía de vez en cuando.
Aparte de eso, he pasado mis días en la mansión. Trabajando en cosas que van desde la jardinería a ayudar a la señora Goodwin con la limpieza de las habitaciones y los pasillos. Algo que se me hace fácil gracias al tipo de cuerpo que tengo, tal vez sufrí alguna clase de accidente que me dejó al borde de la muerte, solo así me explico que todo mi cuerpo sea metálico. De cualquier modo le estoy agradecido a la familia Rivera por acogerme, hasta el momento han sido muy amables conmigo.
No obstante, he intentado recordar, pero esos pensamientos siempre se desvanecen cuando intentó profundizar demasiado. Es como si hubiera un muro dentro de mi cabeza que no me deja recordar. Mi nombre fue lo único que recordé por mí mismo, junto a mis recuerdos más viejos, mi infancia. Al principio pensé que era un apodo, pero con el tiempo me di cuenta de que sentía algo en el pecho cuando lo escuchaba, como si fuera mío desde siempre.
¿Quién era antes de esto? ¿Por qué no recuerdo nada más?... Bueno, tampoco es que pueda darme el lujo de divagar. Estoy en horas laborales.
Pleakley: ¡Aún no puedo creer que lo hicieran! ¡¿Es que no tienen instinto de supervivencia?! ¡Los humanos son fascinantes pero también dan mucho miedo! -dijo el extraño ser de un solo caminando de un lado al otro, mientras el más grande solo se carcajeaba del actuar de su compañero.
Eugeo: Pues según tengo entendido, si lo hicieron. El señor Rivera invito a la gran Concejal a una reunión respecto a su idea de comercializar experimentos -dije con calma para exasperación del alienígena.
Pleakley: Pero Lilo y el monstruo azul aún no han encontrado a todos los experimentos, digo, ya recuperaron a varios pero... -murmuró llevándose una mano a la frente- comunicarse por su cuenta con el comandante DeGil para que el los comunique con la Concejal, ese tipo es de lo que no hay.
Eugeo: No tiene que ver una cosa con la otra -dije queriendo calmarlo- al señor Rivera le gustaría negociar con ella por adelantado. Exponerle su idea, y de paso ella puede corroborar que de momento Lilo y Stitch han tenido un progreso bastante bueno el la reformación de los experimentos.
Pleakley: Muy bien -dijo parando con su actitud melodramática de golpe- veamos como acaba esto, pero si ella llega a mencionar algo de lavar naves, dejó en claro que pediré de antemano que ese tipo venga conmigo.
Jumba: ¡JA! ¡Tú te preocupas demasiado! La concejal es una mujer de grandes decisiones, pero también una mujer de gran paciencia... probablemente no desintegre a Héctor en la primera reunión. Probablemente –dijo con una sonrisa de cuatro colmillos, lo cual no ayudó en absoluto a calmar a su compañero.
Pleakley: ¡PROBABLEMENTE?! ¡ESO NO ES SUFICIENTE PARA DORMIR TRANQUILO! –gritó, señalando con su dedo largo al cielo, como si este le fuera a responder.
Por mi parte solo sonreí apenas, buscando acostumbrarme a las personalidad tan extravagantes de ambos aliens. El día estaba despejado y la brisa del océano movía suavemente las palmeras. Era un lugar tranquilo... Me gustaría ir a nadar, pero me hundiría como piedra, o eso creo...
De pronto, el suelo vibró con un sonido grave y metálico, como un trueno lejano. Los tres miramos hacia el cielo y vimos una nave entrando en la atmósfera a gran velocidad. Una estela de luz azul la seguía, y parecía descender directamente frente a nosotros. Y justo a la hora, la mujer era puntual.
Jumba: ¡Ohhh! ¡Ella llegó con estilo! –dijo emocionado, más que todo para molestar al de un ojo, cosa que logró con facilidad.
Pleakley: ¡ESTILO?! ¡Eso es una maniobra de descenso de emergencia! ¡Vamos a morir todos! –gritó corriendo detrás de él. A lo cual pensé que solo estaba siendo exagerado ya que Jumba parecía tranquilo.
La nave aterrizó en la playa con un estruendo que levantó polvo y arena por todas partes. La compuerta se abrió lentamente, y de su interior bajó una figura alta y elegante, la gran Concejal en persona, acompañada por dos guardias. Sus ojos se posaron directamente en mi, lo que me tomó con la guardia baja.
Gran Concejal: Así que tú eres el joven de quien el señor Rivera me habló –dijo con voz profunda pero serena–. un placer. Por favor guía el camino a donde será la reunión, la cual espero que valga la pena. Según tengo entendido, me dijeron que se trataba de algo de una importancia crucial... ¿Qué hacen ustedes dos aquí? -pregunto mirando al par de aliens que se pusieron tensos.
Pleakley: Venimos a escoltarla también, a la reunión... y si, es algo sumamente crucial, señora... Sólo le pido que mantenga la menta abierta, y si no resulta de forma satisfactoria... ¡Fue todo idea de Jumba, él me obligó! -grito exasperado tras fallar en buscar las palabras correctas. Cosa que hizo al más grande bufar.
Jumba: No seas mentiroso. Accediste ante la idea de tener más 254 en diferentes colores -dijo llamando la atención de la mujer.
Gran Concejal: ¿Más 254 en diferentes colores? -pregunto en lo que tanto yo como los otros dos solo le pedimos que nos acompañara. De allí en más solo abrí la puerta de la limusina para que abordara.
Para acto seguido pulsar un botón para enviar la señal a la nave de los Onís del rayo, que procedieron a teletransportar el vehículo con todos dentro a San Fransokyo en una fracción de segundos. Cosa que sorprendió a la concejal que por la expresión en su rostro, definitivamente noto la tecnología.
Gran Concejal: Esa era tecnología del planeta Oniboshi, esa teletransportación de materia a través de fotones de energía sobrecargada en frecuencia de onda expansiva es inconfundible... es fascinante -dijo mirando por la ventana, viendo cosas que iban desde robots a criaturas que discrepan bastante de su idea del aspecto humano- parece una calle de Contraxia o de Xandar... pensé que faltaban algunos siglos para que los humanos alcanzarán este nivel de tecnología y de aceptación de otras razas... Usted no tuvo nada que ver ¿o sí, señor Jookiba? -preguntó al científico que solo soltó una carcajada amena.
Jumba: Ja, ya quisiera, resulta que hace como cien años, la ciudad llamada San Francisco sufrió una penosa calamidad que la dejó virtualmente en ruinas, con ayuda de inmigrantes del territorio denominado Japón, la ciudad fue reconstruida y hasta mejorada en avances tecnológicos, y en honor a la colaboración entre estadounidenses y japoneses, la ciudad fue rebautizada como San Fransokyo -explicó el origen de la ciudad- así como la ve. Esta es la ciudad humana más avanzada del planeta. Al menos en el denominado continente americano.
La limusina se detuvo frente a un edificio que a mi parecer parecía venir de otro tiempo. Su diseño era limpio y futurista, con placas de vidrio reforzado que reflejaban el sol y drones de seguridad volando en formación sobre la entrada. El logo de Rivera Solutions brillaba en una pantalla holográfica, acompañado de un mensaje de bienvenida multilingüe.
Gran Concejal: Hmph... al menos tienen buen gusto para la arquitectura.
El chofer abrió la puerta y todos descendimos. Yo fui el último en bajar para proceder a guiar al grupo al lugar de la reunión. Hasta el momento lo estaba haciendo bien, pero igual sigo sintiéndome algo decepcionado, no lo se... desde hace tiempo siento que debería luchar, probar mis habilidades en combate ¿por qué será?
Eugeo: Gran Concejal. Sea bienvenida a la sede central de la empresa. Mi jefe, el dueño y CEO le espera en su oficina -dije guiando el camino- como puede ver, en Rivera Solutions nos especializamos en tratar de satisfacer las necesidades de la humanidad en diferentes aspectos. En robótica, tecnología, medicina, salud, entretenimiento, genética y otras áreas, por mencionar algunas cosas.
Gran Concejal: Es fascinante, pero no termino de entender qué tiene que ver conmigo, porque tengo un modo de suponer cómo supieron de la existencia de la Federación Galáctica Unida -comentó mirando de reojo a Jumba y Pleakley quienes rieron con cierto nerviosismo- según se para ustedes es desconocida su existencia dado que no pidieron ayuda para evacuar o pedir refuerzos cuando ocurrió la invasión Chitauri.
Oh, ese suceso. Mejor no hablar de eso, aparte de que fue un suceso que acabó siendo un antes y un después en la historia del planeta, para mi en particular no era grato recordar porque ni siquiera recuerdo si lo viví o no.
Eugeo: Oh no. Aparte de que según tengo entendido este planeta es uno de los nueve mundos de Asgard, que según tengo entendido están aislados a nivel de gobierno del resto del universo. Quien nos habló de la Federación fue Gantu.-dije para su sorpresa.
Gran Concejal: ¿El ex comandante Gantu?
Eugeo: Si, digamos que en este caso aplica qué la basura de uno es el tesoro de otros. Sin faltarle el respeto a Gantu comparándolo con basura, evidentemente -dije a la vez que una sombra de gran tamaño apareció de repente.
Supongo que en este caso aplica la frase de que "solo di el nombre del diablo para que este aparezca".
Gantu: Hämsterveil me decía peor -dijo encogido de hombros antes de hacer una leve reverencia- madame, se ve como una nebulosa recién formada.
Gran Concejal: Ex comandante -dijo respondiendo al saludo- ... veo que le ha ido bien luego de haber sido dado de baja de la federación.
Gantu: Tuve mi mala racha, pero ahora me siento con cierta plenitud -dijo sonriendo- me gustaria charlar con usted, pero el deber llama. El trabajo de guardaespaldas nunca termina -comentó antes de retirarse.
La gran Concejal observó a Gantu alejarse con una ceja arqueada, como si hubiera visto algo que no esperaba. Yo, por mi parte, no pude evitar pensar que todo esto parecía sacado de un sueño demasiado vívido: extraterrestres, teletransportación, tecnología de otro mundo... y yo, un muchacho de cabello dorado y cuerpo metálico, que no tenía idea qué hacía allí... ah sí, ganar el salario mínimo.
Gran Concejal: Bien... supongo que las explicaciones tendrán sentido una vez que hablemos con su jefe –dijo mientras avanzaba hacia el ascensor de cristal que nos llevaría al último piso.
El ascensor se cerró suavemente detrás de nosotros y comenzó a subir en silencio. La ventana y muro transparente permitían ver la ciudad entera desplegarse a nuestro alrededor. Los edificios brillaban como si fueran de plata bajo el sol del mediodía, y los drones de transporte surcaban el cielo como bandadas de aves.
Pleakley: No importa cuántas veces vea esta ciudad, me sigue dando escalofríos... demasiadas máquinas.
Jumba: ¡Bah! ¡Solo tecnología inferior comparada con lo que yo podría construir en mi laboratorio! –gruñó con orgullo.
La gran Concejal no comentó nada, pero podía sentir su mirada fija en mí de vez en cuando, como si tratara de leer algo en mi expresión.
Finalmente, el ascensor se detuvo y las puertas se abrieron, revelando el pasillo que llevaba derecho al despacho del señor Rivera. Era una oficina amplia, con ventanales del suelo al techo y una vista panorámica de toda la bahía, sin mencionar un decorado mixto que iba desde la elegancia a la excentricidad. En el centro de la habitación, detrás de un escritorio de diseño minimalista, estaba el señor Rivera, vestido con su usual traje impecable y una sonrisa diplomática en el rostro.
Eugeo: Señor Rivera. Con usted la única en su clase, la ilustre Gran Concejal -dije dando pasa a la dama con una reverencia.
Héctor: Gran Concejal –dijo inclinando levemente la cabeza en señal de respeto– bienvenida a Rivera Solutions. Espero que el viaje haya sido agradable.
Gran Concejal: Fue... eficiente. Veo que usted no es el típico empresario, señor Rivera –respondió con tono neutral refiriéndose al decorado de la oficina antes de tomar asiento frente a él–. Ahora explíqueme, ¿por qué exactamente me ha hecho venir hasta aquí?
Héctor: Nunca me ha gustado ser tal cosa como alguien "típico", madame. Me presento, mi nombre es Héctor Rivera y como ve, soy un humano que le gustaría hablar seriamente con usted de cierto tema ilegal... O mejor dicho de 626 temas ilegales para ser más exactos -dijo sonriendo con calma.
Tras decir esas palabras, el señor Rivera activó un holograma sobre la mesa. En el aire aparecieron proyecciones de varios experimentos de Jumba que ya habían sido capturados y rehabilitados, junto con datos de progreso y estadísticas.
Gran Concejal: Veo que está enterado de los experimentos genéticos ilegales del señor Jookiba que se encuentran en el denominado Hawaii -dijo mirando con recelo las imágenes proyectadas.
Héctor: Fue accidente más que todo. Mi hijo encontró uno de ellos. Carmen, querida ¿puedes venir? -pidió por el comunicador.
Para que en cuestión de segundos uno de los así llamados experimentos hiciera acto de aparición. 123, Carmen, la cual se acercó con una gran sonrisa para pararse al lado del CEO que tenía una sonrisa de satisfacción.
Héctor: Madame, le presentó al Experimento 123, mejor conocida como Carmen.-presentó al ser a la concejal que se mostró sorprendida.
Gran Concejal: ¿Uno de los experimentos se liberó lejos de la zona de contención de nombre Hawaii? ¿Cómo es que la ciudad no ha sido destruida? -pregunto causándole gracias al señor Rivera.
Héctor: Empezando porque, vamos, hacer bailar a la gente no es que se diga muy destructivo, me dará la razón, madame -dijo casual- pero aparte de eso. Solo bastó una pequeña modificación a su código genético para pasar de ser una pequeña traviesa a toda una santa -dijo con tranquilidad.
Al mismo tiempo que la criatura denominada Carmen solo juntó sus manos, momento en que una luz apareció sobre ella e incluso podría jurar que se escuchaba un coro angelical o algo así. Vaya, eso si es creerse santa.
Jumba: Veo que también se ha vuelto más prepotente viviendo aquí -fue todo lo que dijo divertido.
Gran Concejal: ¿Qué logró modificar su código genético haciendo que pasara de mala a buena, dice? Eso es de mi interés -admitió con sinceridad.
Héctor: Con ayuda del doctor Jookiba, en colaboración con una científica local, la doctora Amy Hall -explicó- hemos descubierto el modo de asegurar que los experimentos puedan dejar de lado su programación original. Y en vez de ser armas, puedan servir como individuos de bien para la sociedad.
Gran Concejal: Eso en los casos en que Lilo y Stitch tuviesen problemas para reformar al Experimento en cuestión, o hallarle un lugar donde pueda encajar, supongo -comentó en lo que el hombre de piel morena asintió.
Héctor: Justamente. De paso, otra razón para llamarla es que viera el progreso actual de la pequeña y su mascota en la labor qué usted les dio -dijo dándole una carpeta con un resumen de ello- mi propuesta es simple. Los experimentos de Jumba han demostrado ser extremadamente versátiles. Con la supervisión adecuada, podrían contribuir de manera significativa al desarrollo de nuestro planeta. Control de desastres, exploración espacial, avances en biotecnología... y, lo más importante, cooperación entre especies. Esto por medio de la fabricación de dichos experimentos por parte de mi empresa. Copias de los originales, por así decirlo.
Y no hace falta decir que dicho comentario hizo a la mujer sobresaltarse casi que al instante.
Gran Concejal: Es un muy buen progreso.... ¿Fabricación de experimentos, dice? –repitió lentamente, dejando la carpeta sobre la mesa y entrelazando las manos sobre su regazo– está usted consciente de que los experimentos originales fueron clasificados como armas biológicas de nivel máximo, ¿verdad? Incluso con las modificaciones, replicarlos sin supervisión directa de la Federación sería considerado una violación grave de nuestras leyes.
Héctor: Lo entiendo perfectamente –respondió sin perder la calma– por eso mismo quiero su supervisión. No busco crear un ejército ni un mercado negro de armas vivientes, sino establecer un marco de colaboración oficial con la Federación. Rivera Solutions proveería la infraestructura y el equipo de desarrollo, pero la Federación mantendría la última palabra en la aprobación de cada proyecto.
Gran Concejal: Interesante... –dijo, inclinándose ligeramente hacia adelante– usted propone convertir lo que fue un proyecto ilegal en un programa de cooperación interplanetaria.
Pleakley: ¡Eso suena increíble en teoría! –interrumpió emocionado, aunque en seguida bajó la voz al notar la mirada de la concejal– ...pero también podría terminar muy mal si la información cae en las manos equivocadas.
Jumba: ¡Bah! La información ya está en las manos equivocadas desde que yo fui arrestado por primera vez –dijo riendo para sí mismo– pero los humanos parecen ser buenos cuidadores de experimentos... incluso mejor que algunos miembros de la Federación.
Señor Rivera: No todos los humanos, soy el primero en reconocerlo –respondió él sin perder la sonrisa ante la concejal– ustedes obtendrían un lugar seguro para probar nuevas formas de convivencia y diplomacia a través de los experimentos, y nosotros acceso a conocimiento y tecnología que podría mejorar la calidad de vida de millones de personas ¿Qué piensa?
La gran Concejal guardó silencio unos segundos, observando a cada uno de los presentes. Su mirada se detuvo en Carmen, quien sonreía inocentemente, y luego en mí. Por alguna razón, sentí que podía ver más allá de mi cuerpo metálico, como si intentara descifrar lo que yo realmente era.
Gran Concejal: Señor Rivera, su propuesta es... audaz, y no mentiré, me ha dejado impresionada. Pero antes de considerar una colaboración, necesito pruebas. Necesito ver con mis propios ojos que esta "reformación" es confiable, que estos experimentos realmente pueden contribuir al bien común sin riesgo de revertirse a su programación original.
Mi jefe no se inmutó ante esas palabras. De hecho, parecía que había estado esperando exactamente esa respuesta.
Héctor: Por supuesto, madame. Aunque deb3 reconocer que el éxito con los experimentos 007 y los 062 que usamos como primeros voluntarios para este proyecto es bastante impresionante -dijo confiado- además, tampoco sería hacer clones de CADA experimento, soy consciente de que muchos experimentos serían peligrosos si hubiera más de uno por ahí suelto.
Bueno, considerando que toda la serie 4 fue hecha con fines bélicos y toda la serie 6 con intenciones de conquista galáctica, pues razón no le falta.
Héctor: No obstante, tiene que reconocer que entre las reprogramaciones y el uso normal de varios de ellos. Sencillamente un buen número de ellos son más beneficiosos qué perjudiciales -argumentó mientras que por su parte la mujer de alcurnia se puso a meditar en sus palabras.
Gran Concejal: Señor Rivera. Solo tengo una pregunta... ¿Por qué buscar hacer todo esto? ¿Quiere tener su propia armada? -preguntó sacando una risa casi burlona al de piel morena.
Héctor: Para esa gracia sólo construyó un montón de robots y ya -dijo restando importancia al asunto- Nah, mis motivaciones son más simples. El sistema dice que solo debes vivir tu vida como alguien normal. Trabajar, tener hijos, conformarte con la monotonía mientras los ricos se hacen ricos y los pobres se hacen pobres- Todo mientras vives en un mundo gris y amargado. Y yo no quiero seguir ese estilo de vida porque me parece estúpido -exclamo con orgullo sirviéndose un trago- culpe al juego y no al jugador, Madame.
La gran Concejal lo miró en silencio por unos segundos, como si midiera cada palabra que había pronunciado. Luego, muy lentamente, dejó escapar una risa suave y breve, algo que parecía un lujo en alguien tan seria como ella.
Gran Concejal: Admito que rara vez escucho a un humano hablar así de su propio sistema. Usted no solo quiere cambiarlo... quiere reescribir las reglas del juego.
Héctor: Exacto –dijo con esa sonrisa tranquila que lo caracteriza– y no soy tan arrogante como para pensar que puedo hacerlo solo. Pero con aliados que puedan ayudarme a mover las piezas correctas... quizás podamos hacer algo que valga la pena para las generaciones futuras -dijo en lo que la alíen asintió.
Gran Concejal: Espero que entienda que hay una razón por la que consideramos qué la tierra es un planeta en subdesarrollo. Aún no están listos para manejar el concepto de la vida interplanetaria.
Héctor: En un inmenso general le doy la razón, madame -admitió para su disgusto- en especial con "patriotas" que creen que cualquier cosa distinta automáticamente es una amenaza para su país, y sólo para su país. Pero para eso estoy yo. Para eso hago qué la gente crea en lo imposible. Pero créame que una de mis metas sea que haya mucha más gente de mente abierta qué escéptica. Y cuando eso pase, entonces podría considerar abrirle las puertas de los demás mundos a este.
Vaya, aun para alguien amnésico como yo, escuchar eso para mí era sinónimo de que el señor Rivera estaba buscando entrar en las grandes ligas sin recibir invitación, y encima queriendo ser tratado como un igual. No obstante... parecía que lo estaba logrando, cosa que decir que era impresionante era quedarme corto.
Gran Concejal: ... Bien, señor Rivera. Tendrá su oportunidad de demostrarme que esta idea es viable. A partir de hoy, designaré un pequeño comité de observadores de la Federación para supervisar el proyecto –dijo poniéndose de pie con la elegancia de una reina– si los resultados son favorables, su propuesta podría convertirse en el primer acuerdo de cooperación oficial entre la Federación Galáctica y los humanos.
Pleakley: ¿¡PRIMER ACUERDO OFICIAL!? –gritó entusiasmado, saltando como si le hubieran dicho que había ganado un premio– ¡Eso es histórico! ¡Voy a escribir un ensayo sobre esto para la universidad!
Jumba: ¡Bah! Mejor escribe un libro, así podrás presumirlo en las fiestas aburridas de la Federación –se burló el científico, aunque no podía ocultar su sonrisa.
Héctor: En realidad creo que tengo la idea perfecta para este comité de evaluación y para usted, madame -dijo ganándose la atención de la burócrata- y para llevar dicha idea a cabo, me gustaría que nos honrase con su presencia asistiendo a una gala que haré próximamente, a la cual asistirán personas que, tenga la seguridad, estarán abiertas a saber de la vida en otros planetas, y a aceptar que lo que ocurra en la gala se quedará en la gala
Pleakley: ¿Será otra fiesta de té? -pregunto emocionado.
Héctor: No, esta vez será una gala nocturna. Una fiesta de blanco y negro -declaro- con el detalle de que mantendremos todo a puerta cerrada, lo que pase ahí se quedará ahí, por ejemplo que conozcan a una diplomática intergaláctica.
Gran Concejal: Una gala... No recuerdo la última vez que asistí a un evento de gala, de hecho –mencionó con cierto aire de curiosidad– debo admitir que no esperaba algo tan... social. Pero si será un evento cerrado y de carácter diplomático, podría ser una buena oportunidad para evaluar de cerca a los individuos implicados en este proyecto.
Héctor: Justamente –respondió él, tomando otro sorbo de su bebida–. Además, los invitados no son cualquier persona. Empresarios, filántropos, científicos y... algunos héroes. Personas con visión de futuro. Créame, si usted quiere ver si la humanidad está lista, este es el mejor grupo de prueba que podrá encontrar.
Gran Concejal: Muy bien, señor Rivera. Asistiré a su gala. –dijo con un gesto leve de aprobación–. Pero entenderá que no asistiré sola. Además de que espero que lo que muestre allí respalde todas las palabras que me ha dicho hoy.
Héctor: Por supuesto, madame. Puede traer a su escolta. No la decepcionaré –respondió él con total confianza, poniéndose de pie para estrechar la mano de la dama.
La reunión concluyó poco después, con la Gran Concejal y sus guardias retirándose para regresar a su nave. Jumba y Pleakley fueron detrás de ella, discutiendo acaloradamente sobre si la comida de la gala debería ser exclusivamente terrícola o incluir platillos de otros planetas. Aparte de también hablar sobre las posibles demostraciones que los experimentos reformados podían hacer.
Me quedé unos segundos solo en la oficina, viendo el holograma de los experimentos apagarse. Algo en el aire me decía que lo que estaba por venir sería importante. No solo para la compañía... sino para mí. Y no solo con la gala, sino con el futuro en general.
Héctor: ¿En qué piensas, muchacho? –preguntó de repente mi jefe, sacándome de mi trance.
Eugeo: ...En nada en particular –mentí, girándome hacia él– solo me preocupa que no tengamos tiempo suficiente para preparar todo.
Héctor: Tiempo suficiente hay. Lo que no hay es margen para errores –respondió con tono serio, caminando hacia la ventana– esta gala no es solo un evento para impresionar. Es nuestra carta de presentación ante la Federación. Si esto sale bien, podríamos abrir un camino que nadie en este planeta ha recorrido.
Eugeo: ¿Y si sale mal? –pregunté antes de poder detenerme.
Héctor: ¿Si sale mal? Pues... –sonrió de forma enigmática– entonces será un desastre... pero uno memorable. Y a veces, eso también es necesario.
No pude evitar sonreír ante su respuesta. Tal vez tenía razón. Siendo en ese momento que senti una mano sobre mi hombro.
Héctor: Solo no te sobre esfuerces, algún día recordarás todo. Hasta entonces sigue haciendo un buen trabajo. Y descuida, he notado tu aparente impaciencia. Pronto tendrás una pelea para despejar la mente. Mientras tanto, sigue siendo un buen trabajador, tu ayuda es apreciada -dijo revolviéndome el cabello. Una acción que aunque me incomoda, también me gusto por la calidez que sentí.
Mientras salía de la oficina y me dirigía al área de logística, noté un extraño zumbido en mis oídos. Fue breve, pero lo suficientemente fuerte para obligarme a detenerme. Cerré los ojos y, por un instante, vi algo... un destello de mi pasado.
Espadas. Un bosque. Una voz femenina gritándome algo. Y la silueta de un chico de cabello negro... Kirito... ¿Qué es un Kirito?
Abrí los ojos de golpe, con el corazón acelerado. El pasillo estaba vacío, y el sonido había desaparecido.
Eugeo: ...¿Qué demonios fue eso? –susurré para mí mismo.
Antes de sólo restar importancia al asunto y volver a mis labores. Vive y recuerda un día a la vez, Eugeo.
_____________________________________________________________
(Hiro Pov)
(Casa de los Crazy Land, San Fransokyo)
Muy bien Hiro, respira hondo, cuando se lo expliques seguro que Miguel lo entenderá. Es decir, solo fue un accidente, no se trata de algo que hayas querido que pasara... ¿a quien engaño? ¡Esta vez sí que metí la pata!
Hiro: Menuda suerte la mía... ¿por qué estas cosas me pasan a mí? -dije lamentándome no queriendo acercarme a donde estaba Miguel, me sentía estresado de saber que pensaría si se lo decía. Pero se supone que somos novios ahora, la honestidad es importante ¿no?
Y de antemano te digo que te calles, ángel en mi hombre que me llama hipócrita por no decirle que soy capitán encanto de los grandes héroes ¡es una cosa muy diferente!
Como sea ¿Qué paso? Bueno, para empezar no se como, Rosa se enteró de mi pequeño tiempo trabajando con Momakase (obvio sin decirle que lo había hecho a cambio de que ella se callara las identidades secretas tanto mía como la de mis amigos como los grandes héroes). Pero en vez de reclamarme, me dio trabajo extra (lo que me faltaba). Siendo así que acabe en una unidad de ataque hacia nada más que una nave alienígena de la raza Kree.
Lo se, son muchas preguntas ¿Empezando con que quienes conforman esta unidad? Pues nada más que las viudas negras, o así tengo entendido que se hacían llamar durante su tiempo en la habitación roja. Donde se llevó a cabo el programa viuda negra, que consistió en un lavado de cerebro y entrenamiento de alto secreto soviético que usaba mujeres criadas como asesinas y sometidas a hipnosis para servir a los rusos. No hace falta decir que gracias a Rivera Solutions toda la instalación fue destruida y las chicas liberadas, contratadas.
Ahora ¿Cuál fue su primera misión? Chaotic.
Ese era el nombre de un juego multiplataforma que aseguraba llevar la experiencia del juego de cartas y online a un nuevo nivel. No solo pudiendo coleccionar e intercambiar cartas coleccionables de gran diseño, sino que también enfrentando a otros jugadores online.Una opción más segura para quienes eran temerosos de los videojuegos de realidad virtual multijugador, desde Swort Art Online a los que juegan esos juegos muchos los llaman suicidas.
De cualquier modo, a simple vista Chaotic parecía un juego inofensivo. De no ser porque después de alcanzar cierto nivel, los jugadores son teletransportados a una especie de centro de reunión donde se podían transformar en los monstruos del juego para pelear de verdad en torneos y todo.
Dichos jugadores tienen teorías de cómo es posible eso, pero la realidad es más alejada a lo que creen... el juego es un experimento de los Kree para recopilar datos de tácticas de batalla, y de una vez buscar a los humanos más hábiles para secuestrarlos, quitarlos, y volverlos en fieles esclavos del imperio Kree.
Así que sin más que explicar, la misión había dado lugar.
(Flashback de hace unas horas)
Así que ahí estaba yo, con un uniforme que claramente no era mío (un traje táctico negro con detalles rojos, prestado por las Viudas) tratando de no temblar mientras el avión sigiloso de Rivera Solutions descendía en modo invisible hacia la nave Kree.
Hiro: "¿Por qué acepté esto?" -me repetía una y otra vez en la cabeza- "Podría estar en mi taller, tomando té con Baymax, terminando algún proyecto, papeleo o incluso en algún proyecto de animación de Leo... pero no, tenía que jugar al agente secreto con ex asesinas rusas" -me queje en mis pensamientos antes de sentir una palmada en el hombro.
Cortesía de una de las chicas del escuadrón, Yelena Belova, de todas ella era la que parecía más abierta, lo que no era mucho, pero comparada con las otras al menos hacía un esfuerzo por incorporarse a la sociedad.
Yelena: Céntrate, chico. Necesitamos a alguien que entienda la tecnología de estos alienígenas. Si no desactivas el centro de control de su nave antes de que salten al hiperespacio queriendo escapar, todos seremos vapor en el mejor de los casos -dijo sonriendo a la vez que yo solo sonreí débilmente.
Nada de presión, ¿verdad?
La nave Kree era enorme, como una ballena metálica flotando en medio de la estratósfera. Apenas entramos, la sensación fue de otro mundo: pasillos negros, luz azulada, y esas puertas que se abrían como si estuviera respirando. Me puse a trabajar en el panel de control mientras las Viudas despejaban la zona con movimientos tan precisos que daban miedo.
Pero entonces pasó lo que no debía pasar: encontré el laboratorio principal. No sólo tenían datos de Chaotic... ¡sino también perfiles completos de jugadores! Fotos, historiales de combate, análisis de patrones de pensamiento. Incluso tenían a los jugadores allí dormidos, escaneando sus mentes mientras ellos creían que estaban jugando.
De allí que sin que nadie me lo dijera, procedí a despertar y liberar a los jugadores que no estaban entendiendo lo que pasaba, incluso algunos se pusieron hostiles creyendo que era alguna clase de truco o magia de una criatura del juego... rayos, ellos me hacen querer a mi no pasar tanto tiempo con los videojuegos. En todo caso, el problema fue cuando iba a despertar a otro chico.
En ese momento la nave se fue de lado por daños, y esto no lo hicieron las viudas. Sino las dos robots que trajimos con nosotros como peso pesado, XJ-9 que se supone que fue creada justamente para enfrentar amenazas del espacio. Y otra chica que aunque parecía una joven normal, con espada en mano era una amenaza para cualquier cosa que tuviese en frente. Alice.
¿De donde salió o de donde viene? Nadie lo sabe, y de lo que he visto, no es muy conversadora. Pero el asunto es que gracias a ella, terminé cayendo sobre el chico que estaba despertando, que solo se que su nombre de usuario era MajorTom... a quien termine besando. Para mi suerte, al menos no era feo.
El tiempo se detuvo.
Yo seguía encima de Tom (que creo que ese es su nombre), mis labios aún pegados a los suyos. La sacudida de la nave cesó, pero en mi cabeza el ruido era ensordecedor. Me levanté de golpe, con la cara más roja que una alarma de emergencia.
Hiro: ¡Yo no quería! –exclamé mientras él me miraba confundido, tocándose los labios.
Tom: ...¿Eh?
Antes de poder explicarme, Yelena apareció en la puerta con cara de pocos amigos.
Yelena: Genial. Justo lo que necesitamos en plena misión: un romance accidental –dijo, mientras señalaba el pasillo con su pistola– Hiro, concéntrate. Los sistemas se están reiniciando. Si no saboteas los sistemas antes de que los Kree recuperen el control, no saldremos de aquí vivos -dijo antes de irse disparando plomo a diestra y siniestra.
Yo solo asentí, deseando que el suelo me tragara. Tom se levantó, todavía desorientado, y para colmo me lanzó una sonrisa burlona.
Tom: Supongo que esto cuenta como un bonus de rescate, ¿no?
Hiro: ¡NO LO FUE! -grité antes de solo perderme de vista.
No había tiempo para discutir. Corrí por el pasillo hasta el núcleo, con Baymax en mi mente diciéndome "Hiro, tu nivel de estrés ha subido un 75%". Sí, Baymax, ya lo sé.
(Fin del flashback)
Al final la misión se completó con éxito. Los Kree fueron puestos bajo custodia, y toda la operación de Chaotic fue suspendida. Para disgusto de los jugadores a los que se les prometió que ya Rivera Solutions estaba trabajando en un nuevo juego que seguro les iba a ser de interés, lo que logró calmarlos al menos un poco.
De cualquier modo, ahora tenía que explicarle a mi novio sobre ese beso, no me entusiasma la idea, pero como sea, al mal paso darle prisa.
Hiro: Solo acabemos con esto de una vez -dije solo para extrañarme al escuchar gritos de motivación desde la parte trasera de la casa. Oh ya veo, hoy es día de entrenamiento.
Honestamente no se que se le metió a Miguel en la cabeza con buscar a un entrenador personal si ya de por sí tiene un cuerpo que haría envidiar a los modelos. Pero a palabras suyas dice que quiere "ganarlo", sea lo que sea que eso signifique. Por esa razón acabó contratando a este tipo que se supone lo conocen como el entrenador definitivo, Nekomaru Nidai.
Y no era sólo hablar por hablar. Aparentemente el hombre ha entrenado leyendas. Entreno a un jugador de béisbol que fue fichado por las ligas profesionales mientras estaba en secundaria, un skater fuera de serie que podía hacer un 720 como si nada, y un jugador de tenis que ganó un partido de 36 horas, por muy loco que suene. Si, el sujeto era cotizado por casi todas las organizaciones deportivas, y aquí estaba, gritando a mi novio.
Nekomaru: ¡Vamos por la de oro, Rivera! ¡Conmigo llegarás al éxito, sea cual sea tu meta! ¡Debes exhalar al ejercer tu fuerza e inhalar al relajarte! ¡No hay ganancia sin dolor, los músculos se cansan mientras crecen! -grito motivando a mi pareja que estaba haciendo pesas.
Miguel: Lo entiendo ¿pero no puede bajar el volumen?
Nekomaru: ¡Pero a ti te agrada que te motive así! ¡Cuando entrenamos, nuestro cuerpo y alma se hacen uno! ¡PUEDO LEERTE COMO UN LIBRO ABIERTO! -dijo en lo que yo solo sentí una gota de sudor bajar- ¡y si luego cuando toque hacer cardio quieres vomitar, entonces vomita y sigue! ¡Yo hice lo mismo! ¡Los humanos no mueren tan fácilmente como piensas!
Yo estaba parado en el marco de la puerta, viendo como Miguel levantaba pesas con aparente esfuerzo mientras Nekomaru lo motivaba como si estuviera en medio de un torneo de lucha libre. Cada vez que Miguel dejaba las mancuernas en el suelo, Nekomaru rugía como si hubieran ganado algún campeonato mundial.
Hiro: Vale, Hiro, respira... Ahora no es el mejor momento... pero si no lo haces ahora, luego te vas a arrepentir.-me dije en voz baja antes de acercarme, tratando de no interrumpir el entrenamiento, pero Miguel me vio de reojo y sonrió.
Miguel: Hiro, hola -dijo con una sonrisa suave- ¿Ya terminaste con tus cosas de hoy?
Su tono relajado me dio un golpe en el estómago. ¿Cómo se lo iba a decir sin que sonara como que lo había engañado?
Hiro: Eh... sí, bueno... Más o menos –dije, rascándome la nuca nervioso– ¿Podemos hablar un momento cuando termines? -pregunte en lo que Miguel levantó una ceja, notando mi expresión.
Miguel: Claro, hablemos ya... –miró a Nekomaru– ¿puedo tomar un descanso?
Nekomaru: ¡¿Un descanso?! –gritó, pero luego nos miró a ambos y suspiró dramáticamente– Bien, pero sólo cinco minutos, ¿entendido? El cuerpo no espera ¡Tener músculos firmes y un gran balance muscular no es excusa para descuidar el entrenamiento! -dijo a la vez que Miguel asintió y dejó las pesas.
Para luego tomarme de la mano y llevarme un poco más lejos, a la alberca, para luego tomar asiento cerca de la piscina.
Miguel: Debo decir que me sorprendiste, Hiro. Te pido disculpas por verme así, estaba terminando mis ejercicios de la mañana -dijo refiriéndose a que estaba todo sudado, lo que hacía que sus músculos se marcaran en su ropa mojada... ay dios.
Y no ayudó que cuando estaba a punto de formular una oración, el desgraciado solo se quitó la camisa sin vergüenza alguna ¡¿Así como se supone que voy a concentrarme?!
Miguel: ¿Me harías el favor de hacerme un masaje? La verdad, siempre acabo un poco adolorido luego de hacer mis ejercicios. Y más cuando Nekomaru se pone intenso -pidió mientras que yo sentía el corazón a mil por hora.
Perfecto, solo perfecto... ¿Cómo voy a confesar algo si este hombre está aquí medio desnudo, sudado, y pidiéndome que le toque la espalda?
Hiro: E-eh... claro... –dije, con mi voz subiendo de tono como si hubiera tragado helio.
Me senté detrás de él mientras Miguel se acomodaba de espaldas frente a mí, cruzando los brazos y relajando los hombros. Era un escenario trampa: el reflejo del agua de la piscina hacía brillar su piel, y el olor a jabón mezclado con sudor me daba justo en las fosas nasales.... Vamos Hiro, solo dile lo del beso y ya. Fácil. Simple. Cómo quitar un curita...
Miguel: ¿Qué dijiste? -pregunto en lo que yo comencé a masajear sus hombros, tratando de que no notara mi sonrojo.
Hiro: ¡Nada! Solo... que tienes los hombros muy tensos.
Miguel: Hehe, sí. Nidai dice que el dolor es señal de progreso. Aunque sospecho que solo disfruta gritar -dijo antes de hacer una expresión de placer- benditas manos las tuyas, chinito lindo. Tienes manos tan suaves, si no fuera por tu amor por la robótica, te diría que te animes a una carrera como masajista.
Yo solté una risa nerviosa, intentando relajarme mientras trabajaba con mis manos en su espalda. Mi cerebro gritaba que era el peor momento para una confesión, pero mi corazón insistía en que la honestidad era importante.
Hiro: Solo eres un adulador -dije con una sonrisa por lo bajo.
Miguel: Solo digo la verdad, cariño, tienes tantos talentos.
Hiro: Como digas.
Miguel: ... ¿Todo bien, Hiro? -me pregunto de repente- ¿Qué pasa? Tienes esa cara de "me metí en un problema que no puedo explicar".
Demonios ¿siempre fue tan bueno leyendo mi ?
Hiro:... No es nada.
Miguel: ¿Seguro? ¿No será que te da pena nuestra cercanía? -pregunto queriendo molestar un poco, solo para preocuparse al notar mi expresión.
Hiro: ¿Te digo algo? Estoy a nada de irme, me recuerdas a alguien que me saca de quicio con solo hablarme -dije no pudiendo evitar que la imagen de cierto ladrón de pacotilla se cruzara por mi cabeza.
Momento en que acabé siendo abrazado de la cintura y atraído al regazo de este gran prospecto de belleza masculina... maldición, ahora hasta siento que necesito hielo en la entrepierna otra vez.
Miguel: ¿Quién molesto a mi chinito lindo para pegarle? -preguntó empezando a darme besos por todo el rostro que aunque me sacaban unas risas, también me hacían sentir peor cada uno de ellos.
Hiro: No quiero hablar de eso -murmuré con algo de amargura antes de que él juntara nuestras frentes con cariño.
Miguel: Un día te saco el nombre de quien te molesta, y ese día yo me lo madreo, nadie hace que tengas una expresión distinta a una sonrisa en mi guardia -dijo con ternura, lo que solo me mortifico.
Respira, Hiro... Ahora o nunca... Fue lo que pensé antes de separarme un poco de Miguel, sintiendo su mirada curiosa sobre mí.
Hiro: Miguel... Tengo que decirte algo –dije bajando la voz, sintiendo cómo mi corazón latía tan fuerte que podía escucharlo en mis oídos.
Miguel: Vale... eso sonó importante –dijo suavemente, su tono pasó de juguetón a atento. Me soltó para darme espacio, pero no apartó la mirada de mí– Díme.
Hiro: Bueno... en la misión de hoy... –empecé, tragando saliva y bajando la mirada, pero mis palabras se atascaron– las cosas se pusieron un poco... caóticas.
Miguel: ¿Por eso el juego se llama así? -pregunto divertido haciendo que quisiera arrojarle una almohada.
Ahora mismo no estaba para payasadas.
Hiro: No bromees –dije apretando los puños, mi voz sonaba un poco más aguda de lo normal– esto es en serio -pedi en lo que él asintió- mira... encontré a los jugadores que estaban atrapados, los liberé, hice mi parte... pero cuando iba a despertar a uno de ellos... la nave se sacudió por los ataques y... bueno... –mi cara se sentía como si ardiera– ... terminé... besando a alguien por accidente.
Hubo silencio. Miguel me miró sin parpadear por unos segundos que parecieron una eternidad. Luego dejó escapar una pequeña risa incrédula.
Miguel: ¿Besaste a alguien... por accidente?
Hiro: ¡¡Sí!! –exclamé, cubriéndome la cara con las manos– No fue intencional, te lo juro. No estaba pensando en eso, ni siquiera me gusta, ni lo conozco... Fue un maldito accidente de física y gravedad, ¿de acuerdo? -dije ya imaginando toda una discusión por venir.
Miguel se quedó mirándome, y por un momento temí que se enojara. Pero para mi sorpresa, sonrió, esa sonrisa suya que me deja sin palabras.
Miguel: Dios mío, eres adorable –dijo soltando una carcajada y acercándose para apartarme las manos de mi rostro– Te estabas torturando por eso, ¿verdad?
Hiro: ¿¡Cómo no iba a torturarme!? ¡Tú eres mi novio! No quería que pensaras que... que te estaba engañando o algo así -dije con vergüenza. En lo que mi novio negó con la cabeza, acariciándome la mejilla con el pulgar.
Miguel: Hiro, mírame. Sé quién eres. Confío en ti. Si dices que fue un accidente, te creo –sonrió un poco más travieso– aunque... parece que fue un accidente interesante, ¿eh?
Hiro: ¡Miguel! –me quejé tapándome la cara de nuevo, más rojo que nunca.
Miguel: Solo digo, la próxima vez invita bebé, escuche que los beso de tres no son una cosa nada mal -sugirió mientras que yo tenía la punta de las orejas rojas- pero ya en serio, ¿porque estaría molesto? Estar enojado implicaría qué no confío en ti. Y si lo hago.
... Sus palabras eran sinceras, eso es un hecho. Pero no se porque, sentía que no estaba siendo del todo transparente, casi podía escuchar sus pensamientos, y no eran nada tranquilos "¡Oh, miserable hijo de puta! ¡Le voy a sacar las tripas con un sacacorchos!"... no, seguro es mi imaginación todavía con algo de paranoia.
Hiro: ...¿Por qué eres así? –pregunté con un suspiro, medio aliviado, medio avergonzado.
Miguel: Porque te amo, y no voy a ponerme dramático por algo que claramente te tenía preocupado -dijo abrazándome y cargándome como si nada en lo que se ponía de pie.
Hiro:... Si quieres no veré de nuevo a ese chico Tom, si te molesta... -dije por si acaso, solo ganándome una mirada confundida por su parte.
Miguel: Eso depende ¿se propaso contigo? ¿Te está incomodando? ¿Hizo comentarios inapropiados?
Hiro: No, no... Nada de eso. Es simpático, y hasta es divertido ver lo penoso que es para socializar, solo que si te molesta la idea... -dije antes de volver a ser atacado con un bombardeo de besos de mi excesivamente cariñoso novio.
Miguel: ¿Qué hagas más amigos por tu cuenta, sin intervención de terceros? Para nada... Solo que si lo vuelves a besar al menos avisa primero ¿si? -dijo con una sonrisa que me hizo resoplar divertido.
Hiro: Tonto, estas loco... Sabes... Como que me gusta que me cargues así -dije abrazándolo por los hombros, no pudiendo evitar soltar un gemido cuando sentí sus labios en mi cuello.
Miguel: No antojes que me dan ganas de programar ratos para hacerlo nomás para consentirte -dijo con una sonrisa galante- y si, soy un tonto y estoy loco. Pero así me tienes y me quieres, ¿Qué te digo? Ahora deja de pensar en accidentes... y concéntrate en esto –dijo señalando sus labios antes de volver a besarme.
Por un segundo pensé que Nekomaru nos iba a gritar por estar perdiendo tiempo, pero en ese momento me daba igual. Por fin podía respirar tranquilo.
Momento en que me percate de que estaba besándome con todo y lengua con mi novio, semi desnudo conmigo abrazado a él, a nada de querer arrancarme la ropa también... ¡Esto es demasiado para mi! ¡Aún no estoy listo para... hacerlo en público!
Miguel: Sabes, creo que entrene suficiente por hoy. Y aún tengo que bañarme para no oler a león sudado ¿quieres bañarte conmigo o ya estoy abusando?
Si, ese fue mi punto de quiebre. De allí que mi respuesta fue desmayarme en sus brazos, lo que lo hizo reír con diversión y ternura. Dios, no se que pasara en el futuro pero a este hombre no lo suelto ni loco.
Miguel: Ok, aún tenemos que trabajar en eso.
Notes:
Y ese fue el capitulo de esta vez. Como siempre pueden votar, comentar, lo que gusten.
¿Y que les pareció?
De antemano les digo que el próximo cap será otro corto Higuel algo subido de tono, que también tendrá algo de desarrollo de mundo (otro crossover). En fin, tal vez esto parezca tedioso o que no avanza, pero no saben como me esta gustando la construcción del mundo de todo esto.
En fin, nos vemos el próximo cap, nos vemos.
Chapter 37: Corto 2: (Hiro x Miguel)
Notes:
(See the end of the chapter for notes.)
Chapter Text
(Hiro Pov)
(Pista de aterrizaje del castillo de la familia Nevermind, Novoselic, Europa oriental)
Ok, lo reconozco, esto no me lo espere en lo absoluto. Pero tampoco diré que me quejo al respecto, en especial porque teniendo todas las montañas de trabajo que usualmente tengo de Rivera Solutions, cualquier excusa para un descanso era bienvenida, y más si es una salida de fin de semana con mi novio.
Y todo gracias a que me desmayé en sus brazos hace un par de días. Lo que él tomó como un síntoma de fatiga por exceso laboral. Lo que hizo que una cosa llevará a la otra, y cuando la familia real de Novoselic dio permiso a Miguel de llevar un invitado para quedarse en el castillo real durante los días que la familia Rivera y la familia Nevermind le daban los últimos detalles a los tratados de comercio y de alianza entre Novoselic y San Fransokyo, fue cuando mi novio solo me dijo que me preparara.
Siendo así que sin darle tantas vueltas al asunto, ahora me encontraba viajando a Novoselic en un lujoso avión privado de la compañía de la familia de mi novio. A lo largo del viaje, mire por la ventanilla e imagine lo qué podría pasar cuando vuelva a ver a Miguel. Solo pensarlo me hacía sentir un calor en el fondo del estómago, más que todo por recordar lo que pasó la última vez que estuvimos los dos solos en una habitación sin supervisión alguna, nuestra primera cita... Y de lo que he escuchado, siempre es mejor la segunda vez.
El avión tocó tierra con suavidad en la pista privada del castillo. Desde mi ventana, vi cómo las luces del atardecer se reflejaban en las torretas góticas de piedra, dándole al lugar un aire de postal medieval. Respiré hondo; incluso a través del cristal, el paisaje de Novoselic parecía tener algo distinto en el aire. Era como si el tiempo pasara más despacio aquí.
Cuando la puerta del avión se abrió, el aire fresco de la montaña me golpeó de inmediato, frío y limpio. Bajé las escaleras y, tanto yo como mi equipaje fuimos trasladados al castillo en un buggy de golf. Ah, curioso, por la reputación que tenía este país esperaba un jeep militar o algo así, igual no me quejo.
Cuando llegué al patio delantero, no pude evitar levantar la vista y quedarme boquiabierto ante la antigua construcción que tenía delante. ¡Cuesta creer que tenga más de mil años y al mismo tiempo es demasiado fácil de asimilar y aceptar!
Siendo en ese momento que note a un hombre uniformado, el cual esperaba pacientemente junto a la puerta. Creo que debo hablarle si quería entrar al castillo ¿eh?.
Hiro: Hola, mi nombre es Hiro Hamada... vine a ver a Miguel Rivera -dije al tipo que solo le miro fijamente sin reaccionar ¿acaso en este país los soldados eran como la guardia inglesa o que?
Pero igual no tuve que esperar mucho antes de ver a mi chico acercándose, con su abrigo largo negro ondeando ligeramente con el viento, y esa sonrisa tranquila que nunca falla en desarmarme por completo.
Miguel: ¿Me buscabas? -me dijo sonriendo- me alegro de que hayas podido venir. Espero que hayas tenido un buen vuelo. Bienvenido a Novoselic.
Antes de que pudiera responder, él ya me había envuelto en un abrazo que me levantó del suelo por un segundo. El cansancio del vuelo, el estrés acumulado del extenuante trabajo constante... todo pareció desvanecerse en el momento en que su perfume familiar me rodeó.
Hiro: Wow... -dije cuando me volvió a dejar en el suelo- ¿Siempre recibes así a tus invitados o solo a los especiales? -pregunte con una sonrisa coqueta. La que él compartió, pero había un brillo distinto en sus ojos. No era solo cariño, sino algo más... orgullo, quizá.
Miguel: Solo a los que necesito que se recuperen -respondió, tomando mi mano con naturalidad- esta vez no pienso dejar que trabajes ni un segundo. Este es tu fin de semana, Hiro. Y eso que apenas has visto nada todavía. ¿Qué te parece? ¿Quieres una visita privada por los jardines? ¿O entramos directamente? Iremos como desees, querido -me dijo besando mi mano con afecto. Escrutando cuidadosamente a mi persona con su mirada, sin mostrar ninguna emoción, solo esperando mi decisión.
Hiro: Una visita privada suena... perfecta –respondí, sintiendo cómo el calor volvía a instalarse en mi estómago.
Miguel asintió, sin soltar mi mano, y tras dejar mis maletas al personal del castillo, me guió hacia un camino empedrado que bordeaba el castillo. Las antorchas que colgaban de las murallas se encendían poco a poco con la caída de la noche, bañando todo en una luz cálida que contrastaba con el frío del aire.
Miguel: Estos jardines son el orgullo de la familia Nevermind –comentó con un tono casual, pero había algo en su voz, como si supiera que yo estaba a punto de impresionarme– han estado aquí desde antes de que se levantara la primera muralla del castillo.
Avanzamos entre setos perfectamente recortados y estatuas de mármol que parecían observarnos. No era un jardín cualquiera: había algo en la forma en que los senderos se curvaban, en cómo las sombras caían de forma casi calculada, que me hacía sentir como si estuviéramos dentro de un tablero de ajedrez gigantesco.
Miguel: Este creo que es uno de mis lugares favoritos del castillo -dijo con una mirada que parecía de nostalgia- cuando era pequeño, siempre pensé que los bosques estaban llenos de brujas, ogros y hadas. Como en un cuento de los hermanos Grimm. Tal vez porque mi padre me los leía antes de dormir.
Hiro: Y... ¿Eso no te asustó un poco? -dije sabiendo que la versión original de esos cuentos pueden ser algo... pesados, para un niño pequeño.
Vaya que conforme más sabia de Héctor Rivera, menos podía defenderlo como alguien decente. Actúa de forma justa, pero sus acciones contrastan mucho con su forma de ser alguna vez, y ni hablemos de su historial que al parecer está manchado sin posibilidad de lavar ni con cloro.
Miguel: Confiaba en mi capacidad para defenderme -dijo encogido de hombros- a veces cuando estaba solo en casa, me imaginaba que estaba en un bosque mágico con mi hermanita, me pareció más emocionante. Todo un mundo oculto para nosotros, listo para ser explorado... -dijo en lo que ambos oímos un crujido entre los árboles.
Y no mentiré, eso me hizo sobresaltar, lo que acabo haciéndome ganar una suave risa de mi pareja que me apretó la mano con suavidad.
Miguel: Parece que tenemos visita, aunque no un ogro, desgraciadamente -dijo con una fingida cara de decepción cuando un ciervo de patas desgarbadas se abrió paso entre los árboles hacia nosotros.
El ciervo se detuvo a unos metros de nosotros. Movió las orejas, olfateó el aire y, como si hubiera decidido que no representábamos amenaza alguna, inclinó la cabeza para mordisquear la hierba. Luego giró la cola y huyó.
Miguel: Ahí lo tienes, uno de los guardianes del jardín –comentó en voz baja, casi solemne antes de soltar una risita– ¿Qué te parece? Incluso sin magia, este lugar es perfecto -me dijo en lo que continuamos con el paseo.
Recorrimos los senderos cogidos de la mano durante un rato antes de que el frío comenzará a instalarse y regresamos al castillo. Donde en la entrada nos estaban esperando 3 personas que era obvio que se trataba de la familia gobernante de la nación. Tanto por sus vestimentas como por las coronas en las cabezas de los adultos, y ni hablar del hecho de que todos les estaban haciendo reverencia.
Los tres se veían imponentes, incluso sin proponérselo. El rey era un hombre alto, de cabello gris cuidadosamente peinado hacia atrás, con un porte que imponía respeto, aunque sus ojos parecían amables. La reina, a su lado, lucía un vestido azul oscuro que caía en pliegues elegantes, su porte sereno y mirada analítica me hicieron sentir que me estaba evaluando en silencio. Y en contraste a ellos, aunque buscaba mantener la profesionalidad, la princesa Sonia Nevermind se notaba emocionada por alguna razón, pero igual irradiaba esa aura de autoridad y respeto.
De hecho, los tres emanaban esa aura, solo con verlos me daban ganas de hincarme sobre mi rodilla y tratarlos de "sus majestades". Algo parecido me pasó en la fiesta de té cuando conocí a la familia real de Wakanda, se notaba que eran realeza genuina... no era por despreciar al príncipe de Achu, pero a diferencia de ellos él no impone ese respeto con su sola presencia.
Miguel: Sus majestades, princesa. Buenas noches -dijo haciendo reverencia a la vez yo lo imité, aunque no pude evitar sentirme algo torpe- él es Hiro, será mi compañía durante los días que esté aquí , una vez más agradezco su bondad por permitir que mi pareja se me uniera en esta visita diplomática.
El rey asintió suavemente, con esa calma que solo tienen los que llevan una corona desde hace décadas, un movimiento que parece pesar toneladas pero se siente calculado, casi ceremonioso.
Rey Nevermind: Bienvenido a Novoselic, Hiro Hamada –dijo con voz grave, profunda, como si cada palabra cargará siglos de historia detrás– nos alegra que aceptaras la invitación.
Hiro: G-gracias, su majestad –alcancé a decir, un poco más rápido de lo que hubiera querido.
La reina me dedicó una sonrisa leve, discreta, aunque no por eso menos cálida.
Reina: El joven Rivera nos ha hablado mucho de ti. Esperamos que te sientas en casa dentro de estas murallas. Novoselic es un país antiguo, y este castillo aún más, pero aun con nuestras diferentes costumbres, esperamos que te sientas a gusto.
La princesa, en cambio, no pudo ocultar su entusiasmo; dio un paso hacia adelante con una energía casi contagiosa. Su sonrisa era mucho más abierta y menos ensayada.
Sonia: ¡Por fin! -exclamó con una sonrisa amplia- he oído tantas cosas de ti que Miguel y su prima Rosa me han dicho, Hiro. Innovador, genio, y lo mejor de todo ¡Eres un japonés de verdad! ¡Vaya combinación!
Me sonrojé un poco. Entre el porte solemne de los padres y el brillo curioso de la princesa, no sabía si reír nerviosamente o seguir rígido como estatua. Aunque no entendía qué tenía que ver mi nacionalidad en esto.
Hiro: Temo decir que solo soy medio japonés del lado de mi padre, princesa.
Sonia: ¡Es mejor que nada! -declaro tomando mis manos con emoción casi infantil- ¡podemos ver series japonesas juntos! ¡Comer comida japonesa! ¡Incluso hacer pijamadas y actividades que hacen los jóvenes de Japón! -dijo con rapidez a la vez que Miguel me rescato jalándome a su lado de forma disimulada.
Miguel: Tendrás que disculparla, la princesa es fanática de la cultura japonesa y cuando le hable de ti, se moría de ganas por conocerte.
Tras las presentaciones, Miguel me condujo con suavidad hacia el interior del castillo, claramente intentando disimular la intensidad con la que Sonia me había abordado. No pude evitar reír por lo bajo; al menos alguien parecía realmente emocionada de que yo estuviera aquí.
Rey Nevermind: Joven Miguel, ¿nos acompañaras al salón principal para cenar? –preguntó con ese tono que, aunque formulaba una pregunta, sonaba más como una instrucción empática de un monarca.
Miguel: Me gustaría su majestad, más que todo para que sigamos discutiendo sobre la posibilidad de abrir una embajada de Novoselic en San Fransokyo, pero me gustaría pasar tiempo con mi pareja ¿sería mucho atrevimiento solicitar que nos dejen la cena en nuestras habitaciones?
El rey lo observó durante un momento que se me hizo eterno, aunque su expresión no cambió en lo absoluto. Finalmente, asintió con suavidad, y la reina intercambió una mirada cómplice con él, como si hubiera esperado exactamente esa petición.
Miguel por su parte inclinó la cabeza en agradecimiento, y yo hice lo mismo, aunque me costó no sonreír de puro nerviosismo. La princesa Sonia, en cambio, puso un puchero evidente, pero se limitó a despedirse con la mano antes de que Miguel me guiará por uno de los pasillos interiores.
Una vez que doblamos la esquina y quedamos fuera de la vista de la familia real, mi novio soltó el aire en un suspiro divertido.
Miguel: Dios, pensé que Sonia iba a arrastrarte a su cuarto de inmediato para hablarte de dramas de horror japonés –murmuró en voz baja, haciendo que yo soltara una carcajada que resonó en el pasillo de piedra.
Hiro: Ella es... intensa –admití– pero linda. Aunque, ¿pijamadas? No sé si soy material de "fiesta de pijamas", Miguel -dije logrando que me lanzara una mirada divertida, de esas que hacen que mi corazón se acelere.
Miguel: Bueno, puedes relajarte ya. Esta noche no hay realeza ni cosas de embajadores que atender. Solo tú y yo –dijo en lo que su tono bajó hasta ser un susurro lleno de tensión sexual, haciéndome tragar saliva.
Subimos por una escalera de caracol de piedra que parecía salida de un cuento, hasta llegar a una enorme puerta de madera tallada con el escudo de la familia Nevermind. Miguel la abrió y me dejó entrar primero. La habitación que me recibió era más un pequeño departamento que un cuarto de hotel.
Techo alto con vigas de madera, alfombras gruesas, un enorme ventanal que daba a las montañas iluminadas por la luna, y una chimenea ya encendida que llenaba el lugar con un calor acogedor. En el centro, una mesa para dos ya estaba preparada, con candelabros de plata y una botella de vino que parecía esperar solo por nosotros.
Miguel: ¿Qué te parece? Esto fácilmente se puede comparar con una de las suites más caras de los hoteles de más lujo y renombre. Pero creo que vale la pena.
Hiro: Whoa... ¿Siempre es así de romántico el servicio de habitación aquí?
Miguel: Solo si lo pides con tiempo -dijo en lo que se acercó por detrás de mí y me rodeó la cintura con los brazos- quería que esta noche fuera especial para ti.
Hiro: No parece real... -admití sintiendo sus labios abrirse paso por mi cuello- incluso me atrevo a decir que es un poco intimidante todo esto.
Miguel: Vamos, no te dejes intimidar. Tú perteneces a este mundo, te mereces todo esto -me dijo antes de volver a tomar mi mano- deja que te enseñe el piso de arriba.
Dejándome llevar, me condujo hasta una puerta semioculta, por la cual subimos otro peldaño de estrechas escaleras en espiral. Las cuales daban al tejado de la torre, el sol se había ido del todo y las estrellas se podían contemplar en todo el cielo nocturno. Pero eso no fue lo que llamó mi atención. no... Eso lo tiene el enorme jacuzzi que estaba casualmente allí en la cima de la torre donde nos íbamos a quedar. El agua ya está burbujeando, irradiando calor. A su lado hay un cubo de champán helado y una botella de refresco.
Miguel: Como ya he dicho, aquí solo tenemos lo mejor. ¿Te apetece un chapuzón? -preguntó con una sonrisa coqueta, posiblemente siendo consciente de la encrucijada en la que me metió.
El agua parece increíblemente tentadora. Pero un bañador no es lo primero que se te ocurre meter en la maleta en un viaje a Europa Oriental, de allí que no tenía ningún en su maleta. El aire está bastante frío ahora, pero el agua parece caliente. ¿Debería dejarme la ropa interior puesta o simplemente bañarme desnudo? Después de todo, Miguel ya me ha visto desnudo antes.
Me quedé quieto un segundo, mirando el agua burbujeante y luego a Miguel, que me observaba con esa expresión traviesa que era mitad desafío y mitad invitación. Oh, con que así quieres jugar ¿eh? Reto aceptado.
Sin buscar atrasar más el espectáculo, le di una sonrisa al chico de piel morena y empecé a quitarme la ropa, prenda por prenda. Miguel se acabó mordiendo el labio mientras me observa, sus ojos oscuros de deseo. Tras unos segundos de tentadora proposición adrede desvistiéndose con lentitud, por fin estaba desnudo.
Y sin perder el tiempo, entré en el jacuzzi, sintiendo cómo el calor me envolvía de inmediato. Un suspiro de alivio escapó de mis labios. momento en que mire a mi hombre con una ceja levantada, sonriendo.
Hiro: ¿Vienes? -pregunte, logrando que se quitara la ropa a toda prisa y se metiera en el agua a mi lado.
Acabamos sentados uno al lado del otro, con su brazo alrededor de mis hombros, acercándome a él. Por mi parte, estire las piernas en el agua caliente e incline la cabeza hacia atrás para mirar las estrellas. El contraste del aire frío y el agua caliente hacía que el vapor se alzara aún más, envolviendo el lugar en una especie de nube privada.
Miguel: ¿Qué te parece? Ni siquiera es el castillo más grande ni el más antiguo. Pero creo que nos está proporcionando una experiencia de lujo -dijo de forma casual queriendo presumir el lujo con el que me estaba consintiendo. Cosa que no se la iba a dejar tan fácil.
Alguien tiene que ocuparse de poner sus pies en la tierra además de su prima.
Hiro: Estás muy seguro de ti mismo ¿verdad? -pregunte divertido antes de solo suspirar fingiendo rendición- pero no puedo mentir. Es la mejor cita que he tenido hasta ahora.
... Creo que metí la pata, es eso o por alguna razón se molesto. Porque por una fracción de segundos de nuevo lo vi fruncir el ceño ¿se molesto por que dije que fue la mejor cita? Oh... eso implica que he tenido citas antes y eso se puede interpretar... creo que metí la pata.
Miguel: ... Y apenas he empezado. Debes admitirlo, este lugar es un sueño, y tu también lo eres para mí -dijo continuando con los besos en mi cuello antes de proceder a besarme de forma posesiva, mientras deslizaba su mano para acariciar mi vientre desnudo.
Siendo mi respuesta a su ataque volver a apretarme contra él, disfrutando de los escalofríos que me produce en la piel tenerlo tan cerca de mi.
Hiro: M-miguel... –susurré, aunque sonaba más como un suspiro.
Su sonrisa se ensanchó apenas un poco, suficiente para hacerme saber que estaba disfrutando de tenerme así, temblando entre sus brazos.
Miguel: No sabes cuánto extrañaba esto –dijo con voz baja, casi un ronroneo– tenerte solo para mí, sin reuniones, sin llamadas de negocios, sin nada que pueda interponerse.
La espuma del jacuzzi cubría apenas lo suficiente para que el contacto de su piel contra la mía se sintiera aún más eléctrico. La mano que había estado en mi vientre subió lentamente por mi pecho hasta llegar a mi hombro, obligándome a girarme hasta quedar frente a él.
Por un segundo, nos quedamos en silencio, mirándonos. El vapor formaba un halo alrededor de su rostro, haciéndolo parecer casi irreal, como si estuviera tallado en mármol, una estatua de algún héroe mitológico.
Miguel: Dime... ¿ya logré que olvidaras por completo todo tu estrés? –preguntó en un tono travieso.
Hiro: Sí –admití sin pensarlo demasiado– y si sigues mirándome así, puede que olvide hasta mi propio nombre.
Miguel soltó una carcajada baja, genuina, antes de inclinarse para besarme. Esta vez el beso no fue suave ni contenido: fue urgente, hambriento, el tipo de beso que dice "no me importa si alguien nos oye". A lo cual me estire, presionando mi trasero contra su entrepierna, reprimiendo una sonrisa.
Entonces me di la vuelta en el agua, balanceando una de mis piernas sobre las suyas hasta sentarme en su regazo. Su dureza me aprieta y no pude resistirme a apretar a ella, haciéndolo gemir. El mundo se desvaneció un poco más en ese instante. El sonido del agua burbujeando, el aire frío en mis mejillas, el calor de su cuerpo contra el mío... todo se mezcló hasta que no supe dónde terminaba yo y empezaba él.
Miguel: Estamos ansiosos por lo que veo -dijo tras separarse solo un poco para recuperar el aliento.
Hiro: Por ti, siempre -reconocí antes de volver al ataque, besándolo con fuerza. La punta de mis dedos se aferraban a sus hombros mientras establecía un ritmo que él le tomó un momento seguir sorprendido de mi iniciativa. .
Miguel: Hiro, hoy estás siendo muy descarado ¿Sabes lo que les pasa a los burlones? -preguntó en lo que yo sacudí la cabeza y él me susurro en el oído- hay que castigarlos.
Antes de que pudiera responder, lo sentí moverse, y en cuestión de segundos me tomó en brazos como si no pesara nada, haciéndome reír de sorpresa mientras me sacaba del agua. Los músculos de sus brazos se flexionan deliciosamente mientras me sube por encima de él y me sienta en el borde del jacuzzi.
El aire frío estaba poniéndome la piel de gallina, pero antes de que pueda quejarme. Miguel se arrodilló frente a mí y me miró seductoramente. Para luego poner sus manos en mis caderas listo para satisfacer.
Miguel: ¿Te parece bien, Hiro? Como te he dicho, no haré nada que no quieras.
Hiro: ...Si, por favor -dije casi suplicando. Él me sonrió como un lobo y me dio un beso en el estómago. Su siguiente beso es más bajo, rozando el borde de mi cadera.
Miguel: ¿Más? -pregunto en lo que yo solo asentí.
Lo que lo hizo besar más y más abajo. Aunque trate de resistir, deje escapar un suspiro de placer cuando sus labios tocan por fin donde más me estaba doliendo y necesitando atención. Me agarro con fuerza de la cintura, manteniéndome en mi sitio, mientras empieza a prodigar atenciones con la lengua a toda mi virilidad.
Dios, esto estaba siendo mucho mejor que la última vez. Me encontraba gimiendo y por inercia deslice una pierna sobre su hombro para apoyarme debido a que ante su tacto, mis huesos se estaban volviendo gelatina Tratando de enfocar lo poco que me queda de sentido común, mire a las estrellas buscando distraerme para aguantar un poco... mientras me invade un cálido calor y acabe gritando al ya no poder resistir .
Por su parte, Miguel se sentó sobre sus talones, sonriéndome de forma ladina.
Miguel: Vamos, esto apenas empieza ¿Por qué no llevamos esto a la cama? -sugirió en lo que yo solo asentí temblorosamente.
En cuanto volvimos a estar juntos dentro de la cálida habitación. Miguel se dio la vuelta de nuevo hacia mí, empujándome contra la pared para besarme ferozmente. Sus dedos recorrían mis hombros desnudos y luego mis brazos con una necesidad y deseo muy notorios.
Miguel: Estamos un poco mojados para hacer algo en la cama. ¿Qué tal si lo hacemos aquí de pie en su lugar? -pregunto en lo que yo solo negué con algo de impaciencia.
Hiro: Es la realeza, pueden comprar sábanas nuevas cuando quieran y somos sus invitados... solo quiero estar cómodo. No te limites, solo hazlo -dije a la vez que él me dio una sonrisa positivamente salvaje.
Miguel: Oh, lo haré. Tus deseos son órdenes.
Sin esperar un segundo más, me pasó un brazo por debajo de las rodillas y me levantó en brazos antes de llevarme a la cama. Una vez me recosté en ella, se alejó un momento y volvió con un condón y algo que no se ve bien escondido en la mano. Pero antes de que pudiera cuestionarlo, volvió a besarme profundamente.
Haciéndome gemir cuando me sujetó las muñecas y me levanto los brazos por encima de la cabeza con una mano, momento en que sentí como la punta de algo estaba dándome caricias en mi entrada, esto se estaba poniendo muy intenso... pero al demonio, no voy a ser yo quien mate el ambiente.
Sea lo que sea eso que estaba acariciándome, pude sentirlo en todas partes, a mi alrededor, hasta lo imaginaba dentro de ti. Entonces fue que lo escuche, un zumbido junto a una sensación de vibración que me hizo mirar hacia abajo... La santa madre de... era un vibrador. No tan grande como el de Miguel, pero lo suficiente.
Miguel: ¿Qué te parece, precioso? ¿Cuánto crees que podría hacerte venir con esto?
Miguel me miraba con esa expresión cargada de deseo y algo de picardía, claramente disfrutando de ver mi reacción. No podía ni siquiera fingir indiferencia, mi respiración ya era entrecortada y el calor en mis mejillas competía con el de la chimenea.
Hiro: C-creo que... –mi voz salió temblorosa, lo que solo hizo que su sonrisa se ampliara.
Miguel: Eso pensé. –dijo en un susurro grave, manteniéndome quieto con su mano mientras aumentaba ligeramente la intensidad del vibrador, metiendo adentro solo un poco de la punta..
Mi espalda se arqueó instintivamente, y mordí mi labio para no gemir demasiado fuerte. No es que me importara que alguien pudiera escuchar, pero el simple hecho de que pudieran escucharme hizo que mi corazón latiera aún más rápido.
Miguel: Así me gusta –dijo mirándome fijamente, como si grabara cada reacción en su memoria– tan honesto... tan mío.
No aguanté más y lo tomé de la camisa, jalándolo hacia mí para besarlo, con toda la intensidad que sentía recorriendo mi cuerpo. Él dejó el juguete sobre la cama, pero lo mantuvo en su lugar con la mano mientras con la otra me acariciaba el muslo.
Miguel: ¿Quieres que siga, Hiro? –preguntó, deteniéndose apenas lo suficiente para que pudiera responder.
Hiro: Sí... no te detengas.
Cumpliendo con la orden volvió a tomar el vibrador, acariciando mi piel, y no me quedó de otra que jadear cuando me recorre otra oleada de placer cuando el juguete entró más mientras Miguel usaba la otra mano para lubricar un poco todo. Siendo allí que perdí el sentido cuando empezó a coger un ritmo, uno exigente.
Mis dedos se aferraban a las sábanas, mi cuerpo temblaba bajo él suyo y la sensación era demasiado, demasiado buena. Miguel estaba confiando en mí para aguantar, prolongar el placer. Hasta que eventualmente perdí incluso la capacidad de pensar. La sensación es a la vez demasiada e insuficiente... pero aún así quiero más, todo de él.
Pronto, sentí que me acercaba al borde del precipicio del éxtasis. Me mordí el labio, conteniendo la sensación que amenazaba con abrumarme, hasta que terminé sintiendo que empezaba a tensarme y a temblar.
Y sin más, llegue a mi límite. Grite mientras el éxtasis explotaba en tu interior, haciendo que solo pudiera ver blanco. Unos instantes después, escuche a Miguel gemir mientras me seguía... tramposo, te la quería chupar y sin embargo se atendió solo ¿tanto le calentó hacer esto? Igual me daré gusto después.
Cuando terminó, Miguel me dedicó una sonrisa de satisfacción.
Miguel: ¿Cómo fue eso, hermoso? ¿Mereció la pena el viaje? -pregunto en lo que solté una risa suave, aún sin fuerzas para moverme demasiado
DEFINITIVAMENTE valió la pena. Pero al menos para recobrar un poco de mi orgullo. No se lo iba a decir.
Hiro: No estoy seguro ¿tal vez deberíamos intentarlo de nuevo para poder decidir? -sugerí haciéndole reír, besándome en la mejilla con cariño.
Miguel: Dale a un hombre la oportunidad de recuperar el aliento -dijo acostándose conmigo en la cama en lo que sentía mis ojos cerrarse.
Miguel me rodeó con un brazo, está claro que quiere abrazarme. Así que para darle gusto, me retorcí para que mi espalda quede apretada contra su pecho, y sus brazos tuvieran toda libertad para envolverme. Su aliento me rozó por detrás de la cabeza, lo que me hizo sonreír cuando su mano se posó en mi estómago.
No sé exactamente en qué momento me quedé dormido, pero cuando abrí los ojos, ha salido el sol y el espacio en la cama a mi lado está vacío. Me tomó un momento incorporarme y estirarme, esperando ver a Miguel en algún otro lugar de la habitación... pero no hay rastro de él.
Entonces fue que me di cuenta de que había dejado un trozo de papel en la mesilla de noche. En la cual se disculpaba por irse, pero dice que tuvo que darse prisa, el rey y la reina querían reunirse con él cuanto antes para discutir más sobre el comercio de tecnología médica y de defensa entre países, así como conocer más de los servicios y productos que Rivera Solutions ofrecen y como podrán implementarlos en el reino..
Aunque no pude evitar enojarme un poco, lo entendía, el trabajo debe ser lo primero.
Solté el aire en un suspiro resignado y me dejé caer de nuevo sobre la cama. Claro que Miguel tenía que irse temprano. Aunque a su parecer estar aquí era trabajo de Rosa y no de él, se supone que Miguel debería estar ensayando canciones para su banda, no haciendo tratados internacionales.
Hiro: Tsk... ¿Tanto costaba despertarme para despedirse? –murmuré para mí mismo, girando el papel en mis manos.
Me quedé unos minutos mirando el techo, sin saber si levantarme o hacer puchero hasta que él volviera. Pero supongo que no vine hasta Europa para quedarme encerrado en una habitación, por muy cómoda que fuera la cama.
Finalmente, me levanté y busqué ropa limpia para cambiarme. Me aseguré de arreglarme el cabello lo mejor que pude antes de salir. No iba a dar la impresión de que estaba medio dormido si me topaba con algún mayordomo, o peor, con la realeza. Voy a disfrutar de unas vacaciones de lujo mientras tengas la oportunidad, con o sin Miguel (aunque tampoco es como que ya no lo iba a ver, tendré mi desquite en la noche a como dé lugar).
No obstante, tal vez eso no fuera posible, ya que apenas abrí la puerta, la princesa Sonia ya se encontraba allí con una sonrisa cómplice y llena de emoción.
Sonia: Hola Hiro, seguro que no esperabas verme ¿verdad? Según escuche tu novio estará ocupado, así que decidí pasar el día contigo para enseñarte lo que considero es lo mejor de mi país ¡Será divertido! ¡De paso podemos hablar, ver alguna película o comer bocadillos tradicionales de Novoselic y de japón!
Hiro: Yo, agradezco el gesto princesa, pero...
Sonia: Por favor, Hiro, llámame por mi nombre, Sonia -dijo cambiando la actitud alegre por una más autoritaria pero igual de cordial- solo mis súbditos se refieren a mi con honoríficos o por mi apellido.
Vaya... de verdad es una princesa.
Bueno, no es como que tuviera un plan mejor, y si Miguel estaba ocupado todo el día, al menos podía aprovechar para conocer el país.
Hiro: Está bien, Sonia. Solo... prométeme que no será algo que termine en titulares internacionales. No quiero que cuando Miguel vuelva de sus pendientes se entere de que su novio causó un escándalo diplomático.
Sonia: ¡Perfecto! –exclamó ignorando convenientemente la advertencia– entonces empieza el "tour real de Sonia". ¡Vamos!
No me dio tiempo a replicar; me tomó de la mano y prácticamente me arrastró por los pasillos del castillo. Lo sorprendente es que nadie parecía inmutarse al ver a la princesa caminando de esa manera tan enérgica, como si fuera normal que arrastrara invitados extranjeros por ahí.
Una cosa es segura, me espera un largo día.
__________________________________________________________
(General Pov)
(Palacio de las naciones, Ginebra, Suiza)
Y ahora la pregunta del millón ¿Qué estaban haciendo el resto de la familia Rivera mientras que el par de tortolitos estaban teniendo su fin de semana romántico? Pues para resumir, tanto Héctor como Rosa estaban en una jungla en América del sur, en un viaje de exploración para investigar cierto lugar del que se enteraron gracias a la comunidad monstruosa que les paso el chisme.
Pero así como llegaron tuvieron que irse con rapidez a Suiza debido a que había pasado algo que ya se anticiparon que pasaría, pero no tan pronto. ¿Y qué fue eso? Que el monarca de Latveria se dio cuenta de sus negociaciones con Novoselic, su reino vecino, y aparentemente tenía un par de cosas que decir al respecto sobre los movimientos geopolíticos de San Fransokyo.
Hector: Ese mendigo encapuchado -dijo fastidiado mientras se dirigía en compañía de su sobrina a la oficina donde los emisarios de Latveria esperaban para tener su reunión.
Al menos tuvieron la cortesía de orquestar esto en un territorio neutral para ambos países. Así al menos era un poco más difícil realizar ciertos actos terroristas.
Rosa: Lo que me preocupa es que no sabemos qué tan enojado está. No es precisamente conocido por su diplomacia, querido tío.
Héctor: Diplomacia... claro. Si por diplomacia entiendes monólogo autoritario con amenazas veladas, entonces sí, es un experto.
Entraron al elegante pasillo de mármol del Palacio de las Naciones. Los guardias de seguridad los dejaron pasar tras revisar por tercera vez sus acreditaciones. El ambiente era solemne, casi sofocante, como si las paredes mismas pudieran escuchar lo que estaba a punto de discutirse.
Cuando llegaron a la sala, las puertas se abrieron con un siseo suave. Ahí estaba él: el mismísimo Victor Von Doom, sentado en la cabecera de la mesa de conferencias, su armadura impecable brillando bajo la luz blanca de la sala, su capa verde perfectamente colocada. A su lado, un par de emisarios latverianos que parecían estatuas vivientes.
Al verlos entrar, Doom no se levantó ni hizo ademán de saludo.
Doom: Señor Rivera. Señorita Rivera -su voz metálica resonó en la sala como un martillo- Doom supone que saben por qué estamos aquí -exclamó con indiferencia, pero se notaba cierto atisbo de amenaza en su voz.
El CEO de Rivera Solutions se sentó sin romper contacto visual, con Rosa a su lado tomando notas mentales de cada palabra y gesto.
Héctor: Lo imaginamos. Pero le aseguro que nuestros acuerdos con Novoselic no buscan desestabilizar la región de Europa oriental en lo absoluto -comentó con tranquilidad a la vez que Doom se inclinó hacia adelante, apoyando sus pesadas manos enguantadas sobre la mesa.
Doom: San Fransokyo mueve piezas en el tablero global como si los demás fuéramos simples espectadores desde su independencia de Estados Unidos. Latveria no es espectador. Lo que ustedes llaman diplomacia, Doom lo llama una amenaza a la soberanía de mi nación.
Siendo esa una actitud que tío y sobrina ya se esperaban, el tipo era un paranoico narcisista de lo peor. Si no había conquistado el mundo aún era únicamente porque tenía demasiados impedimentos. No obstante, era tonto subestimar o tomar por menos al sujeto que tenían delante, su reputación hablaba por si sola.
El aire se volvió más denso. Rosa sintió un escalofrío recorrerle la espalda. Era bien conocida la personalidad errática de Doom, de cómo podía pasar de la calma a la violencia en cuestión de segundos.
Rosa: Con respeto, Su Majestad, lo que buscamos es cooperación, aparte de que una reunión entre nosotros sin Novoselic es una clara falta de cortesía. Si Latveria se siente excluida de las conversaciones...
Doom: Lo que Doom busca es claridad. Díganle a Doom exactamente qué se negoció o... Doom lo averiguara por mis propios medios -interrumpió con un evidente tono de amenaza antes de suspirar un momento- no obstante, Doom cree que no tenemos que ser enemigos. De lo que he visto, Doom asume que tanto su nación como la mía buscamos lo mismo, oportunidades justas para todos en general.
Si, ese comentario tuvo reacciones diferentes en ambos Rivera. Rosa todavía estaba en guardia ante cualquier mensaje entre líneas, aunque su tío por otro lado, se incomodo un poco al sentir que el tema se estaba yendo... por otro lado.
Doom: Si ustedes rascan la espalda de Doom, Doom no tiene problema en hacer lo mismo. Es decir, si Doom les pusiera uno que otro billete americano en sus bolsillos ¿a quien haría daño? Después de todo, Doom cree que podemos hacerlo todo juntos.
Héctor: Ok, esto ya se puso raro para mi -dijo poniéndose de pie de golpe, ya ignorando por completo con quién estaba hablando ni lo que implicaba su actuar- lo siento, majestad, pero no me gustan las cosas que no se pueden decir. Me siento halagado, tal vez un poco curioso ¡pero la respuesta es no! ¡Vámonos rosita! -dijo para darle la espalda dispuesto a salir de allí rápido.
Ya que a ojos de él, aunque de hecho no tenía nada que ver con eso, el asunto estaba teniendo ciertos toques... románticos, que no tenía ningún interés en corresponder.
Doom no se movió de su asiento, pero el aire en la sala se volvió aún más pesado, casi eléctrico. Las luces parecieron parpadear por un instante, y Rosa alcanzó a ver cómo los emisarios latverianos tensaban los hombros, listos para lo que fuera.
Doom: Interesante -dijo con su voz metálica, y aunque sonaba calmado, era evidente que estaba midiendo cada palabra- pocos hombres se atreven a darle la espalda a Doom... y seguir vivos.
Rosa, con el corazón acelerado, puso una mano en el brazo de su tío, deteniéndolo antes de que llegara a la puerta.
Rosa: Tío... -susurró- quizá no deberías dejarlo así.
Héctor, todavía de espaldas, respiró hondo y volteó lentamente, con esa expresión de alguien que sabe que acaba de empujar demasiado la paciencia de alguien peligroso.
Héctor: Ok, bien, sigamos hablando. Pero con límites claros, por favor —dijo, volviendo a tomar asiento con un ademán teatral de calma.
Sin que ninguno de los dos notara que en su mente, Doom estaba sobre pensando más de una cosa. Le sorprendió que el CEO de la empresa que fue responsable de independizar un territorio de USA le hiciera una escena así sin temer a ser desintegrado. ¿era tanto su confianza? Sabía que ciertos grupos como los vengadores o el grupo de su rival y mayor némesis se habían vuelto contactos de su empresa.
Pero... ¿Acaso Rivera Solutions tenía un as bajo la manga que le hacía tener ese coraje frente a Doom? ¿Armamento con tecnología adelantada por siglos a la época? ¿un arma biológica? ¿algún artefacto mágico o procedencia especial altamente destructivo? Esas preguntas inquietaban a Doom, así como el hecho de que una pequeña nación tuviera tal desarrollo e influencia tan rápido en tan poco tiempo.
¿Acaso estaba delante de un genio en política internacional y tácticas militares?... era mejor no arriesgarse de momento. Hasta saber la naturaleza exacta de lo que era San Fransokyo y Rivera Solutions realmente. Por ahora jugará con las cartas que tenía a la mano.
Doom: Muy bien, lo que Doom propone es... Una alianza estratégica -sus manos se entrelazaron sobre la mesa- Doom reconoce el ingenio de Rivera Solutions y su red de contactos. A cambio de cooperación, Doom garantiza acceso preferencial a tecnología latveriana... tecnología que ni Stark ni Wakanda comparten tan fácilmente.
Eso captó la atención de Héctor. Incluso Rosa, que estaba lista para salir corriendo de la sala si era necesario, frunció el ceño en interés al activarse su modo comerciante.
Rosa: ¿De qué clase de tecnología estamos hablando?
Doom: De la que podría garantizar que San Fransokyo no vuelva a estar a merced de ningún imperio extranjero... ni siquiera de Latveria, si eso los tranquiliza -dijo con calma- Doom ofrece hacer un pacto de no agresión y comercio con San Fransokyo a cambio de que Héctor Rivera prometa nunca postularse como alcalde de San Fransokyo.
Él lo sabía, aunque Rivera Solutions adquirió la mayor parte del poder de la ciudad estado, en lo que respecta a política la alcaldía seguía teniendo voz y voto. De allí que prefería que la nación tuviera un eslabón débil que explotar si pasaba alguna eventualidad en el futuro cercano o lejano.
Creia que había ganado de forma aplastante ante los nuevos jugadores de la política mundial... solo para pasar a no tener palabra alguna que expresar al ver a Hector Rivera gritar de emoción para acto seguido tirarse en el suelo y celebrar de una forma que daba pena ajena ver.
(Video para captar la referencia)
Doom: ... Doom empieza a pensar que Héctor Rivera no es el gran genio político que Doom pensaba que era -dijo procesando que al parecer, había sobreestimado demasiado a quien consideraba un adversario de temer y respetar.
Rosa se llevó la mano a la cara mientras su tío se revolcaba en el suelo como si le acabaran de decir que había ganado la lotería.
Rosa: Tío, por favor... dignidad.
Héctor: ¿¡Dignidad!? ¡Acabas de escuchar lo que dijo! ¡No voy a ser alcalde, no voy a tener que ir a mil reuniones aburridas, y encima Doom nos va a dar tecnología de primer nivel!
El monarca de Latveria no reaccionó de inmediato. Sus emisarios intercambiaron miradas incómodas. No era común que alguien celebrará un pacto con él como si fuera un regalo de Navidad. Por un momento, Doom consideró que quizá había cometido un error en su juicio.
Doom: Sea como sea, el acuerdo se hará por escrito. Y Doom espera que lo cumplan, porque...
Héctor: Sí, sí, ya sabemos, "porque de lo contrario Doom desatará el infierno sobre nosotros", o algo por el estilo -dijo interrumpiéndolo- créame, lo último que quiero es que nos lancen rayos láser desde un castillo -dijo actuando como si hablara con alguien que se topa a mitad de la calle para charlar.
Por primera vez, Doom se quedó en silencio, no por enfado, sino porque no sabía si sentirse insultado o... respetado. Era extraño tratar con alguien que no temía ni su título ni su reputación.
Rosa: Nos aseguraremos de que este acuerdo beneficie a ambas partes -dijo con un tono más formal que hizo replantearse a Doom que si en realidad la líder política y CEO de la empresa no era en realidad la sobrina del hombre que tenía enfrente.
Despistar con bufonería para planear desde las sombras, una jugada inteligente que Doom respetaba.
Sin querer perder más tiempo en ese lugar, Doom se levantó lentamente, su capa ondeando detrás de él, y se acercó a Héctor hasta quedar cara a cara.
Doom: Recuerde mis palabras, Héctor Rivera. Doom no repite advertencias.
Héctor: Tranquilo, compadre, trato hecho -dijo extendiendo la mano para ser estrechada. Lo que al final no pasó ya que el monarca sólo le dio la espalda.
Y con un gesto de su mano, sus emisarios se levantaron como soldados bien entrenados. Sin decir otra palabra, abandonaron la sala, dejando un silencio tenso tras de sí. A la vez que tanto tío como sobrina ya solos, no pudieron evitar soltar un suspiro de alivio y se dejaron caer en la sillas.
Héctor: Bueno... Eso no fue tan malo. Y yo pensando que quería invitarme a una cita.
Rosa: Querido tío. Victor Von Doom tendrá malos ratos, malos momentos, incluso malas compañías... pero no malos gustos -dijo divertida al ver la expresión de ofensa de su tutor.
Menudo fin de semana.
Notes:
Y ese fue el corto esta vez. Como siempre pueden votar, comentar, lo que gusten.
¿Y que les pareció?
Ahora, para el próximo cap volvemos con un clásico robo de Casanova antes de volver con el siguiente talismán (recuerden que la búsqueda de los talismanes es lo principal aquí aparte de la relación de los Higuel, el resto de todo el lore ya es más de desarrollo de mundo)
En fin, nos vemos.